Reseña del simposio “La evolución de los antiparasitarios” Ciudad de México, 5 de Mayo de 2016.- El CINVESTAV Unidad Zacatenco fue sede del simposio “La Evolución de los Antiparasitarios” organizado por la Sociedad Mexicana de Parasitología y el CINVESTAV el 22 de Abril del 2016. Este evento se realizó en conmemoración del otorgamiento del Premio Nobel 2015 en Medicina o Fisiología al Irlandés William C. Campbell y al Japonés Satoshi Omura por el descubrimiento de un nuevo fármaco, la Ivermectina para combatir las infecciones parasitarias y a la investigadora China Youyou Tu por el desarrollo de una nueva terapia basada en el uso de la artemisinina contra la malaria. Un homenaje más que merecido para quienes han realizado descubrimientos cruciales para combatir las enfermedades provocadas por parásitos, muchas de las cuales siguen constituyendo uno de los problemas sanitarios más graves en el mundo, principalmente en los países más pobres. Ante un auditorio colmado de estudiantes, profesores e investigadores de diferentes instituciones, la Dra. Guadalupe Ortega Pierres del CINVESTAV Zacatenco, organizadora y anfitriona del evento, presentó una semblanza de los galardonados, resaltando sus aportes científicos y su calidad humana. El Dr. Fidel de la Cruz Hernández-Hernández del CINVESTAV Zacatenco hizo la presentación sobre el tratamiento del paludismo y el descubrimiento de la artemisinina. La malaria es causada por especies del género Plasmodium y es la enfermedad parasitaria de mayor prevalencia en el mundo, siendo P. falciparum la más peligrosa (216 millones de casos y 655,000 muertes, principalmente niños menores de 10 años en Africa) y P. vivax presente en Asia y América. En varias ocasiones se ha concedido el premio Nobel al estudio de la malaria, en 1902 se otorgó a Ronald Ross por la descripción del ciclo, en 1907 a Alphonse Laveran por la descripción del parásito y en 1948 a Paul Herman Müller por el estudio del DDT y su uso para eliminar al mosquito. Los medicamentos son fundamentales en la lucha contra la malaria y entre ellos la cloroquina (CQ), un derivado de la quinina, fue durante muchos años efectiva, aunque posteriormente aparecieron parásitos resistentes que durante la guerra de Vietnam fueron un gran problema que resolver. Los vietnamitas, carentes de un sistema de investigación, solicitaron ayuda a China y el presidente Mao y junto con el premier Zhou iniciaron el proyecto 523 (Mayo 23, fecha que se inició el proyecto). En este contexto, el grupo de trabajo de la profesora Youyou Tu, evaluó el efecto antiparasitario de 200 recetas de medicina tradicional china utilizando al ratón como modelo experimental; encontrando que preparados del “ajenjo dulce” (Artemisia annua; Qinghao) son efectivos. La extracción en frío es clave en la obtención del compuesto activo ya que la molécula de artemisinina tiene un grupo peróxido sensible a temperatura. Por este descubrimiento a la doctora Youyou Tu se le otorgó este alto reconocimiento. Actualmente, la artemisinina es un medicamento excelente para el tratamiento del paludismo; sin embargo en diversas partes del mundo, principalmente Asia, ya hay cepas de P. falciparum resistentes a artemisinina y para combatirlas se usan combinaciones de artemisinina con otros medicamentos. Dada la rápida adaptación del parásito, se prevé que para la “carrera armamentista”, entre el agente infeccioso y la humanidad, será necesario descubrir y desarrollar nuevos medicamentos. El Dr. Raúl Romero Cabello de la UNAM expuso los diversos usos de la Ivermectina, compuesto que fue desarrollado y modificado a partir de la avermectina, producida por la bacteria Streptomyces avermitilis. La bacteria fue inicialmente descubierta y estudiada por el Dr.Satoshi Omura del Instituto Kitasato en Japón, analizando su efecto antibiótico/antiparasitario. Posteriormente, el Dr. William C. Campbell, trabajando para la compañía