Octubre 26 de 2010 HELM ECONÓMICO Helm Económico Editoriales Camila Estrada Echeverri camila.estrada@grupohelm.com Gustavo Adolfo Sorzano gustavo.sorzano@grupohelm.com Marisol Torres Rodríguez marisol.torres@grupohelm.com Consecuencias de las políticas de la FED: deflación o inflación? Cuál es el verdadero riesgo Por: Marisol Torres Rodríguez T: 5818181 E: 4990 / 5094 / 5209 Tras la decisión ya descontada de mayores estímulos a la economía por parte de la FED, los comentarios de los expertos y hacedores de política ahora se centran en las consecuencias que podrían traer a futuro dichas medidas. La más comentada últimamente ha sido el riesgo de deflación que puede estar enfrentando la economía estadounidense, teniendo en cuenta que, pese a los constantes “empujones” de la Reserva Federal, la inflación continúa estando en niveles sumamente bajos y la actividad económica nada que se recupera, por lo que incluso se argumenta que la primera economía del mundo pudo haber caído en una “trampa de liquidez”. Analizando el comportamiento de la inflación en lo álgido de la crisis financiera que estalló a finales de 2007, se observa que tras registrarse niveles año a año de 5,60% en julio de 2008 (nivel más alto de ese año y no visto desde 1991), la inflación alcanzó una cifra negativa de -2,10% en julio de 2009, nivel que no se observaba desde noviembre de 1949. Pese a que luego se retornó a niveles de inflación positiva hasta 2,70% en diciembre de 2009, éste año la tendencia en el alza en los precios nuevamente ha sido a la baja. De acuerdo al último dato publicado por el Departamento de Trabajo, la variación mensual en el IPC del mes de septiembre fue de 0,10% y el cambio anual apenas alcanzó 1,10%. Cabe recordar que la meta del Emisor para finalizar el año es de 2,00%. Ahora bien, los bajos niveles de inflación han venido acompañados de una tasa de desempleo que continúa en niveles históricamente altos. Durante el mes de octubre la tasa de desocupación se ubicó en 9,60%, comparado con el desempleo alcanzado durante el mismo mes del año anterior de 10,10%, siendo éste el nivel más elevado desde diciembre de 1982 cuando se registró una cifra de desocupación de 10,80%. Sumado a lo anterior, el crecimiento del PIB, aunque en terreno positivo continúa siendo decepcionante. De acuerdo al último reporte del Bureau of Economic Analysis, el Producto Interno Bruto correspondiente al tercer trimestre de 2010 creció 2,00% (cifra preliminar), frente al crecimiento reportado durante el segundo trimestre de 1,70% y de 3,70% en el primer trimestre. De hecho, el Fondo Monetario Internacional pronostica que la economía estadounidense se expandirá 2,60% éste año y 2,30% el próximo, proyecciones que contrastan con lo estimado por la FED de 3,25% para 2010 y 3,85% para 2011. Sin embargo, debido al comportamiento reciente de algunos indicadores líderes se espera que los hacedores de política de la Reserva Federal recorten sus estimaciones mañana durante su reunión de política monetaria. Por tales razones, el objetivo de la Reserva Federal ahora es lograr un poco más de inflación con el fin de lograr mayores salarios, reducir el costo del crédito en términos reales y en general impulsar la economía. La idea es “reacomodar” las expectativas de inflación de los hogares y las empresas y así desestimular el ahorro. Si los hogares esperan que en el futuro los precios continúen bajos, preferirán consumir después aplazando su gasto. www.grupohelm.com CONDICIONES DE USO El material contenido en esta comunicación es para propósitos de información únicamente. El contenido ha sido obtenido de fuentes de información públicas y consideradas creíbles. Sin perjuicio de lo anterior, Helm Bank no representa ni garantiza la exactitud de la misma, ni se compromete a actualizarla en caso de eventos futuros. La operativa de mercados financieros puede conllevar riesgos considerables y requiere una vigilancia constante de las posiciones que se adquieren y del entorno del mercado. Esta publicación no constituye ni puede ser interpretada como una recomendación o asesoría para tomar alguna decisión o acción de parte de los clientes o como una oferta por parte de Helm Bank o alguna de las empresas del Grupo Financiero y sólo representa una interpretación realizada por quienes aquí escriben. En consecuencia, el uso de la información aquí suministrada es de responsabilidad exclusiva del usuario sin que Helm Bank o alguna de las empresas del Grupo Financiero asuma responsabilidad