FIDEICOMISO “FONDO DE FOMENTO AGROPECUARIO DEL ESTADO DE TAMAULIPAS” COMITÉ ESTATAL DE EVALUACION ESTUDIO DE CASO: “SANIDAD EN LOS OVINOS” ELABORADO POR: ING. JAIME PUENTE GARZA CD. VICTORIA, TAM. A 11 DE AGOSTO DE 2010. ESTUDIO DE CASO EN OVINOS EN TAMAULIPAS. SANIDAD. Contenido 1. Presentación. 2. Sanidad. a) Situación sanitaria del rebaño nacional. b) Enfermedades zoonóticas. c) Enfermedades presentes en México. d) Enfermedades de alto impacto. e) Enfermedades infecciosas. 1. Pasterelosis. 2. Brucelosis. 3. Clostridiasis. 3.1 Botulismo. 3.2 Pierna negra. 3.3 Edema maligno. 3.4 Abomasitis clostridial. 3.5 Gangrena gaseosa. 3.6 Hepatitis necrótica. 3.7 Hemogloburia bacilar. 4. Enteroxtemia infecciosa de las ovejas. 5. Anaplasmosis. 6. Aborto epizoótico ovino. 7. Pododermatitis. f) Enfermedades parasitarias. 1. Coccidiasis. 2. Fasciolasis. 3. Teniasis. 4. Estrosis. 5. Nematodiasis gastroentérica. 2 6. Diagnóstico de la parasitosis gastrointestinal. 7. Resistencia a los antihelmínticos. 8. Antihelmínticos más empleados en rumiantes. 9. Mecanismos de acción de los antihelmínticos. 10. Tratamientos antiparasitarios. 11. Características de un desparasitante ideal. 3. Toma y envío de muestras para el laboratorio. 4. Higiene. Desinfección. 5. Instalaciones. a) Consideraciones generales para las instalaciones. b) Corrales. c) Corrales modulares. d) Infraestructura. 3 1.- PRESENTACIÓN. En 2008 se elaboró por encargo de los programas de la Alianza para el Campo, un diagnóstico de la cadena productiva ovinos en el Estado de Tamaulipas. En dicho diagnóstico se consigna como un problema en las explotaciones ovinas en el estado, entre otras, la presentación de enfermedades tanto de origen vírico y bacterial, como las producidas por los parásitos ya sean externos ya sean parásitos externos. Con el propósito de documentar y/o actualizar el conocimiento de la problemática del sector se convocó a una reunión a productores de ovinos pertenecientes a la asociación de ovinocultores en el estado, para que en forma directa expusieran la situación actual de la ovinocultura. La reunión fue convocada por el presidente de la asociación MVZ. Omar Sáenz García, y se celebró en la sede de la agrupación el día 22 del mes de junio de 2010. Como resultado del intercambio de experiencias se concluyó lo siguiente: 1. La sanidad en las explotaciones ovinas constituyen un problema y se originan por deficiencias en el manejo general del rebaño, ya sea porque las instalaciones nos son las adecuadas, ya sea por deficiencias en un programa de higiene y sanidades, etc. 2. Desde hace tres años se disminuyó la rentabilidad en engorda intensiva debido al incremento en los costos de los insumos, principalmente el sorgo. 3. Se ha observado que los animales desarrollan una resistencia a los desparasitantes por uso persistente de un mismo producto. 4. Desconocimiento sobre la toma de muestras para laboratorio en caso de mortandad repentinas. 5. No se sigue un programa integral de manejo reconocido. Esto hace que la ovinocultura sea un manejo con mucho empirismo o desorganizado. 6. La asistencia técnica tanto la que ofrece el gobierno a través de sus programas como la particular es muy deficiente. En virtud de lo anterior, y considerando la importancia que significa la prevención de las enfermedades que afectan a los ovinos y las graves consecuencias que se sufren en caso de tener presentes casos frecuentes de brotes infecciosos o parasitarios es que se ha decidido desarrollar un trabajo que contenga los temas sobre la sanidad e higiene en las explotaciones ovinas del estado y además de instalaciones adecuadas. No se trata de hacer 4 un compendio para estudiantes de zootecnia, sino de conjuntar todos los elementos prácticos que nos lleven a ofrecer una guía sencilla pero muy aplicable en la aplicación de un programa de sanidad e higiene y algunas generalidades sobre instalaciones ovinas. Por supuesto que esta guía no podrá ser una receta al 100% de las explotaciones; es tarea y responsabilidad del propietario y/o administrador de la explotación identificar exactamente las particularidades de la empresa y hacer las adecuaciones necesarias para llegar a la rentabilidad potencial eliminando o reduciendo a su mínima expresión los problemas por enfermedades. 2.- SANIDAD. En los sistemas de producción ganadera, el reconocimiento de los padecimientos por parte del productor y del técnico asesor en sanidad, es importante para implementar las medidas de prevención, control y de tratamiento adecuadas en cada caso. Estos padecimientos son de dos orígenes: genéticos o hereditarios y, ambientales; los del segundo grupo son los padecimientos infecciosos, parasitarios, tóxicos, y los que involucran elementos nutricionales o metabólicos, además de los de origen físico. El estudio y la actualización en conocimiento del comportamiento de estos padecimientos es la clave que nos apoya en el manejo y control de las enfermedades. Las enfermedades de vías respiratorias del ganado son de las principales causas de muerte en las explotaciones de bovinos, ovinos y caprinos. A pesar de que existen una gran cantidad de antibacterianos para tratar este padecimiento y una gama amplia de biológicos para prevenirlo, continúa causando serios estragos en la ganadería de nuestro país Es el Complejo Respiratorio Infeccioso (CRB) uno de los padecimientos que ocurren con mayor frecuencia en las ganaderías de pequeños rumiantes. El CRB no depende únicamente de la infección por un virus, una bacteria o ambos, sino una serie de factores que condicionan la presentación de la enfermedad, lo cual hace sumamente difícil controlar todas las variables presentes. Entre éstas, existen por ejemplo factores anatomopatológicos que predisponen a los ovinos específicamente a padecer estos problemas y que no podemos controlar. Hay otros factores incontrolables como los cambios bruscos de temperatura y 5 algunas otras situaciones tensionantes que afectan al animal, si a éstos aunamos medidas de manejo como el transporte, castraciones, instalaciones inadecuadas y algunas otras, es comprensible el hecho de que la enfermedad se presente aun en animales vacunados. Es necesario contar con un buen manejo sanitario para evitar la presencia de enfermedades. Una buena alimentación y unas instalaciones bien ventiladas e higiénicas ayudan en gran parte a la prevención de enfermedades y esto puede fortalecerse con un programa de vacunación. Las principales enfermedades son de tipo respiratorio, digestivo y algunas veces infecciones en las extremidades ocasionadas por el exceso de humedad en los corrales. Es necesario conocer las enfermedades que con más frecuencia se presentan en el lugar y vacunar contra ellas. También es de suma importancia contar con un botiquín de primeros auxilios en el cual se encuentren analgésicos, desinflamatorios, antibióticos, desinfectantes y antisépticos locales, etc. a).- Situación sanitaria del rebaño nacional En la actual situación de procesos económicos globalizados, a los que no escapa el sector agropecuario, la calidad sanitaria de los animales o de los productos derivados de ellos ha resultado revalorizada. En la medida en que ya no se pueden emplear estructuras impositivas (aranceles), para compensar las disparidades económicas y competitivas entre países y restringir los movimientos comerciales, ahora se emplean para tal fin a las enfermedades infectocontagiosas Esta situación no es del todo novedosa, considerando que durante toda la segunda mitad del siglo XX se empleó a la Fiebre Aftosa para restringir o definitivamente impedir, la importación de productos pecuarios desde los países del Cono Sur de América, con sistemas pastoriles que reducen notablemente el costo del proceso productivo y en consecuencia, aún con altas tasas arancelarias, resultaban competitivos para los modelos de producción de Europa y Norte América. La situación de la Aftosa resulta además interesante considerando que nunca se pudo demostrar la transmisión de la enfermedad desde animales portadores y que lácteos o cárnicos con ciertas condiciones de procesamiento no representan ningún riesgo para la 6 ganadería del país importador, tan es así que actualmente, sin que haya cambiado mayormente la situación de la enfermedad en el Cono Sur ya se está importando carne a Norteamérica. Es probable que en este cambio de “actitud” se hayan combinado varios factores: protección al ambiente, la industria cárnica es una industria “sucia” con alta demanda de agua; aumento de consumidores con mayor poder adquisitivo y la oferta de un producto de calidad a menor precio y finalmente las restricciones generadas a la oferta de cárnicos por la enfermedad de las vacas locas. Parafraseando a Don Porfirio Díaz “pobrecito México tan cerca de Estados Unidos …”. De alguna manera el feo concepto de patio trasero de Estados Unidos, ha determinado que México sea “un patio sanitariamente seguro” para la ganadería norteamericana, a lo que se agrega material genético y eventualmente productos pecuarios para México. Las enfermedades existentes en USA seguramente están presentes en México, pero también afortunadamente, implica que no tenemos aquellas que no lo están, con la excepción relativa del problema de Brucelosis y esto permite intercambios comerciales con buena parte del mundo, que de otra forma estarían seriamente dificultados. Así, la dependencia de USA y el alto costo que pagó México para liberarse de la Aftosa, le permite evitar una de las barreras sanitarias más importantes del mundo actual. Tampoco existen en el país ninguna de las enfermedades altamente contagiosas originarias del Continente Africano. Entre las cualidades del rebaño nacional, no debidamente valorada y en riesgo de perderse, debe destacarse la notable resistencia a las parasitosis gastroentéricas, producto de la selección natural, demostrada por las razas de pelo mexicanas (Pelibuey y Blackbelly). Esta cualidad, que tiende a valorarse cada vez más en todo el mundo, ante la problemática generada por la resistencia de estos parásitos a los tratamientos con antihelmínticos, aún no es considerada por los criadores del país. Aunque como se indicará más adelante, el país no tiene una infraestructura diagnóstica apropiada, cuenta en universidades e institutos, con recursos humanos con experiencia en las enfermedades relevantes de los ovinos y en las herramientas diagnósticas más novedosas y apropiadas para el control de las mismas. El control de movilización prácticamente no existe en el país, con algunas raras excepciones, como las aplicadas en la Península de Yucatán. Seguramente colaboran a esta 7 desastrosa situación, las condiciones de corrupción, ya casi consideradas como naturales, dominantes en el país. La falta de convencimiento de los productores, que prefieren no pasar incomodidades y someterse a situaciones de corrupción, que aceptar que el control de la movilización es crítico para que nuevas enfermedades ingresen a su región y a sus rebaños. La falta de controles en la comercialización del animal y sus productos, la mayor parte de los animales se sacrifican en “traspatios”, posiblemente algo más del 95%. Lo que en otros países es una práctica clandestina, ilegal, considerada de alto riesgo para la salud pública, en México es aceptada y permitida, no solo para los ovinos, sino para los cerdos, las cabras, los bovinos y para el “boteo” de leche. La falta de infraestructura diagnóstica, aunque el país cuenta con suficientes y valiosos recursos humanos y de equipamiento, dedicados al trabajo de investigación en universidades e institutos, en gran parte del mismo es difícil conseguir un lugar donde se realice un estudio coproparasitoscópico confiable, el análisis más elemental que se puede pedir a un laboratorio de diagnóstico y que hoy resulta crítico para constatar situaciones de resistencia a antihelmínticos. Estando el país en campaña nacional de control de la Brucelosis, pocos laboratorios emiten resultados confiables en la más primitiva de las pruebas diagnósticas, la aglutinación en placa (tarjeta). ¿Cómo se puede pretender así controlar a la enfermedad, cuando uno de los elementos críticos es detectar a los animales serorreactores? Del diagnóstico eficiente depende poder reducir el riesgo del ingreso de enfermedades nuevas al rebaño nacional o a cada rebaño particular. La calidad de las vacunas o de los diversos productos empleados en la alimentación, suplementación o tratamiento de las enfermedades, también depende de estas mismas herramientas. Actualmente México importa ganado fijando requisitos sanitarios al país exportador, pero en la mayor parte de los casos no está en condiciones de corroborar lo exigido, en cuanto a la calidad sanitaria del mismo. La normatividad establecida por el país, para definir requisitos de importación de ganado, movilización y aún para el ingreso a ferias, es, para usar la palabra más suave, lamentable. Quizás porque se está consciente que al fin y al cabo México es un país donde la ley no aplica. Pero no deja de ser lamentable exigir a los países exportadores que los ovinos que 8 importa México lleguen libres de enfermedades que no afectan a la especie y en contraparte, se permita el ingreso de animales que simplemente no presenten signos clínicos sospechosos de scrapie o hayan sido desparasitados, sin constatar la posibilidad de que sean portadores de cepas resistentes, como ya ha ocurrido. La ventilación en un factor determinante en la sanidad Es posible que la exportación de sementales y animales de cría, en particular de las razas de pelo, en las que los productores mexicanos han realizado y continúan realizando un excelente trabajo, culmine por presionar a que se generen condiciones de diagnóstico adecuadas. Esta infraestructura diagnóstica permitirá que se asegure a estos productores la calidad sanitaria de los materiales que venden, los ayude a controlar las enfermedades ya presentes que limitan la producción del rebaño y los proteja del ingreso de nuevas enfermedades al país y a sus rebaños. Finalmente serán los propios productores los que se convencerán de la importancia de contar con adecuadas medidas de control de movilización, serán ellos los que las promoverán, establecerán y cuidarán de que sean respetadas. Como se señaló al principio, el país cuenta con recursos humanos y de equipamiento suficientes para generar y expandir una infraestructura diagnóstica apropiada a las necesidades del rebaño nacional, solo falta el convencimiento de su importancia y en consecuencia se tomen las necesarias medidas para coordinar esfuerzos, como acostumbramos a decir “solo falta voluntad política” … sin tener en cuenta que la política la hacemos todos. 9 b).- Enfermedades zoonóticas. Son aquellas que además de afectar a los animales son capaces de producir enfermedad en el hombre, es por lo tanto muy razonable restringir el movimiento y comercialización de animales que las padezcan. Vale la pena señalar en este sentido que en todos los casos la población de más alto riesgo de padecerlas son los propietarios de los animales y sus familias, los trabajadores rurales, los veterinarios y los trabajadores de mataderos y centros de acopio de productos de la especie, por lo que son estas mismas personas las que deberían tener el mayor interés de que la enfermedad no exista en los animales con los que trabajan. Afortunadamente en el caso de los ovinos estas enfermedades son solo tres: la brucelosis, el ectima contagioso y se sospecha que también la paratuberculosis (Enfermedad de Crohn) podría tener este carácter. De las tres, solo la brucelosis es realmente una zoonosis grave. c).- Las enfermedades presentes en México. Se ha insistido, que cuando se trata de usar a una enfermedad para restringir el ingreso de animales de un segundo país, no se necesita mayor argumentación para incluirla en el grupo de enfermedades de las que se va a exigir lleguen libres los animales importados. Aún este simple ejercicio, requerirá de acuerdos internos en el país importador, seguramente habrá que buscar la conciliación de intereses de quienes quieren importar animales, con aquellos que bajo ningún concepto están dispuestos a aceptar esa importación, que seguramente reducirá sus espacios de venta interna. En México, aunque las enfermedades no se han empleado con este fin, ni siquiera por un cuidado mínimo de salud pública, de todas maneras es bastante obvia la división entre quienes apoyan las compras desde Norteamérica y aquellos que lo hacen de Oceanía. Tan deficientes han sido las medidas de protección sanitaria del rebaño nacional y de la ganadería en general, que se puede afirmar que si la enfermedad existe en Canadá, USA u Oceanía, existe en México, aunque no haya sido diagnosticada. 