Viaje y recepción del obispo de Antioquia.

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VIAJE Y RECEPCION
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VIAJ[
y RfCEPCIOM
ILUSTRISIAfO
SEÑül{ OBISPO
ANTIO~UIA
MEDELI.IN
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lXPREXTA D~L ESTADO
1873
B..A.r\lCO Dl::. LA REPUBLICA
81BLlO T&<;A lUIS - ANGEL
ARANGO
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.DEL ILUSTRTSDrO
Sl<SOR OBISPO
DE Al\ITIOQUIA
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POI' una in~piracion
q\le beüdigo,acompaïié
al I1us.hísimo señor duetol' GO:'<ZÁLF.Z, ell Sll vinje de c~ta capital it la ciudad de Antioqnia; y por ceder á \lIlll lisonjera exigencin" y por pag:Ll' un trilJuto de ~ratituJ
á los caballeros que me la han hecho, voy á de"cribir
C'3ta fiestlL cristiana, que ha dejado en el f())]do de mi
alnm dulcísimos recuerdos y tiernas emociones.
Siento po:5itivamente no poseer doteti descriptivas,
pues en ninguna ocasion las em plear'ia con más gusto
que en la presente.
Pero ya que no las poseo, ruego á mis lectores que
me otOl'guen su indulgencia, en gracia de mi [mena volüntad j del sentimiento
que me dicta estas páginas.
I
,
Séame permitido hablar algo aquí de la consagracion del Ilustrísimo señor GONZJ\LEZ, á fin de que quede en Lin solo todo la historia de esta festividad, que
vivirá en los anales de la ciudad de Antinquia, y que
los padJ'cs contarán a sus hi,¡'JS t~n las {,~ulee,;vclaùas
del hogar, cuando andflndo los tiempo>:, cllos evoqucn
¡;US rccnerrlos y verm ]O~ hechos [LI tm ves Lk las dell!'las nubefl del fe,¡¡po y de hs );:wn:l!,; 11\,·;"(Je;'~;:::jr.Ún.
'1c !;¡ C:~,;'-("1jl'.l·a V (le: las liÍn-¡,j¡¡::",.
t QI';::n no yc;r~t Slj pamLio n.1 t¡·:t'.'(;" de b;!;l':!fJfI'S 7
Por rnoiivœ que no es dd ea,;:> rc~ol'clur Hf{llí, :Y
,I
il
-4re~pecto de lOR cuajes impctro un genero¡.;o olvido, la
Silla epifieop:tl de la antigua diócesi~ ~e trasla.dó Ú est;¡, capi tal, debiendo, tlc..,de fi \le tal tra"lacion
se vcrificara) :>s\lmir el obispo electo el título Je Obispo de
McJellin y Antioqlli:t.
L~1.tra¡;l:1ciol1
:-00 verificÓ
l'II
18138, Y este IwdlO cr.ll-
EÓ en lo.,; lIobie", hi,jos ùe la ciuùad de Alltioquia
un
profUlHlü y justísimo pesar, el más acerbo de todos lus
que aquella ro:-;pot:1ble .Ysanta matrona habia devorado, de . ,;ùc que b mano airad:t del infortunio l):tl'cce pol:'urse sobre clIn. y desgarrade el corazon COll ¡';U8 aceradas uñas.
Ah! es prcciso ¡;;<tbcl'cuántos desvelos y sacrificiog,
cU(mt~ abnegacion y cOl1staneia, cuánto hCl'OisIllO,pudiera decir, les hub~a costado :.'t 10" hijos ùe aquella noble ciudad la constrllecioll del magnífico templo que
servia allí de cateJl'H 1, pam 111t:(lil' por esto la magnitwl de su dulor y dc '-ll Jesulacioll, CUllllJo vieron ccrrada aquel:a baHílica en otro tiempo poLlada de armonías, alegre y ri¡,;ueÜa como la casta esposa en el
dia de sus boJas.
Desdeentónces empezaron los esfucrzospor1a creacion de Ulla nueva diÓcesis; y gracias á la fe :lccndrada de los ltlltioqueñoH, á su indómita persevera.ncia, á
la netiva cooperacion de Jistillguiùos ciud¡trlanos y al
c:-:píl'it.u conciliador del Ilnstrísirno señOl' Obispo doctor Llon V.UERlO A . .ln1ÉXEZ, el anhelo dc la noble ciudad r!lé eOl\mac1O de un éxito feliz.
El i"lt'tre P8ptífiee que con tanto acierto y con
una firmeZfl. herJic:1. rige hoy los destillo8 de ln. Iglet-'ia nnin·}"~a.l, hn terrible y tenazmente
perseguida
pC'l' :.':'; i'<~"~;;l:'iu:'
de b J'cvo!llcioll imph, accedió á la
E>Ú) (:¡¡ d ..q'wl~()" ll¡.;(I~ :Ürihlhclos, y dceret.(J la erect·i;·;: ,L' . '·¡:è':.t di\';;~(",i;-" y cl:f;iÓ para OlJi:-po de ella
aI ~lllilJUlte &u:crdutc, Lloútor JO.clQL'lX GClI.¡.EfiMO
t
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(; O~)I,;\ [,EZ, Cft11lpCOl1
e.!:,"t'(~:;io
y mil veces probaùo en
lots oat,dltui ùd SeÏi.or.
El 21 de Setiembre (¡ILimo, un concnr"~) inmenso
henehi~L la:05naves de la c:1tedral de Medellin.
Allí estahan los altos fllllcionarios
del Estf1,(lo, los
Dipntaaos :i In Leg;islntm<L, .Y todo Jo m:lS g:1'<1l1:tdo y
seledo de la, sociedad mcdellinense.
lina. solemne limeion i"~t á, ('c1ehl':trsl~.
El Ilustrísimo
serlOr doctor GO~ZALEZ iba á ser uugido con el óleo santo; ibn, á recibir la. inve~tjdUl'a de
pontífice; iba, á poner sohre I'll.';; hombros el g:rave p(!so y la inmensa respon:;:l 11ilidad de pa¡;tor (leI 1·(~IJf\.ïlO,
que Dios cu SU:05 incscl'litahle~:l jnicios le habia confirrùo.
El ticl'Tlo, rn:~jcstllosO y pndico cel'~mnl\¡,11 de la.
Iglesia, se ejecutó con reco?;ímient.o y clevo<:ioil.
F.\ nnevo ungido ùd SEXOU se humill{¡ en d polvo,
y levantó despncfo1 ~11 cabeza cuhiprta con ):L mitru,
apoyallo ell el báculo de b te y de la. e,"peraUZf\.
No será fuera de propósito n~ro\'dal' <{ue despueil
de la ceremonia religiosa, hubo en cas:t del cilllladano
Prc~idellte del E:05taùo, un mn.gnífi.eo ref~'e:05eo, á que
concurrió toùo el clero y muchos distinguidos eaba-
Herof'. Por ltt noche del mismo dia hubo pn In. mi:mm
ca<.:aun cHpléndido banquete ú. qlle rOlwl1rrÍcron IiI<;
Diputados :'i In. Legislatura, Ins ~'(:crd;lJ'im; ùe dl''Ôp:lello, el señor
ClIra lIe la c.atedml y otros
ra b"llC'l'O:';
En c«te banquete
r0ínó la mlt:1 re:::petuœl'l. f¡'[ll1(¡ue~e retira.ron á l:tH
onec de la noche, satisfechos y reconoeidof1 pOl' la exza
y conlialidarl,
y
IOH convÎ(Ltdos
qllil:iita obsrquios¡dad
del
su ti igll:L J" l'l'~~pctnhIe
:':c!ÏOl<t.
ci'HJar]auo
Pi'esiùente
v de
~
G
III
El 23 de Setiernhl'c era el dia. sefia/ado pam em-pl'(~ndel' el yia.ít· ku,ja l:l capital ùe su Diúee:;;i~, d IlllStLÍ~: [HO "cÚOl' (; o:\z_Ü,:z.
Amès (L, t'!!lpl'c~llC;d' (':'oLt lll[lrcha; cumplia lin deber sngNdo .v t¡('nllJ. Fllé ¡í, Orl'e(~el' la V í<.:ti HW, pura. y
sin mancba,
en lit ig][',.;ia
can:-;o eterllO Je lit} amigo
ue
ja "\'em-crnz,
por el des-
muerto un aÚo ántes.
El am;go fiel ilHL ¡í, lIe\?r el tributo de sus oraciones
dû .:iUS big-rima . ", il b tUlllb:t prematuramente
abierta (leI amigo :wsente.
Así :-::emezclan
c()llfullllen las alegrías
la;-1 lttgrimas del hOlllbre sobre la tiena!
El viaje sn eIll prcllllió cerca. de las ocho de la mañana.
Elllll~tl'Í,;:imo ~cíior GO:\1..\LEZ ibn. acompaÙado de
varios caballcl'os, entre 10.'3cwdcs se hallauan llluchos
sacerdotes.
Cel'Ctt
(k hs S01"; de la tarde llegaba:í, la parror¡llia
de San .J'~j'Óll¡ ¡nu, f;i Il ]¡alll'!' oeurrido en la, marcha incidentes dignoH de contal':;e.
El Cura de esta parroquia, acompañado de gran
número ùe l:'llSfeligreses, salió á. rccihirlo.
Al encontrarlo
le dirigió la palahra, felicitúndolo
por su cxaltaeion·ú' la. digniLlad episcopa.l, .Y salud,í.n·
dolo en nombre de lo" catÚlicos de San Jerónimo, CR
decir, de todos los habitante;,; de este Distrito. (a) El
llu"trí"imo seÎlor GOI\ÚLEZ le respondió, como él sabe
responder.
Poco c1espllc¡,;,el repique de campanas, 108 cohdes
y la, mú~ica, Il~testificaban
al iluHtre viajero el afecto
y la nlegrÍa C(ln (lue ::<ele t'ecibia por el pueblo que él
.iba á apaecntar.
Al llegar á la ca,sa del señor José María Itodríglle~,
:r
.r
y
-7--
qne le ~stabn, preparada., .lU hijo de ei'te estimable sugdu L.: di¡'igiÚ la palabl'lL en verso. (b)
•
Ea ae(llClIa casa se hcspedó casi tuda la comitiva,
J por.n (le ,p~le:) de la llegada., ~e ob ..•cq uió ¡í, los huésp:';Llcscon \IWt :lbulldnnte y bien IJreparada comida.
En el Clll'SOde ella hubo tres discur;;os, pronuueÍados re:,:pectivamente pOl' £1 Ilu~trí:-;ilIlo seïlOr GONZÁLEZ, p'Jr el seÜor dador
José María Martínez P. y
por ('1 '!lw esto escribe.
Un poco Ill;tS tarde, la banda de mlísiea, hábilmente dil'i;;ida por el disting1ido arti::>ta seÜor Santiago
H.amíl'cz, obsequiaba al Prelado con una hclla f"erenata; el pueblo todo se agolpó al extell.'lO patio de la casa del seÜo}' llodríguez á c\mcnrrir clln :,;n presencia
al obs:.:quio; y el I1ustl'bimo SCÏlOl'GO~Z,\LEZ e{lle l'abc
que nt llIision es la mi~ma que les rué conterid,t á los
ap6~t()h's por el divino ~,Hrtil', cnando les dij0:
"Id á. enseñar á todas las gcnte~";
le dirigió su palabl'a in~pimda á aquella multitud.
El le dijo al que esto escribe: "es preciso que el
'puehlo ¡¡epa qué pienso y qué quiero".
Aquel bellbimo ùi¡¡cur~o tuvo por objeto combatir
las doctrinas materiali:-,tas que tan fUlIe:>tos estmgos
han c:wsado, y que son tan telTiblemente desoladoms.
Si con la pl'edicacion de estn. doctrina He ha pertlll'hado tan hondamente el órùen ¡¡oeial; si el materialismo es J:1 negaciün del l\,lma humana y de sus dcst !lO;;inmortales j ¡¡i él es ltt negacion de las enseñanZ.lS y de las tmdieioneH de la ley antigua; si él hacc
del Ol';:;to ua impostor y ùeI cristianismo LIna doctri·
1m tth~~FL1¡L i cómo n;¡ HC~::lbi:t e10 eonÜ\1.Ci' ùe prcfe.
,,'"èllCÎ:l
la
aÍL;íl,;ion
ciel Pl'e1;¡:J.o
Ú
CO:l1tJatir
eHa
¡}octri·
na i:n¡Jía, (il:') I):ll'oh los (lj(I1I'~s (r~t!COll:Clli¡lIlel deHh..~·ltu'll,~~ltütle las malas pasioncs, y r.nnadü el br::tzo
Ù~ es(t sectlt que en Francil\, prjTn<~ro,y despues en Es-
-8-
pnfia, ha cometido excesos de que se avergÜenza lq.
humanidad entera?
En el materialismo estÚn como en potencia todas
. las doctrinas impías que han hecho tan incierto 'el por.•
venir y tan precaria la existencia y la paz de los :;;o~
ciedades modernas.
Este es el grande enemip;o fi quíen dphe combat.ir.,.
se sin tregua. El es quien apri~iona al gran Pontífice y
quien dieta las leyes de per¡.;ecucion y de intoleranà~
en Alemania., Suiza, Italia &.
Perdónese esta pequeña digresion, en gracia de la
importancia del asunto.
Al dia siguiente, 24, se dijo una misa solemne :í
<Jueasistió el Prelado, quien tarnbien celebró el santo
sacrificio, en honor de b Hedcntora de los cautivos,
en su dulce advocacion de las )lERcEDEs, y fueron con.•
firmados muchos niños.
Desplles de un abundante almuerzo, la comitiva so
puso en marcha, acrecida ya por muchos vecinos de
8anJ erónimo.
Si este pueblo no hubiera sido sorprendido por la
casi inesperada prescncia del Prelado, pues segun clitinerario convenido, el cual rué preciso llwdilicar, no debia llegar hasta el 2·1por la maÜ:ma, la reeepcion habria. estado más espléndida; pero el señor Cura de et'ta parroquia, el señor Rodrígucz y demas vecinos, deben estar satisfechos de lo qne hicieron, pues tanto el
Ilustrísimo seÜor GONZAI,EZ, como los que tuvimos la.
honra .de acompaña.do, quedamos agradecidos de l~
benévola y generosa acogida que allí se nos dispensl'.
IV
Cerca de las doee del clia llegaba la numerosa comitiva fi la quebrada de Taletflnes, límite de los distrito~de San Jerónimo y Sopetran.
--
~l --
:En In. playa dcrecha de est.a quebrada hahía un nll~
rnerof'O concurso de ca balJeros de Sopct\'all.
Al aproximarse
e11!ustrbimo
HC'Ï1or GO:SZ.\LEZ, un
grito de alegría se escapó del pecho de aquel inmensu
gentío,
En e~te punto le dirigiÓ la palahl'rt el seÏ10r pl'eshí~
tcro Mm¡ricio Mejín. ( c ) cura de Córùoba.
El Illlstrí¡.;imo señor ÚOKÚLEZ, que habla con pas~
mo:oa ihcilidad, respondiÓ á este ùiscurso.
Siguió la comitiva, aumcntarln, á cada paso con gen~
tes de :i caballo y de :í pié.
La marcha era
difícil.
:rit
Cerca de ln, ciudad de Sopet¡·f1.11, en una pcqueÏ1a
eminencia" hay uno Je 103 pn.l'ajcs rnÚs amcnos y pin~
torcsccs que conozco.
ClIitivlttlo con esmero y poblada. de graciosas casas, fi.H'ma uua especie de aldea, de aspecto rislleïlO y
encantador,
Desde ¡ssta eminencia se alcanza á WI' el rnnje¡.;tnoso Cauca, y mas alJÚ, ünvl1elta en un manto de verdura, formado por ellll.ioso follaje de los :'írholcs y de las
palmetas, se deset:brc la eiudad d2 Antiüquia, que ostenta la alta Ülchada ùe su magnífica catedral, como
f'i levunt:t\':l. la altiva. fl'cnte, que no ha, podido hl1lnÍllar el infortunio.
En el paraje qlle voy dc:"cribiclldo y qnc se conoec
con C1nOlllbl'c de Llano de l\íolltÚICI, hay nn,~ {'sI)(~cie
de plaZllcla., y allí d{\ha,jo de U110~ cOl'}mh:ntos {u'holcs
Ile rico f()lbje se extendia un toldo. Cohi,jfUb por l:L
sombra de este toldo y del follaje de a'l'w!los lLrholes,
SB lcvantaLa
una tribuna.
A ln, cnt-mdn de Cf'>ta pla7.Uda hahía un arco "eo'etal, pcm1Ítasemc la cxprc;-;ion.
Dllbajo de [tqnel tolùo se detuvo elllushí:5Îmo
sc=
D
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1ù ----
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lior GOl'iï. ..\r.Eï. y elllllnlCru~o
:-'{~(lllito que lo acompn,..
iïaba.
El j(l'!CE 11t'llja¡¡¡ín 'fn><:l¡:lhcio;~, alllll\W\ (lel Cdcgio de ~anFe:'IJ;¡lldo,
le d;l'i:.:·j<i h l'alabr¿L al Prelado,
dC¡';\!l> hl, tïil.l\i\l;¡ allí:\vm,tad;¡,
( \1 )
}:¡ Ilt!'[l'h;u\l H'Ù\;i' Ci \'Z\U:;; le rl'spomli0, permítas(>ll1C l"l'pl'lirlü, ('omo ('d l'id H: re~pOllJ\·I·.
Lo., cohdl'i", 10:-;g: itos de :degría. d contcnto pintallo en tüdu;.; los l'elllblnllt\'.~, loi' arcus de pallllns, de
ramas, de 1\\ u,;:~(il" y de Horc,', los :ulonll IS Lle la~ ca:-'as
ùe e"te deliciuso par'lje, la Cl'(~(;iellt.e cOIH:ItlTencia, todo, todo pregonaba el elltLl.~ia"lllO y la fe Je los noble:,:
hijos de ~opetraJl.
Pero uu era esto to(lo. Las l'l'l'pd:! lJ]e,,; ma trolla:,; y
vír~~()m',; dl' nq1i(·lb ciudad, (h·]¡ii\ll tOlllill'
parte l'Il Cst, li(~~;L:.
cïi"(:llla:
y dIa" 11l;¡"i¡'an;¡\ "ti fe
ardiente)'
"11 bucn gwtu, ell 10< :IdOl no:.; (,Oil q~!e~e 011galallaba
tau airOS;lIlll'llte h C<IHlad,
Cuando Lt eomitiva dcsccmlia pOI' lit pequeiín. cuesta q ne ~orlll11l:l~ á las callci', ln. banda de mú¡;;ica dirigith, po\' el :-:eiío\' Ramírez de quien ya he hablado, po1)1.1lia tie armoní,lS la espacio"a p\am;
las campa nas,
cdlada-; ,o.. nIdo, l()~ collC,tes, los grito~: todo flll'lnaba lin
cotleierto du luea alegría que en vano aspiraria mi pltlma tÍ descl'ilJir.
'A la elltra<1a de la plazltl'le alzaba un nreo con:-:truido con exquit'ito gusto. Bra una, especie de cÚpulaaél'ca, sostclliJa cn dos graciosas columnas.
Las casas estaban adornndas con balldcras y colgadura~, y en ]()~;ImlconcB, puertas y velltt\\laS, radiantes de ale~l'Ía .Y de eontento, se drjaban ver las seiíorn:.; y !'l'Ílflrita;; de la cimIn·1,
Clla \.'UlllUlh casa Ics "..:taha [)ïepa:'a(L a; 11""t. ¡"i_
mû seUll1' GO\z.\u:z
y :L ;'1':'; CI'l;¡,lïlt·!'
de \'¡'"
En el cxtelli50 patio de (>sta casa, cubierto
con un
la~ ca.,;tas
.. -
~olc:1l }
J 1----.
cIJicln.dosilmente,
[,11hl¡]fU[O
se sil'viÚ puco dc:-;·,
plll';- :l'.,b :;l~:':\ll:! del Fl'cL'llfl, IIll nbllnù:tIlte, riql1í"ill:O
•.y '\'1"1"
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lns fl'lItaE; lUg dIll•.
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rez, n~'li:<a \ cl'llndl'l':¡ illd1te insplrado, rcga~ú lÍ, los COllCUlTe})tt~S C:OllllJ1:1, ben" / ¡;eL-LimcnbLl canc:on, qnc trn.dllei,L cn U,1ll011Ías delicada:.; y caùenciusas,
el gozo ùe
loiS ~utLi'~:;ntes (:.e Sopetrnn, ( e )
ClHt71(:C~ las Últimas notn.., de este gmto
concierto
3e hl\uie]'on extinr;uido, e1111ÎfmlO seÜur Ttalllírez le dirigió ja t,,¡l:tbra al Ul'stl'isimo scîím' GO~Z,I,L¡';Z. (l')
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.u:t l:l'\~' ( l~ ::c"./ :l.¡CCl[;()S:I, C01'ÜJa .lUilU J\! a mal' il':.llca y n'''p:tL:u~;¡;, illli¡r:ac.:ÍoD, l'l'innroi1 en èHlud I'cfrc¡-;co,
La '; ¡.'!sie:t c1:'jn ba olr Sl!" alegr:;s :trmullías, y era.
solo inlel'l'lll\lpid:t
For los omJore::; que se sucedierun,
par:t maniíèstarle al ilustre huésped los I;'ulltlmicntos
que rebosnh"..ll en foiU alma fervorosa y creyente.
