Arquitectura habitacional en la Ciudad de México a fines del siglo xx Carolina Magaña Fajardo * Enrique Ayala Alonso * * Resumen: A lo largo de este documento se enhilarán los Abstract: Throughout this document, strung subsequent cambios sucesivos en materia de vivienda que se han dado en changes in housing that have occurred over the last 25 years los últimos 25 años en la Ciudad de México, mostrando a la par, in Mexico City, showing the couple, how the political, economic, cómo los cambios políticos, económicos, sociales y tecnológicos social and technological housing are shaping fashion today. The 1985 earthquake suffered Mexico City was a water- de moda van perfilando la vivienda de hoy en día. El sismo de 1985 que sufrió la Ciudad de México fue un shed in urban restructuring, led changes in the model building parteaguas en la reestructuración urbana, generó modificaciones and planning, major changes to the Building Code, and the en los modelos de construcción y planeación, cambios impor- formation of groups of social science research that contributed tantes en el Reglamento de Construcciones y la formación in technical and scientific fields. Simultaneously there arose a great demand for housing de grupos de investigación en ciencias sociales que hicieron contribuciones en los ámbitos técnicos y científicos. Simultáneamente se suscitó una gran demanda de created different ways of living in Mexico City. Raises several neighborhood organizations formed by individuals and small vivienda que generó diferentes formas de habitar en la Ciudad groups who share a culture and identity and not just based de México. Surgieron varias agrupaciones vecinales constituidas on political or ideological elements. There are 3 major groups por individuos y pequeños grupos que compartían una cultura y within the housing, housing is popular, the middle class and una identidad y no todos precisamente con base en elemen- upper class. Within this housing typology found lost cities, neighbor- tos políticos o ideológicos. Por ello, se distinguen tres grandes grupos en la vivienda: la vivienda popular, la de clase media y la de clase alta. En esta tipología habitacional se encuentran las ciuda- hoods, new and old working-class neighborhoods, units or residential complexes, gated and closed up several exclusive neighborhoods in Mexico City. des perdidas, vecindades, colonias proletarias nuevas y viejas, unidades o conjuntos habitacionales, fraccionamientos cerrados y cerradas en altura en varias colonias exclusivas de la Ciudad de México. Palabras clave: Ciudad de México, vivienda, historia urbana, Keywords: Mexico City, Housing, Urban History, Built Heritage, patrimonio edificado, siglo XX. Twentieth Century. * Alumna del doctorado en Ciencias y Artes para el Diseño de la ** Profesor del Departamento de Métodos y Sistemas de la proyecto posdoctoral titulado 25 años de vivienda en la División de CyAD, Universidad Autónoma Metropolitana-Xochi- Ciudad de México 1985-2010, mediante beca otorgada por la milco. UAM-Xochimilco, con la tutela del doctor Enrique Ayala Alonso. 1 Este artículo pertenece a la investigación realizada para el 35 Universidad Autónoma Metropolitana-Xochimilco. Introducción El año de 1985 fue un momento crucial para la Ciudad de México; los sismos que la arrasaron constituyeron un parteaguas en su historia social y económica, pero también hubo cambios profundos en las maneras de habitar, tanto al interior de la casas como en la ciudad, principalmente para la población que resultó damnificada. Esta situación originó la formación de diversas organizaciones sociales que reivindicaron su derecho a la vivienda y a permanecer en los barrios y colonias que habían sido sus lugares de habitación. También se crearon programas gubernamentales como Renovación Habitacional Popular (RHP) y Fase II, se revisaron los planes de desarrollo urbano y las normas de diseño estructural lo que dio lugar al nuevo Reglamento de Construcciones, que se expidió en julio de 1987. Simultáneamente, comenzaron a presentarse diferentes formas de vivienda entre otros sectores de la población, que igualmente eran un indicio de transformaciones en los modos tradicionales de habitar; aparecieron colonias cerradas, principalmente para la clase media; conjuntos horizontales, cerrados desde su origen, y casos como los de las viviendas construidas en Santa Fe, donde surgió una pérdida y alteración