PDF (Referencia BOE-A-1837-2623)

cu ya ra zo o , aunque á ninguna clase se pudiera dispensar con mas ju sti­
cia un d istin tivo honorífico que á la que aludía el Sr. Pascual , la com i­
sión sin em bargo no podía ir contra la volu ntad expresa de las Córtes.
El Sr, Pascual rectificó un h e c h o , al que contestó el Sr, O lózaga.
El Sr. GOMEZ B E CE R R A dijo que no sabia cómo definir lo que las
Cortes estaban haciendo a ctu a lm en te , pasando de un dictám en de la co ­
m isión al otro sin declararlos d iscu tid os, y que en el dictám en de S. S.
se debia p reg u n ta r, sin pasar a d e la n te , si cada una de las partes del c i­
tado d ictá m e n , cuya discusión quedaba suspensa, estaban su ficien te­
m en te discutidas.
H allándose ya en el salón suficiente número de D ip u tad os, se pu­
sieron á votación las partes 3.a, 4 .a, 5 .a y 6.a dei d ictám en .
Se leyó la parte 7 .a dei mismo d ictam en , que d ice a s i :
7*a El Sr. García Blanco propone que al final del m ism o caso segun ­
do se añadan estas palabras: » ó de algún arte ú oficio m ecánico, sie m ­
pre que el interesado esté exam inado y tenga talle r ú oficina p ú b lica .”
Las personas que ejercen artes ú oficios m ecánicos están sujetas al
pago d el subsidio de com ercio , y tienen por con sigu ien te exp edito el
m edio mas fá cil de probar su capacidad e le c to r a l; y no seria justo
equipararlas con las que ejercen las profesiones de que trata este caso,
que representan la anticipación de un capital con sid erab le, consum ido
durante los estudios prelim inares á que han tenido que sujetarse. N o es
posible pues a d m itir esta adición.
El Sr. G AR CIA BLANCO juzgó que era poco análoga á la Opinión
general la distinción de clases que hacia la com isión , diciendo que no
seria justo equiparar á las personas que ejercen artes v oficios m ecán i­
cos con las que ejercen las profesiones de que habla el artícu lo á que
se refiere la adición , porque los m aestros exam inados y con talle r
a b ierto en las artes y oficios m ecánicos com ponen una clase que posee
la propiedad y demas requisitos indispensables para ser electores m ejor
que uo cualquiera que á fuerza de trampas y enredos se m antuviese en
una casa cuyo alquiler fuese de 400 á 2500 r s .: que el d ecir que estos
m aestros tendrían el derecho electo ral por pagar en cuota crecida el
subsidio de com ercio era una eq uivocación , porque el m aestro carpin ­
tero ó cerrajero que pagase 200 rs. por esta con tribu ción seria m uy ra­
ra en tre los de su o ficio , de los cuaies el m ayor núm ero pagarian solo
de 60 á 80 rs. , y que por estas razones S. S. juzgaba que las Córtes no
debían aprobar esta parte del dictám en de la com isión.
El Sr. OLOZAGA sostuvo el dictam en de la co m isió n , observando
que un profesor de ciencias representaba un gran cap ital a n ticip ad a­
m ente in vertido en costear una carrera larga y que e xigia grandes gas­
to s, al paso que un artesano habia hecho su carrera eu poco tie m p o , y
tal vez ganando desde el dia que entró en el a p re n d iza je , por lo cual la
disparidad entre ambas clases era m anifiesta , ademas de que la adición
del Sr. García Blanco establecería un p rivile g io á fa vo r de los m aestros
p erten ecien tes á gre m io s, que eran precisam ente á q uienes la industria
h abía debido menos adelantam ientos.
El Sr. García Blanco rectificó un h e ch o , y fue contestado por el
Sr. O 'ózaga.
El Sr. SARD A habló contra esta parte del d ictám en en e l m ism o
sentido que el Sr. García Blanco.