E¡;;to., or:H1;)!"es fÎ.leron los sefiorcs Andres }I. Sanin,
Francisco 'J'rcspalneios, Pío Cla.uJio Gutiérrez;, el jovcncito J llvena 1 .Tarf\lnillo
y Alejandro Uribe Gaviria, cuyos disllul':--lOS se publiean llH\S ade1n.nte, COll ex·
eepcion (k algunos que no se han podido conseguir,
acaso po\' Ulm lamlable rnollebti¡~ de ::;11:'\ autores.
A c:~tla uno de estos ciisc:1rsos respoJl(] iÚ en términos ulleeuQc1o¡;;, sorprendiendo
i todos los concurrcntes
IJOi till D~liz iï.'npr()lii:::iHciul1, el llustrbi~no
~;pîior GONZA1
,
LEZ,
POT la. noche hubo .!1llí ;.1ismo un lucido hnnquete,
cubiertos. En éfiLe t:ulJbien rciuaron lu.
'~ol'dialitlad, la aJegría y ln, franqueza.
.Je r-u:1l'enLa
--
1'-2--
v
Al din. signicnte tle~pues de almorzar, cOlltinwllllùi
£1 viaje. La comitiva em lltlrncrof'í~iJlla.
Los caballeros que ell Sopetran prepararon el reci.
himicnto del l1lli-:trí~ill1o selÏor
ddll_'1l
GO:\:J,ALEZ.
e¡.;tar
,altalilente satip,fcc!los por el éxito qne al~anzaron,
Esa. fic~ta hará época cn aquella importante ciudad, y la recorda,rémus .con agrado todos los flue a~i:-:timos á ella, por ln. espont;Í,¡lea y esmcraùa oJ¡:-:C(luio:-:idad con que fuimos a,cogidos.
Cel'(~a,Lle las once de la mañana (Id ilL :¿'í, 1Ie<~:ó
la comitiva, (~ las mú,rgcne:::; \lei cal\(ttloso y puétiéo
Callca.
La espacio;.:a harca estaba fimcion:llldo dc:-de las
cinco de la ln:Liïana, y á pesar de e:40 Ill) ha bia dado
abasto para el pllSO de todos los qlle sn rlirigian ti. b
ciudad de Al1tioquia, Ú contriiJuir Ii la, slJlelllllc recepcion del Prelado.
Se acordó que toda la comitiva. pasaría primero, y
el Ilustrísimo i'ieÏlor GO:'\ZA,LEZ y al).!;unos ca!J:dlei'Os y
l::1acerdote¡.; que dehian acompaïmrlo en la tmVt~sía, sc
demoraron en In casa que hay Cilla banda derceh:t del
a
rio ..
Gentes de ácaballo y de
Í1 pió, en partidas nnmerosa¡.;: llegil ban de la ciudad de Antioql1ia á la orilla izquierda del Cauca, y la barca se ocupÓ ùnmute dOH ho.
ras "in de~;ean;.;o CIl p:tsar á Jidm orilla, Ü, los que formaban el séquito del Prelado.
'
El Rol enviaba sus ardilmtes rayos sobre la. tOi'tnda
playa de la iZ<luierda, y el nl\lller{;~bim()
C'.OIW.\H'SOno
ptlrecia, senti,'!o: tan grande así em ~;llanhelo por recibir al iluHtrc hué:'ped, qne silllbolizab:L para la noblc
ciudad de Robledo, lus más queridas espcranws,
El iba á enjugar \:tÍ'lhí,grimaÍ'l vortidas durante cinro aoas por a(llldl:L r(>i'pcta.hh~ ¡natrona; él iba {L COll-
--l;i--
solar á h lO'Il'Hia,
de
CI
lar(l';\
ori¡mdaÜ .Jv dcsolacioll.
b
l:HlCd,t elevarsc
á la altura. de lo flue pa:,;Ódesde este ll1sta,ntc.
LC,'ldlU dc;;eribir los trasporte:,; de gozo, cI frenesí
de la ak'!,!;l'Íll ùe aquella apretada. multitlld ?
]1~Jl presencia
de e"tas escenas, lu. emocion no puede. exprc::;a.rsc mas que con el muJo lenguaje de las lágnmas.
A la ulla
la tarde debia hacer la. travesía. del
Cnnca, el Ilustrí.-;imo seÎlÜr GO~ZALEZ, acampanado, co~
me ÍLntes he dicho, de alguno:,; caballeros y sacerdotes.
La barca estaba ernpavesada call cOl'tinajes y ba.nderas; un mwho toldo la. cubria; el pavimento se ha-
Sicnt,Q
(1\1l~ mi
Sil
pluma no
ne
llaba cuiJadosamente entapizado ..
lUcia la testera de proa de la emLarcaciol1, estaba.
colocada la silla que debia ocupar el Prelado.
Aliado de ésta, conveniclltemente
distribuidos, se
hallahan los asientos de sus campaneros de travesía.
l-l:'tcia la popa est:tba la banda de música que di~
rige el sl'ÎlOl' Santiago Ramírez.
LlegÓ el momento tan larga y ansiosamente aguardado.
El Ilustrísimo senOr GOKZÁLE?'; hi7.0 de á pió el peqneño tmyccto que separa del rio la casa donde se ha-
bia, demonulo.
Cuando la multitud distinguió el vestido del Prehc1o, dió un inmenso grito, que RC dilató tt lo largo del
majestuo:,o rio, y sc avanzó ltpretada y compacta. sobre 1:1.Ol';lla .
. El ih~tre viajero ocupó su puesb, y lo mismo hi~
Clel'on SU5compañeros.
La bllrca henùia las aguas con un movimiento pausa(b y apflcib!e.
L:t inmensa ml1ch2dumbre rchoRaba de alegría, y
los co}¡cl:<~'ly d.::SCIUgIl8 se dejaban 0;1' sin interrupcion.
La músit:a J.alxt al viento notas solemnes, que las
--14-ngua,,.;escuchaban a(:as!) por la primera \'01:, en aquellas soledades majeslllo:<u:-: y eternas.
La emOClOn cr:\, .-=>"cner:li.
:El inmenRo con~lIr~o estaba dll'io de gozo: c'fld:\,
cual qneria cstar lO:is (~erca del pUlIto ell (IUC la Ílarea debia detenerse.
Llegó la barca :i ln orilla izquierda.
El presbítero Sr. Domingo Antonio Angarita, Cura
y vicario de la ciudad de Antioquia, salwlÚ en un ":cntido disenrso; ali I[I."tr(' \'¡n.i('ro, ('Tl llon:lll'e <le ait' ¡elb
mllchedulllhn~ que lo recihía eon los brazos a]liert()l',
y llena de entusiasmo, de j(~ y de esperanza. (k)
Desùe b barca rcspolHliú el Ilustrísimo seïlOr GO1\"ZÁLEZ, sie.mpre con aquella
uncion y fi.;licidad que le
son propms,
Terminado su discurso, bendijo á la inmcnsa muchedumbre, quc permaneció de:,;cubierta durante la escena que voy deseribienùo.
Allí efitaba la más granado de lot ciudad de Antioquia, y todas las clases se confundian en la camnn alegría, en la. comun dicha y en las comunes e~peranzas.
Vario!'; miembrof; del Clero y varios caballcros distinguidos entraron á la harca á saludar al Prelado,
Este saltÓ (t tierra y montó en un briosQ y elegan-
te caballo, ricamente enjaezado, que f'e le trajo de la
y la inmensa comitiva empren-
ciudad de Antioquia;
dió su marcha.
VI
Pocos paiflajes lw,y mÚs poéticos qllC cI que form:¡,
~l ca.mino que de las márgcues del Cauca conduce ú,
la cindad de Antioqllia.
RI ancho call1(~llon prcsenh c"c ,,"'wdo ¡k no de
animaeion y de vida) flllè e~ el prí\'ih:giu de las tierras
(~alientcs.
'--
.l;)
o
por n,lLos .Y copudos
:irJlules, (¡ue cleel:. )'0;' del ieiosos CllU,!1izaÚos pCI' el y(~\'(h' d:spe<1,
S.J11¡]¡i'elulo
l,.n
:y elllhab:;
¡¡¡¡¡do
pal'
lOF; 1:',n()llCl'O~, (i ¡le
Cll ~reLd
iJo:-;,
,tllí de CCI'COR, 11l1lestm pOI' tO(lrts païle:-; ese lujo ùe vegetac¡on, esa asombrosa val'ied:ul, esa. riqueza
de producciones, que lmce tall all11'l\O el pequcïio valle ell ·~uvn, parte mas e1eyada fie halla la ciudad.
E~c n~lCho camellGn em estrecho }lara el inmenso
COllCIll'SO que le servia de séquito al Ilustrísimo
seÏlOr
sirven
e OX,d.L,·;Z.
A 11JlOy otro lado de e~te call1ellon y et trechos
il'reguhrcH
ha.y algunaH habitaciollc,,;,
algll11a:-:;ca¡.;itas
l¡l:~nc.as, que Il' comunican
lin a:::pecto mÚs l'isueiío al
palsaJc.
En todas aquellas
ha bitnciones
se constrllyeron
adornrl,(]Os
con musgos y COll llorCR sil-
arcos de l'arnas .Y <le pallll:ls, pOl:ticfLlIlentc
con h:lllÙCraS, con frutas,
vestre::: ..
Al pasar por ellas el ilustre huésped, era sflludado por sus lllor;lclorcH y yccinos allí rcunidos, con
mucstms ùe infinito gozo; y los cohctes y 1.18 descargas, no interrumpidas
desùe el Callea, ¡.;credohlaban
con ardor.
La a.nimacion de los q nc fèll'mahan cst!; ~:l'C¡Il ¡to
parcela flnIrlcntarse et meùida que nos accreÚ,baillo~ tÍ.
la cimh(l.
Por íin llega-mas á ést:1.
La larga calle que debía recorrer la comitivi'" hasta la p]n,Zft p;:incipal, csta1¡t %p16nùiclull1cnte
ùccomùa.
Mi InTes de han{!c;\lS, con insCi'illCiol1CS v:triac1ísico;gn.dm'as,'ya de ricaf> telas, .Y:~de hurnilc!ès ramas u palmas, musgos, frutas y norcs Iu);c;:Œ' aJ'{~os
.
j' 1
' .
tnun it cs lcvantnelos clll:w J)í)Ca~I~Ue~ i'.;" 1:: cU¡:lllJlicfl-
lIl;t~,
};ru ti
vItuna
tr,¡,Ca Uil a';lJc(;tc
puede ùeseribir.
(;~,t[1" Cil
llD
C:iCh;¡ tUÙUi.', {Ille
mi
·-IG-
D8tide cinco cnadra~ Úntc;:; de lleo'al' {t la plaza
lwincipal i'ie encontraha. el primer ar~o, sostenido en
do:-; elegantes coluruna:s.
En una de estas columnas se leia:
JosÉ
.MANUEL
RmoN.
En la atm:
S. .MAlnÍNEz.
En el l"cgnndo, formado por los pliegues de dos
Iwrmo:';ftRlnndentl", se \'eia el retrato del seiio}" dou;
.luan E~t('ban J.l1ariíllf!.o:,á, cuya, inùómibt conRtaneia é
inquebrantable fe, se debe la c'üllStruccioll de la ca~
tedral.
Debajo del tercer arco se veia el retrato del ilutitre colombiano :;;cÏlordoctor clan .José JI/aria l'ól'rc8
(Ja.l/ceJo y al pié de e:,;toretrato, en letras de 01'0 tiObre fondo verùe, ;:;eleia:
.Tos(; )L\IlÍ..\. 'l'úBHLS C_\ YCEDO, DIGXO DE LA GRATlTeD
.JeA:'; DE
])E LOS HIJOS DE AKTIOQUIA.
El cuarto estaba, decorado con el retrato del modesto y humilde sacerdote, antiguo Dean de la catedral de Antioquia, señor JosÉ MARÍA HERRERa, que á.
su iuta,chable virtud unia un corazon sencillo y recto,
lleno de bondad.
En el quinto se veia el retrato del má.rtir de la fe
y del modelo ùe inquebrantable firmeza, Ilu:stri:simo
señor Obispo Do:mNGO A. Itl.iNO.
En el sexto, que estaba á la entrada de la plaza
principal, se mostraba el retrato del Ilustrísimo seÜor
ObÍspo, Ju.\.x lm LA C. GÓMEZ PLATA, de tan grata é
imperecedera memoria pam los hijos de Antioquin; y
en la corni~<t del arco se veilLen gruesos caractéres
de oro, el siguiente letrero:
18 DE OCTUBHE DE 1846.
--
17 --
Fcdm en que el Ilustrbimo
señor GONZÁLEZ rué
urdcnado de presbítero.
Fr<~nte á la puerta mayor de la catedral, y fuera
del at.rio, se alzaba un anchbimo arco, adornado con
el retrato del ::çran Pro IX, de ese anciano venerable,
cuyo nombre nu puede evocal'se sin un religioso respetn'y I'in una tierna emociono
PlO IX es el gl'all mártir de la. fe acendrada, fe
que sost;cne su esperanza en el t1'Îunfo del Uri:5to sohr~ la fccta impflt Ji derrlllgógicil. que la persigue; fe
que le da la incontrastable ÍÎrmeza C'JU que desafia á
5U" perseguiflol'e5.
Deb:ljo de e:;te arco se alzciba á pequeña altura, un
anfitt>atro, con gl':tdería pOI' todos los la:los.
El ltrco fOl'lllab:t una especie (Ill ::lolio. K'le anfiteatro y In::;gradas que le daban aCCE~O se hallab<.Ln ricamente entnpizados.
Este fué ellugiLr destinado para desmontarse el
ilw5tre viajero, y cambial' ~us vestidus de viaje por los
de pünt~licc.
VJ::J::
Vu •..l vo un poc:o atra~.
Al ilegal' á las calle:~ de la. elltnula, la, numero¡;~
(~f1lllíti V:L ltlalTh¡Lba al ga lope', :'L Hn de 1\0 emharazar
h 1I):II'(;ha.
:W ;'uido CIue produci~.n ln,~ calvdlel'Í:t8 u1 herir
la,~ piedl'ù15 CUh laH heITaùlIra:,; lo" gritos de alegría y
de clltu-:iia:->ll1o de las gcnt(~:; Je que e.itllba.ll atestiLdas
laR bocacalles, las pllcrtal'.r Ins ventanas; la ince¡;ante
ùdoulLc:illll de Ins cubeie" )' d~8r:(/¡:lfas, el n'pique anilIl:Hlo .Y edl'e¡¡ituso ùe !.ts calli P:Lll:ts d<3 toda:.:; las iglc¡'¡¡,ll'i de la cillClad,
todo e.,to J(mlla],n, !ln concierto que
c811tuplicabu. el entusiasmo
y la llevaba hasta el de-
lirio.
2
-18-
La alegría se pintaba en todos los semblantes; y
Ii veces ;,e traducia en lágrimas copiosas.
El que esto e¡.;cribe se conmovió tan profundament€, en presencia de aquel c;.;pectáclllo, qlle en el
in:<tante en que pa~abrr por debajo del arco donde
c8taua el retrato dd llu8trísimo señor lÜAÑo le llamó
la atencion un amigo hácia ese conjunto indescriptible, y volvió la cara y le dijo: "no puedo l'esponderte,
estoy llorando".
Rn efecto, las lágrimas inundaban sus ojos.
i,Qué otro lenguaje podria expresar mejor, 6 tan
vigorosamente, sus impresiones en aquel dia memorable?
Por desgracia mi pluma no tiene el poderoso é
irresistible lenguaje de las lágl'imas; y todo lo que voy
refiriendo cal'ece de colorido, de energía y de intereso
Todo es pálido en preseneia de aquel cuadro multiforme y animado, donde el colorido resaltaba en primorosos matices.
La comitiva entró á la plaza principal, espléndidamente decorada con bandE'rl1.8y colgaduras.
La cas¡t consistorial se di:stinguia entre todas por
el esmerado gusto con que fué adornada.
Allí lucia el retrato dd señor don JUAN ANTONIO
MON que trabajó con intercs en las Córtes de España,
cUflndo en el t5iglo pasado se trataba de la ereccion de
la Dióce:sis de Antioqnia.
En la.torre de la catedral flameaban tres blancas
y gigante:,;cas banderas, que se veían desde una ll.'gua
de distancia.
Llegada la inmensa comitiva á la plaza, rodeó el
arco que estaba en frente de la puerta mayor de la catedral.
Allí se desmontó el Ilustrísimo señ0r GONZ •.\.LEZ y
cambió sn modesto traj€ d~ vi¡tjero por las ricas vestiduras episcopales.
--
19 --
esto, el ycnerable ¡-<crIar doctor don J osf~·
p.uwo, Presjllclitc de l~t C:ll'por¡lcion
ll11l11l'ip:d, de p:é Cll el Último peldaño
del atrio del
tem!,l(), le dirigió la palabra '11 Prelado (I) Y puso en
SlIS lmnm; las llaves de h catedral.
Apén:t" el Prelado tomó en SUR manos estas llaves,
IRS puertns de la espaciosa bal-dlica, ccrmdas
hasta. ese
in"ta n te, se a brieron de par ea par, y dejaron ver la
magnificencia y buen gusto eOll que estaba ornamen~
tada,
Parecia, diré repitiéndoP1e, la. ca;,;ta novia. en el
dia <le su" boelas, BItt o:-;tcuhba sus má:-i ricas g,das.
Un cm'o de ache> niÜ:t •..•
, ti~nHt:,; é ino~ente" p'llo-·
mas. ve:-,tidas de blanco, íjue debia manifestarleal Prelado los pin.dosos sentirnientos
del sexo débil, estab:t
cerca del el'itrado.
La niña MARíA TERESA OrtTIz M. le dirigió la palabra. ni Ilustrísimo señor GO~Z\.LEZ (m), y luego que
hubo terminado su sentido discurso, ella .Y sus inocelltes y bell:ls compañeras :-e arroùilhroll
humildes y
reverente:" é impetraron del ilustre Prelado la. bendicion para ellas y para todas aquellas en cuyo nombre
habla ban.
El Ilustrísimo señor GO~7.ALBZ les impartió la. ben-'
d:cion episcopal, habiendo 1'0~pon(lido á los di::;cul'sos
que ~c le dirig;,cron.
El estdm pl'ofundamente
conmovi<lo en este instante, y hs J;igrirnas revelaron la infinita. ternura del
con.zan del Prelaclo.
E;:;as l:ígrim.ls que traducian tantos sentimientos
distintos, alTallCarOn mucha" láp;rimas á los circunstantc:-::;llÍ,5~rintas de gozo, de t8l'1111ra, de reconocimiento.'
i Quién no habria llorario?
Despues, bajó del anH:en tro el Ilustrísimo señor
Go~rzi.Lp.z y se ùiri.~;ó á la c1.tedral.
En la. puerta. (le éJta lo aguardaba el Clero, quieI'.:
Hecho
M
\1:'.\
ilL\.f(!'Í:-;EZ
-·-20---
lo condujo hasta el altar mayor, debajo del rico pa,ho,
recamado de oro, que solo se usa en dos grandes fest.ividades del año, llevado en aquel dia pUl' seis respetables caballeros.
El espacioso templo parecia estrecho para contener
al numeroso concurso.
VIII
Despues de esta solemne y majestuosa procesion, el
Ilustrísimo !'leñor GO~ÛLEZ y la comitiva, He dirigieron
á la casa del señor doctor don JUAN B. LO\'f)oxo.
El acompañamiento
tomó la CH.rrera de Lopez.
Esta c'Llle estaba. adornada con exqui:,ito gu"to; l'l8
balcone:'l, la~ puertas y vent:1naR estaban decorados
con riclt!'\ colgadura.~; numerosas bandera.s iZ'ldas Cil
ambos lados, se cruzaba.n en el medio y formaban arcos néreos y flotantes.
De 109 balcones pendian graciosas canastil1a~ de
flores, que se columpiabùn
coquetameute
al touue
alicuto de laB fl Ul'fl s,
En "t phZll0la Cl)jlti;:;lllt íÍ. ln: plaza. principill se levantó ll,n :\1:::<.1.11~~lli.1nl:l'l, de s~i;:l metro:,; de altnra,
cOi'(I!lada pIli' ilil
!l¡·¡;.;;t);U lllùllllm~nto
hi~tól'ico: por
la h" nell'l'a <ple Jll.lll".thl en la, torre de la (::1tetl:-:tl el
8 <le
D;{~ií:.ll1hl'ü (h)
1637, Jia Je la iniwgu!'i.l.Ü!ÜI1 d~
la grnn b'13í:ic;t.
