17 INVESTIGACIÓN Y DESARFIOLLO SOCIAL • No 19•UMNG • 1&911 La investigación en la Universidad AlejwuJm Luis Arencio* Ponet~cia prestmtada en eJ Primer Encuentro ll:xtroameric<lno de Universidttdes, c~tkbmdu en Jos primeros dias de abril de 1998 en Santafé 4e Bogotá, cuyos ortgltra/es gentilmente fueron cedidos por el autur a la Reoisla Jnoerstigución y Deselrrollo Socil1l. 1 1 1 .~ ~ ¡ 1 [ 1 ~ 1 r ~-' o . Uoo c!e los lal>oralt>nos ele Biología do lo IJnJYemdod M~i»r N~WvQ Groooda, da1orio con 1<» mó• modernos "'l"•P•• paro laol1i<>r o irrveshgodorts y olumnos ef elesMolfo áo proyecm óo '"' "' 9a<IÓII ele lo más aliD <r>!r<lod ~,...,,,...........,.,_...,_,.,_,_,..~~ u.--<Jeeu¡o~""~). . .---áo. s-ia""a.-,r- INVESTIGACION V OESAAAOLLO SOC:AL • NO 19 • UM"'G • · S98 18 1. Antecedentes y marco teótico sobre la situación actttal en ciencia y tecnología n general las institucioi"'CS tecnológí· CLlS de investigación y extenstón, tu· vieron oriaen directo en la posguerra. Fueron partC' del~einicio del comercio inter· nacional v fueron estim uladas por un clima f.nvombl~ al crecimiento económico y de ayuda externa de los p.1íses industrializados, en especial d e los Estado¡, Urúdos. E Se a tribuve. a partir de estJ :;ituadón, un papel pr~tagóniw al Estado eP la ~id~ eco- cincuenta v del sesenta, OOn\\en z:an a e1,fr\!t\· tar dificuÍtadcs d ('sde los años sett'nt<l. El endeudamiento ~is temático y progn·~ivo que sufre América L~tina conjuntamente nm las dificultades en !,1s e"portac10ncs d C' lo~ productos tradicionalC'S, y la rescisión de.)()~ ai\os ochenta, producen en gene ral cns1~ fiscal para el Estad1.), lo que conl!C'\",, inmediatamente ,, un cont rol del apM,\to burocrático y con ella una mayor de~rentrali­ zación v n,wma~ reslrictiv,\S q w etgra\'111\ más el problema. Un ejemplo de t~sto es 13 absorción d e recursos para el p.1go de g<~stos de personal, con lil. consecuente di~minuci6n de fondos para La 2Kción operativa. nómica v de cond ucción del crecimiento, favored do por una historia común de centralismo político y üdministrativo. Esta es una tendencia muy generalizad ,, en le sec:tor público de ca,;i todos los pabc, dt• A méric<~ Latina. Dentro de este marco, las instituciones fueron creán dose en una estrategi a de crecimiento, orientado a la sustitución de importaciones t'n el sector indu~trial, para lo ntal se toma '1\ ¡,, agricultura como base fimmcilldora del prO<'el>o global. Ve-mos así que IIC'g~mo~ al encuentro d~ dos tendencias corürapuestas: por un l<tdo, lo1 expansión viol.;nttl de demand a tecnológ•c''· v nor otro 1,\ contracción de 1,,, capacidad<:~ ' del Estado para ab;orber la CJ r~a de las funcione& tecnológica~. Esta t"Oncepción trajo aparejada una serie de dificultades, por cuanto !as orp;anizaciones tecnológicas y de formación de conocimientos qucdarón dependientes de LlD mareo_nacional bajo el centralismo del Estado. Este <~sume su rol cond uctor y de oferta, pero con el correr de los tiempos los diversos estados de nues tra comunid.nd han ído sufriendo discontinuidades, no sólo de conducción sino también de políticas coherentes hacia los ~""tO""' ternolócicos científicos 'i educativos. 0 1 ~ Esta contraposición apunta hacia una n.;ct'saria rcdefiniciól, de ,,,rg,•~ y responSJbilidades, .siendo conscicnt,'S d(:) que en un ,m<ÍIisis c\Ctuil.l y prospcctivo destacan la wntinuación y aceleración de ¡,, primera t<'n- ""'"" lW El crecimiento que experimentan las instituciones del Est,,do duran te ¡,,s décadas d el • .. r dencia. Estamos frcnt.; a un proceso de cambio en 1!'1 que el E!>t~do -ei\Íienta, po-r 11n l11clo. el desafío de poner en marcha reformas en su propia organi7.adón y objctÍ\'OS. y por otro, relevar su papel como movilizador d e lo~ cambios glob<~le5 n cccsMios, fundamcnt~~ndo la participación de distintos ¡¡ctore:- 1 J ! .: . :- INVESTIGACIÓN Y OESAR~OLLO SOCI~>L• No. 19 • UMNG •1908 en las responsabilid<1de~ prhKip,,les, que inten·en¡;<>n en¡., procuración de recursos, y de la n:aHzación de .invcsti,gaóones y otras actividades tecnológicas. mente a largo plazo. Luego la voluntad ele financiar este tipo de ~:sfuerzo e inn~rsi6n cae d ircctanwnte en el Estado. E11 este marco de crecimiento, el proceso d e 2. EJ ámbito donde se wltiva la ciencia: La Universidad competitivid ad tiene a la tecnología como instrumento principal, e incide sobre la supen·ivenda r progreso eamómiw. La t~cnologí;~ se apoya en el aprendizaje, en la práctica empíric<l de donde naóó, en el ens.