C L Á S I C O S E S P A Ñ O L E S P A R A T O D O S POR ISIDORA CAMPANO Isidora Campano nos invita a explorar cómo en La dama boba, Lope de Vega aborda la importancia del amor en el matrimonio y el derecho de la mujer a la educación en una época en que se creía que el amor entorpecía el buen funcionamiento de la insttitución matrimonial y el rol de la mujer se limitaba a ser sumisa al hombre. La institución del matrimonio, adoptada por la sociedad occidental y el mundo hispano como base de la estructura social, ha tenido desde la Edad Media, algunos condicionamientos sociales y morales, tales como la casta social y el poder monetario. El surgimiento y consolidación de la burguesía como nueva clase dominante, tiñe al matrimonio con otros rasgos, pues el poder económico de la nueva clase hace tambalear muchos de los principios de la sociedad española y católica del Siglo de Oro. En efecto, empieza a generarse una mayor movilidad social y el dinero –en manos de la burguesía- se convierte en el nuevo motor del hombre, mientras que la fe o los principios de pureza de sangre se relativizan. En este marco, debemos destacar la concepción de la relación entre amor y matrimonio que plantean autores como Fray Luis de León en La perfecta casada: ninguno de los esposos debe enamorarse de manera de no alterar las normas básicas de obediencia, recato y sumisión de la mujer ante la figura omnipotente del hombre. Es decir, el amor aparece como opuesto al matrimonio: hay aquí un punto importante que se desarrollará en la obra de Lope de Vega. Sin embargo hay también otro aspecto que 14 Como ya se ha mencionado, en el siglo XVII se observa una profunda crisis social y valórica en España. La consolidación de la burguesía en desmedro de la nobleza y la supremacía del poder del dinero por sobre el poder de la fe y la pureza de sangre, hace que los roles históricos del hombre como agente de poder y figura pública, y el de la mujer como madre, figura íntima, pasiva y obediente, también presenten cambios. De hecho, en este contexto, la mujer se transforma en una prueba viviente del poderío económico de su familia y/o marido, al adornarse con joyas y vestidos, y mostrarse en público. En La dama boba (1613), Lope recoge varios de los aspectos señalados: matrimonios por conveniencia –como el que ha preparado el padre de Finea entre ella y Liseo, o el que luego querrá pactar entre Finea y Duardo (1) -, el poder que adquiere la figura femenina en esta nueva sociedad –Finea y Nise tienen voz y defienden sus sentimientos y acciones, logrando sus propósitos-, el poder del dinero –Finea es poseedora de una gran herencia, por eso pareciera ser que la pretenden los hombres-. Sin embargo Lope también instala con gran ingenio temas conflictivos en su época: el amor como motor fundamental para la concreción del matrimonio –Finea y Laurencio hacen que su amor venza los obstáculos que se le presentan-, la educación de la mujer como un derecho (hasta muy avanzado el siglo XVIII la mujer no tenía acceso a la educación), pero también como elemento divisor entre hombre y mujer –como es el caso de Nise, que siendo igual de bella que su hermana Finea, es mucho más letrada, por lo tanto más aguda y con respuesta para todo, alterando el supuesto orden social en que la mujer obedece y el hombre manda-, y el papel del padre en este nuevo escenario –Octavio (2), aunque trate de ejercer su autoridad, es vencido por el ingenio de sus hijas y pretendientes. 1. Duardo es un personaje que, junto con Feniso y Laurencio, cortejaban a Nise por su nivel intelectual y se reunían con ella a discutir sobre sus creaciones poéticas, obras literarias y autores. La adaptación de Ramón Gutiérrez ha eliminado a los dos primeros para simplificar la trama, dejando sólo a Liseo y Laurencio como pretendientes de las hermanas. 2. En la adaptación, la figura paternal fue puesta en una figura femenina, Otavia, la madre. El tema central de esta obra es la creencia en el amor como transformador de todo: de estructuras sociales, familiares y éticas. El amor puede hacer inteligente a la más boba –Fineay a la más aguda, presa de los celos –Nise-. Y puede hacer que el que más oro anhelaba –Liseo- postergue su deseo material por el verdadero sentimiento. En esta dinámica de transmutaciones, la obra presenta a dos hermanas iguales en belleza, pero distintas en razón y dote. Nise es la sabihonda, la estudiosa y Finea es la boba, la ignorante. La caricaturización que Lope hace de cada tipo de mujer, sirve para