Ell ln. parte ¡tila ¡J,~h columna
se lela en letra8
de 01'0, ~()bI'e fondo bhlH:O :
8
DE D:C,iE.1>lBHE
DE
1837.
Y en la palote Laja:
RE"TAURACIO~,
21
DE MARZO
ilE
1873.
En la lnjolia .Y elegante ca,;a del e.;;tirnahlc 8eñor
doctor LO:-ílJOXO :-<esirvió un riquí,.;imo y v.lI'i:ltlo rcfre,.,e;o,d;)nLle h~ fruta.s y las tIare;;;, de que el'! tan pró. diga In ciudad de Antioquill, competian en abundl1n·
0··-·-
~1 .-- .•
cia, COll Ins delicadas pastas, con lo:; f!abr~sos dulces
las deliciosas bebidal:l.
y
La mes!\' del refresco, que tenia una longitud de
45 yarRfî, y á la CUll 1 concurrieron más de cien convi~
daùos, ocupaba nn ancho y e~pacioso corredor, somoren do pn!' nn toldo de yerdum, donde las trepadoras
entrdnzahan
~Ul4 ramus y ¡;US flores.
En el ccntro o['¡entHl de la me¡.1a Re aL~aba un BOlio ¡clnna,Jo Je verdes palmas, de musgos y de flores,
pri /llOrOsa y a.rtí"ti<':f\,lIlente construido.
E:::e cm, el puesto ÙC::ltillado para el ilustre huésped.
A1 lado de est~ ~o1io Ille ¡'ln 108 rl'tratos d~ los
ihlstrísilIlos
ohi"po;,;
GÓMEZ PL.\TA
Y RIAÑO, de los dis-
tinguidos
(~judaù:lnos, patriarcIl.8 de la cilld¡ld de Antioqllia,
:-:e,ïOl'eR dOll JUAN
K';Tf;llA~ M.UlTÍNEZ,
don
MA:\1I:EL
D. DEL COIIRAL y don EUGESJO ~lARTíNEZ
y
del eminente. lIlodesto y malogrado médico I:!cñor don
CAYETA~O
VILLA
V.
Poco de:-;rue~ de empezado el refresco, el señor
doctor Lo)woxo le dirigió la palabra al Ilustrísimo señor GO~ÚLEZ (n).
E:-;te le respondió en términos propios de las circuntitllncia~'l y de propósito se dirigió ~ las respetable,.; matronas y :í la.s ca::-:t'lS v:l'gcnes de lU. ciudad, invorando su valio:;a y eficaz couperacion en su labor
apostÓlica.
Despue'.; huho otros dl::lCnrsos., que siento no poder
publiear, por no hn.berlos conseguido unos, y otros
porque fuel'on improvisados.
Aquí eOlllO en Sopetran, el diFtinguido artista señor SantilLgo RamÍI'ez, COlltribuyó á solemnizar la
funeion enn las divinas armonías de la. mú:;ictt. vocal
é Íns!:I'Um8:1tal.
Lit eoruia.liJ:l.d fué ta.n grande, COnto la a.legria sincera y fen'orasa.
-22IX
Terminado
ell'efl'esco, el Ilustrísimo seîiol' GON'por el numeroso acompaf1arnieri.to, al palacio episcopal.
.
A las ocho de la noche tuvo lugar allí un suntuoso banquete, :1 que concurrieron lOA sacerdotes y caballeroR que acompaÏlaron en su viaje al Prelado, y
.:varios distinguidos caballeros de la ciudad.
/..,
E~tos banquctes se repitieron el 26, el 27 y e128,
Fr'- alte.~vânclo~e los convidados,
en cada uno de e:;tos
.ZÁLEZ fué conducido
I
.
dia£.
El 26 iLla una de la tnrde, recibió el IIll~tríf<iimo
señal' GO:-'ZÁLEZ, la visita de los alullll10s
del colegio de
'San Fernando, IH'csididos por el Hedol' del cHtablccimieuto fleñül' dcctm' dOli
lian N. Villa
Villa, quien
le dil'igió un notable discul'so (ñ), que fué felizmen~
contr!stado.
Poco despues recibió el Prelado á todos InR empleados de la ciudad, qlle en corporacion fueron á felicitado, pre::-ididos pOI' el •.•cñor doctor don Jú¡.;f; .:\lA.
RfA :YlAmí:mz PAnDO, prc~jd0nte
del Cabildo.
El 27 recibiÓ b" eseueh" de \'arolle~ de In.('inrlad,
prcsidilhs pOI' el dire<:!()I', :-''-'Îlor )Liollel \Y. Ve·lá8qucz y ¡H,:oll1pañ'.ldo,.; del pn~;<bíkro .JlJ~·é .Tacebo QllÍceno. Eu c~te acto se pl'i'llUllCiaron Jos discursos que
se PI11)IÎe;\1l ClI su respectivlJ
lugar.
,
.r
U 2S buLo enta catedral
y
Ull:t
miflt
semi-pontifi-
cal, y el Ilustrísimo seOOr GOXÚLEZ ocupó pUl' primera VVl" ell :,;u calidad de pastor, la cátedra sagrada de
la bella La::iÍlièa.
k.
El concursO l'ué numer·~:y.selecto
Kl b noche de este di:l"y-¡t~el objeto de obsequiar ó. h:::: cnh:t~bro:., fpe, :u'ompafif\l'ol1 en S\1 vi:~je
al I!".;tl'l:;¡n1O ~e1l01' Gal'l..HEx, tl!VO lq;ar en la ea:<a
de mi c¡,tilllable amigo, el culto caballero señor don
L
-23~
Cárlos del Corral, un lucido baile, que terminó cerca
de las cuatro de la mañana.
:x:
Tal es la historia de la. recepcion del Ilustrísimo
señor Obispo de ln.nueva Diócesis de Antioquia.
A pesar de la, extension de este escrito, yo bien
sé que me he queda.do corto en los detalles, y que mí
narracion carece de interes, porque me he sentido
abrumado por la inmen:'la pesadumbre del asunto.
Los pueblos de San Jerónimo, Snpetran y Antio·
quia h:m dado un~t prueba '::>rillantede su sinc~m religiosidlLd, y del inmenso ea,riño que le profe¡.;an al
digno Obispo de la nueva diócesir-;.El Dios tres veces
santo premie su fe y corone sus esperanzas.
He concluido.-Pago con e:>tapequeña labor, una
minima parte de la deuda de gratitud que le" debo á
108 caballeros que tan bcnévoh acogida mo han dis~
pensado On San Jerónimo, Sopetran y Antioquia.
Medellin, Octubre 20 de 1873.
D.V .
...•.. .:
..........•
--24--
DISCURSOS
(a) El señor presbítero José María Hincapié, cura
de San Jerónimo, dijo:
ILt'sTRisIMO
8F.~(l)t:
Se atraviesan en la villa del ho011Hl', como nI paso do 108
f.ielrJ pos, de las ~I'\lemcior\f''; y Ile los !'.iglos, IlPdlOS tan s()rprt'lIdentt's
r soll'nllles, <illf' imprimen ('n d C(lra7.~\1I dl' Ids
cat(,!icos tan intl'n~'l:-; "1·n~a.;iolH·S, ql!i.' las ,dlllllllS Illti~ Lieu
tajalbs no Ih':;ar;·n .¡alll:¡" ií. \lnscrihir clm pr.lpi"'¡ntl.
llay Cll la hi,.,tori:¡ dl' I,)s pllr.h!nH lwdl;¡S l'1l1111i tHwtt's, r('cuerdoD tall gllJrifll'il)s r pá:~inas tan he¡h~\ 'lile l'Il lIleJrlor¡~
no pnùrá ('xt i!lgnir~(' ni COll el eurl'i()(ll'l \ ielilP" ll'H~ }lf\>'fl, (;()ll
lent.itlld,
ni COll el ¡¡"(¡¡wIlle las gE'uf'raciorll's qlH' se SUc('(lt~n
llUU" á r¡tras con III nLt'i,l('z del rayo: rsos recuerdos se gnardan [espctu()sanwn(e
en el t.t.:ll\plll s~gn\(lo (lt~ la in1Dprtlllidad, l'sas ¡.:'iginas ('s('rifas por d dl'do de ])IPS DIHl d libro
sagrado dio' las nllC!01lt'S, ('Il ('I clIal \'illculan su podl'r y Sil
glorif\; ell(l:; lwchos s.m el halllarh' de RUSfueros y l'I fllJll1anH'nto exell1~i\'o de sn cl't'l'!lcia.
i Qllién crl'j'rra, Illlstrísill\l.l ¡;;l~ñor, qne AutioCJuia fuera
una vez tan lll'safl.\rtuna(la
rl'le )lor ,.] illC's[ll'n\llo L11~erdn de
nUl'stro S(\lltí~illlo Padl't, (.] s(.'i'ior l'io IX, de 14 de Fl'h!'f'ro de
1868, qnl'dàfa dpstitt,ida
dl' la alta cat..gllrí" y digrtilhd de
Iglef'ia Catl'llml y ~ilb f'piscoprd, á 'pIC hahia sillo ••hlvada
PI)!' la S:Hltid;¡d V snhiduria
rid sl'ñor Pio VH, ('II 31 de Af:Ço~to de 1804, ratificado ('1'0 s:l]¡io dl'crettl por la ~alltidall dd
señt)r L('on XU, ('n 21 <l(' :\£ayo d~ 1~2ï, rlOlnl>r:tntlo
por
primera Vez al Ilustrísimo
Fl'ñ"r}1ariauü Ualïlicu Dlll.iucla,
Ohispo propio de ella, y ÙPS!IUl'S de haber dmado por tanto
tiempo en 'Iuieta y p"cillea pos':-siou de csta dignillac1 ! ¿ Y
quién pudiera imaginar!\f', Illlstrisimo :;cñ.,r, <IIH: (ksp(ll's d~
ese aciago dccrdo gu hunlltivo de nn,'s:nl S,) rdísi mo Padre \'1
scñvl' Piv I X, (\t· 1~1¡J¡. Febrero Ile 1HG8, t'D q Ul' s,~ di~p()nl' ~11
despoil)
y (¡lll~ Anti" 1,
,Ilia. Sl'a n'tll1l~ida:i
IIn:\ sil1l¡,]û "aITuo"
J
•.• ;'.
;
~
qllJ¡"l. crlt>:;¡¡¡:·.tlt:il, y 1:,1;'1:.10 ya i¡¡sun:.r(ln:'~ y \'Iï!l:'"n,';; dI' .\ll·'
tioljuia,
Sllll1l'r¡.,id;,.; cn ('l¡lalll.,
Cil el 11,,1'11';: l'n 1:1 f(]lt-dad,
y Iku,." d,· JÔC,)IIS11c,iu hu[¡;an Gul¡:,ndü Sill; illstrllInl'utos
lnÚsicos, como t'n otro tiempo las matronns y vir;;enes cau-
--
2;') ---
ti,as del pueùlo hebr('o en los estériles sallce~ de Baùilon¡.,
había de ser hoy restl\bleci0.R,
por dispollíc'¡on d",1 mismo
Santi~imo PH.dre Pia IX, el dia 4 de IflS ealendas 11~Febrel'Ü de 1873, á SUR primiti\'os fuerus,
}lri dl•.gios y dignidad
que ántes poseia ?
Pero estas matrol11lS y virgrne.:l eh mpJio de Rll llanto
y IIU dolor, y simlergidlls én c~ profundo la~o
l¡¡grimas que
á torrentl'8 corria por SIlS mejillas, se encuentran con un a¡¡...
ci,lno de calva frente y barba encallpr.ida por los alios, LAvántage de repente en medio dI' ellas, grande r majestuoso
como el antiguo cedro CU,VllS mmas han qnebruntadu las temprstadrs;
y les dice: "¿Por qué tewblllis,
hijas mias? El
Dios de Israel reside y e!ltá con vosotras; su fuerza cs grande!
Su aliento dl'sgl\ja las mas altas montañaH y derriba lOll mas
fucrteR y robustos muroll ", E,ste anciano era Daniel, el Profeta del S¡'liur, mandado por El l'ara consolar à BU pueblo que
yacía en el cautiverio
de Egipto;
y el ancial\o pam consoJor las matronas y \'írgcnl's de Antioq Ilil\ emn los católicos y
honrados habitantefl ùe la misma Antioqllia, que viéndose 8Unwrgidos en el abandono y 50lednd de sn iglrsia catedml, levantan de cOl\snno su VIlZ y 1;IHI plegaria!'! all'xcelso t.rono del
Altísimo, y hun sido oidos; y vus, insignc Pontifice é ilustre
.Prelado, hubeis sido desigllfHlo por el Omnipotente para hl\cpr las veecs del Profeta Dalliel, para consolar ri. las hijas
de Antioquil1
en Sil Ilfliccion,
y del cauùillo
Moises parIS
sacarlüs ciel estado de tristeza, ùe pesar y de dolor en IlIle yacen, y conducirlas
por camillO fil'gtIfO Ii la tierra de prolllision
qUf' es In celestial .Termalctn,
i Quc el Seilor de las misericordias y Dios de todo consuelo
derramo
con profusion
sohre
vos, ilustre Prelado, los auxilios de la di I'ina gracia para cumplir' tan ~rancio )' tan sublime ministerio,
Estos hechos, serlÍn cseri tos, y las pn.gitlug <] Ile los contengan se leeráh con placer por hw ¡;enl·raciones f\\turaf;,)' por
los si~]os de 108 ¡¡¡glos en la~ bri lIantes y gloriosas uft1wérides de Autioqu¡a.-IIe
ùicho.
ne
(h)
Un jovenclto Jo;;é M_" Rodl'íguez dijo:
Prdn.do ilu\-;trc de In. nneva
Digno ministro del humano
D:úc¡~sili,
Diol';
-26Yo IÍ. nombre de este respetable círculO'
Mil parabienes al presente os doy.
¿Cómo no daros infinitos plácemes
Si habeis hallado gracia ante el Señor,
Para ohtener un honomùle título,
y ser de n~estra Iglesia hoy el timon?
¿C6mo dejar de tributar al mérito,
Esa segunda carùinal virtud,
Al que posee, señor, dotes altísimag
y puede dar á nuestros ojos luz?
El antioqueño pueblo COlllO un náufrago,
Sumergido en Jas ondas de la mar,
Oil mira hoy como espt'ran~a Única
De sal vacion en tun terrible mal.
Este pueblo, señor, há tiempo hUérfaoo,
Huérfano 81, de Padre espiritual,
Se halla contento porque ya el Altísimo
O¡; escogió para su mal curar.
Hoy tieno ya su Iglesia no jefe impávido,
Tiene el rebaño su mE;jor pastor,
y tiene el des\'alido nn fuerte bá'}ulo,
Tiene la caridad un profesor.
¿ y qué diré mas cuando allá en la cátedra
Hagais oil' vuestra elocuente voz?
Confundireis con ella á los incrédulos
y los hareia peguir la religion;
La religion del Hombre que en el Gólgota
A nuestra especie libertad le dió
Del terrible poder del genio réprobo,
Muriendo como infame malhechor!
Tal vez encontrareis, señor, obstáculos
Que es n8ct'sario todos superar;
Pero confiamos en que ya la época
De 4lue Be venzan, presto llegará.
--'27-Qne Dios ùerrame sobre vos, en cúmulo
Sn l\anta CTracia, lnr., l'esiguflcioIl,
Pam \l\>11<7rVll1-'·gtratIlision c¡~túlica
Cll<\l deu\lis, Ilustrígimo señor.
He lliuho.
(c) El i-1eñorCum de Córdoba) presbítero
·Mejia, dijo:
Ir lJ8TRismo
Mauricio
SIÑOR:
PI'1"1liti(1 que ('I Último de vne!\tros súh<litm;, á la par que
el nLis inútll de vnestroil operr_rios en In. viñ>\ d\'l S\'ii,>r, con'fi,\(Ll {~Vtll~~trocelo pastoral ell esta Diócesis de mis simpa'tías, Oll dirija I:~palabra pam f{,licitarns personalmente
por
vne:,tra. eXldtaci(ll1 nI Episco}.H\<lo, salndandoos con el respeto dl' nn hijo obediente y con el que cumple {i. vuestra alta
digllidad.
Empero, Acr\"Ío!' aceptill" mis felicitacirmes
y re-nrlimientos, no de mi parte S\)llll11<.'nt\>, sino t:llnhien (h~la d(' todns los
digllo,; sacf.mllJtes y íL:les q \le con este tin veis al} ui congre. g&.ùns.
Corno la :r.n.rza. marltvilloga de Moises que ardia sin queman;;e, porq lit' all uel fnego im plicahl1. 111. presencia de Dio!\,
qlle ll~i abr-asa lo!\ CGl'.LWUt'S C(,O el fuego
(le sn anh)\, divino;
así VIH'~IT(lS hermauos en el wIgmlto ministerio de la sulvacion eterna, y tudus vuestros hijos, timidas ovejRH, ardemos
hoy t'n a 1101' vnestro, y os juralllos fidelidad y obediencia.
Por esto, y porque vuestros precedentes y aptitudes 1'e8pond('n de que la Iglesil\ de Autioqllia y el Catolicismo tienen eu VvS y ('n vuestra robnsta palabra sn más firme baluartt', es <¡Ile todos los pueblos de la. nueva Diócesis, IÍ. la par
CO.l Sil hnmilde Clero, 1I0S llimos prisa Il felicitaras
por vuestrI", preconjzaujoll;
y ¡;OS Ill'Dl!)'! da(lo cit,\ tlunbien l\Rm cougratul:1rr:os pOl' la fdiz in:lll[::l11'aeion ele vnt:str() gvbie'mo,
hov 'llli! tl~nl'm()f; la djuha ell' v\'j'ns t'ntre nosotr,H, sano y
salvo. y ,'Il vi.L para ln. cdpiLal (le! OLisp:ldo.
Sen, I'l!\'s, hí"u vt'ni,b!
Alwr.l bi~;u, Iiust;'ísinlO Sellur. Es ya del duminio pÚbli"lO vuostra .Pastoral dp, 21 clel pasado, y tanto
que, sin eXR-
0-_.__
28 -----
gemdon, fluedo d~r.iros ll"e ni en III nlnltitlHlllqi.lI
Jll'f'Sentp~
pero ni en toùos lus lÍmbitos de v{('stra Dióc/'s!:I, hay Jlny
lHm snla rerF.Ona en qui •..n impe"e el u~o dr; h\ r<l~()n, que no
111.conozca y la haYl\ leido Cull entl1SialllllO y profundo rt'8}Jeto.
y no podia se\" de otra manem; }lorqnr, !'linlisonj:l, puedecirse de pila lo r¡llc d,~ 108 liùros sapit'neiah's, 1111f' si t'Tl
Ili mil'imos !ln tlJvi('!\pn ellos la prlwha
de haher ",ido dictflllos
por Dio!'l 6 escritos bajo Hll inspir:¡cio!l,
ba8tarian ti It'Slifkar
811 santidad,
la f;ahidlll'ia y exe..!.~itud ¡J(' sns mandato;1. Yen
los propios términos,
efl tltn b('lIa
la dof'tdntl 1)11C d,'sarl'Oliais, son tan santos los principios que enst'Îjais,}' tan elocuentes y expresivos los término8 \!mpleadofl t'lJ nlf'stra <,xllnrtllcion, que si dr. nntt'tnano no hubierais tE'nido a~t'lItfldlL re¡,lltncioh de orador suhlime y de. nutriùa iuteli::;(mcia, Vl1t'~tt'a
rama bajo estc.s conc('ptog (}\1l'ùnría t'stáblceida dl' hoy nJa~
BohrI.' bmws dA f4rallíto; porque
la melllorada y melllora blt~
Pastoral "Ilt'~trll., lo (lig'Oeon OJ'gullo, hace honor TlO ~oln al
Episcopado antioqncño r lJIl'Jelliucnse, sino iambien al Episcopado granadino.
Con razon, llUe!'!, qne ella haya sido un;verslllm,'nt'('
acogida call aplallso y coll }lnrticnlar recogimiento. Y fior lo
que á vuestro clero toca, ser\'Íog creeI'll' por mi conducto,
que él será, como \'os lo deseais, cC'ntinela avanzado entre
log mas valil'lIÍl~8 (h·fensores del Cristo.
Si; para ello contamos con el f¡\vor de la. Proddencia,
J
con el alto ~Îi'mp]o y s(llil]a ellsl'Îíaní:a del hl'll('lUérito l'l'dada á qllien tengo el hOllar de dirigir mi débil voz en esta solemne ocasiono
Acrptollll con benevol(,I1cia, Illlstri~imo !lefí()r, esto1'l sentimientos y nl1estros rC81','tos; ¡ll'o"egui\l en buena Iwra, é im})artitillos vuestra santa bellÙicÎOll.
oe
Re dicho.
