PASTORAL PROFETICA DEPARTAMENTO DE MISIONES At’n P. Pepe Lupe Responsable de Profetica 19-Ene-13 Informe para la asamblea Esta es una dependencia que corresponde a OMPE nacional, (Obras Misionales pontificio Episcopales), nombrando el obispo a un responsable como Director Diocesano de las OMPE. Sobra mencionar la historia, doctrina, y sobre todo el fundamento de la misión ad gentes. Basta recordar que: “La Iglesia peregrinante es, por su propia naturaleza, misionera, puesto que tiene su origen en la misión del Hijo y la misión del Espíritu Santo según el plan de Dios Padre”. El Papa Juan Pablo II proclamó la actualidad de la misión “ad gentes” y señaló proféticamente los frutos: «Veo amanecer una nueva época misionera, que llegará a ser un día radiante y rica en frutos, si todos los cristianos y, en particular, los misioneros y las Iglesias jóvenes responden con generosidad y santidad a las solicitaciones y desafíos de nuestro tiempo» En nuestra Iglesia diocesana -y desde esta dependencia-, hemos tenido un esplendor organizando un sin número de actividades como: 1. Dos Congresos diocesanos misioneros 2. La participación a los Congresos a nivel nacional de 2.1 la IAM (con y para niños), 2.2 LMJ (con y para jóvenes) 2.3 y los CONAMI (con y para adultos). 3. Los tres folletos de la Gran Misión Católica del año 2000 4. El folleto con la Lectio Divina del “Año del Rosario 5. Haber tenido inscritos a mas de 600 enfermos en la UEM (Unión de Enfermos Misioneros) 6. Cuatro jornadas misioneras llegando a juntar hasta 500 personas de los diferentes grupos misioneros parroquiales. 7. Tener en doce parroquias los diferentes grupos que promueve las OMPE Pero los enanos crecieron y en los cambios de párrocos no se pudo percatar este crecimiento llegando a su deserción, y no por falta de compromiso misionero, sino por los retos y logros que poco a poco iban asumiendo según sus edades y necesidades. Conviene tener presente el siguiente hecho que los sociólogos y estadistas contemplan: “Cuando había hambre y escases en medios de comunicación, la población era mas religiosa y la Iglesia tenia mas fieles y adeptos. Pero cuando una sociedad ha subido en nivel y en calidad de vida, la religiosidad se ha empobrecido, la gente va menos a la Iglesia y recibe menos los sacramentos, por más que la llamada “religiosidad popular” se mantenga en no pocas de sus manifestaciones. En la circular primera del año que nuestros Arzobispo nos ha dirigido, señala que: “Necesitamos agentes de pastoral con un corazón renovado, con profundo espíritu de comunión, con la visión clara de su ser y quehacer”, y esto no lo vamos a lograr si no empezamos a trabajar con las nuevas generaciones, no desde la catequesis sabatina, sino en la formación y promoción misionera que les podamos ofrecer. Hagamos cautivos vocacionables a los jóvenes con los programas de la Liga Misional Juvenil. Las vocaciones son fruto del acompañamiento en las edades. Nuestra Iglesia tiene espacios de formación para todos. Finalmente, esta Dependencia se ha reducido a: 1. La entrega de posters y sobres para el DOMUND 2. La entrega de posters para la Jornada Mundial del Enfermo 3. La distribución de la revista Ad Gentes y Sembradores a los dos grupos que han sobrevivido a los embates de los cambios: Corpus Christi y San Pedro Apóstol. Hablar de Pueblo de Dios en Misión como una respuesta a la Misión Permanente Continental, seguramente que será amplia la visión que nos presentará el P. Santiago Tiscareño. Seamos pacientes para escucharlo en su momento.