alguna, en particular, por los resultados de la eventual aplicación de operativas, prácticas o procedimientos aquí descritos. Los informes, análisis y opiniones contenidas en el presente documento no pueden reproducirse sin la autorización expresa y por escrito de sus autores. En economía éste comportamiento fue estudiado por Robert Lucas, quien bajo su teoría de “expectativas racionales” desarrollada durante los años setentas, señala que los agentes prevén el comportamiento futuro de los datos económicos teniendo en cuenta la información disponible, incluida las políticas económicas y sus efectos. Así las cosas, un posible panorama deflacionario trasnocha a los funcionarios de la FED. Algunos banqueros de la Reserva Federal han manifestado en repetidas ocasiones que no se sienten cómodos con los bajos niveles de inflación. Uno de ellos es William Dudley, presidente de la Fed de Nueva York y vicepresidente del Comité Federal de Mercado Abierto, quien ha señalado que los actuales niveles de inflación junto con una tasa de desempleo del orden de 9,60% son "inaceptables", por lo que es necesaria la implementación de mayores medidas por parte del Emisor. En ese sentido, Eric Rosengren, presidente del Banco de la Reserva Federal de Boston, asegura que una vez que se llega a la deflación, ésta puede ser muy dañina y difícil de superar. "Asegurarse contra el riesgo de deflación puede ser mucho más barato que esperar hasta que ocurra y luego tratar de encararla", afirmó Rosengren durante la conferencia anual organizada por la FED de Boston. Y es que si afrontar altos niveles de inflación es riesgoso, enfrentarse a panoramas deflacionarios sería algo como estar “en el peor de los mundos”. Cuando los precios son demasiado bajos, no sólo se desestimula el consumo por lo que ya explicamos anteriormente, también caen los salarios, lo cual afecta directamente a las personas con altos niveles de endeudamiento y reduce el poder de compra de los hogares. Este círculo vicioso se traslada a las empresas, cuyos beneficios se reducen, renunciando a invertir y a contratar, alimentando nuevamente el espiral. Para algunos economistas, la deflación se constituye como una de las mayores amenazas para los Gobiernos, puesto que es un fenómeno bastante difícil de combatir y además como ya señalamos tiene consecuencias desastrosas para los consumidores y empresas endeudadas, ya que su capacidad de pago cae, mientras que el importe de la deuda permanece inalterado. Ante esta situación, el sistema financiero se enfrenta a créditos irrecuperables, con un alto riesgo de colapsar. ¿Y la trampa de liquidez? Teóricamente, una economía se encuentra en una situación de trampa de liquidez “cuando los incentivos que tienen los agentes económicos (incluso con tasas de interés de 0,00%) hacen que el ahorro se situé sistemáticamente por encima de la inversión, bloqueando el crecimiento” (Espina, 2004). Además, la trampa de liquidez considera que si al bajarse demasiado los tipos de interés continúa existiendo exceso de ahorro, la política monetaria convencional deja de ser eficaz para estimular el crecimiento de manera directa. Tal enfoque fue formulado por Hicks en 1937 y estudiado recientemente por el destacado economista y premio Nobel, Paul Krugman (2000). Esta situación es justamente lo que está sucediendo en los Estados Unidos, donde las tasas de interés cercanas a 0,00% en vez de desincentivar el ahorro y estimular la inversión, han logrado totalmente lo contrario. www.grupohelm.com CONDICIONES DE USO El material contenido en esta comunicación es para propósitos de información únicamente. El contenido ha sido obtenido de fuentes de información públicas y consideradas creíbles. Sin perjuicio de lo anterior, Helm Bank no representa ni garantiza la exactitud de la misma, ni se compromete a actualizarla en caso de eventos futuros. La operativa de mercados financieros puede conllevar riesgos considerables y requiere una vigilancia constante de las posiciones que se adquieren y del entorno del mercado. Esta publicación no constituye ni puede ser interpretada como una recomendación o asesoría para tomar alguna decisión o acción de parte de los clientes o como una oferta por parte de Helm Bank o alguna de las empresas del Grupo Financiero y sólo representa una interpretación realizada por quienes aquí escriben. En consecuencia, el uso de la información aquí suministrada es de responsabilidad exclusiva del usuario sin que Helm Bank o alguna de las empresas del