El Sr. OLOZAGA contestó que no habiendo hecho S. S. mas que re ­
producir los argum entos del Sr. G ard a B lan co , poco tenia que añadir,
y era solo que de exc lu irse á los que pretendía el S r. S ard á, habría que
ex c lu ir á todos los propietarios que lo fueren por h e re n c ia , lo que p ro duciria que quedasen sin derecho de elección las n u eve décim as partes
de los á quienes les correspondería.
Después de rectificar varias equivocaciones los Sres. Sardá y O lóza­
g a , se aprobó.el párrafo sin mas discusión.
8.a El Sr. Fontan propone que en el mismo párrafo después de la
palabra urbanos, se añadan las sigu ie n te s: « d e est^b.ecim ien tos indus­
tria le s .”
Los predios rústicos ó urbanos pueden hallarse en pueblos donde
no esten sujetos á contribuciones d irectas, y por eso se concede á sus
dueños la facultad de probar directam ente su capacidad electoral por
m edio d é la renta líquida que aquellos produceu; pero el subsidio de
com ercio alcanza á todas las industrias en todo el reino. Esta sen cilla
reflexión basta para que la adición no se apruebe. Aprobada.
9.a El Sr. Sarda propone que en el mismo caso segundo del artículo
7 .0 después de la palabra urbanos se añada: « y de censos n o p ro ve­
n ien tes de unos ni otro s.”
Los censos que perciben los particulares están gen eralm en te cons­
titu id os sobre predios rústicos y urbanos, y en tal caso no puede du­
darse que son una renta procedente de estos.
Si hubiese algún caso en que el censo estuviese e stab lecid o de otro
m o do, no puede dejar de hallarse sujeto á la contribución de frutos ci­
v ile s , y servirá al censualista para justificar su cuota com o con trib u ­
yen te. No ve pues la com isión que haya necesidad de adm itir esta adi
cion . Aprobada.
10. Del Sr. M o n terd e: En consideración á que los ganados forman
la principal riqueza de varios distritos electorales de E spaña, pido á
las Córtes que en el párrafo 2 .0 del artícu lo 7 .0 se añadan las palabras
v)ganados de cualquiera e sp e c ie .”
No hay razón ninguna para exclu ir del ejercicio de los derechos
p olíticos á los propietarios de ganados de cualquier e sp e cie , y por lo
m ism o debe aprobarse esta adición. Aprobada.
i r . Los Sres. Osea (D. M iguel y
Juan) piden que al final del caso
segundo del mismo artículo se añada: « cu y a renta justificarán los in te ­
resados ante los ayuntam ientos de su respectivo d o m ic ilio , ó bien por
las escrituras de arriendo , ó bien por tasación de p e rito s , que nom bra­
rán las indicadas corp oraciones.”
Las diputaciones han de form ar de oficio las lista s e le cto ra le s, y
podrán valerse de d istin tos m edios en cad a provincia según sus circu n s­
tancias para d eterm in ar la renta líquida de los e le c to re s ; pero si ocu r­
riese alguna re d a m a c ió n , indudablem ente deberá justificarla el in te re ­
sado por las escrituras de arriendo ú otros contratos de la m isma espe­
cie cuando los h a y a ; y si no los h a y , ó si el propietario cu ltiv a por sí
m ism o las tierras ó d isfru ta directam ente las demas especies de propie­
d a d , es indispensable que la justificación se haga por peritos nom bra­
dos por el a yu n tam ien to en cuya jurisdicción esten situados los bienes.
Pero como estos pueden estarlo en uno ó mas pueblos donde no tenga
el propietario su d o m ic ilio , es preciso m odificar la adición en térm inos
co n ve n ie n te s; y en este sentido 1a adm ite la com isión. Aprobada.
12. El Sr. Santonja propone que el tercer caso del a rticu lo 7 .0 se re ­
d acte a s i : « D ar anualm ente por las tierras que c u ltiv e de propiedad
a g e n a , ya sea en arrendam iento ya á partid o, una c a n tid a d , bien sea
en fru to s bien en d in ero, que no sea m enor de 3© rs.
