1 orfe de Madri - Hemeroteca Digital

1 orfe de Madri
lefensor de la zona Morfe v de k ís Gremios de Madric
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EL NORTE DE MADRID
Viviendas qae s e alqailaD.
NOMBRE
Número
Número
de
D E L A CALLE
PISO
ALQUILER
MENSUAL
CONDICIONES DE PAGO
de habi-
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Cts.
Pesetas.
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Santa Engracia ,
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Fernández Ríos.
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3.° decha. ext.
6
45
OBSERVACIONES
1
•,'Casa de nueva construcción,
I con ascensor, termo-sifón,
> instalación de luz y tim\ bres, y azotea para tender
50
1 la ropa.
» Mes adelantado y mes de 2 balcones, gas, agua.inodo
fianza.
ro e instalación de luz.
t
Con servicio de agua.
NOTA.—Rogamos a nuestros abonados nos comuniquen cuando se les alquilen las viviendas, a fin de evitar anuncios iniitiles.
UNA BODA
En la Iglesia de la Concepción, de
esta Corte, se celebró el día 3 del corriente, a las cuatro de la tarde, el
enlace matrimonial de la linda señorita Juana López Puente con el distinguido e ilustrado joven pericial del
Cuerpo de Aduanas D. Fermín Fraguas Fernández, hijo de nuestro querido amigo el doctor D. Pedro Fraguas, farmacéutico de la Asociación
de la Prensa.
Apadrinaron a los nuevos esposos
en tan solemne acto, la Sra. Doña
Manuela López Puente, hermana de
la contrayente, y el doctor Fraguas.
La comitiva nupcial, que era muy
numerosa y distinguida, fué obsequiada con un delicado lunch.
La feliz pareja, por cuya eterna felicidad hacemos los más fervientes
votos, salió aquel mismo día para
Zaragoza y Barcelona.
Grupo Libre de Cuitara
En su sesión del penúltimo viernes,
el catedrático de Historia de la Universidad Central, Sr. Ortega y Rubio,
disertó, como estaba anunciado por
los periódicos, sopre el tema «Estado
de la sociedad española a la aparición del Quijote», haciendo, con la
autoridad que le da su competencia,
una general revisión de personajes
del siglo XVI, muy interesante para
el público, y que supo matizar (con
la naturalidad del que está habituado
a la labor diaria de la clase durante
largos años) de humoristicas apreciaciones, que arrancaron a los oyentes
risas de grato regocijo.
Al terminar, el vicepresidente de la
Asociación, Sr. Balbín de Unquera,
que ocupaba el sitial inmediato a la
Presidencia, desde la que habló el
Sr. Ortega y Rubio, pronunció unas
frases tan ponderadas como tienen
necesariamente que ser siempre las
de hombre tan lleno de sabiduría
como es D. Antonio Balbín, y tan
vehementes como hubieran podido
ser las del muchacho más lleno de virilidad.
Con esto terminó la primera parte
de la sesión, o sea la cervantina, y,
ocupando la Presidencia el secretario
del Grupo, D. Adelardo López-Sánchez, tuvo lugar la segunda, dedicada a la discusión de la Memoria del
Sr. Grau Campuzano sobre «El delito colectivo».
Terciaron en el debate los señores
Goicochea, Cortezo (D. Manuel) Martínez Arboleda, Alonso y Pavía; pero
la Presidencia, atenta siempre al reloj, como el tiempo avanzaba rápidamente, se vio precisada a hacer uso
de un acuerdo del Comité, de carácter potestativo, limitando los turnos
a sólo diez minutos y las rectificaciones a cinco. Aun asi, tuvieron que
quedarse sin hacer uso de la palabia
el Sr. Fernández de la Poza (que estaba anunciado que hablaría) y el se-
ñor Chamón, y algunos otros señores
socios que la pidieron.
A las nueve de la noche la Presidencia levantó la séSión, declarando
quedaba pendiente la discusión de
esta Memoria en la siguiente.
Guía del oecino
Ofertas de venta.
Se vende coche de dos asientos,
para niños. Almansa, 40.
Se vende piano Montano nuevo.
Razón, Palafox, 25, ultramarinos.
Se venden dos hoteles en la calle
de Lérida, números 7 y 9, en 8.000 y
12.000 pesetas, respectivamente. Razón: en esta administración
Se venden grandes solares en las
inmediaciones de Chamartín, á
precios económicos. Razón en EL
NORTE DE MADRID, Jordán, 21.
Se vende una piedra de mármol
labrada. Razón, Gonzalo de Córdoba, 14, bodega «Los Molinos».
Se vende solar con casa en la calle
ds Rita Luna, núm. 7 (Bellas Vistas)
Razón, San Bernardo, 114. Sr. Soto,
veterinario.
Se vende un solar de 3.000 pies.
Ídem sillería completa en mediano
u§o.
Se vende gran local planta baja
principal, de 5.000 pies, propio para
industria o almacén, con entrada
para carruajes. Castillo, 22.
Se venden 3.006 pies de terrenoparte edificado.Teiuán de las Victo,
rias, barrio de la Almenara, calle de
Colón, núm. 10. Razón, en este periódico.
Se vende cocina con cuatro hermosas puertas, rejas y otros efectos
usados, y ciíatro losas de cristal de
125 X 72-Topete, núm. 18.
10 céntimos.
ftftoiV
Madrid, t de Mayo á* l^lé.
Nám. lid
LMOR[l^
MAÜKD
SEMANARIO INOEPENOIENTB
Defensor de los intereses de la zona Norte de Madrid y de los Gremios raadrileftos.
Susc. trimestre, I peseta
El 2 de Mayo de 1808 en Madrid
Ante el recuerdo de sus héroes.
[Héroes anónimos que ante el te
mor de que España fuera invadida por
un pueblo ambicioso, cuando parecía
estar más decadente, más decrépita,
más perdida; cuando el desaliento embargaba todas sus energías, limitan
dose a lanzar suspiros bajo el recuerdo de pasadas grandezas, brotasteis
por todas partes, sin consultar vues tras fuerzas, ni indagar el número de
vuestros enemigos, sin arredraros
ante el prestigio de los ejércitos de
Napoleón; héroes que en las proximidades de Palacio, al grito de una mujer, ¡Qtu se los llevan!, refiriéndose a los
infantes D. Antonio y D. Francisco,
embestísteis con asombrador coraje al
ayudante del despótico Murat, monsieur Augusto Lagrange, y al oficial
del cuerpo de Guardias walonas don
Miguel Desmaisieres; héroes que acó
metisteis al francés por donde quiera
le encontrasteis: en las calles Mayor,
del Barquillo, de Alcalá, de la Montera y de Carretas; paisanos que, sin
resguardo ni apoyo, os precipiiásteis
en el Parque de Artillería, en nuestro
harria de Maravillas, para sacar los
cañones y resistir con más ventaja;
héroes engrandecidos en la refriega.
OPieisias
JORDÁN, 2 1 , pral.
Anuncios econtiinices
-
—- •
D. Pedro Velarde, D. Luis Daoiz y el Francia; grandes en Sicilia y Lepanteniente Ruiz, que fuisteis traspasa - to; grandes en todas partes, más
dos despiadadamente en aquel sagra- sublimes, más héroes fuisteis vosdo lugar a bayonetazos; aquellos otros otros el Dos de Mayo de 1808. ¡Óh,
que también fueron arcabuceados en si! En ese día fuisteis más gigante
el Prado, en el Retiro, junto a la des- que nunca: escribisteis con vuestra
aparecida fuente de la Puerta del Sol sangre y sellasteis con vuestro martiy en la iglesia de lá Soledad, man- rio la fama eterna de nuestro nomchando con vuestra inocente sangre bre y la gloria inmortal de nuestra
las gradas del templo; los que lo fuis- historia.
teis, al siguiente día 3 en el cercado
Por eso, en este aniversario de
de la casa del príncipe Pío; héroes, en aquella gloriosa epopeya, yo os bendigo cotpo se bendice la augusta mefin, que engrandecisteis en aquel me
morable día este pueblo de Madrid; moria de los grandes héroes y de los
postrado hoy de hinojos delante de mártires, como se bendicen jos camvuestras tumbas, os envío la bendición pos que proveen a nuestro sustento,
humilde de mi alma y el amor purísi- comose bendice elamantísimo nombre
mo de mi pecho, santifico solemne- de una madre; como se bendicen las
mente vuestra memoria y uno a mi maravillas del artey los encantos de la
naturaleza; yo os bendigo y me postro '
vida, vuestro glorioso recuerdo!
Es que aquel vuestro grito sacrosan- de hinojos ante vuestros restos y pido
que vuestros nombres resplandezcan
to de njpatria, libertad e ittdependettcui!»
aquel admirable primer canto de una siempre en la historia como resplanepopeya inmortal, aquel día tremendo dece la misteriosa luz del sol en los
de sangre y luto, será de eterna me - espacios del Cosmos.
moria y admiración de las generacioAnael García Martts.
nes que se sucedan.
Cementerio de la Florida, Dos de Mayo 1916.
Si grandes fueron, sin duda alguna, nuestros antepasados peleando
contra Roma y Cartago en Numancia y Sagunto; si grandes combatienCARRUAJES DE LUJO
do contra los áralas desde 711 hasCalle de Sauta Engracia, 2i
ta 1492, en que ondeó la bandera de
Especialidad en landos para bodas
Castilla en Granada; grandes en las
guerras de Italia, de Alemania y de y bautizos.
gUMiifi Fiiiráiidii
E1*N0.;TE DE MADRID
La Orden del Dos de Mayo
Con el mismo esplendor y magnificencia de todos los años, la Orden
del Dos de Mayo, primera Comisión
de la Cruz Roja Española, celebró
las acostumbradas honras fúnebres
por las innumerables víctimas de la
. luctuosa jornada que da nombre a dicha Orden.
Al efecto, en la iglesia parroquial
de Maravillas tuvo lugar una solemne misa de requíen qne cantó el virtuoso sacerdote D. Santiago Granizo,
dirigiendo la capilla el reputado m'aestro Pelegrí, y terminada ésta, el docto orador sagrado D. Matías Alonso
Santamaría, pronunció un elocuente
sermón alusivo a la festividad que, a
pesar de su extensión, fué escuchado
cóá gusto.
Ocuparon los sillones de la presidencia el limo. Sr. D. José Cortés,
presidente de la Orden; las bellas señoritas Elisa y Rafaela Martínez Novoa,"presí3enta y secretaria de la Juníá'de dáñnas; D. José Pita, tesorero
de la Orden, y D. Eduardo Tur, jefe
de la Ambulancia.
La mesa de petitorio fué presidida
por la preciosa señorita Paquita Mestánzá, que vio llenarse de plata la
X»a concurrencia numerosa y selecta, parte de la cual trasladóse después de la ceremonia al domicilio socfalde la Comisión, donde fué galantemente obsequiada con dulces, pastas y vinos exquisitos.
Venciendo nuestra constante resistencia a citar en estos casos íos nombres de los asistentes por lo ¿nejosos
que resultan los olvidos, consignamos
haber tenido el gusto de saludar a las'
respetables si que tamdién herniosas
doña Dolores NÍontoya y señora de
Márquez, que, con las lindas señoritas
Carolina y Consuelo Rubaudonadeu,
María Antonia Mestanzá, Angeles
Montoya, Adelaida Valdivia y otra
larga serie de encantadoras criaturas
cuyos nombres sentimos no recordar,
formaban una antesala de la gloria:
,. Uj&í' íosángelf s y querubines.' "
De los hombres, estrechamos la
mano al coi^tador, D. José Carbonero; a| .director de almacén, D. José
Ariza; a los jefes y oficiales de las di
ferentes comisiones de la Cruz Roja
de Madrid y Vallecas, señores de la
Peña (padre e hijo), Crespo y Novo,
González Ortíz, Fuentes, Casado, Delestal, González (D. Francisco), Pérez (D. Sergio), Fernández (D. Francisco) y Torres, y un sin número de
socios entre los que recordamos a
nuestro buen amigo D. José Balanzat.