• yo de prueba y error. p¿~ra transit<w haci<> lU\ sistem« de conocimiento cada vez má~ amplio y profundo. fn otras palabras, lo tecnología productiva se- constituye cada día más en el complemento inseparable de la ciencia desde sus ni\'des bi\sicos, )' tlen(l'O J~ o:~t~ L(u)cepiu, Lb Li~··•da> \.1.\ska:. 50:: transiorman en el i!Specto central del si8lema global del conocimiento. De ahí que no se puede dínamizar y mantener un sistema de expansión de desanollo tecnológico sin realizar conjuntamente las necesarias activid ades del cultivo de las ciencias. 1 ' ~ 1 ·~ ¡-' l. r 19 Los productos de la ciencia y de las actividades de investigación menos aplíc:adas, constituyen bí~ncs colectivos, esto es, su uso hac~· que su cxistenda no se <"tgole ni destruya como lo es un bien de consumo. Estct C<\racterística dificulta la financiación de la investigación cienHfíca por cu,mto no hay beneficio económico como lo puede haber el' una inversión en tecnología, pues el beneficio Cilptado supera el costo involucrado. Los beneíicios de la ciencia, de la investigación bá sica, de las actividades menos apli<:¡¡das, pr~sentan la dificultad de st>r bcneficit\<> incl irectos, d ifusos y gE!neral- Al hnblar de la Universid ad como institución, implícitarnenle e~t,\mos rdiriéndonn5 a su rol o misión, m~s allá d e la con~iuera­ ción social en relación con el bien común. Si hablilmos de misió n, debemos pensarlo en un contexto actual y f~•turo di! sus acciones o se-rvicios, en la franja de- la socie· dad qu~ involucré! d írcctamer>tc:. en la coberturas geográ fic<\ de su ,\tción, y en In iorma en que la imtitución alcanza su lidt>r<>.<.go competitivo. En este Sl'ntido m·~ reíir:>ro al equilibrio que la Univ~'rsidad im pcinw a sus funciones docentes, de investigación y exlensióJl. D~ntro del ámbito docente, el énfclsi;; deb~ estar C<lnalizado hacia proyectos de prepMar a sus alumnos para que de un modo tficicnte logren tma ca pacitadón acorde con los requerimientos profcsional~·s específicos de un mundo inlegr<tdo y de cvolnción ve1·ti· ginosa, como a~ í misrnü ofrecer posgradns de calidad. También l'n el aspecto d uren te, su preocupación debe e5tar centrad,, en la formación de Stts cu.:.dros, e~to es, n·IM por los formadores de formadores. Esta ,¡('tiv idad debE' ser realizada en un marto de actualidad de conceptos pedagógicos, tt·niendo en cuenta el sentido de apropiac-ión del f(IUI\do por parte del educnndo y el rol de mediador del prof~sor para el logro de un «prendi-.,,¡c ~ignificativo. 20 INVESTIGAC10 N1( DESARROLLO S00 1AL • No. 19 • UMNG • 11>98 Cuántas veces se dice que r.:nsci'lar t'S tron:>milir ton0dmi~·1uo,; ajeno~; pues bi~·11, investigar e,; iormar los prt'pio.s conod mienlos y brinddrlos t'S un <1cto d"' generosidad, c<~ractcríslico dd aLüénti,:o docente. P~ro no :<álo ddn•mos habl,lr o pensM simplemc·nte en UniVt'rsidad, sino debemos propender por !<1 calich1d. 1-l<'blar óe und Uni versidad de c,>lidad imp!ic« un eúmulo de aspectos ÚHirnamenle lig,>dos, corno: lider,u:go intel~.ctual, ref~­ reLKiamit•nto imlilvcionai, calió<ld de su~ docentc·s, varied<~d y nporiLtnidad de beneficios a su persono.~! y ,t\umnos. E~t~· conjunto dt• <lspectos nc' ~·s \)bra ni de la inerci<l ui de 1,\ il:t¡.HCovi::.-at!i\111. sir1o, c¡ue se n•quie:·E llnl\ plnnific,K ~ón estr,¡tégka mnsensu,7(J,¡ y con C(lntirwidad y ¡¡giliJetd n'. id ad<~pt,lci ón « lo~ tiempo s y s~r dcline<:dort¡ de culi·u•·a. Pero c•n cierto nwdo, y c<1cr en un t•srcpticismc• d<:u\ino, \¡¡ instittlci<Jrl,diz,Kiún eh~ Id b\lrorracid hact• perder d~· ,·ist,~ esl<':< <>bj~·ti1•os, en e!'pccial e1 de lcl agilíJ,1d. Pero no todo t~s alribulbl!? '' la buron·acia del ;;iskma adminis· trath·o. Los dn.:enles ~·s· tamos in,·co~u,ractos dirc~ctamentn:n !,~ capilcid,¡d dr, innovación, o ser responsables de ia es\alidctaJ r.Je nuestro~ ,\(· tc,s. :V1uchas \'eces 1« Slr. rutina, ios moldes y 1« tt<~d ici6n ctmspir<.;1 (Ontm tal innova.:i0n sin darnllS C;u::1t,l dt• que red un da en nuestro propio bt'l H~íkic'· Hoy. h,1blar de un,\ U11ivc,rsidd::; .1nu,d, in,plica el habtT caml'iildn ~:r.un iiSp<·c~o fundamr.ntal; t>l \·onccplo del destin«t<~rin. Y :1 n<' pod~mos pensar qnt? lil Universidad e-:..;; un,, institución formc1dora de la ír,lnja prof<.