65*!< ..í^!!»*-*—•-. l-. w ?• / • • :¡ . «ÚM. 127. «1%%% PHECIO tatemes Jf<í/í S'9 de Julio DE t O S 6 . «N cuartos. LAS l'IlOyi.NCÍAS. /"niiuos de pnrtc. r« CN Mvonio. •éi-'' Mí'T ' 'í' 'ÜD D a J . . . . . la Ircj "SKU úteaea, -. . '• . J&CSCI , ,- • - .44 6o Se fuacribe finia -rrdao -eioii, a l i e de -CAItFTE» TAS, -iiúai.: 301 y en ta librtiría de la viuda -da' t:rui, callo Majur. í í xiíxeníe en ta, áJnti. núliacioitet Je cornos. ¿ « rcdítmaciona ¡t pcdldot- tolo « adaticcm Traacot de porte. :Íl fficcwoxtcaxw >fttttoo •» LU;eí:'Cic¡tLd, — E n IM Paix periódico francés , d e i'g del actual se leo <ri Ú Ú c u l o siguiente': ««La situación df>.España , si debemos dar crfilitp ¿ |as. Jioticias q u e n o s ilrgaO'i s e liacc.coda (lia mas álarmanlc* L a insurrección.'cai-liata progresa, argiiii s e d i c e , y sé supone q u e b a y alguna tlivision entre los gériernics d e la Reina. Estamos persuadidos qiie en Todo cstu tiay mucha exajeración, poi-qtio é l gobierno firanc<!s y el ingles toiiiarían , l o sabemos vierta, ikn partido decisivo si se temiese d e algUn modo q u e el p r e tendiente estuviera e n estado d e ir á Madrid. D e otro modo sería menester tío liáblar mas del tratado d e la cuatlriipte alianza , y reconocer en fín q u e se elu^e la ejecución en s u espíritu y en su objeto. Cuando los gabinetes de dos grandes nacioties s e faan adelantado basta el punto q u e lo han h e c h o los de Paris y Ldndrcs, parece dificil q u e puedan honrosamcDle i-ctroccdci*. • legión esirangcra, como si )a vergtienza áe esta miserable i n tervención n o fuese ya bastante grande para.la Francia. ¿ D e pende la suerte d e la España d e un refuerzo mas ni menos considerable? O mas liicn quieren desacreditarse las armas fuancesas del mismo modo q u e la |ngbtcri*a encuentra m o t i vos contiu'uos de hitmillacíun e n la legión britátiica, en razón tiel socorro poco cEca: que la EspaAa consigue cón'ella? N;ida disculpará In ap;it/n del gobierno e.spaitol y la de s u s uliados signatarios del (r.-itado d e la cnúdiiiple alianza; pero cn cuanto ú nosotros, según las noticias q u e recibimos d e . £ s p a i l a , hay una certeza positiva d e q u e jam;>s ha estado mas desesperada la causa de D . Carlos q u e e n el diat N o pudicndo subsistir en las i>roviucias del Norte d e E s paña , estenuadas ya por una guerra civjl tan larga, es m u y natural q u e sus s e c u a c e s , reducidos al último e s t r e m o , traten d e estenderse á otras provincias. Pero estos cuerpos destacados n o encuentran simpatías e n . n i n g u n a parle , y la cspcdicion d e G o m c z , estamos s c g n r o s , no hará mas q u e debilitar y m i n o rar las luei-zas rebeldes. - 1.a tranquilidad q u e reina cn M a d r i d , y la Calma ron q u e Habe pocos dias todavía q u e Mr. Thiers en u n discurso Cn por todas partes se hacen las elecciones j son igualmente para la ciimara^ilc tos p a r e s , dijo q u e los intereses d e la Pi-anciu nosotros otros tantos motivos paro creer q u e las noticias q u e estaban Mlimamcute libados al triunfo d e la causa constitus e han esparcido hace algunos dias sobre los movimientos d e cional de Espaila) y q u e jamas permitiría el gobierno u n a Villareal y s n s gencrnics, y el mal espíritu de los electores xcstauracion c n Madrid. ¿ Q u ¿ significan .estas