MODALIDAD DE INTERVENCIÓN ante situaciones de v i o l e n c i a CARTILLA INSTRUCTIVO hacia la mujer Secretaría de la Mujer, Niñez, Adolescencia y Familia - Gobierno de la Provincia de Córdoba CARTILLA - INSTRUCTIVO Modalidad de intervención ante situaciones de violencia hacia la mujer Material elaborado por la Dirección de Políticas de Prevención de Violencia Familiar en base a materiales del Observatorio de la Violencia de Género de Bizkaia. Ilustraciones: Carlos Julio Sánchez Diseño y diagramación: María Noel Tabera Secretaría de la Mujer, Niñez, Adolescencia y Familia Gobierno de la Provincia de Córdoba Septiembre de 2008. Material disponible en la página web: www.cba.gov.ar "Modalidad de intervención ante situaciones de violencia hacia la mujer " Sobre este material E n su tarea cotidiana, el personal de contacto y los profesionales que se desempeñan en instituciones y organizaciones se encuentran con innumerables situaciones de violencia familiar, con personas que están atravesando un grave problema y que tienen dificultades para enfrentarlo o darle término. Por ello, resulta de vital importancia reconocer qué acciones concretas se pueden llevar a cabo y qué recorrido se le puede proponer a estas personas, de manera que puedan salir de la situación con una actitud protagónica. El objetivo principal de esta cartilla, orientada principalmente a efectores y personal de instituciones que tienen contacto con personas que atraviesan situaciones de violencia familiar, es proponer pautas de actuación para la detección temprana de dichas situaciones, la evaluación de riesgos y la actuación ante casos detectados. Punto de partida: el ciclo de la violencia no de los principales factores condicionantes de la violencia familiar, y en parU ticular contra la mujer, es la relación desigual entre hombres y mujeres y la existencia de una "cultura de la violencia" como medio para resolver conflictos. Antes de avanzar, y dado que ésta no es la concepción más generalizada en nuestra sociedad, es importante desandar ciertos mitos instalados sobre el origen de la violencia en la familia. Por ejemplo, aunque es común que se considere el consumo de alcohol y otras drogas como la causa de las conductas violentas, hay hombres que abusan del alcohol Secretaría de la Mujer, Niñez, Adolescencia y Familia 1 Cartilla - Instructivo sin que por ello manifiesten un comportamiento violento y muchas agresiones contra las mujeres se ejercen en ausencia de alcohol. Se dice también que ciertas características personales de las mujeres que padecen violencia de género podrían ser la causa del maltrato, algunas corrientes incluso han recurrido al masoquismo o patologías como la histeria y el trastorno de personalidad dependiente, para explicar por qué algunas mujeres permanecen o regresan a una relación de maltrato. Frente a explicaciones como éstas existe suficiente documentación que demuestra que no existen características psíquicas diferentes antes del inicio del maltrato entre las mujeres y los niños que lo sufren y las que no, sino que los trastornos y problemas psicológicos son una consecuencia del maltrato y no su causa. La violencia familiar es estructural, no se debe a rasgos singulares y patológicos de individuos particulares, sino que se asienta en una forma cultural de definir las identidades y las relaciones entre los hombres y las mujeres, entre los miembros de la familia. Dentro de estos rasgos estructurales, las diferencias de género y edad son facilitadores de violencia contra las mujeres y los niños. La violencia en el contexto familiar es instrumental. El poder de quien ejerce violencia y la subordinación de las personas maltratadas, que es un rasgo básico del patriarcado, requiere de algún mecanismo de sometimiento. En este sentido, la violencia es el modo de afianzar ese dominio. Cuando se habla de violencia se tiene que pensar en términos de proceso. En el caso de violencia familiar, y de pareja en particular, lo más frecuente es el comienzo del maltrato con conductas de abuso psicológico. Suelen ser conductas restrictivas y controladoras que van minimizando la capacidad de decisión y autonomía de la mujer, produciendo dependencia, aislamiento y temor, como por ejemplo el control sobre la ropa, las amistades o las actividades. El aumento progresivo de la violencia puede extenderse durante un largo período de tiempo, y suele ser difícil para la persona que atraviesa estas situaciones darse cuenta del proceso en el que está inmersa. 