del carácter habitacional y que bien podrían denominarse cerradas verticales. Se crearon nuevos organismos y otros existentes asumieron nuevas funciones, lo que facilitó este proceso: Sedue, Fovisste, Infonavit, Fovi, Fonhapo fueron algunos. Más tarde surgieron empresas inmobiliarias como ara, geo, sare que construirían y financiarían habitación de interés social y medio. El sismo de 1985 y sus consecuencias 36 El 19 de septiembre de 1985 fue un día en que se vivió una de las experiencias más dramáticas e impactantes que haya experimentado la Ciudad de México en toda su historia. La capital mexicana y otras ciudades del país sufrieron el impacto destructivo de movimientos telúricos de alta magnitud y se produjeron varios de los mayores daños materiales de su historia. En los meses que siguieron a los terremotos se desencadenó una serie de procesos de cambio en la esfera social y política de gran profundidad; se adoptaron nuevas leyes, se produjeron movilizaciones de carácter masivo que cuestionaban el sistema político; se diseñaron novedosos procesos de construcción y se adoptaron nuevos códigos constructivos. El 14 de octubre de 1985 se promulgó el decreto presidencial mediante el que se creaba el Programa Emergente de Renovación Habitacional Popular (rhp), mediante el cual se llevaron a cabo las tareas de reconstrucción de vivienda en los predios expropiados. Los objetivos de este programa eran realizar un reordenamiento urbano de la zona central, propiciar el desarrollo social de los barrios céntricos con equipamientos complementarios de la vivienda, combatir la especulación y promover el adecuado uso del destino de suelo. También se inició una planificación urbana por medio del Programa General de Desarrollo Urbano del Distrito Federal en 1987-1988, en donde se establecieron los aspectos fundamentales que debían considerarse para el orden en la estructura urbana, los usos de suelo y el funcionamiento de la ciudad. De igual manera, se hicieron cambios importantes en el Reglamento de Construcciones, debido en parte a las características del sismo, al subsuelo y a los reglamentos de construcción que no consideraban un evento de esta magnitud. El sismo causó colapso y deterioro severo en más de 400 estructuras de hospitales, viviendas, oficinas y escuelas. Los principales daños observados tuvieron varias causas:2 las cargas excesivas de peso muerto; la estructura irregular; las losas planas reticulares que mostraron un mal comportamiento sobre todo en la unión de columnas, lo que dio lugar 2 Amador Terán, Sonia Ruiz y Luis Estrada, “La evolución de la construcción en México como consecuencia del sismo de 1985”, en Estado actual de la ingeniería sísmica en México, Fundación ica, Cuadernos fica, México, 1997. Consejo Nacional de Ciencia y Tecnología (Conacyt), patrocinado por el Gobierno del DF, generó un número importante de proyectos de estudio. Surgieron grupos nuevos como la Fundación Ingenieros Civiles Asociados (ica), que se formó poco después del sismo, la Fundación Barros Sierra, que creó el Centro de Investigaciones Sísmicas (cis), y el Centro de Instrumentación y Registro Sísmico (Cires) que manejó unas redes de instrumentación. De igual manera, el Sistema Nacional de Protección Civil, en 1987, y el Centro Nacional de Prevención de Desastres (Cenapred), entre 1988-1990.4 En paralelo, el conocimiento de la estructura del subsuelo del Valle de México ha mejorado notablemente gracias a las exploraciones realizadas por la cfe y por Pemex, ya que han hecho sondeos entre 1 000 y 3 000 m, así como pruebas de prospección sísmica de reflexión con el fin de estudiar los estratos profundos, de prospección geofísica de profundidad baja y media. Conformaciones urbano-arquitectónicas Si bien el sismo de 1985 fue un parteaguas en la reestructuración urbana, que generó cambios en los modelos de construcción y planeación, también obligó a satisfacer la gran demanda de vivienda que imperaba en la ciudad. Para lograrlo surgieron los grandes conjuntos habitacionales y conformaciones urbanas que representaban una nueva forma de vivienda; éstas, debido a sus características, rápidamente se transformaron en un componente de suma importancia en la estructura urbana, ya que constituía una alternativa de habitación adecuada para una ciudad cosmopolita en expansión y en desarrollo. A partir de la década de 1980, comenzaron a manifestarse diferentes formas de habitar en la Ciudad de México. Existen tres grandes grupos en la vivienda: la vivienda popular, la de clase media y la de clase 3 Id. 4 Varios autores, 20 años después de los sismos de 1985, puecunam, México 2005. 