AMO 1 » NUMERO 19 REDACCIÓN Y ADHisriSTüActótr»' S á b a d o , 16 d e m a y o 1931 ALCALÁ, 87 - M A D R I D rCNDADOBt P E R I Ó D I C ^O T ]R I S E M A N A L NICOLÁS H.* URGOrn mos a üacer una República. Es preciso que nos digan también, oon un mínimo de detalle—no pedimos mucho—, cómo va a ser esa República, cuáles son los puntos de su coincidencia respecto a la nueva estructura del Estado, porque, naturalmente, eobre sus coincidencias, Después de las tranquilas jorna- dos en e r éxtasis del Poder, S5n In- y no sobre sus discrepancias, ha de Sas de estos días, en que sólo las quietud i.ingur.a respecto al futu- levantarse el edificio. El país, que quimeras de las alarmas falsas cru- ro. Incluso en las simplps cuestio- ha votado la República tiene derezaa-on el ambiente público, pued,e nes de detalle, como el procedimien- cho a que se le exponga ya cuál es darse por cerrado él capítulo deli- to para elaborar las listas y desig- el esbozo qfue a la^ Constituyentes beradamente abierto por la provoca- nar candidatos, no hay nada claro quieren llevar, los directores de la opinión republicana. Por mucRa ción monárquica. Hasta aquel día, y flrilie. ©1 Gobierno se había comportado con En cuanto a la propaganda, aúri que sea la confianza puesta ein l<í3 enemigos de la República en no se ha registrado el menor sínto- ellos, el voto en blanco, otorgado el no distinta forma que un gabinete ma de actividad. Y en este inomeri- 12 de abril, debe comenzar a llenarde liberales con los consei-vadoreiS to no se trata simplemente de una se de oompromiso^ y obligaciones. En un número muy anterior dirisalientes. Es preciso hacerlo cons^' propaganda corno la que hasta tar repetidamente, porque cuanto ahora hacían los partidos republi- gimos una apelación a los hombres más conste, más resaltará que no canos de una propaganda esencial- responsables—es decir, a los mejoestaba justiñcada por parte de los mente antimonárquica, a la que los res—, pidiéndoles esto miémo que monárquicos una acción ilegal, y errores y abusos deil régimen caí- ahora reclamamos: ideas claras, subterránea, como la que va descu- do daban fácil pretexto. Trátase principios, normas para la nueva briéndose a medida que se socava y ahora de la verdadera propaganda estructuración de España. Hasta profundiza. No tenían para adoptar republicana, de la que tiene por ob- ahora hemos caminado al hilo^ de ia táctica de la conspiración el pre- jeto no negar y destruir un régi- los Bucesó.6, y las preocupaciones texto de que se 1«9 irñpedía la orga- men, sino de afirmar y construir presentes tal vez han absorbido tonización y la propaganda, ni el otro. ¿Sabemos ahora algo más res- da la atención. Pero siendo, ooriio ejercicio de ninguno de los derechos pecto a la próxima Constitución re- han revelado los sucesor últimos, la de qiue gozaban los partidos repu- publicana que hace un mes? ¿Sa- tarea más apremiante y grave la blieanOs. Sus periódicos adoptaban bemos algo más qpie lo más elemen- constitución definitiva de la Repúformas de expresión violentas o irí- tal a saber, que él Estado adopta- blica, no puede haber ya disculpa Í3idiosas, sin que nadie les fuera a rá uiía forma republicana acaso fe- ninguna para el silencio y la inacla mano. El Gobierno había amplia- deral? Los partidos afectos al nue- tividad de los españoles capaces de do los límites de lo legal. Después vo régimen no pueden contentarse orientar y dirigir la opinión repud ^ incidente del domingo, de las a estas fecha-s con decir al país: va,- blicana. : il^percusiones de los días siguientes y la conjuración alarmista de los últimos, el gobierno tiene ahora toda la razón ajpetecible para imponer I ^ MARCHA DIPLOMÁTICA DKL OABDENAI. FBIMASO HA SIÜO el respeto, a la vóhmtad nacional (júe no oonsisjuió con aquella legali- AOOOJníA CON LA MAS VIVÁ SATISFACCIÓN POB I A OMNION evBLICA. dad desagradecida. DIRECTORi FÉLIX LORENZO AHORA, A CONSTRUIR Urgencia de la propaganda Nó podrá, pues, atribuírsele arbitrariedad y abuso si emprende a fondo el desarme de la monarquía, deshaciendo laS fuerzas monárquicas que tienden a la subversión ilega,l, y los residuos que aquel régimen ha dejado en la misma entraña del Estado. Recién proclamada la República, señalamos, como flnalidad primordial del gobierno, asegurarse la posesión y libre uso de todos los instrumentos del Poder. La,s destituciones de algunos jetes de las fuerzas dedicadas al mantenimiento del orden público, nos indica que esas manivelas no Mncioriaron a tiempo y con eficacia, sino coii deliberada remolonería y pfireza. Pero esperamos que no te detenga ahí la depuración, por el hecho de que hasta ahora sea sCdamente ese personal del Estado el que no cumplió su papel. Cualquier día pudiera suscitarse otra cuestión en que fuese requerido a taoyerae otro instrumento del Poder, y también propendiera a la negligencia y al sabotaje. La República ha de tener en punto y en uso el mecanismo del Estado para poder emplearlo en toda su exteaisíón y B. todo su arbitrio en el instante precáao. TAN SALUÍJABLE MEDIDA CONSTITUIRÍA, SIN EMBARGO, CNA INJUSTICIA SI NO CORRIERAN LA lOISMA SUERTE LOS JESUÍTAS Y LOS PRELADOS QUE, COMO EL ARÍSOBISFO DE SEVILLA Y EL OBISPO DE VITORIA, MAS SE HAN DISTINGUIDO POK SU HOSTILIDAD CONTRA EL RÉGIMEN REPUBLICANO. LA EXPULSIÓN DE LOS JESUÍTAS, SOBRE TODO, CONSTITUYE LA MAS PERENTORIA EXIÜJÍSN CÍA DE LA ESPAÑA MBEBAL Y DEMOCRÁTICA, EL SAN ISIDRO DE AHORA, por Bagaría Pero hay ahora, también urgenfe, otra labor paralela que no compete solamente el Gobierno, como la anterior, sino a la nación entera:. la construcción del nuevo Estado poi- medio de unas Cortea constituyentes. Estamos a la distancia de poco más de un mes de la fecha señalada para las elecciones. La inminencia justifica que nos sorprenda la absoluta falta de propaganda y organización electorales. No hemos visto todavía una sola señal pública que revele la menor preocupación en esta materia, a pesar de BU importancia decisiva para el porvenir próximo de la República. Los partidos afectos a l nuevo régi^ lUn/¿ngel.—CMco, en este afto se *» nnlaaron Iw müagros. É l que quior» pxen parecen exoegivamenté 3i#il- dlsírrtttfu; de iá tteraa* 4ne la teabalé. UNA PALABRA NUEVA ^o, ciudadano X: Los frigios nd eran republicanos. Frigia ira un remo Su último rey, el famoso Midas tenia el divino don de con. vertir en oro todo aqueUo en que toma la mano. Como otros revés modernos han tenido la humana aftctón de foner la mano en todo lo que valía for oro. Los frigios no eran re-publica^ nos; fero usaban un gOrro de sa invención, que, naturalmente, s¿ llamaba frigio. Exactamente coma nuestros refublicanos del 14 de abril, que también usan gorro fri. gio y tampoco son republicanos. Pero en los oídos de nuestro, pueblo, que no sabe Historia aum que ha hecho tanta, frigio y republicano suenan casi lo mismo, gracias a la Revolución francesa, que hieo del gorro frigio un. simbola de M libertad. Nuestro pueblo, mis ingenuo que ninguno, ve el gorro, y fia en él, sin meterse a analizar lo que va dentro: De estas ingenuidades se han aprovechado siempre los contrabandistas. Por eso tantos nobles pabellones hiin encubierta, mercancías falsificadas. Yo n» acortsejáré al pueblo, ciudadano X, que rechace de plánó al republicano uparvenun {es más expresivo én este caso el vocablt^ francés que el español uadvenedisóii). Pero si que lo someta a una cuarentena prudencial. Por lo menos, que no lé permita inmiscuirse en las Cortes constituyentes, que son lá clave de la República. El republicano ufarvenu» es uH frigio que no tiene de republicano más que el gorro. Si en la hora crítica de una votación difícil S0 le cae el gorro, o se lo auita, puede provocar sorpresas. Un hombre que lleva las ideas en el gorro, no es más que una interrogación. El frigio, mientras no soporte 'sin vacilaciones la cuarentena, es un republicano putotívo. Lógicamente, ciudadano X, deduzco y(f que el republicano putativo no es mds que un frigio. No lo olvide usted, amico. El frigio era un monárquico que sé ' cubría con un gorro que las conmociones políticas de la posteridad hicieron re-iublicano. y como entre nosotros es necesaria que todas las cosas tersan un nombre impuesto por las circunstancias, vo propongo que a los mo-* nárquicos que en estas circunstancias, se han improvisado un ^orró republicano, los llamemos ufrigiosñ desde ahora. Ciudadano X: la Reéública va a resolver, en lo posible, el problema clerical. Se me va borrando de la imaginación el nfrailason. y se me yergue en la imaginación el ({frigio»^ que es el otro enemigo solapado d,e la Re-büblica. Cada hora, ciudadano, trae su afán ; cada afán trae Su -hreocu-hación: y es bueno que cada i>reocu-hación tenga su palabra.—Helií5filo. Precio del ejemplar 20 cení líos ^"^laj» Sábado 16 de mayo de 1931 El Estado no es; está Entre los artículos de la Fe, y cojno atributos exciusivos de Dios, cita el Cateciemo: «Creer que es Crea- j dOr, creer que es Salvador, creer que es Glorificador»... El Estado, al sustituir ei Orden a la Fe, como explicaba el maestro Azorín en un artículo de EL CRISOL, juzgó prudente arrogaTiSe los atribatos de Divinidad. Hombres de Gobierno, hcanbres de Estado y hombres creyentes en la divinidad del Estado, proclamaron sns facultades creadoras, salvadoras y gloriflcadorasY sin embargo, si bien se piensa, H SER Supremo es Hacedor consÍEjite; está en ia continua variación de las cosas, en la eterna vibración, en la infinita trans^nutación Es em^ nentemente dinámico; no admite estructuras, porque es eminentemenle vivo y su orden, en perpetua renovación, nace de un ordenado desoí aen, e& decir, de un desc-ot,»! gradual, eficaz, a la,vez coiistruclor y demoiedor En cambio, el Estado es el ESTAR Supremo; conservador íBonstante de la® esructuras consagradas; eminentemente estático; cristalizador. Su orden no ra renovador. Ej Estado no ffi creador; por íEl contrario, sólo acepta eslrocluras hechas y tcperhechasn, ei no perfectas, cuando la multitud d© creyentes las hizo suyas por costumbre. En su supremo ESTAR, ei Eslado recoge las iniciativas ciudaída^ ñas ya marchitas, cuando ya pasaron de mano en mano,, las hace suyas, infligiendo a i^s ideas, ocano un viejo sádico de pecadoras man o s , u n a suprema mácula postrera. El Estado no crea. Descansa, en su orden y en su estructuira y quedaría invariable, pero..., un buen día, una célula, no se amolda a entrar en la estructuración. Ansia vivir su vida. Vibrar. En la imposibilidad de aislarse, imprime vibración a otras céinias; algunas, por afinidad, van hacia esa célula genial, generadora, y forman núcleo; poco a poco, muy lentamente va estructurándose ei núcleo, haciéndose más denso, menos elástico, menos espiritual... y cuando ya nada vibra, constituye un orden, un Estado. COBOIABIO ¡Dantón, R<a)espi«rrÉr Recienteniraxte, ¡Liebknedit, Lenino. TroteTiy! Más vive quien.más aJde; x)ero en el-ardimiento. ¿1 hombre se consume pronto. ¡Aquellos grandes oou' quistadores Alejandro Magno, César, muertos en la flor de la edad y terminada su t área!... Hasta ese pobre Napoleón el Grande (¡qué suerte para él haber mnerto en ISíX)!) Sobreviviéndose, murió todavía joven en edad. Y ya muy pasada su hora... ¡Aquellos generales de la Revolución francesa, generales de treinta años, Hoche, Marceau!... ¡Inútil, por eonsiguieníe, creer en la experiencia de loa años! La experiencia es un ESTAR. -¡Cuando llega la hora de la jubilación física, dónde está ya la hora de. la jubilación espirituall La moral misma varía a diario. Desgraciado quien intenta resistir a ese oleaje de la conciencia colectiva. El Estado no es Creador, por consiguiente, tampoco es Salvador» El Estado está cautivo del Orden y un cautivo no puede eer Redentor. El Estado no es Qloriflcador. lOli glorias puras que el Estado manciUa oon sus viejas manos pecado^ ras!... Ayer, frescas esas glorias y hoy marchitas. Ayer los Galán, los García Hernández, eran héíroes y mártires; hoy ya tienen eaUes en ca* da pueblo, asimilados a los conceja? les de toda concejalía. Ayer los mí^ nistros actuales eran presos, rebeTdes ilustres; hoy son ministros dd una República sensata de ordenado orden. Ayer 'hombres de pie... Mañana hombres sentados. Vida fugaz... Destello de un Insf* tante. Vengan, vengan las células reno» vadoras. Hagan sus aportaciones demojledoras y constructoras. Sirvan de fermento a esa gran masa del Estado. Vivifiquen a ese gran Cuerpo, trayendo espíritu de fuera., Espíritu NUESTRO ee entiende. NO IMITAR. Lo que se imita está yat hecho, y lo hecho, bien terminado, sólo tiene un camino: Deshaceree..* Decio ASTÜB Si el Estado quiere ser Creador, ai quiere Ser en vez de Estar, habrá de d a r toda su importancia a las vibraciones celulares ex* ternas y recoger rápidamente las iniciativas unicelulares; absorber, asimfflar los núcleos, antes de terminada la estructuración. Estos nücJeos existen siempre fuera de] Estado y pueden ser núcleos consultivos, bien diferentes de esos Cuerpos Consultivos del Estado, perfectamente cMerj^os, sin espíritu, estructurados más rápidamente que los gobiernos que los nombraron. üd. a máquina por No; no cabe un movimiento aními- p e Estaiba s e t a nada más al día. co en esas masas. Consulten oporLa mejor máquina de escribir, O(HI tunamente^ los grfjiemos a los núcieos oportunistas de fuera, en el todos los adelantos más modernos. momento de su destello, destello fuGARANTÍA ILIBHTADA gaz que conviene aprovechar, porDescuento especial a los lectores de que, jay!„ cada hombre no es sino esta Revista en destello, la vida de su alma es BOLETÍN A RECORTAR {franquéese con 2 céntimos) fa^lándor de up día; de^ués— vive de la vibración que dejó esa SOCIEDAD mSPAKO-AMERIGASA fiASTOROBSE, C. A. luz efímera que movió a acción. Por eso las emociones no pueden repeSEVILLA, 16 — MADRID tirse; por eso. lo (pie hoy conmueve, Remttame catálogo F, y condiciones ai contado y a plazos de la máquina mañana da risa; por eso la vida ; real de los hombres de acción es tan de escribfr CORONA Modelo S Sport en color . Nombre ...._ corte,. Calle de mím. Población _. Los Girondinos, jflor de \m día! u CORONA'" Z E V S ha puesto a la venta la obra sensaelonal de [| N FR&NO ombas La aetnaetóii revoluelonária para las sublevaciones de dleiembre.^Preee'^ sos.'^Eneareelamleiites.^La e vasten de Prisiones llülitares.^El exilio a Portugal, a Bélgiea y a Franeia.-'Iia'' ehas eontra la polieia francesa BOLBTIM DE PEDIilO MYS,S. A. Editorial-Apartado, 9091 Madrid Sírvase i^MmeesBtnieraAoIso, libre degas(os, na c^mjhr «e mam im us BUIBAS Nombre — Dirección — Residencia ~ 6 pesetas Ck»mpre usted esta obra en las buenas libreras, o pídala con el adjunto cupón Sábado 16 de mayo de 1931 ESTAFETA DE ALCANCE BALANCE DE HECHOS Términos de-un problema Un m e s d e R e p ú b l i c a Un mes de República. Lo más impasos no han sido muy fírMi querido director: Ai comenzar laxitud, en la negligencia, en el portante de él es la firmeza con que el primeros mee, porque uifa máquina no pasa de a escribir este artículo, se y«rgue desprecio de la opinión, en la fran- régimen ha anclado en España. Otros funcionar mal a funcionar bien con inevitablemente ante mi la imagen ca y osada inmoralidad? Esparcía puntos habrá discutibles; éste no. Di- sólo cambiar el ingeniero. Tiene mudo su persona; su persona que, co-n la mirada nuestro ciudadano por fícil será encontrar caso análogo en la chas piezas el engranaje de un esta^ las cuartillas del artículo en la ma- el área de la política y veía ante historia. Desde el primer intante, la do y el acoplamiento y sustitución no no, hace un leve gesto de contrarie- él erguirse, por otra parte, el pro- fracción reaccionaria menos lerda que se improvisan. En la urgencia con qua dad, y a,l mismo tiempo, que me de- blema de las responsabilidades. Pro un día antes defendía al rey, rindió han de escoger numerosos colaboradovuelve el trabajo, neutraliza la de- blema eterno, perdurable en la his- las armas para salvar las mochilas. res para la tarea es fácil errar algumismo día 14 de abril se hicieron na vez. volución oon palabras amables, lle- toria. Problema complejo, lleno de El con ipás o menos habiA propósito: ¿Todos los gobernadonas de afectuosa cortesía. Y he de peligros y de consecuencias incal- republicanos, lidad y distingos, «El Debate», «iSl res han respondido a la confianza que apartar esta imagen para seguir es- culabdes. Era partidario el hombre Sol», «La Voz», «Ahora», «Informacio- depositó en ellos el ministro, encarcribiendo. Lo que ahora quiero ex- de nuestro cuento de que ©1 delito nes», «El Imparcial»... El monarquis- gándoles que en el plazo de quince presar son las dudas, las perpleji- no quedara impune, cometiéralo mo francamente cerril ha necesitado días le enviaran una circunstanciada dades, los dramáticos titubeos de qiúen lo cometiese; pero al propio más tiempo y una dura lección; pero exposición del estado de la provincia? un ciudB/dano oualquieira ante el tiempo le repugnaba profundamen- el mes de la República se cierra ha- ¿Han demostrado todos sagacidad y momento presente de la amada pa- te, de un modo indecible, el que se ciéndose republicanas «La Nación» y competencia? ¿Han demostrado todoa tria española. Este ciudadano, todo apeCase a ese sistema de las res- los legionarios. Sinsabores del triunfo. diligencia, al menos? Sería curioso '?aJamás se puso al frente de España ber qué ha resultado de aquella cera lo largo de su vida, ha sentido un ponsabilidades para cohonestar una profundo amor a España; al llegar falta de valor cívico en acometer un gobierno con tanto derecho como el tera pretensión del ministro; qué caque hoy la rige. El pueblo le otorgó la mino se Ueva de acabar con un caciloe últimos tiempos, el espectácugrandes problemas que un cam- ilimitada confianza que es precisa pa- quismo que cambia de casaca para lo que ofreciera la monarquía con los de régimen Ueva consigo; le re- ra acometer la transformación, la dig- sostenerse. sus ooncupiscenciae, con su desdén bio ©1 que, como en el circo nificación del país. Echaron sobre sí En Hacienda, el Gobierno prov;^:©por todas las fórmulas de civiliza- pugnaba aquellos hombres abrumadora tarea; nal casi se ha limitado a afrontar dición que tanta sangre, tantas lágri- romano, se echase esta carne, bár- sirva esta consideración siempre pa- ficilísimos problemas, que un poco el mas han costado conseguir en la baramente, cruelmente, a las fieras ra dar a la critica que pudiere ser ne- temor y un mucho la mala fe, unidoa para encubrir ante © 1 pueblo una nación española; en los úiltimoa cesaria su verdadero alcance. Han teinepcias anteriores, le plantearon, tiempos, digo, de la monarquía, ese defección en ©1 ideal- ¿Y no estaba nido titubeos y debilidades que en CRI- adesde el primer momento: el crédito ciudadano había Uegado a poner, viendo, contemplando con tristeza SOL hemos dejado consignados; pe- Morgan, la evasión de capitales, la que, en tanto que esas responsabiro no toda la culpa es de ellos si sus falta de papel mioneda que se había oon angustia, con suprema esperanza, a España por encima de la mo. lidades seguían su curso, se erguían I lle°-ado a fent'r. Resolvió !o^ do- prinarquía. Lo que importaba era sal- otras responsabilidades, en qus, meros en p'.eno snibiente de popularidad; el otro con tacto y prudencia, var a todo trance a España- Lo que ante la Historia ai menos, estaba importaba ei-a que viniera cuanto incuTsO el jefe dej poder ejecutivo men, si el azar de las cosas traía ese sin que el pueblo español viera rt«»> antes la República a España. Si no por los actos luctuosos que en de- fracaso, le había de torturar? Y aun- go—como, en efecto, no lo hay—en la medida adoptada por sus gobernanse operaba en nuestro país un cam- terminados días habían ocurrido que ese azar terrible no se presen- tes. Eso es mucho. La prueba más albio de régimen, España se hundiría en España? Incurso en responsabi- tara, la misma idea de que aun en ta de autoridad con que este Goen ed abismo. Y. vino la República. lidades ante la Historia, y como una minutísima parte entorpeciera bierno la ha llegado al poder está en qu« El cambió suspirado y salvador se católico, como creyente, incurso en la marcüa del régimen, ¿no basta- a pesar de la expectación y el retraihabía operado, con emoción, con su conciencia ante él tribual inex- ría para desazona'rle e inquietar- miento, que es lógico produzca todo Intensa a,nsiedad, el ciudadano de cusable del Eterno. le? ¿No estaba ya viendo a España cambio de régimen, el crédito nacionuestra historia seguía los primepersonificada en una matrona, con nal se ha afirmado, sin artific'o. Y ello, Lo esbozado era uno de los térmi•ros pasos del nuevo régimen. Y nos del problema. Veamos sucinta- el semblante trágico por el doüor y a pesar de la ofensiva realista. ^<iuí, en este punto, comienzan las mente el otro; pocas palabras basta- oon los ojos llorosos? ¿Y no valía En Guerra y Mar'na hay mucho por dudas de esta hombre amante de rán para enunciarlo. Frente a la la pena, por no tener esa imagen hacer. El ministro de la Guerra ha dasu patria. COn ei nuevo régimen, República do una disposición bien encaminada a estaba la monarquía. No ante la vista, de pasar por encima reducir las cargas mi''tares. Pero sá íqué es lo que ha venido a España? se podía pensar de todas esas impurezas que a él en la restaiira¿Qué ventajas, qué superioridades, le indignaban? De todos modos, el echan de lAenos medidas de carácter ción de ese régimen. Restaupolítico, que por su ureencia no ad^ é excelencias representaba la ReprobSema se presentaba en térmipública sobre la monarquía? El ciu- rado ese régimen, las consecuen- nos claros: ¿hasta qué punto debía m'ten aplazamientos. Problemas de incluso de actitud de unidadadano, a «'Olas consigo mismo, en cias para España serian lo más fu- prestar adhesión a la Repúbica y mando, Tema delicado es, pero que es insus momentos de íntima reflexión, nesto que se puede imaginar- Con hasta qué punto debía, por impera- des. dispensable abordar, que ya, deberla se hacía las interrogaciones que Ja restauración quedaría estableci- tivo de la conciencia, mostrar su estar abordado. acabamos de estampar. En el Go- do un sistema de impunidad total desaprobación? El decreto sobre el cultivo de la tiebierno de su país veía él diversos e indefinido. Si antes acaso el teLa dosificación de estos elementos rra es con exceso espacioso y lento ds elementos; a unos prestaba adhesión mor de una revolución podía con- era cosa de suma trascendencia. No aplicación, y no afecta fundamentaltener un poco el ansia de tiranía cordial y ante otros manifestaba a la viciosa organización dé el ciudadano hurtarse a su mente la propiedad rural en España. Sólo prudente, reserva- Lo que le disgus- y de concupiscencia, ahora, desva- podía propio pensar. Allí, vivo, palpitanhay de plausible en él la acertada e íaba profundamente era que hubie- necido todo temor, destruido todo te, tenía el problema. ¿Y cabía el ra en el Gobierno de su país hom- fundamento de oposición, el des en- recurso de volver la espalda a la indispensable dirección hacia una disbres—^y hombres predenominantes— freno no tendría límites. Y había política y entregarse a la profesión tribución más justa de los productos! de la tierra y la intensificación dél qué sustituyeran la palabra a la otra cOsa; había la persona en quien .acción; hombres que creyeran que estaba encarnado el ideal monár- que practicara? El trabajo es un le- cultivo. De enseñanza es lo principal haber •un discurso tiene la misma eficacia quico; persona con quien un hom- nitivo para las congojas íntimas^ restablecido escuela el respeto a que la acción; hombres quie, forma- bre de sensibilidad moral, amigo de pero ©1 trabajo no nos impide ei la concienciaendella niño, suurimienclo la flos en el antiguo Parlamentó, tu- la delicadeza y de la cultura, har pensar. Y queriendo o no querien- obligatoriedad de la religión. Es tln do, el problema permanecía en pie. vieran de ese Parlamento todo lo bría de considerarse siempre incomprimer paso en el camino de arranAlguna vez, nuestro ciudadano hacondensable; hombres que, forma- patible. Ante estos dos términos del car al Estado español del dominio de dos en la vieja política, llevarán al problema, ¿cuál había de ser la ac- cía una ^escapacla hacia el futuro; la iglesia. La orientación dada al prose evadía violentamente de la realinuevo régimen todas las viciosas titud de un ciuidadano? No ha de blema del belengüismo es un paso fipprácticas, todas las manosadas ha- pedir nada ese ciudadano a la Re- dad circundante. Los dos términos me por la concordia de los pueblos bilidades que sirvieron para des- pública; no ha de perseguir logros del problema estaban asentados de- hispánicos. En la cuestión de los ayuntamieír acreditar el régimen antiguo. Y otra ni medros; se contentar^ con que lante de ©1; pero éi volaba, por en cOsa nuestro ciudadano debatía en las oondíciones de su trabajo sean cima de ©sos términos, hacia un tos, el gobierno ha pecado tambiéi lo íntimo de su ser; era éste tan de- aceptables; con que pueda en una ideal remoto. Le parecía que un de timidez. Tal vez hubiera sido lo licado, tan peligroso, oue aun en la patria tranquila v íaüz seguir tra- ideal como el comunismo era io mejor suspendtr todo ayuntamierto mayoría monárquica. En primer -intimidad del pensamiento, sin ex- bajando en su oficio. Pero aun in- más noble, lo más altruista que ha-' con que, Jada la opinión general teriorizar con palabras lo pensado, terviniendo lo menos posible en po. bía producido la humanidad; al término país, había motivos para suporer aun en esas condiciones, ponía mu- lítica, algo al menos se interviene. ideal comunista dedicaba los más del fundadamente atropello de la voluntad cha cautela el ciudadano «n lo que puede evitarse ©se ciudadano el fervorosos elogios; en ©se rincón, en popular; el jobie.