l I I 1 Population Reports D ~ / ~ D S P ~ T f 1 , . - - - - -- -. .- - Serie K Número 2 -- J Mayo de 1984 (Publicado en inglés, mayo de 1983) - -- Population lnformation Program, The Johns Hopkins University, Hampton House, 624 North Broadway, Baltimore, Maryland 21205, USA l Las progestinas de acción prolongada: perspectivas sobre métodos prometedores Resumen de la redacción. En la continua búsqueda de mejores métodos de planificación familiar, las progestinas de larga duración ofrecen tanto promesas como problemas. Las progestinas, hormonas sintéticas que actúan tal como la progesterona, hormona femenina natural, se pueden administrar a lo menos de cinco maneras diferentes a fin de evitar el embarazo durante largos períodos de tiempo. Merced a las progestinas se hacen posibles: o los anticonceptivos inyectables, 0 los DlUs liberadores de hormonas, o los implantes subcutáneos, 0 los anillos vaginales y o las píldoras anovulatorias mensuales. Diversas progestinas resultan eficaces durante distintos períodos de tiempo. Las progestinas contenidas en anticonceptivo~orales de uso diario son eficaces durante apenas unas 24 horas. Es posible prolongar la eficacia de algunas progestinas si se les incorpora en una solución inyectable o un medio que libere paulatinamente la hormona. De esta forma, su eficacia puede extendersede un mes a cinco años o más. De las muchas progestinas probadas, tres por lo menos han demostrado ser muy eficaces como anticonceptivos de larga duración. Estas son: el acetato de medroxiprogesterona en su forma de depósito (DMPA; la marca comercial de la compañía Upjohn es Depo-Provera), o el enantato de noretindrona (NET EN; la marca comercial de la compañía Schering AG es Noristerat), y o el levonorgestrel. Las primeras dos son preparaciones inyectables; la tercera se usa en varios medios. Una de las ventajas principales de las progestinas de larga duración consiste en que eliminan la necesidad de actos específicos en el momento del coito, como ponerse un condón, o actos diarios, como ingerir una píldora. Por otra parte, son reversibles. Uno de los grandes inconvenientes de las progestinas de larga duración en uso actual estriba en que interrumpen el ciclo menstrual normal, causando sangrado irregular, pérdida de ciclos menstruales o, de vez en cuando, flujos de sangre más copiosos. No se ha comprobado que estos cambios menstruales constituyan un riesgo para la salud. De hecho, el que reduzcan la pérdida de sangre menstrual quizá disminuye el riesgo de anemia. La interrogante fundamental, no resuelta hasta ahora, es si el uso humano prolongado de ciertas progestinas aumenta o disminuye el riesgo de diversos tipos de cáncer. Anticonceptivos inyectables Existen dos anticonceptivos inyectables de amplia distribución -el DMPA y el NET EN. Uno o ambos han sido utilizados en cerca de 100 países. Generalmente se administra el DMPA en una dosis trimestral de 150 mg y, menos frecuentemente, en una dosis semestral. Se recomienda administrar el NET EN en dosis de 200 mg, ya sea a intervalos de 8 semanas o bien cada 8 semanas durante los primeros 6 meses y luego cada 12 semanas. Se estima que actualmente, 2,3 millones de mujeres usan el DMPA. Su uso es más generalizado en Jamaica, Tailandia, Sri Lanka y Nueva Zelandia. Alrededor de 275.000 mujeres usan el NET EN. Entre 1978 y 1981 los organismos internacionales donantes suministraron anualmente entre medio millón y dos millones de dosis inyectables, en su mayoría DMPA, a países en desarrollo. Tailandia, en donde alrededor del 12 por ciento de todos los usuarios de anticonceptivos CONTENIDO Antecedentes ..............................K- 3 Uso .......................................K 6 lnyectables Eficacia ..................................K- 9 Efectos secundarios ......................K-11 Efectos sobre la reproducción .............K-15 La interrogante del cáncer ................K-18 Continuación y aceptación ................K-22 lnyectables mensuales ....................K-24 Dispositivos intrauterinos liberadores de progestinas ..............................K-25 Implantes ..................................K-26 Anillos vaginales ...........................K-29 Nuevas investigaciones sobre métodos de duración prolongada ..................K-31 Desafíos para los programas .................K-33 Bibliografía ................................. K-36 Este número de Population Reports fue preparado por Laurie S. Liskin, M.A., con asistencia de wayne F. Quillin, sobre la base de documentación publicada e inédita, de correspondencia y entrevistas. Cualquier comentario sobre el contenido o aporte informativo será muy bien recibido. Se agradece la asistencia de los siguientes colaboradores: L.P.Chow, Gordon Duncan, Hanni Levi Ellis, Larry Ewing, lan S. Fraser, Henry L. Gabelnick, Ronald H. Gray, A.T. Gregoire, Peter E. Hall, Robert Hatcher, Susan E. Holck, Theodore M. King, Ursula Lachnit, Tapani Luukkainen, Edwin B. McDaniel, Malur Prasad, Sybille Meyer-Welke, Harold Nash, Gordon Perkin, Malcolm Potts, R.T. Ravenholt, Allan Rosenfield, Patrick J. Rowe, Joerg Schuppler, PramiIla Senanayake, JamesShelton, lwing Sivin, J. Joseph Speidel y Bruce Stadel. Popuhtion Reports se publica seis veces al ano en 624 North Broadway, Baltimore, Maryland 21205, Estados Unidos, por el Population lnformation Program (Programa de Información sobre Población) de la Universidad JohnsHopkins, con el apoyo de la Agencia de los Estados Unidos para el Desarrollo Internacional. Population Reports tiene por objeto proporcionar una información precisa y bien documentada de los acontecimientos importantes en el campo de la población. No representa declaraciones oficiales de política de la Universidad lohns Hopkins ni de la Agencia de los Estados Unidos para el Desarrollo International. Director: Phyllis T. Piotrow, Ph.D.; Director Adjunto: Walter W. Stender; Editor: Ward Rinehart; Editor de los números en idiomas extranjeros: JosephH. Maier. lkpuñ, Serie K, Anticonceptivos lnyectables e Implantes: ISSN Gü97-9104 Population Reports is published bimonthly at 624 North Broadway, Baltimore, Maryland 21205 by the Population lnformation Program of The lohns Hopkins University. Second-class postage paid at Baltimore, Maryland (USPS 063-150). utiliza el DMPA, adquiere actualmente los suministros en forma independiente y disminuye así la necesidad de donaciones. En México y en China se están utilizando inyectables mensuales compuestos de progestinas y estrógenos. Tanto el DMPA como el NET EN son altamente eficaces, con tasas anuales de embarazos inferiores a uno por 100 usuarias. Sus efectos secundarios son pocos, fuera de las perturbaciones menstruales. Algunas mujeres que usan el DMPA aumentan de peso, generalmente de uno a cinco kilos. La mayoría de las mujeres no recupera su fertilidad sino cuatro a cinco meses después de abandonar su uso pero, no existe pruebas de que la fertilidad quede permanentemente impedida. Los inyectables tienen otros beneficios, además de la anticoncepción. Ciertas mujeres que amamantan y toman DMPA pueden tener más leche. El DMPA, al igual que los anticonceptivos orales, disminuye el riesgo de enfermedad inflamatoria pélvica (EIP). Asimismo, el DMPA puede disminuir los síntomas de la anemia falciforme, trastorno genético más común en regiones de Africa y personas de ancestro africano. Los inyectables han demostrado su aceptación en ensayos clínicos y en países en que es posible obtenerlos comercialmente o mediante programas de planificación familiar. Las tasas de continuación son aproximadamente del 50 al 75 por ciento al año. Las irregularidades menstruales cons.tituyen la principal causa de abandono del método. \\ El ~ M P Ano se vende como anticonceptivo en los Estados Unidos porque, hasta el momento, la Administración de Fármacos y ~ l i m ~ n t (US o s Food and Drug Administration) 1 no lo ha aprobado. Por la misma razón, la Agencia para el Desarrollo lnternacional (AID) no suministra DMPA a países en desarrollo, a pesar de que varios organismos internacionales lo hacen. 1 La preocupación sobre los inyectables proviene de estudios practicados en perros (beagles), que desarrollaron tumokes benignos y malignos enlas mamas, así como de estudios en monos, que contrajeron cáncer del endometrio mientras recibían altas dosis de estas hormonas. Se ha puesto en duda la pertinencia de estas pruebas en animales con respecto a seres humanos y, en particular, las pruebas de estas hormonas en perros así como su administración en dosis elevadas. 1 Los estudios en seres humanos con inyectables no demuestran un aumento en el riesgo de cáncer. Sin embargo, la mayoría de los estudios en seres humanos no ha sido suficientemente extensa y ha carecido de controles adecuados y del seguimiento a largo plazo necesarios para arrojar resultados concluyentes. Un amplio estudio de casos y controles (case-control study) que actualmente se lleva a cabo en varios centros el Programa Especial de Investigaciones, Desarrollo y Formación de Investigadores sobre Reproducción Humana de la Organización Mundial de la Salud (OMS), está proporcionando respuestas más claras en cuanto a la interrogante del cáncer. Los resultados preliminares demuestran que no hay riesgo adicional de cáncer de las mamas o del cewix cuando se utiliza el DMPA. (En Nueva Zelandia y Kenya se están efectuando otros estudios de gran magnitud, patrocinados por la compañía Upjohn.) Por lo demás, numerosos estudios metodológicamente fidedignos sobre anticonceptivos orales combinados, sugieren que, en los seres humanos, las progestinas protegen contra el cáncer del endometrio y a los ovarios y que no tienen ningún efecto sobre el riesgo de cáncer de las mamas. De hecho, las progestinas, incluido el DMPA, se usan en el tratamiento de cáncer del endometrio. Después de estudiar la interrogante del cáncer, el Grupo de Estudios Toxicológicos (Toxicology Review Panel) de la OMS y el Grupo lnternacional de Asesoramiento Médico (International Medical Advisory Panel) de la Federación lnternacional de Planificación de la Familia así como varios otros organismos médicos, han respaldado el uso de DMPA. La controversia sobre el DMPA y los polémicas resultados de los estudios en animales y seres humanos plantean varias cuestiones básicas en torno a toda la investigación de la seguridad de fármacos: iQué animales son modelos pertinentes para estudiar un fármaco utilizado por seres humanos? iCuán amplios y prolongados deben ser los estudios en seres humanos antes de que el usode anticonceptivos y otros fármacos, que no demuestran efectos adversos en seres humanos, sea aprobado para personas informadas que desean usarlos? e iQué tipo de seguimiento postcomercial, de hacerlo, debe emprenderse a fin de determinar la existencia de efectos desusados o a largo plazo, difíciles de identificar salvo tras un uso difundido? DlUs liberadores de progestinas Las progestinas naturales y sintéticas se agregaron por primeravez a los DIUs a principios de los años setenta. El DIU Progestasert en forma de T libera diariamente alrededor de 65 pg , de progesterona y mantiene su eficacia duPOPULATION REPORTS - rante un año aproximadamente. Las ventajas principales que ofrece en comparación con los DlUs no hormonales son el menor derrame de sangre por ciclo menstrual y una menstruación menos dolorosa. Las mayores desventajas del Progestasert son su costo superior, la necesidad de remplazarlo todos los años, el "manchado" intermenstrual y posiblemente un mayor número de embarazos ectópicos que con otros DIUs. El Population Council está desarrollando un DIU de levonorgestrel que libera alrededor de 20 a 30 p g diariamente. Este DIU también disminuye el derrame de sangre menstrual y el dolor. La OMS desarrolla actualmente un DIU de levonorgestrel con baja dosis, que libera diariamente alrededor de 2 pg. Estos dispositivos pueden mantener su eficacia durante siete afios. Implantes Los implantes consisten en bastoncillos o cápsulas de polydimethylsiioxano (Silastic) o polímeros que se insertan debajo de la piel y que liberan lentamente una progestina. Principalmente según la cantidad y el tipo de progestina, los implantes pueden evitar los embarazos durante un plazo de hasta siete años. El Population Council ha desarrollado dos variantes de implante, denominado oficialmente Sistema NORPLANT, que libera 30 a 68 p g de levonorgestrel diariamente. Incluso después de tres años, menos del uno por ciento de las usuarias ha quedado embarazada. El método es reversible extimando el implante. En ensayos clínicos, apenas un 20 por ciento de las mujeres descontinuó su uso durante el primer año, muchas de ellas quejándose de irregularidades menstruales. Aunque en algunas usuarias los implantes pueden ser levemente visibles cuando se colocan en el brazo, hasta el momento este hecho no ha disuadido a la mayoría. Norplant aún no está disponible al público. Anillos vaginales Se han diseñado asimismo anillos de silástico que pueden liberar paulatinamente hormonas en la vagina. Se están desarrollando dos tipos: Anillos inhibidores de ovulación, que liberan alrededor de 250 a 290 pg de levonorgestrel diariamente, junto con una pequeña cantidad de estrógeno. E l régimen de uso recomendado es de tres semanas in situ, seguido por una semana en que se extrae el anillo. Cada anillo puede ser utilizado durante seis meses. Anillos de baja dosis, que liberan entre 20 y 50 pg de progestina diariamente, pero que no evitan la ovulación en la mayoría de los ciclos. La OMS ha estado a la vanguardia de este enfoque con el anillo Varlevo-20, que torna el moco cervical impenetrable a los espermatozoide~.Estos anillos pueden ser mantenidos in situ durante varios meses, sin interrupción. Aún no se dispone de información sobre su eficacia. a Ambos anillos se encuentran todavía en desarrollo y no están disponibles para el uso general. Si bien suele ocurrir la expulsión del anillo, es fácil colocarlo nuevamente. En ensayos preliminares, algunas mujeres o sus parejas los han considerado incómodos durante el coito. Problemas actuales Existen grandes diferencias en cuanto al costo y disponibilidad de las progestinas de larga duración. El DMPA y el NET EN se venden actualmente a organismos donantes y organizaciones de planificación familiar a razón de US$0,50 a $1,O0 por dosis. El precio de los implantes liberadores de progestinas y los DlUs de levonorgestrel será probablemente de alrededor de US$10,00 por cada dispositivo. Los honorarios por inyección o inserción serán adicionales. Otras investigaciones se centran en los implantes biodegradables, nuevos inyectables, una píldora mensual que consiste de estrógenos y progestinas, y métodos hormonales para los hombres. Estos métodos de larga duración se encuentran aún en desarrollo y la magnitud de las pruebas en seres humanos es todavía limitada. No se puede vaticinar su costo ni su disponibilidad. Los nuevos métodos anticonceptivos pueden ofrecer una mayor variedad de opciones a personas y parejas. El desafío para los investigadores y formuladores de políticas consiste en determinar, lo más rápidamente posible, cuáles son los riesgos relativos y beneficios para una gran variedad de usuarias potenciales. Para los programas de planificación familiar, el desafío consiste en asegurar que todos los métodos razonablemente seguros y eficaces estén fácilmente disponibles y con información completa sobre sus ventajas y desventajas. Fin del resumen de la redacción. ANTECEDENTES Uno de los objetivos de la investigación sobre la anticoncepción es el desarrollo de un método eficaz, de larga duración, que no exija un acto diario o por cada coito, y que, no obstante, sea fácilmente reversible. La esterilización voluntaria brinda protección a largo plazo contra el embarazo, pero en general no es reversible. Los DlUs ofrecen protección prolongada y reversibilidad, pero no son adecuados para todas las mujeres. Las hormonas femeninas ofrecen otra posibilidad de protección prolongada contra el embarazo y de reversibilidad, pero ha resultado difícil encontrar un método hormonal de larga duración y libre de toda duda sobre efectos secundarios serios. Los primeros anticonceptivos hormonales, desarrollados a mediados de los años cincuenta, fueron progestinas de corta duración administradas oralmente. Aunque estas progestinas evitaban eficazmente el embarazo al suprimir la ovulación, causaban flujos menstruales irregulares. Muy pronto se descubrió que el estrógeno, presente en la progestina como impureza del método de fabricación, podía disminuir las irregularidades menstruales. En consecuencia, se agregó deliberadamente estrógeno a la progestina. El resultado fue una píldora de una asociación estrógeno-progestina, primer anticonceptivo hormonal comercializado. Más adelante, a fines de los años sesenta, se introdujeron píldoras diarias compuestas sólo de progestinas de baja dosis, las minipíldoras (420). Sin embargo, incluso antes de la comercialización de la primera píldora combinada en 1960, se habían sintetizado progestinas que, inyectadas, eran de larga duración. Los investigadoresde anticonceptivos comenzaron entonces a utilizar plásticos, caucho y tecnología de polímeros para desarrollar dispositivos portadores de fármacos que pu- dieran liberar paulatinamente progestinas en el útero, la vagina o incluso bajo la piel. De esta manera, se hicieron factibles numerosos métodos anticonceptivos hormonales de larga duración: inyectables, DlUs medicados, anillos vaginales e implantes. Todos estos métodos de larga duración se han probado desde los años cincuenta. Sólo uno -el inyectable Depo-Provera- se usa extensivamente en países desarrollados y en desarrollo. Otros métodos de duración prolongada -diversos inyectables y DlUs liberadores de progestinas- tienen un uso menos difundido, en tanto que los implantes y los anillos vaginales están todavía en desarrollo. Historia de los inyedables Las primeras progestinas inyectables fueron desarrolladas en 1953 por Karl Junkmann (121,243). En 1957, Junkmann y sus colegas de la Schering AG en Berlín sintetizaron ésteres inyectables de larga duración de la progestina noretindrona (también conocida como noretisterona), incluido el enantato de noretindrona (NET EN) (244). Casi al mismo tiempo, en Estados Unidos, la compañía Upjohn desarrolló el acetato de medroxiprogesterona (MPA o, en su forma de depósito -o inyectable- DMPA) y le dio como nombre comercial Depo-Provera (29). El NET EN fue la primera progestina inyectable usada como anticonceptivo. Es comercializada principalmente por la Schering AG con el nombre de Noristerat. En 1965, la Schering AG comenzó a efectuar ensayos en el terreno. El NET EN se comercializó inicialmente en Perú, en 1967. Aunque en la actualidad se vende en más de 40 países (454), el NET EN no ha tenido un uso tan difundido como el DMPA. Es previsible que su uso aumente próximamente, porque la Federación Internacional de Planificación de la Familia (IPPF) inició en 1983 el suministro de NET EN, a solicitud de programas de planificación familiar (76). En Estados Unidos se están llevando a cabo pruebas toxicológicas del NET EN con animales de laboratorio. La Administración de Fármacos y Alimentos de Estados Unidos (US Food and Drug Administration) (US FDA) ha aprobado la iniciación de ensayos clínicos en mujeres (141). Los primeros ensayos clínicos del DMPA como anticonceptivo se iniciaron en 1963, seguidos por ensayos de campo que comenzaron en 1965. En 1967 la compañla Upjohn solic.6 permiso a la US FDA para comercializar DMPA como anticonceptivo en Estados Unidos. En ese entonces ya era evidente que los estrógenos contenidos por anticonceptivos orales (AOs) eran responsables de efectos secundarios desagradables, tales como náusea y vómitos. Aumentaban las sospechas, posteriormente confirmadas, de que los estrógenos tenfan alguna relación con la formación de coágulos. de sangre (enfermedad tromboembólica) en las usuarias de la píldora. Por esta razón, los métodos hormonales libres de estrógenos como el Depo-Proveray la minipíldora eran muy prometedores. Hacia 1970, sin embargo, los estudios demostraron que algunas progestinas, incluido el DMPA, causaban n6dulos mamarios en perros (beagle) (54, 150). No obstante que muchos científicos llegaron a la conclusión de que tales experimentos no eran pertinentes a los seres humanos (82,210,367) (véase la pág. K-18) los resultados indujeron a la US FDA actuar con cautela. Por l o demás, en Estados Unidos y el Reino Unido, a principios de los años setenta, la demostración de una relación entre la formación de coágulos de sangre y anticonceptivos orales aumentó la preocupación del público en torno a la seguridad de todos los anticonceptivos hormonales, a pesar de que las sospechas recaían sobre los estrógenos y no sobre las progestinas. En septiembre de 1974 la US FDA anunció su intención de aprobar el DMPA para uso anticonceptivo, pero sólo para mujeres que no podían usar otros métodos o que habían tenido fracasos anticonceptivos con otros métodos y aceptaban la "pequeña posibilidad de una esterilidad pecmanente" (456). Esta iniciativa fue posterior a una recomendación del Comité Asesor en Obstetricia y Ginecología (Obstetrics and Gynecology Advisory Committee) de la US FDA en 1973 (642). Poco después, dicha oficina puso término a su proyectada aprobación del DMPA, cuando un representante del Congreso de los Estados Unidos planteó la posibilidad de que el uso del DMPA aumentara el riesgo de cáncer cervical (1,149,455). Un año después, en 1975, un subcomité integrado por miembros del Comité Asesor en Obstetricia y Ginecología de la US FDA y del Comité Asesor de Metodología Epidemiológica y Biométrica (Biometric and Epidemiologic Methodology Advisory Committee), también de la US FDA, concluyó que no existía evidencia de un aumento del riesgo de cáncer cervical, y el Comité Asesor en Obstetricia y Ginecologla recomendó una vez más aprobar el DMPA para un grupo limitado de mujeres (524, 642). No obstante, tres años después, en 1978, la US FDA rechazó formalmente la aprobación del DMPA para uso anticonceptivo y adujo cuatro razones principales: las dudas planteadas en torno al desarrollo de nódulos en las mamas de perros (beagle) a los que se había administrado el DMPA no estaban resueltas. existía un riesgo en potencia de deformaciones congénitas en casos de falla anticonceptiva. los estrógenos serían usados para controlar el flujo irregular de sangre menstrual causado por el DMPA, reduciendo las ventajas de los anticonceptivos consistentes tan solo en progestinas. no se había demostrado una necesidad significativa de DMPA en los Estados Unidos (1, 108). Una polémica que continúa En hdln'icade planificación familiar del hospital McConnick, Tailandia, las mujeies hacen cola para obtener DMPA. Los inyectableshan sido utilizados en Taiiydia desde 1965. (Cortesíade E.B. McDaniel) La decisión de la US FDA en 1978 no puso fin a la controversia. Posteriormente durante ese mismo año, se descubrió cáncer uterino, aparentemente de origen endomePOPULATION REPORTS i trial, en 2 de 12 monos sometidos a autopsia, a los cuales se había administrado en pruebas toxicológicas una dosis de DMPA equivalente a 50 veces la dosis humana necesaria para efectos anticonceptivos (527). Hasta 1983 no se han establecido pruebas de mayores riesgos de cualquier tipo de cáncer en seres humanos que usan el DMPA (véase la pág. K-20). Quienes respalden el DMPA -principalmente promotores de planificación familiar y administradores de programas, científicos, médicos y la companía Upjohn, fabricante del Depo-Provera- sostienen que ni la investigación epidemiológica ni dos décadas de uso humano han demostrado que el DMPA cause efectos secundarios serios. Arguyen que los beneficios conocidos del DMPA contrarrestan cualquier riesgo potencial en el futuro. Desde 1979, varios grupos científicos nacionales e internacionales han apoyado el uso del DMPA: el Grupo de Estudios Toxicológicos (Toxicology Review Panel) del Programa Especial de Investigación, Desarrollo y Formación de Investigadores sobre Reproducción Humana de la Organización Mundial de la Salud (569, 577); el Grupo Internacional de Asesoramiento Médico (International Medical Advisory Panel) de la Federación Internacional de Planificación de la Familia (IPPF) (227, 228); el Comité Asesor Especial en Fisiología Reproductiva (Special Advisory Committee on Reproductive Physiology) de la Oficina Canadiense de Protección a la Salud, Departamento de Salud y Bienestar Nacional (Canadian Health Protection Branch, Department of National Health and Welfare) (609); el Colegio Norteamericano de Obstetricia y Ginecología (American College of Obstetrics and Gynecology) (21); el Comité de Fármacos de la Academia Norteamericana de Pediatría (Committee on Drugs of the American Academy of Pediatrics) (20) y el Grupo Consultor Ad Hoc sobre Acetato de Medroxiprogesterona de Depósito (Ad Hoc Panel), convocado a nombre de la Agencia para el Desarrollo Internacional (US AID) (4). El Grupo Ad Hoc, con una sola voz en contra, recomendó que la US AID suministre DMPA a las naciones que lo soliciten (4). Actualmente la US AID no distribuye DMPA porque no está aprobada para uso anticonceptivo por la US FDA. Los contrarios del DMPA desacuerdan. Los opositores son grupos de consumidores, ciertos grupos feministas como la Red Nacional de Salud para la Mujer (National Women's Health Network) de los Estados Unidos, algunos científicos, y grupos políticos que se oponen al financiamiento estadunidense de programas de planificación familiar en países en vía de desarrollo (181). Estos grupos manifiestan una variedad de preocupaciones. Algunos ponen énfasis en los riesgos de salud, especialmente el cáncer. Sostienen que los efectos secundarios conocidos del DMPA en mujeres, tal como las irregularidades menstruales, y las interrogantes planteadas por estudios en animales sobre el cáncer, son razones suficientes para limitar el uso del fármaco (94, 214, 286, 336). Señalan que efectos secundarios desusados pero serios de otros fármacos para mujeres sólo fueron descubiertos después de su uso masivo. Como prueba de efectos adversos, algunos opositores identifican a personas que han desarrollado diversos problemas de salud durante o después de usar el DMPA y que atribuyen estos problemas al