Con haber añadido y aprobado las Córtes la adición ó á ja rce ría
después de la palabra arrendamiento está ya satisfecho e l ob jeto de esta
a d ic ió n , que no hay necesidad de vo tar otra vez. Aprobada.
13. El Sr. Jaén pide que en e l mismo párrafo después de la palabra
cultive se añada aproveche.
H ay efectivam en te tierras que se aprovechan sin c u lt iv o , com o las
dehesas y los m o n te s; y por consiguiente debe a d m itirse esta adiciou.
Aprobada.
14. El Sr. V erdejo propone que adem as de las tierras se haga m en­
ción en el caso 3 .0 de los ganados.
La riqueza pecuaria no puede ser de peor condición que la te rrito ­
r ia l, y las Córtes deben declararlo asi aprobando la adición. Aprobada.
15 . El Sr. Argum osa pide que se consideren com prendidos en el
m ism o tercer caso « lo s que á títu lo de parceros ó arrendatarios se de­
diqu en á la cria de ganados ó á beneficiar los criaderos de caza y pe.cca .”
Por igual m otivo que ha propuesto la com isión que se apruebe la
adición a n te rio r , cree que debe adm itirse tam bién e s ta , en cu y o caso
es preciso in clu ir en el caso segundo los propietarios de los criaderos de
caza ó pesca. Aprobada.
16. El Sr. B allesteros propone que en el m ismo párrafo después de
las palabras tierra que cultive de propiedad agena, se añada molinos ven­
tas , artefactos ó posadas.
La com isión cree que la facu ltad de probar el derecho e le cto ra l por
e l arrendam iento solo debe concederse á la numerosa y resp etable clase
de los lab rad ores, y que por con sigu ien te la idea del Sr. Ballesteros de­
be adm itirse , reduciendo su adición á estas palabras: « in clu sos los edi­
ficios y artefactos destinados al beneficio de las m ismas tierras y sus
productos.” Aprobada.
1 7 . Los Sres. Santonja y Osea (D . Ju a n ) proponen que en los pue­
blos de menos de 2o9 almas ten ga el derecho de ele g ir e l que pague
300 rs. de a lq u iler de casa anualm ente.
E sta adición es contraria á lo resu elto por las Cdrtes. Aprobada,
r 18. De los Sres. V ázq uez de P a r g a , C achurro y Suan ces, que d ice
a s i : Pedim os á Tas Córtes que al párrafo 4.0 del artícL lo 7.0 de la le y
e le c to r a l, se añada después de las palabras « i¿ o o rs. vn. eu los dem as
pueblos que paseo de 509 a lm a s” , las que siguen : « ó sean capitales de
p r o v in c ia : ’ después de las palabras « i 9 rs. en los que excedan de 208
alm as las sigu ie n te s: « ó sean ciudades ó capitales de p a r t id o ;” y des­
pués de las palabras « y 400 en los dem as de la nación ” lo que sigue*
« c o n tai que los que paguen los referidos alquileres tengan oficio e m ­
p leo , giro t ú otro modo de v iv ir con ocid o.’
'
*
En la parte en que esta adición determina el Importe de los alqui­
leres de casa que se necesita p a g a r , por otra consideración q u e e l v e ­
etectos á la causa p ú b lic a , y el G obierno tien e la mas grande satlsftccindario resp ectiv o de cada p u e b lo , es indudablem ente contraria á lo
cion de no haber faltado á su deber. Yo creo que ahora no debíamos
resuelto por las C ó rte s; y si bien es cierto que el que no tenga propie­
ocuparnos de la justicia ó in ju sticia de esto, que por fin es un negocio
d ad , o ficio , em pleo ú otro modo de v iv ir conocido no debe ejercer el
ya juzgado. El Gobierno cuando vió reunida la representación nacional
derecho e le c to r a l, no es menos cie rto que las leyes deben im pedir que
som etió á su exám en, á su ju ic io , y aun diré á su sanción, todos los ac­
tales personas existau en la so cie d ad ; pero sem ejan tes calificaciones son
tos de igual n aturaleza. Las Córtes con su silen cio y con haberse dado
agenas de la presente le y . Por lo m ism o parece que no debe adm itirse
por enteradas de este asunto lo aprobaron : ¿d ebem os ahora ocuparnos
esta adición. Aprobada.