Grupo Financiero asuma responsabilidad alguna, en particular, por los resultados de la eventual aplicación de operativas, prácticas o procedimientos aquí descritos. Los informes, análisis y opiniones contenidas en el presente documento no pueden reproducirse sin la autorización expresa y por escrito de sus autores. La tasa de ahorro personal como porcentaje del ingreso disponible correspondiente al mes de agosto se situó en 5,80%, 4,10% por encima de niveles pre crisis, cuando por ejemplo en agosto de 2008 se ubicaba en 1,70%. De hecho, ya desde el 2008 Krugman ha venido destacando cómo Estados Unidos estaba cayendo en una trampa de liquidez, dado que a pesar que en ese año la FED empezó a reducir la tasa de interés de intervención por debajo de 0,50%, los mercados de crédito continuaban estancados, tanto por los excesos de liquidez de los últimos años como por la baja rentabilidad de las inversiones. Diversos analistas comparan la situación estadounidense actual con lo que presentaba Japón en los años 90, cuando luego de estallar la burbuja especulativa que se formó a en la década de los 80´s, la industria se dio cuenta de que su capacidad de producción, tenencia de efectivo y su endeudamiento eran demasiado altos; por tal razón, empezaron a dejar de invertir y los precios y los salarios empezaron a caer. A comienzos de la década de los noventa, Japón contaba con una inflación cercana al 3,00%, sin embargo tras la burbuja la variación en el IPC alcanzó a ubicarse en -0,30% durante 1995, manteniendo niveles similares durante los últimos años, tanto, que al 31 de agosto de 2010 se registra una inflación negativa de -0,90%. Desde la década pasada, la deflación ha sido para los diferentes Gobiernos japoneses el principal reto de política económica. Los economistas aseguran que cuando la política monetaria deja de ser efectiva, como en el caso de la trampa de liquidez, es la “receta” keynesiana de gasto público la que puede estimular la economía. Sin embargo, ni el fuerte gasto del Gobierno japonés, ni las grandes cantidades de liquidez inyectada al sistema económico, ni la reducción de la tasa de interés de referencia a niveles bajos, han servido para que ello ocurra. Por el contrario sumado al debilitamiento de la economía, se han alcanzado niveles de deuda pública cercanos al 104,00% como proporción del PIB. La pregunta es entonces, ¿servirán las políticas adoptadas por parte de la FED para lograr un poco más de inflación y “reavivar” el consumo?, ó por el contrario, ¿los estímulos del Emisor fallarán al punto de presentarse panoramas tan desoladores como los de Japón? Como una alternativa adicional para evitar que la economía se enfrente a un fenómeno deflacionario, el Presidente del Banco de la Reserva Federal de Chicago, Charles Evans (quien considera que Estados Unidos será “presa” de una trampa de liquidez), propuso en días pasados que se debería analizar por parte del Emisor la posibilidad de valerse de una fijación temporal de precios, lo que eventualmente sacaría a la economía de la trampa de liquidez convenciendo a empresas y hogares a no aplazar su inversión y gasto. Puntualmente Evans señaló que “se presentan circunstancias especiales, toda vez que la fijación de precios sería un complemento de utilidad para nuestra estrategia actual y futura”. La otra cara de la moneda Ahora bien, la preocupación de algunos analistas y hacedores de política gira en torno a que la “avalancha” de liquidez, producto de las inyecciones desmedidas de dinero en la economía que se espera continúe realizando el Emisor, genere niveles indeseables de inflación. www.grupohelm.com CONDICIONES DE USO El material contenido en esta comunicación es para propósitos de información únicamente. El contenido ha sido obtenido de fuentes de información públicas y consideradas creíbles. Sin perjuicio de lo anterior, Helm Bank no representa ni garantiza la exactitud de la misma, ni se compromete a actualizarla en caso de eventos futuros. La operativa de mercados financieros puede conllevar riesgos considerables y requiere una vigilancia constante de las posiciones que se adquieren y del entorno del mercado. Esta publicación no constituye ni puede ser interpretada como una recomendación o asesoría para tomar alguna decisión o acción de parte de los clientes o como una oferta por parte de Helm Bank o alguna de las empresas del Grupo Financiero y sólo representa una interpretación realizada por quienes aquí escriben. En consecuencia, el uso de la