fármaco (634). También se ataca la forma de administración inyectable. Hay quienes temen que el fármaco pueda ser 'administrado a mujeres que no sepan lo que es y sin su consentimiento bien fundamentado (informed consent) (214, 414, 548). Los opositores de DMPA también argumentan que, POPULATION REPORTS MSs de dos millones de mujeres actualmente usan Depo-Rovera (DMPA) como anticonceptivo. Una inyección de 150 mg de DMPA en uno o tres ml de líquido evita el embarazo eficazmente durante por lo menos tres meses. (Cortesía de la Upjohn Company) puesto que el fármaco es una inyección de duración prolongada, sus efectos -inclusive cualquier efecto secundario mayor o menor- no pueden detenerse rápidamente con sólo descontinuar su uso. El uso del DMPA en Estados Unidos se encuentra nuevamente en reconsideración. Dentro de los procedimientos de la US FDA, una Junta de Investigación Pública (Public Board of Inquiry) celebró una audiencia a petición de la compañía Upjohn en enero de 1983, para reconsiderar la negativa de la US FDA de aprobar el DMPA. Citada especialmente a reunión, dicha junta integrada por tres científicos, fue seleccionada conjuntamente por la Upjohn y la US FDA. Las recomendaciones de la junta serán estudiadas por el Comisionado de la US FDA, que emitirá la decisión final sobre la apelación de la'compañia Upjohn. Fuera de los Estados Unidos, los organismos reglamentarios de otros países han estudiado recientemente o estudian el DMPA. En 1981, la Junta Nacional Sueca de Salud y Bienestar (Swedish National Board of Health and Welfare) aprobó autorizar el DMPA para uso anticonceptivo (494). La Oficina Federal de Salud de la República Federal de Alemania, restringió el uso de DMPA y NET ENT en 1983. Los inyectables, que anteriormente contaban con aprobación incondicional, ahora no se pueden recetar a las mujeres que están lactando o a las que sufren de diabetes o anemia falciforme. En el Reino Unido, el Comité de Seguridad de Fármacos (Committee for the Safety of Medicines) (CSM) recomendó en 1982 una aprobación más amplia del DMPA (598), pero, al igual que en Estados Unidos, la decisión originó una controversia política. El Ministerio de Salud dejó sin efecto la recomendación del CSM (598). Hubo una audiencia de apelación en abril de 1983 (5%). Actualmente, el uso del DMPA está aprobado en el Reino Unido como anticonceptivo, exclusivamente para mujeres recién vacunadas contra la rubeola o para aquellas cuyos maridos recién se han hecho una vasectomía (227). En Egipto se ha autorizado el uso de DMPA y NET EN (están a la venta en el mercado desde principios de 1984) (651). El continuo debate sobre el DMPA ha planteado problemas más amplios respecto de la prueba y reglamentación de anticonceptivos y fármacos en general. Algunos de estos problemas son: iCuánta confianza se puede asignar a los estudios en animales? iQué animales deben ser utilizados? K-5 icuántas pruebas procedentes de estudios en humanos son necesarias para tomar una decisión reglamentaria, especialmente si los estudios en animales indican posibles efectos nocivos? iCuál es el papel de estudios pos-comercialización en seres humanos? iQuién debe llevar a cabo y pagar estos estudios? iQué proporción de incertidumbre en cuanto a p,o -si bles riesgos resulta aceptable habida cuenta de las ventajas de u n fármaco? Además de eficacia y seguridad, i q u é otros criterios deben ser la base d e decisiones reglamentarias? iDebe considerarse el número de usuarias potenciales? iCuán pertinente es la posibilidad de mal uso o abuso del fármaco? La controversia se extiende asimismo al campo internacional. Entre los problemas internacionales se cuentan los siguientes: o iQué importancia deben revestir las decisiones de organismos reglamentarios de países desarrollados, en particular la US FDA, en las decisiones de organismos reglamentarios de países en desarrollo o en progamas-de salud y planificación familiar? ~ e b i d o - la a decisión de 1978 de la US FDA y a la publicidad en torno a ella, muchos países en desarrollo han postergado la introducción del DMPA a los nacionales de planificación familiar o, en el caso de Zimbabwe, han descontinuado su uso temporalmente (134). iDeben los organismos donantes suministrar fármacos y otros productos, a petición de los países en desarrollo, si el producto n o está aprobado para su uso en el país donante? iDeben los organismos donantes nacionales tratar de limitar la acción de las organizaciones internacionales en cuanto a los métodos de planificación familiar que se suministran? USO Según encuestas e informes de los fabricantes, cerca de cuatro millones de mujeres actualmente usan alguna forma de anticonceptivo hormonal de larga duración. Casi todas usan inyectables, el único método de larga duración y amplia disponibilidad. En la República Popular de China, cerca de 200,000 mujeres utilizan una píldora mensual (395). Entre 100.000 y 150.000 mujeres de los Estados Unidos y Europa Occidental usan DlUs liberadores de progestinas (334). Otros anticonceptivos hormonales de larga duración -implantes, anillos vaginales y otros sistemas biodegradables- están aún en etapa de desarrollo o de prueba. Los anticonceptivos inyectables están legalmente permitidos y por lo tanto teóricamente disponibles en más de 100 países. Sin duda, el inyectable de mayor uso es el DepoProvera, marca comercial del DMPA de la compañía Upjohn. Entre 1978 y 1981 la compañía Upjohn vendió anualmente alrededor de 7 millones de dosis de Depo-Provera -cantidad suficiente como para abastecer a 1,75 millones de mujeres- y en 1982 las ventas ascendieron a 8 millones de dosis -suficiente para dos millones de mujeres(véase el Cuadro 1). Las ventas se distribuyen por igual entre países desarrollados y países en vía de desarrollo Las ventas del inyectable Noristerat han crecido rápidamente durante los últimos anos. Una inyección de un m1 que contiene 200 mg de NET EN es altamente eficaz como anticonceptivo cuando se administra cada dos meses. (Cortesía de la Schering AC) (527). Por otra parte, fabricantes de Italia y Europa Oriental producen y venden DMPA a compañías de Tailandia y otros lugares, quienes lo envasan para uso anticonceptivo y otras aplicaciones (49, 133, 394). En la actualidad, estos fabricantes suministran DMPA a cerca de 300.000 mujeres tailandesas -tres cuartas partes de todas las usuarias de DMPA en Tailandia- (53, 429). La Schering AG informa que se vendieron aproximadamente 1,4 millones de dosis de NET EN en 1982, lo suficiente para unas 275.000 mujeres durante un año (453). Por lo menos 1,l millones de mujeres, principalmente en China y América Latina, usan preparaciones inyectables mensuales que contienen progestinas y estrógenos (199, 307, 395). Información proveniente de encuestas recientes de muestras representativas (véase el Cuadro 2) y de fabricantes, así como otros cálculos, indican que los inyectables son más utilizados en Jamaica, Tailandia, Nueva Zelandia, México, Sri Lanka, China y Trinidad y Tabago. En otros países, donde el abastecimiento es a veces incierto, el uso es relativamente escaso, por lo regular, el 2 por ciento o menos de las mujeres casadas en edad de procreación (MCEP). Jamaica tiene el mayor porcentaje de usuarias de inyectables. El 11 por ciento de MCEP, o el 21 por ciento de todos los usuarios de anticonceptivos, usa Depo-Provera. El uso de inyectables casi se duplicó entre la Encuesta Mundial de Fecundidad (World Fertility Suwey) de 1975-76 y la Cuadro 1. Total de ventas al sector público y privado de Depo-Provera 150 y Noristerat, 1975-1982 (en miles de dosis) Año 1975 1976 ign 1978 1979 1980 1981 1982 Depo-Provera 4.386 4.079 4.766 7.041 6.880 7.028 6.788 8.0005 Noristerat 2 28 78 545 796 557 1 .O35 1.418 Nota: Las cifras sólo representan ventas de dosis anticonceptivas. 'Estimadas Fuente: Schering AC (453, 454, Upjohn lnternational Inc. (133) POPULATION REPORTS Encuesta de Prevalenciadel Uso de Anticonceptivos (Contraceptive Prevalence Survey) de 1979, subiendo del 6 por ciento de MCEP al 11 por ciento (84, 351). Durante el mismo período, los inyectables pasaron de ser el cuarto anticonceptivo más aceptado -precedido por los anticonceptivos orales, la esterilización femenina y los condones- a ocupar el segundo lugar, después de los anticonc e p t i v o ~orales. En un estudio reciente de los registros de clínicas de planificación familiar, que son la fuente primaria de inyectables, se determinó que, en 1971, el DepoProvera fue el método preferido del 11 por ciento de las nuevas usuarias, mientras que en 1976 lo fue del 34 por ciento (34). El Depo-Provera lo suministran los programas de planificación familiar en Jamaica fundamentalmente mediante el Fondo de las Naciones Unidas para Actividades en Materia de Población (FNUAP), y en pequeña cantidad mediante la Federación Internacional de Planificación de la Familia (IPPF). El DMPA se ha usado en Tailandia durante aproximadamente 20 años y, según la Encuesta de Prevalencia del Uso de Anticonceptivos, el 7 por ciento de las MCEP usa inyectables en la actualidad (245). Los inyectables son el tercer anticonceptivo en orden de popularidad, después de la esterilización femenina y los anticonceptivos, orales. Tienen más aceptación entre las mujeres más jóvenes. Entre mujeres usuarias de anticonceptivos de 15 a 25 años, alrededor del 20 por ciento utiliza inyectables, frente a un uso de menos del 10 por ciento entre las usuarias de anticonceptivo~de 40 a 49 años, según la encuesta. En 1972,6.000 de 457.000 nuevas usuarias dentro de programas de planificación familiar -o el uno por ciento- optaron por inyectables, según estadísticas gubernamentales. Hacia 1981, 170.000 de 1.125.000 nuevas usuarias -o el 15 por ciento- optó por inyectables (429). Aunque hay disponibilidad de NET EN y preparaciones mensuales, el DMPA es con mucho el inyectable más utilizado. Nueve compañías distintas envasan y comercializan DMPA en Tailandia (53). En Nueva Zelandia, el Depo-Provera ha estado disponible comercialmente desde 1968 (401). Las ventas aumentaron en forma constante hasta mediados de los años setenta y luego se estabilizaron en cerca de 80.000 dosis anuales (suficiente para 20.000 mujeres) entre 1977 y 1981 (226). Esta cifra corresponde aproximadamente al 4 por ciento de las MCEP (542), que podría ser el mayor nivel de uso en cualquier país desarrollado. Cuadro 2. Porcentaje de mujeres casadas en edad d e procreación que usan anticonceptivos inyectables, según encuestas d e muestras representativas, 1971-81 % de usua- - Región v No de país o zona ref. Aíio AFRICA Y MEDIO ORIENTE Kenva 257 1977-78 lesotho 285 1977 Mauricio 208 1975 Siria 289 1978 Sudán 289 1978 (Norte) Turquía 201 1978 ASIA Y PACIFICO Bangladesh 37 37 Corea, 84 Rep. de Fiji 84 Filipinas 84 Hong Kong 215 lndonesia 84 Malasia 84 Sri Lanka 84 Tailandia 84 351 245 rias de an% que usa ticonceptiCualquier Invec- vos que usan método tables inyectablesa 9 7 46b 23 5 50 13 19 35 41 36 71 26 33 32 32 53 59 Nota: Los niveles de uso revelados por las Encuestas de Prevalencia del Uso de Anticonceptivos fueron cero en Túnez, 1979 (351); Rep. de Corea, 1979 (351); y 8 estados de Brasil, 1978-81 (350, 351, 628): y por la Encuesta Mundial de Fecundidad en Senegal, 1978 (289); Pakistán, 1975 (84); Guyana, 1975 (84); y Venezuela, 1977 (532). Los datos de las Encuestas de Prevalencia del Uso de Anticonceptivos (118, 245, 351) a excepción de Bangladesh (37) excluyen duchas, abstinencia, y "otros" del total de usuarias de anticonceptivos; los datos de la Encuesta Mundial de Fecundidad (84, 201,215,257, 285, 289, 385,515) y Encuesta de Prevalencia del Uso de Anticonceptivos en Bangladesh (37) incluyen estos métodos; datos de la encuesta en Mauricio (208) incluyen la abstinencia y el aborto; datos de las encuestas en Bélgica (91, 92) incluyen ducha. Las mujeres objeto de las encuestas viven actualmente en unión consensual (America Latina y el Caribe) o casadas (en otras partes), entre 15 y 44 POPULATION REPORTS % de usua- rias de anticonceptiCualquier Inyec- vos que usan método tables inyectables' % que usa Región y No de país o zona ref. EUROPA Bélgica (sólo Flandes) 91 92 Año 1971 1975-76 AMERICA LATINA Y EL CARIBE 84 1976 Colombia 351 1978 118 1980 Costa Rica 84 1976 351 1978 118 1980 El Salvador 351 1978 Guatemala 351 1978 Jamaica 84 1975-76 351 1979 México 84 1976-77 351 1978 Panamd 84 1976 351 197940 Paraguay 351 1977 385 1979 Perú 84 1977-78 República 84 1975 Dominicana Trinidad y 515 1977 Tabago años o entre 15 y 49 años. Las excepciones son: Lesotho, Sudán, Siria, Turquía, Haití, y Trinidad y Tabago, donde las mujeres encuestadas estaban actualmente viviendo en unión consensual o casadas, entre 15 y 44 años entre 15 y 49 años, fértiles y no embarazadas (incluida esterilización voluntaria de la mujer o del marido); Mauricio, donde las mujeres alguna vez casadas menores de 50 años fueron encuestadas; Bélgica, donde mujeres casadas entre 30 y 34 años fueron encuestadas en 1971 y entre 16 y 44 años fueron encuestadas en 1975-76; y Costa Rica, donde las mujeres encuestadas en 1976 estaban en unión consensual, entre 20 y 44 años. "Como las cifras han sido redondeadas, no pueden ser derivadas de aquellas de las columnas anteriores. bExcluye la esterilización. Todas las otras encuestas incluyen esterilización voluntaria de la mujer o del marido. K-7 En México la Encuesta de Prevalencia del Uso de Anticonc e p t i v o ~determinó que 3 por ciento de MCEP usa inyectables. Esta cifra significa casi 300.000 mujeres (542) o aproximadamente el 7 por ciento de todas las usuarias del mundo. Los productos disponibles incluyen el Depo-Provera; el NET EN, comercializado por la Schering AG como Noristerat y por Syntex lnternational S.A. como Syngestal; y dos preparaciones de uso mensual: 150 mg la acetofenida de dihydroxiprogesterona (DHPA) con 10 m g de enantato de estradiol y 75 mg DHPA con 5 mg enantato de estradiol que comercializan por l o menos ocho fabricantes diferentes (199). La mayoría de las usuarias obtiene los inyectables en las farmacias. Se los ponen personas que sin entrenamiento formal se especializan en aplicar inyecciones (199). Entre julio de 1981 y junio de 1982, las ventas comerciales d e Depo-Provera fueron suficientes para 21.000 mujeres; las ventas de Noristerat, para 16.000 mujeres; las de Syngestal, para 7.000 mujeres; y las ventas de todos los inyectables de uso mensual, para más de 200.000 mujeres (199). Por otra parte, el FNUAP y la IPPF suministran Depo-Provera a programas de planificación familiar de México (76, 521). En Sri Lanka el uso de Depo-Provera ha aumentado recientemente hasta u n nivel importante. El Depo-Provera fue introducido en forma limitada por la Asociación de Planificación Familiar de Sri Lanka (FPASL) en 1968 (42). Durante muchos años su uso fue escaso. De acuerdo con la Encuesta Mundial de Fecundidad de 1975, menos del 0,5 por ciento de MCEP estaban usando inyectables (véase el Cuadro 2). A mediados de los años setenta, la FPASL hizo disponible DMPA, obtenido de la IPPF y el FNUAP, en todas las clínicas. Hacia 1977, el número de nuevas usuarias aumentaba rápidamente (638). Desde 1981, más del 70 por ciento de todas las nuevas usuarias de métodos reversibles en clínicas de la FPASL eligió Depo-Provera (42). N o es posible determinar la prevalencia de uso total hasta tanto n o se realice otra encuesta a nivel nacional. (De manera similar, en Indonesia, mientras aproximadamente el 4 por ciento de todas las usuarias de anticonceptivos usa inyectables, las últimas cifras del programa nacional demuestran quecerca del 20 por ciento de todas las nuevas usuarias elige inyectables (522).) En la República Popular de China las cifras de producción de 1979-80 sugieren que aproximadamente 800.000 mujeres, o el uno por ciento de todas las usuarias de anticonceptivo~,usa u n inyectable mensual. E l inyectable, producido por el gobierno chino, consiste de 250 mg de la progestina caproato de 17-hidroxiprogesterona y 5 mg del estrógeno valerato de estradiol. En 1984 empezará a funcionar una nueva instalación de inyectables, construida con ayuda del FNUAP, que fabricará lo suficiente como para otros 2,5 millones de mujeres anualmente (394, 395). También se utiliza en China píldoras mensuales que contienen distintas hormonas. La producción es suficiente para más de 200.000 mujeres al año (395). El millón de mujeres chinas estimadas como usuarias de la inyección mensual o de la píldora mensual, representan alrededor de una cuarta parte de todas las mujeres usuarias de anticonceptivo~hormonales de duración prolongada en el mundo. iPor qué se usan tan frecuentemente los inyectables en estos seis países y n o en todas partes?La disponibilidad de ---abastecimientos y apoyo médico de este método dentro \ de programas de planificación familiar en el sector privado y guber'namental son probablemente las razones más im- portantes, toda vez que los estudios demuestran que una alta proporción de mujeres utilizarán el método S-¡se les da a escoger (véase la pág. K-24). Abastecimientos de organismos donantes Aunque la US AID no suministra ningún inyectable, otros organismos donantes l o hacen. La IPPF y el FNUAP son los donantes principales (véase el Cuadro 3). - Cuadro 3. Suministros de anticonceptivos inyectables' por organismos donantes, por región y ano, 1975-1982 (en miles de dosis) Región y Donante AFRICA IPPF SlDA RU ODA FNUAP Vecinos Mundiales 1979 1980 1981 280.0 165.5 1 1 2 ; ~ 60,O 1,0 9,O 108,7 122,l 197,9 Subtotal 402,O 334,2 ASIA Y PACIFICO ClDA 600.0 1.000,O IPPF 1.261;9 334,7 89,O 3,s SIDA RU ODA 64,s FNUAP' 580,6 394,2 Banco Mundial (pré~tamo)~ Vecinos 3,s 25,O Mundiales 1975-78 - - Total 1982 1975-82 - - - 11,O 14,4 - 260,Sb 1.026,O - 172,O 1,o l,Sb 144,7 2,o 2,o 133,l 212,3 264,0b 1.345,7 400,O 263,7 150,O 110,8 - 2.000,o 150,8~ 2.121,9 242,s 64,s 164,7b 1.627,O - 1.580,O - - - 195,O 292,5 400,O 1.180,O 21,O - - - 49,s Subtotal 2.599,51.757,41.429,71.583,3 315,3b 7.685,4 EUROPA - 29,l 3,l 3,3 35,s FNUAPc AMERICA LATINA Y EL CARIBE 346,O 32,7 38,7 28,3 52,gb 498,6 IPPF OPS - 108.4 4.3 4.8 ND 117,5 FUANP~ 76,4 398;6 13;9 83;0 l,gb 573,8 Vecinos 2,o 2s' Mundiales - - Subtotal 422,4 539,7 56,9 116,1 MEDIO ORIENTE Y NORTE DE AFRICA 68,5 12,O 15,O 18,O IPPF 56Jb 1.191,8 14Jb 128,3 TOTALES ORGANISMOS ClDA 600,O 1.000,O IPPF 1.956,4 W , 9 OPS - 108,4 SlDA 201,O 63,5 RU ODA 65,s FNUAP' 666,O 930,7 Banco Mundial (pré~tarno)~ 3,s 25'0 Vecinos Mundiales TOTAL 3.492,4 2.672,5 1.637,8 1.933,O 651,1b 10.386,7 N D = no disponible 'Acetato de medroxiprogesteronade depósito, excepto aproximadamente un 10% de enantato de noretindrona (NET EN) en 1981-82 suministrado por el FNUAP (30) y 5% de NET EN en 1980 de suministros de Vecinos Mundiales (117). "Cifra estimada 'Cifra estimada de gastos a razón de US$1,00 por dosis (521) dLas cifras representan dosis compradas con un préstamo del Banco Mundial. Fuentes: Agencia Canadiense para el Desarrollo Internacional (CIDA) (377); Federación lnternacional de Planificación de la Familia (IPPF) (76); Organización Panamericana de la Salud (OPS) (483); Agencia Sueca para el Desarrollo lnternacional (SIDA) (140); Administración de Desarrollo Exterior, Reino Unido (RU ODA) (524); Fondo de las Naciones Unidas para Actividades en Materia de Población (FNUAP) (641); Banco Mundial (412); Vecinos Mundiales (117). 1 POPUlATlON REPORTS La cantidad de inyectables suministrados por organismos donantes llegó a u n máximo en 1979, al alcanzar 2,7 millones de dosis (véase el Cuadro 3). Desde entonces ha disminuido, en parte porque los programas en Tailandia han estado comprando parte o todo el DMPA en forma independiente. Tailandia era el mayor beneficiario de abastecimientos de los organismos donantes, recibiendo más de la mitad de todos esos abastecimientos entre 1978 y 1981. Contribuyó a la transición de donaciones a compras u n préstamo del Banco Mundial para adquisiciones en 1980 y 1981 (412). La IPPF, actualmente el mayor abastecedor de inyectables, ha estado suministrando Depo-Provera durante más de diez años a asociaciones de planificación familiar miembros, en países en desarrollo que lo han solicitado. Desde 1975, la IPPF ha suministrado casi 4 millones de dosis. En 1983 la IPPF también comenzó a suministrar Noristerat (76). El FNUAP ha provisto aproximadamente 2,7 millones de dosis inyectables, principalmente Depo-Provera, desde 1974. Más del 60 por ciento de estos suministros se enviaron a cuatro países: Bangladesh, Jamaica, Pakistán y Tailandia (641). La Oficina Panamericana de la Salud (OPS) ha suministrado Depo-Provera y10 Noristerat a ocho países centroamericanos y del Caribe entre 1979 y 1981. La mayoría de las remesas fueron pequeñas, a excepción de una de 100.000 dosis de Noristerat a México, en 1979 (483). Vecinos Mundiales (World Neighbors), una pequeña organización n o gubernamental, ha suministrado aproximadamente 50.000 dosis de inyectables, principalmente DepoProvera, desde 1976. La mayoría de estas remesas ha sido destinada a lndonesia y las Filipinas (117). Otros organismos donantes han seguido políticas distintas en cuanto al suministro de inyectables. La US AID no provee inyectables porque su uso n o está aprobado en Estados Unidos por la US FDA. El único método hormonal de duración prolongada aprobado hasta la fecha por la US FDA es el DIU Progestasert. El Banco Mundial, mediante un préstamo, y la Agencia Canadiense para el Desarrollo Internacional (Canadian lnternational Development Agency) (CIDA) suministraron DMPA a Tailandia en el pasado, pero generalmente no proporcionan anticonceptivos de ningún tipo (377, 412). La Administración de Desarrollo Exterior (Overseas Development Administration) (ODA) del Reino Unido recientemente n o ha suministrado Depo-Provera, aunque generalmente está dispuesta a hacerlo, como parte de sus proyectos de población (254, 255). La Agencia Sueca para el Desarrollo Internacional (Swedish lnternational Development Authority) (SIDA) dejó de suministrar DMPA en 1980. En 1982, en medio de una considerable controversia pública, la SIDA adoptó una política oficial contraria al abastecimiento de DMPA, n o obstante que en 1981, la Junta Sueca de Salud y Bienestar (Swedish Board of Health and Welfare) lo había aprobado para uso contraceptivo en Suecia (494). U n funcionario del SlDA ha afirmado que la razón de la decisión "no fue médica, sino el hecho de que sería difícil y costoso controlar su uso adecuado en zonas rurales de países en desarrollo" (491). En general, las cantidades de anticonceptivos que suministran los donantes fluctúan de año en año, porque los grandes envíos están destinados a durar varios años. N o obstante, desde 1979 han disminuido los suministros de inyectables de donantes internacionales, con excepción de la IPPF. Fuera del caso de Tailandia, estas disminuciones pueden reflejar en parte la sensibilidad de los gobiernos a POPULATION RERORTS preocupaciones políticas, mientras que los suministros de la IPPF en general responden a solicitudes de asociaciones de planificación familiar a fin de satisfacer necesidades clínicas y las preferencias de las usuarias. EFICACIA Tanto el DMPA como el NET EN son métodos anticonceptivos muy eficaces. Con regímenes de 150 mg de DMPA cada tres meses o 200 mg de NET EN cada dos meses, es La farmacología de los inyectables Tanto el DMPA como el NET EN tienen una acción de duración prolongada tras una sola inyección. Comparado con el DMPA, el NET EN se metaboliza más rápidamente, y la fertilidad retorna más rápidamente. Sin embargo, con respecto a ambos fármacos la tasa de metabolismo varía mucho entre mujeres. El DMPA es la forma inyectable de depósito de la progestina acetato d e medroxiprogesterona (17-a-acetoxi-6a-metilpregn-4-ena-3,20-diona), una progestina derivada de la hormona natural progesterona. El DMPA se prepara en una suspensión microcristalina, que retrasa la absorción de la hormona después de una inyección. En una semana, después de una inyección de 150 mg, los niveles de acetato de medroxiprogesterona (MPA) llegan a su máximo, oscilando entre 1,O a 6,8 ng por ml de suero (155, 156, 157, 237, 556). Los niveles séricos permanecen elevados durante dos o tres meses y después disminuyen paulatinamente (384). (Véase la Figura 1, pág. K-12). El MPA puede ser indetectable en el suero a los 55 días de una inyección, pero generalmente puede ser detectado durante cerca de seis meses o más (156, 157, 263, 384, 520). Los niveles séricos de MPA n o se acumulan con el uso a largo plazo del inyectable en dosis anticonceptivas. De acuerdo con un estudio, los niveles promedio de MPA, 90 días después de una inyección, fueron muy similares en mujeres que habían recibido 8 inyecciones y en mujeres que habían recibido solo una (269). El enantato de noretindrona (17-hidroxi-19-nor-17apregn-4-en-20-yn-3-ona enantato), progestina derivada de testosterona, se prepara en una solución aceitosa. A diferencia de la suspensión microcristalina utilizada para el DMPA, las soluciones aceitosas no tienen un tamaño de partícula fijo. Como resultado, la tasa de liberación desde el lugar de la inyección y a la circulación puede variar mucho. Una vez inyectado, el NET EN debe ser convertido en noretindrona (NET) en el cuerpo, antes de hacerse biológicamente activo (152). Los niveles séricos de NET llegan a su máximo una semana después de la inyección y fluctúan de 4 a 26 nglml (180, 448, 552, 557). Después, los niveles séricos disminuyen constantemente y por l o general n o son detectables a los 2%a 4 meses después de una inyección (152, 154, 157, 550, 552, 557). posible que menos de una mujer entre 100 conciba en un año. En consecuencia, los inyectables actualmente disponibles resultan tan eficaces como los anticonceptivos orales combinados de estrógenos y progestinas que se toman regularmente y mucho más eficaces que los DIUs. general tasas de embarazos levemente superiores, aunque con una gama de embarazos de O a 3,6 por 100 añosmujer (86, 249, 260, 299, 305, 316, 325, 378,416, 459, 590). No se han efectuado comparaciones bien controladas de los regímenes de 3 a 6 meses (164). Las progestinas inyectables evitan el embarazo de varias maneras. Funcionan principalmente al: inhibir la ovulación en la mayoría de las mujeres (154, 180,184, 236, 337, 503, 550, 557). Quizá tambien surtan