farmacétuica Merck en su sede de Estados Unidos de América realizó modificaciones del compuesto activo antiparasitario para su potencial uso con fines terapéuticos. La Ivermectina tiene propiedades endo y ectoparasiticidas sobre nematodos parásitos del tubo digestivo, las vías respiratorias, tejido subcutáneo así como de diversos tipos de parásitos que viven sobre la piel como piojos, ácaros, garrapatas y microscópicos (productores de sarna) y moscas en fase adulta y larvaria. El espectro antiparasitario de la Ivermectina incluye a los nematodos pulmonares, varios tipos de piojos -particularmente los hematófagos- así como las larvas de moscas, como el gusano barrenador productor de miasis de las heridas, subcutánea y nasal que son causa de problemas crónicos y eventualmente de mortalidad. En los equinos el espectro de la Ivermectina cubre un importante grupo de parásitos intestinales como los conocidos como grandes estrongilos (Strongylus vulgaris, Strongylus equinus y Strongylus edentatus) así como el grupo de los pequeños estrongilinos (doce géneros y alrededor de cincuenta especies de estos) también están incluidos los ascáridos, oxiúridos, así como los espirúridos. Debido a que se determinó un excelente potencial para la eliminación de las formas adultas y larvarias de Onchocerca cervicalis, el Dr. William Campbell, líder del equipo de Merck sugirió el empleo de la Ivermectina para tratar la ceguera de los ríos causada en humanos por Onchocerca volvulus. El relativo éxito de un programa para la erradicación de esta parasitosis se debió a que los laboratorios Merck comercializaron el Mectizan, la Ivermectina para uso en humanos y lo donaron a las autoridades sanitarias de las zonas endémicas de oncocercosis. Esto permitió abatir dramáticamente los casos de esta parasitosis y en Septiembre del 2015 en México se declaró la erradicación de esta parasitosis, después de que se hiciera en Colombia y Ecuador. Así, se concluyó que la Ivermectina es uno de los antiparasitarios más empleados en el mundo y que su aporte a la salud de los animales y el humano ha sido de gran importancia. La presentación del M. en C. Pablo Martínez Labat de la UNAM partió de la premisa de la necesidad de producir alimentos, de origen vegetal o animal, para cubrir las necesidades de la población humana y los riesgos sanitarios y medio ambientales que conlleva su producción. Enfatizó que las granjas animales inminentemente requieren el empleo de una amplia gama de medicamentos como antibióticos, antiparasitarios y productos hormonales para mejorar la producción animal. Sin embargo, estos compuestos tienen repercusiones a nivel ambiental muy severos. Después de ser metabolizados por los animales, los principios activos son excretados en las heces y mantienen una alta actividad citocida que afecta a diversos organismos en el suelo. Dentro de los antiparasitarios, el uso de las lactonas macrocíclicas, particularmente la Ivermectina, ha llevado en muchos casos al desarrollo de resistencia en la micro fauna y en particular a contaminar el suelo. La Ivermectina afecta el crecimiento y desarrollo de los invertebrados asociados a la degradación del estiércol, lo cual impide que las heces de los animales se degraden y se reciclen en el medio ambiente, afectando el desarrollo de las plantas y su disponibilidad. Estos efectos nocivos llevan a considerar la búsqueda de nuevas opciones en las que se valore la inocuidad de los metabolitos excretados por los animales para reducir su impacto en los diversos ecosistemas. Así, se propone llevar a cabo la identificación de plantas o extractos de éstas como antiparasitarios, sistemas de control biológico usando diferentes organismos o el empleo de productos químicos con bajo impacto ambiental. La Dra. Martha Ponce Macotela del Instituto Nacional de Pediatría en su presentación enfatizó la necesidad de la búsqueda de nuevos antiparasitarios