El doctor D. Ramón Antolín, que
por ineludibles deberes profesionales
no pudo concurrir a los funerales lo
efectuó en unión del Sr. Cortés y del
secretario Sr. Clemente a depositar
una hermosa corona en la casa de la
calle de la Ternera donde vivió Daoiz,
y otra en el arco de Monteleón.
También en dicho arco fué depositada por una Comisión del «Centro e
Hijos de Madrid» otra corona, cuya
Comisión fué recibida por el señor
Cambronero con la amabilidad que le
es peculiar.
En la plaza del Dos de Mayo, junto al monumento erigido a Daoiz y
Velarde, levantó la Cruz Roja una
hermosa y espaciosa tienda de cam •
paña que llamó justamente la atención del numerosísimo público que se
congregó en la referida plaza.
Es modelo alemán, reformado por
su constructor D. Moisés Sánchez,
pudiéndosele dar las dimensiones que
se quiera según el número de indivi
dúos que haya de albergar y está provista de mesas, sillas, armarios, bancos, camas, jofainas, jarros para agua
y en fin, hasta del más secreto servicio, todo de lona admirablemente
construido, montándose y desmontándose con facilidad asombrosa.
Durante toda la tarde desfilaron
por la tienda lucidas representaciones
de la Cruz Roja de Madrid y del
Puente de Vallecas, y gran núnjero
de socios que fueron atentamente obsequiados por los señores de la Junta
directiva y jefes y oficiales de la Orden, siendo grandísima la alegría y
anitnaciÓn reinante en todo momento; pero llegando a su período máximo cuando hicieron su aparición magestuosa las encantadoras ñores que
ha popularizadof el inimitable D. Antonio Casero, la rosa, la gardenia y
el clavel, nées Elisa Martínez Novoa y
Paquita y María Antonia Mestanzá,
formando un bouquet ideal con otra
flor no menos preciosa que las citadas, un delicado jazmín que con aquellas compite en gracia y gentileza, la
encantadora Rafaelita Martínez Novoa.
Cuande nos hallábamos abstraídos
en la estática contemplación de tan
lindas mujeres flores, fuimos saludados por el culto periodista redactor de La Patria D. José Santos Pérez, por el socio D. Carlos Genové y
por el practicante de guardia don
Eduardo Pérez Márquez, que con el
más exquisito celo había montado el
servicio sanitario.
Creemos de justicia consignar que
parte del lucimiento de esta fiesta se
debe al simpático teniente de alcalde
del distrito D. Antonio Casero, por las
iacilidades que ha dado para la instalación de la tienda de campaña y
adornos del arco de Monteleón, obras
del señor Miranda.
Anael Sánchez.
Las obras del sobsoelo
eo la calle de Trafalgar
Gen este titulo dieron comienzo
hace infinito tiempo las pbras 4^ saneamiento de la citada calle. Industriales, comerciantes, vecinos y propietarios, creyendo sin duda, en los
comienzos de tales obras, que éstas
tendrían un término prudencial y desde luego se aprestaron a sufrir r^signadamente las incontables molestias
y perturbaciones que habrían de ocasionarse, muchas de ellas innecesarias, como el entrar y salir carretas y
carros con carga, no ya por la vía
pública, sino por jos andenes y por
las mismas aceras, rozando las portadas y los batientes de las entradas
con riesgo de criaturas y de personas
mayores, y haciendo imposible la
vida a los vecinos, a la industria y al
comercio, incluso a los infelices vendedores de la Plaza de Olavide a los
que, a título de urgencia se les obstruyó el paso en plenas Navidades y
Pascuas, privándoles así de beneficios de positiva importancia, contra
cuyos perjuicios redamaron inútilmente.
No obstante, creyendo todos que
se trataba dé un calvario relativamente transitorio, se resignaron a so-
EL NORTE DE MADRID
portarlo como buenos y respetuosos
vecinos, cediendo el interés particular al colectivo; porque ¿cómo pensar que estas obras pudieran dejar en
mantillas a la famosa del Escorial
por su duración? En este caso no se
hubieran resignado, porque todo tiene su limite, y mucho más la paciencia humana.
Y a ese ej^tremo ha llegado; al
agotamiento de la paciencia. Cansados, aburridos de este orden de cosas, y conociendo que tienen derecho a que la perturbación cese y poder libremente transitar por sus calles
y aceras, y a ejercer sin* trabas sus
profesiones, sus industrias, su co"lercio, que para eso pagan al Tesoro y al Municipio y puesto que
'as gestiones de nuestro convecino y
J^oncejal Sr. De Miguel, las del celoso Teniente Alcalde, la laboriosa
y honrada campaña del periódico
Sincero EL NORTE DE MADRID, se
estrellan por lo visto contra un poQer superior y oculto en la sombra,
"ámese Empresa o como quiera 11a''^^''se, ¿no podrían ponerse de acuerdo Teniente Alcalde y Concejales
Para ejercer una acción colectiva con"3 ese Poder, a fin de obligarle a
^espetar los derechos del vecindario?
Mientras la acción colectiva fructií'c^í podría el Sr. Teniente Alcalde
í"*^''Poner su autoridad para que se
•nipien las aceras, desaparezcan de
'las la tierra vertida por los carros y
^s rodadas que éstos dejaron, se limP'^n los alcorques y regueros, y se
^«pongan las losas rotas, colocando
nivel las pocas sanas que existen,
_°n lo cual algo iríamos ya ganando
®" f^^lidad de tránsito.
Los vecinos confiamos que nues9 bondadoso amigo e ilustre Téjente Alcalde ha de lograr rápida«lente poner término a este estado
dé
coáas, evitando con su acierto la
Jjanifestación de queja que es el am^ ^nte y el clamor general de todos
Os sufridos vecinos, y les quedarán
«mente agradecidos, de la misma
D?!í ^^^ ^^ director de EL NORTE
MADRID por su laboriosa campaña
Por la inserción de estas cuartillas
ca^i^" nombre de la razón les dedi^* vecino y propietario
eiprlano L,6pez Gil.
:: Lia Semana en • bpoma^ tt
El Gobierno del Sr. Maura suprimió, mejor dicho, restó esplendor a
las fiestas del Dos de Mayo, suprimiendo los actos oficiales que en tal
día se celebraban para conmemorar
la iniciación de la guerra de la Independencia.
Y se fundaba la decisión gubernamental para tomar tal medida en que
había que evitar en todo lo posible
de herir susceptibilidades.
Todo hubiera estado muy en su
punto si al mismo tiempo que se suprimía la fiesta del Dos de Mayo los
franceses hubieran borrado del Arco
de la Estrella de París los nombres
de Zaragoza y Bailen.
Porque esos dos nombres también
hieren nuestra susceptibilidad, sobre
todo porque en Zaragoza probó España su heroísmo no igualado por
nadie, y en cuanto a Bailen, no deben
olvidar nuestros amigos de allende el
Bidasoa que fué la primera nube que
comenzó a eclipsar el sol napoleónico.
Pero dejando a un lado las cosas
serias, lo cierto es que a pesar de la
prohibición o suspensión de las fiestas, los madrileños las celebramos
con todo el entusiasmo.
Claro es que hoy, afortunadamente, no ocurre lo que hace medio siglo.
A nosotros nos han contado que
allá por el año 40 del pasado siglo,
un individuo entró en un café y pidió
al camarero que le sirviera un consomé.
Como el terminajo oliera a francés
desde un kilómetro, y el camarero
descendiera en línea recta de uno de
los patriotas del año 8,'le sirvió el
consomé, perocon cabezas de fósforos, porque entonces no se conocían
las tan acreditadas pastillas de sublimado corrosivo, a las que apelan aL
gunos cuando se les acaba el dinero
o cuando la novia les da calabazas.
Nuestro querido amigo el señor
Mandánguez es lo que se llama un
hombre a la moderna. Habla el francés, lee Le Matin, come ragú, y ha
estado dos veces en San Juan de Luz.
Ama a Francia, y se felicita de que
hayamos traducido al español los
apaches, porque esto, según sus fra ses, «nos acerca a Europa».
Pero llega el día Dos de Mayó, y el
señor Mandángnez se acuerda de que
ha nacido en Madrid y de que se ha
casado en la iglesia de Maravilla, la
más próxima al lugar en que se desarrolló uno de los más heroicos episodios de aquella gloriosa jornada.
Muy de mañana, vistiendo el traje
primaveral y el paja, se fué al Obe-.
lisco del Dos de Mayo; oyó su misa
con la unción que corresponde a un
fiel cristiano y a un buen patriota.
Después se marchó al Retiro, donde tomó una cosa muy parecida al
chocolate; dio un paseito en una lancha, para ejercitar sus fuerzas en este
deporte náutico, y de nuevo al Obelisco, a presenciar el oficio religioso
que allí se celebra con asistencia del
Ayuntamiento.
Más tarde, en su domicilio, leyó la
historia de la guerra de la Independenda, y se indignó fieramente contra Murat, por la picardía que hizo
en Madrid en aquella memoiable fecha, y a comer.
Porque el patriotismo no le quita
al señor Mandánguez el apetito, y
aquel día rinde al clásico cocido un
tributo mucho más fervoroso que de
ordinario.
Y claro, como aquel día, aunque
no es fiesta oficial, hay toros, el señor
Mandánguez no falta a la corrida,
porque se anuncia una muy comentada entre los abonados del circo.
Terminada la corrida, el Sr. Mandánguez, acompañado de uua modistilla francesa vecina suya, se va a
la Bombilla, donde después de una
merienda opípara se entregan ambos
a la polca internacional.
¿Lo ven ustedes?
El tiempo borra los odios hasta tal
punto, que hoy es la cosa más corriente que un francés dé su corazón
y su mano a una española, y que una
francesa se deje conquistar por un
español.
EL NORTE DE MADRID
Y es que para el amor no hay mares ni fronteras, y los odios de raza y
hasta de categorías sociales se'prosternan ante él.
Y así sea por muchos años para
bien de la Humanidad.
Amén.
Isidro Bellas Vistas.
¿NOS Givmizñivios?
les la enhorabuena, porque ellos nos
vienen a sacar del ostracismo y de la
ociosidad.
para que éste ordene inmediatamente la desinfección de la vivienda desalquilada, y, por último, la de denunciar al teniente de alcalde de su distrito a aquel o aquellos propietarios
remisos en el cumplimiento de la indicada obligación, para que se ies imponga el oportuno correctivo, consistente, según ya dijimos, en una multa, salvo casos de temeraria reincidencia, que llevan aparejada, como
es consiguiente, una sanción más
grave.
Y si, como antes hemos dicho; los
alcaldes de barrio no ignoran—o no
deben ignorar—los traslados de domicilio ocurridos en su demarcación
y, por consiguiente, las viviendas que
se desalquilan y éstas no se someten
a la desinfección reglamentaria, ¿a
quién sino a ellos cabe hacer responsables, en primer término, de la transgresión?
Porque si los propietarios, los administradores o los porteros no cumplen con su deber eu ese punto, facultades tienen los alcaldes de barrio
para requerirlos a que lo efectúen, y
si al requerimiento se resisten, medios tienen aquéllos de hacer que la
ley se respete y se cumpla, denunciando a los infractores.
Quede, pues, sentado: los responsables en primer término, aquellos
sobre quienes más directamente y de
modo más marcado recae la respon sabilidad por el incumplimiento en lo
relativo a la desinfección de viviendas son los alcaldes de barrio, dicho
sea salvando las honrosas excepciones, porque ¿cómo hemos de negar
nosotros que hay alcaldes de barrio
que en este particular, de tan vital interés para la salud del vecindario,
cumplen con su deber?
U SALUD PUBLICA
Desinfección de viviendas.—Responsabilidad en las esferas oficiales.—Los
alcaldes de barrio.
Los responsables, en las esferas
oficiales, del crimen de lesa humaniDecididamente entramos en el con- dad perpetrado a diario por el incum
cierto europeo. Teníamos un bar en plimiento de las disposiciones relaticada esquina, un salón de varíeles en vas a la desinfección de viviendas
cada portal, hablamos el francés casi desalquiladas, son los tenientes de
mejor que el castellano, y comenza- alcalde, los visitadores municipales y
mos a decir pestes del cocido.
los alcaldes de barrio—decíamos en
¿Qué nos faltaba para afrancesarnos el número anterior de EL NORTE DE
MADRID—y hoy agregamos: los más
por completo?
directamente,
responsables, aquellos
Tener apaches propios, aunque el
gremio haya sido importado del fran- sobre quienes la gravedad de la falta
recae más inmediatamente y de un
cés.