efecto al: producir u n moco cervical escaso y espeso, que crea consecuentemente una barrera para los espermatoz o i d e ~(304, 344,411, 589), hacer que el endometrio sea menos adecuado para la implantación de u n óvulo fertilizado (304,305, 344), y cambiar la velocidad de transporte del óvulo a través de los oviductos (75, 305, 589). El NET EN en dosis de 200 mg resulta más eficaz cuando las inyecciones se administran a intervalos más cortos. En estudios sobre inyecciones con intervalos de 12 semanas o 90 días generalmente se informan tasas de falla anticonceptiva de hasta 5 embarazos por 100 años-mujer (89,258, 304,419,570, 590) y, en algunos casos, incluso superiores (495). Los embarazos ocurrieron generalmente en el tercer mes después de la primera o segunda inyección (258,570). N o obstante, con un intervalo de ocho semanas entre las inyecciones, las tasas de embarazo calculadas por el método actuarial de tablas de vida (life-table pregnancy rate) oscilan entre el O y el 0,7 por 100 mujeres al año (177,218, 579). También se ha administrado NET EN en una dosis de 20 mg mensuales, con una tasa de embarazos en un año del 0,2 entre 200 mujeres en la India (407). Se ha administrado DMPA en distintos regímenes de dosificación, todos los cuales evitan de igual manera la concepción. En la mayoría de los estudios de mayor alcance, que abarcan más de 18.000 años-mujer de uso del régimen normal -150 mg cada tres meses- las tasas de embarazo son inferiores a uno por 100 años-mujer (59, 65, 85, 89, 129, 284, 290, 326, 405, 460, 465, 570, 579, 590). Solamente un pequeño estudio arrojó una tasa mucho más alta (495). En otros términos, los embarazos no ocurren casi nunca durante el período de tres meses posterior a la inyección. Recientes estudios de alcance limitado indican que dosis menores de DMPA -100 mg o 75 mg cada tres meses- tienen la misma eficacia que la inyección de 150 mg (156,579). Investigaciones sobre regímenes de 6 meses con 250, 300, 400 o 450 mg de DMPA demuestran por lo La OMS ha realizado en varios centros dos ensayos aleator i o para ~ comparar DMPA y NET EN (véase el Cuadro 4). Se puso término al primer ensayo antes de completarse, porque la tasa de embarazos con NET EN administrado a intervalos de 12 semanas fue muy alta: 3,6 por 100 mujeres en 36 semanas. La tasa de embarazos con el régimen normal de DMPA fue del 0,7 (570). Se llevó a cabo una segunda prueba, en parte para estudiar otros posibles regímenes de NET EN, usando en cada uno inyecciones de 200 mg. En el primero se administró NET EN cada ocho semanas. La tasa de embarazos a los 24 meses fue del 0,4. En el segundo se administró NET EN cada ocho semanas Cuadro 4. Estudios comparativos del acetato de medroxiprogesterona de depósito (DMPA) y el enantato de noretindrona (NET EN) como anticonceptivos inyectables, realizados en varios centros por la 0rganización~undial.dela Salud (OMS) Tasas de abandono del método ~ o 100 r muieres' ~ o r : Autor y fecha node ref. Meses de estudio Fármaco Dosis Toda Otras Causas Tasas Node causa causas no de contimujeres médica Embarazo Sangrado Amenorrea médicas médicas nuación OMS 1977 (570) DMPA 150 rngi 12 serns. NET EN 150 rngi 12 sems. OMS 1982, 1983 (574, 580) DMPA 150mgi 90 días NET EN 200 rngi 60 días NET EN 200 mgi 60-84 díasd 90 días NET EN 200 rngi 60 días NET EN 200 mgl 60-84 días ND = no disponible 'Tasas brutas calculadas según el método actuarial de tablas de vida (gross life-table rates) bCuando el estudio fue descontinuado, aproximadamente el 20 por ciento de las mujeres que utilizaban uno u otro inyectable habían completado un atio de uso. Aproximadamente el 40 por ciento completó por lo menos 'YK:10 9 meses. Las tasas de embarazos parael NET EN fueron iguales a los 9 y 12 meses de uso. =Diferenciaestadisticamente significativa en relación al DMPA. dLas mujeres de este grupo recibieron 200 mg de NET EN cada 60 días por 6 meses, posteriormente 200 mg cada 84 días. POPULATION REPORTS 1 I k .l durante 6 meses y luego cada 12 semanas; la tasa de embarazos fue de 1,4 a los 24 meses. En comparación, la tasa de embarazos con el uso de DMPA fue de sólo el 0,2 (574). La OMS concluyó que los tres regímenes son aceptables. El régimen de 8 semanas de NET EN parece ser algo más eficaz que el régimen de 8 a 12 semanas, pero tiene la desventaja de exigir inyecciones más frecuentes, mayor costo y una administración de fármacos mayor (580). La eficacia de los inyectables, especialmente del NET EN, puede variar probablemente según: el momento de la inyección respecto del ciclo menstrual, la tasa de metabolismo del fármaco, el peso de la mujer, la técnica de inyección. Para asegurarse de que la mujer no está embarazada en el momento de la inyección, se recomienda administrar los inyectables durante los primeros 5 a 7 días de su ciclo menstrual (227,569). Por lo demás, las inyecciones que se administran temprano durante el ciclo pueden ser más eficaces para prevenir concepciones posteriores. Entre 7.930 mujeres tailandesas usuarias de DMPA, la tasa de embarazos después de una inyección aplicada durante los primeros ocho días del ciclo fue de 1,6 por ciento, frente al 6,2 por ciento de aquellas que recibieron una inyección después del noveno día, una diferencia estadísticamente significativa (190). Algunos de estos embarazos pudieron haber ocurrido antes de que las mujeres recibieran sus inyecciones. En un estudio tailandés reciente, sin embargo, se indica que el DMPA administrado después de la primera semana del ciclo menstrual no siempre evita la ovulación durante ese ciclo. De 24 mujeres inyectadas durante el noveno o décimoprimer día del ciclo, 5 ovularon más tarde durante el mismo ciclo. De 25 inyectadas durante la primera semana de sus ciclos ninguna ovuló (472). Los factores que rigen la tasa de metabolismo de las hormonas anticonceptivas no se conocen a fondo. Mujeres de distintos grupos de población pueden metabolizar una progestina iñyectable á tasas marcadamente diferentes (51, 157). Por ejemplo, después de una inyección de 150 mg de DMPA, mujeres de la India ovularon dentro de 2% meses, mientras que mujeres suecas no ovularon durante por lo menos cinco meses (157). En otro estudio, mujeres hindúes y tailandesas tardaron en promedio el doble que mujeres brasileñas en reanudar su ovulación, después de una inyección de NET EN de 200 mg (51). No está claro si el peso tiene influencia sobre el metabolismo hormonal. En la primera prueba comparativa de la OMS, las usuarias de NET EN que quedaron embarazadas pesaban significativamente menos, en promedio, que las mujeres que no concibieron. No hubo diferencias entre usuarias de DMPA (570). En un estudio de pequeño alcance en Tailandia se descubrió que el peso no afectaba el metabolismo de hormonas o el retorno de la ovulación (155). e Resulta esencial una cuidadosa técnica de inyección, tanto con el DMPA como con el NET EN. Si no se succiona todo el fármaco del envase con la jeringa, la dosis puede ser inadecuada. Las ampollas que contienen DMPA deben ser vigorosamente agitadas para evitar que cualquier sedi-' mento se deposite en el fondo del envase. El NET EN se administra en una solución aceitosa y viscosa, difícil de POPULATION REPORTS Otros usos de DMPA Fuera del uso como anticonceptivo, el DMPA o su forma oral, el MPA, ha sido utilizado para tratar una gran variedad de afecciones (164). Es un tratamiento reconocido para cáncer primario y metastático del endometrio. En Estados Unidos es aprobado para el tratamiento paliativo de cáncer endometrial y renal (528). El cáncer a las mamas también ha sido tratado con MPA, pero no está clara su eficacia para este uso. El MPA también se utiliza en EE.UU., Europa, Australia, y otras partes para la endometriosis (162). En los Estados Unidos, el MPA a veces es utilizado para tratar la pubertad precoz, y ha sido utilizado solo o en combinación con estrógenos para la terapia de reemplazo hormonal de la postmenopausia (67, 171, 352, 357, 492). En los hombres el DMPA combinado con testosterona ha sido estudiado como un anticonceptivo, pero es incierto si alguna vez será utilizado para este objetivo (35, 392) (véase la pág. K-33). El DMPA en dosis muy altas ha sido estudiado como una manera de disminuir los niveles de testosterona en hombres cuya conducta sexual es anormal (169, 348). succionar y evacuar con una jeringa. Se recomienda entibiar la ampolla (152). Si el fármaco no se inyecta profundamente dentro del músculo o si se masajea el lugar de la inyección, se puede acelerar la liberación del fármaco desde el punto inyectado, acortándose el período de eficacia anticonceptiva (579). Las inyecciones de DMPA se aplican generalmente en el brazo; las de NET EN en las nalgas. EFECTOS SECUNDARIOS Los trastornos menstruales son el efecto secundario más común y molesto de los inyectables de sólo progestinas. Otros efectos secundarios frecuentemente manifestados son el aumento de peso y las cefaleas. Los inyectables parecen tener menos efectos en el sistema circulatorio que los anticonceptivos orales. Se han informado pocos cambios metabólicos con el uso de DMPA: un leve aumento de los niveles de insulina y una disminución de lipoproteínas de alta densidad. La importancia clínica de estos cambios no está clara, ni se han notado problemas clínicos afines. Para algunas mujeres, el DMPA puede ofrecer beneficios importantes fuera de la anticoncepción. Por ejemplo, según un estudio preliminar pareciera que el DMPA tiene un efecto beneficioso sobre la anemia falciforme. Alteraciones del ciclo menstrual La mayoría de las mujeres presenta algunas alteraciones del ciclo menstrual mientras usa los inyectables. Los patrones menstruales normales pueden ser remplazados por amenorrea (ausencia de sangrado), sangrado irregular o "manchado", o cambios en la frecuencia, duración o cantidad de la pérdida de sangre. Generalmente, más de dos tercios de las mujeres que usan DMPA y la mitad de las usuarias de NET EN no tienen ciclos regulares durante el K-11 primer año de uso (10, 85, 86, 261, 495, 571). Los efectos menstruales dependen del tiempo de uso. El sangrado intermenstrual y el manchado disminuyen con el tiempo (10, 571), mientras que la amenorrea aumenta. (Véanse las Figuras 2 y 3.) En estudios recientes, aproximadamente del 6 al 25 por ciento de las mujeres dejaron de usar inyectables durante el primer año, debido a cambios en los patrones del sangrado menstrual (570, 580). El DMPA causa más sangrado y manchado y más ameno: rrea que el NET EN. Con el DMPA ocurren más frecuentemente episodios de sangrado y manchado que duran más de diez días (571). N o obstante, en las dos pruebas comparativas de la OMS, las tasas de abandono del método debido a sangrado irregular fueron muy parecidas, aproximadamente del 9 al 15 para el DMPA y alrededor del 10 al 13 para el NET EN después de un año (570,571,580). Puede registrarse amenorrea de 90 o más días de duración en hasta el 55 por ciento de las usuarias de DMPA y el 34 por ciento de las usuarias de NET EN al final del primer año de uso (571, 527). En la primera prueba de la OMS, en que ambos inyectables fueron administrados a intervalos de 90 días, la tasa de abandono del método por razones de amenorrea fue del 11,5 con el DMPA y del 1,8 con el NET EN. En la segunda prueba de la OMS, en que se administró NET EN cada 60 días, se cuadruplicaron los abandonos por amenorrea, pero aún así fueron menos frecuentes que con el DMPA (580) (véase el Cuadro 2). A pesar de que la amenorrea puede causar preocupación a algunas mujeres, la disminución de la pérdida de sangre puede tener el efecto beneficioso de reducir las posibilidades de contraer anemia. La hemorragia, posible riesgo para la salud, es rara (193, 261, 266, 389, 527, 568, 576). Por ejemplo, en la primera prueba realizada por la OMS en varios centros, sólo 6 de 1.214 mujeres, o el 0,5 por ciento, necesitaron tratamiento por hemorragia abundante o prolongada durante 13,800 meses-mujer de uso (576). Figura 1. Niveles de hormona en el suero sanguíneo de usuarias de tres métodos anticonceptivos INYECTARLE DE URCA I\-'o~ AMICONCEFWVO ORAL I Tanto con el NET EN como con el DMPA, los cambios en los patrones menstruales son en general impredecibles. La amenorrea parece ser más común en usuarias de DMPA de más peso, pero n o así en las usuarias de NET EN (300, 571, 580). Tanto las usuarias de NET EN que experimentan sangrado irregular como las que n o lo sufren, presentan el mismo perfil hormonal (579). Tratamiento del sangrado Los intentos por evitar irregularidades del sangrado causadas por inyectables de sólo progestinas son, en general, insatisfactorios. Aunque antes se usaban extensivamente los suplementos rutinarios de estrógenos (59,85,129,200, 221, 223, 233, 275, 304, 313, 325, 379, 405, 419, 465, 5891, ningún estudio controlado ha demostrado reducir o evitar alteraciones menstruales (164, 266, 527, 569). En u n reciente estudio aleatorio doble ciego en Tailandia, las usuarias de DMPA que tomaban el estrógeno suplementario quinestrol y mujeres a quienes se administraba u n placebo, n o registraron diferencias en los patrones de sangrado o en las tasas de abandono debido a alteraciones menstruales (388). N o se han estudiado otros estrógenos. La mayoría de los clínicos n o recomiendan actualmente el uso rutinario de ningún suplemento de estrógenos junto con los inyectables (266,569). Los estrógenos suplementarios contrarrestan algunas de las ventajas de los inyectables. Las mujeres deben recordar que es necesario tomar una píldora. Además, los estrógenos pueden causar mareo y náuseas y ocasionar riesgos de la formación de coágulos de sangre (266). El asesoramiento antes y durante el uso puede ser más útil para alentar su continuación que la administración de estrógenos (221, 569). En tanto que el manchado y la amenorrea n o debieran ser tratadas rutinariamente, el sangrado prolongado y copioso -que ocurre infrecuentemente- requiere atención médica. Una publicación de la OMS recomienda que la mujer afectada por sangrado prolongado y10 copioso debe ser examinada en primer lugar en búsqueda de causas del sangrado ajenas al inyectable. Sugiere 25 p g de estradiol, una tableta tres veces al día durante tres días, para sangrado moderado y prolongado o para sangrado copioso en una usuaria de DMPA o NET EN. Si esto resultara ineficaz o si la mujer inicialmente se queja de un sangrado muy copioso, se le debe administrar una inyección de 5 mg de cipionato de estradiol en suspensión aceitosa. La dosis debe ser repetida una vez si el sangrado n o cesa dentro de 24 horas. Si el sangrado continúa, se debe considerar la dilatación y el curetaje (569). La compañía Upjohn recomienda tratar el sangrado muy profuso y prolongado con 0,05 a 1,O mg de etinil estradiol oral por 7 a 21 días. Si la sangre no disminuye en uno o dos ciclos, la mujer debe usar otro método anticonceptivo (527). Aumento de peso La representación esquemática de los niveles de hormona en el suero sanguíneo ilustra las diferencias entre inyectables, implantes y anticonceptivos orales diarios. Inmediatamente después de una inyección el nivel sérico aumenta rápidamente. Después disminuye paulatinamente con el transcurso del tiempo. Un implante libera hormona a una tasa bastante constante y por consiguiente los niveles séricos se mantienen constantes. Por otro hdo, las preparaciones orales deben ser tomadas diariamente porque las hormonas se metabolizan rápidamente. Por lo tanto ios niveles séricos fluctiian diariamente.'(~ortesiade Henry Gabelnick) A pesar de que hasta u n cuarto de las usuarias de inyectables pueden perder peso, la mayoría de las mujeres aumentan d e peso. E l aumento promedio d e peso es pequeño, y varía en distintos estudios desde menos de 1 kg hasta 5 kg durante el primer año de uso (17, 86, 95, 218, 249, 353, 571, 580). N o obstante, hay mujeres que aumentan mucho más de peso (39, 205, 249, 284). Con DMPA administrado cada tres meses y NET EN cada dos meses, el aumento de peso es parecido (580). Algunos investigadores han descubierto que el aumento de peso con DMPA se nivela después del primer año de uso (89, POPULATION REPORTS 205,592). Otros informan de u n aumento lento y continuo (39, 300, 440, 460). Las razones del aumento de peso no son claras. El peso adicional parece obedecer a u n aumento de grasa corporal y n o a retención de líquidos. Los investigadores suponen que el DMPA estimula el centro de control del apetito del hipotálamo en el cerebro, de suerte que las mujeres comen más de l o común (19). En mujeres desnutridas este efecto podría ser beneficioso, si pudieran conseguir mas alimentos. Figura 2. Porcentaje de mujeres usuarias de DMPA O NET EN que tuvieron amenorrea por más de 90 días, por período de uso 0DMPA (régimen d e 90 días) V//I NET EN (régimen d e 80 días) 0NET EN (régimen d e 60184 días*) Efectos cardiovasculares A diferencia de los anticonceptivos de estrógenos y progestinas combinadas, los inyectables de sólo progestinas parecen tener poco efecto sobre la presión sanguínea y la coagulación de sangre. La mayoría de los estudios n o arrojan cambios importantes en la presión sistólica o diastólica en usuarias de NET EN (10, 541) o DMPA (57, 119, 205,353,440, 460, 571, 592). Algunos estudios arrojan disminuciones leves de la presión sanguínea con ambos fármacos (57,571,580,592). En u n estudio inicial se descubrió u n aumento significativo de la presión sanguínea en algunas usuarias de DMPA, pero una disminución de la presión sanguínea en cerca de la mitad de las mujeres que sufrían previamente de hipertensión (284). En otro estudio se reveló un marcado aumento de presión diastólica en 7 de 400 usuarias (383). No hay evidencia de que el DMPA o el NET EN aumenten en una mujer el riesgo de coágulos de sangre u otras enfermedades del sistema circulatorio, aunque la extención e intensidad de los seguimientos probablemente n o sea suficiente como para desechar la posibilidad de tales efectos. En la mayoría de los estudios sobre uso del DMPA n o se descubrieron cambios en la coagulación y ni el sistema fibrinolítico (que pueden afectar a la coagulación), incluso en el caso de las altas dosis utilizadas en el tratamiento del cáncer (27, 62, 64, 219, 220, 333, 482, 559). El aumento del riesgo de coágulos sanguíneos relacionados con anticonceptivos orales es atribuido generalmente al estrógeno (487), ausente en los inyectables. Pruebas recientes indican, sin embargo, que el aumento del riesgo de ataques al corazón e infartos para usuarias de anticonceptivo~orales puede estar relacionado con las progestinas (161, 252, 485, 488). Se sospecha que los cambios en el metabolismo de Iípidos, especialmente la disminución de niveles de colesterol de lipoproteínas de alta densidad, aumentan el riesgo de desarrollar enfermedades cardiovasculares (185, 335). Este tipo de cambios se observa en usuarias de progestinas, pero su importancia clínica resulta incierta (158, 164, 273). Por un lado, es más probable que desarrollen ateroesclerosis aquellas personas que tienen bajos niveles de colesterol de lipoproteínas de alta densidad (185,252,335). Por otro lado, no hay pruebas directas de que la disminución de los niveles de colesterol de lipoproteínas de alta densidad acelere el desarrollo de ateroesclerosis (280). Es necesario investigar más sobre este tema. El efecto de los inyectables sobre el colesterol de lipoproteínas de alta densidad no está claro, puesto que se han estudiado s610 pocas mujeres y por corto tiempo (280, 489). En varios estudios de corto plazo de mujeres pre- y postmenopáusicas que están tomando oralmente grandes dosis de MPA se informa que n o hay reducción de coleste- POPULATION REPORTS - 1 eses 1-18 meses Período de uso 0-6 meses *El régimen consistió de 200 mg de NET EN cada 60 días por inicialmente 180 y posteriormente cada 84 días. Fuente: Organización Mundial de la Salud. Programa Especial de Investigación, Desarrollo y Formación de lnvestigadores sobre Reproducción Humana. Multinational comparative clinical trial of long-acting injectable contraceptives: norethisterone enanthate given in two dosage regimens and depot-medroxyprogesteroneacetate: final report. [Un ensayo clínico multinacional comparativo de anticonceptivos inyectables de larga duración: enantato de norestisterona administrado en dos regimenes de dosificación y acetato de medroxiprogesteronade depósito: informe final.] Contraception 28(1): 1-20. Julio de 1983. Figura 3. Porcentaje de mujeres usuarias de DMPA o ÑET EN que tuiieron episodios de sangrado y10 manchado de 21 o más días de duración, por período de uso O DMPA (régimen d e 90 días) m,NET EN (régimen d e 60 días) 0NET EN (régimen d e 60184 días*) ~ o- ~ 1 1 M S 0-6 meses 7-12 meses 13-18 meses 19-%meses Período de uso 'El régimen consistió de 200 mg de NET EN cada 60 días por inicialmente 180 y posteriormente cada 84 días. Fuente: Organización Mundial de la Salud. Programa Especial de Investigación, Desarrollo y Formación de lnvestigadores sobre Reproducción Humana. Multinational comparative clinical trial of long-acting injectable contraceptives: norethisterone enanthate given in two dosage regimens and depot-medroxyprogesterone acetate: final report. [Un ensayo clínico multinacional comparativo de anticonceptivos inyectables de larga duración: enantato de norestisterona administrado en dos regímenes de dosificación y acetato de medroxiprogesteronade depósito: informe final.] Contraception 28U): 1-20. Julio de 1983. Con DMPA v Ni3 EN. el ~orcentaiede muieres con amenorrea generalmeníe aumenta con la duración de &o. Un número significativamente más alto de muieres se Donen amenorréicas con DMPA que con NET EN ( ~ i ~ u ; 2). a ~os'manchadosy sangrados tienen la tendencia a disminuir. Las diferencias entre los regímenes no son marcadas excepto en los primeros seis meses, donde más manchado ocurre con las usuarias de DMPA (Figura 3). desarrollo de diabetes abierta en usuarias d e DMPA como anticonceptivo (569). La diabetes ha sido rara y n o más común que l o esperado, entre mujeres que reciben dosis muy grandes de MPA (la versión oral de DMPA) como terapia del cáncer (530). Aunque hay muchos estudios que n o informan de ningún cambio en la glucosa sanguínea o en los niveles de insulina como respuesta a la prueba de tolerancia de glucosa (47, 123,182, 305, 460, 497,518, 520, 530), otros estudios revelan u n aumento (16, 79, 486, 533). El NET EN ha sido menos extensamente estudiado que el DMPA. De cinco estudios (11, 23, 123, 176, 220), sólo en uno se determinó u n aumento de los niveles d e insulina (23). La OMS n o considera la diabetes como contraindicación para el uso de inyectables. N o obstante, sugiere que las mujeres afectadas por la enfermedad o con antecedentes de diabetes durante el embarazo, deben controlar su tolerancia de glucosa si usan u n inyectable (569). Un trabajador de salud en Taihndia verifica h presión sanguínea antes de administrar una inyección de DMPA. Las progestinas inyectables parecen tener un efecto mínimo o nulo sobre h presión sanguínea. (Cortesía de E.B. McDaniel) rol de lipoproteínas de alta densidad (212, 470, 507). Por otra parte, en una investigación reciente con 23 mujeres que habían tomado dosis anticonceptivas de DMPA durante por lo menos u n año, se determinó que los niveles de colesterol de lipoproteínas de alta densidad eran 20 por ciento menores que en u n grupo de control de usuarias de DIUs (273). En el único estudio de usuarias de NET EN se determinó que los niveles de colesterol de lipoproteínas de alta densidad disminuyó en cerca del 25 por ciento después de la primera inyección y n o disminuyó más durante hasta cuatro años de uso (158). En cuanto a otros Iípidos, la mayoría de los investigadores n o ha encontrado ningún efecto sobre los triglicéridos o el colesterol total (16,122,123,158,259,561) n i tampoco una disminución en ambos, l o que podría ser beneficioso (23, 196, 355, 497). Existen pocos informes sobre complicaciones cardiovasculares en usuarias de inyectables. De 11.500 mujeres usuarias de DMPA por más de 200.000 meses-mujer, sólo 15 de ellas, o el 0,13 por ciento, desarrollaron coágulos de sangre u otra forma de enfermedad tromboembólica (458). Se ha informado u n caso de hipertensión intercraneal en una usuaria de DMPA (33) y u n caso de infarto mortal en una mujer asiática, fumadora, que recibió dos inyecciones de DMPA (240). Esta situación contrasta con la historia d e los problemas del sistema circulatorio relacionados con los anticonceptivos orales. Informes de casos sobre coágulos de sangre e infarto en usuarias de anticonceptivos orales pusieron a los investigadores en alerta sobre la posibilidad de una relación. La ausencia casi total de informes de casos que entrañen inyectables sugiere que los inyectables n o aumentan el riesgo de enfermedades del sistema circulatorio. Al mismo tiempo, puede que los informes sean escasos debido, en parte, al hecho de que la mayoría de las usuarias viven en países en desarrollo, donde es menos probable que se informe sobre los casos que ocurren. Efectos metabólicos Al igual que otras hormonas, el DMPA altera el metabolismo d e los carbohidratos, pero n o se ha informado del Con unas pocas excepciones (354, 446, 447), en los estudios se informa que ni los inyectables n i las grandes dosis de MPA para el tratamiento de cáncer del endometrio afectan a la función hepática (18,23,137,196,259,305,355, 418, 460, 497). La compañía Upjohn ha recibido sólo 12 informes de ictericia u otras alteraciones al hígado, durante las dos décadas en que el Depo-Provera ha estado en el mercado (527). ~ l ~ u n investigadores os han concluido que los inyectables pueden ser utilizados con seguridad por mujeres con antecedentes de ictericia o enfermedades hepáticas (18, 137). Las mujeres con infestación parasítica de duela hepática (Opisthorchis viverrini), afección muy común en Asia oriental y sudoriental, pueden usar DMPA sin efectos adversos (196). En general, los inyectables n o alteran el metabolismo de proteínas y vitaminas (16, 18,259, 460,561). Los niveles de zinc en el suero sanguíneo pueden ser menores en usuarias de NET EN que en las que n o usan. Las consecuencias clínicas de este cambio n o son conocidas (167, 408). Otros efectos secundarios La incidencia de efectos secundarios n o menstruales, fuera