·:<ion,\1 5tXÍC1hn<:ntc ubkad,¡ en lll' ~\s tra to ml'<i iP superior de donctt: s urgí<~n ios cu,ldros o;lirigcnci,1les; ahora estamos ct~ una Unh-ersid <~d ;, universa 1''. d~ friln¡,ls ~ocioeconórn icas divcrs,¡s )' hetl'mgénell$.. con in ten•st'$ d islin: !'~ de los ,mtcrior~s incat<trios, fundamental· ment~: l'l de ser pr<)l<l!;l'ni~t,:~ del (,)mbi<'· AIWr<l bien, <::1 pmblo:?t!H <if ¡,, Uni\·e•·sid,ld, e:~~pc:Lialn,cnte la lath·.tmrnericnncl es d :.:~ t' p0dcr responder <: la dc~rnand« t'n ot•l,1ciún C()ll su .:a~mdcl,>d de vfcr t,¡_ Lns restricciont)-" fihnnci~~rtlS se enfn.·ntdn con h'\ exp)us{ón deinog1·,Hk ,, de1 ahnr,n,)dC'; os1 1,1 caiict«d :!e· ¡,, .:.~uc,l- ~ aJ!Il¡¡O•~ ~"'i l o O ~rr. ,a/ll/a(J'hnpl'iria un cúmulo de aspcclos flftimá'i lif]íltft; li:galjo!;. como: Jttml'azgq, lnJpledtual, refr:rNtcíamicnto 1JlStfbl.cf~IA11" c.alftta (Jlle shs: 'de'lleJUes;"tiarieaaitt y oporw nitla<l de bclwfl<:íos a su personal y aJumno8. cit~n cn1no Ctln~c~·:.l('nda de la re\,,ción docmlk,liumn<'t>> 111'! pun i<' crilkn. Pero es silnplista ed~~~r la cul.p.as olali'lente al aspecto ec0116mic:o sobre la .c.alidad de forin ad 'ón unit·t•r·sitada. H,1y ,¡,;pectas tan profundos t;O· mo cl econfimico y que~ son de-índole intrinse.ca ,) ~,, Univt.'r$id~ld, COl11{' por ('jt~mp.lo [¡¡ obsoh5 ccnciil de los p1:qgrau'ii~ • - oNVESliGACtÓN Y CeSAR ROllO SOCIAL • N<>. 19 • IJIANG • 1998 de estud io e inmovilidad de currículos, métodos ped agógicos no ad ecuados y que gene:ralmentc faYorecen un aprendizaje pasi\'o por parte d e del alurrmado, metodolog ías de evaluación que no respond an a parámetros pedagógicos, e tc. En definitiva, modernizar,, la un iversidad, más allá de Jos problemas económicos. sigrufica dilr respuesta a los aspectos anotados, procurando asila calidad deJa mism;,. PensM en la calidad d e cualquier empresa, imp lic,\ aspectos mo\·ilizad ores para las mismas: ¿quo? es?, ¿por qué es importante?, ¿cómo m<Jn tencrla?, wn alguna~ de la s p reguntas que debemos hacemos desde la empres¡o. universitaria. :\o me corres ponde en este !'Aomento d ar respuesta a tales cue¡,tio· namientos, pues no hay respuest~s únicas, pero creo que en los foros como éste debemos encontrar las respuestas entre todos. a. r En cuanto a la investigación: Si buscamo:; en cual q uier diccionario o enciclopedia 1<~ acep ción de la palabra investigar encontramos que es una actividad, fundamentalmente intelectual, que permite descubrir verdades nuevas. l.(ogicamente 0-;tc llUevo d escubrimiento d~ verdades n uev,\s se basa en las verdades viej~. y muchas veces en las falsedades que el hombre dá como verdad. Al res~to cabe recordar lo q ue alguna vez dijo Madamt:: Curic: "El día que e) hombre sedie~-e cuent,J de s us profundas equivocaciones habría terminado el progrl'!so de la ciencia". Hablar de investigación me lleva inmed iata- mente a anteponer dos conceptos funda- 21 mentales v cada día más sobi'E!saliente> en ' la actividad universit,,rla de Cltalquier país del mundo. Estos conceptos son los de cienci.:o y tecnología. La cienrí~ surgo:> na t!IIalmt'l1tC cu.aml0 el h ombre busca desc ubrir y cvnocl'C, p0r la observación y el razonamiento, la ~~<~turalcza de todo lo que lo roden, l'S decir, de la estructura de la natural<'Z.l. Así ciencia es más que observar, es fundament.1lmrnte razonar siguiendo un camino objetivo y reflexivo, fCJrmulando r comprobando hipótesb mediante la experiment,•dón, l'l análisis, y ll~¡~;ando a la formulación de la ley. e 1,1 uniót1 de las técnicas empíricas con los frutt~s d<' '"cien cía nace la tecnologí3, y ,1~í desde el siglo XVIIl conocemos el resultado de tal unión, que t'> la sis~em<~ti/.,lCión de los métodos de producción. Así entonces, dcdmos que la tecnología es el conjunto orde11,1do de conocimientos, y los correspondiente~ procesos, que tienen como objetivo la produ cción d e bienes y scn·icios, teniendo l!n cuent.t la ciencia y los aspectos económico,, ~oci..:ok';,, y culturales invuh•crado~; y le~.