Nº 13 - enero 2011 - Revista Trimestral Actualización en antidepresivos. Trastornos del sueño y psiquiatría. Terapia de parejas. El desafío de ser pareja hoy. Distribución Gratuita sin Valor Comercial Indice Editorial Actualización en antidepresivos. 4 - 16 Trastornos del sueño y psiquiatría. 18 - 27 Terapia de parejas. El desafío de ser pareja hoy. 28 - 34 n esta última revista del año 2010 hemos considerado de interés realizar una revisión y actualización del uso de antidepresivos de segunda generación, principalmente por su amplio uso no solo en el ámbito psiquiátrico sino también en otras áreas de la medicina. Es por ello que hemos dado énfasis a las reacciones adversas, más aquellas poco frecuentes pero de cuidado como el síndrome serotoninergico y el trastorno de coagulación y sangrado. También nos hemos detenido en los efectos negativos de la sexualidad ya que si no lo consideramos puede ser motivo de abandono de tratamiento, y en el síndrome de discontinuación de antidepresivos, muchas veces ajenas a una decisión médica, con efectos clínicos muy desagradables, dando énfasis en la educación y adherencia al tratamiento farmacológico. Como cada vez son más los pacientes depresivos que presentan conjuntamente otras enfermedades médicas y/o psiquiátricas, consideramos fundamental el conocimiento farmacodinámico y farmacocinético de los antidepresivos prescritos, principalmente sus posibles interacciones farmacológicas, con el objetivo de evitar efectos secundarios indeseables e ineficacia clínica. De igual manera cada vez debemos conocer la fármaco genómica de los antidepresivos, más aún si sospechamos problemas en su metabolismo dado por algún polimorfismo de los genes CYP o del transportador de serotonina, es por ello que también hemos realizado una somera revisión al respecto. Todo esto con el objetivo de prescribir el antidepresivo más adecuado al paciente. Los trastornos del sueño son muy esperables y frecuentes de observar en nuestros pacientes psiquiátricos. Es por ello que hemos solicitado al Dr. Mario Seguel una revisión actualizada considerando su rica experiencia clínica en la medicina del sueño. En esta revisión se describen las principales patologías psiquiátricas (trastornos de ansiedad, depresión mayor, trastorno bipolar) con sus específicas alteraciones o anormalidades del sueño y sus tratamientos respectivos. Editor Dr. Sergio Zamora Delgado Médico Psiquiatra Centro de Salud Mental Integrado. Diseño y diagramación Agencia de Publicidad Sobrevuelo Ltda. Indudablemente que el vivir en pareja es una aventura y un desafío. Gloria Tapia, psicoterapeuta del Centro de Salud Mental Integrado (CSM) nos relata el como fluye el amor y enamorase y con ello la aventura de ser pareja. Nos previene y nos señala las diversas maneras de cómo sostener y fortalecer la relación de pareja, a través del ajuste de expectativas, de comunicarse mejor y de entretenerse juntos. Nos muestra la terapia de pareja como una alternativa posible cuando hay un quiebre o una crisis en la relación de pareja, como una posibilidad de reencontrase y comunicarse mejor Nuevamente invito a los médicos, psicólogos u otros profesionales de la salud mental a participar en este proyecto de revisión y actualización de temas de interés clínico. 3 ACTUALIZACIÓN EN NEUROCIENCIA Y SALUD Actualización en antidepresivos Dr. Sergio Zamora Delgado l uso de antidepresivos se ha generalizado, no sólo en la consulta psiquiátrica, sino también en la consulta médica en general. Disponemos de una variedad de antidepresivos de primera y segunda generación, con sus características peculiares cada uno de ellos, que se hace imprescindible conocerlas, principalmente sus efectos adversos como sus interacciones con otros fármacos, única manera de realizar una prescripción que sea segura y que facilite la adherencia terapéutica. Es por esta razón que he considerado conveniente realizar una revisión sobre los antidepresivos de segunda generación, dando énfasis a sus interacciones farmacológicas y sus cada vez más esperables efectos secundarios. EFECTOS SECUNDARIOS DE LOS ANTIDEPRESIVOS Es importante señalar al paciente que al comenzar a tomar un antidepresivo probablemente presentará una o más molestias de carácter leve a moderado los primeros días, los cuales cederán dentro de una o dos semanas. Si estos persisten, deben tener la posibilidad y accesibilidad de comunicarse con su tratante. Todas estas medidas evitarán que el paciente desconfíe o abandone su tratamiento. Los síntomas secundarios más frecuentes al inicio del tratamiento son náusea, diarrea, cefalea, ansiedad, insomnio, somnolencia, boca seca y aumento de la sudoración. Neurona presináptica Inhibición de adenil ciclasa Receptor 5-HT1A rotonina en las plaquetas al inhibir la recaptura de serotonina por el transportador ubicado en la membrana de las plaquetas, llegando con el tiempo a un agotamiento de serotonina intraplaquetaria. - Inhiben la sintetasa del óxido nítrico, necesaria para la síntesis de CMPC que actúa como regulador de la agregación plaquetaria. G AMPc Liberación de serotonina Receptor 5-HT2A Serotonina Fosfatidilinositol Neurona postsináptica Acción biológica El origen de las náuseas se debe a la estimulación de los receptores 5HT3 en el hipotálamo, tronco cerebral y fibras aferentes viscerales. El Ondasentron, antagonista del receptor 5HT3, disminuye las náuseas 12. La estimulación de los receptores 5HT3 y 5HT4 en el tracto gastrointestinal puede provocar un incremento de la motilidad del intestino y diarrea 12. La estimulación aguda de los receptores 5HT2A y 5HT2C en la proyección desde el rafe a la corteza límbica puede causar agitación mental y ansiedad 12. El bloqueo de los receptores 5HT2A e histamínicos H1 explica el efecto secundario de la sedación, y el bloqueo de los receptores 5HT2C y de H1 la ganancia de peso 12. 4 Hay otros síntomas secundarios no muy frecuentes de observar, pero que con el uso masivo y frecuente de ISRS, es posible pesquisar y con ello evitar el abandono prematuro o secuelas mayores, el cual revisaremos a continuación. Alteración de la coagulación y hemorragia Es importante destacar que la serotonina se encuentra almacenada en las plaquetas (principal reserva periférica de serotonina), facilitando la agregación plaquetaria y la hemostasia. Los ISRS aumenta el riesgo de hemorragia, inhibiendo la formación del coágulo, por dos mecanismos 1: - Disminuyen los niveles de se- Esta situación se puede apreciar en el paciente que toma ISRS, por hematomas cutáneos espontáneos como petequias y equimosis, epistaxis y hemorragia del tubo digestivo o genitourinarias. Por lo general son de intensidad leve a moderada. Los ISRS más frecuentemente asociados a hemorragias, son aquellos con mayor efecto inhibidor de la recaptura de serotonina como lo son la fluoxetina, paroxetina y sertralina. Los de inhibición intermedia como citalopram, escitalopram y fluvoxamina se asocian con menos frecuencia de sangrado 3. Con ISRS el riesgo de sangrar aumenta entre 1.71 y 3.6 veces más que aquellos que no toman ISRS. Si se asocia a los ISRS aspirina el riesgo aumenta hasta 7.2 veces y con el uso concomitante de antiinflamatorios no esteroidales (AINES) el riesgo aumenta hasta 15.6 veces 2. Por ello debemos tener cuidado con el uso de ISRS, más cuando el paciente tiene antecedentes de úlcera o hemorragia digestiva, es de mayor edad o está usando ácido acetilsalicílico, AINES, anticoagulantes o corticoides. No contraindica uso de ISRS en pacientes con antecedentes de trastornos de coagulación (trombocitopienia) o alteración de las plaquetas. Eso si se debe tener un control permanente. Se ha observado que el uso de duloxetina asociado a fármacos antiagregantes plaquetarios, anticoagulantes y AINES aumenta el riesgo de sangrado 1. ¿Qué hacer ante sospecha de sangrado por ISRS? - Suspender ISRS y usar otro ISRS de inhibición intermedia (por ejemplo, sertralina por escitalopram). - Si tiene algún factor de riesgo usar ISRS de inhibición intermedia. Síndrome de secreción inadecuada de hormona antidiurética (SIADH) El síndrome de secreción inadecuada de hormona antidiurética se debe a una liberación excesiva de esta hormona por la hipófisis anterior (neurohipófisis). Esta hormona actúa en los receptores de los túbulos colectores de los riñones reteniendo agua y disminuyendo con ello los niveles de sodio plasmático. Es importante detectar esta disfunción electrolítica porque sus síntomas pueden confundirse con síntomas depresivos (síntomas cognitivos, enlentecimiento del pensamiento y letargia). Para hacer diagnóstico el nivel de sodio plasmático debe ser menor de 135 mOsm/Kg, en la cual se empiezan a manifestar algunos síntomas clínicos como malestar general, mialgias, letargo y cefalea. 5 Es importante consignar que otros fármacos también pueden provocar el SIADH, como ciertos antipsicóticos, estabilizadores del ánimo, antiinflamatorios no esteroidales, diuréticos e hipoglicemiantes entre otros. También ciertas situaciones clínicas lo pueden favorecer, como vómitos, diarreas, infecciones pulmonares, hipotiroidismo, insuficiencia cardiaca, renal o hepática, etc. Los factores de riesgo para desarrollar SIADH son: sexo femenino, edad avanzada, usar alguno de los fármacos mencionados o padecer algunas de las enfermedades descritas 1 . Los antidepresivos ISRS pueden presentar este síndrome, principalmente durante la primera semana de tratamiento 4. Se debe tener mucha precaución al indicar algún ISRS si el paciente tiene algún factor de riesgo, se debería medir los niveles de sodio antes de comenzar con ISRS. ¿Qué hacer SIADH? ante sospecha de - Suspender tratamiento con ISRS. - Medir niveles de sodio plasmático. - Restringir el agua y reemplazar el sodio. Disregulación del metabolismo óseo y riesgo de fracturas Algunos estudios han sugerido que existe una asociación entre la administración de ISRS y la disminución de la densidad mineral ósea y con ello el riesgo de fracturas, aunque no son concluyentes 35. ACTUALIZACIÓN EN NEUROCIENCIA Y SALUD Esta disminución de la densidad mineral ósea se debería al incremento de cortisol y de las citoquinas inflamatorias (la interleuquina 6 y el factor de necrosis tumoral alfa activarían los oestoeclastos aumentando el nivel de resorción ósea). No está claro la influencia del sistema serotoninérgico sobre la regulación del tejido óseo. En cuanto al riesgo de fracturas con uso de ISRS, un metanálisis informó de un riesgo 33% superior v/s uso de antidepresivos no ISRS. Este riesgo de fracturas se observó durante las primeras etapas del tratamiento con ISRS o antidepresivos tricíclicos. Una de las causas sería el mayor riesgo de caídas de pacientes con ISRS 35. Síndrome Apático Se ha descrito en pacientes en tratamiento con ISRS este síndrome apático o amotivacional caracterizado por pérdida de la motivación, mayor pasividad y sentimientos de indiferencia. Se postula que lo provoca un déficit de la función dopaminérgica principalmente en el lóbulo frontal por estimulación serotoninérgica central continuada 31. Su intensidad se relaciona con la dosis del ISRS y tiende a desaparecer una vez retirado el antidepresivo. ¿Qué hacer ante este síndrome amotivacional secundario a ISRS? Cambiar o combinar con un antidepresivo con acción dopaminérgica como el bupropion o algún dual en altas dosis (venlafaxina). También se debe considerar el uso de agonistas dopaminérgicos como pramipexole o metilfenidato. SÍNDROME SEROTONINÉRGICO Es un trastorno iatrogénico secundario a la elevación intrasináptica de la serotonina, cuya gravedad está relacionada directamente con los niveles de serotonina (dosis dependiente). Sus manifestaciones clínicas pueden ser desde leve a graves o tóxicas. Pueden variar desde temblores y diarreas hasta una confusión mental, rigidez muscular e hipertermia grave. Muchas veces estos síntomas pueden pasar desapercibidos y confundirse como un agravamiento de la enfermedad de base. Por lo general este síndrome serotoninérgico se produce por la asociación de dos o más fármacos serotoninérgicos. También puede ser producido por una sobredosis de un único fármaco (en el 15% de los pacientes con sobredosis de ISRS). Cada vez son más las posibilidades de que este síndrome se presente en la práctica clínica habitual, dado lo frecuente de las depresiones y el masivo uso de antidepresivos, por lo que se sugiere a todo clínico informar al paciente sobre los riesgos del uso de antidepresivos, más aún si se usan en dosis elevadas y asociado a otro antidepresivo u otra sustancia serotoninérgica. Sustancias que pueden provocar un aumento de los niveles de serotonina y con ello un riesgo de un Síndrome Serotoninérgico 5. 1.-Aumentan síntesis de serotonina: L-Triptofano. 2.-Aumentan la liberación de serotonina: anfetaminas, cocaína, metilendioximelanfetamina (MDMA) / éxtasis, fenfluramina. 3.-Bloquean la recaptura de serotonina: antidepresivos triciclitos, ISRS, ISRN, trazodona y mirtazapina, tramadol, sibutramina. 4.-Reducen el catabolismo de serotonina: IMAOS. En Chile meclobemida. 5.-Estimulan directamente receptores serotoninérgicos: buspirona, litio, triptanes (naratriptan, sunatriptan y otros), LSD, Ginseng, Hipericum perforatum (flor de San Juan). Del cuadro anterior se desprende que debemos tener mucho cuidado al asociar antidepresivos, ya sea con otro antidepresivo u otras de las sustancias señaladas, por riesgo de un síndrome serotoninérgico. Por ejemplo, con los antijaquecosos triptanes (agonistas selectivos de los receptores 5HTR1B y 5HT1D) dado que la jaqueca es una comorbilidad muy frecuente 3, como también con el analgésico opiáceo tramadol dado que el dolor crónico es también acompañante frecuente de las depresiones, principalmente en cuadros como la fibromialgia. 6 Manifestaciones clínicas El síndrome serotoninérgico produce cambios en el estado mental del paciente con una hiperactividad autonómica y anomalías neuromusculares, que pueden ser de leve intensidad a un cuadro tóxico y mortal. En el cuadro siguiente se mencionan los síntomas más frecuentes de encontrar. Existe una híper activación de todo el sistema serotoninérgico ¿Qué hacer ante la sospecha de un Síndrome Serotoninérgico? 1.-Cambios en el estado mental: - Nerviosismo. - Confusión. - Agitación. - Estupor o coma. 2.-Hiperactividad autonómica. - Diarrea. - Escalofríos. - Fiebre. - Sudoración. - Taquicardia. - Taquipnea. - Alteración de la presión arterial. - Dilatación pupilar. - Náuseas y vómitos. 3.-Anomalías Neuromusculares. - Acatisia. - Ataxia. - Rigidez. - Mioclonias. - Hiperreflexia. - Temblor e incoordinación motora. - Convulsiones. Criterios diagnósticos de Sternbach 5 Síntomas mayores: Fiebre, confusión, coma, hipertermia, temblor, escalofríos, rigidez, hiperreflexia, mioclonía. Síntomas menores: insomnio, nerviosismo, agitación, taquicardia, taquipnea, disnea, diarrea, hipo o hipertensión arterial, falta de coordinación, midriasis, acatisia. Es un cuadro leve cuando no presenta la totalidad de los síntomas. Es de presentación completa cuando cumple criterio de 4 síntomas mayores o 3 mayores más 2 menores. Es tóxico cuando presenta coma, convulsiones e hipertermia con fiebre sobre 40 grados 6. 