del aumento de peso, varía mucho en usuarias de inyectables. Los trastornos parecen ser similares, e n cuanto a tipo y frecuencia, a los informados por usuarias de anticonceptivos orales y DIUs (459, 460, 465). Uno de los más frecuentes es la cefalea. En distintos estudios, la proporción de mujeres con este trastorno fluctúa desde menos del 1 por ciento (624) al 17 por ciento (460). En el primer ensayo de la OMS, u n número significativamente mayor de usuarias de DMPA que de usuarias de NET EN informó sufrir cefalea, y la incidencia de dolores de cabeza aumentó con el uso prolongado de MPA (571). En el segundo ensayo de la OMS, sin embargo, la proporción de mujeres que informó sufrir cefalea fue similar (580). Otros efectos secundarios, tales como dolores o distención abdominal, son más comunes entre mujeres usuarias de DMPA que entre usuarias de NET EN (571, 574). Efectos beneficiosos Al igual - que los anticonceptivos orales, los inyectables pueden tener efectos beneficiosos además de evitar el embarazo. Los inyectables pueden aumentar la concentración de hemoglobina y, por l o tanto, evitar la anemia (617). Por l o demás, varios estudios de escala limitada realizados POPULATION REPORTS en los años sesenta y setenta, indican que el MPA y otras hormonas pueden evitar la formación falciforme, desarrollo de células rojas anormalmente formadas en la anemia falciforme (9, 231, 232, 397). En un estudio reciente de 23 mujeres jamaiquinas con anemia falciforme, éstas tuvieron menos episodios de dolor de los huesos cuando usaron DMPA que durante el período de control en que usaron u n placebo. Además, distintas muestras de sangre demostraron una mejoría significativa. Los investigadores aseveran que el DMPA es el mejor anticonceptivo para mujeres con anemia falciforme (87). La anemia falciforme, u n trastorno genético, se presenta en personas de Africa oriental, central y occidental, así como en personas cuyos antepasados provienen de esas regionnes. También se registra en la región del Mediterráneo, India del Sur y al Sur de la península arábiga (622). Los inyectables también pueden ayudar a evitar la infección pélvica, una afección potencialmente grave. En u n reciente estudio de casos y controles realizado por la OMS, se descubrió que las usuarias de DMPA tenían menos posibilidad de desarrollar enfermedad inflamatoria pélvica (EIP) que las mujeres que no utilizan ningún método (189). Un efecto protector similar se ha observado en los anticonceptivos orales (3, 437). (Véase Population Reports, A-6, mayo de 1983, Los anticonceptivos orales en e l decenio de 1980.) El DMPA y el NET EN pueden asimismo disminuir la incidencia de colonización e infección vagina1 por el microorganismo Candida albicans, aunque las pruebas son muy preliminares (468, 514). para usuarias de anticonceptivos orales que los abandonaron (386,387) (véase la Figura 4). La duración de la infertilidad puede depender de la velocidad en que se metabolice el DMPA y posiblemente también del peso (40, 461). No hay pruebas que indiquen que los inyectables afectan permanentemente a la fertilidad. Más del 50 por ciento de las mujeres vuelven a menstruar a los seis meses del abandono y aproximadamente el 85 por ciento, al año, l o que sugiere que la fertilidad se ha restablecido (42, 130, 172, 460, 465). Más del 60 por ciento de mujeres que quieren quedar embarazadas l o logran dentro de u n año tras el abandono, y más del 90 por ciento dentro de dos años (40, 42, 130, 321, 387, 461). En el estudio tailandés, a los dos años después del abandono, 92 por ciento de las usuarias Figura 4. Tasas acumulativas de concepción en mujeres que abandonan el uso de DIU, anticonceptivos orales o DMPA, para poder quedar embarazadas EFECTOS EN LA REPRODUCCION No existen pruebas de que los inyectables tengan efectos perdurables en la reproducción humana después de que se suspende su uso. Sin embargo, hay que tomar en cuenta varias consideraciones: 0 El retorno de la fertilidad se retrasa generalmente varios meses después de la suspensión. 0 Las altas dosis de ciertas progestinas durante el embarazo han tenido ocasionalmente efectos masculinizadores en fetos femeninos. 0 El DMPA y el NET EN pueden aumentar el volumen de leche materna, aunque esto n o es seguro, porque los estudios controlados son difíciles de llevar a cabo. Ambas hormonas son transmitidas en pequeñas cantidades a los niños lactantes; los efectos en el largo plazo son desconocidos, pero hasta ahora no se han observado efectos adversos. -Anticonceptivos orales -----DIU -DMPA Retorno de la fertilidad Aunque una inyección de 150 mg de DMPA no se considera eficaz como anticonceptivo por más de 90 días, en la mayoría de las mujeres el DMPA evita el embarazo durante u n período más largo. En promedio, las usuarias de DMPA que lo han abandonado tardan entre 17hy 3 meses más para concebir que las usuarias de anticonceptivos orales y DlUs que han abandonado su uso. En un extenso estudio sobre mujeres tailandesas que abandonaron la planificación familiar para quedar embarazadas, el tiempo promedio para concebir, después de la última inyección de DMPA, fue de 9 meses -ó 5,5 meses desde la fecha en que la inyección siguiente debió aplicarse- en comparación con 4,s meses para las usuarias de DIUs y 3 meses POPULATION REPORTS O 4 8 12 16 20 24 28 Meses después del abandono 32 36 Fuentes: adaptado de Pardthaisong (386) y de Parthaisong y col. (387) Las mujeres que abandonan el DMPA para quedar embarazadas se demoran más en concebir que las ex usuarias de otros métodos, pero no se altera permanentemente su fertilidad. En este estudio tailandés de más de 1.300 mujeres, casi el 80 por ciento de ex usuarias de DMPA y ex usuarias de DlUs concibieron dentro de los 12 meses posteriores al abandono. A los 24 meses, casi el 95 por ciento de todas las mujeres en todos los grupos habían quedado embarazadas. En este estudio se consideró que 15 semanas después de la última inyección de DMPA era la fecha de abandono. K-15 de DMPA, el 93 por ciento de las usuarias de DlUs y el 95 por ciento de las usuarias de anticonceptivos orales habían quedado embarazadas (véase la Figura 4). Estas diferencias n o son estadísticamente significativas (386, 387). Otras pruebas indican también que n o hay efecto permanente en la fertilidad. Fármacos para estimular la ovulación, como el citrato de clomifeno han restablecido la fertilidad en mujeres que padecían de prolongada amenorrea tras haber recibido inyecciones de DMPA (584, 588). Por lo demás, las usuarias a largo plazo conciben tan rápidamente como las que sólo han recibido unas pocas inyecciones, l o que sugiere que n o existe u n efecto acumulativo (42,130, 172, 321, 387, 461, 584). El restablecimiento de la fertilidad después de usar la dosis normal de 200 mg de NET EN n o se ha estudiado extensamente, pero puede ser más rápido que con el DMPA. E l NET EN se metaboliza rápidamente y al cuarto Grupo de diversos organismos fomenfa el desarrollo de nuevos inyectables Se ha formado recientemente u n grupo integrado por diversos organismos para fomentar y coordinar la selección y desarrollo de anticonceptivos inyectables nuevos y mejorados. El Grupo de Trabajo Integrado por Diversos Organismos sobre Anticonceptivos lnyectables (Interagency Working Group o n lnjectable Contraceptives) fue establecido en febrero de 1983, por la Reunión de Organismos que Realizan o Apoyan Directamente la Investigación sobre los Aspectos Biomédicos de la Planificación Familiar (Meeting of Agencies Conducting or Directly Suppórting Research o n Biomedical Aspects of Family Planning), una reunión de diversos organismos convocada por la OMS. El objetivo del nuevo grupo es el desarrollo y prueba de nuevos inyectables, su introducción y la planificación de la vigilancia del uso difundido. Entre los organismos y los países interesados en la tarea incluyen a la OMS, el Program for Applied Research in Fertility Regulation (PARFR), el Instituto Nacional de Salud Infantil y Desarrollo Humano de los Estados Unidos (US National lnstitute of Child Health and Human Development) (NICHD), US AID, Family Health lnternational (FHI), la República Popular de China y el Consejo de Investigación Médica de la India (Indian Council of Medical Research). Esperan poder interesar a otros organismos en su trabajo y cooperar con la industria farmacéutica. E l Programa Especial sobre Investigación, Desarrollo y Formación de Investigadores sobre Reproducción Humana de la OMS (WHO Special Programme o n Research, Development and Research Training i n Human Reproduction) organizará y presidirá las reuniones. El nuevo Crupo de Trabajo celebró su primera reunión en junio de 1983. Fue preparada una breve lista de compuestos y fórmulas a cuyo desarrollo se le debe dar prioridad, y se establecieron relaciones de trabajo cooperativo entre los distintos organismos (653). mes tras una inyección no se puede detectar en la sangre (154, 157). La ovulación ocurre frecuentemente dentro de tres meses después de una inyección, aunque a veces se retrasa hasta cinco meses (51,122,154,157, 180, 550, 552, 557). Tanto en el caso del NET EN como del DMPA, el tiempo promedio entre el abandono y la ovulación parece variar en distintas poblaciones (51, 157). Efectos fetales La preocupación en torno a posibles efectos teratogénicos -es decir, defectos congénitos- fue una de las razones esgrimidas por la US FDA para n o aprobar el DMPA como anticonceptivo en los Estados Unidos en 1978. La preocupación n o surgió a raíz de informes sobre anticonceptivo~inyectables como causantes de defectos congénitos, sino debido a sospechas respecto de otras progestinas utilizadas e n altas dosis durante el embarazo. Es extremadamente difícil estudiar los inyectables en forma directa, porque los embarazos entre las usuarias son pocos y porque, en todo caso, las anomalías congénitas se presentan tan sólo en una proporción muy pequeña de todos los partos. Las posibilidades de que el feto esté expuesto al NET EN y DMPA son leves. Los embarazos durante el uso de u n inyectable son muy escasos (véase la pág. K-10). Los embarazos después del uso de inyectables ocurren pocas veces, hasta tanto los niveles hormonales no hayan disminuido sustancialmente. Después de una inyección de DMPA, la mayoría de las mujeres n o ovula hasta que los niveles de MPA circulante en el cuerpo sean indetectables o muy bajos, menos de 0,l nglml (156, 263, 384, 556). Con el NET EN, las mujeres generalmente n o ovulan hasta que los niveles de NET EN en el suero sean de aproximadamente 0,4 a 0,8 nglml, aunque se han informado casos de ovulación con niveles en el suero de hasta 1,8 nglml (180, 552). Los embarazos antes de la primera inyección son muy infrecuentes cuando la inyección se aplica en la primera semana del ciclo menstrual. En pruebas cooperativas de DMPA de la compañía Upjohn, por ejemplo, el 0,3 por ciento de las mujeres tenía embarazos no diagnosticados al momento de la primera inyección (460). Posiblemente haya más mujeres embarazadas que reciben las inyecciones si creen que los inyectables provocan el aborto y las piden precisamente por esa razón (417) o bien, si las inyecciones se aplican después de la primera semana del ciclo menstrual. En los raros casos de mujeres embarazadas expuestas al DMPA, n o se ha observado un aumento de casos de malformaciones congénitas o partos prematuros (41,129,271, 311,323, 389,417,460). Por lo demás, no se ha observado u n aumento de anomalías congénitas cuando las mujeres quedan embarazadas después de concluido el efecto anticonceptivo del DMPA. En Tailandia, la incidencia de toda anomalía congénita de los hijos de 1.133 ex usuarias de DMPA fue del 2,3 por ciento, en comparación con el 2,2 por ciento de los hijos de 4.029 mujeres que n o habían usado anticonceptivos hormonales. Tampoco hubo diferencias en la incidencia de mortalidad fetal tardía o partos múltiples, en la razón de masculinidad o en el peso al nacer de hijos de ex usuarias de DMPA en comparación con los hijos de más de 7.000 n o usuarias (311). Sólo en dos pequeños estudios, que carecían de grupos de control, se ha observado una incidencia más alta de deformaciones congénitas que en la población en general (405, 590). POPULATION REPORTS En los años cincuenta y a principios de los sesenta, se administraron altas dosis de distintas progestinas a mujeres embarazadas a fin de prevenir la amenaza de aborto o el aborto habitual. Este tratamiento nunca demostró ser eficaz y ya no se recomienda (567). Algunas progestinas, especialmente las derivadas de testosterona, causaban ocasionalmente masculinización de los genitales externos (clítoris agrandado o fusión de la labia) en niñas, cuando las progestinas habían sido administradas durante el primer trimestre del embarazo (452, 564, 565). Se han registrado unos pocos casos de ese tipo de masculinización en recién nacidas cuyas madres tomaron dosis orales de MPA (derivada de la progesterona más bien que de la testosterona) para evitar abortos (77, 452, 527). Algunos casos de clítoris agrandado se revierten espontáneamente en un corto período de tiempo (77). Estudios recientes han indicado que la exposición prenatal a hormonas puede causar otras anomalías, no genitales (204, 209), pero las pruebas no son concluyentes, debido al deficiente control de que adolecieron los estudios (188). En dos estudios prospectivos se informa una duplicación del riesgo de deformaciones en niños expuestos a hormonas, en comparación con niños no expuestos (204,209). En estos estudios, sin embargo, algunos de los diagnósticos de defectos congénitos fueron errados, y no quedó claro si las hormonas fueron administradas durante el período 607, crítico en que los órganos fetales se desarrollan 645). En la mayoría de los casos, las hormonas fueron administradas para prevenir abortos o para pruebas de embarazo. Pocos casos entrañaban anticonceptivos. Como las deformaciones serias son una causa de amenaza de aborto, resulta difícil saber si la deformación indujo al uso de hormonas o si las hormonas causaron la deformación (567). La mavoría de los estudios recientes sobre anticonceptivos orales no indican una relación entre la píldora y los defectos congénitos (565). (Véase Population Reports, A-6, mayo de 1983, Anticonceptivos orales en el decenio de 1980.) (188, A pesar de que el problema de la teratogenicidad quizá nunca pueda ser completamente resuelto debido a las dificultades en el estudio del asunto, no existen pruebas que relacionen claramente las progestinas anticonceptivas con cualquier tipo de defecto-coñgénito. Como ha.señalado la OMS: . . . puesto que los embarazos con inyectables de duración prolongada son poco comunes, los trastornos poco frecuentes, y cualquier posible riesgo teratogénico pequeño, no es probable que constituya una preocupación importante de salud pública. (568) a Los riesgos potenciales pueden ser minimizados si las inyecciones se administran sólo durante los primeros cinco días del ciclo menstrual, y se informa a las mujeres que los inyectables no causan aborto. En algunos programas, particularmente en donde el acceso a servicios de planificación familiar es limitado, se administran inyecciones a las mujeres en cualquier momento del ciclo menstrual (26, 316). Cuando haya posibilidad de existir un comienzo de embarazo, se debe aconsejar a las mujeres que la posibilidad de riesgo para el feto es incierto. Lactancia La administración de DMPA postparto o bien aumenta la cantidad de leche materna o no tiene efecto medible (véase Population Reports, J-24, octubre de 1982, La lactancia materna, la fecundidad y la planificación familiar). El POPULATION REPORTS NET EN tampoco parece tener efectos adversos en la lactancia (246, 406, 443), aunque las investigaciones son más limitadas, lo que contrasta con los anticonceptivos orales que contienen estrógenos y progestinas, que pueden disminuir el volumen de leche. En comparación con las no usuarias, las mujeres que utilizan inyectables producen a veces más leche o amamantan durante mayor tiempo (32, 198, 239, 246, 267, 586, 587). Al parecer, el DMPA no ocasiona un cambio adverso en la composición de la leche. La concentración de proteína y grasa en la leche de usuarias de DMPA es igual o más alta que en la de no usuarias. La concentración de lactosa no es afectada (32, 222, 246, 267). Hasta la fecha, el único estudio sobre efectos inmunológicos no estableció una diferencia significativa en la concentración de inmunoglobulinas de la leche de usuarias de DMPA o NET EN en comparación con la de no usuarias (303). Transmisión de hormonas en la leche materna Cuando una mujer que amamanta usa cualquier hormona, pequeñas cantidades del fármaco pasan a la leche y son consumidas por el niño. Se desconoce si los nitios sufrirán efectos adversos a largo plazo, pero se está estudiando este asunto. La cantidad de hormona transmitida al niño en la leche materna es muy pequeña -menos del 0,5 por ciento de la dosis materna (457, 567). Es mayor después de una inyección y posteriormente disminuye en forma rápida (265, 268, 4511.' Probablemente sólo una parte de la hormona es absorbida por el sistema digestivo del niño (569). La exposición del niño a la hormona es mucho menor en el caso del NET EN que en el del DMPA. Suporn Koetsawang y colegas informaron que una semana después de una inyección, el insumo diario de hormona del niño, en 600 ml de leche materna, oscila entre 0,5 y 2,4 pg de MPA. A las ocho semanas, sólo 2 de 10 mujeres tenían niveles detectables de NET EN en la leche materna, mientras que 8 de 10 mujeres tenían niveles detectables de MPA (268). En otro estudio, no se pudo detectar NET en el plasma de recién nacidos amamantados entre dos y cinco días después de haberse inyectado a la madre, aunque los niveles de NET en el plasma de la madre se encontraban en su máximo en ese momento (331). A corto plazo, los efectos de la exposición hormonal son mínimos. No hay efectos adversos en el aumento de peso y desarrollo del niño (32, 119, 267) y, en algunos casos, éstos son considerablemente mayores que en niños no expuestos (222, 246). Se han planteado dudas sobre posibles efectos inmunosupresores del DMPA en niños amamantados, pero en un pequeño estudio efectuado en Tailandia se presentó una tasa similar de enfermedades infecciosas -aproximadamente tres por año- en niños de usuarias de DMPA y en otros niños (119). Se necesitan más estudios para determinar si existen efectos a largo plazo debidos a la exposición temprana a hormonas. En Chile, los resultados preliminares de un estudio a largo plazo, de niños de tres a seis años de edad no arrojó diferencias en el desarrollo psicomotor y en la frecuencia de infecciones u otras enfermedades entre niños cuyas madres habían usado DMPA mientras amamantaban y niños de mujeres que no habían usado ningún anticonceptivo hormonal mientras amamantaban. Los niños de usuarias de DMPA pesaban menos, en promedio, que los otros niños y un porcentaje significativamente mayor pesaba menos que el promedio previsto para su edad. El investigador atribuyó esta diferencia a un período más largo de amamantamiento -superior al óptimo- entre los niños de usuarias de DMPA (239). Otros estudios de niños no informan sobre efectos perceptibles de la exposición a inyectables en la leche materna: ninguna diferencia en el crecimiento o desarrollo físico o mental de los niños de usuarias y no usuarias, a quienes se controló hasta 10 años (527), y ninguna anomalía física, mental u ósea detectable en aproximadamente 200 niños de 18 meses, cuyas madres habían usado DMPA o NET EN (246). E l desarrollo sexual de ratas expuestas a altas dosis de DMPA a través de la leche de ratas ha experimentado atrasos (449). No se han llevado a cabo estudios en humanos con un seguimiento hasta la pubertad. Ni la OMS ni la IPPF descartan el uso del DMPA para mujeres lactantes (227, 568, 569). Puesto que la investigación sobre NET EN es limitada, la OMS sugiere que el DMPA u otros métodos son preferibles durante la lactancia (569). Para minimizar cualquier posible efecto sobre el niño cuando se usa DMPA, la compañía Upjohn recomienda retrasar la primera inyección postparto a seis semanas después del parto. En ese momento la capacidad de metabolizar y eliminar el fármaco está mejor desarrollada en el niño (527). LA INTERROGANTE DEL CANCER La interrogante de si los inyectables de progestinas de larga duración -especialmente el DMPA- afectan el riesgo de cáncer es una de las fuentes principales de controversia. Por una parte, ciertos animales de laboratorio expuestos al DMPA y NET EN han desarrollado más tumores del útero y las mamas que los animales controles, y algunos de estos tumores han sido malignos. Pero, por otra parte, no hay ninguna prueba que relacione el uso de progestinas con el cáncer en las mujeres. Incluso algunas progestinas, entre ellas MPA, se utilizan en dosis elevadas para retardar el crecimiento de cáncer de los órganos reproductivos, y los anticonceptivos orales combinados de estrógeno-progestina protegen contra el cáncer del endometrio y los ovarios. Quedan por resolver dos problemas científicos básicos: e jCuán pertinentes para las mujeres son los resultados adversos de estudios en animales? e iCuán concluyentes son los estudios en humanos que no han detectado ningún efecto adverso, pero que han sido limitados hasta ahora en cuanto a la escala del estudio, la duración del uso y la extensión del seguimiento? Investigación del riesgo de cáncer La investigación sobre el potencial de un fármaco u otro agente para causar cáncer se basa fundamentalmente en pruebas toxicológicas en animales de laboratorio y estudios epidemiológicos en humanos. Los estudios en animales se utilizan por varias razones: e Pueden revelar efectos adversos sin ningún riesgo para humanos. e Es posible administrar a los animales dosis mucho mayores que las dosis humanas. Se supone que un fármaco que causa efectos adversos, incluido el cáncer, actuará mucho más rápida o frecuentemente cuando se administra en grandes dosis (526). Por lo tanto, los efectos adversos pueden ser identificados más rapidamente en animales que en seres humanos. De hecho, es posible administrar grandes dosis de fármacos a animales con la intención de causar efectos adversos. Los investigadores tendrán entonces una idea más clara de lo que conviene pesquisar en los seres humanos. e Los estudios en animales pueden ser más cuidadosamente controlados que los en seres humanos, de modo que se pueden excluir otros posibles factores de riesgo. Sin embargo, la pertinencia de los estudios en animales a los seres humanos no es siempre clara. Hay dos problemas importantes: jResponde la especie animal a ese fármaco de manera similar o distinta a los seres humanos?Si responde de manera distinta, iindica esto que el fármaco tendrá un efecto diferente en el riesgo de cáncer en los seres humanos? Esto plantea un problema particular de las hormonas reproductivas, que actúan de forma muy diferente en distintas especies. Las grandes dosis, durante largos períodos de tiempo, jcausan efectos cualitativamente distintos en animales que las dosis normales?S i así fuera, los resultados de estudios animales quizá no sean pertinentes para seres humanos que usan dosis bajas. Los estudios de seres humanos pueden evaluar directamente los riesgos. Sin embargo, por varias razones, los estudios epidemiológicos quizá no siempre produzcan resultados concluyentes, especialmente cuando se estudian las hormonas sexuales y el cáncer de los órganos reproductivos: e M U C ~ O Sfactores genéticos y de comportamiento influyen en el riesgo de cáncer del sistema reproductivo. Por ejemplo, la edad al primer parto afecta al riesgo de cáncer de las mamas (625). Es necesario tomar en cuenta estos factores. Es probable, que al efecto se requiera una gran población y un complejo diseño experimental. Respecto de muchos agentes causantes de cáncer, pueden transcurrir años e incluso decenios entre la exposición al agente y la detección del cáncer. En consecuencia, los estudios quizá deben centrarse en personas expuestas a la droga muchos años antes. e Puede que los riesgos no sean indetectables tras una exposición a corto plazo, pero considerables tras una exposición a largo plazo. Si hay pocas usuarias a largo plazo resulta difícil estudiar el riesgo. Respecto de formas raras de cáncer, es posible tardar decenios en recolectar suficientes casos para un análisis epidemiológico adecuado. Incluso respecto de cánceres más comunes, como el de las mamas, los estudios de grande escala, a largo plazo y prospectivos, capaces de determinar la incidencia de cáncer en las personas que han usado anticonceptivos hormonales y quienes no los han usado, son extremadamente difíciles y caros de llevar a cabo. Estudios en animales y tumores de las mamas La US FDA exije que los anticonceptivos hormonales sean probados en tres especies animales: ratas, perros (beagles) y monos. Las ratas deben recibir cantidades de fárPOPULATION REPORTS i 10 0 maco equivalentes, en relación al peso, a una o dos y 10 y 50 veces la dosis humana durante dos años. Los perros deben recibir una o dos y 10 y 25 veces la dosis humana durante siete años. Los monos deben recibir una o dos y 10 y 50 veces de el equivalente a la dosis humana durante 10 arios (54,150,604). i o n el uso del DMPA y NET EN, tales estudios animales han revelado tasas más altas de tumores en animales tratados que en animales de control, en los siguientes casos: en ratas, tumores de las mamas con NET EN pero no con DMPA; en perros (beagles), tumores de las mamas con DMPA (aún no está disponible la información sobre el NET EN en perros (beagles); en monos, cáncer del endometrio con DMPA y NET EN, y nódulos benignos de las mamas con DMPA. (Aún no está disponible la información sobre el NET EN y cambios eventuales en las mamas.) Se han planteado serias dudas sobre la pertinencia a los seres humanos de estos resultados en animales. Aunque se relacionan altas dosis de NET EN con tumores benignos y malignos de las mamas de ratas, de manera general se está de acuerdo en que estos resultados no son directamente pertinentes a los seres humanos. El NET EN tiene un fuerte efecto estrogénico en las ratas, que induce un aumento en la secreción de prolactina. A su vez, ello estimula el crecimiento del tejido de las mamas y, según la teoría, estimula el desarrollo de células anormales (368). Por otro lado, el NET EN y DMPA tienen efectos progestacionales en humanos, y no aumentan la secreción de prolactina. Por lo demás, las posibilidades de que una progestina cause tumores de las mamas varían de una raza de ratas a otra. Puesto que las ratas parecen ser modelos inadecuados para estudiar las progestinas, el descubrimiento de tumores en ratas no ha impedido la aprobación por la US FDA a las progestinas derivadas de testosterona para uso anticonceptivo (602). (El NET EN es derivado de testosterona, mientras que el DMPA lo es de progesterona). En los dos estudios a largo plazo con perros (beagles), tantos los animales de control como los animales a los que se administró DMPA desarrollaron nódulos en las mamas, aunque el porcentaje fue mayor en los perros que recibieron DMPA. Algunos perros que recibieron DMPA desarrollaron cáncer (150, 160, 527, 531). Los resultados se resumen en el Cuadro 5. Los perros han sido utilizados en pruebas de toxicidad durante muchos años y la US FDA incluye su uso entre los requisitos para probar cualquier fármaco nuevo. Se optó por los perros beagles como la raza a utilizar, porque es fácil de trabajar con ellos en el laboratorio y se consiguen fácilmente (54). No obstante, probablemente los perros no sean los animales más adecuados para la prueba de progestinas, porque responden a ellas y a la hormona natural progesterona de manera muy distinta que las mujeres y que la mayoría de las otras especies. El perro y el hurón son las únicas especies de las cuales es sabido que la progesterona u otras progestinas por sí solas causan un crecimiento marcado de cierto tejido de las mamas (368). Este crecimiento excepionalmente rápido de células normales en una disposición normal, o hiperplasia, se relaciona con el desarrollo de tumores. En los perros beagles sometidos a progesterona se presentan tumores benignos y malignos tanto como en los perros sometidos a ciertas progestinas sintéticas derivadas de la progesterona (82, POPULATION REPORTS -- .