si es p o lítico ó justo e l paso que el Gobierno ha dado y que ha Venido
19- Del Sr. A rc e : Pido á las Córtes que á su final se añada: « S e e x ­
á las Córtes dando cuenta y som etiéndolo á su deliberación desde un
ceptú an las capitales y ciudades m arítim as, á las que no aplicarán la
P rin cip io , dejando á su disposición el producto de estos bienes?
cuota de los 400 r s . , sino la que para las demas poblaciones designe el
H oy vien e á d ecir que nos encontram os en circun stancias m uy dU
a rtícu lo .”
versas. La nación jura con el mas grande placer la nueva Constitución
Tam bién esta adición parece con traria á lo resu elto por las Córtes,
que es una bandera de unión y de p a z; y en este m om ento á hombres
y no debe aprobarse.
contra quienes no e x iste ningún d e lit o , ¿ se les ha de continuar pri­
El Sr. GOMEZ ACEBO expresó que no tenia por tan in ú til com o decia
vándoles de los bienes? ¿P u e d e el Gobierno por sí m ismo a lte ra rla
la com isión lo propuesto por el Sr. A r c e , ni tam poco por con tradictorio
disposición que habia tomado y som etido á las C ó rtes? El G obierno ha
con lo ya aprobado en el a r t íc u lo , pues habia m uchos p u e b lo s, espe­
d ich o : nos encontram os en este e sta d o , y esta es la op in ión del Go­
cialm en te m arítim o s, en que el alq u iler de las casas era igu al al subido
bierno ; las Córtes decidirán si es llegado el tiem p o de alzarse estos se­
que se paga en M ad rid ; y de no hacerse la aclaración que se pedia, vencu e stro s, porque no es mas que secuestro lo q u e el Gobierno decretó
dria á resu lta r que las capitales serian las que verificasen laS eleccion es,
dejando á la disposición de las Córtes disponer de los réditos de estos
no pudiendo ser electores los vecinos de los dem as pueblos de la p ro vin ­
bienes.
cia r e s p e c tiv a ; y por lo tanto opinó que debia hacerse la aclaración que
Ha dicho el Sr. V ila que el Sr. González ha asegurado que habia co­
se habia pedido en el artícu lo.
m etido una injusticia notoria: el Sr. González no creo que h aya dicho tai
El Sr. ARG UELLES contestó que habiéndose fijado en 400 rs. anua­
cosa , ni este acto del G obierno en volvía in ju sticia: ha añadido S. S. qué
les para los pueblos de cierto vecind ario la cuota dei alqu iler para ser­
ha com etido una in ju sticia que debia indem nizar. ( E l Sr. V ila dice que
v ir de base al derecho ele cto ra l, no era fá cil que hubiese ningún pueblo
no ha dicho tal c o s a ). Me alegro de haberm e equivocado. C oncluyo con
de la clase que citaba el Sr. A cebo en el caso indicado por S. S . , por lo
pedir á las Córtes que supuesto que han cesado las consideraciones jus­
c u a l, después de otras varias o b servacion es, opinó que no habia m otivo
tas que tu vo el Gobierno para acordar el secuestro de los bienes de
á ju icio de la com isión para variar el dictam en ya presentado.
aquellas personas que sin las form alidades con ven ien tes pasaron al ex­
Los Sres. Góm ez A ceb o y A rguelles rectifican m útu am en te algunos
trangero en m om entos tan crítico s, produciendo males por mas que fue­
hecho.6.
sen ágenos de su intención , y consultando el m otivo plausible que ex­
Después de unas ligeras observaciones del Sr. A rce se declaró el pun­
pone el mismo G ob iern o, se sirvan aprobar el dictám en de la comisión,
to su ficien tem en te d iscu tid o , y puesta á votación esta parte del d ictá ­
que es el m ism o del Gobierno con alguna diferencia superficial.
men , quedó aprobada.