2 Dirección de Políticas de Prevención de Violencia Familiar "Modalidad de intervención ante situaciones de violencia hacia la mujer " Este proceso es cíclico, y es posible identificar en él tres fases: Acumulación de tensión: caracterizada por una escalada gradual de la tensión, donde la hostilidad del hombre va en aumento sin motivo comprensible y aparente para la mujer. Se intensifica la violencia verbal y pueden aparecer los primeros indicios de violencia física. Se presentan como episodios aislados que la mujer cree poder controlar y que desaparecerán. La tensión aumenta y se acumula. Explosión o agresión: estalla la violencia y se producen las agresiones físicas, psicológicas y sexuales. Es en esta fase donde la mujer suele denunciar o pedir ayuda. Luna de miel: el agresor manifiesta que se arrepiente y pide perdón a la mujer. Utiliza estrategias de manipulación afectiva (regalos, caricias, disculpas, promesas) para evitar que la relación se rompa. La mujer a menudo piensa que todo cambiará. En la medida que los comportamientos violentos se van afianzando y ganando terreno, la fase de reconciliación tiende a desaparecer y los episodios violentos se aproximan en el tiempo. Es de vital importancia considerar que a lo largo del proceso de la violencia, la mujer sufre una pérdida progresiva de autoestima y pierde también las esperanzas de cambio de la situación, aumentando la sumisión y el miedo hacia el agresor. Para el hombre maltratador será la ratificación de que su estrategia funciona. Todo esto hace difícil que la mujer rompa la relación. Por eso, cuando una mujer pide ayuda, debe recibir en todas las ocasiones apoyos concretos para cambiar su situación, respetando y no culpabilizándola por sus decisiones. Es importante que comprenda que la violencia continuará e irá en aumento, y que no podrá corregir la conducta de su agresor, para que sea consciente del peligro que corre. Secretaría de la Mujer, Niñez, Adolescencia y Familia 3 Cartilla - Instructivo El papel de los efectores y el personal de las instituciones sociales. C ada uno como efector puede desempeñar un papel crucial para ayudar a las mujeres que sufren violencia, ya que en su mayoría entran en contacto con variados referentes institucionales en algún momento de su vida (servicios de salud, ONG's, policía, servicios sociales, escuelas, ámbitos laborales, etc.). Las características con las cuales se desarrolla y se presenta la violencia familiar requiere de la implicación activa de todos, conscientes de que el abordaje y la resolución de las consecuencias deben comenzar con el descubrimiento del problema, y considerando que las personas que atraviesan este problema no suelen manifestar ni hablar de su situación espontáneamente. A menudo sienten miedo, vergüenza, minimizan la gravedad y peligrosidad de la situación, se resisten a reconocerlo y pueden llegar a autoculparse. En muchas ocasiones, sino en la mayoría, se requiere de intervenciones interdisciplinarias e interinstitucionales con profesionales que no siempre se encuentran en los espacios habituales de trabajo. Esto obliga a actuar de manera coordinada entre distintas instituciones para poder dar una respuesta integral. Además, cuando no existen lesiones físicas es difícil identificar situaciones de maltrato, por lo cual es necesario ahondar mediante una relación contenedora y comprensiva con la posible víctima en aspectos psicosociales y de género referidos a la forma y el estilo de vida, problemas y situación familiar. Hay que tener claro que el primer paso para la comprensión y visualización del problema, es que se rompa el silencio y que detectar la situación de violencia contribuye a que ello ocurra. Por el contrario, cuando una situación de maltrato no es reconocida, especialmente por figuras dotadas de "autoridad" como lo son los referentes institucionales de la comunidad, se produce una nueva victimización para la mujer que podría contribuir a hacer del maltrato algo crónico. 