Memorias de Dos Hijos

Tercera Semana
Los Dos Hijos
EL HERMANO MENOR
«Un hombre tenía dos hijos —continuó Jesús—.
El menor de ellos le dijo a su padre: “Papá,
dame lo que me toca de la herencia”…»
Lucas 15:11-12
NVI
Dame mi herencia…
«Este quizás era el aspecto más inquietante de la conducta del hijo
pródigo. Para que un hijo en esa cultura exigiera su herencia antes de
hora casi equivalía a decir: “Papá, desearía que estuvieras muerto.
Obstaculizas mis planes. Eres una barrera. Quiero mi libertad. Anhelo
mi realización. Y quiero estar ahora mismo fuera de esta familia. Tengo
otros planes en que no tienes nada que ver; planes que no involucran a
esta familia ni esta propiedad, y ni siquiera esta aldea. No quiero tener
nada que ver contigo. Dame mi herencia ahora mismo, y me voy de
aquí”. En una cultura donde la honra era muy importante, y el quinto
mandamiento («Honra a tu padre y a tu madre») era una ley
categórica, la desfachatez de este joven era peor que simplemente un
escándalo. Cualquier hijo que hiciera una solicitud tan chocantemente
inadecuada a un padre próspero se habría considerado como la forma
más vil de trasgresión».
John MacArthur: Memorias de Dos Hijos, p.35
El hermano menor
«Poco después el hijo menor juntó todo lo que
tenía y se fue a un país lejano…
Lucas 15:13a
NVI
El hermano menor
…allí vivió desenfrenadamente y derrochó su
herencia».
Lucas 15:13b
NVI
LA PERDICIÓN DEL
HERMANO MENOR
«Allí vivió desenfrenadamente. La palabra griega traducida
“desperdició” es diaskorpizô. Es un vocablo que suscita la idea de
aventar, donde se lanza el grano al aire y se deja que el viento se lleve
los residuos. Literalmente significa “esparcir en distintas direcciones”.
Él simplemente arrojó los bienes por la ventana, “viviendo
perdidamente”. Desperdició una fortuna rapidísimo, gastando su
herencia y yendo tras la maldad. Aunque el hermano mayor expresa a
su padre: “…ha despilfarrado tu fortuna con prostitutas” y puede sonar
como una frase de venganza e insulto para el hermano menor y para el
padre, es claro ver que la insinuación “viviendo perdidamente”
muestra el estilo de vida promiscuo y libertino que tuvo, sino peor».
John MacArthur: Memorias de Dos Hijos, p. 130
LA PERDICIÓN DEL
HERMANO MENOR
• «El pago que da el pecado es la muerte»
Romanos 6:23 - DHH
• «Porque si ustedes viven conforme a ella (la
naturaleza pecaminosa), morirán…»
Romanos 8:13 - NVI
• « …y del pecado, cuando llega a su completo
desarrollo, nace la muerte.»
Santiago 1:15 - DHH
Una Hambruna…
«Cuando ya lo había gastado todo, sobrevino
una gran escasez en la región, y él comenzó a
pasar necesidad»
Lucas 15:14
NVI
Una hambruna…
«Así que fue y consiguió empleo con un ciudadano
de aquel país, quien lo mandó a sus campos a
cuidar cerdos».
Lucas 15:14
NVI
«Y fue y se arrimó a uno de los ciudadanos de
aquella tierra, el cual le envió a su hacienda para
que apacentase cerdos».
Lucas 15:14
RVR60
Una hambruna…
«Tanta hambre tenía que hubiera querido
llenarse el estómago con la comida que daban
a los cerdos, pero aun así nadie le daba».
Lucas 15:16
NVI
«Y deseaba llenar su vientre de las algarrobas
que comían los cerdos, pero nadie le daba».
Lucas 15:16
RV60
«Por supuesto, cualquiera que desprecia todo
deber, que abandona toda responsabilidad,
que rechaza toda insinuación de rendir
cuentas, y que busca esa clase de estilo inmoral
de vida, va rapidísimo hacia la ruina total. Es
inevitable».
John MacArthur: Memorias de Dos Hijos, p.145
El Plan Del Hermano Menor
«Por fin recapacitó y se dijo: “¡Cuántos jornaleros de mi
padre tienen comida de sobra, y yo aquí me muero de
hambre! Tengo que volver a mi padre y decirle: Papá,
he pecado contra el cielo y contra ti. Ya no merezco que
se me llame tu hijo; trátame como si fuera uno de tus
jornaleros”».
Lucas 15:17 - 19
NVI
«La soledad es un arma letal, tanto para el que
está deprimido, como para aquel duro
corazón, que en su necio entender, debe
entrar en razón, para reconocer que debe
quebrar su orgullo».
(Isaías Romero, Apuntes personales)
EL HERMANO MAYOR
«Pero él le contestó: “¡Fíjate cuántos años te he
servido sin desobedecer jamás tus órdenes”…».
Lucas 15:29
NVI
LA PERDICIÓN DEL
HERMANO MAYOR
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Se negó a entrar.
Su enojo incontenible ante la “injusticia”.
El insulto a su padre.
«Por tantos años he sido tu esclavo».
La confrontación, el “sacar los trapitos al aire”.
Nunca le dice al padre “mi hermano”. Le dice:
“Este, hijo tuyo”.
«En realidad, ¿por qué debía estar indignado el hermano mayor?
