Crónica sobre la Formación en Ambientes de Aprendizaje Mediados por TIC Por: Claudia Patricia Zúñiga Osorio Seis meses después de mi primera formación como Maestra Formadora del Proyecto Tit@ Pedagogía mediada con TIC, a la que le denominan ola 2, volví a tomar la decisión de presentarme a esta nueva convocatoria denominada Fase 5. Aunque, les confieso, que una vez fui citada a la entrevista después de pasar la prueba técnica, estuve a punto de retirarme del proceso, ya que sentía que era demasiado trabajo para mí, teniendo en cuenta las ocupaciones que hoy día tengo por haber sido seleccionada como MF de la Ola 2, más las responsabilidades que tengo como maestra de primaria, maestra del Programa de Formación Complementaria, madre y esposa. En fin, un sinnúmero de situaciones que se estaban poniendo más en el lado de la balanza que se inclinaba hacia el “No”. Pero, por esas cosas de la vida, un día recibimos un mensaje en nuestro correo que cerraba con la siguiente frase: “Recuerden que es importante en la vida siempre preguntar, no suponer”, lo cual me hizo hacer ciertas averiguaciones que me convencieron de seguir en el proceso y demostrarme a mí misma, que organizando el tiempo se pueden lograr muchas metas. Finalmente me presenté a la entrevista que compartí con tres maestros más, que mostraban a través de sus respuestas, sus cualidades, sus habilidades y competencias, además de su deseo por hacer parte de este proyecto de ciudad. Dos de esos maestros están compartiendo esta nueva experiencia de formación. El lunes 3 de agosto llegué al encuentro con los que serían mis compañeros y compañeras durante este proceso. Vi caras nuevas, caras conocidas y caras reconocidas. Me sentía feliz y orgullosa nuevamente de hacer parte de este selecto grupo. Llegué con muchas expectativas frente a la estructura esta nueva fase pues nos decían que era diferente a las anteriores propuestas, lo cual generó más inquietudes al respecto. Cuando iniciamos la capacitación, sentí como si estuviera retrocediendo el tiempo pues una vez más estábamos haciendo el Mandala, el escudo, la rueda de la vida, el pentágono de competencias y otras actividades realizadas en la Fase 2. La gran diferencia, es que ahora ya estaba recogiendo los frutos de esa primera sanación pues no sentía tanto dolor, tanta tristezas ni tanta rabia. Era como si realmente lo hubiera dejado atrás. Me gustó mucho la actividad del Mandala Colectivo, pues fue una manera de descargar muchas emociones y sentimientos, pero a la vez reconocer en todos y cada uno de mis compañeros y compañeras, un ser emocional y un ser sensible, con los cuales tenemos muchas cosas en común. Luego, el martes 4 de agosto empezó a avistar una de las primeras preocupaciones en esta Fase y era el manejo de la Tablet. Pues ya había tenido un acercamiento con la que le regalamos a nuestro hijo para que jugara. La había explorado pero no la había visualizado como una herramienta en el aula. No sólo por si tuviera o no las aplicaciones necesarias, sino por lo relacionado al manejo y cuidado dentro del aula, ya que he tenido experiencias un poco incómodas la pérdida y daño. Pero nuevamente dejé atrás esa barrera para poder seguir en el aprendizaje sobre sus aplicaciones y especificaciones pues es de conocimiento de todos y todas que esas serán las nuevas herramientas en muchas de las aulas de la ciudad. Desde ese día y por unos cuantos más, se estuvo hablando y dialogando sobre la conceptualización de los AAMTC en donde tuvimos la oportunidad de recordar y también de aprender nuevamente sobre lo que significa en educación un AA, sus características, sus dimensiones, sus ejes y en general todas aquellas implicaciones que tiene. Fue de mi deleite escuchar hablar de temas como caracterizaciones y contextualizaciones de los estudiantes y de los maestros, de empezar a hacer esas reflexiones que nos convocan a pensar más en ese ser que está frente a nosotros, a valorarnos aún más como los profesionales que somos, a tener realmente en cuenta la humanización como ese proceso de darle reconocimiento al otro, de ponerse en los zapatos del otro, de respetar el espacio del otro que en la simple descripción de un estrato. Cuando dejaba atraparme por todo este discurso pero, por momentos aterrizaba en el salón, me hacía la siguiente pregunta “¿Uy qué le pasó a Tit@?”, “¡Qué chévere que se esté hablando de todo esto!”, “Las profesora Maria Licenia y Camen (MEs del colegio Multipropósito) serían felices escuchando toda esta conceptualización” y sobre todo aspectos a tener en cuenta en esta nueva formación. Pero a la vez me cuestionaba, el hecho de que a la hora de preparar las actividades de un proyecto o tema, uno no tiene en cuenta elementos que ayudarían a generar nuevos y mejores aprendizajes. Se empieza a volver algo repetitivo