37 al colapso generalizado de todos los niveles de losas. Este sistema fue el que presentó mayor porcentaje de daños severos. Además en algunas ocasiones los propietarios hicieron modificaciones estructurales, tirando algunos muros de carga y sustituyéndolos por trabes soportando sólo la carga vertical mas no la capacidad de carga horizontal ni la rigidez del edificio; y finalmente la falta de mantenimiento. El primer reglamento de construcciones para el DF, data de 1920 y fue modificado en 1942, 1957, 1966, 1976, 1985, 1987, 1993 y 2004. En todos los casos por adecuaciones al diseño sísmico y el conocimiento de los métodos de análisis y diseño, así como por mejoras en la práctica constructiva.3 A pesar de que el reglamento de 1976 fue reconocido a nivel mundial por su extenso análisis, en 1987 se publicó otro en el que se ajustaban todas las modificaciones a raíz del terremoto de 1985. A partir de este evento, se propone una metodología en la construcción, empezando por una planeación de obra, en la cual se plantea de manera abierta el concepto arquitectónico, los materiales por emplear y la maquinaria. En cuanto a los materiales de construcción, se propone el concreto estructural en cuya fabricación se emplean agregados de mayor resistencia, un módulo de elasticidad más alto y uniforme y un menor grado de contracción. El acero se utiliza en forma de barras de refuerzo y en perfiles para estructuras metálicas. En el caso de elementos prefabricados, se han popularizado ampliamente y son muy confiables, debido a que el uso del concreto directamente vertido y con un curado controlado da una uniformidad que permite esta confianza. En el caso de la mampostería, se recomendó usarla como estructura de soporte en casas habitación y edificios de poca altura, cuando se confinan adecuadamente con castillos y cadenas de liga. Una de las consecuencias de la tragedia de 1985, fue la formación de grupos de investigación en ciencias sociales que contribuyeron en los ámbitos técnicos y científicos. Por ejemplo, el programa de dos años entre la National Science Foundation y el alta. También existen distintos tipos de producción de vivienda: la autoproducción, la producción por encargo, la producción promocional privada y la producción promocional del Estado.5 Éstos varían según el nivel socioeconómico de la población en la Ciudad de México, ya que pueden presentarse en los tres grupos de vivienda. Tipología de la vivienda popular El concepto de vivienda se ha ido modificando según el país y los tiempos. En general, éste se refiere al manejo de espacios habitables, provocando ambigüedad respecto a lo que es una vivienda digna. Esto nos remite principalmente a los espacios tan reducidos y materiales de dudosa calidad que hacen pensar si ellos fueron realmente diseñados para el ser humano. En el grupo de vivienda popular existen los siguientes: deteriorado y ruinoso. Están densamente pobladas por grupos de bajos ingresos, pues sus rentas son módicas; obreros semicalificados, empleadas domésticas y hasta algunos profesionistas cuyos ingresos equivalente a tres salarios mínimos7 las ocupan. Colonias proletarias nuevas Este sistema de vivienda es representado por los fraccionamientos o subdivisiones de terreno que ofrecen lotes individuales, ubicados en la periferia de la ciudad (Netzahualcóyotl). Su tamaño varía desde subdivisiones de 100 lotes hasta algunas de varios millares. Son de baja densidad y muy extensos. No cuentan con infraestructura de servicios comunitarios. Se agrupan básicamente en dos tipos: unos planeados sobre terrenos privados y otros sobre terrenos ejidales, comunales y públicos. En 1970, éstos sumaban 27 % de la población, la cual es joven, de bajos ingresos, de tres a cinco salarios mínimos; las viviendas se encuentran en diversas etapas de construcción.8 Ciudades perdidas Son grupos de chozas o tugurios comprendidos dentro de un lote, típicamente en el corazón de manzanas ubicadas en el anillo intermedio de la ciudad. Los lotes por lo general no cuentan con ningún servicio y a veces tienen sólo una toma de agua para toda la comunidad. La electricidad se obtiene clandestinamente de las líneas de conducción en la calle. Son asentamientos