7 JUAN DOMINGO PERON Y LA CRISIS ARGENTINA. EL RIESGO DE ARGENTINIZACIÓN EN LA ECONOMÍA ESPAÑOLA. CRISIS ECONÓMICA SEPTIEMBRE DE 2010 Serie crisis económica Número especial Crisis Argentina Lo que la experiencia y la historia enseña es que los gobernantes y los pueblos nunca aprendieron nada de la historia ni se comportan de acuerdo con sus lecciones. Georg Wilhelm Friedrich Hegel Filósofo alemán (Stuttgart 1770-Berlín 1831) ÍNDICE JUAN DOMINGO PERÓN Y LA CRISIS ARGENTINA. 3 EL “CORRALITO FINANCIERO” ARGENTINO. CRONOLOGÍA. 17 EL RIESGO DE ARGENTINIZACIÓN DE LA ECONOMÍA ESPAÑOLA. DIFERENCIAS Y SIMILITUDES ENTRE LA POLÍTICA ECONÓMICA PERONISTA Y LA DE RODRIGUEZ ZAPATERO. 21 ¿PUEDE HABER UN CORRALITO FINANCIERO ESPAÑOL? 27 COYUNTURA ECONÓMICA: HACIA DOS MONEDAS DENTRO DEL SISTEMA MONETARIO EUROPEO. EL EURO Y EL EURÍN O EURO B. 31 SITUACIÓN DE LA ECONOMÍA ESPAÑOLA Y PREVISIONES PARA 2010. 33 MERCADOS Y BOLSAS DE VALORES. 37 COYUNTURA POLÍTICA: LA URGENTE NECESIDAD DE ELECCIONES ANTICIPADAS EN ESPAÑA Y DEL ABANDONO DE LA CULTURA DE LA BOINA. 39 JUAN DOMINGO PERÓN Y LA CRISIS ARGENTINA. Breve reseña histórica del peronismo Juan Domingo Perón ha sido una de las figuras hispanoamericanas más relevantes del siglo XX. Fue Presidente electo de la República Argentina en tres ocasiones: 1946-1952; 1952-1955 y 1973-1974. Nació en Lobos1 provincia de Buenos Aires, el 8 de Octubre de 1895.En 1911 ingresó en la Academia Militar donde obtuvo el grado de Subteniente de Infantería. Con el grado de Teniente participó en la represión de los huelguistas de la Semana Trágica en enero de 1919. En 1930 ya era miembro del Estado Mayor del ejército y profesor titular de “Historia Militar” de la Escuela Superior de Guerra, publicando diversos textos de carácter militar, entre otros, “Campañas del Alto Perú”, “El frente oriental en la Guerra Mundial de 1914,Estudios Estratégicos”, “Toponimia Patagónica de Etimología Araucana” (1935). En el año 1936, con el grado de Mayor del ejército, fue nombrado Agregado Militar de la Embajada Argentina en Chile ascendiendo en ese año a Teniente Coronel. Entre 1939 y 1941 fue agregado militar en la Italia de Benito Mussolini considerando la ideología fascista como “un ensayo de socialismo nacional, ni marxista, ni dogmático”. En 1943 su vida militar comenzó a converger hacia la vida política que lo iba a absorber totalmente hasta su fallecimiento. En este año, con el grado de coronel, Juan Domingo Perón participó en el golpe militar que derrocó al gobierno conservador de Ramón Castillo, formando parte de una logia llamada G.O.U. (Grupo de Oficiales Unidos), que sostenía un pensamiento nacionalista y de recuperación ética. En la Dictadura Militar ocupó el cargo de Secretario General de Trabajo y Previsión Social, desde donde aprobó importantes leyes de carácter social, promulgando una legislación protectora inspirada en principios de justicia social de inspiración cristiana e impulsando la organización de los trabajadores en sindicatos. Entre las medidas de de apoyo a los trabajadores cabe destacar : El Estatuto del Peón, que estableció un salario mínimo y procuró mejorar las condiciones de alimentación y vivienda de los trabajadores rurales. Los derechos del trabajador. Los convenios colectivos de trabajo. La Ley de Previsión Social y de Accidentes de Trabajo. Los derechos de la ancianidad. Las escuelas sindicales. El establecimiento del seguro social y la jubilación para más de dos millones de argentinos. La creación de los Tribunales de Trabajo. El establecimiento de vacaciones pagadas y las dos pagas extraordinarias. El reconocimiento del sindicalismo y las asociaciones profesionales de trabajadores. 1 Juan Domingo Perón (1895-1974) art. Felipe Pigna en la revista El Historiador. Juan Domingo Perón y la crisis argentina 3 El control estatal de los precios de los alquileres. La construcción de viviendas populares y el acceso a la financiación de los trabajadores. Importantes mejoras en salud y educación, doblando el número de camas hospitalarias y multiplicando por tres la enseñanza superior, que pasó a ser gratuita. Todas estas medidas consiguieron que se ganara el apoyo de los trabajadores y de amplios sectores sociales a pesar de ser un militar golpista, lo que le permitió poder preparar las elecciones de 1946. Ello le valió la enemistad del ejército que le obligó a dimitir de sus cargos de Vicepresidente y Ministro de Guerra del Gobierno Militar en 1945 siendo detenido y deportado a la Isla Martín Garcia. La presión y huelga por parte de los trabajadores obligó a la Dictadura Militar a ponerlo en libertad. El Gobierno Militar convocó elecciones el 24 de Febrero de 1946. El sector de la Unión Cívica Radical que le apoyaba formó la UCR Junta Renovadora, a la cual se sumaron el Partido Laborista y el Partido Independiente, en tanto la organización radical FORJA se disolvió para sumarse al movimiento peronista junto con los sindicatos obreros. Frente a Perón, todos los partidos tradicionales unidos en la Plataforma Unión Democrática: el Partido Conservador, la Unión Cívica Radical, en alianza con el Partido Socialista y el Comunista, con el apoyo del embajador norteamericano Braden. La Coalición de Perón ganó las elecciones obteniendo mayoría absoluta de los Diputados de la Cámara. Cuando Perón tomó el poder se constituyó en jefe político de masas a través del desarrollo de un programa social que le valió el apoyo de los trabajadores, programa que había comenzado tres años antes desde su puesto de Secretario del Departamento Nacional del Trabajo. No obstante, el Movimiento Peronista no logró el apoyo de la burguesía industrial, aunque si de amplios sectores de la clase trabajadora pero no de toda, ya que el partido socialista y el comunista siempre estuvieron enfrentados al peronismo al ver en 4 Juan Domingo Perón y la crisis argentina el partido justicialista un larvado movimiento fascista. Ello hizo que el peronismo viviera una contradicción viva y permanente, contando con el apoyo de gran parte de los trabajadores, pero no de los partidos que en teoría los representaban, lo que se resolvió con un poder personal por parte de Perón que se ejerció por encima de las clases y sectores en pugna. Perón en su primer gobierno se apoyó fundamenlamente en la burocracia civil y militar, en la maquinaria del Estado, en la burocratizada cúpula sindical muy fiel, en amplios sectores de la clase trabajadora, así como en la Iglesia católica hasta su ruptura en 1955. En 1947, disolvió la Plataforma UCR y fundó el Partido Peronista o Justicialista. Dos años más tarde reformó la Constitución mediante elección democrática de los constituyentes incorporando a la misma los nuevos derechos sociales de la clase trabajadora, así como los derechos del Estado sobre la energía y el voto femenino que fue aprobado en 1947. Perón desde el primer momento se preocupó por controlar los medios de comunicación siendo muy difícil el expresar las ideas opositoras. La mayoría de los medios fueron comprados o controlados desde el Gobierno convirtiéndose en afines al Gobierno y los que discrepaban sufrían continuas clausuras, algo que en Argentina ha continuado desgraciadamente hasta nuestros días. Así mismo, acabó con la independencia del poder judicial que pasó a depender del ejecutivo, lo que fue una las causas del elevado nivel de corrupción que se instaló en la sociedad argentina desde la llegada del Coronel Perón que ha llegado hasta nuestros días. El poder económico con que el que Argentina emergió de la II Guerra Mundial y la salud de las finanzas argentinas en esa época permitieron al gobierno peronista imponer su proyecto en los primeros años de gestión al contar con importantes medios financieros, consiguiendo sostener el impresionante aumento de salarios y de nivel de vida que experimentó la sociedad argentina en los primeros años de mandato. Perón desde el incio de su gobierno colocó a Argentina en un proceso de industrialización e intervención de la economía, tratando que dejara de depender de la tradicional exportación agropecuaria, una maniobra destinada para proveer mejores beneficios sociales a la clase obrera y obtener de esta manera su apoyo. La política exterior peronista se planteó en base a los conceptos de un fuerte componente antiimperialista (EE.UU. e Inglaterra), y un continentalismo encaminado a integrar a Brasil, Argentina y Perú, lo que luego sería el Mercosur (30 años después), siendo precursor del movimiento de los paieses no alineados. Perón nacionalizó los ferrocarriles comprando las líneas a los ingleses y franceses, así como los aeropuertos y financió grandes obras públicas. Todas estas políticas de gasto corriente e inversión fueron financiadas con el excedente comercial que produjeron las exportaciones, agrícolas y pecuarias que realizó Argentina antes y tras la Segunda Guerra Mundial en que se alcanzaron unos precios nunca vistos. La magnitud del gasto fue tan grande que el excedente no fue suficiente, y Perón acabó su primer gobierno con con una balanza de pagos deficitaria, una inflación elevada y con signos evidentes de deterioro económico. Antes de finalizar su primer Gobierno en 1951, dejó exhaustas las reservas del Banco Central de Argentina que ya jamás se recuperaron, instalando en la sociedad argentina una percepción de que el Estado debe resolver todos los problemas, un Estado asistencial- providencia, para el que el país no estaba preparado, al no tener una base económica suficiente. El peronismo dividió a la sociedad argentina en dos bloques irreconcialiables: peronistas y antiperonistas, división que ha continuado hasta nuestros días. En las segundas elecciones en que participó, en noviembre de 1951, el partido justicialista fue reelegido por 2/3 de los argentinos. No obstante, a principios de la década de 1950 ya habían comenzado a disminuir las ventajas de que gozaba la clase trabajadora de las ciudades al haber escasez de productos ante la falta de divisas y la creciente dificultad de obtención de créditos en los mercados internacionales. La muerte de Evita (1952), las dificultades económicas que surgieron ante la imposibilidad para continuar financiando el cambio de modelo económico por la carencia de divisas, así como de continuar incrementando los salarios como había ocurrido en el primer gobierno peronista, produjo una creciente agitación laboral, lo cual unido a la pérdida del tradicional aliado que había sido la Iglesia Católica, -que dejó de serlo por la oposición de Perón a la creación de un partido demócrata cristiano y a la ley de divorcio -, debilitaron aún más su gobierno. Durante 1954 la economía comenzó a dar síntomas de cierta recuperación, consecuencia de los resultados del fuerte Plan de Ajuste implementado a partir de 1952, si bien, la comentada falta de reservas de divisas por la caída de las exportaciones agropecuarias y la pérdida del crédito exterior, sumado al hostigamiento de Perón hacia todo aquel que se le opusiera, comenzó a crear un importante grupo de sectores hostil al Gobierno que acabó con una manifestación el 11 de junio de 1955. El 16 de Septiembre de 1955, un movimiento militar encabezado por el General Leonardi le depuso y acabó con su segundo mandato, comenzando el exilio que duró 17 años. Su derrocamiento a manos Juan Domingo Perón y la crisis argentina 5 del Ejército fue reflejo del creciente rechazo popular a su gobierno dictatorial. Sin embargo, durante sus 18 años de exilio Perón contó con la adhesión de los sindicatos y cierta influencia en la política de Argentina apoyando a sus seguidores en su intento por alcanzar el poder. Finalmente, regresó a Argentina una vez que los peronistas agrupados en el Frente Justicialista de Liberación vencieron en las elecciones presidenciales de 1973, siendo reelegido presidente con su tercera esposa María Estela Martínez de Perón, como vicepresidenta. Murió en el ejercicio de ese cargo el 1 de julio de 1974, sustituyéndole, al frente de la Presidencia, su esposa. ¿Qué tipo de ideología es el peronismo? El peronismo es una ideología mutante y compleja2, se ha considerado tanto fascismo como totalitarismo de izquierdas con Perón; como neoliberalismo con Menem y como socialdemocracia progresista con Kirchner. En realidad, es una ideología difusa de corte populista y oportunista, que ha impregnado la sociedad argentina y que ha hecho exclamar a Jorge Luis Borges: “los peronistas no son ni buenos ni malos: son incorregibles”. El grave problema del peronismo son los dirigentes que, desde hace medio siglo utilizan al pueblo en su propio beneficio con la particularidad que el movimiento es tan grande que las culpas se licúan. El peronismo se ha transformado en una seña de identidad del pueblo argentino que difícilmente puede perder las elecciones porque no tiene candidato propio. En este sentido, participa en todas las candidaturas de los distintos partidos que concurren a las elecciones a través de un candidato peronista. Los candidatos peronistas repiten frases hechas vacías de contenido dichas por Perón o su esposa Evita, hablando sin tener en cuenta la realidad y el contexto político-social-económico y cultural, consiguiendo instalar el autismo en la política 2 Art. de Alberto Albuela sobre el Peronismo. Buenos Aires 30/08/2008 3 María Matilde Ollier: las mil caras del peronismo (1975-2007). 