LA BELLEZA Y LA MIMESIS EN EL ARTE GRIEGO DE ÉPOCA CLÁSICA 'Dicen ... es ya media mentira' T.Fuller De todo el arte de los pueblos occidentales de la historia, el arte más ordenado, más riguroso y del que más movimientos artísticos han surgido sin duda es el arte griego, y dentro de él la época clásica es, a su vez, la más ordenada y rigurosa. Antes de esta etapa otras manifestaciones artísticas habían destacado en gran medida, como por ejemplo las de los egipcios, pero el arte griego innova de dos maneras que me parecen destacables: es un arte más estético que funcional y además con él surgen los primeros grandes teóricos del arte. Es evidente que los griegos eran tan sibaritas que lo primero que nos llega al cerebro al ver cualquier obra de arte griega es la intensa búsqueda de la belleza que hay en ella. Con la belleza se llega a la perfección y con la perfección a la belleza. Leyendo los textos, esto se confirma: los filósofos son los primeros en escribir ríos de tinta sobre la belleza en el arte y cómo conseguirla. Tatarkiewicz en su “Historia de la estética' cita a Viollet-le-Duc: “Nous pouvons bien croire que les Grecs étaitent capables de tout en fait d’art, qu’ils eprouvaient par le sens de la vue des jouissances que nous sommes trop grossiers pour jamais connaître”. Esto me hace pensar que el arte para los griegos es tan esencial como su espiritualidad, es decir, que es algo inherente a su cultura. La belleza para ellos tenía un significado diferente al que tiene para nosotros, un significado más amplio, ya que engloban dentro de ella todo lo que agrada a los sentidos, y algo subjetivo, ya que en referencia a las artes visuales centran la idea de la belleza en el ritmo, la medida o la proporción. Pollit explica que la idea de Protágoras (El hombre es la medida de todas las cosas) permanece durante el período clásico. Para los artistas plásticos, la palabra base es simetria, la medida justa (Tatarkiewicz, 31.1). De esta 'medida justa' se deriva la idea fundamental del Kanon, totalmente presente en el pensamiento clásico sobre la arquitectura y la escultura. Pollit habla de To Eu lo bueno, en relación con lo bello. Los primeros estetas evidentemente no podían ser otros que los pitagóricos; tanto razonamiento matemático debía tener una lógica aplicación a las proporciones del arte. Otras teorías surgieron después, como las de los solistas, pero yo me centraré en las teorías quizás más significativas de la etapa clásica, que fueron las de Platón y su discípulo Aristóteles. PLATÓN (427-347 a.C) Parece que Platón no tenía demasiado clara su postura sobre las artes visuales: «Abierta condena y fascinación medio mística (Barasch, 21)'. Si bien no tiene una teoría de¡ arte recogida, en la mayor parte de sus obras habla del arte, de la belleza y la perfección, como en Hipias Mayor, Fedro o el Banquete, incluso en la República, donde trata en parte el tema de la mímesis. Para Platón la mímesis es degradante. El artista imita lo que ve en el mundo sensible, lo que significa que está imitando lo imperfecto, y a la vez no puede imitar nada del mundo de las Ideas, ya que el artista no puede llegar a conocer este mundo. Esta idea es la misma que posteriormente tendrá lugar en las mentes de los iconoclastas: no se debe representar a Dios porque nadie es capaz de representar la perfección de Dios. Platón habla de dos tipos de mímesis, la construcción del parecido y la ilusión fantástica. En la primera entra en juego la idea academicista y perfeccionista sobre la belleza: se necesita la simetría, la proporción total, las medidas justas, para que el artista sea lo más fiel posible al modelo al que imita su obra. Él «acepta" este tipo de mímesis. La segunda me recuerda de gran manera al genio maligno de Descartes, que nos engañaba y nos hacía ver la realidad de determinada manera. Los artistas añaden a su obra apariencias engañosas que no se corresponden con la realidad externa. Aquí aparecen las desviaciones, las correcciones que se hacen a la obra para adecuarse a la apreciación visual del hombre. Es decir, que habla de ilusiones ópticas y esto no lo acepta de ninguna manera, de hecho en este aspecto es artistas buscan tres tipos de belleza: sensible (físico-material), espiritual (pensamiento) y perfecta (la de las Ideas, a la cual no pueden acceder). Acepta sin embargo a los artistas poiéticos (poio-realizar), que trabajan gracias a la Thea Moira, y son capaces de crear imágenes análogas al mundo de las Ideas. “…Este mismo artesano no tiene solamente talento de hacer todos los muebles, sino también todas las plantas y de borrar a todos los seres vivos, y al él mismo; esto no es todo: hace la tierra, el cielo, los dioses, todo lo que existe en el cielo y todo lo que existe bajo la tierra, en Hades. - Hablas de un artista en efecto admirable [... ]. - Bien - dije - caes justamente en mi idea, porque creo que entre estos artesanos hay que incluir también al pintor, ¿no es así? [...] En cierto modo el pintor hace también una cama, ¿no? - Sí, pero una cama aparente.' (La República) Analicemos a Platón, que es el extremo del academicismo, en estos dos supuestos: - Ante el Guemica de Picasso, ante una obra de Delaunay o incluso alguna obra manierista. - Ante el David de Miguel Ángel, ante el