declaraciones si constitucionales en el pais ocupado por las tropas d o la ilcina l o s sucesos q u e pasan en V i z c a y a , e n Navarra, en el bajo tienen iin mismo origen. N o q u e r e m o s citar, p o r egempio, Aragnu y cn la alta Castilla, tienen toda la gra%xdad q u e se mas q u e el pretendido ata(|Ue d e Fuciiterrabia, ciudad abierta l e s atribuye? L a insurrección, es menester confesarlo, no está dice \a Gaceta de Francia, defendida por trescientos cnrliscout;Glitrada ya ¡ se propaga por varios plintos á la vez. E l tas, y ante la q u e el cj(!rcito angto-espat'iol, compuesto de 8 p u e b l o se c a n s a , y el terror revolucionario parece a m e n a - ., i io£) h o m b r e s , ha encontrado unas nuevas Termopilas. z a r todas l a s ' ciudades vecinas ¿ los movimientos carlistas, I c o m o Ira sucedido ya en Figucras. S e dice tjue tas elecciones || —El impuesto sobre los_ perros d c 3 c r 1 i n , c u y o producto e s t i destinado á cubrir los gastos d e la construcción de las a c e c]ue s e anuncian como moderudaii^ toman d e día cn dia un c a ras , e s tan productivo, que el ato próximo tendrán aceras las rfcter radical. Si el nuevo Estamento d e Procuradores se comcalles d e Bcrlin. pusiese d e principios.anárquicos, c o m o puede temerse,¿quido preveo el giro q u e tomarian los sucfiaos ? . . —Se ha'notado q u e l u i s Felipe desde la egecuclon d e A l i I N o serfíi mujr..escncial qUc el miniaterio adoptase una r e b e a u d , se retira a París ya rauy entrada la n o c h e , llevando solución definitiva ? M r . Thiers , q u e cn otro tiemjio se p r o siempre consigo una escolta d e caballería; permaneciendo l o n u n c i ó tan abiertatpcntc en favor d e la intervención ¿ n o habi-á mas de un« |t-dos horas en dicha capital. negado al sillón d e primer ministró sino para reniínciar. sus —Durante In permanencia en Berlín de los príncipes franceses principios y «onvicciones p ¿Sería posible q u e viese.< don Carse han cgecutado la Nitrmnhai y el A!v!dort óperas ambas do l o s «travesar la EspaSa y llegar á -Madrid siendo presidente Spontiui, y Jinbtrto-üX-Diabla. ,Sc elogi.-i niucíio nnn gran d d consejo d e m i n i s t r o s , como le vio siendo miiiistrn de lo - -_ ...,1... uu lu 11 ninrólia mililnr sobre/r/íín."! «/7/7/7n/eí, coinpncsta por S. A. R . Iritec¡«ir atravesar impunemente la Francia pnrn pasar -i' la.*» |¡ -o! pi-fncipe.Guillermo de Pi-u.-íí.-i, y q u e lo.-! prírit-ípes franceses provincias rebeldes ? S é habla d e ani'ncuUir los fuerzas de la | | se li^h llevado para introducirla e n ct rgúrcito de s u pais. ^Mñ Cí L JOROBADO. TEATROST^-^) P n i N C I P E » A la> odio y ninliá: No mas moitradór'!!! niiHliit vn cinco acton Daílc y «avúctc* co- 'coa la cmpresii^del JonoisADo,-qucdan definitivamente -cortadas para en adelante. P o r consiguiente^'NI SOMOS fedaclores de este periódico, tii tenemos parte alg'ana en la empresa, ni queremos que se publiquen en el mismo las toscas producciones de nuestras plumas. Queda disuélia l a ' actuid redacción d e l JoiioBADO ( - l ) . • . . clVIoculti^ ji^ ~&c> j u & . —Madre ¿ n o oye vd. q u e r u i d o ? •querer dormir es en vniío. —Hija, lunnana lemprnno sabremos q u e ha sucedido. -7-¡Qué carreras? { q u é desorden! jqiié voces! ¡ q u é palabrotas! —Uija, si son patriotas 'que cstau conservando el orden > —Madre, la bulla se acerca, yo voy á ' a b r i r el balcón. .