con base en la etnobotánica ya que los antiparasitarios que actualmente se utilizan se descubrieron en las primeras décadas del siglo pasado y la mayoría produce efectos secundarios indeseables y su uso indiscriminado está seleccionando parásitos resistentes, lo cual es un problema a nivel mundial. Por tales motivos, es necesario dirigir la mirada a la etnobotánica para la identificación de plantas y obtención de extractos y compuestos con actividad antiparasitaria. Por ejemplo, los extractos de Justicia spicigera, Psidium guajava y Lippia spp tuvieron mejor efecto anti-giardiásico que el tinidazol y el extracto de Bromelia pinguin es activo contra nematodos. Actualmente, muchos grupos de investigación a nivel mundial buscan antiparasitarios en las plantas; este enfoque de investigación se ve reflejado en los miles de artículos publicados que demuestran que principios activos obtenidos de plantas tienen efectos contra protozoarios, nematodos y trematodos. El Dr. Raúl Argüello García del CINVESTAV, presentó las evidencias experimentales que documentan el efecto antiparasitario de extractos totales de ajo y sus derivados tipo tioalil sobre trofozoítos de G. duodenalis. El Dr. Argüello identificó a la alicina como el compuesto mayoritario responsable del efecto citocida del ajo. Se observó que este compuesto tiene eficacia terapéutica en giardiasis experimental en el modelo de jerbos, así como un mecanismo de acción citolítico asociado a un proceso de muerte celular tipo necrótico, el cual es distinto del tipo apoptótico que se ha observado con los fármacos empleados comúnmente en el tratamiento de la giardiasis. De esta manera se abren nuevas alternativas de tratamiento de esta enfermedad altamente prevalente en niños. Por otro lado, el Dr. Rafael Castillo Bocanegra de la Facultad de Química de la UNAM expuso un enfoque alternativo para la identificación de compuestos antiparasitarios utilizando sus conocimientos en síntesis química. El Dr. Castillo expuso aspectos sobre el diseño de nuevos derivados del bencimidazol como inhibidores de la arginasa de Leishmania mexicana. Partiendo de un análisis proteómico de Giardia intestinales tratada con un derivado bencimidazólico, se observó una disminución importante en la expresión de la enzima arginina deiminasa y de manera relevante utiliza a la L-arginina para generar ATP para su sobrevida. Considerando que la arginasa en Leishmania spp emplea la L-arginina para la síntesis de poliaminas vitales para la supervivencia del parásito y que el huésped utiliza este amino ácido para generar óxido nítrico como mecanismo de defensa contra el parásito, se diseñaron inhibidores de la arginasa de Leishmania. Para ello se determinó la estructura tridimensional de la enzima utilizando estudios computacionales de homología y docking. De los 17 compuestos que se sintetizaron tres de ellos resultaron con CI50 en el intervalo nanomolar, baja toxicidad y alta selectividad contra el parásito. Así, estos compuestos ofrecen alternativas novedosas en el tratamiento de estas infecciones parasitarias. Para concluir el evento, la Dra. Guadalupe Ortega agradeció a los ponentes por su participación y a la mesa directiva de la Sociedad Mexicana de Parasitología, presidida por el Dr. Fernando Anaya Velázquez de la Universidad de Guanajuato, en particular resaltó el apoyo de la Dra. Emma Saavedra Lira, del Dr. Juan Pablo Martínez Labat y de la Dra. Magdalena Aguirre García para la organización del simposio. A los interesados en conocer los eventos y actividades organizadas por la Sociedad Mexicana de Parasitología, pueden consultar el siguiente sitio de internet: http://smp.cinvestav.mx/ Participantes en elaboración de la reseña: Dr. Fidel de la Cruz Hernández, M. en C. Juan Pablo Martínez, Dra. Martha Ponce, Dr. Raúl Argüello, Dr. Rafael Castillo, Dr. Felipe Padilla, Dra. Emma Saavedra, Dra. Ma. Guadalupe Ortega Pierres.