SERIE: Vida de Jesús LECCIÓN 14 La Resurrección PASAJE BÍBLICO: Lucas 24 y Juan 20 VERDAD CENTRAL: Jesús vive. Venció la muerte con gran poder, y nos resucitará a los que creemos en Él. META: Que el alumno se regocije que Jesús está vivo, y que dé testimonio de su seguridad de vivir después de la muerte. TEXTO: Juan 11:25 “Yo soy la resurrección y la vida; el que cree en mí, aunque esté muerto, vivirá.” PLAN DE CLASE INTRODUCCIÓN En esta lección están incluidos dos monólogos que se pueden presentar por un títere (de aspecto de una persona bíblica) o por una persona vestida como Pedro, el discípulo de Jesús. Si el tiempo no permite que se usen los dos monólogos, se puede usar sólo uno, o ninguno. Son opcionales. 1. Use un títere para representar al discípulo Pedro, y presente el siguiente monólogo. Si desea, puede pedir a un joven o a un adulto que se vista de ropa del tiempo bíblico y que venga a la clase a dar el monólogo. El Peor Día De Mi Vida (Un monólogo de Pedro, escrito por Mateo Hines) Soy Pedro, uno de los discípulos de Cristo. ¿Pueden ustedes recordar el peor día de su vida? Yo, sí, recuerdo el peor día de mi vida. Es difícil para mí contar todo lo que ocurrió porque yo no era fiel a mi Señor durante ese tiempo. En el huerto de Getsemaní yo durmí tres veces mientras Jesús agonizaba solo en oración. Recuerdo bien cuando me dijo, - Simón ¿estás durmiendo? ¿No pudiste quedarte despierto ni una hora? Yo me sentía mal que mi maestro me dijera así, pero no pude vencer el sueño. Tres veces Jesús me despertó, y por fin, dijo, -Ya basta. Levántense, vámonos; ya se acerca el que me traiciona. Todavía me estaba levantando cuando oí un ruido que rompió el silencio de la noche. Había llegado mucha gente con espadas y palos, y al frente estaba una forma conocida. ¡Fue Judas Iscariote, uno de nosotros! Judas se acercó a Jesús y lo besó. Entonces sus enemigos le echaron mano a Jesús y lo arrestaron. Yo estaba confundido. No estaba bien preparado para ese momento. Había durmido en vez de orar. Pero queriendo hacer algo, saqué mi espada y le di duro a uno de ellos, cortándole la oreja. Pero Jesús me reprendió y sanó la oreja. Viendo que yo no pude hacer nada, se apoderó de mí un gran miedo, y yo huí junto con los demás discípulos….dejando a Jesús solo. Lo que pasó esa noche es como una pesadilla. Yo negué a Jesús…..y no sólo una vez. TRES VECES negué que yo conociera a tal hombre. Hermanos, cuando pienso en esto me duele el corazón. En el momento de crisis, yo fallé a mi Señor. Sin el apoyo de nadie, Jesús se enfrentó con el sumo sacerdote, con Herodes, con Pilato, y con la misma muerte. Sí, fue a la muerte solo. Yo miré de lejos y oí cuando El dijo, - Padre, en tus manos encomiendo mi espíritu. Sentí como si mi corazón quebrara. Estaba seguro que nunca más volvería a sonreír. Fue un día oscuro, el peor día de mi vida. 2. Haga, por medio de objetos, un repaso de los 2 días terribles de Semana Santa, el jueves y el viernes. Preparación: Cubra una mesa con tela de color púrpura, y ponga en ella los siguientes objetos: Objeto Significado Cita bíblica tela de púrpura color de reyes Marcos 15:17 Los soldados vistieron a Jesús de púrpura para burlarse de El dados Representa el hecho de que los los soldados echaron suertes por la ropa de Jesús. Marcos 15:24 vinagre y esponja Empaparon una esponja de vinagre y trataron de hacerle a Jesús beberlo. Marcos 15:36 espinas lo que usaron para hacer una (o corona de espinas) corona para burlarse de Jesús Marcos 15:17 vino Lo tomó con Sus discípulos en la (copa de líquido rojo) última cena antes de Su muerte. Representa Su sangre. Marcos 14:23-24 pan Lo comió con Sus discípulos en la última cena antes de Su muerte. Representa Su cuerpo. Marcos 14:22 3 clavos grandes Al crucificar, los Romanos clavaron a la persona a la cruz, un clavo en cada mano y un solo clavo