Un verano en el Servicio Militar

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LATERCERA Domingo 28 de febrero de 2016
Nacional
El calor junto a un fusil y un traje de
campaña. Desde el 4 de enero y hasta el
11 de marzo, 90 jóvenes efectúan el
curso de verano que el Ejército ofrece
como alternativa de conscripción.
Por Benjamín Turner.
Un verano en el
Servicio Militar
V
ACACIONES. Palabra que gran
parte de los jóvenes chilenos asimila a una postal
de contemplativo
descanso, cuyo
escenario se sitúa en playas o lugares ajenos al estrés del año. Trajes de baño, agua de mar y piscinas, y combate al calor. Pero no es
el caso del Regimiento Maipo ni
del grupo de jóvenes que allí decidió cambiar los piqueros por un
fusil y un traje de campaña, y homologar el verano a otro concepto radicalmente distinto: el Servicio Militar.
El campo militar Eleuterio Ramírez, en Laguna Verde, Región
de Valparaíso, es el lugar que el
Ejército destinó para efectuar la
preparación estival. Se trata del
Regimiento Maipo Nº2, hasta don-
de llegaron los 90 jóvenes que actualmente están ocupando la opción de casi dos meses que la institución uniformada ofrece para
cumplir con esta instancia. De
ellos, uno está en el liceo, en tercer
año medio; 17 en cuarto medio y 58
con matrícula en estudios superiores. El resto se encuentra evaluando su futuro vocacional.
“Terminé el año pasado el colegio y salí llamado por sorteo. En el
cantón de reclutamiento nos habían hablado de esta posibilidad,
para quienes estudian o trabajan,
y decidí inscribirme, porque durante el año viajaré fuera del país
y no quería dejar de cumplir con
mi deber ciudadano”, dice Hernán
Olguín (20), oriundo de Isla de
Maipo, Santiago.
Reconoce que fue difícil decirle
adiós a sus cercanos. “En mis vacaciones, antes de ingresar al servi-
RR Un grupo de conscriptos efectuando un ejercicio militar, el pasado miércoles. MINISTERIO DE DEFENSA.
Uno de los conscriptos
está en tercero medio, 17
en cuarto medio y 58 en
estudios superiores.
cio, compartí mucho con mis amigos y los echo de menos. La verdad
es que el primer mes fue bastante
fuerte sentir la lejanía del hogar,
pero aquí el grupo te ayuda mucho”, relata emocionado.
Los jóvenes efectúan este curso
entre el 4 enero y el 11 de marzo, y
su validez es completamente igual
a la del Servicio Militar ordinario.
Bruno Villaseca (18), de Villa
Alemana, cuenta que “egresé de
cuarto medio el 2015 y me matriculé en la Universidad de Valparaíso, en ingeniería comercial”.
Añade que “estoy muy agradecido de esta experiencia pero, por
ahora, no he pensado en continuar con la vida militar”.
Valoró la rutina y lo aprendido en
estos meses, y reconoció que “el
cambio fue bastante abrupto y se
nota; pasar de la vida civil a la vida
militar es complicado. Uno aprende que es una actividad valiosa y
muy exigente”.
Facilidades a jóvenes
El coronel Angelo Hernández, encargado del Regimiento Nº 2 Maipo, explica que “este curso de instrucción está orientado fundamentalmente a satisfacer una
necesidad como institución y nación. Debemos darles las facilidades a los jóvenes que realizan sus
estudios, o que tienen algún tipo
de proyección en el año, para que
puedan hacer el Servicio Militar
durante el verano”.
Respecto del contingente de este
verano 2016, el oficial se mostró satisfecho con lo logrado: “Como comandante, me pone muy feliz que
estos jóvenes tuvieran el entusiasmo y la intención de cumplir con
la ley. A nuestro juicio, lo han hecho de muy buena forma a lo largo de los meses”.
Según cifras de la institución castrense, normalmente entre el 20%
y 25% de los jóvenes decide quedarse en el Ejército.
Este último miércoles, la subsecretaria de FF.AA., Paulina Vodanovic, presenció algunos ejercicios
militares de los reclutas. “Vimos
un ejemplo de profesionalismo y de
entrega al servicio del país que, viniendo de gente joven, es aún más
relevante”. Agregó que “dentro de
las capacidades que ellos adquirieron destacan el aprender a trabajar
en equipo y lo relacionado con el
uso de las armas”.b
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