- Cuadro 5. Nódulo~de las mamas de perros beagles tratados con DMPA y en controles, estudios IRDC y Dawson* Estudio IRDC Controles Número examinado Número con nódulos Número con tumores malignos Dosis de DMPA 1X 25 x 16 9" O 16 12 2b 4 3 O Estudio Dawson Controles 20 2 O Número examinado Número con nódulos Número con tumores malignos Controles Número examinado Número con nódulos Número con tumores malignos 20 O O Dosis de DMPA 1X 10x 25X 20 13 7 20 15 10 20 12 9 Dosis de progesterona 1X ' 25Xc 20 13 O *IRDC: lnternational Research and Development Corporation; Dawson: Dawson Research Corporation. 'Los nódulos fueron transitorios en 7 de 9 animales bAdenocarcinomas con metástasis a otros órganos cProgesterona administrada en cantidades equivalentes a 1 vez ó 25 veces el nivel normal de progesterona de fase lútea humana Fuente: Estudio IRDC-Frank y col. (160), Upjohn (527); Estudio DawsonCarlson (85), Frank y col. (160),Upjohn (527). - _----.--A- ~.-2 160). De hecho, varios investigadores han concluido que cualquier progestina puede estimular tumores de las mamas de perros beagles si es administrada por una vía apropiada y en dosis grandes y continuadas durante muchos años (2, 71, 143). El desarrollo de nódulos en las mamas de perros beagles que reciben progestinas parece estar relacionado con un aumento en los niveles de la hormona de crecimiento (143, 160). El DMPA no aumenta los niveles de hormona de crecimiento en las mujeres (122, 445, 627). Otra diferencia es que los perros beagles pueden tener reservas de neoplasmas microscópicos en las mamas (80). Estas lesiones pueden crecer y desarrollarse en respuesta a las progestinas, especialmente de las derivadas de progesterona, como el DMPA (70). Aparentemente, las mujeres no tienen esas lesiones (70, 568). Además, no se observa en las mujeres otros efectos secundarios resultantes de dosis elevadas de progestinas que se manifiestan en los perros, lo que indica más diferencias en cuanto a reacciones. Estos efectos secundarios, que no están directamente relacionados con el crecimiento de tejido de mamas o el desarrollo de tumores, incluyen la piómetra (un tipo de infección uterina) y acromegalia (un estado de crecimiento anómalo (52, 123, 445, 486, 527). Se observan, asimismo, diferencias importantes a nivel celular en respuesta a progestinas. En el perro beagle, la administración de progestinas aumenta marcadamente el número de receptores de progesterona, tanto en las mamas como en el endometrio (71). Por el contrario, en las mujeres la progesterona disminuye el número de receptores de progesterona y estradiol en el tejido uterino (366, 517, 560, 619). Los receptores son proteínas específicas en las células, que se fijan químicamente con una K-19 hormona causando una reacción celular (490). Mientras más receptores de una hormona específica, más fuerte es la reacción (132, 366). Considerando las diferencias entre perros beagles y humanos, numerosos investigadores y cuatro paneles de expertos -el Grupo de Estudios Toxicológicos de la OMS (WHO Toxicology Review Panel), el Grupo Internacional de Asesoramiento Médico de la IPPF (IPPF International Medical Advisory Panel), el Comité de Seguridad de Fármacos del Reino Unido (Committee on Safety of Medicines in the United Kingdom) y el Grupo Consultor Ad Hoc sobre Acetato de Medroxiprogesterona de Depósito convocado a nombre de la US AID para estudiar el DMPAhan concluido que el perro beagle no es un animal adecuado para evaluar la seguridad de las hormonas anticonceptivas (2, 4, 48, 70, 71, 143, 186, 210, 211, 229, 531, 576, 597). En el Reino Unido, el organismo que autoriza el uso de fármacos -la Licensing Authority- ya no exige que los productos que contienen progestinas sean probados en perros beagles (597). Aunque la US FDA sigue exigiendo estudios en perros beagles, el Comité Asesor en Fármacos de Fertilidad y Salud Materna (Fertility and Maternal Health Drugs Advisory Committee) de este organismo, ha recomendado recientemente que un panel de expertos estudie los requisitos de la US FDA para las pruebas toxicológicas de progestinas en animales (523). En monos, se palparon nódulos en las mamas durante el curso del estudio, en 8 de 20 animales que recibían una o diez veces la dosis humana equivalente de DMPA. Se palparon en 2 de 18 controles. La mayoría de estos nódulos desaparecieron posteriormente. Al final del estudio, cuando los monos fueron sacrificados, se encontraron nódulos en 3 monos tratados con DMPA. Los nódulos eran aparentemente hyperplasia nodular focal, un crecimiento anómalo pero benigno de tejido normal. No se encontraron tumores en monos que recibieron 50 veces el equivalente de una dosis humana (527). Todavía no hay información disponible sobre el NET EN. Cáncer del endometrio en monos Se descubrió cáncer del endometrio en 2 de 12 monos autopsiados a los que se había administrado 50 veces la dosis humana equivalente de DMPA (527) y, desde principios de 1983, en un estudio en curso, uno de 24 que recibían 50 veces la dosis humana equivalente de NET EN (568). Nada se ha encontrado en los controles de estos estudios. Se han informado varios casos de cáncer al endometrio en otros monos no expuestos a progestinas (527), pero la incidencia de la enfermedad es desconocida. Tal como en los casos de tumores en las mamas de perros, se ha cuestionado la relación de estos descubrimientos con las mujeres: En los monos, el cáncer del endometrio se presentó en endometrio atrófico o atrofiado (527,646). En mujeres, el cáncer del endometrio está relacionado a menudo con la hyperplasia (crecimiento anormalmente rápido de celulas normales) inducida por estrógenos (4, 171,462). El DMPA y otras progestinas suprimen el crecimiento endometrial y previenen la hyperplasia en las mujeres (305, 344). Algunos patólogos aseveran que los cánceres del endometrio de los monos son de un tipo celular distinto al cáncer del endometrio en las mujeres (527, 529, 568). Un patólogo formula la hipótesis de que los tumores en monos tratados con DMPA se originan en una placa epitelial que se forma como respuesta a la progestina o progesterona (529). Esta estructura no ocurre en mujeres (4, 462). Las hormonas en dosis altas, como las que se administraron a los monos que desarrollaron cáncer del endometrio, pueden causar efectos cualitativamente distintos que en dosis bajas (4, 523). Además, como los monos no pueden metabolizar grandes dosis con suficiente rapidez, el fármaco se acumula en el cuerpo con el tiempo, de modo que los animales están eventualmente expuestos a dosis mucho mayores que 50 veces el equivalente de la dosis humana. En las audiencias recientes ante la Junta de Investigación Pública sobre el DMPA (Public Board of lnquiry on DMPA) de la US FDA (véase la pág. K-5), un patólogo sugirió que los tumores no eran cánceres del endometrio sino un tipo de cáncer raro, adenocarcinoma endocervical (de la pared interior del cuello uterino), que se había propagado al endometrio (120). Posteriormente, un grupo de patólogos reunidos por la OMS examinó el tejido uterino de los tres monos con cáncer y de otros monos. Concluyeron que los tres tumores eran seguramente de origen endometrial y poco probablemente endocervicales (646). Además, a diferencia de opiniones previas (568), decidieron que los tres tumores eran del mismo tipo celular (646). Las células del tumor se parecían a las células de placa endometrial, pero no se sabe lo suficiente como para asegurar que los tumores se desarrollaron de la placa endometrial (646). Los estudios en humanos no indican la existencia de riesgos Tres tipos de pruebas indican que los inyectables de progestinas no causan cáncer en las mujeres: los resultados de estudios epidemiológicos y clínicos efectuados hasta la fecha, el hecho de que las progestinas se utilizan terapéuticamente con algún éxito para tratar ciertos cánceres, los resultados de estudios sobre anticonceptivos orales, que demuestran que no existe riesgo adicional de cáncer mamario, y que sugieren un efecto protector contra el cáncer del endometrio y los ovarios. Hasta la fecha, ningún estudio epidemiológico ha demostrado que los inyectables estén relacionados con algún tipo de cáncer. Empero la mayoría de los estudios, todos los cuales han sido sobre DMPA, ha comprendido a usuarias a corto plazo y, por lo tanto, no podrían detectar riesgos para usuarias a largo plazo, de haberlos (216). Los resultados preliminares del estudio más importante efectuado hasta la fecha demuestran que el uso del DMPA no entraña riesgo de cáncer cervical o de las mamas. La OMS está llevando a cabo un estudio de casos y controles en 11 centros de nueve países. E l estudio investiga el uso actual o anterior de anticonceptivos orales e inyectables, entre mujeres con cáncer de los órganos reproductivos, mamas, hígado o vesícula biliar, y entre mujeres sin cáncer. Se han realizado análisis preliminares relacionados con el DMPA, basados en información de los tres centros participantes de Tailandia, donde el DMPA se ha usado durante casi 20 atios. A principios de 1983, el estudio de la OMS había recopilado más de 500 casos de cáncer cervical y procedió a compararlos con más de 1.800 controles. El análisis preliminar no detectó relación entre el uso del POPULATION REPORTS ; 'a DMPA y el cáncer cervical invasor o in situ (no invasor). A comienzos de 1983, el estudio tenía un 90 por ciento de posibilidades de detectar u n riesgo tan bajo como 1,6 veces mayor para usuarias que para no usuarias (647). El estudio de la O M S ha recopilado también más de 100 casos de cáncer mamario en Tailandia, y 10s comparó con más de 1.800 controles. Los resultados prelimin-ares indican que n o aumenta el riesgo de cáncer mamario con el uso del DMPA y quizá indiquen u n leve efecto protector. Hacia comienzos de 1983, el estudio tenía u n 90 por ciento de posibilidades de detectar u n riesgo relativo tan bajo como el 2,5 (647). El número de casos de otros cánceres, incluido el cáncer del endometrio, recopilado por la OMS ha sido demasiado pequeño para efectuar un análisis. Sin embargo, la OMS afirma que: . . . la escasez de casos de cáncer del útero, ovario y órganos hepatobiliares (hígado y vesícula biliar) con antecedentes de uso del DMPA, en un país en que el uso de DMPA es relativamente difundido, es alentadora. La información sugiere que no existe un problema importante de salud pública debido al DMPA, por lo menos en cuanto a estos cánceres. (647). Puesto que el estudio de la OMS se realiza en Tailandia, donde el DMPA ha estado disponible durante muchos años, puede evaluarse el uso más prolongado del DMPA en u n período anterior que los estudios en otros lugares. Unos 191 de los controles seleccionados hasta el momento para el estudio han usado DMPA. De ellos, el 40 por ciento había utilizado el inyectable durante 6 meses y hasta 3 años, y aproximadamente una cuarta parte había usado el inyectable por más de 3 años. Más de la mitad de las usuarias, entre los controles, había usado el DMPA durante más de 9 años antes de que se iniciara el estudio (647). El estudio de la OMS está actualmente en curso y, aunque los resultados preliminares son tranquilizadores, se requiere mayor análisis e información adicional para llegar a conclusiones más definitivas. En dos recientes estudios estadounidenses se informa que n o aumenta el riesgo de cáncer de las mamas en mujeres que han usado el DMPA por cortos períodos de tiempo (194,288). En u n estudio de control de casos de 30 mujeres con cáncer de las mamas y 179 controles sin cáncer de las mamas, se determinó que la proporción de usuarias de DMPA en los dos grupos era igual. Tan sólo u n caso había recibido más de dos inyecciones de DMPA. Los investigadores señalan que el pequeño número de casos estudiados y la corta duración promedio de uso limitan el generalizar a partir del estudio a otros grupos de mujeres (194). El segundo estudio estadounidense comparó la incidencia de cánceres de las mamas, útero y ovario, en mujeres que habían recibido DMPA en una clínica hospitalaria de planificación familiar, con el número esperado de casos, basado en tasas de casos de cáncer ajustadas por raza y edad en Estados Unidos. N o se registraron diferencias importantes entre los números observados y previstos de cualquiera de estos cánceres. El estudio abarcó a 5.000 usuarias de DMPA de 4 a 13 años después de su primera inyección. La mayoría había usado DMPA por menos de un año. Hubo ocho casos de cáncer del sistema reproductivo entre estas mujeres: seis cánceres de las mamas, u n cáncer uterino (leiomiosarcoma, n o cáncer al endometrio) y u n cáncer ovárico. La mayoría de ellas eran usuarias a POPULATION REPORTS corto plazo. Los investigadores señalan que su estudio tenía capacidad limitada para detectar u n efecto carcinógeno débil o uno que se presentara sólo después de u n largo período de latencia. Sin embargo, concluyeron que los resultados indican que es poco probable una relación marcada entre el uso del DMPA y estos cánceres (288). En un reciente estudio canadiense d e mujeres retardadas mentales internadas, usuarias del DMPA, tres mujeres habían muerto de cáncer de las mamas. Esta cifra es superior al número esperado, basado en la tasa de la población general (591). Sin embargo, estas mujeres n o son comparables a la población general, puesto que casi todas eran nulíparas -lo que aumenta el riesgo de cáncer de las mamas en comparación con el de la población en general (625)- y muchas habían recibido una gran variedad de fármacos y tratamientos durante largos períodos d e tiempo (591). En consecuencia, n o es posible deducir ninguna conclusión de este estudio (216). En cuanto al cáncer del endometrio, aún n o hay resultados de estudios controlados sobre el DMPA y el NET EN para uso anticonceptivo. Edwin McDaniel y Malcolm Potts n o encontraron un aumento con el tiempo, del número anual de hospitalizaciones de casos de cáncer del endometrio en la provincia de Chiang Mai, Tailandia, entre 1974 y 1978. D e las 16 mujeres hospitalizadas con cáncer del endometrio de 1974 a 1978, que por razones de edad y región de residencia probablemente habían usado DMPA, sólo se pudo hacer u n seguimiento de 9 casos. Ninguna había usado DMPA (312, 327). A partir de 1979 la serie se había ampliado a 14 casos. Ninguna había usado DMPA (633). N o obstante, el número de mujeres es aún pequeño y el informe está basado en registros hospitalarios, que pueden ser incompletos, y que n o pueden tomar en cuenta a las mujeres que n o acudieron a hospitales. Pruebas arrojadas por el uso terapéutico Pruebas adicionales en contra de la relación entre DMPA y el cáncer provienen de estudios de mujeres que utilizan grandes dosis con fines ajenos a la anticoncepción. Las mujeres que reciben grandes dosis de DMPA o MPA oral para tratar el cáncer del endometrio o síntomas postmenopáusicos demuestran que n o aumenta el riesgo de tumores de las mamas (61, 62, 357). Por ejemplo, en u n estudio de más de 100 mujeres que durante varios años tomaron semanalmente u n gramo de MPA oral -aproximadamente 80 veces la dosis anticonceptiva- n o se observó ningún signo de disfunción mamaria o de displasia (desarrollo d e células anormales) (61). El MPA oral o el DMPA usados para tratar el cáncer de las mamas produce una remisión parcial en cerca de una tercera parte de los casos (292). Ocasionalmente, sin embargo, los síntomas pueden empeorar (264). En cuanto al cáncer del endometrio, la adición de progestinas, incluido el MPA, a estrógenos utilizados para tratar síntomas de menopausia, disminuye la incidencia de hiperplasia y de cáncer asociado a esa terapia (74, 171, 203, 357,493,504). Asimismo, el DMPA es u n tratamiento eficaz para el cáncer del endometrio y está aprobado para ese uso por la US FDA. Se administran dosis altas a mujeres con cáncer del endometrio metastático o recurrente, o bien antes d e una histerectomía (22, 62, 63, 72, 400, 438). Una remisión completa o parcial de cáncer metastático ocurre en el 18 al 57 por ciento de los casos (63, 400). K-21 Pruebas arrojadas por investigaciones sobre anticonceptivos orales La investigación sobre anticonceptivos orales combinados de estrógenos y progestinas demuestra que no hay riesgo adicional de cáncer de las mamas e indica un efecto protector contra el cáncer del endometrio, cáncer ovárico y tumores benignos d e las mamas en mujeres (véase Population Reports, A-6, mayo de 1983, Anticonceptivos orales en e l decenio de 1980.) E l mayor estudio de casos y controles realizado hasta la fecha no ha encontrado un aumento en el riesgo de cáncer de las mamas para el total de usuarias de la píldora o para cualquier subgrupo (631). Incluso los anticonceptivos orales que contienen acetato de clormadinona y acetato de megestrol no han sido relacionados con cáncer de las mamas (534). (Estas progestinas, como el DMPA, han causado nódulos en las mamas en perros beagles (ISO).) Las mujeres que toman anticonceptivo~orales tienen mucho menos posibilidad de desarrollar enfermedad benigna de las mamas; la protección es mayor mientras más altas sean las dosis de progestinas (608). No obstante, la relación entre la enfermedad benigna de las mamas y el cáncer de las mamas no está clara. Las mujeres que usan anticonceptivos orales combinados están protegidas contra ciertos cánceres del sistema reproductivo. Las mujeres que han usado anticonceptivos orales corren entre un quinto y la mitad del riesgo de desarrollar cáncer del endornetrio, en comparación con las no usuarias (224, 251, 439, 555). Dosis mas altas de progestinas quizás ofrezcan mayor protección (224). Los anticonceptivos orales protegen también contra el cáncer de los ovarios (610, 612, 626, 630, 644). La protección aumenta con el uso más prolongado y puede persistir durante más de 15 años después de su uso inicial (612). Se cree que esta protección resulta de prevenir la ovulación (614, 629, 649). Problemas de reglamentación e investigaciones futuras El conflicto aparente entre los estudios animales y las pruebas humanas en torno al DMPA plantea un dilema para los organismos reguladores de fármacos. iDeben estos organismos confiar en pruebas claras aunque probablemente no pertinentes de los estudios animales, o bien en las pruebas pertinentes pero menos concluyentes de los estudios humanos efectuados hasta la fecha? La postura de la US FDA consiste en confiar en los estudios animales. Los funcionairios señalan que podrían aprobar el Depo-Provera para uso anticonceptivo sólo en el caso de que la compañía Upjohn pudiera probar que: (1) los resultados de los estudios en perros y monos son claramente inaplicables a las mujeres; (2) estudios .humanos bien controlados demuestren que el DMPA es seguro, o (3) hay un grupo definido de mujeres norteamericanas para quienes los beneficios de Depo-Provera son mayores que los riesgos indicados por los estudios animales (502). Otros organismos reguladores de fármacos de Europa y el resto del mundo harl llegado a conclusiones diferentes, aprobando el DMPA con base en las mismas pruebas. Como dijera un ex comisionado de la US FDA en relación con el Depo-Provera: ". . . una decisión sobre la idoneidad de un fármaco anticonceptivo para los Estados Unidos no es necesariamente aplicable a cualquier otra nación, y menos todas" (256). Puesto que se pone seriamente en duda la pertinencia de los estudios animales, científicos, funcionarios de planifi- cación familiar y de organismos reguladores esperan los resultados de estudios humanos adicionales, a fin de esclarecer el asunto de las progestinas inyectables y el riesgo de cáncer. iQué estudios serían necesarios para resolver estos problemas? iCómo se deben realizar? iQuién los debe realizar? Tales estudios son caros. En Estados Unidos, por ejemplo, un estudio realizado en varios centros destinado a recopilar alrededor de 8.400 casos de cáncer del endometrio, las mamas o los ovarios, así como cerca de 6.000 controles para obtener resultados concluyentes sobre estos cánceres y los anticonceptivos orales, está costando aproximadamente US$6,5 millones, o bien, cerca de $500 por sujeto (640). E l estudio de la OMS de 9 países sobre anticonceptivos hormonales y cáncer tuvo un costo cercano a US$1,2 millones en los tres primeros años (648). En consecuencia, quien deba financiar tales estudios -gobiernos, fabricantes o ambos- pasa a ser un problema importante. El estudio de la OMS de casos y controles, actualmente en curso, proporcionará las respuestas más concluyentes al problema del cáncer. El estudio recopilará suficientes casos de cánceres del sistema reproductivo y las mamas como para poder detectar un aumento del riesgo tan pequeño como una duplicación (579). Otros estudios en curso incluyen un estudio sobre grupos estadísticos homogéneos (cohort study) en Nueva Zelandia, que compara principalmente el riesgo de desarrollar displasia cervical o cáncer en 7.500 usuarias de anticonceptivos orales, DMPA o DIUs. Estas mujeres tendrán un seguimiento de hasta cinco años. El estudio es financiado por la compañía Upjohn, aunque es dirigido por un comité independiente. La compañía Upjohn está apoyando también un estudio (cross-sectional study) tranversal en Kenya. Se comparará la incidencia de anomalías cervicales, cambios endometriales y tumores mamarios en mujeres usuarias de DMPA durante cinco o más años, con la incidencia en mujeres que usan anticonceptivos orales, DIUs, otros métodos o ningún método. Ambos estudios observarán, asimismo, hospitalizaciones y muertes en todos los grupos (527). En última instancia, cada organismo regulador nacional o programa nacional deberá evaluar las pruebas y llegar a conclusiones propias acerca de los riesgos y beneficios. Dichas decisiones comprenden no sólo información científica e interpretaciones, sino también factores no científicos, como los valores asignados a beneficios y posibles riesgos, la percepción de responsabilidades por parte del organismo regulador, y presiones políticas. En el campo de los anticonceptivos, las pruebas de su seguridad son mucho más importantes que las existentes con respecto a muchos otros productos ampliamente utilizados. Aunque ninguna prueba permite demostrar en forma concluyente una ausencia de riesgo, se está llevando a cabo una investigación cuidadosamente controlada, en un gran número de mujeres, a fin de proporcionar una base científica más sólida a futuras decisiones regulatorias. CONTINUACION Y ACEPTACION Las tasas de continuación del uso de inyectables varían mucho. Dependen fundamentalmente de la disposición de las usuarias a tolerar irregularidades menstruales. Aproximadamente el 50 al 75 por ciento de las mujeres POPULATION REPORTS que empiezan a usar inyectables trimestrales, los continúan usando un año después (129, 258,271,320,326,460, 570, 580). Estas tasas son comparables a las de los anticonc e p t i v o ~orales (272,309) y levemente menores que las de DIUs (véase Population Reports, B-4, noviembre de 1983, DIUs: un anticonceptivo apropiado para muchas mujeres). Las tasas de continuación en el uso del DMPA y NET EN son parecidas. El segundo ensayo de la OMS informó tasas de continuación basadas en el método actuarial de tablas de vida para el NET EN de 50 por 100 mujeres después de u n año, en el régimen de 8 semanas y en el régimen de 8 semanasll2 semanas. La tasa correspondiente al DMPA fue del 48 por 100 (580) (véase el Cuadro 4). El primer ensayo comparativo de la OMS informó u n abandono del método significativamente mayor del DMPA que del NET EN, pero la diferencia se debió a u n centro -Chandigarh, Indiadonde u n porcentaje muy alto de mujeres dejó de usar DMPA. Las tasas de abandono, excluido Chandigarh, n o fueron signficativamente distintas (570). Las tasas de continuación con dosis más altas de DMPA, administradas cada seis meses, oscilan entre el 41 y el 86 por ciento después de u n año, u n poco mayores que las señaladas en estudios del régimen trimestral (260, 324, 325, 416, 459). Descontento por las irregularidades menstruales El descontento con los inyectables nace principalmente debido a alteraciones en los patrones menstruales (véase la pág. K-11). Las irregularidades del sangrado menstrual llevan a entre el 20 y