10 d).- Enfermedades de alto impacto. Pocas enfermedades resultan en efectos dramáticos sobre la capacidad productiva del rebaño. Es probable que en este rubro en México, como en el resto del mundo, las enfermedades parasitarias sean las más significativas. La más ampliamente distribuida es la nematodiasis gastroentérica inducida por diversos géneros y especies de gusanos redondos que afectan abomaso e intestinos, de los cuales se considera como particularmente importante a Haemonchus contortus. Estas parasitosis sólo se presentan en animales en sistemas de pastoreo y son particularmente importantes en los estados de la costa del golfo, con condiciones ecológicas por demás propicias al desarrollo de las formas infectantes en los pastizales. e).- Enfermedades infecciosas. 1.- Pasteurelosis. La pasteurelosis comprende dos formas clínicas: la neumónica y la sistémica. La primera está producida por Mannheimia haemolytica (antes Pasteurella haemolytica), por lo que de acuerdo a la nueva nomenclatura se le podría denominar Mannhemiosis y la segunda por Pasteurella trehalosi. En los borregos y cabras P. multocida participa en menor proporción en el proceso infeccioso del tracto respiratorio. La producción de neumonías en las ovejas por Mannheimia haemolytica (Pasteurella haemolytica) es una de las mas importantes, por su amplia distribución, tanto en climas templados como en subtropicales y tropicales. Es importante señalar que ambos géneros forman parte de la flora normal del tracto respiratorio alto. Etiología. Inicialmente P. haemolytica se clasificó en 17 serotipos de acuerdo a sus antígenos capsulares y en dos biotipos A y T de acuerdo en su capacidad para fermentar a la arabinosa y a la trehalosa respectivamente. En 1990 el biotipo T (T3, T4, T10 y T15) se reclasificó como una especie separada y se le llamó Pasteurella trehalosi. Posteriormente en 1999 se propone la reclasificación de P. haemolytica serotipo A en un nuevo género llamado Mannheimia, por lo que P. haemolytica serotipo A (A1, A2, A5, A6, A7, A8, A9, A12, A13, A14, A16; y A17) ahora es llamado Mannheimia haemolytica. Tanto 11 Mannheimia haemolytica (Pasteurella haemolytica) como Pasteurella trehalosi son cocobacilos aerobios y anaerobios facultativos, Gramnegativos, con morfología idéntica, poseen cápsula, no móviles, oxidasa positivo, indol negativo y se diferencían por la capacidad de fementar a la Arabinos y Trehalosa respectivamente. Las colonias de M. haemolytica son pequeñas y de color gris, y producen una pequeña zona de hemólisis después de 24 horas de incubación. La identificación se realiza en base a fermentación de azúcares y la serotipificación con antisueros específicos producidos en conejos con los diferentes serotipos capsulares. Breve descripción de la enfermedad. Los síntomas clínicos de la pasteurelosis neumónica aguda que se puede presentar son la muerte súbita, debilidad, depresión, anorexia, pérdida de peso, fiebre alta, hipernea o disnea, tos, se incrementan los sonidos pulmonares, puede existir flujo nasal y ocular seroso. Con respecto a la presentación septicémica esta se presenta solamente en corderos de 6-10 meses y por lo general la muerte es súbita, y aquellas que se pueden observar vivas se encuentran postradas, deprimidas, con diseña y espuma en la boca. Esta decripción clínica concuerda con una situación de shock endotóxico. Casos de este padecimiento no ha sido informado en México. Patogenia. El proceso de enfermedad depende una combinación de eventos o factores como son condiciones medioambientales, cambios bruscos de temperatura, mala ventilación, prácticas de manejo inadecuado; lo anterior provoca situaciones de stress que elevan los niveles de cortisol en suero que da como resultado una inmunosupresión, aunado a la presencia de agentes primarios como virus que dañan el epitelio causando inflamación, edema y necrosis destruyendo la acción ciliar y las células secretoras de moco permitiendo la colonización bacteriana y de micoplasmas de las áreas dañadas. Una vez establecida M. haemolytica se multiplica, produce toxinas e invade causando un fuerte daño. Lo anterior da como resultado una bronconeumonía fibrinopurulenta y pleuritis fibrinosa. Colección de muestras para el diagnóstico. La necropsia de animales afectados presentan exceso de fluido seroso en cavidades pleural y peritoneal y los pulmones presentan áreas de consolidación con uno o más focos de necrosis rodeados de hemorragias. En algunos casos 12 se puede observar hidropericardio. Muestras de tejido pulmonar afectado o exudado se deberá remitir en refrigeración o incluso congelado al laboratorio para la realización de estudio bacteriológico. En el caso de Pasturelosis septicémica por P. trehalosi el hígado suele aparecer inflamado y congestionado y puede contener pequeños focos necróticos. Diagnóstico. Un diagnóstico presuntivo se puede realizar de acuerdo al la historia clínica y los signos clínicos. Se confirma con las lesiones observadas a la necropsia, el estudio histopatológico y el aislamiento e identificación de M. haemolytica. Tratamiento. Muchos casos responden al tratamiento con oxitetraciclina de acción prolongada (20 mg/kg SC cada 48-72 hrs), Tilosina (10-20 mg/kg), Ceftiofur (2.2-4.4 mg/kg IM o IV cada 24 hrs), Florfenicol (20 mg/kg IM cada 48 hrs), Tilmicosina (10 mg/kg SC). La penicilina y ampicilina también han sido reportadas como efectivas. Prevención. La presentación de neumonías puede ser prevenida reduciendo las situaciones de stress y estableciendo programas de vacunación con biológicos que contengan leucotoxina de M. haemolytica. 2.- Brucelosis. Las brucelas son bacterias pequeñas de forma cocobacilar, que se tiñen como Gram negativas, cuya principal característica es su capacidad de replicarse intracelularmente y que manifiestan una gran resistencia a los factores ambientales. Un aspecto clave en la virulencia de Brucella es su habilidad de sobrevivir y multiplicarse dentro de las células hospederas. Esto es que las cepas virulentas de Brucella perturban la maduración del fagosoma y crea su nicho intracelular en el reticulo endoplásmico en el cual se multiplica. En cambio las brucelas no virulentas como son las vacunales (Rev 1, RB51 y S19) no pueden replicarse intracelularmente y son destruidas en el lisosoma, sin embargo esto es suficiente para despertar una respuesta inmune de tipo celular y humoral. Por ello es que una vacuna contra la brucelosis debe por fuerza de ser una cepa viva y las bacterinas no son adecuadas porque no entran a las células del hospedero. 13 Breve descripción de la enfermedad. La brucelosis en ovinos tiene dos manifestaciones y dos agentes etiológicos, detalle muy importante porque los signos de los animales, la problemática que causan, el diagnóstico, la vacunación y el control son diferentes para los dos presentaciones de la brucelosis. Brucella ovis causa principalmente la epididimitis contagiosa del carnero y rara vez afecta hembras, por su parte Brucella melitensis provoca aborto y rara vez afecta a machos.La brucelosis humana es causada por B.melitensis y pero nunca por B.ovis, la bacteria se transmite por la ingestión de leche y queso de ovejas infectadas, por contacto directo con secreciones contaminadas, por aerosoles, siendo una enfermedad ocupacional que afecta a veterinarios, matanceros, ovinocultores, laboratoristas, etc. Patogenia. Brucella ovis. De manera natural afecta solo a ovinos, es una especie que tiene una morfología colonial rugosa, esto es que su lipopolisacárido (LPS) es rugoso al carecer de su estructura más externa que es la cadena O, los anticuerpos que se detectan en las pruebas de tarjeta y de fijación del complemento están dirigidos contra esta estructura, es por eso que las pruebas que se usan rutinariamente para el diagnóstico de brucelosis no son adecuadas para diagnosticar la presencia de anticuerpos en el suero de los ovinos contra Brucella ovis. Es la etiología principal de la epididimitis contagiosa del carnero, aunque con mucha menor frecuencia otras bacterias (Actinobacillus seminis y Histophilus somni ) pueden también causarla. El curso de la enfermedad va de agudo a crónico, se caracteriza por la baja calidad del semen, presencia de granulomas espermáticos y fibrosis progresiva del epidídimo. La inflamación del epidídimo puede ser unilateral o bilateral con la consiguiente disminución de fertilidad, las hembras infectadas con frecuencia suelen estar seronegativas; sin embargo, la presencia de B. ovis puede manifestarse como una reducción en el número de nacimientos, aumento de los intervalos interpartos, pobre viabilidad neonatal y de manera esporádica aborto. Los carneros infectados eliminan la bacteria en el semen, incluso por más de cuatro años posterior a la infección dándose el contagio a las hembras. Brucella melitensis. Esta especie de brucela es lisa, esto es que su LPS tiene como estructura más externa a la cadena O. En borregas causa aborto especialmente en el último tercio de la gestación, que frecuentemente es seguido de partos normales en los cuales se 14 eliminan grandes cantidades de brucelas, en el macho muy rara vez se presenta orquitis o epididimitis. Las secreciones presentes durante el parto o el aborto de los animales infectados, contaminan alimento y agua, entrando a los animales susceptibles por vía oral o mediante aerosoles por la vía conjuntival. También se presenta la transmisión vertical a las crías, durante el parto o la lactación. En México la seroprevalencia se ubica en valores que van del 0.7 % al 40%. La mortalidad es nula. Colección de muestras para el diagnóstico. Para el diagnóstico de B. melitensis se colectan muestras de suero individuales para realizar el estudio serológico. Para el estudio bacteriológico las muestras más adecuadas son en caso de aborto: placenta, y el feto del cual en el laboratorio se le extraerán el estómago y los pulmones. De la hembra las muestras más adecuadas son: leche y exudado vaginal de preferencia no más allá de pasado un mes del parto o del aborto. Por ser una zoonosis, la toma de muestras para el estudio bacteriológico, el manejo de fetos, y la necropsia de animales deberá hacerse con guantes, careta y cubre boca. El diagnóstico bacteriológico de B. ovis se realiza a partir de muestras de semen y de epidídimo. Diagnóstico. Aunque la respuesta inmune de tipo celular es la más importante para la brucelosis, el diagnóstico se basa en la detección de anticuerpos serológicos. Brucelas lisas (B. melitensis). En el estudio serológico se usa principalmente la prueba de tarjeta a una concentración celular del 3 % como tamiz y como confirmatoria la fijación de complemento, aunque está última prueba no es recomendada ya que en ovinos presenta una sensibilidad menor que la prueba tamiz. Las pruebas de rivanol y anillo en leche no son recomendadas. El aislamiento obtenido mediante estudio bacteriológico es incuestionable, sin embargo tiene baja sensibilidad, es caro y tardado. La reacción en cadena de la polimerasa (PCR) no ha sido estandarizada para su uso diagnóstico. Brucella ovis. Se usa la inmunodifusión doble (IDD) con el antígeno extracto caliente salino (HS), la prueba se basa en que el agar es una malla porosa que permite la difusión de pequeñas partículas, como lo son el antígeno y los anticuerpos que pueden estar en el suero a probar, si estos anticuerpos son específicos contra el antígeno usado, se unirán y precipitaran formando un halo visible microscópicamente. El valor diagnóstico de la IDD 15 cuando la técnica está correctamente estandarizada, con las concentraciones de antígeno y cloruro sódico correctas, tiene una sensibilidad del 91.8% y una especificidad del 100%; ventajas a las que hay que añadir su simplicidad, facilidad de interpretación, bajo costo y posibilidad de utilización en condiciones de campo o en laboratorios poco dotados y poco especializados. Sus principales inconvenientes son los de no haber sido estandarizada y el que los resultados pueden solamente interpretarse cualitativamente. Tratamiento. En los animales no es recomendable. Prevención. En el caso de la brucelosis es obligatorio utilizar una cepa viva como inmunógeno, debido a la característica de replicación intracelular que tiene la bacteria. Para prevenir contra la B. melitensis, se aplica la vacuna Rev 1 por vía subcutánea o conjuntival, en dosis clásica en hembras de 3 a 6 meses de edad, en dosis reducida en hembras mayores de seis meses de edad, recomendándose la vacunación de hembras vacías. No es recomendable usar la cepa RB51. No existen vacunas contra B. ovis y las bacterinas no son efectivas. 3.- Clostridios. Los clostridios son microorganismos que se llegan a encontrar en el suelo, instalaciones, equipo de la granja y aun en el intestino de los animales de forma asintomática. Son capaces de producir esporas que les permiten resistir inclemencias y permanecer activos por largas temporadas. Además poseen la característica de producir toxinas con un elevado poder lesivo al huésped. Debido a la amplia variedad de especies de clostridios que pueden afectar a los ovinos y caprinos, a continuación se realizará una breve descripción de estas enfermedades, a excepción de la enterotoxemia, la cual debido a su importancia se tratará aparte más ampliamente. Etiología. Estos microorganismos son bacilos largos Gram positivos, catalasa negativos; móviles a excepción de Clostridium perfringens, anaerobios; fermentativos y forman esporas. Al microscopio, estos bacilos presentan sus terminaciones redondeadas, 16 apareciendo solos, en cadenas cortas o en filamentos largos. Las endoesporas pueden estar ubicadas como centrales, subterminales y terminales. Tétanos. Es causado por el Clostridium tetani, produciendo rigidez de los músculos esqueléticos, especialmente de las extremidades, temblor, marcha insegura, dificultad en la masticación, arqueamiento de la columna vertebral y muerte por paro respiratorio. El microorganismo suele estar presente en el excremento y suelo de corrales contaminados, infectando al animal a través de heridas que no son atendidas y que proporcionan un ambiente microaerofílico o anaerobio, facilitando la germinación de las esporas. La enfermedad se presenta frecuentemente después de la trasquila, corte de cola, castración y ocasionalmente por lesiones en el parto. 3.1.- Botulismo Etiología. Las toxinas botulínicas son producidas por Clostridium botulinum aunque se han reportado casos de otras especies de clostridios que también producen este tipo de toxinas. La bacteria y el mecanismo toxigénico lo describió Van Ermengem en 1895 a partir de un gran brote en Bélgica. C. botulinum es un bacilo gram positivo esporulado y anaerobio obligado. Generalmente es recto o ligeramente curvado, las esporas pueden ser de forma oval o esférica y subterminales. Es móvil por medio de flagelos peritricos. El hábitat de este microorganismo es el medio ambiente: suelo, agua, tracto intestinal de animales y el hombre. Descripción de la enfermedad. Es una enfermedad neurológica severa caracterizada por una parálisis fláccida que afecta a los humanos y a una variedad de animales, causada por la acción de la neurotoxina botulínica. El nombre de la enfermedad deriva de la palabra del latín botulus, que significa salchicha, dada la asociación de esta enfermedad con el consumo de salchichas y otros alimentos cárnicos. El botulismo puede afectar a rumiantes de cualquier edad y se caracteriza por una parálisis flácida muscular bilateral progresiva. El origen de la intoxicación suele ser el consumo de alimentos o agua contaminada por cadáveres de pájaros o pequeños animales putrefactos. Los animales mueren generalmente por asfixia, provocada por la parálisis del diafragma. Este microorganismo presenta 7 tipos de toxinas (A B C D E F y G). Los tipos C y D son los que provocan enfermedad en el 17 ganado. C. botulinum forma periódicamente parte de la flora intestinal, y no es nocivo. Sin embargo, los animales pueden infectarse al ingerir formas esporuladas de microorganismos productores de toxina. El botulismo puede igualmente causarse por contaminación de heridas de grandes dimensiones cuyos tejidos lacerados entran en putrefacción; al contrario que el tétanos, el botulismo cursa con una parálisis fláccida. Patogenia. Luego de ser absorbida desde el tracto gastrointestinal o desde la herida, la toxina es llevada por vía linfática o sanguínea hasta sus sitios de acción, las terminaciones nerviosas colinérgicas. Como no atraviesa la barrera hematoencefálica, solo actúa sobre el sistema nervioso periférico, especialmente a nivel de la placa neuromuscular y en el sistema autónomo. Los distintos tipos de toxina difieren en su afinidad por el tejido nervioso, siendo la de tipo A la que posee mayor afinidad. La toxina botulínica actúa bloqueando la liberación de acetilcolina, causando de esta manera una parálisis fláccida de los músculos esqueléticos y un fallo parasimpático. En su mecanismo de acción se dan 3 pasos: 1. La cadena H de la toxina se une a receptores en la membrana presináptica; 2. La toxina penetra por un mecanismo activo semejante a la endocitosis; 3. Dentro de la célula nerviosa, la toxina interfiere con la liberación de la acetilcolina, necesaria para la excitación del músculo. La porción activa de la toxina tiene actividad de peptidasa que es específica para proteínas que forman la estructura de la vesícula sináptica que contiene el neurotransmisor y están involucradas en la exocitosis. La acción de la toxina previene la exocitosis del neurotransmisor y de esta manera se bloquea el impulso nervioso. Colección de muestras para el diagnóstico: 1. Envío rápido al laboratorio de bromatología de un mínimo de 50 gr de alimentos sospechosos, refrigerados y en recipientes estériles. 