Pues ya los tenemos; ya funcionan modo más marcado, son los alcaldes
y ya los periódicos consagran cróni - de barrio.
cas y más crónicas a saludar su apaEsta afirmación parecerá paradórición.
jica, habida cuenta del menguado
La verdad que es cosa de enorgu- concepto que en tesis general se tiellecemos. Ya somos alguien, y ahora ne de las funciones del alcalde de ba
si que no se debe decir que África co- rrio; de tal manera el caciquismo, el
favor, el nepotismo han desiaturalimienza en los Pirineos.
Los apaches nacionales ya funcio- zado el cargo. No hay, sin embargo,
nan libremente, y la otra noche tra- inexactitud en la afirmación.
El alcalde de barrio, por razón de
taron de asesinar a un matrimonio
que no había cometido más delito que vecindad, por ser, de las autoridades,
el de haber asistido al teatro Infanta la que en más inmediato contacto
está con el vecindario, por razón de
Isabel.
¡Qué también puede que fuese un los deberes gue su cargo le imponen
no debe ignorar los traslados de dodelito!
Menos mal que nuestros apaches aún micilio que en su demarcación ocuno están bien entrenados en el manejo rran. ¡Desdichado de él si los ignodel puñal; pero todo se andará, y los rase! Signo evidente sería de que no
apaches españoles darán quince y raya se tratábanlas que de una figura dea los extranjeros, en cuanto entrenen coYativa, y ello vendría a hacer bueno
el propósito de los que tienden a la
up poco más.
A los desocupados se les ofrece una supresión, economizando al Municinueva profesión un tanto lucrativa, y pio un centenar de miles de pesetas.
estamos seguros que de aquí a unos
Pero no se trata, no, de una figura
cuarenta años, los apaches franceses decorativa; se trata de un cargo muy
vendrán a tomar lecciones de los es- modesto, sí, pero de funciones de repañoles.
conocida importancia, y entre ellas la
Lo que si hacemos notar con mu- de velar por el cumplimiento de la
cho gusto, es que hasta que la policía ley y de los reglamentos en lo relatiespañola no ha estado medianamente vo a la desinfección de viviendas; la
organizada, no hemos tenido apaches, de invitar a los propietarios a que no
que nos pongan a nivel de las nacio- prescindan del parte de desalquilo,
nes civilizadas.
del que el alcalde de barrio ha de dar
Saludemos su aparición, y démos- traslado al Laboratorio Municipal,
Aspirantes al Bachillerato
aprobarán en Junio próximo el Ingreso y Primer curso (o un curso cualquiera), ingresando ahora en el
Insíituío de Gulíura
GLORIETA DE BILBAO, 5
Horas de Secretaria y clases: tarde
y noche.
EL NORTE DE MADRID
CENTRO INSTRUCTIVO LIBERAL
DE CUATRO CAMIMOS
LOS VIERNES DE BROCAS
Brillante y solemne; he aquí los
dos adjetivos que, sin eufemismos,
pueden aplicarse a la velada que en
el viernes de la penúltima semana se
celebró en nuestro Centro instructivo
liberal de Cuatro Caminos.
Brillante, por las personalidades
allí congregadas; solemne, por las declaracionesde ardiente madrileñismo,
de neta y sana política liberal y de
acendrado cariño a la barriada de
Cuatro Caminosj cuyas declaraciones
brotaron de labios- tan autorizados
como^los de los diputados electos se
ñores Conde de Santa Engracia, AraS<^n y Alesanco, y por orad >res del
fuste de los Sres. Doval, Fau de Casa
"^"ana, González Roja^, Buendía, Arniiñana y Pulido (D. Ramón), la ninfa Egeria del Sr. Doval, según éste le
llamó, en un discurso elocuentísimo,
plagado de ocurrencias felicísimas y
de inspirados tropos, que embelesó
al ilustrado auditorio y fué premiado
con bravos y aplausos a granel.
No fué tampoco escasa la cosecha
de aplausos que recogieron los seño•^es Aragón, Alesanco y Conde de
Santa Engracia, cuyos discursos tupieron por tema principal la gratitud
a los electores monárquicos del distuto de Chamberí, y especialmente
de Cuatro Caminos (ambos distritos),
por haberles favorecido con sus vo'^s, a cuyo favor correspondieron
Ofreciéndose incondicionalmente a
^Us amigos y electores, y prometiendo laborar sin tregua por los intere^*^s de Madrid, en general, y de los
barrios extremos en particular.
El Sr. Fau de Casa Juana, cumpliendo lo ofrecido en la velada del
^nterior viernes, «ntregó a la Presidencia el premio Brocas, destinado al
'obrero de mejor comportamiento,
consistente en un bonito reloj con la
'Correspondiente y alusiva inscripción,
S^'abada en la tapa.
El.secretario, Sr. Tur, leyó una cartadel Sr. Setuain justificando su auticia y adhiriéndose al acto, cuya
arta fué acogida con nutridos aplau
Sos.
Terminó el acto leyendo el Sr. Casero, con entonación y gracejo inimi
tables, tres de sus aplaudidas composiciones tituladas, si mal no recordamos, «El juicio del año», «El baile de
piñata» y «Un viaje de recreo».
Inútil paiece decir que el ilustre
cantor de los Madriles fué recompensado con una ovación estruendosa y
muy merecida.
No hubo resumen de discursos;
¿para qué?; pero sí muy sinceras y reiteradísimas manifestaciones de simpatía y de respeto para el presidente
accidental Sr. Vincenti y para el efectivo D. Manuel Brocas.
Ecos de\?allehermoso
Ignoramos si para cuando este número de EL NORTE DE MADRID vea la
luz, elSr. Conde deRomanones habrá
encontrado quien quiera cargar con
el mochuelo de la Alcaldía de Madrid
o la vara simbólica seguirá en manos
del Sr. Valero Hervás, aunque sea interinamente.
De todos modos, rogamos a la persona que ejerza la primera autoridad
municipal de Madrid, que se digne
hacer un viaje a este barrio de Vallehermoso.
Puede hacer el viaje como guste,
pues la impertinente lluvia de estos
dias lo permiten aunque sea en submarino; hay agua para todo.
El alcalde, sea el interino o sea el
efectivo, se podrá convencer de que
el que viva en Vallehermoso, sobre
todo en tiempo de lluvia, demuestra
que tiene un valor acreditado.
Hay que reconocer que los alcaldes interinos siempre han hecho algo
aunque sólo haya sido por lograr
aplausos.
Al Sr. Valero Hervás se le presenta una ocasión propicia para que los
vecinos de este barrio le toquen las
palmas.
Y conste que los vecinos de este
barrio, sólo se contentan con que el
nuevo alcalde les conteste a la siguientes preguntas:
¿Cuándo comienza el derribo de
los cementerios adosados en la zona
norte de Madrid.
¿Cuándo se termina el adoquinado
de la calle de Galileo?
¿Cuándo se termina de encintar
la calle de Rodríguez San Pedro?
¿Cuándo desaparece el Asilo Fernández Latorre?
¿Cuándo deja de estar cerrada la
salida de la calle de Pontevedra?
¿Cuándo se prohibe que en el
mismo piso que hay establecida una
escuela nacional, funcione una clínica de enfermedades comunes?
¿Cuándo se colocan bocas de riego
en la calle de Galileo?
Si el señor alcalde se digna contestar a tan inocentes preguntas, le prometemos declararle hijo, o por la menos, sobrino adoptivo de Vallehermoso.
Un veeino.
Recuerdos del
Madrid viejo
Calle de la Cabeza.
Vivía en una casa algo decente,
cerca del barrio del Ave-María, un
sacerdote de mediana fortuna, el cual
tenía un criado que, codicioso de sus
bienes, proyectó apoderarse de ellos;
y no encontrando otro medio que el
de asesinarlo, se decidió a cometer su
terrible crimen. En efecto, aguardó
a que el respetable sacerdote se reco •
giera, y cuando le orayó dormido, se
llegó a su lecho, y con una enorme
navaja le degolló, separándole la cabeza del tronco del cuerpo: en seguida se apoderó de su metálico, que no
era poco, y cuando lo hubo recogido
salió de la casa, emigrando al reino
de Portugal, donde permaneció algunos años.
Viendo algunos vecinos inmediatos
que el sacerdote no salía a las obligaciones de su ministerio, ni tampoco el
criado a cumplir con las suyas, empezaron a sospechar si habría ocurrido algún incidente a ambos; pero
nadie se atrevió a acercarse a su habitación, hasta que trayéndole recado
de la parroquia de San Sebastián, en
donde era cumplidor de unas capellanías, para que en aquella noche asistiese a un enterramiento que con
oficio había, halló al llegar el sacristán que estaba la puerta entreabierta,
y que nadie le contestaba; retrocedió
EL NORTE DE MADRID
para preguntar a un vecino, y le dijo cumplió la sentencia volvió a transque en aquella mañana no le había formarse en cabeza de carnero, y por
visto ir a celebrar como algunos días memoria mandó el rey D. Felipe UI
iba a la ermita de Santa Catalina, que se hiciese una de piedra asemecostumbre que tenía cuando no lo ve • jando a la del sacerdote, y que se corificaba en la parroquia. Por último, locase en la fachada de la casa; pero
determinaron ponerlo en conocimien- luego los vecinos pidieron que se quito del alcalde de aquel cuartel, quien tase de allí porque les causaba espancon los ministriles acudió a la casa, to, y que ellos se obligaban a edificar
donde hallaron al sacerdote mencio- una capilla en honor de Nuestra Senado tendido en su lecho, bañado en ñora del Carmen y poner un cuadro
su sangre y la cabeza arrojada en el que representara el suceso; así se les
suelo; buscaron al criado, pero en otorgó y labraron su capilla, en la
vano, porque ya había huido: practi- que algunos devotos de la Virgen forcaron diligencias sin averiguar cosa maron una asociación devota, de la
alguna; entretanto, recogido el cadá- que tuvo origen la V. O. T. de Peniver, lo llevaron a sepultar a la parro- tencia de Nuestra Señora del Carmen,
quia con la solemnidad correspon- que mas adelante un piadoso oaballe
diente.
ro compró un terreno en el claustro
Mucho se habló en Madrid de este del convento del Carmen Calzado, y
asesinato, el cual quedó impune, y se edificó otra capilla a la Virgen, en
con el tiempo también olvidado; pero la que esta corporación siguió practial cabo de algunos años, cuando ya cando sus ejercicios hasta la última
ninguno se acordaba, el asesino vol- exclautraoión, en que habiéndose invió a Madrid disfrazado de caballero, cautado la hacienda del convento pade modo que ya no era íácil fuese co- ra establecer en él las oficinas de la
nocido, y paseándose una mañana dirección de la Deuda, fué trasladada
por el Rastro, le dio el capricho de la Virgen a una capilla de la iglesia
comprar una cabeza de carnero, re- del mencionado convento. Ahora dicordando todavía su humilde condi- remos que la capilla, luego que se
ción de criado de servir: la ajustó y vendió la casa, fué trasladada a la cala escondió debajo de Í-U capa, siguió lle de la Cruz, donde ha permanecido
con ella, y un aguacil que por allí ha- hasta hace algunos años, y que por
bía notó que iba el fingido caballero haber estado la cabeza de piedra en
dejando un rastro de sangre; el agua- la fachada de la casa donde se consucil le paró, preguntándole lo que lle- mó el crimen, la denominaran calle de
vaba, porque la sangre teñía el suelo. la Cabeza.