—^Pues cuenta con u n chichón, ó con que te llamen puerca. — M a d r e , por ahi van diciendo: *'que me matan.... ¡Dios me asista!" —Hija, será algiiu carlista á quien bstan convirtiendok —^¡Ay! para q u é liabré yo abierto? -«lili mismo á u n - h o m b r e han herido^ — ¿ Y qué mas quiere el perdido? d é p^racias q u e n o le han muerto. - ^ Y el sereno, eso está b u e n o , como 6Í nada pasara. —Hija, pues »i él se alterara dejara de ser sereno. -r-Por allí van dos iiatrullas ¿ y no oirán estos clamores? —Hija, y por q u é esos señores ' se han de andar metiendo en bullas ? ' —Madre, dice la tia Pica, q u e á treinta y dos han matado» —¡Dichosos! que se han ahorrado pagar médico y botica. —¡Qué escenas tan horrorosas! tiene raxon la vecina. —Cierra el balcón , Marcelina» y no me hables con facciosas. ' — Y á este esceso estraordinario ¿ no ponen remedio presto ? —¿No han de poner...? Por supuesto: u n gran b a n d o en el Diario. —¿Y el q u e m u r i ó ? Aqui el adagio se cumple de '*al asno muerto...." —Ay, hija, ten j)or m u y cierto q y e le sirve d e sufragio. • —Y callan con tal frescura los periódicos infieles! —¿Cómo han de h a b l a r los papeles en tanto q u e haya censura? Señor editor del JOROBADO : Aunque la poca i m portancia de nuestra personas y escritos nos- han r e trnido siempre de hacer declaraciones como la p r e sente, ha Itcgado el caso d e que nos interese e l - q u e vd. se sirva hacer público por medio de su diario, q u e cualesquiera q u e hayan sido nuestras rclacioues " ' . ^ Besan la m a n o de vd. sus afectísimos scrvidorés== Antonio Marta Segoi>ia=Juan Lopes 'Peii'alver, '•.^t; •^r .'•;•/ ;•; GOBÍERJÍO a V H : . D E ESTA PROVINCIA. Debiendo j-trocederse á segunda elección |>ara el nombramiento'del Je^ítz/iodipulado á cortés por esta provincia, entre-los'scíiorcs don Manuel María-lia-isualdo, don Francisco Marlinez de la l l o s a j ' marques d e Somerueiós-, qü'e sin Ucgar á'la:mayoTÍa:absoÍujtnv obtuvieron mas n ú m e r o de votos, se verificará el acto en Tos'dias 29-, 3ó y 3< d«il-corrient^^en los mismos sitios y horas, y con las mismas fortnalidades que el d e la pritnefa elección,'.'scgunlo^ dispuesto en el a r tículo 3 ^ del íi-A decreto de 28 de mayó último. Lo que pongo eu conocimiento del público para su g o bierno. Madrid 28 de julio de i836.=si)/ar(V<wtf f-^alero.y Arteta. , • _ Quedó pues á la picados de la ata pulsión casi gen< se apoderaron de tores y administr devolverlos á sus cargados de la a como no habían seguro y ventajos piarse los frutos/<t<?/itt"j,'que llau parecer por el sij es una especie de vente debe'chupa potencia .atractiva contraria á la leg nio, reconocido ~¡ real decreto de 3 vüluciou, mcnosci m i n i o , defraudan los dueños, desmc ial de q u e procec e y , y remedando liatriz que hizo el dores áae cultiva] fecías dé J u a n , ni el crédito del crcd los clamores y sú{ t i m a d a , todo ha. mis esperanzas uc ^Londres., inserto t Pueblo, periódico har:heclio. Yo com la nim'orc y cultiva la arrancó el prek por el medio irres arriendo cbiiio si h yo el colono. Cua: uc setiembre, culi al entregármela, uba como si fuerí esta usurpación, c cuatro meses que da, contestan que 1 esta cuestión. Pre{ retenerse lo agenc también: ¿le paree lasito, si el minist( do en' el orden 1 injusticia? Y pre¿ látigo en favor de ncs nacionales? Si ceda con abundaní gracia eficaz y peri sito, según ha mea robados, y te desea I •coatcmc^tíüs. RUIJÍTEGRP D E BIENES NACIONALES. También son acreedores los compradores d e hid— ttCs nacionales-al patronato del látigo jorbbicura. D M pojados de las fincas,que c d n t o d o s los requisitos-r formalidades legales les había vendido el estado, por; el. gobierno absoluto realista , restablecido e n iS¿3i perdidas las mejoras q u e de buena fe y Con ventajas t a n conocidas hicierou e n sus precios: forjados los, propietarios, q u e los cultivaron, á p a g a r á l.-is.comu—. nidades d e los conventos restablecidos por providencia d e la 'justicia dk entonces el'arriendo q u e tasaron los peritos: tratados los compradores en todo aquel infausto pci^iodo como desafectos á la catisa del alt.-ir y del t r o n o : luego q u e la inmortal CiitsTtNAproclairló el imperio de las leyes y la reparación de las injusticias, se concibieron esperanzas seguras del próximo reintegro de estos bienes y de lá indemnización de. los perjuicio» q u e habia causado su despojo. LOÍS pro-, curadores á cortes, los periódicos, la opinión piíblica, el voto nacional, todos reclamaron este grande y l y gente acto de justicia, diferido por u n a política m e drosa Y mezquina, hasta que cu la agonta del m i n i s terio Toreijo se trató de satisfacer esta necesidad con el real decreto de 3 de setiembre último. Dictado en medio del aturdimiento y sobresalto que tenia embargado en aquellos dias al ministerio, se declaró solamente la validación de las v'entasde los bienes llamados nacionales y se mandó que se devolviesen desde luego á sus compradores, sin hacer prevención alguna sobre el modo coii q u e debia hacerse la entrega. ..Señor editor dt Muy señor mío periódicos la Le^i brigadier don José desvanecer tal false que-dicho mi espo: (1) Aunque disuclta la actual rcíacc'ion del JoaoBADO y pcncllcnle de arreglos la que dclic eonlinilar en lo a u c o i v o , el Editor piií-dc y drlte amifieíar desde ahora que atisolutámcntc indcpeiidicnté Cftta díftolueiotí de causas pnlitlcas, ni^ variará de iiTÍncí-. píoS'el iioriódico, ni.dejará de cnmpUr lo oCriiCtJo en ftu prospcclo Anterior al primer núnirro; dejando al juicio del púUUca Ua^me)uraa que BU propone hacer en la redacción. ;S_ '•HC^-Í/; EL m -•3!V. Quedó pues á la arbitrariedad y capricho de los e m pleados de la amortización, q u é con moíivo de la cspulsion casi general' de los Irailcs dé sus convciitoSj se apoderaron de sus bienes y fueron tauíbicn los colectores y administradores de los enajenados. Pero al devolverlos á sus legítimos dueños, aunque los e n cargados de la amortización eran meros depositarios, como no habian recibido instrucciones, creyeron nxus seguro y ventajoso pai'a ellos y para la real caja, apropiarse los frutos-pendientes,' por el dcvecUo//r¿mt-ca/jiéritis,'c^ue llaman de caza y pesca, pi:rsuadidos.al parecer por el significado de la amortizaciou, que esta es una especie de esponja q u e por su virtud absor— vente debe' chupar todos los jugoí. á que alcance su j'>otencia .atractiva. Con esta siniestra interpretación,' contraria á la legitimidad del derecho de pleno dominio, reconocido *y declarado pox' t;l ' gdbierno