~ prod uetos obtenidos de ella como re~ultado de esos p:roceSO$, son los que deben responder necesariamente,\ la mcjoc calidad de ,·ida. D Ahora bien, pensar en ciencia y la tecnolo¡?a es pensar funddmentalmcn tc en im·estigación y consecuentemE'nte en l:nivcrsidad, pues no se puede concebir \il id~·a de lnil··crsidad sin investigación, <~~í ..:ünw /<~m­ poco se puede concebir la idea dE' Univ<'r~>i­ dad sin alumnos. Organismos nacionales e int~rnacion,\lt'> han dedicado muchos esfut>rzos al estudio 22 INVESTIGACióN Y DESA~RQhl.O SOCIAL • r:J<>, j 9 • UMNG • 1998 de esta ¡¡cHvidad, en especial en vista del futuro próximo. En materia de iiW'!stigación en las universidades, especialmente en las latinoamericanas, hay di\·crsos aspectos que la involucran, como el específico de la in\·estiga· cíón, y el consecuel\te que es la organización y administración de la ínv'!~tigación, las lí· neñs de investigación, los programas que la ligan al desarrollo y a la transferencia, etc. Hasta no hace mucho, ya sea por razones políticas, estilo, o administrativas, la im·es· ti_gación estaba escindida d~ la actividad do· cente. Inclusive se podía ser catedrático, desarrollar esta actividad como única, sin LJUe se ''cxlgier.:~'' temer trab~jos de invE'stiga· ción para <\\'anzaren la carrera universitari,L En otras palabras, el eje de la <~Ctividad de las Ulliver~ídades est,;ba en el rol meramentede la fonn<~ción de profesionales, esto es, los actores sólo realizaban tareas de profesor. tarea que llega a consistir en la transmisión de conocimientos ya elaborados. l\o hay creatividad ni verdades propias. Esto hizo que las L'niversídades se quedaran relegadas frente al desafío del mundo cambiante, y ~m especial, sufrir un aislamiento pernicioso. Al darnos cuenta de que esto no podía seguir así, se hace necesario revertir este proceso, y pam eso, el primer p<~so es el análisis realista de J;¡ situación. De tales estudios surge p«ra un rrúsmo sujeto académico, el tiempo o ritmo docente y de ilwestigador que son distintos en todos los aspectos de las dos actividades. Así, por cjem· plo, la investigación t>xige insumos, financia· e; • rrúento, capacita<:iún, etc. que el sttjeto docente no está en condiciones de afrontar, mientw~ que en su labor pedagógica tales ~xigenci<l~ se minimizan. Otro aspecto importante es que, aún habiendo vencido todos los obstáculos antNiores y habiendo logrado que el docent~' investi· gue, y habiendo llegado a resultado~ promisorios, se en<:uentr<~ que él no es cctp,v., no está prepar<~do ni tiene cualidades específi· eas d~~ vender su producto. De este panorama t«n general quisiera bajar un poco a aspE'ctos tan puntuales como: Capacitación en investigación. líne«s de ~ m,estigación, trñnsfercncia de la inve~tiga­ ción univer~"'t!Jri.a y p¡}r último las relacione~ inslilu(·iot~al~, t::J't el qudt,KO::•' im e~ti~<JtÍ\ o. • e Todos estos fem<~s tienen, a mi modo de vet: relación con el tema tan Cl~ntral y prt'ocu· pan te que es el de la financiación de la •nvesiígación, independientemente del pape! del Estildo que indispensablemente e1>tá ligado a esta actividad. b. Capacilación en investigación: Ya mencioné una etapa de 1<"1 \'ida Utli~·cr­ sitaria latinnamericana en que el ctoccntt' hacía prácticamente solo actividad doct>ntc, pero que de pronto, se encuentra ante lit l'Xigen<:ia que para progresar en su carrer,l, debE:! hacer ín\'t>Stigación. Est~~ hacerse transfonn¡¡ en Ull<l necesidad y en una obligación, y entonces se pone a hact<>r investigación. Debe tenerse claro que no es -mi propósito establecer que todos los docentes deben hilcc•r i11 ínrestig11ción. pero señalo que lil J --'' ,;.< ""l \NVEST!GACIÓN Y OESAFIFIOLLO SOCIAL • No. 19 • UMNG • 1998 realidad l1<1 hecho que seamos todos igw1/es frente al sistema. • Quizás preparar~ para S1.J activ idc~d doc~nte le llevó un buen número de años transcu· rriendo por lus distintos niveles, desdo: auxiliar hasta lograr las categorias ~uperio· res en el escalafón de la cátedras o d eparta· mento, p.: ro aquí, de un día para otro debe s~bcr cómo formular un proyec to, qué condiciones debe tener paca que éste .sea exitoso, cl uso de metodologlas apropiadas y de las técnicas cspcdfícas, y además, los conocimientoll e~encíales de la ev<lluación de proyectos. Todo esto sin mendonat la buro· cr.Jcia prop ia de la p resentoción, el'aluación dentro de la ,v financiación de los provectos ' institución unive~itaria. En todo esto caben preguntas tales como, ¿cuando este académico cursó su.~ e.~tudios se le enseñó lo fund<tmental del quehacer en materia de in vestigación?, ¿la Ín\'estigación era parte del currículo de su carrera? 