Expediente 8689-Ingresado 10/3/14-hora 16,30 PROYECTO DE LEY INICIATIVA: BLOQUE PARTIDO COMUNISTA. DIPUTADA SONIA LOPEZ. OBJETO: ORDENAMIENTO TERRITORIAL AMBIENTAL: PROCEDIMIENTO PARA ASEGURAR EL CUMPLIMIENTO DEL ART. 61 DE LA CONSTITUCIÓN PROVINCIAL. MODIFICACIÓN DE LA LEY 4298. FUNDAMENTOS: Honorable Cámara: Hoy asistimos a nuevas formas de colonización que continúan obstaculizando el derecho a la libre determinación de nuestro pueblo. Una de ellas es el proceso de extranjerización de tierras en zonas del territorio nacional que son estratégicas desde el punto de vista de los recursos naturales no renovables, la agricultura y zonas de frontera. Los intereses de los inversores foráneos apuntan a determinadas zonas geográficas claves para el aprovechamiento actual o la futura explotación de recursos específicos. Agua, selva, bosques, minerales, madera y riqueza turística, que, con el transcurrir del tiempo, se harán cada vez más vitales para el desarrollo humano y económico. Esta preocupación impulsó y propició a nivel nacional la sanción del proyecto de ley contra la extranjerización de la tierra durante el año pasado, así como había motivado una de las reformas introducidas a la Constitución Provincial durante el 2007, dado el avasallante proceso de enajenación al que nuestro país fue sometido sin freno ninguno. Se calcula que de 170 millones de hectáreas cultivables que tiene el país, 1 20.000.000 se encuentran en manos extranjeras hasta el momento, es decir, casi el 12 por ciento. Si de muestra basta un botón, recordemos rápidamente a Douglas Tompkins, que posee 350.000 hectáreas en Corrientes, Santa Cruz, Neuquén y Tierra del Fuego, y en particular la situación de los esteros del Iberá, con nada menos que el acuífero Guaraní como subsuelo, entre otras adquisiciones, o las tierras que en Córdoba adquirió la Flia. Bush, para extraer agua dulce y exportarla en euros por litro a valores increíbles a Europa, dada su máxima pureza; o a los Benneton que puede disfrutar de unas 970.000 hectáreas en la Patagonia argentina. En suma, la extranjerización de nuestras tierras tiene graves consecuencias sociales y económicas. Entre los riesgos de esta situación podemos mencionar la pérdida del control nacional sobre el territorio y los recursos naturales estratégicos, es decir, pérdida de soberanía; el desplazamiento forzado de pueblos originarios de sus tierras; la expansión de modelos tecnológicos “importados” y en muchos casos, depredatorios de los recursos naturales; la pérdida de la cultura y del arraigo de la población en el medio rural y la dificultad de controlar, mediante legislación, la influencia de los procesos de la economía globalizada sobre estos hechos. La Ley Nacional N° 26.737 vino finalmente a establecer un límite del 20 por ciento de las hectáreas cultivables totales del país, y un total de 1.000 hectáreas por zona, a la posesión que puedan hacer personas físicas o jurídicas foráneas, estén o no afincadas en el país. Asimismo, y atendiendo al gran déficit en la información catastral, el proyecto contempla la realización de un censo para crear un registro único de tierras rurales. (Corrientes aún no respondió). Lejos de representar una legislación xenofóbica, prohibitiva o refractaria a las inversiones extranjeras responsables –como se suele afirmar desde algún sector-, se basa en legislaciones de países como Brasil, Estados Unidos, Canadá, Francia e Italia; y tiene una gran importancia desde el punto de vista económico y social, ya que busca proteger un recurso estratégico como es la tierra, uno de los pilares de la economía argentina. No obstante, este proceso de neo-colonización, al igual que hace cinco siglos atrás, no se sostiene únicamente con compras y cesiones de tierra: también utiliza medios violentos. Hoy asisitimos a una serie de intimaciones y desalojos que 2 vienen a culminar procesos iniciados hace años en nuestra Provincia, en los que ciertos terratenientes extranjeros, en connivencia con autoridades públicas y/o a través de los empleados de sus empresas, han utilizado todo medio –legítimo e ilegítimo- a su alcance para hacerse de más tierras, situación antes no reglada. Como la situación que coyunturalmente nos ocupa, los intentos de desalojo de Colonia Carlos Pellegrini, se han sucedió muchas antes, y no siempre a través de denuncias que se pretenden legales, sino lisa y llanamente a través de la violencia, del despojo por la fuerza, de la matanza de animales, del cercado de terrenos, del incendio de escuelas. La atención pública, la preocupación ciudadana y de los medios de comunicación, los reiterados pedidos de ayuda por parte de los pobladores rurales de los Esteros y localidades aledañas, han puesto el foco en estos hechos ilícitos. Si bien los interesados en acumular tierra en manos extranjeras ya no cuentan con la completa impunidad y favorable desregulación con que contaban hace unos años, de todas maneras han encontrado otros recursos para hacerse con los mismos de manera