(d) El jóven Denj;ullin TregpaIacios dijo:
ILuHTRísmo
Ell
Sl!:~OR.
alall de la Religion y á impulso del entusiasmo,
un
--ll.llllllllll
(lel eufc.¡Óo de
8all
;!~-Fel'lJalJdc)
e~te dill 1ll1.'1IlI'I'ablc, (1.11~har,i
(¡S
dirig<.: ln. pn.lahra.
1l\Hl é¡Joea
importante
ell
en los
fustos de Antíoqnia.
8í; 'ln wc !';r,urupongo á mi p.d:vl para fe1icitarnR con tOlla
Ifl. t'flli:)jr~'n d" Oli sensible cOl'11zon, y IlH' congratulo con ('so·
plkblo regocijado que OB rodea y OR contempla
con III misma uvidez coll que el de Isrupl ,'eia no su Libcl'tn(lor
en 14
d,> nizan. Si ese purblo
/lliUlado VOl' ¡¡U Criador ¡;aluù;Ûm á
J\iuises corno al ellYiado dd ¡';eÎl'Jr P¡¡1'a ponl'î térrJ)ino á sus
p:l.t!er;imir.ntos, para rescatarlo y cO!lducirlo Ii esa tierra pOl
cuya bU p(>llicie serpent!'!! bail !lrl'Oyes cie kche y miel, seglin
la eXprt3ÎlIll Je ln. EscriturH; nosotr05 n'mos ~n YO:; Lill nuevo l\1(li~l's, e3co¡:!irlo por el Et,erno jlant dírigirnoH, para sa.Cf.mos de la Rervi,lumore
(le] prillcipe Ùè bs tinieblas y builLrL)oR á la Jerl1~alem
cele:;tilll.
G fIIlld!' '.'ll la misiolJ q I:e se Oil ha confiad!): SIlS funciones
Rn bl i Ul(·~ ÙCllllllldan
llU!\ c0nFngracio!1
á tud:\ prueba.
ElOI>' r(l, Vlh'strO!l. recnrSOfl inh·kdnnlcs
y religiosos OB hacen
apttl pnro. pmf1lliíar elluicul\J, pam dirí~ir Hna gn'y que Of!
el5pem !lcna clr ft, y (Ir esp('ranza en vuestros Jllincipios. ¿Y
¡wj' qUt- IJ(¡ 1':cr',1~;I, C\l;!UÙO ','llf'~trll¡; lucl'sy
\'inlHIl's Bon
o"teTl;;:l,;t':~. Y t'Il lllas dr l!nlt (Jl;:!sioll h,.hci~ llIaJlifl's~ado
ulla
re iL~i""i!::¡,:ih.¡úien Sill hi"():'!'l]~ia, UIl ¡:"rltl'Lel" linilC ~iu fatuidad, y llllll c¡u'i.l¡l(l fenit'LJte sin orgL:llo ui ostl:nt¡H'ioll?
¿ P{)r q ItÚ no telH,l' fc, por e}né carcrt'T ue ll~esperanza, cn8ndo \'ut'sL'o nOlllbf'¡' ilJlpCllll'nte, sonanùo en las 116vvdas del
Va tieano, kL hClch ) p!j.] pil:lr el co,'aZOIl (Iel ~bIlto Pao1re, lJue
08 ha eh>gido para. ~n cvlab,¡r:lG.o], Cl! 111t'lllpll':m
g-loriosa de
Ill. cvun¡;e¡;Zacillll drlUnívl'TSCl;
El tino de Pio IX. es la me.ior ¡:::lraníl1 Ij Ile ¡ui'dt' dÚn·,'ncs Jd a('í,>rto (le ln elccciûll.
Ln I~b;ia an! iO!j llclla, 1"lItil:wte lOHIO ¡;U FUnÙlld0f,
encnbezn.da por Yt)R, marehnní. á Ims!)!; gi~;¡ntt scos hácia el cúllllU) rie llna gl,win. iUllloltul;
gloria ¡:I\)l'leticla por el Hijo
ùe Dio¡; ~' comprob1tda por la t)xperil;¡;~il: de dipz y llIHWe
siglos. Ella burlará el oùiu ùe sus clJ(-llligo~, deRpreciará sus
cri lUi nah'fl proyectos)'
8eglli1'<1HIl l'un! bl> al tmvtS JP. t.orlas
llis g'enc.mcíol\es
q \l~ ùehen SllCpdrTDo8, hl\lltl\ fse dia tl'ellH't1do ('Il que !01() ¡\\'(,s(~lltar:i Pl M:írtir del Gólgota ií. :!'oo)p.ter
á .inicio (t to(IOR lOll hombre:'!; ese dia en \}UIJ los \,ot\'lltl\ÙOB
de la. tit'l'm Sf) prr';('nt;¡nÍ1l cUllf¡;ndiùos conlafl víctimas de 811
orgullo y arbitraried.ad: e~edia espantuso cn r..ne cllli,r\?'l ùd
-30Supremo JllPZ ignalará Jas ruhpzas de JosmortaJes; ese ¡¡¡aj'
CD fin, ('n que 11\ h¡¡lHllz<t dl' la dil'ill:t ju~ti('il! p(·sarÓ las nccionl':" dl' lo~ hlllllild('~ y los f;l!h:r1,i(l~, y hará ci,· IlH-j<.r ('llndieioll á los qUl\ )"('collocil'ndq ~1I [Jullibn', ~igtli,.·nd() su cloctrina y oh,·dl"cictldo SIlS pr~ct'pto~, d'·~pn'l,jill".lCl los phc:cres
DlunJaJlos,
l)('bi(~ron la copa del dolor)' llHllieron con la tranq uilidad dtl justo.
Si, I1ustr¡~iIll0 srñor: Dios l'B lIama:á presidir fsta Igle8ia, y l'stamos Sl'gurOS de que la g'uiarâ:1 con digllidad y sabiduría.
1'clleis, como he dir:ho lintes, las dotes necesarias,
y podeis contribuir á p.onjurar la tormenta que la impiedad
nos prepara con el fin de destluir la propiedad, Ja civilizacion. y el únIen público y ~(lmés( ieo, para ohteller 11U nll'dro
ternble y momentáneo. EJ trll('flll Sllena en !()lltílWI!l7,;¡: los
"ientas deJetérejs, SOplíllHlo
1'1'('ia1ill'n~ ~\()hre la~ Jlal:iullt~s
del ~nti~uo mundo, dirigen SUll corril-nll'll
hltcia laH cupitales de la inoel'nte
AUiérÍca: [Ol'; rayos destrudnreg
vihran y
cruzan el At lálltico, atraviesan ti Pacífieo y. el 111clieo en
todas direcciones; y Ci:' preciso qUf ('I Episco¡,aclo trabtúe i>in
dl'scanso para ¡;alvar la nave de Pedro, y en olla á todos los
hijos del Cl'ucifieàdo.
La educacioll del pueblo es una palallra. de primer p.:énero qne debe t'mplearsc Pll.la. m•..
.cánica rl'Jigiosa, si Sfl
permite esta exprt'sioll; y yo cteo, sin riesgo de incurrir en
error, que sois d llamado á usada en estos paises. Si Arquimedes deseaba Ull pnnto de apoyo para levant.ar con Sll
palanca el ~lobo de la tiC!Ta, venciendo la resil'ltencia con su
científico poder, vos teneu; ese )Jllnto de apoyo rn el cielo;
el pueblo 1'8 dócil, no ofrrcc rc~istencia, y el poder que os da
la uncion de vuestra palabra es grande. Con tall'S dcmrntos
elevareis vuestra Igll:sie. hasta esa rt'gion .eD que Re oYt'n lOB
cántieos melodiosos de las jerarquía¡.; angélicas, al COID!Jas
de los trino!' armónicos cie sus nrpas ùe oro y de zafiro.
Un Seminario regentado por vos, l\erá el fllCO dl' 11\ eivilizacion: ese ¡l!antd hien dirigido, 51·ni un sI'millero [¡'cunda, de donde saldrán dignos sacerdotes pam sostener la CElUfia de Dios, y ülIc!areeido&ciudaùanos
para abogar por la dicba de la humanidad en goeneral. E~ta no es nna ilÜsion
jllvenil: la experiencia lo ha demol;trallo en este mi"mn. auelo; ¡JUl'S la mayor par.le de ~ hombres fjue hoy ligllran en
el Estado de AntioqUlu'Y algunos' que existen euatros pun .•
me
-
31 --
'tos dI' la Rppúblicft, han salido de laR claustros do ese brillante S':lllin¡n-io qlle fU:lnó tI Ilu¡;;trísirnll l'relado á quien
deh\:is l:ts luce-" q\l(~ os adorll'trl.
Yu haré plIrte de vuestroS
di~cí(1111)3,
OCllJli1r(~ ¡::-l:stldO
u:\
ollneo
en
ese :':stablpcimit'nto,
y ~eré Vllt'~tr(\ :Sl1bt'tcrnu.
T>iis de~l~os ~on fl'rvil'utcH y puros
á t'Rte respedo: quit:ru Sl'! de rJguna
ntiliù"d í~la IgI.-'sill. y
al l':gtado, y pam con:seg'uirlo, imploro rles.le ahora la proteccion de Dios: á él le pioo bendiga mi carrera; y a vos,
señor, os suplico tile concedai¡; vuestro apoyo, vuestras sim.,patlas y \'uestl'l1 prt.'dilceciun.
He concluido, llustrisimo Señor.
(e) El señor Santiago Ramírez y compañeros cantawn la siguiente
CANCION .
Bien veniùo, dignisimo Prelado!
Bien venido, Ilustrísimo tieñor!
¡Que seaiR ùe dicha el nuncio soberano,
Que scais de paz <:>1
ángel precurt!or!
.CORO.-j
I
Sopdran, el mll~nánimo pueblo,
Entusiasta CUq; nUllca se alz6,
y relltlidu lI~gó á \'ue~tras plantas,
y tn voz elocuento escuchó.
CúRo.-Bien
vcnido &.
II
Y en unánime acento os dirige,
COulO á ùigno escogido Paôtor,
El Baludo filial exprt'sivo
En modesta y senc:ilJa cancion.
CORo.-Bicn
venido &.
III
Y en las alaR del ángp.l eleva
Rasta Dios, fervorosa. oracion,
--
:'>2·-
n~ndicielldo la ruano pot~lItt'!
Que la witra I'll tu llien cu!ocó.
COlto.-Bien
"eniùo &.
IV
Qne el eeñt)r Gómez Plata diri.ia,
Vuestra lllPnte á la paz y la uniun,
y la i:ltllllbra Ih·! noble maestro
Al discipulo infunda valor.
COM.-Bien venido &.
J';opetran, 24 Je Setiembre
SEGUNDA
de 18ï3.
C.ASCIO~.
CURu.-Antioquia!
levanta
y tern pla tu voz
y alegre recibe
'¡'u nu\:ro Pastor.
1
Tiempo:'! hit que la I~lesia de Antioquia
t'll (ii;.;no Pastor
ha Iloraùo,
1'\01'0 Vios e:'e Hanto ha enjugado,
A
H'~Jlarundo
su
pérdida Ja.
Vuestra justa demlluùa,
antioqueños,
D¡:,j Eterno ha'lta el tre>"o llegó;
y hny diBpone l'n Joaquin de\'ulveros
Lo qUlJ infausta la suerte 08 quitó.
CORo.-Antioquia! le\Gtnta &.
II
El noveno lllllgll'¡nimo Pio
Os devuelve la Sede pt'nlidu;
're restaura con ella la rida,
'l'1\ riqu\i7.ll. y antig-lIo ('Splendor.
lIaIl nu 01viùü~ jaUlus, nunca. olvides,
Guarda en tu alma por siéUJpre los uombres
-33-Del ilustre y ~raudioso Berri"
y Bibon, y Martínez y rrúrrcs.
CORo.-Antioquia!
lüvanta
&.
III
Gloria eter!lll. á tus hijos, oh Antioquia,
(~ue luchando en la lid desigual,
'rus sagrados y antiguos derechos
H¡¡s logrado por fin restaurar.
Ès tambien que de Dios la justicia.
Al que usurpa sus fueros, le asiste,
y su triunfo le va, si resiste
Ùn ataque tau duro y tenaz.
lev!1nta &.
CORo.-Antioquía!
iv
Sabe Antioqtiia que un pueblo - tu hermanoSopctran, te acompaña al plac('!r;
Poniue te ama y él sufre si sufres,
y Ri gozas, él goza; tambien .
.A I ilustre Prelado le damos
Amistosa y feliz bienvenida;
Pues !lUè trae á su grey afligida
BI remedio que âlivia su mal.
0oRo.-Atitioquia!
~opet.nm, 24 de Setiembre
levanta &.
de 1873.
(1') El señor Santiago ltamírez Jijo :
lLl:ll'flli:mlO
8E~OR:
Lfl llistoria
(le la ci vilizacion moderna es la Historia Jo
la Iglesia, y la Historia de la Iglesia es la Historia de su
Apostulado, segun el pensamiento de uu emiuente llUblici:>ta.
y 110 poùia ser du otra ma.llenl..
Esuuc)¡a.ùmc:
U Il ti ia. el Il llgiùu l1el Seiíur Cil los campos do G alilca, soguitlv dl' lm; muchedulIlbre:; 'lllet<e nwtal'illaLull du oide, SU~
-34-
er
biÓ¡¡e Ii UD monte, y abriendo sus labios divinos pnso en
oido de las tll\'bas f\11uellas <\ngu,;tas ellsl'ñanzas
Q1l0, escándalo para los judío!; y locura para los gentiles, debían regenerar el muuùo eutúnces agunizante entre enervantes delicia¡¡,
En aquella vez {nil C1H1.IHlo e] Cristo (]irigiéndose Ii sus
discÍ),nloB ks di.io: V08olroB sois la sal de la ticrr(/,; V080b'os sois la luz dd mundo,
lié aquí, Ilustrísimo scñor, la suhlime a1tI';':r1, OP, la mision
del Apóstol; hé af'[llí YUl'stm gran mbion: Ber' la sal de la
ticrra; sel' la lUi: dd 'Inundo,
¡Qué palabras \"1\ blJca do un Dios dirigi(bs;Í, unos hombres toscos, ignorantes de I:ts letras! l'alalJl':u,; Ijne expresun
toda la mann'ilh (Id milag-n" totb la fuerza del preeepto,
todo ('I enrarecimiento cid ('h~'io,
i V080f1'OS 80is la sal de la l icrra; vosoti·os sois la luz del
?n1mrlo.'
G\'iI1Hle cs, pnes, IlIj('¡¡t!'o ;':')20 j10r h:tiJ~r,);; ('l('~id()1:1. Proyid(mcia pam que scais la. ~;al ùc la lllle\'¡j, Diócesis de Anti0C¡1l in,
,r('llirl, flue regocij:t1]os (¡S r¡,.'illimos, y s';IIla. Sill de esta
tbrm qlle Vios en S!l¡¡ areimos ha puesto hajo la yigilallcia
especial de vuestro ],nterIlill cuidad0.
VCllid y, COll ln" n'sl,]:\lIdl~~;¡:'lltes "irtillle;; ('nseií:Hhs par
el Cristo, sed la sal tIc e~la tic'iTa ¡mm que no L'¡.tien en corru pciotl las CDStUllll)i'(''; ¡le sm hij(,s.
Vcu:d y, cou la i!IJL";~:'ô c\'i\ll~.:,i;:ic[l,on ,-iF:ê;(¡':l'; p)'()\'idcncias, sod la sal de CSLl t ¡"ITa I: ,te eomo n'st,) (le la. erc;lcion
deùe elevar al eie]o b r.:~,~Î'ill('ia de: li!lS \'ir(lldc",
VOtlicl y, con YUl's'.r,:;s s'mtps y pel'sl'\'('\'alll~;:; \jrmplos,
seù la sal de esta ti\'rra '¡lIC Cdlll!(']1Z:t (¡ Gorro)}) ¡>c'l'se COti la
nSf¡UCrOSa cnseÍÏan;.:a de la Filosl>fía sensuali;;ta,
la ellal proclama como suprema moml, los iW':l'ntivos pbcereii)' abrasadores deleites,
Grande es lllll'stro gozo, Ilustrísimo
sCÎiOl', por h[\1)(>r08
colocado la l'w\'id<'lluia
('11 al t!!m
e]I'\'[\(la,
rara r¡tw desde
alli, remo rC'sp1:tll\h'cil'J11c :lll!(\l'c]¡a, illllliilll'ís {t hIS pneblo::!
fi Ue c1el)uis guiar ú. las r(':~i"lJ':s ¡¡¡mortales,
V~'!lid, ]111,"';, ~' ¡¡('rl nq".;ll;t 1:17. ('(\n la y;hr:lnlp
j):1hhr[\
LtC YU:-;:.trl) c· l.<j·it:i
::'l:~<t ·.;~~I,
.. ~{~.;:~\.1(' :luI.' df~. ~;;\'rhil y vllcl-
--~ -<>,),)
van it la viùa. los q ne donniù,)s sc (-\lCUCl1tra\l el! el dcsc1en 1
l'el i,,'io~o.
"
1
•
.JIU' rISV'~llid y, con los claros destellos de la ltOctnna
lIC'
to, ewwÜaùa sin intcrTnisjol1 por \"1H'stro elocucnte labia, sed
la lllz dc cstn Iglrsin, á fin cIe lIle \"llC,St.l'OS hijos !lO permalwzcan sentados .;u las brumos<!s tillieLlas ni en lut! sombras dc la
InlH'rte.
y, cv:mgclimnllo ¡~
lm; ;:icn tes con J:¡, conBtancin.
sCIlla till. qne <lC~18,!~lliarbs l'ara rllll~ no dén
calJil!a l'n su inteligl>llcia
\li cntrad:. C'n S1l ClJral.lln, ri. los fu]U,stùs ('¡,rores qlle en toJas Ins 7.ouas lId 3'lp1ll1 UUlenu:¿a ])1'0pH~ar el impío filosofismo.
Venid, en fin, á scr (;] I"gcnte impnlsi\"o de csta civilizaci:m cristiana entre estas alt",s ll1lWlrrD ••" ]¡clJllceillas por la
Pl'fwidncia,
V cnid :í. desarrollar esta san t.a ci \'ilizacion fundada por .J CSllcristo.
"Vo'lotros sois la sal de ln. tierrfl.; 'Vosotroe; soie; la luz del
mnmlo;', EstaR palabras proféticas annlH:ia¡: COll r.la.rirlad los
ti!):> grn.!llles elemenios de la civilizacion moderna: la moral
)' la dodrina.
La moral para el coraZOI1, la docti'lrW l;:\;-a el entendimiento,
\' ¡l'111(1 y ciencia
(.'1 .>1 h'l~il)rc, ";',1 '¡Jr.,';], il:) COl r0l'ljH~rSe,
1117.pnr:~ no el'.~a.i'sc. Tal es k ~;íllt()(;is de j;,)(ll)'; lo:, ¡¡lleJantos
tL la 1l1'.lIIanidml Cil la tici';'a.
Si no nombro entre los ~ \lIll1e:> ('I('nwntm; llL' b "i"jlil.iLcion las rilluezas materialt-s, es )l(li';lllC 1'l'l;I!eltl,O :"[llel snblinie pn'c'~)ito <lrl I)e:>(~:\(li) l~l;1;'.;; l:a(:ilitl('~:
"Bw,ea(l primcro lns (:,):ms de I;¡,,)::; y lJ.r Sil rtt:rnn. jllsti-,
ci¡t, y tOllo lo dmnas se os d;tI,;~ 1)<)1':Üíl,:il~¡¡m."
{¿IW filé tanto c()mo deciï:
"Hnsc!1cl priuleïO la virind y
ln Cil'llcia, porqllc c\las r('s01\11.r'\11 ctern:UUl'llÍt: en las I'egio111)8 del cÙ·Jo. 'l'ollas las ri'lIl<"f.:'" se ot! (lai'.Lll por n¡ïadidllm,
porqllc si al lirio Je los ntlles Dios viste con primor y {LI:Hl
aVI'" <l1~1
cielo las snstcnt:l ¿euÚ,nto nui,; fi vosotros (Ille sois
hijos de wi padre?
Cun mzon, piles, la Eis:,)lia (;,~ il', ei'vii¡¡;clci1Jl! lI\Odcrnll
~:-) Ja .. ~¡:;tnrÜ1 th,~ ~a .I~'!(''':::''' -ir ~:1.'::i.:~~~·~)t>L
t~ ~a .1: ;r.:-;iu e~.; la
Fi"j oriol lie su J, pil'~t"]¡" la;' pon.¡ !'l: '':'tc ~i"l)(~ 1)01' misillll
'¡/lIillh,,:tr Ii In s()ci(',hd
p;!r;~ 'llll' I'" s" ('O:'Jill·:,'.
y ::,l;'LLkCl;:
l"J.i:l)':,
',illC lIO ~;l':d,autlilllf> ,'p h"lln'¡j/,(l!; ,1(.' d"luk
Vl'nid
d(,] .\p,'n;tol,
-36Ilustrísimo señor. Desde que la gran doctrina de Jesus
apareció llar allá en el centro de los continentes, fué e] blanco de todos los vt'jámenes y el asunto perpetuo de toùas las
con trad icciones.