2. Envío rápido a laboratorio de microbiología de 5 gr de heces o vómitos de los animales, refrigerados, en frasco estéril y con medio de transporte si es posible. 3. En el caso de sospecha de botulismo, solicitaremos además muestra de suero para búsqueda de toxinas. 4. Determinar la toxina en suero, heces, vómitos o muestras de tejido de animales. 5. Determinar la presencia de toxina en el alimento sospechoso y aislamiento del microorganismo en dichas muestras. 18 Diagnóstico. Cuando se sospecha de un brote de clostridiosis, debe hacerse por profesionales veterinarios expertos. El diagnóstico anatomopatológico para observar las lesiones típicas que provoca el clostridio sospechoso. Se puede complementar el diagnóstico con la detección de las toxinas en los alimentos sospechosos y en los cadáveres de los animales. El aislamiento se realiza en caldo tioglicolato, Agar sangre incubado en anaerobiosis (Gaspack). La presencia de toxina específica en sangre (toxina botulínica), puede realizarse inoculando ratones o cuyes. La identidad de la toxina presente en la muestra clínica se confirma bloqueando el efecto letal con antitoxinas de referencia (pruebas de protección) La diferenciación entre las diferentes especies de Clostridium, puede realizarce fácilmente por medio de inmunofluorescencia. Tratamiento y prevención. En el caso del botulismo son escasas las referencias de ovejas que hayan recibido tratamiento, dado el excesivo costo eco nómico de éste. Sin embargo, los animales afectados pueden ser tratados con antibióticos del grupo de las penicilinas los clostridios responden bien a estos antibióticos, el uso de suero hiperinmune específico e incluso la vacunación pueden ser aplicados para el tratamiento y la prevención. 3.2.- Pierna Negra Otros nombres de esta enfermedad son: mal de paleta, carbón sintomático, cuarto negro, mancha. La causa es el Clostridium chauvoei, el cual se presenta esporádicamente en ovinos y caprinos, causando inflamación de los músculos con crepitaciones gaseosas, cojera, anorexia, fiebre y muerte. Una de las toxinas de este microorganismo es la que produce las lesiones de carácter gangrenoso. Las infecciones se realizan generalmente por medio de heridas que pueden ser de carácter mixto y que producen anaerobiosis. 3.3.- Edema Maligno Esta enfermedad puede confundirse con pierna negra ya que es muy similar. Es producida por Clostridium septicum, aunque pueden asociarse Clostridium chauvoei y otros. Es frecuente que esta enfermedad se manifieste posteriormente 19 a la presentación de heridas profundas o a las producidas por prácticas zootécnicas. Las lesiones se caracterizan por una marcada inflamación muscular y la presencia de líquido subcutáneo en abundancia, causando cojera. Aunque para ciertos autores la pierna negra y el edema maligno son la misma enfermedad que varía solamente en la severidad de la infección, la necrosis del área afectada es poco frecuente en el edema maligno. 3.4.- Abomasitis Clostridial Los ovinos menores de un año, son los principalmente afectados por esta enfermedad, que también es conocida como “Braxy”. También es causada por el Clostridium septicum y se asocia al consumo de pasturas heladas, lo cual extrañamente favorece el desarrollo del germen. La enfermedad aparece de manera súbita, causando una toxemia que llega a producir la muerte después de doce horas. A la necropsia se puede encontrar inflamación hemorrágica en el abomaso y líquido sanguinolento en la cavidad peritoneal. 3.5.- Gangrena Gaseosa Se considera que el agente causal de esta enfermedad a partir de cierto tipo de heridas, es el Clostridium novyi tipo A, pero se involucran otros microorganismos como: Clostridium septicum, Clostridium perfringens, Clostridium sordellii, Clostridium chauvoei, además de un sinnúmero de microorganismos proteolíticos y putrefacientes. La enfermedad se presenta generalmente después de la ocurrencia de heridas profundas, como puede ser la trasquila, corte de cola, castra ción y lesiones en el parto. Entre los principales signos clínicos de la enfermedad están la decoloración de la piel alrededor de las heridas, formación de burbujas de gas que crepitan y presentación de edema, postración y muerte repentina. El Clostridium novyi tipo A, también se considera el causante de el SÍNDROME DE CABEZA HINCHADA DE LOS CARNEROS, el cuál como su nombre lo indica, manifiesta inflamación de la cabeza y el cuello debido a la presencia de edema. 3.6.- Hepatitis Necrótica El causante de esta enfermedad es el Clostridium novyi tipo B, el cual se adquiere por vía oral y llega al hígado a través del torrente sanguíneo, donde prolifera gracias a las lesiones 20 hepáticas que en muchos casos son causadas por la fasciola hepática. Entre los signos clínicos de importancia causados por las toxinas, se encuentra el ennegrecimiento de la piel debido a la congestión de los vasos sanguíneos, edema cutáneo e insuficiencia cardiaca provocando la muerte. Se recomienda el control de las fasciolas para prevenir la enfermedad. 3.7.- Hemoglobinuria Bacilar Al igual que la hepatitis necrótica, la hemoglobinuria bacilar está influenciada por la presencia de la fasciola hepática en el hígado del hospedero. Esta enfermedad tiene como agente etiológico al Clostridium hemolyticum o Clostridium novyi tipo D. Al desarrollarse la enfermedad, la toxina que causa toxemia destruye los glóbulos rojos provocando la eliminación de hemoglobina por la orina, siendo éste el signo clínico más frecuente. Otros signos son parálisis ruminal, diarrea hemorrágica de color oscuro, fiebre, ictericia y orina de color rojo. A la necropsia se puede encontrar liquido rojo en las cavidades pleural, pericárdica y peritoneal, hemorragias subserosas generalizadas e infartos hepáticos. En términos generales, el diagnóstico de las enfermedades clostridiales debe incluir el examen clínico de animales enfermos, alteraciones a la necropsia, aislamiento del microorganismo o su observación por medio de frotis o improntas directas de las heridas u órganos afectados, pero se considera de suma importancia el determinar la presencia de las toxinas por métodos de laboratorio, como es el caso de la seroneutralización. Debido al carácter agudo o sobreagudo característico de las enfermedades clostridiales, su tratamiento es poco aplicado. Además de la posible aplicación de antibióticos y antitoxinas, se recomienda la aplicación de medidas sanitarias como debridación y oxigenación de heridas. En los casos que se involucra a la fasciola hepática, deberán aplicarse programas de desparasitación idóneos y poco agresivos al huésped, acompañados de la aplicación de electrolitos y suplementos nutricionales. Prevencion de las clostridiasis. Se realiza generalmente por medio de bacterinas-toxoide, siendo necesario incluir en ellas factores bacterianos y de la toxina, ya que la utilización de uno solo de ellos resulta insuficiente para la inmunización adecuada. Se han desarrollado bacterinas-toxoide múltiples que incluyen varias especies de clostridios con resultados 21 satisfactorios y que en ciertos casos aportan protección pasiva a las crías a través del calostro, aunque es de vital importancia mantener una buena calidad del producto en cuanto a la presencia de antígenos de toxina. Por lo general, se recomienda la aplicación anual de estos inmunógenos. Es recomendable establecer programas de control para fasciola hepática en las explotaciones ovinas y caprinas. 4.- Enterotoxemia Infecciosa De Las Ovejas, Enfermedad De La Sobrealimentación, Riñón Pulposo, Enterotoxemia Tipo D Descripción de la enfermedad. Clostridium perfringens tipo D produce la toxina epsilon en forma de protoxina, la cual es inocua, siendo la tripsina la encargada de transformarla a toxina activa. La sobrealimentación es un factor importante para la presentación de esta enfermedad, ya que al aumentar el porcentaje de concentrado se aumenta la proliferación del bacilo y por tanto la cantidad de toxinas. Este microorganismo se encuentra presente en el suelo y en el tracto gastrointestinal de los animales. La presencia de animales muertos especialmente los de mejor apariencia- es en muchos casos el único indicio de la enfermedad, ya que suele ser de curso muy rápido. Los signos que se pueden llegar a observar, son de diarrea y fiebre pero especialmente de tipo nervioso como convulsiones, temblor muscular, rigidez en las extremidades e incoordinación. En ocasiones los animales se encuentran postrados y pataleando, pero sin poder incorporarse. La mortalidad en hatos sin vacunar puede ser entre 5 y 10%, mientras que en hatos vacunados del 0.1 al 0.5%. Etiología. El microorganismo causante de esta enfermedad es el Clostridium perfringens tipo D, que son bacilos largos Gram positivos, catalasa negativos; inmóviles, anaerobios; fermentativos y forman esporas. Existen seis serotipos distintos de Clostridium perfringens: el A causa la enfermedad conocida como cordero amarillo, el B produce la disentería de los corderos y la enterotoxemia hemorrágica en corderos lactantes, el C y el E causan enteritis hemorrágica y necrótica en terneras, el D es el serotipo que abordaremos en esta descripción y el F que se considera como una variedad del C ya que produce el mismo tipo de toxinas y una enfermedad muy similar. 22 Patogenia. Clostridium perfringens tipo D es una bacteria con capacidad de esporular, lo cual le permite subsistir por largos periodos en el suelo de los corrales, en el agua y en el alimento. Los animales se infectan por vía oral, hecho que permite la elimi nación del germen por medio de las heces. Las bacterias pasan al tracto digestivo donde permanecen hasta que se presentan los factores de sobrealimentación y proliferan, incrementándose la cantidad de protoxina epsilon, la cual se transforma en toxina activa por acción de la tripsina. Al parecer, la toxina tiene un efecto destructivo sobre las células epiteliales del intestino, produciendo además una disminución en el peristaltismo intestinal, hechos que favorecen el paso de la toxina al torrente sanguíneo y posteriormente al sistema nervioso. Muestreo y diagnóstico. La presentación de muertes súbitas de animales en buenas condiciones físicas, la historia clínica de sobrealimentación y la posible presentación de los signos clínicos antes descritos, son muy útiles para el diagnóstico de la enfermedad, pero además se recomienda recurrir al laboratorio para identificar la toxina por medio del muestreo del contenido intestinal o la sangre. La muestra debe tomarse lo más pronto posible después de la muerte del animal, ya que la toxina es muy lábil, debiendo mantenerse en refrigeración. Entre las pruebas más comunes se encuentran: inmunodifusión radial simple, hemoaglutinación indirecta pasiva y seroneutralización en ratones. Debe establecerse un diagnóstico diferencial con pierna negra, carbunco y timpanismo. Tratamiento. En casos excepcionales se puede utilizar antitoxina y antibióticos (penicilinas) por vía endovenosa. No es común el tratamiento debido a la falta de signos clínicos y al curso agudo de la enfermedad. Prevención. Se pueden utilizar bacterinas-toxoide o toxoide solamente, los cuales incluyen generalmente los serotipos D y C por ser los más frecuentes, llegando a obtener una protección adecuada. Se recomienda la vacunación de animales que van a ser engordados y de hembras gestantes para favorecer la inmunidad pasiva a los corderos. En el caso de animales jóvenes provenientes de madres no inmunizadas, se puede aplicar suero hiperinmune, obteniendo cierta inmunidad por un espacio de dos a tres semanas. En los 23 corrales de engorda se puede tratar de aumentar el concentrado de forma gradual hasta lograr que los animales se adapten al nuevo alimento; en otros casos se utiliza la adición de antibióticos como la clortetraciclina durante el periodo de acostumbramiento. 5.- Anaplasmosis Etiología. El causante específico de la anaplasmosis en ovinos es una rickettsia conocida con el nombre de Anaplasma ovis, mismas que invaden los eritrocitos en una forma periférica en el 65% de los casos y el resto en forma central. Descripción. La anaplasmosis es una enfermedad subaguda, infecciosa, no contagiosa que se caracteriza por la presencia de fiebre, anemia, ictericia y anorexia. Esta enfermedad produce pérdidas económicas principalmente por la disminución de peso corporal y por la anorexia. Afecta principalmente a animales a partir de un año de edad. Patogenia. El Anaplasma ovis es transmitido por garrapatas como Dermacentor andersoni, Dermacentor variavilis y Rhipicefalus sanguineus, las cuales se encuentran infectadas con el Anaplasma. El proceso de transmisión inicia con las secreciones salivales de las garrapatas infectadas que inoculan los anaplasmas de forma local, estos viajan por vía sanguínea hacia los órganos internos, se multiplican en ellos y pasan posteriormente a la circulación periférica. El problema de la anemia se presenta por la destrucción de los eritrocitos infectados y por la supresión de la eritropoyesis. Después de que el eritrocito es parasitado, el cuerpo inicial incrementa su tamaño y se divide de dos en dos hasta llegar a ocho nuevos cuerpos iniciales, formando de esta manera lo que se llama el cuerpo marginal. Este proceso debilita progresivamente la integridad del eritrocito que posteriormente es reconocido por el sistema inmune y retirado por eritrofagia por las células reticuloendoteliales. Colección de muestras para el diagnóstico. Se recomienda obtener muestras de sangre con anticoagulante. El hematocrito disminuye de 9 a 12 millones /cm que es el valor normal a 5 a 7 millones/cm. 24 Diagnóstico Está basado en los signos clínicos: anemia, baja progresiva de peso corporal, y una marcada ictericia. La elaboración de frotis sanguíneo teñido con Giemsa, demuestra la presencia del Anaplasma. Es importante considerar el antecedente de la presencia de las garrapatas de los géneros mencionados. Tratamiento. El tratamiento consiste en la aplicación de tetraciclinas por vía parenteral, en dosis que van de 6 a 10 mg/Kg de peso vivo durante por lo menos cinco días. Prevención. Está basado principalmente en el control y erradicación de las garrapatas. 6.