indirecta. Es así que las prohibiciones de la ley devienen en mera palabra y en falta de acción estatal cuando las mismas son eludidas a través de otros artilugios legales. Si debiésemos adentrarnos en el debate sobre la tenencia de la tierra y el necesario cambio de modelo productivo, poner freno a la extranjerización debería implicar la nacionalización de lo ya extranjerizado, revistiendo igual o más importancia a quién adjudicar esas tierras, sobretodo ¿con cuál modelo productivo hacerlas producir?. Pero este es un debate que excede el objeto del presente Proyecto. Por lo pronto, entendemos que si bien comienzan a existir herramientas jurídicas para detener el ya avanzado proceso de extranjerización, las mismas están quedando limitadas frente a las prácticas reales de los actores socioeconómicos involucrados en la problemática, y particularmente de quienes cuentan con estructuras propias e institucionales a su favor para avasallar los mandatos legales utilizando otros mecanismos aparentemente “legítimos”, como la constitución de testaferros y la interposición de personas. Cabe aquí recordar, quizá, nuestra Carta Fundamental provincia, que en su Capítulo XII “Del ordenamiento territorial ambiental”, Artículo 61, con toda claridad afirma: “Corresponde al Gobierno de la Provincia mantener la integridad del territorio provincial. El Estado Provincial propenderá a establecer incentivos con el fin de mantener la propiedad de los bienes inmuebles ubicados en zonas de seguridad o en 3 áreas protegidas o que constituyan recursos estratégicos, en manos de habitantes argentinos nativos, o del propio Estado Provincial o de los municipios. Los extranjeros sin residencia permanente, las sociedades conformadas por ciudadanos o capitales foráneos y las sociedades sin autorización para funcionar en el país, no pueden adquirir inmuebles en las zonas determinadas en el párrafo precedente, con excepción de los extranjeros que acrediten residencia legal conforme la ley”. El mismo interés informa la Ley Nacional N° 26.737 de Régimen de Protección al Dominio Nacional sobre la Propiedad, Posesión o Tenencia de las Tierras Rurales. Es así que ella, un poco más previsora, anuncia ya en su Artículo 6: “Queda prohibida toda interposición de personas físicas de nacionalidad argentina, o de personas jurídicas constituidas en nuestro país, a los fines de configurar una titularidad nacional figurada para infringir las previsiones de esta ley. Ello se considerará una simulación ilícita y fraudulenta”; y en su Artículo 7: “Todos los actos jurídicos que se celebren en violación a lo establecido en la presente ley serán de nulidad total, absoluta e insanable, sin derecho a reclamo indemnizatorio alguno en beneficio de los autores y partícipes del acto antijurídico. A los efectos de esta disposición se considerarán partícipes quienes hicieran entrega de las tierras u otorgaren instrumentos, públicos o privados, que conformaren el obrar antijurídico, los que responderán en forma personal y solidaria con su patrimonio por las consecuencias dañosas de estos actos. La autoridad de aplicación está facultada a examinar los actos jurídicos conforme su naturaleza real, sin sujetarse al nombre que le impongan las partes otorgantes”. En este mismo sentido es que aspiramos a hacer un aporte con el presente Proyecto de Ley, incorporando una suerte de Reglamentación para nuestro Art. 61 de la Constitución Provincial a través de la implementación de un procedimiento registral especial que contemple las particularidades del proceso de extranjerización de la tierra a los fines de evitar toda posible evasión del mandato legal instituido tanto por esta misma Constitución como por la Ley N° 26737. Cabe destacar que el mismo texto legal que en esta oportunidad presentamos ya había sido propuesto en el año 2012, como Expte. 7721/12 ingresado el 5 de Noviembre de dicho año a las 20:25hs, que luego fue destinado para su estudio a la Comisión de Ecología y Ambiente. La misma no pudo expedirse durante dicho año legislativo ni durante el siguiente al respecto, por lo que al no contar con dictamen 4 favorable ni desfavorable, dicho proyecto cayó bajo la moción de Archivo llevada a cabo por esta Honorable Cámara en fecha de su primera sesión del año 2014, el pasado 5 de Marzo. Sin embargo, y en vista de una serie de conflictos más recientes en relación a la dudosa titularidad de tierras en el área de protección constitucional del Iberá, tal el caso de las tierras en propiedad de Harvard (Exptes. 8526/13 y 8533/13 en trámite en esta misma Honorable Cámara); entendemos que la problemática sigue tan vigente como hace dos años, en ocasión de la primera presentación de este mismo Proyecto de Ley. Por lo tanto, decidimos insistir en su presentación con el objetivo de que eventualmente su tratamiento e implementación permitan la aplicación de un mecanismo efectivo de control y de garantía del cumplimiento del mandato constitucional sobre la protección de nuestro recurso natural estratégico más emblemático. Por todo lo aquí expresado, y por los fundamentos que oportunamente expondré en el recinto es que solicito a los señores Diputados y Diputadas tengan a bien acompañar el siguiente Proyecto de Ley: L E Y Nº .