en los dos pies. Juan 20:25, Col. 2:14 látigo Lo que se usó para azotar a Jesús. Juan 19:1 30 monedas de plata El precio que los sacerdotes le dieron a Judas Iscariote por traicionar a Jesús y entregárselo a ellos. Mateo 26:15 una cruz Mateo 27:32 Donde Jesús fue clavado y murió. Pero la cruz está vacía. Jesús resucitó. ¡El vive! ESTUDIO BÍBLICO 1. Cuente la historia de la Resurrección con todo entusiasmo y amor. La Historia de la Resurrección de Jesucristo Fue un día triste cuando murió Jesús. Sus amigos se sintieron como si no valiera la pena vivir. ¡Cómo habían amado a Jesús! Habían tenido grandes esperanzas de cambiar el mundo por seguir a ese gran hombre Jesús de Nazaret. Pero ahora ¿qué podían hacer? Todo había cambiado. Ya no tenían esperanza. Había muerto su maestro. Les quedó solamente una cosa que hacer - cuidar el cuerpo de Jesús. Uno de sus seguidores ofreció su tumba. Los amigos de Jesús metieron Su cuerpo en la tumba y la cerraron con una gran piedra. Fue el viernes. El sábado fue el día de reposo, así que los judíos se descansaron. Pero muy temprano el domingo, tres mujeres fueron al huerto donde estaba la tumba de Jesús. Ellas llevaron perfumes para poner en el cuerpo de su Señor. Mientras caminaban decían entre sí, -¿Quién nos va a quitar la piedra de la entrada del sepulcro? Pero cuando llegaron ¡qué sorpresa fue la suya! ¡El sepulcro estaba abierto! La piedra no estaba en su lugar. María Magdalena no se quedó sino se fue corriendo para contárselo a Juan y a Pedro. Las otras mujeres entraron en la tumba, pero no encontraron el cuerpo de Jesús. ¡Se había desaparecido! Estaban asustadas y no sabían qué hacer. Pero de repente vieron que no estaban solas. Dos ángeles estaban de pie junto a ellas, vestidos de ropa brillante. Las mujeres se inclinaron hasta el suelo, llenas de miedo. Los ángeles les dijeron, -¿Por qué buscan ustedes entre los muertos al que está vivo? No está aquí, pues ha resucitado. ¿No recuerdan que él les dijo que iba a morir y resucitar al tercer día? Entonces las mujeres se acordaron de las palabras de Jesús, y se fueron para llevar las noticias a los discípulos. Mientras tanto Juan y Pedro llegaron a la tumba. Los dos iban corriendo juntos, pero Juan llegó primero. Juan se agachó a mirar y vio las vendas en que habían enrollado el cuerpo de Jesús. Vio las vendas puestas pero sin cuerpo adentro. Sin embargo Juan no entró. Después llegó Pedro y entró en el sepulcro. El también vio las vendas puestas allí. Además vio que la tela que había servido para envolver la cabeza de Jesús no estaba junto con las vendas sino enrollada y puesta aparte. Entonces entró Juan también. Y los dos creyeron y se fueron a su casa con alegría. Pero María Magdalena se quedó afuera, junto al sepulcro, llorando. Mientras lloraba, se agachó para mirar dentro del sepulcro, y vio dos ángeles vestido de blanco, sentados donde había estado el cuerpo de Jesús. Y los ángeles le preguntaron, -Señora ¿por qué está llorando? Ella les dijo, -Porque se han llevado a mi Señor, y no sé dónde lo han puesto. Apenas dijo esto, cuando volvió la cara y vio a Jesús que estaba allí; pero no sabía que era Jesús. El le preguntó, - ¿Por qué estás llorando? ¿A quién buscas? María, pensando que era el que cuidaba el huerto, le dijo, -Señor, si usted se lo llevó, dígame dónde lo dejó para que yo me lo lleve. Jesús entonces la llamó por nombre. -¡María!, le dijo. ¡Qué raro! pensó María. Ese hombre sabe mi nombre….y esa voz….¡Es la voz de Jesús! Ella se dio vuelta y con mucho gozo le dijo, -¡Maestro! Jesús le dijo, -Anda y diles a mis hermanos que subo a donde está el Padre. Entonces María fue a avisar a los discípulos que ella había visto al Señor. ¡Qué gozo era para los amigos de Jesús oír que él estaba vivo! Pronto después se regocijaron aún más porque vieron a Jesús en persona. Ya entendieron porque Jesús tuvo que morir. Ya tenían un propósito por vivir. Cuarenta días después de Su resurrección Jesús se fue al cielo, pero antes de irse les dio una promesa a Sus discípulos. Les dijo, -Yo estoy con ustedes todos los días, hasta el fin del mundo. ¡JESÚS ESTÁ VIVO! ¡Él nos da VIDA ETERNA! 