7 Lo primero y fundamental es suspender el o los fármacos o sustancias sospechosos. Luego las medidas de sostén, vale decir, hidratación (líquidos por boca o suero) y medidas para disminuir hipertermia como ventiladores y paños fríos o camas refrigerantes (no uso de antipiréticos ya que no es de origen central sino muscular). El uso de benzodiazepinas como lorazepam o diazepam son efectivos para tratar la rigidez muscular presente. También se considera el uso de antiserotoninérgicos como la ciproheptadina 1. En caso de que sea un cuadro severo o tóxico, no dudar, derivar de inmediato a un centro médico que disponga de cuidados intensivos, ya que es una urgencia médica que puede ser mortal. ACTUALIZACIÓN EN NEUROCIENCIA Y SALUD SÍNDROME DE DISCONTINUACIÓN DE ANTIDEPRESIVOS Esta situación clínica ocurre en pacientes que estando en tratamiento con antidepresivos lo suspenden abruptamente, ya sea por decisión propia o por falta de recursos económicos o porque “no tenía la receta”, desencadenando una sintomatología que puede llegar a ser muy severa llevando al paciente a un servicio de urgencia. Este síndrome se ha descrito en todos los antidepresivos ISRS e IRSN, pero con mucha más frecuencia en paroxetina y venlafaxina 1,3,7. Al parecer la disminución abrupta de serotonina en el espacio sináptico lleva a una falla en la estimulación de los receptores postsinápticos que se encuentran “hiposensibles”. También se postula un efecto secundario sobre noradrenalina, dopamina y GABA. Características generales de la discontinuación de antidepresivos: - Se debe solamente a la disminución brusca de antidepresivos, y con menor frecuencia, a una disminución de la dosis del antidepresivo. - No se presenta en todos los pacientes que suspenden abruptamente el antidepresivo. - Generalmente los síntomas son leves y de corta duración. - La intensidad de los síntomas está en relación con las características farmacológicas de cada antidepresivo, más y peor con paroxetina y venlafaxina. - En general los síntomas aparecen el segundo día y su duración es de una a dos semanas. Una de las preocupaciones que debe tener todo clínico al prescribir un antidepresivo es el efecto que tenga este sobre la respuesta sexual, más aún si al paciente le es importante su vida sexual, dado que muchos antidepresivos afectan la libido, retardan el orgasmo y la eyaculación y debilitan la erección. - Si se reinstala el antidepresivo, los síntomas desaparecen con rapidez. ¿Cómo se manifiesta el síndrome de discontinuación de antidepresivos? Los pacientes suelen manifestar algunos de los siguientes síntomas: nauseas, cefalea, mareos y vértigo, sensación de shock eléctrico o parestesias, síntomas seudogripales (congestión nasal), fatiga o malestar general, ansiedad, insomnio, agitación, irritabilidad, temblores, crisis de llanto. En raras excepciones puede incluso darse síntomas de despersonalización, conductas agresivas e ideación suicida 8. Muchas veces estos síntomas llegan a producir malestar clínicamente significativo con un deterioro en la vida social, familiar y laboral. Esto ocurre por ejemplo cuando se suspende bruscamente paroxetina a dosis de 40 Mg/día o venlafaxina a dosis de 300 mg/día. Si uno no tiene en mente este síndrome de discontinuación, ante la presencia inesperada de estos síntomas se puede plantear que sea un agravamiento de su cuadro clínico. ¿Cómo prevenir el síndrome de discontinuación de antidepresivos? Lo primero y fundamental es tener conocimiento sobre este síndrome de discontinuación en atención primaria y servicios de urgencia, ya que el uso de antidepresivos se ha extendido bastante a nivel de medicina general y este cuadro puede llevar al paciente a un servicio de urgencia. 8 DISFUNCIÓN SEXUAL Y ANTIDEPRESIVOS Entre un 15-20% de los pacientes relatan espontáneamente su dificultad sexual. Si el médico les pregunta dirigidamente sobre su sexualidad, un 60% señala tener alguna disfunción 1. Se observa una remisión espontánea de un 20% de la disfunción sexual a los 6 meses. Al prescribir el antidepresivo se debe explicar al paciente la posibilidad de presentar este síndrome de discontinuación, principalmente con el uso de paroxetina y venlafaxina, al suspender abruptamente el antidepresivo o al disminuir sus dosis 9. Si presenta los síntomas de discontinuación se debe reinstalar el mismo antidepresivo, principalmente si estaba siendo efectivo. Una vez reinstalado el antidepresivo los síntomas comienzan a desaparecer. Al comenzar a disminuir el antidepresivo se debe hacer de la forma más lenta posible (hasta 4 a 8 semanas), especialmente los de mayor riesgo como paroxetina y venlafaxina. Si se desea cambiar a otro antidepresivo, se debe reducir gradualmente, mientras el otro antidepresivo se va también subiendo dosis gradualmente. Especial cuidado con venlafaxina y paroxetina. Los estudios realizados en pacientes sexualmente activos y tratados con antidepresivos (ISRS y Venlafaxina), encuentran un 60% de disfunción sexual. Un estudio multicéntrico realizado por Montejo en 1022 pacientes sexualmente activos, con edad media de 39.8 años, aplicando un cuestionario para la medida de la disfunción sexual secundaria a psicofármacos, encuentra una incidencia de 60% de disfunción sexual 10: Disfunción sexual (%) 10 Fluoxetina Fluvoxamina Sertralina Venlafaxina Paroxetina Citalopram 57.7 62.3 62.9 67.3 70.7 72.7 Los antidepresivos que estimulan la serotonina, específicamente el receptor postsináptico 5HT2, como todos los ISRS, producen un retraso del orgasmo y la eyaculación como una disminución del deseo sexual 11, 15. La estimulación de los receptores 5HT2 en los centros del placer mesocorticales reduce la actividad dopaminérgica, y con ello la libido. En la medula espinal, la estimulación de 5HT2 inhibe los reflejos espinales del orgasmo y la eyaculación 12. Aquellos antidepresivos que son antagonistas de los receptores 5HT2 no afectan la sexualidad, como la mirtazapina y la trazodona También no comprometen la sexualidad los antidepresivos dopaminérgicos y noradrenérgicos, como bupropion, reboxetina y milnacepran. La dopamina facilita la función sexual, el deseo y excitación subjetiva. La noradrenalina interviene en el inicio y mantenimiento de la actividad sexual 13. Incidencia de disfunción sexual 13 Menos del 10% 10-30% más del 30% Bupropion Mirtazapina Moclobemida Milnacepran Citalopram Duloxetina Venlafaxina Fluoxetina Fluvoxamina Paroxetina Sertralina ¿Cómo tratar la disfunción sexual inducida por antidepresivos? Lo primero, se debe averiguar si el paciente tiene vida sexual activa o si para él es importante su sexualidad. Lo segundo, descartar que no esté tomando algún otro fármaco que afecte su sexualidad (antihipertensivos, antipsicóticos, hipolipemiantes, beta bloqueadores, etc.), o que consuma alguna droga o alcohol de manera excesiva. Al prescribir un antidepresivo se debería optar por alguno que no afecte la sexualidad. Si ello no es posible, ya sea por el tipo y/o gravedad del episodio depresivo, se usa el antidepresivo adecuado, y una vez lograda la remisión, se deberían buscar las diversas alternativas terapéuticas para reducir o recuperar la sexualidad, con el objetivo de mejorar la calidad de vida del paciente y facilitar la adherencia al tratamiento. 9 Una de las medidas a utilizar es disminuir hasta un 50% la dosis del antidepresivo, con ello se puede lograr una mejoría hasta un 70%. Se debe tener precaución por una probable recaída 1. Otra medida que puede considerarse es asociar un fármaco que facilita la sexualidad, cuyos resultados han sido muy inciertos y con muchos efectos secundarios, como por ejemplo se ha utilizado un agonista dopaminérgico (amantadita, pemolina), un antagonista serotoninérgico (ciproheptadina), un estimulante del receptor 5HT1A (buspirona) o un agonista adrenérgico (yohimbina) 1. También se ha descrito la llamada vacaciones terapéuticas de los fines de semana, en la cual no se usa el antidepresivo o se reduce su dosis. No es muy efectiva, con riesgo de un síndrome de discontinuación y de incumplimiento. El asociar otro antidepresivo con efecto antagónico 5HT2 puede ser una buena opción, como mianserina, mirtazapina y trazodona 14. También se puede asociar un antidepresivo con acción noradrenérgica y dopaminérgica como bupropion. En este caso se puede reducir dosis de ISRS y aumentar dosis de bupropion. Una opción bastante eficiente, logrando una mejoría de un 70-90%, es cambiar el antidepresivo a bupropion, milnacepram, meclobemida o mirtazapina 16, 17. Debemos considerar el uso de trazodona cuando hay compromiso de la erección secundaria a ISRS. Su acción favorecedora de la erección sería por un antagonismo de receptores adrenérgicos periféricos y a nivel central 14. ACTUALIZACIÓN EN NEUROCIENCIA Y SALUD INTERACCIONES FARMACOLÓGICAS DE LOS ANTIDEPRESIVOS de otros fármacos que se metabolizan por esta vía, cuando se toman conjuntamente. Entre ellos, antidepresivo tricíclicos (amitriptilina, imipramina), tioridazina, risperidona, atomoxetina y tamoxifeno. Una interacción farmacológica se presenta cuando el efecto y/o concentración de un fármaco se modifica por otro fármaco que se usa concomitantemente, pudiendo llegar a ser clínicamente significativo cuando la seguridad o efectividad del fármaco se ve comprometida. Milnacepram y desvenlafaxina son los únicos antidepresivos no metabolizados por esta enzima. Al prescribir un antidepresivo es importante además de su indicación médica, el considerar las probables interacciones con otros fármacos que esté tomando el paciente por otras situaciones clínicas, ya que ello puede afectar la tolerabilidad y/o eficacia a corto y largo plazo del antidepresivo. Los antidepresivos tienen altas probabilidades de interactuar con otros fármacos ya que se usan por largo tiempo, (meses a años) y además en pacientes que tienen una alta comorbilidad médica (hipertensión arterial, hipotiroidismo, diabetes mellitus, etc.) y/o psiquiátrica (trastornos de ansiedad, trastornos obsesivo compulsivo, etc.) con uso de uno o más fármacos. La tasa de incidencia de interacciones farmacológicas consideradas clínicamente significativa es del 4.7 a 8.8% 18. Donde se producen las mayores interacciones farmacológicas es en el Hígado, donde se metabolizan la mayoría de los antidepresivos, por medio de las enzimas de la citocromo P450 (CYP) ubicadas en el retículo endoplasmático. Aquí ocurre la reacción de metabolización fase I o de oxidación. Específicamente, la enzima CYP450 convierte el sustrato farmacológico en un producto biotransformado que pasa al torrente sanguíneo 12. O2 R-H NDAPH+H Fármacos metabolizados por CYP2D6 Un ejemplo de inhibición es la asociación de un antidepresivo con inhibición potente de la isoenzima CYP2D6 (paroxetina, fluoxetina) con un B Bloqueador (propranolo) que es sustrato de 2D6. En dicha situación existe riesgo de producir bradicardia como resultados de mayores concentraciones del B Bloqueador 19. Un ejemplo de inducción es el uso de antipsicóticos como clozapina, olanzapina y haloperidol que se metabolizan por vía CYP1A2 en pacientes fumadores. El tabaco activa esta vía enzimática y por ende las concentraciones de estos antipsicóticos disminuye y con ello su eficacia 19. También debemos tener presente que muchos polimorfismos genéticos comprometen las enzimas CYP, por lo cual nos encontramos con metabolizadores normales, lentos, intermedios y ultra-rápidos 20. R OH + NDAP H-O-H ción llevará a una remoción rápida del fármaco con concentraciones plasmáticas menores y con menor eficacia. CYP450 CITOPLASMA MEMBRANA RETICULO ENDOPLASMÁTICO Citocromo p450: metabolización fase I o de oxidación. Aquellos fármacos que inhiben una vía CYP facilitarán concentraciones mayores de los fármacos que se metabolizan por dicha vía enzimática. Al contrario, una inducción o activa10 Muchos de los pacientes con depresión refractaria tienden a poseer una alta incidencia de polimorfismos inactivos de CYP2D6 20, 23. En relación al metabolismo de los antidepresivos, los sistemas CYP2D6, CYP2C19 y CYP3A4 son las vías metabólicas más importantes, ya que la mayoría de los antidepresivos se metabolizan por estas vías. Enzimas CYP2D6 Cerca del 50% de los pacientes psiquiátricos utilizan al menos un fármaco que es metabolizado por esta enzima 23a. Por esta vía se metabolizan antidepresivos tricíclicos (amitriptilina, clomipramina, desipramina, nortriptilina), ISRS (citalopram, escitalopram, fluoxetina, paroxetina, y sertralina, fluvoxamina), IRSN (duloxetina y venlafaxina) y mirtazapina 20,21. A su vez, algunos de ellos inhiben la actividad enzimática de CYP2D6. La fluoxetina y paroxetina son inhibidores potentes. Duloxetina. y bupropion también inhiben pero más débilmente la 2D6. La inhibición de la enzima CYP2D6 puede llevar a un aumento de las concentraciones plasmáticas Antidepresivos Antipsicóticos Beta bloqueadores Otros Tricíclicos ISRS Venlafaxina Mirtazapina Duloxetina Haloperidol Perfenacina Tioridacina Zuclopentixol Risperidona Aripiprazol Clorpromazina S-metoprolol Propafenone Timolol Propranolo Anfetamina Atomoxetina Tramadol Codeína Lidocaína Tamoxifeno Si se administra conjuntamente un ISRS inhibidor de la 2D6 con un antidepresivo tricíclico, los niveles plasmáticos de estos últimos aumentan con los efectos indeseables consabidos y riesgo de toxicidad. Por lo que se debe evitar dicha combinación. En el caso del Tamoxifeno, que se usa en cáncer de mama para prevenir recurrencias, debemos tener cuidado con el uso de los fármacos que inhiben esta vía, principalmente paroxetina y fluoxetina, ya que las concentraciones de sus metabolitos activos disminuyen con riesgo de ineficacia que incluso puede ser fatal para la paciente 19, 22. También debemos tener cuidado con la duloxetina ya que es metabolizada exclusivamente por 2D6, por lo que compite con tamoxifeno a nivel hepático 1. Además se debe conocer las interacciones de atomoxetina con un 11 ISRS inhibidor de 2D6 ya que puede llevar a un incremento de su semivida (por ejemplo de 5 a 24 horas) por lo que se debe ajustar sus dosis 19. Enzimas CYP2C19 También es una enzima muy importante para el metabolismo de antidepresivos tricíclicos (amitriptilina, clomipramina, imipramina) y los de nueva generación como citalopram, escitalopram, sertralina, venlafaxina y meclobemida. Está enzima 2C19 es inhibida por fluoxetina y fluvoxamina 19,20. Enzimas CYP3A4 Por esta vía se metabolizan ISRS fluoxetina, citalopram, escitalopram y paroxetina, y también mirtazapina, reboxetina, nefazodona. A su vez es inhibida por fluvoxamina y nefazodona 19, 21. ACTUALIZACIÓN EN NEUROCIENCIA Y SALUD