6 Juan Domingo Perón y la crisis argentina argentina. La única solución posible para acabar con el peronismo, según Alberto Abuela, es tomar las riendas de la conducción del movimiento peronista, pero para eso se necesitan dirigentes no corruptos, con convicciones profundas y medios adecuados que es algo contra natura en el peronismo2. El peronismo es un movimiento de carácter demagógico, populista, arribista y oportunista, cuya finalidad es la de ocupar puestos y cargos en beneficio propio con desprecio del pueblo a quien con frases grandilocuentes proponen defender. La democracia presidencialista argentina, de baja institucionalización, otorga ventajas al presidente, en tanto el liderazgo estructura esta fuerza como organización política. La imbricación entre presidente de la nación y jefe del partido justicialista (formal o informal), la ausencia de un poder judicial independiente, la debilidad de las instituciones argentinas y el alto nivel de corrupción, así como la particular morfología peronista, capaz de combinar diferentes modelos de partidos, favorece el ejercicio concentrado del poder permitiendo que el peronismo emerja con mil caras en la escena nacional (del neoliberalismo al populismo económico), siendo esas caras las de sus liderazgos, tal y como señala Matilde Ollier3. Por esto, en las próximas elecciones habrá candidatos peronistas en todos los partidos que aspiran al poder, con lo cual está garantizado su triunfo. La politica económica peronista Perón y las nacionalizaciones Perón, al comienzo de su mandato, en 1946, nacionalizó el Banco Central Argentino y todos los depósitos del sistema bancario mediante el Decreto 8503/46. El Banco Central había sido creado en 1935 por los economistas Federico Pinedo y Prebish. En dicha creación, se contemplaba un organismo mixto con importante papel del Estado Nacional si bien su carácter era independiente. Sus atribuciones eran la exclusividad de la emisión monetaria, mantener las reservas de oro y divisas como respaldo de la inversión, regular el crédito e inspeccionar a las entidades financieras. El Banco Central de Argentina se autoimpuso un 25% de garantía en oro y divisas con relación al papel en circulación de la moneda argentina, lo que convirtió al peso argentino en la moneda más fuerte de sudamérica hasta el final del primer gobierno peronista. Simúltanamente a la nacionalización tuvo lugar una asignación discreccional del crédito, mediante la conformación de bancos oficiales especializados. El recién creado Banco de Crédito Industrial apoyó la Industria y la Minería, el Banco de la Nación el agro y el comercio, el Banco Hipotecario Nacional fue el que financió la construcción de viviendas y la Caja Nacional de Ahorro Postal los créditos al consumo. En 1947 -un año después de ganar las elecciones-, el Presidente Perón, con la fuerte posición de caja que tenia Argentina, pagó totalmente la Deuda Externa y declaró la “independencia económica de Argentina”. Esto fue un gesto puramente estético, con vistas a afirmar su carácter nacionalista e independiente, porque inmediatamente comenzó a acumular una nueva e importante deuda en dólares, mucho mayor que la anterior, pero que no contaba con el respaldo de la fuerte posición en divisas. Esta deuda estaba centrrada básicamente en préstamos de EE.UU. Entre las prioridades de Perón estuvo la compra de los Ferrocarriles, propiedad de los ingleses, a los que el Estado les compró las líneas en 1948. Además de esta nacionalización, en 1946, pasaron a manos del Estado la empresa United River Plate, Telephone Company Lmd (perteneciente al consorcio norteamericano I.T.T., así como la Compañía Privada del Gas y las Compañias de Electricidad, la Flota Mercante, las suministradoras de agua y productos básicos, inclusive con la creación de Aerolíneas Argentinas (que no levantó cabeza desde su fundación por su mala gestión), además de la construcción de nuevos aeropuertos y otras obras civiles de gran envergadura. El golpe de gracia a la economía argentina fue la creación del Instituto Argentino para la Promoción de Intercambio (I.A.P.I), al que se le concedió el monopolio de la comercialización de productos agropecuarios argentinos en los mercados inernacionales. La función del Instituto era comprar las cosechas a los agricultores y revenderla en los mercados internacionales a un precio superior, con lo que se nacionalizaron, de facto, los beneficios del sector agropecuario, desviándose los recursos obtenidos al nuevo modelo económico de industrialización, lo que se tradujo en el pago de las cosechas y el ganado a precios inferiores a los de mercado, con el consecuente abandono de tierras. El resultado fue la disminución de las exportaciones agropecuarias en un 18% en cuatro años, pasando Argentina de ser la despensa del mundo, a necesitar importaciones del sector agrícola para la población al final del segundo gobierno peronista. De esa manera, un sector primario que había sido el motor tradicional de la economía Argentina, dejó de serlo y, en esa nacionalización encubierta del sector agropecuario, se fraguó la posterior ruina de Argentina. Se declararon, así mismo, propiedad del Estado todas las riquezas Juan Domingo Perón y la crisis argentina 7 del subsuelo, comenzando un largo conflicto con las compañias mineras extranjeras que acabó con la compra de éstas por parte del Estado Argentino. En poco tiempo el Estado se convirtió en el principal empresario en Argentina. Las dos etapas de la política peronista La génesis de la política peronista fue el Plan Pinedo de 1940 planteado para hacer frente a los efectos de la 2ª Guerra Mundial y la caída de las exportaciones agropecuarias, con el diseño de una política a largo plazo con el objeto de redefinir el perfil de la economía argentina incorporando estímulos al sector industrial. Para ello, se proponía que el Estado asumiera el rol de crear las condiciones favorables para ese cambio o redefinición en el mix de la economía argentina entre producción agropecuaria e industrial potenciando ésta. Así mismo, se proponía una política de incremento de los aranceles para proteger la industria nacional con vistas a favorecer su desarrollo, con la finalidad de incrementar el comercio con Estados Unidos dándole un trato preferente en las importaciones de productos industriales a cambio de promover las exportaciones argentinas a este país. El Plan Pinedo fracasó, pero contribuyó a crear un clima favorable hacia la industrialización de Argentina que inspiró la política peronista desde su ascenso al poder en 1946. La primera etapa de la política peronista, corresponde al Primer Plan Quinquenal 1946-1951. Esta etapa presenta un marcado protagonismo del Estado y cambios profundos en la distribución de los ingresos, tanto entre sectores sociales, como de la producción. La segunda etapa, correspondiente al Segundo Plan Quinquenal, comienza en 1952 y resultó inacabada al ser depuesto Perón por un golpe militar en 1955. El primer gobierno peronista 1946-1951, practicó una política de capitalismo de estado, de estatizaciones, de aumento del sector público con un rol activo del Estado en la economía. El Estado cobró creciente importancia como regulador de la economía en todos los mercados, y promovió un fuerte incremento de la rentas del trabajo. 8 Juan Domingo Perón y la crisis argentina Los pilares del discurso peronista fueron: mercado interno; nacionalismo económico; posición exterior antiimperialista; rol preponderante del Estado como garante de la redistribución de de la riqueza; incremento del número de funcionarios y de los salarios; un papel central de la industria en detrimento del sector agropecuario; un marcado acento de un Estado asistencial propulsor del bienestar social; con un mensaje de cambio en la política económica que acabara con la oligarquía terrateniente, dando paso a una nueva economía industrial que dejara la tradicional basada en las exportaciones agropecuarias excesivamente dependiente de los mercados externos. La política económica del primer Gobierno peronista incrementó los salarios un 500 por ciento en diez años, aunque el incremento real solo fue del 50% por la elevada inflación de más del 400%, en ese periodo, algo desconocido en Argentina hasta la llegada del peronismo. El fuerte aumento de salarios provocó un aumento de la demanda interna y de las importaciones -acabando con el secular superávit comercial de Argentina- y fue la génesis de la posterior gran inflación y de la ruina del país. El objetivo final era que la economía nacional dejara de depender de los vaivenes del comercio exterior, desarrollando un mercado interno capaz de funcionar como motor interno de crecimiento para conseguir un círculo virtuoso entre industrialización, alto nivel de ocupación, aumento de los salarios reales y consumo. Consecuencia de su política económica de marcado carácter social. Perón, en su época, pasó de ser considerado un militar de derechas a un político de izquierdas. Durante el primer gobierno el objetivo prioritario fue modificar la distribución de los ingresos para consolidar un nuevo orden social. Los instrumentos de que se valió la nueva administración fueron de corte keynesiano: créditos subsidiados a la industria para financiar la producción, que distaba mucho de la calidad de los patrones occidentales, subidas de salarios e instalación, por primera vez en Argentina, del déficit público para mantener el nivel de actividad industrial, las grandes obras en infraestructuras y un aumento significativo del número de funcionarios para cubrir las necesidades del creciente aparato estatal. Al cabo de dos años del ascenso al poder, en 1948, comenzaron los controles de cambios una nota característica del peronismo y en 1949, el “racionamiento” de divisas (permisos previos a la importación y cambios múltiples), “liberándose” al Banco Central de la obligación autoimpuesta de mantener el 25% de las reservas en oro y divisas. Finalmente, en 1949, el Estado Argentino intervino el fondo de pensiones sustituyendo los activos en los que estaba invertido por bonos estatales, comenzando la tragedia que ha convertido a Argentina en el paradigma del riesgo país que acabó con la quiebra o default en 2001. El período 1946-1952 fue realmente pródigo en realizaciones, parecía haberse creado una prosperidad inextinguible. Se vivía una euforia generalizada, euforia en que se sobreconsideraban los recursos del país que siendo importantes, no eran infinitos, subestimándose los problemas que habían ya asomado a partir de 1949 y que obligaron al segundo gobierno peronista a aplicar importantes políticas de ajuste ante el déficit de la balanza de pagos, la elevada inflación y la ausencia de divisas y préstamos internacionales. El producto interior bruto creció en ese periodo, aunque también los hicieron los precios mayoristas. El sector externo, tradicional pulmón de la economía argentina, comenzaba a mostrar dificultades, debido a la expansión de las importaciones, con la finalidad de proveer los insumos de la industrialización. Por otra parte, las reservas de divisas se desplomaron en tan solo tres años con la nacionalización de los servicios públicos, el fuerte incremento del número de funcionarios, el pago de la deuda externa como bandera de la independencia económica de Argentina que pretendía simbolizar el peronismo y la compra de las industrias nacionalizadas. En 1948, la economía funcionaba a plena utilización de la capacidad instalada, merced a una política expansiva-procíclica que redujo la tasa de ahorro e inversión y elevó el nivel de precios. A partir de 1949, la economía argentina entró en un período de crisis que se prolongó alrededor de cuatro años, que estuvo marcado por la caída de la producción agropecuaria, consecuencia de la actuación del IAPI. Ello provocó una caída en el volumen de las exportaciones y, en consecuencia, de la cantidad de divisas que se necesitaban para importar equipos y bienes industriales. A esto se sumaba la dificultad de Argentina en colocar sus productos en los mercados europeos por efecto del Plan Marshall que inundó Europa de cereales norteamericanos subsidiados. Esto último contribuyó a deteriorar los términos de intercambio y a contraer la demanda de productos argentinos que pasó a depender básicamente de EE.UU., que en cambio, poco precisaba de productos argentinos por ser autosuficiente. Además, entre 1951 y 1952 se produjo una importante sequía, por lo que cayeron notablemente las exportaciones agrícolas. Todos estos factores estaban indicando que la política económica implementada había fracasado, tenía un talón de Aquiles en la creciente necesidad de divisas para importar los insumos necesarios para la industrialización que se perseguía. A ello se sumó la falta de productividad por ausencia de tradición empresarial de las recientemente creadas industrias, a lo que había que añadir el hundimiento del sector agropecuario que provocó rápidamente la escasez de divisas y el estrangulamiento de la economía. Juan Domingo Perón y la crisis argentina 9 La estrategia de industrialización vía sustitución de exportaciones fracasó por varios factores: en primer lugar, no había partido como en Europa del sector privado, es decir, de la burguesía industrial, sino del Estado y de forma precipitada, porque en Europa se forjó durante varias generaciones, siendo imposible en tan solo cinco años implementar ese cambio que pretendía el primer gobierno peronista. En el cuadro siguiente se ilustra la rápida variación en el PIB argentino entre rentas del trabajo y rentas de capital. EVOLUCIÓN DEL PORCENTAJE DE PARTICIPACIÓN EN EL P.I.B. AÑO RETRIBUCIÓN DEL TRABAJO RETRIBUCIÓN DEL CAPITAL 1935 46,8% 53,2% 1940 46,0% 54,0% 1945 45,9% 54,1% 1946 45,2% 54,8% 1948 50,2% 49,8% 1949 56,1% 43,9% 1950 56,7% 43,3% En tan sólo cuatro años la retribución del factor trabajo subió diez puntos y la del capital bajó los mismos diez. EVOLUCIÓN DEL AHORRO Y LA INVERSIÓN EN PORCENTAJE SOBRE P.I.B. 10 AÑO AHORRO TOTAL (A) INVERSIÓN BRUTA (I) A-I 1935 0,20% 0,10% 10% 1936 0,19% 0,10% 9% 1937 0,15% 0,11% 4% 1938 0,09% 0,19% -10% 1939 0,16% 0,12% 4% 1940 0,14% 0,12% 2% 1941 0,14% 0,12% 2% 1942 0,16% 0,12% 4% 1943 0,19% 0,12% 7% 1944 0,17% 0,10% 7% 1945 0,19% 0,12% 7% 1946 0,16% 0,16% 0% 1947 0,10% 0,23% -13% 1948 0,07% 0,27% -20% 1949 0,08% 0,21% -13% 1950 0,12% 0,21% -9% 1951 0,14% 0,23% -9% 1952 0,13% 0,22% -9% Juan Domingo Perón y la crisis argentina Como se observa en el cuadro anterior, desde la llegada de Perón al poder se cambia la relación entre ahorro e inversión, que pasa a ser negativa desde 1947. El fuerte incremento del gasto público en el primer gobierno de Perón se recoge en el siguiente cuadro. EVOLUCIÓN DEL GASTO PÚBLICO EN ARGENTINA. EN AUSTRALES DE 1960 AÑO P.I.B. GASTO GASTO/P.I.B. 1946 649,91 161,33 24,82% 1947 722,2 221,43 30,66% 1948 761,77 320,49 42,07% 1949 751,88 220,83 29,37% 1950 755,25 222,15 29,41% 1951 784,6 226,25 28,84% 1952 745,12 223,18 29,95% Perón, como se ha comentado anteriormente, en un momento de expansión económica en Argentina debido a la finalización de la 2ª Guerra Mundial y de fuerte demanda de productos agrarios argentinos, acabó con la independencia del Banco Central Argentina y su política económica anticíclica (de ahorro y superávit presupuestario, en periodos de bonanza económica) y en su lugar promovió una procíclica con una marcada expansión del gasto, con una serie de reformas sobre tres ejes principales: Reforma del sistema impostivo, con tributos a los beneficios empresariales y a la Renta de las Personas Físicas. Control absoluto por el Estado del producto del comercio exterior y de la liquidación de las divisas producido por el mismo. Nuevo sistema previsional de Seguridad Social con una generalización de la cobertura que creó un aumento masivo de aportantes. El segundo Plan Quinquenal 1952-1957 se vió truncado por el golpe de estado de 1955. La mala situación económica que comenzó a aflorar en 1950 obligó al gobierno a introducir cambios en el rumbo de la política económica. La crisis se evidenciaba con toda claridad en el balanza de pagos. Por un lado, las reservas de oro y divisas disminuyeron rápidamente como consecuencia del rescate de deuda externa, la nacionalización de empresas extranjeras y el aumento de las importaciones. Por otro, como resultado de la baja en los precios internacionales de los productos primarios, la caída del volumen de las exportaciones, antes mencionado por la actuación del IAPI, la pérdida de los mercados europeos por el efecto del Plan Marshall comentado y el incremento del nivel de las importaciones ante el fracaso de la política de la sustitución de las importaciones industriales, la balanza comercial pasó de tener un saldo global positivo de 894,4 millones de dólares entre 1946 y 1948 a un déficit de 310,4 millones de dólares en 1951 y 490,9 millones de dólares en 1952. La contrapartida de ese Juan Domingo Perón y la crisis argentina 11 déficit era un creciente endeudamiento con Estados Unidos, principal proveedor de las