El Sr. V IL A rectifica un h e ch o , y dice que el decreto no estáapró20. Los Sres. P a s c u a l, M oscoso y Pedrosa piden que se conceda el
bado por las C ó rte s, y que el G obierno debería so licitar un decreto de
derecho de votar « á los que tengan un hijo sirviendo á la patria en las
indem nidad.
filas del e jército a c tiv o .”
El Sr. M inistro de G R A CIA Y JU ST IC IA : Yo rep etiré lo mismo que
Esta cd 'cion su bvertiría com pletam ente la base e le cto ra l adm itida
dijé antes. En efecto , el Gobierno cree que las Córtes aprobaron su dis­
por las C o rte s, y no puede aprobarse. Aprobada.
posición en el hecho de haberla som etido á su exám en y haber dicho
21. El Sr. Argum osa propone que se conceda el derecho e lecto ra l:
quedar en teradas: el Gobierno lo hizo á tiem po op o rtu n o , y siempre
« i . ° á los que hayan cum plido bien todo el tiem po de su em peño en
que ocurran iguales circu n stancias obrará com o entonces. Es d ecir, que
el servicio de las arm as: 2.0 á los que al form ar las listas electorales
considera aprobado el d ecreto habiendo dicho las Córtes que quedan en­
se hallen revalidados en m edicina ó ciru g ía .”
teradas.
Esta adición adolece del m ismo in con ven ien te que la an terior, y no
El Sr. GOMEZ B E C E R R A : El Sr. V ila ha m anifestado, prim ero su
debe adm itirse.
J
deseo de que se tengan presentes los anteced en tes que han mediado en
El Sr. ARGUM OSA dijo que no encontraba razón para que la com i­
este n e go cio , y segu n d o , que supuesto que se trata de un d ecreto del
sión privase del voto electoral á los individuos contenidos en su adición
G o b ie rn o , al Gobierno toca revocarlo. El Gobierno creyó necesario to­
pues los servicios que prestaban los m ilitares en el ejé rcito batiéndose
mar la medida de que se tr a ta , y lo som etió luego á las C ó rte s, que lo
contra los enem igos de la p a tria , y los fa cu lta tiv o s en los contagios
les hacia acreedores en su concepto á este derecho.
* pasaron á una com isión ; y aunque se suponga que nada han resuelto,
ello es que fue un decreto provisional que exigiero n las circunstancias,
El Sr. CASTRO contestando al Sr. Argum osa e x p u so , que de n in gu­
y que queda ya sin efecto por haber variado aqu ellas.
na m anera eran aplicables las razones de S. S. al caso p re s e n te , porque
Cualquiera que fuese la resolución especial que hubiese tenido que
la com isión habia reconocido el principio de buscar en los electores una
recaer sobre aquellos decretos , estos los dió el G obierno obligado por
responsabilidad n o to ria , y para esto habia d icho que las capacidades d o
las circunstancias. Estas han v a ria d o ; exigen otra cosa m uy d istin ta , y
se estim an tales sino en tanto que están en e je rc ic io , y no se les con ­
estando las Córtes reunidas están en el caso de en trar á exam inar el
cede el voto electoral si no pagan una contribución cierta .
pro yecto de d ecreto que ahora se presenta.
La com isión, c o n tin ú a , no puede adoptar la idea del Sr. Argum osa
En cuanto á la observación del Sr. V ila , que d ice que siendo este
sin prescindir de las bases adoptadas. El que ha cum plido bien seis ú
un acto del G ob iern o, las Córtes no deberán ocuparse de él sioo para
ocho años de servicio no ofrece la garantía y responsabilidad que la co ­
aprobar la conducta del G o b ie rn o , ó censurarla si lo m ereciese, á ella
misión ha fijado, y seria una con tradicción dar por prem io lo que debe
responde el mismo preám bulo dei d ictám en de la com isión. Dice ( lo le­
solo concederse á la aptitud y capacidad p olítica. En cuanto á los facu l­
y ó ) . Habiendo q u ed ado, p u e s, á disposición de Jas Córtes el destino de
tativos de que ha hablado el Sr. A rg u m o sa , y que ha dicho que aunque
los bienes secu estrad o s, las m ismas Córtes están ahora en el caso de
tengan la aptitud necesaria no podrán v otar porque no pagan la co n tri­
determ in ar acerca de esos bienes lo que convenga , y por consiguiente
bu ción , diré que estos fa cu ltativos tendrán casa ú otra cosa por lo que
de reso lve r acerca del proyecto que está presentado á su deliberación.