Algunas benzodiazepinas como alprazolam y triazolam son sustrato de la CYP3A4, por lo que usadas conjuntamente con fluoxetina o fluvoxamina aumentan sus concentraciones, las cuales deben ajustarse 12. ANTIDEPRESIVOS Y CITOCROMO P450 Paroxetina Fármacos metabolizados por la CYP3A4 Antidepresivos Antipsicóticos Benzodiazepin Antiepilépticos Amitriptilina Clomipramina Imipramina Citalopram Fluoxetina Paroxetina Sertralina Mirtazapina Venlafaxina Reboxetina Trazodona Clozapina Haloperidol Pimocida Quetiapina Clorpromazina Ziprasidona Diazepam Alprazolam Nitrazepam Midazolam Triazolam Clonazepam Zolpidem Carbamazepina Valproato Tiagabina Depende principalmente de la isoenzima CYP2D6 para su conversión en metabolitos inactivos. Además es un potente inhibidor de CYP2D6, por lo que debe evaluarse las probables interacciones farmacológicas antes de su uso con otros fármacos. También inhibe moderadamente la vía CYP3A4. RI Na m-ACh Paroxetine Enzimas CYP1A2 CYP 206 NOS SRI Fluoxetina La clomipramina y la imipramina son sustratos de esta enzima. Por un proceso de desmetilación los transforma en metabolitos activos desmetilclomipramina y desipramina respectivamente 12. La fluvoxamina inhibe potentemente esta vía enzimática, como también el antibiótico cipofloxacilino y ranitidina entre otros. La cafeína y el tabaquismo inducen su metabolismo. Fármacos metabolizados por CYP1A2 También es un inhibidor potente de isoenzima CYP2D6, por lo que puede aumentar bastantes concentraciones de tricíclicos si se usa asociado a ellos. Además inhibe las isoenzimas CYP2C y CYP3A4, lo que puede llevar a un aumento de niveles plasmáticos de diazepam y alprazolam como de carbamazepina. Fluvoxamina Antidepresivos Antipsicóticos Otros Imipramina Amitriptilina Clomipramina Fluvoxamina Mirtazapina Duloxetina Clozapina Haloperidol Olanzapina Diazepam Propranolol Teofilina 12 Es un inhibidor potente de la CYP1A2 y menos potente de CYP3A4, CYP2C19 y CYP2D6, por lo que debemos tener mucho cuidado con los fármacos que se metabolizan por estas enzimas, ya que pueden eliminarse de forma lenta alcanzando mayores concentraciones plasmáticas al usarse junto a fluvoxamina. Por ejemplo, aumenta concentraciones plasmáticas de triazolam, midazolam, alprazolam y diazepam, las cuales son metabolizadas por la citocromo CYP3A4; y de clozapina, olanzapina, tioriodazina y propranolo que son metabolizadas por CYP1A2. afectan esta vía, ya sea induciendo (carbamazepina, fenobarbital) o inhibiendo (valproato, cimetidina) pueden aumentar o disminuir sus concentraciones plasmáticas 18. Inhibe ligeramente CYP2D6, mucho menos que paroxetina y fluoxetina. Tiene un perfil de interacciones muy favorable. Bupropion y su metabolito activo hidroxibupropion, inhiben la ruta CYP2D6, aumentando por ende las concentraciones plasmáticas de otros fármacos metabolizados por esta vía: triciclitos, ISRS, haloperidol, risperidona, tioridazina, bloqueadores B, etc. 19. Citalopram y Escitalopram Duloxetina En general afecta poco el sistema CYP450, por lo tanto, el número de interacciones es limitado. Se metaboliza principalmente por las isoenzimas CYPO2D6 y CYP1A2. A su vez la duloxetina inhibe CYP2D6 y por ende puede aumentar concentraciones de antidepresivos triciclitos, fenotiacinas, ISRS paroxetina y fluoxetina como los antiarrítmicos del grupo 1C. Sertralina Venlafaxina Se metaboliza ampliamente por las isoenzimas CYP 2D6 y CYP3A4. A su vez inhibe débilmente las isoenzimas CYP2C9, CYP2D6, CYP1A2 y CYP3A4. Debemos tener cuidado con fármacos que inhiben bastante la CYP2D6 como fluoxetina y paroxetina, ya que al usarse asociados pueden aumentar sus niveles plasmáticos. Desvenlafaxina Metabolito activo de la venlafaxina, sólo es metabolizado de manera mínima por la vía CYP3A4, siendo eliminado predominantemente sin cambios por excreción renal 19. Bupropion Es metabolizado por la isoenzima CYP2B6 dando su principal metabolito, hidroxibupropion. Fármacos que Debemos tener presente que el uso de antidepresivos inhibidores de la CYP1A2 como fluoxetina, fluvoxamina y paroxetina puede aumentar los niveles de plasmáticos de duloxetina. Mirtazapina Es un inhibidor débil a moderado de las isoenzimas CYP1A2, CYP3A4 y CYP1A2. El uso asociado a fluoxetina, paroxetina y fluvoxamina aumenta sus niveles plasmáticos dado la inhibición de 2D6 y 1A2 respectivamente. Las diferencias farmacocinéticas justifican las ventajas de sertralina, citalopram y escitalopram dentro de los ISRS, y de desvenlafaxina y 13 milnacepram dentro de los duales en pacientes poli medicados por su menor riesgo de interacciones. ¿Cómo reconocer una interacción farmacológica? Por lo general no se detecta ni sospecha una interacción farmacológica. Sus efectos suelen aparecer gradualmente en 1 a 2 semanas y producir signos o síntomas que podrían interpretarse como acentuación de un efecto adverso del antidepresivo usado. En general, se acentúan los efectos adversos de los fármacos que se están usando 19. Por lo señalado se deben evitar algunas combinaciones de fármacos, otras combinaciones requieren ajuste de dosis de uno de los fármacos. También es importante consignar que muchas interacciones farmacológicas resultan estadísticamente significativas pero clínicamente insignificantes 12 . Por ello es importante que el médico clínico tenga un conocimiento de las posibles interacciones farmacológicas de los fármacos prescritos, y ante la duda consultar banco de datos de Internet o tener a mano literatura al respecto. FARMACOGENÓMICA Y ANTIDEPRESIVOS El uso de la información genómica cada vez facilitará al clínico una prescripción adecuada del antidepresivo, de acuerdo al tipo de paciente y el tipo de depresión que esté cursando. Es decir, facilitará una atención más personalizada, y por ende, más eficiente y segura. En un primer nivel, en el proceso de metabolización hepática por ACTUALIZACIÓN EN NEUROCIENCIA Y SALUD la enzima citocromo P450, varios polimorfismos del gen (mutaciones, deleciones, duplicaciones) de las isoenzimas, específicamente la 2D6, determinará que algunos pacientes sean metabolizadores lentos y otros ultra rápidos. Si resulta ser un metabolizador lento, es decir, con una incapacidad para metabolizar el antidepresivo indicado, se debe reducir la dosis de éste entre un 30-60%, de lo contrario aparecerán efectos adversos del antidepresivo. En cambio, si resulta ser un metabolizador ultra-rápido se debe incrementar entre un 20-100% de la dosis que se usa habitualmente para lograr un efecto terapéutico 21. Esto explica por qué hay pacientes que con dosis de 25 mg. de sertralina logran una recuperación clínica y con dosis mayores presentan intolerancia y síntomas desagradables. En cambio los metabolizadores rápidos responden con dosis mayores, por ejemplo con 600 o más mg. de venlafaxina. A través del test de laboratorio (AmpliChip CYP450) es posible saber el fenotipo metabolizador del paciente, si es lento, normal, intermedio o ultrarrápido, identificando los genes CYP2D6 y CYP2C19, que son los más implicados en la metabolización de los antidepresivos. Por ahora, por razones de costo/beneficio no se usa de forma sistemática en la clínica 20, 23a . Tipos de metabolizadores de la enzima CYP2D6 1.-Metabolizador lento o pobre (MP): Caracterizado por la ausencia de ambos homocigotos o la presencia de copias (alelos) inactivas. 2.-Metabolizador intermedio (MI): Tiene un alelo normal y otro alelo defectuoso. Serían un metabolizador entre normal y lento. 3.-Metabolizador extensivo o normal (ME): Tiene un genotipo normal, ambos alelos homocigotos o normales. 4.-Metabolizador ultra-rápido (MUR): Presenta duplicación, más de dos alelos. También la fármaco genómica nos permitirá saber si nuestro paciente tiene algún polimorfismo del gen del transportador de serotonina (5HTTR), ya que dependiendo de ello habrá una buena respuesta o no, al antidepresivo indicado 21. Así por ejemplo, se ha descrito una asociación entre el alelo corto s y una pobre respuesta a los ISRS (fluoxetina, paroxetina, fluvoxamina) en pacientes con depresión mayor. En cambio, el alelo largo l parece estar asociado a respuesta más favorable a paroxetina y fluvoxamina 20. De acuerdo a los estudios de fármaco genómica en psiquiatría, se sugiere hacer un tipeo genético de enzimas del sistema citocromo P450 20 : - Paciente resistente a tratamiento farmacológico. - Paciente con efectos secundarios excesivos o toxicidad aguda. - Pacientes que desean acelerar el proceso de selección de un antidepresivo efectivo en cuanto a su composición química y dosis requerida. Farmacogenómica = Responde bien al fármaco = Responde medianamente al fármaco = No responde al fármaco Pacientes El estudio de la relación entre el fondo genético (genotipo) de un individuo y su respuesta al tratamiento farmacológico. USO DE ANTIDEPRESIVOS EN EMBARAZO Y LACTANCIA Cerca del 10% de las mujeres que están embarazadas o en el posparto presentan una depresión clínica, lo que plantea la necesidad del uso de antidepresivos considerando los riesgos y beneficios 3,24. Los antidepresivos más utilizados son los ISRS, que atraviesan la barrera placentaria y por ende entran en la circulación del feto 25. Al parecer estos ISRS no aumentan la frecuencia de malformaciones congénitas, a excepción de la paroxetina con mayor frecuencia de malformaciones cardiacas (tiene un riesgo 1.5-2 veces mayor que otros ISRS) 26. También se ha encontrado en estudios metaanalíticos que los ISRS aumentaban la tasa de abortos espontáneos (12.4% v/s 8.7% tasa habitual) 27. Se han descrito complicaciones neonatales con estos antidepresivos, como parto prematuro y bajo peso al nacer; y problemas neonatales ya sea por efecto directo o por discontinuación del ISRS (hipotonía, problemas respiratorios, hipoglicemia, cianosis, inquietud, Apgar bajo; etc.) 28. No se ha detectado en niños cuyas madres han usado antidepresivos en el embarazo, con seguimiento hasta 7 años, alteraciones en su coeficiente intelectual, lenguaje o comportamiento 29. Se debe tener especial cuidado durante el primer trimestre del em- 14 barazo, ya que se está desarrollando el tubo neural, con mayor vulnerabilidad a malformaciones. Durante el último trimestre del embarazo el uso de ISRS puede ocasionar al recién nacido hipertensión pulmonar persistente 30. Hipertensión pulmonar persistente - Afecta a recién nacidos a término o casi a término (menos 34 semanas de gestación). - Existe una elevación persistente de la resistencia vascular pulmonar con hipoxemia grave, dado por la inhibición de la síntesis de óxido nítrico, con el efecto vasoconstrictor de la serotonina sobe los vasos pulmonares. - El uso de ISRS (citalopram, fluoxetina, paroxetina y sertralina) después de las 20 semanas de gestación aumenta 6.1 veces el riesgo que el recién nacido tuviera esta patología. - Esto representa un aumento en el riesgo de sólo 0.5%. Existe 99.5% de probabilidades de que el niño no sea afectado. ¿Qué hacer ante una mujer que está tomando antidepresivos y se embaraza? Evaluar los riesgos y beneficios, y los efectos de no dar tratamiento o suspenderlo. El riesgo de tener un nuevo episodio depresivo durante el embarazo es cinco veces mayor si se suspende el tratamiento que si se continúa 32. Si está tomando paroxetina debería cambiar a otro antidepresivo ISRS, suspensión que debe ser gradual para evitar el síndrome de discontinuación. 15 ¿Cuáles antidepresivos son los más indicados? Siempre se debe considerar el uso de un ISRS, a excepción de paroxetina, teniendo presente la categoría de riesgo según la FDA. Los ISRS están en categoría C, es decir, en que no se puede descartar el riesgo para el niño, no hay riego de teratogenidad, sin embargo el beneficio potencial justifica su uso. Riesgo potencial de antidepresivos, según la clasificación de la FDA -Amitriptilina, imipramina Nortriptilina D Taquicardia, síndrome de abstinencia, efectos anticolinérgicos fetales. -IMAO C Malformaciones fetales raras. -Paroxetina D Malformaciones cardiovasculares. -otros ISRS C Incremento de complicaciones Perinatales. -Venlafaxina C Síndrome de discontinuación En cambio, paroxetina como los antidepresivos tricíclicos amitriptilina, clomipramina e imipramina, y fluvoxamina, están en categoría D, en que existe evidencia de riesgo para el producto; y por tanto en lo posible evitar su uso. Es importante destacar que ningún antidepresivo está en categoría A (sin riesgo) y en categoría B (sin evidencia de riesgo en humanos). Tampoco hay antidepresivos en categoría X (contraindicado durante embarazo). ¿Qué debe conocer la paciente y su pareja antes de decidir aceptar el uso o no de antidepresivos? - El riesgo, prevalencia y relación específicos del uso de antidepresivos con malformaciones congénitas e hipertensión pulmonar persistente. - El riesgo de recaer si descontinúa el tratamiento antidepresivo. - El efecto y el daño de la depresión en la paciente y el niño (se altera el vínculo y apego, en el niño riesgo de trastornos conductuales y cognitivos. Uso de antidepresivos en la lactancia Una de cada 10 mujeres que se embarazan presentan una depresión posparto, por lo que el uso de BIBLIOGRAFÍA 1.- Martinez Azumendi O, Alonso Ganuza Z. Hemorragia digestiva alta y alteraciones de la coagulación por ISRS. Tratado de Psicofarmacología. Editorial Médica Panamericana. 2010; 841-845. 2.- Loke YK, Trivedi AN, Singh S. Meta-analysis: gastrointestinal bleeding due to interaction between selective serotonin uptake inhibitors and non-steroidal anti-inflammatory drugs. Aliment Pharmacol Ther 2008; 27:31-40. 3.- Chávez-Léon E, Ontiveros Uribe M, Serrano Gómez. Los antidepresivos inhibidores selectivos de recaptura de serotonina (ISRS, ISR-5HT). Salud Mental 2008;31:307-319. 4.-Kirby D, Ames D. Hyponatremia and selective serotonina-reuptake inhibitors in elderly patients. Int J Geriatr Psychiatry 2001;16:484-493. 5.-Sánchez Garcia MA, Benavides Espilla MB, Medina Ojeda G. Sindrome serotoninérgico o toxicidad por serotonina. Tratado de Psicofarmacología. Editorial Médica Panamericana. 2010; 836-839. 6.-Sternbach H. The serotonin syndrome. Am J Psychiatry. 1991; 148: 705-13. 7.-Bogetto F, Bellino S, Revello RB, PatriaL. Discontinuation syndrome in dysthymic patients treated with selective serotonin reuptake inhibitor: a clinical investigation. CNS Drug. 2002;16: 273-283. 8.-Black K, Shea C, Dursun S, Kutcher S. Selective serotonin reuptake inhibitor discontinuation syndrome: proposed diagnostic criteria. J Psychiatry Neurosci. 2000; 25(3): 255-261. 9.-Pacheco L, Aragües M, Malo P, Prieto M, Aragües E, Etxebeste M. Alternativas para el manejo del síndrome de discontinuación con los nuevos antidepresivos. Psq Biol 2002;9(3): 133-141. 10.