importaciones argentinas, especialmente, de maquinaria y vehículos. Los créditos impagados con bancos norteamericanos se fueron acumulando llegando a alcanzar la suma de 300 millones de dólares en 1949. Ante la dificultad impuesta a las empresas extranjeras y en particular a las empresas norteamericanas de repatriar beneficios debido a las restricciones cambiarias existentes, los exportadores norteamericanos limitaron el crédito a las empresas argentinas, un crédito que era necesario para efectuar las importaciones que ese país hacía de productos argentinos. Como consecuencia, las exportaciones argentinas cayeron abruptamente pasando de 577,5 millones de dólares en 1948 a 157,5 millones de dólares en 1950, estrangulando la producción industrial en 1950 por falta de insumos básicos, ante las crecientes dificultades financieras y el escenario descrito . Por todo lo que antecede, el segundo gobierno de Perón denominado segundo Plan Quinquenal, que acabó en 1955, se caracterizó por un sesgo de mayor apertura de la economía con un fuerte y no confesado Plan de Estabilización, denominado oficialmente Plan de Austeridad o de Ajuste, para intentar reconducir la maltrecha situación de la economía y finanzas argentinas, producto de los grandes excesos cometidos en los primeros cinco años de mandato, con una tendencia de acercamiento a políticas económicas más ortodoxas, y hacia EE.UU., cuyo distanciamiento había sido, hasta entonces, la bandera de la política exterior peronista basada en una posición nacionalista y antiimperialista. Este nuevo Plan Quinquenal significó el abandono de la política de nacionalizaciones, del IAPI., que había cercenado la tradicional economía argentina de 12 Juan Domingo Perón y la crisis argentina superávit comercial, así como de las estatizaciones, de los aumentos de salarios y, a partir de 1954, del abandono del fuerte componente nacionalista, con unos acuerdos con EE.UU. que fueron considerados por los sectores nacionalistas argentinos como una entrega al hasta entonces considerado país imperialista. A partir de 1952 se fijan unas condiciones favorables de precios agrícolas mediante el mecanismo del subsidio para recuperar el nivel de producción agropecuario. De este modo se mantenían bajos los precios internos y se aumentaba el ingreso de los productores. Se congelaron durante dos años los salarios del sector estatal y se controlaron los convenios colectivos para reducir la inflación que se había disparado en 1951, con una política de congelación de rentas. Todos los rasgos o elementos característicos del primer gobierno peronista fueron abandonados ante las dificultades de la economía argentina que comenzaron en 1949, ya que el resultado del Primer Plan Quinquenal había sido un fracaso en toda regla al no haberse alcanzado la industrialización que se perseguía y, en cambio, haber perjudicado seriamente al sector primario, lo que se había traducido en inflación y falta de divisas. Ello obligó al régimen a aprobar una nueva Ley de inversiones extranjeras en 1951 que permitiera repatriar los beneficios y tener un trato similar a las empresas argentinas. También se firmaron acuerdos especiales con empresas extranjeras para el abastecimiento de determinados productos y para dar impulso a las industrias nacionales como la automotriz. Con la nueva ley de inversiones extranjeras se les dio garantías y ubicó en el marco legal en el que funcionan o podían funcionar las compañías argentinas, significando un reconocimiento a la necesidad de nuevos capitales que ya empezaban a faltar, así como poner en pie de igualdad a empresarios argentinos y extranjeros y acabar con el monopolio estatal en la explotación y la comercialización de la industria petrolífera que tenia la entidad estatal YPF, que tal y como ha demostrado la historia, siempre que ha quedado en manos del estado argentino ha funcionado de manera ineficiente por la alta corrupción del Estado y la falta de una adecuada tecnología. Esto constituyó uno de los problemas más graves que tuvo que afrontar Perón como consecuencia de su anterior política económica, cual fue precisamente, la escasez de combustible. A pesar de contar con grandes reservas de petróleo tenía que dedicar 300 millones de dólares anuales a la importación del combustible que exigía la industria del país para seguir funcionando, lo cual debido a la escasez de divisas era cada vez más difícil de afrontar. Ante esta situación, Perón tomó la decisión en 1954 de cancelar la explotación y comercialización de petróleo en manos exclusivamente de Petróleos Argentinos -YPF- y contratar con la compañía norteamericana Standard Oil de California. Esto fue un verdadero shock por estar en contra de la política nacionalista que el peronismo había predicado y muestra hasta donde había variado su política económica el régimen peronista a lo largo de 1954 y 1955. Toda esta serie de cambios introducidos marcaron grandes debates dentro del peronismo. A pesar de continuar apoyando a Perón, el movimiento obrero comenzó a tomar cierta distancia sobre algunas de las decisiones económicas tomadas por el Gobierno. En ese año, se sancionaron algunas medidas que significaron un giro de 180 grados en la anterior política económica: el Congreso de la Productividad celebrado en 1954 que contempló la necesidad de incrementar la productividad de los circuitos económicos y ligar a esta los aumentos de salarios produjo un enfrentamiento con los sindicatos, una nueva regulación de las horas extra que habían significado un abuso, y la eliminación de las dificultades del despido para el ajuste las plantillas con una nueva regulación. Todos los sectores nacionalistas que lo apoyaban se volvieron en su contra y Perón tuvo que pagar un gran coste político por ese cambio. Ello fue aprovechado por la oposición que comenzó a denunciar lo que parecía una grave contradicción del gobierno, que desde una inicial política petrolera que se apoyaba en dar la explotación y la comercialización a YPF, había llegado a entregar gran parte territorio nacional argentino para que fuera explotado por una compañía norteamericana. Finalmente, en el Plan de Austeridad del Segundo Gobierno de Perón, se intentó poner límites al gasto público y a la expansión estatal dentro de la esfera económica. Ello se reflejó, en una caída en la tasa de empleo en la administración pública. Se modificó la política de distribución de ingresos por medio de la imposición de límites a los aumentos salariales, estableciendo la posibilidad de prórroga de los contratos de trabajo. Asimismo, se obtuvieron créditos externos (principalmente, de Estados Unidos), para el desarrollo de determinados proyectos. Como resultado de esta política de ajuste, la economía argentina comenzó en 1954 a dar síntomas de una mejora al controlarse la inflación y recuperarse las exportaciones agropecuarias, si bien la política implementada de ajuste hizo que se enfriaran las relaciones con el mundo obrero, uno de los apoyos de los tradicionales del peronismo centrado en la clase obrera y la iglesia, lo que permitió que Perón fuera depuesto en 1955 por los militares que, ante la caída de la popularidad del Presidente, no encontraron rechazo popular. El segundo gobierno peronista tuvo un mayor sesgo aperturista que el primero de marcado protagonismo del Estado, intentó poner orden en las maltrechas finanzas argentinas, aunque con escaso éxito, porque el daño ya estaba hecho, ya que cuando se crea un determinado gasto público es muy dificil suprimirlo porque detrás de él siempre hay una necesidad real que cubrir. La fuerte implementación de gasto corriente del primer gobierno peronista fue una pesada losa que impidió reconducir la situación. Ello unido a la corrupción del sector público consecuencia de la eliminación de la independencia del poder judicial y la represión hacia sectores hostiles al Juan Domingo Perón y la crisis argentina 13 peronismo con métodos fascistas, convirtió a Argentina en el paradigma de un país de políticos manirrotos y corruptos. Un país poco fiable por el elevado grado de inseguridad jurídica para la inversión extranjera y para los própios argentinos, comenzando con el primer gobierno peronista un declive que parece no tener fin en la economía argentina, declive que, con sus altibajos, ha continuado hasta nuestros días. de la gasolina del 100%, de la energía eléctrica del 76%, del transporte del 80% y de las tasas de interés del 50%. Los sindicatos, por primera vez 20 años despúes del primer Gobierno de Perón, convocan una huelga general de 48 horas a un partido peronista. En julio de 1975 se alcanza la hiperinflación con un 476% anual. Arranca la “indexación de la Economía” la dolarización, para combatir la inflación que duró 20 años. En 1976 la emisión monetaria resulta imparable y los militares deponen al Gobierno de Isabel Perón. En 1955 con la salida de Perón vuelve Prebish (que había creado, junto con Pinedo, el Banco Central de Argentina en 1935), se proscribe el peronismo al que se hace responsable de todos los males del país, se da marcha atrás a la “nacionalización de depósitos”, se favorece la apertura de nuevas inversiones extranjeras, ingresando en el Fondo Monetario Internacional y proclamándose el retiro de la intervención del Estado en la economía. Nace el Club de París, también conocido como el club de los países morosos, siendo a partir de ese año Argentina socia vitalicia. En 1958 con el Gobierno de Arturo Frondiza el déficit público alcanza el 9,5%, que se cubre con endeudamiento interno y externo. El Gobierno pide ayuda al FMI. En 1959 la inflación alcanza los tres dígitos hasta el 114%. Argentina, durante la mayor parte de la segunda mitad del siglo XX (a partir de 1947, con el primer gobierno peronista), ha experimentado un crecimiento en la intervención gubernamental en la economía, lo que unido a un elevado nivel de corrupción, que comenzó en 1946 cuando Perón eliminó la independencia del poder judicial y nacionalizó gran parte de la base industrial del país, acabó con su tradicional superávit comercial y fuerte posición de divisas. Después de 20 años de la aparición del peronismo, Argentina quedó arruinada a pesar de sus riquezas naturales, y parece que ya no se recuperará. En tan solo 12 años desde el primer gobieno peronista un país rico, merced a políticas populistas de gasto corriente financiado con endeudamiento, se convirtió en pobre, pasando de ser considerado desarollado, a ingresar, sine die, en el club de los países en vías de desarrollo. En 1975 bajo la Presidencia de Isabel de Perón se produce una devaluación de la moneda del 50% alcanzando el mercado negro el 40% de la economía. El ministro de Economía, Celestino Rodrigo, en solo 50 dias provoca una devaluación del 100%, un aumento 14 Juan Domingo Perón y la crisis argentina A inicios de la década de los noventa el Presidente Carlos Menem, finalmente, introdujo reformas de mercado de corte liberal, pero incompletas, que no fueron acompañadas, desgraciadamente, por un control del gasto público, sino que por el contrario, se vivió un incremento dramático en éste y de la corrupción. Entre 1989 y el 2000, el gasto del gobierno federal en porcentaje del PIB creció de un 9.4% a un 21%. Durante la presidencia de Menem, el corrupto sistema judicial argentino permaneció incólume. En el año 2001, Transparencia Internacional colocó a Argentina en el puesto 57 entre los 91 países estudiados. En la actualidad bajo la Presidencia de la señora de Kirchner, que ha sucedido a su marido en la Presidencia de la nación, el gobierno sigue aumentando los gastos muy por encima de los ingresos, la inflación real (no oficial) estimada es del 25% y la subida salarial de 2010 de 26%, ha comenzado ya la espiral de la inflación. El riesgo de una nueva quiebra de Argentina es superior al 50% y el país se ve nuevamente imposibilitado de colocar Deuda Pública en los mercados de crédito ante la falta de credibilidad de las finanzas e instituciones argentinas, a lo cual se une la fuga de capitales del país. Perón y los sindicatos La política seguida por Perón con los sindicatos fue de intentar que formaran parte de su movimiento. No le fue difícil pues durante su primer mandato (1946-51) y desde su puesto su Secretario de Trabajo (1943-46) en la dictadura con centenares de disposiciones, resoluciones y dictámenes emitidos fue configurando todas las figuras jurídicas y los principios básicos de la política social peronista que perseguía dos objetivos básicos: la valoración social de los trabajadores, su reconocimiento como miembros de la comunidad nacional y la rápida mejora de las condiciones económicas ,tratando de equipararlas al de las economías desarrolladas, y consiguiéndolo, porque en diez años Argentina pasó de tener un estado de bienestar propio de un país en vías de desarrollo, a estar a la cabeza del mundo en ese aspecto, aunque ello desgraciadamente duró poco tiempo. El mérito y reconocimiento internacional del Coronel Perón fue sacar del aislamiento internacional al régimen militar propiciando importantes conquistas sociales propias de un país avanzado, con un incremento de un 500% de los salarios en diez años. No obstante, la economía argentina no pudo en tan poco tiempo absorber ese impacto tan fuerte que la precipitó a la ruina en tan solo doce años. En concreto, respecto a los sindicatos, la política de Perón alternó el acercamiento hacia las organizaciones, con el hostigamiento hacia aquellas o hacia los dirigentes que no se plegaron a sus deseos a través del importante aparato represivo peronista. La política sindical aplicada fue muy flexible, utilizando tanto el hostigamiento como la atracción frente a las organizaciones y los dirigentes. Aquellos gremios o asociaciones sindicales que se oponían a sus intereses podían ser disueltos o suprimidos. Todo ello se concretó en que la cúspide sindical perdió autonomía durante la época peronista, si bien en la base, la masa obrera continuó ejerciendo un nivel de presión que condicionó la conducción de la Confederación General de Trabajadores (C.G.T.). No obstante, el movimiento obrero fue el sector social más numeroso que apoyó a Perón en correspondencia al apoyo recibido por la política peronista en virtud del cual la gran mayoría de trabajadores dieron su apoyo al peronismo. En su primer Gobierno se dio un gran impulso a las organizaciones sindicales, junto a una burocratización y estatización de los sindicatos, siendo el proceso de sindicalización rigurosamente reglamentado por el Gobierno. Según un Decreto de octubre de 1945, era el Gobierno quien habilitaba al sindicato con más afiliados a ejercer con exclusividad la representación de los trabajadores. Todo ello permitió a Perón desplazar a los sindicatos que no le eran afines y beneficiar a los que si lo eran. Además se creó una estructura sindical centralizada desde las ramas locales a una única central, la C.G.T. El Estado podía intervenir cualquier sindicato opositor y condicionaba la concesión de beneficio a los que renunciasen al derecho de huelga. Durante el primer Gobierno de Perón, se desarrolló un importante proceso de organización de los sindicatos por industria que abarcaba a la mayoría de la clase obrera a la vez Juan Domingo Perón y la crisis argentina 15 que los trabajadores obtenían importantes conquistas sociales. Además de la clase obrera, hubieron algunos estratos de la sociedad como los interesados en una industria nacional independiente y otros grupos de gran importancia como la numerosa burocracia estatal, el clero (hasta la posterior ruptura con el Régimen Peronista en 1955) y las fuerzas armadas, que obtuvieron importantes beneficios, en contrapartida a los sectores tradicionales agropecuarios que se vieron fuertemente castigados. El mensaje transmitido a las organizaciones sindicales o gremiales era que cualquier dirigente que quisiera conseguir una mejora para el colectivo que representaba tenía que estar dispuesto a colaborar con el régimen peronista y estar de acuerdo con el clima político, orientaciones ideológicas, etc. Una política, en definitva, de palo y zanahoria que dio sus frutos, pues a través de ella aparecieron nuevas asociaciones sindicales que sustituyeron a las que no sintonizaban con el peronismo, las cuales se suprimieron. 