02-Factores del clima

Geografía de España.: Climatología: Factores del clima
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2. FACTORES DEL CLIMA
2.1.a. Factores geográficos.
España, dentro de la Península Ibérica se encuentra a una latitud entre 36º y
43º 5´ Norte, es decir se encuentra en la zona templada del hemisferio norte, en la
zona de intercambio de masas de aire polar y tropical, en el sector meridional de la
banda de actuación del Frente Polar, en la zona de influencia de los vientos del
oeste.
A
B
A
B
FIGURA 2. Jet Stream en invierno
En este sentido, la longitud es otro factor
determinante. España se sitúa entre los 4º este
y los 10 oeste, es decir es una avanzada
atlántica de Europa, en la zona de predominio
de los vientos húmedos y suaves del noroeste,
aunque, como veremos a continuación, otros
factores hacen que sólo algunas zonas se vean
afectadas directamente por ellos.
La latitud, como hemos señalado, antes es un elemento importante para
analizar la insolación en un punto determinado, pues nos señala el ángulo de
incidencia de los rayos del sol en una estación determinada, pero también lo son los
factores que “filtran” la llegada de los rayos del sol: nubes, contaminación, etc...
España presenta, como veremos más adelante, una insolación muy desigual a lo
largo de su orografía, duplicándose la cantidad de Norte a Sur.
Otro factor geográfico importante es la orografía, España tiene una altitud
media de 660 metros sobre el nivel del mar, si a esto le sumamos que su orografía
está dispuesta a modo de muralla defensiva que impide el acceso al interior de los
influjos que vienen del mar,
sacamos la conclusión de que, aunque domina
gran parte de lo que es la Península Ibérica, y se encuentra en una zona de
predominio de vientos marítimos atlánticos (de temperaturas suaves, con poca oscilación
térmica verano/invierno, húmedos...), y en menor medida mediterráneos, son muy pocas
las zonas que disfrutan de estas condiciones, que se limitan a estrechas orlas
costeras.
Es lo que llamamos efecto Föhen.
La altitud, a la que nos hemos referido antes, es otro importante factor: aísla
aun más al interior (alto) de la costa (baja) de las influencias marítimas, hace
descender las temperaturas entre 3º y 4º y colabora en la diferenciación climática
entre las diferentes regiones de España.
2.2. b. Factores termodinánicos
1/ La Jet Stream en invierno se sitúa entre los 30º y los 45º lat. N, es decir
afectando a la zona donde está España. En este solsticio la corriente es rápida (alto
índice), circulando a más de 70 km/h y a veces a más de 150 Km/h en sentido
rectilíneo del oeste o describiendo meandros (conforme reduce su velocidad), a lo
largo de los que se disponen crestas (A) y valles (B), que originan ondas ciclónicas
en superficie: las crestas, por subsidencia, amplifican el efecto de los “A” de
superficie, y los “B”, masas de aire polar, conducen masas polares hacia el sur. En
1
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este sentido, cada vez se le da más importancia a la Jet Stream como causa del
Frente Polar y de que este afecte a la península Ibérica. El mapa de altura muestra
A y B con isohipsas abiertas y rodeados de isohipsas abiertas.
En primavera y otoño, la corriente de chorro circula más al norte y a índice
bajo (baja velocidad), y produciendo una agudización de los meandros, que puede
llegar a una circulación “en omega”, que envía B muy hacia el sur, que originan una
fuerte inestabilidad, dando lugar a masas de aire polar que en altura alcanzan
latitudes demasiado meridionales para la época, inestabilizando la atmósfera y
originando que en superficie lenguas de aire polar formen borrascas que pueden
alcanzar nuestras latitudes. Las crestas o dorsales en altura, por subsidencia,
tienden a prolongar los anticiclones subtropicales hacia el Norte, colaborando a
enviar en superficie masas de aire cálido hacia las borrascas antes descritas o,
cuando el anticiclón de las Azores afecta a la península ibérica, dándonos tiempo
estable y soleado. El mapa de altura ve como las isohipsas se van cerrando en torno
a crestas y vaguadas y como van aumentando los gradientes entre estos centros.
Esta agudización de los meandros (ver figura. 3) puede dar lugar al
establecimiento de un sistema de A y B inverso, como el dibujado, en el que las
crestas ocupen el lugar de las vaguadas y viceversa. Cuando esta posición “en
omega” se produce hablamos de situación de bloqueo, porque la circulación normal
del oeste queda bloqueada y alterada,
estableciéndose un sistema celular de altas y
bajas.
