biblioteca la bòbila - Ajuntament de L`Hospitalet

Anuncio
bobila.blogspot.com
el fanzine del “Club de Lectura de Novel·la Negra” de la Biblioteca la Bòbila
BIBLIOTECA LA BÒBILA
# ESPECIAL 2012
L'Hospitalet / Esplugues
L'H Confidencial 1
Rafael
Alcalde
ENTREVISTA
―Quan vas començar a escriure i per què?
―Vaig començar a escriure ficció arran de la tesi
doctoral.
Era
sobre
Barcelona
Traction
―la mare de FECSA―, i era una bona història
d'intriga, a banda de l'embolic econòmicofinancer. Hi havia assassinats, suborns, intrigues,
diners ―molts diners― i febleses ―moltes, moltes
febleses humanes―. Era una llàstima que la
història es perdés en el format d'una tesi
doctoral. Quan portava unes poques pàgines, les
hi vaig passar a la meva dona i vaig preguntar-li
―quan es va recuperar de la sorpresa―: segueixo?
I em va dir qiue sí.
―Com et vas acostar a la novel·la negra? Quins
són els teus autors favorits?
―Com en la primera novel·la: és la vida la que
sovint és negre. Per això les dues que han seguit
també tenen aquest color, o alguns de propers.
No cal esforçar-se gaire a que surti negre un relat
versemblant, proper a la realitat.
Autors? Sóc omnívor. Fins i tot Nietzsche es pot
prendre com un autor negre. M'agrada de tot: des
de la Christie a l'Élmer Mendoza, passant per
Vázquez Montalbán, Hammett o Guerrero
Casasola.
―Aquesta no és una novel·la negra a l’ús, com
la definiries?
― És una novel·la de color gris fosc, producte
d'algunes parts negres com el carbó i d'altres més
clares. No crec que la intriga estigui barallada
amb el que és quotidià. Ans al contrari, em
sembla més inquietant que la desgràcia s'acarnissi
amb una dona atabalada pel divorci de la seva
amiga o amb una noieta boja pel seu xicot que
amb el gastat semental del MI6 expert en arts
marcials que, peti qui peti, acabarà triomfant a
la trama.
―Et preocupa el paper de les noves tecnologies
a les nostres vides?
―Una de les notícies més esgarrifoses que he
llegit darrerament és la que anuncia alegrement
els passos endavant en la direcció de la
interpretació automàtica de les reaccions
cerebrals. O sia, els prolegòmens de la lectura
del pensament. O sia, bona nit i tapa't.
Però en aquesta novel·la la tecnologia no va més
enllà d'excusa, d'argamassa.
―Costa explicar una historia a través
únicament de diàlegs?
―Escriure tota la novel·la dialogada va començar
com a una entremaliadura i va passar a ser una
aposta ―amb mi mateix, és clar―. La primera
tenia de tot. Em vaig proposar que la segona no
tingués ni una entrada de diàleg, i així va sortir.
Volia, per a aquesta tercera, just el contrari. Les
compensacions són un ritme viu de l'acció i una
digestió fàcil de la lectura.
―Penses continuar escrivint novel·les de
gènere negre i policíac?
―No sé si policíac, però sí sé que negre. O gris
fosc. La gamma que sovint pren la vida corrent.
―Tres novel·les, tres premis. Interès pels
premis, dificultat de trobar editorial?
―La primera i l'última vegada que vaig anar
directament a una editorial va ser amb l'original
de la tesi doctoral, proveït d'una recomanació del
tribunal. Em van respondre que no tenia públic
objectiu, i probablement tenien raó. Una tesi
doctoral, per definició, és espessa. Prefereixo
l'anonimat, lectors sense prejudicis i jurats i
concursos honestos. I he tingut la sort de trobarne tres de benèvols
―Quins són els teus propers projectes?
―Cada dia agafo el tren per anar a treballar.