16 Juan Domingo Perón y la crisis argentina EL “CORRALITO FINANCIERO” ARGENTINO. CRONOLOGÍA. El corralito financiero argentino fue una restricción a la extracción de dinero en efectivo de plazos fijos, cuentas corrientes y de ahorro impuesta por el Gobierno de De la Rúa en 2001, junto con la eliminación de las transferencias al exterior que no derivasen del comercio, respetándose la operatoria de las tarjetas de crédito. El gobierno peronista anterior de Carlos Menem dejó en 1999 un elevado déficit fiscal de 7.350 millones de pesos, lo que provocó que su sucesor el Presidente De la Rúa tomara severas medidas de ajuste con la finalidad de sanear las finanzas públicas. La base del ajuste era un tipo fijo de cambio anclado al dólar estadounidense llamado “Convertibilidad”, que perjudicó seriamente a la industria nacional, especialmente al sector exportador, además de provocar un aumento de impuestos sobre las clases medias y altas. Con estas medidas comenzó la huída y evasión de capitales que se aceleraron a partir de noviembre de 2000. Al final del mandato de Menem el peso de la deuda ahogaba al Gobierno y aumentaba el déficit fiscal. Los bancos tenían una gran exposición con la Deuda Pública Argentina y crecían las especulaciones sobre la posibilidad de un default o quiebra del estado argentino. Estas medidas de política económica ahogaron todo movimiento económico al restringir la liquidez monetaria, paralizando el comercio y el crédito, asfixiando a la economia sumergida, de la cual dependía una parte significativa de la población. En la fase previa al corralito, en el año 2000, la situación económica se deterioró progresivamente. El cambio 1$=1 peso, acabó siendo una ilusión monetaria, ya que desde el último trimestre de 1999 comenzó una salida neta de capitales trimestre tras trimestre. Además, en el ejercicio 2000 comenzó una caída vertiginosa de la recaudación fiscal por el deterioro económico en las cuentas del Sector Público Nacional y de las Provincias, unido a un mayor peso de los intereses de la deuda. En definitiva, en el periodo 1999-2001 en Argentina, al igual que en España en 20082010, se produjo un círculo vicioso que se fue acrecentando: recesión, caída de la recaudación, aumento de los impuestos, incremento del endeudamiento público, aumento de las tasas de interés y reducción del crédito a emprendedores y particulares. En el año 2000 la situación continuó igual, incrementándose de nuevo los impuestos. El PIB volvió a caer un 1%, la productividad no se recuperó y la salida neta de capitales continuó. A ello se sumó el aumento de las tasas de interés que se exigió a las nuevas emisiones de deuda pública argentina. En estos años fracasaron todas las medidas económicas que se implantaron: ley déficit cero, planes de competividad para reactivar la economía desde el lado de la oferta: factor de convergencia; reducciones arancelarias a las importaciones de bienes de capital; como del lado de la demanda, con reducciones en algunos impuestos. Todo los intentos por reconducir la economía resultaron infructuosos porque los agentes económicos ya habían comenzado a descontar el abandono de la “Convertibilidad”. Los analistas durante estos años comenzaron a contemplar distintos escenarios de modelos cambiarios y a descontar la devaluación a partir del tercer trimestre de 2001 y la El “Corralito financiero” argentino. Cronología. 17 gran caída del PIB que comenzó a mediados del 2001. El sistema financiero argentino de forma paradójica era el considerado más estable de Sudamerica desde el “efecto Tequila” 4 de la crisis mejicana de 1994, ya que a partir de ese año se fortaleció la regulación bancaria mediante unas provisiones genéricas al estilo de las españolas de Rodrigo Rato mediante las relaciones de capital/activos y se mejoraron las técnicas de supervisión bancaria. Todas estas medidas efectivamente fortalecieron el sistema bancario argentino pero el grave deterioro que experimentaron las cuentas públicas, a pesar de la altísima dolarización y de la tendencia creciente a contratar depósitos bancarios en dólares hasta marzo de 2001, no se pudo impedir la insolvencia del país y del sistema financiero argentino. En enero de 2002, el Presidente de la Nación, Eduardo Duhalde, decretó la salida del régimen de “Convertibilidad” después de tres años de crisis, un periodo nunca visto en la historia del país, comenzando por un “cambio administrado” 1$= 1,40 pesos para las operaciones de comercio exterior, y 1$ libre para el resto de las operaciones. El objeto de esta devaluación (un 40%), fue desincentivar la demanda de dólares, aunque obtuvo, como es lógico, un resultado contrario ya que ésta se incrementó. El corralito evitó el colapso bancario, pero trajo una serie de efectos colaterales como la pérdida de confianza en el gobierno y sistema financiero del país que ha dejado su huella en la sociedad argentina, convertida en materia de estudio de sociólogos, antropólogos y psicólogos en todo el mundo. Su efecto económico fue demoledor, pues secó completamente la circulación de dinero efectivo, lo que en una sociedad poco aficionada a las tarjetas de crédito fue definitivo para que la actividad cayera de forma abrupta durante el año de permanencia. Los resultados del corralito fueron una caída de la inversión del 44% y del PIB del 10.7% en diciembre de 2001, en comparación con el mismo mes del año anterior. La tasa de desempleo subió al 18.3% en octubre de 2001, en comparación con el 16.3% de mayo del mismo año y al 14.7% en octubre de 2000. Un 35% de los habitantes de Buenos Aires se situaron por debajo de la línea de pobreza. El IPC disminuyó un 1.5% en el año 2001 y los precios mayoristas cayeron un 5.3%. Los spreads (diferenciales de la deuda respecto al dólar estadounidense alcanzaron los 1.500 puntos básicos en septiembre de 2000, llegando en diciembre a los 5.400 puntos básicos, equivalentes a 54 puntos porcentuales. Durante los tres primeros trimestres del ejercicio 2001, se cumplió con las premisas establecidas por el FMI gracias a que a las Provincias se traspasaron menos fondos que los que se habían comprometido. En el cuarto trimestre de 2001 ante el deterioro de la situación económica no se cumplieron las metas fiscales del Fondo Monetario Internacional. El aspecto más crítico fue el reparto del sacrificio entre el Gobierno de la Nación y las Provincias aumentando la tensión entre ambos. 4 “El efecto Tequila” Se inició el 20 de Diciembre de 1994 cuando el gobierno mejicano del candidato del PRI Carlos Salinas de Gortari (19981994) tomó la decisión de devaluar el peso. Esta crisis se extendió a otros países como Argentina, donde cayó la Bolsa de valores y también hubo fuga de divisas.El origen de la crisis mejicana fue que en 1994, y siguiendo la tradición del PRI (un partido al que imitó Perón), hubo un altísimo gasto gubernamental en obras públicas , lo que tradujo un déficit histórico por cuenta corriente del 7%. Los poseedores de bonos mejicanos asustados los pusieron en venta, colapsando el mercado de la deuda mejicana. El Banco de Méjico en lugar de dejar actuar al mercado y que flotara su divisa, compró bonos hasta donde le fue posible, quedándose sin divisas, lo que produjo posteriormente una huida de capitales mejicanos. Para afrontar la crisis su sucesor Ernesto Zedillo recurrió a EE.UU. que puso a su disposición 20.000 millones de $. 18 El “Corralito financiero” argentino. Cronología. Cronología del Corralito 1/12/2001 Nacimiento del “Corralito”: El 1 de diciembre de 2001 el Ministro de Economia, Roberto Cavallo, en medio de la debacle económica junto con el Presidente, Fernando de la Rúa, impuso el llamado “Corralito” bancario para evitar la fuga de depósitos, que generó una ola de protestas derivando en su renuncia posteriormente, al anunciar la inmovilidad de los depósitos para frenar la fuga de capitales y un colapso bancario, durante un periodo provisional de 90 días. 5/12/2001 El F.M.I. se niega a desembolsar 1.264 millones de dólares por incumplimiento del Plan de déficit cero. 19/12/2001 Saqueos a supermercados en todo el país. De la Rúa decreta el estado de sitio. La población de Buenos Aires protagoniza el primer cacerolazo de protesta. Renuncia Domingo Cavallo. 1/1/2002 Toma el poder otro peronista, Eduardo Duhalde, quien asumiendo que el país está quebrado endurece las restricciones y dispone la “pesificación” que significa la conversión en pesos devaluados de los depósitos en dólares. 6/1/2002 El Parlamento pone fin a la convertibilidad de pesos en dólares. 9/1/2002 El Gobierno de Duhalde promulga la “Ley de Emergencia Pública y Reforma del Régimen Cambiario” que deroga la convertiblidad y pesifica los depósitos en dólares así como las deudas, estableciendo una convertibilidad asimétrica 1,40 pesos/dólar para los depósitos, y un peso/dólar para las deudas. La diferencia de 0.40 pesos/dólar fue compensada entregrándose por el Estado bonos para cubrir la diferencia. 20/1/2002 Se inician contactos con el F.M.I. para recibir ayuda. 28/1/2002 El Gobierno flexibiliza el corralito, al disponer de fondos para efectuar pagos. 1/2/2002 La Corte Suprema declara Inconstitucional el “Corralito”. 1/6/2002 Lavagna anuncia una nueva flexibilización de las restricciones. 3/6/2002 El Gobierno anuncia que por los depósitos a plazo fijo se entregarán certificados de depósito llamados “Cedro”. Los tenedores podrán mantener los depósitos o canjearlos por nuevos “fondos Boden”. 22/11/2002 El Ministro de Economía Roberto Lavagna anuncia la liberación de los fondos depositados en las cuentas corrientes y cajas de ahorro. Comienza el corralón que impone límites de hasta 10.000 pesos (unos 3.000 euros) para el retiro de los fondos a plazo fijo, que fueron canjeados por bonos o títulos de deuda a pagar en 10 años. El fin del “corralito” permitió la liberación de depósitos de 21.000 millones de pesos unos 6.000 millones de euros. 2/12/2002 Se mantienen las restricciones sobre unos 15.000 millones de pesos (unos 4.300 millones de dólares) de depósitos a plazo fijo reprogramados para 2003. Esta medida fue acompañada por controles cambiarios, en virtud de los cuales no se permitió a ninguna persona o empresa adquirir mas de 100.000 dólares USA. 28-12-2006 La Corte Suprema de Argentina ordenó a los bancos restituir en pesos la totalidad El “Corralito financiero” argentino. Cronología. 19 de los depósitos bancarios hechos en dólares y que habían sido congelados en 2002, resolviendo 50.000 demandas judiciales contra la “pesificación” de esos fondos. La devaluación de la moneda argentina durante el año de duración del corralito fue de un 350%. La decisión provocó una convulsión social que acabó con el mandato del Presidente Fernando de la Rúa que abandonó el cargo al día siguiente, cuando se cumplía la mitad de su mandato de cuatro años. La represión policial a los manifestantes que se reunieron en la Plaza de Mayo provocó seis muertos. 20 El “Corralito financiero” argentino. Cronología. El corralito evitó la fuga de los depósitos en Argentina, pero provocó la recesión más importante de la historia económica del país con una caída del PIB del 10,7% provocando una total desconfianza en el sistema bancario, una huída de la inversión extranjera y una desconfianza general en un país que encarna la corrupción e inseguridad jurídica, un estigma que perseguirá a Argentina quizás para siempre. EL RIESGO DE ARGENTINIZACIÓN EN LA ECONOMÍA ESPAÑOLA. DIFERENCIAS Y SIMILITUDES ENTRE LA POLÍTICA ECONÓMICA PERONISTA Y LA DE RODRIGUEZ ZAPATERO En cuanto al proceso de argentinización de la economía española, afortunadamente, el grado de deterioro de las instituciones no es comparable, al menos de momento, con el de Argentina, pero puede llegar a serlo si no hay un gran acuerdo nacional de regeneración democrática de las instituciones que conlleve, entre otras medidas, la necesaria independencia del poder judicial, porque el deterioro de las instituciones españolas es evidente y nos deslizamos por la misma peligrosa pendiente que ha sumido a Argentina en el paradigma del país que encarna la inseguridad jurídica y la corrupción. Respecto a las diferencias y similitudes entre ambas políticas económicas, es de destacar, en primer lugar, que son mucho más importantes las diferencias que las similitudes, ya que la base de la politica económica del primer gobierno de Perón fue un capitalismo de Estado que no tiene nada que ver con la política económica seguida en los dos Gobiernos de Rodríguez Zapatero durante los que no se ha practicado “la estatización”, que es el aspecto más relevante del peronismo. Existen además diferencias de contexto histórico y de ublicación geográfica lo que determina que sean más importantes las diferencias. No obstante, hay rasgos que sin duda identifican a ambos dirigentes cual es la implementación de unas políticas económicas de gasto corriente financiado con endeudamiento, que en el caso argentino arruinaron al país definitivamente y en el español ha producido un deterioro muy grave en la situación de las finanzas españolas y afectado de manera seriamente a la sociedad española. Veamos cuáles son esas similitudes: Dos políticas económicas procíclicas con finalización de la independencia de los dos Bancos Centrales. Contaminación del fondo de reserva de la seguridad social y de los balances de las entidades financieras mediante la colocación de la Deuda Pública en ambos países. En Argentina, durante el periodo 1946-1952, en un momento de expansión económica en Argentina debido a la finalización de la 2ª Guerra Mundial y de fuerte demanda de productos agrarios argentinos, Perón acabó con la independencia del Banco Central Argentina y su política económica anticíclica (de ahorro y superávit presupuestario, en periodos de bonanza económica), y en su lugar promovió una procíclica con una marcada expansión del gasto. En España en el período 2004-2009, se siguió así mismo una política económica procíclica, de fuerte implementación de gasto público, buscando un clientelismo en lo “social”, que en Argentina acabó totalmente con el estado de bienestar que en teoría se pretendió instaurar, y en España lleva el mismo camino, ante la falta de credibilidad de las finanzas españolas que ha obligado a crear un fondo de 750.000 euros al B.C.E. y al F.M.I. para acudir al rescate de España, Grecia y Portugal, en al menos la cantidad de 280.000 millones de euros para nuestro país. Las medidas de ajuste del segundo gobierno de Rodríguez Zapatero le obligará a un fuerte recorte del gasto de carácter social y la pérdida no sólo de las medidas sociales del gobierno del primer gobierno (el cheque bebé, los 400 euros, la El riesgo de argentinización de la economía española. 