potenciar la enseñanza que desea proyectar al público. Sin embargo, la figura masculina también aparece muy bien definida dentro de los estereotipos de la época: Laurencio y Feniso son extremadamente machistas con Nise, lo mismo que Octavio con sus hijas, al enfatizar que virtud y honestidad son perfección en una casada y no la belleza o el amor a su marido. En los otros personajes masculinos, como Liseo, Leandro, Duardo, Laurencio y Miseno (3), la caricaturización se observa en cómo plantean la necesidad de dinero como causa primera –y última- de un matrimonio. Afirman incluso que un ignorante puede hacerse sabio con dinero (con lo cual comprobamos el cambio social en la España de esa época). Sin embargo, a medida que la acción avanza, va cobrando fuerza la idea del poder transformador del amor. Vale la pena destacar que son los sirvientes –Celia, Clara, Pedro, Turín- quienes mantienen la creencia de que el amor sí se funda en el dinero. En esto podemos encontrar un primer rasgo conservador de Lope. Hay otros aspectos que también hablan de cierto conservadurismo por parte de Lope: ambas hermanas son bellas, por lo tanto cumplen con la cualidad de la hermosura esperable de las mujeres de su condición social. Por otra parte, Liseo es rico y ama a Nise por su discreción y belleza, no por su dinero, dado que él ya lo tiene; así, se mantiene el equilibrio en esa unión. Laurencio es pobre y ama a Finea por su dinero y hermosura, por lo tanto también se mantiene un equilibrio. Un tercer aspecto se observa en 3. En la obra original, Miseno es amigo de Octavio, padre de Nise y Finea, y Leandro es un estudiante que se encuentra con Liseo en su camino a conocer a Finea y le relata las carcaterísticas de cada una de las hermanas. En La dama boba (versión animal) estos personajes han sido eliminados para simplificar la trama. el conflicto desatado entre las dos hermanas a causa de Laurencio, que podría hacer tambalear el equilibrio entre ellas, sin embargo la lucidez y prudencia de Nise ante las pruebas del amor de Finea por Laurencio, la hacen quedarse con Liseo, manteniendo así el equilibrio fraternal. Incluso el padre, que tanto quiso casar a Finea con Liseo, acepta la decisión de su hija. La ruptura de estos equilibrios está en las afirmaciones morales y conductuales propias de la época en cuanto al comportamiento femenino, como el lamento de Octavio al ver qué Nise no lee precisamente devocionarios o al lamentarse por su aguda inteligencia, por tener siempre un argumento que decir y no obedecer la voz del padre o del hombre; o incluso el admirarse del cambio de Finea de boba a inteligente y luego el regreso a su estado primero, lamentándose primero por su ignorancia y luego por su inteligencia. En el acto tercero se hace explícita la idea de que el amor todo lo transforma. La canción del amor que aparece en la escena VI es clave: todo lo cambia el amor, todo lo vence, descubre los ojos e inaugura una nueva forma de vivir. Instaura un nuevo equilibrio. En esa certeza Finea reconocerá que la naturaleza de la mujer es fingir, ya sea para fingir falsa obediencia a la autoridad del padre o fingir ser igual de ignorante que antes para mantener la unión con Laurencio. Quizás el mensaje último de Lope –un ser muy enamoradizo según se registra en sus biografías- sea que el amor está por sobre todas las convenciones sociales, el amor lo gobierna todo y desarrolla estrategias, utiliza el ingenio para consumarse. El amor puede ser el móvil del matrimonio en esa sociedad -aunque, insisto, se trata de un amor que ya ha resuelto los problemas monetarios-. Si el amor es luz, es entendimiento, es razón, el amor es también estrategia para conseguir aquello que se ama, sea esto belleza, inteligencia o dinero. Amor al fin y al cabo. • ISIDORA CAMPANO NÚÑEZ. Licenciada en Lengua y Literatura Hispánicas de la Universidad de Chile. Magíster en Filología Hispánica del Consejo Superior de Investigaciones Científicas de Madrid, España. Actualmente es candidata a Doctor en Literatura de la Pontificia Universidad Católica de Chile. Se desempeña desde hace años como docente en el área de Literatura Española en la Escuela de Literatura Creativa de la Universidad Diego Portales y en la Facultad de Letras de la Pontificia Universidad Católica de Chile. 15 U C señalar, y es el papel que cumple la mujer en esta instancia social. T E A T R O El amor en la época de Lope de Vega C L Á S I C O S E S P A Ñ O L E S P A R A T O D O S T E A T R O U C LA DAMA BOBA (VERSIÓN ANIMAL)