muy poblados porque ofrecen a las personas de escasos ingresos una alternativa económica de habitación y con inmejorable ubicación en la ciudad. La población que las ocupa generalmente no tienen expectativas de crecimiento social o económico.6 Vecindades 38 Éstos se conforman por cuartos o pequeñas viviendas dispuestos en torno a un patio central, típicamente ubicados en el centro de la ciudad. Los tamaños de las vecindades varían de 20 a 50 viviendas, de uno a dos cuartos. Pueden contar con todos los servicios, pero no son eficientes. Algunos de éstos son comunitarios como el baño y los lavaderos de ropa. El estado físico de las vecindades se encuentra por lo general Colonias proletarias viejas Son fraccionamientos de terrenos que ofrecen lotes individuales ubicados en el anillo intermedio de la ciudad. La mayoría de las casas están terminadas, pero se puede ver el deterioro por falta de mantenimiento y equivale a 12 % de la población. Están ocupados por personas de edad madura con una posición económica estable, de tres a cinco salarios mínimos. Unidades o conjuntos habitacionales En el Plan Director para el Desarrollo Urbano del Distrito Federal de 1980, se define claramente que 5 Marta Scheingart, “La vivienda terminada. Producción habitacional y promoción inmobiliaria en la zona metropolitana de la Ciudad de México”, en Marco Antonio Michel (coord.), Procesos habitacionales en la Ciudad de México, uam/Sedue, México, 1988. 6 Jan Bazant et al., Tipología de vivienda urbana. Análisis físico de contextos urbano-habitacionales de la población de bajos ingresos en la Ciudad de México, Diana, México, 1978. 7 Id. 8 Id. los conjuntos habitacionales son los desarrollos urbanos construidos en predios con superficie mayor a 10 000 m2 y con un número de viviendas no menor a 100. Estos conjuntos fueron considerados como elementos preferentes sobre los fraccionamientos para el futuro crecimiento de la ciudad y fomentados mediante mecanismos financieros públicos o privados.9 Estaban dirigidos principalmente a clientes con capacidad de pago para usufructuar este tipo de habitación. Estos conjuntos habitacionales no necesariamente pertenecen en exclusiva a algún grupo de vivienda, lo que distingue el nivel socioeconómico son las colonias en donde se encuentran, los espacios, el diseño de interiores y acabados de cada vivienda y el costo de cada una. Coloquialmente, los conceptos de conjuntos habitacionales, unidades habitacionales, multifamiliares y grandes conjuntos aluden a una tipología habitacional presente en las ciudades grandes, que se confunden entre sí. El modelo más repetido es el que reúne varios edificios contiguos con viviendas similares o idénticas y que dejan entre sí algunas áreas abiertas de magnitudes variables que están destinadas al uso colectivo de quienes habitan en los edificios. Se entiende como conjuntos a las viviendas de alquiler a precios reducidos, vivienda social que no es propiedad de sus ocupantes, sino del Estado o de sociedades de economía mixta y se alquilan a precios moderados a las familias de menores ingresos.10 Haciendo un poco de memoria, los primeros multifamiliares surgen a raíz de la demanda habitacional que continuaba en aumento, como se ha comentado anteriormente: “Pese a las diversas soluciones que se ponían en práctica, urgían respuestas novedosas, económicas, eficientes e higiénicas“.11 Es decir: por Le Corbusier y que por entonces estaba siendo edificada“.12 En 1947, la Dirección de Pensiones en México convocó a un concurso de anteproyectos para la construcción de 800 casas en la Colonia del Valle, que el arquitecto Mario Pani ganó con la propuesta de edificios multifamiliares de 1 080 viviendas. “La construcción de este proyecto, con el cual inició la época más productiva y de mayor experimentación en la arquitectura habitacional del siglo xx”,13 fue el inicio de estos conjuntos. A partir de estos concursos, se construyeron muchos más. Actualmente se pueden clasificar según su tamaño en: Conjuntos pequeños. Tienen entre 40 y 150 viviendas, representan 62.7 % del total de conjuntos. En este tipo de viviendas, que son aproximadamente 39 mil, viven 157 mil personas. Se caracterizan por disponer de pocas áreas de uso colectivo, y si las hay son los andadores, jardines o estacionamientos. También existen casos donde se utilizan para actividades privadas de las familias, como el tendido de ropa o almacenamiento de muebles, bicicletas o llantas de coches. Estos conjuntos tienden a localizarse en el centro y áreas intermedias de la ciudad, como ejemplo se pueden mencionar al Conjunto España y Arroyo Zacatenco.14 Conjuntos medianos. Pueden contener 151 y 600 viviendas y representan 24.3 % del total de los conjuntos con 62 mil viviendas. A diferencia de los pequeños, tiene más áreas de jardín y de estaciona9 Plan General de Desarrollo Urbano del Distrito Federal de 1980, p. 43. 