Pero en ninguna época, como en la presente, el infiprno
habia desencadenado
contra ella todas las fllcnms del raciocinio y toùo el cinismo de sus odios.
El campo es inmenso; la lid está abierta; losjefes se ocultan á los sent.idos del cuerpo, pero no á los del alma: el Cristv y el Demonio,. el Bien y el j):[al.
Mas el triunfo no es incierto, porque escrito cstá~ "ltl te
quebrantará
lu. cabezu. y tú pondrás asechallzas á su calcañar" .
Hó aquí los clos TJartidos: el Oielo y el h¡/i"1"no,. y su~
representantes
en la tierra, la Iglcsia y el Filu·~()fismo.
La Iglesia por una mision ~l()riosa debe sembrar el trigo
entre los pueblos dd mnndo. El Filo8o.fismo por nna inspiTaeion diabólica, debe sC'mbrar ]a ;r.izaña en las regiones de
la tierra. Pl'ro al fin el 'Ille siega guarùar¡\ el trigo en graneros y arrojará la ziznña al fllego para que arda.
Venid, )lues, Ú srm{¡rar en onestras almas el trigo de
aquella doctrina que da luz, calor y vidf~ á 108 que como nosotros la imploran; y 1'pc.,nlud, ~('1Ïor, que nuestro regr¡cUo es
grande cuando contemplamos CluC110 snis Ulla luz puesta deLajo del ce]emin, sino una antorcha encelluida como ]ámpara en el tl'llIplo p!Ha allllllbmr :í. los hombres r guiados cou
el Evangelio á HuS dest.inos inmortales!
He dicho.
(g) El señol' Aool'es .María Sanin dijo:
Bien wnic1o, dj~lií8il1lo PrelaLlo r
Bien venido, Tlmtrísimo Señor!
Que seais de dieha el nuncio soherano,
Que seais de pa"- el ángel precursor!
Hubo un tiempo, scoor, en que úrgnllosa,
En (lue alti\'a, y ufana, y poderosa,
La cind:HI ùe Hobl(,do se mostró,
PlII'(llW
en su SCllÜ ('ollH'!l'\'aba
elln.
-:37 La silla episcopal, que era la estrella
])el espléndido cielo de su amor.
'renia ra:l;Qn! El suelo colombiano
Le daba por estrellas r~fulgentes,
Obispos que llevaban ('n sus frentes
Una mitra de amor y caridad;
Veù si no Ins Garnica y Gómez Plata,
110S Riaño y sus ùi~notl Provisores,
Lumùreras de la fe, sabios doctorcs
Que dieron gloria y fema á la ciudad.
y asi feliz pasaba y deseuidaJa
Sin lanzar su mirada al porvenir,
Ni temer que una mano envenenada.
l)udiera i ay ! su corazon herir.
Sin pensar que su garra emponzoñada
La negrc¿ suerte clavara pertinaz,
Dejándola en viudez, acong~jada,
Pero noble y altiva cual jamas.
Pasaras años de tristeza y duelo,
Mas la Iglesia. antioqueïia nuncu. al suelo
Iuclinaba su frente, porque Dios
Velaba por los hijos que en BU templo
Daban al mundo con su noble ejemplo
Lecciones de humildad y devocion.
u
••
Lució la. aur4lra de otro nuevo dia,
Derramando el contento y la alegria,
:En el noble antioqueño corazon.
El sol de la jllsticia, e"plendoroso
Levantóse, y radiante y majestuoso
Disipó de su cielo el nnbarron.
La pradera se viste con mil flores
De brillantes y vividos colores,
O:;tentando nn jardin á la oricntal;
y al?;a su t'rentc la gentil palmera,
Sllclllliendo sn verde ca.belll'ra
Al soplo de la brisa matinal.
_.
--
38 --
El m'gro manto de vil1lk:.-: se caml)ía.
las lJl'il1antcs galas de la es [!c¡sa"
y IIf)}' se !Ilu\'stra radiante y IlHl.jestuosll)
.An q,~lèlllllu su tÚlalllo nlll1eia1.
Es la r,·in:], (Ph) \'1 et.:lrù ya perdido
De reculli'ar!" elíll ";dol' a"aha,
Es la pÚdica CSj.l)Sa qne l1uralm
Al \.'spusu que !,rullto iua :i llegar.
POI'
Elin e'; la novia ch:lce y complacientc)
Yo- :·1 n,;\'i,-,~ 1 Ill"! rí"imo H,·iJùr;
y loJs tlig-lIos ],¡¡drim.s de (sla alianza
DOli Berrío, jllutíue¡;
y ltilJon.
CAKTO.
(no~IPE
J,A. ORQUESTA).
l'H.D!EH.A
PA;{TE.
Gloria eterna á los dignos campeones
Pl flll'J'O ant i011ueîíu;
Jklltlig-amos por siemprc :,us nümLrciJ
y ni ilustre l'rel,tclo con ellos!
ICORO.-j
QlIl: sal varull
1
(C.\.~L\.
s.
ILDIÍlŒZ).
P('<1ra .J liStO Herrín! La fama
Dc tll nom hre hasta Homa llegó,
y una sl'de de p Úrpnra y g-rana
y un ilustre Prda\.lo uos clió.
.,Cono.-Gloria eterna &.
II
(<:,\:\'L\.
;J l',\.:\
ILDlí!tEZ).
~.:\1 \J:Ti:->r:z salmuùo
UCC(lllO luchÓ,
C'.1l HIlIO:'; y cun '['Óulm;;, por durno13
N lluva Dude y riqueza y hOllar.
};¡
'CoHo.-Gloria
])1:;
illllll,'lISU
eterna&.
-3G-(CO:>:T1::\ÚA 8.8.:>:1::\).
~\Lml;, seilor, los hij'JS agr;Jpllllos
C.~UlllO
en concurso uni-.'ersnl aqni;
Que con CllutOS sulllimeg significan
1.\(3 ::iU con ten:o cllucCo fr(,!lesí.
Porque fuisteis, sciíor, el elegido
J'lm!. ocu1)[l.r el húlio episcopal;
1>c cntre el ilustre clero colombiano
il. vos os cscogió Su Santidad.
y elevando hácia Dios en elocuente
y dulcísimo acento su caùcion,
Glorifican la mana Or:llli potento
Que en vuestra sien la mitra coloc6.
CANTO.
PARTF. sr-:r;UNDA.
COllO.-G1oria eterna á los digtlos campcont's
Que salvaron el fuero antioqueîio;
BÜlllligamos ]lor siempre sus nombres
y al ilustre Prelado con ellos.
lE
(CA:>:TA
RAMíREZ).
Recarcdo do Villa, y García,
Han terciado tambifm en Ill.lid,
.ibtallamlo con noLlo hiLlalguí;;,
Hasta darlo á la lucha su fin.
VI
Que el cla-.-in de ln. fama levanto
arrnóni00 accnto hasta Dios,
'J'antos nomùres tlue hl:11 sido el baluarto
Do estrc1lóso la envidiCl, feroz.
Ell
COllo.-Gloria
oterna &.
-40(cm'TINtA
SANIN E.)
y este pUfbIo piadoso que es hermano
De esa ciudad de qne os habIaba yo;
Pllpblo noble y altiyo y gencJ'Oso
y que practica la moral de Dios;
Cual por resorte mágico movido,
Entusiasta y unánime se alzó,
Por llegar respetuoso á ,vuestras plantas
A recibir la santa bendicion.
Suplicandoos, señor, al mismo tiempo,
Quo no os vayais sin visitar su hogar,
Que aunque pobro y humilde él os la ofrece
Con sincera y ardiente voluntad.
Vos que fuisteiR, Reñor, de Gómez Plat~
Discípulo y ardiente allmirador,
En la pesada carga que os agnarda,
Que su ejemplo os aliente y dé valor.
Bien venido, dignísimo Prelado!
Bien venido, Ilustrí¡imo señor!
Sed de la dicha el nnncio soberaQq
y de la. paz el ángel protector.
Sopetran, Setiembre 23 de 1873.
(h) El señor Francisco Trespalacios dijo:
ILUSTRíSIMO
sERon:
Antioquia está de gab. Ella celebra entusiasta su reB~
tauracion.
QnÓ trillllfü !
Sus hijos regocijaclos entom\n por doqllièr mil himnos de
alabanza, y ensalzan los designios de la Providf'ncia que
tlsi corm};)"1'~)l10ndidamellte sus esfuerzos. Loor á sus bravos ada iilIr·s !
i Glor;;l y celestial favor al Pontífice Romano! ¡Mil
años de vida y felicidad perpetua á su Vicario ungido aq u1
presente!
Las naciones, en general, como los pueblos y sus indivi~
-41¿¡HOR en particular,
tienen siempre especial cuidado ùe per}letuur, consignnnd{> en los analm; de su yida politica ó religio~a, todos nt"} lldlos acontecimientos
de uno Ú otro ól'den
qlle los impresionan fucrtemente;
ora por efecto de un grav\~ mal, como los n~la8tos de 108 romnnos, ó ya sra por la
l'X pcricncin
{¡ satisf¡H:cioll de un ~rlln Líen, á lo qne aquellos mismos {kllUlUíllaban fausto dia, fecha memorabilísima
que celehraban con gran pompa. Y ¡¡icmlo; Ilustrísimo señor, de esta Última especie el suceso qne !lOS proporciona. la.
dicha de tcneros entre nosotros, muy natural y justo es que
todos los fieles de Vl1estm Diócesis nos regocijemos en el Sofi(lr, hoy qne ÉL se ha sen'ido restituirnos nuestra Sede epillcopal, y con ella el antiguo esplendor de nuest.ro culto, dándonos en vos ün Prelado digno de suceder, en su ilustrado
gcbierno, á nuestro coroun maestro, Monseñor Gómez Plata, de in mortal memoria.
Por esto dije al principio y la repito aquí: Antioquia
t'slá de gala. Elin. celebra entusiasta
su restauracion.
Qué
triunfo!
Si; los dias 21de marzo, 23, 24 Y 25 de Setiembre de
1873, son fechas que en la. via de nllegtra. felicidad hal)lan
}lar un libro; y llevnndo ellas, por tanto, en sí mismas la
ra7.OI1 de su importancia,
quedarán con este blason para
siempre impresas eu h~memoria de todo antioqueño amante de su religion y de su patria ..
i Gloria y hendicion eternas á los 'l'órres CDycedo, Ribon, Villa ( Rccarcdo),
Bonia, Martínez (Juan de S.) y
cieu mas, aclalidos incansables en la gran victoria que celebramo:'! !
Bntre los muchos hermo¡::os pensamientos que con tanto
acinrto como elegancia estampais en vuestra Pastoral de 21
del p:u;u(ln, sobro ellYo aplauso y santidfill ya ha discurrido
nnod~
vII(:stros más aprecia hle;; sacerdotes, a(ll1011os son
!)[ll"a mi más gmvcs y fecundos, mÚs elocuentes r oportunos; quo Lien explican vuestra desconfianza y anuncian
VIlt'Ktros tt'morrs fl1lHladoi'\ ('n 1ft corrupcion de! RigIo; pero
<)nc [\1 propiu tiempo nos exltertan y alientan !Jam iraLujar
en la grnnde obm de l111e8tra ¡;;alvacion, COll fl>' ciega ell la
duetrin:~ del Cristo, y ell el poùer y sabiduría de Sil Padre.
"TmbajnÙ
con temor y temblor" son vnestras paIaLras,
.;om) ~i dijémis: " Vigilatc et orate, vigilad y orad, por:-
-qno el
})uITlonio
4:2 --
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•
.l<,~:,~.\" li":' i, ..·; lJi,'l'it:,:.-;. de ~l:LJ;î}}~ LJll(Ll1'~'t el hulL:dV
lu:; l)!r:;Hit';..;~ ;¡l~itllalïi lus Cl'l'ru~~ y cn,utÏlliLr¡'L
suùre b5 '-':';:\1:1", ,;i è;¡;lIdllc('(lil'S
f'1lt.'ren taks pl'¿tÏigiiJS
al ¡in
prilIlnrio dl~ Sil lllau,illll pOI' l,. til'l'l'<t..
\I~:
~:~I>!,l~Lt~,';;
.'ll:'i~h:
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11· :-'
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lo ,.;ah,is
el politeísmo
IlIllY hiI'll,
con sns l:lî',,\\~; Y dcki,,-s
WI!1 :,'¡ ¡¡llllg"ld" ('Il la ;:alJ,!.;T('
(let
Ualrario.
1.[11\' j!¡j hl" Il~l'it Hi'li,'il'll j'osil)](: IItlt' la d,·! DillS
Vi\'o. \.' e¡'Jil:'¡:;!
1l!1:-li>O lo dijl7 l'Ill' 1)I)C'1 ll,,' ~ll e Ili~¡:'ld(),
éstp villo a1 ¡¡¡¡¡::do Ú d,Li' tc,~ti:Jli'l¡.id de la n'rd",], Y ;l di~ipal' las ti'¿i;,L]'l<'
(id ))):tl: PUI''l\l¡' El ~(',j() p~ la ¡11;~, el ;--;"!Î'JI'
y In. yii.la. . .1\-.•." (:(l:':-i'~ïl~('t't{\ ~;~"I'~:'a:'ilni iqiciíl lllP'" }1-:I(~I'S
;l~:::I:~~'~,:,(;S;:,L'j';,) j'~'I:II:':!,:,:~'~!,
¡;.:~.::l\<I:.'~:i: ,Í!~!~;l:
','¡~:,~:ll;,'"i;:: :',1 )(~;Lr;: =
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l11el'eCl'l'i1. .~ll fnY~lr;
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Vi,)s ú a{¡'eje
llt'g:ll'la,
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y los fl1C']'lls (k sU Jllh'b¡o,
{·ll¡otlL·r (10 ~ll ln'Hzo e~tar(L
lL~'
1.:;ell
(:e ¡Hute de f;U~ bij,)s lidl's,
CD.l'i[n.til'us
y
c;'''yeIHl'S.
y H)l \'it:Ullù, tí yo ." b:'ILi¡ pillltu de Sei'l.:lltt fill l'il h'lllj1l:St:L(ll1.-;,h:~cba; (·stuy cil'rtu (l(~ (p:;; ~abrei" clmL!lIcir s'il! ,:UZl)la I¡<lïr¡ilill:t (l:'ll':sca<lur
Ú "l'g-llt''' Jln,'rl '. al
l)lwrt,) l[.j ~\l sal\¡lci'ill. Y si el Jlillmle> plll' slll,('j'wr"id:\,1
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1:(t\·e.~~Hn.i":\~(jl}~'c l~'l,
en J'lan-a
y 1.1b1lC:t leche las ll!"!d:t;; Œfllt'è'CiJas;
Cll11eS¡'Ít'itn superillr :í tierra (h- prùmisi'.>ll.
SOH, pll\.:'-',llÏl:Tl el\1l'lv:lltn,.;, 1!ustrbilU(l "'Îlor,
la oVilC'!ün
y ruallit'(!sta(;ÍOllCS (Pl': YVlIis l'ecilJil,mIo; l'orque la ProÙd('llcia !'je1m di~nado
conselTar nli:stl'll preciosa villa, y dew,lverle CUll elb ¡a salud y espiritual reposo á l'ste huido rcl)flño, CI ue afi0S !tri llora, y llorando ha estado la ausulCia
de
cUlI\'ÍrtÎvlJ(lo
y arril'lIl'cis
-51
L't:',:!).'
y qucriùo.
CUiOf'0
4;; -Empero;
no estillWig t'l ohscc(IlIU
1)(':" ';~l v.~Lel'lu!' :.' l:~r..tl'~·i[dyalí:l, (P.le l'l'b;, {:~ Eil1.~llIl~,
[1'(1 pi.'~'~~~:JIl elc:.lïdU
y e:-\pOll ;lilí...'~d:Hl :lc lll!C~~tro
¡~IL' l' lu iill/,O"ta;;le;
lu que l,icI! I!l(;rccci:;.
1\;:-> '¡,L1a1J
~lS \P Ct)/l(;lll',·ü
.
(-~ll;lt.ll·
r..ga~aJí.J,
.;.:' III,: Ill!" n'l~'~)l;' y iUl c"!l'brnÙu 3~(;mprC con ('fop1ellllor
;05 tI ¡Ill !'(l~ de ~,t.leÍ':¡¡'I,8c<,m.
~~:' " 'lllL: ,:Ii C(ln:U¡i ci"'dl ico cllle slil';'imfl Jas dí~t;llldll:':
6 f(~ P.ll!'(:a el ",:por te la n¡:n";2;,',eiull <1~',Jo'; )T,ares y dl~ ll)s
,je:;, ¡II!,I]H'lll;ÍaJl¡]" el til'il1;lÜ. n<:!lli, n'Ji,'l1<liillCS el Ùl'f,Cll';";l)ll1i. ¡,',) C](' rEI:lJa::; llHU'lll'ii/:1s, y le"'lIllal'lOs
e:;tntllas
de
.Illaci/,I)
l¡:'()l\('r Ú. los illn't1Lon.'~ y oÚn.'J'()s (le tallwüo 1'1(l;,;"'Cso. ['il' rClllpe un canal (lIt(: CCIllUllicltIH!O lo:; m::rc:; ellLre !:ii,
abce \[L~Lo tampa y nncJ:o¡; hcrizontes
Ú la nan'gnciotl
y al
comercio: alii can tll 111os el hosf',nr:1l. de lsrael tÍ, los p;obicrnos
progre!ii3tas, y á los ingenios atrevidos f]lIC aGollletieroD, £0:mentarcll y llevaron á. eima tan estupcmlo adelanto.
y sill eml.mrg-o ¿qué son ninguno dc esos SllCCSO:S,cómo
poclr(m üllo:s Hatisfacer las aspinwionelJ
<ld crt'yenil~, l'Il tanto Cj IW aq uellu~ !>ollùeradus e:d'nerzos y trofeos 110:;c rcficmn
iJ>iv; y conspiren ti la sal\'fl-cion dd ¡"JlulJl"o? ='m!a, cL,îtamelltc. i)ígalo ~ino ¡(ljltt.'lIa tL lt:stialllll;h!l\íu
que auuuciara
allll!ltll]" liada W('1l0S oue b leui,la lIe su ltl'dentoJ':
"G 10rill ¡t .'.>ÎIIS l'II 1.:.s altllra~ y paz cn la tierra lLlos hombres de
bUCl!fl \,(lluntad".
J.Ill'go t<ill ('·,ta p:luria, silll'~la
paz, tullo
es precario, todo c:s inútil, Ih,stl'Ísilllo
seiiol'.
y p~)r consi¡~uiente 110 encuntrÚndof,c la wnlmlcra dicha
so'~J!'ola ticrra, ::;illO en la eRpemnz:t de b "illa futma; forzoso
cs concluir <lue la~ verllullcl<\S fil'st[l,s dL1 erist¡auo
110 <lc1JL'1l
ser SillO ét(lllclln3 fillO Hllgan motiva<las pOI' tOllo raRO dmlo,
y :,)01"todo acontecimiento
plausible en la via de ~u SillvueÎ .lI1.
'J.' al es llue:;tra suerte ùe hoy, J' por eso la ciudaù es:Ú Lle
I
p]¡í,cl'Jl1r~;,
~:í; r'lr eso el cido mismo "c regoeijll de \'lIe~tn> alh'eni::niClliu, :: yo p:~m cOllcluil' <liJe cou sus Úugdl.'s:
{;l()J'ia Ii .I)ios :'0 Ins alturus,
'lUZ Cll l,' +;"1'1'[1,
Îl;S' d ign~s '~;pl.'~'fl.rios
De la vilia ilcl Selior.
'/
A
TIc dicho.
-44Ci) El ReïlOr Pio Claudio Gutiérrez, Director de
la escuela de niños, dijo:
ILl;STRíSIllO
BEXOR:
En mi propio nombre y en el de 108 j6venes alumnos que
presido, tengo la honra de felicitaras çumplidamente,
tanto
por vuestra exaltacian á la dignidad epi~copal, como por
vuestra bienvenida al seno de nosotros.
No he podiùo ménos, Ilustrh:imo señor, que congratularme altamente Call los hijos de la vieja Diócesis por tan fausto acontecimiento,
y sentir la más grata amocion al ver Jas
esplénùidas y sinceras manifestaciones con que os han favorecido en esta. vez; dando allí una prueba inequívoca de sus
nobles y elevados sentimientos.
y por cierto, Ilustrísimo señor, que es justo y justísimo
el placer que e~perimcnt.an.