21 ley de depenencia, etc.), sino a otras que seguramente hubieran podido permanecer de no haber seguido su disparatada política económica, todo ello con la finalidad de combatir el déficit público, que es imposible continuar financiando. Además, porque las finanzas españolas se dirigen desde el exterior desde el pasado 7 de Mayo de 2010, fecha en la que España estuvo al borde del default o quiebra. Importante herencia económica recibida con la sensación de recursos inagotables en ambos dirigentes. Perón recibió un país rico en recursos naturales, una economía floreciente fruto de veinte años de seguimiento de una política económica ortodoxa de carácter anticíclico por los gobiernos anteriores, a lo que se unió un contexto económico mundial de bonanza para la economía argentina coincidente con el final de la 2ª Guerra Mundial. Un país que era la despensa del mundo en agricultura y ganadería, con una deuda muy baja en relación al PIB y unas importantes reservas de oro y divisas que superaban ampliamente el endeudamiento exterior. Las divisas le fluían por todas partes por los altísimos precios de la exportaciones agropecuarias con la expansión que siguió a la 2ª Guerra Mundial. Pero en sólo cinco años, se pasó del todo a la nada, de la autoprocalmada “independencia económica”, al pagar la totalidad de la deuda externa el primer año de su mandato, a la falta de divisas y de crédito internacional en 1951. Al igual que Perón, Rodríguez Zapatero recibió en 1996 una economía boyante que había reducido su endeudamiento a la mitad, del 67% al 38% del P.I.B. en los ocho años anteriores, una deuda pública que era el 50% de la media de las economías de la UE Alemania incluida, con un bono español a diez años que llegó en 2002 a pagar menos interés que el bono alemán, unas finanzas en situación de equilibrio presupuestario por primera vez en la historia de la democracia. Posiblemente el mejor momento económico y financiero de la historia económica de 22 El riesgo de argentinización de la economía española. España. Es evidente que con un hándicap importante que no se supo o se quiso ver, consistente en un modelo económico frágil, excesivamente concentrado en la construcción y el turismo, que precisaba cambios estructurales urgentes puesto que el país sufría una pérdida de competividad importante desde principios de los años 90. En lugar de acometer esos cambios durante su primer mandato, para lo que España contaba con una fuerte posición de caja y una calificación crediticia de tripe A por las tres Agencias de calificación, el primer Gobierno de Rodríguez Zapatero, con Solbes al frente de Economia, decidió poner “más carbón a la locomotora”, pasando de criticar el modelo existente con anterioridad a ganar las elecciones y, a pesar de encontrarse con unos signos evidentes de burbuja inmobiliaria denunciada contínuamente desde el Banco de España por el entonces Gobernador Jaime Caruana, evitó que se detuviera, sustituyendo a Jaime Caruana (ahora en el F.M.I.), que estaba decidido a frenar la fiebre del crédito a la construcción. De haberse seguido los consejos de Caruana, se hubiera evitado gran parte la delicada situación actual de las entidades financieras españolas, puesto que en el periodo 20052008 se dobló la deuda hipotecaria española. Para ello, Rodríguez Zapatero no dudó en nombrar por primera vez en la Democracia a un Gobernador del Banco de España miembro de un partido en el Gobierno, -Fernandez Ordoñez-, acabando con la tradicional independencia entre Gobierno y Banco de España. De esta manera se continuó con un modelo económico que daba síntomas alarmantes de agotamiento, pero que proporcionaba al Estado importantes ingresos fiscales para finanaciar el fuerte incremento de gasto público, que impulsa Zapatero desde su llegada a la Presidencia, con incrementos medios del 4% de 2005 a 2009 en muchas partidas presupuestarias, siendo responsable en sus primeros cuatro años de mandato de la generación más del 60% de la deuda ligada al sector de la construcción que en estos momentos ahoga al país. Una difusa ideología con predominio de lo “social”. El Estado asistencial. El coronel Juan Domingo Perón encontró un nicho de mercado electoral ante el vacío de contenido social en la legislación argentina de los gobiernos anteriores que tenía importantes déficits en ese sentido. Perón, en apenas tres años aprobó importantes leyes de carácter social: pagas extraordinarias, salario mínimo, negociación colectiva, pensiones generalizadas, etc., es decir, todo las leyes que debe tener un Estado moderno y avanzado, pero en tan corto periodo de tiempo, que al igual que la República de Weimar en Alemania entre 1919 y 1923, no se pudo asimilar por la economía del país. Las subidas salariales del 500% en diez años del estado peronista fueron la génesis de la posterior hiperinflación, y la persecución de las rentas de capital para buscar desesperadamente ingresos, la de la huída de capitales. El resultado es por todos conocido, Argentina pasó de ser un pais rico a otro hundido en la miseria, cuyos habitantes han tenido que abandonarlo y emigrar, muy a su pesar, porque es incapaz de darles un mínimo de calidad de vida y oportunidades, acabando con la existencia de esas pretendidas conquistas sociales, que eran el propósito inicial del peronismo, con unos salarios y pensiones ridículas en la actualidad. Porque Hegel tenía razón cuando dijo que, aunque se recomiende a los gobernantes, estadistas y a los pueblos que aprendan, preferiblemente, a través de la experiencia de la historia, lo que la experiencia y la historia enseña es que los gobernantes y los pueblos nunca aprendieron nada de la historia ni se comportan de acuerdo con sus lecciones. Y esta lección es la que debió aprender Rodríguez Zapatero del primer gobierno peronista a su llegada al poder. Este es el caso de la Argentina, donde la convulsión social y política era perfectamente previsible y se presumía inevitable, como consecuencia de la crisis económica y financiera en la que se sumergió, y es el caso de España en la actualidad con una clase política que, en general, confunde a los ciudadanos con votantes, un país con 4.600.000 parados y una sociedad civil que permanece anestesiada ante la situación tan crítica que estamos atravesando. Implementación de un modelo de déficit público recurrente. El afrontar los problemas desde un enfoque de gasto público con recurso al incremento de impuestos y al endeudamiento de manera sostenida, provoca una pérdida de confianza en la credibilidad de la economía del país, con la consiguiente huída de la inversión extranjera, cuando no la de depósitos de los capitales del propio país. El déficit público actual del Estado Español del 11,7% del P.I.B. (más del doble que en la Argentina del corralito), implica que hay que acudir a los mercados para colocar mas de 100.000 millones de euros cada año, lo que provoca el sucesivo encarecimiento de las emisiones, que se están cubriendo por las compras de la banca española, -lo que es el origen de la la falta de liquidez al sector privado- y del Banco Central Europeo, en los momentos en que periódicamente se acusa esa falta de credibilidad, lo que dificulta la recuperación y añade un grado importante de incertidumbre sobre la viabilidad de la economía española. Dos países en manos del Fondo Monetario Internacional (F.M.I) y hundimiento del sistema financiero. El sistema financiero argentino considerado como uno de los más sólidos de sudamérica en su momento ha acabado prácticamente en quiebra, desprestigiado después del corralito financiero de 2001. Existe una similitud entre el colapso financiero argentino de diciembre de 2001 y el rescate del Banco Central Europeo de la Economía Española de 7 Mayo de 2010, al desprenderse los principales fondos de inversión de la deuda española meses atrás ante el temor del default del Estado español El riesgo de argentinización de la economía española. 23 y tener que acudir el Banco Central Europeo (B.C.E.) al rescate de la Deuda Pública Española. Apoyo en la cúpula sindical. En el primer Gobierno de Perón y en los dos de Zapatero es un lugar común señalar que en ambos casos el Gobierno estaba condicionado por los Sindicatos. Nada más lejos de la realidad, ya que tanto en un caso como en otro, -argentino y español- fueron los gobiernos respectivos los que utilizaron a los Sindicatos, mejor dicho, a las cúpulas sindicales absolutamente burocratizadas, muy lejos de representar y defender al colectivo de los trabajadores e incluso a sus bases, siguiendo un modelo de relaciones laborales cuya génesis en el caso argentino es peronista y en el español franquista. Los sindicatos argentinos a pesar de las dificultades financieras tan grandes en que quedó sumida Argentina después del primer gobierno de Perón no hicieron una huelga general a un gobierno peronista hasta 1974, casi 20 años después. Hay que señalar que el modelo de relaciones laborales español es franquista (Ley de Contrato de Trabajo de 1944), que se ha perpetuado en el tiempo con algún retoque más o menos estético, en el que el marco de las relaciones laborales es determinado por una cúpula empresarial que no representa ni al 5% de un tejido industrial compuesto en más del 95% por pequeñas y medianas empresas, sino a la oligarquía financiera e inmobiliaria, así como al lobby energético y unos sindicatos mayoritarios con una representación del 18-20%. Pero en realidad, reconociendo la dificultad del papel de unos sindicatos de clase, cuando la lucha de clases ha acabado, ya que en la actualidad solo sobreviven en un mundo global las estructuras empresariales horizontales de colaboración entre los distintos actores que conforman la empresa (proveedores, clientes, trabajadores), verbigracia, Mercadona6, cuyo modelo de negocio se estudia en Harvard. La cúpula sindical, al igual que la mayoría de los gobiernos central, autonómicos o locales, mantiene una visión del siglo XX, no se da cuenta que en el XXI el mundo ha cambiado, y por ello trata de mantener un statu quo de relaciones laborales del siglo pasado que son un lastre para la economía del país y cuyo resultado es un 40% de paro juvenil (20% más que la media Europea) y un 20% de desempleo, consecuencia de un modelo donde las empresas con pérdidas tienen que competir con los mismos sueldos que otras que no lo están, por lo que no pueden adaptarse (salvo a través del proceloso sistema del descuelgue salarial), y, en consecuencia, no pueden competir, siendo barridas del mercado ante la imposibilidad de tener convenios de empresa y estar sometidas a una negociación colectiva. Un modelo dual de relaciones laborales en el que los trabajadores jóvenes no pueden competir con los menos jóvenes porque entre ellos median 45 días de blindaje por despido improcedente, una muralla insalvable que provoca la desigualdad injusta entre el empuje de la fuerza e ilusión de la juventud y la experiencia de trabajadores menos jóvenes para ocupar un puesto de trabajo. La situación actual es tan dramática que obliga a que la preocupación sindical debiera ser la de formar cuadros sindicales en la organización del trabajo para acabar con la falta de competividad de la economía española que es la causa del elevado nivel de desempleo en mayor medida que el marco de las relaciones laborales. 6 Periódico Expansión.26.09.10. La clave del éxito de Mercadona se basa en el MCT o Modelo de Calidad Total que parte de la idea que cualquier empresa puede funcionar como una cadena de montaje, desde las materias primas hasta las tiendas. A finales de 2008, la Dirección se dio cuenta que estaban estancados. La cadena diseñó un Plan para reducir los precios (un 17%), atraer un 8% mas de clientes y conseguir un aumento medio de la compra del 5%. Se eliminaron 1000 referencias junto a una serie de mejoras en los procesos para ahorrar costes. La optimización se consigue en la estandarización de procesos y en el análisis de las necesidades del cliente. El grupo trata de saisfacer (por orden de importancia) al 1ºjefe (el cliente),2º trabajador,3ºproveedor,4ºsociedad y 5ºcapital. En 2008 la productividad por empleado de Mercadona (232.260 euros de ventas), mejoraba un 18% los datos del resto de supermercados de España y de EE.UU. La compañía se ha volcado en la formación de los trabajadores con una inversión media de 1000 euros al año y con un trabajo y horario estable. 24 El riesgo de argentinización de la economía española. La solución, entre otras muchas, es un cambio en el marco de las relaciones laborales, desde una negociación colectiva, a una negociación a nivel de empresa, y el objetivo a perseguir es la participación en los consejos de administración de la representación sindical, en definitiva, “la cogestión” que tan buenos resultados ha dado en Alemania. El resultado del modelo de relaciones laborales actual es que en los ajustes de empleo no prima ni la capacidad o talento, ni la idoneidad de la persona en el puesto de trabajo, sino el criterio de la antigüedad por el coste de despido que representa, que es más del doble de la media europea y ocho veces mayor que en la Dinamarca de la flexiseguridad7 con menos de un 5% de desempleo. En la Argentina de Perón al igual que en la España de Zapatero, la burocratizada cúpula sindical estaba en manos del Gobierno, no al revés, con una direcciones anacrónicas que hacen causa común con el Gobierno para defender un statu quo con la finalidad de que no haya cambios, ante su incapacidad de adaptación al complejo mundo global en que nos encontramos. Unas relaciones laborales que, en nuestro caso, datan de la Dictadura y que no sirven para un país moderno dentro del actual mundo global. Importancia de los gobiernos regionales en ambos países. Al igual que los Gobernadores de las Provincias argentinas, en España tienen una relevancia esencial los barones territoriales de los partidos mayoritarios, y en mayor medida los partidos nacionalistas, cuyas direcciones son en la actualidad pro-separatistas y a los que la ley electoral ofrece una sobrerepresentación que les permite cada año en los Presupuestos del Estado arañar todo lo que puedan en función de la debilidad del Gobierno de turno, lo que justifica su permanencia en el Parlamento ante sus electores. Partidos con los que la llegada de Rodríguez Zapatero incrementaron su poder tratando de aislar a la oposición llegando a la situación actual, que ha hecho imposible la necesaria “Gran Coalición” de los dos grandes partidos, la única solución a la crítica situación que nos encontramos. Contaminación del Fondo de Reserva de la Seguridad Social, y de los Balances bancarios. Perón en 1949 invirtió el Fondo de Reserva de la pensiones en Deuda Pública Argentina, condenando con la posterior quiebra del Estado a millones de argentinos a no tener una pensión digna. Rodríguez Zapatero durante el último año y medio, ante la dificultad de colocar la deuda pública española, ha invertido el fondo de reserva de las pensiones en Deuda Pública española (más de 60.000 millones de euros), poniendo en riesgo el futuro de éstas. Además las entidades financieras españolas tienen, así mismo, su futuro comprometido, no solo por la deuda inmobiliaria y el desempleo existente, sino por poseer en sus balances más de 160.000 millones de Deuda Pública Española, ante el abandono de los fondos de inversión y banca extranjera, lo que ha dejado sin crédito a las empresas y familias españolas y añade un grado de incertidumbre adicional sobre la salud de bancos y cajas españoles, que inicialemente en la crisis partían de una mejor posición que los europeos. 