10 Judith Villavicencio y María Teresa Esquivel, Conjuntos y unidades habitacionales en la Ciudad de México. En busca de espacios sociales y de integración barrial, UAM Azcapotzalco, México, 2006. Se estaba pensando en los multifamiliares, que en 11 Enrique Ayala Alonso, “El movimiento moderno y sus conjun- otras latitudes se construían no sólo con éxito, sino que tos habitacionales”, en Barrios, colonias y fraccionamientos de se tenía la seguridad de estar haciendo una revolución la Ciudad de México. Memorias de los seminarios, UAM- de esos proyectos internacionales, sin duda, era la Unidad Habitacional de Marsella, en Francia, diseñada Xochimilco, México, 2010. 12 Id. 13 Id. 14 Villavicencio y Esquivel, op. cit. 39 de orden arquitectónico y urbano. El más destacado 40 incentivó el proyecto de los Desarrollos Urbanos Integrales Sustentables, conocidos como duis. Éstos son áreas de desarrollo planeadas integralmente que por su gran extensión contribuyen al ordenamiento municipal, facilitan la provisión eficiente de servicios, contribuyen al crecimiento público de la región y ayudan a reducir los daños al ambiente. En lo que compete a una unidad habitacional, ésta se refiere a los más grandes conjuntos efectuados que concentran vivienda unifamiliar y departamentos, como en el caso del Conjunto Copilco en Torres de Mixcoac (1970-1980), orientados a sectores medios de la población. El primer conjunto habitacional en la Ciudad de México fue el Unidad Habitacional Miguel Alemán (1947-1948), de Mario Pani, con un total de 1 080 viviendas en departamentos de dos niveles. Con superficies que variaban entre 60 y 100 m2; tenía 168 locales comerciales, áreas de uso colectivo e infraestructura para comercio y ciertos servicios. Otros ejemplos son el Conjunto Urbano Presidente López Mateos en Nonoalco Figura 1. Unidad habitacional Noanalco-Tlatelolco. Foto: Carolina Magaña, 2010. Tlatelolco, construido entre 1960 y 1964 (figura 1); la Unidad Independencia, de miento, juegos infantiles con cierta datación de mobi- 1960, con 2 234 departamentos (figuras 2 y 3), la liario urbano y, en algunos casos, caseta de vigilancia. unidad Lomas Hermosa en calzada Legaria; Villa Como ejemplos están Aidé Solis y Presidente. Olímpica, de 1968, en la Delegación Tlalpan, con 29 Conjuntos grandes. Constituyen 7 % del total edificios y 904 viviendas; Conjunto Iztacalco con cuade conjuntos, con 601 a 1 300 viviendas. Cuentan tro secciones y 5 200 viviendas; El Rosario con 12 362 con las características de los medianos, más espacios viviendas al inicio y 3 614 más en 1985, sumando deportivos, vialidades interiores, explanadas y algunos un total de 15 976. Si bien estos conjuntos habitaequipamientos como guarderías, comercios, centros cionales son muy conocidos, existen otros de igual de salud, centro social y oficinas. Como ejemplos importancia como los Culhuacanes, localizado en están Los Molinos Cananea y Canal Nacional B.15 Coyoacán, con 19 788 viviendas; otro es el realizado Esta tipología habitacional rompió desde meentre 1991-1992, junto al Aeropuerto en la Delediados del siglo xx con las formas tradicionales de vivienda. Hoy en día, dada la gran demanda de estos 15 Id. conjuntos, el Gobierno, junto con otras instituciones, gación Venustiano Carranza con ocho sectores, 154 edificios y 1 839 viviendas; la Mayeguera, con 354 viviendas en edificios de cuatro niveles y casas dúplex, localizada en la Delegación Iztapalapa; el conjunto habitacional Cabeza de Juárez con cuatro secciones, edificios de cinco niveles y 1 451 viviendas.16 La mayoría de estos conjuntos habitacionales se localizan en municipios periféricos, algunos con bajas densidades de población, en grandes extensiones de terrenos, con construcciones de tipo horizontal y baja densidad ocupacional. Son espacios habitacionales planificados con una mezcla de prototipos de vivienda, financiados por la banca y las distintas instituciones de vivienda, como