La IgIE'6ia antioqueña, parte pequeña del rebaño de Jesucri~to, acéfala y viuda do algun tit'mpo á esta parte, abandonada como uua débil barquilla en el abismo do la más espantoga desolacion ; combatida por el dolor y la miseria que
como vientos opuest.os la arrojaban aqui y allá, marcaba por
doquier las señales de su amargura ~r abatimiento.
Y á fe
que tenia razon, Ilustrísimo
señor. Ella habia perdido su
pastor, Sl1 maestro, su padre. Ella se agitaba vivamente
entre el dolor de tan incomparable
l)érdida y la esperanza de su reparacion. Pero no fué vana su esperanza. Cuando su ahatiIIliento y agitacion parecia tocaban ya á las puertas de la desesperacion, un grito agudo sale del fondo de su
Bcno y su acento suplicante conmueve la inagotable bondad
de nuestro paùre, quien á la pur deja escapar una palabra
dulce y cariñosa que como señal de paz trajese el consuelo
:í la viuda desvalida que en esta vez imploraba su paternal
indulgencia.
Hé aquí, Ilustrísimo señor, la causa eficiente del agradecimiento de uu pueblo que os recibe lleno de entusiasmo, al
ver cumplida en vuestra digna persona la devolucion de su
])I1.stor ; la recuperaciorl de sus mas sagrados derechos; y con
esto la dicha y el contento que por tanto tiempo se habian
alejado de su seno.
Que Dios os conserve largos años, que Oi dé acierto para
--45-~iirígir vuestra. grey pôr el cfimi~o de la verdad; fuerza.Y'
valor para que, como el baluarte Inexpugnable
dc.la Iglesi3.
podais resistir los embatcs descarados de l~)s enemIgos de la
Iglesia; re~ignacion para qne no desmaycls nunca en vucstra. penosa pero sagrada labor, Estos son nuestros más fcrvientes y sinceres votos.
Ilustrísimo señor.
(j) El alumno Juvenal Jaramillo dijo:
lLUBTllíSlMO
BESOR'
:
La jnventt1d cat6lica de este pueblo, llen'l. de regocijo y
participando del contento gcneml qne anima ií. todos los habitantes, os saluda con respeto y ent,usiaslllo.
Justo es qllC nosotros os demos en tan solemne ocasion,
una pequeña pero sincera mucstra de nuestro respeto y aùhesion.
Nosotros, Ilustrísimo señor, dominados por una emocion
irresistible, guiados como por un instinto secreto, nos hallarnos aq uí corno buscfmdo en este solemne acto algo de interesante que él encierra para nosotrns. Y á la verdad, Ilustrísimo ~l~iïor, si ántcs paredanos
oil' uu It:iano rUllIor que
nos inquietaba y que llevaba á nuestros juveniles Coraï.ones
la más profunda y melancólica. tristeza;
si inks
entreoiamas una voz secreta que nos solrecogia y llenulJfl. de terror;
si ántes sentíamos los pasos de un fantasma terrihle y ameIlazador, hoy parécenos, Ilustrísimo señor, que el peligro se
nI ('ja. y una esperanza firme y tranquila viene á posarse en
nuestros corazones. Sí, nosotros no creemos, Ilustrísimo sefior, que el acto que se está cnmpliendo CD este momento sea
llno de tantos que diariament.e se repiten Cll la vida social,
sin mus significacion que la (leI tiempo cn que sc verifican y
sin mas importancia que la del cutretenimiento;
nosotros,
con la conviccion de verdaderos hijos de la Iglesia católica,
á la cual nos gloriamos de pertenecer, no vemos en la presente ocasion sino una de esas ro",'oluciones que su tierna solicitud opera de tiempo en tiempo para mostrar ;Í sus hijos
todos lo~ bienes de que es capaz, proporciollÍl.nùoles
dias de
pa7., de Lonamm y de tranquilidad. Y en ef(~cto, Ilustrísimo
sellar: ;,de cnántos hienes no scrris instrumento en las com-
--
4G --
r1ica<1a" fHIlCiullPf; que YIll'~trO SIIp,.'rior os lia elleoll}(~lldilll(/
('I¡ la a('Ía~ft e[lom <¡1H~ atraw's:unos l'Il que b ilJlpil'dad
yel
error cllnd¡,¡¡ por todas partes?
Ah! ew'tll!os élTores no
(]r'strnin!is?
CWlfltas i;.::nor:tncin'i 110 dl'st(,'Tareis?
CI¡;Í,ntof;
mall's lIO l,¡'itan,j,,?
En llIHt palahra
IlnstrisinlO
s('iïor, 1'08
s·~n'is ('Il addanll: l,1 p'nanlí:1lI \' l,l d('positario
fid <le n¡¡,'strus prl'(,iusos ill:l'!\"";"'~ ¡':Hn. e()'n Di<Js,
(¿ui('m el cjplo Ilnir :l \ïlt';.:!ro (,,']í) nunca (lv"ll1i'ntíilo :: ti
las altas doti'S CUll 'lIle' os L:,kis ¡\'jslill,'-;'llido ('11 Pl I:trgo )18rí,)(Io de Yllt'~;tro ministeri·) ¡>:l.;:tclral, lIlas Îiwr¡:a y ya]or l'ilm
s;Jl¡¡'"IIe\"iLr b ]lolldl'ro,a \. j"l'i'ild0
car!'a IJIII' ¡¡¡'s:t l¡d', <<Jbrn \Ïll'strlls hombi'lIs. \' 'il H')S"!r,,s IH'r~L'\'(:J',tll('¡a ): "L,:di':Ilcia 1¡¡\l11. s(:~lliros ell el',.,:ullillo del Gien,
llmtrisili;O
scfí,)l'.
Ck) El f'CÎÍOl' D()mi¡¡,~o Antonio
Vicario de /llltioqllia,
dijo:
TLITfltí.5DIO
Angal'ita,
Cura y
H:\l)R:
LlL 1'Iï,yi,il"!lciët Ili\,¡lIiL, <{IlP Lill s:dJi:lIl1,'I1ÍU d;I';;";" los I';I'~jít:~)s (\I: la ;.¡,)(:Ït'c\:1I1 y ti" I'ls }¡,J1!liJI'CS,
ha qllt'lil]')
qll<! I;'~Sl!L!","; d,! tant",;
YiliVl'II,
s y ('nlllratiplllpoS,
r.l"splll'S <1L'(¡tLI·os
~::t\,,'i£l(:i,ls 11('('/;\1s y sll:'l'ilJ,j\'J~k" 1':'l"'r:!l1r'i¡jnd,,~ l'II 1',f;l J\1-
(,:ll¡di~d. <l_,l,j,;"s tí. la
í~¡,,:·in, al jill lJal'a
¡',m'llc¡a d" Sil 1'1'l,]:.cI,) ':
si,),) 1'I"..;tiîliida
la ('illd:¡;]
orClll.l:alllc
al r;l\I~;) di~
1'1';;:'~()I':¡¡, :a ié;'k,·;¡:t'lIll¡rriz >il' ]¡'Iya rcs!al¡l,'('id .• Ú ic;lv;-.ia catedral, y se h;I\'1. cÜll:-;'~é!;lli'¡,) 1111 Obi"pn pl'il¡,i,), I)lil' ]'('l're:;1[
H'lltalld:>
lfls ghri;¡~ <ln Alltiu(l'lin
pll"i(,si:
IÚl'llliw)
Ú Illll'f;-
rras a~l'irnci(illl~>~.
Ved :L')lIi .inl1tas t.oLlas ytl('"t¡'fUl glorias
l'or (';;(1' bl'cho <li' (anta signilieacinn
('n I~I "'1'dl'!llJloral
y rl'li~í\1';'J (Il' AlIti"'lllia.
y :lUlI ('111'1 c¡\-il, la !'o¡dacÍun ('II masa ('stet 1ll'Ila Ile 1111~illlto rp~oci,il), y CUll f;I,.])\,;\lIn.
razoll; porc] \Il' si l';; lIiltnra1 dalllal'
t't DillS cl\iln,l"
llOS lmllamus atriIJll):lllos y ro¡Jl'ad{l~ Ill' ('ala!lli{1adl's y miserias, TI') l'5
i Alltill<{U,'i1¡,s!
trn<1icillllaks,
ITlt'.'11US
qlle
("Jfd'Orlll;\
pi,',,; Il:l~;ta
glJ
¿t
1:L
1';;/4)!)
y (~ :a
ti:;
agradecer
(':~j¡':;llf:.:.
d!.' :~:.ljtl!';"¡'ij~:l,
In,u:O.
l~1(\,1l1aLa .Jol) l'Il (,llllnladai',
cllhiert·)
\'11
el
la l':t1I{'~'l.:
ilUrdlJ
l~i.l
('!;lllla;":JI
c1e La~.!.·:ls lt('\t1,: 1(1:;:
~idl;lcll.l'
.\i.'¡'flil·
la l'~L~a~Ll:" '¡'tj1~it.l1::: 'J)~
'.!j,;aelL
Ui¡j)i:I..liJ~~i...JI..':-:'til\ l'Il
lus i.h.:tlt~i·h.:ius
-47el cautiverio, 108 Israelitas en el desierto y el buen Ladron en
~l. 811pl'Wio. Y asi como todos éstos y otros muchôs, han diri: .•
gido 80S plegarias al cielo en semejantes circunstancias,
por
Un impulso naturaly por secretos movimientos de la divina
gracia, de la misnH manera }loises, d,-spues dd tránsito miJagroso de10s Isnwlitas en,cl nmr rc\jo, ásu cflbei\l\ como
guia dd pnel)lo de Días exclamó: ¡'Oantc1nus domino glrwiose tnim 'fiwgn?licat1!8 cst. Animado yo dé' las misnH~s ernoci011es y como fiel l'('presentnntu
del puchlo antio(¡uefici, despues de repetir las mismas pali1hras OanteÎÎw8 Domine glorio.qt>. enÚn mnynifi(:ntu8
C8t, H'ngo lt cumplimentaras,:i
saludaras conlinl yaÙ-<:!¡¡os<llJl('ntn ('Il unioil de los ernint.'otes
cilldadano!'; quo'os ;L¡:ompalÏ:lIl, y ,í f(Jli<.:itaros pOr vuostro dichoso arribo al tClTítori,) antillqu"fio,
en 1<1. rihera izquícrda
d\'1 e:ll\ditlOi"fl Call1'a. i Q!IÓ paí.,aje tall Ldlo y cllcantador!
j QllÓ
'>Sl'pcj(WllI0
till!
ilUl"llklltn
.•.ais Ú pJ'<~8\'nciarCIl
el
tra-
yrcto de :HJilí á \'Llc:;tra catedral que os agua.rda. llei1a de
gOZ') !
Do aquí :í. la cimlad capital no hay paraje alguno habita.do po\' sus hi.iflR, duad(~ no se v<,a [rinar la ale~ría, el gozo,
la satisflcci"n
y pl n>!-,:ocijo; Y ¿ cómo no rrgooijarnllSCuando hemos conseguido de Obi$po propio á nngaccrdote emine.nte'endoetrirm'y pi~(lad, éit:i'ii ('¡e!Tcia (·';t(L rca];r,at!a ('Oil la
másfl1iofnnda nl",\¡>'-;\ia, y que :'~J" tllliee y agradahlr desns
lTlaJH'ras a~r;;~:l oi r,lS cllaiidadeR
m¡ís cX'luisitas de corazon?
:l\Ias eh!'o. qne :í sn l!lll1Jildall v caridaJ. caracterisLÏ.cas aunde lin \'()l'áZ,'lll bien pnestü y u'na Ill.'l.gnanimidad
de alma 3
tod::1. pruoba? ,
Demos nn millon (le gra"i:F~al ('gl'c;~¡() ci lllln.(lano doctor
Pedro .J. B(,lTío (lo CI\~O\Ireson te) q né' en fHtcalidaù de Pl"esid~'nt(: de este Estado Suberauo y con todf\ sn valia. nos
ayudó á favorecer j,ara QU0. lH1estr~~ iglesi:t q IIcdase COli tod.og.
los parafl1cntos, a.llmjas y ornamental';; <J tie ha sido nnestro
valioso protector en la eroccion Je eRtr. (,híspado, y qUé' con
t.oda aCllciosic1ad y [)(:r:;everane:ia tmbajó (l1aei(,ll\lo la indica.cíon á Homa) para 'lIlO mWiltro úiJispo fuese el seiïor Gon7.álcz; ¡·\(.vernr)s TI1wstj'() f('Ü(l!Ioc:Ílllienfo hasta el n.lIgnsto trono Jel POlitilice, jiO!"ll11C aco~!:ió lJPnii~nam('ntc
('sta indicacinn, hizo la e!I'I:ei,'n. LI ,lllroÏl(, ,.. cons:w)"(J. con!ir¡éndole
la
mi¡.¡i'lll, f~IlIt1f''lIlt' (h' 'la \'(';'dad :....la vid;'; d',' la l~.;I('sia. En
eÍ()cv), él es el cura;;;O¡1 y la c¡tl)~:'a\de est.e c¡¡erl'0 místico,'Y
--48-asi Como del corazon, saliendo la. sangre por las arterias y vc~
se comunica la vida y movimiento á
todo el organismo, del mi:mlù modo del Pontífice, por medio de lOB Obispos y sacerdotes, comunica á. los Últimos
'
fieles y al armonioso y extenso cuerpo de la Iglesia á la cual
tenemos la dicha de pertenecer, la vida y la salnd.
En todas epocas ha siùo necesario que lbs Obis}lOS sean
sabios (pues que t.odos deben ser doctores); pero en esta, y
especialmente para esta localidad, es muy eonvenicllte quo
la ciencia esté realzada con la facilidad de la expresion, para;
con el estilo firme y cleganto á la vez, ponu en relieve las
vcrdades de la fe, sensibilizando por decirlo así, las admirables propiedades y precioBas armonías del culto católico. Tal
es el POlltítice que nos ha tocado en Sllcrt,e; y por esto, por
triple motivo, la diócesis de Alltioquia debe llenarse de alegría, diciendo hoy en cI dia de nuestra felicidad: Hec est diès
q1wn fecit Dominu8 e..lJultellW8 et letel/WB in ea. U fiLO o debe estar el clero antioqneüo al telll'r ya en Rn seno Ull PrelaJada semejante; llenos de contento los ObispOR grauadinos
al contar can un colega digno de ellos; yen fin, el catolicismo
ent!'ro repleto de un santo regocijo cDnmc!alldo ya entre loS
Obispos un luminar mas.
Antioq neiios! N nestro Obispo electO' ya. ha sido cansa·
grado, y se le ha escudado COlllas armas duras del Pastor;
considerándosele
con la ciencia eminente, bastante y neccsaria; con la voluntad suficiente para posponer la cllIocion
del hombre á h~ justicia tran~luilt1 dd J u('~, y COli la ricci··
siou lleccsaria pam ddender los derechos impre:;crlptiuks
du
la. Iglesia.
Ved aquí el gran conquista-dor de IllS almas, el prolHlgadar de la Heligion del {]risto: El ha ofrendaùo ya á Hn gl"CY
cou toda encrgía sn ¡¡alud, repo¡;;o y vida, y 110 podia Her do
otro modo, porq ue su alma y su "ida son de Dios y de las almas. El viene á nosotros con toùo el !tmor de padrc y con
toda la ternnra de una bncna madre, pOI'l}Ile así debe ser \Ill
Obispo, segun "Fenelon, y fué demostrullo Ile a:llteHmno pur
el fundador de la Iglesia tí quien reprl'SI'llta, euu Hl! sallgre,
suplicio y cnwifixion.
N a elllùargalltc, como cI saccnlocio es ear~a Knppriùr allll
para los mislllos Angeles} y lllnd\() m<.Ísel l'l'i:;cop:lllllJ IlllSI)hus tleuemus eÚlltriLuil', Hu solo tall la úLeL\i"lll;ia y sllluÏ::iiull
Das del cuerpo humano,
sid:) y tu (lU~ es más, COll los sufragio.s, rueoracioll(·s, Ú till de C{lle Dios); \lcstro ~e~or ?ellÙ¡ga SI~S
1)1."OS, vcnr.:l L..; Gbsl,Í,c¡¡]u.';
~'¡tr:J. (i t:::; loU Iflllllsteno le se?, 11g"::'o, sn Je (I'j t(~n etia:-; pnw[¡¡t.; (Li:~nco!Uunes el~ \'stos tlCmp.)s) <¡Ht) hace/1 la al1H::'~;l1¡';\ d,·! UlJIl1L deJos Olnspos, y quo
lv. jll'itiei:l y I:, Ha!¡idllri¡, 1"I:dl('~(':1l1 ~Il ~;dlaJ para que muntnni(':I!JIIS¡: cutrp el l'c:,tiL),,¡u .r e~ :t](ar, :;('11 de Lncna volllntnd 1'¡!I'.L r;,;;;ctnJs, el cu¡¡d¡!e~:J!' J¡; 1.\:; JlJiscrieordiaH
de Dios
y <1espIII';\ (lu tL glau pelei: ci ie nl Ú C111lll'l'udl'r, ót consi~a la.
it su :lll:'l)l"ÎllaJ,
go~.r
gloria .r lluwtros
Ú HUa. n:elaLll..Lï:
::LSIL SùlU1Jm
la
e~el'lm
fl'lieiùad,
pudiendo
llO/wl/, cc;'i'il1;¡,cn cr;,{avi, ('ursum consu7iW?J/: et ttú¿cn se¡'vavi, in J'el;'luo.,¡'eliUsita
est mihi COl'onam
J'Est ¡Us 'I/!am 1"edclcl ?ni/ti iltÚ die jU8tltS Judex.
lIe
C.Ïcho.
(l) El doctor José ¡¡Inria. l\IartÍllez Pardo dijo:
ILUSTIlÍ)IO
8E5iOlt:
En este difl. fausto }lara esta ciudad, no dcho traer á la;
memoria el acontecimiento en virtud del cllal Jas 11a\'e6 de
este templo pasaron al poder de la Corporacion
municipal,
y
llu; qne l'stay enclLrg:ulo de poner en "lwsttas
manos. Con sa.~
ti~tilCCi(lll Jo ha~o, sCÎÍor, porqlH" puedo informaros
que no 8010
se ha cuidado de la conservaeion
dd edificio, que pareeia
abal1do'-lado,
sino q no tam hien ~e Lan cclt'vrado
en él torlas las
se hiciera,
hemos ha-
fuueionc;; con cllllismo (>spkulor
con que álltcs
á ]lesar de las difíciles cirCllmetatlcias oli que nos
lJa(lll y ,le la escasez (le reClll'SIJS y pobreza del
merecimicnto de lo hecho se Jebe ri. otros, que á
corresponde el de decido á Su Seüoría.
pueblo. El
mí solo me
El pueblo clamaba 'por tener
el Prelado
que funciona~
en esta santa iglesia catedral,
con residencia
en la ciudad,
y en StlS sÚplicas me pn.reej(~ f[ ne oin. la q ne hace cincuenta
l'a
aüos decía en la Basílica l\fdwpolitana
el orador s(\O'ratlo, y
.
1
o
SI lIO me engaño StlS pa abras:!r:1n : "Los p:í:'vulos pidieron
}lan y JlO !tnlJo r¡ni(~1l S(' los cli~;tribn,l()ra". Vos sabeis, ¡;eîior,
ql!l' PÜJI n; t.:l (l(:e su lwd ¡a,
('o/uo la fe llUllc3. abanùonó
á
los (Jlll~ I lI¡JÍ¡;Lll ('ll la rllisericlInlia
divina,
la RÚplic3. ùe los
llec~si tados fué oida. ¿ Y cómo 110habia de serlo, si las ple-
.r
ganati
CritH acoilllJUüaùas
de la voz de la mujer, que interponía
4
--
;")0--
la meJincion
de la Patrona de la ciudad, de la inmac111:111a
YírgPll María?
J,as oracionl>s subian al trono
del Altísimo
]Jor esa escala mistc'riuFa qne el santo 11ll1l¡J)j'e veia en slIeîjos, d8 allí partiú la inspilw;Ïon al Padre cOlllun dl' los fieles, y Vos, !;cñor, fuisteis preconizado cn presencia de 101i
Cardenales de la Hanta Ig-Jesia Hornana para apaccntar la.
grey que se os encomiclltla.
Hoy podemos decir: Los p:ir,'ulos pidieron pan, y ha vcnillu el que debe distriollirsl'lo.
Bien H'niJo sois, Illlstl'isilllO
s()ÎÍor; pcro :'tutes Je entrar á la
santa igle¡.;ía Ú dar ¡.{racias al Hantisimo
pUl' pl hien qlle nos
ha dispeus[\llo, ()~ ha~o la sÚplica de qlll' ha:-çais oil' VUI',;(m
.•oz á esta lllultitud
(]ne (tt;Î lo ùesea;
mi n\<'go viene auturizado {Jar la lHtlabra r¡ue va lb dirigiros
la inoeeneÏ:t, n~l'leEc:ntada en bto grupo dl' \'Íl'gl:'nts 'lue veis aflllÍ á VUestro
lallo, que quil'\"(l tamhiul íldicital'os pOl" el alto honor qlle haheis recibiùo. 'l\nllillo, pues, haciendoos clltrega de lus llaves de vuestra cateùral.