el 25 por ciento de las mujeres a dejar de usar inyectables (580). En el Programa Nacional d e Planificación Familiar de Tailandia, por ejemplo, una encuesta de 624 mujeres reveló que las alteraciones menstruales causaron dos veces más abandono del método que todos los otros efectos secundarios combinados (358). En el primer ensayo de la OMS, hasta el 65 por ciento de todos los abandonos entre las usuarias de DMPA, y hasta el 45 por ciento entre las de NET EN, se debieron a problemas de sangrado menstrual (191). La tolerancia a las perturbaciones menstruales varió. Por ejemplo, los patrones de sangrado menstrual fueron muy similares entre las mujeres de los dos centros hindúes, Chandigarh y Bombay, pero el abandono debido a problemas de sangrado menstrual fue de 3 a 10 veces mayor en Chandigarh (187). La amenorrea prolongada y el sangrado menstrual prolongado provocan la mayor insatisfacción. Ronald Cray y sus colegas descubrieron que era tres veces más probable que las mujeres que sangraban durante u n total de más de 30 días en u n intervalo de tres meses abandonaran el uso que las que sangraban menos. D e manera similar, las mujeres amenorreicas durante tres meses presentaban tres veces más posibilidades de abandonar el uso que las mujeres que menstruaron por lo menos una vez entre inyecciones (191). Las mujeres quizá tolerarían mejor las irregularidades menstruales si ellas y sus parejas recibiesen asesoramiento antes de la primera inyección y se les tranquilizara reiteradamente durante las inyecciones posteriores (41, 569). En Sri Lanka, algunos programas efectúan rutinariamente u n examen pélvico en cada una de las visitas de seguimiento, para asegurarle a la mujer que n o está embarazada (41). Clínicos de distintas partes informan que, una vez convencidas las mujeres de que la amenorrea n o es nociva, algunas se complacen con la ausencia de menstruación (271, 284, 347). POPULATION REPORTS Los inyectables de duración prolongada son de fácil uso, y ésta es una de las razones de su popularidad. Un folleto preparado por PlATA de México muestra que se requiere una inyección de NET EN sólo una vez cada dos meses. La amenorrea puede ser u n obstáculo formidable al uso d e inyectables por parte de algunas mujeres, a pesar de que n o amenaza la salud. En algunas culturas, las mujeres creen que la menstruación es esencial para que el cuerpo se libere de la "sangre mala". En varios países de Africa, Asia y el Medio Oriente, se cree que sin menstruación regular, la sangre se acumula en el cuerpo, causando dolores de cabeza, letargo, locura y debilitamiento (41, 163, 242,248,250, 320,356,389,566). En u n estudio de la OMS sobre la menstruación, que abarcó más de 5.300 mujeres de 10 países, se reveló que muchas mujeres relacionan la amenorrea con la menopausia, la esterilidad y el inicio de la vejez. En los diez centro's encuestados, del 50 al 91 por ciento sostuvo que n o utilizaría u n método anticonceptivo que causara amenorrea. Las mujeres urbanas más jóvenes, mejor educadas, fueron las más dispuestas a tolerar la amenorrea (566). El sangrado irregular y prolongado puede interrumpir seriamente la vida cotidiana de una mujer. En las sociedades musulmanas, por ejemplo, las mujeres n o deben rezar mientras están sangrando (558). En muchas culturas, las relaciones sexuales durante la menstruación están prohibidas o se consideran inadecuadas o poco saludables (242, 566). Por lo tanto, los maridos pueden oponerse a que sus mujeres utilicen inyectables (242). O t r o tipo de actividades, como cocinar o visitar amigos y parientes, puede estar también prohibido por la costumbre (242, 558, 566). Reacción frente a otros efectos secundarios En comparación con las irregularidades menstruales, otras quejas entre usuarias de inyectables raramente conducen al abandono del método. En el primer ensayo de la OMS, por ejemplo, las tasas de abandono después de u n año, calculadas según el método actuarial de tablas de vida, debido a efectos secundarios ajenos a los problemas menstruales, fue de 7,6 por 100 mujeres para el NET EN y de 3,l para el DMPA (570) (véase el Cuadro 4). Otros estudios informan tasas de abandono igualmente bajas (89, 258, 271, 328, 459, 460). Relativamente pocas mujeres dejan de usar inyectables debido al aumento de peso. En los estudios cooperativos de la compañía Upjohn, que abarcaron principalmente a mujeres norteamericanas, sólo el 1,7 por ciento descontinuó el uso debido a esta razón en tres años (459). De hecho, en algunos países en desarrollo, las mujeres consideran el aumento de peso u n beneficio de los inyectables (24,89). Otras quejas de usuarias de inyectables, incluidas cefaleas, molestias abdominales, y angustia y nerviosismo, llevan al 1 a 2 por ciento a abandonar el uso (164, 570). Aceptación de los inyectables Muchas mujeres consideran que los inyectables son u n método muy satisfactorio para controlar la natalidad. En programas de planificación familiar en los cuales se ofrece a las mujeres una opción entre métodos que incluyen inyectables, generalmente entre una y tres cuartas partes optan por los inyectables (56, 90, 217, 258, 314, 390, 467, 484, 581). El método de administración explica en parte esta aceptación. En muchos países en desarrollo a la gente le gusta los medicamentos inyectables porque han probado ser muy eficaces contra enfermedades. En Tailandia, por ejemplo, el respeto por las inyecciones se remonta a las de penicilina, en la feliz campaña para erradicar la frambesia durante los años cincuenta, y se debe asimismo al continuo uso eficaz de otros antibióticos inyectables (358). Los inyectables son populares también porque son fáciles de usar. Muchas mujeres prefieren una inyección única cada tantos meses y n o tomar una píldora o anotar la temperatura basal todos los días. La inyección n o está vinculada al momento del coito, y las mujeres n o tienen que comprar o almacenar suministros. Los inyectables se pueden abandonar después de tres meses, sencillamente al n o hacerse aplicar otra inyección, mientras que u n D I U o u n implante n o biodegradable debe ser extraído por u n trabajador de la salud capacitado. Además, los inyectables son administrados fuera de la casa. Una mujer puede mantener su intimidad y, si es necesario, puede usar el inyectable sin conocimiento del marido o la familia (242, 329, 390). Al igual que los anticonceptivos orales combinados de estrógenos y progestinas, los inyectables son muy eficaces para evitar los embarazos. A diferencia de las usuarias de anticonceptivos orales, sin embargo, las mujeres que usan inyectables de sólo progestinas n o experimentan los efectos secundarios menores asociados a los estrógenos, como la náusea o el peligro raro pero más serio de coágulos sanguíneos. Por lo demás, las mujeres que están amamantando pueden preferir u n método de solo progestina, puesto que los estrógenos pueden suprimir la producción de leche (véase la pág. K-17). INYECTABLES MENSUALES La investigación de los inyectables mensuales -tanto de los combinados de estrógeno y progestina, y de las formulaciones de sólo progestinas- se ha estado llevando a cabo desde principios del decenio de 1960. A pesar de que se han desarrollado más de 15 fórmulas, sólo tres se han probado en grandes números de mujeres, y sólo dos se comercializan. Las inyecciones mensuales de progestinas -con o sin estrógenos- entrañan una dosis más baja de hormonas al mes que las inyecciones trimestrales. La eficacia es alta, y los efectos secundarios, como las irregularidades menstruales y la amenorrea, son menos frecuentes que con las dosis trimestrales. Estas ventajas deben ser sopesadas contra el inconveniente y el mayor costo de 12 inyecciones en vez de 4 anuales y los posibles efectos secundarios del estrógeno en algunos productos. Según se informa, en los lugares en que se venden tanto los inyectables mensuales como los trimestrales, las formulaciones mensuales suelen tener mayor aceptación (404). Esto puede deberse a que el uso mensual corresponde al ciclo menstrual, o bien, a que el farmacéutico promueve más activamente el producto mensual. U n inyectable mensual, que combina 150 m g de acetofénido de dihidroxiprogesterona y 10 m g deenantato de estradiol, l o comercializan a l o menos ocho compañías farmacéuticas en América Latina y España con distintos nombres comerciales, incluidos Perlutal y Tobasel (183, 513). Una dosis mensual, que consiste en la mitad de dichas cantidades, .la comercializan a lo menos 4 compañías farmacéuticas en América Latina (199). En Estados Unidos, la Squibb Pharmaceutical Company retiró el producto de dosis más alta, llamado Deladroxate, de las pruebas clínicas hacia fines de los años sesenta, debido a que: (1) las pruebas toxicológicas demostraron tumores en las mamas de perros beagles e hiperplasia pituitaria en ratas, y (2) n o fue posible determinar cabalmente la distribución y la excreción del componente de estrógeno en el cuerpo (183, 513). El Deladroxate había sido probado en más de 20.000 ciclos. N o se habían informado embarazos. Se había observado sangrado irregular en aproximadamente u n 25 por ciento de los ciclos. El porcentaje de mujeres que abandonó el fármaco debido a problemas de sangrado osciló entre el 7,5 y el 26 por ciento (107, 183, 544). Tal como con el uso del DMPA, el retorno de la fertilidad ~ u e d retrasarse. e Las mujeres han quedado embarazadas'entre 1 y 39 meses después de descontinuar las inyecciones (253, 544). Otro inyectable mensual ampliamente probado, el CycloProvera, también ofrece protección anticonceptiva casi completa y control relativamente bueno del ciclo menstrual (183,513). En tanto que las formulaciones iniciales de Cyclo-Provera contenían dosis mayores (60, 464), el régimen actualmente estudiado entraña 25 m g de DMPA y 5 mg de cipionato de estradiol cada 28 días. En u n estudio tailandés, más del 80 por ciento de 111 usuarias de CycloProvera informó apenas u n episodio de sangrado por ciclo, y sólo 7 por ciento de las mujeres n o menstruó durante más d e tres meses. La tasa de continuación después de u n año fue del 79 por ciento, y después de dos años del 44 por ciento (270). El aumento de peso es u n efecto secundario común. Los exámenes del suero sanguíneo y POPULATlON REPORTS las mediciones de la presión sanguínea n o demostraron ningún cambio durante el uso (60,105,153,270,442,464). Una investigación reciente de los niveles en el plasma indican que la dosis de Cyclo-Provera puede ser reducida aún más (60, 269). La OMS está estudiando inyecciones con 12,5 m g de DMPA y 2,5 m g de cipionato de estradiol (202). Actualmente n o se comercializa el Cyclo-Provera. En la República Popular de China, el "lnyectable No l", que consiste de 250 m g de caproato de 17-hidroxiprogesterona y 5 m g d e valerato de estradiol, probablemente representa el 1 por ciento de todos los anticonceptivos. Anualmente se fabrican cerca de 10 millones de dosis. Se administran dos inyecciones durante el primer mes de uso y una inyección mensual posteriormente (395). Los científicos chinos están estudiando dos nuevos inyectables. El primero combina 25 m g de acetato de megestrol con 3,5 m g de 17P-estradiol; el otro, 80 m g de NET EN con 5 m g de valerato de estradiol (594). Los DlUs liberadores de hormonas disminuyen la pérdida de La OMS también está estudiando inyectables mensuales que combinan NET EN y valerato de estradiol (183, 579). Para determinar la dosis adecuada, se están efectuando estudios de dos regímenes -50 m g de NET EN con 5 m g de valerato de estradiol y 25 m g de NET EN con 2,5 m g de valerato de estradiol (202). DISPOSITIVOS INTRAUTERINOS LIBERADORES DE PROGESTINAS A comienzos de los años setenta se agregaron progestinas naturales y sintéticas a los DIUs. Esta fue la primera vez que se administraron hormonas anticonceptivas localmente y n o sistémicamente (46). El único D I U liberador de progestina actualmente comercializado es el Progestasert, u n dispositivo en forma de T, que contiene 38 m g de progesterona liberada a una tasa constante de 65 p g diaria por u n año (15). Esta cantidad de progesterona n o evita la ovulación, pero sí suprime los cambios cíclicos normales en el endometrio, haciendo que la implantación de u n óvulo fertilizado sea poco probable (15, 463). U n dispositivo que contiene 52 m g de progesterona y diseñado para durar por más de dos años fue probado en u n ensayo realizado en varios centros (579). Se puso término al ensayo cuando las tasas de embarazo comenzaron a aumentar en los 20 a 22 meses (430). Las principales ventajas del Progestasert, en comparación con otros DIUs, son la menor pérdida de sangre y la menor dismenorrea (menstruación dolorosa). Las desventajas principales son la necesidad de reemplazarlo una vez al año, el sangrado intermenstrual y el manchado y, posiblemente, más embarazos ectópicos que con otros DlUs (véase Population Reports, B-4, noviembre de 1983, DIUs: un anticonceptivo apropiado para muchas mujeres). Tanto la OMS como el Population Council están probando DlUs en forma de T que liberan levonorgestrel. El dispositivo de la OMS contiene 10 m g de levonorgestrel. La baja tasa de liberación -2 p g diarios- tiene por objeto evitar efectos sistémicos. N o tiene por finalidad evitar la ovulación sino evitar los embarazos, mediante efectos locales sobre el moco cervical y el endometrio. Se calcula que su duración es de 10 años (575, 579). N o hay información disponible acerca d e los resultados clínicos de este DIU. POPULATION REPORTS sangre menstrual y por consiguiente, quizás ayuden a evitar la anemia. El Piogestasert (derecha) libera aproximadamente 65 pg de progesterona diariamente durante cerca de un ano. El DIU de levonorgestrel (izquierda), aún no comercializado, libera alrededor de 20 pg de hormona diariamente, por lo menos durante siete años. Con ambos DlUs se presentan pocos embarazos. El Population Council desarrolló inicialmente dos dispositivos -el primero contenía43 m g de levonorgestrel, liberado a una tasa de 20 p g diarios; el segundo contenía 56 mg, liberado a una tasa de 30 p g diarios (297, 376). Debido a u n leve cambio en el procedimiento de fabricación, se ha producido u n dispositivo modificado que contiene 60 m g de levonorgestrel, liberado a una tasa diaria de 20 pg; actualmente está en prueba (361). Estos DlUs del Population Council -que liberan aproximadamente 10 veces la dosis diaria de levonorgestrel liberada por el dispositivo de la OMS- evitan la ovulación en aproximadamente el 20 al 30 por ciento de las mujeres durante el primer año de uso (373, 374). Los DlUs liberadores de progestinas son altamente eficaces. Con el Progestasert, las tasas de embarazos son de alrededor d e 2 a 3 por cada 100 mujeres p o r año. Con los dispositivos liberadores de levonorgestrel del Population Council las tasas de embarazos son aún más bajas. En dos años n o se registraron embarazos en 163 mujeres que usaron el dispositivo de 56 mg. A los dos años, la tasa de embarazos en 164 usuarias del D I U de 43 m g fue de sólo 0,6. Se trata de una tasa de embarazos parecida a la que presentan las usuarias de DMPA. (No se conocen a ciencia cierta los efectos que puede tener en el feto en desarrollo la liberación de progestinas en el útero, de ocurrir u n embarazo.) Las tasas de continuación, a los dos años, han sido del 55 por ciento aproximadamente (297, 376). Los efectos secundarios más frecuentes de los DlUs liberadores d e progestinas son el sangrado o el manchado intermenstruales. El número total de días de sangrado aumenta hasta u n 42 por ciento comparado con los niveles de preinserción (197,282,375,376,432,525). Sin embargo, en &unos estudios, el número total de días de sangrado en cada ciclo fue disminuyendo paulatinamente con el tiempo (369, 376). Durante el primer año de uso, del 5,6 al 11 por ciento de las mujeres se hacen extraer el D I U liberador d e progestinas debido al sangrado y10 dolor (15, 282, 369, 375, 376). Aunque los DlUs liberadores de progestinas aumentan el manchado, también disminuyen el volumen total de sangre perdida en hasta un 40 por ciento (197, 297, 298,302, 376,444). En un estudio de más de 300 mujeres usuarias de DlUs liberadores de levonorgestrel, el 11 por ciento se hizo amenorreicas en un año (375). La disminución de la pérdida de sangre puede evitar la anemia. Entre mujeres que usan DIUs liberadores de progestinas, los niveles promedios de hemoglobina y ferritina en el suero son más altos que los niveles de preinserción (206, 370, 423, 424, 575). También el dispositivo Progestasert y el DIU liberador de levonorgestrel, del Population Council, probablemente disminuye en hasta un tercio la incidencia de dismenorrea (174, 375, 545, 583). A pesar de que las pruebas son aún preliminares, el efecto local de las progestinas sobre el endometrio y las trompas de Falopio puede disminuir el riesgo de inflamación pélvica o infección. E l levonorgestrel hace que el moco cervical se ponga más espeso, lo que podría evitar la entrada de bacterias al cervix. Por lo demás, el escaso sangrado menstrual no ofrecería un medio para la multiplicación de bacterias (296). En más de 15.000 meses-mujer de uso del DIU liberador de levonorgestrel del Population Council, sólo se extrajeron tres dispositivos debido a infección pélvica, una tasa de 0,24 por 100 años-mujer de uso (297). Estudios preliminares en pequeños números de mujeres sugieren que la inflamación no bacteria1 de las trompas ocurre menos frecuentemente entre usuarias del Progestasert que entre usuarias de otros DlUs no hormonales (142). Existen pruebas de que se pueden presentar más frecuentemente embarazos ectópicos en las usuarias de Progestasert que en las de otros DIUs. Un conjunto de pruebas clínicas arroja una tasa de aproximadamente cinco embarazos ectópicos por 1.O00 años-mujer con respecto al Progestasert (14, 1751, en comparación con 1,2 con respecto al Asa de Lippes y el Saf-T-Coi1y 0,96 en el caso de los DlUs de cobre (473,506). En pruebas del DIU liberador de levonorgestrel del Population Council se registró un embarazo ectópico en más de 1.660 años-mujer de uso (296). La tasa puede ser baja porque este DIU evita la ovulación en algunas usuarias. IMPLANTES Los primeros implantes subdérmicos anticonceptivos, fabricados de tubos flexibles no biodegradables llenos de hormonas y colocados bajo la piel, fueron desarrollados en los años sesenta. Los implantes ofrecen la posibilidad de un anticonceptivo de larga duración sin intervenciones médicas frecuentes o acción continua de parte de la usuaria (466). Además, se cree que una liberqción continua y relativamente constante del fármaco (denominada tasa de liberacion de orden cero) (zero order release rate) causará menos efectos secundarios que los inyectables, que inicialmente crean niveles muy altos de hormona en el plasma, o que los anticonceptivos orales, que producen fluctuaciones diarias de niveles de hormona (69, 469). Modo de entrega La mayoría de los implantes son fabricados de la elastómera polidimetisiloxano (Silastic) en una de dos formas: Los implantes anticonceptivos que contienen levonorgestrel han sido desarrollados por el Population Council. Los implantes, que se colocan inmediatamente debajo de la piel, liberan progestina lenta y continuamente. Hay dos sistemas en estudio: uno consiste en seis cápsulas (izquierda); el otro, en dos varillas. moldeado en cápsulas huecas llenas de hormona, o e moldeadas en varillas sólidas impregnadas de hor- mona (véase la foto de esta página). La mayoría de las varillas y cápsulas son de 2 a 4 cm de largo, con un diámetro exterior de 2,4 mm. Pueden ser colocadas debajo de la piel con una aguja hipodérmica grande (calibre de trócar 10 a 11) (110, 476). Los implantes deben ser insertados justo debajo de la piel, técnica que requiere de un trabajador de la salud especialmente calificado. Se requiere anestesia local y el procedimiento completo demora entre 10 y 15 minutos. La extracción requiere también anestesia local, porque se hace una pequeña incisión -de alrededor de 5 cm de largo- en la piel, sobre el implante. Si los implantes son insertados profundamente debajo de la piel, en el músculo, pueden ser difíciles de encontrar y de extraer. Sin embargo, si los implantes son colocados adecuadamente, la extracción es más fácil. El Population Council recomienda colocar los implantes en la parte interior del antebrazo o del brazo superior. Los implantes colocados en las nalgas o en el muslo tienden a desplazarse debajo de la piel y son mas difíciles de extraer (501, 551). Los implantes biodegradables, que no necesitan extraerse a no ser que la mujer desee quedar embarazada antes, se encuentran actualmente en las etapas iniciales de desarrollo (véase la pág. K-31). La cantidad de hormona liberada por los implantes puede variar mucho, dependiendo de varios factores. Estos incluyen : e El tipo de hormona usada. Algunas hormonas son de difusión más rápida que otras, por lo que el implante tiene una duración más corta. Si las hormonas son de difusión más lenta el implante dura más, pero pueden necesitarse más implantes para entregar una dosis suficientemente grande para ser eficaz. Con todas las hormonas la cantidad liberada disminuye con el tiempo, aunque con algunas la tasa se estabiliza después de los primeros meses (364). La superficie de la varilla o cápsula. A medida que aumenta la superficie del implante, la tasa de hormona liberada aumenta. El tipo de implante. Las varillas tienen una tasa de liberación entre tres y cuatro veces más rápida que la POPULATION REPORTS mamas de perros beagles (97). La progesterona y la progestina ST 1572 causaron inflamación en torno al lugar del implante (97). El acetato de clormadinona y los compuestos más nuevos lynestrenol y R 1364 se difunden a través de la membrana tan rápidamente, que incluso cuatro o tos más nuevos linestrenol y R 1364 se difunden a través de la membrana tan rápidamente, que incluso cuatro o cinco cápsulas durarían menos de u n año (97). El gestrigona, también llamado metilnorgestrienona o R 2323, aumentó los niveles de las transaminasas (enzimas hepáticas), sugiriendo una perturbación de la función hepática. También causó efectos secundarios androgénicos, como el acné y el crecimiento de vello (12,102,112). Más recientemente, se probaron la noretindrona y el acetato de noretindrona pero se abandonaron porque las tasas de embarazas eran demasiado altas (97,114,381,382,413,496,501, 562). La adición de estrógenos a los implantes de progestinas también incrementó las tasas de embarazos (97). cápsula, porque la hormona recorre una distancia menor para llegar a la superficie del implante (364). o El número de varillas o cápsulas utilizadas. Se han probado de 1 a 12. o Esterilización del implante. Algunas varillas y cápsulas n o deben ser esterilizadas por irradiación, puesto que ésta tiende a disminuir la tasa de liberación del fármaco (364). Caracterkticas d e las usuarias (277, 349, 363, 364, 551, 553). N o está claro por qué varía la tasa de liberación entre las mujeres. En algunas mujeres se forma u n tejido denso y fibroso alrededor de los implantes que tal vez retrase la liberación de hormona (238, 364), aunque ello n o parece aumentar las tasas de embarazos (238). La tasa en la cual el fármaco entra a la circulación sanguínea parece depender, en parte, del riego sanguíneo local, la cantidad de grasa corporal y, posiblemente, de la actividad física de la persona (58, 111). Las hormonas más prometedoras probadas hasta la fecha son: el ST 1435, la norgestrienona, o el levonorgestrel (98, 295). En ensayos clínicos con una a cinco cápsulas de ST-1435, una progestina derivada de la testosterona, se informan tasas de embarazos de uno o menos por 100 mujeres-año, y pocos efectos secundarios (103, 104, 295). N o obstante, estos implantes sólo duran alrededor de seis meses (103). Hormonas probadas En las últimas dos décadas se han probado por l o menos 10 compuestos en implantes, en u n total superior a las 5.000 mujeres (97, 110). Varios de ellos resultaron inadecuados para el uso anticonceptivo. Por ejemplo, el acetato de megestrol, la primera progestina usada en pruebas clínicas de implantes (99,100,115,498,499), fue eliminado después de que pruebas toxicológicas, a principios de los años setenta, demostraron que causaban nódulos en las Figura 5. Promedio d e niveles de levonorgestrel en el plasma o suero sanguíneo durante el primer mes de uso de cinco anticonceptivos 1 2 3 4 5 6 7 8 9 10 11 12 13 14 15 16 17 18 19 20 21 22 23 24 25 27 26 Días -Anticonceptivo OvraP oral --- Anillo vagina1 del Population CouncilZ ....Implante Norplanf ---Anillo Vagina1 de la OMS4 -DIU del Population Counci15 1 Cada píldora contiene 250 pg de levonorgestrel (500 pg de dl-norgestrel) y 50 pg de etinil estradiol. Fuente: adaptada de Brenner y col. (69). ?Latasa de liberación diaria de este anillo oscila de 206 a 333 pg de levonorgestrely 175 a 254 pg de estradiol. Este anillo, con un diámetro exterior de 61 mm, libera hormona aproximadamente a la misma tasa que el anillo de 58 mm, actualmente sometido a prueba por el Population Council. Fuente: adaptado de Mishell y col. (342). 3La tasa de liberación diaria de Norplant (6 cápsulas) es aproximadamente 68 pg de levonorgestrel durante las primeras semanas de uso, disminuyendo hasta cerca de 40 pg a fines del primer año de uso y hasta 30 pg a fines del quinto año (635). Fuente: Croxatto y col. (111). 4La tasa de liberación diaria para el anillo de la OMS es de aproximadamente 20 pg de levonorgestrel. Fuente: Landgren y col. (279). 