4 Dirección de Políticas de Prevención de Violencia Familiar "Modalidad de intervención ante situaciones de violencia hacia la mujer " Por todo esto es impor tante: Preguntar con regularidad, cuando sea factible, a todas las mujeres sobre la existencia de violencia doméstica, como tarea habitual dentro de las actividades preventivas. Estar alerta a posibles indicadores de maltrato y hacer seguimiento si es viable. Ayudar a entender su malestar, y eventualmente sus problemas de salud, como una consecuencia de la violencia y el miedo. Informar sobre instituciones especializadas disponibles y facilitar su acceso a las mismas. Mantener la privacidad y confidencialidad de la información obtenida. Estimular y apoyar a las mujeres a lo largo de todo el proceso, respetando su propia evolución. Evitar actitudes ni solidarias o culpabilizadoras ya que pueden reforzar el aislamiento, minar la confianza en ellas mismas y restar la probabilidad de que busquen ayuda. Establecer una coordinación con otros y otras profesionales e instituciones. Registrar los casos en algún tipo de ficha institucional. Frecuentemente no se interviene por miedo a no saber qué hacer, o a hacer más daño. Pero a veces, el diálogo que se pueda establecer con una mujer que sufre de violencia, es el único espacio que ella tiene para hablar de lo que le pasa. Por eso, el sólo hecho de escuchar con respeto es un acto positivo y una gran ayuda. Al hablar se va descubriendo en qué se la puede ayudar y cómo. Secretaría de la Mujer, Niñez, Adolescencia y Familia 5 Cartilla - Instructivo Limitaciones para identificar la violencia familiar Para cumplir un rol en la vida de las personas que sufren situaciones de violencia familiar, y para fortalecer las acciones de prevención, es importante considerar tres elementos claves: las propias valoraciones y creencias respecto al tema, las características del ámbito laboral que actúan de contexto del encuentro con la víctima o victimario, y la situación de contacto con ella. Como efectores institucionales, es imprescindible trabajar sobre las propias valoraciones, para evitar actuar de un modo inadecuado perjudicando a la persona asistida y su entorno. Para eso hay que empezar por reconocer que: Estamos inmersos en el mismo proceso de socialización que el resto de la sociedad, un proceso que es finalmente patriarcal. Desconocemos nuestras experiencias personales de violencia, convenciéndonos de que le sucede a otros solamente. También nosotros tenemos vergüenza de nuestras experiencias. Y por supuesto, hacer conscientes algunos prejuicios que se tienen internalizados y que impactan en los modos en los que se establecen relaciones con el tema o las personas víctimas de violencia, como por ejemplo: Si creemos que la violencia no es tan frecuente y tendemos a negar o minimizar los casos que se presentan. Si intentamos racionalizar y/o justificar la conducta del agresor y culpamos a la mujer maltratada de su situación de maltrato (victimizándola nuevamente). Si desconocemos las estrategias para el manejo de estas situaciones, y en vez de reconocerlo y pedir asesoramiento, nos paralizamos por miedo de ofenderla, o a empeorar su situación, por su seguridad o por la propia integridad. 6 Dirección de Políticas de Prevención de Violencia Familiar "Modalidad de intervención ante situaciones de violencia hacia la mujer " Si pensamos que tenemos que hacer todo por ella y asumimos una actitud paternalista que le impide ser protagonista y sostener la superación de su problema. También es necesario reconocer las limitaciones que pueden existir en el propio ámbito laboral respecto al tema, para promover su superación, entre ellas: Falta de conocimiento de la problemática y recursos existentes. Falta de coordinación entre los distintos actores institucionales e interinstitucionales. Ausencia de trabajo en equipo. Deficiente formación en violencia. Finalmente, otra cuestión a considerar en el momento de identificación del problema, es la situación de intercambio con personas que viven una situación de violencia. En general, el diálogo no será productivo si se da en un contexto con alguna de las siguientes características: Falta de privacidad e intimidad. Que la mujer venga acompañada de su pareja. Escasa formación del profesional interviniente en habilidades de comunicación. Secretaría de la Mujer, Niñez, Adolescencia y Familia 7 Cartilla - Instructivo ¿Qué hacer frente a un caso de violencia familiar? Modalidades de reconocimiento, evaluación e intervención T odos podemos realizar acciones desde nuestro lugar, como efector institucional se actúa en el reconocimiento inmediato y primario, pero también