2. Cante un cántico de vida y victoria, algo como “Dios No Está Muerto”, “Yo Vivo, Señor, Porque Tú Vives”, etc. 3. Títere. El títere Pedro (o la persona que se ha vestido de Pedro) entra de nuevo y presenta el monólogo siguiente: La Resurrección (Un monólogo de Pedro, escrito por Mateo Hines) Buenos días. Soy yo otra vez, Pedro, el discípulo de Jesús. Quiero que ustedes sepan que el asunto de Jesús no terminó aquel terrible viernes cuando El murió. Al domingo siguiente me levanté temprano. No había dormido bien desde el viernes. De repente oí voces, gritando, - ¡Jesús no está en el sepulcro! ¡Un hombre nos dijo que se ha resucitado! ¡Resucitado! Mi corazón brincó dentro de mí. ¿Sería posible? Luego María Magdalena dijo, -¡Se han llevado del sepulcro al señor, y no sabemos dónde lo han puesto! Yo no sabía qué pensar. ¿Habría entrado alguien a robar el cuerpo? ¿Quién hubiera hecho eso? ¿Y qué estaban hablando esas mujeres acerca de hombres vestidos de blanco? ¿Serían ángeles? Juan y yo no pudimos esperar. Fuimos corriendo a mil hacia el sepulcro. Entramos y vimos las vendas, y vimos la tela que había servido para envolver la cabeza de Jesús, todavía enrollada y puesta aparte. Al ver esto, Juan creyó, pero yo todavía tenía dudas. Quería creer que Jesús estaba vivo, pero quería verlo con mis propios ojos. Esa noche todos nosotros nos reunimos con las puertas cerradas por miedo a los judíos. Pero de repente, Jesús entró. No sé cómo, pero ahí estaba en medio de nosotros. Nos saludó, y dijo, -¡Paz a ustedes! Pero nosotros no contestamos. Estábamos asustados, pensando que veíamos un espíritu. Pero El nos dijo, -¿Por qué están asustados? ¿Por qué tienen esas dudas en su corazón? Miren mis manos y mis pies. Soy yo mismo. Tóquenme y vean. Luego pidió comida, y cuando yo vi que El comió, yo creí. Esto no era un espíritu. Este era Jesús mismo, Jesús, mi Señor. ¡Se resucitó! Hermanos, ¡Jesús vive! ¡Aleluya! 4. EL TEXTO. Se puede escribir el texto en la figura de una flor. Explique que éstas son las palabras de Jesús. APLICACIÓN Oración de gracias y alabanza. 1. Conversación. Conversar con los alumnos usando las siguientes preguntas: ¿Qué habría pasado si Jesús hubiera quedado muerto? ¿Estaríamos salvos? ¿Por qué no? ¿Qué puede hacer un Salvador muerto? Nada. Satanás habría conquistado. El tendría más poder que Jesús. No es posible. La resurrección es absolutamente necesaria. ¿Cuántos de ustedes tienen miedo de morir? ¿Por qué? Ya que Jesús venció la muerte, no tenemos que temer la muerte. No es que queremos morir. No. Queremos vivir. Pero algún día todos vamos a morir. ¿No es cierto? Todos vamos a morir, pero no tengamos miedo, porque si usted tiene a Cristo, si su corazón está limpio, usted irá al cielo a vivir con Jesús para siempre. La resurrección de Cristo nos da a nosotros los cristianos UNA GRAN ESPERANZA. La muerte no es el fin. Vamos a VIVIR PARA SIEMPRE. 3. Testimonios de los alumnos. Si los alumnos no han compartido su fe y su esperanza durante la conversación, tal vez usted puede animarles a hacerlo ahora. Puede preguntar: “¿Cómo se siente usted en cuanto a la muerte? ¿Se siente mejor ahora que hemos hablado de la esperanza que tenemos los cristianos? ¿Está seguro que usted va a vivir para siempre con Jesús? ¿Cómo podemos estar seguros? ¿Qué dice Jesús en el texto de hoy? Si usted siente la dirección de Dios de hacer una invitación a la salvación, hágala. Tal vez sería bueno orar una vez más. Dé gracias por la esperanza que tenemos y pida que Jesús quite del corazón de cada niño cristiano el temor de la muerte.