-Montejo AL, Llorca G, Izquierdo JA, Rico-Villademoros F, et al . incidente of sexual dysfunction antidepresivos se hace necesario, ya que no tratar una depresión posparto tiene consecuencias muy nefastas sobre el vínculo madre-hijo. Lo deseable es no suspender la lactancia materna ya que esta facilita el apego materno-infantil como proteger al niño de enfermedades. Se recomienda que la fluoxetina (con vida media larga) y dosis alta de citalopram (que presenta altas concentraciones en la leche y el plasma) se utilicen con precaución durante la lactancia y sólo en pacientes que hayan tenido buenos resultados con estos fármacos durante el embarazo o un episodio previo 34. Los antidepresivos se excretan en la leche materna. No se encuentran niveles séricos detectables al usar sertralina y paroxetina; no así con otros ISRS y venlafaxina. Para el citalopram se encuentran niveles detectables pero bajos 33. El antidepresivo se sugiere tomar inmediatamente después de dar el pecho y antes del momento del sueño del bebe para reducir al mínimo la exposición a concentraciones máximas del fármaco. De lo anterior se deduce que el antidepresivo de primera elección para una depresión posparto es la sertralina, por lo mencionado y además por su seguridad y farmacocinética. En general, en los estudios no se ha observado efectos conductuales o en el desarrollo del recién nacido cuyas madres han tomado antidepresivos, entre ellos los ISRS 33. associated to different antidepressant agents. A prospective and multicentric study in 1022 patients. J Clin Psychiatry 2001;62(Suppl): 10-21. 11.-Clayton AH, Montejo AL. Major depressive disorder, antidepressants, and sexual dysfunction. J Clin Psychiatry 2006;67(Suppl): 33-37. 12.-Stalh Stephen. Psicofarmacologia esencial de la depresión y trastorno bipolar. Ariel Ciencias Médicas. 2002 13.-Kennedy S, Lam R, Nutt D, Thase M. Treating depression effectively. Martin Dunitz. 2004. 14.-Stryjer et al. Trazodone for the treatment of sexual dysfunction induced by serotonin reuptake inhibitors: a preliminary open-label study. Clin Neuropharm. 2009; 32:82-84. 15.-Balon R. SSRI –associated sexual dysfunction AM J Psychiatry. 2006;163: 1504-1509. 16.-Dhillon S, Yang LP, Curran MP. Spotlight on bupropion in major depressive disorder. CNS. Drugs. 2008;22(7): 613-617. 17.-Baldwin D and Birtwistle. Antidepressant drugs and sexual function: improving the recognition and management of sexual dysfunction in depressed patients. Antidepressant therapy. Edited by M Briley and S Montgomery. 1998:231-253. 18.-Ruiz Fernández V. Interacciones medicamentosas. Tratado de Psicofarmacología. Editorial Médica .Panamericana. 2010: 88-102. 19.-Ereshefsky Larry. Interacciones farmacológicas con el uso de fármacos psicotrópicos. Suplemento de CNS Spectrum. 2009. Vol. 14. No 8. 20.-Alarcón Renato, Mrazek D. Fármaco genómica psiquiátrica: actualización y perspectivas. En Genética y farmacogenómica en psiquiatría. Editor: Hernán Silva. Serie Roja SONEPSYN. 2007; 59-79. 21.-Malhotra Anil, Murphy Greer, Kennedy James. Farmacogenética de la respuesta a los fármacos psicotrópicos. Am J Psychiatry 2004; 161:780-796. 22.-Jin Y, Desta Z, Steams V, Ward B, Ho H, Lee KH. CYP2D6 genotype, antidepressant use, and tamoxifen metabolism during adjuvant cancer treatment. J Natl Cancer Inst 2005; 97(1): 30-39. 23.-Mrazek DA, O”Kane D, Snyder K, Black J. A threegene pharmacogenomic model for antidepressant response. Biol Psychiatry. 2005;57:167S. 23 a.-V Ruiz Fernández. Interacciones medicamento- sas. Tratado de Psicofarmacología. Editorial médica Panamericana. 2010; 88-102. 24.- Suri R, Altshuler L, Hellemann G, Burt V et al. Efectos de la depresión prenatal y el tratamiento antidepresivo sobre la edad gestacional al nacer y el riesgo de parto prematuro. Am J Psychiatry (Ed Esp) 2007, 10:609-616. 25.- Hendrick V, Stowe ZN, Altshuler LL et al. Placental passage of antidepressant medications. Am J Psychiatry 2003;160: 993-996. 26.-Alwan S, Reefhuls J, Rasmussen S. Use of selective serotonin-reuptake inhibitors in pregnancy and the risk of birth defects. N Engl J Med 2007; 356(26):2684-2692. 27.-Rahimi R, Shekoufen N, Abdollahi M et al. Pregnency outcomes following exposure to serotonin reuptake inhibitors: a meta-analysis of clinical trials. Reprod Toxicol 2005;22(4): 571-575. 28.-Simon GE, Cunningham ML, Davis RL. Outcomes pf prenatal antidepressant exposure. Am J Psychiatry. 2002;159:2055-2061. 29.-Misri S, Reebye P, Kendrick K et al. Internalizing behaviors in 4-year-old children exposed inutero to psychotropic medications. Am J Psychiatry 2006;163:1026-1032. 30.-Chambers CD, Hernandez Díaz S, Van Marter LJ, Werler MM. Selective serotonin-reuptake inhibitors ans risk of persistent pulmonary hypertension of the newborn. N Engl J Med 2006;354(6):579-587. 31.-S. Álvarez de Eulate Unibaso. S. Bustamente Madariaga. Inhibidores selectivos de la recaptación de serotonina. En Tratado de Psicofarmacología. Editorial Médica Panamericana. 2010;642-677. 32.-Cohen LS, Altshuler LL, Harlow BI et al. Relapse of major depression during pregnancy in women whoi maintain or discontinue antidepressant treatment. J Am Med Assoc. 2006;295:499-507. 33.-Payne Jennifer. Uso de antidepresivos en el período posparto: consideraciones prácticas. Am J Psychiatry (Ed Esp)2007.10:10. 34.-Burt VK, Suri R, Altshuler L et al. The use of psychotropic medications during breast-feeding. Am J Psychiatry. 2001;158:1001-1009. 35.- Hallberg, S. SSRIs, Bone Mineral Density, and risk of fractures: a review. European Neuropsychopharmacology. 2009;19(10):683-692. 16 Neopresol ESCITALOPRAM Producto BIOEQUIVALENTE Calidad Seguridad Eficacia ® ACTUALIZACIÓN EN NEUROCIENCIA Y SALUD TRASTORNOS DEL SUEÑO Y PSIQUIATRÍA Dr. Mario Seguel Lizama Psiquiatra Dirección:marsegue@vtr.net l sueño es un fenómeno biológico presente en los seres vivos. En el ser humano se encuentra incorporado en un régimen de 24 hrs. conocido como ciclo circadiano. El período de sueño comprende a lo menos 1/3 del tiempo vivido. El sueño ha sido descrito por Lee-Chiong como “un estado neurológico complejo y altamente reversible, que es activado por diferentes sistemas neuronales los cuales usan diversos sistemas de neurotransmisores” 1. Este estado se encuentra a su vez regulado por influencias homeostáticas, circadianas y ultradianas, las cuales vinculan el sueño a condiciones ambientales fundamentales, como el día y la noche, estaciones del año, cambios geográficos, regímenes de trabajo, etc. El sueño puede evaluarse desde perspectivas conductuales y fisiológicas. En el transcurso de la vida se alternan básicamente dos estados: la vigilia y el sueño; el sueño se subdivide en dos estados: a) el de No Movimientos Oculares Rápidos, denominado desde el inglés en NREM (non-rapid eye movement) y b) con Movimientos Oculares Rápidos, denominado al igual que el anterior del inglés REM (rapid eye movement). Hasta el momento no existe una teoría que explique de una manera unitaria y comprensible la función del sueño. Algunas funciones importantes del sueño son: la capacidad restauradora de las actividades diurnas (la cual se encuentra vinculada a funciones anabólicas), regulación de computación, etc.) en los patrones de sueño y la vigilia. Psiquiatría y sueño la temperatura corporal, inmunidad, conservación de la energía, promoción de la plasticidad neuronal sináptica y de su integridad (desarrollo del cerebro, aprendizaje y memoria) y facilitación de todas las funciones neuronales 1. Como se puede apreciar, el sueño se encuentra fuertemente vinculado a actividades básicas de conservación de la vida y de la integridad del organismo. La importancia clínica del sueño, se vincula a que el sueño influye en funciones biológicas tan diversas y vinculadas a aspectos tan relevantes de la vida, lo cual permite entender que sus anormalidades, sean estas en cantidad (disminución o incremento) o en modificaciones de funciones cualitativas impactan gravemente la salud, pudiendo afectar severamente el desarrollo en etapas claves como la infancia y la adolescencia. El reconocimiento de los trastornos del sueño se ha incorporado a los temas de mayor relevancia médica y de la agenda pública, principalmente por el impacto de sus consecuencias. Ejemplo de ellas son la accidentabilidad, la disminución del rendimiento laboral y académico, incremento de la morbilidad y mortalidad general, etc. En las últimas décadas el desarrollo de la investigación en sueño ha sido exponencial y sus resultados tanto en el ámbito preclínico, clínico y terapéutico han llegado a ser de extrema complejidad. Esta complejidad distancia los más importantes hallazgos de la práctica clínica y de los profesionales de la atención general. 18 Los trastornos psiquiátricos constituyen eventos médicos de elevada prevalencia en la población general, y entre sus múltiples manifestaciones clínicas es frecuente encontrar alguna perturbación del ciclo sueño vigilia, especialmente en la cantidad y calidad del sueño, lo cual lo transforma en una manifestación clínica relevante. Existe una alta prevalencia de los trastornos del sueño en la población general, y en especial, en los consultantes de la atención médica general, los más comunes son el Insomnio, Síndrome de apnea del sueño, o Parasomnias, los cuales requieren de la participación de todos los profesionales para lograr su reconocimiento oportuno y efectuar tratamientos efectivos. Como he señalado, la prevalencia y complejidad de los trastornos del sueño han facilitado el surgimiento de una nueva subespecialidad médica, la medicina del sueño, lo cual ha permitido ordenar conocimientos sobre etiología, pronóstico, fisiología y fisiopatología, prevención y tratamiento de las anormalidades del dormir (para revisar la clasificación más reciente, sugiero revisar la referencia 2). Otro aspecto destacado es el desarrollo de un amplio campo de trabajo interdisciplinario con otros profesionales del ámbito social y político para evaluar aspectos como: sueño y capacidad laboral, horarios de trabajo, sueño y memoria, evaluación del impacto de la tecnología como la luz, comunicaciones (celulares, TV, Existen alteraciones del sueño que son independientes del trastorno psiquiátrico y que aparecen de una manera coincidente (comórbida) con la evolución del trastorno psiquiátrico. Estos trastornos se denominan Trastornos primarios del sueño (Por ejemplo: Insomnio primario o psicofisiológico, hipersomnia primaria, etc.). Se diagnostican en forma independiente (criterios DSM IV TR) y su curso clínico tiende a agravar el trastorno psiquiátrico, requieren además medidas específicas de tratamiento, tanto farmacológico como psicoterapéutico, Del mismo modo existen trastornos del sueño secundario a… (Un determinado trastorno psiquiátrico), cuya evolución temporal depende del trastorno psiquiátrico, este trastorno en forma independiente de su gravedad se transforma en un síntoma. En ocasiones la gravedad del síntoma puede comandar parte el curso clínico, ejemplos de ello son los trastornos del sueño en una Depresión Atípica, Trastorno por estrés post traumático, etc. La relación entre los trastornos primarios del sueño y el trastorno psiquiátrico, plantean una delicada inter- fase. Los síntomas psiquiátricos en la comorbilidad pueden ser amplificados y agravados por la disfunción del sueño. Por otra parte los fenómenos fisiopatológicos subyacentes al trastorno psiquiátrico pueden contribuir al empeoramiento de la calidad del sueño y por tanto su perpetuación y cronificación. Un ejemplo de esta compleja relación se encuentra en el hecho que las personas que presentan insomnio tienen un riesgo mayor de desarrollar un episodio nuevo de un trastorno psiquiátrico, en especial de Depresión Mayor, luego de un año de evolución del insomnio 3. Entre los trastornos psiquiátricos se encuentra toda una gama de trastornos del sueño, los más frecuentes son: insomnio, somnolencia excesiva y parasomnias (pesadillas, terrores nocturnos). Estimaciones epidemiológicas en diversos países concluyen que a lo menos la mitad o más de un tercio de pacientes con insomnio crónico se encuentran asociado a un trastorno psiquiátrico (ver cuadro N° 1). Por otra parte existen alteraciones funcionales de la arquitectura del sueño como es la disminución de la latencia de fase REM del sueño (el inicio de la fase REM es muy típica en las personas sanas y ocurre aproximadamente a los 90 minutos de iniciado el sueño), este acortamiento puede encontrarse en trastornos tan diversos como el episodio de Depresión Mayor, Esquizofrenia y Trastorno de Personalidad Fronteriza. A continuación se revisarán los principales trastornos psiquiátricos y su relación con los principales trastornos del sueño, que el psiquiatra encuentra muy a menudo en su práctica 19 clínica, para las descripciones clínicas y clasificaciones se utiliza como referencia el DSM IV TR 4. Cuadro N°1 Trastornos Psiquiátricos asociados a insomnio o somnolencia excesiva Insomnio Somnolencia Excesiva Trastorno Bipolar Depresión Atípica Depresión Mayor Trastorno Bipolar Trastorno por Ansiedad Generalizada Trastorno afectivo estacional Trastorno Obsesivo Compulsivo Trastornos de la Personalidad Trastorno por estrés post traumático Esquizofrenia Trastornos de Ansiedad: Los trastornos de ansiedad son los trastornos psiquiátricos más prevalentes en la población general y se asocian frecuentemente con dificultades del sueño. Los principales trastornos asociados son: Trastorno de Pánico (TP), Trastorno de Ansiedad Generalizada (TAG), Trastorno de Ansiedad Social (TAS), Trastorno Obsesivo Compulsivo(TOC) y Trastorno por estrés pos Traumático(TEPT). Si estos trastornos se ordenan por la gravedad de la perturbación del sueño, ésta es más grave en pacientes con TEPT, TP y TAG. Se agrega a lo anterior que en estas tres patologías la Depresión es una comorbilidad muy frecuente, por tanto existe una mayor agravación del trastorno del ACTUALIZACIÓN EN NEUROCIENCIA Y SALUD sueño. El fenómeno clínico central a cualquier subtipo de trastorno de ansiedad son abruptos despertares en el transcurso de la noche, en especial en TP y TEPT, los cuales ocurren específicamente en la transición de las fases NREM y REM del sueño. Trastorno de Pánico (TP): El fenómeno clínico característico del trastorno son ataques de angustia, recurrentes e inesperados, acompañados de intensos síntomas somáticos como: dolor torácico, palpitaciones, síntomas digestivos, alteraciones psicosensoriales (modificación en la percepción de la intensidad de la luz, sonidos, del tiempo, desrealización y despersonalización). Otro aspecto importante es la brevedad del episodio, incrementándose rápidamente la intensidad (10 minutos), duran segundos a minutos. Es un trastorno cuyas manifestaciones son preferentemente diurnas, sin embargo las crisis pueden ocurrir (sólo o concomitantemente) durante el sueño utilizándose la descripción de “pánico nocturno” o “pánico en el sueño” como sinónimos a TP. Algunos autores consideran a las crisis de pánico nocturno como una Parasomnia. El TP se diagnostica cuando en un individuo se manifiestan episodios