información aquí suministrada es de responsabilidad exclusiva del usuario sin que Helm Bank o alguna de las empresas del Grupo Financiero asuma responsabilidad alguna, en particular, por los resultados de la eventual aplicación de operativas, prácticas o procedimientos aquí descritos. Los informes, análisis y opiniones contenidas en el presente documento no pueden reproducirse sin la autorización expresa y por escrito de sus autores. En tal sentido, el remedio sería peor que la enfermedad y el llamado “relajamiento cuantitativo” en vez de apuntalar la economía (como se espera) podría ocasionar un fenómeno inflacionario que se le puede salir de las manos a Bernanke y su equipo. Una de las consecuencias más graves de un panorama inflacionario en Estados Unidos sería la creación de burbujas en el precio de los activos, particularmente en el de las materias primas. Además, la ya gran cantidad de dinero que circula en la mayor economía mundial está haciendo que la inversión migre a mercados emergentes, que a futuro gracias a ello podrían también enfrentarse a una mayor alza en los precios. Algunos economistas temen que, tras las compras que se espera realice la Fed y que se estiman sean de alrededor de USD $1 billón, se presente un escenario parecido al de los años 70´s, cuando la inflación alcanzaba niveles cercanos al 15,00%. Al respecto, el presidente de la Reserva Federal de Kansas, Thomas Hoening, en días pasados manifestó que con la política monetaria que se está llevando a cabo se corre el riesgo de recaer en una nueva recesión en los próximos años. Hoening no ha dejado de recalcar que el Banco Central debe pensar en el largo plazo y no en el corto plazo como lo está haciendo. Adicionalmente, con mayor inflación la Reserva Federal puede verse obligada a elevar las tasas de interés, con lo que reversaría todos los esfuerzos que está llevando a cabo actualmente. Así las cosas, la Fed no la tiene nada fácil en lo que respecta a las consecuencias que podrían generar sus decisiones de política. Los costos y riesgos de caer en deflación ó en un alto nivel de inflación, pueden ser nefastos, no sólo para Estados Unidos, sino para el resto de países que dependen fuertemente de ésta nación. Además, cualquiera de los escenarios (inflacionario ó deflacionario) continuaría afectando seriamente la calidad de vida de los estadounidenses, incrementando la problemática social que hoy se constituye como uno de los principales retos del Gobierno Obama. Lo que parece hoy claro es que la FED ha decidido apostarle a permitir algo más de inflación, con tal de evadir el riesgo de caer en un espiral deflacionario. Las consecuencias estarán algo más allá que a la vuelta de la esquina y sólo el tiempo lo dirá. Referencias Bibliográficas • Krugman P. (2000). “Thinking about the liquidity trap”. Journal of the Japanese and International Economies,14, 221–237. • Espina A (2004). “Sobre estabilidad de precios, deflación y trampas de liquidez en el G-3”.Documentos de Trabajo Real Instituto Elcano de Estudios Internacionales y Estratégicos, 3, 1-54. www.grupohelm.com CONDICIONES DE USO El material contenido en esta comunicación es para propósitos de información únicamente. El contenido ha sido obtenido de fuentes de información públicas y consideradas creíbles. Sin perjuicio de lo anterior, Helm Bank no representa ni garantiza la exactitud de la misma, ni se compromete a actualizarla en caso de eventos futuros. La operativa de mercados financieros puede conllevar riesgos considerables y requiere una vigilancia constante de las posiciones que se adquieren y del entorno del mercado. Esta publicación no constituye ni puede ser interpretada como una recomendación o asesoría para tomar alguna decisión o acción de parte de los clientes o como una oferta por parte de Helm Bank o alguna de las empresas del Grupo Financiero y sólo representa una interpretación realizada por quienes aquí escriben. En consecuencia, el uso de la información aquí suministrada es de responsabilidad exclusiva del usuario sin que Helm Bank o alguna de las empresas del Grupo Financiero asuma responsabilidad alguna, en particular, por los resultados de la eventual aplicación de operativas, prácticas o procedimientos aquí descritos. Los informes, análisis y opiniones contenidas en el presente documento no pueden reproducirse sin la autorización expresa y por escrito de sus autores. Aunque Estados Unidos se califica a sí mismo en toda ésta situación como una “víctima”, algunos analistas