¡Qué tengo de llevar! contestó admirado,
la cabeza de un carnero que ahora
acabo de comprar. Y al tiempo de
mostrársela a\ ministro de justicia, se
halló con que era la cabeza de un sacerdote. ¡Castigo del cielo es esto! esEsas son, al menos, nuestras imclamó el asesino. <Yo mismo me declaro presiones; parece ser que la adquisia los tribunales para que me juz- ción de nuevo local depende sólo de
guen.» Entonces reveló su crimen, y detalles en vías de ser ultimados safué conducido a la cárcel de Villa, tisfactoriamente y que, por consejunto a las casas consistoriales, y ha- cuencia,¡del derrribo del vetusto edibiéndosele sentenciado a horca, fué ficio y la división del terreno en parejecutado en la Plaza Mayor de Ma- celas para edificar es cosa descontadrid, llevando delante la cabeza del da y a realizar en muy breve térsacerdote en una batea de plata. Fué mino.
numeroso el concurso de gentes que
Más por si estas referencias no
acudió a ver e»ta ejecución del asesirespondieran
por completo a la reano qqe descubrió la Justicia Divina.
lidad,
a
continuación
publicamos la
El fué contrito] al suplicio, extremecopia
de
una
carta
que
a nuestro
oiéndose cada vez que a grito de prepoder
llega
y
que
el
conocido
indusgonero se leía su sentencia. Subió al
trial
D.
C.
Lorente
dirigió
al
señor
cadalso, donde expió su crimen, y por
Director
de
La
Correspondenaa
de
la noche fué llevado a enterrar al
España,
sin
que
hasta
la
fecha
haya
atrio de la parroquia de San Miguel
merecido los honores de la inserde los Octoes.
ción, que separaos, en cuya carta se
La cabeza, ouent&n que así que se demuestra de una manera evidente
¿Se derriba el Hospicio?
hasta que punto resulta útil y necesaria la demolición del referido edificio. La carta dice así:
uMadrid 3 Febrero 1916.
Señor Director de La Correspondencia de España, en esta.
Muy señor mío y de mi mayor
consideración: Asiduo lector de sus
bien escritos artículos y más cuando
se trata del bien general en estos
momentos de crisis del trabajo y carestía de las subsistencias, veo que
los albañiles piden que sean demolidas para construirlas de nuevo las
casas que haya denunciadas, y ante
esto se me ocurre preguntar.
¿Qué hace la Diputación provincial con los terrenos y proyecto del
nuevo Hospicio, que si mal no recuerdo haber leído en el periódico
que V. tan dignamente dirige, obtuvo autorización para poder permutar los terrenos y aprovechamiento
del actual, tasado en 5 millones por
la edificación del nuevo, tasado en 3?
¿Es que no hay capitalistas que se
atrevan a construirlo con esta tan
gran ventaja? ¿O es que ha de ser un
proyecto más que quede relegado al
olvido y que de hacerlo podría darse
trabajo a centenares de obreros?
Tiempo es ya que desaparezca
ese vetusto caserón en vía tan importante como la calle de Fuencarral, que a excepción de su artística
portada, es un edificio que por todas
partes se derrumba, y sino díganlo
las tapias de la calle de la Beneficencia, socavadas por sus cimientos y
con el peligro de que algún transeúnte poco avisado quede sepultado el mejor día entre sus escombros.
Con ello ganaría también el callejón llamado calle de Barceló y desaparecería ese espectro de jardín en
plena calle de Fuencarral que hace
poco honor a sus administradores.
Dispénseme señor Director este
atrevimiento; pero como veo que
usted siempre defiende las buenas
causas no he titubeado en dirigirle
esta pregunta por si merece que se
haga eco de ella.
De V. atento s. s. q. e. s. m,
Un antiguo suscrlptor.D
Planchado amerieano
para cuellos y puños.
Raimuhdo LuliOf 5, l.°
EL NORTE DE MADRID
Las confidentas :
—Créame usted a mi Pepe:
Julia es una buena chica,
y le quiere a usted muchísimo,
según todo lo atestigua.
—¿Qué me quiere?
—Ya lo creo.
—Entonces, ¿qué justifica
las tremendas calabazas
que me manda en esta e|ifstola?
—Porque es usted muy celoso,
según todo lo atestigua.
—No he de serlo, si me consta
que desde hace varios días
la sigue un tal Sinibaldo...
—Y ¿qué importa que la siga?
¡Vaya una cosa!
—En que ella,
en vez de mostrar su inquina,
¡le dirige unas miradas!
|le dirige unas sonrisas!
—¡Aprensión!
—No; no, señora.
— Es que ella es una chiquilla
y hace todas esas cosas
sin intención, sin malicia.
Esta noche va usté a verla,
que ya estará arrepentida
de haberle a usté escrito esa
carta, qué tanto le Indigna,
y se acabó.
—Hasta maflana,
que volvamos a las mismas.
-^¡No me hables más de ese títere!
¡No me hables más!
—Pero, hija...
—Hoy le he mandado a paseo
porque sé que se dedica
a hacerle el amor a una
muchacha telefonista,
con la que habla por el hilo
a todas horas del día.
—Pues, hija, te han engañado.
—¡Cómo!
—Todo eso es mentira
Pepito te quiere mucho
en ti su cariño cifra,
y como tú le desdeñes,
apelará a la pastilla
de sublimado.
— ¿Qué dices?
—¡Lo que oyes!
—¡Virgen María!
¿Quién te ha dicho eso?
—El mismo.
—¿Estposibíe?
—Sí, querida.
—¡Pobrecillo!
—De manera,
que puedes estar tranquila.
Compro Ud. loo domingoo
—¡Ay, Lola! ¡Cuánto te debo!
¡Eres mi mejor amiga!
Ecos de Bellas Vistas
Casa nueva, vida nueva.
El día 29 del próximo pasado hubo
una Junta general extraordinaria en
—Se hizo la paz.
la Asociación de Propietarios, Indus— Lo celebro.
triales y Vecinos del barrio de Bellas
—Como la vi tan propicia,
Vistas, en la que sesenta y ocho votos
nos explicamos, y todo
quedó arreglado en seguida.
contra cuatro dieron uno de censura a
—¿Sabe usted que envidio a Julia?
la Junta directiva que, ante el inape¡Vaya si la tengo envidia!
lable fallo quedó ipso facto suspensa
Y ¿por qué?
de empleo y sueldo, por no decir ce— Porque ella tiene
sante, siendo elegida en sustición de
quien'la quiere, quien la mitíia.
aquélla la que se cita a^ renglón se¿Y usted?
—Yo no tengo a nadie
guido:
—Pues me parece mentira.
Presidente, ü . Antonio García Que—¿Qué quiere usted? Yo soy fea.
jido.
—Al contrario, muy bonita.
Vicepresidente, D. Mariano Plaza.
—Favor.
Secretario general, D. Egdunio
—No: justicia sólo.
(La verdad es que es muy linda.)
Tur.
—Julia tiene mucha suerte
ídem de actas, D. Enrique Co¡Vaya! Y eso que la niña
nejo.
es algo alegre de cascos.
Vicesecretario, D. Manuel Garrido.
—Un poco.
—Y algo coquetiUa.
Contador, D. Fernando Céspedes
—Un poco.
Nicoli.
—Y un poco tonta.
Tesorero, D. Manuel Alvarez AlPero es buena.
varez.
—Sí; bonísima.
Vocale*: Sres. Alvarez (D. D,),
¡Ay, Lola! Si yo encontrara
una mujer parecida
Merchán, Alvarez Sanz, Ruiz, Palaa usted...
cios, Conejo (D. D.), Moreno, Mar—Busque usté, y ¡quién sabe!
tín y López.
—Y usted cree...
Alguno de los señores de la ante--¿Quién adivina?
rior
Junta salió del domicilio social,
—¿Sabe usted lo que le digo?
haciéndose un saco de conjeturas
—No sé.
— ¡Que usted me cautiva!
respecto a lo ocurrido.
—¡Pepe!
Nosotros pensábamos hacer una
— ¡Que usted me seduce!
larga
serie de sabrosos comentarios al
—¡Pepe!
asunto; pero es tan elocuente, tan
— ¡Que usted me electriza!
abrumadora, tan incontestable la fuer—Pero ¿y Julia?
—¡No me importa!
za de los números...
—¿Qué no le importa?
¿Quién será capaz de negar el po—¡Ni chispa!
der demoledor del número cuarenta
¿Y qué me dice usté a esto?
y dosl
—¿Qué quiere usted que le diga?
Pues asimismo el núm. 68 está doQue yo le agradezco mucho
las frases que me dedica,
tado de una fuerza Kolosal.
que usté es amable... que es mucho .
Dicho lo que dicho queda respecto
el afecto que me inspira...
al
particular
fallado por la Junta ge y que si eso fuese cierto...
neral,
nadu
tendríamos que añadir
yo...
porque
la
noticia
nada tiene de parti—Vamos... yo chica ,.
cular (aunque pBrezca un contrasenti¡Ojo, ñiflas candorosas,
do); pero siguiendo nuestra costum porque así es como terminan
bre periodística de hinchar el perro (no
esas que por amigables
hay alusión), vamos a extendernos (a
componedoras terminan!
pierna suelta) en un mar de consideAIanu|el Soriano.
raciones, nadando sin guardar la
ropa.
¡Lástima grande que una Sociedad
EL NORTE OE MllOllfO
10
que debiera ser la genuína representación del bfrrio, camine tan asendereada por los más tortuosos vericuetos debido a la incompetencia de los
conductores!
¡Lástima grande, lástima inmensa
de aquel presidente digno y caballeroso, llamado D. Juan Pinto Abía,
lleno de prestigios, personalidad y
buen criterio que por las intrigas caciquiles imperantes en el ¿arrio de
Bellas Vistas fué inicuamente arrojado por la borda!...
Ha sonado ya la h')ra da que to los
los elementos vitales del barrio d; spierten de su profundo letargo y se
den cuenta de la importanía, de la
fuerza incontrastable que poseen para
imprimir a estos desamparados lugares un movimiento desenvolvente tan
extenso como por sus condiciones naturales les corresponde.
Es necesario, indispensable que s^pan elegir los gobernantes que con nobleza de miras les lleven por el Camino del Progreso: no por el de Progreso Cuatro Caminos, pues sólo hay uno
expedito para el fin propuesto: el de
la unión.
El comercio, la industria, la propiedad y el vecindario unidos por estrecho lazo del común interés en torno de una persona de prestigio, de inteligencia clara y de buena fe pueden
llevar a cabo la urgentísima obra regeneradora que se impone, despreciando a los pequeños grandes hombres, cuya soberbia gigante está en
razón inversa con su origen ínfimo.
Es de absoluta precisión limpiar el
barrio de embusteros, perturbadores,
haciéndolos salir, si preciso fuera, no
sólo deja Asociación, sino del barrio,
a uña de caballo, que es el paso que
mejor les cuadra.
Pero observo que me voy extendiendo demasiado; así es que voy a
concluir, mas no sin antes recordarles, caros amigos, que la silla presidencial no es una silla gestatoria destinada a comprobar si el presidente es
valiente, valentón o simplemente Valentín, para echarlo todo por la tremenda, ni es una sedes sapientiae o silla
de la sabiduría (para que vean que sé
latín), donde deba sentarse el más sabio de los socios. ¡Cá! Ni siquiera es
necesario que la ocupe un socio listo,
EL NORTE DE MADRID
porque éstos a veces se pasan de lis"
tos y se sientan hasta en... la boca del
estómago. Basta y sobra con que se
tome un interés desinteresado por el barrio, y que tratándose de Bellas Vistas pnnga !os ojns en B'anco... Parrondo nuestro simpático Teniente de
Alcaide, acudiendo a él siempre que
sea preciso en pro de la barriada, seguro de que será solícita y prontamente atendido.
Eduardo Tur.
En las primeras sombras de la noche, nuestras gríicües modistillas
salen de sus talleres, ufanas, pletórícas de alegría, esa alegría tan peculiar en las hijas de nuestro Madrid; estas lindas muchachas que
con sus risas alegran nuestro corazón, que nos hacen olvidar todas las
pesadumbres de la vida...
Entre ellas, las hay menuditas de
cuerpo, de rostro ovalado, de ojos
negros, grandes y soñadores, de cabellos como la endrina; las hay también rubias, como las espigas calcinadas por el sol, de pelo sedoso, de
ojos zalameros, de boca fina casi imperceptible, en cuyos labios sonrosados se halla dibujada una leve sonrisa.