recurrentes de ataques de pánico. El curso clínico del trastorno es variable, sin embargo la mayoría de las personas desarrollan ansiedad anticipatoria (temor a nuevos ataques) y temor a eventuales complicaciones médicas en torno a las consecuencias de la crisis. Esta ansiedad anticipatoria lleva a la necesidad de evitar lugares en que han ocurrido las crisis o espacios geográficos en los cuales se sienten desprotegidos de recursos médicos ante una eventual descompensación. Alteraciones del sueño: Estudios clínicos comparativos de sujetos sanos y con TP muestran consistentemente un incremento del insomnio. Los estudios efectuados en el Laboratorio de sueño, con Polisomnografía nocturna (PSG) en su gran mayoría confirman el hallazgo clínico y muestran específicamente una disminución de eficiencia y duración del tiempo total de sueño. Existe una excelente revisión en la referencia 5. En el TP existe una elevada comorbilidad con el Trastorno Depresivo Mayor, lo cual hace que los resultados en la PSG sean difíciles de interpretar, tanto es así que algunos autores plantean que estos hallazgos pueden deberse a la depresión más que al TP. Crisis de pánico nocturna: Las formas más graves de TP, se han asociado con manifestaciones nocturnas de las crisis. En estos pacientes la presencia de crisis nocturnas, no son un hecho aislado y puede existir otras manifestaciones: ocurren manifestaciones del trastorno muy tempranas en la vida, presentan una elevada comorbilidad con otros trastornos de ansiedad o depresión en la vida adulta. Se ha planteado que esta modalidad clínica sea un subtipo de TP. El 18% de los pacientes sólo experimenta crisis nocturnas y el 50 % ha experimentado una crisis nocturna a lo largo de la vida. Los pacientes describen un despertar súbito, a menudo con síntomas físicos intensos, respiración breve y el resto de la crisis es muy similar a las manifestaciones diurnas. Las crisis se presentan en período de NREM a menudo entre las etapas 2 a 3. Esto permite plantear la hipótesis de una 20 disminución del arousal (transición a sueño lento) como un gatillante de la crisis, alteración muy propia de las parasomnias. Clínicamente es posible identificar que las crisis ocurren temprano en la noche, a menudo en la primera mitad, donde el sueño NREM es predominante, los pacientes no refieren contenidos angustiantes al despertarse y las crisis se exacerban ante la inseguridad de que las crisis se repitan en el transcurso de la noche. Las crisis son más frecuentes cuando los pacientes están solos o en sitios donde estiman que la ayuda médica es menos eficiente. Las conductas de evitación se pueden objetivar en la necesidad de posponer la hora de inicio del sueño y evitar estar solos durante la noche o evitar viajar a lugares más desprotegidos (campo, playa, etc.). Tratamiento: Al igual que en las crisis diurnas, el propósito fundamental es bloquear la presentación de nuevas crisis nocturnas y eliminar los temores y conductas de evitación en particular respecto al dormir. La privación parcial o total de sueño aumenta la frecuencia de las crisis y las conductas de evitación pueden retrasar considerablemente el inicio del sueño complicando seriamente la evolución del trastorno. Es imprescindible controlar estrictamente el consumo de cafeína, pues incide tanto en el insomnio como en aumentar la frecuencia y gravedad de las crisis. Aún no se sabe si un TP con crisis nocturnas requiere un tratamiento diferente, aparentemente las crisis nocturnas responden de manera similar a las diurnas, tanto a los antidepresivos tricíclicos, inhibidores de recaptura de serotonina (ISRSs) o inhibidores de la monoaminoxidasa (IMAOs); como a las Benzodiazepinas (Alprazolam, Clonazepam y Lorazepam) y diversas modalidades de intervención Psicoterapéutica. En todos los pacientes es imprescindible establecer una buena Higiene de sueño. Especial atención es recordar que muchos antidepresivos pueden empeorar la arquitectura del sueño provocando mayor fragmentación del sueño y pueden desencadenar síndrome de piernas inquietas lo cual de una manera indirecta empeora o dificultará una adecuada recuperación del paciente. La PSG, en la cual se comparan con sujetos control, se aprecia un aumento de la latencia de sueño, aumento del tiempo despierto cuando se ha interrumpido en el transcurso del sueño, reducción del tiempo total de sueño y disminución de la eficiencia de sueño. La arquitectura del sueño entones es compatible con un insomnio inespecífico de inicio y mantención del sueño, comprometiendo especialmente la calidad del sueño 5 . Estos parámetros permiten, como veremos más adelante, distinguir claramente el PSG de pacientes con Depresión Mayor. Trastorno de Ansiedad Generalizada (TAG): El tratamiento farmacológico de primera línea considera antidepresivos ISRS y duales, los cuales han desplazado a las Benzodiazepinas. Los antidepresivos pueden inicialmente empeorar el insomnio, requiriendo la asociación específica de hipnóticos no benzodiazepínicos por un tiempo breve para evitar el riesgo de desarrollar tolerancia y dependencia. La psicoterapia conductual ha demostrado alta efectividad no sólo en los síntomas de ansiedad sino también en los trastornos del sueño. Es necesario implementar también una adecuada higiene de sueño. Se caracteriza por ser un trastorno de ansiedad crónico, cuya manifestación clínica más relevante es la “preocupación excesiva” y la ansiedad. La preocupación excesiva involucra múltiples factores, como trabajo, salud o familia. Alteraciones del sueño: En los criterios propuestos por el DSM IV TR para el diagnóstico de TAG se incluyen síntomas de un trastorno del sueño: dificultad para iniciar y mantener el sueño, el sueño es tenso e insatisfactorio, otros dos elementos son diurnos y claves para el diagnóstico fatigabilidad e irritabilidad los cuales pueden ser consecuencia de la pérdida de horas de sueño. El fenómeno central “preocupación excesiva” se manifiesta intensamente en el descanso, en el inicio del sueño o cuando ocurren los despertares nocturnos, limitando la oportunidad de reiniciar el sueño. Tratamiento: Trastorno de Ansiedad Social (TAS) ex Fobia Social: El fenómeno esencial es el intenso y persistente temor a exponerse a una o más situaciones sociales. La ansiedad puede llegar en momentos a la intensidad de las crisis de pánico, en especial cuando las personas no pueden eludir exponerse a las situaciones que temen. Este trastorno 21 a menudo se inicia muy temprano en la infancia o adolescencia y es altamente comórbido con otros trastornos de ansiedad, depresión y abuso de sustancias en especial al alcohol en los hombres. Alteraciones del sueño: El insomnio es el fenómeno más habitual, aún cuando este síntoma no se transforme en la molestia más referida por los pacientes. Los estudios con PSG suelen ser normales o documentar aumento de latencia y disminución de la eficiencia del sueño. Si aparecen otras anormalidades en el sueño debe considerarse la presencia de una comorbilidad como la causa más importante, en especial la búsqueda de automedicación con Benzodiazepinas y abuso/dependencia de alcohol en forma oculta. En casos graves, los pacientes presentan retraimiento social importante y evitación a los grupos, refugiándose en su habitación en actividades como la TV o la computación, esta evitación implica permanecer despierto (no insomne) hasta altas horas de la madrugada. Este retraso permanente del inicio del sueño genera una privación o deuda crónica de sueño, frecuente entre los adolescentes. Este trastorno no debe ser diagnosticado como no como insomnio sino como un Trastorno del ciclo sueño-vigilia, específicamente como un retraso de fase (Síndrome de Fase Retrasada de Sueño). En este síndrome la cantidad de horas de sueño es normal e incluso excesiva, cuando se limita el tiempo total de sueño por el cumplimiento de responsabilidades (despertar por horario de clases o trabajo) se provoca una privación parcial de sueño con severas consecuencias diurnas. ACTUALIZACIÓN EN NEUROCIENCIA Y SALUD Tratamiento: Existe una notable respuesta terapéutica a ISRS, Venlafaxina, algunos betabloqueadores (Atenolol y Propanolol) y a psicoterapia. Siendo la recomendación más aceptada el uso muy limitado (en el tiempo) de benzodiazepinas y la coterapia (Psicofarmacológica y psicoterapia). Los efectos adversos de los antidepresivos en el sueño (insomnio, síndrome de piernas inquietas, etc.) pueden ser los más limitantes si existe un trastorno del sueño. Intentar siempre Higiene del sueño. Trastorno por estrés post Traumático (TEPT): Es posible, sea el trastorno de ansiedad en que las alteraciones del sueño sean más prominentes. En este trastorno el fenómeno central es recurrencia inesperada de los eventos traumáticos. En nuestro país este trastorno tiene una elevada prevalencia a continuación del terremoto del 27 de Febrero. Se estima que a lo menos el 18-20% de las personas expuestas a un evento traumático manifiesta esta complicación. El tipo de trauma es muy variado y oscila entre el terremoto y la violencia. Las personas consultan con gran retraso y no asocian sus síntomas al evento traumático. Trastornos del sueño: Las alteraciones son muy intensas y variadas. Los pacientes reportan no haber dormido bien por décadas, los cuales pueden ser corroborados por su compañero(a) de cama. Los pacientes se encuentran extremadamente hiperalertas (hiperarousal) en especial aquellas perso- nas que han vivido experiencias de guerra o entrenamiento militar. Pesadillas, acompañadas de muy vívidos recuerdos de personas, situaciones y lugares vinculados a la experiencia traumática. Han utilizado durante años una cantidad importante de hipnóticos o similares de diversa naturaleza como antihistamínicos, medicina natural, etc. Finalmente muchos de ellos recurren regularmente al consumo de cantidades importantes de alcohol para lograra iniciar y/o mantener el sueño. Entre los criterios diagnósticos del DSM IV TR, destacan dos fenómenos específicos del sueño son: Pesadillas (vividas como re experiencia) e insomnio (modalidad de dificultad para iniciar y mantener el sueño), el sello distintivo del trastorno son las pesadillas recurrentes. Existen estudios en que hasta el 70% de los pacientes con TEPT presentas otros trastornos graves del dormir como: conductas violentas o de autoagresión en el sueño, parálisis del sueño, hablar en el sueño y alucinaciones hipnopómpicas e hipnagógicas. Los estudios de laboratorio efectuados durante la vigilia son concordantes con un alto nivel de alerta y ansiedad durante las 24 hrs. Las alteraciones del sueño se han correlacionado con los niveles elevados de incapacidad funcional (laboral) que pueden hacer del trastorno, una enfermedad altamente invalidante. En estudios a continuación de desastres naturales (especialmente huracanes, los más estudiados en USA) o accidentes automovilísticos, las alteraciones del sueño (y su gravedad) anticipan el inicio de los otros síntomas del trastorno. La homogeneidad de los estu22 dios con PSG son limitados pues algunos de ellos incluyen tanto pacientes que se encuentran en etapas tempranas como muy tardías del trastorno. Los resultados más destacados son: disminución del tiempo total de sueño y de su eficiencia, e incremento en el número de despertares. Un número importante de mujeres con historia de abuso sexual (algunos hombres con experiencias traumáticas de guerra) presentan un incremento de riesgo de desarrollar asociadas a las alteraciones del sueño ya descritos, adicionalmente trastornos respiratorios en el sueño (apneas del sueño), fenómeno aún no explicado. La relación entre Pesadillas y anormalidades de sueño REM, en especial el incremento en la motricidad (la cual debiera estar fisiológicamente inhibida) ha generado una interesante línea de investigación que explique la cronificación del trastorno. El sueño REM se encuentra fuertemente asociado a una mayor actividad diurna y especialmente nocturna del sistema noradrenérgico, el cual media la actividad neurovegetativa excesiva en el trastorno. La importancia de este hallazgo es que la identificación temprana de anormalidades del REM (y su eventual tratamiento) permitiría identificar cuáles de las personas expuestas a una experiencia traumática, puedan llegar a desarrollar el cuadro clínico, es importante recordar que no existen aún predictores confiables de quienes evolucionan al trastorno luego de la exposición al trauma. Desde el punto de vista terapéutico es importante el reconocimiento clínico de la magnitud del trastorno del sueño y de la eventual alteración respiratoria en el sueño, pues esta última requiere ser objetivada mediante la polisomnografía. La comorbilidad con Depresión Ma- yor y otros trastornos ansiosos, en especial TP, abuso dependencia de sustancias, muestran la enorme complejidad al momento de diseñar el tratamiento más efectivo. El tratamiento comprende coterapia (Psicofármacos y psicoterapia). Para controlar las manifestaciones del sueño se han recomendado el uso específico de antipsicóticos de segunda generación (Olanzapina, Quetiapina o Risperidona) y anticonvulsivantes como el Topiramato. Las pesadillas en acuerdo a revisiones de evidencia médica, muestra una elevada efectividad la psicoterapia cognitivo conductual. Desde el año 2000 se ha propuesto el uso de Prazosin un antagonista α1- adrenérgico (utilizado en hipertensión arterial e hiperplasia de la próstata) como un excelente medicamento para el tratamiento del estado de hiperalerta y de las pesadillas, en especial en la modalidad crónica de TEPT, en dosis de hasta 15 mg. Lo interesante es que no sólo genera cambios positivos en la calidad del sueño, sino también en la mejoría global. El mecanismo de acción posible es la reducción del output de la hormona liberadora de corticotropina y la disminución de REM 6. Trastorno Obsesivo Compulsivo (TOC): Los dos elementos claves en el trastorno son las obsesiones y las compulsiones, las cuales a menudo alcanzan un nivel altamente estresante. Este trastorno también se inicia temprano en la vida, infancia o adolescencia adquiriendo un carácter más grave en la edad adulta. Trastornos del Sueño: Los niveles de ansiedad son muy elevados y las ideas obsesivas son muy intrusivas en los períodos de descanso, debiendo a menudo interrumpir la conciliación del sueño para efectuar rituales, en especial de revisión. Los estudios PSG muestran normalidad en la arquitectura del sueño, cuando se encuentra una anormalidad esta puede ser consecuencia de la comorbilidad con depresión o como consecuencia de las alteraciones conductuales ya descritas. Trastornos del ánimo Los trastornos del sueño son prominentes en especial en la Depresión Mayor (DM) y en el Trastorno Bipolar (TB) y los cambios en el sueño constituyen elementos claves para el diagnostico según criterios DSM IV TR, lo cual refleja la importancia y prevalencias de ellos. A