en el real decreto de 3 de setiembre, se llá'hiutilado | a devolución, menoscabado é r reintegro é invadido el dom i n i o , defraudando de u n a parte de sU propiedad, á los dueíios, desmembrando lo accesorio de lo princí— de que procede y Á que se hulla adherido por la }]al e y , y remedando en .cierto modo la operación cspoliatriit q u e hizo el gobierno absoluto con los c o m p r a dores bae cultivaron estos bienesen iSaS. jN'i las profecias dé J u a n , ni sus promesas y celo sublimado por el crédito del crédito, (esta cacolbnia es necesaria^ ni los clamores y súplicas,de esta clase .numerosa y l a s timada , todo ba. sido ineficaz en este punto. Avivó mis esperanzas u n escelentc escrito, ^remitido desde Londres^ inserto en el número 7a del Noticioso del Pueblo, periódico de Cádiz; mas hasta hoy nada se ha,,beclio. Yo compré una finca' de .viñas y olivares: la mejoré y cultivaba por mi en SaSi No tan solo m e la arrancó el prelado del convento, sino que me sacó por el medio irresistible de la autoridad judicial el arriendo cbiiío si hubiera sido antes él el propicta'rio y yo el colono. Cuando se espidió el real decreto de 3 de setiembre, cultivaba el prelado la misma finca, y al entregármela , la. amortización retuvo el fruto de a b a como si fuera de su pertenencia. He redomado esta usurpación, este despojo, y aunque hace mas de cuatro meses que presente una instancia documentada, contestan que hay consulta pendiente para decidir esta cuestión. Pregunfo: ¿es discutible si debe ó no retenerse lo ageno reconocido su dueño? Pregunto también: ¿le parece á vd. señor don'Nicolasito ó Co— lasito,^si el ministerio del señor Isturiz que ha entrado en"' el ordca legal, se ocupará de reparar esta injusticia.' Y pregunto por último: ¿crujirá vd. su látigo en favor de los jorobados com()radorcs de b i e nes nacionales? Si asi lo hicieres Dios te ayude y concedo con abundante muchedumbre de suscritores, la g^racia eficaz y perseverancia final en tu santo propósito, según faa menester ]fl. familia inmensa de los j o robados, y te desea tu devoto=i^/ doliente logatina. W- m JOROBADO. /¿lora 5 de Julios . .Señor editor del JOROBADO. Muy señor mió: en los números 3o y 793 de los periódicos la /jeyy el Eco se dice que mi ciípóso, el brigadier don José Gavarre, se halla en Oran y jiara desvanecer tal falsedad mejcs preciso mauifestar ú.vd. que- dicho mi esposo hace mas de'tres años que su sa- lud lúa es í)íen fatal, que para recuperarla, y por dletahien de los facultativos, se estableció cii una liacieiidu donde ha pennuiiecido mas de dos años, pero agravándose sus padecimientos,, se vio prec¡.-5it(Jo á trasladarse á este pueblo (donde existe) para los mas prontos auxilios de médico y botica que no era dable tener con ujiortunidad eii- el campo^ y por último, que en el día se halla m u y empeorada su salud y de bastante peligro; todo lo q u e ruego á vi), señor editor se sirva espresarlo én su apreciable jieriódico á lo q u e le-quedará reconocida sir atenta servidora Q. &: M. iJ.s=!/eréja Peres del Pulgar de Caiarrc. Querido joroba : cuando vivín tni padre (D. L.H. P. me refería algunos ejemplos, hisioriasj y cuentos cu las dilatadas noches del invierno. Me acuerdo entreotros del siguiente que viene como de molde á mi asuntíllo.