- EL HONORABLE SENADO Y LA HONORABLE CAMARA DE DIPUTADOS DE LA PROVINCIA DE CORRIENTES, SANCIONAN CON FUERZA DE L E 5 Y ARTÍCULO 1º: OBJETO. Sin perjuicio de la plena operatividad del art. 61 de la Constitución de la Provincia de Corrientes, el objeto de la presente ley es: 1. Asegurar el cumplimiento del Art. 61 de la Constitución Provincial. 2. Preservar los bienes y recursos naturales, culturales, humanos y la diversidad biológica en todo el territorio de la Provincia, con el objeto de resguardar la seguridad alimentaria, la identidad y la soberanía nacionales. 2. Garantizar el derecho humano fundamental a un ambiente sano y el desarrollo sustentable. ARTÍCULO 2º: NULIDAD. Es prohibido de nulidad absoluta e insanable en los términos del Art. 7 de la Ley Nacional N° 26737 la cesión y/o transferencia de inmuebles rurales ubicados en zonas de seguridad o en áreas protegidas o que constituyan recursos estratégicos, mediante cualquier título, a personas extranjeras físicas no residentes permanentes, a las sociedades conformadas por personas o capitales foráneos, y a las personas jurídicas no autorizadas para funcionar en el país; Y, asimismo, es prohibido de nulidad absoluta e insanable la operación mencionada de adquisición, mediante cualquier título, la simulación y/o interposición de personas físicas de nacionalidad argentina, de acuerdo al Art. 6 de la misma Ley. La nulidad absoluta operara de pleno derecho y la simulación y/o interposición configurará un hecho ilícito y fraudulento. ARTÍCULO 3°: PRUEBA. Toda cesión, transferencia y/o adquisición de inmuebles rurales en las zonas de frontera, así como en torno a la Reserva Iberá y a otras zonas protegidas y declaradas estratégicas, por parte de persona física o jurídica argentina, deberá realizarse previa demostración de la capacidad patrimonial acorde con la inversión a efectuar y el origen de los fondos. ARTÍCULO 4°: REGISTRO. El Registro de la Propiedad Inmueble deberá: 1. Rechazar toda inscripción que se pretenda, si se configura la prohibición del art. 61 de la Constitución Provincial, en los términos del artículo 2 de la presente, y 6 denunciar su nulidad insalvable ante el peticionante, el titular anterior y las autoridades que correspondan para la investigación del hecho. 2. En caso de inmueble rural ubicado fuera de las zonas prohibidas por la Constitución Provincial, dejar constancia en la inscripción del inmueble rural la condición de que pertenece a una persona física o jurídica extranjera, especificando la nacionalidad y origen de los fondos. 3. Llevar el control permanente del porcentaje de áreas que se van registrando a inmuebles rurales de personas físicas o jurídicas extranjeras. 4. Dar fehaciente comunicación al Consejo Interministerial de Tierras Rurales creado por Ley Nacional N° 26737 de toda inscripción de inmuebles rurales por personas físicas o jurídicas extranjeras y/o de toda cesión, transferencia y/o adquisición de inmuebles rurales en las zonas no prohibidas por la Constitución Provincial. 5. No realizar la inscripción del inmueble rural en las zonas no prohibidas por la Constitución Provincial, cuando se exceda los porcentajes establecidos por la Ley Nacional N° 26737. 6. Suministrar toda información de interés por determinación del Director del Registro Provincial y/o a pedido del Consejo Interministerial de Tierras Rurales o del Registro Nacional de Tierras Rurales. ARTÍCULO 5°: MODIFICACIÓN LEY N° 4298. Agrégase el Artículo 8 bis al Capítulo II de la Ley N° 4298, a ser insertado entre los actuales Artículos 8 y 9 de la misma, con el siguiente texto: “Art. 8 bis: El Registro de la Propiedad Inmueble está obligado a llevar un registro especial de las adquisiciones de inmuebles rurales realizadas por las personas mencionadas en el Artículo 3° de la Ley 26737, supervisando el cumplimiento de lo establecido y verificando la veracidad de la documentación. Asimismo denunciará ante el Consejo Interministerial de Tierras Rurales, lo 7 dispuesto por el art. 4º y la documentación requerida por el Artículo 3° de la Ley N° …”. ARTÍCULO 6°: AUTORIDAD DE APLICACIÓN: A los fines de la aplicación de la presente Ley, se crea la dependencia dentro de la estructura orgánica del Registro de la Propiedad Inmueble entre los actuales Artículos 8 y 9 de la Ley 4298 luego del Art. 8 bis: que será el siguiente: “Art. 8 ter: Crease dentro de la estructura orgánica del Registro de la Propiedad Inmueble, un departamento, con funciones propias, a los fines de la aplicación de la presente ley, cuyas características serán reglamentadas según corresponda” ARTÍCULO 7°: COMUNIQUESE al Poder Ejecutivo.- DADA en la Sala de Sesiones de la Honorable Legislatura de la Provincia de Corrientes, a los __ días del mes de __________ del año ____. 8