le com prenda este derecho. Dice que es dable que algún fa cu lta tiv o b a ­
El Sr. A L V A R O , á lo que pudim os e n ten d e r, preguntó al Gobierno
ya pagado las con trib u cio n e s, y se vea lu ego en la necesidad de d eja r­
cuál era la cuantía de los bienes secuestrados.
se cortar un b ra zo, ó que se le hiciese la ca ta ra ta , y que entonces v e n ­
El Sr. Secretario de G R A CIA Y JU STICIA con testa que esta m ate­
dría á un estado de m iseria que le q u itaría esta garantía. Esto es una
ria quedó íntegra á la resolución de las C ó rte s, después de dar el Go­
desgracia im p re v ista , y la le y es im posible que las prevenga. Por todas
biern o el d ecreto de se cu e stro ; que no form ó exp ed ien te sobre estos
estas consideraciones creo debe aprobarse esta parte dei d ictám en.
b ie n es, y que asi ignora su cuan tía.
E l Sr. Argum osa rectifica un h e c h o , y el Sr. Castro otro quedando
El Sr. A L V A R O d icé que ignorando esto no cree que pueda resol­
en seguida aprobada la parte del dictám en que se d iscu te.
verse con a cierto la c u e stió n ; pero que m irándola abstractam ente está
Se suspende esta discusión.
en e l fondo de acuerdo con la co m isió n , si con vien e en retira r los artí­
Se da cuenta de un dictám en de la com isión de P o d e re s , aprob an ­
culos 2.0 y 3 .0, y añadir al i . ° las palabras ^ devolvién d ose los produc­
do los de D. A ntonio Serey, Diputado por A lican te. Q uedan aprobados.
tos depositados.”
Entra á jurar y tom a asiento d icho Sr. Diputado.
. La com isión con vien e en re tira r el art. 2 .0 y m odificar e l i . ° . pero
Se da cuenta del dictám en de la com isión E clesiástica sobre la e x ­
con servar el 3.0
posición del cabildo de Toledo re la tiva á d iezm o s, siendo de parecer que
Se declara la totalidad suficien tem en te discutida.
se pase al Gobierno para los efectos con ven ien tes. Queda aprobado.
Se pone á votación y se aprueba el art. i . ° en estos té rm in o s: « Que­
Se lee el dictám en de la com isión de Infracciones de C onstitución
da sin efecto el Real decreto de 26 de Setiem bre de 1836, y se alzan to­
acerca de la queja del ayu n tam ien to de M adrid contra el Sr. M inistro
dos los secuestros ejecutados en su v ir tu d , devolvién dose los producto!
de la Gobernación D. Pió Pita P iz a rro , por in fracción del art. 223 de la
depositados.”
de 18 12 , y de algunos artículos de la le y de 3 de F ebrero de 1823 y
Se lee el a rt. 3.0, ahora 2 .0, que d ice : « U n a le y determ inará lo
opina que se está en el caso del art, 228 del m ismo C ódigo; Se lee el
que corresponda respecto de aquellos españoles ausentes sin licenci*
voto particu lar de los Sres. A rrie ta y P a scu a l, y se manda todo im ­
que den tro de dos m eses, contados desde la pu blicación de este decre-1
prim ir.
t o , no se som etan al Gobierno de S, M ., y presten el juram ento de guar­
Continúa la discusión del p royecto de la com isión de L eg islación
dar la Constitu ción y ser fieles á la R ein a.”
sobre levan tam ien to de secuestros.