-ao de la monarquía .pensaba. Si el antiguo régimen se No ese remanso, se detenía un instante quiso atropeni'ia en tedas parte?, y en las cosas de España, y había perdido, pricipalmiente, casi pensar para ovidar la realidad ruda e im- ¿n unos sitios lo consi^nic y en otros pensar en las cosas de España, es •exclusivamente, por una cuestión de ya intervenir con el pensamiento, placable; olvidado de todo lo pre- no. Nueva elección, oon gavantia, era moralidad, ¿no habría de ponerse sente, en el ideal de altruismo, en lo procedente. Responsabilidades, ftepit.imoslo; í^^i 'iodo ©1 empeño, el mdximum de losj en la política. ¿Cuál había de ser, un ideal qué no tenía las impur© esfuerzos, en que la República fue- pues, la posición, el pensamiento, zas de éstos, se engolfaba lleno do un error dejar salir de España al rey 'i'a Un régimen irreprochable, inma- de ese hombre Estar sin reservas esperanza y de fervor. Puesto que destronado. No .se trataba ya de un culado, blanco, como e,i larmiño? con ©1 nuevo régimen 1© parecía fragmentariamente, aj menos, veía rey que había perdido popularidad y en su país, sino de un rey jY afl mismo tiempo que el ciudada- inadmisible; él no potíía dar su ad- falibles, ineficaces, las ideas del pre- prestigio había caído en distintas formas •hb pensaba en esto con emoción, hesión a prácticas y tendencias que sente, en lo porvenir, en las edades que delincuencia, política y común. La ¿no tenía allí, delante de los ojos, en el antiguo régimen había conde- futuras en que el comunismo ha- de alarmante equivocación de revocar el »d6nunciado por hombres celosos de nado. Se sentía suWevado contra sí bría de realizarse, se refugiaba. Lo auto de procesamiento de Berenguer su patria, un caso que le hacía apar- mismo, al solo pensamiento de que malo era que la realidad presente fué inmediatamente corregida, por fortar la mirada con pena? Y otros hombres que él había apartado men- tenía una fuerza incontrastable, y tuna, coincidiendo con sucesos qus se síntomas esparcidos acá. y allá, ¿no talmente d© sí, ahora, por el'sólo aue de pronto, la sacudida que esa interpreten como se interpreten, no puede negarse que han revelado en "indiciarían ©se comienzo de todos hecho de formar parte de] Gobier- realidad daba, le tornaba, desde loa su iniciación principios de impacien«*» cambios políticos, sea como re- no republicano, iban a tener su años de lo porvenir, a los años ac- cia popular. El mismo gobierno lo ha Pública, sea oomio dictadura, en que aprobación. Y por otro lado, si se • , entendido cuerdamente así, ya que a ^ principia con arrogancia de pu- dejaba arrastrar por ©sa repugnan- tuales. de ellos han venido las órdeuia Y estfc es, (juericio director, ©I raíz . ' ^ a , oon gallardía de severidad, y cia, ¿no corría ©l riesgo de trabaprisión contra ex ministros de la f?, <iue poco a pocO, terriblemente, jar, sin querer trabajar, en contra artículo que, dentro de un instant^á de dictadura, el examen de que procede '^%iStoía6i)it«. se va Qayenclo eft- ja de la República? ¿No adquiría a sua voy, con cierta timidez, a presentar hacer con determinadas órdenes relipropios ojos una responsabilidad a usted. giosas, el encarcelamiento de monarqu« a iodas horas, lr«íjasado ©i réffiquféos perturbadores, la Suspensión _5_3l^^ Sábado 16 de mayo de 1931 —suponemos que sólo temporal y como medida mvy obligada de ord?n— de periódicos que atizaban interesados enconos contra la República, Como balance de im mes de régimen, jparece acusarse excesiva pausa y timidez en el Gobierno; temor de poner mano en cosas fundamentales por respeto a las Constituyentes que lan de reunirse; natural reacción en hombres de escrúpulo y conciencia política, que vienen detrás de un régimen en que todo era la arbitrariedad y el abuso de unos cuantos. Pero han de darse cuenta de la diferencia de porción. A BIIOS los ha investido España con su confianza expresa: »Uos representan un conjunto de postulados que el país ha dicho que quiere; les toca defender la República de los riesgos que la acechan, SI, como parece, hw». ^acelerado el ritmo de su labor. B<spaSa se lo agradecerá. minadoras para juzgar la labor docente desarrollada duranie el curso, solicitando el aprobado peneral. En la seguridad de que no es, ni mucho menos, éste el sentir de la masa escolar, y que la idea procede de determinados sectores interesados en desprestigiar la magnifica moral que hasta hoy ha presidido la conducta de la pesetas por asistir a los, oficiales y juventud estudiosa, la Federación Universitaria Escolar sale al paso de esa Corre por la 2x>na Norte de Marrue- soldados del Tabor, diez reales por vi- burda taaniobra, haciendo un llama. cos que el pueblo español, engañado sita a los enfermos pobres, y ia cuen- miento a todos los estudiantes para por SUB políticos y publicistas cree ta de las medicinas que siiministraba, que no abandonen por un momento el suya, pero que es del Sultán, lui tío o decía suministrar, que mensualmen- camino de integridad profesional y dede - nombre sintomático; el Guad Ma- te presentaba. Pues bien, este favori- fensa de la dignidad académica, que Jaaen o río del Mal Olor. La cuenca to del Estado español no asistía a los ha constituido hasta el día su rrayor geográfica de este río que presenció enfermos, cobraba a los pobres B:em- i timbre de gloria, haciéndoles acreedola merecida derrota del imbécil don pre que podía, pero haciéndolos ir a res .'Jel resneto y admiración nanion»< Sebastián, es pequeña y depende de su casa, y estudiaba su oficio en el les. la del Lukus. Esto en lo geográfico. café, o paseando, de modo que los • En este sentido, la P. U. E. condena En lo moral y político comprende to- más afortunados eran realmente aque-! y riesautariza, con la máxiaa energía, da la zona. Allí donde el Estado espa- líos a quienes no recetaba ESi suma.- i esta maniobra, y espera de todos los ñol ha puesto sus pecadoras manos, copia fiel de su colega de Tángsr, Tri-! estudiantes consci«ites q u e tendrán allí huele mal. vino, el que tantos estragos hacía en ' siempre en cuenta sus deberes escolaTánger e hizo después en Melilia, y res, impidiendo que prosperen ests^ acLo tenía olvidado de puro sabido. merceél a los cuales llegó a los más al- titudes. Ha tiempo que desvié mi atención, Igualmente, con el apoyo moral que con pena y asco, de todas las cosas tos puestos en el escalafón de Sacreernos tener en la mavorfa escolar, hispano-marroquíes. Una inesperada nidad. Quejáronse los españoles, hebreos y hacemos público que estamos disp lescircunstancia me la vuelve a ellas. tos a garantizar por todos los r.edios La Policía ha descubierto en un rin- moros a la Legación de Tájoger y per- Que las tareas examinadoras se Uevcaí cón de Madrid laa fuentes de otro río dieron el tiempo, más el papel y la tin- a cabo con la mayor normalidad, apoalbañalesco: el edbiñalesco, o sea el ta de las firmas. Pero en Tetüán, por yando con nuestra actuación la libernegocio patriótico de Albiñana tvea el casualidad rarísima, había un cónsul tad de Juicio del, profasorado, dentro CJomo anunciamos en nuestro niímo- lector que de albafial a Alb'ñana la celoso cumplidor de su deber a la par de las más estrictas normas de Justicia^ ro anterior, el gobit-rnc de la República distancia no es grande) protegido por que enérgico. Quiso substituir al mal La P . D. E. recuerda, sin embargo, h a dado .satisfacción plena a los fun- el Estado. Y vea también como éste, médico e indigno funcionario x>or otro cionarios postales con el decreto apro- por su baja calidad moral, formaba que realmente fuese médico y que tu- que las directivas de stis isocíacioiies bado en el Oon.'sejo de ministre» del la cuenca del río de podredumbre que viese siquiera un poco de pundonor. están abiertas a toda iniciativa v pro-. contra posibles arbitrarle, Jueves. lo invadía todo. Así la roja y gualda ¡Inútil empeño! Al casi-médico tetua- testa justas de cualquier parte oue ¡Jrocedan, Bn varisis oearfones sobrajamos la onaeaba triunfalmente sobre tina vas- ní lo amparaba el gran Bandei«c de dades, e resaltar que sus acuerdos llen'KMsidad de reintegrar el Cuerpo de ta cloaca, en la. que flotaban orgullo- Pariente con todo el poder de su p&- ynent a choy ya una efectividad positiva Correos a suscterect's Jarídieos, arre- sos la corona y el cetro del último laíína influencia. ¡El que de allí a pocomo lo pñ?eba la última concesión de batados en 1922 por la táctica irrefle- Bcrbón. co salió de Tetuán fué López Perrer! prorroga de curso recientemente solicixiv» de los gobiernos borbóiiicos. Y El río del Mal Olor le repelía a él tada.—Antonio Almaraz, Vicente Bae. como este asu/jto lo hemos seguido con AJiora bien, en el río albiñalesco máxime interés, afirmamos que s"n'a desembocaba un tenue hilo del río del como a todo servidor honrado y útil, na. Femando Arias, Feliciano Conejo, una. de las primeras soluciones qus stU- Mal Olor marroquí. Los periódicos y suavemente empujaba, acariciándo- Jasé G. Orhaneja y Enrique CTuencaj du'an er. la «Gaceta». Como asi ha han denunciado (sin saber 3o que de- los y aorectntándolos a todos los reBolsa de ^ a j e sido. nunciaban) ésta confluencia fluvial siduos putrefactos que la sociedad es-1 hn reorganización tenía forzosamente contándonos cómo fué descubierto el pañola en descomposición iba airo-' La Facultad de Ciencias de la TTnI. versidad de Santlaíro concede una bolque iniciarse con la derogación de aque- archivo de los bandoleros patriotas .al jando hacia Marruí^os. Ix)s moros, aunque, acosbjmbrados .sa de viaje de 3.000 pesetaf. con arrellas disposiciones que infringieron las servicio de la monarquía, y como en leyes orgánicas. Las medidas de excep- ellos S6 halló una -carta de ciertx» ami- a! hedor de sus basas opresores y ral-. glo a tes siguientes condiciones: ción aplicadas hace nueve años si!b>5is- go y servidor del Borbón, que dice paces, presenciaban aquella fnvas'ón Primero. El objeto de la pensión es tian contra los funcionsirias postrJes, llamarse Bandelac de Pariente y que estupefactos, y hasta se tapaban las la íimriliación de estudios en el exfigurando entre los que legíOmamsnte es médico de la Embajada de Espa- narices. trp.njero. habían adquirido un derecho profesio- ña en París (otro brazo caudaloso ^ Bepundo. El plazo mínimo de estannal alguncB otros que se áprovectiaron del río del Mal Olor) habiénd'>le to- ( m cia en el lu^ar donde se realice el tráde las infracciones monárquicas para cado, por serlo, asistir a Primo de Rl- j Bendelac, e2 hijo dvl masagXsta, aho- balo ha de ser de tres meses. dar a sus empleos una prerrogativa an- vera en su última enfermedad (provi- ; ra encopetado servidor de la real caTerrero. La Facultad se reserva el tilegal dencial castigo de los i)eeados de éste), i sa, no podía dejar de escribir a Al- daecbo de exigir a los concursantes Si hubiesen seguido en España los solamente la posesión ^"1 iiií^ma I1K>S periódicos no dicen más, sin biñana, su colega en servicios, la car- no desgóbemadores del orden, la Patria, y duda ta afectuosa que en los arch'vos albi- del país donde lian de realizar las trapor que nada más saben. la monarquía, claro es qne el C!u.^rpo bajos, la preparación cientifícA neñalescos se ha erconti-ado, y en la cesariasino Pero yo si sé. T paso a decirlo. de Correos 310 hubiera conseguido n.3rpara el mejor resultado de los que «a pesar de no tener la dicha de malizar su situación ni restablecer la conocerle, manda al querido comiMiñe- mismos. ética profesionaL tJuarto. Podrán solicitar esta peti^ Este Bandelac de Pariente, médico ro 20 pesetas», para aumentar con El proceder del gobierno con los fm~ de la Embajada en los tiempos glo- ^ ellas el tesoro destinado a la defensa sión los licenciados en Ciencias i<J»iíiniIdeados que n o h a n ingresado «por liosos de Quiñones de León, es vn ju- j cas que havan .semiido sus psturi^'os to. virtud • de oposición regalar» no pn?de dio tetuaní que no se ¡lama Bande-; de ia monarquía, de la religión y de tal O Dsrcjnlmente en esta Facultad. ser ni más democrático ni más huma- lac. aunque, con tal nombre ha adqui- j la patria. Quinto. El niazo de admi.'rf'^n de soahí está porqué este Bendelac me licitudes terminará el día 20 del acno. En sentido ideológico opuesto, los la nacionalidad española, y que ¡ haY merecido las presentes líneas. Es ímojeian sussiendido en s u s : habí n-s, ndo tval. por sa humildad, I pústula sintomá,tica de la diátesis adeanás de separarles del puerp=> y del ciHisiguíó ganar y habilidad en el difícil i la Monumento a Caja! serrfeio de'Correos, jtlgobienio prorf- afectuosidad hemos ven'do "padeciendo y conejetcicio de dulces tercerías, la regia i que sfonal de la República no quiere em- protección, viene dehuticiarla. Más no por el gusEl próximo miércoles se inaueurar* tan dispuesta a recompen-1 plear jjrocedimientos aue son de Ifi cxto de la denuncia, sino para que el el iwonnmento » Rsmón y Cs^al en el clusiva competencia de los monárquicos. sar tales obsequios como desprecia- ( nuevo Estado se ponga en tratamien- patio de la Facultad de Medicina La dora de los servicios decentes. Estos empleados sin deiechos legales to y evite la contaminación. Si la zo- Asociación Profesional de F.sturHn.ntea /TI verdadero nombre de Bandelac na de España en Marruecos ha de de Medicina, autora de esta iniciaMpara, ocupar puestos dentro de una cor Doración ministerial pasan, ccsno furcio- es Bendelac. Parece que de Bande'ac couíjnuar siendo la vasta cuenca del vn, dará la msyoT solemnldnri ai acto Aários interinos, a depender de la Pre- a Bendelac no va más que una lede! Mal Olor, lo único que hay dp la inauguración. Ha invitníin ni presidencia del Consejo de Ministros, con tra, y que es tina nimiedad notarlo. I rio fddente del gobierno nrovisional y al la n liana categoría, sueldo y orden res- Puí;s no hay tal. Estas cosas marro-; oue hacer allí es marcharse. Y cuan- mipistro de Instruccáón pública, "y s pectivo <jué tienen en la escala d í Co- quíes presentan extraiSas e inespera- to antes mejor. Pero, dirá para su capote el lector, todas las autoridades académicas. rreos. El tiempo amorti^rá esta escala. das complicaciones. El apellido BanEl Condeso fie la ti. P. E. H El gobierno sabe que las responsRbi- delac de Pariente, viene, según el in- ¿cómo se hace esa limpieza' El Comité eiecutivo de la TJnloTj Fe. Poseo la receta, pero me la guardo Bdades de estas infracciones de las le- teresado, de que stis antepasados prodpral de Estudiantes Hispanos ha s i » y ^ no alcanzan directamente a los aun, cedían dé una distinguida familia ho- por aquello del gato escaldado a quien pendido el Conarreso extraordinario con impulsados por la necesidad y la « n landesa. El, ahora, amigo del rey de ya hasta el agua fría asusta. vocado nara este TOKS. Divpr.síis P. t J . B fioencia política», lograrcHi tm sueldo España, quiere ser también d'stingulGonzalo DE BEPABAZ tian solicitado su anlazaniiento. wiürreglamentario. Los verdaderos cul. do. Pero ¡ay!, que los que estamos El Congreso se celebrará en el pró:dpables son los gobiernos, que pewUs- en el secreto sabemos que Bendelac, mo mes de octubreron el equUihrio del mando, resolvie» nombre verdadero, quiere deoír c' hijo Co la cólera y la pasión lo que única- del inasafíista, y por este fiilo sacamos Curso de eonferencias mente la prudencia podía haber re- el ovillo del oficio de su padre o abueLa Asociación Profesional de EstuRtelto. lo, que florecieron en algún obscuro diantes de Deretíio h a oirtraniüado u n EQcausado ya el Gueri» de Cerráis rincón de sabe Dios qué T-Mman macurso de conferencias, con motrfrala en su estruxíturá Jurídica, devuelta la rroquf o turco. de pago, cuyo impariñ se dedicara a tianqullidad profesionai a los fuuckJiía, la suscripción abierta por el Ajiuita. Pero esto nó le impidió llegar a pAr\iQS postales, comenzará esa labor d? I miento en fav<a- de los obreros paraitorganizadón de servicia con la ranl. sonaje palatino influyente, y a s:o7ar Interesante nota de la F. U, E. dte Va\ dos. dez que exige, después de haber estado de T>ositiva Infhteno-'a en la Emb«.>atladolid Serán loe confereaiciantes los señoda hispán'ca, merceci al srte infinito oaraüJKida durante tantos años. La P. U. E. de Vailadólid. ante la res Besteiro, Kent (Victoria), Sánchez El ministro de Ccnnunicaciones, con con que desemtseñaba su amable pa- idea lanzada por uiu grupo de escoki- Román. Pabra Ribas y don Femando lÉS directores de su departamento, tra- pel d© embajador de Vejius. Eli elfiíran- res de esa ürüversidad, para conseguir de los Ríos. Las conferencias ¡se CP1«t í j a activamente para consolidar en te písito de Bendelac era tm Pnraf^o, el aprobado colectivo, ha publicado vita, braran los días 16. 22. 26 y 30 de matóazo breve las múltiples reformas In- siempre bien provisto de Eva«i delicio- nota que reproducimos íntegra. yo, y 2 de junio, en el paraninfo de la tteretiics a un servicio público lan im- sas. Así el rey le amaba, Qirñnnes Las sanciones académicas pocas ve- Universidad. portante como el de Correos y tan pro- le amaba, todos le pmahsn, él ppr>?neEl precio de la matrícula es de 1 M) fítictivo por sus ingresos. raba con el amor de todos, y Espa- ces podrán ser Impue,?tas con más Justicia que a los sujetos que intentan con- pesetas para los obreros y estudlatites ña esT>iénd.*damente ppaaba. seguir el aprobado de esta forma. Las federados, y 2,50 pesetas para el re?ta In^iewión telefónica Y Bfndelac, con su influencia pode- organizaciones escolares y las autorida- del púMico. tiB. conferencia de hoy com<?nrir^ a Otro decreto de extraordinario inte '•íisa, e.