7 Dinamarca y la flexiseguridad. De los Lunes al Sol de Elias Querejeta en España al pleno empleo en Dinamarca. Dinamarca que sufrió a principios de los años 90 una crisis muy importante con un impacto muy fuerte en el empleo, logró un amplio consenso a través de un acuerdo entre la patronal y los sindicatos que provocó un pleno empleo diez años después. Los efectos de este acuerdo que se conocen como la” flexiseguridad” combinan una amplia capacidad para ajustar plantillas (el despido oscila entre 6 y 8 días por año trabajado) con una gran seguridad (el trabajador en caso de despido tiene hasta cuatro años de un subsidio de hasta 3.000 € mensuales), financiado con una imposición elevada de aproximadamente el 50%, impuestos que en un 33% mínimo tienen que revertir en el ciudadano en forma de prestaciones sociales. Como consecuencia el mercado de trabajo danés es tan flexible como el británico y al mismo tiempo tan seguro como el sueco. Un mercado laboral flexible en el que la movilidad laboral y de fijación de jornadas y salarios es muy grande y cuyo resultado es el bajo nivel de desempleo. El riesgo de argentinización de la economía española. 25 La banca española solo ha recibido el 20% de las ayudas de países como Francia y Alemania y, en cambio, han acudido a la compra de una deuda pública española en mucha mayor proporción. Una deuda que ante uno de los mayores déficits públicos de la OCDE (el 10%), se deteriora cada día y que exigirá muy pronto provisiones adicionales a las del sector inmobiliario. Tasa elevada de desempleo en ambos países. Importante tasa de paro 18% en Argentina en 2001 y del 20% en España en 2010. La elevada tasa de desempleo es siempre el resultado que se obtiene de la falta de disciplina fiscal y de las políticas económicas erróneas, como las seguidas en Argentina en el periodo 1946-1951 y España 2004-2010, en que el Estado absorbe los recursos del sector privado y lo deja sin financiación, comenzando el círculo pernicioso de la economía, caída de ventas, caída de la financiación, aumento del desempleo, incremento de las necesidades del estado ante la caida de ingresos, aumento de gastos, y monetarización o recurso al endeudamiento para financiar el déficit público. ya emitida, como consecuencia de la brusca caída de ingresos y el aumento de gasto corriente por la dos crisis superpuestas: la propia y la internacional. Incremento de Impuestos en ambos países. Al llegar Perón al poder se encontró con una presión fiscal muy baja. Para financiar las políticas de gasto implantó una serie de nuevos impuestos e incrementó los existentes persiguiendo sobre todo los beneficios de las empresas, de las rentas medias y altas y de capital. El resultado fue una interminable serie de quiebras empresariales y la masiva huida de capitales. A la llegada de Zapatero al poder, subió igualmente las rentas del capital, que pasaron del 15% al 18% y al 21% en julio de 2010, con una previsión del 25% para 2011 y también del Impuesto de Sociedades, ya que las sociedades patrimoniales pasaron de tributar del 15% al tipo normal 30% o 25% actual. En 2010 se ha subido el IVA al 18% y en 2011 seguramente al 20% para intentar cubrir la brecha o gap fiscal. Como conclusión: El resultado de las políticas populistas como las de Perón o Zapatero, es siempre muchos años de sufrimiento de la población para enderezar el rumbo de la economía y las finanzas, llegando, como en el caso de Argentina, a la quiebra del Estado, a un punto sin retorno y al deterioro de la instituciones, corrupción, inseguridad jurídica y pobreza para la mayor parte de la población. Emisión de Deuda Publica sin control. El Gobierno de Perón recurrió al recurso de la emisión de papel moneda, continuando en gobiernos posteriores, acabando con la suspensión de pagos internacional y una quita del 65% en 2002. En España la emisión neta prevista por el Gobierno español para 2010 y 2011 es de 250.000 millones de euros para financiar el fuerte déficit público y los vencimientos de la Deuda Pública 26 El riesgo de argentinización de la economía española. No hay nada que objetar a que un gobierno como ha sido el de Rodríguez Zapatero persiga mejoras sociales para la población, sino al contrario, es uno de los objetivos que debe perseguir un gobernante. No obstante las llamadas “conquistas sociales” que existen en los países desarrollados -que hay que proteger y conservar-, que distinguen a los paises desarrollados de los que no lo son, solo son posibles cuando se financian con ingresos (impuestos) del Estado, impuestos que no tienen que poner en peligro, por excesivos, la viabilidad del tejido empresarial y la competividad en una economía global e interdependiente. Solo con un control de las finanzas públicas, sin déficits públicos recurrentes, con políticas económicas anticíclicas, un poder judicial independiente para el control de la clase política y evitar la corrupción, con personas honestas y preparadas al frente de los poderes públicos (Estado y Autonomías) son sostenibles esas conquistas en el tiempo. Por ello, las políticas de gasto corriente financiadas con endeudamiento o emisión de papel moneda, al igual que sucedió en la Argentina de Perón en 19461955, en la Alemania de Weimar 1919- 1923, El Estado de California en EE.UU. y Venezuela 2000-2010, y en España 2004-2010, acaban siempre con la quiebra de los países que la practican o, en su caso, con serias dificultades económicas, haciendo sufrir precisamente a los más desfavorecidos que engañados por ese espejismo, por ser víctimas de un clientelismo, o bien por pensar que estaban inspiradas en un principio de justica y equidad social, las apoyaron ciegamente. ¿PUEDE HABER UN CORRALITO FINANCIERO EN ESPAÑA? FORMA DE PREVENIRLO Argentina, 3 de diciembre de 2001, dentro de una profunda recesión, el gobierno del Presidente De la Rúa impuso por Decreto el llamado “corralito” que restringía la extracción de depósitos bancarios a 250 $/semana así como las transferencias al exterior que no tuvieran carácter comercial, para evitar la fuga de dinero del sistema que superaba los 20.000 millones de dólares. Argentina tenía un sistema fijo de convertibilidad 1peso=1$, que había comenzado a resquebrajarse por la mala situación económica y el alto endeudamiento del país. Las nuevas medidas según el Ministro de Economía Domingo Cavallo eran “de carácter extraordinario y tenían por objeto defender a la economía frente a los ataques especulativos de algunos inescrupulosos que buscan una devaluación”. Hay varios aspectos en los que se asemeja la situación actual española a la de Argentina de 2001: Mala situación financiera y fuerte caída de los ingresos fiscales. (Argentina 1999-2001, España 2008-2010). En Argentina en los años anteriores al corralito hubo una fuerte caída del nivel de actividad económica, un creciente incumplimiento de las obligaciones crediticias e impositivas, falta de liquidez en los bancos y atrasos en los pagos del Estado que generaron más recesión. En ambos países, los Gobiernos respectivos afrontaron la caída de los ingresos fiscales además con endeudamiento con atrasos en los pagos. En el caso español centrado básicamente en las Comunidades Autónomas y Corporaciones Locales, lo que implica un endeudamiento encubierto no contabilizado que en nuestro caso asciende a 160.000 millones de euros, aproximadamente un 16% del Producto Interior Bruto (P.I.B.) del Estado español. El fuerte aumento impositivo al que el FMI forzó a Argentina en el año 2002 cuando estaba saliendo de la recesión, provocó una nueva recaída y una pérdida de ingresos, cosa que previsiblemente también ocurrirá ante el aumento generalizado de los impuestos en España previsto para 2011. Falta de capacidad de devolución de la Deuda Pública, con recurso al endeudamiento para financiar el déficit. Dos economías dirigidas desde el exterior. La deuda externa es como el reloj de un taxi que va mostrando como aumenta el importe a pagar a medida que transcurre el viaje, tic,tac,tic,tac... La deuda pública Argentina fue creciendo durante los últimos años de la década de los 90, al albur de un contexto económico favorable a tasas de un 9% cada año, ascendiendo a finales de 2000 al 55% del PIB nacional. Cuando se decretó el corralito era del 62% del PIB (similar a la española a finales de 2010), con un déficit público del 6,4% casi la mitad que el español actual y un déficit por cuenta corriente de 1,7% del PIB cinco veces inferior. Los mercados financieros internacionales estaban cerrados por los tenedores de bonos argentinos que El riesgo de argentinización de la economía española. 27 rechazaron el canje de deuda de bonos argentinos, teniendo que financiarse a un alto costo financiero que llegó al 16%. En el año 2000, bajo el mandato del presidente de De la Rúa, se incrementaron los impuestos a las clases medias y altas, mientras que la deuda externa y el déficit fiscal seguían creciendo, con lo que se incrementó la salida de capitales del país. En la prensa nacional e internacional, así como en organismos especializados, al igual que ocurrió en España hace tan solo dos meses, se comenzó a dudar de la capacidad del Estado para pagar las deudas, lo que hizo que en el año 2001 se solicitara ayuda al FMI, pero la recesión y la fuga de capitales se intensificó por el malestar que causaron las medidas impuestas por el Fondo. El segundo semestre de 2001 el paro subió al 18,3%, la deuda pública a 144.000 millones de dólares y el riesgo país a 5.400 puntos básicos (equivalente a un 54% anual). Temiendo un pánico económico y una devaluación del peso argentino la gente convirtió los pesos en dólares, aunque de nada sirvió porque el Gobierno Argentino pesificó los depósitos en dólares estadounidenses. Al final del corralito el peso argentino que partía de la paridad se cambiaba con una relación 1$= 3,5 pesos. España en la actualidad con un déficit público del 11.3% del Producto Interior Bruto (P.I.B), solo ingresa un euro por cada dos que se gasta. Necesita emitir deuda pública en año y medio por importe de 250.000 millones de euros para financiar el déficit público de más de 150.000 millones de euros en año y medio y atender los vencimientos de la deuda pública ya emitida, a corto plazo principalmente. La deuda española está colocándose por ofrecer casi el doble de rentabilidad que el bono alemán a diez años, así 28 El riesgo de argentinización de la economía española. como por las compras del Banco Central Europeo y la banca española. Solo el Plan de Rescate de 750.000 millones de euros recientemente aprobado por el Banco Central Europeo (BCE) y el Fondo Monetario Internacional (FMI) -la mayor operación financiera de la historia-, puede salvar a España del default o quiebra ante la imposibilidad, sino se refinancia, de atender los vencimientos de la deuda pública, pero quien, en definitiva, tiene la llave del futuro del país es Alemania, sostén del euro y de la CE, y en menor medida Francia, que van a decidir cuál es el mal menor, asumir el impago de los 600.000 euros de riesgo país de España con Europa, o continuar comprando Deuda Española a través del Banco Central Europeo (BCE), por lo nos encontramos ante un durísimo proceso de ajuste que no ha hecho más que empezar. Financiación de la caída de ingresos fiscales mediante el endeudamiento. El círculo vicioso de la deuda en las dos economías. En ambos países: Argentina 1999/2000 y España 2008/2010, se financió la caída de ingresos con el recurso al endeudamiento lo que aumentó el riesgo país, comenzando el círculo vicioso: recesión, caída de la recaudación, aumento de los impuestos, disminución de la inversión extranjera con salida de capitales del país, incremento del endeudamiento público, aumento de las tasas de interés y restricción de crédito a empresas y particulares, generándose en definitiva, una espiral de recesión, mayor deuda con mayores tipos de interés, ante la creciente desconfianza y exigencia de los mercados. Imposibilidad de colocar la deuda española. Al igual que en Argentina en el año 2001, el 7 de Mayo de 2010 se colapsó el mercado de la deuda pública española ante la imposibilidad de su colocación. Gracias a la intervención del BCE que compró deuda de los estados periféricos de la zona euro por importe de 16.000 millones de euros y el anuncio del Plan de Rescate conjunto por el BCE y el FMI de 750.000 millones de euros se pudo sortear la situación. La pérdida de confianza en España obliga a pagar su financiación del bono a 10 años a un interés del 4,10%, mientras que Alemania sólo lo hace al 2,32%. Elevada cifra de desempleo. En Argentina el 18.8% y en España el 20%. Esta elevada cifra de desempleados es una de las principales causas de la morosidad bancaria y responsable de casi la tercera parte del déficit público por la prestaciones de desempleo, así como por la caída de ingresos fiscales, la caída del consumo y del grave deterioro de la economía. Insuficiencia de las medidas de ajuste tomadas en España. Los 15.000 millones de euros de recorte de gastos aprobados el miércoles 27 de Mayo de 2010 en el Parlamento, solo representan un 1,5% del 11,3% de déficit público. Se necesita un esfuerzo del doble los próximos dos años y medio, a razón de 30.000 millones de euros cada año, para llegar a 2013 por debajo del 3% de déficit público máximo. Por tanto, al no realizarse este duro ajuste, lo más probable es perder como en Argentina la convertibilidad con el dólar, lo que en nuestro caso equivale a salir del euro hacia el euro “b” o eurín, o vuelta a la moneda propia. Esta salida del euro será voluntaria (se venderá como temporal), para poder devaluar y hacer más competitiva nuestra economía. Por lo tanto, en nuestros tres escenarios de salida de la crisis contemplamos la vuelta a la peseta o al eurín (la moneda europea de los países del sur), con una fuerte devaluación como uno de los escenarios más probables, lo que podría llevar aparejado un “corralito financiero español”, posiblemente a finales de 2011 o a lo sumo en 2012, para evitar la salida masiva de capitales y salvar a la banca española. La salida del Euro después de unas elecciones generales y con un Gobierno de concentración nacional entre los dos grandes partidos, a ser posible con otros líderes políticos, es la mejor solución, ya que a través de la devaluación se provocaría una rápida recuperación de la competividad además de poder vender en el exterior parte de los “stocks” de 1.500.000 de viviendas, lo que conllevaría una entrada masiva de capitales, generando el empleo que se precisa para poder obtener ingresos fiscales, que solo mediante una reactivación de la economía -y no mediante la subida de impuestos, como se verá en 2011-, pueden obtenerse. La salida del euro hacia el euro “b” o eurín, o la vuelta a la peseta, se producirá, -si se sigue las recetas económicas impuestas desde Bruselas-, de forma controlada con la ayuda europea y del FMI, con una quita de la deuda española en euros para compensar la posterior devaluación y con las duras medidas de ajuste necesarias, -desregulación y flexibilización del mercado de trabajo, del energético, congelación de pensiones y retraso en la edad de jubilación, copago en sanidad y educación, rebaja de gastos consuntivos en todas las administraciones, eliminación de las administraciones duplicadas y de las Diputaciones, así como de la mitad o más de las Corporaciones Locales-, medidas, que el BCE y el FMI van a imponer al Gobierno español a cambio de la ayuda que se va a prestar a las finanzas españolas y seguir comprando la deuda española, para poder preparar una economía con moneda propia que incremente su competividad mediante la devaluación y pueda salir del pozo de la recesión donde se encuentra. El riesgo de argentinización de la economía española. 