1 l r 1 1 1 ~ ) Todo lo que antecede es diagnósti<:o y hasta en cierto modo dcbQmos d~cir q uc es historia. Debe ser pas11do. N'o mod ifica r esta ~ituación a sabiendas es ir en contrn del s<'r un i\'ersitario. Bien, a quienes de un modo u otro les cabe la respon~abil idc1d del logro d e l<t C<lliditd universitaria, deben preparare implementar las formas d e capacitar a sus docentes para enfrentar científic,, ,v conscientemente la labor de in vestigación. Debe pensarse en programas de capacitación q ue abarquen no sólo las temáticas (formu· lación, mctod oJogia, evaluación, difusión, 23 etc.) :;iJ1o que tengan en cuent,\ los act\11't'S, esto es, desde el nivel de dlumno ('n un./1 carrera de grado hasta el que llegó a prufe~or titulélr sin haber realizado int'L'S tigación. Y en esto considero qu~:~ od aportt' con¡unto para la formulación de p rogrclmcl~ d t: capo:lcitación en innstigad6n debe ser un,l prop uesta para encuentro~ C'tJmo d que hoy n\.>5 toca compartir. Lineas de investigacióu: ¿Qué se im·cstiga?, ¿Quién iija los temas o necesidade~? ¿ H~ y qué pr~·dc t~·rmin M líneas de in•·estigadón y ron b ~se en.://,¡:; buscar quién las lleve" Cilb\l? Un problemo concrelo, ante los inte!'ro· gantes precedentes e!> el de la "libertad de cátedra" que conlle•·a implícitamente "la libert<ld de investigación''. La imposioón de determinadas temáticas afectan \' ofend en las libertades mencionéldas. Debemos r<>sp<:tar la llb<>rtad cicntif!C..l t~nicndo en cuenta qu~ lil ~xccsi\·a pbm fi· cación plantea eJ problema del desconoc1· miento del carácter esencia lmente imprede· cible de sus resultados. En principio sólo deben C\'itarse o no apoyar aquellos tema¡, que afE'Ci't.'n a los principios éllcos sociJlmom· te consen~uados y" lo8 d~rechos hum;mo~. En el equilibrio de intereses y r~speto por lo toma de cl~'cisioncs h3}' que cncon!rJr d camino del justo medio. En est~ punto quiero narrar la cxpcricnriil concreta que estamos \'i viendo en nuestr¡¡ Univ~rsldad, pues el des.1ffo de las !ine«lo r 24 INVESTIGA.CIÓN Y DESARROLLO SOCIAL • No. 19 • UMNG • 1998 prioritarias de investigación conforman un aspecto del Plan de Gobierno actual. insertado en un Plan de Desarro!l() Institucional. En el aná!isis de i<l actividad de im·estigación dentro de nuestra universidad, y en particular el tema de si se fomtulaban lú1eas prioritarias o no, se lle~ó a que sí había que establecer líneas priorítMia~, }'se peflSÓ que las mismas fueran definidas por los propios actores, esto es, por los docentes-investigadores. Y a, en grstúmes ¡¡nteriores, SI:! habían establecido por resolución del Cons('jo Superior, las líneas prioritarias de invesligación de latuü versidad, pero la falta de consenso por parte de los involucrados hizo que se tr¡¡nsfonnara en letra muerta y que nuliLcl "" LLtrnplier<lll. SabE:dores de este fracaso y estando c~m­ venc idos d~, que si se dejaba esta probl~~má­ tica en m.mos de los ¡¡dores no se iban a encontrar m ejote:> res\tl tados, se decidió planificar estr.ltcgias desde otra óptica. La estrategia quE:! s~' planteó fue In de proponer en lugar de imponer. Así, bajo ~~sta concepciL~n, lo prim~r<l fu<.> redescubrir el sentido del por qué de las líneas de investigación con otro más esenci.Jl, ¿pal'a qué investigar?, haciendo ver qu~ la respuesta est:í en las necesidades que la SO<;iedad tiene. A~í dL~ contundente, así de simple. No ~e tr.1ta de pensar en r!!solver un problt'Jllil económico, sino de dar respuesta a la calidad de vida y que desde la universidad se puede estudí<1r y responder. Por ejemplo, el ptoblema del tránsito, el del crecimiento ~-- urbano y suburbano, e{ p•·oblema del agua, etc. El p<~so siguiente fue detennintH, dentro dl' la iníinita gama, cu,iles eran IJs necesidades que podíamos atender con nue~tr,, oferta. Y para s01ber que esto entró en cont.Kto con ~1 administrador de la sociedad, es to es, con t>l Gooi(:rno de J.;¡ provincia y po.~teriorm<>nw ¡,e interesó también al de la lh\ción. Por medio del organismo qw la prodm:ia en milleria de investig,1dón, del cu,11 las Ut1iversidades nadonales y prindas, conjuntamente con otras institucio•ws del quehacer científi<:o y de la producción forman parte, se fue estudiando pormenorizadam~nte U:t listado de ret}uerimiente>:; ~el\el'ales y su.