marcha de los bombos en santiago del estero, argentina

Marcha de los bombos en Santiago del Estero
Adriana Luengo y Nélida T. Toloza
Cómo citar este artículo: Luengo,
Adriana – Toloza, Nélida. 2007. “Marcha
de los bombos en Santiago del Estero”.
Entremúsicas. Música, investigación y
docencia.
http://entremusicas.com/investigacion/20
08/05/14/marcha-de-los-bombos-ensantiago-del-estero/
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año]
Introducción
Este trabajo surgió a partir de nuestra visita a Santiago del Estero en ocasión de la
5ta. Marcha de los Bombos realizada el 21 de julio de 2007.
Para una mejor comprensión, dividimos el trabajo en tres partes:
1- La Marcha de los Bombos, su origen, su crecimiento, y la descripción de
la 5ta. Marcha a la que asistimos, junto con un relato de primera mano, y una secuencia de
las fotos que sacamos en dicha ocasión.
2- Una entrevista que realizamos a un artesano de bombos contactado en la Marcha,
el Sr. Mario Paz, y a su hijo Mariano. La misma muestra las etapas de la construcción de los
bombos que se realizan en su taller familiar, así como las fotos que sacamos en dicho lugar,
que describen las distintas secuencias.
3- Conclusiones y bibliografía. Las conclusiones no son cerradas, sino que nos
plantean preguntas e incógnitas para continuar desarrollando los temas tratados en este
trabajo y también, el de su difusión.
La Marcha de los Bombos
La Marcha de los Bombos es una celebración original y, que sepamos, única en el
mundo, que se festeja en Santiago del Estero. Esta fiesta comenzó en el año 2003,
impulsada por el artesano de bombos Froilán “el indio” González, Teresa Castronuovo y el
percusionista Eduardo Mizoguchi. Fue apoyada por el entonces intendente Gerardo Zamora.
Froilán González testimonió: “Nosotros en enero de 2003 estábamos en casa con
Eduardo Mizoguchi, la Tere, mi compañera y Freddy García. Mientras comíamos un guiso
nos pusimos a hablar sobre un proyecto para presentar ante las autoridades municipales.
Se nos ocurrió organizar una marcha de bombos. Tenían que ser 450, uno por cada año.
“¿Y los podremos juntar?”, nos preguntamos. Y sí, en ese inicio juntamos 670 bombos.
Salió a la calle el pueblo sin distinción de clases sociales ni edades. Hemos visto a
criaturitas con el bombo de un lado y del otro la mamadera. Le dimos categoría al bombo
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que desde siempre fue menos considerado que otros instrumentos. Hoy el movimiento ya no
nos pertenece, es de la gente”, rememoró el famoso artesano.
La primera edición se realizó el 19 de julio de 2003, en homenaje a los 450 años de
Santiago, y contó con la participación de 468 bombos. La iniciativa fue creciendo y en 2004
(16 de julio) se congregaron 10.000 personas y 2.100 bombos; y en 2005 (22 de julio),
15.000 personas y 2.100 bombos. Finalmente, en 2006 (19 de julio), más de 20.000
asistentes marcharon acompañando a 2.684 bombistos. Se realiza siempre el sábado anterior
a la celebración del aniversario de la fundación de la ciudad de Santiago del Estero, llamada
la “Madre de ciudades”, que en esta ocasión (25 de julio) cumplió 454 años.
Este año, por primera vez, la Marcha de los Bombos se presentó en Buenos Aires
para celebrar la Independencia Nacional y tuvo una amplia convocatoria de bombistos y
folkloristas (más de 500 bombos), que marcharon por la Avenida de Mayo, pasando frente
al palco oficial, ubicado frente al café “Los 36 billares”. Comenzó el lunes 9 de julio a las 9
horas en Avenida de Mayo y Paraná, y fue precedido por el Regimiento de Granaderos.
Contó con la participación del “Indio” Froilán González, Teresa Castruonovo y Eduardo
Mizoguchi.
También hubo una pequeña Marcha de los Bombos en Termas de Río Hondo,
Santiago del Estero, pero lógicamente no tuvo la convocatoria de las otras dos.