=!taha sJfíjr>pre dispuesto a acu- des académicas deben actuar discipliife para Comtmicaciones es el armada dir en auxilio de amigos y colegas ne- nariamente contra los autores de tsa las siete de la tarde, y el señor Bestelcesitados. én el mismo Consejo de ministros esidea vei^onzosa, Gracias a lasP. ü . E , ro hablará dr «Socialismo T Pilosotía»/ tabltMendo Ja Inspección de Instalacioque representan a los auténticos esco U nes y servieios de la Compama Nacional lares, actos de esta naturaleza no puede España. En Tetuán había im galeno argentí- den cristalizar. Por algo se emiHe2!a. Dice asi el documento: fero que cobrar &.000 i > ^ t a s anuales, CRISOL poblica sctnanalments, «ün grupo de escolares, completamenmediante las cuales debía prestar gra1. P . ea ios HÚmt^rw de U» sábados, tuitamente sus servicios al personal te anónimo y sin representación algu«La Sentaca de h » Ubro». p&del Consulado y a las familias df ios , na, ha lanzado la idea de elevar tina tíiiit ife4tea<Ia a la ptoávmaon españoles pobres y de los moros y he- í Ijistancia a ia superioridad académica mxeatMn ie CSKlS<a« Aieaíá, »% breos protegid<^ Además recibía 1.200 1 pióicoida la sapresion de inraebas exa- AL CORRER DE LA MAQUINA EL RIO DEL MAL OLOR La unidad orgánica y moral de Correos EL AULA Y LA CALLE Sábado 16 de mayo de i931 HECHOS Y PROPÓSITOS Los hombres de la segunda República El desarrollo que los servicios de Correos, Telégrafos y Teléfonos habían alcanzado, jeee a la falta de medios materiales con que ios dos primeros se desenvolvían, y a la falt a de interior satirilatvií.i con que trabajaljan s u s cuerpos técnicos, jusiicaba, t.ace ya bav,ai.tes años, I a creación de im ministerio que abarcase estos servi^Sos tan vitales y necesarios. L a creación del ministerio, adem á s de ser ur.a necesidad, constituía desde hace tiempo u n a aspiración de los íuneionarios de Correos y Telégrafos. Esa necesidad y esa aspiración, h a n sido satisfechas por el primer gobierno de la República, que, además, h a tenido el acierto de designar como primer ministro de Gomumcaciones, a u n hombre como el señor Martínez Barrios, lleno de buena intención, ansioso de realizar u n a obra útil y provechosa, m u y enterado de , las necesidades dé la vida nacional, y animado del m á s elevado espíritu de justicia. Desde sus primeros pasos en el ministerio, el señor Martínez Barrios h a demostiado que se había percatado exactamente de los problemas que tenía que resolver, y que, par a esta «.olución, había adoptado la orientación más eficaz. LOS PROBLEMAS DE CORREOS Ayer precisamente h a n publicado los periódicos u n a disposición, relativa a Correos, que tiene extraordinario interés p a r a la solución del más inax>ortante problema del cuerpo de Correos. Ha quedado restablecida la unidad. Este cuerpo tenía, actualmente, tal organización, que todos s u s funcionarios lo eran con carácter interino; atiera cada uno de esos funcionarios irá a ocupar el lugar que merece, o el que realmente le corresponde. P a r a ello, se h a restablecido la situación que los empleados tenían en 1917, y ocuparán en «1 escalafón el puesto que les hii" hiera correspondido de no haber variado la sit'iación en aquella fecha. Es decir, que quedará restablecida la normalidad en el escalafó^n, coBiD si n a d a hubiera ocurrido. Esta era u n a reivindicación que constituía una aspiración con»stante del cuerpo; en varias ocasiones parecía que la iban a alcanzar, pero n u n c a la lograron. —Para mí-^nos dice el señor Martínez Barrios—ha sido u n a gran satisfacción poner la firma en ese decreto. —/.Piensa usted hacer reformas o taejoras de interés p a r a el público? -—Quisiera hacer algunas cosas, pero h a y que tener presente que no Be puede desbordar el presupuesto. El presupuesto que ahora tiene este ministerio es el de u n a dirección general, y yo no puedo salirrae de él; por consiguiente, h a s t a el año próximo creo que no habrá posibilidad d e - h a c e r n a d a importante. <~}.Y en cuanto a pereonal?... —Desde luego pienso aliviar l a situación de los carteros y peatones rurales, a quienes h_a traído a \ina Situación difícil la 'creación del sello <ÍR cinco céntimos, que suprime los que antes se daban por el reparto. No sé si tendré medio de reafear este (leseo mío, pero tengo l a esperanza de lograrlo, porque l a emisión de ese fvello produce al Espado mucho más que lo que n a g a a aquellos msodestos funcionarios. SR. MARTÍNEZ BARRIOS ISI señor Martíneai Barrios, visto ^ r Bag:ar{a —Estoy estudiando im proyecto hay presupuesto p a r a "desarroDarp a r a que antes de que expire el las. plazo máximo ooncedido a la Com«Baste decirles a ustedes que la pañía Telefónica Nacional de Espa- consignación p a r a construcción de ña, presten este servicio los telegra-^ nuevos edificios y mejoras de los Astas. "Además, llevaré a las Cortes actuales, que es un millón de peseconstituyentes un estudio completo tas, h a quedado totalmente consudel contrato con la telefónica, aun- mida en el primer trimestre. que esto es u n a cuestión distinta de la anterior. »Yo creo que el gobierno lo recogerá, y que se debe presentar un proyecto reconociendo y permitiendo la organización sindical. Esta organización es ya un hecho actualmente; pero como no tiene cauce legal, Se manifiesta de u n a manera dañina y clandestinamente. Creo Ei Granado que h a y . que inclinarse ante la reaNo se trata de hablar de un árbol, lidad del hecho y aceptar esa orgasino de un pueblo. EJl Granado es un nización. pueblo; un pequeño pueblo, que tiene »Por lo que se refiere al cuerpo alcalde y todo. Por tener alcalde—aporde Telégrafos, y a h a logrpdo tam- que lo tuvo mucho tiempo contra su bién sufl reivindicaciones con to voluntad—, El Granado ha presenciado disposiciones publicadas hace días, cosas terribles, cosas que parecen imsobre colocación y eobre reforma de posibles. la plantilla. Cada uno h a quedado Por ejemplo, en El Granado hay un y a en el sitio que le correspondía. edificio dedicado a escuela y a cárcel. »En. cuanto a la Telefónica, ayer La escuo'a ocupa les dos tercios del quedó aprobado por el Consejo de edificio; la cárcel, el resto. lUya niños a veces un poco en broma: Ministros u n decreto creando l a pregimíaa a la cárcel?» Ix)s presos, j u n t a que prevé el contrato con «¿Vamos cuando recobran su libertad, exclaman: la Tleefónica, sobre u n control cons- «¡Por fia salimos de la escuela!» tante del Estado en el funciranaigual I * escuela es sucia. Como miento de la Compañía. Ya estaba la Es cáxceL La cárcel es esta-echa y somprevista esa j u n t a en el contrato, bría. Como la escuela. En la escuela y pero no había sido nombrada. Exis- en la cárcel falta la alegría y el amor. tía el control económico, y n o exis- Son diOs centros de tortura que están juntos y abaadonados. El cacique de El tía el técnico. Granado tiene un santo horror a 3a PARA EL PORVENIR escuela porque de ella pueden salir un día los hombres que acaben con su lApenas estos servicios queden ^ Ijoder. T tiene, además, un miedo terrinormalizados en su isníerior fun- ble a la cárcel porque sabe que más o cionamiento, espero que este minis- menos tarde la cárcel se abrirá para él. terio se n u t r a con sus funciones Yo no sé si estos días se habrá cumpropias, oomiO ferrocarriles, comu- plido ya la profecía. Las gentes de El nicaciones por carreteras, M a r i n a | Granado te odian Coi*dialmente. Le mercante, etc.» odian y le temen. 3BH temor suele ser el más peligroso de los enemigos. LA FALTA DE DINERO El señor feudal de El Granado no TRLECBAFOS —Todo eso indica que tiene us- tiene oficio ni beneficio. No tiene renY TELEFONOS ted un plan de mejoras en las Cb-; tas. NI ha fabricado moneda falsa, que sepajtnos. Pero vive espléndidamente., ; 1*asa el señor Martínez Barrios a municaciones, ¿Van a realizarse &1-' Administra indirectamente 20.000 pesegrnias en plasMj inmediato? hablarnos de Telégrafos, y nos di-¡ tas del presupuesto municipal. Las adde que va a que ^ t e servicio desera^j —-MeJ&ras posibles, h a y fitóchas, ministra con celo. Con ese dinero. El P6ñe la totalidad de s u s funciones. I pero, como y a he dlého antes, n o Granado teñdiia calles de oro, y las ca- POR TIERRAS DE ESPAÑA LO QUE PRODUCEN Y LO QUE CUESTAN LOS SERVICIOS Todo el hiundo sabe que el sei> vicio de Correos constituye u n a verdadera r e n t a p a r a el Estado, pues lejos de costar dinero, produce u n a cantidad respetable. P o r eso indicamos al ministro la posibilidad de que las mejoras necesarias se puedan realizar sin sacriflcáo p a r a el Estado, y el ministro nos dice: —Esa cuestión h a y que m i r a r l a en conjunto, porque aunque, efectivamente. Correas produce sil Estado m á s de treinta millones de pesetas, Telégrafos tiene u n déficit d« unos diez y siete o diez y ocho millones. EL PERSONAL . El señor Martínez Barrios termin a refiriéndose al personal de Correos y Telégrafos, al que dedica con g r a n entusiasmo los mavoreS elogios. —Son dos cuerpos—dice—llenos de modestia, de abnegación y de ejemplaridad. Les faltaba interior satisfacción; tenían, p a r a u n traslado, por ejemplo, que acudir de una: m a n e r a particular a alguno de los jefes... Ahora h a n sido nombrados directores generales de Oorre(« y Telégrafos, dos funcionarios de u n o y otro cuerpo, y esto debe ser para, todos u n a satisfacción y g a r a n t í a de que i m p e r a r á la justicia. líCon estos dos directores, yo n o hago aquí otra cosa que refrendar los nombramientos; son dos jefes honorables que tienen la plena confianza de los íuneionarios, y, naturalmente, la mía. Todo cuanto han hecho h a s t a ahora no h a merecido m á s que aplausos generales, incluso algunos traslados que se han hecho, porque se h a n hecho también respondiendo a u n espíritu de justicia que a todos h a satisfecho. sas podrían ser de marfil. No tiene ca^ lies. Las calles son barrancos. Las casas, muy modestas, están hechas con la mezcla más humilde... No hay manera de librarse de los Impuestos. Se cuenta que un día un vecino quiso protestar <Je la cuota que se le había fijado en el departamento. He aquí lo que ocurrió, poco más o menos: —to—dijo el vecino—no puedo pagar esa cuota... E3s superior a mis fuerzas. -—La pagarás—replicó el cadqua. —Imposible. — t pagarás, además, «anco peseta» por cada palabra de protesta. —Es... —¡Cinoo pesetas más...! —^Pero... —¡Diez pesetas más...! No pudo continuar. Y pagó la multa. La pagó sin pronunciar una pa'abra. No me expllao cdmo sigue callando Él Granado. No me lo explico. Estos días leo los periódicos de Andalucía —los de Huelva especialmente-—porque me temo que ocurra una ooaa tíágioa. Pero no ocurre nada. El Granado, como todos los pueWos de España, es un pueblo bueno, Incapaz de tomar venganza. El cacique de El Granado cuando se indignaba contra un labriego le cruzaba el rosti-o. El labriego, como Cristo, sufría, pero ponía Va. otra mejilla. Es muy posiWe que a estas horas el cacique se haya hecho republicano. Si El Granado fuera un árbol serviría para coSgar de él al cacique; pero conao es un pueblo no le va a quedar otro recurso que servir al cacique en nombre de la Eepública. Es esa la maniobra que están realizando todos los caciques. BodoMo VUSAS Teléfoxuw d» CBIBOl^: SSMÍ y Sábado 16 de mayo de 1931 C R I S O L DE P R E N S A P A Í S VASCO Propaganda en la Bioja En la Rioja alavesa se extiende y consolida la organización republicana yernos en la Prensa local el entusias. Vio con que se han inaugurado nuevos centros en Baños de Ebro y Villabuena, asi como la reseña de ünportantes actos celebrados en Samaniego, Navaridas, Elciego, Laguardia y Labastida. Provocaciones clericales En «El Pueblo Vasco», de San Sebastián, vemos las siguientes declaraciones del gobernador civil civil de Guipúzcoa: «He abierto una información para el esclarecimiento de los sucesos del sábado último; y por las referencias que Be han recogido, parece ser que, contra lo que era habitual, se piiso a la venta el semanario «La Cruz», voce8,do por jóvenes pertenecientes a diversas congregaciones religiosas, que lo pregonaban con palabras jactEinciosas, llegando a decir uno de ellos en la calle de Garibay que era el semanario ieídor por las personas decentes; y estas arrogancias y otras bravuconerías tan imprudentes son las que dieron lugar a los lamentables sucesos que se produjeron. Se i)ermite llamar la atención acerca de algunas campañas de Prensa y de actuaciones poco discretas de autoridades eclesiásticas, que parecen empeñadas en librar peligrosas batallas en monaentos de tanta gravedad para el país y en que todo el esfuerzo de los gobernantes es necesario para el mantenimiento del orden, acerca del riesgo que supone el colocarse en actitud subversiva y de franco desacato a las órdenes de la autoridad gubernativa, que si se ha abstenido de adoptar medidas de rigor por evitar a todos perturbaciones innecesarias, actuará con la energía necesaria si las circunstancias asi lo reclaman, sin detenerse en la jerarquía civil o eclesiástica de los perturbadores.» Del fondo de «El Liberal», de Bilbao, del día 13: «Anoche se intentó producir en nuestra villa una perturbación semejante a la que ha dado lugar a los sucesos desagradables de Madrid. Nadie dudará ^ o r a de la maniobra. Un grupo de mozalbetes—de pelo engomado y chantel de comunión—, aprovechando la presencia de unas monjas, a las que no hacían el menor servicio, se dieron a gritar, poseídos de una furia injustificada: «iVivá Cristo rey!» ¿Qué propósitos eran los suyos? A nadie de cuantos paseaban por la Gran Vía se le ocurrió que pudiera gritarse muera, ni antes ni después de que los jovencitos dé marras iniciasen la. maniobra. No faltaron quienes pretendieron encabezar una manifestación con ese viva y con im muera que el lector puede imaginar,; El caso era, bien se le alcanzará al más romo, sacar a nuestra vUla de BU calma serena, de su vigilancia dis. yiplinada, y lanzar a las masas populares a la comisión de violencias-que pongan en entredicho la bondad dé la República. ¡Tonto tiene que ser—^no incauto—quien se decida a hacer el juego e los provocadores monárquicos! Salvo quienes coincidan en el iniemo interés perturbador que los monárquicos, nadie con dos dedos de frente entrará en la torpe combinación. I A República, lo dijimos ayer, lo repetimos hoy, no necesita de incendios de conventos, como, no necesita, i)ara hacer su obra, que las m u j e r e s sean violadas en la calle. Si a alguien le está haciendo mucha falta íque ocurran esas cosas "es a los mobárquicos, ¡Lo que darían porque la República se deshonrase a sí misma!.Ya que esto no oíjurra, tratan de poner por su parte cuanto pueden para que !a paz se altere y hallen confirmación BUS prédicas.» l a cuestión vasca Diferentes organlsinos están oelebranño reuniones con el objeto de concluir las bases para un ÍEstatuto del país vasco. Con este motivo, la Prensa regional ha publicado el siguiente llamamiento del Comité Universitario Vasco de Madrid: «El Comité tTniversitario Vasco Be cree en la necesidad de hacerse oír fen estos momentos trascendentales. Razones de oportunidad política le mueven a eilo. Se trata de los destinos de núes. defendiamos la República y 2a salva ción ce la España auténtica. La autoridad legitima, guardadora de la salud publica, dcoe reducir a esas ageni,cs provocadores, q^c en vez de sembrar la paz, siembran la guerra. Por España y por la RepúbUca haga^ tro pueblo, hasta ahora encauzados n r espítales respectivas y a la Sociedad d¡e vías totalmente opuestas a las que en Estudios Vascos para que designe de- se justicia, aunque para ello se abian las puertas de la cárcel. un régimen de justicia, comprensión y legaciones de los miembros que se sulealtad hubiera llevado. De haber se- men a la Comisión, requiriendo, adeguido en esa dirección nuestro espíritu, más, el concurso de todas las entidanuestras virtudes y nuestra lengua "su- des culturales del país. GALICIA bieran desaparecido bajo la absorción Se gestiona que a la Comisión refe^ Los personajss restaradorcs asimilista. rida se agregue la que ya estaba funEs ahora precisamente cuando el cem- cionando pro Facultad de Medicina en Es interesante la Información que bio de dirección hacia el auténtico por- Bilbao. aporta «El Pueblo GaUe^o» de Vigo al venir vasco es más posible. Dentro de los incidentes del Círculo Monárouico:| ANDALUCÍA unas semanas funcionarán las Cortes «Basta leer los nombres de los ele. Constituyentes. En ellas ha de asen- Ccmentario a la pastoral del primado gidos para regir el flamante Centro pro^ tarse el éxito de la República y la tranrnovedor de los disturbios: insiemliiLa, «Gaceta del Sur», de Granada, dice cantes. sin calidad m.ental, orise'', sin" quilidad del pueblo vasco. Forzoso es sobre la pastoral del primado: "alor social, slñ Tcpresentaclón alguna.que para entonces el país vasco dé una «La pastoral del primado, conocida, Son simples agentes del más podrido sensación inflexible de su potencialidad. juzgada y alabada por todo el mundo caciqíi-.K'no y do la más desacreditac-.V Y ésta sólo puede conseguirse por medio de una unidad de afecto y de ac- católico, es de una lealtad irreprocha- plutocracia. Uno de ellos, bien conocido en Lupo,ción, Es absoljatamente necesario que ble con el Poder constituido y con las alaveses, guipuzcoanos, navarros y viz- diversas opiniones políticas que la doc- ?ra el cabezota de piedra de la conjtmí ción de esta provincia, de a(iue] abecaínos se percaten de la enorme res- trina católica permite a los ñeleg; rígi- rrante contubernio que, cuando piibüdamente ortodoxo, el documento del carponsabilidad del instante actual. camos el documento indubitado qae lo A las Constituyentes ha de llevarse, denal Segura no contiene un párrafo, afirmaba, asombró a Galicia y a Es. con energía y con cordialidad, la im- ninguna afirmación y ninguna reco- paña. presión de que al pueblo vasco y a su mendación que no se autorice con algún Y acude a defender su fuero pro vi ntradición, preocupado por su futuro, texto indiscutible o con alguna de las ••'al, para seguir mangoneando los once sólo le interesa gobernarse por sus normas decretadas por la Santa Sede distritos que, como herencia famillarj para la actuación voluntaria o precep- eslima suyos. propios medios. de los católicos en los asuntos púEs una garantía de acierto nuestro tiva Y en las afueras, aconsejándoles y, pasado para que desdeñemos un por- blicos. alentándoles, estaban todos, absoluta, No es el cardenal Segura, por su mente todos los grandes cazurros de la venir equivalente. La unidad, si antes fué un deber, ahora es una necesidad. cuenta y con su opinión, sino la Santa rertón, jugando la carta de la monarSede la que, con textos anteriores a la quía, la úi"uca de que pueden disponer Una actitud, simpática y si^ificatíva, ha sido dada últimamente por la República, habla en la pastoral que ha sus intereses y sus últimas esperanzas.» Cámara de Comercio e Industria de Lo- incomodado al señor De los Ríos. Si groño, aspirando fervientemente la 'n- es «una actuación de esta naturaleza» corporación de la Rioja al movimiento lo que no quiere consentir el Gobierno autonomista del país vasco. Rioja vuel- provisional, vale más que lo medite; ve la vista a sus orígenes para inspi- que considere los conflictos a que se arroja y el estrago que puede hacer en rar sus anhelos. Hace falta—y no es otra la finalidad la paz de España.» Parece que el gobierno provisional de esta nota—formar inmediatamente «La Croix»— el «Debate» f r a n c é s lo ha meditado ya, por fortuna. La el bloque autonomista vasco. marcha del imprudente primado es todo decía el 12 de mayo: «Los aconteciSólo unidos,^ en la organización y "en mientos toman un giro muy grave en la idea, el país vasco podrá conseguir un síntoma, si bien poco agradable, se- Madrid, que parece estar en •vísperas de la República la organización inter- guramente, para la «Gaceta del Sur». de una revolución.» na a que tiene sobrado derecho. La crisis del campo ¿En -vísperas? No, pío colega. Error El pacto de San Sebastián señala el «Política» de Córdoba, pide que el mi- de buenos clericales, que en ninguna rumbo al pueblo vasco para recunerar latitud acAhaxL de enterarse dé que la soberanía perdida, y a la República nistro del Trabajo visite el campo an- su reno ya no es de este mundo. Esdaluz para que adopte medidas urgenpara reconocerla. paña se halla, no en vísperas, sino en El pueblo vasco necesita en estos ins- tes. Añade: «Los ánimos en tensión y la impa- la ardua tarea de dar remate a su retantes decisivos un organismo propio, volución. Entérense de una vez: aquí que concentre y oriente a "las fuer?»? í pública; S ? Í ^ .^?5 triste JS^'liSLÍTi^^S! íi^Jíl-^!' herencia de Ja monar- ha pasado algo. Y lo que anhelan los de Álava, Guipúzcoa, Navarra y Viz- quía y lala presión de los agitadores y clericales del mundo entero, y con caya. agentes del desorden, promoverán ho- ellos «La Croix», aquí no puede volUnidad vasca nedimos para ahora v clios tristes, si el Gobierno no inter- ver. para el futuro, Y, dentro de esta uní. viene con prisa, este mismo mes, estos SI mismo periódico, sin embargo, dad, para vigorizarla, el reconocimiento dias. En. nombre de la República y de integral de las peculiaridades propias Andalucía, que no quiere \er sus campos publicaba el día siguiente un comende todas y cada una de las resriones encendidos por el odio, solicitamos la tario inspirado en una plaus'ble pruvascas.—El Comité Universitario Vasco inmediata visita del señor Largo CaLa- dencia, que empieza con estas pala^" de Madrid.» lloro. del ministro de Trabajo, hombre bras: «El populacho h a incendiado de fría y certera visión, que deba «ver» diez conventos en Madrid: evitemos no obstante emitir juic'os prematuel problema en su mismo foco. En «El Pueblo Vasco», de San Se¡Que venga el señor Larfro Cab'ilie- ros.y- Y pregunta: «;.Se dejarán loa bastían, del día 14 dice «Alcibar»: 10 y lecoja, para trasladarla al go- correlig'onar'os de allende el Pirineo «Varios prelados, siguiendo la doc- bierno, la lista de medidas urgentes. arrastrar por las circunstancias, obetrina de la Iglesia católica, venían Hay que empe7,ar a racionalizar los sa- decerán a las maniobras de los extre^ aconsejando sensatamente el acatamien- larios y reducir a la posibilidad del mistas de derecha y de izquierda que, to a la Repúbüca, con la cual debía/- campo el ritmo de las rentas y los «de común acuerdo», desean la mala mos colaborar a la paz de la nación. arrendamientos, si se quiere evitar una inteligenc'a entre la- Iglesia y el nueEl cardenal primado, de Toledo había tragedla. vo régimen español?» hecho lo propio últimamente. Pero en En nombre de la República y de An;De común acuerdo, dice «La Croix» ?' el texto de su pastoral advirtieron los dalucía pedimos la intervención del se- Tiene motivos para estar b:en inforgobernantes un consejo tendencioso en ñor Largo Caballero, porque esp ¡ramos mada. favor de la monarquía. Alentados los no tenga carácter meramente oficial, simonárquicos por tan alto apoyo, cele- no que sea inteligente, sustantiva, hubraron el acto conocido del domingo. mana. Y, como consecuencia de su viaOp'nión liberal: el «Manchestér En él se desbordaron ios entusiasmos j e , una serie de decretos que penetren e» favor de don Alfonso. La coinci- a fondo la cuestión. El campesino no Guardian» (12 de mayo): «Es cierto dencia de ambas actitudes, la de los tiene ya paciencia para esperar fiu" las que la causa profunda de los ataques monárquicos y la de Su Eminencia, ha Constituyentes se com'oquen y dlsculiin a los conventos de jesu'tas y otras producido el rozamiento del pedernal. y acuerden la forma de la tierra. Ur- órdenes monásticas ha sido la agita/, La cihispa ha caído, como respuesta a gen las medidas preventivas;» ción poJítica en la cual la Iglesia se la pastoral de Toledo, en docenas de ha lanzado con frecuencia de un moconventos inocentes. ¡Siempre ej hilo do insensato; mientras que la causa LEVANTE Si rompió por lo más delgado! inmediata de los disturbios ha sido ía conducta provocadora de a l a n o s jóLas audacias clericales Los conventos han ardido. I/Os vovenes alborotadores monárquicos... El bres frailucos, las monjicas y sus asiPara que se observe la campaña de Gobierno, que ha proclamado la ley, lados han quedado sin hogar. ¿Qué te- provocación qué están llevando a cabo marcial, ha hecho cuarto estaba en nían'que ver ellos con la hida'guía di- los elementos clericales, léase lo que nástica del ilustre obispo, que en vista dice «El Puebloyí de Valencia. Y eso que su pod.er para poner término a loa e x c e ^ s'n caer en medidas de rea las Hurdes conoció don Alfonso, ele- en Valencia no se asaltó ningún conpresión militar, que hubiesen incitado véaáolo al solio del primado de la Igle- vento: » sia?... ¡Pobres fraifes, pobres monjas, «El domingo, con motivo de la fes- probablemente la multitud a mayores pobres asilados, abandonados a la de- tividad que la'Iglesia'celebraba, al'ju- violeijcias. riva en mitad del arroyo!... nos desaprensivos subieron al p'üpito «El clericalismo y su corolario el anSu Eminencia el cardenal Segura pa- y • lanzaron denuestos contra la Repú- ticlericalismo figuran, según han deaó ayer la frontera, en automóvil, sin blica V encendidas soíLamas monániul- mostrado los ^«^ientes acontecimiencas. novedad.» tos, entre los problemas más arduos Esto ha ocurrido en Valencia y en que ci joven Gobierno español tiene Hacía la "Dniversidad vasca templos sujetos a este arzobispado. planteados. Si la República qu'cre •vi-' El Ayuntamiento de Bilbao ha acorEn la Iglesia de San Valero, >1e Ru- vir, no sólo tiene que ev'far a toda dado la creación de una Comisión de 7Ria; en la ermita, de San Juan de la co.