Fovi, Infonavit, Fovissste, así como las sociedades hipotecarias conocidas como Sofoles.17 Ciudad y arquitectura de los sectores altos Entender el porqué de las colonias cerradas y de las vecindades no es sólo un tema arquitectónico, ya que éstas tienen que ver con factores políticos, sociales, económicos, estilo de vida, nivel social, de identidad e identificación de los ciudadanos en la Ciudad de México. Como hemos mencionado, las agrupaciones vecinales surgen en la Ciudad de México después del sismo de 1985, por los problemas compartidos, que atañen a los asuntos de la vida diaria, y la afectación de los derechos relacionados con su condición de habitantes de un espacio o ámbito determinado.18 Estos grupos integran sectores de la clase media que buscan la mejora del medio urbano, enfrentan el deterioro ambiental, abogan por la desaparición del comercio ambulante y protestan por la creciente inseguridad pública, por ello, sus demandas se modiFigura 2 y 3. Unidad Independencia. Foto: Carolina Magaña, 2010. 16 Id. 17 Entrevista con el maestro Jorge Andrade, 7 de julio de 2009. 18 Patricia Safa, “Noticias locales, problemas metropolitanos: democracia y organizaciones vecinales en la Ciudad de México”, en Jorge Alonso y Juan Manuel Ramírez Saiz (coords.), La democracia de los de abajo en México, ciih, unam, La Jornada, 41 México, 1997, p. 245. Figura 4. Colonia Cerrada en la Cd. De México. Foto: Carolina Magaña, 2010. fican y cambian frecuentemente. Las organizaciones del Movimiento Urbano Popular (mup) surgen por la desigualdad en los accesos de los bienes y servicios de la ciudad; éstas se han organizado local y regionalmente en torno a las demandas de obtención de terrenos, regularización de la tierra y dotación e instalación de servicios, con diferentes influencias ideológicas y políticas, generando relaciones preferentes con los partidos políticos.19 Estas agrupaciones vecinales están constituidas por individuos y pequeños grupos articulados entre sí, que comparten una cultura y una identidad. Se basan en relaciones informales, en las que el involucramiento personal y la solidaridad son decisivos. Una de sus características es que la identidad de sus miembros se basa en el espacio habitacional o residencial, es decir, a partir de un factor territorial como la calle, la colonia o el barrio,20 y no precisamente con base en elementos políticos o ideológicos. y personas ajenas a ellos; se empezó a pedir una identificación al entrar, y se resguardaba la seguridad con policías o vigilantes las 24 horas.21 Colocaron plumas que delimitaban la colonia, y rejas; utilizaron los muros como mecanismos de protección ante la delincuencia, el deterioro ambiental y el graffiti. Este conjunto de elementos ha garantizado, y lo seguirá haciendo, una ideología e identidad propia de las 19 Ana Contreras Burgos, “El territorio como imaginario. La construcción identitaria en una colonia del Distrito Federal”, en Acta sociológica. Ciudad de México, identidad, cultura y política, núm. 34, Facultad de Ciencias Políticas y Sociales, Centro de Estudios Sociológicos, enero-abril de 2002. 20 Es preciso definir la diferencia conceptual entre barrio y colonia: barrio es un territorio que alguna comunidad reconoce como suyo, ya que ahí se comparten tradiciones y se establecen relaciones más profundas que las de la simple vecindad o las de un estatus económico semejante. En este caso, la conformación del espacio físico, los servicios y el equipamiento urbano favorecen el contacto entre los vecinos; colonia, cuando nace, carece de tradición y surge prácticamente de Fraccionamientos cerrados 42 Hace más de una década comenzó a ser frecuente en la Ciudad de México el cierre de colonias y fraccionamientos urbanos a la libre circulación de vehículos cero; sólo establece una división administrativa. 