en la atención integral a las mujeres en situación de violencia intrafamiliar. Una vez que se entra en contacto directo y continuado con la mujer que vive una situación de violencia, contar con formación y conocimientos de la problemática, con información de las acciones que podrían llevarse a cabo y los recursos institucionales y especializados existentes, puede facilitar el desarrollo de acciones que le permitan salir del problema. Por esto, es recomendable tener una actitud de alerta desde el primer contacto con cada mujer, realizando preguntas exploratorias de abordaje psicosocial que nos permitan advertir conductas o indicadores de sospecha. Las acciones de intervención son posteriores al reconocimiento de indicadores de sospecha, su confirmación y la evaluación de las características de cada situación particular. De esta manera, en la atención a las mujeres que se encuentran en una situación de maltrato familiar, se puede especificar una serie de pasos a seguir en nuestra acción, entre los cuales hay procesos de reconocimiento y evaluación, por un lado, y acciones de intervención por otro. Procesos de reconocimiento ¿Cómo identificar la violencia intrafamiliar? Aunque no existe una causa única del problema, y la mirada deba encaminarse al reconocimiento de distintos factores que confluyen, 8 Dirección de Políticas de Prevención de Violencia Familiar "Modalidad de intervención ante situaciones de violencia hacia la mujer " enumeraremos determinadas características que aparecen reiteradamente en relación a esta problemática. En este sentido, es frecuente encontrar en la mujer que sufre una situación de violencia: Miedos (a la respuesta de su pareja, a no ser entendida y ser culpabilizada, a que no se respete la confidencialidad, a no ser capaz de iniciar una nueva vida, a las dificultades económicas, judiciales, sociales, a lo que ocurra con sus hijos...). Baja autoestima, culpabilización. Dependencia económica (Estar fuera del mercado laboral). Vergüenza y humillación. Deseo de proteger a la pareja. Resistencia a reconocer lo que le está pasando. Desconfianza en el sistema público. Minimización de lo que le ocurre (a veces no son conscientes de su situación y les cuesta identificar el peligro y su deterioro). Aislamiento y falta de apoyo social y familiar. Valores y creencias culturales (si la sociedad lo tolera, ellas también). Acostumbramiento a ocultarlo. Inmovilización, desconcierto y alienación por el trauma físico y psíquico. ¿Cómo reconocer indicadores? Existen una serie de señales y/o advertencias que pueden hacer pensar que una mujer sufre violencia intrafamiliar. Es importante conocerlas y mantener una actitud alerta en los encuentros, a fin de identificar los casos. En los antecedentes y características de la mujer 1. Antecedentes de haber sufrido o presenciado malos tratos en la infancia 2. Antecedentes personales y de hábitos de vida a. Lesiones frecuentes b. Abuso de alcohol u otras drogas c. Abuso de medicamentos, sobre todo psicofármacos 3. Síntomas psicológicos frecuentes a. Insomnio Secretaría de la Mujer, Niñez, Adolescencia y Familia 9 Cartilla - Instructivo 4. 5. 6. 7. b. Depresión c. Ansiedad d. Trastorno de estrés postraumático e. Intentos de suicidio f. Baja autoestima g. Agotamiento psíquico h. Irritabilidad i. Trastornos de la conducta alimentaria j. Labilidad emocional Síntomas físicos frecuentes a. Cefalea b. Dolor crónico en general c. Molestias gastrointestinales (diarrea, estreñimiento, dispepsia, vómitos, dolor abdominal) d. Dificultades respiratorias Utilización de servicios organizacionales y/o institucionales a. Existencia de periodos de mucha frecuencia y otros de abandono (largas ausencias) b. Incumplimiento de citas o tratamientos c. Uso repetitivo de servicios de urgencias d. Frecuentes hospitalizaciones e. Acudir con la pareja cuando antes no lo hacía Situaciones de cambio vital a. Embarazo y puerperio b. Noviazgo c. Separación d. Jubilación propia o de la pareja Situaciones que aumentan la dependencia a. Aislamiento tanto familiar como social b. Enfermedad discapacitante c. Dependencia física o económica d. Dificultades laborales y desempleo e. Dificultades de formación y de ascenso en el trabajo 10 Dirección de Políticas de Prevención de Violencia Familiar "Modalidad de intervención ante situaciones de violencia hacia la mujer " f. Ausencia de habilidades