En este estado se pregunta si se prorogará la sesión por una hort
El Sr. V IL A pide qué se lea la com unicación del G o b ie rn o , re la tiv a
mas , y se acuerda n egativam en te.
al d ecreto de 26 de S etiem b re ú ltim o .
Se leen varias adiciones que pasan á la com isión de Supresión dé
E l Sr. RODA contesta que no está en el exp e d ie n te porque se pasó
diezm os.
¿ otra com isión.
r
Se conceden tres meses de licen cia al Sr. Cam ps para pasar á arre­
El Sr. V IL A dice que pues falta este a n te ce d e n te , es necesario que
gla r sus asuntos.
pase á la co m isió n , y que en el e n tre tan to se opone á que se tom e
El Sr. PRESIDEN TE señala los asuntos que han de d iscu tirse m a­
resolución.
ñana , y levan ta la sesión de hoy á las cuatro.
El Sr. GONZALEZ (D, A n to n io ): El Sr. V ila ha prom ovido una cu es­
tión de órden sin que haya im pugnado el dictám en de la com isión pues
S. S. cree que antes de d iscutirse este p royecto debe exam inarse e l d e ­
creto de 26 de Setiem bre. Cualquiera que fuese sobre él el d ictám en de
los individuos de la com isión , no estando las Córtes en el caso de resol­
Votación nominal del art. 2.º del proyecto de ley sobre su­
v e r sobre el punto sustancial contenido en el d ecreto, seria in ú til e l exáp r e s ió n d e l d ie z m o .
m en. La com isión no ha podido dar su dictám en sobre é l , y esto no im ­
Señores que aprobaron.
plica que las Córtes tom en resolución sobre el que se presenta. El G o­
bierno ha creído que la m edida legislativa que tom ó para contener la
Feliu.
M artín ez de V elasco,
Santonja.
>
em igración en cierta ép oca, estaba en el caso de cesar. Es necesario que
Góm ez Becerra*
Gil Orduña.
P erceb a l.
,
el G obierno dé m uestras de que respeta la C onstitu ción que acabam os
Pascual.
Pareja.
Lasaña.
de ju ra r, y en oingun modo es árbitro de que con tin úen las d isposicio­
Ferrer (D. Joaquín)*
Pedrajas.
A lco risa .
1
nes de aquel d ecreto. Si no lo hubiese hecho, yo y otros lo habríam os
D iez.
A b argu es.
B la ke.
reclam ado. Nosotros estamos en e l caso de hacer desaparecer esta m e ­
Sardá.
García Blanco.
T o var.
dida que no puede producid sino efectos m uy funestos en la a ctu a li­
Lujan.
Calderón de la Barca.
Sánchez del Pozo.
d ad , y por esta razón las Córtes deben proveer el le van tam ien to de esos
G il (D. Pedro).
C
evailos
(
D
.
Geróni­
G arcía F lores.
secuestros.
Diaz G il.
m o ).
Saenz.
^ El Sr. V IL A : Supuesto que se ha con testado á la cuestión de órden
A lcon.
R od rígu ez V era.
Bezares.
diré que el d ecreto á que se hace referencia con tien e una in ju sticia* sé
Baeza (D. Juan).
Los Ancos.
Buc.
acude ahora á las C ó rtes: aqui se aprueba lo hecho por el G ob iern o’ y
S to rk .
R oda.
Viadera.
yo creo que no estam os en este caso. El Gobierno puede hacerlo por «f Ladrón de G uevara.
B u rrie i.
Bertrán de L is.
y rem ediar los daños que haya causado, p u esto que se ha d icho que no
Suances.
Ónís.
Gorosarri.
era á rb itro de tom ar esta providencia y que por la nueva Constitución
Franquet.
Serrano.
Osea (D.’ Juan).
ha variado el estado de la cuestión . Bórrese el decreto por el m ism o
Infan te.
A lca lá Zam ora.
Pedrosa.