íta la repetición de tales atentados, Estudio de la Universidad Vasca, con Ribera, de la Avenida de los Aliados • en la finalidad de preparar urgentemente la iglesia de San Antonio, de la crdle sino que tiene también que eliminar cuaiito se relacione con la posible ins- de Sagunto, ha habido unos juníperos, »u causa emprendiendo 'valerosamentalación en Bilbao de !a Universidad elfeTÓn padre- Femando, que el domin- te el reajuste completo de las relaciovasca, que^ a su juicio, debe ser uni- go se sintieron émulos del cardenal Se- nes entre la Iglesia y el Estado.» taria y establecida inmediatamente por gura y se refocilaron sembrando Ja 'nquictud en los cspfritus. el nuevo régimen. Esta Comisión invitará a las diputaA estos perturbadores debe ImoonárJXététom»^ ^ CRISOL: 5 3 ^ 1 y ciones de Alaya, Guipúzcoa, Navarra seles lá ley. el castigo ejemplar, él misSSMZ y Vizcaya; a loé ayuntamientos de las mo código que so nos imponía a los quw' Prensa extranjera Sábati0 16 de mayo de 1931 TABLA REDONDA Briand, Doumer y Europa A los republicancis «spaaoles no puede, naturalmente, dejarles indiferentes Ja persona en quien h a recaído pOT la elección del miércoles, l a jefatura del Estado francés. Entre España y Francia hay, desde el 14 de abril, algo más que la vecindad, geográfica. Hay simiiitud de régimen y afinidades políticas de m u c h a s clases. Además, E s p a ñ a h a entrado en el concierto de las democracias europeas. Le afectan, des de ahora, cuantos acontecimientos puedan repercutir en favor o en perjuicio de la cooperación internacional de la buena inteligencia ent r e I-os' demás pueblos: es decir, de la paiz. Y de l a reconstrucción moral y material de nuestro Continente. Desde este tiunto de vista, que n a de ser «n adelante, el de los republicanos espafroles--iibres y a de las intrigas palaciegas y persorialísLm a s de Alfonso de Borbón, que en m á s de u n a ocasión estuvieron en franco desacuerdo con los v&rdad' 10- ir lor-aes >\- la nación—, desde este punto de vista de la democracia europea, ¿cuáj es el sentido v cuál puede ser la consecuencia de l a victoria de Doumer? En los dos días transcurridos ya se ha contestado esta pregunta de v a r i a s maneras. Ante todo, y era b a t u r a i después de los apasionamientos de la lucha que antece^Hó a l a «lección presidencial, se le h^ dado u n a respuesta pesimista, catastrófica casi. Más que la victoria de Doumer, se h a hecho resaltar la derrota de Briand. Y con.o quiera gue a la candidatura de Briaud so le dio u n Sentido de combate contra la reacción nacionalista; como quier a que a Doumer, rechazado en pri m e r l u ^ a r por los conservadores intransigentes y los industriales del patriotismo, por su etiqueta radicalsocialista (bien inocua, sin embargo, en Francia), o por lo que fuer a , le acogieron luego todas U^Ü derechas; como quiera que con ei apoyo, socialista se convirtió, en cambio, a Briand—la vida política tiene sus ironías—en el paladín de las izquierdas, son muchos los que consideran en F r a n c i a y fuera de Francia la victoria del presidente del Senado como u n triunfo de la reacción, del nacionalismo agr-sivo, en el interior y en el exterior. P a r a quien se tome la moJestia de examinar con algún detenimiento la situación respectiva rVe uno y otro candidato en el momento de la votación, apartándola de las simplificaciones propias de la lu'iha, no puede menos de parecer u n tanto exagerado ese juicio. La verdad es que h a influido mucho ei fac tor personal, especialmente, en el caso de Briand. En el curso de la entrevista con los parlamentarios que le decidió a presentar su candidatura, el entonces ministro de Asuntos Exteriores, hizo res-iltar precisamente, los violentos ataquen de que se te hacía objeto en algunos sectores, y el viejo diputado Gastón Thoms^'U, le replicó que esos ataques «iban dirigidos, no contra su política, sino contra su persona)). En las derechas se uníar, en u n mismo odio, persona y política. LOS ÚLTIMOS AÑOS DE LA DICTADURA R5 La operación la manda el general Souza y la dirige Berenguer,* El día 4 do marzo nos enviaba estos informes: «La operación—iniciada hoy que ha mejorado el tiempo—se presenta muy dura. Apenas s ise ha avanzado algo sobre los objetivos. El enemigo (numerosísimo) ha hecho una gran resistencia. Hemos tenido 200 bajas, entre ellas la del coronel Millán, herido grave en la cabeza. (A consecuencia de dicha herida perdió el ojo derecho.) El enemigo tiene en esta guerra un éxito enorme, pues sabe llevarnos a hacer la guerra a la montaña, adonde le conviene. Lleva la, in'ciativa siempre. En toda la costa,. hasta Uad Lau, se ha hecho una gran demostración de desembarco. Se ha gastado una millonada de metralla, pues amén lo que han tirado los barcos, las ecuadrillas de Larache, Sevilla y Melilla, que vinieron a reforzar las de Tetuán, han estado volando todo el día y arrojando bombas; Asusta pensar lo que cuesta todo esto. Pero Abd-el-Krim, por lo visto, sin estado mayor, ni intendencia, ni parques de municiones, le sobra para traernos en jaque. Como mañana continúa la operación, y creo se avanzará más, porque ^ como lo de hoy no lo van a dejar decir, creo preferible no engañar al país diciéndole que es gloria lo que no es otra cosa que un desconcierto y una desorientación, como resultas de la «famosa ÍI' usa» dejada al hacer la retirada, que dejó a Tetuán al socaire.» Ayer, al anochecer, fueron atacados todos los blocados ds la línea de río Martín, viéndose desde la ciudad el fuego de las granadas de mano y fusilería. La gente se sigue marchando poco a poco. El cañón, apenas ha tirado hoy, pues, por lo visto, el enemigo lo prepara para recibir a las columnas.;» Primo de Rivera publicaba en «El Noticiero del Lunes» del día S lo siguiente: «Virtualinente puede considerarse terminads, con la ocopaGÍón, •Sel collado de Dar Bald y meseta de Safa el SCa, la operación militar realizada para librar a la dudad de Tetuán del efecto á* loa fuegos de tos cañones emplazados en cueivas u oqtiedsdes de iem más «atos pieos de la sierra de BenKHosmar. Una vez más el mando y las fUet-zas del ejército Se Msrrueoos Ikaa resuelto r a í d a m e n t e las dificultades que el problema ofrece y seguirá ofreciendo mientras no se logre la stunisión completa «le la rtíietdia, a lo qne se va por todos tos mediO«.» Cuando se daba por terminada esta operación comenzaba otra en te a m a de Laracbe y otra en la de Axdtr. Al mismo tiempo, el día 15 el alto comisario marcM a Rabat I « r a conferenciar con el residente francés y con el general Bolchut, Acerca de esta conferencia tuvimos los siguientes informes: «En la conferencia de Rabat entre Sanjnrjo y Boiohut ha qaeda«o nlümado el plan de oi>eraclones de primavera. Los franceses emP**aráa e] 15 de abril y nosotros el 1 de mayo. Todo el plan trazado es sobre Alhucemas, o se», estrechar el cer•*• de Eenl Urrlaguel. Nuestro avance será por el valle del Neitor, y » * ^oderafeauw, taU» otra» cosas, del Yebel Harnaa o mottte* da las minas, " ' Pero entre los moderados dal ceaILos refranes ban sido siempre fietro, que probablemente decidieron les intérpretes de la realidad, según creencia general. la votación va desde el primer esLos mom^itos actuales- lian veirido crutinio, no faltaron ios que sostienen la política y reciíazaron al a dentostrar lo contrario, Aquí tenéis varios refranes que irhaa hombre. faTIrsflo». Bl proyecto aduanero austrcalsm á n h a sido u n a piedra en ei ch vr. co de l a s Cancillerías europeas, cuyos remolinos continúan agitan lo la superficie y llegaron hasta Varsalles. ÍJOIS enemigos de Acístides Briand—sobre lodo los de su política—explotaron a fondo y eax desprestigio suyo. Este incidente, que h a venido a perturbar la placidez académica de los debates en torno a u n a muy futura, casi lejana, Unión Europea. No pueden olvidarse los meritorios esfuerzos de Briand en favor de la paz, ni Locarno, ni lo sucedido después de T.ocarno. Pero en el caso concreto del proyecto austroaiemán no se olvide tampoco que Briand, aun antes de la elección presiden—^Bime con quién andas y "lé cial, preparaba p a r a Ginebra u n a quién eres. ofensiva contra dicho acuerdo aduaneroEn cuanto a su adversario victo' . FRONTERA rioso, cuajlesquiera que sean sus preferencias políticas dentro de su muy elástica denominación, las liESPAÑA-FRflNWA mitaciones del cargo no le permitir á n demostrarlas de u n modo demasiado evidente. El presidente en F r a n c i a n o puede salirse mv^cho de su función de arbitro de los partidos. La nación n o consiente s u inten'ención personal en la contienda: el caso Millerand no se h a olvidado odavía. Ei discurso de Doumergue, e n Niza, es 1 " ;' * * •" •^ la máxima manifestación política que se h a y a permitido en s u s siete años de ejercicio el presidente saliente. —^A Segura lo llevan preso. En vísperas de la elección escribía «I^e Temps»—que combatió la candidatura Briand y apoyó a Doumer con todo su peso—: (¡De todas maneras, l a obra de paz y de seguTidad será continuada. Es l a obra de Francia.» Esto es 4o que import a al pueblo franoés- y a s u s vecinos. A Europa y al mundo. Uno de los motivos por los cuales parece desproporcionado el tomar por lo írá'jr co la llegada de Doumer al Elíseo es rme no hav v a lugar en el mundo p a r a u n a política agresivamente nacionalista. Cabe mayor o menor fervor en la obra común de cooperación. Pero nadie, ningún p u e b l o - a su costa lo h a aprendido el fascismo italiano—, puede hoy sustraerse por completo a la solidadad que de hecho existe entre los pueblos (aunque se resista.n a admitirlo los gobiernos). Solidaridad materialmente inevitable. Que s e nutre de la misma vida moderna, vibra con ella, con nervios cada vez más sensibles, y crece y se inteneiflca sin que las fuerzas del pasado ni el oropel militarista lo puedan impedir. Los pacifistas en ©1 mundo tienen yá, además de la razón, también l a fuerza. En sus ñias acaba de ent r a r l a joven democracia española. No h a y motivo p a r a que les cause m á s nervioeidad l a victoria de Doumer sobre Briand, que, porgamos por ejMnplo, la del repubdicano Noover sobre el demócrata Smith. OGIKB PETECEILE -Xin barriga ytu^a h u r g a n ideaAi @r—^!^ Agrupación femenina republicana •Bu la imposibilidad Se contestar individualmente a todas Jas mujeres adheridas a esta Agrupación, se pone en sn conocimiento que se están llevando a cabo los trabajos de oonstltuclóa y que tan pronto como éstos termiaen se les comunicará directamente Existiendo un partido político con la denominación de esta entidad y no. teniendo ntiesti-a Agz-upación carácter partidista, se va a proceder a cambiar su nombre jjor el de «Agrupación femenina republicana», a la cual podrán pertenecer todas las mujeres qi», sin diferencias de nartldos, «niersn defender y difundir la" idea republicana. Las adhesiones, ^ r «Krito, a Miguel Ángel, U . Úadrid. .--á^iÉW'IIciHl'.ft'lHM'|riyb«,. 8 Sábado 16 de mayo de 1931 PORTUGAL Y ESPAÑA LOMAS URGENTE Don Gonzalo de Reparaz h a escri jÉo en estas páginas interesant-ísimos artículos acerca de l a nueva política española, y al t r a z a r las normas de u n a futura actuación partiendo de la nueva estructura federal de España, h a enjuiciado el problema de 'las reJaciones üispauoportuguesas desde un punto dé visita, perfectamente definido, que la p l u m a vigorosa de este cuito escrijtor viene sustentando desde hace mucho tiempo. Geógrafo, antes qrue todo, convenícido por la fuerza misma de los hefehos de que las determinantes geojgráficas acaban por prevalecer, y a que son m á s poderosas que cuantos artificios «e oponen a su triunfo, el sefior Reparaz enjuicia esta cuestión con el prestigio que le dan sus profundos estudios de la política peni n s u l a r y con el desembarazo que le proporciona haber nacido portugués. Por eso llega a conclusiones no aventuradas, sí prematuras; a conSelusiones qu© p a r a consoilidár en una, realidad n a d a próxima, requiejpen u n a larguísima labor previa de ios elementos taás capacitados de jambos países, y que, hOy por hoy, soló pueden ser motivo de suspicacia y argumento contraproducente en manos de tantos como, tienen interés en que las relaciones lusoespañolas sigan por el catice de incomprensión a-q^ue las-llevó la estúpida rivalidad de- dos dinastías. En lugar de ésto, la República española h a venido a fomentar el recelo. La dictadura portuguesa, comprendiendo el pedigro que p a r a ella significa que en la memoria del pueblo que esclaviza remoce viejos triunfos gloriosos u n ejemplo cercano procura por cuantos medios tiene, desvirtuar nuestra gran victoria democrática; acentúa la separación secuestrando la prensa española y haciendo en ]a portuguesa una insidiosa campaña; agita de nuevo como espeluznante espantajo el peligro español, que y a no es imperialista V absorbente, como antes, que ahora es comunista, demoledor,.. Nada conseguirá con tales patrañas. España no es líusia, lejana y enigmática, es u n pueblo vecino cuya personalidad resulta aígo dTícil desvirtuar; pero esta r.ianiob.'.i de la Dicta-Jura, unida a los ho^^ I dos pTobl^^maí interiores que P o tuga! tiene, maJogra u n a ocasión recepcional j.ara que hubiera scb""»:venido el cac.i} io de actitud que los dos pueblOe necesitan. No nos desesperancemos por ello. Cuantas más sean las dificultades, más alicientes tendrá esta labor que siemijre h a sido ingrata y espinosa, pero a la que 'se h a consagrado demasiado esfuerzo selecto p a r a que pueda Ser esterilizada por la ciega arremetida de la incomprensión y de la fatalidad. Quiérase o no se quiera, h a g a cuanto h a g a l a dictadura portuguesa, y con eUa Tas clases que la susAiités dé pensaa- en ningún acuer- tentan,,, especialmente ciertas órdeiflo político, que ^1 circunstancias nes religiosas qjié. tienen por nor¡excepcionales lo produjesen . a des- ma sembrar la cizaña, y ahora con ' tiempo sólo podían dar los más doble motivo les interesa que l a ci¡r'- ^Irosos resultados, sería con ve- zaña prospere, )a inteligencia lusoI ü. 'ortugai en E s p a ñ a y los ver- españoJa tiene que ser u n hecho, np Jdadei-Os amigos d e - E s p a ñ a en.-Por- sólo porque las determinantes geo.niente que los verdaderos amigos gráficas lo imponen, sino porque íjtugal laborasen intensamente pa- sólo en eJ mutuo apovo encontrarán ira conseguir u n a m u t u a compren- Portugal y España la fuerza preci'Bión fecunda, sa p a r a desenvolver su grandeza, soNada hay fan doloroso como ad- cavada precisamente, por la secular vertir al r a r o concepto que de Es- enemistad que los pueblos sucesop a ñ a y de k)s españoles se tiene res suyos en la hegemonía dé Eurom á s allá de las inexistentes fronte- pa, acrecentaron con perseverante r a s portuguesas, concepto que só- y taimada política. lo admite comparación oon el nue Antes de que pueda sobrevenir, el pOr aquí se tiene, de lo que ocurre acuerdo político—insistamos en que e n Portugal. El vulgo persiste en prematuro sería contraproducente— tina hostilidad m á s o menos vaga;, es preciso que otros acuerdos mefavorecida por rancios prejuicios la- nos vidriosos permitan la aproximentables. Lo que n o es el vulgo, mación en el terreno en que mejor h a . adoptado u n a actitud m á s cen- se consolidan las buenas relaciones Burable: volver üa espalda y' des- internacionales. entenderse del problema. Es preciso, en primer término, acoExiste u n a razón p a r a que esto meter él, convenio comercial que lleocurra. Cuantas veces se h a inten- va medio siglo de inútiles tanteos; tado aproximar a los dos pueblos pero este convenio, que debe ser p a r a que se conozcan los naciona- estudiado m u y minuciosamente y lismos irracionales, h a n hecho inau- con un criterio mucho m á s elevado ditos esfuerzos p a r a m a l o g r a r la del que se aplicó antes, tiene que intención. Los fracasos reiterados ser un modelo de lealtad y de desin ítcabaron por agotar los empeños teres, u n a prueba irrefutable de ) mejor dirigidos y el ambiente de que las viejas pugnas h a n desapa* Buspicaciá. de recelo con que aquí recido y de que al interés supremo y allí se acogía toda empresa con- de u n a m u t u a , a y u d a se deben posiciliadora, acababa por váioer las poner todos los mezquinos iniere¿voluntades m á s firDies. ses que vienen agitando los cues1? Tampoco l a s circunstancias han tiones porque les convienen las fayc^'ecido gi'an idosa l a ,obráu,de aguas turbias. ;SEÍproximación. Ahora mismo^ se esNo existe u n a sola incompatibilicita dando ei caso lamentable, de que dad fundamental entre lag econofe! advenimiento de la República es- ', mías portuguesas y españolas; hay, pañola, que durante tantos años ' por el contrario, u n a serie consideconsideramos muchos como ei he- rable de coincidencias compensado* icho más favorable p a r a u n a inteli- ras que pueden centuplicar e3 intergencia hispanolusitana, constituye cambio de productos oon mutuo protin nuevo obstácuílo por l a situación vecho. Algunas de ellas—me refiero «en que P o r t u g a l ' se encuentraa la producción y . m a n u f a c t u r a del Si en vez de detentar el-Poder lo corcho—nos ccJocarían «n primer, taás reacionario, ]o miis intransi- l u g a r en el mercado del mundo. gente de la nación ,portugiiesa. ri- Otras — piénsese en el aprovechagieran los destinos de aquel país miento de los saltos de f/^!\' los hombres liberales de otro tiem- nacionales—pueden contribuir P la po ¿qiié duda cabe, de que sin ne- absoluta trasformación de las induscesidad de acto, acuerdo, pacto ni i trias, del nivel de vida, creando u n a contrato, se hubiera establecido' el ! riqueza imp'Osible de calcular. lazo m á s poderoso de unión, la I Cuando se tienen bases tan s ó i fuente corriente de simpatía y de das en que apoyar un mutuo encordialidad que Portugal y España grandecimiento, que tanto nos imestán necesitando tan urgentemente? porta, es imposible pensar qué per- en algunos lugnres tan disparatadamcn te elegidos, que este solo detalle basta para deiuostrav la ignii,'-encia de quienes iucieran su señalari-iiento. Si después Je la «liquidación» decretada hace pocos días en ia «Gaceta» hubiera üe sostenerse oste im'itil y onerosf. organismo, cuyas ramificaciouea íuera de España son absolutamente infecundas, .sena preciso que el gobierno estudiase muy atente "i "nt.K la nueva crcani/.a^ión de osa oficina. El turismo que hay que incrementar ea España es el nacional. Lo prin;ero es que los españole.s conozcan España. Y sobre todo, que se proporcione facilidades para ese conocimiento, a los que no tienen posición de forturia que les permita ir a alojarse en palaces y a alberearse en suntuosas posadas carroterilcs. La riqueza artística de España va desapareciendo sin que a su conserva, ción se apliquen dineros que ,se gastan en cronagandas notoriamente tneíicace?. Ineficaces para el interés nacional, poique para sostener intermediarios no hay duda de su éficacia, Ijas personas «nudientes», q u e no pierden ocafiión de conocer capitales extran,ieras antes de conocer su proDia patria, están en su perfecto tirrp.-iio aunque a nuestro juicio no hagnn Uno üe los aciertos rüás rotundos del bien. Pero los que no tienen ro""""!- ''o gobier'.io pro\ísional ha sido ponei en liquidación el Patronato Nacional del <'oi-tuna ana les oermitan desplazarne fuera de su residencia forzada de traJ'UrLsmo. Confiamos en que no pararán ahí las bajadores, merecen que se les facilite, disposiciones encaminadas a poner cr- en la rn-4xima medida de lo posible, hacten en el asunto. Y una de la.s que cer turismo. Poraue el turismo no es lo nue esos veríamos con gran satisfacción decretar, sería la de hacer públicas y «de in- patronatos con sus característicos desserción obligatoria», ¡as cuentas ñc gas- pilfarros, han hecho creer a la-s gen. tos de ese funesto organismo, cuya rni- i te,s: ocupación de desocupados que se sion no pudo nunca ser la de iiacer tu- aburren. rismo literario y gráfico, subvencionar! El turi'ímo es la santificación de las campos de golf, hacer propaganda de fiestas. Santificación que, en nuestro hoteles y comedores de lujo, y hasta concento, consif^te. para el máximo becon.struir alguno de aquéllos. I neficio nacional, en que el tiempo aun ocupaciones necesarias para la viPara sostener ese despilfarro de or- las dejen Kbre, lo aproveche el ciudadagia se creó un impuesto, único en el I da '10 español viajar por España, conomundo, el seguro obligatorio en ferro- ciendo así aensus en sus rescarriles, que ha colocado a España en cectivas tierras, yhermanos, con su ura situación de ridículo internacional. I trato los pre.iuicios deshaciendo y errores que viey cuya primera consecuencia fué la de nen le-v^antando supuestas barreras de oncar-'CPt les viajo.s, yue nc FS precisa- reerlón engendradoras de odios suicimente un medio de favorecer el tu- das. riomo. En la legislación vigente el obrero Otro de los «aciertos» del «napoleónico» organismo fué construir albergues i español tiene derecho a xma semana de dure la política incomprensiva que viene rigiendo las relaciones hi&panoportuguesas. . I Puede ocurrir, es lo más proba , ble, que por parte de Portugal no , encontremos ahora nijigún deseo d e : afrontar estos problemas con la ge-1 nercsidad que es necesaria. i Tampoco debe preocuparnos gran cosa tal consideración. Si la dict a d u r a acentúa su hostilidad porque su misma naturaleza y su precaria situación se lo aconsejan así, habremos andado por nuestra parte el camino que nos corresponde. En Portugal no h a de faltar quien nos saJga al encuentro con u n a intención tan limpia y tan leal como ia que a nosotros nos mueve.. Rafael ALVABEZ EL TURISMO EN ESPAÑA 66 ' LOS ÚLTIMOS AÍÍOS DE LA D I C T A D U R S L Quieren anu'ar a Abd-el-Krim y creen consegtiirlo ocupando totaltoente su cabi'a. Veremos qué hay. Aquí se ha celebrado una larga conferencia entre los generales Sanjurjo, Castro Girona y Goded, trar zando el plan de operaciones, a más de ocuparse de la próxima relación de recompensas a capitanes y oficiales, .aue -ha,- d» "«hlicarse, Ja..,cual es de una eytensión enorme,» LA CONFERENCIA DE tlXDA' En los mism¿>s días en que se hacían preparativos paru tas operaciones que deberían realizarse durante la primavera, comenzaron unaa negociac.'ones entre delegados franceses, españoles y rífenos. Las entrevistas comenzaron en Camp Berteaux. «La primera entrevista con los rífenos, celebrada en Camp Berteaux—decían nuestros informes—ha motivado un alto en las conversaciones; puede decirse que casi en el primer punto. Para dar contestación ^obre el canje de prisioneros y el avance pacífico a la^ posiciones que se consideran necesarias por Francia y España para la segur'.dad, los rífenos pidieron una tregua para ir a consultar a Abdiel-Krim. En avión salió Haddu para Targuits, y el jueves se reanuda la conferencia El Aium. Se seguirán las conferencias en el campo por 8l no se llega a un acuerdo en las conversaciones preliminares, que no entren los rífenos en Uxda, donde se habían de celebrar los tratos oficiales.» Los delegados rífenos facilitaron a la Prensa la siguiente nota: «Hemos llegado a Taurit el 15 de abr.l. Estamos saUsfechos de la recepción que nos ha hecho el general Mougin, Mr. Gabríelli y M. Bouzard, intérprete. No se nos ha i)odido recibir mejor. Acudimos a lá conferencia ccn ardiente deseo de llegar a la paz. Tenemos plena confianza en el éxito de nuestra misión. Nuestro deeeo de paz es vivísimo y así lo hemos proclamado en distintas ocasiones. Solicitamos de los gobiernos francés y español que nos ayuden en la realización de nuestras aspiraciones, que han de permitirnos vivir en paz y con toda clase de seguridades. Hemos conocido las condiciones previas para la apertura de las negociaciones. . Tenemos la convicción de que la paz es posible si de ambas partea se hacen concesiones. En cuanto a nosotros, estamos decididos a hacer las mayores concesiones, siempre qua no se oponga a nuestros razonables derechos. Taurit, 18 de abril, Mohamed Ben Azercane. Haddu Ben Mammu, Amen Cheddi, cald de los Mitiua,» Las negociaciones se prosiguió, pero cunde el pesimismo. La delegación rlfeña tiene qu interrumpir las conversaciones para consultar con Abd-el-Krim. Sábado 16 de mayo de 1931 licencia con el salario pagado. SI el Estado (y la República debe tratar de conseguirlo) diese medios para que, en esa semana anual, el obrero, sin merma del presupuesto familiar, pudiera salir de su residencia y ver otras tieraras de España, pocos años tardarianios en recoger el fruto de tan interesajite siembra de cultura ciudadana. Acaso parezca utópica esa idea, ¿pero no parecía también utópica hace pocos años la propia «semana» de vacación retribuicia? Con los millones desperdiciados por ei Patronato Nacional, en el breve plazo de su existencia, hubiera podido hacerse, sin duda alguna, mucho «turismo español de españoles», que es infinitamente más interesante que «intentar» traer extranjeros, que venían en mayor abundancia antes que ahora, y lue, si vienen, será merced-a la labor que puedan realizar empresas de viajes especializadas en la materia. B. RUIZ FERRY VILANOS EN EL AIRE po de 50 ciudadanos armados dfe pis- | tola, para ejercer vigilancia en las carlies. LAS FIESTAS POPULARES •:.!:•• ¿Por qué ha sido aceptado ese ofrecimiento? ¿Qué pasa en Cádiz? El Grobiérno debe meditar sobre el peligro que puede entrañar el funcionamiento de grupos civiles armados, y desde luego," suponernos que la responsabilidad de lo que hagan esos 50 gaditajios, será de la autoridad que aceptó su ofrecimiento. Porque éste sería sincero en favor de la República—no lo dudemos—, pero a veces, los elementos «de orden» se convierten sin querer en representantes del desorden. No citemos ejemplos. * TTn niño a su mamá: —Mamá, yo soy socialista, La madre: —/.Cómo? ¿Tú socialista? ¡Serás monárquico, monárquico! El niño se calla. Después, lamidamente : —Mamá, ¿me dejas ser republicano de orden? * El director de Enseñanza, Rodolfo Llopis, ha anunciado en Cartagena el Funcionaba en Madrid una estación aumento del número de maestros en de radio, patrocinada por el conde da 5.000. Rodríguez Sampedro, y, naturalmenEse es el ejército que mejor ha de te, jesuítica y clerical. defender y consolidar la República. El de Sampedro se marchó a Hen«La Voz» celebra con grandes cadaya, de donde acaso vuelva con el racteres, el primer m e s de.la Repúapellido modif;cado, de acuerdo con blica. las circunstancias. En el mismo número ironiza, sobre Y, mientras tanto, y por si las mos- la conversión de los legionarios». cas, la estación de radio ha izado en ¡Un mes de ant'güedad en las ideas, 8U antena una bandera tricolor. no da derecho a tanto! Nos lo d'/j quien les ha visto a estas gentes la antena. «El Neivión» el periódico de los «sede Biltiai'», por es'mcia, está esLos «legionarios» Se han disueltó. r,orf'^'3 pecializado en erratRS oportunas y alarjKaturalmente! En cuanto cambió de niRntes, significativamente ' reiteradas. manos la bireccióh General dé Se- según «El Liberal» de aquella villa. guridad y el iti'.nísterio de la GoberAsi, el día 12 puso en su pizarra la nación. Quieren guardar las formas, siguiente nota: en vista de que la Repúblca desea «I^a peseta se ha cotissadó en la Bolguardar los fondos. sa de esta ciudad, a las dooe dé hoy, a razón de 256 pesetas los 100 francos.» * ¡Hay erratas que, .