menudo preceden a la aparición de otros síntomas y ello ocurre tanto en la Manía como en la Depresión. Depresión Mayor Un estudio 7 muestra que el 65% de los pacientes con DM, presentan uno de los siguientes problemas del sueño: dificultades para iniciar el sueño (Insomnio de conciliación 38%), frecuentes despertares (insomnio medio 39%), despertar muy temprano (insomnio del despertar 41%). Otras quejas son sueño no restaurador, sueños angustiosos y acortamiento del tiempo total de sueño. Lo cual muestra la enorme gama de síntomas vinculados al sueño que pueden encontrarse en pacientes de23 primidos y borra el concepto clásico de considerar sólo el insomnio del despertar como lo habitual en depresión. Cuando se efectúan estudios poblacionales que evalúan la existencia de insomnio en adultos (en relación a quienes duermen satisfactoriamente) se constata un incremento de nueve veces el diagnóstico de DM. Adultos jóvenes con historia de insomnio, hipersomnia o ambos muestran un incremento de 10 a 20 veces el riesgo de desarrollar DM a lo largo de la vida 2. Por otra parte, la duración del insomnio se correlaciona con la gravedad del episodio depresivo y una mayor recurrencia. En un estudio de seguimiento por un año, de una población general con insomnio mostró un riesgo relativo de 39,8 para DM en relación a aquellas que no presentan insomnio 8. Cuando se evalúa la población consultante en servicios médicos (ambulatorio u hospitalizados) síntomas como sueño y fatiga predicen positivamente DM, esto ha sido corroborado en un extenso estudio multicéntrico en el cual las ¾ partes de los pacientes que presentaban insomnio reúnen los criterios de un Trastorno psiquiátrico, siendo el más frecuente la DM 9. Una pregunta interesante en la investigación, ha sido investigar si los trastornos del sueño pueden tener capacidad predictiva de un trastorno del ánimo. La respuesta ha sido positiva, tanto el insomnio como la hipersomnia se asocian con incremento de un nuevo episodio DM e incluso Manía, el estudio de Breslau 2 comprende entre 3,5 y 34 años de seguimiento y el incremento es de 2-5,4 ACTUALIZACIÓN EN NEUROCIENCIA Y SALUD veces. Otros estudios corroboran los mismos hallazgos y comprenden población joven, demostrando que el insomnio persistente es un factor de riesgo importante para el desarrollo de DM. Un dato clínico relevante, es que cuando ocurre una modificación de 3 horas de sueño (aumento o disminución) sugiere una inminente recaída en un paciente con diagnóstico de TB. La asociación de Insomnio y depresión se asocia también con un elevado índice de intentos de suicidio y suicidio tanto en pacientes adolescentes como adultos. Otro aspecto a tener en cuenta es lo que ocurre cuando no se logra la remisión de los síntomas depresivos. La persistencia de síntomas depresivos impide la remisión (como propósito del tratamiento) y le confiere al cuadro clínico una peor evolución y una mayor refractariedad al tratamiento antidepresivo. El insomnio es el síntoma residual más frecuentemente referido por los pacientes sin remisión y predice la recaída y la gravedad de ellas. La importancia de un trastorno del sueño es válida también para pacientes bipolares en fase eutímica, en relación a que la persistencia de insomnio aumenta el riesgo de recaída y una mayor refractariedad al tratamiento. El incremento de comorbilidad psiquiátrica y médica es otro hallazgo frecuente. En el área médica es frecuente la obesidad, la hipertensión arterial, los accidentes cerebrovasculares, enfermedades digestivas y del aparato locomotor. En el ámbito psiquiátrico la mayor prevalencia son la dependencia de nicotina, alcohol y sustancias ilícitas; y trastornos de ansiedad. Los trastornos primarios del sueño como Síndrome de Apnea/ hipoapnea del sueño y Síndrome de piernas inquietas son también más frecuentes y cursan como una comorbilidad. Las anormalidades en la arquitectura del sueño se pueden agrupar en tres categorías generales 10: Trastornos del sueño: 1. Trastornos de la continuidad del sueño: se manifiesta en la prolongación de latencia de sueño (periodo transcurrido entre que se apaga la luz y se manifiestan los primeros indicadores de sueño), aumento del número y duración del tiempo que se mantiene despierto una vez iniciado el sueño y despertar muy temprano. Estos hallazgos reflejan una fragmentación del sueño y una menor eficiencia del sueño. Existe una abundante literatura respecto a intentos de objetivar las anormalidades del sueño descritas, para revisión ver referencia 10. Desde la década de los 60s se pensó que alguna de las anormalidades de la arquitectura del sueño, pudieran ser un marcador biológico de Depresión, lo cual aún no se ha establecido pero tampoco se han descartado 11. Los estudios mediante PSG muestran importantes discrepancias entre la gravedad de la percepción de los pacientes depresivos con insomnio y los hallazgos en la PSG. Esta diferencia se ha atribuido a trastornos en los aspectos cualitativos del sueño involucrados en el insomnio, como es un trastorno en la percepción de la calidad del sueño. Los principales resultados polisomnográficos se resumen en el cuadro N°2. 2. Déficit de sueño lento. Corresponde a la suma de etapas 3 y 4 de NREM y es a menudo descrito como sueño “profundo”, ya que la posibilidad de despertarse en esta etapa es la más difícil (elevado umbral de arousal). La reducción de esta etapa es muy frecuente en la depresión y también se ha identificado una anormalidad en su distribución temporal. Sujetos sanos tienen durante Cuadro N°2 ANORMALIDADES DEL SUEÑO EN DEPRESIÓN Y MANÍA Síntoma Resultado PSG Insomnio Dificultades en la continuidad del sueño - Dificultad para inicio del sueño Latencia de sueño prolongada - Incremento de despertares Incremento del tiempo despierto (insomnio medio) Incremento del tiempo de despertar - Despertar temprano Disminución del tiempo total de sueño (Insomnio del despertar) Disminución de Sueño Lento (etapas 3-4) Disminución de la cantidad total de sueño Disminución total de Sueño lento Sueño menos “profundo” o reparador Disminución % de sueño lento Trastornos del soñar Anormalidades de REM Disminución de latencia de REM Prolongación de primer REM Incremento de actividad REM (noche total) Incremento densidad REM Incremento % REM 24 el primer ciclo de sueño una mayor cantidad de sueño lento, el cual disminuye gradualmente a lo largo de la noche. Sujetos con Depresión tienen menos sueño lento en primer ciclo de la noche, el cual se incrementa en el segundo ciclo. Esta anormalidad, ha sido reevaluada con análisis computacionales de sueño 3. Anormalidades en sueño REM. Estas anormalidades fueron las inicialmente descritas en Depresión, son consistentes y específicas, en especial el acortamiento en la latencia de REM (tiempo transcurrido desde inicio de sueño al primer REM de la noche) y aumento de la densidad de REM. Otra modalidad de estudios es la correlación entre la gravedad de síntomas clínicos (insomnio, apetito, anhedonia) y trastornos de la arquitectura del sueño, como es la disminución de la latencia de REM, los cuales muestran una correlación positiva. De la misma forma el incremento en la cantidad de REM (densidad de REM y disminución de la eficiencia de sueño) muestra correlación positiva con la gravedad de síntomas depresivos, estas alteraciones se asocian a las manifestaciones clínicas y se corrigen con la remisión del cuadro. La persistencia de latencia de REM disminuida y alteraciones del sueño lento persisten más allá de la mejoría y definen un subgrupo biológico, en el cual el curso clínico es más grave y existe un mayor índice de recurrencia. Estudios en familias con DM, la disminución de latencia de REM se encuentra entre quienes presentan DM y aquellos aún asintomáticos 12. El género muestra también efectos diferenciales, la disminución de sueño lento es más frecuente en varones (tanto adolescentes y adul- tos), la edad no representa cambios relevantes 13. Rol de la nueva tecnología en sueño Técnicas como la cuantificación de actividad de EEG, han permitido efectuar nuevos estudios 10. Esta técnica permite el análisis de un amplio rango de frecuencias llamado “power spectral analysis” las cuales permiten estudiar el comportamiento de ondas lentas, ondas agudas, REM y su sincronización entre diferentes áreas del cerebro. El registro se obtiene con EEG de alta densidad y 60 o más puntos de registro simultáneos. El aporte de estas evaluaciones es obtener información diferente a la arquitectura del sueño, estos registros son estables noche a noche, correspondiendo su expresión a una cualidad dependiente de la enfermedad. Adicionalmente es posible obtener información local, de áreas específicas durante la vigilia, etapas iniciales de sueño, sueño lento y REM. Los resultados más importantes son: disminución en la cantidad de sueño lento en el primer periodo NREM de la noche e incremento (del mismo) en el segundo NREM de la noche, este relación ha sido llevada a un valor numérico denominado índice de sueño lento (reflejaría una anormalidad en la regulación homeostática del sueño, Proceso S). Esta anormalidad predice una mejor respuesta a antidepresivos, y es un marcador de vulnerabilidad a la recurrencia 14. La disminución de sueño lento en primer NREM de la noche puede encontrarse también en otros trastornos, como es la Esquizofrenia, pero la especificidad de incremento en el segundo NREM se encuentra sólo en la depresión. Otros estudios promisorios son la “coherencia de ritmos de sueño en EEG”, 25 evalúa la coherencia de ritmos entre diferentes localizaciones, de ellas la interhemisféricas e intrahemisféricas parecen ser muy relevantes. La disminución de coherencia es frecuente entre adultos y adolescentes con DM (comprometa andas lentas y beta), incluso se ha descrito en recién nacidos en riesgo de Depresión, y se correlaciona cuando se efectúa seguimiento de un Episodio de DM en niños y adolescentes respecto al riesgo de recurrencia. Este examen muestra una mayor selectividad en mujeres que hombres adolescentes, y es menos frecuente en adultos. Sugiriéndose como un posible marcadores biológico de la Depresión 15. La elevada superposición de síntomas del ánimo y del sueño claramente propone mecanismos neurobiológicos comunes comprometidos. Como se ha planteado anteriormente existe la dificultad de precisar que es primario y secundario en el desarrollo de estos dos trastornos. Trastorno Bipolar: En la fase depresiva los fenómenos más frecuentes son similares a los descritos en la DM, en el curso clínico y con la recurrencia de nuevos episodios suelen agregarse fenómenos más “atípicos” como fatigabilidad, hipersomnia e incremento de patrones de estacionalidad (depresión en invierno y manía o hipomanía en primavera-verano). La hipersomnia comprendida como la necesidad de dormir diariamente más de 9-10 hrs, diarias es frecuente en la población general (3%-8%). Se ha pensado que los pacientes que tienen patrones de insomnio o hipersomnia severos pueden representar subgrupos de pacientes con mayor gravedad de los trastornos biológicos subyacentes. ACTUALIZACIÓN EN NEUROCIENCIA Y SALUD Episodios de Manía Otros trastornos psiquiátricos Los pacientes reportan reducción del tiempo total de sueño, a menudo con la sensación de una disminución de la necesidad de dormir. La Hipomanía presenta insomnio. Estudios con PSG muestran: aumento del número de despertares, disminución de etapa 3-4 de NREM, disminución de latencia de REM y aumento de densidad de REM. Casi todos los trastornos psiquiátricos, no mencionados en esta revisión, han sido recientemente evaluados para precisar los trastornos específicos del sueño, su comorbilidad con trastornos del sueño y la relevancia de estas anormalidades en el momento de seleccionar el tratamiento farmacológico. En el cuadro N° 3 se resumen parte de los más importantes hallazgos. Latencia Continuidad Sueño Latencia Sedación Percepción Efectos REM sueño sueño lento REM diurna sueño adversos Tricíclicos Amitritilina +/- ↑ +/- ++ ↓↓ ++++ ↑ 1,2,3 En la fase Depresiva, los datos clínicos y de la PSG son similares a los hallazgos de Depresión Mayor Unipolar. Sin embargo, es frecuente la somnolencia excesiva y la PSG puede demostrar un incremento en el tiempo total de sueño y disminución de REM 1. Doxepina +/- - - ++ ↓↓ ++++ ↑ 1,2,3 - ↓ ↑ ++ ↓↓ ++ ↓ 1,2,3 Desipramina Sd sd ↑ Sd ↓↓ + Sd 1,2,3 Clomipramina +/- ↓ ↑ ++ ↓↓↓↓ +/- ↑ 1,2,3 Sd ↓ Sd ++ - Sd ↓ 3 Fluoxetina ↑ ↓ - ↑ ↓↓ +/- ↓ 1,2,3 Paroxetina ↑/- ↓/- - ++ ↓↓ Sd ↓ 1,2 En los episodios mixtos se manifiesta insomnio y disminución de la duración del sueño. No se encuentran diferencia clínicas ni en la PSG en las modalidades de TB I y TB II 1. Sertralina ↑ ↓/- - ++ ↓↓ Sd ↑ 1,2 Fluvoxamina ↑ ↓ - ++ ↓↓ Sd ↑ 1,2 Citalopram - ↑ - ++ ↓↓ Sd ↑ 1,2 Sd ↑ Sd Sd Sd Sd ↑ Sd A pesar de su frecuencia e importancia clínica existen escasos estudios que la distinguen de la DM, y muchas descripciones clínicas y PSG muestran similitudes más que diferencias. Tratamiento de los trastornos del sueño en la DM: En la tabla 1 se describe el efecto de los diversos medicamentos utilizados en los trastornos del ánimo y su efecto sinérgico o antagónico en la mejoría del trastorno del sueño 16. Trastorno Psiquiátrico Imipramina IMAO Moclobemida ISRS Escitalopram Trastorno del sueño Dependencia de Alcohol Despertares frecuentes Somnolencia en Delirium tremens ↑ pesadillas, enuresis, terror nocturno y sonambulismo Empeoramiento de ronquidos y Síndrome de Apnea del sueño Déficit atencional ↑ de Síndrome de Apnea obstructiva ↑ de movimiento periódico de extremidades ↑ latencia de sueño ↓ eficiencia de sueño ↑ tiempo total de sueño ↓ latencia de REM Efecto de antidepresivos y estabilizadores del ánimo en el sueño Fármaco BIBLIOGRAFÍA Otros Trastornos psiquiátricos y sueño Tabla N° 1 Episodio de Depresión: Distimia: Cuadro N°3 Trastorno Fronterizo de la personalidad Trastornos de la alimentación Insomnio en Anorexia Nerviosa Hipersomnia en Bulimia Esquizofrenia ↑ latencia de sueño ↓ eficiencia de sueño ↓ tiempo total de sueño ↓ fase 3-4 NREM ↓ latencia de REM ↓ cantidad sueño REM Duales Venlafaxina Sd ↓ - - - ++ ↑ 3 Duloxetina Sd ↓/↑ Sd Sd Sd Sd Sd Sd Mirtazapina sd ↑ ↑ - ++ ↑ 1 Otros - Agomelatine Sd ↑ ↑ Sd Sd ↑ Sd Reboxetina Sd - - ↑ - Sd ↓ Sd Bupropion Sd - - ↑ ↓ - Sd Sd Mianserina - ↑ - ↑ ↓ Sd ↑ Sd Trazodone Sd ↑ ↑ ↑ ↓/- ++++ ↑ Sd Estabilizadores ↓ Valproato- Sd Sd -/↑ Sd -/↑ ++ ↓ Sd Carbamazepina Sd ↑ Sd - - ++ ↑/? Sd Litio Sd Sd ↑ ↑ ↓ + Sd Sd Lamotrigina Sd Sd -/↓ Sd -/↑ Sd Sd Sd Gabapentina Sd ↑ ↑ Sd -/↑/↓ Sd ↑ 1/? Modificado de Ref. 14: ↑ mejoría o aumento, ↓ empeoramiento o disminución, + aumento, - sin cambio significativo, Sd sin datos disponibles, 1 trastorno de movimiento de extremidades, 2 pesadillas, 3 Trastorno Conductual del REM. 26 Conclusiones: El óptimo tratamiento de los trastornos psiquiátricos requiere la evaluación y tratamiento oportuno de los trastornos del sueño. Los trastornos del sueño pueden, en algunos casos, ser parte importante de la sintomatología clínica del trastorno y en otros casos ser, por su aparición, un trastorno independiente y que al modo de las comorbilidades puede modificar sustancialmente la evolución del trastorno psiquiátrico. Que para todos los pacientes en que el síntoma o trastorno del sueño es relevante, además del tratamiento específico, deben instaurarse medidas de higiene del sueño. Estas medidas siempre van a contribuir a un mejor desempeño diurno del paciente y una mejor respuesta terapéutica global. Si el trastorno del sueño persiste a pesar del adecuado tratamiento (descartando el efecto adverso en el sueño de algunos medicamentos) se debiera evaluar clínicamente otras alternativas diagnósticas como son: Síndrome de piernas inquietas, Trastornos respiratorios del sueño, Trastorno conductual del REM, etc., que requieren de la evaluación mediante exámenes del laboratorio de sueño o la evaluación de un especialista en medicina del sueño. 