21 Enrique Ayala Alonso, Habitar la casa: Historia, actualidad y prospectiva, Colección Antologías, UAM-Xochimilco, México, 2010. élites; son elementos de los que han carecido otros grupos sociales sin la capacidad económica suficiente para reproducir y emular la producción y consumo del urbanismo llamado primero de calidad, luego claramente “privado” o “cerrado”, y que sigue en expansión (figura 4). La proliferación de las urbanizaciones cerradas es el resultado, en alguna medida, de la protección contra la pobreza, la delincuencia, la violencia y la aparición de diferentes formas de segregación, cuya finalidad es la seguridad. Como podemos percatarnos, esta parte se relaciona directamente con el Gobierno de México y concretamente con el modelo neoliberal que se ha venido viviendo en las últimas décadas. Una de las manifestaciones del neoliberalismo22 es la privatización de las empresas gubernamentales y los servicios públicos o, en realidad, de la “desincorporación o la entrega a la administración privada de los servicios públicos”.23 Ejemplo de ello es el servicio de recolección de basura, el abasto del agua potable, el tratamiento de las aguas residuales y el transporte público, que en algunas ciudades de nuestro país lo subsidiaba el Gobierno, y hoy se propone entregarlo al sector privado. Así, los servicios públicos se convierten en mercancías que sólo se pueden obtener en el mercado, lo cual empieza a generar exclusiones en la posibilidad de satisfacer las necesidades de servicios para ampliar zonas urbanas, donde precisamente habita la mayor parte de la población. La implantación del neoliberalismo en México de carácter urbano significa: suerte: es decir, al crecimiento del desempleo, la creciente pobreza urbana, el deterioro de la ciudad, la mayor segregación urbana, el deterioro, la distorsión y la fragmentación de la vida en las ciudades, así como el aumento exponencial de la violencia y la inseguridad.25 Cerradas en altura Con todas las condicionantes explicadas, las cerradas en altura son una proyección del mismo concepto de los fraccionamientos o colonias cerradas, pero en edificios de gran altura y en colonias exclusivas, donde un edificio habitacional es todavía más demandante en cuanto a servicios de lujo que representan la ideología o la identidad de elite. Se trata de una forma de arquitectura doméstica propia de la globalización, aislada del resto de la ciudad, dotada de adelantos tecnológicos y mimetizada, aunque no integrada, con otros edificios incluso de oficinas, es decir, sin carácter habitacional, buscando con ello un “anonimato y una negación de la realidad social y urbana”.26 Estos nuevos fraccionamientos son el escaparate de arquitecturas espectaculares y novedosas, dictadas por modas vigentes en países desarrollados. Éstas se identifican como High Tech, Light Constuction, deconstructivismo y otros ismos aceptados por arquitectos mexicanos de renombre.27 22 Durante el gobierno de Carlos Salinas de Gortari (19881994), la estrategia neoliberal se sintetizó: la estabilización de la economía a partir del manejo realista del presupuesto, Ampliar la participación de las comunidades y los gru- la privatización de empresas paraestatales, la reforma fiscal, la pos privados, para mejorar la distribución del bienestar desregularización económica, la reforma financiera, la liberali- y reducir las funciones del Estado para garantizar la zación del comercio, la renegociación de la deuda externa y el paz social, abatir el conflicto y usar los medios políticos para promover la armonía social.24 fortalecimiento de la tenencia de la tierra fueron el nuevo camino con el que el pueblo mexicano llevó a cabo una reforma del Estado. 23 Jaime Ornelas Delgado, “La ciudad bajo el neoliberalismo”, en Papeles de Población, núm. 23, Universidad Autónoma del Estado de México, Toluca, enero-marzo de 2000, pp 45-69. 24 Id. 25 Id. 26 Ayala, Habitar la casa…, op. cit. 27 Id. 43 El continuo empobrecimiento de la población, característica inseparable del neoliberalismo, ha provocado la existencia de dos tipos de ciudadanos: los pocos privilegiados que pueden pagar los servicios urbanos; el resto de la población, que sería abandonada a su Formalmente estas cerradas en altura se pueden distinguir por lo siguiente: Énfasis de la verticalidad, el empleo de materiales novedosos; en todas sus construcciones se busca evitar el contacto con el exterior, con sus vecinos, con ello se fortalece una tendencia reciente a la negación del espacio urbano, la cual irremediablemente cambia las formas de habitar.28 44 Los interiores de estos departamentos suelen ser de una “arquitectura minimalista”, en la que radican materiales de moda y la domótica;29 y principalmente cuentan con servicios comunes que brindan exclusividad y seguridad: canchas de tenis, albercas, spa y gimnasio. Es importante resaltar, sin embargo, que en general sus dimensiones y funcionamiento internos son insuficientes para un habitar cómodo. En esta arquitectura, llamada “inteligente”, domina el uso de la tecnología, sistemas computarizados, entretenimiento y sistemas de control remoto para videocámaras, televisores, persianas, temperatura ambiental y música, en fin, todo lo necesario para procurar altos niveles de comodidad.30 En la Ciudad de México, este fenómeno ocurre en los diferentes desarrollos residenciales de la Zona Comercial Santa Fe y Lomas de Chapultepec; también en algunos casos aislados de las Lomas del Pedregal y Coyoacán, donde viven quienes tienen un alto nivel socioeconómico, cultural, estilo de vida y gustos sofisticados. El proyecto de Santa Fe surgió como iniciativa de un grupo interdisciplinario de arquitectos, urbanistas e ingenieros, que propusieron a Carlos Hank González, entonces regente del Distrito Federal, la reconversión de uno de los espacios más degradados del área metropolitana, los tiraderos de basura de Santa Fe, en una zona de “primer mundo” aprovechando su cercanía con varias zonas de alto nivel económico como las Lomas de Chapultepec, Tecamachalco y otros elegantes suburbios que empezaban a formarse en los años ochenta en el sector poniente de la Ciudad de México.31 Para ello, se diseñó un plan integral de desarrollo urbano que de manera paulatina iría fraccionando y construyendo la infraestructura necesaria para atraer la inversión de la iniciativa privada y financiar, de esa manera, un esquema de ciudad que debería de servir de modelo para desarrollos futuros. Fue así que en menos de 10 años la zona se empezó a poblar por corporativos de empresas trasnacionales y mexicanas, que encontraron en Santa Fe un entorno idóneo para desarrollarse e inscribirse en el mundo global de los negocios. Simultáneamente, en la zona se inició el desarrollo del Centro Comercial Santa Fe, el más grande de Latinoamérica, que atrajo importantes cadenas internacionales y facilitó el proceso de poblar este fraccionamiento con el surgimiento de grandes proyectos inmobiliarios; algunos de ellos fueron realizados por destacados arquitectos mexicanos como Ricardo Legorreta y Teodoro González de León. Otros casos particulares en la Delegación Miguel Hidalgo son Bosques de las Lomas, que abarca desde Lomas de Vista Hermosa hasta colindar con el Estado de México; Lomas de Vista Hermosa, que abarca desde la colindancia con Bosques de las Lomas hasta Boulevard Reforma, conocido también como Prolongación Paseo de la Reforma o excarretera Federal México-Toluca. También las Lomas de Chapultepec, Contadero, que colinda con los poblados pequeños de Cuajimalpa, y la zona boscosa de La Venta. Estas zonas están consideradas como las de mayor nivel socioeconómico de la ciudad y posiblemente del país, en conjunto con otras ubicadas en otros lugares de la capital. En Lomas de Vista Hermosa se construyeron los primeros condominios de lujo que surgieron en la zona Rincón de las Lomas, La Colina 28 Id. 29 Conjunto de sistemas capaces de automatizar una vivienda, aportando servicios de gestión energética, seguridad, bienestar y comunicación, y que pueden estar integrados por medio de redes interiores y exteriores de comunicación, cableadas o inalámbricas, desde dentro y fuera del hogar. 30 Ayala, Habitar la casa…, op. cit., p. 185. 31 http://www.ciudadmexico.com.mx/zonas/santa_fe.htm. Conclusiones Hoy por hoy, habitar en un mundo globalizado con demandas masivas de vivienda ha producido una amplia gama de tipologías de viviendas. Las modas y lo efímero en el campo arquitectónico forman parte del mundo actual que vivimos y van escribiendo la historia de los diferentes cambios en la vivienda. Falta ver, con el paso del tiempo, si los nuevos conceptos y programas arquitectónicos que están surgiendo en las colonias exclusivas se adaptan en su totalidad a la cultura de la Ciudad de México o sólo serán un paso más en la construcción de la vivienda y qué consecuencias traerán. 45 y Villas de Vista Hermosa, desarrollos que quizá impulsaron también el gran desarrollo socioeconómico de la zona. Bibliografía Safa, Patricia, “Noticias locales, problemas metropolitanos: democracia y organizaciones vecinales en la Ciudad de México”, Ayala Alonso, Enrique, “El movimiento moderno y sus conjuntos en Jorge Alonso y Juan Manuel Ramirez Saiz (coords.), La habitacionales”, en Barrios, colonias y fraccionamientos de la democracia de los de abajo en México, ciih, unam, La Jornada, Ciudad de México. 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