A
A
A
Cuando la velocidad es muy baja, la
meandrización puede ser extrema y se pueden
B
llegar a producir estrangulamientos en las masas B
B
B
de aire polar: una masa de aire muy fría queda
separada, en forma de vaguada, de su origen y es
enviada a gran velocidad (como un vórtice) hacia FIGURA 3. La Jet Stream en circulación
equinoccial
el sur, a latitudes muy alejadas de su origen. Si
esta B se sitúa sobre masas de aire que en superficie son más cálidas y húmedas1 ,
produce un fortísimo incremento del gradiente adiabático (diferencial de
temperaturas) que produce velocísimos y copiosísimos procesos de condensación
que tienen como consecuencia violentas y abundantísimas lluvias, es lo que
denominamos gota fría.
En el solsticio de verano, la Jet Stream circula por encima de los 50º lat. N, a
bajo índice y, por tanto, describiendo grandes sinuosidades o meandros, fruto de
ellos son las situaciones anticiclónicas: cuando se sitúa una cresta sobre el ámbito
del A de las Azores ampliando su radio de acción más al norte (bloquea la llegada
de aire atlántico a la península) o sobre la misma península ibérica.
2/ Centros de acción que afectan a la península Ibérica. Estos centros de
acción dirigen la circulación en superficie, aunque, como ya hemos señalado antes,
sobre ellos influye con mucha frecuencia la circulación en altura.
1
.– Si consideramos que la gota fría es un ataque, en altura, súbito y muy rápido de una masa de aire
muy frío en una zona de predominio de aire más cálido, podemos entender que en superficie sea
relativamente frecuente que bajo la vaguada o gota fría tengamos aire cálido.
2
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2.1 El Anticiclón de las Azores forma parte del cinturón subtropical de altas
presiones y tiene su origen en un fenómeno de subsidencia de la cresta formada en
altura en la zona limítrofe de los vientos del oeste y tropicales2 . La frecuencia con la
que es citado en los comentarios de los mapas del tiempo es un síntoma claro de su
importancia. Como consecuencias más importantes citaremos:
– Alimenta los sectores cálidos de las borrascas que afectan a la península.
– En otoño e invierno es el responsable de los vientos húmedos y cálidos que
afectan al W peninsular (clima oceánico: inviernos suaves y húmedos ).
– Cuando se encuentra situado en latitudes norteñas o a la altura de la PI,
este enorme ventilador3 repele o aleja las borrascas que se puedan acercar
desde el atlántico hacia la península, a esta situación se la denomina abrigo
aerológico.
2.2 Anticiclones polares del atlántico son en realidad la prolongación muy al
norte del A de las Azores, provocada por la subsidencia de una cresta en altura. Las
consecuencias son la emisión de vientos del norte (muy fríos4 ) sobre la Península
Ibérica y la situación de abrigo aerológico. Es una situación que se produce en
invierno y primavera.
2.3 Anticiclones térmicos del continente europeo. Son el resultado del
contrastre térmico en invierno entre el continente y el océano y suele estar situado
en centroeuropa. Sobre la PI es generalmente una extensión del centroeuropeo, del
de las Azores o de los dos. El tiempo es este caso es soleado (abrigo aerológico) y
con descenso de las temperaturas.
2.4 Borrascas de Islandia son muy frecuentes y tienen su origen en el Frente
Polar, que se ve reforzado en invierno por la corriente marítima cálida del Golfo de
México que acentúa el contraste térmico imprescindible. A estas borrascas debemos
gran parte de la inestabilidad (son vientos polares y árticos marítimos/húmedos ) que afecta a
la PI.
2.5. Borrascas continentales europeas, producidas en verano por los
contrastes térmicos continente–océano, cuando aparecen sobre la PI suelen ser
núcleos secundarios de otros formados sobre la Europa continental, que a su vez
suelen estar conectados con el gran B asiático.
2.6 Borrascas del Golfo de Génova. Son el resultado de advecciones de
masas de aire frío desde Europa continental a través de los valles alpinos que
alcanzan la atmósfera mediterránea más cálida y húmeda, con cuyo contraste se
forman estas B. Suelen darse en invierno y los equinoccios, en estos pueden
aparecer asociadas a fenómenos de gota fría.
2
Producido por un fenómeno dinámico de reducción de velocidades y convergencia de los dos
vientos .
3
No olvidemos que los A son grandes ventiladores que envían viento en el sentido de las agujas del
reloj.
4
Empuja vientos polares hacia el Sur.