27 1. Lee-Chiong T Sleep Medicine. Essentials and Review. Oxford University Press 2008. 2. American Academy of Sleep Medicine: The International Classification of Sleep Disorders, 2nd Edition (ICSD-2): Diagnostic and Coding Manual. Westchester, IL, American Academy of Sleep Medicine, 2005. 3. Breslau N, Roth T, Rosenthal L et al. Sleep disturbances and psychiatric disorders: longitudinal epidemiological study of young adults. Biol Psychiat 1996;39:411418. 4. American Psychiatric Association: Diagnostic and Statistical Manual of Mental Disorders, 4th Edition, Text Revision. Washington, DC, American Psychiatric Association, 2000. 5. Mellman T. Sleep and Anxiety Disoders. Psychatr Clin N Am 2006;29:1047-1058. 6. Raskind MA, Peskind ER, Hoff DJ, et al: A parallel group placebo controlled study of prazosin for trauma nightmares and sleep disturbance in combat veterans with post-traumatic stress disorder. Biol Psychiatry 61:928–934, 2007. 7. Gerber PD, Barret JE, Barret JA et al. The relationship of presenting physical complaints to depressive symptoms in primary care patients. J Gen Intern Med 1992;7:170-173. 8. Ford DE, kamerow DB. Epidemiological study of sleep disturbances and psychiatric disorders. An opportunity for prevention? JAMA 1989;262:1479-1484. 9. Buysse DI, Reynolds CF, Kupfer DJ, et al. Clinical diagnoses in 216 insomnia patients using the international Classification of Sleep disorders (ICSD), DSM IV and ICD-10 categories: a report the APA/NIMH DSMIV field trial. Sleep 1994;17:630-637. 10. Peterson JP, Benca RM Sleep in Mood disorders. Psychiatr Clin N Am 2006;29:1009-1032. 11. Perlis ML, Smith MT, Pigeon WR: Etiology and pathophysiology of insomnia, in Principles and Practices of Sleep Medicine, 4th Edition. Edited by Kryger MH, Roth T, Dement WC. Philadelphia, PA, Elsevier, 2005, pp 714–725. 12. Giles DE, Roffward HP, Sclesser ME, et al. Wich endogenous depressive symptoms relate to REM latency reduction? Biol psychiatry 1986;21: 473-482. 13. Ivanneko A, crabtree VM, Goz L D. Sleep and depression in children and adolescents. Sleep and Med Rew 2005;9:115129. 14. Kupfer DJ, Ehlers CL, Frank E, et al. Electroencephalographic sleep studies in depressed patients during long-term recovery. Psychiatr Res 1987;49:121-138. 15. Armitage R, Hoffman RF, Emslie GJ, et al. Sleep microarchitecture as a predictor of recurrence in children and adolescents wth depression. Int J Neuropsychopharcol 2002;5:217-228. 16. Mendlewicz J Sleep disturbances: Core symptoms of mayor depressive disorder rather than associated of comorbid disorders. The World J of boil Psychiatry, 2009;10:269-275. ACTUALIZACIÓN EN NEUROCIENCIA Y SALUD TERAPIA DE PAREJAS. El desafío de ser pareja hoy Ps.: Gloria Tapia Toro Terapeuta de pareja CSM Yo soy yo, Tú eres Tú Tú haces lo Tuyo, Yo hago lo Mío Yo no vine a este mundo para vivir De acuerdo a tus expectativas Tú no viniste a este mundo para vivir De acuerdo con mis expectativas Yo hago mi vida, Tú haces la tuya Si coincidimos, será maravilloso Si no, no hay nada que hacer. AMAR Y ENAMORARSE Fritz S. Perls onstruir una buena pareja constituye un gran desafío en la actualidad. Mucho se habla de que la pareja está en crisis y es que, los constantes cambios sociales, culturales, educativos también han afectado las relaciones de pareja. El concepto de pareja y también el concepto de familia se han ido modificando. La mujer se ha ido emancipando y ha empezado a asumir roles que antes eran tradicionalmente masculinos, como la inserción al mundo laboral y su mayor independencia económica. Por su parte esto ha llevado a que el hombre se involucre también más en los roles que estaban asignados preferentemente a la mujer, participando en algunas tareas domésticas y compartiendo el cuidado de los hijos. Si bien estos cambios han significado un avance en la consecución de equiparar las oportunidades en todos los ámbitos de la vida de hombres y mujeres, también esta transformación ha repercutido negativamente en las parejas, facilitando la manifestación de conflictos. En la actualidad las parejas se casan para ser felices, no para cumplir con una obligación social, por lo mismo exigen más de su pareja. A diferencia de épocas anteriores en las que las personas se unían con el propósito de procrear y dar educación a los hijos casi como único fin, la pareja hoy está en constante búsqueda de placer y satisfacción personal y sexual. Si antes se sacrificaba la propia satisfacción y se renunciaba a los propios sueños por la pareja, hoy se lucha por la felicidad y satisfacción personal. Hoy parece estar pesando más la búsqueda de la felicidad individual que la estabilidad. Esta perspectiva de la pareja actual en que el desarrollo personal y la propia felicidad es un objetivo fundamental ha incidido en el aumento de separaciones y divorcios. Según datos proporcionados por el Poder Judicial, en 2009 los tribunales de familia decretaron el divorcio de 63.021 parejas. Durante el mismo período, el Registro Civil inscribió 57.836 nuevas uniones legales. Es decir, las parejas que se casaron el año pasado fueron 9% menos que 28 se psíquica y físicamente lo que los afecta psicológicamente, pudiendo asociarse incluso a cuadros de ansiedad, depresión, estrés, entre otros, interfiriendo de manera significativa en la calidad de vida de la pareja y de las personas que componen el entorno familiar. las que firmaron para poner fin a esa unión. (Publicado en latercera.com. 05-06-2010). Hoy en día son cada vez más las parejas que acuden a solicitar ayuda profesional para resolver sus diferencias y conflictos. Situaciones que pueden estar asociados a una crisis puntual o que pueden arrastrarse por largo tiempo y que han ido desgastando la relación. Algunos de los temas conflictivos que más consultan las parejas son: Los problemas de comunicación, discusiones frecuentes, la relación con las respectivas familias de origen, la educación de los hijos, la distribución de las tareas domésticas, el manejo del dinero, manejo del tiempo, infidelidad, los celos patológicos, la grave problemática de la violencia doméstica, la distribución de la jerarquía, diferencias religiosas, conflictos de valores, la sexualidad y cualquier otro evento que modifique de alguna forma la dinámica familiar o de la pareja. Estos conflictos generan en las parejas sufrimiento y un alto grado de insatisfacción, malestar, y frustración. Las parejas comienzan a distanciar- El amor es capaz de elevarnos a las nubes y también dejarnos caer al precipicio. En la etapa de conquista y enamoramiento nos inunda el entusiasmo, la admiración, somos capaces de dejar nuestro egocentrismo y nos mostramos altruistas, nos deshacemos en atenciones con nuestro objeto amado, pensamos gran parte del tiempo en él, intentamos agradarlo, y hasta pareciéramos estar de acuerdo en todo. En esta etapa se activan una serie de creencias y expectativas en relación a la pareja, muchas veces influidas por nuestros modelos familiares. A medida que avanza la convivencia, la realidad se presenta y ese ser que idealizamos y ensalzamos empieza a sucumbir y aparece ante nosotros un ser desconocido. Incluso algunas características que en la etapa anterior admirábamos ahora nos molestan. Queremos que el otro sea siempre atento, siempre esté alegre, que se adelante a nuestros deseos, como si poseyera el don de adivinar lo que queremos sin que se lo pidamos. Nos hacemos la ilusión que el otro resolverá nuestras carencias. Y lo que es más, casi exigimos que piense y actúe como nosotros. Frente a esta realidad, vemos que nuestros sueños y expectativas se ven frustrados y aparecen las discusiones y los conflictos. Nos senti- mos decepcionados. Creemos que ya nada podemos hacer para revertir la situación. “Cuando uno se enamora, en realidad no ve al otro en su totalidad, sino que el otro funciona como una pantalla donde el enamorado proyecta sus aspectos idealizados. Los sentimientos, a diferencia de las pasiones, son más duraderos y están anclados en la percepción de la realidad externa. La construcción del amor empieza cuando puedo ver al que tengo delante, cuando descubro al otro. Es allí cuando amor reemplaza al enamoramiento”. (Bucay, 2009). DIFERENCIAS ENTRE SER HOMBRE Y SER MUJER Incluso una pareja con muchas similitudes, como nivel social, económico y cultural, valores, inclinación religiosa, gustos, nivel educacional e intelectual, etc. serán distintos por definición, y a pesar de sus coincidencias y afinidades tendrán a lo largo de su relación, desencuentros y dificultades. En esos momentos vale tener presente que hombres y mujeres son diferentes, que vemos el mundo y la relación de distinta manera, y que esperamos y estamos dispuestos a entregar distintas cosas. El desafío es ser capaz de tolerar la distancia entre el ideal que nos forjamos y la persona real que tenemos a nuestro lado. Será un paso importante para empezar a ver al otro tal cual es, con sus virtudes y defectos, con sus aciertos y sus errores. Algunas parejas en esos momentos se preguntan si seguir juntos o terminar la relación. Tomar un camino u otro puede ser muy difícil y trascendente a la vez, por ello es importante que las parejas se den la oportunidad de intentarlo. Recordar el amor que los unió, los proyectos en común, puede ayudar a “abrir las cortinas” y ver si todavía a pesar de la distancia, las penas, las desilusiones, todavía queda algo de ese amor, que vale la pena rescatar. Si las diferencias son irreconciliables y/o se acabó el amor y la decisión es separarse, la terapia también puede resultarles útil, ya que les enseñará a superar este proceso, llegar a acuerdos, negociar y les entregará herramientas para relacionarse en el futuro sobretodo en el caso que existan hijos en común. 29 Estas diferencias entre hombres y mujeres no son sólo biológicas y anatómicas, son también psicológicas. Aceptar que hombres y mujeres son diferentes, que cada uno ve el mundo con distintos cristales, por ejemplo se dice que las mujeres son ACTUALIZACIÓN EN NEUROCIENCIA Y SALUD más intuitivas y que los hombres analizan el mundo de una manera más racional. Los problemas y las quejas que plantean en una relación son asimismo distintas, nos ayudará a entender y resolver muchos de los problemas que afectan a las relaciones de pareja hoy. Las dos miradas son válidas – distintas - pero en general complementarias. Es cierto, no todos los hombres son iguales, ni todas las mujeres tampoco, pero como regla general, hombres y mujeres son distintos en su esencia. Conocer estas diferencias, aceptarlas, respetarlas y valorarlas “darse permiso para ser distinto” ayudará a las parejas a resolver muchos de los problemas que los afectan y podrán empezar a buscar nuevas soluciones a viejos problemas. SER PAREJA: No todas las parejas “son parejas”, dos personas que consultan, que conviven y hacen algunas cosas juntos y que se autodenominan parejas, pueden no serlo si falta el “nosotros”. Ser pareja en el sentido que hemos venido comentando supone una relación de a dos, unidos en un vinculo sentimental que implica compromiso, confianza, lealtad, voluntad, intimidad y un proyecto de vida juntos. John Gray, en su libro ÉL y ELLA, describe LAS SIETE ACTITUDES o necesidades emocionales básicas que son esenciales para crear una relación de pareja verdaderamente afectuosa y positiva: el amor, el cuidado, la comprensión, el respeto, la valoración, la aceptación y la confianza. “Si la persona se siente apoyada en lo emocional, todas estas actitudes están presentes en mayor o menor medida. Sentimientos positivos como la satisfacción, la paz, la felicidad, la gratitud, la ilusión y la confianza surgen cuando podemos satisfacer nuestras necesidades emocionales básicas. • El amor. El amor es una actitud que une, comunica y comparte. Sin criticar ni ponderar, afirma: “Somos diferentes, pero también somos parecidos. Yo me veo en ti, y tú te ves en mí”. A nivel mental, el amor se expresa con la comprensión. Reconoce el sentido de la relación, y afirma: “Me relaciono contigo de modo similar a como tú te relacionas conmigo”. A nivel emocional el amor se expresa con la empatía. Reconoce la afinidad de los sentimientos. Afirma: entiendo tus sentimientos. Los he tenido parecido”. A nivel físico, el amor se expresa con el tacto. • El cuidado. El cuidado reconoce la responsabilidad de responder a las necesidades del otro. Cuidar del otro significa mostrar un gran interés y una preocupación por el bienestar de la otra persona. Cuando alguien nos importa, cuidamos de su bienestar y nos preocupa su falta. Cuanto más nos importa, más nos sentimos motivados para cuidar y ayudarle. El cuidado también reconoce lo que es importante para el otro. Cuidar de una persona significa otorgarle una condición especial. • La Comprensión. La actitud comprensiva da validez a unas palabras, sentimientos o situaciones. No pretende conocer de antemano todas las respuestas. La actitud comprensiva parte del desconocimiento, reúne los significados de las palabras escuchadas y tiende a validarlas. La comprensión nos permite ver el mundo a través de los ojos de la otra persona. La comprensión afirma: “Antes de cri30 ticarte, intentaré ponerme en tu lugar por un momento”. • El respeto: La actitud respetuosa reconoce los derechos, los deseos y las necesidades del otro. Cede a ellos, pero no por miedo sino por comprender su validez. El respeto reconoce el valor y la importancia de la forma de ser y las necesidades de la otra persona. El respeto es una actitud que nos motiva a ayudar porque creemos que el otro realmente lo merece. • La valoración. La actitud valorativa reconoce la importancia de los esfuerzos y el comportamiento del otro. Reconoce que la expresión de su forma de ser ha contribuido al bienestar del que valora. La valoración es una reacción natural al apoyo recibido. Nos inspira a