- Campilobacteriosis, vibriosis, aborto epizootico ovino Etiología. Campylobacter fetus subespecie intestinalis es una bacteria Gram negativa, en forma de bacilo curveado y espiral; móvil, con requerimientos de microaerofília o anaerobiosis; oxidasa negativo, ácido sulfhídrico positivo y no fermenta los carbohidratos. Descripción de la enfermedad. La manifestación más importante de la enfermedad son los abortos, que llegan a producirse hasta en el 70% de las hembras. Los fetos son expulsados durante el último tercio de la gestación o nacen muertos. Puede llegar a presentarse el nacimiento prematuro de corderos o cabritas débiles, que mueren al poco tiempo. Estos animales pueden presentar ictericia, que se aprecia por una coloración amarilla de la piel, mucosas y músculos. Las hembras infectadas pueden llegar a presentar una secreción vaginal abundante de aspecto viscoso, olor pútrido y color café, la cual se presenta algunos días antes y después del aborto. También pueden presentar un cuadro diarreico, con heces de olor fétido y color oscuro. En general, las ovejas y cabras abortadas pueden desarrollar gestaciones y partos subsecuentes normales. La mortandad de hembras por esta enfermedad puede llegar hasta un 5%, aunque la mayoría se recuperan. Patogenia. Los animales se infectan por vía oral, especialmente por alimento o agua contaminados. No se considera viable la transmisión a través del coito. Las bacterias pasan del tracto digestivo al torrente sanguíneo y de ahí a la placenta provocando una placentitis grave y al feto, causándole la muerte y su expulsión. Los 25 animales infectados eliminan grandes cantidades de bacterias por las heces y por secreciones vaginales posteriores al aborto o parto. Es común la introducción de la enfermedad a un hato por medio de animales de otros hatos que no tengan manifestaciones clínicas o por aves y roedores. Muestreo y diagnóstico. Para el diagnostico de la enfermedad son muy útiles los signos clínicos, pero además existen diferentes métodos diagnósticos, siendo el más común el aislamiento del microorganismo. Este aislamiento puede realizarse por medio del muestreo de heces y secreciones vaginales de las hembras, colectando hisopos que deberán transportarse en envases estériles; también puede recurrirse al muestreo de líquidos placentarios, cotiledones, vesícula biliar y contenido estomacal del feto, transportados de igual manera en envases estériles y en ambos casos en refrigeración (4 oC). Debe realizarse el diagnóstico diferencial con otras enfermedades de carácter abortivo, como es el caso de chlamidiosis, brucelosis, listeriosis, salmonelosis y toxoplasmosis. Tratamiento. Han demostrado su gran utilidad las tetraciclinas, las estreptomicinas y los macrólidos. Prevención. Se han desarrollado bacterinas monovalentes y polivalentes, recomendando su aplicación en todos los animales de un hato cuando se presenta un brote, llegando en ciertos casos a reducir la presentación de abortos, también se utiliza en animales que van a ser introducidos al hato. En general, los animales que enferman y se recuperan, llegan a desarrollar una alta resistencia a la reinfección. 7.- Pododermatitis. Etiología. Existen muchos factores que contribuyen en la presentación de esta enfermedad como es la presencia previa de Fusobacterium necrophorum , pero el agente principal es una bacteria anaeróbica llamada Dichelobacter nodosus (Bacteroides nodosus). 26 Descripción. Es una severa enfermedad infecciosa, contagiosa que afecta a los ovinos de todas las razas y edades, aunque generalmente se incrementa con la edad, se caracteriza por la presencia de dermatitis interdigital, inflamación de la pezuña y cojeras. Patogenia. Muchos de los casos inician con una proliferación previa de una bacteria llamada Fusobacterium necrophorum que ocasiona una dermatitis interdigital cuando la pezuña es expuesta a condiciones de humedad, lo que desarrolla una típica lesión de pedero, facilitando la invasión epidérmica de la Dichelobacter nodosus. Durante el clima cálido y húmedo el periodo de incubación va de 5 a 7 días, el organismo invade los tejidos blandos como la piel y subcutáneo, ocasionando tumefacción aguda y posteriormente necrosis, propagándose a las vainas tendinosas y cápsulas articulares e incluso puede llegar al hueso. La cojera suele ser el signo que indica la presencia de la enfermedad, en los casos más graves, las ovejas permanecen postradas la mayor parte del tiempo. Las lesiones pueden variar desde una simple inflamación benigna en el espacio interdigital hasta un extenso desprendimiento del tejido blando del talón y del tejido córneo como la pezuña. En el tejido afectado se observa exudado seroso y se puede observar una capa necrótica en la superficie dando un olor característico. Colección de muestras para el diagnóstico. No suele ser necesaria la práctica de análisis bacteriológico, pero muestras directas de la lesión normalmente revelan una gran cantidad de bacterias de los géneros Fusobacterium necrophorum y Dichelobacter nodosus. Diagnóstico. Está basado en los signos clínicos, dermatitis interdigital, inflamación y la necrosis del tejido, los antecedentes del clima húmedo y la presencia de un alto número de individuos afectados. El uso de pruebas sexológicas pueden ayudar a diferenciar de pododermatitis virulenta. El diagnóstico diferencial debe llevarse a cabo con abscesos, laminitis, lengua azul, fiebre aftosa y golpes en las pezuñas. Tratamiento y prevención. La administración parenteral de antibióticos como las oxitetraciclinas en dosis de 10 mg/kh de peso vivo o sulfamidimina sódica en dosis de 150 a 200 mg/kg de peso, ambas por vía endovenosa aunado al tratamiento local con 27 antisépticos (sulfato de cobre, sulfato de zinc, cetrimida o formalina al 4 o 5 %), la aplicación de pediluvios es recomendado para el tratamiento y la prevención en todo el rebaño, principalmente en la época de lluvias. f.- Enfermedades parasitarias Las enfermedades parasitarias se encuentran entre las causas más frecuentes e importantes que ocasionan una ineficiencia biológica y económica en los sistemas pecuarios del país; tales problemas disminuyen sutil o apreciablemente la producción de los animales trayendo como consecuencia baja utilidad al productor, favoreciendo el desaliento y abandono de la actividad pecuaria. En cuanto al control parasitario externo e interno, se debe llevar un manejo sanitario muy riguroso para no tener que batallar con estos problemas. Los parásitos externos más comunes son: piojo del cuerno, piojo de las patas, garrapatas, micro ácaros (sarna) y moscas. Estos se controlan con la limpieza y desinfección periódica de las instalaciones y realizar baños o aplicaciones de insecticidas recomendados para animales. Los insecticidas más utilizados son piretrinas, el malathión, el coumphos. Los parásitos internos que con más frecuencia atacan a los corderos son lombrices y gusanos que afectan al abomaso, los intestinos, el hígado, entre otros. Su control es a base de la implementación de prácticas sanitarias y de manejo adecuados como lo es el evitar la sobredensidad y la acumulación de estiércol en los corrales; debe proporcionárseles también un alimento higiénico, así como agua limpia, etc. Respecto a las parasitosis respiratorias, en particular los cuadros por Dictyocaulus filaria, ésta sólo afecta a corderos en desarrollo, en sistemas pastoriles y en regiones de alta humedad como las zonas de bosques de montaña. Todas las parasitosis pueden llegar a producir muertes cuando actúan sobre animales mal alimentados o inmunológicamente deprimidos, pero su efecto más importante es sobre la eficiencia productiva de los animales. El mal uso de los tratamientos antiparasitarios ha determinado la selección de “cepas” resistentes a estos tratamientos, en particular para el caso de las nematodiasis y de la fasciolasis. En México esta problemática ya ha sido 28 detectada y continúa en expansión, en particular en la zona del golfo, que por sus características ecológicas induce al uso indiscriminado de las drogas varias veces en el año, acelerando la selección de estas cepas resistentes. La implementación de programas de desparasitación selectiva, mediante la técnica de FAMACHA y el uso controlado de los fármacos, junto al uso de otras estrategias de control parasitario, son una urgente necesidad para desacelerar esta problemática que puede llegar a impedir la producción ovina. Entre las estrategias a considerar en el control parasitario, se debe tener en cuenta la selección de animales resistentes a la parasitosis. México cuenta, entre sus razas de pelo, con una gran oportunidad en este sentido. Estas razas se desarrollaron en la zona del golfo, enfrentando pastizales y condiciones de alta carga parasitaria, en situaciones productivas en las que los ovinos no eran prioridad, no eran de interés, por lo que no recibieron cuidados de ningún tipo, incluida la atención parasitaria, el resultado fue una alta presión de selección natural hacia animales resistentes a la enfermedad. Lamentablemente, en el momento actual, esta resistencia genética se puede perder por el uso de cruzamientos con “razas mejoradoras” que no fueron seleccionadas con este criterio. Una tarea urgente del sector ovino es proteger este germoplasma y asegurar la investigación que procure la determinación de marcadores genéticos moleculares, que permitan la fácil identificación de los animales resistentes, sin necesidad de pruebas de desafío a parásitos. Esta identificación sería un valiosísimo “plus” a la venta de animales de cría con esta cualidad, en particular de sementales. 1.- Parasitosis gastrointestinal Los agentes causantes de la parasitosis gastrointestinal en los rumiantes son diversos, por lo que su comportamiento biológico y efecto sobre el animal depende del tipo de parásito involucrado. En el cuadro 1 se incluyen algunas de las principales parasitosis gastrointestinales que afectan a los ovinos de México, así como los agentes que las ocasionan. Resulta imposible que el presente trabajo se aborden detalladamente las enfermedades parasitarias del tacto gastrointestinal ya enlistadas, sin embargo, se hace referencia de aquellas características que favorecen su aparición en los ovinos y que de alguna manera, el 29 conocimiento de esas características llevan a la comprensión individual y real del problema parasitario para lograr un control eficaz. Cuadro 1. Principales parásitosis gastrointestinales de los ovinos en México Tipo de parásito Protozoario (Cimeria) Nombre de la enfermedad Características clínicas del problema que ocasiona Diarrea, en ocasiones con mucho moco y Coccidiosis ( " ) sangre, baja de peso y subdesarrollo. Pueden presentarse muertes Platelmintos (Gusanos planos) Diarrea, baja de peso, edemas (abultamiento en Fasciola Hepática Fasciolasis ("Mal de ") (") la mandíbula), Ictericia (mucosas amarillas) y muerte Moniezia sp. Thysanosoma actimioides Monieziosis (Teniasis) Diarrea, baja de peso, vientre abultado (panzón) (Solitaria) y subdesarrollo Tisanosimiasis (Tenia del hígado ) solo en ovinos y Trastornos digestivos, baja de peso. caprinos Nematelmintos (gusanos cilindros) Nematodos Nematodiasis gastroenterica Gastrointestinales (Lombrices) Diarrea, cuadro anémico (debilidad, mucosa pálidas), además, disminución de peso, subdesarrollo y muerte. En primer lugar es importante puntualizar en el hecho de que la enfermedad parasitaria no es solo el resultado de la simple relación hospedador - parásito, sino mas bien es consecuencia de la conjunción de diversos factores, que al presentarse y muchas veces al 30 interactuar entre sí, hacen que el problema se presente. Por lo tanto, el simple uso de fármacos antiparasitarios, solo llevan un control parcial de la parasitosis si no son modificadas aquellas situaciones que favorecen. 1. Coccidiasis. Producida por diferentes especies del protozoario Eimeria spp. afecta la capacidad de crecimiento y eventualmente mata a corderos entre los dos y cinco meses de edad; su presentación está fuertemente influida por las condiciones de las instalaciones de encierro nocturno, el corral de destete o el modelo de estabulación y en consecuencia su impacto varía de rebaño en rebaño. Es una enfermedad producida por protozoarias (del genero Elimeria) que requiere de tres factores determinantes para su presentación: a) Una humedad relativa elevada. Se necesita alrededor de un 75% de humedad relativa micro ambiental que favorezca la maduración y supervivencia del protozoario en el ambiente. b) Presencia de fases infectantes del protozoario (quistes maduros). El parásito es eliminado al exterior por medio del excremento de los animales, por lo tanto, cuando hay una excesiva acumulación de material fecal, se favorece la contaminación de alimentos y agua, con la consecuente presentación de la enfermedad. c) La Coccidiosis se da en los corderos desde la lactancia al destete. La razón de que solo en los animales jóvenes se presente la Coccidiosis obedece a la respuesta inmune sobre la presencia del parásito, la cual es bastante sólida en animales mayores. Otras circunstancias asociadas a los tres factores citados son por ejemplo, el "encierro nocturno ", que es un manejo muy generalizado en México que consiste en el pastoreo diurno y alojamiento de los animales por la tarde y noche, en corrales muy estrechos y carecen de ventilación. El resultado de esto es un hacinamiento y alta humedad y mayor cantidad de materia fecal acumulada. Por otro lado, hay mezcla de animales de diversas edades, favoreciendo que los adultos contaminen el ambiente de los más jóvenes. La ausencia de comederos o pesebres y los bebederos 31 sucios y con fugas de agua tienen como consecuencia la aparición de este problema parasitario. La Coccidiosis es más frecuente en la época de lluvias dada la humedad prevaleciente. Es importante señalar que el problema se presenta cuando los animales son mantenidos en forma intensiva (engorda en corrales) o son sometidos a estrés. Los estados de subnutrición hacen al animal susceptible para padecer la Coccidiosis. 2. Fasciolasis. Producida por el tremátodo Fasciola hepática, se presenta en México con una distribución claramente regional dependiente de que los animales pastoreen en terrenos bajos anegados o en bordes de arroyos o lagunas. Esta parasitosis, producida por el " gusano plano" Fasciola hepática se presenta básicamente en animales en pastoreo. La razón está, en que el pasto se enquista la fase evolutiva del parásito (metacercaria), que es el que ingiere el animal para adquirir la Fasciolasis. Los rumiantes mantenidos en forma estabulada, pero alimentados con forraje fresco que posea la metacercaria, también pueden padecer la enfermedad. Las Fasciolasis, es asociada necesariamente a la presencia de un caracol acuático (genero Lymnaea), donde la fasciola debe llevar a cabo alguna de sus fases evolutivas, para posteriormente salir de él y enquistarse en el forraje. Este caracol requiere de bastante humedad para sobrevivir y reproducirse, por lo que este problema parasitario es común que adquiera durante la época de lluvias, en praderas irrigadas, cuando los animales pastorean en la orilla de riego, aguajes, presas, pantanos, etcétera. Los animales que consumen forraje son los que principalmente se afectan por la fasciolasis, en otras palabras, es difícil detectar problemas de esta enfermedad en animales muy pequeños, lactantes o recién destetados. Los borregos se consideran mucho más susceptibles a la fasciolasis en comparación a los caprinos y bovinos; la razón es que sus 32 conductos biliares son más delgados, se ven más afectados por el parásito. Además la alta preferencia de los ovinos por ingerir forraje más tierno y fresco, aumenta la posibilidad de ingestión de metacercarias. El hábitat general de las cabras, que son las zonas áridas y semiáridas, hace suponer que esta enfermedad sea rara; sin embargo, hay antecedentes en esta especie donde la fuente de adquisición es el forraje que crece alrededor de los pocos aguajes presentes en el agostadero. Los animales desnutridos son marcadamente más susceptibles a padecer la fasciolasis. Es de esperar en este estado de nutrición son víctimas fáciles de los parásitos al deprimirse sus defensas internas. Aunado a lo anterior es importante enfatizar que en esta enfermedad, el órgano afectado es el hígado que es primordial para la mayoría de las funciones vitales del animal, por lo que, cuando hay F. hepática se agrava la desnutrición trayendo como consecuencia final la muerte. 3. Teniasis. La "teniasis" mejor llamada Monieziosis, también se presenta en animales de pastorean. La enfermedad la adquieren cuando, junto con el forraje, ingieren un ácaro el cual en su interior trae la fase infectante del parásito que es el "cisticercoide". El ácaro, al alimentarse de material fecal ingiere los huevos del parásito y de ahí crece el cisticercoide. Existen de épocas del año donde son más abundantes los ácaros en el suelo, al final de la primavera y el otoño. Los animales más infectados son los que están en crecimiento, esto es debido que aún no desarrollan mecanismos inmunes contra el parásito. Además del gran tamaño del "gusano" (de 2 a 3 metros) en relación al largo y diámetro del intestino del animal. Asimismo dada la competencia por los nutrientes en crecimiento serán más afectados por sus altas necesidades nutritivas. 