5La tasa de liberación diaria de este DIU es de aproximadamente 20 pg de levonorgestrel durante el primer año de uso. Fuente: Luukkainen y Nilsson (297). La progestina levonorgestrel se siendo utiliza en varios métodos anticonceptivos, incluidos anticonceptivos orales combinados de estrógeno-progestina, anillos vaginales, DlUs e implantes. Los niveles hormonales promedio en el plasma o suero sanguíneo de las usuarias reflejan los distintos modos de administración. Los anticonceptivos orales producen fluctuaciones diarias de los niveles. Con el anillo vaginal del Population Council, destinado a evitar la ovulación, los niveles suben durante la primera semana de uso, y después disminuyen paulatinamente. Durante los períodos siguientes de uso, el nivel es casi constante y de aproximadamente2 ng/ml. Los niveles de levonorgestrel se mantienen bajos y constantes con el anillo vaginal de la OMS, que no evita la ovulación constantemente, con el DIU del Population Council y con el implante Norplant. Con todos los métodos anticonceptivos hormonales, los niveles varían considerablemente en distintas mujeres. POPULATION REPORTS K-27 Los implantes de ST 1435 pueden ser quizás un buen anticonceptivo para mujeres lactante~,porque el ST 1435 secretado en la leche materna tal vez resulte inactivo en los niños (295). Los implantes de norgestrienona (o R 2010) tienen también una duración relativamente corta (101, 125, 471): aproximadamente 18 a 24 meses por seis cápsulas (97). En un ensayo aleatorio doble ciego, la tasa de embarazos al año calculada según el método actuarial de tablas de vida fue de 3,5 por 100 mujeres, es decir, significativamente más alta que la tasa de 0,6 de los implantes de levonorgestrel (402). Sin embargo, el abandono debido a irregularidades menstruales fue significativamente menos frecuente que en el uso de los implantes de norgestrienona: 4,3 por 100 mujeres después de un año, comparado con 12,3 en el caso de los implantes de levonorgestrel (402). Implantes de levonorgestrel El Population Council, que ha apoyado gran parte de la investigación sobre implantes, favorece el levonorgestrel porque el fármaco se difunde lentamente a través del portador y es altamente eficaz en pequeñas cantidades. El Population Council ha desarrollado y está probando dos sistemas. El primero, llamado Norplant, consiste en seis cápsulas, cada una de las cuales contiene 36 mg de levonorgestrel. Se calcula que la duración eficaz de este sistema es de por lo menos cinco años (124,480). En las primeras semanas de uso los implantes liberan un total de aproximadamente 68 pg de levonorgestrel cada día. La cantidad disminuye paulatinamente hasta cerca de 40 pg al final del primer año y 30 pg a fines del quinto (635). Esto equivale a cerca de una quinta parte del levonorgestrel contenido en la dosis más baja de los anticonceptivo~orales combinados. En 1983, se autorizó el uso de Norplant en Finlandia. El Population Council proyecta empezar con los procedimientos de registro de Norplant en más de 40 países en los próximos cuatro años (652). Asimismo, el Population Council está patrocinando ensayos en los Estados Unidos, Europa y América Latina, en los que se compara el Norplant con el sistema Norplant 11, que consiste en dos varillas en lugar de seis cápsulas. Cada varilla contiene 70 mg de levonorgestrel. La tasa de liberación diaria de ambas varillas es de aproximadamente 50 pg (361). Puesto que consiste en dos y no seis implantes, el Norplant 11puede resultar menos visible y más fácil de insertar y extraer. En consecuencia, puede ser más aceptable para las mujeres. El Population Council se propone solicitar la aprobación de la US FDA para el uso de Norplant IIen los Estados Unidos (361). En dos ensayos clínicos de larga duración con cápsulas de Norplant se informan tasas de embarzaos en tres años inferiores a 1 por 100 mujeres. En un estudio chileno de 101 mujeres, no hubo embarazos en cinco años (124,126). La tasa de continuación a los cinco años calculada según el método actuarial de tablas de vida fue del 54 por ciento (124). En un ensayo mayor realizado por el comité Internacional de Investigaciones en Anticoncepción (International Committee for Contraception Research) (ICCR) del Population Council en varios centros en seis países latinoamericanos y escandinavos, se informó una tasa de embarazos de 0,7 en tres años (476). Hubo un embarazo ectópico con los implantes de levonorgestrel, durante los primeros tres años de uso, ó 0,7 por 1.000 años-mujer. No está claro si aumentará la frecuencia de embarazos ectópicos con los implantes de levonorgestrel según la duración del uso. Durante el primer año de uso, la ovulación ocurre en aproximadamente el 1-0 por ciento de los ciclos menstruales. En los años subsiguientes, sin embargo, a medida que la tasa de liberación de levonorgestrel disminuye hasta alcanzar entre 30 y 40 pg diarios (635), la ovulación ocurre más frecuentemente, entre 30 y 75 por ciento de los ciclos, aproximadamente (113). Efectos secundarios Los implantes, como otros anticonceptivos de sólo progestinas, interrumpen el ciclo menstrual. En dos estudios, las tasas de abandono, calculadas según el método actuarial de tablas de vida, debido a irregularidades menstruales entre usuarias de cápsulas Norplant fueron del 7 y 9,5 por ciento después de un año. Esto representa cerca de la mitad de los abandonos del uso en el primer año (126, 476). El sangrado prolongado e irregular es la queja más común (480). Las irregularidades menstruales disminuyen con el tiempo. En el estudio de la ICCR, por ejemplo, durante los primeros tres meses posteriores a la inserción, el 36 por ciento de las mujeres tuvieron 31 o más días de sangrado y sólo el 12 por ciento en el noveno a décimosegundo mes. Hubo amenorrea de más de 60 días en el 32 por ciento durante los tres primeros meses, y en el 24 por ciento en el noveno a décimosegundo mes (148). La utilización de implantes con una mayor tasa de liberación diaria de levonorgestrel parece disminuir el sangrado prolongado e irregular y aumentar la amenorrea (148). A pesar del sangrado frecuente y prolongado que se presenta con implantes, la pérdida de sangre menstrual promedio puede ser menor que antes de la inserción y puede disminuir aún más con el tiempo (372). El hematócrito promedio y los niveles promedio de hemoglobina en las mujeres que usan Norplant de seis cápsulas, no cambian o bien aumentan con el tiempo, un efecto beneficioso (12, 147, 372, 402). El abandono del uso debido a irregularidades menstruales se puede disminuir sustancialmente si las mujeres reciben asesoramiento antes de la inserción y durante los primeros meses de uso. En un estudio, la tasa de abandono de usuarias que no habían sido cuidadosamente informadas sobre los efectos secundarios fue del 10,5 después de un año (403). En un segundo grupo de usuarias, a las cuales se advirtió que los problemas de irregularidades menstruales iban a disminuir y que el sangrado irregular no tenía efectos adversos, la tasa fue del 5,2 (475, 476). Los implantes de levonorgestrel causan aparentemente pocos efectos secundarios sistémicos, fuera de las irregularidades menstruales: e El promedio de aumento de peso es pequeño: entre 1,4 y 2,7 kg en el primer año de uso (147, 403). No se han observado cambios en la presión sanguínea o en el metabolismo de carbohidratos o Iípidos (112, 126,147) o en niveles de transaminasa (enzimas hepáticas) (12, 112). En un estudio, las usuarias de larga duración de Norplant presentaban niveles más bajos de colesterol y trigliceridas que las usuarias de DIUs, un efecto beneficioso. Los niveles de colesterol de lipoproteínas de alta densidad fueron los mismos en-ambos grupos (109). POPULATION REPORTS Los informes sobre los niveles de cortisol en el plasma n o son concluyentes, pero no se han observado síntomas clínicos de hipoadrenalisrno (109, 112, 126). Efectos secundarios andrógenicos, que incluyen el crecimiento de vello y acné, han ocurrido en hasta el 15 por ciento de las mujeres en un estudio de cinco años, pero rara vez han conducido al abandono (124). Sin embargo, en otros estudios, estos efectos secundarios, que pueden ser causados por las progestinas, n o fueron más comunes en usuarias de implantes que en usuarias de DlUs de cobre (403). Aproximadamente el 11 por ciento de las 101 muieres en los ensayos chilenos con Norplant, tuvieron dolores en el abdomen inferior y u n ensanche temporal de las trompas de Falopio y los ovarios. Una mujer debió operarse debido al aumento de tamaño de quistes foliculares. Los síntomas desaparecieron espontáneamente en las otras mujeres (126). También se han registrado dolor y ensanchamiento de los anexos en hasta el 40 por ciento de las mujeres usuarias de implantes con acetato de megestrol y otras hormonas (114, 116). Entre el 15 y el 33 por ciento de usuarias de Norplant sufrió cefaleas, nerviosismo o depresión, pero este porcentaje fue inferior al de u n grupo de control que usaba DIU de cobre (403). Las infecciones en el lugar del implante son raras. Menos de una mujer entre 100 ha presentado signos de inflamación local (476). El efecto anticonceptivo de los implantes Norplant es reversible mediante la extracción del mismo. De 53 mujeres que querían concebir, el 77 por ciento quedó embarazada al año siguiente de la extracción (474). El tiempo de concepción no es afectado por la duración del uso (124, 474). Aceptación Es difícil medir la aceptación de los implantes en los programas nacionales de planificación familiar, puesto que sólo se han probado en ensayos clínicos relativamente pequeños, que abarcan a participantes muy selectos. Las pruebas preliminares sugieren que la mayoría de las usuarias está muy satisfecha. En los dos ensayos clínicos, las tasas de continuación después de un año fueron del 76 y el 87 por ciento (124, 476). Sin embargo, la aceptación varió en diferentes países. Las tasas de continuación después de dos años oscilaron entre el 38 por ciento en la República Dominicana y el 75 por ciento en Chile (480). Alrededor del 80 al 85 por ciento de las mujeres que participaron en el estudio de la ICCR recomendó los implantes a sus amigas o parientes. La facilidad de uso fue la ventaja más citada del método. A muchas mujeres les gustó también la ausencia de efectos secundarios, la alta eficacia y su larga duración. Las desventajas principales mencionadas por algunas mujeres fueron las irregularidades menstruales y otros efectos secundarios. La mayoria de las mujeres sintió poco malestar durante la inserción del implante. N o obstante, cerca del 30 por ciento encontró dolorosa la extracción v el 10 al 12 Dor ciento informó molestias menores o malestar durante el uso del implante (480). A diferencia de otros métodos, los implantes son a veces visibles bajo la piel y pueden ser observados por rniembros de la familia y amigos. Esto puede perturbar a algunas mujeres. Sin embargo, la visibilidad de los implantes n o POPULATION REPORTS provocaron reparos durante los ensayos clínicos. Aproximadamente el 40 por ciento informó que amigos y parientes habían notado los implantes. S610 a una cuarta parte de estas mujeres les molestó este hecho. Sólo el 7 por ciento consideró la visibilidad de los implantes la característica que más les disgustó (480). A diferencia de la práctica de colocar los implantes en el antebrazo, ahora se colocan en la parte interna del brazo superior y, por l o tanto, resultan quizá menos visibles (474). ANILLOS VAGINALES Los anillos vaginales liberadores de hormonas, fabricados inicialmente a fines de los años sesenta y comienzos de los años setenta, utilizan portadores de Silastic (polidimethilsiloxano), el mismo material usado en los implantes subdérmicos anticonceptivos. Los anillos, tubos circulares que contienen hormona, son insertados en la vagina, alrededor del cewix. Estan diseñados para permanecer en la vagina sea por tres semanas o por cerca de tres meses, según el tipo de anillo. A diferencia de las usuarias de otros métodos de duración prolongada, las mujeres pueden fácilmente empezar a usar y1abandonar los anillos vaginales. No está claro, sin embargo, si los anillos vaginales serán más aceptables que los diafragmas u otros métodos de barrera, que son más baratos y que prácticamente n o tienen efectos secundarios. Se han fabricado anillos vaginales de distintos tamaños y diseños. Los anillos actualmente en prueba tienen u n diámetro exterior de 50 a 60 mm y un espesor de 7,5 a 9,s mm. A diferencia de los diafragmas, los anillos n o necesitan ser acomodados con precisión, puesto que n o actúan como barreras a los espermatozoides (135). Sin embargo, el tamaño del anillo puede afectar la comodidad de la usuaria. La erosión vagina1 y la irritación son raras con los anillos actualmente en uso, pero era frecuente con anillos más grandes y rígidos, así como con los más delgados (339, 341, 345). Las tasas de liberación hormonal de los anillos varían mucho, según el diseño del anillo así como de la solubilidad de la hormona (362). Se han probado cuatro diseños. El anillo homogéneo, impregnado en forma igual y completa con hormona, liberaba inicialmente mucha hormona y después disminuía marcadamente (362). El anillo de franja, o anillo de colágeno, contenía toda la hormona en una pequeña banda de colágeno moldeada en la circunferencia externa del anillo. La banda frecuentemente se quebraba o se desprendía del anillo (170,434, 539). Estos dos diseños han sido abandonados. Actualmente, el Population Council y la OMS están estudiando los anillos de corteza y de núcleo. El diseño de corteza (shell) consta de una parte central libre de hormona, rodeada por una estrecha franja llena de hormona que a su vez, está cubierta por u n tubo de Silastic. En el diseño de núcleo (core), toda la hormona está en una núcleo central de 3,s m m de diámetro (278, 434). Em ambos diseños, toda la hormona recorre aproximadamente la misma distancia antes de ser liberada, por lo que la tasa de liberación es relativamente estable (434). El desarrollo de anillos vaginales ha adoptado dos enfoques distintos. Uno consiste en u n anillo que libera sufi- ciente hormona para inhibir la ovulación. Estos anillos están destinados al uso intermitente. En el régimen más ampliamente probado, el anillo se deja en la vagina durante tres' semanas y después se extrae por una semana para ocasionar sangrado de privación. Alternativamente, puede ser extraído hasta por cinco días seguidos si hay sangrado intermenstrual (511, 537). El único anillo que inhibe la ovulación, actualmente en estudio, es un anillo de progestina y estrógeno combinado, desarrollado por el Population Council. El segundo enfoque, seguido por la OMS y por investigadores chinos (5941, es un anillo que libera bajos niveles de sólo progestinas. Se cree que evita el embarazo mediante efectos locales en el moco cervical y el endometrio, sin evitar la ovulación. El anillo de la OMS se usa continuamente, durante tres meses, y no es necesario extraerlo cada mes (128, 380). Anillo vagina1 de levonorgestrel-estradiol combinado Los primeros anillos vaginales que evitaban la ovulación utilizaban sólo progestinas. Se probaron y descartaron varias hormonas, debido a frecuente sangrado irregular y otros problemas (8, 241, 339, 341, 343, 345, 434, 508, 538, 540). En 1978 se agregó estradiol a un anillo liberador de levonorgestrel, para lograr un patrón mensual más regular de sangrado y para reducir la frecuencia de sangrado intermenstrual (342). Este anillo combinado es de diseño de corteza (shell ring) y contiene aproximadamente 100 mg de levonorgestrel y 50 mg de estradiol. Se ha fabricado en dos tamaños de diámetro exterior: 58 mm y 50 mm (477). La tasa promedio de liberación -250 a 290 pg de levonorgestrel y 150 a 180 p g de estradiol- evita la ovulación en la mayoría de los ciclos (342, 510). Los anillos son eficaces por lo menos durante seis meses (361). Los resultados de un amplio ensayo reciente, realizado en varios centros, indican que los anillos vaginales combinados son tan eficaces para evitar embarazos como los anticonceptivo~orales de baja dosis. Más de 1.100 usuarias del anillo de dos tamaños fueron comparadas con 533 usuarias del anticonceptivo oral combinado de baja dosis Nordette, que consiste en 0,15 mg de levonorgestrel y 0,3 mg de etinil estradiol. Las tasas de embarazos después de un año, calculadas según el método actuarial de tablas de vida, fueron similares para los tres grupos: 1,8 por 100 mujeres usuarias del anillo de 50 mm o los anticonceptivos orales, y 0,7 para usuarias del anillo de 58 rnm (477). En este ensayo, porcentajes similares de mujeres dejaron de usar los dos métodos debido a efectos secundarios: al año, aproximadamente 23 por 100 usuarias del anillo y 19 por 100 usuarias de anticonceptivos orales. Sin embargo, los efectos secundarios fueron distintos. Los problemas vaginales -principalmente secrecionesfueron motivo de que del 5 al 7 por ciento de las usuarias de anillo abandonara el método; ninguna usuaria de anticonceptivo~orales lo abandonó. Los exámenes médicos demostraron que los problemas vaginales, especialmente la vaginitis, leucorrea y otras secreciones, fueron significativamente más comunes entre usuarias de anillos que entre usuarias de anticonceptivos orales. Otros efectos secundarios, como las cefaleas, náusea y mareos, eran menos comunes entre las usuarias del anillo (478). A pesar del estrógeno, el sangrado intermenstrual sigue siendo un problema. Aproximadamente el 7 al 8 por ciento de las mujeres abandonaron los anillos debido a problemas menstruales, en comparación con el 4 por ciento de las usuarias de anticonceptivos orales (477). Después del primer mes de uso, las usuarias de anillos tuvieron un promedio de alrededor de 5 días de sangrado y manchado cada mes. Cerca del 10 por ciento de las mujeres, sin embargo, tuvo 4 o más días de sangrado intermenstrual o manchado durante las tres semanas en que el anillo estuvo in situ (479). En varios estudios más pequeños, la frecuencia de sangrado intermenstrual ha variado (330, 342, 435, 509). Los anillos vaginales pueden ser insertados y extraidos fácilmente por la usuaria. El anillo del Population Council (arriba) contiene levonorgestrel y estradiol, y permanece en la vagina durante tres semanas a la vez. El anillo de la OMS (abajo) s61o contiene levonorgestrely puede permanecerin situ por tres meses. Ambos anillos causan algo de sangrado irregular y manchado. K-30 Otros efectos secundarios a corto plazo del anillo combinado parecen ser leves. La hemoglobina y el hematócrito, la presión sanguínea, los factores de coagulación, la función hepática y el metabolismo de carbohidratos no resultan significativamente afectados (7, 330, 342,435,478). Sin embargo, los niveles de colesterol de lipoproteínas de alta densidad en el plasma son marcadamente más bajos (5, 426,433), y permanecen bajos durante hasta un año de uso (6). Se supone que esto puede ser un efecto adverso, pero el significado clínico del cambio no está claro. Se desconocen los efectos a largo plazo. Aún queda por determinar si la administración directa local de estrógenos durante largos períodos de tiempo tiene efectos a largo plazo en la vagina y el cervix. (46,128,170). DespuCs de un POPULATION REPORTS año de uso, los frotis cervicales siguen normales (330). De acuerdo con un estudio de dos años, que actualmente lleva a cabo el Population Council, los anillos producen principalmente un efecto progestacional en la vagina (361). Anillos d e levonorgestrel d e baja dosis Desde 1972, la OMS ha patrocinado investigaciones para desarrollar un anillo vaginal con una baja tasa de liberación. Este anillo está diseñado para evitar la concepción sin inhibir constantemente la ovulación Dara así disminuir la exposición a hormonas. Uno de los primeros anillos de este tipo liberaba cerca de 50 pg de noretindrona diariamente, que redundaba en una tasa de embarazos superior a 6 por 100 anos-mujer (128,170,572,578). Desde 1980, las investigaciones se han centrado en un anillo que libere 20 pg de levonorgestrel diarios, durante por lo menos 90 días: el anillo Varlevo-20 (579). Este anillo es de diseño de núcleo (core ring) y contiene aproximadamente 6 mg de levonorgestrel (78). El diámetro exterior es de 55,6 mm y el anillo tiene 9,s mm de espesor (128). Un ensayo clínico que abarca a cerca de 500 mujeres se lleva a cabo en 13 países. La OMS está desarrollando otro anillo que durará un año (431). Con el anillo Varlevo-20, los patrones normales de ovulación y de sangrado parecen ser sólo levemente alterados. En pequeños ensayos, se suprimió la ovulación en 20 a 50 por ciento de los ciclos (128,279,578,579). Las pruebas postcoito encontraron un moco cervical impenetrable al semen en 11 de 12 ciclos (578). Se informó un embarazo, en relación con este método, en 554 meses-mujer de uso (128). No se ha eliminado completamente el sangrado irregular, pero en promedio es muy leve (128). Aceptación Es incierto cuán aceptables resultarán los anillos vaginales. En comparación con otros métodos, el anillo ofrece una serie de ventajas. Aunque es completa y fácilmente controlado por la usuaria, no exige una actividad diaria como tomar una píldora. El anillo permanece puesto y por lo tanto, a diferencia del diafragma, no tiene que ser insertado antes de las relaciones sexuales. Requiere relativamente poco cuidado. Por otro lado, los anillos pueden combinar algunos de los inconvenientes de los métodos vaginales con algunos de los problemas sistémicos de las hormonas. Además, la idea de usar un anillo vaginal causa extrañeza. Es necesario que las mujeres manipulen sus genitales y que dejen un objeto en la vagina por un largo período de tiempo. Mientras que las tasas de abandono debido a efectos secundarios fueron similares en el estudio mayor comparativo de los anillos combinados con los anticonceptivos orales, un importante número de usuarias de anillo lo abandonó debido a problemas relacionados con el uso: aproximadamente el 4 al 6 por ciento de usuarias de anillos, frente al 2 por ciento de las usuarias de anticonceptivos orales. Las dificultades y "desagrados" al insertar y extraer los anillos fueron las razones principales. Por lo demás, varias mujeres perdieron sus anillos (477). El limpiar y guardar el anillo inhibidor de ovulación, durante una semana al mes, puede resultar difícil en algunas situaciones. Un 15 a 20 por ciento de las usuarias de anillos informaron su expulsión parcial o total (477). Las expulsiones ocurren frecuentemente cuando las mujeres se acuclillan o defecan (170,330). En un estudio de un año sobre 39 POPULATION REPORTS mujeres en India, éstas usaron anillos combinados de progestinas-estrógenos con un diámetro exterior de 61 rnm y un espesor de 9,s mm. Hubo 16 expulsiones y tres mujeres abandonaron su uso por esta razón (330). La OMS está considerando la fabricación de anillos de distintos tamaños, adecuados para mujeres nulíparas o multíparas, para disminuir los deslizamientos y expulsiones (579). Los anillos vaginales están diseñados para permanecer en la vagina durante las relaciones sexuales. No obstante, en un estudio en la República Dominicana y el Brasil, cerca del 25 por ciento de las mujeres de ambos países se sacaban ocasionalmente o siempre el anillo antes del coito. Aproximadamente 8 por ciento de los hombres brasileños y 24 por ciento de los dominicanos señalaron cierta incomodidad durante el coito debido al anillo (146). NUEVAS INVESTIGACIONES EN METODOS DE DURACION PROLONGADA Las investigaciones en este complejo campo, aquí sólo brevemente descritas, centran sus esfuerzos en: la síntesis de nuevas hormonas de larga duración y encontrar nuevos sistemas de entrega. Las pruebas humanas de estos nuevos métodos han sido limitadas. Sistemas biodegradables Los sistemas biodegradables entregan un fármaco en un portador que se disuelve lentamente en los tejidos del cuerpo. Se están estudiando dos tipos: (1) implantes colocados bajo la piel y (2) microcápsulas -hormona en un portador de polímero biológicamente inactivo- que se inyectan intramuscularmente. Ambos métodos permiten Un nuevo tipo de inyedable de duraci6n prolongada consiste en micropartículas biodegradables, que liberan pequehas cantidades de ~rogestinasdurante tres a seis semanas. En esta fotomicrografía, Gbtenida mediante microscopio electrónico, se muestran las microcámulas de noretindrona maanificadas 500 veces. Estas microcáp&las evitan la ovulación durañte tres meses. (Cortesía de T.R. Tice) K-31 una liberación relativamente constante de hormona, evitando los altos niveles iniciales que ocurren con los inyectables. No es necesario remplazar un dispositivo biodegradable después de que la hormona se ha agotado, como sucede con los implantes no biodegradables de Silastic o los DlUs liberadores de progestinas. De hecho, la mayoría de los sistemas biodegradables, como las inyecciones, no puede ser extraída ni detenidos sus efectos a voluntad (46, 601). Se han estudiado numerosos compuestos como portadores biodegradables. Estos incluyen el poli(ácido láctico) (44, 45, 46, 601), el polilactido y el poliglicólido (195), la poli(e-caprolactona) (399), los polipeptidos (639), y poliortoésteres (398, 601). La OMS y el Instituto Nacional de Salud Infantil y Desarrollo Humano de los Estados Unidos (US National lnstitute of Child Health and Human Development) (US NICHD) han efectuado pruebas preliminares utilizando sistemas de entrega de implantes biodegradables, (biodegradable implant delivery systems) (BIDS), consistentes en portadores de poliortoésteres que contienen sea noretindrona (BIDS-NET) o levonorgestrel (BIDSNOC). El trabajo en estos implantes se descontinuó porque causaron picazón local e inflamación (168, 579). US NICHD ha comenzado pruebas toxicológicas con un implante llamado Capronor, que consiste de un solo tubo de poli(^-caprolactona). El tubo libera de 20 a 40 pg de levonorgestrel diarios y es eficaz por un año. El portador puede ser extraído a voluntad y no se biodegrada hasta dos o tres años después de la implantación, mucho después de que el fármaco se ha acabado (168, 579). Las pruebas iniciales demostraron que le Capronor evitaba la ovulación en 8 mujeres en un ciclo cada una (632). Lee Beck y colegas han desarrollado microcápsulas de copolímeros de dl-poli(ácido láctico) y acído poliglicólico que contiene cristales de noretindrona (NET) (43, 287) (véase la foto, p. K-31). Una inyección contiene microcápsulas de muchos tamaños. Las cápsulas más grandes liberan hormonas a una tasa más lenta que las cápsulas más pequeñas. En consecuencia, el número y el tamaño de las microcápsulas determinan la tasa y la duración de la liberación de hormona (44,45, 505). En pruebas preliminares, una inyección de tres meses, con un total de 75 mg de NET, liberó aproximadamente 500 a 800 pg de hormona por día. Esta dosis suprimió la ovulación. Todas las mujeres tuvieron ciclos menstruales irregulares y manchado. Las investigaciones continúan también sobre microcápsulas que contienen norgestimato. Estudios