En dos ataques en una semana a una misma explotación de ganado vacuno de El Barraco, Los buitres matan a dos vacas y a un ternero, y los agentes ambientales niegan copia del informe al ganadero. La hipocresía de la Consejería de Medio Ambiente llega hasta tal punto que sigue negando la evidencia: los buitres, ante la escasez de animales muertos, ya que han de ser incinerados desde que apareció el problema de la “vacas locas”, se ven obligados a matar, y lo hacen aprovechando la debilidad del recién nacido o de la de la propia madre. La hipocresía de la actuación de los responsables de dicha Consejería también llega hasta el extremo de negar a los ganaderos damnificados una copia del informe que emiten en la visita al lugar del siniestro a raíz de la denuncia de los ataques de los buitres. Sin embargo, dichos agentes sí entregan copia del informe a los ganaderos en el mismo momento de la visita cuando se trata de un ataque de lobos. ¿Será que los responsables de dicha Consejería o del Servicio Territorial de Medio Ambiente no se fían de que sus agentes respeten la directriz de que los buitres no matan? Sea como fuere, UCCL pedirá explicaciones y exigirá que se entregue copia del acta o informe de los celadores o agentes en el mismo momento en que aquél se realiza. Así le ha tocado sufrir, tanto con los buitres del campo como con la Consejería, al ganadero de vacuno extensivo de El Barraco, Jesús Díaz Maqueda, cuya explotación ha sufrido dos ataques en una semana. En ambos casos los buitres han estado a la espera de que llegara el momento del parto a dos hembras de la citada ganadería. El pasado jueves, 13 de noviembre, le llegó el momento a una vaca primeriza de raza Charolesa, en el paraje de “Matalasfuentes”. En realidad lo que le llegó fue el momento de la muerte, puesto que los buitres, durante el parto, mataron a la madre y por ende a la cría, que llegó a salir completamente del vientre de la madre. Ayer mismo, justo una semana después del anterior ataque, los buitres han matado, también en el momento del parto a una impresionante vaca de raza cruzada Charolesa con Flewick, de siete años de edad. Hacia las 10 h de la mañana de ayer, Jesús Díaz realizó la rutinaria visita de atención a su ganadería, en este caso en el paraje del “Cerro de Navalpollo”. Observó que la vaca podría parir en el día, por lo que volvió al mediodía. Pero ya se encontró con la vaca muerta, si bien había dejado un rastro de sangre de más de cien metros desde el lugar donde parió hasta donde murió, en la agonizante muerte a picotazos en sus partes blandas posteriores y en la cara. Sin embargo, la cría, refugiándose debajo de un zarzal había conseguido esquivar a la muerte a picotazos, si bien tenía comido parte del ombligo. Los buitres le han “volado” más de 4.000 euros al titular de la exportación ganadera. Pero, si son los buitres de la Consejería, ¿por qué no pagan los daños que causan?, ¿por qué le niegan a Jesús Díaz una copia del acta que han levantado los agentes ambientales en el lugar de los hechos? Su hipocresía es mayúscula, pues presumen de su buena gestión ambiental por las cada vez más numerosas poblaciones de lobos y buitres, y sin embargo niegan los daños a la hora de indemnizar a los ganaderos. Y lo más triste aún: niegan la referida copia del informe de daños. (Se adjuntan varias fotos de los hechos) Personas de contacto: Jesús Díaz Maqueda (ganadero afectado). Tel : 656 97 77 40 Jesús Muñoz Martín. Presidente de UCCL-Jóvenes Agricultores. Tel : 636985657 Ávila, viernes, 21 de noviembre de 2014 UCCL-JÓVENES AGRICULTORES DE ÁV ILA. Organización integrada en Unión de Campesinos de Castilla y León (UCCL) Duque de Alba 4, 2 Planta – Telf. 920 22 32 57 – Fax 920 25 79 91 – 05001 Ávila. E – mail: mauri@uniondecampesinos.com