N. ü d5. Valles poblada de pintorescos caseríos y de populosas ciudades; Tarrasa y Sabadoll con sus airosas y esbeltas chimeneas que desprenden penachos de azulado humo. Alguien ha comparado á un inmenso circo aquel panorama. El histórico Monserrat, las cordilleras de! Pirineo, las montañas de nuestras costas, Moneada, Collserola, San Pedro Mártir, forman el anfiteatro, y la vasta llanura la platea. t No nos cansábamos de admirar tan bello panorama, y nuestros pulmones no bastaban á aspirar el aire purísimo saturado de la esencia de mil plantas aromáticas que llenan el monte en toda su extensión. Circuyen su ancha base espesos bosques imitando las oscuras manchas de una atigrada piel. En aquella montaña y en aquella altura se vive más en una hora, que un mes encerrados en los estrechoslímites de nuestras ciudades. jQuó cielo tan espléndido y azul! ¡qué horizontes tan ricos en fulgores! ¡qué brisas tan perfumadas! En aquella cima el corazón se ensancha y el pensamiento se dilata. Es San Lorenzo uno de los montes más altos del P r i n c i p a d o . No puede competir con su altura el histórico Monserrat, cuyos cortados picos se divisan al Oeste, envueltos en la niebla de sus tradiciones, como diría el malo grado Pifferrer. «San Lorenzo,—ha dicho muy bien un escritor amigo, — es la primera montaña que saludan los marinos en alta mar, la primera sierra que sale á su encuentro y les envía el perfume de la tierra catalana. Llamábase antiguamente Monte-Alegre, sin duda por el bello y sorprendente espectáculo que desde su cumbre se ofrece á la vista del viajero. Hoy se llama de San Lorenzo ú causa del Monasterio que en la misma se erigió en el siglo x. Aun pueden verse los restos de aquel suntuoso edificio, que abandonado quedó y desierto á principios del siglo xvn. Es de creer que en los primitivos tiempos de la Iglesia, los cristianos , huyendo del furor de sus enemigos, hallaron un asilo seguro en sus escabrosidades y en sus cuevas. Solo así se comprende que desde tiempos muy remotos se edificasen en la montaña, ermitas y capillas. Fundóse el Monasterio en tiempo del conde de Barcelona Híimon Borrell y fue uno de sus primitivos protectores el conde Ramón Borenguer y su esposa la condesa Almodis. Durante el reinado de este conde, el día 23 de junio de 1064, fue consagrada su iglesia en honor cíe San Lorenzo. A mediados del siglo xi las dádivas de los fieles hicieron muy rico y poderoso el Monasterio. Difícil nos sería enumerar las inmensas posesiones que llegó á adquirir durante esto siglo. Hemos tenido ocasión de registrar en los archivos de la Corona EL VIAJERO ILUSTRADO. do Aragón, numerosas escrituras que dan cuenta de tierras y señoríos, ventas y compras de este monasterio. Durante la gloriosa lucha por nuestra Independencia, el día 3 de mayo de 1809 fue incendiado por VENTA DE PINAS EN BAHAMA. las tropas francesas. Convertidos quedaron en corral para el ganado sus venerables ruinas, hasta que RIBERAS DEL AMAZONAS. ol Kdo. l)r. Vorgt'1.^, entusiasta por nuosfms glorias, emprendió su restauración en iH(',\) (1). Lo más notable que hoy puede verse del primitivo Monasterio son unas sepulturas antiquísimas adosadas á las paredes del santuario, que ostentan el báculo abacial, lío ahí In único que queda de la i-'ii la D!I]-!J l i i i í ñ r i r a V'íírm.-v/ <t/ili¡/itu y hint/rr/ui ÜOLIJll L ' \ l - e n s a m o n l t > <V o s l e Ü I I Ü Í Í U O M o n a s t e r i o . me solitaria morada de los religiosos benedictinos. Cuando el estómago, que es e! órgano más exigente, nos hizo presente que todavía no había recibido su acostumbrada visita, abandonamos el Santuario y nos encaminamos á la cueva de Santa Inés, en cuyo seno brotan aguas puras y cristalinas. Allí _ .J..BBJX- - -=_-.-=— --a nos esperaba una suculenta comida magistralmente * arreglada, por dos compañeros muy prácticos en el arte culinario. Junto á esta cueva levántanse los viejos paredones de la que fue ermita de Sta. Inés. En 1737 se hallaba todavía habilitada la capilla para la celebración de la misa. Parece lo más probable que este santo retiro quedó abandonado en 1809, cuando los franceses destruyeron e! monasterio. Toda la montaña de San Lorenzo está poblada de cuevas, algunas de ellas vírgenes todavía de humana planta. Las más notables son las cuevas llamadas Sinsaíia, del Fraile, de Sascorts y del Drack. Según antiguas leyendas en esta última moraba un monstruoso y alado dragón, el cual asoló y devastó la comarca del Valles hasta que el conde de Barcelona Vifredo el Velloso, libró la tierra de aquel monstruo con auxilio de su espada. Al terminar la campestre comida, abandonamos las solitarias ruinas de la ermita de Sta. Inés y nos encaminamos por un angosto sendero á la más famosa de todas las cuevas, á la cueva Sinsaña. De ella se cuentan tradiciones fantásticas, de brujos y espíritus malignos, monstruos y fantasmas diabólicos que vagan errantes por sus bóvedas. El humo asfixiante de las antorchas nos impidió internarnos en la oscura y misteriosa cueva..El cronista Pujadas en su Crónica de Cataluña , tomo VII, nos habla largamente de sus misterios. Otro conocido escritor, el Sr. Pi y Margall, la describe así: «'Una horrible hendidura cruzada de peñascos, informe, ancha, erguida, elevada en la mitad del monte, es la arrogante fachada de la cueva, inmensa sinfonía de granito, en que el alma concibe lo áspero, lo tenebroso, lo horrible de la creación misteriosa. »Al penetrar en su recinto, el resplandor de los blandones ilum i na horriblemente las tinieblas, al parecer i m p e n e t r a b l e s , pinta en la techumbre y paredones mil formas fantásticas y figurones espantosos y arrastra tras de nosotros sus sombras movedizas, como la llama que las agita. "Metidos de pronto en una encrucijada, ábrense dos largas calles, una que sigue el curso de la calle referida, asaz corta para mentada, otra que tuerce á la izquierda, cuya bóveda amenaza aplastarnos, según va inclinándose al escabroso pavimento. Desgajan se del lecho numerosas estalactitas, chorreando acompasadamente gotas cristalinas, corren