^or lo meaos, son Lá autoridad de Cádiz, ha aceptado el ofrecimiento que' le hizo un i^ru- todo un curso Grendiano! , . * • • . , SU R E V I V I S C E N C I A El criterio de la finalidad concreta a que se dedican las fiestas es el más útil y real, confirmándose por múltiples y característicos casos en España la teoría de su diverso origen y finalidad en oposición a la que sostiene, que sólo al concepto religioso son debidas. En nuestro psus es manifiesta la distinción por su origen y finalidad de religiosas, en su inmensa mayoría nacidas por el culto católico, pero bastantes de ellas aceptadas y trasformadas éste hasta perder, a veces, su característica primitiva; históricas o conmemorativas de algún suceso, generalmente, particular a la localidad en que se celebran, predoniinantemente las de reconquista, llamadas de moros y cristianos algunas, de las guerras o incursiones de los frariceses, y varias recuerdo de las guerras civiles, en conmemoración de la libertad; fiestas estacionales, propiamente dichas, y en las que se celebra, algunos de los hechos astronómicos y climáticos, en evidente modo, análogas & las paganas y con tradición directa de ellas, desde Egipto, Grecia y Roma, incluyéndose en este grupo las propiamente agrícolas, de regocijo por los más destacadas faenas de la tierra, y otras pastoriles, influidas ambas, como es natural, por el ceremonial de la liturgia católica. Hay un grupo de fiestas ligadas, Tnás o menos directamente, al carnaval, con personajes y hechos burlescos y satíricos, y en las que la influencia de la romanización en España es evidente. Por fin pudieran destacarse algunas fiestas de tipo social, predominando en ellas los elementos culturales, principalmente con danzas y músicas, aunque sean estos dos elementos génuinamente acompañantes del regocijo español, y nadie mejor que Cervantes lo sintetiza al escribir que canto y baile «hacen brincar las almas y retozar de risa; causan desasosiego en los cuerpos y ponen azogue en ios sentidos». tnsr EJEMPLO: LAS DANZAS LOS ÚLTIMOS AÑOS D ELA' DICTADURA 67 AI fin, en los primeros días de mayo, la delegación francesa y española hacen pública la siguiente nota: «Las delegaciones española y francesa han iniciado con la delegación rifeña, en Camp Berteaux, el 18 de abril de 1926, conversaciones encaminadas al mantenimiento de la paz, tomando como base aceptada de negociaciones los cinco puntos citados en la carta dirigida, el 11 de abril a Sidj Mohamed Azerkane. En esta carta se pedía, además, que las negociaciones debían terminar el 1 de mayo. Las conversaciones seguidas desde aquella fecha, tanto en El Aiun como en Uxda, han necesitado nueve sesiones, sin dar a la terminación una aproximación de extremos que permita asegurar en un plazo razonable el feliz término buscado. El desacuerdo no existe solamente en el detalle de aplicación y modalidades de ejecución, algunas d-e las cuales, ciertamente, justificarán un examen más largo, y el plazo necesario para ciertas consultas, sino sobre el principio de las cinco condiciones que pudieran considerarse como convenidas el 11 de abril próximo pasado, puesto que constituían la base aceptada de las conversaciones, de la cual se tomó nota por los Gobiernos. Estas condiciones eran las siguientes: Primera. Sumisión a su majestad el Sultán. Segunda. Alejamiento de Abd-el-Krim, Tercera. Desarme de las tribus, que recibirán garantías a determinar. Cuarta. Canje de prisioneros, a determinar el orden; y Quinta. Suspensión de hostilidades, con la facultad para las fuar«as españolas y francesas de ver ficar su enlace on el Kert. Para dar una muestra clara de su espíritu de conciliación, las dos delegaciones no han insistido en la aceptación previa ni en la ejecución inmediata de esta última, comprendida ya, sin embargo, en ía definición de la tregua. Hub.'eran, por lo menos, deseado que la delegación rifeña diera, a su vez, una prueba de buena voluntad, aceptando el arreglo inmediato y total j i e la cuestión de los prisioneros, cuestión muy propia por su carácter humanitario, ante todo, para poner de manifiesto los Bentimientos recíprocos con que estas conversaciones se iniciaban, puesto que se trataba de una solución que interesaba tanto a los prisioneros e internados rífenos como a los prisioneros e internados españoles y franceses. La delegación rifeña no ha creído poder responder a los deseos de las dos delegaciones e ir más allá del ofrecimiento de la entrega inmediata de los heridos graves, de los enfermos graves, de las mujeres y de los niños internados en el Rif, en número de unos quince, e igualmente el ofrecimiento de facilitar el envío de una siisión sanitaria y de un convoy de víveres a los prisioneros; pero sin querer, hasta aquí, hacer el gesto amplio esperado. • Dejando de lado estos pflntos, 'as delegaciones española y francesa han aceptado abordar el examen de las otras corfdiciones. Este examen ha sido activamente persegudo en Uxda desde hace una se'«lana, sin que en la fecha de 1 de mayo se vislumbre un acuerdo sobre los principios mismos de las condiciones. Merecen particular atención los innúmeros, •4ráriadoa y originales tipos dé «bailes españoles»,- que bien necesitan un estudio completo y sintético, hasta hoy sólo parcial y no siempre verazmente realizado. Nótase una perfecta oposición entre los bailes populares de toda la zona Norte, desde Cataluña a Galicia, incluyendo a León y Castilla, y los ejecutados en el resto de España. Especialmente Andalucía y Levante. Domina en la primera de estas zonas él baile colectivo, en corro o en rueda, mal confundidos éstos entre si por varios escritores, en oposición -al de parejas o aun pareja aislada, y a vecesde un solo hombre o mujer, característico de Andalucía, siendo de notar que esta modalidad llega hasta la forma de los cortejos y relaciones amorosas, pues en eÍ?Nort"e la ronda de mozos cortejando es ",0rriente, y se extiende hasta la cuenca media del Ebro, contrastando con el dúo de la reja andaluza o extremeña, que sigue hasta tierras de Toledo, Espléndidas manifestaciones del baile colectivo son las sardanas, acompañadas por la cobla especialmente, en la región montafiosa.de Cataluña, continuadas en Lérida por el ball de rodó y la propia jota, que hasta hace treinta años era el baile del país en unión del «ball faixaxs» de hombres solos, unidos por las fajas; el de coba en el Urgel, el de roba á los que se unen el do la morisca, la esquerran.i l'indiot, el del Sant en Grandella, y ei general a^toda Cataluña «ball plá». Mayor es aún la riqueza en la provincia de Ge ona, limitándonos a citar por característicos el del gambeto, los cLntes, de San Isidro, las moratxexs, el le gegant y caballers, y el de los fcart danzaire de Olot, extendido a otras regiones. Son igualmente tínicos y freneralizados en toda Cataluña los del ciri, de Deu, la bolanguera, la dan^a de Cañipdevanol, el contrapás, espunyolet, caballins, y los muy particulares del her.eu Riera, las gitanas, el patatús y el llamado galop de cortesía. Con grandes conexiones con los catAlfnes, pero con perfecta personalidad, eirtán los bailes levantinos o valenoiímos, deiíde la conocida tarana, •J del u y el dos, la xaquiera bella. el ball de torrent, y los muy variados llamados danses y danza valencianaque de Alicante pasan a Murcia, donde la guitarra sustituye bastante a la dulzaina y tamboril, para las llamadas malagueñas murcianas, así oomO! las castañuelas acompañan a la parranda. Por ser muy conocidos prescindí-' mos de los bailes andaluces, donde hay.' algunos momentos litúrgicos y procesionales, antes muy extendidos en" otras regiones de España, y ejecutados en el interior de las iglesias, con' tanto y tan antiguo abuso, que ya lea prohibieron los concilios de Braga y Toledo, y muy posteriormente, Carlos Illií en 1775, a pesar de ío cual, pudiéra-l mos citar más de una docena de ca-l sos muy característicos. Debemos ad¿1 vertir que la música serrano-andaluzai' de las provincias interiores, y los bal-j les a que acompañan, no entran en "S estereotipado cuadro de las danzas da' la región litoral, del que eruditos y, compositores han destacado también estos últimos años el llamado cante jondo. . ^» En la región del Ebro u Aragón nS, es exclusiva la jota, pues en Teruel' hay el danca en las funciones religiosas y en las de moros y cristianos,* además del remao, bolero, cercaviíla, baile del reinado, y formas muy di-, versas de jota y fandango, que se ex4 tienden a la Rioja, donde la influén-i; cia vasca y castellana es también evidente, ejecutándose bailes dé danzanles en cuadrillas, que pasan a Soria, continúan a Segovia y llegan al otro"" extremo de la cordillera Central en tierra de Avila, y aunque parecidos en los pasos a los espatadantzaris vascos,' no puede incluirse entre los grupoá de esta región, de cuyo señalanriientoil hemos de prescindir. * \ La extensa zona de Castilla y León con Extremadura tiene bailes de rue-j da y sueltos, probablemente derivadoá de los del Norte, cómo lo hemos cO'nprobado, incluso- en las comarcas d# las Hurdes, salvo algunos muy psxk ticulares de León, como el Ti-Toribio/ el mip mis el llamado sopas de ajo, y\ el tos pa un lao, que con dulzainad( tamboril y pandero, son acompañados con saltos y rebrincos, y gritos do ,jurj,u,.de i ^ a l origen que el jujio montañés, y sus análogos asturianos y gallegos, cambiados a veces en el a-la-laJ Continúa en León el llamado baila montañés, de dos filas de parejas, y] baja por Zam_ora y sigue hasta S§*] govia, acompañado de gaita y tamboi» ril, pasando por Avila hasta Cáceres, donde se Une a modalidades más me-, ridionales, como el baile del serengua y el oriundo de Salamanca, llamado 1^' charrada, así como a la jota extrema* ña, y a la danza de la noche de San Juan, llamada sayas, ejecutadas poí rondas de mozos, pues lanzan el jujüruju y forman cuadrillas de danzantes, especialmente procesionales, quí hacen extender esta institución mfistco-coreográfica hasta la provincia dé Huelva, donde también la hemos en-^ centrado. ' L. de HOYOS SAINZ \ 10 Sábado 16 de mayo de 1931 En la obra del señor Dicenla áesfl- Fni)erai6e un esUlo tun apto, tan ceft*. lan: una serie de tip<s cien veces asen- do al genero de teatro que cultiva cl dereadas sobre las tablas por nuestros señor Suárez de Deza. Insuperable hasinnúmeros currinches. Una moaa bue- ta para el mismo autor. na y honrada, a la que deshonró H caLa gente aplaudió mucho al comel u m n i a («Mari-Blanca», interpretada diógrafo y a los representantes—seácra En el boxeo, como en todos los de- damente después de 15 períodos de fie- por la señora María Guerrero); ot-a López Heredla, señor Asquerino, etc—, portes, los aficionados reciben con fre- ra batalla. moza celosa de la anterior («Anrlrea» a ios representantes y al comediógrafo^ cuencia grandes sorpresas. Una de En 1929 comenzó Canzoneri a com- por la señora Társila Criado)- un moE, dllas, y no minúscula, se la ha propor- batir como un «ligero», y mientras la zo jaque y bravucón, especie de tenocionado el resultado del combate ce- oposición no fué muy valiosa laa vic- rio rural, que quiere conseguir por la lebrado en Chicago entre el campeón torias se repitieron con frecuencia'; pe- fuerza lo que de ninguna manera conmundial de los «ligeros» Tony Canzo- ro cuando el año pasado el italiano se sigue de Mari-Blanca, de quien se venga mediante una absurda -istrataneri, y el que era juzgado como su a enfrentarse con los astros gema («Miguel», por el señor vJ-irlos más temible retador: Jackie Kid Eerg, decidió de su nueva categoría y escogió al Díaz de Mendoza); un mozo bueno y de Ijondres, efecto como prueba al inglés Jackie hombre pobre, «pero» lionHace varios meses presenciamos en Kid Berg, la paliza que recibió, como enamorado, rado XiUís», por el señor Dcrinel Madison Square Garden el primer dijimos al principio, fué soberbia, c hi- gola), («José y un de aldea, evangélico encuentro efectuado entre el italoame- zo pensar a los aficionados en que si y bonísimo, acura quien llaman en el puericano neoyorquino y el hebreo inglés, Canzoneri como «pluma» había sido blo «Cnchito de Pan» (a cargo del seEn el Ateneo de Turón (Asturias)', y la paliza que entonces le propinara campeón, como «ligero» no iba a pa- ñor Puentes), forman el cuadro priadio, el conoc do abogado ovetense doa Berg a Canzoneri fué de las que ha- sar de aspirante. Cuando unos meses cipnl de personajes en la obra. Benigno Arango una notable confecen época. De ella hablamos en aque- más tarde se enfrentó en Chicago con Ya se dará cuenta el lector, vista la rencia sobre el momento político. E!l lla ocasión. Canzoneri, v i o - y sintió— Petrolle y de nuevo resultó apo- simple relación de los tipos y el asun- conferenciante más guantes aquella noche que cuan- Billy tuvo una alus ón para rreado, la opinión se acentuó, sin que to del drama, lo que es «Pluma en el CRISOL, que no tos macarrones es capaz de comerse su queremos dejar de viento». Añadiré que el verso perteneposterior victoria sobre Singer, que ea toda una semana. El judío londirecoger porque es una prueba del ince a la estirpe poética de aquellos que le proporcionó el campeonato, cambianense, como de costumbre, se lanzó fama y prez dieron a Camprodón terés con que se sigue nuestra obra, desde el primer campaniHazo sobre ra su situación con el público, pues to- !I ytanta D jo el señor Arango: Ircopqldo Cano. do el mundo sabia que el apocado Sinsu adversario-, y no le daba ocasión, «Por otra parte, pide que se reco( n señor Dicenta salió repetidas veger subió al «ring» vencida de anteno ya de pegar, sino ni siquiera de poal proscenio aclamado por el auü- ja cl ejemplo de consecuencia dado nerse en guardia. Es muy lógico, pues, mano. Ha sido necesario que Canzone- \1 ees por hom.bres de todas las tallas repuque los que presenciaron aquel com- ri obtuviera su sensacional victoria torio.—E. blicanas, y recuerda la act tud de loa bate, al tener noticia ahora de que sobre Berg, para que el público se ha- ! VICTORIA.—<Xa princesa del Marrón redactores de C'fllSOL, que han corriGlacé» Caíizoneri — convertido en campeón ya decidido a tomarlo en serio como do la aventura del porvenir antes da por virtud de una victoria sobre Al campeón mundial de los ligeros. Reflejo de algunos episodios de esa vender su conciencia, viendo cómo los Singer, en que lo de menos fueron los vida baral que suele enmarcarse en la que les sustituían en un periódico que Tony Canzoneri reúne los estilos del pantalla golpes cambiadbs—iba a defender su cinematográfica, en la coine- iba a declararse monárquico de un motitulo por primera ver contra el for- boxeador y el batallador, todo en una dia anodina, o en la novclita *nsd)o mento a otro, tuvieron la fortuna da midable Berg, se sintieran francamen- pieza. Cuando combate con un contra- i sentimental, medio picaresca, sin crJs- que la revolución triunfase antes de la te pesimistas hacia las probabilidades rio del tipo agresivo, usa el estilo de • talizar definitivamente en nada, es el vergonzosa confesión y aun consiguiedel campeón, y consideraran el tittilo, los boxeadores científicos, por lo me- juguete cómico «La princesa del Ma- sen que ej presidente de! (5ob'emo lea por anticipado camino de Inglaterra. nos mientras u n , golpe del contrario ' rrón Glacé», perpetrado por el señor fuese a dar el espaldarazo de republiCerno decimos antes, la sorpresa fué no lo hace perder la cabeza. Cuande ; Suárez de Deza. canos. (Se refiere a «El Sol»). unánime al tener conocimiento de que su oponente conoce bien los puntos Obiitj. tranquila, un poco panfila, que Canzoneri puso fuera de combate a más finos del arte de la defensa prode poner a los redactores Berp en el tercer asalto del encuentro pia, entonces 4 italiano se vuelve en sin duda surtirá todos sus efectos los deDespués CKISOL como modelo de ciudadapor la tarde, cuando los chide Chicago, en el que no contó para extremo agresivo y sus puños no se domingos del comercio y las burguesitas ca- nía y entereza jKxlítica, p'de para ellos naSa el factor suerte. Simplemente, dan punto de l-eposo. Según el cable_, cos seras que todavía abundan, van al un aplauso. {La sala del Atenso so en su último combate con Berg, fué teatro. nn «fc. o.» limpio y formidable. hallaba repleta de público, que rompa la frialdad personificada y no malgasEsta es la única obra que conocemos en. una prolongada ovación, durando Como todo el mundo nos sorprendi- tó un sólo movimiento, recibiendo las Suárez de Deza. Pelizniente, minutos).» mos, pero más por el hecho de que acometida? del Inglés con contunden- del señor lo que nos dicen. Porque según infuera Canzoneri el victorioso que por tes golpes de derecha que pronto tu- por formes, el estilo de <'ste tscriior no ha razón de que Berg recibiera al cabo, vieron al hebreo en inferioridad. Un Jamás del que se muestra tendido sobre la lona, la cuenta regla- preciso dereohazo en la misma bar- discrepado Admioistratdón de CBISOL con toda alegría en «OLa princésita del mentaria. Hace üempo que esperába- billa en el tercer período, fué suficien- Mairón Y aun nay quien asemos ver a Berg vencido, y nuestxa sor- te para el inglés, que cayó a la lona y gura queGl-cé. Alcalá, 87. de ninguna manera i 3dría presa fué grande ai ver cómo trans- aunque pretendió levantarse no pudo currían los asaltos de su aún recien- lograrlo. te encuentro contra Billy Petrolle, sin Se dice dé Canzoneri, y no sin raque el esperado «knockdown» se produ3era. Una y otra vez, Berg recibió zón, que su nunca discutido valor lo hace crecerse en sus combates imporiii plena mandíbula terribles derechaLOS ÚLTIMOS AÑOS DE LA DICTADURA 6» aos del hombre que estuvo a punto tantes. Mucho tiene que aumentar de de «.noquear» a Jimmy McTjarnin, sin estatura s4 quiere salir airoso de su dejarse derribar por ellos, aunque en proyectado encuentro con el argentiLa delegación rlfeña, a la vez, declara aceptar el reconocimiento varias ocasiones la fuerza de los im- no Justo Suárez, el cual a estas horas del poder espiritual del Sultán, y rechaza el término y la idea de su pactos le hicieron dar una vuelta com- se halla en alta mar, camino de Kuemisión, como incompatible con el concepto de la autonomía, tal como .pléta. Como se recordará, Berg obtu- va York. Creemos que a Suárez no ella la entiende, La delegación rifeña no acepta ninguna ingerencia vo una más o menos bien ganada podrá llouidarlo de un solo puñetazo del Groblerno jerifano ni el reconocimiento del Sultán en la zona esvictoria por puntos, pero no pudo como a Berg, y el argentino, en campañola en la gestión de loa asuntos interiores del Rif. Tampoco acepsalvarse ,del terrible efecto que, a. juz- bio, sí es capaz de mandarlo a él al gar por el resultado de su encuentro limbo con un sólo golpe... ta, en fin, ninguna acción interventora o tutelar de parte de las au'de ahora con Canzoner, el fuerte castoridades del protectorado. La delegación rifeña declara que, en el A. ABROTO KTJZ tigo recibido le causara. Dado el esInterés mutuo de la ejecución del acuerdo deseado, no puede pensarse tilo de Berg, el declinar de sus faNueva York, abril de 1931. por ahora en el alejamiento de Abd-el-Krim. Sólo es posible que Abdcultades debió iniciarse hace tiempo. el-Krim, por su propia iniciativa, se aleje algún día del Poder y se reEl que no ocurriera hasta ahora tire a su casa, en el Rif, cuando el nuevo régimen quede implantado. prueba simplemente que el inglés poseía una resistencia anormal. Y la delegación rifeña declara aceptar el principio del desarme de las tribus y la intervención de esta operación de una comisión mixta hispanofrancesa; pero pide la constitución simultánea de una fuerSegún dice el cable, al ser proclaza armada, puramente rifeña, y encargada sólo ella del mantenimiento mado vencedor- Canzoneri se olvidó del orden, con exclusión de toda intervención y toda fiscalización exde su rival, que lloraba como u n muchacho, y se volvió loco_ de júbilo bai- FísPAííOIi.