33 4. Estrosis. En esta enfermedad ocurre una severa rinitis producida por las larvas de la mosca Oestrus ovis. No hay evidencias claras de que los animales afectados reduzcan por esta condición su capacidad productiva, aunque en las horas del mediodía, cuando la mosca los ataca para depositar sus larvas en los hollares, los animales procuran defenderse escondiendo la cabeza y dejan de comer. Las larvas que completan su desarrollo tienen el tamaño de las bolas del excremento de los ovinos y presentan ganchos para evitar ser expulsadas por el estornudo, por lo que provocan una severa rinitis mecánica, que determina que los animales presenten moco abundante, gelatinoso de color grisáceo, ocasionalmente con estrías de sangre, muy evidente en las mañanas, este cuadro confunde al neófito con situaciones de neumonía y le da al animal un aspecto desagradable. La mosca en vida libre no se alimenta por lo que no puede ser atacada con los sistemas diseñados para el control de otras moscas, las larvas pueden ser destruidas con tratamientos a base de organofosforados, closantel o ivermectina, sin embargo el uso de estos productos, que actúan sobre los nemátodos gastroentéricos, implica aumentar los riesgos señalados, de inducir por su uso periódico, problemas de resistencia. 5. Nematodiasis gastroentérica. (NGE) El control de NGE por lo general se basa en el uso de antihelmínticos. Por su alta virulencia y su amplia distribución, el Haemonchus contortus es considerado el nematodo gastroentérico (NGE) más importante en México. Estrategias de control parasitario en ovinos tropicales. La nematodiasis gastroentérica es una enfermedad parasitaria de los ovinos que repercute negativamente en la eficiencia biológica y económica de los rebaños, produciendo retraso en el crecimiento, desnutrición, baja conversión alimenticia, baja producción de leche, diarrea, anemia, edema submandibular, pérdida de apetito, bajos índices de fertilidad y en algunos casos muertes en animales jóvenes. 34 6.- Diagnóstico de la parasitosis gastrointestinal. En primer lugar se debe considerar que en la mayoría de los casos la presencia de parásitos en los animales pasa inadvertida por la ausencia de signos clínicos (enfermedad parasitaria subclínica), siendo el mejor momento para establecer un control antiparásito. Como se observa en el cuadro 1, los efectos de los parásitos gastrointestinales sobre los rumiantes son muy similares a todas las situaciones, existiendo solo pequeñas diferencias en algunos signos de enfermedad. Por lo anterior, es necesario efectuar diagnósticos de laboratorio para conocer los parásitos específicos presentes en los animales, para que por diversos métodos se llegue a un diagnostico confiable de las parasitosis. El diagnóstico será una herramienta útil para el control parasitario, si además se toma en cuenta las circunstancias en que estén los animales, así como todos aquellos factores relacionados con la enfermedad parasitaria. Es fundamental que las enfermedades parasitarias sean diagnosticadas antes de que exista la aparición masiva de casos clínicos en el hato, lo cual ya denota pérdidas para el productor y diseminación de los parásitos. Por lo tanto, se recomienda efectuar muestreos periódicos (por ejemplo cada mes) para conocer el tipo de parásitos presentes y la cantidad eliminada, y en base a esa información tomar la decisión para efectuar la Desparasitación en forma estratégica. 7.- Resistencia a los antihelmínticos. En prácticamente todo el mundo, el control de la nematodiasis gastroentérica se basa casi exclusivamente en la administración de antihelmínticos. Desgraciadamente uno de los problemas que se ha generado por el uso masivo e indiscriminado de los antihelmínticos, es la resistencia hacia los mismos, situación que es un problema de grandes dimensiones en aquellos países donde la producción ovina es una de las principales actividades económicas. En México los hallazgos de NGE resistentes a antihelmínticos (RA) son escasos. Se reporta la detección de una cepa de H. contortus resistente a bencimidazoles, específicamente al 35 albendazol. Esa cepa fue aislada de una explotación ovina de raza Pelibuey en clima subtropical húmedo. Se empleó una prueba in vitro para conocer el factor de resistencia. Cabe mencionar que el rebaño estudiado había sido desparasitado frecuentemente con albendazol y se habían detectado fracasos en la terapia antihelmíntica, donde, a los pocos días de la aplicación del fármaco, algunos animales morían y poseían grandes cantidades del nematodo. Profundizando en el estudio de ese caso, Mendoza (1991) no encuentra diferencias en la cinética de anticuerpos contra cepas de H. contortus resistentes y susceptibles a bencimidazoles en ovinos infectados experimentalmente. Heras y col. (1992) no encontraron diferencias en los parámetros sanguíneos de corderos infectados con cepas de H. contortus resistente y susceptible de albendazol. Por su parte, Manifacio y col. (1992) evaluaron cuatro antihelmínticos contra esa cepa de H. contortus resistente al albendazol. Emplearon el levamisol (7.5 mg/kg PV por vía intra muscular), ivermectina (200 mg/kg PV subcutánea), netobimín (7.5 mg/ PV por vía oral) y albendazol (5 mg/kg PV por vía oral). A los 7 días pos tratamiento, el levamisol, ivermectina y netobimín mostraron una eficacia del 100%, mientras que para el albendazol fue del 68.8%, sin embargo, existió la presencia de huevos de NGE a los 15, 21 y 28 días en los animales tratados con netobimín. Asimismo, Heras y Quiroz (1992) evaluaron la eficacia del netobimín y albendazol contra cepas de H. contortus resistente y susceptible al albendazol. Encontraron una eficacia del netobimín del 77.4% y 100% contra la cepa resistente y susceptible respectivamente. Por su parte, el albendazol tuvo una eficacia del 76.6% y 97.8% también para ambas cepas. Por otro lado, se ha detectado baja eficacia al tratamiento emplean do fenbendazol y oxfendazol en H. contortus Una compilación de los datos de RA en México se muestra en el cuadro 1. Como se ve, la aparición de RA en los rebaños ovinos de México es una realidad, pues existen las condiciones climáticas y de manejo del pastoreo que la favorecen. Es necesario establecer todas las acciones necesarias para continuar con su detección, especialmente en aquellas regiones con alta frecuencia de desparasitación y en donde se han introducido animales con cepas presumiblemente resistentes. 36 Aunado al problema de RA, se ha incrementado la necesidad de reducir los residuos de medicamentos en los alimentos para los humanos y el ambiente, lo que obliga a que se generen otras estrategias de control antiparasitario que no dependa del empleo de substancias químicas. Entre ellas están: • El desarrollo de vacunas específicas contra nematodos gastroentéricos. • La suplementación alimenticia, especialmente de nitrógeno proteico o no proteico donde se puede producir una disminución en la severidad de la parasitosis por H. contortus, así como un incremento en el desarrollo de inmunidad contra el parásito y mejores niveles de producción en los animales. • El uso de depredadores naturales de las larvas exógenas de los nematodos parásitos evaluando hongos con actividad nematófaga. Han sido empleados exitosamente distintos tipos de hongos no patógenos para el hospedador pero nocivos para las larvas de nemato de parásitos, visualizando su empleo masivo como un método de control para la hemoncosis. • Efectuar modificaciones en los sistemas de manejo en la cría ovina. Por ejemplo, Amarante y col. (1997) evalúan el efecto del pastoreo mixto de novillos con ovinos sobre la disminución de la parasitosis en los segundos al encontrar en los bovinos un hospedador poco propicio para su desarrollo. • El empleo de genotipos resistentes a la infestación por parásitos. • Sistema FAMACHA‚. Es la identificación clínica del desarrollo de anemia ocasionada por la presencia de H. contortus. Se ha sugerido que la principal razón por la que no se ha podido contener la RA es la población de parásitos en refugio que se debe considerar en los programas de control parasitario. Refugio es un término utilizado en parasitología para indicar la proporción de la población de un parásito determinado que escapa a la exposición de algún compuesto usado para el control parasitario, por ejemplo las fases de vida libre en las pasturas de los helmintos cuando los animales son desparasitados. En otras palabras la pastura constituye un refugio para las poblaciones parasitarias cuando los animales son desparasitados. 37 De acuerdo al modelo matemático parece que la proporción de parásitos en refugio tiene un efecto profundo en la presión de selección para la resistencia parasitaria. Si todos los animales de un grupo son desparasitados simultáneamente en dosis correctas con un principio activo altamente eficaz (por ejemplo desparasitando parásitos susceptibles ss) y después son inmediatamente colocados en una pastura con muy pocos o sin parásitos en refugio presentes, sin duda los únicos parásitos que sobrevivirán el tratamiento son aquellos resistentes al medicamento (heterocigotos sr y/u homocigotos rr) por lo tanto hay pocos o no hay parásitos susceptibles en la pastura que puedan aparearse con los adultos resistentes que quedaron en la pastura, esto hace que la siguiente y subsecuentes generaciones están inclinadas a ser heterocigotos o hasta homocigotos para ser resistentes. Si el tratamiento es repetido, las oportunidades de una resistencia se multiplican. Esto aplica para resistencia de un sólo gen y resistencia de múltiples genes. Además mientras más pequeño sea el número de parásitos en el refugio y más eficaz el principio activo empleado, más grande será el efecto en la selección de RA y mayor será la proporción de homocigotos resistentes (rr) que se desarrollarán y más difícil será matar los parásitos con ese medicamento. Para fines del presente trabajo sólo se hará referencia al método FAMACHA‚, al manejo estabulado de la cría y engorda de corderos y a la resistencia de los animales a NGE. La Nematodiasis gastroentérica es otra enfermedad que se favorece con el pastoreo. En este caso las larvas infestantes (larva 3) suben a la punta de los pastos para ser ingeridas por el animal cuando se alimenta. 38 La larva 3 de los nemátodos gastroentéricos, los cuales se enlistan de acuerdo a su localización en el cuadro 2, requieren de la humedad para su desarrollo y supervivencia. Lo anterior hace que esta parasitosis se presenta básicamente durante la época de lluvias o cuando los rumiantes pastan en praderas implantadas que reciben riego periódicamente. Otros factores que facilitan la presentación de este problema son el sobrepastoreo, el pastoreo diurno y pastoreo mixto de diferentes especies (ovinos, bovinos, y caprinos ) o distintas edades. El sobrepastoreo, en otras palabras una gran cantidad de animales en un área definida, determina la presencia de larvas infestantes de esos nematodos. Al existir muchos animales el recurso forrajero se hace escaso y la contaminación fecal es mayor. Cabe mencionar que los huevos de los nematodos gastrointestinales que posteriormente evolucionaran a larvas infestantes, se eliminan en el excremento. Larvas infestantes suben a las puntas de los pastos puedan ingerirlas. Estas larvas emplean ciertos estímulos para efectuar esta migración. Por un lado, tiene la afinidad por el agua (hidrotropismo positivo), huyen de la tierra (geotropismo negativo), son atraídas por la luz tenue (fototropismo positivo a la luz tenue y negativo a la intensa). Cuadro 2. Géneros de nematodos gastrointestinales y su localización anatómica en los ovinos Localización Género Haemonchus* Abomaso (cuajo) Ostertagia Trichostrogylus* Nematodirus* Trichostrongylus* Intestino delgado Cooperia Bunostomun Strngyloides* 39 Ciego Colon (intestino grueso) Trichuris* Skrjabinema Oesophagostomum* Chabertia * Son los más frecuentes en México. Y, por ultimo buscan una temporada templada (termotropismo). Esto ocasiona que tanto que en las primeras horas de la mañana, y en los días nublados, la cantidad de larvas en forraje sea mayor, aumentando la posibilidad de adquirir la parasitosis. Por lo general se considera que los ovinos poseen mayores cargas parasitarias en relación a los bovinos y caprinos, por lo tanto cuando pastorean juntos, la principal fuente de contaminación serán los borregos. Como en otras enfermedades parasitarias, el problema de la nematodiasis gastrointestinal se dé esencialmente en los animales jóvenes en crecimiento. La presencia de nematodos en el aparato gastrointestinal de los rumiantes, hace que se alteren las funciones de digestión y absorción de nutrientes, lo que se traduce en un cuadro de desnutrición de grave variable, que incluso puede terminar con la vida del animal parasitado. Este hecho es mucho más crítico en los animales jóvenes dado que al estar en crecimiento, sus requerimientos nutricionales son mayores. Además existe, entre otros, un par de factores de importancia que influyen en la presentación de la nematodiasis gastroentérica, éstos son la raza y el estado nutricional. Generalmente los animales nativos o "criollos" son considerados más resistentes a los parásitos en relación a las razas puras. La razón de esta mayor resistencia es la adaptación al desarrollo de mecanismos de inmunidad tras la infestación continua y prolongada con nematodos. Desde luego, algunos son susceptibles y mueren, sobreviviendo los más capacitados para soportar este tipo de enfermedades; en otras palabras en ellos ha ocurrido una "selección natural", los de raza pura, muchas veces criados bajo otros ambientes menos 40 contaminados, al no tener antecedentes de su presencia y no haber desarrollado mecanismos inmunes para un ataque, son marcadamente más susceptibles a la parasitosis. Siendo una de las razones del fracaso de algunas razas introducidas en ambiente altamente contaminado con larvas de nematodos. Por otro lado, el estado nutricional puede determinar la aparición de cuadros de nematodiasis gastrointestinal al deprimirse las defensas del animal. Como ya se vio, la presencia de nematodos hace que el animal se desnutra, situación que es más grave si ya existe un pobre estado nutricional. Cabe mencionar que puede hacer aparición de casos de nematodiasis durante la época de frió o sequía, ya que la condición general del animal disminuye y si poseía cierta cantidad de parásitos que aparentemente no le ocasionaban problemas, bajo esas condiciones el efecto será notorio. 8.- Antihelmínticos más empleados en los rumiantes. Los antihelmínticos disponibles en la actualidad se agrupan de acuerdo a su naturaleza química y efectos sobre los parásitos. 1.- Bencimidazoles y probencimidazoles: • • Triabendazol* • Parbendazol* • Cambendazol* • Mebendazol • Oxibendazol • Ferbendazol • Oxferdazol • Alberdazol • Tiofanoto • Febantel Netobimin * Actualmente no están disponibles en el mercado 2.- Inmidazotiazoles: 41 • Levamisol • Morante 3.- Derivados Salicilanilidos: • Rofoxanide • Nitroxinil • Closantel 4.- Lactonas macrociclicas: • Invermectina • Moxidectina • Doramectina 9.- Mecanismos de acción de los antihelmínticos. Aunque en algunos casos aún no se ha comprobado el modo en el que el antihelmíntico actúa contra los parásitos, se puede afirmar que casi en todos los casos hay una alteración importante en el metabolismo de los mismos, que finalmente los paraliza o les causa la muerte. El mecanismo de acción conocido y específico para cada uno de los grupos mencionados, es el siguiente: 1. Bencimidazoles y probencimidazoles, actúa sobre el metabolismo energético de los parásitos, inhiben la enzima fumarato reductasa, inducen un desacoplamiento mitrocondrial y favorecen la secreción de la colín esteraza. Se ha demostrado que destruyen los microtúbulos citoplasmáticos por una afectación en la unión alfa y beta tubulina, produciendo una acumulación de vesículas secretoras y presentándose finalmente la muerte celular. Los microtúbulos son indispensables para el mantenimiento, nutrición y movimiento de las células en los parásitos. No se ve afectadas las células del hospedador. 42 2. Imidazotiazoles, tienen acciones sobre el sistema nervioso del parásito, afectan los ganglios nerviosos y como resultado se presenta parálisis. Específicamente el levamisol puede ocasionar una alteración en el metabolismos energético. 3. Derivados salicilanilidos, actúa al desacoplar la fosforilación oxidativa del parásito, afectando la producción de energía y como consecuencia, la muerte del mismo. 4. Lactonas Macrociclicas, son compuestos derivados de la fermentación de hongos, su principal efecto es inducir una parálisis de los parásitos al estimular la liberación del ácido gama aminobutirico, un neurotransmisor de tipo inhibiotico que impide la transmisión de impulsos nerviosos en las uniones neuromotoras y neuromusculares del parásito. 