3
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2.7 Borrascas de las Azores. Son el resultado de advecciones de aire frío
proveniente del Norte que invaden la zona cálida y húmeda que hay entre Portugal y
las Azores. Se dan en invierno y los equinoccios, produciendo precipitaciones en el
SW y SE. Pueden aparecer asociadas a fenómenos de gota fría.
3/ Masas de aire que afectan a la Península Ibérica. Todas ellas son de
origen exógeno, porque en nuestra península no se forman masas de aire
importantes.
3.1 Ártico–marítimo (Am). Su origen está en la cubeta ártica, tiene dirección N
y sus características son: de origen frío y poco húmedo, en su trayecto hacia el S, a
través de los océanos se recalienta ligeramente y se humedece en la base. Trae frío
y precipitaciones de nieve.
3.2 Ártico–continental (Ac). Tiene su origen en el NE de Europa y W de
Siberia, tiene dirección NE y trae vientos secos (atraviesa el continente) y helados,
con escasas precipitaciones, días soleados y heladas.
3.3 Polar–marítimo (Pm). Con origen en el Atlántico norte, tiene un elevado
índice de humedad. A menos de 50º lat. N es un viento cálido (del sector N del A de
las Azores), que trae tiempo nuboso, aunque con escasas precipitaciones, desde
finales del invierno a principios del verano.
3.4 Polar–continental (Pc). Tiene su origen en el A térmico centroeuropeo de
invierno (si lo hay) y trae un tiempo frío y seco.
3.5 Tropical–marítimo (Tm). Tiene su origen en el A de las Azores. Trae un
viento cálido y húmedo, que se va enfriando (condensaciones) en su ruta hacia e N.
(Suele ser viento del SW), dando lugar a una gran inestabilidad. Si en altura se sitúa
una cresta, se produce un fenómeno de subsidencia de aire frío que aumenta la
inestabilidad.
3.6 Tropical–continental (Tc). Tiene su origen en el norte de África (Sahara)
en verano y trae viento cálido y seco en verano, en las llamadas olas de calor.
Puede traer partículas de polvo en suspensión.
3.7 Mediterráneo. Cuando hablamos de masa de aire mediterráneo nos
referimos a modificaciones de otras masas de aire que al quedar estancadas5 sobre
el mediterráneo, protegidas de la circulación del W por el A de las Azores, se
recalientan y humedecen ligeramente. El resultado es días de tiempo encalmado,
con escasa nubosidad, temperaturas más altas de lo normal, fuerte insolación y
calimas.
4/ Frentes, de mayor presencia en invierno y escasos en verano, se forman
por el encuentro de las masas de aire frío y cálido, formando borrascas. Vamos a
estudiar, pues, los encuentros de las masas de aire que hemos descrito antes, que
afectan a la Península Ibérica.
5
.– Se tiene que dar una situación de pantano barométrico, en la que las presiones sean la normales
del período y no haya fuertes gradientes (las isobaras discurran paralelas y distantes). Generalmente
con tiempo encalmado debido a que el A de las Azores cubre con su influencia la zona.
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4.1 Frente Polar. Separa las masas de aire polar y tropical (aunque a veces
puede separar dos masas de aire polares de diferentes temperaturas), avanza en
dirección NW a SE y nos afecta frecuentemente en invierno.
4.2 F. Mediterráneo. Se forma por contacto entre el aire Polar–continental
(Pc) y el mediterráneo, es más frecuente en otoño.
4.3 F. Mediterráneo–sahariano. Formado en invierno por el contacto entre aire
mediterráneo y Tropical–continental sahariano, se suele situar en la zona del Atlas.
Nos afecta muy raras veces, tiene dirección Este y trae precipitaciones.
4.4 F. Ártico. Pone en contacto masas de aire árticas y polares o árticas y
tropicales. Sólo alcanza la Península Ibérica cuando ocasionalmente se desvía hacia
el Sur (dirección N), en esas ocasiones trae advecciones de aire frío y bruscos
cambios de tiempo.
4.5 F. Atlántico–mediterráneo. Línea de contacto de aire Tropical–marítimo
del A de las Azores y mediterráneo, que suele situarse en el SE de la Península
Ibérica. Más frecuente en verano, suele llevar una dirección de SW a NE.
4.6 F. De los alisios. Formado por el contacto de aire Tropical–continental del
Sahara y aire Tropical–marítimo del A de las Azores, a lo que hay que añadir la
influencia de la corriente marítima fría de las Canarias, que enfría esta masa de aire
Tm. Es activo especialmente en verano, afectando a las Canarias y muy
escasamente a la península.
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