^ Tres estranjcros vinieron á Ecpaíiá cblí obgcto de aprentler nuestro idionió. Uno se acomodó en casa de u n abogado, otro en la de ü n comerciante, y el ultimo s& puso á herrero. Después de algunbs Ineses se reunieron en cierto paraje, y cada cual manifestó lo q u e había aprendido. El h e r r e r o : yo sé decir..... aqut toas tres, t¡oto d tristos. El pasante:yo... por la razón. £1 comerciante; yo... por el dinero. Con tales adelantos juzgaron que ya pudián regresar á su a m a da [jatría. En efecto salieron de la corte el dia y hora establecidos, rompiendo su marcha á paso redoblado; Pero ¡oh desgracia! no habian andado media legua cuando tropezaron con u n cadáver puesto d la orilla :dcl camino. Llega d este tiempo lo justicia, y el a l calde les pregunta ¿Quien ha matado á este hombre I* yíqtd toas tres iioto d tristos:, respondió muy ufano el herrcrOf—¿Y por q u é le han matado? Por la razón.. dijo el pasante. Y el comerciante... /70r el dinero. Apliquemos ahora lo thaterial del cuentecillo. Tres oficiales ( n o de ejército) somos en esta Villa. Oíros tres h a y , pero estos forman rancho aparte como se verá después. ¿ Querrás creer, querido jorobeta que andamos pordioseando toós tres voto á tristes'' pora sustentar nuestras farailins, por tarazón de re—» tardarnos la paga, y por el dinero de que no quie— i-en desprenderse los que tienen obligación ó ello? Cobra el albcitnr, cobra el herrero ^ y el carretero cobra. Cobran lodos tres ¿y nosotros tres voto d tristos"} Malamente. Y por qué causa? Porque el albeilar c u r o , el herrero agtuca y eji .carretero entabla. Lindanienle!.¿Pues no cura también el cirujano? El maestro escuela ¿no aguza, adelgaza j ' sutiliza su entendimiento y^cl de los niños cu las continuas y penosas dificultades de la enseñanza? No entabla ó forma el escribano, útiles y necesarios espedientes á fin de maiiteticr el ordcn> y castigar á los revoltosos que letras— tornan ? ¡ Ay corcoba de mi vida! Al modo que trata— mps de cuidar, y regalar (vaya un trociio de misión) este vilísimo cuerpo, desatendiendo tal veza nuestra noble alma,"asi la mayor parte de los pueblos a p r e cian sus caballcrias é instrumentos de labranza mas que la salubridad y enseñanza de sus hijos, 3' aun mas que la'paz y tranquilidad en sus locales. -Esta es lo causa .porque prefieren el. albeitar al cirujano, el h c r r'ci*o al maestro de escuela, y el carretero al escribano de la villa. i •I •:i EL Aludió me bu clelenlclu, ainado Joroba. Disimula "^ ten la buiíilud Ju inscrtai* en tu liiudú .periódico es— ^ s justas quejas, por la razoii que nos asislCiy -por el ditwro que recluiiiumos uliura y siempre que -liaya detenciüu en la |)u^a. 3^oós tres iioto á trUtos. MOSAICO. :»«iKn atención á la poca scgu'rjilatl i3c que goKitn loa trantcuntct por Ia> callt!» de cata capít«t,.sc lia JlActirrlUo citubleccr cariivanat para camÍRar por ellas «tipi*clalnicnie «le nocliiU. Kstiía caravanas nunca bajarán del número do cuarenta pi>rsona5, llevarán á vanguardia di(« liombrct montados y armndos, y pn el centro unos cuantos gríudurc» entonando ul híuino de Ku-^o, y clamando de -rato en rato: uniucra ul ntiiiístcrío, ica til que fuere*» .'Con Citas jirccaucioncft se espera que -no serán molestados en su camino* ^—£1 flcTíor M> H* nos dice en el número 5o de la T.fx^ entre .muchas cosas bucnaa i*que los pueblos de