10.- Tratamientos antiparasitarios utilizados en México. Actualmente existen diversos fármacos con eficacias y espectros variables para el ataque a los parásitos. En el cuadro 3 se anotan algunos medicamentos empleados contra los parásitos gastrointestinales en los rumiantes, disponibles en México. Es evidente que hay fármacos que tienen acción contra más de un tipo de parásito y que hay medicamentos no útiles en algunos parásitos. La elección del mejor producto se hará en base al diagnostico parasitario, costo del medicamento y a qué grupo de animales será aplicado (por ejemplo, el levamisol y albendazol, no se recomiendan en la gestación). Cuadro 3. Antiparasitarios empleados en rumiantes en México Parasitosis Coccidiosis Principio activo Sulfadiazina, sulameracina y sulfametazina, Sulfas y trimetropim Nombre comercial Trisulfas Sulfatroìn Gorban 43 Daimetom Valbazen Fasciolasis Albendazol Closantil, Closantel Flukiver Netobimin Seponver Nitroximil Hapadex Rafoxanide Trodax Triclabendazol Ranide Fasinex Albendazol Valbazen Fabante Bayverm Fenbendazol Panacur Netobimin Hapadex Oxfendazol Synanthic Levamisol Cydectin Ivermectina Dectomax Moxidectina Valbazen Doramectina Panacur Albendazol Bayben Nematodiasis Fenbendazol Synanthic gastroenterica Febantel Hapadex Oxfendazol Closantil Netobimin Flukiver Closantel Seponver Nitroxinil Trodaax Rafaxanide Ranide Monieziosis 44 11.- Características de un desparasitarte ideal. Todas las características del mejor antiparásito, difícilmente las puede poseer alguno de los medicamentos actuales en el mercado, sin embargo, es deseable que tengan una mayor cantidad de los siguientes atributos: • Eficacia al 100% sobre fases adultas e inmaduras del parásito • Amplio espectro contra distintos tipos de parásitos • Que no induzca resistencia • Fácil aplicación • Baja toxicidad para el hospedador, en sus distintas etapas fisiológicas • Bajo costo para el productor • Amplia disponibilidad en el mercado • Nulo Impacto sobre el ecosistema Concentrado de los parásitos gastrointestinales, sitio de infestación y daño causado. PARASITO Dictyocaulus filaria SITIO DE INFESTAClON Pulmones y vías respiratorias DAÑO CAUSADO Irritación, obstrucción (neumonía) Muellerius capilaris Crystocaulus spp. Netrongylus spp. Haemonchus spp Estómago e intestino Succionan sangre, Marshallagia spp. delgado irritan la mucosa. Trichostrongylus spp. Forman nódulos en Ostertagia spp. la mucosa Nematodirus spp. Bunostomum spp. Oesophagostomum spp. Chabertia spp. Intestino grueso Succionan sangre e irritan la mucosa 45 Monieza expansa Intestino delgado M. benedetti Tenia que succiona sangre 3.- TOMA Y ENVÍO DE MUESTRAS AL LABORATORIO. El diagnóstico preciso y oportuno de las causas de enfermedad o muerte que afectan a los ovinos y caprinos es de suma importancia para tomar las medidas adecuada para aplicar el tratamiento adecuado y las medidas de control necesarias. Para una adecuada toma, conservación y envío de las muestras, es indispensable tener presentes las siguientes normas: 1. Toda muestra debe ser enviada con su historia clínica completa y perfectamente identificada. 2. Las muestras idóneas se obtienen de animales vivos, en distintas etapas de la enfermedad. En cadáveres, la necropsia deberá ser realizada por personal capacitado, en un lapso máximo de 3 horas posteriores a la muerte del animal. 3. Las muestras para estudios bacteriológicos deben tomarse en animales que no hayan sido sometidos a tratamiento o antes de la administración de fármacos, y deberá utilizarse material y recipientes estériles. En ocasiones, dependiendo del tipo de muestra será necesario emplear medios de transporte como el de Stuart, con la finalidad de conservar la viabilidad de las bacterias. 4. Para la recolección de cualquier otro tipo de muestra, es recomendable utilizar material limpio y seco. 5. Los envases utilizados para el envío de muestras deben ser en resistentes o irrompibles, de cierre hermético y de dimensiones adecuadas al tamaño o cantidad de muestra. En términos generales se deben tomar las precauciones necesarias dependiendo del tipo de muestra, temperatura ambiente, medio de transporte y duración del viaje. El tiempo máximo que debe transcurrir entre la obtención de la muestra y su llegada al laboratorio será de 24 horas. 46 Identificación de las muestras La identificación de cada una de las muestras es de vital importancia para el laboratorio; se recomienda deben contener los siguientes datos de ser posible: Raza, sexo, edad, número de identificación o nombre del animal. Información del rebaño e historia clínica Esta información es esencial para comunicar inmediatamente los resultados del laboratorio ◗ Nombre, dirección, E-mail, teléfono y fax del propietario. ◗ Nombre, dirección, E-mail, teléfono y fax del médico veterinario. ◗ Nombre y dirección del rebaño. ◗ Número de animales que integran el rebaño ◗ Porcentaje de morbilidad (enfermos) y mortalidad (muertos). ◗ Sintomatología ◗ Tiempo de evolución de la enfermedad. ◗ Tratamiento efectuado. ◗ Vacunas aplicadas (tipo y fechas). ◗ En caso de necropsia, descripción de hallazgos o lesiones macro. ◗ Tipo de muestra, fecha y hora de la toma. ◗ Sistema de conservación utilizado. ◗ Diagnóstico presuntivo. ◗ Observaciones ◗ Técnicas para recolección de las muestras Estudios bacteriológicos Selección y recolección de muestras. El resultado del estudio bacteriológico de una muestra clínica, depende de la selección, recolección y condiciones de envío de la muestra. El criterio que se debe seguir para la de selección de la muestra, será que ésta tenga más probabilidad de que contenga el agente causal y evitar en lo posible se contamine con organismos del medio ambiente. 47 Leche 1.- Lavar con agua y jabón, enjuagar con abundante agua y secar la ubre con toallitas desechables si es posible. 2.- Con alcohol al 70% desinfectarse perfectamente las manos. 3.- Con la misma solución de alcohol y utilizando algodón, desinfectar los pezones. Dejar secar el pezón por un lapso de 2 minutos. Eliminar los dos primeros chorros de leche antes de tomar la muestra. 4.- Ordeñar y recoger un volumen de aproximadamente 3 ml en un recipiente estéril sin tocar sus bordes. Tomar muestra por separado de cada uno de los cuartos afectados. 5.- Identificar cada una de las muestras correctamente y mantenerlas en refrigeración durante su traslado hasta el laboratorio. Heridas abiertas y exudados En heridas abiertas, lo mismo que en exudados, los hisopos de algodón estériles, son los que ofrecen las mayores ventajas: 1.- En la toma de muestras de heridas y exudados, las áreas aledañas que pudiera tenerse contacto con el hisopo, deberán lavarse y secarse previamente. 2. Con un hisopo estéril, raspar la zona afectada evitando el contacto con cualquier otra parte, introducir dentro de un tubo estéril con 3 ml de medio de transporte. Existen en el mercado hisopos comerciales que incluyen el sistema completo para transportación y conservación con Medio de Transporte. 3. Identificar las muestras y enviarlas al laboratorio en refrigeración. Abscesos, edema y líquido articular Para obtener éste tipo de muestras, está indicada la punción con jeringa desechable nueva, bajo el siguiente protocolo: 1.- Rasurar, lavar con suficiente agua y jabón, desinfectar el sitio donde se realizará la punción. 2.- Introducir la aguja y aspirar la muestra hasta obtener una cantidad suficiente (1-2 ml) para realizar el estudio bacteriológico. 48 3.- Cubrir la aguja perfectamente con su tapa y tener cuidado de colocar la jeringa en un recipiente que evite el derramamiento de la muestra por opresión del émbolo. 4.- Identificar la muestra y enviarla al laboratorio en refrigeración. Órganos y tejidos La obtención de la muestra se realiza con asepsia durante la necropsia. Lo ideal es sacrificar el animal representativo del problema y de preferencia sin tratamiento con quimioterapéuticos. Si la toma de muestras se realiza a partir de un cadáver, se toma como plazo un máximo de tres horas posteriores a la muerte del animal para realizar la actividad. 1.- Seleccionar el órgano o tejido que presente lesiones; cortar trozos de tejido u órgano afectado. 2.- Depositar la muestra de forma individual en un frasco estéril de boca ancha y con tapa de rosca. 3.- Las muestras deben enviarse refrigeradas o incluso en congelación al laboratorio. Lavado prepucial La obtención de éste tipo de muestra es importante para el diagnóstico de las enfermedades infecciosas que afectan el sistema reproductor del macho. 1. - Depilar, lavar con agua y jabón toda el área externa, secar perfetamente con toallitas desechables. 2. - Se recomienda realizar el lavado de la cavidad prepucial, introduciendo aproximadamente 10 ml de solución salina estéril con una jeringa desechable nueva (sin aguja) en la parte más profunda de la cavidad. con masajes de abajo hacia arriba. 3. Sujetar el orificio externo del prepucio con los dedos y aspirar la solución salina con la jeringa. 4. Tapar la jeringa, identificarla y colocarla cuidadosamente para evitar derramamientos. 5. Enviarla en refrigeración al laboratorio. Semen Cuando se sospecha de problemas de infertilidad por alguna infección bacteriana en el macho es importante realizar un estudio bacteriológico del semen. El procedimiento mas práctico para la obtención de semen en ovinos y caprinos es por medio del uso de electroeyaculador. 49 1.- Los recipientes utilizados para la recolección del semen deben estar estériles y no contener ningún conservador. Incluso se pueden utilizar bolsas de polietileno nuevas (se compran en expendios por kilo) que se colocan cono vagina artificial para recoger la muestra en el momento de la eyaculación. 2.- Las muestras se identifican mantienen en refrigeración y deberán ser procesadas lo más pronto posible. Feto y placenta La recolección de éste tipo de muestras es importante en casos de aborto, para investigación sobre todo de brucelosis. Placenta El procedimiento y criterios a seguir es similar al utilizado para recolección de órganos. 1. Utilizando guantes, se toman porciones de los cotiledones. 2. Colocarlas en un frasco estéril de boca ancha. 3. Identificar y enviar refrigeradas al laboratorio. Feto 1. Limpie el feto de cualquier suciedad como estiércol o paja, utilizando guantes. 2. Coloque el feto completo en una bolsa nueva de polietileno. 3. Identifique la muestra y envíela en refrigeración al laboratorio. Heces Las muestras de heces para coprocultivo deben ser recolectadas directamente del recto con la finalidad de evitar contaminación, puestas en un bolsas de polietileno nuevas y enviadas en refrigeración al laboratorio. Orina Se debe utilizar un recipiente estéril de boca ancha y tapa de rosca. Lo ideal es tomar directamente el chorro de orina de la micción espontánea. En ovinos hembras se puede provocar la micción sujetando y tapando los ollares del animal. La muestra debe identificarse y enviarse al laboratorio en refrigeración. Sangre para hemocultivos Se obtiene por punción de la vena yugular, de preferencia con el sistema Vacutainer utilizando tubos con anticoagulante EDTA (tapón lila). Identificar y enviar el tubo en 50 refrigeración lo más pronto posible (máximo 4 horas). Se debe desinfectar el área de punción con una torunda de algodón impregnada de alcohol al 70%, se deja secar totalmente y se realiza la toma de muestra. Esta misma muestra sirve para realizar estudios de Química Sanguínea. Análisis de agua La muestra de agua para estudio bacteriológico se obtendrán directamente de donde los animales tienen acceso a ella, se colectará un volumen aproximado de 50 ml. La colecta se realiza en frasco estéril y debe ser enviada al laboratorio en refrigeración. Muestras para virología De forma general, los estudios para el diagnóstico de enfermedades virales requieren de suero (sangre sin anticoagulante), exudados y de tejidos, con el fin de llevar a cabo pruebas serológicas, aislamientos de virus y estudios histopatológicos. En la colección de muestras para este tipo de estudios se siguen los mismos criterios que para los estudios bacteriológicos y serológicos. Estudios de micología (hongos) Micosis superficiales Raspados cutáneos del borde de una lesión activa y pelo obtenido por depilación son las muestras preferidas para aislamiento de dermatofitos. Deben ser enviadas al laboratorio en un sobre de papel perfectamente cerrado, en ambiente libre de humedad y a temperatura de medio ambiente. Micosis profundas Las muestras de tejidos y órganos para este tipo de estudio deberán ser enviadas bajo condiciones y siguiendo el mismo criterio ya descrito para el análisis bacteriológico. Estudio histopatológico 1.- Seleccionar el órgano o tejido que presente lesiones; cortar trozos de tejido u órgano afectado, de preferencia con bisturí, en porciones pequeñas y delgadas. Las secciones de intestino deberán ser cortas (3-5 cm) y estar ligadas en los extremos para poder inyectar formalina en su interior, de tal forma que se fije mejor. 51 2.- Se pueden colocar todas las muestras de un animal en un solo frasco que contenga formalina al 10% y enviarse al laboratorio perfectamente identificado y a temperatura ambiente. Muestra para biometría hemática 1.- Obtener por punción de yugular, 5 ml de sangre con el sistema Vacutainner con un tubo con EDTA (tapón lila). 2.- Mezclar perfectamente la sangre con el anticoagulante, moviendo cuidadosamente el tubo de 5 a 7 veces aproximadamente. 3.- Identificar y enviar la muestra en refrigeración. Muestra para química sanguínea y estudios serológicos 1.- Extraer por punción de yugular 7 ml de sangre con un tubo sin anticoagulante (Vacutainner tapa roja). 2.- Dejar reposar el tubo con la muestra a temperatura ambiente de forma horizontal hasta que se forme el coágulo. Para evitar hemólisis, se deberá separar el coágulo destapando cuidadosamente el tubo, evitando que el coágulo que está adherido al tapón se despegue para poderlo desechar. En caso de que se rompa o quede una porción de coágulo en el suero, se deberá sacar con palillos de madera largos, teniendo cuidado en utilizar uno para cada muestra. 3.- Identificar y colocar la muestra en refrigeración para trasladarla al laboratorio. 4. -No congelar el suero hasta que se haya centrifugado y separado perfectamente de los eritrocitos. Parasitología Parásitos gastrointestinales, hepáticos y pulmonares Coproparasitarios 1.- Usando un guante de palpación estimular el esfínter anal del ovino o caprino para poder tomar directamente del recto la muestra de heces (10 g aprox.), voltear el guante, identificarlo y enviarlo en refrigeración al laboratorio 52 2.- Cuando se requiera evaluar un rebaño se deben de tomar muestras de forma aleatoria a grupos de animales de la misma edad y formar un “pool” de muestras. Por cada grupo de animales formado de acuerdo a sus características se deberá formar un “pool”. Muestras para identificar ectoparásitos Garrapatas y piojos 1.- Se sujeta el cuerpo del ectoparásito en cuestión con una pinza de disección y se separa del cuerpo del ovino o caprino. 2.- Colocar los ectoparásitos recolectadas en un frasco con alcohol al 70%. 3. Identificar y enviar al laboratorio. Acaros 1. Utilizando una gasa humedecida con glicerina, limpiar el área afectada, separando las costras y las escamas que se encuentran sobre o alrededor de la lesión. 2.- Colocar una gota de glicerina en la zona afectada y con una hoja de bisturí realizar un raspado. 3. Colocar el raspado a un frasco estéril, identificar y enviar al laboratorio. Formas de envío Las muestras biológicas requieren de un cuidado especial para su envío ya que se trata de preservar la viabilidad de los microorganismos de interés médico y evitar la proliferación de los contaminantes, por lo que es vital que se conserven a temperatura constante de refrigeración o incluso en algunos casos se podrán enviar congelados. Por otro lado se considera que algunas muestras biológicas son potencialmente infecciosas, lo que implica un riesgo para las personas que las transportan, por lo tanto la recomendación ideal es la participación directa de los médicos veterinarios en el transporte y entrega. Sin embargo, cuando esto no es posible, se deben enviar las muestras utilizando los servicios de compañías de mensajería o paquetería siguiendo estas instrucciones: 1.- Para la conservación de la temperatura de refrigeración lo ideal es utilizar refrigerantes; en caso que se requiera temperaturas más bajas o cuando el tiempo de entrega sea mayor se puede utilizar adicionalmente hielo seco. 53 2.