~ respecti1·o~ desagreg.u.lo<. Este se denominó "Productos y! o ,,ctil'idades seleccionada¡;", y así encontr<lmo;.: • R~·cursos hídricos • Agroalimentos • Gestión • Ordenamiento territorial y control ambient<tl • lrwestigación y desarrollos t('cnológicos no tradicionales lit'J1t' En cu.111ta a los desagrcg.ldos o temas específicos, porej~mplo, con el titlllo Rccu· rsos hídricos, la problemáticil espedfir,, dcdemc1tKia de proyectos ~~s: Gen~r<1ción, mantenim iento v e\';tlu< 1· ' ción de la in form11ción hidro-níveometeorológica Desarrollo ternológico para 1.:. optimización del uso conjunto s,,Jinización y drenaje Cot1taminaci6n de a~·uífcros • ) '• 1 í > 25 INV/i.STIG'>.CióN Y DI:SARFIOllO SOCIAl • NG\ 19 •lJMNG • 19~8 Innovación institucional para el manejo integral del agua. Esto es a modo de ejemplo, pe-ro en cada uno áe !os Utulos hay un L'Úmulo de probl<:mas concretos que requieren d~ la participación de todos los docentes de nuestra universidad y d e las d emás. Estt" es u n punto importante. Se genera la p osibilidad de trabajo interdisciplinario, má~ allá d e la propia institu ción u n i vcrsitari<~. El paso si~iente y en el que nos cncontr.tmos abocados y en ví~s de solución, e> la financiación de estos proyecto~. mplanteamiento original h.tc el gue no debía hacerse por el canal tradiclonal del subsidio emPrg~ntC' rlPl pn'S11pllesto univer~itilrio, o si debía indefecliblemt:nte 1.1Hlizarse, pero en la m~or medid<J po$ible. Estosi.g:ni/:iolba que no se convirtieran en proyectos comunes con los trad idonales y escasos recursos. Estas líneas v sus d erivados debian ser ' importan tes recursos pilra que fuesen atrayentes, y la financiación podría provenir de los pcincip~les receptores de las ~olucio­ nes, ef.to e.s, lil~ empre;a::. y el Gobi t>rno en sus di versas f11rmas: m unicipal, departamenta l ,v nacion~l. En est()S m omen tos se está trabajando en la firma d e com·enios para la fu1.:mciación, pero la expectativa generada en el ámbito de los itwestig<~dores uni vcrsitarios ha sido brrandc. Lógicanwntc, llegad.Jl,, etapa de formulación de los proyectos habrá que pasar por [,, E'\'aluación illt<'ma y ex tema de la calidad de los equipos y de cada proyecto en >Í mismo. Un párr<~fo especial merece un¡¡ línea que n('l surge i.cmtediatMncnte de un a.náJisi.s sociv cultural, pero está inserto en la misma raíz de la universidad, esto e>, la inw~tigadón cducativ,\. Cuando en estos días se habla de investig<~ción, generalmente el pensamiento se orienta hacia cl desarrollo tecnológico, hac.a la producción de bien('$ y ser•·icios. hacia d crecimiento económico, y todo¡¡ estos aspt:ctos concaten¡¡dos hacia l'l biene~t.u soCJill. Pero por W\ momento tratemos óe imar;inar una sodedad plena de riquezas pero Cilrentt· de educadores y educandos. ¡Imposible! lmposibk hablar de bieDestar s0ci~l ,;in conocimientos¡ ni en l~s sociectadc$ más primirivns podria rnncebir!ll' tal idf:',l. Otro pcn.,cUIUento t¡ue no~ asalta ,,1 hablar de investigaáón es la f<~lta dE: rccurs%eronómicos y tecnológicos¡ pero ante E!stc plante.mtil!ll(\J se hact neces<\rio recordar las palabra~ de Houssay: ''Los países >On ricos porque in\'estigan, y noim·estig¿m por que ,on nros". l.a investigación orie11tada hada el quehacer ~·ducatiyu es c:;encialrncnte f<Jrmatil·a por cuanto posibilita el dcsarroll~, plt'no de 1.1 capacidad ac<~démica.. el potencial intelcctuill, la creatividad y la originillidad. Recordemos gue "enseñar es toc.u Ul\a vid2> para ::-iempn:'''. c. Transferencia de la investigación universitaria: UDa de Las KT•'ndes preocupacione~ t'l't.\ en la que denominamos ciencia oculta¡ ebtO e..-, hay un elevadísimo ntírncro dt> "inf~1rme> fina le>" que SI:' <~cumulan l'n oscuro~ n·dntol> sin c¡uc nadie lo~ conozca, .v esto no ~lo se da en las universidad~:>s sino en otro~ orgn- 26 nismos de im·estigación. Cada INVESTIGACIONY DESARROLLO SOCIAL • No 10 • UMNG • 1 ~98 r~cinto de ést05, cadn pilo de informes, nos indican la necesidad de publicación, de transferencia, pero sobre todo, desde el punto de vbta humano y pensando en el investigador, es de tener presl:!nte que por cada informe acumulado se ~cumula una frustración. Anteriormente hice mención a la deseo· n exión que exi ste entre los docentes-investigadores y los beneficios de k)s productos de la in1res!i)l'aci6n. Tal dt·~,·oncxión es reconocida y de e;,tt• reconocimiento surgen lilS unidades de vinculnción l:niver~idad­ J::mp.rcsa, que pasan il canalizar lo; requerimientos de extensión y servicios, pues hay áreas conrr~ta!