La quinta marcha en la Capital de Santiago del Estero, a la que asistimos, comenzó
con una vigilia a las 21 hs. del día viernes 20. Reunió más de 30.000 personas, número que
superó a las ediciones pasadas, y fue la que contó con mayor afluencia turística. La Marcha
de los Bombos Sur estuvo integrada no sólo por vecinos de la Capital, sino también por
gente de La Banda, Sumamao, Sumampa, Quimilí, Buenos Aires, Tucumán y Salta.
La gente se concentró en dos lugares, de donde partieron dos columnas.
1- El patio de Froilán “Indio” González: columna norte
2- Parroquia San José (también llamada del Señor de Mailín): columna sur.
En ambos lugares pasaron la noche en vela. En el norte, a las 21 hs. se hizo una
celebración religiosa en honor a Nuestra Sra. del Valle, y posteriormente canto y danza, con
los “rezabaile” con que se rinde homenaje a los santos pueblerinos, participando “El
bailarín de los montes”, Juan Saavedra.
En el sur, celebración en honor a San José Obrero, una representación teatral, ballet
folklórico y artistas invitados. Los bombos de la Marcha Sur fueron bendecidos frente a la
Iglesia Santo Tomás de Aquino, en las inmediaciones de Juncal y Belgrano, por el Padre
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Mario, quien saludó a los presentes y dio la bienvenida a los turistas que los acompañaban.
A las 9 horas del día 21 partieron las columnas. A la columna sur, a cargo del
percusionista Eduardo Mizoguchi, que concentraba a la gente del barrio de San Esteban, se
le sumó la columna de Sumamao, que partió muy temprano a la mañana. La columna norte
estaba a cargo de Froilán González.
En cada columna marchaban los participantes, grandes y chicos, la mayoría con
bombos. Iban realizando paradas en distintos lugares. La columna norte paró en Huaico
Hondo, en el monumento al “Linyerita” (que recuerda a un indigente asesinado en las vías
del ex ferrocarril Belgrano, y en el hospital Independencia, el más antiguo de la ciudad. La
columna sur paró en dos iglesias, en una de las cuales el sacerdote bendijo los bombos (que
los participantes levantaban por sobre sus cabezas), y también en un hospital.
En todo el trayecto, que se hizo al ritmo de la chacarera, de marcha, y el incesante
repiquetear de los bombos, las columnas eran esperadas y recibidas con entusiasmo, cantos
y bailes, y se iban sumando nuevos bombistos y gente en general.
Las dos columnas se encontraron en la esquina de Libertad y Belgrano, y una vez
unidas y mezcladas doblaron una cuadra hasta la plaza Libertad, que es la plaza central de la
ciudad. Es una plaza amplia, con muchos árboles, a un costado un pabellón, donde antes
tocaban las bandas. De un lado la Municipalidad, del otro la Catedral (la más antigua de la
Argentina). En un costado se exponían fotos gigantes con imágenes de la ciudad antigua.
Era un día esplendoroso, de sol y no demasiado frío.
Del aspecto humano: muchísima gente, de todas las edades y condiciones sociales,
algunos gauchos, muchos con poncho, algunos con sombrero, mamás con bebés en carrito.
Había mayoría de santiagueños pero también muchos turistas, tanto de otras provincias
como algunos extranjeros. Participan también muchos folkloristas, como Carlos “Peteco”
Carabajal, Daniel Heredia, Mario Alvarez Quiroga, “Coco” Banegas, y otros más.
Durante la vigilia y el final de la caminata, se habilitaron más de un centenar de
puestos para la venta de comidas típicas y regionales, tales como empanadas santiagueñas
cocinadas en hornos de barro móviles, además de locro, tamales y asado criollo.
La Marcha de los Bombos se realiza, según los testimonios, desde la destitución del
ex gobernador Juarez. Se ha convertido en una manifestación de alegría por las libertades
restituidas desde la caída de ese gobierno, si bien algunas personas consideran que es
utilizada para distraer la atención de ciertos problemas de la provincia.