que se compone la cno* narquia -ctpa'noU.t ban vivido /ror espacio de tres siglos bajó tm gobierno cuya ostra^-agantc forma -no bailaba dilinicion alguna •ca el dereclio público de las jiaciuncs civilizadas,-y que presentaba 4 la península-cumo u n anacruniumo en d mapa político de la •£uropa«M Ko «c puede leer esto sín indignación : V u l t a i r e , des* pues ddialtcr discurrido sobre las atrocidades cometidas en X^ran•eia, Inglaterra , Alemania , ttalia y -detnna naciones civilizadas t n el siglo ^ T I I , uno de csns'trcs-y se csplica en estos términos acerca de lá E^paiía.» Decíase entonces que la arrogancia , )a dcArocion f la galantería, la ociosidad Turrnaban >cl carácter d é l a inacion.; mas tampoco hubo en ellaTiinguna de aquellas'revoluciones sángtiinarias, aquellas conspiraciones, aquellos castigos crueles que se vieron en l a s otras corles de tE^uropa**.*. £ n iin , sin los horrores de la inquisición , nada tondrlamós que reprochar entonces á la Kspaua*» Auiíqut: nos«s-poco devoto, la presenta •comparativamente como un honroso anacronismo en cí mapa político de la Europa. £audent te alienu — E n t r e los hechos gloriosos <lel ministerio McNDlZABAt, comparado c o n el de sus antecesores, cuenta el scltor don Aniceto de Alvaro (^Es^aítol de aa de junio) la Cuerea moral de <loa Carlos y del gobierno d é l a R E I N A en setiembre y ahora ; los auxilios prestados por nuestros aliados y I.A Q.t3iETUD OBSERVADA Ett 1.AS PROVIMCIAS V EX XA < : A P I T A L DE LA MONARQUÍA- i JOROBADO, La ' conversión de la mtlicta urhaná ^juc recibió , en guardia nacio^ nal que presenta, y la extinción tle regulares con aplicación de sus bienes al crédito público , son otrosí una prueba d e s ú s constantes afanes empleados para terminar la guerra civil , mejorar el-crédito y bien estar de la nación y afianzar el trono de la ÜCtNA» Mucho cstraitamos que el sctTor don Alvaro hiciese en tal ocasión el elogio de la fuerza dcl-.:£obierno de la B E I N A y de la quietud de las provincias y de la c a p i u l de la monarquía. •^Rasgo de humanidad en el acítor don Aniceto. ( Español del o a de junio). Se lamenta de la falta de paga que cspcrimcntan hace cuatro meses los empleados , cesantes , viudas y rctiradps, ^ue todos perecen. E n a t de m a y o , según el Español, había v o U d o que se retírase al gobierno la facultad de exigir las c o n tribuciones y de confeccionar ningún otro medio Jinancierú' t(msl haya vuestra jerigonza amen), con que pfeciaaiiacntc hablan 4 e cubrirse aquellas obligaciones. .—Dicen las fábulas que el crocodilo se pone á llorar sobre loa cadáveres que dc\'orá* —Seíior J O R O B A D O : hahiendo toldo de. si ic había vd. hecho ministerial d n o : para que siquo de escrúpulos á algur^aa perso-> nás, le suplico encarecidamente so «írva injertar cata decima en respueau. . • / Que tanto «rugido ha. dado^ Con ninguno se ha casado !Ki casarse puede é l ; * Declarado por el fiel Y mas sabio protector Del purbló, en su favQr Tan soto se ocuptrÁy Y c r i i l c o pugnará A aquel que ullra^gOtú-üoTidr. lEfpera de vd. fo inserte, previo el cónociniíeiito ^c 1« parictf1lii en-su aprccíable periódico, el hijo de su auscrítór Cents* CXIAUADAS. 'Con la primera y scgtinda Y a t a primera y la cnárta estupefacto me a d m i r o , cesaron en su cícrcício, llego á comparar f,[M'eguhtoÍ ai miramos tos conventoa también amcnáso y. riito.. cerrados y aoprimidoflK.