El gozo de su padre por el arrepentimiento y el regreso del
hermano menor no era un insulto para él. No era que el padre
despreciara ahora a su hijo primogénito solo por haber
perdonado a su hijo menor. Al expresar su gran amor por el
pródigo y su alegría por haber regresado, el padre no formulaba
nada negativo respecto del hijo mayor. El amor de los padres no
está dividido en cantidades finitas, de tal modo que cualquier
amor especial que mostrara hacia un hijo pudiera disminuir
automáticamente sus sentimientos por el otro. Con seguridad
podrá regocijarse por el regreso de un hijo perdido sin que el hijo
que no se fue lo perciba como un desprecio hacia él».
John MacArthur: Memorias de Dos Hijos, p. 215
• En resumen: no entraré a la fiesta…
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Él no lo merece, yo sí lo merezco;
Él no cumplió con la ley, yo sí;
Él gastó tu fortuna, yo no, pero no gastes la mía;
Él no hizo nada para merecerla, yo sí;
Él no trabaja, yo sí;
Él es malo, yo soy bueno;
Él regresó a casa, yo nunca me fui;
Él te pidió perdón, yo no tengo porqué;
Él no te ama, yo…
• El plan de vida del hermano mayor estaba tan perdido como
el del hermano menor.
REDEFINIENDO EL PECADO
• El Autodescubrimiento. Aquel que debe ser
libre para perseguir sus propias metas y su
desarrollo personal, sin importar las
convenciones ni las costumbres.
– «En este sentido, el mundo sería mejor si las
tradiciones, los prejuicios, la autoridad jerárquica
y otras barreras a la libertad personal fueran
menos estrictas o incluso eliminadas».
Tim Keller: El Dios Pródigo, p.36
REDEFINIENDO EL PECADO
• La Conformidad Moral. Existen innumerables
variedades de este paradigma, pero todas
ellas privilegian la voluntad de Dios y los
estándares de la comunidad por encima de la
realización individual. Bajo esta óptica, solo
obtendremos la felicidad y un mundo
impecable por medio de la rectitud moral.
«El pecado es profundamente complejo. Nace en
nosotros, se agranda por el mal trato de otros y se
profundiza y se distorsiona por nuestras propias
decisiones. La manera en que Jesús contempla el
pecado es más comprensiva y multidimensional que la
de muchos sicólogos, sociólogos y líderes religiosos».
Tim Keller
«En un hermoso libro titulado La Libertad de la Obediencia,
Elizabeth Elliot escribe acerca de un joven ansioso por renuncia
al mundo y seguir fielmente a Cristo. “¿Qué es lo que debo
abandonar?” Se pregunta dicho joven.
La autora registra la siguiente respuesta, y al hacerlo ilustra la
necedad de tratar de agradar a Dios intentando acatar reglas
hechas por los hombres y normas legalistas. ¿A qué debe
renunciar este joven? Trate de no sonreír:
“Para empezar, la ropa muy colorida. Libérate de todo lo que
haya en tu guardarropa que no sea de color blanco. Deja de
dormir con una almohada mullida (blanda). Vende tus
instrumentos musicales y no comas más pan blanco. Si
realmente eres sincero en tu deseo de obedecer a Cristo, no
puedes darte duchas tibias ni afeitarte la barba. Afeitarse es
ofender a Aquel que nos creó, es intentar mejorar su obra”.
“¿Parece absurdo?”, pregunta la autora. Luego nos sorprende
con la siguiente afirmación:
“¡Esta es la respuesta que se daba en las más reconocidas
escuelas cristianas del siglo II!” ¿No será que las reglas que han
sido adoptadas por muchos creyentes del siglo XX resultarán tan
absurdas como éstas cuando las lean los sinceros seguidores de
Cristo de aquí a unos años?»
Charles R. Swindoll, El Despertar de la Gracia, p. 57.
«El legalismo levanta el polvo de nuestra mala vida,
pero el evangelio es el agua que ayuda a limpiar todo
aquel pecado que la ley hizo notoria».
Juan Bunyan, El progreso del Peregrino, p. 61 -62 .
«La obediencia fiel a las leyes de Dios puede servir
como una estrategia para rebelarnos contra él».
Tim Keller, El Dios Pródigo, p. 40.
• El moralista dice: las personas buenas estamos adentro,
las malas son el verdadero problema, están afuera.
• El autodescubridor dice: las personas tolerantes y de
mentalidad abierta están adentro, y las fanáticas y de
mentalidad estrecha son el verdadero problema del
mundo, están afuera.
• Jesús nos dice: “los humildes están dentro y los
orgullosos afuera” (Lucas 18:14).
«El peligro está en entremeterse con la bestia, adentrarse en sus
dominios. No le gusta que traten de cazarla; no le gusta que
sepan de ella. Mi sabiduría ha sido respetar y vivir según esa
política, y es por eso que he podido vivir hasta ahora aquí
durante 23 años y nunca se me ha molestado. Como la he dejado
tranquila, ella me ha dejado tranquila a mí, dijo Jules…»
«Vive y dejar vivir, recordé lo que dijo Jules. No te metas con el
dragón y él no se meterá contigo. Nunca lo molesto y nunca me
molesta a mí… Recordé cada palabra de Jules ahora que veo que
el dragón lo devoró».
Frank Peretti, El Juramento, pp. 334, 492
•Lo que no sabían los hijos, o tal vez sí lo sabían,
pero no les importaba, era que el padre los
amaba, sin medida.
«Nunca nada de lo que hagas, hará
que Dios te ame menos».
Rob Bell
«El Señor se manifestó a mí hace ya mucho
tiempo, diciendo: Con amor eterno te he
amado; por tanto, te prolongué mi
misericordia».
Jeremías 31:3
RVR60
ACM San Borja
Abril 2015