consideran que justamente sus políticas son las causantes de la volatilidad y tendencia apreciativa en los tipos de cambio alrededor del mundo. El Gobernador del Banco Central de Taiwan por ejemplo, manifestó el mes pasado que la primera economía del mundo ha impreso una gran cantidad de dinero, lo cual ha hecho que mucho “dinero caliente” éste circulando en las economías. También, el premio Nobel de Economía, Joseph Stiglitz, considera que la liquidez creada por la Reserva Federal está generando un caos en el resto del mundo. ¿Sirve o no la intervención? Ahora bien, la pregunta relevante es: ¿la intervención que están haciendo los países para frenar la apreciación de sus monedas ha servido hasta el momento? Según la opinión de varios expertos, la alta movilidad de capitales alrededor del mundo hace que las medidas de intervención cambiaria realizada por los diferentes Bancos Centrales no tengan efectos permanentes, al menos si las presiones del mercado son verdaderamente firmes. Lo anterior se corrobora al observar el comportamiento de las monedas antes analizadas, tras la intervención de sus respectivos Bancos Centrales. Al 19 de octubre el yen japonés se ha fortalecido 12,30% frente al dólar, y tras la medida adoptada en septiembre por el Banco de Japón, dicha tendencia continuó. Incluso la moneda volvió a tocar nuevos máximos de 15 años frente al dólar, hasta USDJPY 80,88 (el pasado 15 de octubre). Con el real brasilero pasó algo similar. Tras las medidas impuestas el 5 de octubre y que ya señalamos, el real continuó su senda apreciativa alcanzando un mínimo de USDBRL 1,6442 el pasado 14 de octubre. En lo corrido de 2010 el real se ha valorizado 4,00%. En el caso de Colombia, las decisiones del Banrep lograron quitarle volatilidad a la moneda y frenar la caída. Sin embargo, en varias sesiones se logró ver nuevamente la divisa por debajo de USDCOP 1800,00. Es relevante destacar en todo caso que el peso colombiano es la moneda latinoamericana que más se ha fortalecido en lo corrido del año (11,00%). Según Castellanos et al (2010), las principales causas de tal apreciación han sido el debilitamiento internacional del dólar, la política monetaria expansiva de las principales economías desarrolladas, los altos precios de las materias primas y las buenas perspectivas de crecimiento de las naciones emergentes, entre otras. Estudios más rigurosos muestran que no hay evidencia rotunda de la efectividad de la intervención cambiaria sobre el tipo de cambio en el largo plazo. De acuerdo a un documento realizado para el caso colombiano por Rincón y Toro (2010), mediante un ejercicio econométrico se encuentra que durante el periodo 19932010 ni los controles de capital, ni la intervención del Banco Central utilizados por separado tuvieron éxito para depreciar el tipo de cambio. Por el contrario incrementaron la volatilidad. En contraste, cuando ambas políticas son utilizadas al tiempo, se obtiene un efecto estadístico significativo en el cual la interacción entre ambas medidas es efectiva para lograr una depreciación promedio diaria en la tasa de cambio, sin incrementar su volatilidad. Resultado que se dio en Colombia durante 2008, año en el que la crisis pudo haber influido al menos en buena parte del comportamiento depreciativo y por tal razón dichas conclusiones se deben tomar con cautela. www.grupohelm.com CONDICIONES DE USO El material contenido en esta comunicación es para propósitos de información únicamente. El contenido ha sido obtenido de fuentes de información públicas y consideradas creíbles. Sin perjuicio de lo anterior, Helm Bank no representa ni garantiza la exactitud de la misma, ni se compromete a actualizarla en caso de eventos futuros. La operativa de mercados financieros puede conllevar riesgos considerables y requiere una vigilancia constante de las posiciones que se adquieren y del entorno del mercado. Esta publicación no constituye ni puede ser interpretada como una recomendación o asesoría para tomar alguna decisión o acción de parte de los clientes o como una oferta por parte de Helm Bank o alguna de las empresas del Grupo Financiero y sólo representa una interpretación realizada por quienes aquí escriben. En consecuencia, el uso de la información aquí suministrada es de responsabilidad exclusiva del usuario sin que Helm Bank o alguna de las empresas del Grupo Financiero asuma responsabilidad alguna, en particular, por los resultados de la eventual aplicación de operativas, prácticas o procedimientos aquí