ayudar con una sensación de alegría y plenitud. La valoración reconoce que hemos recibido un regalo valioso. • La aceptación. La actitud de la aceptación significa que recibimos de buen grado la forma de ser y el comportamiento de la otra persona. No rechaza, sino que afirma. De hecho, la aceptación va acompañada por un sentimiento de gratitud por lo recibido. No se trata de una actitud pasiva, altanera ni desaprobadora. Aceptar a una persona significa reconocer que es suficiente para uno. No significa que usted considera que podría mejorar, por el contrario, indica que no trata de cambiarla. La aceptación es la actitud que sabe perdonar los errores ajenos. • La confianza. La actitud de la confianza reconoce las cualidades positivas de la otra persona: la honradez, la integridad, la fiabilidad, la justicia y la sinceridad. Si no hay confianza, solemos precipitarnos y sacar conclusiones equivocadas con respecto a las intenciones de los demás. La confianza concede a toda ofensa el beneficio de la duda, al suponer que debe existir una buena explicación de lo ocurrido. La confianza crece entre una pareja cuando cada uno de sus miembros reconoce que el otro no tiene la intención de herir. Acercarse a la pareja con confianza es creerla capaz y deseosa de colaborar”. DESAFÍOS DE LA TERAPIA DE PAREJA: El amor es necesario pero no suficiente para que la relación se mantenga, tampoco lo es por si solo, lo bien que se lleven en el plano sexual. Lo realmente eficaz y promisorio es la habilidad que tengan para enfrentar los conflictos y superar sus diferencias. Afortunadamente como cualquier otra habilidad, se puede aprender. En toda relación de parejas hay momentos difíciles, crisis que son normales y que se relacionan con el proceso de afiatamiento y maduración de la vida conyugal. Una crisis es una señal de alerta que exige cambios, y nos llama a hacer esfuerzos para reencontrarse y seguir juntos. Las buenas parejas saldrán fortalecidas después de una crisis y las malas parejas probablemente terminen distanciándose. Cuando los miembros de la pareja se cierran y no ven la solución a sus conflictos pueden terminar de una manera drástica. Frente a las crisis la intervención terapéutica se orientara a enseñarles a las personas a resolver sus problemas, teniendo presente que es un tema de dos y no de uno solamente, ya que lo que le pase a uno de sus miembros repercutirá en el otro y en la relación. Algunas formas habituales de reaccionar cuando NO nos sentimos satisfechos con nuestra relación de pareja son: • Tomar una actitud pasiva, por desesperanza o desinterés: prefiero mantenerme en silencio y no hago nada esperando que las cosas sigan su curso. • Aceptar que hay situaciones de la convivencia que a pesar de no ser críticas podemos y debemos hacer algo para mejorarla. • Decidir terminar la relación, ya que se tiene la convicción de que ya nada se puede hacer. Lamentablemente suele suceder que las personas creen que solos serán capaces de reparar la relación y postergan el pedir ayuda, muchas veces por temor, incomodad y/o vergüenza de exponer sus problemas y su intimidad a un tercero, dilatando la decisión, a veces llegando demasiado tarde. Una pareja que acude a la consulta ha dado un gran paso en pro de su relación. “Generalmente, llegan llenos de resentimiento, de cosas no expresadas, y la tarea del terapeuta es ayudarlos a soltarse, a manifestar lo que tienen miedo a decir, a mostrar su dolor.” (Bucay, 2009). Cuando una pareja llega a la consulta a plantear su problema, generalmente va orientada a los defectos y actitudes del otro, como si “él o ella cambiara, mejoraría la relación”. Poniendo la culpa en el otro. Detrás de esto se esconde el deseo de que el otro cambie, de esa forma consciente o inconsciente intentamos que el otro se adapte al ideal de hombre o mujer que nos hemos forjado. 31 Gran parte del trabajo en terapia de pareja consiste en ayudar a cada uno a estar siempre conectado con lo que le está pasando y que no se entretenga hablando del otro (Bucay, 2009). La terapia de pareja les ayudará a identificar y resolver los conflictos y a adquirir herramientas que ayuden a mejorar la comunicación, logrando mayores resultados si la pareja viene a tiempo. En la terapia de parejas, se les enseña a sus miembros a adquirir y/o mejorar sus habilidades de comunicación para resolver sus diferencias y para que puedan ponerlas en prácticas cuando surjan los problemas y/o conflictos. Así este aprendizaje no sólo les servirá para resolver una crisis puntual, sino para enfrentar aquellas situaciones futuras que pudieran presentarse. ACTUALIZACIÓN EN NEUROCIENCIA Y SALUD Nos olvidamos que no somos perfectos. De mantenerse esa visión, se dificultaría mucho el cambio ya que ninguno asumiría que el cambio debe empezar por uno mismo. Aceptar que el otro no es perfecto nos lleva a no pedirle lo que no tiene y a no intentar cambiar lo que no puede. El terapeuta entonces deberá orientarlos hacia un cambio de óptica, cambiando el foco desde ¿en qué estás fallando tú? a ¿en qué estoy fallando yo?. Esta nueva mirada de la situación les hará reflexionar en torno al aporte que hace cada uno para que las cosas funcionen como están. Ser generosos en aceptar las debilidades del otro y reconocer las nuestras, nos hará menos críticos. El amor necesita cuidados y aceptación. Los reproches provocarán tensión y resentimientos. Esto no significa que nunca más discutiremos, o no tendremos desacuerdos. Todas las parejas en algún momento discuten. Estas discusiones son constructivas cuando aceptamos que no tenemos que estar de acuerdo en todo, por el contrario el tener puntos de vista distintos nos amplía la mirada y frente a un problema podemos tener más de una alternativa. Cuando las parejas discuten constantemente aumenta la distancia entre ambos y la relación comienza a desgastarse. y con los roles que han sido asimilados en su familia de origen A partir de estas experiencias construimos una imagen de lo que creemos que debe hacer un hombre o una mujer como compañero. En este encuentro inicial la pareja tiende a ser idealizada y como en los cuentos de hada creen que “serán felices para siempre”. Cuando la pareja no cumple con las expectativas, el otro se sentirá engañado y decepcionado. Aparecen las frustraciones, las desilusiones, los malos entendidos, incluso pueden llegar a pensar que su matrimonio ha sido un error. Para construir una mejor pareja resulta esencial un ajuste de expectativas. Como en toda relación humana, tarde o temprano, nos encontraremos con que nuestro compañero o compañera de vida no es perfecto; es un ser humano con virtudes y defectos. Muchas de sus características pueden resultarnos muy molestas y originar dificultades en la vida de pareja; por lo que tenemos que asumir que ni mi pareja ni yo somos perfectos y que debemos aprender a convivir con ello, de forma realista y constructiva. El lema aquí pasa a ser “Cambiaré mis defectos en todo lo que pueda” y “Aceptaré tus defectos en todo lo que pueda”. (Bagladi, 2009). emociones sin enjuiciarlo ni criticarlo. Demostrarle que le importa lo que dice, le pasa, y por sobre todo que lo está escuchando. No sólo a través de las palabras, (parafraseando, asintiendo, preguntando…), sino también a través del lenguaje no verbal, con la mirada, el cuerpo, etc. CAPACIDAD DE ENTRENERSE JUNTOS Las parejas que son capaces de entretenerse juntos parecieran tener un mejor pronóstico. Estudios realizados en el Instituto Chileno de Psicoterapia Integrativa (ICPSI) (Bagladi 2007, 2008) señalan que existe una fuerte asociación entre la satisfacción en la pareja y la capacidad de entretenerse juntos. Muchas veces cuando las parejas no saben disfrutar juntos, suelen refugiarse en el trabajo o en los hijos en lugar de crear instancias para compartir. También sucede que buscan otras actividades con amigos, con la familia extendida, etc., evitando el estar solos, se refugian en “otros” como una manera de evitar el enfrentarse con las carencias que pueda tener la relación. Para combatir la rutina y evitar el aburrimiento es preciso abrirse a nuevas experiencias, atreverse a hacer cosas nuevas. Compartir nuevas amistades, cultivar algún hobby juntos. Cosas simples y fáciles de implementar, que no requieren grandes despliegues, como por ejemplo planificar una ida a cenar, al cine o una caminata, o alguna actividad de su interés, también les puede ayudar a romper la rutina y les brindará el tiempo para compartir. AJUSTE DE EXPECTATIVAS Cada miembro de la pareja viene con distintas expectativas de lo que significará su vida en común, expectativas respecto de la relación y también respecto de su pareja. Cada uno tiene una idea preestablecida de lo que significa ser pareja. Esta idea se relaciona con las experiencias vividas a lo largo de la historia personal, con su estilo de vida, sus costumbres 32 COMUNICARSE MEJOR “Las parejas pueden superar sus dificultades si reconocen, en primer lugar, que una gran parte de sus decepciones, frustraciones y enojos no arranca de una incompatibilidad básica, sino de malentendidos desdichados que provienen de comunicaciones equivocadas e interpretaciones prejuiciosas del comportamiento mutuo. El malentendido es a menudo un proceso activo que se origina cuando un cónyuge desarrolla una imagen distorsionada del otro. Esa distorsión hace, a su vez, que el cónyuge mal interprete lo que el otro hace o dice y le atribuya motivos indeseables. Los esposos simplemente no tienen el hábito de “controlar” sus interpretaciones o buscar la claridad en las comunicaciones” (Beck, 1990). Aprender a comunicarse de manera eficaz, será objetivo fundamental en la terapia. Aprender mejores formas de comunicación, fortaleciendo las herramientas y habilidades comunicacionales es un desafío importante para construir una mejor relación de pareja. No es infrecuente que la comunicación se vea entorpecida por no saber escuchar y que cuando uno está hablando el otro esté ocupado en elaborar lo que va a responder, para defenderse o mostrarle al otro lo equivocado que está. “La tarea será entonces pasar “del escuchar para responder al escuchar para comprender”. (Bagladi, 2009). A través de la comunicación se conoce a la pareja, su historia, sus deseos, frustraciones e intereses, a la vez que ayuda a comprenderse mejor y a lograr un mayor acercamiento. Para que la comunicación sea efectiva, cada miembro de la pareja deberá estar dispuesto a escuchar activamente al otro, con el fin de comprender lo que ese otro quiere decir. Esto les permitirá llegar a acuerdos, resolver problemas y tomar decisiones en conjunto. Aprender a escuchar de manera empática, supone enfocar la atención en el otro, intentando comprender lo que nos quiere decir, poniéndose en su lugar e intentando conectarse con sus sentimientos y 33 Escuchar al otro empáticamente implica no mal interpretar. Cuando se interpreta al otro, se hace con la propia historia y significaciones, por lo tanto, es probable equivocarse y sacar conclusiones erróneas, generando discusiones y malos entendidos. No mal interpretar es una tarea a desarrollar. No mostrar conductas agresivas y fomentar el respeto mutuo es otro desafío. Asumir un compromiso de no agresión a pesar de las diferencias y los conflictos evitará que se sigan dañando y que continúe la escalada de malos tratos empeorando la comunicación. Una buena comunicación contribuirá a enfrentar las crisis y los conflictos de manera más efectiva. En terapia se enseña a la pareja a que aprendan a través del modelado a escuchar de modo empático, a cómo expresar desacuerdos y a negociar soluciones. Se programan tareas individuales y en pareja para motivar la comunicación, dejando espacios para el diálogo, para intercambiar ideas. Mantenerse informados de lo que le pasa al otro, ser capaz de entablar conversaciones entretenidas, enriquecer su mundo, compartir experiencias y no sólo centrarse en el tema de los hijos o laborales ayudará a que la comunicación sea más gratificante e interesante para ambos. “Un norte de la vida de pareja es el no dejarse caer en la relación, sino, muy por el contrario, ser activos en el enriquecimiento de la pareja” (V. Bagladi, 2007). “Los cónyuges pueden ayudarse a sí mismos, ayudar a cada uno de ellos y a la relación, si adoptan una actitud de “sin culpa ni reproche”. Ese modo de abordar las cosas permitirá enfocar los problemas reales y resolverlos con más facilidad. Cada cónyuge debe asumir la plena responsabilidad de mejorar la relación. Debe comprender que tiene opciones y que puede (y debe) recurrir a todos los conocimientos e instituciones a su alcance para hacer que él y su pareja sean más felices”. (Beck, 1990). Algunas intervenciones en Terapia de parejas: Entrenamiento en reciprocidad: Intercambio de acontecimientos gratificantes. Técnicas que aumentan la tasa de comportamientos positivos. Dirigir la atención hacia lo positivo en vez de lo negativo. Aprender a dar refuerzos positivos. Registrar las gratificaciones recibidas y entregadas. Entrenamiento en comunicación: Escucha activa y empática. Habilidades sociales y modelado (ejemplos de comunicación positiva). Adecuada transmisión de sentimientos negativos. Aprender a hacer peticiones asertivas: Cambiar las quejas por peticiones concretas. Manejo de las diferencias. Negociación: Expresar desacuerdos y negociar soluciones. Ceder para buscar un punto de equilibrio. Entrenamiento en resolución de problemas: Definición del problema (siendo específico y admitiendo el papel que se tiene en el problema). Centrarse en la solución. BIBLIOGRAFÍA Bagladi, V. (2008). Enfoque Integrativo Barcelona: Paidós. Menéndez, I. (2010) La construcción del Supraparadigmático y Psicoterapia de Bucay, J. (2009), Amarse con los ojos amor. Espasa Libros. S.L.U. Pareja. Material presentando en clases abiertos. RBA Libros. S.A. Opazo, R. (2008) Enfoque Integrativo Su- del Magíster en Psicoterapia Integrativa Coddou, F., Méndez, C. (2002). La aven- praparadigmático y Psicoterapia de Pa- en el Instituto Chileno de Psicoterapia In- tura de ser pareja. Santiago de Chile: Gri- reja. Clases del Magíster en Psicoterapia tegrativa, Santiago de Chile. jalbo. Integrativa, Santiago: ICPSI Bagladi, V. (2009), Una aproximación al Fromm, E. (1959). El arte de amar. Bue- Rojas, E. (1997). Remedios para el Des- bienestar humano. Actualizaciones en nos Aires: Paidós. amor. Buenos Aires: Planeta. Psicoterapia Integrativa, Vol. I Gray, J. (1995). El y ella. Random House Beck, A. (1990). Con el amor no basta. Mondadori, S. L. 34 PRESENCIA MUNDIAL www.sobrevuelo.cl Laboratorios Bagó S.A. México Centroamérica República Dominicana Costa Rica Cuba Colombia Ecuador Brasil Argentina Bolivia Perú Paraguay Uruguay Chile Rusia Sri Lanka Myanmar Pakistán Ucrania Georgia Azerbaiján Senegal Costa de Marfil Kenia Sudáfrica Sudán Benin 36 Congo Camerún China Tailandia Filipinas Yemen Australia Nueva Zelanda