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A continuación ofrecemos el relato personal que hicimos sobre la Marcha:
Relato de la 5ta. Marcha de los Bombos
“Nos levantamos a las 7 para llegar con tiempo a la marcha. En la estación de
Santiago tomamos un taxi hasta la capilla de Mailín, de donde salía la columna sur. Había
dos lugares de concentración: el que fuimos y el patio de Froilán, de donde salía la columna
norte, y que es el más conocido. Las dos columnas se encontrarían en Libertad y Belgrano,
desde donde seguirían juntas hasta la plaza Libertad, la principal de la ciudad, donde están
la Municipalidad y la Catedral.
Cuando llegamos, ya había unas 50 personas con bombos. Nos convidaron mate
cocido y tortillas, una especie de galletas blandas de levadura, cocidas a las brasas, y que a
esa hora venían muy bien. Claro, ellos habían pasado la noche en vela. Todas las fiestas en
Santiago comienzan la noche anterior, posiblemente debido al calor.
A eso de las 9 vimos acercarse una columna con banderas, venían de Sumamao, y
habían salido al amanecer. La gente de San Esteban (así se llamaba el barrio donde
estábamos) los recibió con alegría y toques de bombo. Se juntaron y arrancó la marcha, con
una pancarta y un banderín de cada barrio. El de San Esteban era rojo y blanco, y su
pancarta llevaba las imágenes de Sixto Palavecino y de Jacinto Piedra, folklorista fallecido
en un accidente.
Mientras íbamos por la ruta, se veía gente en las esquinas esperando con sus
bombos o bombitos para sumarse a la marcha. Era hermoso ver a los chiquitos con sus
bombitos, pero tocando en serio, con un ritmo perfecto (deben nacer tocando chacareras).
Había grandes y chicos, mamás con sus bebés en cochecito, viejos, muchos con ponchos,
muchos también muy emocionados, como un señor, Mario Paz, un referente de Santiago en
artesanías de bombos, que apenas podía hablar de la emoción. Conseguimos una cita para
entrevistarlo el martes.
Como nos explicaron, esta marcha tiene también un sentido político y social, porque
estuvieron muchos años sometidos a los Juárez, y ahora sienten que pueden salir a la calle y
manifestarse, en paz y alegría. Nos dijeron que es una marcha que surgió del pueblo,
espontánea. Pero observamos que el gobierno actual participaba con su presencia en la
plaza.
La columna sur, con la que íbamos, fue haciendo paradas: primero en la iglesia
Santo Tomás de Aquino, donde el padre Mario bendijo los bombos que la gente sostenía en
alto (la marcha está bajo la protección de la virgen de Sumampa), luego en dos hospitales.
Con nosotros iban también dos camiones con músicos con guitarra, acordeón y bombo.
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Finalmente se produjo el encuentro de las dos columnas, que se mezclaron, y doblaron
hacia la plaza principal.
Las veredas desbordaban de gente y había un sol espectacular. Cada grupo hizo una
parada frente a la municipalidad donde estaban el gobernador y el intendente en el balcón,
luego dieron vuelta a la manzana rodeando la plaza, y terminó con todo el mundo delante de
un escenario donde estaban los principales referentes de la marcha: Froilán González,
Horacio Mizoguchi, Peteco Carabajal, y muchos más. Allí se cantó el himno nacional, con
un dejo muy folklórico, y 3 chacareras. El público entusiasmado cantaba, tocaba los
bombos, palmeaba y revoleaba ponchos y pullóveres. Y luego se disolvió todo.”
MARCHA DE LOS BOMBOS
Santiago del Estero – 21/07/2007
1) Esperando en la Iglesia del Señor de Mailín a los que llegan desde Sumamao, la Caravana Sur
se prepara para comenzar la 5º Marcha de los Bombos, en ocasión de los 454 años de Santiago
del Estero.
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2) Llegan los participantes de la Marcha desde Sumamao, que salieron a las 7 de la mañana. Los
reciben con toques de bombo.
3) Con la bandera de San Esteban en lo alto, tocan marcha en corrillo, con
acordeones y bombos.
4) En este cartel están las figuras de los músicos Sixto Palavecino y Jacinto Piedra.
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5 y 6) Se observan muchas familias con sus hijos durante la 5º Marcha de los Bombos.
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os
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utan
do
bom
bo.
El de la izquierda tiene un bombo realizado con cartón (envase de dulce).
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