Gobierno, pero sin in terven ir el Congreso ni san cion aren ningún modo
V icens.
B allesteros.
M oscoso.
puesto que está llen o de in justicia , según se ha dicho.
* Salvato.
Franco.
M oratin.
El Sr. GO N ZALEZ rectifica un hecho y añade que el Gobierno no
R ivas.
A illo n .
Yagüe.
puede a lterar un decreto que está ya som etido á las Córtes.
A lvarez G arcía.
A lm on acf.
V
ila .
El Sr. M inistro de G R A C IA Y J U S T IC IA : No creí' que las Córtes se
Llanos (D. V ale n tín .)
A cuñ a.
Zum alacarreguf.
ocuparan sobre si el Gobierno procedió con justicia ó no al tiem po de Trias.
Espinosa.
Dom enech.
dar el decreto de 26 de Setiem bre ú ltim o’. El Gobierno está m uy sa tis­
Crespo V ele z.
P erez.
F errer Garcés.
fech o de haber procedido entonces con fundadas razones de ju sticia de
Gil (D. José).
Argum osa,
Sarabía.
política y de conveniencia p ú b lica , y está hoy convencido que ha sido
R oyo.
V erdu go.
Torrens.
m uy op o rtu n o , que ha producido buen efecto , y el estado de tranq u i­
Góm ez (D. Joaquín),
A rrieta.
Cam ps y A v iñ ó .
lidad perfecta en que hoy se encuentra la nación es debida á esta y
A le jo .
M ateu.
Faí ero.
otras medidas de igual n aturaleza d el'm ism o día. Yo convengo con el
Abad (D. E steban).
A lonso.
R o v ira lta .
Sr. V ila que el Gobierno no debiera haber tomado esta medida y ot-as
H u elves.
P rete l de Cozar.
Sr. P resid en te.
si no hubieran sido tan urgentes , ó las Córtes se hubiesen hallado reu ­
V enegas.
Osea (D. M igu el.)
>
n id a s; pero ni la Córtes se hallaban reunidas para que el Gobierno les
hubiese som etido esta d isposición , ni el Gobierno pod ia, sin fa ltar á
Señores que desaprobaron.
sus mas sagrados d eb eres, haberla d ife rid o , estando encardado de la
marcha del sistem a por el que la nación se habla pronunciado.
Perez de M eca.
P olo.
A lv aro .
El Gobierno tuvo que hacer el sacrificio de sus propios sen tim ien ­
M ata Vi gil.
R ios.
N ufiez.
t o s , conociendo como conocía que se atacaba en cie rto modo la p ro p ie­
A rgüelles M ier.
Laborda.
Pardo O sorlo.
j
d a d ; pero este sacrificio debió hacerlo para la conservación del órden
A ceved o.
V rquinaon a.
Falcón.
público y para la defensa de la causa de la libertad. Bien conocida era
Fernandez de los R ios. Busto.
Cabrera de N evares.
\
la alarm a gen eral que produjo la em igración en aquellos m om entos d e
V ázquez Parga,
San M igu el.
F on tan .
;
personas notables y m uy m arcadas; acto que no califico en este m o ­
G oyanes.
Valdés (D. D ionisio).
T e ije iro .
m e n to , y que por mas rectas y justificadas que quieran suponerse sus
Casajús.
A rce (D. Salvador),
C astro.
in te n cio n e s, lo cierto es que produjeron una alarm a grande. Se cre y ó
Campa ner.
Charco.
Soler.
|
que no habia seguridad; se creyó que estaba am enazaba la vida y pro­
Bardaji.
Ligu és,
S an taella.
, [•
piedad de todas las personas, y en el extran gero produjo los m ayores
V allejo.
M adoz.
Carrasco.
\
m a le s , no porque estuviese en la idea de estos hom bres, ni porque fu e ­
A bad y L a sierri.
F ernandez d el P in o.
Heroa.
[
sen fundados los tem ores* pero con razón ó sin ella produjo fun estos
Cachurro.
Tarancon.
Í