- El contenedor donde se envíen las muestras deberá ser de un material aislante para mantener la temperatura interna de forma adecuada, siendo las más recomendadas las cajas de poliuretano (unicel) por su bajo peso y fácil manejo. 3.- Los recipientes que contienen las muestras deberán estar perfectamente acomodados y para evitar accidentes se recomienda colocar material que amortigüe los golpes y mantenga fijas las muestras. 4.- La caja deberá ser sellada perfectamente con cinta adhesiva (cinta canela) y colocar con letra grande y clara, con las siguientes leyendas: a) MANÉJESE CON CUIDADO, b) FRÁGIL, c) ENTREGA URGENTE d) CONTIENE MATERIAL BIOLOGICO, d) REFRIGERADO a 4ºC. 4.- HIGIENE. DESINFECCIÓN. La desinfección de instalaciones, equipos, vestuario del personal y aun del mismo personal es una de las actividades de práctica rutinaria en cualquier explotación pero sobre todo en las explotaciones intensivas. Enseguida se detallan los desinfectantes que mayor uso tienen y algunas recomendaciones sobre su uso. Naturalmente que el asistente técnico diseñará un programa eligiendo los agentes desinfectantes que mejor aplicación pueda lograr de ellos. Desinfectantes de uso más común. AGENTE DESINFECTANTE APLICACIONES CONCENTRACIÓN Ácido bórico Como baño ocular y de otras partes sensibles del cuerpo. 30 g. en 500 ml. De agua (solución de alrededor de 6%). Alcohol Efectivo contra los gérmenes patógenos menos resistentes, siempre que tenga una adecuad exposición. 70% concentración habitual del alcohol usado para fricciones. LIMITACIONES Y OBSERVACIONES Es un antiséptico débil, si es absorbido por el cuerpo en grandes cantidades, puede dañar al sistema nervioso. Por esta y por otras razones se utilizan frecuentemente en su remplazo antibióticos y soluciones salinas. Aplicación limitada. No se recomienda para uso general. Es empleado con frecuencia como antiséptico local en la obtención de muestras sanguíneas, o para efectuar inyecciones hipodérmicas. No resulta adecuado para la esterilización de los instrumentos. 54 Bactericidas catiónicos (existen varios productos disponibles, ente ellos, los compuestos de amoniocuaternario) Bicloruro de mercurio (cloruro mercúrico o sublimado corrosivo) Cal (Cal viva, cal apagada, óxido de calcio). Calor (por medio de vapor, agua caliente, llama o ebullición) Carbonato de sodio Cresoles Germicidas fenólicos Son en primer lugar detergentes, pero algunos demuestran ser activos bactericidas. Se usan generalmente en la limpieza de los utensilios de ordeño. Sólo deben ser utilizados en la forma que recomiendan las autoridades sanitarias. En condiciones favorables, destruye las bacterias menos resistentes. Tiende más a inhibir el crecimiento bacteriano que a destruir los microorganismos. En ocasiones, los mercuriales orgánicos usados como antisépticos locales son menos tóxicos y más seguros. Como desodorantes cuando se rocía sobre los excrementos y excreciones de los animales, o como desinfectante cuando se esparce sobre el suelo o se usa como lechada de cal recién preparada o como blanqueo. Destrucción de los desperdicios y eliminación de las secreciones corporales contaminadas. El vaporizador “Jenny” es efectivo para la desinfección si se emplea adecuadamente y, en especial, si se usa junto con un germicida fenólico. Puede ser utilizado en el lugar de hidróxido de sodio contra el virus de la fiebre aftosa y el exantema vesicular. En general, son desinfectantes eficaces. Activos contra los agente causales de la brucelosis, septicemia hemorrágica, mal rojo del cerdo y tuberculosis. Constituyen un grupo de Las concentraciones varían con los diferentes productos y conforme a las diversas condiciones. Seguir recomendaciones autorizadas. Presentan una toxicidad muy débil, no producen efectos irritantes y son inodoros. El jabón, los detergentes aniónicos e incluso las sales minerales contenidas en algunas aguas los neutralizan, son, superiores a los compuestos clorados en presencia de materia orgánica. Carecen de actividad contra el bacilo de la tuberculosis y los esporos. Tabletas en dilución al 1 por 1000. Ineficaz como germicida en presencia de materia orgánica. Los bovinos son especialmente susceptibles a la intoxicación por mercurio. En la desinfección de as instalaciones, el bicloruro de mercurio es inferior a los fenoles sintéticos, la lejía, los cresoles saponificados y los nuevos bactericidas catiónicos. Usada en espolvoreo, como lechada de cal o como blanqueo. Ineficaz contra el bacilo de la tuberculosis y los esporos. Se deben usar gafas cuando se agrega agua a la cal viva. Bastan por lo general 10 minutos de exposición al agua hirviente. La exposición al agua en ebullición destruye todos los gérmenes comunes, pero a veces no elimina ciertos esporos como los del carbunco y el tétanos. El calor húmedo es preferible al calor seco, y el vapor a presión es la forma más efectiva. El uso de este agente puede resultar costoso o impracticable. Solución al 10.5% (378 g. en 4.5 litros de agua). Se emplea generalmente como agente limpiador, pero tiene propiedades desinfectantes, sobre todo en solución caliente. 30 g/litro, o de acuerdo con las indicaciones del envase. No deben usarse donde su olor pueda ser absorbido, ni tampoco cerca de la leche y de la carne. Varía con las diferentes Excelentes para desinfección. No son 55 sintéticos (contienen fenoles no tóxicos e inodoros, como el ortofenifenol y el ortobencilparaclorofenol) Hipocloritos (compuestos clorados) jabón Lejía (hidróxido de sodio o soda cáustica) yodo Yodofor (complejo de yodo xon un detergente que lo libera a una velocidad controlada) desinfectantes efectivos contra todas las enfermedades producidas por hongos y bacterias, incluso el bacilo de la tuberculosis. Como desodorantes del estiércol, cloacas y desagües, y para la desinfección de tarros y botellas de leche e instalaciones lecheras. formulaciones. Deben seguirse las indicaciones del fabricante. inactivadas por el jabón, los detergentes aniónicos, las aguas duras o la materia orgánica. Carecen de actividad contra los esporos al carbunco y del tétanos. 200 partes de cloro libre por millón de agua. Inestable. La solución debe remplazarse con la frecuencia recomendada. Su poder germicida es muy limitado. Se utiliza fundamentalmente como limpiador y tensioactivo de superficie antes de la aplicación de un buen desinfectante. Sobre los pisosde cemento; en las lecherías, puesto que no deja olor; contra la bacteria de la brucelosis y el virus de la fiebre aftosa, peste porcina y exantema vesicular. En solución al 5% es efectiva contra el carbunco y la mancha. Muy usado como desinfectante de la piel, en heridas y contusiones menores. Para la desinfección de tarros y botellas de leche, y de lugares donde no existe gran cantidad de materia orgánica. Como se expende en el comercio. Excelente para desinfección, pero con las siguientes limitaciones: no es efectivo contra el bacilo de la tuberculosis y los esporos, y su eficacia se reduce en presencia de materia orgánica, como la leche, aún en pequeñas cantidades. Los hipocloritos se deterioran rápidamente cuando son expuestos al aire. Aunque indispensable para el saneamiento de las superficies, no debe ser usado como desinfectante. No es comúnmente efectivo y, los estafilococos y microorganismos productores de diarrea son resistentes. 365 g. cada 70 litros de agua. Daña las telas y el aluminio, y colorea las superficies. Deben tomarse precauciones cuando se aplica, ya que tiene efectos cáustico sobre la piel. No es efectiva contra los agentes causales de la tuberculosis, disentería crónica de los bovinos, papera del equino y la mayoría de los esporos. Para neutralizar la lejía puede utilizarse el vinagre diluido. Se emplea generalmente como tintura de yodo al 2-7%. No cubrir nunca con apósito. Se debe limpiar la piel antes de aplicar yodo. 75 de yodo activo por millón es la concentración mínima en condiciones ideales; se recomiendan 150 ppm para los usos prácticos. Inestable. La solución debe renovarse frecuentemente. Es un excelnte desinfectante, pero tiene las siguientes limitaciones: se trata de un germicida rápidamente consumido por las sustancias orgánicas, por lo que se necesita renovarlo con frecuencia; actúa mejor en los medios altamente ácidos; cuando la solución se efectúa con agua alcalina, debe reforzarse la concentración agregando yodo; éste se volatiliza poco a poco de la solución. 56 5.- INSTALACIONES. En condiciones naturales, la salud y el futuro del animal recién nacido dependen en gran parte, por un lado, de los cuidados que le presta la madre y, por otro, de la climatología regional; pero en el caso de los animales domésticos explotados en forma intensiva, estos dos factores se hallan relegados en parte o modificados por la intervención del hombre. El desarrollo y la futura productividad de los animales jóvenes dependen solamente en un 20% de su constitución genética y, como mínimo en el 80% de las condiciones ambientales. De todo ello se desprende la necesidad de de crear en las explotaciones ganaderas intensivas un ambiente controlado e higiénico, en especial cuando se trata de animales jóvenes. Este control debe estar relacionado, en primer lugar, con las exigencias primarias: espaciocubicación, espacio-pavimento, espacio-comedero y bebedero. Después se debe pensar en la temperatura, la iluminación, la alimentación, los cuidados sanitarios y la eliminación del excremento. El medio ambiente en el que se hallan inmersos los animales condiciona en gran manera sus constantes fisiológicas y repercute, muchas veces de modo sorprendente, sobre su salud, y, por consiguiente, sobre su productividad. Se debe reconocer que solo se puede obtener una buena rentabilidad del ganado manteniendo a los animales enclaustrados en las condiciones óptimas de ambiente, las cuales han sido determinadas en la actualidad para cada especie. En general, y especialmente en climas extremos, cuando los locales están mal aislados del exterior, controlar el clima se impone, ya que reduce: A. La mortalidad, los riesgos sanitarios y los gastos veterinarios. B. La duración del ciclo de explotación, lo que significa una economía de alimento. Los factores ambientales, en particular la temperatura, tienen una acción preponderante en el índice de transformación o, dicho de otra forma, en la cantidad de carne producida por cada kilo de alimento consumido. Los otros factores actúan preferentemente sobre el estado sanitario de los animales y, por consiguiente, sobre su índice de mortalidad. 57 Todas las condiciones de medio ambiente adecuado para los animales es posible obtenerlas siguiendo las especificaciones necesarias respecto a las instalaciones donde se albergará el ganado. Para el manejo y crianza de ovinos no se requieren de instilaciones costosas y equipos sofisticados; las instalaciones adecuadas con los equipos necesarios nos facilitan realizar el manejo de los ovinos con eficiencia y ahorro de tiempo. a).- Consideraciones generales para las instalaciones. a) Ubicación. Un terreno que esté libre de corrientes de aire, bien soleado, con declive apropiado para facilitar el drenaje y considerando factores como disponibilidad de agua y fácil acceso a mano de obra mercados y caminos. b) Orientación. En lugares con vientos fuertes, las instalaciones deben estar orientadas de manera que los animales queden protegidos de masas de aire frio. En climas cálidos, la orientación debe seguir la dirección del sol para conseguir una mayor área de sombra durante el día. En climas fríos, deben orientarse en forma transversal al recorrido del sol, para permitir que éste entre durante todo el día. c) Diseño. El diseño depende del tipo de ganado que hospedará y de las condiciones climáticas de la región para lograr un microclima apropiado para la especie. Es uno de los problemas más serios readecuar instalaciones de una especie a otra, por próximas que éstas parezcan. d) Temperatura ambiente. La temperatura es un factor muy importante a controlar en las instalaciones, no sólo por sus efectos sobre la presentación de enfermedades, principalmente neumonías, sino más aún por su impacto en la producción. Se puede considerar que temperaturas entre los 15 y 20° C son adecuadas para un buen equilibrio térmico en el animal. Temperaturas más altas reducen el consumo de alimento y, en consecuencia, la eficiencia productiva en leche o carne; las más bajas obligan al animal a incrementar el gasto energético para producir calor, incluso en casos extremos, movilizando grasas para tal fin a través de la gluconeogénesis 58 mediada por cortisol. Esta secreción de corticoides para obtener energía puede determinar en las borregas o cabras gestantes la presentación de abortos. Los descensos bruscos de temperatura, de más de 10° C en unas pocas horas, tal como ocurre en los meses de invierno entre el mediodía y el atardecer, o cuando los animales están expuestos a corrientes de aire, especialmente cuando se han mojado, son predisponentes a la presentación de neumonías, por lo que deben evitarse las corrientes de aire en las instalaciones de encierro, utilizando cortinas, pacas o paredes orientadas a evitar el impacto directo de los vientos dominantes sobre los animales. En la época de partos, las corrientes de aire sobre la cría recién parida y húmeda son determinantes de la muerte por exposición o hipotermia del recién nacido. Los mecanismos que permiten amortiguar los efectos de la temperatura en las instalaciones son eficientar los mecanismos de ventilación para asegurar la remoción efectiva del aire caliente; cuidar la altura de los techos, bajándolos en climas fríos, y, subiéndolos en los calientes; vigilar las superficies sombreadas incrementándolas en climas cálidos y controlar la humedad, cuidando los drenajes y las posibles fugas en bebederos o sistemas de agua. Es importante destacar que la sombra “más sana” es la que se obtiene con árboles, que igualmente sirven para evitar las corrientes de aire (cortinas de árboles) y permiten una adecuada filtración solar en los corrales y potreros. e) Ventilación. Las instalaciones deben estar bien ventiladas para prevenir problemas neumónicos. Esta idea no está reñida con el concepto anterior de evitar corrientes de aire que enfrían a los animales. Una buena ventilación se logra recordando que el aire calentado por el contacto con los animales tiende a subir creando palancas de aire, que cuando existen ventanas altas o chimeneas que permiten su salida, arrastra los aerosoles generados por la tos o el estornudo de los animales enfermos y reduce significativamente la transmisión de los patógenos involucrados en las neumonías. Un indicador de la mala ventilación es el olor a orina que llega a ser intolerable; muchos piensan que las neumonías son consecuencia del efecto irritante del amoniaco, cuando en realidad lo son de la mala ventilación. La existencia de aberturas a nivel del piso, o de ventanas o chimeneas en la parte alta y opuesta de la 59 instalación aseguran una adecuada palanca de aire que puede además ser mejorada forzando el aire con extractores o ventiladores. Como se indicó antes, una buena ventilación también permite regular la temperatura ambiente. f) Humedad. La humedad en las instalaciones en un factor siempre negativo, enfría a los animales, incrementa notablemente la sobrevivencia de los microorganismos en el ambiente y en algunos casos es factor predisponente directo de enfermedades como las neumonías y el gabarro. Una de las enfermedades de mayor mortalidad de crías en sistemas confinados es la coccidiosis. La capacidad infectante de los ooquistes de coccidias eliminados por jóvenes y adultos se incrementa notablemente en condiciones de humedad. Una buena inclinación en los pisos y el evitar encharcamientos garantizan un buen drenaje de las instalaciones, pero debe acompañarse del control de los bebederos y el sistema de limpieza, que eventualmente se desbordan o presentan fugas que colaboran con la orina de los animales a mantener la humedad ambiental. Es esencial remarcar aquí que el uso de pisos de cemento, si bien permiten una mejor limpieza y pueden asegurar una inclinación apropiada, resultan fríos, son impermeables y se mantienen húmedos, en particular en zonas bajo techo, sombreadas en ocasiones permanentemente. A lo anterior debe agregarse su costo; su uso dependerá del clima de la región, pero debe considerarse que las excretas de los pequeños rumiantes son fáciles de eliminar en un piso de tierra adecuadamente