Ile dicho.
( !Tl) La nilÏa
IW8TnisDlO
l\larb Teresa Ortiz ~hrtínez dijo:
BESür..:
La ciudad capitnl (le la J)iúcp,j~;, que la l)i,"i~m Prnvi(~ nleRt ro euidado, y q nc r¡>prp~l·ntn. u;te
(J'i
sallllla por mi '"UZ, y se ftlieita
1'(lnplC
ùespucH de halwr ag'u:l\'lla<.lo con la espc,rnnza <¡uo vil'ne de
la fe, el com;ul'lo flllC )lnsiera término á la J¡¡rga prinll;jon del
Pastor que apacC'ntara fillS hijos, hoy recibe un Prelado cuyas soorrsalil'l1tp8 cualidades y virtudes
no solo le prometen
los benefieios que necl'sit!L ci alma, iiilJO lamlJien la labur y
cultivo de b cducacioll : el bien en todo sl'nti<.lo.
Jt'l1cia ha confiaùo
cor0 de vírgl:'llC's,
Antjof{uia,
vnestra
to
señor,
ilustrncioD,
en COIlIpClIsn.cjon
de
de yuestra (;onsag-mcioll
enanto
espera. de
y vuestro
[.fcc-
~íla
gre~! qne se os ha encomcnùado,
OH ofrece
RIlUl)sioll
y respeto, cOll.sillc:r:¡ciulH·:;; y amor, IlrenJas
:;l'(;"uras Üe nU te
sincera.
Ú\ ,('ii"r. r;1'(, ",111(,:1 ;,,, -;-~('il'l,l" :111T1clI:m(10 :k'110.i'1llen'dlr,s <il: WllgD du l';lpiLal, ereyÚ y espem "11 1,\
justicia de SllS fueros) ftll'ros (pIC hoy le son rei v'illùieullos;
S\!
da, de
SI1S
--.-51-r"~cíl}j('nrloeu sn seno al Prelado
lJant n·~ir.ü~ta
ilustre llestinado por j)io~;
grcy ...
_
..
E~e\)gld() entre el yntnol;O clero antlOr¡lH~no, fUldels Jcsign:lllo ]JOr el (l¡·clo de la Di viuid:L<I pMU gobernar la Iglesia
(b Antiocluia y dIa todo III <'Spem de \'os; de vos, corno
orador eIOe\1e;ltt'; de \'os, erll~:'gicü en vuestros procc(IimienÍ{,s; de 'l'OR, .i nsto t'u vucstras dücisioucs; y CIl fin, de vos,
amante de la ci,'ili ~aeion.
La eate,lr"l, qnü es el 01'611110 de nosotros, ese templo
sllntl\\)S') coustrnillo
:;ill f,'lllbs especialrs y soJo por la te. de
un honJJl'r ram y Ii glltil:i de ~;¡¡llor de nu nohlü ]l\whlo, está
de gala hoy. El lntu qnc ha. \estitlo por cinco ri.üos lo deja
dé lknu ya para siümpre, porquo c1l' HlS, sl'oor, el pt..Jhlo espcra tanto, que ann desecha ::>1t.emor de 1l\111 utra puna.
El pndre de los fieles (kcrdÔ ya el relUdio q llC anhelá.bamos y nucstl'O l;ufrimiento resignado obtuvo el premio
que oht.ener dd)iel'ft.
El dig-no l'rl'sidcnte de la Corporacian J1llmicil'al 11l1SO
ya en yn::stras manos las llaves de rstr tell1plo: n:U[¡lOS LlltarlÍ en él. Proseguid y acept¡l,¡] hondaclosl) /a, hllt'llll \'Illllntad yel respeto de un pueblo que os cstl'l'dm l'litre StI:'! !;fa%05, que os ofrcrn amor y ventracioll
y <lue os pide de l,inujas vnestm hCllLlicioIl.
He didlo.
(n)El
1r.¡¡sTHi~mo
sCI10r Juan
n.
LondoÙo dijo:
SF.:\"orr:
Honrado con el encargo de dirigiros la palabra en nom-'
bre de esta ciudad, os la dirij~ con gu~to, pOl'rllle cumpla
un deber de gratitud para con ella; porque anulIciado
\'os
llor la conciencia pÚblica como mensajero providc1lcial (it.!
llna
j"rpamcion, de Ulla jnstid:l,
de l1~rt espcrnn;m, merccr:!;
hicl: nu\'stm más corrli[11 y j"2:;petl10~:1 .~:1'"[:lCi(}ll; y ('t\ fill
pOJ't[lle
(~S ,a
l'
,
•
t·H:¡;lC¡;OnO
pf.rI~ rn
i
qlle
('co dl' mil> propios sentimientos
¡il 1l1eTlSn. t·~~p!osiull \10 rq;ocijo C:JI1
e~ yo>; n,l ~;()l del nHCVO dia, do la
f~i
JlIe/:H
In¡;L
J ·h:ll
.
[;(', jlerm¡{<1,
J
flCl'!lt~;nr C!ln
CGCIllTnCllSO clalllor
esa,
'lllO to:lo el pHe ]¡]o H;t¡lllh
llncv[t
l~poca) tlW'
JIOY
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\:'jlh(Ü
St; •..L~::·1
l'Ult.tLllj
'/ll\., ...,L[i .. lill';:;Uili.,;ll..~
ajl~l
i:).i;n·l-~
BANCO DE L A REPUBLICA
1lI8l.10T&CA lUIS. ANGEl
ARANGO
--
52 --
fi.ea eiel'btlllt)\1fe b r"ivilhlieacioll
tl(~Ull llerec!w, la repara~
ciull de un a;!;\'nvi l. d [Irincipio d,) un }Jrogl't'~o.
Rt'w)'dad. Ill1:;lïí:iilllu
,;eilur, '1I1C est.a ciudad, haciendo
('[\Ormes Hael'ificio;', CIll1Sj~1I iÚ la l'ru;ciun
,Id autiguo obispado de ;\ntilllluia,
y llkl'<'eiÚ t'] titlllu Ile Cal'itn]lh~
eHe obispado. Hoconlad 11'W s:n ¡¡tas \\'CIIl'SW:i ,pte la fo illeon tmstahle y In. Dllenrt Yulullta(l de 1lllOS lhlel/S homlll'Vs, emprmllliÚ
la conslnu'ciou llu es:tlwl~uifica c:ttl'Llr:d que se osteuta aÚn
COlll') el pritw·r
templo dd E~t;\do. Hecol'lla,l, en fin, ll'le
cual corona de glori'l mnccdida
Ú tnuto esfill'J"ZI) y :i tan nobl!.!s sacrificios, se Ilulllbr6 pam Obispo de esu Dióc('sis al fieiior GÚlI1l'Z I'lata, YW'stro sabio maestro.
Pero despnes de ('sos tiempofl ùe \'f>ntnJ'U yinieron lllua
Antioq Ilia ti('m pus (ll~ ad n:rsida,L
y eu túnees, fa tall'ccuerdo,
llu"trbimo
HeÜOl' i viohLron sus dcn ..hos imprescriptibles! i la de:-;}loj;\I'on Il!) Sil antigua Jignidal.1 !
_
Pero COl'mmOj uu velu 80hre eso, sepultcmos tan pcnoso
recuerdo en el 01 vido, que tal nJZ las tribulaciones no son mas
que una expiaeion ó acaso un cri"ol en que Ja Providencia
trata de prob.tr ÚlOH pueuIl)s ailí como á los imlividuos, l>am
levantados luego á mayor altum.
BI pueulu ultraiado no se exasperó, soport6 la injuria
con l'Csignl\ciou, redubl(, su fervor religioso; y cuando to(lo
oido en la ticrra. parecia sordo Ú lOll voz que clamaha justicia,
la elevó ú otro oiùo mas alto, al oillo de Dius llue siempre
oye al q Ile cC/n buena Yol untad le ruega.
Yo vi ele\'~l\'He h,Lst<t el l:ielu la sÚplica aeI pueblo entre
lJuhes de ineiellso y sobre Jas alas de lUi: y de aromas ùe la.
ol'aciún, y pronto,
algo CaIlla una promesa:
algo como un
fuIg{lr de c:;penw;>;ll aparcciÓ en el horizonte. Se anullci6
la
rl'Dti tllei,)n del olJis[1ado y ha~ta /:le adi villú vuestra. eleccion.
Bntllnecs l'sn. soeic'dad, ese pueblo q Ile 1mbvis visto agol}-.urs!: lÍ vuestro paso pam saludaras,
se cstrcmeciÚ
se est\'\:'ll1cciÚ Jlresintiendo
ln. rcalizacion de sus más íntimos descos. y cuantas veces esa promcslL y ese fulgor aparecian
HllLi:l claros :t SIlS oj()S, utms
tantas ,'cces, palpitante de entusiasl1Jo, lanzÓ Ú ll)s vientos las alegres viura¡;ioncs de !lUS handas de llIÚsim y (le ~nH CilmpalWS, i[umin') el espacio COllIaS
mil !tICI'S de Sl1S }¡w!in:tri;¡:; y de SIlS c()hd(~s, y (11jÚ cJtallar
por lloude rplÍera la mllllifestaeiún de su inmenso regocijo.
l\las t<nde :lpal'ceiú tvplí "U'3'ltm pastoral, la pastoral (1ue
--
;'):3 ---
nI c:lrl'o y :í lo!'; cnh'llieœ dn Yllc:~tr~ f)i("~rsi~l: pl'('IHlli,) \l,lice y ~n\¡\inle (10 la~ clocnente8
lIlanifcstaciollCS
Ill)
,'w'stro p(,!I~allli(,llto, !termo,o
(ll'~il'!lo (l(~ la 11Ií': (le \"l'estra
clara inteli'fellcia
bnr.al]o ('Il medio de las tiuiel¡las de lllles-
Iliriv.if:t,,¡s
tm ~itllaci~n p':~;Lda, pam disipadas.
En fin, d\'spl!cs d/~ toelo ('~o ()!i ]ll'es(~l1tais
lila
seiior,
\'OS, 1111strísÍacorn¡mïia(!n
<le \'Ht lJl'iilante \'('Imion (le vnestros
que hall \'('nido á J¡ollramos eelcbrallllo call nosotros
amigos,
la fdir. inal}O'uracion de otro oLispa<1o ; Os prest'lltais rodeado de hOllll)~'s C")lIe oClIpan nn Imcsto elll¡ll\'ntc en la literatma, en la Jlolítica, ell el eOlnercjo (lrl Esta<1o; os prescntaifl,
en fin, adorlJado COll CHa. l¡ri!lanto nnrl'ola úo la ropnlaridfl.tl
q Ile lni!llL Cil torno \ïlcstro y q Ile ndtl l1uis r¡ne el oro y las
cornna8 con qlie OrriIl1ell su sien los monarcas y los c~nquistudoI'cs.
Hit>n vcnido scais, Ilustrísimo señor, bien venido seais.
Ohrero activo, eficaz é in¡¡ltigal¡le del progreso moral é
intelectual
LleI 11I1I'hl", poch·is COllsag-mros á vuestm Raub labor l¡ajo la s(lIn!n'a (le !\\WstlU afedo y dc I1l\estm ~mtitlld.
'J'm]¡ajacl lJor b JIU?, ]lO!' lrt ?no!'(ll y por la cclllca('/o]/.
'l'rah~iall, fil, pero trahllj:t11 Rill tn'g-Ila, [1or')llè el cit'h os
cllll('(,dit, üll1¡¡ís lJoLle, PI lll:í, 1)(·110 dl' t(.d(·:.; l():~ jl')(¡"ï('~' '[1I1'
]Jll<'dl'lI 0::;te11tar8C ('\1 la tic:rm,
('I I'l'dl'r dl'! takll10
llllid,) al
poeler dt: lu. virtud,
de cuya unían nace vuecltm lllagllitie[~
e luclIl'llI:ia.
Dt'rralllaù cntre ondnlacinJ10s
tb luz y de annonía8 el
má~ico rauclal do vue8tros lH'lISalllit'llt08 en cI seno de esa socieùaù quo hoy constituye otra grey y lo vert~is f(.'Clluda.rse y
prollucir ahnndante eoseclta dl' Lendicios.
1laIJlad, Ilustrísimo
seiïw, hal,lad sir.mpre, que VUC'flÍ11t
palabra siembre el ~él'll\en du la v¡rtlld en el COI';\z;QU;que
vucstra
I'alahm Ill'\'(> la luz de la \,(,l'dad ;Í, la llwllle, (JIlt' al
golpe (le \'Ul'~tm palahm cai~a d jlod0-!' alllE'lli!Zante (1el crim[~n y dd vieio; quc vuestra palabra, en fill, deleite, int;truya y moralice tlomle cIuiem !lue clla se kvunte.
lie dicho.
El
T
(-)
II
~ SCIIOi',,!ln
11 ~T
j\.
-"l'
\ i Hl Y 'tT'll
\ 1
[1, d"J,JO:
Cn!llcal!o á la cahc7.n. cld oJlcgio c1r Ran Fernando, cnmplo hoy el satisfadorio deber (le í",licitarl)'l Ú llli nombre j' en
---
;)4--
el de laR clases del e8t:Lhl<~cillli('nt(1.. \ I haccrlo, no me impui.,.
;Ha la efímera etiqueta, sino la:;; il1~pira(;ioll<'s de Ull corazon
animado )lar los m:i;; )lmu;; selltillliGlltus de ami;;tad de rcs.1
.
,
:pcto y d e COIlSILemelUll.
Amante du AlltÍO(jllia, como el 'JllO más lo sra, mi t'spirit.u se contm!)\¡ y mi eor:lZOll fué dibcer:tllo ¡lOI' el (lolor
llliis cr11c], ri, causa (11) la trasl:wioll (le la Ni1la l'l'isr:olml d(~
la cilHlatl (le lt"hl('(lo ¡i otm (IUL' nillc;l1n ~aerilieio ha]¡i¡t Iw:cho para la crece ion del ohisplulo. Empero, c~e sentillliento
('"tÚ CUllI[ll'nsado con usura al "el' la mitra ;;obre la digna
cnueza de UIl sacerdote
sali(lu ùe los claustros (Id plantd
qUI) dirijo ell la. actualidad.
Este es un titulo (le llOlJOr para.
mi, para Vlh~stn)8 cUlltliseípulos, para vuestros amigos, para
la DiÓcesis cn ~cn("nd, y debe ¡;erIo para todos los vcrdatl(~ros catulicus (Id Illuntlo.
Llc:';'ais, SCll!lr, ¡i Ulla cinlhll r¡nc os n'(~ibJ elm eutusiasmo; (l UIJa ei\ll\;lll n's¡H.:labk, (t p,:~ar de :<11,ll'~~raci:t; Ú ulla
cillLbel rpji:;i'l~a, Hltd (Pl'~ 1(:5 pese á su~ (,alllllllliautes;
(t
lIlla ciu,lad qll(; allm el cnlto, porque ama at Vios de ¡;US
mayores.
Los ]lueblos qllc vcis de fi'cntc y los quu tel1l'is :í la c,;pallIa, SOli vl<l'stms ~inccros amigus, os ll~l\Uf\lan eon nu~i11.
y se J!I'Ollletcll (iwcll" dI: "III'stm <liJ'i'fTiull pastllral. El
gr:lIl1le Ohi:;po, el l'gl't'gil) (~Úllll'¡; 1'Iat11. liS Cllntl'lll}>1n (]¡.,(I,; (,I cido, ,h'Slle ('sa lllnn~ilJtl ref11lg(~Ilt(-'Il(JIIL1L.se halla. !'L'Slllranclo 11Ila all!;,',:;tl'm de gloria illlllurtal
X o se ¡.;i po\"
l¡l. cxnltaeiL'n de ¡Hi c\:I'\'1.lro, ,'t causa Jel plal','r, habré eaillo
ell ihl,~iu~l, ó si efediranlL'llte
I'S lIlla re¡diclad;
]l1'1'l)St'a lo
qlle fuer." yo \'eo it ese l'rdmlü
impollcnte,
cuyo S\'lHblante
}"(·rda uuu. dieha iU1]lcrtnrbal¡]c; yo reo Ulla alln:,o!::t radialltu sohre Sll cal)l'za; yo lo \"Co sOllreir (h> jÚbilo, pOl'que suis
YOS el que oClll'ais la ¡)illa CJlll' él huJl!'ó en otro ti(,lIlpO; digo ruas, yo percibu d tilllbre de su voz pririleginda
y oigo
qlle oS dirige In, l'alabms si~ni\.'nks:
'(1)";:0;0
SAl'I';I,DOTE:
"Al trillar la "('IHIa del Epi,;copallo, seguid mi <'j(,In)'lo,
no os de;;vieis de la línea de ('ullLlneia <¡ne (IS traeé, y la Dió.,
l'l'si" de Alltie'(Jl1ifl, illllll'lilla por hLjnsticia, marelIu,l'(t eon
llaso 1Îrll1e llÚci,t 1,1pin;ienlu Lie b pel'feeeion moral y religiosa. No os intilllideis
po\" el clima, por la impiedad,
ni
--
55 --
anrxn;:; :í Ja mitra:
e1 ]¡omhrt"l C'l ~osmop()lita
III es r.on ll.)]¡ll~ I'ilml!, El l1tll\\]¡re. ('(Jill!) rey de
la I ¡';I'I':I, rH) t.iel!c latitu,l
fija: San Pnb!o ill).~ diÓ el t',j('mp[o
C:l torIa sn calTera H!J0slúlic,o,; el Híj(l lId 'l'r U,;llll, lo manif(:~tÚ en su pnso \'eloz [lor la península
española;
el A~uila
de P:ltmos,
ílncf.nando
en b caldera
de aceit.e hirvienùo, no scnti,.
otro cajal' qne el r¡l1C Jo Ín[l¡tlllah:t
en el
amor (le su divino
l\IarRtro;
Elllal¡,t i',e n·f'n'Reaha con las
kas
quc devoraban
su IllUSI:llLlciol1 \'ir~in:tl,
t":IS inf,.ml.:s,
l'rC1H\I';ttlas por la harbarilia([
(le D;lrian');
S'lIlto Dl)lllin~o y
Han A brarnio
confllllclienm
los par:tlclo:o (Id El;na<!or,
y
a'::Ncal'(ln los merilli:ll1o!o; <le h" zOn,t:l el! q n,~ lH,t'\licaron la,
¿"etrir),], del Un:.;illo; y S,m Antoni,) y ~¡ll\ n,~nitll hicieron
lnjal' el rnrrcurio
en el termÚ!lletro
nfrie:lTlll, al impulso do
su e('lo evang'l:lico y al enc:lIlt\l dl' sn ,,(',1I1dom palahra,
L[t
illl¡lÏ"ILvl uo t'xi~te cn vuestra
DiÚ(;\,sis, os \1) a;:.c;,;nru (ll'slle
1,,_ ltlilHSion rntilantc
en qne hoy me cnClwntr\l;
1wm si por
d,:s;l:l'<lcilL I,L illlpiellaJ
Je otms paisl's traLare tIc illv<t(lir ese
tl·rl'itorío,
estoy cierto f]llC tClldn'Í;; la hrfl"'l..'t 1lC'L:t's:ll'ia parr<.\'('chazlwla y l:ialvar vllestr;) gn'y. Creo y t:r'n~'() c!értillllrnbre Ile '¡\lC, :i illlitacion
(le S;:ll AlIll11'llSi,), (\an·is (,I reto á
los m;tl\'aùns (¡ne intpntan
\'il)lar ('1S;I~'I';lth dl' la I',desi¡t, En
el;~etl), nlcstras
InCl;;;, ynt'stra sn\¡lillle ¡¡:lLd,ra, \':,,-,~tras virtmles v \'llcstm rdioriosit\;¡t\ Sllll gal';lfltcs sillicil,lt!t·s de \'1\('Stm eO;llllleti1l'piscI~lal.
No dntI~), vlld\'D ;'1<L'cid", 'lIlO si la
cOlTnpr.ít111 tl(~J si~l() :ltrll'll:lZ'l, COll SI1Sqk:l,l:ts
illf,'!'1\alos It)s
Únglllos lie Anti0'lllia,
lll:ltll:jan:is 1,1 timull de \'ll,'stra
n:lve
con maestria,
y salvareis Ja tl'ipnlaciun,
l'OUlU el n:llltico más
CXpé'rillH:n tado.
