CICLO JOSÉ ALBERTO DEL CERRO CANO (1994) Comienza sus estudios de piano en el Real Conservatorio de Música y Danza de Albacete, bajo la dirección de Gloria Munuera, con quien cursará sus estudios de Enseñanzas Elementales y Profesionales, finalizando con Matrícula de Honor. En 2012 comienza en el Conservatorio Superior de Música ‘’Manuel Massotti Littel’’ el Grado Superior en la especialidad de Interpretación con Pilar Valero, estudios que continúa hasta la actualidad, obteniendo excelentes calificaciones. Ha obtenido en el Concurso regional Diputación de Albacete el primer premio junto a otras menciones como el ‘’premio a la mejor interpretación de música española’’ en 2012. Ha dado clase con profesores tal que José María Martínez Toledo, Alexander Kandelaki, Bruno Canino, Michael Wladkowsky, Yuri Bogdanov, Sorin Enachescu, Fabio Bidini o Aquiles Delle Vigne, entre otros. Ha interpretado de solista junto a la Orquesta de la Universidad de Murcia, o la Orquesta el Conservatorio Superior de Música de Murcia, aparte de conciertos de piano solo o cámara en lugares como el Teatro Circo, Auditorio o Sala Cultural de Caja Castilla-La Mancha (Albacete), Teatro Villa de Villa (Molina de Segura), Sala Cultural de Caja Murcia o Casino (Murcia), Clasijazz (Almería), “Atellier” (Bruselas), Torre in Pietra (Roma), etc. Ha interpretado también música moderna y jazz en diferentes agrupaciones, realizando un curso de perfeccionamiento con Alfons Carrascosa, además de estudiar en la Escuela de Música Moderna de Albacete. Actualmente compagina sus estudios con el ámbito laboral siendo profesor de piano en la “Sociedad Unión Musical” de Bigastro y en la Escuela Municipal de Música de Abarán. EL PIANO CLÁSICO HAYDN | MOZART | BEETHOVEN JÓVENES PIANISTAS ALBACETEÑOS PRÓXIMOS CONCIERTOS 10/03/2016 [20 h.] LAURA GÓMEZ MARTÍNEZ, piano DISEÑO | JAVIER HIDALGO 17/03/2016 [20 h.] MARIO MORA SÁIZ, piano En conmemoración de su 25º Aniversario, La Escuela de Música y Arte Amadeus felicita a estos jóvenes intérpretes de piano con especial cariño y gran orgullo por haber formado parte de su primera formación musical y a los que deseamos un gran éxito en su excelente carrera. JOSÉ ALBERTO DEL CERRO CANO Jueves, 3 de marzo, 2016 Casa de la Cultura “José Saramago” 20 h. NOTAS AL PROGRAMA Franz Joseph HAYDN (1732–1809) Sonata nº 33 Hob. XVI-20 en Do menor I. Modeato II. Andante con moto III. Allegro Wolfgang Amadeus MOZART (1756-1791) Fantasía KV 475 en Do menor I. Adagio—Allegro—Andantino—Più Allegro Ludwig Van BEETHOVEN (1770-1827) Sonata no. 31 op. 110 en LA b mayor I. Moderato cantabile molto espressivo II. Allegro molto III. Adagio, ma non troppo JOSÉ ALBERTO DEL CERRO CANO, piano Duración aproximada: 60 min. sin pausas. Se ruega no aplaudir entre los movimientos de cada obra La sonata de Haydn que se interpreta esta noche fue compuesta cuando el compositor tenía 40 años y por tanto pertenece a su época media de creación, en la que se denota una gran fogosidad en la que se da rienda suelta a un sentimiento más vehemente y desinhibido que las obras anteriores o que iban a llegar después. Se plantea en esta Sonata que al componerla Haydn estuviera pensando en el pianoforte más que en el clave debida a las grandes indicaciones dinámicas que posee. La fantasía en do menor, K. 475, fue escrita por Mozart en Viena el 20 de mayo de 1785 y dedicada a la alumna Theree von Tratner. En la línea de las demás fantasías de Mozart, esta obra presenta un carácter bastante virtuosístico, pero ésta es una obra única puesto que ninguna otra obra de Mozart presenta temas tan vistosamente contrastados en un espacio tan reducido. Se le suele emparentar con la Fantasía K 457 con la que se le ha comparado estilísticamente. La sonata para piano nº 31, de Ludwig van Beethoven fue compuesta en el transcurso de 1821 y acabada en los últimos días de diciembre. Esta sonata está, por tanto, relacionada con uno de los momentos más negros de la vida de Beethoven. Fué dramática su existencia desde el ángulo de la salud, de los problemas familiares y de los desastres económicos. Esta obra está considerada como una de las creaciones más profundamente subjetivas y personales de toda la producción beethoveniana; pese a su urdimbre nada revolucionaria, son ya los impulos del alma los que dominan la concepción general y son los sentimientos los que condicionan su estructura formal. Entre los elementos que hacen de la sonata Op. 110 una sonata significativa del último periodo beethoveniando podemos citar la extremada, aunque equilibrada, libertad de la forma así como la adopción de un procedimiento cíclico (en el sentido de que los temas parecen nacer de un único núcleo) y la elección del recitativo dramático alternado con partes fugadas. Javier Hidalgo Romero