y a repetir patrones de otras personas, a sentarse en esa zona de comodidad. La verdad no recuerdo haber llegado a sentir tanta valoración por el verdadero sentido de un ambiente de aprendizaje puesto que se me estaba incrustando algo así como “un chip en la cabeza” que pensaba que a los niños y a las niñas de hoy, sólo les interesa lo virtual y que tener o no un salón ambientado, era o es irrelevante para ellos y ellas. Tuve un ligero sentimiento de culpa al recordar la ambientación actual de mi salón de clases. Pero apenas regrese, lo solucionaré. Poco a poco fuimos ahondando más en la apropiación del significado de un AAMTC en donde por primera vez escuchaba términos como Diseño Instruccional y Diseño Interfaz pero a medida que Adriana lo abordaba, comprendía que aquello que yo había empezado a hacer en una AVA desde hace 4 años, le estaba haciendo falta otros elementos para poder convertirse en un verdadero AAMTC. Recuerdo que cuando fui ME, la Maestra Formadora de ese entonces, me preguntaba que cuáles era mis expectativas frente al proyecto TIt@ y le dije yo quería consolidar el trabajo que venía realizando en páginas wix con mis estudiantes, la verdad pensé que lo que le hacía falta era el TPACk pero ahora con esta nueva mirada, ya sé qué es lo que lograría esa consolidación. Incluso ya tengo ideas para trabajar en esa otra parte que le falta a uno de esos AVA. Pero lo más increíble es que, a pesar de que ya tenía algo de experiencia en la construcción de esos ambientes virtuales, a la hora de darle una estructura al AAMTC de nuestro grupo, me sentía impotente, me sentía y actuaba como si nunca hubiera hecho uno. Pero esto no es señal de falta de comprensión, lo que veo es que fue tanto el impacto de descubrir y de resignificar aquellos elementos conceptuales a tener en cuenta en la creación de un Ambiente de Aprendizaje, que nuestro cerebro se bloqueó pero con ayuda del trabajo colaborativo y el compartir de saberes, se fue solucionando poco a poco. Mis desequilibrios cognitivos en este proceso, iniciaron en la construcción de ese ambiente de aprendizaje puesto que me habían dado tantas maneras de diseñarlo que a la final, casi no logro elegir uno. Incluso, esa misma dinámica de elaborar el planificador logró “moverme el piso” pues como lo hablábamos con mis compañeros del equipo en nuestra socialización de ayer, uno está acostumbrado a que un formato de un proyecto uno lo va diligenciando en el orden estricto en que aparece, pero este planificador fue diferente. No tenía en cuenta el orden del papel, sino el orden real de la construcción, una secuencia lógica. Pero ese tipo de estrategias son las que realmente ayudan a generar pensamiento y por ende conocimiento. En la formación se propició de manera clara una interacción de alto nivel, puesto el equipo pedagógico a través de una clara caracterización que hicieron sobre todos los ME que estuvimos en el proceso, lograron distribuir los grupos de trabajo de manera armoniosa y dentro de los cuales, se crearon grupos de Whatsapp, se compartieron documentos a través de la nube, se crearon relaciones respetuosas y cordiales. Muy bien distribuidos los equipos. Aunque hay que decir también que hubo algunos momentos donde pensábamos que era un poco difícil lograr una integración curricular con tanta diversidad. Otro factor que me generó un poco de desequilibrio fue el de la búsqueda de herramientas OFF-LINE para poderlas usar en las tablets a las cuales los estudiantes tendrán acceso en aquellas instituciones donde hay poca conectividad o no hay conectividad. Pero finalmente poco a poco, con las herramientas dadas por nuestros compañeros Luis Vera, Luis Hinestroza y Carlos Álvarez hemos tomado más confianza con esta herramienta. Debemos seguir practicando con ella. Finalmente me siento muy contenta y feliz por todo lo que aprendí en esta nueva Formación ya que me ha brindado elementos que enriquecerán mi quehacer pedagógico, que consolidará finalmente ese trabajo que venía desarrollando con mis estudiantes y al que no lograba identificar cuál era ese toque que le hacía falta para poder ser no solo un AVA sino un real AAMTC. Yo recomiendo esta formación a los docentes de Cali, porque se centra no sólo en las TIC como principio motor, si no en el aprender a construir ambientes de aprendizaje mediados con TIC: contextualizados, motivadores y acogedores para nuestros y nuestras estudiantes, logrando así mejorar la calidad educativa y la calidad de vida de muchos de ellos y ellas a través de los recursos atencionales, motivacionales, el aprendizaje colaborativo, el desarrollo de habilidades de pensamiento, la interacción de alto nivel y el desequilibrio cognitivo. Además porque a través de su dinámica de trabajo se afianzan nuestras competencias y se promueve la integración curricular.