Reg.: A y S t 230 p 42-44. Santa Fe, 18 de febrero del año 2.009. VISTA: La queja por denegación del recurso de inconstitucionalidad interpuesto por la defensa técnica de G. G., contra la resolución n° 144 del 21 de noviembre de 2007, dictada por la Sala Segunda -integrada- de la Cámara de Apelación en lo Penal de Rosario en autos "P., G. -Denuncia- en representación de Federación Patronal- (Expte. 1139/07)" (Expte. C.S.J. Nº 22, año 2008); y, CONSIDERANDO: 1. La Sala Segunda integrada de la Cámara de Apelación en lo Penal de Rosario, por resolución n° 144, de fecha 21 de noviembre de 2007, resolvió desestimar las nulidades planteadas contra el auto nº 80 dictado el 17/10/2007, tener presente las reservas efectuadas, confirmar el rechazo de la inhibitoria deducida por la defensa, disponiendo que continuara interviniendo el Juzgado de Primera Instancia de Distrito en lo Penal de Instrucción n° 6 y recomendando la eficiente y rápida investigación de los graves hechos anoticiados y desacumulando los expedientes nº 1335/07 y 1139/07 del registro de la Mesa de Entradas de la Presidencia de ese Cuerpo, continuando ambos trámites por separado (fs. 43/44). Contra dicho decisorio deduce el impugnante su recurso de inconstitucionalidad achacándole arbitrariedad por falta de motivación suficiente del rechazo de las nulidades articuladas y del planteo inhibitorio formulado por la defensa, con grave afectación de las garantías de imparcialidad, juez natural y doble instancia (fs. 3/22v.). Afirma que la resolución impugnada fue pronunciada por magistrados que habían sido recusados oportunamente con causa y cuyos apartamientos rechazados no se encontraban firmes al haber deducido recurso de inconstitucionalidad. Reprocha a la Sala afectar el derecho a la jurisdicción y violentar el juez natural, por cuanto sostiene que no debería haber entendido la Sala Segunda sino la Cuarta conforme las reglas del turno. Enuncia que a futuro y desde dicha circunstancia por la Acordada nº 32 y el Acuerdo nº 12, en la eventualidad de una apelación, vendría a intervenir la Cámara de Apelación en lo Penal de Venado Tuerto con la consecuente inconstitucionalidad que tal intervención produciría. Sostiene también, que asiste a su defendido el derecho a la doble instancia, apoyando su tesitura en el precedente "Romero Cacharane" de la Corte Nacional. Afirma finalmente que la desacumulación ordenada luce dogmática y sin sustento lógicojurídico, ya que si en la vía recursiva se revoca lo decidido por medio de la resolución impugnada se producirá la nulidad de todo lo actuado en la causa desacumulada. 2. La Sala Segunda -integrada- de la Cámara de Apelación en lo Penal de Rosario, por resolución nº 13 de fecha 8 de febrero de 2008, declaró inadmisible el recurso de inconstitucionalidad (fs. 27/28). Tal denegatoria motivó la presentación directa del impugnante ante esta Corte (fs. 31/39v.). 3. El remedio impetrado no habrá de prosperar, atento que el recurrente no logra demostrar que en las circunstancias del caso pudiera soslayarse la ausencia de definitividad del decisorio impugnado (cfr. art. 1, ley 7055). En esta tesitura, sabido es que -en principio- las resoluciones que se expiden en torno a nulidades, sea admitiéndose o rechazándose, no son susceptibles de ser impugnadas por vía del recurso de inconstitucionalidad por falta de definitividad. Y tampoco lo son -en principio- las decisiones sobre cuestiones de competencia, toda vez que no ponen fin al pleito ni hacen imposible su continuación, resultando así incumplida la exigencia legal estatuida a los efectos de la admisibilidad del recurso de inconstitucionalidad (cfr. Fallos:302:417; A y S, T. 144, pág. 450; T. 175, pág. 183; T. 188, pág. 181) a menos que lo resuelto cause un gravamen irreparable (cfr. A. y S. T. 63, pág. 111; T. 199, pág. 265). Como no son sentencias definitivas ni autos equiparables a las mismas, los pronunciamientos que se dicten con motivo de recusación y excusación de magistrados, en los términos exigidos por el artículo 1 de la ley 7055, no resultando en principio un objeto impugnable por la vía del recurso de inconstitucionalidad (A. y S., T. 41, pág. 163; T. 68, pág. 246; T. 69, págs. 194 y 400; T. 79, pág. 302; T. 109, pág. 343; T. 114, pág. 272; T. 157, pág. 140; T. 166, pág. 284; T. 168, pág. 405; 174, pág. 127, entre muchos otros y Fallos:305:1745 y sus citas). Empero, tanto la Corte Nacional como este Tribunal han reconocido excepciones a esa regla general, atendiendo a los diversos y particulares casos que llegan a sus estrados (Fallos:314:107; 316:826; A. y S., T. 72, pág. 64; entre otros). Mas, en estos autos el recurrente no logra persuadir a este Cuerpo respecto a la existencia de un caso constitucional que permita sortear el recaudo de definitividad, ni logra hacer entrever como configurada en el caso la afectación a las aludidas garantías constitucionales, ni rebatir -en su recurso de queja- los argumentos del auto denegatorio, respecto a que "la llamada competencia por turno consiste esencialmente en un método preestablecido de distribución del trabajo judicial de manera que los distintos enfoques interpretativos de las normas que lo definen, en principio carecen de consistencia para asimilarlos a un ataque contra el principio del juez natural, imparcial e independiente. Más aún, en los sistemas modernos de colegio o comunidad de jueces las asignaciones de los casos se concretan por vía de gerenciamiento administrativo, de manera que todos los magistrados integrantes del Consejo son potencialmente competentes para entender en las causas que promueven las fiscalías" (f. 27v.). Incumpliendo, en consecuencia, con la carga impuesta en el artículo 8 de la ley 7055. Por otra parte, si bien la defensa en tren de sustentar el gravamen hace referencia a que de entender la Sala Cuarta conforme la competencia por turnos, ante la eventualidad de apelar, y a estarse a la Acordada nº 32 y al Acuerdo nº 12, debería intervenir la Cámara de Apelación en lo Penal de Venado Tuerto. Lo cierto es, que ello resulta conjetural y eventual. Por lo cual, sus planteos solo evidencian su disconformidad con lo decidido y no tienen entidad constitucional. Como tampoco la tiene, la alegada afectación a la garantía de doble instancia, la cual debe desestimarse por cuanto el impugnante no demuestra con sus genéricas postulaciones como podría trasladarse el precedente invocado del Máximo Tribunal de la Nación -conforme sus particularidades- a la situación de autos (cfr. art. 8.2.h. C.A.D.H.). Por todo ello, se entiende que el pronunciamiento impugnado no reúne la cualidad de ser sentencia definitiva ni auto interlocutorio con las características prescriptas en el artículo 1 de la ley 7055 para la admisibilidad del recurso de inconstitucionalidad y que el recurrente no ha suministrado razones suficientes para convencer de que corresponde hacer excepción de tal requisito, para lograr la apertura de esta instancia extraordinaria. Por las razones expuestas, la Corte Suprema de Justicia de la Provincia RESUELVE: Rechazar la queja interpuesta y declarar perdido para el recurrente el depósito efectuado. Regístrese, hágase saber y oportunamente remítanse copias al Tribunal de origen. Fdo.: GUTIÉRREZ-ERBETTA-GASTALDI-NETRI- Fernández Riestra (Secretaria)