sociales g. Situaciones de exclusión social (reclusas, prostitutas, indigentes) h. Información de familiares, amistades, o de otros y otras profesionales e instituciones de que la mujer está siendo víctima de malos tratos. Durante la consulta o el encuentro 1. Actitud de la mujer a. Temerosa, evasiva, incómoda, nervios (se altera fácilmente) b. Triste, desmotivada, desilusionada, sin esperanza c. Autoestima baja d. Sentimientos de culpa e. Estado de ansiedad o angustia, irritabilidad f. Sentimientos de vergüenza, retraimiento, comunicación difícil, evita mirar a la cara g. Vestimenta que puede indicar la intención de ocultar lesiones h. Falta de cuidado personal i. Justifica sus lesiones o quita importancia a las mismas j. Si está presente su pareja: se muestra temerosa en las respuestas y busca constantemente su aprobación 2. Actitud de la pareja si acompaña a la mujer a. Solicita estar presente en toda la visita b. Muy controlador, siempre contesta él o, por el contrario, despreocupado, despectivo o intentando banalizar los hechos c. Excesivamente preocupado o solícito con ella d. A veces colérico u hostil con ella o con el profesional 3. Actitud de la pareja cuando no acompaña a la mujer a. Busca manipular a los profesionales b. Minimiza los comentarios de la mujer ¿Cómo actuar en la situación de detección? Cuando se tienen muchos indicadores de que una mujer puede ser víctima de maltrato, deberá confirmar o descartar la situación de violencia. Para ello se sugiere realizar una entrevista o encuentro específicamente para hablar del tema. Secretaría de la Mujer, Niñez, Adolescencia y Familia 11 Cartilla - Instructivo A continuación se presentan algunas recomendaciones para crear un clima de confianza que facilite un diálogo sincero: 1. Ver a la mujer sola, asegurando la confidencialidad. 2. Observar las actitudes y estado emocional (a través del lenguaje verbal y no verbal). 3. Facilitar la expresión de sentimientos. 4. Mantener una actitud empática, que facilite la comunicación, con una escucha activa. 5. Seguir una secuencia lógica de preguntas más generales e indirectas a otras más concretas y directas. 6. Abordar directamente el tema de la violencia. 7. Expresar claramente que nunca está justificada la violencia en las relaciones humanas. En el caso de que la mujer reconozca la situación de violencia que padece, es conveniente: a. Hacer sentir a la mujer que no es culpable de la violencia que sufre. b. Creerle, no poner en duda la interpretación de los hechos, no emitir juicios, intentando quitar miedo a la revelación del abuso. c. Ayudarle a pensar, a ordenar sus ideas y a tomar decisiones. d. Alertar a la mujer de los riesgos y aceptar su elección. e. NO dar la impresión de que todo se va a arreglar fácilmente. f. NO dar falsas esperanzas. g. NO criticar la actitud o ausencia de respuesta de la mujer con frases como: "¿Por qué sigue con él?; “si usted quisiera acabar, se iría...". h. NO infravalorar la sensación de peligro expresada por la mujer. i. NO recomendar terapia de pareja ni mediación familiar. j. NO utilizar una actitud paternalista. k. NO imponer criterios o decisiones. 12 Dirección de Políticas de Prevención de Violencia Familiar "Modalidad de intervención ante situaciones de violencia hacia la mujer " Procesos de evaluación Una vez que la mujer reconoce estar en una situación de maltrato, se sugiere realizar una serie de preguntas que permitan valorar la situación y tipo de violencia, para lo cual es necesario reconocer algunos elementos que permitan valorar los riesgos a los que está expuesta. Componentes de la Evaluación social 1. Situación familiar y Red de apoyo social. Identificar redes informales (familiares, amistades, vecinos). Es importante, pues nos permite encontrar referentes inmediatos a los cuales poder recurrir cuando se presenten situaciones de riesgo. 2. Situación económica, laboral y ocupacional. Reconocer si cuenta con recursos económicos para sostener su vida de manera autónoma. 3. Red Institucional de apoyo. Indagar qué información posee sobre redes formales, es decir acerca de las instituciones que prestan algún tipo de servicio (asistencia, recepción de denuncias, alojamiento, etc.), y si ha acudido y/o buscado ayuda institucional. Se apunta a conocer si ha solicitado apoyo policial o reconoce que la entidad pueda actuar por su seguridad cuando ella lo necesite. 