El tipo de mujer madrileña de
cuerpo pequeño y flexible como la
palmera, aparece representado en
nuesiras simpáticas modistas. Las
morenas son quizás las más alegres
y graciosas, sonríen por cualquier
piropo que les lanza algún tenorio
callejeros, y, si es preciso, sígnenla
charla amena y salpicada de agudezas, hasta el umbral de su vivienda, en el cual, y volviendo la cabecita de niña alocada hacia el galán,
presunto conquistador, lo despiden
moviendo los deditos-jazmines enrollados de su mano, donde tiembla el dedal plateado como símbolo
del trabajo... Los ojos negros de la
niña se ven relucir en el fondo del
portal; las miradas se cruzan, y algunas veces es el preludio de un
poema de amor que empieza con
sueños e ilusiones y acabará quizás
con angustias y desengaños.
La modista rnadrileña, a través de
su risa burlona, ama intensamente y
es capaz de ios mayores sacrificios
y de las más temibles venganzas, si
el estudiante calavera, por quien
está enamorada, le hace una mal*
acción.
Ellas salen alegres de sus talleres
y a pesar de las muchas contrariedades que pasan en la vida, no se apuran, su genio es de aquí, netamente
castizo; porque por algo nacieron en
Avapiés o Chamberí... Ellas d e r r a man la gracia a torrentes, esparcen
por las calles su juvenil bullicio y
son a modo de aves cantoras que
alegran con sus melodías las congojas de nuestro espíritu; ellas y nadie
mejor que ellas son las que elevan
al espacio las notas de su canción al
amor y a la vida.
Pero también hay días que no cantan. Algunas compañeras han desaparecido Las rigurosidades del invierno o la miseria maldita, se las
llevó a sitios de donde no se vuelve
y nada se sabe. Máquinas humanas
descompuesta'^, que las acabó de enmohecer las ingratitudes de esta
v i d a . Compañeras que llevan el
eterno camino en tardes tristes, en
coche fúnebre, sin lujo, resaltando
en el centro la cajita blanca, horrible en su inmaculada blancura, porque dentro se guarda el cuerpo de
una virgen que se sepultó en el misterio de la muerte sin que sus ojos
se hubiesen cerrado llenos de amor
sobre los ojos del esposo, sin que su
corazón hubiera palpitado al lado de
otro corazón amante...
Viene a mi imaginación un recuerdo. ¡Triste recuerdo! Andaba yo
una noche a caz i de aventuras, y,
no se en que calle trabé conversación que pronto fué amistad—con
una niña, de guedejas rubias, de
ojos que hablaban poi sí solos, azules como el color del cielo andaluz,
de andares menuditos, sus pies como
la almendra; parecía, en suma, una
virgencita de nácar, y era su conversación tan sedante, y había un
dejo tan triste y melancólico en sus
palabras, que su vida me interesó
apasionadamente.
Al preguntarla por qué estaba tan
triste cuando sus compañeras rebosaban de alegría, me contestó que
estaba enferma.
—Yo, también he reído locaiaente
como ellas - a ñ a d i ó con una expresión penosa de su voz musical—pero
ahora ya no río...
Un golpe de tos seca y pertinaz
interrumpió su última palabra e
hizo temblar su cuerpecito de líneas
finas y suaves.
EL NORTE DE MADRID
No quise hablar más por no hacer
el dolor de la pobre niña más intenso. En aquel instante llegábamos a
su casa, un destartalado y viejo caserón donde vivían muchas familias
en cuartos pequeños, obscuros, húmedos y sin ventilación.
Me tendió su mano pequeñita, de
piel fina, pero que ardía por la calentura que, poco a poco iba consumiendo aquel cuerpecito, y se despidió de mí hasta el día siguiente.
Al otro día no fué al taller; pasó
otro, otro; ¡nada! Esperaba siempre
en vano a la muñequita de nácar,
como yo la llamaba.
Mi impaciencia aumentaba y una
de las noches que salían del taller
sus compañeras las pregunté por mi
amiguita. Todas me miraron con
tristeza, y al fin me respondieron:
—Elena ha muerto ayer ,tísica.
No pude oír más. Di las gracias y
seguí calle abajo ocultando una lágrima furtiva, ofrenda tiue rendía a
la niña buena, de ojos azules, que
había consumido su corta existencia
sobre la costura, en un taller húmedo y sombrío, mientras las prendas
salidas de sus manos, lucirían en
teatros, coches y salones aristocráticos, sobre los cuerpos de aquellas
mujeres altivas que, cuando entraban en el taller para encargar un
vestido, miraban despreciativas a
las pobres modistas que cosían silenciosas, trenzando un ensueño, deshecho a veces como el de mi buena
amiga Elena.
¡Linda muñequita, que pena más
profunda me produjo tu muerte!
Leoncio L,ara.
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ÍCOS DE CHAMBERÍ
La verbena del Carmen.
Parecerá prematuro que El Fisgón
de Chamberí se ocupe ahora de la
verbena del Carmen, que se celebra,
como todos saben, el día 16 de Ju lio; pero el programa de fiestas que
ha concebido es algo extenso, y se
necesita tiempo para desarrollarlo y
llevarlo a feliz término. Además, tiene el deseo de que la verbena dé
Chamberi supere este año a todas
las de la Corte, para lo cual dispone
por adelantado de vías amplias y hermosas de que carecen los barrios
donde se efectúan análogas diversiones.
Los festejos que podrían celebrarse, entre otros, son los siguientes:
Concurso de belleza; concurso de
feos para que el .sexo fuerte no se
sienta postergado; concurso de balcones, escaparates, fachadas y porta-
11
das, con premios al mejor gusto artístico; bailes populares; conciertos;
cinematógrafo y teatro al aire libre;
cabalgata cervantina, con pasajes del
Quijote; cabalgata de los gremios;
batalla de flores; festival infantil; juegos florales o certamen literario; misa
de campaña; comida popular a los
pobres, servida por señoritas del ba •
rrio; retretas; distribución de premios
a los niños más aplicados de las escuelas municipales,' y fuegos artificiales, cucañas, carreras de cintas, de
asnos, de hombres en sacos, etc., e
iluminación a la veneciana, o en otra
forma vistosa y artística, de las calles
de Santa Engracia, Martínez Campos
y Eloy Gonzalo,
En estas vías se permitiría instalar
puestos o tiendas para la venta de
juguetes, flores, etc., Tíos vivos y
otros entretenimientos cultos.
Además, deberían colgarse y engalanarse los balcones del barrio.
A los concursos se otorgarían diplomas, accésits y hasta premios en
metálico, permitiéndolo los recur
sos.
¿Qué les parece a ustedes el programita?
No se le oculta al autor de este
programa las dificultades para desarrollarlo; pero con firme voluntad
todo podría allanarse.
Como el mayor factor para toda
empresa es el dinero, propongo que
en todos los establecimientos se abra
una suscripción popular para subve nir a los gastos de los festejos del
Carmen, y que las cantidades ingre
sen en la Alcaldía según se vayan recaudando, con relación detallada de
todas cuantas personas contribuyanpara publicarse en EL NORTE DE MADRID, a más de exponerla en los sitios que se designe, a fin de que todos puedan enterarse.
También propongo el nombramiento de una Junta o Comisión
compuesta del Teniente Alcalde, de
un individuo de cada gremio, otro
de los propietarios, de un vecino y
de un obrero, para que la clase popular tuviera representación.
Esta Junta daría forma adecuada
al proyecto de
BÍ E^Iagón de ebambcrl.
12
EL NORTE DE MADRID
Por nuestra cuenta.
No nos parece mal, en principio
lá idea del ilustrado colaborador que
con el seudónimo de El Fisgón de
Chamberí honra estas columnas; pero
la encontramos susceptible de am-
pliaciones, reducciones y modificaciones que con más tiempo y espacio nos proponemos exponer.
Y nada más por hoy; sino que nos
agradaría ver que alguien recogía la
idea de El Fí$gón de Chamberí para
hacer este año algo práctico y fuera
de los manoseados moldes.
¡Oh, si el simpático Teniente Alcalde quisiera!...
Anuncíese en EL NORTE DE MADRID
LOS CUATRO AMIGOS
F*or A . E ' s t r a d a 7 F . O r t e g a
VIOLETTE
{Continuación)
Habíanse instalado encima de la
hierba y a guisa de tienda uuas mantas agujereadas.
Los objetos expuestos eran pendientes de metal, perlas hechas con
ésoamas de pescados, peinetas, pañuelos de algodón, todo ello presentado
a la multitud por una chiquilla, cuya
voz endeble gritaba con tono monótono el precio de cada cosa.
Los aduaneros tienen el olfato de
perros de caza. Aunque Martín üurer no estuviese en servicio en Oberwiller, sus instintos profesionales se
despertaron. No lejos del grupo estaban tendidos dos perros con hocico
de lobo, como los que emplean generalmente los contrabandistasBuscó, pues, a Otto, aduanero en
Oberwillér, y con él interrogó al que
pareda jefe de la banda; pero éste
presentó sus documentos ea regla.
El más viejo de los buhoneros, una
especie de Matusalén, con barba blanca, declinó su nombre diciendo que
se llamaba Weis. Preciso fué que
Martín Durer guardara para sí sus
sospechas.
En cambio Catalina, menos desconfiada, no apartaba la vista de la chiquilla, que, indiferente al interrogatorio, continuaba pregonando sus mereaadas. Decíase la mujer del cabo que
Francisca debía tener poco más o menod la edad de la muc'iachuela al.maaa, y sus ojos se llenaban de lágrimas,
aunque trataba de contenerse.
Martin Durer lo notó, y entonces
examinó a la chiquilla.
Lo mismo que su mujer, el buen
hombre no podía ver a uua criatura
de aquélla edad sin que su corazón se
oprimiera. No obstante, toda comparación era difícil entre la joven vendedora y Francisca.
Fraucisca había tenido el cabello
rubio, del color del trigo, y la chica
alemana, con su cabellera obscura, su
tez curtida y sus ojeras negruzcas, no
era por cierto .su retrato. Francisca
habría tenido más de diez años por
aquel tiempo, y la edad de la otra no
podía adivinarse fácilmente. Sus brazos denot-iban cierto vigor, en tanto
que su carita pálida, bajo la capa tostada, revelaba cansancio y fiebre; quizás tenía diez años yquizás tenía doce.
Sin embargo, el cabo la llamó con
una seña, la compró un rosario y luego la dirigió algunas preguntas.
Muy poco fué lo que supo. La chica
dijo que se llamaba Violette, y Martín
Durer tuvo que contentarse con esto.
Después dijo que no conocía padre ni
madre, y que su tínico pariente era su
tío Weias, el mismo que los aduaneros
habían interrogado alguuos minutos
antes.
La conversación no fué larga, porque intervino en ella Weiss, que estaba alrededor de la chica.
« - Si la muahácha os agrada la volveréis a ver porque a menudo venimos a estas tierras. Por ahora basta
de conversación.»
Los habitantes del Rothlach debieron dejar la fiesta sin haber sabido
otra cosa.
Violette no volvió a parecer. Parecía que los contrabandistas tuviesen
razones secretas para mantenerse fue
ra del radio del Rothlach.
Martín Durer habló con sus compañeros infructuosamente, pues, todos
le declararon que si la chica tenía su
tío, nada había que decir, y él no tenía que mezclarse en cosas que no le
importaban.
Sin embargo, pocas semanas antes
de haber encontrado a Violette desmayada, recibió aviso el cabo, que
las invasiones de los oontrat)andi8ta8
se hacían alarmantes.
Estaban señalados en las mimbreras del Rhin y en las cuestas de
Oberwillér. El director ordenó a los
aduaneros, aumento de vigilancia
desde las orillas del río hasta más
allá del Schneethal.
De todas las noticias resultaba, que
el jefe de las cuadrillas era Federico
Schmidf. Al saber esto Martín Durer,
sintió que su corazón latía fuerte mente. Cerca de doce años hacía que
buscaba ocasión de encontrarse en
presencia del hombre a quien acusaba
del rapto y quizá de la muerte de su
niña, y quizá se le proporcionaba esta
ocasión tan anhelada.