29 Este durísimo proceso de ajuste económico que solo ha hecho que comenzar en España, y significa un giro de 180 grados de la política que ha llevado al poder al actual Gobierno y que han imitado la práctica totalidad de las Comunidades Autónomas y Corporaciones Locales, de cualquier signo político, lo que las hace corresponsables de la crítica situación en que nos encontramos, no está exenta de riesgos por la dificultad que entraña la aplicación de las mismas, por la impopularidad y descontento social inherentes, existiendo el riesgo que pueda desembocar en un proceso de argentinización de nuestra economía, que significaría, en caso de producirse, la ruina definitiva para nuestro país. ¿Qué hacemos para protegernos del corralito financiero? El gran capital financiero español, al igual que ocurió con el argentino, ya ha tomado medidas mediante inversiones en fondos de Luxemburgo donde han dirigido (no desplazado), las inversiones de sus Sicavs. Pero un pequeño ahorrador está “atrapado”, no puede o no le merece la pena mover sus depósitos a otras áreas del euro. ¿Qué puede hacer entonces? Los argentinos aprendieron, durante el corralito que las inversiones en renta variable de valores que cotizaban en los mercados internacionales les dejaron a salvo de la devaluación y pérdida de valor de su dinero, (un 75% en año y medio), al conservar el valor de las mismas por la puesta en equivalencia de la moneda nacional desdolarizada en las divisas de otros paises donde cotizaban. En España y en Alemania preferentemente, hay valores del sector eléctrico y telecomunicaciones con unas rentabilidades que superan el 7%*, más del doble que la renta fija y más segura, con ingresos, beneficios y dividendos recurrentes que nos ponen a salvo de una hipotética salida del euro, devaluación y, en su caso, corralito financiero en España, ya que aunque esto ocurra, conservarán su valor por mantener la equivalencia por las cotizaciones en las divisas que cotizan en otros mercados. *Telefónica (dividendo de 7,36%), Repsol (5,73%), Deutch Telekom (8,3%), Eon (6,38%), Belgacom (8%). 30 El riesgo de argentinización de la economía española. COYUNTURA ECONÓMICA MUNDIAL: HACIA DOS MONEDAS DENTRO DEL SISTEMA MONETARIO EUROPEO. EL EURO Y EL EURÍN O EURO “B”. Previsiones OCDE primavera 2010 P.I.B. 2009 2010 2011 OCDE - 3,3% 2,7% 2,8% EEUU - 2,4% 3,2% 3,2% Japón - 5,2% 3,0% 2,0% Zona Euro - 4,1% 1,2% 1,8% Alemania - 4,9% 1,9% 2,1% Francia - 2,5% 1,7% 2,1% España - 3,6% - 0,2% 0,9% Reino Unido - 4,9% 1,3% 2,5% Italia - 5,1% 1,1% 1,5% Portugal -2,7% 1,0% 0,8% Holanda - 4,0% 1,2% 2,0% Brasil -0,2% 6,5% 5,0% China 8,7% 11,1% 9,7% India 6,6% 8,3% 8,5% Rusia -7,9% 5,5% 5,1% Zona Euro Países emergentes TIPOS DE INTERÉS 2009 2010 2011 Zona Euro 1,0% 1,0% 1,25% EE.UU. 0,5% 0,5% 1% Coyuntura económica mundial 2010 31 INFLACIÓN 2009 2010 2011 EE.UU. - 0,3% 1,9% 1,1% Japón -1,4% -0,7% -0,3% Zona Euro -0,3% 1,4% 1,0% TASA DE DESEMPLEO 2009 2010 2011 EE.UU. 9,3% 9,7% 8,9% Japón 5,1% 4,9% 4,7% Zona Euro 9,4% 10,1% 10,1% ESPAÑA 2009 2010 2011 Crecimiento PIB - 3,6% -0,2% 0,9% Desempleo 18,0% 19,1% 18,2% Deuda Pública (% sobre PIB) 54,0% 64,0% 74% Déficit Público (% sobre PIB) - 11,2% (1) - 9,4% (1) -7% (p) Inflación - 0,3% 1,4% 0,6% Productividad - 0,3% 1,4% 0,6% Nuestras previsiones. Continuamos con tres velocidades claras en la recuperación: 1ª Países emergentes Asia y Latinoamérica. Crecimiento sostenido. 2ª Economías maduras que han salido de la recesión: Japón, Estados Unidos y Europa con tasas positivas gracias a los estímulos y a la recuperación del comercio internacional, pero con peligro de recaída cuando se retiren los estímulos fiscales, sobre todo en EE.UU. y Reino Unido. 3ª Economías maduras de la zona euro que no han salido de la recesión como España, Grecia y Portugal. Los países que pertenecen a esta categoría dependen más de la demanda interna que de la exportación tendrán, en cosecuencia, una salida en forma de L, caída y estancamiento durante años, no vislumbrándose a corto plazo la salida de la recesión. En la próxima revisión de la OCDE se revisará a la baja el crecimiento de EE.UU. previsto en al menos 1,5 puntos cifrándose en 1,7% de crecimiento para 2011, con riesgo de vuelta a la recesión en W, poco probable, pero posible. 32 Coyuntura económica mundial 2010 SITUACIÓN DE LA ECONOMÍA ESPAÑOLA Y PREVISIONES PARA 2010 ¿Que ocurrirá en España en 2010? Contracción del crédito y fuertes restricciones crediticias a empresas y economías domésticas. Reproducimos y actualizamos nuestras previsiones del Boletin número 6, “De la década perdida japonesa 19902001, a la española 2008-2018” (página 23), enero de 2010. Como se observa se ha cumplido y desarrollado todo tal y como habíamos previsto, excepto la subida del euribor. Actualizamos a continuación nuestras previsiones y añadimos las de 2011. Veamos cuáles son esas previsiones para 2010: La respuesta a la pregunta de porqué los bancos no dan crédito, es muy sencilla: no tienen tesorería suficiente, la tienen ocupada en los inmuebles que han financiado y que mantienen en sus balances a la espera de que suban, en la compra de la deuda pública española por importe de más de 160.000 millones de euros y en los préstamos al sector público local y autonómico que continúa sin enterarse de la crisis. Es decir, la liquidez que tienen se está dirigiendo a atender las necesidades del mantenimiento del gasto público, en parte de carácter consuntivo al que ninguna de las administraciones quiere renunciar. La economía productiva está asfixiada por esta falta de créditos y se equivocan los que piensan que con una banca pública se solucionaría el problema, porque por el contrario, se dedicará con mayor énfasis, si cabe, a financiar al sector público español de una voracidad insaciable con unas administraciones duplicadas y hasta triplicadas, que son insostenibles y que acabarán con la ruína del país. Si el Plan de Ajuste que está dibujando el Ejecutivo para 2011 fracasa, habrá una presión insostenible sobre la deuda española que obligará a intervenir al BCE con el Fondo creado de 750.000 millones de euros. Ello añadirá una presión adicional sobre la banca por las provisiones que se exigirá a la Deuda Pública Española que tiene en sus balances. En las entidades financieras continuarán los problemas de morosidad que pueden afectar a la liquidez y la solvencia en el sector financiero, fundamentalmente en algunas Cajas de Ahorro que necesitarán una inyección de fondos de al menos 90.000 millones de euros para su saneamiento. La cobertura del déficit público de más de 100.000 millones de euros está arruinando al país, y a pesar de los alardes triunfalistas del Gobierno porque lleva un mes colocando la deuda pública española y se han relajado las tensiones, éstas van a volver este otoño sin ninguna duda, porque no se ha explicado adecuadamente cómo se va a reducir este déficit y cómo ha ocurrido en los años anteriores los ingresos previstos para 2011 de un crecimiento del 1,3% del P.I.B. son intencionadamente optimistas con la intención de cuadrar el presupuesto. Cierre de 175.000 empresas, una cifra algo inferior a 2009. Un millón y medio de casas sin vender y unos precios oficiales con un 15% de bajada, pero que irán descendiendo hasta el 40%-50% desde los niveles máximos de precios durante los dos próximos años. No hemos tocado fondo en el mercado inmobiliario todavía y solamente lo haremos cuando se comience a crear empleo. La morosidad de la banca española no se sabe exáctamente cuál es. Los balances de las entidades financieras están llenos de daciones en pago de deuda, compras de inmuebles para pago de deuda de Situación de la economía española y previsiones para 2010 33 inmuebles, de terrenos rústicos o urbanos. La morosidad tocará fondo el próximo año y superará con creces la de crisis de 2003 que fue del 9%. Los stress test efectuados el mes pasado son una falacia, se basan en la extrapolación de los maquillados balances bancarios actuales. Han servido para relajar la tensión sobre la deuda española, pero los mercados lo saben perfectamente, por eso volverá a haber dificultades en la colocación de la Deuda Pública a corto y medio plazo. Solamente, como ocurrió en Japón, a partir de 2001, con un un saneamiento del sector financiero y aflorando la totalidad de la morosidad encubierta, se provocará un cambio de tendencia y el inicio de la recuperación económica. 4,5 millones de parados en 2010 y 5.000.000 en 2011. Cronificación de la tasa de paro. Según las previsiones de los expertos solamente se comenzará a crear empleo neto a partir del segundo semestre de 2012. Aumento generalizado de impuestos directos e indirectos para compensar la caída de ingresos, así como de las tasas y demás tributos. Mantenimiento de un consumo débil y ausencia de inversión privada, por falta de crédito y por la exigencia por parte las entidades financieras, de que continúe el desapalancamiento crediticio a sus clientes por la propia necesidad de desapalancarse. Medidas de contención del gasto público que, por lo que se ha visto, se centrarán en menor medida en la inversión productiva, no en el gasto corriente, lo que alargará la recesión y la salida de la crisis. Imposibilidad del necesario “Pacto de Estado” porque ya es demasiado tarde y las posiciones se han enquistado. Problemas del modelo económico y de un modelo de Estado Autonómico ineficiente y no sostenible, que si no camina hacia el Estado federal de corresponsabilidad fiscal provocará la fragmentación del país. Mantenimiento del Euribor. 34 Situación de la economía española y previsiones para 2010 Caída del PIB entre el 0,3-0,7%. Emisión de Deuda Pública neta por valor importe de 136.000 millones de euros, con dificultades en la colocación. Vuelta a la recesión económica en el tercer trimestre de 2010. Fuerte debilidad del Gobierno Central después de la huelga general del 29 de septiembre de 2010. ¿Y Que ocurrirá en la economía mundial y en España 2011? En el mundo un crecimiento global de más de cuatro puntos. En Estados Unidos la política económica postKeynesiana de Obama, -de estímulos fiscales, inversión en sectores maduros sin futuro como la industria del automóvil de Detroit y su orientación al consumo-, un Obama que acumula mayor desgaste que Bush y al que acaba de abandonar el último de los asesores económicos, parece haber sido un fracaso. EE.UU. tendrá un crecimiento débil que restará 1,5 puntos al estimado en la primavera por la OCDE. Alemania y los países de Centro Europa continuarán con crecimientos sólidos por encima del 2% marcando las diferencias con los países del sur que continuarán estancados, un punto más que las previsiones de la OCDE. Las dos velocidades en Europa no van a continuar indefinidamente. En 2011 se producirá posiblemente el default de Grecia, cuya deuda ha llegado al igual que la española (350% del P.I.B. Deuda Pública + privada) a un punto sin retorno. Los problemas de la Deuda Pública de los Estados europeos solo se puede solucionar por tres caminos posibles: 1.- Alta inflación de hasta dos dígitos y posibilidad de hiperinflación: la inflación mata las deudas. Permanencia de todos los países que actualmente conforman el euro. Probabilidad 30%. La base monetaria se ha multiplicado estos últimos años por las políticas de expansión cuantitativa seguidas por los bancos centrales. Si bien no se ve el resultado puesto que la masa monetaria en ciruculación es el resultado de multiplicar la base monetaria por la velocidad de circulación al haberse secado prácticamente ésta, no se aprecia el aumento de la base monetaria. Pero cuando pasen los efectos de la crisis este aumento de la base monetaria va a provocar de forma indubitada inflación que va a tener que ser controlada por los Bancos Centrales. En el caso europeo, el B.C.E. codirigido desde Alemania, no es probable que permita una alta inflación de hasta dos dígitos o hiperinflación, porque Alemania tuvo una experiencia dramática en 1923 con la hiperinflación que acabó con el nacimiento del fascismo. Por otra parte, puede que Alemania esté tratando de ganar tiempo y ya no le interese el euro porque su mercado son los paises emergentes y su población en un 60% desea salir del euro y volver al marco. Esto es posible, pero tiene el problema de que sería una moneda demasiado fuerte para un país exportador, por ello le interesa más que le “resten” un poco a la divisa común los países del sur, pero no con la “barra libre” de la que han disfrutado. De ahí, que al menos de momento, se camine por un mayor control de las finanzas de los paises que conforman el euro con una pre-aprobación de sus presupuestos por Bruselas y el mantenimiento de todos los paises que conforman el euro. Pero esto solo es momentáneo. No pueden existir economías tan dispares como las del Norte y el Sur de la C.E. con la misma moneda. 2.- Dos monedas en el sistema monetario europeo dependientes del BCE: El Euro y el Eurín o Euro “b”. Probabilidad 50%. Es evidente que en la actualidad países tan poco competitivos como España no pueden competir con otros como Alemania con la misma moneda, necesitan el arma de la devaluación. La vuelta de cada uno de los países mal administrados del sur de Europa a las respectivas monedas no es descartable en absoluto, aunque es más probable que conformen un euro débil que vamos a denominar Eurín o Euro “b”, un 15-20% más barato que el euro, que permita ganar a corto plazo competividad por la mejoría en la paridad, hasta que estos países (Portugal, España, Grecia y en menor medida Italia), hagan las reformas estructurales necesarias: en energía, mercado laboral, educación, marco autonómico en el caso español, que les permita en un plazo no inferior a cinco años poder competir con los aplicados vecinos europeos de Centro Europa y volver al euro fuerte. Concedemos al Eurín un 60% de posibilidades de implantarse, con una inyección o ayuda inicial del Banco Central Europeo y del F.M.I., que puede ser la de los 750.000 millones de euros recién creada. 