Introducción El entendimiento de que el riesgo es el resultado de la interacción entre la exposición y el peligro, conlleva a potenciales cambios en las conductas y hábitos en las labores de producción para maximizar la productividad y la competitividad con el mínimo riesgo posible para la salud humana, el ambiente y el desarrollo sostenible. El manejo ambiental dentro de las prácticas agropecuarias a través del tiempo, no ha tenido el lugar que le corresponde como factor de competitividad y sostenibilidad del sector. Confirma este hecho la necesidad de adoptar un instrumento de gestión que permita unificar criterios para permitir el desarrollo ambiental dentro de un marco de referencia claro con herramientas de planeación y control orientadas al mejoramiento de los procesos productivos agropecuarios que impacten positivamente la sociedad y su Economía. El uso irracional en las aplicaciones químicas para el control de enfermedades ha traído como consecuencia muchos problemas en el enfoque ambiental como en la salud humana. Peligros para la salud humana, un producto químico de uso agrícola puede tener un efecto negativo sobre la salud humana cuando el grado de exposición supera los niveles considerados seguros. Puede darse una exposición directa a plaguicidas químicos de uso agrícola en el caso de un manejo inadecuado tanto por los operarios, trabajadores, agricultores, aplicadores, etc.; como también puede haber una exposición indirecta como en el caso de residentes y transeúntes, en particular durante la aplicación o un tiempo después de la aplicación de los plaguicidas químicos de uso agrícola. Los efectos negativos más comunes de los plaguicidas químicos de uso agrícola observados, son dolores de cabeza, náuseas, vómitos, trastornos de personalidad, dolores musculares, calambres, dolores de estómago y diarreas, que se deben a una exposición inadecuada durante la aplicación, la preparación o la mezcla de los productos y la manipulación de contenedores. Si el nivel de exposición crónico, a través del tiempo, es más alto que el nivel de detoxificación o limpieza habrá efectos crónicos. Peligros para el ambiente Debido al mal uso de los químicos de uso agrícola, ineficacia en la aplicación, como su sobreutilización, puede provocar una contaminación del agua, el aire y el suelo, afectando negativamente la fauna y la flora silvestre, y producir una pérdida de biodiversidad en general. En particular, los plaguicidas químicos de uso agrícola liberados al medio ambiente de forma incontrolada por la deriva, la lixiviación o la escorrentía pueden contaminar el suelo y las aguas superficiales y/o subterráneas. Un producto químico de uso agrícola al ser aplicado sobre un determinado cultivo puede llegar a contaminar las fuentes de agua, tanto subterráneas como superficiales, el aire, el suelo o el alimento, dependiendo de sus propiedades fisicoquímicas y de su adecuada aplicación (dosis y frecuencias) en el campo. Adicionalmente se puede generar la contaminación de los productos agrícolas por la aplicación descontrolada de los plaguicidas químicos de uso agrícola, es decir exceder las dosis, frecuencias y no cumplir con los periodos de carencia establecidos para cada producto químico de uso agrícola en un cultivo específico, o posiblemente por el contacto del producto agrícola con el suelo o una fuente de agua contaminada, puede generar un riesgo a la salud humana.