Fácil es comprender si se cómovería Martín Durer, cuando encontró
a Violette acompañada de un perro
cargado con un fardo de contrabando. La chica servía no a buhoneros
sino a contrabandistas.
En cuanto a Catalina, no pensaba
más que en una cosa: y era que, morena o rubia, niña encontrada, o sobrina de un ladrón de camino real,
jamás Vioiette reemplazaría eternanamente a la criatura que ella había
perdido; y sin embargo, su corazón
maternal hada provisiones dé cariño
para la pobre chica, que la casualidad Irabía traído a su casa.
Tal érala situación de los héroes
do esta historia en el momento en que
después de haberse cerciorado de que
Violette nada necesitaba ya, Martín y
Catalina volvieron a la sala del piso
bajo.
{Coniinuará.)
:BOTSID-¿I.3DOIS-A.
PRECIOS ECONÓMICOS
Jordán, núm. 21, prah
liiitla.
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13
EJi NORTE DE MADRID
chazo y termina con una estocada demuestra inteligencia. Da un pinchazo superior, saliendo volteado.
baja. (Pitos.)
CUARTO Posadero pasa desconfiaSEGUNDO
Jabonero,
bien
colocado
Seis novillos de D. Federico Gómez
de cuerna. Méndez veroniquea bien. do. Da unpinchazo, una estocada y
para Méndez, Posadero, y Torquito III.
descabella a la segunda. (Palmas.)
El toro toma cuatro varas.
Méndez coloca un par superior. QUINTO Méndez muletea lucido y
PRIMERO Negro, cornicorto. Povaliente. Pincha 3 veces bien y termisadero da cuatro verónicas muy bue (Palmas.)
na conuna estocada entera buena, y
ñas. (Palmas.)
Con la muleta, Méndez está cerca le dan la y oreja.
El bicho toma cuatro varas. Los y valiente. Da un pinchazo en lo alto,
matadores son aplaudidos en los qui- otro, y mata al toro de un volapié su- SEXTO Torquito da pocos pases, y
entrando superiormente coloca un
tes
perior. (Ovación.)
Posadero coloca tres pares malos. TERCERO Negro bragao. Torquito volapié en lo alto que mata sin pun
Con la muleta está cerca y valiente. fija al torocon varios capotazos que tilla. (Ovación.)
Torquito y Méndez salen en homUn pinchanzo malo. Nueva faena, se aplauden.
bros.
movida, sufriendo colada. Oro pinEn la faena de muleta Torquito
Toros en Tetuán.
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AIGTA. Aquellos de nuestros sus*
criptores que deseen ser inscritos
en alguna de estas Secciones, 6
quieran rigura;r en otra distinta de
la en que aparezcan incluidos, se
servirán manifestarlo á la Admlnis*
tradón del periódico para la consi«
guíente Inscripción ó rectificación.
Joaquín Hernández, Glorieta Quevedo, 9.
Ildefonso Soto, San Bernardo, 114.
Ciríaco Sanz, Raimundo Lulio, 2.
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AGUARDIENTES
Tomás Iglesias, San Bernardo, número 102.
Julián-de la Pefla, Santa Engracia, 28.
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ABOGADOS
Enrique Talón, Bravo Murillo, 95.-Tejidos,
D. Manuel Maldónado, General Martínez
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Campos, 1,3° izquierda.
Fidel López Díaz, Trafalgar, 10 duplicado.—
D. Ambrosio Anta.Rodríguez, Plaza del Dos
legumbres y comestibles.
de Mayo, 5. Horas: de 9 a 11 y de 2 a 4. Félix Martín, Ave María, 4.—Aceitunas.
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cia, 3; horas: de 10 a 12 y de 6 a 8.
y harinas.
D. Juan Alférez Maruri, Monteleón, 18.
Clemente Alonso, Ruiz. 19.—Vinagres seD Pedro Manuel Camino, Arrieta, 11, 3°
lectos.
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que, 19.
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Pedro Fraguas, Sagasta, 7.
y Glorieta de Quevedo, 10.
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Francisco Espina, Bravo Murillo, 138 á 142. Francisco Jimeno, "Ideal Yauco", Trafalgar,
número 19.
Pompeyo Jiménez, Fuencarral," 120.
Rogelio García, "La Luna', Glorieta de CuaEmiliano Ceimertar, Bi^Vo Murilo, 7.
tro Óáminos y Aceiteros, 2.
'Farmacia Quevedo", Glorieta Quevedo, 10
R. Labiaga, Glorieta de Cuatro Caminos, ó Juan González, "El Turismo-, Luchana, 12.
luán t-ópez "La Casa de Todos', Santa EnPaseo de Ronda, 3.
gracia, 101 y 103.
Higinio Estébanez, Santa Felfciana, 13.
J-uis Civil Precia(|os, Puencarral, 51 duplica. Martín Agulrre, Corredera Alta, 25,
Carlos Sanz Clavo, "Chumbica", Glorieta de
_dp. Teléfono 4.^04,
Cuatro Caminos.
MéQK^OS
Manuel Valcárcel, Cardenal Cisneros, 25.
Leopoldo Queipo Franco, Glorieta de Bil- Alonso y Miró, Glorieta de Bilbao, Bar X.
b^o, 3, pfimero.
BODEGAS
Dóéf6r tranzo Herrái?, Bravo Murillo, 211.
Urlos Rodríguez Luzunariz, Sagasta, 1.
«Los Ceas», Trafalgar, 11 duplicado.—TeléAntonio PüéMa, especialista enfermedades
fono 4.547.
niflos, Foencariraf, 136.
- Sergio del Río, 'Los. Molinos" Gonzalo de
Andrés Benavides, O'Donneli, 18, hotel,
Córdoba, 14 y Cardenal Cisneros, 47.
Vicente Olivar, bodegas de Chinchón, Ga(Tetuán).
lUeo, 22.
MÉpi^Qi.1^BNT|STA
Justo Crespo, Santa Feliciana, 3.
Dr. Germán Martínez, Carranza, 13, pral.
BRONCISTAS
VARIOS
Gregorio
Fuentes,
Farmacia, 6.
Serafín Fernández Cruz, preparación TnbuJoaquín Pérez, Eloy Gonzalo, 8.
nal de Cuentas, Fuencarral, 95
tJáronty, mago-ilusionista, Princesa, 28, ter- Ángel Montero, Castillo, 9.
Fernando Salcedo, P.° Martínez Campos, 4.
cero centro.Instituto de Cultura, preparación carreras es- José Hernández, Santa Engracia, 70.
. pedales, Glorieta de Bilbao, 5.
eASHARRÉRIAS
VETERINARIOS
Rufino
Gordo
Parro, Cardenal Cisneros, 48.
José María García, Bravo Murillo, 105.
Manuel Socorro García, Almana, 40.
Luís Infiesta, Bravo Murillo, 73.
Juan Antonio Marco, Alberto Aguilera, 37.
GAFES
Vicente Marquina, Paseo de la Dirección, 11
Europeo, Glorieta Bilbao, 1 y Carranza, 2.
CARBONERÍAS
Valentín Santos, Bravo Murillo, 48.
Francisco García, Santa Engracia, 99.
Timoteo Miguel, Bretón de los Herreros, 25
Manuel Antón, Carranza, 2.
J..Núñex, Alcalá, 107.—La Reguladora, carbones de todas clases—Teléfono 5.725.
Viuda de Iglesias, Luchana, 28.
eARNICERIAS
Ceferino Rivera, Plaza de Olavide, 20.
Santos del Río, Glorieta Cuatro Caminos, 4.
Alejan dro Rodríguez, Luchana, 11.
Santiago Martínez, Alberto Aguilera, 35.
Amadeo Moneo, Cardenal Cisneros, 43.
Mateo Sánchez, Luchana, 2.
Luis Chillida, Viriato, 19.
Venancio Huetos, Ponzano, 21.
Pío Fernández, Marqués de Urquijo, 25.
Gregorio Simón Sandoval, 25.
Manuel Prieto, Carranza, 17.
Baltasar Criado, Sagasta, 8,
Francisco Alonso, Bravo Murillo; 8.
Luis Canal Pastor, Bravo Murillo, 64.
Silverio Blas Centeno, Feijoó, 3.
Vicente Alcaide, Bravo Murillo, 105.
Emilio González, Cardenal Cisneros, 4,
Nicolás Esteban, Teruel, 1"
Justo Prieto, Eloy Gonzalo, 14.
José Menéndez, Raimundo Lulio, 19.
Alberto Pérez, Ponzano, 48.
Luciano Alvarez Fuencarral 152.
Miguel García, Eloy Gonzalo, 22.
Manuel Riesco, Fuencarral, 123 Teléf. 4.788
Santiago de Cabo, Santa Engracia, 75 y 85.
Pedro Laureiro, Santa Feliciana, 12, y Gallleo, 10.
Saturnino Sotillo, Sania Engracia, 45.
Ramón Martínez, Luchana, 28.
CARPINTERÍAS
José Bonache, Pozas, 14.
Jerónimo Pérez, Artistas, 27.
Justo Roche, Fernández de los Ríos, 18.
Antonio Arlza, Alonso Cano, 31.
Eugenio González Bonlúo, Bravo MUrlUo,
33 y 35.
Ángel Landa, Abascal, ^8.
Norberto Verde, San Opropio, 9, principal.
José González Dleguez, Ponzano, 39. Teléfono 4.976.
Esteban Velasco, Castillo, 6.
Puche hermanos, Ponzano, 70.—T. 4.557.
Francisco de la Fuente, Malasafia, 11.
CASAS DE HUESPEDES
Eugenia Martín, Viuda de López, Hortaleza, 42, 1.° y 2."-Pensión parUcular.
Clotile Riera López, Cruz Verde, 14.
14
EL NORTE t>É MAÜRÍD
easas DE eoMions
Alberto Blanco, Barco, 30.
Antonio Olivares, Divino Pastor, 24.
Francisco Sanz Contreras, Santa Bárbara, 11.
Enrique Nargel, Santa Engracia, 107.
Pascual Amor, Hernani, 8.
Eulogio Sanz Alvaro, Eguílaz, 10.
Andrés Sanz, San Vicente, 11.
e A R R C A J E S Y AUTOMÓVILES
Luis Gonzále?, Bravo Murillo, 7.
Trigo hermanos, Luchana, 15.
eERVECERinS
"Vinces', Glorieta de Bilbao, 4.
•Cervecería Española', Glorieta Bilbao, 3.
eERRflJERiaS
Gaspar Gómez, Jordán, 8.
Joaquín del Campo, Artistas, 11.
Pedro Eguiluz, Jordán, 4.
Santiago López Casales, Ponzano. 8.
Félix González, Aranjuez, 6.
eiNEMaTÓGRHPOS
"Cinema X', Glorieta de Bilbao, Malasañay
Carranza.
'Lux Edén', Plaza de la Iglesia (Chamberí)
y Santa Engracia.
eOMESTlBLES Y OLTRaMa*
RINOS
Sucesor de Vela, Fuencarral, 119.
Mariano Plaza, San Bernardo, 104.
Martín Galán, Fuencarral, 151,158. y Bravo
Murillo, 4.
Casimiro Moral, Cardenal Cisneros, 24 y Alburquerque, 1.
Fulgencio de Miguel, Trafalgar, 22.
José de la I-lama, Carranza, 7.
Ramón Sánchez, Fuencarral, 152.
Marcelino de Diego, Dulcinea, 11.
Manuel Sainz de Baranda, Eloy Gonzalo, 7.
Moisés Esteban, "Las Carolinas', Bravo Murillo, 94.
Angela González, Malasafia, 17 y Malasafia,
número 29 (teléfono 4.620;
Ignacio Uceda, Cardenal Cisneros, 43.
Domingo Otero, 'Nueva España', Bravo
Murillo, 113.
Francisco González, Santa Engracia, 67.
Constantino García, Santa Engracia, 45.
Matías García, *E1 Madrileño", Conde Duque, 32.
Manuel Morato, "La Perla>, Bravo Murillo,
número 120.