< t>n que el sertor producth·o requiere de las universidades. J)esde la aparición de estos or~ani smo> se ha insistido en que deben tener detenninad as ca ract<>rísticas, v entre ellas las más de~­ tacadas son: que po~ean mecanü;mos ágiles, op t:!ra tivos y formales, y fundamentalmente n(1 entr<1r en competencia con los mismos profesionales que la uni\'ccsidad produce y lanza al medio. Por otr<l p arte no de~ caerse en cri terios economicbtas p enS<lndo a b universidad como una empres<~ que g~ncra servicios. Esta concepción ,mul .~ría su ~senda de ser la contenedora dt:! la cultura en gen eral, yen cuanto a la ín"e~tigadón, relegaría a las deudas básicas a niveles mínimos. Sobre est¡¡ materi<~ ~e n<)n producido numcro~o~ encuentros y foros; entre otros organismos internacionales el ClNDA ha producido documentos y se sigue trabajando en ello, pero creo que hay mucho por hacer. la experiencia de la univen;idad de donde pro- \'Cngo, la cua1 posee un.1 unid.Jd de Fincu· [ación, tod<wía no logra canaliz<~rel Cll('l.lCntro del im't'Stlgador (equipo) con el u~uario Falta a m1 modo de ver la pcrson<~ que cumpla la interÍil7. t•ntr~1: Pr<)ducto de la int·cstigadón-benefi· ciario o consumidor bl Dcmanda-inYestigador. a) Sé que sobre este punto ~e está tr,,b,,j,m do muc:"ho y se esperan resultados alent,,d (>l'('!> para todos los investigador~:!>. d. Los organismos estatales de investigación; • t Di\'ersoo pabes ¡,,tinoamcric:',,nos posocn entidades d e investigación li~<~d a~ a l,¡ órhit,l d<:>l Gobicmo, que genf'ralmtontf' Sf' ilcuñ,m b.ljo ¡,, denominación de Consejo Nilcionül rJe Ciencia }' T<'cnología, con nlg(m tipo d~ vari ante en cu,\nto a nomu1ación pero con funciones ~quivalenles. Aquí en Colombia, encontramoli 11 COLClENCIAS. <·n nuc,tro país es CONICF.T, t>n Vene<.uela el COt\ 1CIT, El\ Uruguay es ~1 CONICYT l'n lkp(,. blica Dominic;ma es CONACITE, y cl~í p~> · dríamos seguir con otros paíse!> hermanos. coentemente.la Red lberommmctlnél de Indicadores de Cienci~ )' Tt:cnoklgía RICYT, en función del pro¡.¡r,>nM Iberoamericano de Cienci<1 v Tecnología p.1rc1 el Desarrollo, ha publiC<Jdo un tom v m uy R import<1nte d~ consu lta. Es el d!:nomin,,rJ,, PRI.t\CJI'ALES INDICADORES DE CJEi',;- ClA Y TECI\OLOGIA rBERO AMEIUCA· 2\fOS E INTF.RA VI EI<ICA NOS. En él podremos encontrar un ponn<>nNi· zado análisif> dc.scripliYo y cunnlilath·o d~ la situación de estas entid,1dt'S de i1wcstig,1· ••: ( 1 1 \ r• 27 INVESTIGACIÓN Y DE.SAF\ROLLO SOCIAL • No. 19 • UMNG. • 1998 ción científica en íberoamécica. De ahí que no es mi intención hacer números, pero sí quiero reflejar un sentimiento al respecto, quizás aplicable sólo a Argen{ina, no lo sé, o qu izás sea más generalizado de lo que UllO cree. La Universidad Argentina y el organismo oficial de investigación no sólo están alejados sino que están divorciados. Universidad y CONlCET no conjt~gan acciones wmvnes, a pesar de que un significativo porcentaje de investigadores de esta institución prestnn serYiciosen las universidades. Cabe preguntarse las razones de este alejamiento teniendo en cuenta que hay intereses comunes. Las razones puedE!n ser vilrias y con orígenes históricos, pero prevalece normalmente ('1 interé~ económico y sectorial. Creo, wn mucha esperanz<t, que es un proceso que tiende a re\-ertirse, generando propuestas y acciones de interés común con equitativa responsabilidad y compensación. mis palabr<1S finales .~on para form ular propuestas de exce lencia sobre aspectos q ue hacr;:n a nuestros d ocentes·ini'Cstigadorcs, ya sea desde~~/ punto de vista ind ividu,\1 o de marco de tr3bajo, tanto de ~us logro~ como de los escollos en el camino. A tal respecto menci•:mo: 1) Sobre la evaluación. En este punto voy a tomar los conceptos del Dr. Ruy Pérez Tamayo, méd ico mejicano, que publicó un artículo en nuestro d iario La NJci6n, intitulado " La pérdida de la inocencia del científico" donde narra el dcl-enir de una im:e.stigación cíentific<l, hecha d!:'sde los claustros COll amor, pasión y a ~-entura, h,1sta la \"i\"id<~ hoy con remuneraciones por produdividad 5e131ín E>l mímP.ro d~, " p;, . pcrs" ,lugar de publicación, imp,Ktn, cte. Lo cierto es que el ámbito natur<tl dondC' se debe cultivar la tienci<~ es la universidad, peco que adolece