Escric, sobretot, al tren. És a dir, tracto
d'escriure unes línies cada dia. És lent, però és
diari. I de tant en tant trobo algun lector a qui li
agrada. No es pot demanar més.
L'H Confidencial 2
AIXÍ COMENÇA…
- Papá, pásame la sal.
- Por favor, Begoña; las cosas se piden por favor. Y tomar tanta sal
no es bueno.
- Menos todavía por la noche.
- Bueno, mamá, no me chinches tú también.
- Begoña, hija mía, yo no busco chincharte, como tú dices, sino
velar por ti.
- Pero es que no me dejáis respirar, entre una cosa y otra.
- ¿Has oído lo que ha dicho tu hija, Gerardo?
- También es tu hija, Magdalena, y claro que lo he oído. Mira,
Begoña, dentro de un par de años ya nos podrás
hacer callar legalmente. Mientras, obedece, que es por tu bien.
- Año y dos meses, papá, año y dos meses.
- Mejor, Begoña; año y poco. Pero ya verás como llegará el día que
añorarás nuestros consejos.
- Lo dudo, papá. Estoy empachada de tantos.
- ¿Pero tú has visto el descaro de esta chica, Gerardo?
- A ver, Magdalena, pásame ahora tú la sal, que te ha quedado más
cerca. ¿Cómo le ha ido hoy el colegio a
nuestro tesoro rubio?
- Vuestro tesoro rubio quiere cambiar de colegio.
- Menudo pronto, Begoña. Pero si acaba de empezar el curso, y
llevas cinco años en esa escuela, y contenta. ¿A
qué viene eso?
- Ay, Gerardo, pareces tonto. ¿Es que no ves que Begoña se ha
enamorado?
- ¡Mamá!
- Bueno, hija, el año pasado te ocurrió algo parecido, así que no es
tan difícil sumar dos y dos. ¿Dónde vas,
Begoña? ¡Pero si no te has acabado el plato!
- Déjala, Magdalena, mañana será otro día.
- Pero es que no ha dicho ni buenas noches, Gerardo.
- Tanto da, mujer. Y tú tampoco has sido muy delicada.
- Cualquiera diría. Estás tú muy protector con Begoña, y la niña es
una niña, pero no es de cristal. Lo que pasa
es que últimamente apenas paras en casa, y Begoña guarda su peor
cara para mí.
- De aquí a enero solo tengo el viaje a Viena, aunque el ir y venir a
las centrales no me lo quita nadie.
- Nadie, Gerardo, no te lo quita nadie
- No empecemos por ahí, Magdalena. Trabajo en lo que trabajo, y
no puedo evitarlo. ¿Cuánto hace que acepté?
¿Cuatro años? Y tú sabes mejor que nadie quién me aconsejó.
- Caramba, Gerardo, no pierdes la ocasión de sacármelo a relucir.
¿Qué quieres de postre?
- Nada. Un poco más de vino, y nada más. Y a ti, ¿cómo te ha ido el
día?
- Regular, rutinario. Estoy algo cansada de todo. Me voy a comer un
par de higos. ¿Estás seguro de que no
quieres nada más?
- Seguro. Suena muy mal, eso de estar cansada de todo. ¿También
de mí y de los chicos?
- Me refería al laboratorio.
- ¿Qué pasa con él?
- Nada, Gerardo, es igual.
- Mujer, ahora no me dejes así.
- Tampoco es nada concreto, por ahora, y los únicos que circulan
con libertad son los rumores. Los suizos, la
plantilla, las patentes. Habladurías, suposiciones. No sé a qué
atenerme. Estos higos están verdes. No valen
nada.
- Déjalos y tómate este poco de vino.
- Basta, Gerardo, no me pongas más que ya me lo noto, y después
no hay quien duerma.
- ¿Han comprado el laboratorio?
- No lo sé con certeza. Se lo he preguntado a Marcelo Ochoa, pero
me ha respondido con evasivas. Si no han
cerrado el trato, poco faltará. Se habla de que una quinta parte de
la gente acabará en la calle.