Pedro Fernández, Trafalgar, 10 y Luchana, 26
Aniceto del Álamo, Eloy Gonzalo, 27 y 29.
Julián Sanz, Glorieta Cuatro Caminos, 2 y
Artistas, 2.
Manuel Queipo, Glorieta Cuatro Caminos, 1.
Emilio Mateos, Galileo, 36.
losé de la Torre, 'Punta Brava', Bravo Murillo, 89, antes 77.
£scolástico Pla7.a, 'La Bomba', Palafox, 25
Plaza Olavide, 12.
Francisco Horcajada, Santa Engracia 57.—
Raimundo Lulio, 19, y Bravo MuriUo, 46
Froilán Rodríguez, Fuencarral, 106, y San
Andrés, 31.
Dámaso Ortega, Pez, 11.
Alfonso de Guinea, Augusto de Figueroa, 30
Antonio Gial, Libertad, 18.
Román García Calleja, plaza de Santiago, 1.
—Los mejores productos ultramarinos.
Anacleto Barcones, Aranjuez, 10.
Juan A, de Cos, Santa Engracia, 47
José Martin, Alonso Cano, 38.
Felipe Rodríguez, Fuencarral, 105.
Narciso García, Santa Engracia, 20.
Cándido Sanz, Morejón, 4.
Mateo Abad, Joaquín María López, 1.
Luis Sáinz, Luchana, 7 y Cardenal Cisneros,
número 2 (2.» casa del bacalao.)
Rafael de Cos Monteleón, 18.
Juan Romero, *La Bomba*, Bellas Vistas.
Ramiro Alonso, Juan de Austria, 18.
Francisco Casado, San Hermenegildo,Jl.
Mariano Peflalba, Santa Engracia, 58.
Nazario Martínez, Sagunto, 14.
Andrés Frías Sopeña, Conde Duque, 13.
Fidel Antón, Ponzano, 43.
Manuel Cañada, Bravo Murillo, 60.
Isidro García, Galileo, 22.
Nicolás Canales, Paseo de la Dirección, 15.
José Martínez, Monteleón, 33, Bravo Murillo, 56 y Galileo, 44.
Félix Martín, Cardenal Cisneros, 25.
Celestino González, Bravo Murillo, 28
José Vázquez, Luchana, 12.
Lucas de Frutos, Medellín, 3.
Pedro Peña, Bravo Murillo, 73.
Pedro Moro, Artistas, 7.
Manuel Morato, "El Triunfo', Bravo Murillo, 149.
Genaro Ortigosa, Sagasla, 4.
Severiano Medina. Castilla, 11.
Manuel Santos, Fuencarral, 166.
Manuel Miguel, Quesada, 9.
Julián Cásasela, Bretón de los Herreros, 25.
Raimundo Arial, Sagasta, 8.
Agapito Desiderio, Cristóbal Bordíu, 19.—
feléfono 4.758.
Florentino Muñoz, Fuencarral, 130
Melchor Díaz-Valero, Trafalgar, 2, y Lucha
na, 23.
Vicente Salazar, Luchana, 43.
Aquilino Sardina, Juan de Austria, 11.
Ventura Campo, Morejón, 6.
Vicente Salazar, Luchana, 43.
Andrés Olmos, Pozas, 10.
Timoteo Rubio, Santa Engracia, 27-33.
Daniel González, Salas, 3
Anacleto Casares, Matqués de Urquijo, 19.
Victoriano Rubio, Ponzano, 32.
José Gómez, Eloy Gonzalo, 30.
Aurelio Cabellos. San Vicente, 58.
Manuel Fernández, Divino Pastor, 22.
Jaime Pérez, Magallanes, 11.
Felipe Sotillo, Almagro, 20.
Telesforo Lapeña, Ferraz, 56 y Quintana, 26
Simón García, Alberto Aguilera, 26.
Pablo Aguilera, Palma, 32,
Ramón García Calleja, Plaza Santiago, 1.
Marcelino López, Ponzano, 16.
Hilario Román, Úfnón, 24.
Edelmiro Moral, Almansa, 48.
eoMPRa<vENTa
Vicente F. Sánchez, Malasafia, 3.
Emilio García, Malasafia, 10.
Antonio López, Embajadores, 26.
eONPITERiaS
Francisco Alvarez, "El Boulevard", Carranza, 12.
U. del Río, "Los Angeles", Bravo Murillo,
nüm- 81, y Glorieta Cuatro Caminos, 1.
Rufino Aroca, Eloy Gonzalo, 31.
Alfredo Muñoz, Trafalgar, 17 y Plaza de Ola
vide, 14.
eeeHBS
Viuda de Wenceslao del Fueyo, Sagunto, 4.
Clemente Fernández, Santa Engracia, 21.
Manuel Fernández, Glorieta S.Bernardo, 3.
Pedro González Ortiz, Fuencarral, 141.
Josefa Allende, Castillo, 24.
Esteban Básala, Malasaña, 33.
Manuel Alonso, Guzmán el Bueno, 12.
euapiNisTas PLariMSTas
de e o e h e s
Román Arévalo, Ponzano, 18.
Santillana y Esnaola,General Martínez Campos, 45
DROGÜBRiaS Y PBRPUMBRiaS
Rafael Carro, Trafalgar, 22.
Ceferino Vaquero, Fuencarral, 138.
Federico Baires, Glorieta de Bilbao, 5.
Ambrosio Sanz, Bravo Murillo, 144.
Isidro Sanz, Santa Engracia, 59.
Indalecio García Góngora, Ponzano', 13.
José Vlllanueva Yarza, Eloy Gonzalo, 25.
ESaNISTBRiaS Y TAPieBRiaS
Pedro Hernando, Santa Engracia, 34.
Clément hermanos, Raimundo Lulio, 8.
BSTANeeS
Eugenio López y López, Carranza, 21
Natalia Gómez, Glorieta Cuatro Caminos, 3.
Bautista de Roa, Eloy Gonzalo, 26.
Celedonio Goñi, Santa Engracia, 66.
p á B R i e a s
Oe s o m b r e r o s de paja y fieltro
Julián París, Peligros, 18, primero.
Oe a s e r r a r .
Mariano Cabrejas, Fuencarral,'145.
earrosseries automóviles
Pedro Brieva, Ponzano, 24.
ehocolates
'La España', Santa Engracia, número 86.
Gaseosas.
Florentino López, 'La Covadonga", Bravo
Murillo, 14.
Bu]fas y ¡ a b o n e s .
J. Manuel García, "La Iberia"'. Bravo Murillo, 20.
Florentino Municio, Bravo Murillo, 29.
Camilo Vega, Don Juan de Austria, 10. Teléfono 2.759
José Barreiro Rico, Santa Engracfa, 97.
Harinas.
Vicente Torres Llórente, Luchana, 30.
Metalurgia.
Regino Amores, Ponzano, 30.
Hielo.
Andrés Fagalde "La Heladora*, Sandoval, 8.
Guantes.
Guillermo Zurro, Carretas, 14.
Oe s o m b r e r o s para s e ñ o r a y n i ñ o .
Mauricio Castillo, Infantas, 22, primero.
FERRETERÍAS
Cándido Rolando, "La Pilarica', camino de
la Dehesa de la Villa, 8.
Eleuterio Saournil, Fuencarral, 82.
Víctor Martínez, Cardenal Cisneros, 1 duplicado.—Aparatos para electricidad.
Narciso Serrano, batería de cocina, San Bernardo, 88, teléfono 330.
PROTBRIAS
Ramón González, Carranza, 15.
Toribio López Vedias, Almansa, 15.
Celestino Cano, Fuencarral, 152.
José Onteniente, Alberto Aguilera, 23.
HORNO OB A S A D O S
Mariano Franco, Santa María, 2(Tetuán).
Felipe Pérez, Bravo Murillo, 90, y Guipúzcoa, 5.
HOEVBRIAS
Santos Moreno, Santa Engracia, 81.
Fernando Barrio, Hernani, 8.
Rufino Jalón, Cardenal Cisneros, 8.
Manuel Izquierdo, Matasafla, 19.
Manuel Oarcia, Monteleón, 34 y 36.
HOBVBRIAS Y P O L ^ B R I A S
José Santos, Cardenal Cisneros, 35.
Amador Fernández, Malasafia, 29.
L A V A D E R O S HlGIBNXeOS
Espronceda (Hipódromo). Teléfono 2.174.
. l a Carolina', Bravo MuriUo, 148.
LBeHBRIAS
Pedro de Roa, Morejón, 8.
Lorenzo Llórente, Miguel Ángel, 16,
Luis BoUachero, Malasaña, 1.
Juliana Anaya, Divino Pastor, 24.
León Sanz, Luchana, 8, huever
Pascual Ortega, Rulz, 12.
MBReBRiaS
Eustaquio Serrano, Bravo Murillo, 99.
Francisco Vía, Carranza, 13.
Nazario Pardo, Bravo Murillo, 97 y Glorieta
Cuatro Caminos, 3.
José Montaves, *La Azucena*, Fuencarral,
número 166.
•La Maravilla*, Plaza del Dos de Mayo, 8.
Juan García Qil, *La Concha*, Luchana, 4.
Doroteo Ruiz, Santa Engracia, 83.
EL NORTE DE MADRID
MERENDEROS
Justo Cabra. 'Villa Carmen", Doctor Santero, 6.
Ángulo, Almansa, 50 duplicado (Amaniel.)
Juan Sánchez, -Villa Llanes", Paseo de la
Dirección, 10.
Melitón Pérez, merendero de Aranjuez, Paseo de la Dirección, 2,
PANADERÍAS
Pablo Rojo, Carranza, 11,
Ramón Menéndea;, Sandoval, 20.
Ángel Carrete, Raimundo Lulio, 10.
Julián García, Hortaleza, 17.
Manuel Rodríguez, Santa Engracia, 45.
Ramón Salvador, Tres Cruces, 4.
Isidoro García, Santa Engracia, 21.
Manuel Corralón, Bravo Murillo, 10.
Florencio Gutiérrez, Feijóo, 3.
Félix López, Galileo, 16.
Martina»Nonveia, Hartzenbusch, 5.
Primo López, Fuencarral, 151,
Urbano Azuara, Víriato, 24.
Francisco Paradela, Sagasta, 4.
Adrián Alvarez, Bravo Murillo, 90.
Pedro Domínguez, Glorieta Cuatro Caminos
número 4.
José Alvarez, Santa Engracia, 43.
Mateo García, Raimundo Lulio, 11 y Juan de
Austria, 16.
José Couto, Santa Feliciana, 4.
Segundo Palacios, García Paredes, 36 y Pon
zano, 43.
Antonio Pardeiro, Pozo, 13.
Francisco Fernández, Santa Engracia, 63.
Leonardo Sancho, San Mateo, 15.
José Huertas, Santa Feliciana, 18.
Julián García, Hortaleza, 17.
PELUQUERÍAS
Miguel López Peralta, Malasafla, 25, Peluquería Granadina.
Julio de Diego, Carranza, 6.
Felipe Rapado, Rodríguez San Pedao, 11.
Marcelino Barrepo, Artistas, 7.
Ciríaco García, Bravo Murillo, 92.
Pedro de la Peña, Plaza de Olavide, 2.
Juan Ribot, Malasaña, 7.
Agustín Moral, Carranza, 10.
Robustiano Reyes, Glorieta de Cuatro Ca
minos, 1,
MANUEL MARTÍNEZ, Ponzano, 18.—
Teléfono 3.519.
José Martín Riaflo, Santa Engracia, 57.
Ignacio Guerrero, Carolinas, 3 triplicado
Andrés Moreno, Fuencarral, 153.
Homobono Ramos, Catranza, 15.
Juan Medialdea, Alberto Aguilera, 45.
Juan Hernández, Ruiz, 6.— Peluquería Aséptica.
Francisco Navarrete. Sagasta, 4,
PESCADERÍAS
Tomás Martínez ,Fuencarral, núm. 159, teléfono 5.518.
José Pérez, Bravo Murillo, 115.
PINTORES-DEeORAOORES
José Prado, General Arrando, 10.
