La figura de la mujer en el siglo XVII Los roles de género estaban

La figura de la mujer en el siglo XVII
Los roles de género estaban estrictamente establecidos durante el siglo XVII.
La mujer estaba destinada a dedicarse a las labores del hogar, al cuidado de los hijos, se les
denegaba cualquier tipo de derecho, de hecho, pertenecían a un hombre, eran tratadas como
objetos. En el momento en que la mujer deseaba independizarse, deshacerse de las ataduras
de las actividades estipuladas por una sociedad enteramente sexista, eran consideradas unas
libertinas.
En esta sección veremos como muchas mujeres a lo largo de los siglos han luchado por sus
derechos hasta llegar al siglo XXI.
Una mujer en un mundo de hombres
Artemisia Gentileschi
Artemisia nace en 1953 en Roma bajo el seno de una familia de artistas, su padre, Orazio
Gentileschi, fue un pintor con una clara influencia de Caravaggio y de Juan Bautista Maíno,
artistas que dejarán una profunda huella en la obra de la italiana.
Podemos afirmar que Artemisia es una de las artistas más famosas del siglo XVII, consiguiendo,
a pesar de todos los obstáculos que tuvo que atravesar a lo largo de su vida, el reconocimiento
de sus contemporáneos.
Su obra se caracterizaba por expresar con claridad un estilo personal, en el que no faltaba el
dramatismo propio de la artista, combinado con el naturalismo y dinamismo de sus
composiciones.
En cuanto a su producción, muchas de sus obras, desperdigadas por distintas iglesias, como la
Catedral de Pozzuoli, o en posesión de reyes como Carlos I de Inglaterra, se perdieron por el
devenir de diversos sucesos, tales como incendios, guerras o “desapariciones”, dificultando
aún todavía más el estudio de su legado.
Su vida cambiaría en el momento en que decidió dedicarse a la pintura, mundo reservado a
los hombres y en el que pocas mujeres llegarían a franquear sus puertas. Su comienzo no fue
fácil, ya que la desgracia caería sobre ella al encomendarse a las órdenes del taller de Agostino
Tassi, artista que según se sabe por algunos documentos, llegaría a violar a Artemisia. Este
suceso le daría muy mala reputación, llegando a ser considerada una libertina.
No solo en vida, sino que a su muerte siguieron los males, produciéndose la destrucción de
muchos documentos relacionados con la artista, provocando que muchas de sus obras se
perdieran creando cierta incertidumbre en torno a la atribución de algunas de sus obras
pictóricas e incluso el poder definir su estilo.
En cierto modo, estos acontecimientos pueden ayudarnos a comprender su obra, a entender
que eligiera la pintura como su medio de expresión.
Artemisia y las pintoras contemporáneas
Para una mujer a comienzos del siglo XVII, ser pintora como Artemisia era una elección inusual
y difícil, pero no excepcional. Antes de Artemisia, a finales del XVI y comienzos del XVII, otras
pintoras tuvieron carreras exitosas. Ejemplo de ello son:
Sofonisba Anguissola (Cremona, hacia 1532 - Palermo, 1625), pintora italiana, la primera
mujer pintora de éxito del Renacimiento que llegaría a España para retratar al Duque de Alba.
Consiguiendo convertirse en pintora de la corte en Madrid.
Lavinia Fontana (Bolonia, 1552 - Roma 1614) pintora italiana del primer barroco. Hija de uno
de los líderes de la escuela de Bolonia de la época, que le enseñaría el oficio.
Fede Galizia (Milán, 1578 - 1630) pintora italiana del barroco, pionera del género del bodegón.
Otras pintoras comenzaron su carrera mientras Artemisia aún vivía. Juzgadas por sus méritos
artísticos. Aun así, la Gentileschi seguirá siendo una de las artistas femeninas mejor consideras
y, sobre todo en el barroco.
De esta consideración puede que provenga la afirmación de Longhi1 de que Artemisia fue "la
única mujer en Italia que supo algo sobre pintura"2.
Artemisia dedicó una parte de su obra a aquellas mujeres heroínas de la historia en momentos
que habían pasado desapercibidas o en los que no se les quiso dar demasiada importancia.
Por un lado están las tres heroínas bíblicas, Judith, Ester y Yael, y por otro las clásicas, Lucrecia
y Cleopatra.
Vale la pena contemplar la energía de las mujeres que retrata que con su belleza transmiten el
poder de una mujer luchadora.
1
2
Historiador del arte italiano (Alba, Italia, 28 de diciembre de 1890 - Florencia, 3 de junio de 1970)
LONGHI, Roberto. Gentileschi. Padre e figlia, L´Arte XIX, 1916. Florencia 1961.