—íiPlnma en c l viento», por terior, No puede aceptar la entrada en territorio, rifeño de ninguna Joaquiü Uieenta -• • UinSo en el «ring» y besando a sus fuerza armada española o francesa que tuviere por misión velar por «segundos» y amigos. En realidad, teSeguramente, él señor Dicenta ño so la seguridad durante el período transitorio y asegurar la realización nía motivo para ello, pues si bien es ha propuesto reaüzar una obfá" de verdel nuevo régimen. La delegación rifeña entiende por autonomía adverdad que oficialmente fué declarado dadero etMpcfto artístico. Si lo hubiese ministrativa un régimen que, fundado sobre el hecho nuevo de la exisicampeón de los «ligeros» la noche que iiitentado habría procurado cuidar un' tencia de un Gobierno interior no el Imperio jerifano, el Gobierno del ; derrotó a Singer, hasta que obtuvo su poco más la forma de expresión, el Rif y las poblaciones adictas, no permitiría ninguna intervención do ¡victoria sobre Berg no fué considera- verso, aun dentro de los amplios li-. ido como un verdadero campeón. Vic- mitc£> en que .se mueven poéímas de la autoridad jerifiana o de la autoridad de la potencia protectora en los torioso. —y victorioso en forma es- esta dase. asuntos interiores del Bif. Respecto a sus relaciones exteriores, la depectacular—«obre Berg, un Berg que El drama nural efepaSol parece aue legación rifeña, si bien renuncia a reivindicar para el Gobierno del al regresar hace unos meses a Ingla- no tiene otro asunto ijue eü del catíBif el beneficio que lleva en sí la Independencisi, formula, sin embarterra, después de haber vencido a to- Qulsmp amoroso. Al ver «Pluma en el jgo, reservas sobre la aplicación de los tratados internacionales, que da la (posición que le haMan puesto viento» pensábamos en las muchas no podrían ser respetados de un modo general. La delegación rifeña ten Ntó'tKíE^ica, había sídó recibido obras teatrales españolas que desarro'en su patria como el verdadero cam- llan el mismo tema. Desde la fecha ya no ha acordado hasta la fecha que el régimen de los tratados quo re3>eón d« su categoría, actualmente no antigua de «La Dolores», el motivo draigrula la situación Internacional del Imperio Jerifano, no solamente en fdebe haber nadie que ponga en tela mático de la ca»iBinia viene siendo ob8US relacionéis con España y Francia, sino, en sus relaciones con la* de juicio sa derecho a. la diadema de ietfl de impertinente preferencia por otras potencias, sea intangible, y se extiendan al Rif sus modificacioI que disfruta, ;E»or lo demás, Inglaterra parte de los autores de «(?ran puD'icc». nes, Como se extienden a las otras partes de Marruecos. JTOsultó derrotada una vez más en sus En raerto modo hacen Won Tes autoj'esfueEEoe por recuperar alguno de los res, ya <iue este eran púbUco siempre lea otorga su pnitisleisino y sus apte.uj títulos mundiales del deporte que ella sos, Tal es, objetivamente expuesto, el estado de las conversaciones el como aconteció al señor Dicenta en fcreó y gaa « i otro tiempo fueron el estreno J, de mayo; es decir, en 3a fecha fijada para el acuerdo definitivo sode «Pluma en él vienU)». Buyos. .bre los principios de la paz. La tesis—Uíijnémoela a s í - ^ u e saUenta el e.utor es Jto de oae ima calinnn^a Con gran sentimiento, las delegaciones española y francesa se ven V 5 ° ? ^ CanziHieri es uno de los con- qtip logra euafcr en los VCTBOS de una en la obligación de hacer constar que en este día no han podido decifadisim^ mortales «lue h a poseído dos copla es imperecedera tiamo la plimia dir a los delegados rifeños a aceptar las conUiciones y garantías do idistmtos campeonatos mundiales. En en el viento. Aserto demasiado atreví, paz razonables y conformes con los acuerdos interoaclonaies, ¡1928 obtuvo la diadema mundial de los do. ya que las plumas vol»nt«s acahAn Y leída la anterior nota a la delegación rifeña y p r ^ u n t a d a si teiifplumas» al derrotar ü Benny Bass en por reposar en alguna parte, y l»}s nía que formular algún repsuro, manifestó estar conforme.» tin cfflnbate celebrado en el fJarden vientos n o siü-mpre soplan de modo en el espacio, sin desHe esta ciudad, el día 10 de febrero; que maiitengan un plumaje en voltereta. P°ra, pero d mismo afio—^ 28 Os sep- can.so, • LA REDENCIÓN DE ABD-EL-KBIM en fm, esto es Jo de menrts. Las Ideas tiembre, para, ser más eaactos—se de- tie no Espiraa & deoaastrarse más QIM jj uó íuiBoaiar arití)atar su su corona corona por por el el trances francés t » r la dialí^tirA virf v/iaíT «r,^i„,T¡r . . 5 ^ ^ " W ' o ««,t«"»'haban las negociaciones. Quedaba roto el «^mU^ Andrfe Mmiüa. q u i ^ le ganó moreci-j ^ d e S ^ t ó ^ " " ^ ' "^ ''^^''> ticio. Sin emfeargoj se ooacede UA nuevo plaza a UM rifeóot. Ese pl«" El boxeo en Norteamérica Cómo se hace justicia a CRISOL TE A T R O S Sábado 16 de mayo de 1931 11 Una Exposición de Arquitectu- El protector de la industria ^ raen Toledo nacional El arquitecto Alfonso Jimeno, fervoroso profesional de su arte, que viene consagrado con singular espíritu de sacrificio, tiempo y energías, al estudio de los problemas planteados por la arquitectura y el urbanismo actuales en Jas «ciudades históricas», ha dado una nueva prueba de sus fervores, ofreciendo a la Academia de Bellas Artes de troledo el fruto de su labor de nensionado en el extranjero (Bélgica v Holanda), relativa a la «conservación de ios valores arquitectónicos locales a traiVés de la edificación moderna», con un estudio sobre las posibles aplicaciones al zasó de Toledo, cristalizado en su primera parte, en un proyecto de «UeBidencia para arquitectos y pintores», en aquella gloriosa ciudad. Ha entendido el señor Jimeno que el resurgimiento espiritual y material de Toledo podría hallar nuevos CPAICCS dentro del cultivo de su patrimonio artístico, instituyendo medios adecuados para su veneración y estudio. Y esta residencia de artistas que propone, podría ser la primera de una sene de creaciones de indudable beneficio para ÍToledo, para España y para el resto del mundo, que, imidas a la trascendente labor que Toledo debe imponerse a SI misma, de rectificación de sus propias culpas, de anulación de abusos y atropellos, haría de esta incomparable ciudad el lugar más atrayente de la .tierra. , . . , ^ La iniciativa y entusiasmos de este arauitecto joven hallaron el mas decidido apovo en la Academia de Bellas 'Artes de Toledo, y con la sincera adhesión de las autoridades toledanas e instituciones do cultura, se organizó una exposición con los trabajos del seiñor Jimeno, que fué inaugurada el domingo, 10 del actual, en el salón de sesiones de la Academia, ante ima selecta y numerosa concurrencia. Entre los asistentes al acto se encon traban el director geneial de Bailas 'Artes, señor Orueta; el Ayuntamiento toledano, el pleno de la Academia y nutridas repíesentaciones de las diversas entidades: Diputación provincial, Escuela de Artes, cámaras de Comercio y de la Propiedad, claustros de Escuelas Normales e Instituto, etc. El señor Jimeno acompañó a las autoridades en el detenido examen que, con visibles muestras de admiración, hicieron de los trabajos expuestos, celeorándose después la apertura oficial de la exposición, bajo la presidencia del director general de Bellas Artes, alfaide de Toledo, señor Ballester y presidente de la Academia, señor San Román. El señor San Román habló primero, en términos de gran afecto, expresando la íntima satisfacción que la Acadcniia sentía al recibir a tan dignas autoridades y representantes de tá opinión culta toledana, por motivo tan grato y trascendente a la vez, cnmó el que a'lí reunía a todos Hizo después, la semblanza d e l arquitecto expositor, destacando sobre sus méritos de artista laureado 1» virtud que más podían estimar»los toledanos: la de 3U amor á Toledo, y por la que 'Toledo entero debía prestarle su máximo apoyo y simpatía. A ijontinuación habló el alcalde, señor Ballester, quien en nombre de la, ciudad y del Ayuntamiento que '•epres<;ntaba, no sólo acogía con la gratitud y admiración a que eran acreedoras la Iniciativa y la ofrenda del señor Jimeno, sino que, persuadido ádérhás,deque la vida de una ciudad como Toledo liaíjía de articularse a base de ima nolítit a de icspeto y de admiración profunda por cuanto entrañara un valor esItético, para fundirlo y armonizarlo con los Impulsos do modernidad que la vi. da actual exige, y de que, sólo criterios como el del señor Jimeno, sustentado con tan ampUa visión del problema, ,podíían ser los directores de una nueva vida próspera y halagüeña como la que él ansiaba para Toledo,, prestaría su más ferviente apoyo, por cuantos medios estuvieran a su alcance, para que los ideales del arquitecto Jimeno, que eran los suyos, tuviesen una inmeHíata realización. Por i'ütimó, el director de Bellas Arles pronuncie un discurso, manifestando que su presencia en aquel sitio, f, por motivo como el que allí le había «tvado, era prueba evidente de sus piotJüsiios al posesionarse del cargo que ocupaba. El estaba dispuesto a dlspenri,m„^ máxima protección posible a tanrtí.™ **'**' español, lo mismo alennpfS.?,,'^"**^'» pudi(?ra redundar en benencio suyo, que detondléodolo, por to- dos los medios legales, de cualquier peligro o asechan?a. En la conservación de nuestro tesoro artístico cera rigurosamente, inexorablemente, conservador, para no tolerar que se mueva una piedra ni un azulejo, y qué cuanto exisi? de interés se respete y se perpeti'i?. En el avance del arte nuevo ira tan lejos como éste exija. Por eso la labor del señor Jimeno la encuentia de tal manera estimable, no sólo por su ca'idad —que conceptúa extraordinaria—, sino por su significado, que él promete apoyarla sinceramente en la medida de sus fuerzas, haciendo votos por qjie Ue. gue a convertirse en una bella realidad. Todos los oradores fueron caluronamente aplaudidos, pronunciando, al final, el señor Jlmsno, unas sentidas paliibras de efusivo agradecimiento. Por la tarde, a las cuatro, el arquitecto Jimeno pronunció "una interesantísima conferencia, exponiendo su labor en el extranjero, de la que nos ocuparemos en breve. El próximo domingo, 17, dará una segunda conferencia en el mismo sitio y hora, sobre la aplicación de sus estudios al caso de Toledo, y a la que están invitados el ministro de Instrucción píiblica y otras relevantes personalidades. «Un pacifico ciudadano» Uña de las debilidades recientes de «fja Nacióm) era el albiñanismo. '.¿"oüo era «el ilustre doctor Albiñana>, por «rriba, y «el ilustre doctor Albiñana», por atajo. Las provocaciones de sus pistoleros eran cantadas como dechado ciG ciudadanía y amor al orden. Pues en su número del miércoles entiende que la peor jugada que a un hombre se le puede nacer es decirle en público «ísujeto perteneciente al partido del doctor Albiñana». Eso es nada menos que «salvaje patraña» de «un mal intencionado que pudo ocasionar un grave conflicto». Y que requiere «enérgica determinación». No; no era un «sujeto del partido albiñanista», sino «un pacífico ciudadano» que, por lo visto, es ahora para «La Nación» también todo lo contrario. Le pareció muy mal a «El Debate» que CRISOL anunciara la posibilidad de que en eJ archivo particular del ex rey, se encontrasen huellas de sus lucrativos negocios particulares. No ha sido necesario recurrir a este archivo. Como era de esperar, los mismos sacrificados por el Borbón procuran ahora zafarse de esta especie de esclavitud económica a que tenía reducidos, a cuantos juzgaron necesario requerir su poderosa protección, y en «La Libei> tad» leemos una información referente a uno de tales regooios, que valió a don Alfonso, la bonita suma de quinientas mil pesetas en acciones liberadas y preferentes de una sociedad que explota la pesca del bacalao. El caso, en síntesis, es así: Esta Sociedad, organizada por elementos franceses y traspasada luego a capitalistas españoles, encontraba para desenvolver su negocio la dificultad de que los pescadores, con abundante trabajo en el litoral, no querían enrolarse en los barcos que han de pasar laiga temporada en los mares del Norte. Como éste era el único obstáculo para los planes de expCotación, que, por otra parte, daban excelentes rendimientos, un intermediario, también de nacionalidad francesa, le sugirió la idea de que encontrarían pescadores numerosos, y hasta con jornales muy reducidos, si conseguían una disposición por la que se reconociese el servicio en la flota pesquera de bacaiao como servicio militar. El pCan era audaz; se trataba nada menos de librar deil servicio militar a imos cientos o unos miles de ciudadanos, en excíusivo beneficio de una compañía particular, y, naturalmente, ningún Gobierno se hubiera atrevido a tomar tal determinación. Pero el iiítermediario facilitó el medio. Por inspiración suya, la sociedad aumentó su capital en medio millón de pesetas, en acciones liberadas y preferentes, que fuern ofrecidas al entonces rey, y aceptadas por éste, mediante lo cual, la disposición pssó a la «Gaceta», y los triputentes, así recCutados, sobrepasaron el nümiero de los necesarios. y aquí viene la parte más curiosa de este nlagnífico «affaire». El Interti'.ediario inventor de la fórmula salvadora n.0 quiso nada por su intervención; no Pero al poco tiempo, y al amparo de iiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiMiiiiiiiiiiiiii iiiiniiiniiiiiiiiiiiiiiiiiniitiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiitiíiiiiiiiiiiiiiiiii "^ CERVANTINAS "En loa casos arduos y díBcultosoa, • n ua mismo punto ban de andar •I consejo y i« ót>ra„ 1». éaPtr. y Seg. Libra I. C«p. n . Todos le darán el mismo consejo, pero Vd. ha de obrar. Recuerde la filosofía cervantina y verá como al sufrir un dolor cualquiera todos le aconsejarán la universalmente conocida Caíiaspirfna, pero Vd. no deje de obrar, ya que unidos han de andar el consejo y la obra. Si sufre Vd. dolor de cabeza, oído o muelas, jaqueca, neuralgia, etc., tomé ^ dos tabletas de Caf¡aspirina y se sentirá aliviado. Reanima las fuerzas; aumenta el bienestar. l]No. afecta al corazón niva los ri&ones. acepto recompensa de ningún g-énero. la disposición dictada, creaba él otra yT^iT^ exploradora de la pesca de bacalao que, como no tenía en su V e supuesto la carga de los intereses d t vengados por el medio millón de pí>setas propiedad del ex rey, pudo competir ventajosamente con la primera. Ningún comentario requiere e s t e asunto. Suponemos que la justicia a c tuara con el rigor necesario, y si rio es posible—como al parecer se intente—librar a la sociedad concesionaria de las acciones Ubeíadas del peso de este medio millón, con el que pudo \'Ul. nerar la ley en su beneficio, por lo menos impedirá que el desterrado siga disfrutando de los rendimiento de este negocio, uno entre los muchos en que intervenía sm más interés que proteger a la industria nacional. El decreto para investigar el origen y el estado de la fortuna de Alfonso de Borbón es oportuno y justo. Solgan a la plaza pública los embrollos, las trampas, los enjuagues económicos del desterrado; quede a la luz su protección a negocios abusivos en que se le daba parte; exhíbanse las acciones liberadas de ese Alfonso el Liberado. Uelitos comunes saldrán por qué pedir la extradición: reales cohechos, regias rapiñas, soberanos despojos. Y no estaría mal pedirla, aún a sabiendas de lo inútil del paso, por clavarle er. la picota ante el mundo; reclamarle, no como rey perjuro, sino como aficionado a tapices ajenos. No será mucho lo que en virtud de ese decreto pueda cogerse a los borbo. nes para responsabilidad civil. P e r o hasta ese mismo hecho será significativo. Se verá cómo el rey situaba fuera el capital que iba amasando mientras nuestras finanzas estaban en grave compromiso. Nada nuevo ha de salir, nada que no se sepa en conjunto; pero la aportación de prueba, el proceso formal, cari tribuirá a dibujar detalladamente la figura de ese Eorbón, ferroviario unas veces, telefonista otras, hidráulico en este sitio, salchichero en aquél, cabaretista a sueldo más allá. ¿Los Somatenes se arman de nuevo? En el número 15 de CRISOL, oftrrespondietne al 7 de este mes, pübláH camos una carta de don Carmelo Pi»« zuelo. de Zaragoza, sobre la orden de armar de nuevo a los somatenistas. Hoy comprobamos la de. uneia de nuestro comunicante, a la vista de un impreso que dice; <.Somatén Local de Zaragoza. OP* den urgente a los afiliados. Los señores afiliados que, cumpliendo órdenes, hubieran hecho entrega de armas de fuego (largas o cortas);de su propiedad, en el cuartel de la Guardia civil de esta capital, pasariSü a recoererlaa cuando tengan por coaveniente. Aquellos que nos las hubieren entregado, se abstendrán de haoerlo> por quedar en suspenso dicha orden. Zaragoza, 22 de abril de 1931. E' cabo le d'strito, Mariano Blasco.s Hay un sello que d'ce; «Somatén Armado de la 5.» Reg''"ón. Paz, pajz y, buena voluntad, Cabo. Zaragoza. Distrito II.» Deseamos saber quién h a dispuesto la suspensión de «d'cha orden», que dló el Gobierno de la República, imponiendo el inmediato desarme do loa SoTnatencs. Con recoger el hecho, queda destar cado el peligro que encierra, advertido y conjurado con gran acierto, por el mandato que ahora se anula. ;,HJa que en Zaragoza hay poderes superiores a los legítimos del Gobierno de Madrid? Esos poderes, ¿habrán funcionado o estarán íundonando en el resto de España? .Creemos que eH señor ministro de la Gobernación tomará cartas en el asunto e impedirá el resurg'tmentp, .Jüt una ir^titucióQ que no se Jia distinguido precisamente pói su amor al - régimen triunfante. 12 Sábado 16 de mayo de 1931 LA PBOPAGANUA EN NOBTEAMEÍALACIO ÜE LA PEKNSA BICA «La últi<aa orden* S s i a película, estrenada hace dos La presentación de «Angeles del inlAoa y que tanto maUmmoró a Martí- fierno», de Howard Hughes, en Nuenez Anido, hasta el punto de suspen- , va Tork, ha batido un triple record. El der la proyección, fué repuesta en el del coste de producción, que se estima cartel del Palacio de la Prensa, ante , entre tres y cuatro millones de dólares; mx público entusiasta que en todo mo- el otro consiste en el simultáneo estremento admiró la ptríección técnica no en dos teatros de Broadway, el ide la cinta y se asimiló su fuerte con- Gaiety y el Criterium, y el último en jtKtido, de un alto valor revoluciona- la propaganda, que costó cien mi! dório. lares para^ los diez .<Uas que precedie« l a última orden», episodio de los ron inmediatamente al estreno en Nuefinales del zarismo, muestra al pue- va York. De esta cifra se gastaron cuaVto ruso bestialmente esclavizado, que renta y dos mil dólares en anuncios tgí un esfuerzo sublime inicia el moytanionto de liberación más grande de la Historia. Jannings, el gran actor, encama el tipo central con un verismo absoluto, iMuy bien secundado por Evelin Brent, cuya tierna expresión y belleza sirve II maravilla al rojo poema cinemator grálico., CINE MADRID] AVENIDA I.» rubia de Shigapoor© Se trata de un drama, de fina sensibWídad. El rudo capitán de barco mercante al llegar a un imerto, visita el Mañana lunes ESTRENO rttuTo— La D a m a de Skanéaí por Mary y Charles Noían i Murrayl Butaca 0,75 Ultimas exhibiciones en la Prensa solamente y seis mil más en propaganda para el exterior de dichos teatros. Los tickets de piel especiales, que como recuerdo de tal acontecimiento se repartieron, cuatro gigantescos rótulos luminosos y la renovación de los dos teatros se llevaron el resto de la suma anteriormente indicada. La propaganda usada para el exteL a tuan.Ira d e l a rior de los teatros, distribuida POT die s c u a d r a alein.an.a ferentes lugares, que equivalió a la que ordinariamente emplean, durante una semana xui centenar de teatroaeine. Constaba de más de 10.100 carconsabido cabaret de los puertos, que- teles, a saber: 500 de 24 hojas, 64 de dando prendido en las redes amoroeas de una muchacha, caída en pleno fango, pero en la que ve el buon marino un limpio corazón todo ternura y nobleza, terminaixdo la aventura, en ^ ^ ^ L O S DÍAS una unión fuerte y defiiiitiva, que salva a la muchacha de la vida equí,Voca y crea para ^ eterno navegante un hogar feliz. ilel> emocionante pelicul» La Tragedia Scapa Floüv ¡El Palacio de t» P"»»"! jCíne i S a n Mí^uell ^ Todos ios días grandios» isitu ORDE.U | por |rEMPESTAD| ^ ^ p o r J o l t n BarryonoreJ y Caatiia Horn^ El público saboreó con placer este Hescnlace ta-» moral y acaramelado y festejó las mil incidencias de la película y la perfecta ¡nterFi'¿tación de Alen Hale HGUCE Emil J^nninés lEXlTO CUMBRE 48 hojas, 24 de 84 hojas, 1.500 de tres hojas, 3.G00 de una hoja, 5.000 litografías sobre cartón para escaparates y 17 cuadros. Dos de los anuheios lui^inosos de «Angeles del infierno» ostentaban las mayores letras que se han visto en Broadway. Lo eran tanto, que el anuncio del Griterium, especialmente, ^ i g l ó tapiar provisionalmente las ventanas de la parte alta del teatro, pues de otro modp no hubieran cabido en él él las letras del título de esta superproducción. Sábado 16 de mayo de 1931 13 LA SEMANA DE LOS LBROS que él nació, por decirlo así, a la vida , en cuenta que la obra consta de tres pública: en la fecha dé su travesía : temos, el último biográfico, y que sólo atlántica. Relata todos los incidentes ' el primero tiene la fecha indicada por pw'íticos a que dio lugar el histórico usted. La obra acabó de publicarse en vuelo y los atropellos de que le hicieron 1795. En «Anticípolis», novela de Luis de victima las dicftaduras, que no transíp.—¿Una Geografía die América, reOteyza (Renacimiento), se pinta la gian con la voluntad libertadora del comendable? Vida de Nueva York, por tantos con- famoso aviador. Todas las emocionantes E,._No teniendo interés por una Receptos sensacional para un europeo y jomadas en que Franco tomó parte pública determinada (entonces !e recomucho más para un español. Oteyza. se encuentran referidas con verdadero menídaríamos obras especiales), creela ofi-eee en el más agudo contraste.) acierto periodístico en «Madrid bajo las mos debe consultar el ttomo tercero Como piedra de toque del cosmopoli-j bombas». El hombre más popufar de d'3 la traducioión española de la Geotlsmo moderno imagina una señora es-! España acusa en cada página su aínor grafía de Granger, hecha por ei señor páñofa, víctima de todos los prejuicios ¡ por la libertad y el derecho, y revela, Eteatín Cereceda y don Juan Izquierdo tradicionales, sobre la cual actúa abru-i además, sus admirables cualidades de Croselles. El volumen teroero a que madoramente, hasta aplastarla, la ciu- técnico y de hombre de acción, nos referimos, que es nuevo, en la edidad múitipíe y mecanizada. Ha sido ua oión española contiene «Iberoamérica», J. DÍAZ FEBNANDKE acierto del novaljista colocar un perpor el señor Izquierdo Croeelles, y «La sonaje ^pnrtípoda en ua;,mundo teorifiPenínsula Ibérica», por Dantin. Vemos cadio, que todo lo reduce a un común en ima bibliogiafla reciente «L'Ameridórií;nador de materia y de cálculo. Las que du Sud», por P. Denis (tomo XV reacciones de la española tradicional no de «CSeographie Unáverselle), París. nacen sólo del ctooque con las costumArmand Colín, 1927; 210 páginas, 86 bres nuevas y con las diferenciaciones mapais y 64 láminas. vitales; brotan también de ia oposiP.—¿Se ha publicado la conferencia ción niorai de la protagonista a un por Ortega y Gtasset no hace mu concepto expeditivo de la vida que es-: P.