4. Situación emocional. Reconocer aspectos personales que le permitan sobrellevar la situación y o que le faciliten la toma de decisiones. Valoración de la situación de violencia. 1. Tipo de violencia, desde cuándo la sufre, frecuencia e intensidad de la misma. 2. Comportamientos de la persona agresora a nivel familiar y social; si ha habido agresiones a otras personas o familiares. 3. Mecanismos de adaptación desarrollados por la mujer. 4. Fase del proceso de violencia en la que se encuentra. Secretaría de la Mujer, Niñez, Adolescencia y Familia 13 Cartilla - Instructivo Seguridad y evaluación del riesgo. Se trata de determinar si la mujer se encuentra o no en peligro extremo, entendiendo por tal la situación actual de sufrir un evento inminente con riesgo cierto para la vida de la mujer o la de sus hijos o hijas. Esta evaluación se hará conjuntamente con la mujer al verificar la existencia de los siguientes hechos: Amenazas con armas o uso de las mismas Amenazas o intentos de homicidio a ellas y sus hijos o hijas Amenazas o intentos de suicidio de la persona Malos tratos a hijos o hijas u otros miembros de la familia Lesiones graves, requiriendo incluso hospitalización Amenazas o acoso a pesar de estar separados Aumento de la intensidad y frecuencia de la violencia Agresiones durante el embarazo Abusos sexuales repetidos Comportamiento violento fuera del hogar Celos extremos, control obsesivo de sus actividades diarias (a dónde va, con quién está o cuánto dinero tiene) Aislamiento creciente Consumo de alcohol o drogas por parte del cónyuge Disminución o ausencia de remordimiento expresado por el agresor También es importante considerar la percepción de peligro por parte de la mujer, tanto para ella como para otros miembros del entorno familiar. Si ella se reconoce en peligro, la situación queda definida directamente como de peligro extremo. Para determinar esto se aconseja preguntar: a. ¿Se siente segura en su casa? b. ¿Puede ir a casa ahora? c. ¿Están sus hijos/as seguros? d. ¿Dónde está ahora el agresor? e. ¿Lo saben sus amistades o familiares? f. ¿Le ayudarían? 14 Dirección de Políticas de Prevención de Violencia Familiar "Modalidad de intervención ante situaciones de violencia hacia la mujer " Preguntas para valorar la situación y tipo de violencia Violencia física a. ¿Su pareja le empuja o agarra? b. ¿Su pareja le golpea, le da bofetadas o cualquier otra agresión? Violencia sexual a. ¿Su pareja le obliga a tener relaciones sexuales contra su voluntad? b. ¿Le fuerza a llevar a cabo alguna práctica sexual que usted no desea? Violencia psicológica a. ¿Le grita a menudo o le habla de manera autoritaria? b. ¿Amenaza con hacerle daño a usted, a las hijas o hijos, a otras personas o a los animales domésticos? c. ¿La insulta, ridiculiza o menosprecia, a solas o delante de otras personas? d. ¿Se pone celoso sin motivo? e. ¿Le impide o dificulta ver a su familia o a sus amistades? f. ¿La culpa de todo lo que sucede? g. ¿Le controla el dinero y le obliga a rendir cuenta de los gastos? h. ¿Le impide trabajar fuera de casa o estudiar? i. ¿La amenaza con quitarle a los hijos o hijas si le abandona? j. ¿Ignora sus sentimientos, su presencia, etc.? Secretaría de la Mujer, Niñez, Adolescencia y Familia 15 Cartilla - Instructivo Acciones de intervención La confirmación de una sospecha de malos tratos a una mujer no pone fin a la actuación, sino que a partir de ese momento se debe desarrollar una importante labor de información, de atención y trabajo en la consulta o encuentros sucesivos; y cuando las características del caso lo requieran ser capaces de derivar para una mejor ayuda. Hay que tener en cuenta que la actuación será distinta si la mujer reconoce o no el maltrato y según la situación de peligro en la que se encuentre. Así, se presentan las 3 posibles situaciones para las cuales habrá que plantear pautas de actuación diferentes: 1. Mujer de quien sospechamos sufre malos tratos pero ella no lo reconoce. 2. Mujer que reconoce sufrir malos tratos pero no se encuentra en peligro extremo. 3. Mujer que reconoce sufrir malos tratos y se encuentra en peligro extremo. 