trabajo de Thorwaidsen, de Canova o incluso ante las pinturas de Antonio López. En el primer caso se llevaría las manos a la cabeza y los criticaría y definiría como reflejos del mundo sensible imperfecto, sin embargo en el segundo es probable que los alabara, que los aceptara, ya que son más "perfectos', en cuanto a medidas, proporciones y demás caracteres academicistas,, Parece, en resumen, que a Platón no le importaban ni los artistas, ni el arte en sí, es decir, ni sus materiales, ni su riqueza o importancia. El arte era justificable si reflejaba de alguna manera la belleza superior. El artista mimético es apartado de lo verdadero, de lo importante, y es 'desterrado" a la educación de los jóvenes. Es una especie de 'racista' del arte. Su crítica es dura y a mi juicio injustificada en gran parte. Lo desprecia todo si no es racionalizado al máximo y absolutamente perfecto. Sin embargo Panofsky en "Idea» opina que .sería ir demasiado lejos el querer definir la filosofía platónico como absolutamente antiartística', refiriéndose a los poiéticos, pero yo pienso que sí es antiartística porque incluso a estos los degrada; simplemente por el hecho de degradar al pintor o al escultor, ya obliga a mirar la obra del artesano sin aceptarla a menos que sea perfecta a nuestros ojos. Y al igual que la propia sociedad griega todo este perfeccionismo no hace más que relegar el arte a una simple imagen, y está claro que no lo es, sino que es, como lo explica Pollit, un vehículo de expresión. ARISTÓTELES (384-322 a.C) Se tiene constancia de algunas obras de Aristóteles que trataban sobre estética y arte, pero no se han conservado. Sólo la Poética, en la que habla sobre todo de¡ teatro. Aún siendo discípulo de Platón y teniendo algunas ideas en común, Aristóteles es el polo opuesto a su maestro. Representa el realismo, el progreso, el adelanto artístico, es el prototipo del anti-órden, y por ello influirá en gran medida en la posterior etapa helenística (como lo llama Pollit, el mundo en desorden). Mientras Platón sueña con mundos inalcanzables, Arístóteles tiene los pies en la tierra y centra su atención en lo material, en el conocimiento empírico. Toda esta diferencia se refleja en su concepto del arte. Aristóteles rompe un poco con la idea griega de la belleza por encima de todo: para él el arte es un fin en si mismo, tiene su propia significación. No es que deje la belleza de lado, también habla de ella. Es bello lo que es apreciado por si mismo y no por su utilidad y cuyo valor está dentro de ello (y no en su resultado). Sin embargo, habla de que en lo bello intervienen lapraxis; y la megezos;' junto con la symmetria y con esto entra en relación con el perfeccionismo platónico. Aristóteles habla de nuevo de los poiéticos, de la producción. El arte es una producción. Para que una producción sea arte, debe ser realizada mediante reglas; otra coincidencia con Platón. A pesar de estas coincidencias, le da una importancia al papel del artista que Platón no le da en absoluto. La obra de arte es una producción gracias al artista. Éste debe tener conocimientos y cierta habilidad, es decir, un aprendizaje pero por supuesto también un talento innato. Con relación a la mímesis, ni la descarta como Platón, ni le parece degradante. La mímesis es la esencia del arte imitativo, y no es sólo un medio, sino también un fin. Los propios artistas no buscan la belleza, sino la mímesis, y pueden intervenir en ella y variada a su antojo. El arte imitativo ha de ser convincente (verosímil) y conmovedor (ha de impactar al espectador). Exige que el receptor del arte reconozca en la producción al modelo general (conocimiento a través de los sentidos). La mímesis de Aristóteles es activa, frente a la pasiva de Platón, y sus ideas se reflejarán en artistas como Scopas, Praxíteles y Lisipo. Quisiera ahora como resumen, explicar el porqué de la cita del principio del trabajo. Aunque de los dos filósofos de los que he tratado me inclino mucho más por Aristóteles, en realidad hay algo que no entendían ninguno de los dos, y en mi opinión ninguno de los teóricos del arte de la historia, y es que quizás ni el arte pueda definirse, ni podamos entender a los artistas. A lo mejor los antiguos artistas griegos tenían la misma necesidad de expresarse que cualquier artista de nuestros días, y si realizaban las obras de la manera que lo hacían es porque quizás otra cosa habría resultado un fracaso para ellos; la opinión pública no lo habría comprendido. Quizás no todos creyeron en el canon, en la medida justa. 0 quizás sí. Por mucho que leamos a Platón o a Aristóteles, no sabremos como se sentían los artistas de aquellos días. Pero hay algo claro, y es que el arte ha sido creado por los artistas, para los demás. Y simplemente por eso ya es bello. Y, finalmente, ¿no era belleza lo que buscaban los griegos? BIBLIOGRAFIA - BARASCH, M.: Teorías del arte. De Platón a Winckiemann. Alianza. Madrid 1 991. Cap. 1: La Antigüedad. Pags. 15-48. -PANOFSKY,E: Idea. Cátedra, Madrid 1981. -POLLIT,J.J.: Arte y experiencia en la Grecia Clásica. Xarait, Bilbao 1987. -TATARKIEWICZ, W.: Historia de la estética. Vol. 1. Akal, Madrid 1987. -VARIOS AUTORES: Historia de la filosofía. Vol. 111 la filosofía griega. Dirigido por Brice Parain. S.XXI, Madrid 1982.