Pablo Palacios, Eloy Gonzalo, 9.
Francisco Acón, Feijóo, 2.
PLATINISTAS
Viuda de .Mollar y C.*, calle de la Florida, 11
Diego Canelo, Trafalgar, 11; teléfono 4.547.
PRENDERÍAS
José Evia, Sagunto, IH.
Gregorio Duran, GaUleo, 29.
RELOJERÍAS
Mariano Herranz, Trafalgar, 11 y Glorieta
de Cuatro Caminos, 1.
Tomás Alvarez, Malasaña, 21.
RESTAURANTS
Fíautí&ca Lorences, "El Sol", Glorieia Cuatro Caminos, 4.
Loreto Nájera, Concepción, 2 (esq. Almansa)
Fructuoso del Toro, bravo Murillo, 96; teléfono 4.146.
SASTRERÍAS
Bonifacio Lauzán, Montera, 13.
Andrés Martínez Almazán, Eloy Gonzalo, 4.
Bernardo Valladolid, Eloy Gonzalo, 28.
Carlos Gómez, San Joaquín, 2 dup., 2." izq.
Germán Frías, Fuencarral, 139.
Bruno Silván, Fuencarral, 159.
Andrés de Andrés, San Bernardo, 102.
TAHONAS
Francisco Fernández, Fuencarral, 122.
Manuel Fernández, Gonzalo de Córdoba, 10
Victoriano Méndez, Bravo Murillo, 76.
Ramón Couto, Dulcinea, 6.
Norberto Martín, Palafox, 3.
Manuel García y C*, Fuencarral, 141.
Ramón Fernández, Embajadores, 28.
Silverio Belanbre, Santa Isabel, 7.
luán Bonaíé, Valencia, 6.
Lucas López Parajua. Cardenal Cisneros, 51.
Doroteo Cepeda y Comp.', Travesía de Andrés Mellado, 4.
José Sanz y Hermano, Águila, 34.
Guillermo Donastorg, Maldonadas, 3.
Rafael Ayala, Santa ivlaria, 20.
Ambrosio Latournerie, Serrano, 33.
Ramón Quintana, Amparo, 74.
Pascual Martín, Sai) Marcos, 26.
Antonio Lalaurie, Cava Alta, 23.
Francisco Pedre, Amaniel, 13.
Elíseo Gayón, carretera de Valencia, 11, y
Puente de Vallecas.
Pedro López, Madera, 32.
Juan Pérez, Santa Engracia, 56.
J.ulián Dilhac, San Andrés, 28.
Antonio Folgueiras, Eloy Gonzalo, 23.
.Ángel Ferreiro, Trafalgar, 3.
Carmen Campos, Carranza, 6.
Ceferino Rivero,. Bravo Murillo, 140, 125 y
O'Donnell, 8.
Daniel Martínez, Santiago, 3.
Agustín Germáin, Lagasca, 48.
Antonio Ríos, Horno de la Mata, 9.
Manuel Lámela, Plaza del Progreso, 18.
Alberto Sarisón, Espíritu Santo, 2.
Ángel Díaz, Marqués de Santa Ana, 23.
Ramón González, Ballesta, 34.
Ramón Andión, Leganitos, 4.
José Sánchez, San Blas, 1.
Rafael Escolar, Molino de Viento, 7.
Ramón Reboredo, Mendizábal, 29.
Manuel Lence, Mendizábal, 34.
Ángel Alvarez, Almansa, 5.
Vicente Carrera, Eloy Gonzalo, 20.
Eulogio Abad, Fuencarral, 46.
José Fernández, Santa Isabel, 37
Luis Clamagirand, Antonio López, 2.
Pedro Raynal, Alcalá, 137.
Francisco Mazoy, Apodaca, 12.
Julián París, Peligros, 9.
Juan-López, Jesús y Maria, 11.
Justo Ontalva, Esgrima, 13.
Ramón Cigarrán, Santa Lucía, 12.
Francisco Lorenzo, P." Marqués de iVlonlstrol, 5.
Manuel Alonso, Blasco de Garay, 29.
Manuel Várela, Malasaña, 22.
TALLERES
Juana Cabrejas, Ruiz, 12.—Taller planchado
Victoriano Góra-ez, IVlonteleón, 19.—Taller
de calzado.
TEJIÓOS Y e O N B B e e i O N E S
Claro Silvan, Trafalgar, 23.
Hilarlo Llena, «El Río de la Plata», Plaza de
Olavide, 2.
Ruiz y Urrutia Hermanos, "Nuestra Señora
del Carmen", Bravo Murillo, 98.
Pedro Avila, Fuencarral, J64.
TINTES Y QUITAMANeHAS
Estanislao García, Olid, 3 y 6, Fernando VI,
número 31 y Magdalena, 11.
15
Tomás López, Glorieta Quevedo, 4, y Luna,
número 19.
Cesáreo Albillo, 'Los Mil Colores", Santa
Engracia, 50 y 52, y Carmen, 47.
'Non Plus Ultra". Espronceda, Lavadero higiénico.—Teléfono 2.174.
Juan N. Colorado, Raimundo Lulio, 5.
VAQUERÍAS
Manuel Gutiérjcz, Ruiz, 26.
Manuel Cobo, Feijóo, 2.
Carlota Cobo, Santa Engracia, 35.
José Cobo, Cardenal Cisneros, 53.
Manuela Pelayo, Alberto Aguilera, 45.
Tomás Ortiz, Alberto Aguilera, 12,
LA SANTANOERINA, Virtudes 24.—
Marca registrada.—Teléfono 3.787.
Josefa Cobo, Apodaca, 1.
Ramón Llena, San Vicente, 60.
Tomás de Diego Setién, Malasaña, 24.
José Seticn y Abascal, Viriato, 9
Manuel Beniao, «La Florencia», Conde Duque, 40 dup.
José Caballero, Ruiz 7.
VIDRIEROS Y F O N T A N E R O S
Ramón Saavedra, Carranza, 11 duplicado.
Manuel de la Rosa, Bravo Murillo, 119,
l^austo Cerezo, San Hermenegildo, 22.
Rafael Farfán, Fuencarral, 160.
Sinforoso Fernández, Jordán, 4.
José Serrano, Eguiiaz, 9.
Mauricio Bravo, Eloy Gonzalo, 21.
Carlos Rodríguez, Eloy Gonzalo, 31.
Matías ÍVlolero, calle del Cisne, 9.
Felipe Marín, Santa Engracia, 37.
Feliciano Alvarez, Mesón de Paredes, 13.
Natalio Fernández, platinista, San Bernardo, 110.
VINOS
Juan Aparicio, Alberto Aguilera, 47.
Epifanío Benito, Morejón, 11.
Isabel González, Feijóo, 2
Félix García, Galileo, 44.
Dionisio González, AJcalá, 107.
Pedro López, Sagasta, 2.
Ramón Prada, Trafalgar, 7.
Urbano García de la Rosa, Bravo Murillo, 145
Juan Peñalva, Galileo, 30.
José del Blanco, Arapiles, 7.
Julio Revuelta, Eloy'Gonzalo, 32.
Antonio Povedano, O'Donnell, 5 (Tetuán).
Teodoro García, Artistas, 4.
Tíburcio Pedrosa, Bravo Murillo, 92.
Francisco Fernández, Murillo, 1.
Tomás Allende, Fuencarral, 119.
Gaspar Soria, Sta. Engracia, 108, y Olite, 11
Wenceslao Blanco, Bravo Murillo, 5.
Domingo Uzquiano, Blasco Garayí 24,
Crisanto Abollo, Glorieta de Quevedo, 3.
'Los Garcías* Santa Engracia, 58, bajo.
Manuel Rivas Fernández, San Andrés, 19.
Tomás Arnanz, "La Ochava', Bravo Murillo,
número 84.
Julio Galiana, "La Anhelada", Medellín, 1.
Ventura García, Fuencarral, 144,
Benigno Ramos Fernández, Almansa, 26.
José Marqués, Luchana, 23.
Gil García, Almansa, 40.
Manuel Aibaredo, Fuencarral, 123.
Manuel Gómez, Bravo Murillo, 47.
Manuel San Valentín, Alvarado, 9.
Joaquín González, Bravo Murillo, 89<
Gabriel Ordóñez, P.° Martínez Campos, 22.
Fausto Peftalba, Santa Engracia, 60.
Manuel Fernández, Fernández de la Hoz, 54
Francisco Martin Pérez, Cacranza, ^7.
Benigno Baño, Luchana, 13.
Antonio Molina, Bravo MufUIo, 28.
Lucio Castro, Sandoval, 12.
Manuel Aumente, Jordán, 17 y Cardenal
Cisneros, 54.
Agustín Toledano, Glorieta de San Bernardo, 4.
Benjamín Giménez, Santa Bárbara, 4.
Manuel García, Ruiz, 28.
»
EL NORTE DE MADRID
Dionisio González, Alcalá, 107.
Basiliso González, O'Donnell, 49 (Tetuán).
Bucero Hermanos, Plaza Olavide, 20.
Jesús Qarcia Glorieta de Quevedo, 2.
Isidoro Alarcón, Plaza Olavide, 1.
Diego Lucas, Fernández de los Ríos, 32.
Cristóbal Verdejo, García de Paredes, 8F.
ZHI?aTERiaS
Pedro Salinas, Carranza, 5.
José Prieto, Fuencarral, 153.
Gumersindo López, Plaza de Olavide, 11.
L. Monteagudo, Fuencarral, 152.
Manuel Rodríguez, Plaza de Olavide, 2.
Pedro Villalba, Artistas, 1.
Viuda de RípoU, Bravo Murillo, 110.
José M.'' Flor, "La Florida", Fuencarral, 164
Pedro Mármol, Malasaña, 5.
¥aRI©S
Jesús Núñez, Alcalá, 92 moder.",cacharrería
J. Fuguet, íotograbador, San Bernardo, 92.
Teléfono 1.922.
Cesáreo Alonso, ortopédico, Fuencarral, 104
Ventura Ovilo, sillero. Cardenal Cisneros 30
Emilio Jarasquemada, Ruiz, 15, bicicletas
José Santos "El Pilar", jardín, Alberto Aguilera, 5,
Munar y Guitart, ascensores,, fundición, Manuel Luna, 2.
Antonio Ayora. IMáquinas de hacer medias
y calcetines.—San Bernardo, 117.
V. Rodríguez, marcos v molduras, Carranza, 11.
Antonio Quintana, pajería, Camino Dehesa.
José Torrecuadrada, material eléctrico, Bravo Murillo, 118.
Ángel Alvarez, curtidos, Bravo Murillo, 64.
Aquilino López, cajas registradoras. Malasaña, 16.-Teléfono 5.842
Pedro Salinas, esterería, Carranza, 5.
José Santiago García, tostador de café. Molino de Viento, 31.
Francisco Menéndez, San Bernardo, 127, fábrica de baúles y artículos de viaje.
Germán Sánchez, aceites, jabones y legumbres, Trafalgar, 19,
Matías Hernán, alpargatería y zapatería. Carranza, 9.
Francisco Adsuar, mecánico, Trafalgar, 36.
Evaristo Pérez, churrería y buñolería, Santa
Feliciana, 10.
José Pastor, 'Planchado americano Electromecánico", Raimundo Lulio, 5.
Perpetuo Serrano Hermanos, pirotécnicos,
Bravo Murillo, 15
Trifón Sanz, patatería. Plaza de Olavide 1,
Atanasio Gutiérrez, cestería, Luchana, 40.
Luis Ordóñez Maza, tallista, Garcüaso, 2.
Manuel de la Riva, escritura a máquina, travesía del Reloj, 4.
Agustín Losa, horno de bollos y asado de
carnes y pescados, Palafox, 20,
Ramón Fonoyosa, constructor de sillas y
muebles, Luchana, 38.
Amonio Díaz, tornero, Feijoó', 3.
Señores Vaqué y Romeu, materiales de
construcción, Santa Engracia, 43.
José Lafora, antigüedades, Carrera de San
Jerónimo, 51.
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número 17 (junto al Hipódromo).
José María Pérez, escultor, Gonzalo de Córdoba, 14.
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