—iUna Gramática española más sis- dada cho en la ünivei^dad Central? tablece una escala diferente de valo-1 temática y clara que la extensa de la R.—Se ha publicado su libro «Misión res. El conflicto, claro está, no se plan-;; Academia y más completa que el epíde la Universidad» («Revista de Occi,tea en términos de discusión Inte'.eo-j tome? dente», Madrid, tres jjesetas), del que tual, sino de experiencias y episodios j K.—Creemos que le será útil, por sisque constituyen el interés anecdótico, temática., ciará y práctica, la del pro- dice él autor son redacción «posterior, mayor ampütud de las nodel libro. Oteyza lo aprovecha para trarj feE.or dónL -Báfáiéa Seco, pubíicáda en con alguna que había tomado para la confezar un gráfico de la vida neoyorquina! dos volúmenes en las Bibliíotectis Gei>- tas» y enfocar la actualidad gigantesca del yantes dé la Compañía Ibero-AJnerica- rencia. un país supermaterializado. P.—¿ Conocen algún libro que estudie na de Publicaciones. Dos pesetas cinla personalidad y la obra dé Waldo .El título del libro, y aun el pensa-¡ cuenta céntimos cada volumen. Prank? miento que lo informa, parecen dar a; P.—^^¿ Quién ha editado y a qué precio R.~E1 Instituto de las Españas (NueeiJtender que Norteamérica es un an-, la obra reciente de don Miguel Asín va Ycwk) ha publicado no hacie mudio tleipo de futuro. Quizá encontramos ia, sobre el Islamismo? Djisma idea que en el «Nueva Tork» R.—M. titulo completo es «El Islam uno, titulado «Waldo Franlc in América de Morand, Pero a la obra de Morand cristianizado. ESstudio del «sufismo» a hispana», donde está estudiado el es«abría oponer la que escribió Duhamel,! través de las obras de Abénarabi de critor bajo diversos a,spectos y por dis«Escenas de la Vida futura», con el es-, Murcia». Editorial Plutarco (Madrid); tintos escritores hipano-americanos j . píritu aterrorizado por esa tensión te- precio, 35 pesetas. Se trata de una obra espcñoles, entre ellos Salaverría, Mañch, rrib'e de la materia predominando so- de 543 páginas en cuarto mayor. José Carlos Mariátegui, Alfonso Reyes... bre la ética humana. Creo, sin emSe trata de una recopilación de traP.—¿Qué valor tendrá la obra «El bargo, que a todo esto es fácil oponer, Museo pictórico y Elscala óptica teó- bajos aparecidos en diversos periódicos una concepción diferente del porvenir.: rica de la Pintura», por Antonio Pa- y revistas. La vida norteamericana no es el anti-1 lomino, impresa en Madrid, por SanP.—¿ El qué fué catedrático de la Uniéipo del futíuró. jpor suerte para la ¡ cha, en 1795? versidad Central don Francisco María ECumaraidad, el triunfo dé la máquina' R.—Se trata de la segunda edición Rivero esicribló alguna historia de la Irá unido al de una nueva cultura, i esta obra. (La primera también fué Literatura ¡atina? que Creará un orden de mayor armonía! de R.—^Da Kivero eóüo conocemos, en en Madrid, en 1715rl724, por en el complejo juego de ?as relaciones' impresaAntonio de Bedmar). Es obra este aspecto, una traducción del resusociales. I¡a vida de Norteamérica es Lucas men de Baehr <«Lehbuch der roemisbastante rara y se paga a buen precio. ya, una hipertrofia de Ja civilización En un catálogo reciente la encontra-j chen Liíoraturgeschichte»), publicada presente. El alba de la nueva vida no mos anunciada en 600 pesetas. Tenga i en Madrid en 1879. surgirá seguiamente por allí. LIBROS NUEVOS Consultas bibliográficas «José busca la libertad». Este es el titulo de 'a, novela de Hermann Kesten, uno de los jóvenes eiscritores alemanes de mayor auge, que han hecho traducir Ediciones Hoy. José, el personaje, es un niño de la post-guerra, un residuo doloroso de la catástrofe moral y económica de vui pueblo que había de purtficaree por .el dolor. En derredor de este adolescente se agita ¡a desesperada turba de las pasiones y de las faecesidadea de una existenciia moral y económicamente miserable. Los golpes que recibe la sensibilidad pura del niño le producen el más terrible y permanente dolor. Pero le ayudan también a salir de la cárcel de su ingenuidad y buscar la libre vida de su corazón repleto de avidez y ternura. Ver a este niño perderse por la encrucijada de la! vida difícil y recuperarlo después con el alma llena de amor y de entusiasmo \ por las cosas es sensación que no olvidará ningún lector de tan admirable novela. Novela que está esci'ita en el eetíjo objetivo y directo del moderno'] naturalismo, donde no sobra ni siquie-!'i (ra el detalle más crudo y rea'ista, Re-iJ oortado todo, sin retóricas ni barro<[Ulsmo, ©1 novelista acude al tema desgarrado con la valentía y la eficacia 8.6 quien siente-tan segura la expreBión como la idea. La, nota que intro- i dwcc la novela es bien exacta cuando ¡ afirma: «Obra densa de contenido, cuan-j to más apretada de brevedad y de con-' oisión, está escrita, además, en un es-; tilo fiero, salpicado de sarcasmo y de' exudas ironías, ai>asionado, nervioso y Vehemente.» 3En la imaginación ha escrito el comandante Franco su libro «Madrid bajo las bombas» (Zeus). En forma de información detallada del movimiento que hizo posible el establecimiento del nuevo régimen, Franco no describe sólo elj día memoraWé en que voló sobre Ma-j drld con un dltwignio revoiuolonairio. i inicia BU relato ea el punto mismo en | £• DO^SAT, editor Plaza de Santa Ana, 9. Apartado 47. Madrid Ultimas publicaciones: «Heliófilo»: Charlas al Sol, 2." serie. «El mejor libro del mes». Publicadas también la 1.' y 3.* series, a ptas. 5. Gerard: Lecciones de Electricidad. Versión española. Tomo IV y último, pta». 24. Obra completa, cuatro tomos, ptás. 85. Martín de la Escalera: Cálculo elemental y EjeCnción de obras de hormigón annadD. Segunda edición, reformada. Ptas. 15.; Envíos contra reembolso Solicite usted gratis el Catálogo de libros técnicos publicados últlmaznente. Literatura extranjem El rostro humano Desde Lavater hasta hoy la flsond» mica se limitó a estudiar .'a cara hitmana exclusivamente como espejo del alma. Picard (1) pertenece a los pri» meros que se exceden grandensente de este l'mite con que una raentalidad medieval había enjaulado el vasto problema. E s de «ctrañar que el ensayo no at naya ocui>ado ya hace siglos de la cara humana en sentido de la fachada; mas interesante que aparece en la naturaleza. Suponemos que hubo qufl vencer antes la superstición surgid* del concepto de «la efigie de Dios». E s «pico que esas resistencias fueron derribadas por un arte que por sus condiciones crueles ignora y aborrece U magia: el arte fotográfico. I,a fotogra,. fía moderna, cansada ya de reproditi cir lo Indirecto, o sea, la cveación< rompió la gran prohibición y rotrat* lo directo: la cara desnuda del crea* dor. Picard parece haber aprendido d é los nuevos fotógrafos. Concibe lo. cara humana como astro que nació de la suma de todas las potencias natura^ les. fulgurando la suma de todas laa potencias naturales. Picard a acaba para siempre con la doctrina escolar 4i>i que la cara no es más que una de laa partes del cuerpo humano. Un crítico alemán anota sobre la obra de Picard: «... un libro del que me atrevo decir con toda la oonsciencia de mi responsabilidad crítica que es uno de los libros más decisivos, no sólo di! estos años, sino de toda una época.» ' En efecto, basta con ABX una pjeai' da al Índice de esta obra para Que s í nos revele la grandiosa multiplTcidaá que una manera de pensar modém« obtuvo en lucha ferviente con la ma< teri». La cara humana tiene, en realidad^ igual que la moneda, dos caras. Un4 que da al mundo expresando emociones del individuo, otra que da al «itttenor», al alma del hombre, pantallSi a ;a que proyecta el espectáculo de la esfera que la rodea. Esta cara cubieiw ta es la que enfoca Picard en su e » célente estud'o, poniéndola en rel&clón con todas las apariencias del univer" so. Picard. desriuestra. como las CCH rrientes fenomenológicas que dan M» taclón a Ja esfera humana se vierteni en las rfárag humanas.. «Desde Picard—d;ce un amigo á6 este libro—existe la cara humana». Yo voy a decir algo más aún: Desdal Picard sabemos que el alma no es m&a fiue un componente de la cara, pues se nutre de impresiones que la faa, astro entre astros, recibe del sol central. Desde Picard, tina cara vista ea el espejo es un espejo visto en un* ^ • Máximo José KAHN (i) pical*, Max: «Das MenscheBi» gesicht», 223 páginas, SO retrato»! Delphin-Verlag, Munich, ^^NO S O TE OS^^ NOTICIAS DE ALEMANIA Bajo el título: «Die Hotte» ha sidí ti aducida al alemán la novela conocida de Mariano Azuela. Apareció ea la Editorial Kindt & Bucher, Glessen. EL SEMANARIO DE LA REVOLUCIÓN Contra la reacción. Contra el clericalismo. Contra los monopolizadores. Contra los latifundistas. En'*Sí®S5SOtr®s** escriben y colaboran los hombres más representativos de la revolución españoa. Todos los sábados. 30 céntimos. Todos los sábados En el próximo número de la revista: *Querschnitt» aparecerá una serie de Greguerías de Ramón sobre ios po< ees. Acaba de visitar España el escritor y pintor Adalbert Pfeiffer. Sus artículos y dibujos sobre la España a.ntigua y moderna se publican en varios periódicos berlineses. En estos días cumplió sesenta años el áamoso literato Fríedlaender-Mynona. Lo exíi'aordlnarío de este autor es que creó a la par. les sátiras más graciosas y los estudios fllosóilcos mea profundos. Su obra más conocida es: «Indiferencia creadora», cuyo idioma y fuerza ideológica recuerdan enormemente a Nietzsche.—M. J. K, Sábado 16 de mayo de 1931 14 UN CAMBIO ESENCIAL DESDE BUENOS AIRES Dos grandes gestos de Palabras de una dama catalana democracia Una dama catalana, nos remite las momentt» vibrantes de la más gransiguientes cuartillas: de fiesta nacional. «Serenidad, conocimiento de causa Hallaron a la esposa de Maciá, consde toda suspicacia, es lo ternada, porqus aún no sabía a cienCasi a un tiempo, como dos verdade- de la humanidad, a la que .arrastran de.sprovisto que exig-lmos los catalanes de buena cia cierta si su simado esposo sería ras hermanas movidas del mismo instin- tras de sí de bueno o de mal grado. Es indudable que el mundo gira deci- voluntad a todos los que pluma en envuelto en un juicio sumarisimo. o to, Espuña y la Argentina acaban de elevado al más alto y merecido hotener un magnífico gesto de democra- didanitinte hacía la izquierda, en un ristre trata de la cuestión catalana. Prudencia en las palabras de los nor. cia. Más trascendental el de España, sentido de cada vez más amplia democracia, más esencial justicia distrihombres que en la hora actual rigen níj deja de tener el de la Argentina Klla tenía una bandera catalana, indudable importancia. En ambos, ca- butiva. Acaba de demostrarlo, a su ma- los destinos de España. Que compe- espléndida, regalo de los catalanes de sos el pueblo, por medio de las urna.<:, nera, la Argentina, precisamente en los netrados de la historia y aspinacio Buenos Aires. ba dejado oír su voz decisiva de pro- momentos en que España se liberaba, nes de esta región, no puedan ser enLlenas de entusiasmo, queríamos testa contra el régimen imperante, y en en un gesto elegante de caballero ba- vueltos en injustos temores, haciendo sacarla para que bamholora y luciera ambos casos el régimen ha hecho crisis yardo victorioso y magnánimo, de las coro con los enem.gos de la Repüblipara acceder a la demanda imperiosa instituciones y los hombres que la te- ca, sino prudente.s, dominar la deli- a los cuatro vientos. —^No, nos dijo la venerable señora. nían maltrecha. La Argentina, que hace cada situación desde sus altos puesdel pueblo. Esa ahora no puede sacarse. Tiene mises, indignada por los excesos Ese gasto de democracia, sorprcnfien- siete tos, en estos momentos de confederae una demagogia inculta, hizo una, reuna estrella separatista. tes para quienes dudaban de la capaci- c.' rápida e incruenta y -irrojc ción española, en estos supremos moLa confianza y la fe en los homdad política de ambos pueblos herma- volución mentos en que Cataluña, se siente del Poder a los culpables de sú desastre tios, ha signiíicado en Espafip. la caída administrativo, ahora se ha vuelto, por PJspaña, borrando, Jlena de fe en el bres de la República, ha hecho la de mía corona empolvada de siglos, y medio de las urnas, contra el gobierno liuevo régimen, las ofensas y vejacio- unión amorosa de todas !as regioneSi en la Argentina, el fracaso de un ré- provisional, que ha defraudado sus es- nes que sufriera desde loe atropellos conquistando el corazón de Cataluña. gimen de gobierno nacido de una r>.vo- ncranzas. Y es que el gobierno provi- del conde-duque de Olivares. La mayoría absoluta de los catalaiución que re.sulta sietemesina. Y en ".inc sional, qu'eren gobernarse, como lo hamal aconsejado por algunos Je Siglo?, que los catalanes lloran sus nes y otro caso han sido los graves des- sus ministros y por la alta burguesía libertades perddias, y que supieron rán las demás regiones, cuando se haaciertos, autoritarismos y arbitrarieda- agrícola-ganadera ya controlado su exper'enc'a y mériy bancaria, que fordes perpntrado-5 desde el Toder los que muralla a su alrededor, en vez de defender con su «Corpus Se sangre». tos para ello. Quieren gobernarse a si fia castigado el pueblo, víctima de los mó Que sepan todos los españoles^ que mismos, «mío e! hijo ponderado y diiglimitarse a sanear la administración mismos. Y los que en la Argentina hey hacer obra de paz mediante aquel «plajn del senadors» esa miisica no en su mayoría de edad, pero quiemos observa!io las cosas desde cerca te- púDlica completa preseindencia poUtici.. dio (fuerera que aun en sus alegres fies- re vivir en una España común, aquenemos la convicción de que los sucesos una su actuación una marcada tenr'encía tas; salía de las gargantas de los ca^ lla España, federal con que soñaron de España no han Irifluíúo poco, por su aderechista y ha venido ejerciendo una taianes, y que con ellos oían las muje- Ctsta y Pi y Margal!, nada sospechooportimidai, en los de esta Hepública. especie de dictadura, velada, pero dic- res y los niños de pie; ese canto ma- sos de separatismo. Hasta ahora mismo, hasta este mes tadura. cho, que ponía en sus días de alegría, _ Cataluña nunca ha sido m&s espatíe abril, que será histórico para España una sombra de posibles luchas fratri- ñola, que en esta hora htótórica y suDesde un principio hasta ahora el cidas, no se canta en Cataluña, desde y quizá para el mimdo, los españoles prema. que vivimos fu los países de Am.órica gobierno provisional ha mantenido a la el advenimiento de la República. teníamos, la epidermis política irritada Repüblica_en estado de sitio, ha some .M de VALENCIA Llenos de fe los catalanes en la por constante vergüenza. Nuestra Pa- udb a la. Prensa a indirecta pero severa tria, que en un tiempo fué la dueña y censura, "ha aplicado con prodigalidad ] confederación Ibérica, esperan les sean señora, m.atenal y espiritual, de este la pena de muerte, ha deportado a devueltas sus libertades. Ya no ven prodlgiosc enjambre de naciones que he- millares de personas sospechadas ce • nos sofocando BUS leyes, sus cosredaron su idioma, había quedado en ideas avanzadas, ha sometido a la po- tumbres y sus aspiraciones, que la lo político considerablemente retrasada blación a exageradas medidas policia- hicieron, rica y plena, confiando, que, con relación a algimos de estos naíses. les, ha mostrado un empeño sospechosíj dentro de la República y con la coLa Aryentlna, por ejemplo, marchaba, on propiciar la reforma de la Consti- operación de sus hombres cumbre, llepor su libérrima y generosa Constitu- tución y de la ley Sáenz Peña, base nos de sabiduría y de buena fe, no ción y ixjr sus instituciones y leyes fun- fundamental de la democracia argenti- tendrán necesidad de empuñar la hoz | damentales, a algunas generaciones de na; ha prestado protección decidida a del «Corpus de sangre» para reconEl suplemento literario del «Tiventaja. V el Uruguay, ese asombroso les intereses de los grandes capitniLslíiboratorio de experienciris políticas, se tas, olvidando, simultáneamente la casi quistarlas. Basta ya de cantar tristes mes» (7 de mayo), .-dica u n a larperdía para nuestra Patria en una le- desesperada situación de las pob.lacio- y foscos contra el tirano de Madrid. ga y elogiosa veañn. al libro re«El bon cop de fals.» Ese h'mno con- cienlemente publicado por la editojanía de progreso. nes campesinas; ha prodigado arbitramedidas proteccionistas, que han centrado y guerrero que cantaban aun rial Catalonla, «La Lligó de la DicNo podemc.i librarnos de recordar una rias encarecido considerablemente los artícu- en sus horas do asueto, como triste tadura», cuyo autor es el ministro y otra vez con cierta náusea la estul- los primera nece.sidad: amenazi en .".rupiro de una ofensa y un dolor, que tez de aquel hispanoamericardsmo, na- estosde instantes universitaria, después de sig'los, no dejaba de san- de Economía, señor Nicolau d'OIcido entre los gases de los vientres re- y ha perseguidola reforma wer. El crítico inglés, que demuesrencorosamente a los grar. pletos al final de banquetes que cometís hombres del régimen depuesto, prestant r a estar perfectamente enterado de la ignorancia de proponer a una ¿\UiC:- do sus simpatías, y todo Cataluña, confiada en el respeto .-leí lo que ellas rica joven, r-spubücana, liberal, demopoder central, desde el advenimiento la verdadera situación política en crática, pro3rr;?iva, el patrón de una significan, a los conservadores. España, se declara totalmente de España vieja, monórquica. conservadoComo consecuencia de toáo ello, el de la República- es cuando ha dejad' acuerdo con. el señor Nicolau d'Olra, oligárquica y retardataria. ¿Cómo pueblo de la Argentina, en la pilm.era de ser separatista. Que cesen de una vez laa alarmas, wer, en cuanto al peligro ¿e u n a no iban a reaccionar estos países con- ocasión que se le ha presentado de exNo ^ _ _ os __ dejéis ^_ nueva dictadura, declarada o implítra ese hispano-americanlsmo que no poner su opinión, por medio de las ur- en el resto de Españaera sinc cretino-americanismo? ¿Cómo nas, en la provincia de Buenos Aires, envóíver por un sentimiento equivoca- : cita, latente mientras la na ion ca^ no iban a orientar su atención nacía ha dado al gobierno provisional el más do de Patria. Observad que es sentí- rezca de u n fuerte espíritu demootros horizontes de aire máfj puro y rotundo voto de censura, otorgando ima menfalismo hipócrita y bufo, arma que j crátíco. Y añade que el c t a b l e c l vivificante. Ubre de las pesadas nubes asombrosa mayoría a los candidatos ra- psgTim'rán los enemigos de la Repú- I miento de l a República no basta en de vetustas Institucio.nes. de anacróni- dicales y originando la caída del go- blica, los monárquicos, que se aver- sí mismo p a r a crear ese espíritu, cas tradiciones, do rural cacicato, de bierno. Y ahora, este gobierno, que si- •'ü^rízan en la hora actual de apellicIarlcali.«mo za"o y de analfabeti.'ímo? gue presidiendo el general Uriburu, re- darse monárquicos; los retrogados uni- aunque puede contribuir mucho par a fomentarlo. Y no era. por cierto, que en el fondo novado en una gran parte, se esfuerza a la c'erec'a que nos combatide estos p'ioblos hísDano-americanoá hu- por poner remedio a lo sucedido, ini- dos Opina asimismo, con el autor del rán siempre, y siempre hipócritamenbie.se muerto el rescoldo de amor a la ciando una, sin duda ya tardía, política te, porque se habifín acabado para libro, que hay en España «JemasiaPatíia de origen Era que ese rescoldo de concordia y de mejor democracia. ellos, prebendas y conces'ones, que en dos falsos conservadores, que n o se ocultaba bajo las cenizas disimulaY es que el pueblo argentino, COLVO nombre de la religión, rec'bían y dis- consiguen conservar n a d a ; a quiedoras de una imprecisa vergüenza por sucede en estos tiempos a casi todos el precario estado del tronco gene- los pueblos, no tolera ya, sino nrcvi- frutaban. El fantasma del separatismo nes deslumhra el progreso material», rador sionalmente y por la fuerza de las ar- catalán será la la bandera sentimental Y que por m u y impresionante que que pretenderán engañar a los h a y a sido la forma pacífica en que c«'.> p"- así ae hit puesto bien en mas, derechismos ni conservadurismos con se desarrolló la Revolución spañoeviP'ñ'^n'' • •»" "«te momento histórico. y mucho^ menos dictaduras y prepoten- inconscientes. cias de los poderosos, aunque sean veDespués' dé siglos de vejaciones, los la, «no debemos olvidar que h a y "Anenoí! •rtc-'^^o l,a demostrado al munladas. La oligarquía burguesa, la poliaó que es va otra nueva Fspafta; apecatalanes se amparaban en su bande- u n a paz que se paga demasiado cana.s se ha de.'