- Pero si el laboratorio era, quiero decir, es muy provechoso.
- Pues, por lo visto, quieren que lo sea más todavía. Algunas tareas
son redundantes, dicen. Hace una semana
que solo oigo la palabra sinergia. Sinergia arriba, sinergia abajo.
- Mal asunto.
- Me temo que las sinergias nos aplastarán.
- A ti no te tocarán un pelo.
- ¿Y tú qué sabes?
- Eres demasiado buena, Magdalena.
- ¿Bondadosa?
- Buena en tu trabajo, no te hagas la despistada. ¿Cuántas de las
patentes de los últimos años podías haber
firmado como propias?
- ¿Qué es peor, Gerardo: ser despedida o tener que decidir a quién
echar?
- No me digas…
- Ya ves dónde estoy. Me veo venir aprietos de un modo o de otro.
Feliz tú, escondido en tu Consejo, tan
funcionarial y tan calmo.
- Joder, Magdalena, ya veo que esta noche estás…
-¿Insoportable?
- Eso lo has dicho tú, no yo, pero todos tenemos nuestros problemas.
Mira, si no, a Begoña. Lo que pasa es que
unos los explican más que otros.
- ¿Qué problemas tienes tú en tu trabajo, aparte de viajar setenta
días cada año y cobrar el doble que yo, con
todas mis invenciones?
- Oye, Magdalena, si te vas a poner así de sarcástica, mejor lo
dejamos. No serás tan ilusa que creerás que lo
mío es ver mundo, no dar golpe y forrarme.
- Pues a ver, di, hombre, di, que últimamente no me explicas nada.
- Será porque cuando llego a casa trato de dejar en la puerta el
lastre, pero con lo de si cierran la número seis
hay muchas presiones, y todos escurren el bulto. Hace tiempo que
Rojas, con la excusa de delegar, me endosa
tareas que son suyas, así que tengo que hacer su trabajo y el mío.
Ahora, con la discusión de la clausura, peor, y
me las tengo que ver con dificultades que ni me competen, ni puedo
evitar sentirme responsable. En algunos
casos ni siquiera sé qué hacer. Soy un técnico que lleva tiempo
soportando funciones de relaciones públicas y
que, si me descuido, acabaré tomando decisiones políticas que
tendré que asumir si la gente las considera
errores, y que se arrogará Rojas si la impresión general es de acierto.
A eso me dedico yo últimamente.
- Es verdad que parece feo, Gerardo, pero cada cual nota su cruz
como la más pesada. Creo que me cambiaría
por ti en este mismo instante y sin dudarlo.
- Tú ganas, Magdalena. No tengo más fuerzas para discutir. Me voy a
escuchar las noticias.
- No faltaría más, Gerardo. Yo me voy a relajar recogiendo la mesa y
fregando los platos.
- Coño, Magdalena, no me fastidies. ¿Para qué pagamos a Gladys? ¿No
podemos dejarlo así y que lo arregle
mañana?
- […]
- ¿No?
- Gladys no vendrá mañana. Me pidió el día para ir al médico.
- Me parece que esta chica tiene mucho cuento.
- A mí me parece que esta chica está embarazada.
- ¡No fastidies!
- Son cosas que nos pasan a las mujeres de vez en cuando. ¿Te
acuerdas?
- Pero si el laboratorio era quiero decir es muy
L'H Confidencial 3
Fragment gentilesa de l’edició de Roca Editorial
ALTRES OBRES DE L’AUTOR…
B.T. (a la mierda)
Rafael Alcalde
L’escriptor barceloní Rafael Alcalde ha estat el guanyador de la
sisena edició del premi internacional de novel·la negra L’H
Confidencial, amb la novel·la ¿Te suena un tal López? El premi,
promogut per la Biblioteca la Bòbila i convocat per
l’Ajuntament de L’Hospitalet i Roca Editorial, ha recaigut en
una obra ambientada en la Espanya actual.