-Dií la primera y tercera Muchos vieron cn.cl afeía usaron bien los antt£Uos el t o d o , yo n o le'he-visto, para raedír, no en las lon)aS| ns le he do ver, puea~ya CttCtfto -ni en los despachos del vino. nueve lustros y tres qnrittoK Tina operación indica Mi cuarta'Con tnl primer» Mi primera y mi sc{»iinda, 'En guisado niuiíbo ipuata-, Que sin ella no es posible Y aun fiambre, si en cf'campo Calificar •cierta frutav •Se quiere comer con'bulla. Mi flrgunda con mí -cuarta Mi irríiucra *con mí cíis^ta E n ciertos meses asusta', E n las'viílaa se acostumthra Y su cSecto es espantoso Hacer para que au frdto S i se esparce por su altura* Con más ventajas 'prodmca. E s terrible cñ los cbmbatca Y mi todo « n la alta' Marftdui Mi cuarta «on mi segunda., Está isituadoisin duda» Y a u n « l mas bravo y valiente Ditndo -nombre á cierta orden 'Le moñifica y apura.-Que de arntí^ñcdad diaXnrta* •Soluccion de la charada del númiró -La flor linda y herniosa^ •que con belleza engalana, un jardín 'pot' la Tnaiiana sin duda que ea la ^osa : flor .oficio tiene la Ut* estrechar y sostener, siendo el nombre de la tnngéf tní querida Jlosáit'a* «i& B e s u m c n analítico del sistema del doclnr tGall sobre las racuUncIc» del hombre y funciones d e l c e r e b r o , vulgarmente llamado Craneoscopia, tradncido y recopilado por u o a s o c i e dad d e natui'aliatus y literatos d e esta corte. t a general aceptación y rápido despacho tjuc la presente obra ha tenido en los países mas cnitos de Europa, <cs s u mejor recomendación» El doctor Gall prueba basta la evidencia qno todos nuestros instintos y t a l e n t o s , tienen u n s i t i o d e t e n n i u a d o en el c e r e b r o , y q u e desarrollándose separadamente, producen en la superficie del c r á n e o , diferentes bultos visibles y palpab l e s , por m e d i o d e j o s cuales se p u e d e n descubrir todas las f a cultades análogas i coda individuo^ Esta obra se baila cu la librería cstroogera, callo de. loa Jardines , n." 17. Imprenta de D. F. Pascual, calle de-Jardines. NÚM. Sábaürú 3 0 de.Jtt i 1i OB I85C. Éi '* EN MADIUD. UB^MCB . . . . . . Tres mcfles . . . . . i a • B 9 £ ^ is •£ W nii' í 12Í • mí^-mmi. i El J O R O B A D O papel * Se suicribo co la r riuu , calle de C^ T A S , núin 3 0 ' . v ^ líbrcna de ta víiiJ Cruc , calle ftlaror. aiHMMH |)anorai JBiaUtantes de ti q u e vuestro coman Clon provincial, tic eneini(;os del Tron 'por Qirilez y otros terrilorío'dé esta le niros, que la autor Civil y P o p u l a r , b ' mas enérgicas ^ acti cion de los malévolc ridad d e esta capita Eii este siipueat d e vosotros los que ( sostener en e^ta pro cional. Descansad v( toridadcs velan «n i seguridad. Alicante ral , Gregorio PiqUi aidente de la d¡]iiita —^E«criben d e Sc( Hemos tenido.de u n m o m e n t o ; ya csti puesto esto ayuntain < dcfenderac, vínier guardia reolj y otroa lian reunido algunos veda y Cuellar. —Del B i d a s o a , coi Las circunstancia están en Má<lrid,- con c o n frialdad' estas nu( t i e n e n ; ^ u e s si nsi no tomarían'. Entrctcnídc deshonrarse, deinn t vent.ijas positivos, yac d o todos los esfuerzos tria dcbiuii consagrara del país, adoptando c de deslrnir k los encn —Cuando l í f,iccioi descubierta coinpucsUi