ínojado en un gesto mae. tica de «orden conservador», la capri- ra barrada. ra». chosa limitación de los derechos ciudañífíco del lastre de prejuicios, de sisHoy no se ve una bandera catalana, Alude luego, con el ministro de tomas e instituciones que la tenían im- danos, la persecución a las ideas, traen que expontáneamente. no la acompar siempre esta consecuencia: la más raposibilitada para dar expansión a f>us Economía, a «aquellas personas poñe la bandera española. dical inclinación del pueblo hacia la energías, y retrasada muchos oomnascs El día de la proclamación de la Re- r a quienes el orden es más imporen el concierto ecuménico. América, es- izquierda, hacia la dignidad humana, hacia la libertad. pública, cuando las mujeres leridanas, tante que todo lo demás, a ú n que lal ta América ahora más aue nunca esA este respecto no se puede negar acompañadas de la hija del caudillo, justicia y l a legalidad». Finalmenpañola, ha sallaiJo de gozo, y el r.3ScoIdo del orauilo de estirpe, latente baje que son preciosos los ejemplos, casi María Maoiá, compraban y cosían ban^ te señala l a importancia de l a exlas cenizas vergonzs ites, se ha trocado simultáneos, de España y la Argentma. deras españolas y catalanas, llegáron- posición que con perfecta claridad ahora %-erdaderament,e hermanas en li- se hasta la casa de líder afligridas hace en su libro el señor Nioolau en hoguera gloriosa v reivmdicadora. Ahora Esoaña, la España republica- bertad y democracia. porque no encontraban bastante tela d'Olwer del problema religioso en na se ha puesto de un salto prodigioso, republicana españo'a y catalana, pa^ España, de las relaciones entre la Luis ECHAVABRI a la altura política de estos pueflos \ ra adornar sus balcones en aquellos Iglesia y el Estado, y la oportuniBuenos Aires, abril. de América. Esto es mucho, aunaue está dad de s u s críticas acerca die la' todavía íejos de ser bastante. Si luesidiosincrasia catalana, en la que el tras ardientes esperanzas tuviesen confirmación ; si el cambio operado er. Esautor advierte tres grandes defectos: paña fuese, más qus de régimen exescasez de hombres de acción capatemo, de profunda y radical translorces de llevar a cabo l a o b r a em!macion interior, de esencial modo de prendida; excesivo respeto por loa pensar y s-ntir, de vida completamente prejuicios y las fórmulas estereotinueva en odres también radicalmente padas, y exceso también de energía; nuevos, entonces nuestra Patria pasaría a ocupar en el concierto mundial el contra carencia de visión. lugar que verdaderamente le eorre<;p£inde: más adelante aun qtie las repúblicas liberales y democráticas, .pero insuficientes culturalmente, de América: No se devuelven los origrinalé» más adelante que los pueblos ricos de espontáneos. Fero todos son leídos oivlUzáción y de cultura, pero socialcuidadosamente y publicados aqaa¡naite arbitrarios, Europa; a la par UoB que se alusten a las normas Se los pocos pueblos de avanzada, guias inaltouribles del perlddloo. UN LIBRO DE NICOLAO D'OLWER RELOJERÍA G A S C A Ved escaparates y preeios TETUAN^ 24 15 Sábado 16 de mayo de 1931 MUNDO SOCIAL Y OBRERO UN «FRIGIO» LA MAS ALTA RECOMPENSA Líevamos u n mm presentando caIsos divertidoEi de conversiones a l a República, Periódicos y otras enti'dades, individuos sueltos gua mere^ cían n o estarlo, rivalizan en esa g r a n batuda. Pero la m á s alta recompenisa, 'quien la merece «s José Beritráns Solsona. ¿Quién es José, o Josep (que de ambas maneras, y de otras puede Ha mársele) Bertráns Solsona? Pues el autor de un libro titulado «El vaUe de Arán-Suiza Española», o «La Valí d'Aían-Suís$a Catalana». Este libro se publicó en casteDan o el año 192», y nevaba esta conmovedora dedicatoria: «A S. M. EL REY DON ALFONSO X i n . Señor: El m á s humilde de vuestros súb'ditos, sin otro mérito gue el de tener las aspiraciones, bellezas y paIrioüsmo del VaUe de Aran, puestos en su corazón, y, éste, entregado al servicio de vuestra majestad y al entusiasmo de vuestra augusta persona, despierta con sus altas virtu^ des cívicas de gobernante y de paitriota en el alma de los españoles, y, en especisü, de.los arañases, dedica este modesto libro sobre el Valle de Aran, comarca que tanto qttie!re y tanto debe a su egregio sobetaño. Señor: A. L. R. P. de. V. M., José Bertráns Solsona.» El libro se h a reeditado en 1931; Ipero esta vez en catalán, y l a dedicatoria, traducida, es la siguiente: «A Francisco Maciá, presidente de. la g-eneralidad de Catahiña. Venerable patricio: E n estos momentos, no apagada aún la emoción ique en el pueblo ha despertado el triunfo de nuestra libertad, quiero eacar a luz un libro en que se refleje un trozo de la tierra de Cataluñ a en todos sus aspectovs: histórico, geográfico, social, etc. Me refiero 'al Valle de Aran. Esta modesta obra mía se la dedico a usted, en demostración de sincero acatamiento a eu persona y a l a formidable gesta que h a realizado. Josep Bertrans.n Nunca como ahora puede decirse 'de u n a edición gue es. corregida. Joisep no h a tenido compasión p a r a José; h a quitado todo (y era mucho) lo,que había de adhesión a l a dictadura. Retratos de Alfonso, de Martínez Anido, y «su patriótica labor n u n c a bien ponderada, a guien el Valle de Aran debe gratitud eterna»; de Barrera, «a guien muchos municipios, honrándose, h a n nombrado hijo adoptivo»; u n a docena de páfrinaa ditirámbicas hablando del viaje del rey al Valle. También h a suprimido párrafos en gue se hablaba del amor de loa araneses a España, y del túnel Alfonso XITI: y Pedro IV pasa a ser Pedro TTT, oon otras íutilee correcciones históMcas. Como este señor, o senyor Bert r á n s , n o es fácil encontrarlo ni aun buscando en las redacciones de •los periódicos, convertidos el 14 de abril. Caiga sobre ellas la ignominia del fracaso. Ríndanse ante este nuevo. .Tose que escapa victorioso de las tentaciones monárquicas, con feólo deíarse u n a s cuantas páginas entfft los reales pies de su majestad. CRISOL examini semanalmente la, marcha de los taercados, las «osechais y lo» valores flnancLuos Dirección de CBISOt. AlcaWw 8» LA CUESTIÓN VASCA La ArgentÍB^ reanuda SU cola- TRABAJOS" DE ORGANIZACIÓN boración en la O-1. T. Un telegrama del ministro de TTe^ gpciog Extranjeros de la Argentina^ don Ernesto Eosch, a la oficina intepnacional del Trabajo, .advierte a ésta que etti la próxima conferencia que se inauguraré el día 28 de este mea en Ginebra, tomará parte una delegación completa de la gran Kepubüca sudamericana. Tres años hace que la Argentina había suspendido su colaboración en la conferencia Internacional del Trabajo, A pesar de haberse apartado de la Sociedad de las Naciones, no había dejado de ser miembro de la organización. Per» BUS itelaciones con ésta quedaron interrumpidas. En la conferencia de 1928 hubo, como en las anteriores, una dele. gao:ón argentina completa. Y precisamente aquella conferencia eligió como presidente al señor Saavedra Lamas, primer delegado del gobierno argentino. El mismr) año se reeligió a la Re^ píiblica platense coseno mi!embro del Consejo de administración de la oficina, del cual había formado parte ya en 1922 y en 1925 y en donde se la consideraba, en cierto modo, representante de toda la América latina. Pero el cambio en la orientación polífca de Ja Argentina que trajo con.íigo la elección de Irlgoyen para la presidencia, en 1928, tuvo como consecuencia el que no volviege a compa>recer por el Consejo de la Oficina el delegado da aquel país ni que a las conferencias internacionales de 1929 y ;930 acudiese ninguna representación. Este hecho deplorable, fué lamentado por todos y muy particularmente por los propos obreros argentinos. En la conferencia de 1930. se recibió, por conducto del delegado obrero chileno, un mensaje de los trabajadores argentinos!, en el cual expresaban su simpatía hacia la organzación y reiteraban su deseo de oolaboxaj: con ella. I Sin embargo, la Oficina no había dejado de considerar a la Argentina como miembro de la Organización,- enviando al Gobierno todas las convocatorias y todos los documentos como anteriormente. Adema?, prestó, sin reservas, su concurso a la Comisión de legislación social argentina para que ésta elaborase el proyecto de Código del trabajo que se le había encomendado. No puede decirse, pues, que las relaciones hayan llegado- a cc|rtarse por completo. Pero la frialdad, el apartamiento por parte del Gobierno sudamericano, había existido de manera manifiesta. Apartamiento que de co(razón deplorábamos cuantos aspiramos a la colaboración internao-onal en toda oíase de actividades. Por eso tuvimos por feliz augurio, que la realidad confirma, el que el doctor Cantilo, representante del Gobierno argentino en el Consejo de adm'nistraoión de la Oficina rnternaeiohal del Trabajo, acud'ese a ocupar su puesto en la reunión celebrada por dicho Consejo en octubre último. La noticia do que a la próxima conferencia asistirá una dolegao'ón completa de la Argentina, nos llena de satisfacción y reaviva nuestra fe en el porvenir y nuestra esperanza en el progreso social del mundo. Completaremos esta noticia diciendo que la delegación aludida la compondrán los sfiores sigu'entes: por el Gobierno, el doctor Juan P. Ramos, catedrático de Derecho de la Universidad de Buenos Aires; y don Carlos Brcbhia, consejero comercial de embajada honorario; por los patronos, Pinnaijo por varios alcaldes de la montana de Navarra, se h a dirigido un llamamiento a las cuatro provinciis r ^ ' r ¿ i ° ™ T * ^ ' ^ ° ^"^ ^1 sentid ™ d e w l uñido en*^^?,/^»?"*'*'^''" ^« «í^estre Dwa of,p f,"^ P^^"=-'-í?e& autonómicas, para que no se remta el tmrin^.^woí EL CONVENIO SOBRE EL TRABA«separatismo» m t e r n r q u e ' t a n t o ' S JO NOCTURNO DE LAS MUJERES rt.« ^i'o P'^'"^'«an sus fueros una ¡¡ras Reglamentariamente y previo acuer- ctra las cuatro provincias vascoí.aVa^ do déi Consejo de administración de la Oficina Internacional del Trabajo, Para ello solicitan que la ponsncia en la próxima conferencia, que se nivarra do la Sociedad de Estudia inaugurará el día 28 del corriente mes Vascos prepare su obra sin perder moen Ginebra, se revisaijá el convenio de 1919 sobre el trabajo nocturno de asamh?,«^iL^'^'='^*^'^ ^ aprueber er{ las mujeres. I«. Oficina ha enviado a los gobier- r^ívprJol?^ ^°^ ayuntamientos vasco. nos un informe sobre este asunto. jímto "^^"'^'^ ** conclusiones de conEl Convenio no será modificado en su esencia ni en sus términos generaEn la última reunión del Ayuntales. Sólo a petición de los gobiernos belga, británico y sueco se discutirá miento do Vitoria se acordó- ' ' ^ " " : " «Dirigirse inmediatamente" a Ja Cola inclusión de dos disposiciones: uiia que estipule que el convenio n a es misión gestora de nuestra provincia v aplicable a las personas que ocupan rogarle que cor la premura que las accircmistancias requieren, eonvo^ puestos de vigilancia o de dirección, tualesa los partidos políticos que .'•uscriy otta que autorice a los miembros que el llamado «Pacto de San Sebasde la Organización a señalar el perío- bieron y a la representaci&i de los mu-* do de proh'bición del trabajo feme- tian», mcipios alaveses. Y juntos todos, y denino entre laí! once de la noche y las bidamente asesorados, sin dejar de oír seis de la mañana, en vez de las diez a la asamblea «Pro Fueros», hacer u n a y las cinco, respectivamente, que im- adaptación del antiguo Fuero alavés s pone el convenio. las necesidades actuales de nuestra pro. vi?icia; para después, fijando talen lo LA PRENSA COOPERATIVA SUIZA que podemos ceder y lo que debamos La propaganda cooperatista por me'- recabar—dejando siempre a salvo la lio de la Prensa ha adquirido propor- pensonalidad de Álava—unirnos a nuestras heitnanas provincias vascas, a fin ciones considerables en Suiza. Duran- de el Estatuto federal vascos te el año 19S0. los periódicos coopera- que, preparar con el catalán y el de cuantps -retivos de aquella República imprimie- giones lo soliciten, será presentado anron y distribuyeron 15 millones de te las Cortes Constituyentes, y sóstenl* ejemplares. La mayor parte (11 mi- do por el gobierno provisional que lioy llones) de estas publicaciones apare- rige la nación española.» cen en lengua alemajia. LOS OBREROS AGRÍCOLAS CHILa Cámara de Comercio de Logroño LENOS se ha hecho intérprete de un moví, Se han reunido en Valdivia los de- miento de opinión duc parece iniciarse Isgadoa de los obreros agrícolas para en parte, al menos de la Rioja, tendenestudiar la forma de unificar los sala- te a pedir la unión de aquella proVin< cia al País Vasco, en orden a la scliélrios en el Sur del país. tnc'ón del oportuno estatuto, y en feíl Después de una amplia delibera- sentido dirige a corporaciones y eáx. ción, la asamblea acordó establecer tidades se vascongadas. como salario mínimo de 4 pesos con comida en época de siembra y cosechas y 4 pesos sin comida en el resto Acción Nacionalista Vasca ha reRaT* del año. tido en Bilbao unas hojas impresas, cn Loa trabajadores menores de diez y las que se dice, firmado por el Comité seis años, cobrarán la mitad de los del p8,rl;ido, que, en vista de los sucesos salarios antes mencionados. ocurridos en otras poblaciones y ante También se han reunido los agri- el temor de que tuvieran repercusión cultores de Aconcagua, tratando, entre en Bilbao, requería el concurso de todos los ciudadanos para evitar que se Otrosí, los temas slgúiientesi; sucesos, ocurridos quizá pot Organización del trabajp en el cam- produzcan actuación benigna del gobierno de po; Olas ficación de empleados y obre- una ros; jornada de trabajo, salarios y re- la República. muneración; asistencia social; raoioralización de! trabajo agrícola, y apliUn grupo de alcaldes gulpuzcoanos cación do :as leyes sociales. ha redactado, un manifiesto en el que se dice; «Deseamos la franca y leal colaboración de todos los municipios gulpuscoanos dentro de la verdadera hei-m-indaá tradicional. Actuación justa y proporcional en la representación de esS& municipio. Nada de sectarismos, ni tesu dencias, ni recelos. Los republicanos amigos de José EsPara la consecución de todas las as. cudero quieren dedicarle un homenaje plraciones y reivindicaciones politico-so* por haber sido designado por el gobier- cíales vascas, pedimos la imlón de t o . no dé la República para la vicepresi- dos los. guipuzcoanos, mediante la fradencia del Patronato Nacional de Fir- ternal colaboración de los municipios mes Especiales. Con este objeto se de Guipúzcoa.» reunirán en una comida cordialisima el próximo sábado, día 16, a las nueve iiiitiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiHiiiiiitiinüniiuiiim y media de la noche, en el Hotel Fio r'da. Como todos los que durante los años últimos lucharon por acabar cor la monarquía sienten gran simpatía hacia Escudero, promete ser este acto del sábado de extraordinario agrado. MOTOR DIESEL "CüMftX:* Pueden recogerse las tarjetas, al prePARA ACEITES PtSADOS cio de 14 pesetas, en el Ateneo, Maison Sin connprtsor.' Dorée, Hotel París y Hotel Florida. don Víctor Vaidaml, de la Unión Industrial; y por los obreros: don Bernardo Becerra, de la Confederación General del Trabajo. BANQUETE A JOSÉ ESCUDERO A LOS QDB P O S E E S 9 » APARATOS A L L m © U o »• en estuche de eartósi Enviándome pesetas 3,50 por giro postal, remitiré a correo vuelto un precioso estuche 00^ maxco de madera. E. O. LEYPUM, Bengoechea. 1. S a n Sebastián (Guipúzcoa). «trancando »b«ol«. t a m s n t e «n f r t o , sencilla y muy perfeccionado, se pag» s6lo por su economía Tipos filos » marinos. MO" ^delos ligero* B p s r a vehtei^ Flos. tractorea, locoml^ vilés.eompii^ sores, etc. * C O IM ¿ " U V I O IW» I P« • » ^ ^ Pídanse prosseclos al «PÍRTÍIHJ 7«.-»»BRU> 16 CRISOL S^^bado 16 de mayo de 1931^ I nuevas intentonas. Cualquier mane' jo de carácter realista que pudiera iniciarse quedaría automátiicamente destruido, porque a estas horas están en poder del gobierno los nombres de cuantos participaban Un conglomerado de derechas.^—Contrata de hamde u n modo u oteo en la conspiraEl I l a n a d o partido nacionalis'ta ción. español acaba de publicar u n a nopones.—Los Legionarios.—Como se adquirieron ta recomendando a sus simpatizanlas armas, dinero y automóviles.—Las listas de tes el -acatamieoto al Poder constituido. Dice que su organización se los comprometidos h a dado de baja en la Dirección General de Seguridad. Ahora falta que La exigencia de responsabilldad-ís fué Hemos podido averiguar a l g u n o s ' los cuales pidieron residencia en bandera común a todos los partidos ciue la Dirección General de Seguridad detalles de la conspiración monár- Madrid con motivo del último in- luchan contra la monarquía inquiíca. les dé de baja a ellos. En ciertas quica que ía energía de los elemen- dulto, a estos individuos estarían, sin liitonces se especificó hasta la saciaJad listas h a n de figurar las fichas da tos de la República h a hecho abor- duda, destinados el material y el que había dos clases de responsabili- estos paladines de la monarquía. tai; en el momento en que empeza- dinero recaudado p a r a iniciar el aades: las de gestión y las puramente ¿Qué mejor ocasión p a r a publicarDolí ticas. los? A ello a y u d a r á n , jwr si faltab a a ser peligrosa. alboroto y la alarma. El asalto a Para depurar la primeras están, sin ba algo, los documentos recién enNos consta que se trataba de un los conventos se hizo mediante la duca alguna, los tribunales ordinarios contrados en Chamartín. conglomerado de derechas en el mezcla de estas gentes en la mu- de justicia. Las segundas, en opinión que participaban significadas per- chedumbre irritada por las provo- de muchos, deben ser depuradas por el Afirman los legionarios: «Como sonas de la aristocracia, de la alta caciones de los monárquicos. Las eobierno revolucionario, como verdade- nuestro lema consistió siempre en burguesía y del clero, aliadas con autoridades cuentan también con ro órgano que es de la conciencia revo- el apoyo incondicional a cuanto relos turbios componentes del Centro relaciones de personas de distintas lucionaria del pueblo. presentase orden público y engranLa naturaleza especial de las respon- decimiento de nuestra patria...". El Nacionalista Español, cuyo archivo profesiones, incluso algunos militas.n.Diiidades políticas y la urgencia d.:obra en poder de las autoridades mi- res, que figuraban en las listas • de su sanción, como reparación que se orden de tilos quedó demostrado en litares. Había también algunos mi- i los conspiradores. Se conoce, asi- debe al país ultrajado - por el déspota ; el asalto al semanario «Nosotros»', litares sueltos que por su condición mismo, la correspondencia cruzada '/ sus cómplices, aconsejan, a nuestro en la irrupción en «La Libertad», de palatinos se habían ofrecido a | entre los albiñanistas y los monár- juicio, i.na inhibición de los tribunales en el tiroteo desde sus balcones de colaborar en u n movimiento restau-' quicos, de diferentes localidades, para dar paso a la acción directa y la calle del Almirante, en los sucerador por medio de la acción per- por la cual se comprueba que la rápida del gobierno revolucionario, eri- sos del cine Europa, de la academia en tribunal especial de justicia, sonal, y aun dispuestos a ponerse conspiración pretendía buscar ra- gido para lo que es el organismo más apto, de Jurisprudencia, en el de la Cáral frente de grupos de^ acción con- mificaciones en toda España. ya que se trata dé juzgar actos de go- ' cel Modelo, y, en otras muchas «hetratados, al efecto, entre los profe- j bierno. roicidades» por el estilo. P o r lo qué Como el complot carecía de fuersionales del hampa. Se celebraron ¿Por qué no se decide el gobien-o a a la patria se refiere, nos interesa za efectiva, las autoridades tienen reuniones en distintas casas partí-' actuar en tal sentido, en vez de mez- saber cómo la sirvieron, y por cuenculares, y en el domicilio de un pe- la segutidad de haber descuhierto clar a los tribunales en el enjuiciamien- ta de qué institución. toda su t r a m a interna, y, por lo to de responsabilidades tan ajenas a riódico que t r a t a h a de cubrir la Ahora pretenden pasar inadverticonspiración con u n a organización tanto, no existe peligro alguno de sus verdaderos fines? dos p a r a rehuir el saldo de cuentas. de tipo electoral. Eso no puede consentirse. Antes ea indispensable u n a liquidación, lo Parece que u n a de las personalimás patriótica posible, de aquellos dades de quienes viene hablándose famosos esgrimidores de porras, es.tos días, acudió a P a r í s en calillaves inglesas, pistolas y demás dad de emisario p a r a presentarle instrumentos del orden... que a elloa a l ex rey pliegos con algunos miles les convenía conservar por instinto de firmas que habían sido reeofeide propia conservación. dás previamente por medio dé 1<* elementos clericales y aristocrátiSepamos, pues, de u n a vez, los cos. Con estas firmas de adhesión, nombres de los «legionarios», sus Capitails 3 . 0 0 0 . 0 0 0 d e p e s e t a s s e t r a t a b a de demostrarle al señor I domicilios y las sanciones que h a n Borhón que el país había rectificado .merecido por .sus «campañas». Capital suscrito previamente: •sa republicanismo, y que déí?éaba su vuelta. No sabemos si el ex rey aceptó el argumeno de sus leales; l.SOO.OOO p e s e t a s pero lo cierto es que él emisario volvió con el encargo de solicitar ayuSuscripción pública da La prueba de que teníamos razón pa'das de carácter económico p a r a un ra pedir sanciones contra los ex mimovimiento restaurador. Se asegunistros de las dictaduras, siníplcm«hr a q u e los fondos reca,udádqs asl.SOO.OOO p e s e t a s te por el hecho de serlo y a reserva dé cendías a diez millones, de pesetas, otras respoBsabilidades que hubieran podido contraer, es que «1 fiscal de la 'qoe se dedicarían a la propaganda en acciones de 500 pteetas y décimas de acción de 50 pesetas. Ropublica ha terminado por presentar y organización nionárquica de toda querella contra. Iiodos ellos. Espaiña. Sé hizo, además, u n a esProceder contra esos señores es de pecie de requisa de automóviles, justicia' elemental. No hace siquíerít falBOLETÍN DE SUSCRIPCIÓN ofreciendo los aristócratas sus cota que estén incursos en leyes adjetiches, cuyos chóferes quedaron a disvas del país, ya que violaron las conspOÉBción del comité p a r a realizar gobernando de espaldas a Don i con domicüio tituciocales la voluntad nacional y prescindiendo los servicios que se les encomendade los legítimos órganos de expresión sen. del país. , caUe En el archivo del Centro Naciona- en , provincia de Sin t;ue con esto queramos decir que lista, Sé encuentran u n o s , docunumerosos pár'aJos Uel Wdigó penal Djiéiitos que demuestran lá particiinvocados a diario eu las salas de jussuscribe licia p.'ra acusai a deUncueates comu¡numero piso pación de toda clase de elementos n<T no ' eneían de m-jld- a la mayor CTL los trabajos de provocación y parte de esos ex ministros por la gradesorden. Hay, por ejemplo, u n a cia del Trj u'íurinidor. , décimas de aeaccciones de 500 pesetas carta firmada por toda u n a comun i d a d religiosa, muy cercana a Madrid, donde se excita a los legio- ción de SO pesetas (i), a cuyo efecto remiten la cantidad de pecetas narios a que combatan a sangre y fií^o a los republicanos, ofreciena razón de do al Centro Nacionalista su adheAlfonso de Borbón, en la significativa sión incondicional, y dando a eninter.iú que le hizo en París Luca de 490 pesetas por acción suscrita p a r a su pago total (1), itender que están dispuestos a enTena, decía encantado que íu hijo Jua. 49 pesetas por décima suscrita p a r a su pago total. rnto—«El dbico», le llamaba el, sin conigrosar las cotizaciones en la medi100 pesetas por el primer plazo por cada acción suscrita. sideración al mucho dinero que nos he|da que sea preciso. mos gastado en hacerle un señorito»— 10 pesetas por el primer plazo por cada décima suscrita. Existen también pruebas suficienSe obliga a remitir mensualmente, a razón de 50 pesetas, por ac- iba a mgresar en la Marina inglesa. les p a r a demostrar que en las últi«: y que para ser jsj.arino mslés si que ción suscrita, hasta el 15 de diciembre, O bien 5 pesetas por décima hay que estudiar!» Aña-iía, dejando m a s s e m a n a s , calificados monárde acción (1). asomar con ello su particular v dispa^quicos adquirieron, en diferentes Los pagos han de efectuarse, necesariamente, en cheque de fácil co- ratada opinión, de que en. España es armerías numerosas pistolas con cualquiera. las cuales habían de ser arraatios bro sobre cualquier entidad bancaria de Madrid, o en giros postales marino Pero Alfonso no habla contado con dirigidos al administrador de CRISOL. ^ los grujKis de pistoleros a sueldo. De conformidad con lo expuesto, envío por cheque o giro (1) la can- la Marina ingli.-sa, que no qui^Ttí tener L a compra se hizo valiéndose de líOTtones en su seno El 'PC cetario flcientos carnets, cuyas señas apareluinciero del Azmirantazgo. contestando a una pregunta hecha en 1H Cámar.^ de cen en los libros de los referidos es- tidad de pesetas los Comunes, na dicho que don Juan tablecimientos. rte iSorbón. actual cadete de la E.sciiela L a s autoridades militares que con Naval de Dartmouth, no podrá ser ofi1931. de En motivo del estado de guerra h a n encial de la Marina británica una vez que tendido estos días en los sucesos, tiebaya terminado su curso de instruc(Firma) ción. nen la convicción de que los agenDlsculp-amos que hx familia de los tes monárquicos se sirvieron de u n Borliones quiera mantenerse a flote Pecrecidísimo número de maleantes, ro la Marlria inglesa es demasiada boy.i, para esos náufragos. Tienen quo i r . (1) Táchese ló que no proceda. haciéndose a la idea de qué son tina' NOTA.—Para más detaUes véanse los boletines y condiciones qué sé puf a m i l i a a lo rii»i-it>o Talleres GAMA, Duque de Alba, «. blicaron en los tres primeros nfimeros de CRISÓ'- ¡Cuidado con l o s "patriotas"! La conspiración monárquica" Las responsabilidades Mítorial "Inlmen" propietaria de l ü Z \ ERA DE JUSTICIA A LA DERIVA