El jurat és presidit pel regidor delegat de Cultura de
l’Ajuntament de L’Hospitalet, Jaume Graells, i està format per
l’editora Blanca Rosa Roca; la cap de Biblioteques de
L’Hospitalet, Anna Riera, el director de la Biblioteca la Bòbila,
Jordi Canal, i dos lectors apassionats per la novel·la negra,
Nancy López, del Club de Lectura de Novel·la Negra, i Paco
Camarasa, llibreter de Negra i Criminal i comissari de BCNegra.
El jurat destaca en aquesta obra la reflexió que l’autor fa sobre
la condició humana i la desaparició de la intimitat en una
societat en què les noves tecnologies estan al servei de la
comunicació i la seguretat, i l’agilitat d’un text absolutament
dialogat que progresa fins abocar-nos en un thriller de
conseqüències apocalíptiques. El premi serà lliurat en un acte
públic a la Biblioteca la Bòbila el proper 24 de març, en el qual
es farà també la presentació de l’obra publicada.
Nascut a Barcelona 1961, Rafael Alcalde és llicenciat en
Filosofia i doctor en Economia. Actualment exerceix de
professor de batxillerat a Vilafranca del Penedès i, fins el
moment, ha publicat dues novel·les: B.T. (a la mierda), amb
la què guanyà el XI Premio de Narrativa “Alfonso VIII”, i
Diario anciano, Premio de Novela Mario Vargas Llosa 2010.
El pulso narrativo, el carácter de los personajes, las voces, la
alternancia de perspectivas, el dominio del idioma, el manejo de las
situaciones y la inteligente disposición de las más variadas peripecias
se acoplan hasta lograr un engranaje preciso que rinde sin alharacas y
sin chirridos. Los trazos de escritura, que Rafael Alcalde maneja con
el primor de un avezado narrador, se delinean como salidos de una
rueca que tuerce las hilazas de una novela deslumbrante. El lector,
mientras recorre minuciosa y detenidamente los recovecos de este
múltiple relato, se envanece con la emoción de asistir al
alumbramiento de un nuevo y gran narrador. Juan March, apodado en
medios financieros «el último pirata del Mediterráneo», en una hábil y
complejísima operación mercantil, consiguió que su recién formada
FECSA adquiriera el completo control de la eléctrica Barcelona
Traction Ligth & Power Company Ltd., «la Canadiense», hasta
entonces en manos belgas y la más importante compañía eléctrica que
operaba en España desde 1911. En esta larga historia de sobornos,
mezquindades e intereses económicos se vieron implicadas muchas
personalidades del régimen franquista. El proceso judicial se prolongó
hasta el polémico fallo del Tribunal de la Haya (1970). Juan Antonio
Suanzes, dos veces ministro de Industria, cuya intervención fue
decisiva para que FECSA se quedara con Barcelona Traction.
Diario anciano
Augusto Calderón, de setenta y cuatro años, que acaba de ser
desahuciado por sus médicos, comienza la redacción de un diario
como terapia paliativa. Las circunstancias provocarán que ese
cuaderno cambie de manos en cinco ocasiones antes de ser destruido.
El diario recogerá miedos, recuerdos, esperanzas confesiones e
intrigas de todos y cada uno de los que lo utilizarán a lo largo de sus
ciento cincuenta y cuatro días de vida.
Club de Lectura de Novel·la Negra
Biblioteca la Bòbila | Fons especial de gènere negre i policíac
Pl. de la Bòbila, 1 – 08906 L’Hospitalet | Tel. 934 807 438 | biblabobila@l-h.cat | www.labobila.tk
www.l-h.cat/biblioteques | www.diba.cat/biblioteques
matins (excepte juliol i agost): dimecres, dijous i dissabte de 10 a 13.30 h. | tardes: de dilluns a divendres, de 15.30 a 20.30 h.
Metro L5 Can Vidalet | Trambaix T1-T2-T3 Ca n’Oliveres | Autobusos L’H2, EP1
________________________________________________________________________________________________
L'H Confidencial 4
Descargar