1. Plan de atención a la mujer que presenta indicadores de sospecha pero no reconoce sufrir malos tratos Registrar en la ficha (en caso de que la hubiera) el episodio y las actuaciones realizadas. Puede que este registro sirva si la Justicia necesita información. Informar a la mujer de la situación en que se encuentra. Informar cuáles pueden ser las instituciones a las que puede acudir si fuese necesario. Ofrecer visitas de seguimiento: acompañar a la mujer en el 16 Dirección de Políticas de Prevención de Violencia Familiar "Modalidad de intervención ante situaciones de violencia hacia la mujer " reconocimiento de la situación de violencia y en la toma de decisiones, de manera empática. Sugerir la participación en reuniones grupales en centros que asisten en violencia familiar. 2. Plan de atención a la mujer que reconoce sufrir malos tratos pero no se encuentra en peligro extremo Registrar en la ficha (en caso de que la hubiera) el episodio y las actuaciones realizadas. Puede que este registro sirva si la Justicia necesita información. Informar a la mujer de la situación en que se encuentra. Trabajar en la consulta - seguimiento: plantear la elaboración de una estrategia de seguridad ante una posible situación extrema y establecer un plan de consultas de seguimiento. En el Seguimiento: - Plantear y favorecer la toma de decisiones para iniciar cambios en la situación. - Acompañar a la mujer en el afrontamiento de su situación. - Prevenir nuevas situaciones de violencia. - Sugerir participación en reuniones grupales (grupos de mujeres en nuestra institución ú otras de la zona). - Derivar (si se estima necesario y previo consentimiento de la mujer). - Actuar también con los hijos e hijas y otras personas depen dientes si las hubiera. Secretaría de la Mujer, Niñez, Adolescencia y Familia 17 Cartilla - Instructivo En aquellos casos en que la mujer se niega a denunciar y desde nuestra institución se tienen fundadas sospechas de la existencia de malos tratos físicos ó psíquicos, se recomienda realizar la denuncia en el Programa de Violencia Familiar, tal como establece la Ley 9.283. 3. Plan de atención a la mujer que reconoce sufrir malos tratos y se encuentra en peligro extremo: Informarla de la situación de peligro en que se encuentra y plantearle las posibles estrategias a seguir. Transmitirle que no está sola. Derivar con carácter urgente a servicios de 24 hs. que brindan apoyo para mujeres que sufren maltrato del Programa de Violencia. Familiar a los teléfonos 0-800-888-9898 / 0351-4342113. Registrar en la ficha (en caso de que la hubiera) el episodio y las actuaciones realizadas. Puede que este registro sirva si la Justicia necesita información. Conocer y/o recurrir a la situación familiar, personas dependientes y los recursos con que cuenta. 18 Dirección de Políticas de Prevención de Violencia Familiar "Modalidad de intervención ante situaciones de violencia hacia la mujer " GOBIERNO DE LA PROVINCIA DE CÓRDOBA RECURSOS PARA LA ASISTENCIA Y ASESORAMIENTO A VÍCTIMAS DE VIOLENCIA FAMILIAR Organismo Línea gratuita y anónima Dirección de Violencia Familiar Mesa de Entradas de Violencia Familiar Servicio que Temática ofrece Dirección Asistencia Situaciones de Asesoramiento Violencia IntraDenuncia familiar Derivación Asistencia Situaciones de Gral Alvear Asesoramiento 150. Violencia IntraCentro Denuncia familiar Cba. Capital. Derivación Denuncia Víctima de Violencia Familiar Teléfono 0-800-888-9898 0351-4342113 Duarte Quirós 650. Centro Cba. Capital. 0351-4298011 0351-4331635 Unidad Judicial de Violencia Familiar Denuncia Duarte Víctima de Quirós 650. Violencia Centro Familiar y delito Cba. Capital Unidad Judicial de la Mujer Denuncias y consultas Víctima de deli- Rondeau tos contra la 258. Centro integridad Cba. Capital sexual 0800-5555-8342 0351-4331484 Secretaría de la Mujer, Niñez, Adolescencia y Familia 19 Cartilla - Instructivo Organismo Servicio que Temática ofrece Dirección H. Irigoyen Dirección de Prevención de políticas de pre- Asesoramiento Violencia 494. 1º piso. Centro vención de vio- y capacitación familiar lencia familiar Cba. Capital Policía Emergencias PolicíaDenuncias anónimas Línea 102 (MuNAF) Seguridad Delitos Violencia Familiar ---------- Denuncia Delitos ---------- Denuncia Maltrato Infantil V. Sarsfield 771 20 Dirección de Políticas de Prevención de Violencia Familiar Teléfono 0351-4438213 101 0810-888-3368 102 Gobernador de la Provincia de Córdoba Cr. Juan Schiaretti Secretaria de la Mujer, Niñez, Adolescencia y Familia Lic. Raquel Krawchik Directora de Políticas de Prevención de Violencia Familiar Ab. Ester Carena