3.- La vuelta a las respectivas monedas de los países europeos que no cumplan los objetivos de Mastrich en 2013. Probabilidades 20%, quedando un área euro fuerte conformada por Alemania, Francia, Holanda y Luxemburgo. Es una posibilidad a la que concedemos un 20%. Evolución de la paridad Dólar/euro. Para los aún escépticos se aclarará de una forma contundente que los países exportadores y con el déficit público controlado que practican el ahorro y la inversión: Alemania, Francia, Holanda, incluso puede que Irlanda, que atraviesa dificultades por tener un sistema bancario seriamente tocado, consolidarán la salida de la crisis lo que apreciará el euro, salvo el impacto por el posible default de Grecia que ha llegado a un punto sin retorno, y en menor medida por el riesgo país de Portugal y España. El dólar va a experimentar una nueva monetarización por la política de expansión cuantitativa de la Reserva Federal Estadounidense -la FED-, que tiene preparado otro billón de dólares para que no caiga la actividad que depreciará su moneda. Esto, como se demostrará, no va a servir para nada, porque el origen de esta crisis es el excesivo gasto público y los consiguientes déficits públicos de los paises desarrrollados, financiados con altos endeudamientos de los Estados, y esto se soluciona con ahorro e inversión, no con más gasto y consumo, Situación de la economía española y previsiones para 2010 35 como se está viendo en EE.UU. La actividad económica de este segundo semestre en EE.UU se desplomará porque Estados Unidos no afronta sus dos grandes problemas: el déficit público y comercial, sino que practica una política que los aumenta: el primero por su excesiva capacidad de gasto militar y el segundo por tener una economía basada en el consumo, un modelo del siglo XX que ya es historia. El modelo del siglo XXI es el basado en el ahorro, el equilibrio presupuestario y la exportación, no el de los estímulos fiscales artificiales financiados con endeudamiento. Esto no se tolera en una economía global. España: Elecciones anticipadas en otoño de 2011. En España se alcanzará la cifra “oficial” de 5.000.000 de parados, más del doble de la media de los países de la OCDE. La debilidad de un ejecutivo noqueado por la recesión provocará algo necesario en el país como es las elecciones anticipadas inmediatamente después de las municipales y autonómicas, ante el previsible descalabro electoral como no se ha conocido en la historia de la democracia española, con el resultado -esperemos que sea así-, de un gobierno de coalición entre los dos grandes partidos que juntos suman el 90% de los votos, para efectuar las grandes reformas estructurales que el país necesita y acabar de una vez por todas con el habitual chantaje de los partidos minoritarios nacionalistas que están hiperrepresentados y son una lacra para el conjunto del país. España tocará el fondo de la crisis en 2011, pero permanecerá años en ella hasta que se cambie la actual política económica. El crecimiento previsto por el Ejecutivo del 1.3% en los Presupuestos aprobados es una ilusión, y solo servirá para confeccionar por tercer año consecutivo unos presupuestos ficticios. El crecimiento español de 2011 se situará en una horquilla entre el 0,3-0,6 por ciento. Un crecimiento débil con el que se continuará destruyendo empleo. Las medidas que se van a implantar de ajuste en las cuentas públicas de 2011 parece que van en la buena dirección, pero este gobierno carece de legitimidad 36 Situación de la economía española y previsiones para 2010 y credibilidad para implantarlas por sus contínuos errores y su mala gestión de la crisis. Rebajas adicionales de la calidad de la deuda española dos escalones hasta A+ como Italia (que es como cotiza ahora en los mercados), y en algunas entidades financieras por las agencias de calificación internacionales. En 2011, por pura necesidad, se inciará el cambio de un sistema autonómico, fuente inagotable de dádivas, discriminaciones y reclamaciones no siempre justificadas, un sistema obsoleto que solo tiene una salida: el estado federal y la corresponsabilidad fiscal, para que las administraciones autonómicas “respondan” de los impuestos que recaudan. El paro seguirá instalado este año y el que viene en el 20% de la población activa. Bruselas espera que la tasa de desempleo cerrará este año en un 19,7%, y termine 2011 en el 19,8%. La evolución anual del PIB. será en 2010 una contracción del 0,4% este año, menos mala que la contracción del 0,6% augurada hace dos meses y medio. El déficit público sigue disparado (9,8% en 2010 y 8,8% en 2011) y muy lejos del objetivo de colocarlo por debajo del 3% en 2013. La deuda pública se aleja irremediablemente del 36,2% de 2007 para situarse en el 64,9% este año y en el 72,5% el que viene, por encima del 60% del supuesto umbral máximo permitido a los países del euro. La inflación se situará en 2010 y 2011 en el 1,6%. El déficit por cuenta corriente caerá hasta el 4,6% en 2010 y al 4,5% en 2011 por la mejora de las exportaciones. En 2011 habrá una fuerte lucha entre el Estado y las Autonomías por la asunción y reparto del déficit fiscal. La guerra de divisas comenzada en 2010 entre dolar, yuan, yen y euro acabará con una apreciación del yuan y un euro a 1,20$ a finales de 2011. MERCADOS Y BOLSAS DE VALORES En el año que va a acabar nos hemos movido dentro de un rango de variación lateral en la renta variable del +/- 15%. Vamos a continuar con esta tendencia lateral a medio plazo. En este ejercicio debemos recordar que EL DINERO SIGUE SIENDO EL REY Y LA POSICIÓN DE LIQUIDEZ EL OBJETIVO A CUMPLIR. En un contexto generalizado de necesidad de capitales, los tipos de interés van a acabar subiendo en cuanto se consolide la salida de la recesión. Por ello, continuamos desapalancándonos en la medida posible, porque las entidades financieras en cualquier momento cortarán el crédito, si no lo ha hecho ya. Las empresas muy endeudadas desaparecerán a corto plazo, en menos de tres años. 2010 es un un año de consolidación en Bolsa con poco recorrido, pero también un año de oportunidades de “cazar”, en las bajadas, valores con beneficios y dividendos recurrentes con más de un 7% anual. ¿Que hacemos con nuestro dinero? Huiremos de la Deuda Pública, en general, sobre todo de Estados con poca visibilidad de ingresos y muy endeudados. Tampoco nos interesan los Depósitos bancarios a medio y largo, porque los tipos de interés van a subir mucho. Además su rentabilidad es escasa. Fondos de inversión, tampoco (son opacos, juegan con nuestro dinero). La historia demuestra que ganan mucho menos que el mercado en épocas de alza y pierden mucho más en épocas de caídas bursátiles (un poco extraño cuando están dirigidas por profesionales). Los fondos garantizados tampoco son alternativa. Tampoco adquiriremos deuda soberana y acciones de Compañías de Estados Unidos, porque el dólar y la libra continuarán siendo dos monedas débiles y ante la falta de credibilidad en que EE.UU. supere sus déficits estructurales comercial y déficit público. Ello va a provocar de una manera silente que en los próximos años se vaya abandonando el dólar como moneda refugio (ya no lo es), a favor de monedas más estables y seguras: el euro en cuanto se supere el problema de los países del sur de Europa; el franco suizo como moneda del país más seguro y estable, que va a continuar teniendo problemas para evitar una fuerte apreciación; el dólar canadiense; el dólar australiano; y los emergentes: el yuan chino, el real brasileño y la rupia de la India. Por ello apostamos de nuevo por una horquilla del dólar frente al euro, desde los niveles actuales hasta niveles de 1.35-1.45 euros/dólar. Hasta que se aclare el panorama de la economía mundial, el oro será el valor refugio por excelencia y puede continuar apreciándose hasta 1.300-1.500 $/ onza. El resto de las materias primas, ante el escenario que prevemos de inflación o quizás, peor, de estanflación van a ser los auténticos valores refugio. El petróleo continuará apreciándose los próximos años porque es escaso y los nuevos descubrimientos son mucho más caros en cuanto al proceso de extracción que los actuales. Además la importancia de los nuevos 2.500 millones de consumidores de los países emergentes ya empieza a ser una realidad que va a provocar una nueva subida hasta los 80-100-120 dólares en 2010-2011, en función de la evolución de la coyuntura económica mundial. Por tanto, lo recomendable es invertir una parte en el mercado de futuros de manera continua, con un stop loss por debajo de 76$ en el barril Brent. Mercados y bolsas de valores 37 Esta inversión nos puede generar unas importantes plusvalías en los próximos años. Entender las claves macroeconómicas nos ayudará a acertar en nuestras previsiones. ¿Cuáles son? El origen de la crisis financiera y económica es el fuerte endeudamiento de las economías occidentales que en diez años se ha multiplicado por 2,5 en relación al PIB. En cambio, en los países emergentes, el endeudamiento ha permanecido estable en estos años, situándose entorno al 45% del PIB, consecuencia de la ortodoxia a que les ha obligado el FMI y el Banco Mundial para atajar otras crisis anteriores. Una ortodoxia, en cambio, que olvidaron aplicar en las economías occidentales. Es por ello, que tanto Sudamérica, como el Sudeste Asiático e India, han salido antes de la crisis, la han resistido mejor, y han iniciado su recuperación, por ser una crisis cuya génesis es el endeudamiento, la gran liquidez y el excesivo apalancamiento de la inversiones que creó una burbuja especulativa que disparó el precio de los activos en los países ricos y provocó pérdidas bancarias multimillonarias. La ingeniería financiera creada en Wall Street, en muchos casos una estafa, con productos financieros extraños que ahora todo el mundo reconoce que no entendía contribuyó a agravar el problema, pero no es la génesis, sino una de sus consecuencias. Crecimiento sólido en las economías del centro de Europa, débil en Estados Unidos y poco fiable, muy supeditado en este segundo caso a los estímulos fiscales y con un grado importante de incertidumbre cuando se retiren. Por lo tanto, no recomendamos este país por la debilidad de su moneda, consecuencia de los fuertes déficit estructurales: público y comercial. Estados Unidos está dejando caer su moneda de forma controlada para no provocar el pánico entre sus acreedores, y de esta manera disminuir su importante déficit comercial. Preferimos el área fuerte del euro. Alemania, Holanda, Austria y Francia. 38 Mercados y bolsas de valores ¿Cómo distribuiremos nuestro dinero? 60% Renta variable. Nos centramos con las empresas líderes mundiales en su segmento, de los sectores de telecomunicaciones, energía, seguros, petróleo y biotecnología. Vendemos toda nuestra cartera en bancos porque 2010 y 2011 serán muy complicados para las entidades financieras. Centrar y focalizar nuestra inversión en estos líderes de los sectores de telecomunicaciones, energía, petróleo y biotecnología, nos servirá para disminuir el riesgo y la volatilidad de los mercados, porque estas empresas multinacionales al tener unos ingresos recurrentes y diversificados geográficamente son más seguras que los propios Estados donde radican, que, en general, están fuertemente endeudados y con caídas de los ingresos fiscales por la crisis económica. Continuamos con la energía y las telecomunicaciones porque son valores muy defensivos que nos protegerán mejor que cualquier depósito de los avatares de los mercados financieros. Compramos valores defensivos de la zona fuerte del euro, Alemania, Holanda y Francia con alta rentabilidad por dividendo superior al 6-8% Energía (Eon), telecomunicaciones (Deutch Telekom y Belgacom). Alcatel-Lucent en Francia por ser el líder mundial en comunicaciones. En España solamente Telefónica, por su diversificación geográfica y su dividendo, Repsol (por su dividendo y sus descubrimientos que pondrá en valor los próximos años, valorando el riesgo en Argentina de YPF, y Natraceutical, dueña ahora de un 32% de la francesa Naturex, lider mundial en ingredientes naturales para alimentos nutraceúticos. 10% Mercado de futuros del oro. Ello nos protegerá de una eventual caída de los mercados financieros, no descartable, opera como una cobertura de la exposición a la renta variable. 10% Mercados de futuro del petróleo. 20% Liquidez en depósitos a corto plazo. COYUNTURA POLÍTICA: LA URGENTE NECESIDAD DE ELECCIONES ANTICIPADAS EN ESPAÑA Y DEL ABANDONO DE LA CULTURA DE LA BOINA. España se encuentra sumida en una depresión económica muy profunda mucho mayor que la de nuestros vecinos europeos por los motivos expuestos, en éste y anteriores boletines. Pero además de esta depresión tiene una importante falta de cohesión y una crisis de valores -un país donde se ha instalado por los sucesivos gobiernos democráticos “la cultura de la boina”, todo el mundo cree derecho a tener un centro de salud debajo su casa, que existan universidades en pueblos de apenas 50.000 habitantes, a tener unos servicios de primer nivel sin límite y gratuitos, que el Estado cubra todas sus necesidades o contingencias, y, fundamentalmente, un país donde la clase política está muchos enteros por debajo de la sociedad que representa, estando cubiertos los puestos de responsabilidad públicos, incluso al más alto nivel, con personas con poca cualificación y sin experiencia en la empresa privada, con un poder judicial al dictado del ejecutivo de turno desde que la Guerra lo finiquitó, y una crisis institucional de modelo de país. Se precisa con urgencia elecciones anticipadas que posibiliten un gran consenso nacional de todos aquellos partidos que estén interesados en sacar de España de la situación en la que se encuentra que es mucho peor de lo que se dice y cuenta, y que pasa necesariamente, por un acuerdo entre los dos grandes partidos. Los líderes de los partidos mayoritarios que representan al 90% del electorado no parecen representar el cambio de valores que el país necesita para ese necesario gobierno de concentración nacional, en un país hundido y con un desempleo sin paragón en el mundo desarrollado, que es el gran problema que tiene que resolver la clase política, ante una sociedad civil que permanece pasiva y anestesiada que al igual que en Argentina parece haberse instalado en el autismo. Coyuntura política. La urgente necesidad de elecciones anticipadas. 39 AUDIT IBÉRICA Corporate Finance Jorge Perepérez Ventura Socio-Director. Economista. Las opinions emitidas y los pronósticos efectuados en este boletín son estimaciones y valoraciones personales y no suponen una garantía de que necesariamente se vayan a cumplir. © Todos los derechos reservados. Audit Ibérica S.A. www.auditiberica.es