apisonado y que la tierra absorbe muy bien la orina de los animales. El inconveniente con ovinos en estabulación permanente es la tendencia de los animales a rascar y hacer hoyos en el piso como consecuencia de su condición de estrés. g) Insolación. El uso de techos debe ser cuidadosamente analizado no sólo por su costo sino por sus efectos en la ventilación, la humedad, la temperatura y la restricción al pasaje del sol. La humedad y el frío son condiciones que favorecerán la sobrevivencia de patógenos en el ambiente; la radiación solar no sólo seca el ambiente sino que tiene efectos germicidas por su espectro ultravioleta. La luz solar es el desinfectante más barato que se puede aplicar en una instalación, por lo que debe procurarse orientar a la misma, en particular en la colocación de techos y paredes, de tal manera que se asegure la insolación de todo el ambiente. Debe 60 considerarse la inclinación en el trayecto del sol hacia el sur en la temporada invernal para garantizar en esta época la insolación. h) Hacinamiento. La superficie por animal debe ser de un metro y medio a dos metros para evitar condiciones de hacinamiento y dar confort al animal. En climas calientes deben tener zonas con sombra y en fríos zonas protegidas, de lo contrario, aunque el corral sea muy grande, los animales se aglomeraran buscando las zonas más confortables. El exceso de animales por superficie facilita la transmisión de patógenos entre enfermos y sanos, incrementa las deposiciones y la consecuente mala higiene. También se afecta el calostrado de las crías aumentando los problemas diarreicos y el abandono de las crías por las hembras recién paridas. i) Manejo. En México es poco frecuente que los ranchos cuenten con instalaciones de manejo, aunque sean rudimentarias y, es poco común que se emplee la sala de ordeño o corrales de parición cuando se requiere tratar o muestrear a los animales o revisarlos con cualquier fin. Esta práctica determina que los animales identifiquen estas áreas con un ambiente en el que pueden ser molestados y se reduzca la secreción de leche, al menos en los días siguientes a la maniobra. Un pequeño corral, conectado a las instalaciones generales, con una manga de salida en la que pueda interponerse la báscula, sería una instalación suficiente para manejar adecuadamente a los animales y con seguridad también para los operarios. Además, los animales sufrirán un menor estrés y, sobre todo, resultarán menos golpeados en estas condiciones. Algunas instalaciones pueden ser completamente descartadas, como por ejemplo contar con áreas de enfermería u hospital, o el construir baños de inmersión. Éstos sólo resultan útiles en rebaños de más de mil animales y en condiciones en las que las ectoparásitosis son frecuentes. Sólo en el caso del gabarro se puede justificar un corral de aislamiento de animales enfermos, como medida de control (separación de los enfermos de los sanos) o en ranchos con excesivo movimiento de animales contar con un corral de embarque y exhibición, y uno cuarentenario, para aislar animales de nueva adquisición antes de incorporarlos al rebaño general. 61 Se resumen aquí las consideraciones sobre las características de las instalaciones para lograr abatir el número de posibles patógenos. Evitar el hacinamiento; tener una adecuada densidad animal para la eliminación de patógenos en el ambiente, pero sobre todo para reducir las posibilidades de transmisión de los enfermos a los sanos; lograr una buena ventilación que ayude a tener una apropiada temperatura, a secar el ambiente y a eliminar los aerosoles contaminados. Si la instalación está bien orientada se debe lograr que toda el área reciba una razonable insolación a lo largo del día y las paredes sólo serán necesarias para cortar corrientes de aire. Un buen drenaje impide encharcamientos y humedad excesiva. Los árboles son mucho más apropiados para lograr sombra que los techos y éstos sólo son necesarios para proteger los comederos. b).- Corrales. Pueden ser construidos de acuerdo a la disponibilidad de los materiales con que se cuente en la región y de los recursos económicos del productor, es importante considerar las condiciones climáticas para determinar la necesidad de espacio adecuada. Generalmente los requerimientos de espacio en corral es de 1.5 m2 por animal y de 0.5 m2 por animal en el caso de sombreadero. Es recomendable construir corrales con puertas pequeñas para que solo tengan acceso las crías en lactancia con la finalidad de ofrecer alimento concentrado rico en proteína. a).- Corrales de alojamiento (manejo intensivo) Los corrales de alojamiento son principalmente usados para las hembras poco antes del parto hasta el destete de crías, y para el engorde de borregos. Al lado del corral se encuentra una nave frecuentemente abierta por un lado. La nave sirve para proteger a los animales contra las inclemencias del tiempo. En una parte de la nave se instalan parideras individuales. Cuando hace mucho frío, éstos pueden estar provistos de calefacción. Otra parte de la nave se usa para almacenar alimentos. Aquí se pueden instalar los comederos para los concentrados y eventualmente para el heno. El ensilaje o el forraje fresco normalmente se suministra en comederos a la intemperie. 62 Los corrales se deben construir de tal modo que alcancen para grupos de 50 hasta 100 ovejas con sus crías. Se debe tomar en cuenta una superficie de alrededor de 4m2 por hembra. Un diseño para 200 ovejas con sus crías consta de las siguientes partes: 1) Corral para 100 ovejas con una cría. 2) Corral para 100 ovejas con mellizos. 3) Nave cerrada por tres lados. 4) Parideras. 5) Corral comunal para madres con crías de 2 hasta 4 días de edad. 6) Comedero para crías. El alimento no puede ser alcanzado por las ovejas. 7) Almacén para heno con comedero tipo porta forrajes de rastrillo. 8) Comederos al lado de la cerca. 9) Bebedero. Si es de tipo taza, un bebedero es suficiente para 40 ovejas o 60 borregos. Si es de tipo pileta, una longitud de 1.25m es suficiente para 100 ovejas. Este tipo de corral también puede ser usado para los borregos de engorde. Las parideras, el corral comunal y los comederos son desarmables. Un corral de este tamaño alcanza para 200 borregos de engorde. Generalmente este tipo de instalaciones son utilizadas en aquellos establecimientos que realizan un manejo intensivo de sus animales, y preferentemente en zonas de donde el invierno es muy riguroso y con muchas nevadas. a).- Corrales de manejo. El diseño y tamaño de los corrales para ovinos dependerá del número de animales que componen la majada y el propósito productivo de la misma. La superficie total se puede calcular sobre la base del espacio que debe disponer cada animal en el encierre, el cual puede variar entre 1.4 y 1.6 m2 según la raza. Sobre la base de esta superficie individual se calcula el tamaño de los potreros. 63 En segundo lugar hay que tener en cuenta la ubicación de los corrales. En general se encuentran adyacentes al galpón de esquila si lo hay, o cercanos a un galpón que eventualmente pueda usarse para la misma o tinglado para fines diversos. Para la orientación hay que considerar que el ovino se mueve mejor y por ende se trabaja con menos esfuerzo, en subida y con el sol de atrás o de costado. Nunca debe orientarse el corral hacia el sol de frente en especial la manga de clasificación. En términos generales, un corral para ovinos está compuesto por corrales de recepción, encierre conocido como diamante por la forma, la cual recibe a los animales de los corrales que lo rodea, a continuación se ubica el apretador que desemboca en la manga. La manga debe ser construida ciega, con madera unida una con la otra, de manera que el animal no pueda ver al exterior como así también en forma directa a la manga. Para la construcción se deben considerar las medidas de la base y de la parte superior, las cuales no tienen que superar en la base los 27 cm. y en la parte superior los 54 cm. Estas medidas impiden que los animales se den vuelta en la manga con los consiguientes problemas. En la salida de la manga, se colocarán los separadores cuya cantidad dependerá del número de grupos a seleccionar. Es de tener en cuenta que una vez diseñados los corrales se deben colocar el embretador y la manga, los cuales estarán ubicados en el centro del mismo. En el diseño de los corrales es importante considerar la circulación de manera que se pueda volver con los animales que pasaron por la manga a los lugares de recepción. c).- Corrales modulares. Es un equipo que como su nombre lo indica permite construir con módulos o paneles de materiales resistentes, corrales de diversas formas y funciones. Se requiere utilizar materiales ligeros pero a la vez resistentes. Lo ideal es el aluminio, pero por ser muy caro no se recomienda. Se puede emplear entonces el material conocido como tabular que es ligero, resistente, fácil de soldar y pintar para que dure más tiempo. El sistema de módulos permite fundamentalmente construir en pocos minutos y con poco esfuerzo, corrales modulares con diversas formas y funciones. Por ejemplo: 64 • Un corral para encierro nocturno. • Manga de manejo. • Separador de corderos para alimentación especial. • Separador de animales enfermos. • Lugar de paso para baños pódales. • También permite que en época de lluvias el corral pueda ser movido continuamente evitando lodazales o problemas de patas en los ovinos. Características de un módulo que puede ser empleado como cerca perimetral ó en la construcción de la manga. Características de un módulo que puede ser empleado como cerca perimetral ó en la construcción de la manga. Figura 2. Características de un módulo que permite hacer corrales para dar alimento diferente a los corderos. 65 Tipos de módulos. Existen varios tipos de módulos que pueden ser construidos para diversas funciones. Los principales son: a).- Módulo base para la construcción de cerca perimetral o manga de manejo. Este módulo se puede hacer de unos 2 o 3 metros de largo y 1 metro de alto. Como se muestra en la figura 1, se recomienda que sea construido de abajo hacia arriba con una barra que puede quedar al ras del suelo si se entierra el módulo y luego dos barras separadas 10 centímetros cada una de la que va pegado al suelo. Esto evita que se salgan los corderos y le da fuerza módulo. Las otras cuatro barras pueden ir a 20 centímetros de distancia. b).- Módulo separador de corderos. Este módulo permite hacer un corral pequeño donde sólo pueden entrar los corderos. Se utilizan cuando se les da concentrado o grano a los corderos. Como se muestra en la figura 2, en la parte de abajo según la raza hay el espacio suficientemente alto (30 a 35 cm) y ancho (20 a 22 cm) para que pasen los corderos pero no los animales grandes. c).- Módulo para manga con puerta. Una de las grandes ventajas de este sistema de módulos es que permite hacer corrales de manejo, muy útiles cuando se quiere desparasitar, descolar, curar patas, seleccionar o revisar el ganado, etcétera. Este módulo como se muestra en la figura 3, tiene en uno de los lados una puerta que ayuda a controlar el paso de los animales o permite a las personas entrar o salir. Se presentan dos formas en que puede estar la puerta. Figura 3A. Módulo con puerta al ras. 66 Figura 3B. Módulo con puerta alta Figura 4. Detalle del ensamble de los módulos. Cómo se construyen los corrales. Como ya se dijo son paneles hechos con perfil tubular, el largo puede ser de 2 a 3 metros y el alto de 1 a 1.2 metros, dependiendo de si se tienen animales altos como el Suffolk, Hampshire o Columbia. Las barras de los extremos, y la del centro de refuerzo tienen una pata que sirve para entrenarlos. Para poder ensamblar los módulos en los extremos tanto arriba como abajo, se sueldan unos tubos que permiten pasar unas varillas, como se aprecia en la figura 4. En la figura 5, se muestra cómo se van ensamblando los módulos. 67 Figura 5. Forma en que se ensamblan dos módulos. Costo aproximado de cada módulo. El costo de un módulo o panel es muy variado, depende del precio del material y de la mano de obra. Un módulo puede durar muchos años si se les da un mantenimiento mínimo, por ejemplo repararlo cuando se rompan algunas de las barras y pintarlos cuando lo necesiten. Corral de encierro con área de alimentación especial de corderos. 68 Corral de manejo para desparasitar, vacunar, seleccionar, etcétera. Cuántos módulos se necesitan para hacer un corral Un corral para 50 ovejas adultas se puede construir con 10 módulos de 3 metros. Finalmente se ilustran ejemplos de corrales que pueden ser construidos con módulos. Corral con baño podal d).-Infraestructura. - Comederos. Sirven para disponer de un lugar específico donde aportar a los animales suplementos alimenticios. Se requieren de 14-20 cm de longitud por animal, se puede construir de 69 diversos materiales. Es importante cuidar la altura de los comederos para evitar que los animales se metan a los comederos provocando desperdicio de alimento. Los comederos más comunes son los colocados al lado de la cerca de los corrales. Estos comederos pueden ser construidos completamente de madera o de cemento con postes de madera. 1) Comedero de madera al lado del alambrado: La oveja requiere de 30 a 40 cm. de longitud de comedero por animal. Los borregos necesitan de 15 a 20 cm. de comedero por animal. A veces se construye un comedero como división de dos corrales. Este tipo de comedero debe ser llenado en forma mecánica. Por su alto costo, su uso es reducido. Ambos tipos de comedero pueden ser usados para suministrar forrajes, concentrados y raciones completas de mezclas de forrajes con concentrados. 2) En el campo se usa frecuentemente un comedero en dos niveles. Consta de un porta forrajes tipo rastrillo para el heno y debajo de éste un pesebre para los concentrados y/o los minerales. En climas con mucha lluvia o mucho sol, lo mejor es colocar el comedero bajo techo. Los comederos tienen una altura de 110cm. Las distancias entre las barras del rastrillo son de 10 cm. Para suministrar solamente concentrados se usa un comedero de madera que puede ser construido en diferentes formas: 1) Profundidad del pesebre: 12 cm; ancho: 34 cm (arriba) y 25 cm (abajo). 2) Altura total del comedero: 60 cm para animales adultos y 50 cm para animales jóvenes. 3) Las patas del comedero están separadas por una distancia de 100 cm para que los ovinos no lo derriben. Una oveja adulta necesita un espacio de 50 cm. para comer. Por lo tanto, un metro de comedero alcanza para cuatro animales ya que pueden comer por ambos lados. Este comedero también puede ser usado para el suministro de minerales, pero se deberá encontrar bajo techo. 70 Frecuentemente es necesario suministrar concentrados a las crías y al mismo tiempo prevenir que los animales adultos coman de éstos. A esto se lo llama creep feeding. Para lograr el creep feeding se colocan los comederos en un lugar cercado, de tal manera que solamente los animales pequeños puedan entrar. Otra posibilidad es usar comederos especiales. Éstos se construyen con las siguientes especificaciones: • Abertura de 12 cm. Únicamente los animales pequeños pueden meter la cabeza. • Tapa con bisagras para llenar el comedero. • Altura del comedero: 55 cm. • Ancho máximo entre las patas: 80 cm. - Bebederos. Sirve como tanque receptor de agua para que los animales en cualquier momento puedan disponer de agua, ésta debe estar fresca y limpia, siempre bajo sombra. Existen diferentes tipos de bebederos y de diversos materiales como madera, fierro, llanta, concreto, entre otros. El tamaño de los bebederos, no debe ser excesivamente largo dado que la renovación del agua es en cierta forma lenta, siendo este problema más acentuado en verano ya que, con altas temperaturas, el agua alcanza temperaturas superiores a las normales para los animales. Respecto a la ubicación en el potrero, los bebederos deberán estar alejados de los alambrados para permitir que los animales puedan abastecerse a ambos lados del bebedero. Hay que tener en cuenta la altura del bebedero, para permitir que los corderos puedan acceder al agua sin problemas. Es conveniente consolidar el suelo en los alrededores, ya sea con tosca o cemento, con una pendiente que no permita la acumulación de agua. - Sombreaderos. Como su nombre lo indica, aporta sombra a los animales en los días soleados y evitan que se mojen durante la temporada de lluvias. El sombreadero debe presentar la forma de dos aguas, de oriente a poniente y con un cierto grado de inclinación; pueden ser construidas con diversos materiales. 71