de falencias que se continúan en el tiempo: En ~:>1 seJltido de la Cl'aluación de los d ocentes-investigad ores esta mos a merced de mecanismos y moldes 'impuestos que des virtúan en muchos casos la propi,, <~Ctivid,ld. Desde ya hay que tener en cu~mta que las reglas impuestas ind ue en conductas. La c<~rencia del presupuesto adecuado específico para la investigación. Restringido número de docentes "parttime" y más aún, ''full-time". Falta de capacitación teórica y práctica de sus cuadros pura la realización de tareas de in vestignción. Establecer políticas y estrategias de integración ron otros centros donde se reali· za la activid<\d científica y tecnológica. La hwestigación en lrt Universidad tiene vn esp ectro d e disciplinas tan amplio como ~'l cuuículum mismo, y no todo tiene el m ismo mod o de ser ev ,,[uado, pero como es el (mico en vigencia se cae en aberr,lfiones simplistas por su homog~nización. Tomo un solo cj~'Tll­ p lo: ¿Es lo mismo evaluar (o aplicar los m ismos mecanismos)" Lln proyecto tccnológiCCl de medicino gue uno de invE-stigación etilográfica «plíc,ld<t a la educación? Propuestas finales: /\-os corresponde a nosotros disd!<lt y proponer formas de e1·aluación tanto del¿¡ activ idad de Investigación como de sus resul- ~- Como responsables de la investigación en las wüversidades (no de sus presupuestos) f 1 ( 28 INVESTIGAQIÓN Y DESA_IlR0LLO SOCIAl • Nó 19 • UMNG • !99a ~>l~g_;Ka~,¡e~ R"~sae PJ1eaiis.a 13. deJtá· ética, de la formación de pel'sonas íntegras con . oomptomiso soclal, con capacidad para lograt la ú'ansform,-wióu necesaria en ef logro del bien común. tados, t~t1icnd o bien p rl'S~·nte gu~ la propi,~ evaluación l!.S una herr<1mient.1 efkilx p.;ra el de"''rw llo, en dond~: se pmp ugnt' d tr,\bajo en Ctluipo, la \'il.iomción de ¡,1 ,,ctid dad especííit u de .:ada inv<:stig.:lCión, w" J,) j·ust.:\ d iscrinÚliKión y accpl ación tk los ~'aradig­ n'ltlS cuanlhilt1VO!' v cualitt1tivns. " En dl:'finitiva, rcp iiit>ndl' las palab w s de P(•irn::.c:rt: "L1 t'Vi\ lu,,ción ddw b~ncfici«t ,) 1,, ciencia, llt' distor~ion<~rl<~ ". 2) Sobre los cespons~bles • lización" que tc1n t'n bog<~ est.í ('r: cs l<•~ d ías. l« un h,ersid<ld y J,~ im·estig,Kié>n no quedan t:xccptu«d,,s d~ ;;u 1\mbitn. Tal f~·né>meno ~s rt'<~ L concr<·to v no st• l' t.H'd<! ::t•slayar ni prctc·nder (\lle e~~ :~lgo p<;nl íos d~nüs. l11 economía no e~ 1,) t' Xc\uvcn tt• en e~tc fc:n6men•J; 1<> cultur,1 y¡., sociL>ci.1d to•i,t, c.•t:n bajo su in flu;~n.:ia. v · Jllnto con ~!>te (\)nCt'~'lo se cncut·nll'<l el d~· C<•opt~ración Jnt~~rn,Kinnal. Ht'\' v en dü1~ sub; igu icntes e>to~ dos modo~ cÍe: ;,id1l lnd iCilr.in el des,lrwlk' d,~ nuest:11~ Sürit•ti,ldt·~. v I:'Stt:: dE>.s .umlio derend<!r:Í del g•'Jdn de~,, ~. ticipac iór. de todt•~ y cada L:;10 de nn~ntw::-. 1 • De ahí que incrcment<1r c:l encut·n <rt' ~·n t'OS de soludon~:;. es i.n:pn!:'dndible p<lr,, ;mc~tr<: crt•cimil'nto y nut•s tri1 (ompetit\\·id,)d, ~'~l'!) con \lll ll,~macto dt> ,tt(:rtcinn: manll!ngamos nues!r.il iden!idnd. L,l \ctea dl' ,~ klc<1 giol,1ll nP dc'o~ Wl' fuud irnos. En mi p,1ís h<l)' u 11 d it:ho qu~ c•xpr~·,.,) "j·..tn tos p~ro no,) .non tonados". fu;ltcm<~m•:. \.'C)l'\ el reslo cl.~l ntundo par,. . p rdgrí$ tu·, P "-\1\) sig~n\ü;o; ~iend<l del queh.t<:er científico IE'cnológico, ya sea gobierno, universidad o Cl'ltidad privada: Eslos organismos de dt~SMrollocientífico deben d isponH dt• cód igos de étb ), y que el n:speto a éstos p\·~cn en el nwm~nto de lil asign,Ki6n de 1'1:'·~-ursos ydi:' promoción. La étk'<) dC!bc se:- la virtud por excelencia del inwstig,K1nr, ya se<~ t•n su activid«d ~spc:cí­ fi(« o en l<~ n~l<:ción S•xial qu~ de ell~ surg0.. 3} FINALM ENT E: hasta este momento no he querid o uiilizar la ex~'rf·sión "globa- Atnéticc. L(l lin<1. t:un la riqtK·u de su ¡::~·nt{'. de' Hll histo; i,l J' d e· sus lrad ícione~. Jvntén)onos pan1 r.:·du(~,lr l~esdt· Id pl't':lnis;t dt• r" étiC"u, de ¡,, fl•l'lllací<in d<: p,• rsonit~ int~gn:ts (:on (Otr.pnm"l isü social, ~on r('l~'íl­ cidact pM.:t lt>gB r h1 t•·,1nsform~~ ción rwn ·S<'lria ('n (') jogro dt•l bic·n comtÍ!). Des«rwik:mos las ~'c•lítir,)s nccesMias de· prom0ción ~~ inie!·(a;nb¡o, fnnnenw:; iil~ n·d~s que no~ <:nnL>cten y tt'n~am,);;, el m tmdn <)1 i nst,mle, pew q\lt' C'l n~undo con.c•zr,<nue:;;:ra idcnticbd, }' ~obrl' todü, ,,~~~· ¡,, n~'¡.'ct-e. .1 ~