en mandriles demostraron que el norgestimato no altera el endometrio ni los patrones menstruales (43). Están asimismo en desarrollo microcápsulas que contienen estradiol (43). US NlCHD está patrocinando investigaciones sobre un implante de 6 meses de micropartículas de poliactida, que contienen levonorgestrel. Se calcula que los estudios toxicológicos se iniciarán en 1984 (168). lnyectables Varias nuevas hormonas se encuentran en estudio. En Brasil, E.M. Coutinho y colegas descubrieron que una dosis de 200 mg de una nueva progestina, ORC 2154, evitaba la ovulación de 5 a 10 meses. Se registraron irregularidades menstruales parecidas a las que se presentan con el uso del DMPA. Las pruebas químicas de sangre fueron normales (106). En la República Federal de Alemania los estudios preliminares sugieren que dosis de 50 mg de dos nuevos ésteres de progestinas, el glicotridecanoato de NET y el glicotridecanoato de levonorgestrel evitaron la ovulación de cuatro a cinco meses (225). Más de 200 nuevas progestinas de larga duración han sido sintetizadas por centros de investigaciones en los 12 países participantes del Programa de Síntesis Química de la OMS. El US NICHD ha investigado la actividad biológica de estos ésteres (168). Cuatro ésteres de levonorgestrel tuvieron el doble de duración que el DMPA. Las pruebas toxicológicas con animales en los ésteres más prometedores se iniciaron en 1982 (579). Píldoras combinadas mensuales Diversos anticonceptivos orales que se toman una vez al mes se están utilizando en China. A diferencia de la mayoría de los demás métodos hormonales, casi todas las píldoras de uso mensual contienen un estrógeno, el quinestrol, que se almacena en la grasa corporal y es liberado lentamente con el tiempo (55, 308). La píldora china mensual más comúnmente usada combina 3 mg de quinestrol con 12 mg de dl-norgestrel (144). Otras progestinas en uso incluyen el acetato de megestrol, clormadinona y 16-metileno clormadinona. En Beijing, durante 1979, se produjeron cerca de 3 milliones de píldoras de duración prolongada, suficiente para 200.000 mujeres al año (395). La primera píldora se toma en el quinto día del ciclo menstrual; la segunda pildora 20 días después. Enseguida se toma una píldora cada cuatro semanas. Este régimen parece ser altamente eficaz, aunque no se ha informado de las tasas exactas de eficacia (144, 594). Tal como los anticonceptivo~orales diarios, las píldoras mensuales aumentan temporalmente los niveles de colesterol y triglicéridos, y afectan desfavorablemente la respuesta de la mujer a la prueba de tolerancia de glucosa. No se han observado cambios importantes en la presión sanguínea ni la función hepática. Estudios animales y humanos indican que no hay riesgo adicional de nódulos a las mamas o cáncer cervical, de acuerdo con informes chinos (144, 594). Se comprobó hiperplasia endometrial en cerca de la mitad de las usuarias de píldoras que contienen clormadinona. Por el contrario, sólo el uno por ciento de las usuarias de anticonceptivo~orales mensuales que contienen dl-norgestrel registraron hyperplasia endometrial (144). En Estados Unidos y América Latina, las investigaciones de principios de los años setenta se centraron en una píldora que contenía 2 mg de quinestrol y 2,5 mg de la progestina acetato de quingestanol. Estas investigaciones se abandonaron debido a las altas tasas de embarazos (338,547). Por lo demás, los efectos secundarios eran muy comunes, incluidos el sangrado menstrual prolongado y copioso, náusea y vómitos, y un aumento de secreción de moco (55, 281, 308, 338, 346). Varias otras píldoras anticonceptivas de larga duración se usan en China. La píldora mensual ~ r o ~ e s tNo i n1 contiene 50 mg de una nueva progestina, el 3-cyclopentyl propionato de acetato de megestrol, y 0,25 mg del estrógeno quinestrol. Desde 1979 se han desarrollado además nueve diferentes "píldoras de vacaciones". Estas píldoras han sido diseñadas para parejas que viven separadas y sólo se juntan durante las vacaciones. Según el tipo y la cantidad de hormona, algunas de estas píldoras se toman todos los días de la vacación; otras, sólo dos veces a la semana o menos. Algunas píldoras, incluidas las que contienen la hormona sintética anordin, se toman sólo después del coito (594,623). (Véase Population Reports, 1-25, diciembre POPULATION REPORTS a de 1982, Población y planificación de la natalidad en la República Popular de China.) Anticonceptivos masculinos - - Se están investigando hormonas de larga duración que suprimen la producción de espermatozoides, como anticonceptivo~para hombres. La mayoría de los investigadores combinan un andrógeno y una progestina. Ambas suprimen la producción pituitaria de hormona folículoestimulante (FSH) y hormona luteinizante (LH), que son esenciales para la producción de espermatozoides. Los andrógenos estudiados hasta la fecha incluyen la testosterona, el cipionato de testosterona y el enantato de testosterona. Las progestinas estudiadas incluyen el DMPA, levonorgestrel, norgestrienona, NET, danazol, R 2323, acetato de megestrol, acetato de ciproterona y noretandrolona (35, 274, 392, 546, 606). Asimismo, se han estudiado implantes que contienen el andrógeno testosterona y el estrógeno estradiol, que causan esterilidad completa y reversible en monos rhesus. Todavía no se han realizado estudios en animales (293). La combinación de levonorgestrel y estrona redujo pero no eliminó la espermatogénesis en siete hombres estudiados (606). e Tanto un andrógeno como una progestina solos es inaceptable. El andrógeno testosterona solo, en dosis bajas, debe ser administrado alrededor de cuatro veces al mes para evitar la producción de espermatozoides. Dosis más altas, que duran más, aumentan la retención de sodio y agua y cambian los niveles de lipoproteínas en el suero (66, 392). Las progestinas solas también pueden evitar la producción de espermatozoides, pero deprimen los niveles de testosterona, causando en ocasiones la pérdida de la libido, impotencia o ensanchamiento de las mamas (35, 66, 274, 392). Una fuente exógena de testosterona evita estos efectos secundarios. Por lo tanto, se ha prestado mayor atención a la combinación de un andrógeno y una progestina. De acuerdo con C. Alvin Paulsen y colegas, la "combinación más eficaz y más práctica" probada es el DMPA y un andrógeno (392). El Grupo de Trabajo sobre Métodos Masculinos de la OMS recomienda estudios adicionales sobre una dosis mensual de 200 mg de DMPA y 250 mg de enantato de testosterona. Las pruebas de eficacia se han postergado mientras se realizan estudios para determinar qué efecto, de haberlo, tiene esta combinación de hormonas en el colesterol de lipoproteínas de alta densidad (648). En distintos regímenes -inyecciones mensuales de 100 a 300 mg de DMPA, además de inyecciones e implantes de ~ i l a s t % de ésteres de testosterona- más del 75 vor ciento de los hombres manifestaron reducción de la producción de espermatozoides a menos de 10 millones de espermatozoides por ml de semen. Porcentajes menores de hombres -del 14 al 79 por ciento- dejaron completamente de producir espermatozoides (13, 69, 166, 283, 332, 392). No está claro cuánto debe reducirse la producción de espermatozoides para evitar la concepción. La norma de subfertilidad masculina es generalmente 20 millones de espermatozoides o menos por ml de eyaculado. Sin embargo, un estudio reciente informa de nueve mujeres impregnadas por hombres cuyo recuento de espermatozoides era inferior a 10 millones por ml. En el caso de cinco, los recuentos de espermatozoides fueron menores a 1 millón por ml. Esta informaCión sugiere que, para una POPULATION REPORTS eficacia completa, un anticonceptivo masculino debe ser capaz de detener completamente la producción de espermatozoide~(38). Ninguna combinación de hormonas estudiada hasta el momento puede lograrlo, a menos de dosis tóxicas. Dispositivos intracervicales Se encuentran en estudio varios dispositivos intracervicales (DIC), que se colocan en el cervix y que liberan fármacos continuame'nte. Los primeros DICs, desarrollados a comienzo de los años setenta, contenían progesterona O la progestina acetato de clormadinona o bien los estrógenos mestranol, estradiol, o estrona (93, 179, 192). Dispositivos más recientes liberan aproximadamente de 10 pg a 20-25 pg de levonorgestrel por día (276, 301, 391). Los ensayos clínicos preliminares no indican que los DlCs ofrezcan ninguna ventaja sobre DIUs de cobre o liberadores de hormonas. Algunos informan expulsiones frecuentes, dificultades de inserción, y dolor en el abdomen inferior (73, 276, 391, 578). La OMS ha descontinuado la investigación sobre los DlCs por estas razones (572). En el único ensayo en gran escala hasta la fecha, las tasas de embarazos y de extracción para un DIC que liberaba 10 pg de levonorgestrel al día, fueron similares a las tasas del DIU TCU-200, pero significativamente mayores que las tasas para un DIU que libera 15,5 pg de levonorgestrel diario (301). DESAFIOS PARA LOS PROGRAMAS De todos los anticonceptivos hormonales de duración prolongada, sólo el DMPA ha sido extensamente utilizado en programas de planificación familiar. Casi 20 años de experiencia con el DMPA revelan pocos problemas programáticos. Las mujeres suelen preferir DMPA a otros métodos. Las enfermeras y otros trabajadores auxiliares de la salud pueden aplicar las inyecciones y explicar los posibles efectos secundarios a las mujeres. Los costos son menores. Los problemas principales con el DMPA parecen ser los aspectos reglamentarios (véase la pág. K-5). No obstante, una vez que los gobiernos y los programas de planificación familiar suministran DMPA, se enfrentan pocas dificultades en el suministro de servicios. En Tailandia, por ejemplo, donde el uso del DMPA es difundido, éste fue introducido inicialmente en 1965, por el Programa de Planificación Familiar del Hospital McCormick, en la ciudad de Chiang Mai. En 1967 se ofreció la píldora y los inyectables durante visitas mensuales a una zona rural de la provincia de Chiang Mai. La respuesta positiva indujo a crear un equipo móvil especial que prestara servicios en las zonas rurales. Este equipo móvil -un médico, enfermeras, parteras y ayudantes- cubre actualmente a cerca del 90 por ciento de la población rural de la provincia, visitando cada aldea cada tres meses para ofrecer DMPA, anticonceptivos orales y condones (véase la foto, pág. K-34). Se cobra un precio subvencionado por todos los servicios (15 baht, o US$0,75 por una inyección de tres meses), pero las personas insolventes reciben gratuitamente los suministros y servicios. El equipo móvil proporciona alrededor de la mitad de todos los servicios del programa McCormick. La otra mitad es suministrada por la clínica y el hospital en la ciudad K-33 de Chiang Mai. Por medio de servicios móviles y fijos se distribuyen cerca de 9.000 dosis de DMPA todos los meses (319). E l éxito del programa se ha atribuido a la considerable demanda de servicios anticonceptivos y a la confianza de la población en los medicamentos inyectables (36). Uno de los problemas con los servicios móviles es asegurar que las mujeres que van a recibir una primera inyección no estén embarazadas. Fuera de la experiencia en Tailandia, que ha sido extensamente estudiada e investigada, existe muy poca información publicada sobre uso de inyectables en otros países. lucro no pueden financiar una amplia promoción y publicidad. Carecen de redes de distribución de abastecedores, vendedores y detallistas como las que tienen las compañías farmacéuticas. Por otra parte, cuando las organizaciones sin fines de lucro conceden licencias a firmas comerciales permitiéndoles vender el producto, el convenio puede estipular un bajo precio de venta. El precio puede ser tan bajo, que la firma no está dispuesta a gastar dinero en publicidad y distribución, especialmente si el nuevo producto compite con productos existentes que tienen mayores márgenes de utilidad. Virtualmente, no ha habido experiencia programática con otros métodos de larga duración. Los problemas principales que se pueden prever incluyen: fuentes de suministro, costo, 0 capacitación de personal. Las organizaciones sin fines de lucro están concertando la promoción y distribución de implantes y anillos. Recientemente, el Population Council llegó a un acuerdo con Leiras Pharmaceuticals en Finlandia para fabricar a bajo precio el sistema Norplant de seis cápsulas, para su distribución por gobiernos y organizaciones sin fines de lucro (361). Asimismo, el Population Council ha concertado un contrato con el Program for the lntroduction and Adaptation of Contraceptive Technology (PIACT) a fin de prepararse para la introducción del sistema Norplant en programas nacionales de planificación familiar. Se enviarán folletos y dispositivos de muestra a administradores de programas de planificación familiar, médicos prominentes y otras personas de alto nivel. El PlACT también ha preparado documentación auxiliar en que describe el sistema Norplant para médicos, trabajadores de la salud y usuarios potenciales (393). Fuentes de suministro No esta claro cómo se distribuirán los nuevos métodos de duración prolongada. Como algunos DIUs, pero a diferencia de otros anticonceptivos, los anillos y los implantes han sido desarrollados y probados por organizaciones no gubernamentales y sin fines de lucro, y no por firmas comerciales. Por consiguiente, los productos pueden ser vendidos a un precio menor que los productos desarrollados comercialmente, pero las organizaciones sin fines de También se están haciendo esfuerzos para distribuir anillos vaginales de sólo progestinas a bajo precio. La OMS ha celebrado un contrato con una compañía farmacéutica británica, London Rubber, a fin de desarrollar el equipo necesario para la produción en masa de 5.000 anillos diarios. Se está fabricando un prototipo de la maquinaria de producción. La compañía está desarrollando también un envase para el anillo y determinando su duración de almacenaje en climas tropicales (579). La fabricación o empaque local de los anticonceptivos puede aumentar su disponibilidad y disminuir los costos. Se fabrican o empacan inyectables de uso mensual o trimestral en varios países asiáticos y latinoamericanos, incluidos China, Tailandia, Indonesia y México (133). Han surgido dudas acerca de la calidad del DMPA fabricado localmente (412). La mayor fuente potencial de problemas es el tamaño de la partícula de la suspensión en la formulación de depósito, que afecta la tasa de liberación desde el lugar de la inyección (165). La producción local de otros métodos hormonales de duración prolongada no es factible en este momento. La fabricación de implantes y anillos vaginales aún no ha sido mecanizada; el equipo está aún en desarrollo. Es poco probable, en todo caso, que la mayoría de los países en desarrollo fabriquen Silastic u hormonas. Por lo demás, se requiere un alto grado de especialización para trabajar con seguridad con hormonas (306, 425). Costo En la provincia de Chiang Mai, Tailandia, un equipo móvil de trabajadores de la salud del Hospital McCormick visita las zonas rurales cada tres meses para administrar inyecciones de DMPA y otros anticonceptivos q;e se soliciten. ~~ioximadamente un 12 por ciento de todos los usuarios de anticonceptivos en Tailandia hilizan actualmente el DMPA. (Cortesía de E.B. McDaniel) K-34 El costo de métodos de larga duración varía considerablemente. Algunos son tan baratos como la píldora, pero otros son más costosos. Los organismos donantes que compran cantidades de DMPA y NET EN al por mayor para los programas de planificación familiar pagan US$1,00 por dosis (30, 117). Así una cantidad de DMPA suficiente para un año cuesta US$4,00. El DMPA producido por otros POPULATION REPORTS fabricantes y envasado localmente se podría vender a la mitad de este precio. En Tailandia, el DMPA envasado localmente cuesta aproximadamente US$0,50 por inyección trimestral, o US$2,00 al año (315). En comparación, el precio que pagan el FNUAP y la US AID por un paquete de anticonceptivos orales es de alrededor de US$0,15 por ciclo, o aproximadamente US$2,00 por un año. Para una mujer que compra un inyectable en una farmacia O de un médico particular, el costo anual oscila entre US$18 y $75 en muchos países en desarrollo (469). El costo de los implantes, DlUs liberadores de levonorgestrel y anillos vaginales para programas gubernamentales o usuarias individuales, no está aún establecido, porque estos productos son relativamente nuevos o experimentales. Se calcula, no obstante, que el sistema Norplant de seis cápsulas costará a los programas alrededor de US$11,00 inicialmente (361). Si la mujer lo usa durante cinco años, el precio resulta un poco más alto que cinco años de anticonceptivos orales a razón de US$0,15 por ciclo, o aproximadamente US$10,00. Los anillos vaginales actuales duran de tres a seis meses. A no ser que puedan ser fabricados y distribuidos a bajo precio, serán menos económicos que los inyectables e implantes. En comparación, el DIU Progestasert es mucho más caro que los inyectables, implantes o píldoras. El precio al sector público es de aproximadamente US$8,40 por un DIU en envase antiséptico, que sólo ofrece un año de protección (543). La compra de productos anticonceptivos a granel es lo más barato, y puede asegurar al programa de planificación familiar un suministro continuo. Los métodos hormonales de duración prolongada tienen una duración de almacenamiento larga, que permite compras a granel. De acuerdo con los fabricantes, el DMPA y NET EN pueden ser almacenados hasta por cinco años sin refrigeración. E l sistema Norplant y los anillos vaginales combinados de progestinas y estrógenos del Population Council cuentan con una duración de almacenamiento probada de seis años, y talvez puedan ser almacenados indefinidamente (425). Sin embargo, si los paquetes se mojan, probablemente pierdan su esterilidad (425). Capacitación y equipo El gasto de proporcionar un método incluye también el costo de equipo auxiliar, capacitación de trabajadores de salud, y el sistema de suministro de servicios. Los inyectables y los anillos vaginales pueden ser suministrados por enfermeras o trabajadores auxiliares de salud, bajo la supervisión general de un médico (146,318,569). Pueden ser proporcionados al amparo de programas de distribución basados en la comunidad así como en clínicas. También pueden ser vendidos a través de programas de comercialización social y, en el caso de los inyectables, pueden ser administrados por médicos particulares y otros trabajadores de la salud que colocan inyecciones. Fuera de una jeringa para aplicar las inyecciones, no se necesita equipo. La inserción y extracción de implantes, como los DIUs, requieren de capacitación especial. El Population Council recomienda que los médicos inserten por lo menos cuatro o cinco implantes bajo supervisión (361). El médico u otro trabajador de la salud quizá necesite efectuar hasta 10 ó 15 inserciones antes de tener confianza al administrar el procedimiento (409). Los trabajadores auxiliares pueden aprender a insertar implantes tal como aprendieron a in- 1 POPULATION REPORTS Pautas para el uso No hay contraindicaciones conocidas para el uso de anticonceptivos de sólo progestinas de duración prolongada en mujeres sanas. La OMS recomienda que mujeres con las siguientes condiciones no reciban inyectables: e cáncer de las mamas o del tracto genital, 0 sangrado anormal por causas desconocidas, e embarazo sospechado (569). La mejor manera de evitar la aplicación de un inyectable a una mujer embarazada es administrar la primera inyección durante la menstruación o dentro de la semana siguiente. Puesto que es imposible afirmar de modo concluyente cuáles deben ser las contraindicaciones adecuadas, una publicación de la OMS recomienda la cuidadosa consideración de las contraindicaciones normales para el uso de anteconceptivos orales combinados. Además, la OMS recomienda el control cuidadoso de mujeres con diabetes o con antecedentes de diabetes durante el embarazo porque el DMPA ha alterado el metabolismo de los carbohidratos en algunas pruebas de laboratorio (569). Sin embargo, otros señalan que un método de progestinas solas puede ser especialmente adecuado para mujeres que no usan anticonceptivos orales combinados, debido a su preocupación con respecto a los coágulos sanguíneos o a antecedentes familiares de cáncer (404). La OMS recomienda cautela en la aplicación de inyectables a mujeres nulíparas o mayores de 40 años (569). Sin embargo, no existen pruebas que sugiera que el DMPA o NET EN afecten permanentemente la fertilidad (véase la pág. K-15). De hecho, el único estudio que examinó el retorno de la fertilidad en mujeres nulíparas, que abarcó a 41 usuarias del DMPA, reveló que habían concebido a la misma tasa que las madres que habían usado DMPA (387). No obstante, muchos programas de planificación familiar no quieren correr el riesgo de suministrar inadvertidamente inyectables a una pareja que puede ser de hecho estéril, pero que posteriormente podría culpar al inyectable. En consecuencia, los programas frecuentemente han limitado el DMPA a mujeres que han tenido por lo menos un embarazo (26, 41, 96,294). En mujeres mayores de 40 años, el sangrado irregular causado por los inyectables y otros métodos de progestinas solas, puede ser confundido con síntomas de la menopausia o problemas ginecológiCOS (569). Las contraindicaciones respecto de los anillos vaginales e implantes incluyen la enfermedad hepática activa, ictericia, tumores al hígado, embarazo y hemorragia uterina de causas desconocidas (361). Los DlUs liberadores de progestinas, como otros DIUs, no deben ser usados por mujeres que tienen anormalidades uterinas congénitas o que han tenido enfermedad pélvica inflamatoria o un embarazo ectópico (230). sertar DlUs y hacer minilaparotomías para la esterilización voluntaria (88, 136,575). En Chile y Brasil, los trabajadores auxiliares han insertado implantes rutinariamente (145). Probablemente sería beneficioso para los trabajadores de salud que extraigan implantes contar con alguna experiencia o capacitación en cirugia menor (428). La inserción de DlUs así como la inserción y extracción de implantes requieren equipo y desinfectantes químicos. También se necesitan anestesia local, gasa esterilizadaLy un trócar (aguja hipodérmica) para la inserción de implantes. Algunos médicos quizás opten por usar también un pequeño bisturí (409). Para extraer implantes se necesita un bisturí y anestesia local. Introducción de un nuevo método Los administradores de planificación familiar deben considerar cómo introducir un nuevo método anticonceptivo en u n programa de planificación familiar. Sin preparación y planificación cuidadosa, los nuevos métodos quizá no sean bien aceptados, las tasas de abandono y embarazos pueden resultar inaceptablemente altas, y se puede afectar desfavorablemente la reputación del programa. Gordon Perkin y Lyle Saunders han sugerido que inicialmente los administradores de planificación familiar introduzcan cualquier método nuevo en forma limitada, por ejemplo, sólo en un distrito o una provincia. Por consiguiente, antes de planificar un programa nacional, se podría determinar la posible demanda del método, la mejor manera de educar a los clientes, sus repercusiones en otros métodos y los requisitos de adiestramiento (396). Las actitudes y prácticas anticonceptivas del personal de planificación familiar de la clínica y de otros miembros influyentes de la comunidad también afectan a la acepta- ción de un nuevo método (427). En pruebas preliminares del anillo combinado de progestina-estrógeno, en la República Dominicana y Brasil, la aceptación fue marcadamente superior en clínicas en donde las enfermeras decidieron usar los anillos ellas mismas (146). En Tailandia, antes de establecer servicios, el equipo móvil de servicios de planificación familiar del Hospital McCormick siempre se ponía en contacto con el dirigente de cada aldea, para pedir su apoyo y para aprovechar de su influencia en la comunidad (36). Diferentes nuevos métodos pueden gozar de mayor aceptación en distintos sectores de la población. Los implantes y los DIUs liberadores de levonorgestrel, por ejemplo, son especialmente apropiados para mujeres que no desean más niños pero que no quieren una esterilización voluntaria (306). Por otro lado, los inyectables y los anillos vaginales son más adecuados para mujeres que están espaciando sus hijos. Se debe aconsejar a las mujeres que están amamantando que usen métodos de progestinas solas, si están disponibles, en vez de métodos con estrógenos, puesto que el estrógeno puede disminuir la producción de leche. En general, los métodos anticonceptivos de progestinas de duración prolongada pueden ofrecer valiosas opciones contraceptivas. Considerando que ningún método puede satisfacer las necesidades de todo el mundo en toda etapa de la vida reproductiva, es conveniente contar con una gran variedad de métodos. En consecuencia, cualesquiera de los métodos hormonales de duración prolongada -los ya bien conocidos métodos inyectables y los nuevos implantes, anillos y DIUs- incrementarán seguramente el uso de la planificación familiar al ofrecer nuevas opciones. BlBLlOCRAFlA El asterisco (*) designa un artículo que fue de gran utilidad en la preparación de este número de Population Reports. 1. ANONYMOUS. Approval oí DepPmvera for contraceptfon denied. FDA Drug Bulletin 8(2): 1011. March-April 1978. '2. ANONYMOUS. Hounding the pill. Medical lournal of Australia 2(8): 4Ob4ü7. Ocfober 20, 1979. 3. ANONYMOUS. Pill users pmtected against PID if they haw used OCs for longer than one year. Family Planning Perspectives 14W: 32-33. Ianuary-kbmary 1982. '4. AD HOC CONSULTATIVE PANEL O N DEPOT MEDROXYPROGESTERONE ACEIATE. Rewn l o USAID of the Ad Hoc Consuliattw Panel d Depol ~ e d ' m x y ~ r ~ e r oAcetate ne New York Cily. December 7-8. 1978 luly 1980 59 p (Lnpublishedl 5. AHR~N, T., LITHELL, H., VICTOR, A.. VESSBY, B., and JOHANSSON, E.D.B. C m p n r o n of the metabolic effects o í l w o hormonal contraceptive methodr: an oral fomulation and a vagina1 ring: 2. S N lipopmteins ~ and apolipopmleins. Contraception 24M): 451-468. Onober 1981. 6. 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