descritos. Los informes, análisis y opiniones contenidas en el presente documento no pueden reproducirse sin la autorización expresa y por escrito de sus autores. Entre tanto, Echavarria et al (2009), mediante un modelo VAR estructural evalúan durante el periodo 2000-2008 el impacto conjunto de las intervenciones cambiarias y de la política monetaria sobre la tasa de cambio, la tasa de interés y otras variables del sistema. El principal hallazgo de la investigación señala que las compras netas de divisas devalúan significativamente la tasa de cambio nominal durante aproximadamente un mes, debido en parte a que “las compras no han sido esterilizadas en su totalidad, y a que han anunciado una política monetaria expansiva en el futuro”. Finalmente, el artículo realizado por Alonso et al (2006) intenta analizar cómo han logrado países como Hungría, Chile, China, Perú y Brasil para mantener un determinado nivel de tasa de cambio durante un periodo prolongado de tiempo. Mediante un estudio puramente empírico donde se analizan las prioridades y esquemas de política económica de los países antes señalados, se encuentra que todas las naciones han combinado un régimen de inflación objetivo con fuertes intervenciones en el mercado cambiario, durante los distintos episodios de choques externos que han enfrentado. De esta manera, esta combinación les ha permitido mantener la estabilidad en su tipo de cambio por un periodo largo de tiempo. De todas maneras, el estudio destaca que algunas naciones tienen factores estructurales que explican que su tipo de cambio sea más estable. De lo anterior se deduce entonces que la literatura no avala un efecto sustancial, y menos de largo plazo, de la intervención cambiaria sobre el comportamiento depreciativo de la tasa de cambio nominal. En otras palabras, los estudios no encuentran evidencia sostenida de la efectividad de éstas medidas sobre las monedas apreciadas. También es relevante destacar que en Colombia la intervención ha sido relativamente marginal, sobre todo en relación a América Latina. Además, si el mercado por sí sólo hace que el peso se situé por encima de USDCOP 1800,00, como ha venido sucediendo por cuenta de la relajación cuantitativa de la FED, una mayor intervención del Emisor no sería necesaria. De todas maneras, pensamos que si nuevamente el peso cae por debajo de éste nivel y digamos llega a romper con fuerza el nivel de USDCOP 1780,00 a la baja, el Banrep podría elevar los montos de intervención discrecional, en vista de las presiones políticas de gremios sobre la Junta y el Gobierno. Referencias Bibliográficas • Alonso et al (2006). “Política monetaria y cambiaria y estabilidad del tiop de cambio en algunos países emergentes: Hungría, Chile, China, Perú y Brasil”. Borradores de Economía, v 580. • Echavarria et al (2009). “Intervenciones cambiarias y política monetaria en Colombia. Un análisis de VAR estructural”. Borradores de Economía, v 426. • Rincón y Toro (2010). “Are capital controls and central bank intervention effective”. Borradores de Economía, v 625. • Castellanos et al (2010). “La tasa de cambio y la competitividad”. Semana Económica Asobancaria, 23 de agosto. www.grupohelm.com CONDICIONES DE USO El material contenido en esta comunicación es para propósitos de información únicamente. El contenido ha sido obtenido de fuentes de información públicas y consideradas creíbles. Sin perjuicio de lo anterior, Helm Bank no representa ni garantiza la exactitud de la misma, ni se compromete a actualizarla en caso de eventos futuros. La operativa de mercados financieros puede conllevar riesgos considerables y requiere una vigilancia constante de las posiciones que se adquieren y del entorno del mercado. Esta publicación no constituye ni puede ser interpretada como una recomendación o asesoría para tomar alguna decisión o acción de parte de los clientes o como una oferta por parte de Helm Bank o alguna de las empresas del Grupo Financiero y sólo representa una interpretación realizada por quienes aquí escriben. En consecuencia, el uso de la información aquí suministrada es de responsabilidad exclusiva del usuario sin que Helm Bank o alguna de las empresas del Grupo Financiero asuma responsabilidad alguna, en particular, por los resultados de la eventual aplicación de operativas, prácticas o procedimientos aquí descritos. Los informes, análisis y opiniones contenidas en el presente documento no pueden reproducirse sin la autorización expresa y por escrito de sus autores.