"T llf:diblemcllte
Jas Arrios (ln] presentr
;:.ig-lt) I1nJIar:in I'n
vos otro :\tallflsio C]ne los eùul"lCllla, 1¡lIe [1l1h'vricn sns falaces
doctrinas
y Jas disipe Cil JIt atl\1ós!'t'l":L m..fitica Je su misma
inic¡ nid,tll. Lo hareis,
Sl'iior, (JoJ'(f\1e tl:lll'is ln. inst.l'lwcion y
el temple: (le alma Iwel'S:ll'ios, y cout.ais con la coo[l(;l'aeion <le
cilllladanos
crninentl'ltlellte
relig-insos, y COD el apoyo
de un
G"hinrl!o snceionnl <l ne ;:;e g-Juría. de Reg-nil' la rdig'ion
del
C1'Ilcilica<llJ, Las tarléilS n~ p\1(~llen intimiùar
;Í lIll hombre
como vos, qne sabe que el católico cs un Roldatlo de Jesucl'i.;to y Clle Sil consi~wt DO es otra f]lIn 1;1 de trillllf¡lr ó perc'cpr l'llv'll'l!u ('n d ('stalldart£) dl' h crm~: tln l'Slt cl'nz fm'l'te (lue aterrlÍ ¡í ;\Tu.s-cucio y ('I,~vó a Cunst;wtino
el gr1J.udc;
~I;¡' Jas tarrnfl
y 1·1 ApÓstol
--
r)G --
de esa cruz esplendente anto 13. cl1al c,:iaron la barl,atie llr
Baulo, el or~1111() ¡]t~ ('!o(lu\('o, (·llj):1lliqul'i~nl()
de ¡\;2:\1~tin
y la sClI~ualitla(l (l() ..\l,,·hnlo; (h' t 'iL Crill. },mll'roo:1, ('untra
la cunl se l',tn'II:II'OIl
]".; nilllil1alt·:'
Ill't\\'('c!t)S
~. los infancs
esfuerzos dI' \'oltain·, Ho)n~:'l':lll,ll:l!(>'lll.".'rt, lJi¡J"l'n1. n"h'ncio, 1l0ilHlCh y fanlos (¡tros I'rrn'r:'lJs CUlllO lJan tlv:,]]t)IJl'aclo
á la hurnanidncll'fl
lm; 1S siglos antc!'iores,
r qlle !l('na do
espanto á los rnqllít.i<:os pj~:1!IC()S de ln époc:l nr-tn:!l. I.ns
tareas no p!ledell halT!' ft'w))!,,! Ú 1111 :\Ii¡¡istro llel ;-:alit !I:lrio, q!le mira d smco IUlllillow {l'le lhjaroll en }lus (l,~ si el
:Mártir dc J1arsella, el cOIIJlnu(lu de l:;cualllll~, la víctima de
Paris, y ùemm; Prelados g ue han fincado Sil tlicha en el
cumplimiento de sus deùeres, Las tareas no pueden anelh-ar
á un Levita que estÚ íntimanJ('ute
cOll\'cllci,lo qllC lo e:'pcra ultratumba Ulla "ilIa inmortal v mira con all/daril)})
la
corona gloriosa íjuo ]0 csÜí. prcpan;da en la morada de los
hiena vellturados."
Esto
ecllUJ'I)s
Ilmtrísimo
dice
(Jhi"pn
y
<1"~pll(,.~ d('
,<do 1I~1 (lv1irio.
s('ÎÍt)r, qlI(~ (]..jj¡-jo h:l <llllce': hllh'l!:: ..
JL·I-:C .Y
QlIi~il'm 110 ll:llH~1' s;t1it!\lllllIlCa lIe \Ill l'Xt:l~¡S
(an
Hcdllctor!
el
uelllliclo]J
su
!l1c,(le](l,
l':\Í/'l'llal.
:-;i
IW l'l'Lira,
e"Il'
hl
agradable!
EIJI}ll'I'O, 1m tl'l'mi¡Ja<.lIl, y yo, dJSl,rto y {'('¡¡!ll()"iùo con tal discurso, n~:n'~o por c01Oplemento,
(illf' ('sa
silla qne oCIlJlnis, come) })::'11 lo ~¡,11"::', Illl I'S la ~ilh (k Elt'ogábalo,
cs la de ~~:tlfllTl(ljl, Ill) (':' Lt d,~ \';] J¡"l::l?:U', cc; nna
dl' l'il) J X, l'w,k (:ll!l\'(:'j ir~f' (;! )i(l:" Il') lo
c!llade~'lldia~(O,rll.J('l'US:tll'¡'l;(,ll
hde{:l'riano
110
imitacioll
permita!)
<.le ln
cn Curtngn, r en la de [g'n:¡cin l'li Alltjl)(~lljil; pero r:qlJr',iluporb l'sto Ú lin sil'J'vo del ¡";¡·¡¡or, qne al im\'t:f: Il"i diMallo
velo de la fe, mira al n¡¡nw}'(lSO :~;r\lrO <1l.' I.-.s l:),inil'es, ve
las corouns íjue ndornan l'ilS ca1.1ezas, y j'l'l'cille ebrn!lH'lltc
sus melodiosos cantal'L':'~ Xnda. nhsolutrrnl(·nte
Hada, E! lecho que ('I> ha prepal'nclo
(:1 Altisimo, TIO es el vt)luptuoso
lecho de Xal.H1ctHlo!loso\';
llO l'~;el JIlllIIÍI!O lecho de l\J:HCO
Amplio;
no es pl 1Jlandu IecllO dl' Antonino:
es 1111 kcho de
santidad y jllsliíic:lcioll:
]l\1dl~ (:(l1J\'cr{-in.;(' l'lt (,1 dl' nl:ntimozin,
Ú
L'))
l'lljlW
oe:¡¡':u\ln
¡¡¡neL,>:; criè'tia::¡)s
('11
la era
dioclt'cian:t: ('~C ¡'C]ltl no (';iuí c;;ll!aJt:¡rJ., ('¡"'II hs f¡':l'_::ralltl'';
rosas ¡J" ,lt'Jj,(,;
P")"'l,
('n rl'l;o;I!JWll,:1.:il
lin t\" \"1\(·~\!·;t (~arl'l'm vit:d, d :-:,'r:~ c'i1\'('rtÍ(lo
('11 1111!ce:lo c\ilJi<':l t,) dl' l'os:;;;
crlestiah-s',r p'rfll",\dü
c',m les :ll'Ù:ll:1S qm' cxlJala ll<'scie Sil
-'-57-trono ~xêelso la Santísima
'l'rinidu(l.
Seguid, lmes, señor, Jlor
lI1urchacllmpávido brida el ùestino á CI ue 08 llama el cit'lo, y sereis eterbumente feliz.
¡Oh Dios de nÜcstros l)aclres! Dios Omnipotente y Eterno! Aunqno el más indigno de vuestros hijos, yo os alabo
con todas las potelJcias ùe mi alma y con toda la fuerzA. de
nn corazon que late tllmultuariamentc
por el jÚbilo que lo
domina. Yo os piùo, Señor, que si, por una desgracia imlecliuable, el Gobierno nacional, impío, materia.1isb\ y ateo logra descatolizar el pais, tengais compasion de nosotros y no
nos apartcis de "uestra l'resencia. Haced, Deñor, que el Estado de Antioq11ia se salve del cataclismo, se mantenga firille en Rns creencias; consen'c los tradiciones,
y 8C constitnya fiel depositario de las taùlas de vl1cstra santa ley.
Haced (¡ne nuestras montañns se trasformen cn el monte Modin l)ara qne sirvan ùe asilo á los verdaderos creyentes. Haced que nuestro Pastor y nuestros prohom bres, imi tanda á los
ilustres Macaheos, ellCUÙeC(~ll
las falanges cat61icaH, yescarmienten y castiguen (L los A ní.lol:os <lile quieran arrebatamos
las crt·l·nclas. Haced qlle ese !lectoral que adorna el pecho'do
~1uestro Prelado se trasformo en el racional ùe Aaron, y que
el bácnlo que tiene en RIl mano, aùquiera las prerogativas de
la yam de Moises. Os pido, Señor, la benùicion pam los sef10rcs Hibon, }lartine:t y TÚrres Caycedo }lar el Înteres que
tomaron en la creecion del Obispado.
Pido bendigais á las
lllatmnas de A ntioquia, cuyas fervientes oraciones Lan teni.10 t;in ÙUlla una part.e mllY integrante en la cOllsecucion de
la. mitm; y os recomiendo con especialidad el alma pura del
señor J mm Estéban l\lartínez Ferreiro.
Vos sabois, Señor,
])OI"f[UC nada so os oculta, que cnando el preslJitero Salvador
de Lastra estaha en pl borùe del sepulcro, hi:w llamar al citado Martinez, con el o~ir.to de que bUf>casenn escribano para hacer sn testamento, instituyendo heredera universal de
SIlS ¡lienes á una de sus hijas, que era su ahijlLda; sabeis qne
d padre dl' la f;C'iíol'ita conteHtó qlle su hija no tenia necesidad y que la Virgen esiaba mur pobre; (¡\le la fÚbrica de Sll
templo cllfccia de l'('ntas, y IJue le parccla l1)('jor que dqiase
1m fortuna il ln. Vírgl;n; lo qnc al fin se vl'rillcr,. f\aheis taml,icn que, pn uno de los temblores del aiío de 40, qUiZ(l el más
fuerte de esa época, cuando t.odos corriamos desl1a YOl'idosen
d carril en qne os ha colocado la Providencia;
--
;')8 --
busca de un asilo para escapar cIe la muerte, que nos amenazaha, l~st.ehOlOhre extraordinario
corre impávi(lo á examinar la catedral, h.-revisa (lcteni1lame¡¡te, y sale ùe ella lleno
de jÚhilu, porque ningun daiío había sufrido. Aunque su alma no necesita de recomendacion por estar ya en vuestro seno, la hago apÓuas coml) Ulla manifestacion de ~ratitud, y
como una prucba de la simpatía que tengo siempre por los
hombres que se disting'uen, como los te, por su religiosidad y
por HU de~interes mundano.
Os pido tarnhien la bendicion
para el Pastor qlle me oye y para la grey que debe apacentar.
El rehaîio no es numeroso; pera esto mismo le garantiza el
aciert.o J' hUI'Tléxi to de la direccion; esto mismo le da m(lS segmidad de poder presentar10 integro Ii la derecha del IlolllbreDios en el Uran tT urado que tendrá lu~ar el dia de la conSllmu('ion de los siglos; cn ese juicio solemne en que el J liez será fiscal y tt'stigo al mismo tiempo; en ese tribunal imponente en que el J ll?:garlor hará resonar por todos los ángu los deI
Josafiü, el honible "Idos de aquí, malditos". Oh! qué anatema tan ("spantoso! Qué sentencia tan aterradoraL
No
¡wrmitais, ~eiíor, que nos comprenda!
Si, ella no nos COIl1}>l'l'nderá, rnudiQ.nte vuestra infinita misericordia y la proteccj,lll (le la inrnaculada Marta; de l'sa Vírgen esclareciJa, qnc
;111 ¡¡ cn las angnstias
del Cal vario aceptó el eneargo de Madie y protectora de los hlJmùres; de esa compasiva Señora
que lilaR de una vez ha prometido que sus devotos no sc perden'in. Imploro, pues ¡oh Dios hondadoso! vuestra divina.
proteccion, y exclamo, CO:1 todü el entusiasmo de qne soy SU!;ceptible: g-loria á Dios en las alturas y paz en la tierra á los
h,)mbres de buena voluntad, por el inmenso fal'or que hoy
Be noS dispensa sin ningun merecimiento de nuestra parte.
Re dicho.
Ilustrísimo señor.
(o) Un al umno de la escuela dijo:
ILvsTnísDlú
SE~OR:
En me(lio de mi alborozo y en estos arrebatos de alegria,
lu: llegado Ii pensaI"¿ cómo es que hemos pOlli(lo vivir
tantos años sin Pastor? ~ué crimen, qué pecado cometió An-
.--
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'~i'Hluia, para qlle fIlera así n:llucida á ruina? Yo comprendo
q ne Imuo algo pam Ilue Dios (;ast i~arr.. á e~te pueblo alejándolo dl~ su Pastor. Yo digo con el Pl'Of()ta: "¿Cúmo estaba
sentada, solitaria la (;iudad Iklla de pueblo? Ella quedó col1l0 vil1lla, porquE:' no habir.. <iuién asistiera á sus solelllnidad.'s. Pe()ado grande cometiÓ Jeí'1lsalcm, por cstu Ita sido
destruida", l'ecado g-ranùe ::onwtió Antioquia,
por esto la.
dl'jaron sin Pastor. l\Ias hoy; Ilustrísimo señor, se reedificall
los mmos de Jerusalem. Vos; J lllstrísimo señor, sercis el Neh8l1lías, que rccùifiearei3 los muros de Antioquia, y nowtros
tm1ajarémos con las espadas ceñidas, prontos á combatir la.
f¡"hm doctrina (~onla venladera. Pero confiad, Ilustrísimo seÏiJr, en que aquí no hay Sanaballat que se oponga á la recdificaeilln.
En la época actual y en VOR, Ilustrísimo señor, se cumple
atlUe! dicho de Isalas: "Yo ùiré á Ciro: como sn Pastor vebl'ás soure mi pneblo y cllrn~)liní~ mi voluntad. ElreedificarÚ la CiUllad SantIL
" Vos, Ilustrísimo señor, sois el Ciro
Ci lIO cUlI\plirá l;L\'oluntarl del Señor, rstablcciendo las soll'mnidadrs dcl culto V reedilieanùo el semillcl'O de Israelitas.
V os, (:0100 otro'8e<!ccias, cOhsolareis IÍ. J.¡s pobres que han
qupda(!o ('n esta cimlael. VIlS, señor, nos ensl'ñareis á nosotros,
pobres nif!os, el <:amino <t11C(lebamos seguir; y yo os prometo con mis compañeros, que empreo<lerélllos la aDra (;011ardor, Ho j1rsar <18las falsas doctrinas q11Cruedan Ih)r el muodo,
y trahajltrémos COll las espa.(las ceñidas, repito, prontos á
combatir.
Ilustrísimo
señor.
(p) El seüor José Jacobo Quiccno dijo:
husTu:ísmo
s¡.;~on:
Hay épocas notahles en la vicIa do los pueblos que sirvcn
de poste co el curso im petuoso de los siglos; hay hechos de
tal importancia y trascendt'!leia q lie, cnal un faro luminoso,
irradian con su brillante luz no solo al trayes del porvenir,
bino tamhicn del pmmdo. Estos heehJs culminantes
forman
~:poca y pasan de gcneracioll on gcncraeiol1, por mc(lio de la
historia escritos con letras de oro: así ha sucedido siempre en
todas las l1<tciolles antiguas y modernas. Abrase el libro que
--GO-contiene el pnsudo, el presente y el porvenir y Re V\'l'(t fpl\!
Roma, Aténas, Esparta, Jernsall'm, .iUéníis y otras T1\m;has
ciudades antiguas seiïnlalJan lus dias faustos para los lJ\lebIos y en cada anivcrsario salwlakm
la auront de ('sc dia,
como que había 11ll1llllJrltdoun hecho portentoso, sul,!illw y
poético para elloR, y (lue no la recibian COIllOlin 1ll'llcficio de
los homIlI"cs, sino COluOlin dón gratÚito del ¡..jérsuperior que
con sus inescrntal¡l('s .iuicios rig-e el Luiven:io. lIoy dia hacen la mismo las naciones civili7.ndas del antiguo y llueva
continente, solernnizall(lo y 11l'l")wtuando con lJionUllwntos los
hechOR asombmsos que no SUCt'¡)Cllsino (le vez en cuando, en
cada ct'nt.uria, y que son la }lr~eJ¡a mas rde\"<iut.; del aillaI'
profundo ùe Dios á sus criatura~, ó de la caridad de la sagrada victima ùel Gólgota it la humanidad. 'l'al es ('1 hecho que
se cumple hoy ùe la rrstauraeion de la antig-lla iglesia catedral de Antioquia, y vuestra ('x:¡]tacioll Ú c~te ('pisco¡lado Cll~
ya errRcíon Re l'cmont.a Ú ulla ('pOClt 1ll1I)' l':iana. iDecretos
inescl'ut.ables dlOla Provi(l,'II<:ia! (¿¡¡il"IIUos ]¡ul¡i(·ra dicho por
allá el noo Je 184(j, qi1C YI)S,1II1stri~illj() st'ÎÎur) n:llllriais:í OGUlmr la silb Je \urstro il\lstre, sall),), \irtu"sll llHlf'stro y 1>rl']:1\10 el Ilustrísimo
¡;eJÎor doctor J llHJI de la Cruz (;t'llll/'7,
Plata.
Creo en este instltut.e <]11el'US sa¡sradoB manes nORaCOnlpaoan y qne sus yertas cenizas sc n'Hnilllall y se ll<:1lnnde
all'gria al contl'lllplar que sus dcs\clns y \'igilifls no fueron
illfrllct\lOSaR (m la lO(l\lefLeion<le SllS le\itils y (p.Ie hoy cosechamos Jos 6pilllüS frutos lIe su trabajo.
I1\lstrísimo sClÏor, ya apénas ('stahn. en la infancia, cuando t.uvimos la pena de la gran [,(·nlida ¡Je la lJl\lerte del señor Plut.a; por lo e\lal ]la tl1YCla fl'lic.:idad dI' conocerlo; pero su inmortal 6 impcn,cCllera J!H:i1lOrial'or sus hcdlOS brillantcH ha llegado hasta mí; lllJO de ellns ('8 q \le la mayor
parte de l,)s hOIl¡]m:>s!Illis illJstn"s qm' t'IH:i!'lTa este Estado,
tanto en la eclesiástico COIllO en lo ci vil, fueron sus discí-
pulos.
Cllanclo rn esta ci11l1allse fiUpo dI' nn modo cierto que Sn
Santidad hahia erj~ido l'D capital de la ])iÚcu"i.4 á ~Ieddlin,
todos Be conRt!'l'llaron y a;.c:obitdofi de dolor dirigieron sus
plegarias al Etrrno. Est,t ci1lcla(l !jue siempre fnÔ mimada,
aun del gobierno de la ::Uctrúpoli, cn t.iempo de la colonia,
DO
por las riquezas que contcnia.
\Ii
por
Sil
antigüedad, sino
-
61 --
por e~e entusiasmo
religioso que siempre ha
tenido tlcslk la eonf]llista en lo~ prilJleros siglos, no desma~'ú, y ellal otro pHoulo de Ismel marchó de obstáculo
en
obstáculo, y guiada por una fe igual á. ln. de un Moises,
.\arolJ y su hermallo ha¡;tn. lkgar fi la tierra pronwtida. ¡Quó
cOlltm~te, ::3ll ~cii\Jria! Esta tierra que en otro tiempo se vistió oe luto y lII:tnifestlllnl 8U dolor hasta en su vista topográfí(~¡t, y CI IIC su triste;m se veia hasta en los séres inanimados, h0Y cst¡j, de gala, y lÍ pesar de !Ilás de trescientos años
de existencia, se presenta r'duvenccid1L
en la primavera de
su vida como una l¡lanca vpstal cuyas SlellCS ciño la auréola.
resplandeciente de la virtud y la justicia. ¿Cuál es la causa
de semejante met:tlUorfúsis?
:No hay ùuda que es la reivindicaciJn cie sus derechos y ln. eleccion q Ut' el Espíri tu Santo
ha hecho por condllCto del Pontífice mÚximo Pia IX en Su
Señoría, pam regir los ùestiuos de esta Iglesia.
~~pœi¡.lJ\llelltc
:r
He dicho.
C.\..NCIO~.
Himnos mil entonel~JS hoy dia
Al Criador de los cieky tie'rra,
Al qne toùo bondad ~¡o encierra,
y las penas de Ant.il.uia calmó.
D(,lllo~ grn.ci"s al 'ios q Ile piadoso
Nucstra YO;l, escllchl( nuestro llanto,
}~ inspirando
al l'u'iikc Santo
Un OIJispo bn dig! lias di6,
G mei,\s mil :oí ln.[aclrc purísima,
A la Hllina del ciel á María,
QIW el commelo nrdió Cll la agonía.
y del templo las ,¡ertas abrió.
Sal VC, sal ve al.1stre González,
Al virtuoso mini'o, al Prdac1o,
Al ApÓstol cie l's, al cllviado
(,!\lC 110Y el ~o)(le Antioquili
ocup6,
Salve, salve ¡Palitor tan dès~ado,
All1loù~sto, al.lmilde, al pi~doso,
--()2-Cu~'o acento sonoro, amoroso
llo)' el pueblo extasiado escucM.
Gllrrrde el cielo la vida preciosa
Dell\1inistl'o }' A pÓstúl amado,
Que hoy y siempre será. vent'rado
Como el Angel que DioR nos mandó.
IJoor eterno al preclaro Benio,
A los 'rórres, Ribon y l\Iartíul'z,
Cllyn voz fEFonó en lo!! confines
y el dolor en placer comirtió.
G. D. G.