Descripción Anatómica de los Componentes del Sistema Osteomuscular

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DESCRIPCION ANATOMICA DE LOS COMPONENTES DEL SISTEMA
OSTEOMUSCULAR.
Anatomía es la base de todas las ramas de la medicina y estudia
la estructura del cuerpo humano vivo, en forma macroscópica. La
estructura hace posible la función.
El sistema osteomuscular está formado por el sistema óseo y
muscular.
La osteología es la ciencia, rama de la morfología que estudia los
huesos del cuerpo humano, en su estructura, función y patología.
Los huesos conforman el esqueleto y éstos a su vez por tejido
óseo, que es de tipo conjuntivo especializado y que está
mineralizado, vascularizado y que está en constante cambio, se
caracteriza por su dureza, elasticidad, capacidad regenerativa y
sus mecanismos de crecimiento.
A excepción del hueso hioides, que se encuentra separado del
esqueleto, todos los demás se encuentran articulados entre sí por
estructuras como cartílagos, músculos, tendones y ligamentos.
El cuerpo humano tiene aproximadamente 208 huesos, sin contar
los wornianos, que son supernumerarios del cráneo, los
sesamoídeos, a la vez supernumerarios del pié.
Los huesos constituyen el 12% del peso corporal total del cuerpo
humano.
Los huesos son 26 en la columna vertebral, 8 en el cráneo, 14 en
la cara. 8 oído, 1 hioides, 25 en el tórax, 64 en el miembro superior
y 62 en el miembro inferior.
Las funciones del esqueleto humano son varias como: sostén
mecánico del cuerpo y de sus partes blandas, mantenimiento
postural, para que se mantenga la bipedestación, soporte
dinámico, para la locomoción. marcha y movimientos funcionando
como anclaje o palanca, como protección de vísceras, pulmones,
etc., como almacén metabólico en la regulación de sales de calcio
y fosfato, transmisión de vibraciones y por último contención de la
médula que participa en la hematopoyesis.
Macroscopía de un hueso largo:
Diafísis, es la parte alargada del hueso; epífisis, que son los
extremos o terminaciones del hueso.
Metafísis, unión de la diafísis con la epífisis, en el adulto es ósea,
y cartilaginosa en etapas del desarrollo.
Cartílago articular, es de tipo hialino que recubre la epífisis, donde
el hueso articula con otro símil; su función es reducir la fricción,
choques y vibraciones.
Periostio, membrana que recubre el hueso no cubierta por
cartílago y que está compuesta de dos capas una exterior de
tejido conjuntivo denso que contiene el paquete vasculo nervioso
y una interior, la capa osteogénica, que contiene células óseas de
varios tipos, fibras elásticas y vasos sanguíneos.
El periostio es básico en el crecimiento óseo, en su reparación y
nutrición. Constituye el punto de inserción de ligamentos y
tendones.
Cavidad medular, es un espacio cilíndrico situado en la parte
central de la diafísis, y que en los adultos contiene la médula ósea
amarilla.
Endostio, que cubre la cavidad medular, que es una membrana
que aloja a las células osteóprogenitoras.
Hay dos clases de tejidos óseos; uno de ellos es el denso
denominado compacto, el otro cuya malla trabecular es más laxa,
es el llamado hueso esponjoso o trabecular.
El hueso compacto siempre es exterior y rodea al esponjoso; su
calidad y arquitectura varía de acuerdo a su posición, forma y
función.
El hueso está recubierto en su totalidad, menos en las superficies
articulares o de unión por el periosto; membrana ricamente
vascularizada e inervada. En las superficies articulares está
recubierto de cartílago.
Los huesos, según su forma se clasifican en: largos, en que
predomina una dimensión sobre las otras dos; como la pierna y el
brazo; cortos, en que ninguna dimensión predomina, como la
muñeca; planos, en que dos dimensiones predominan sobre la
tercera dimensión, como los huesos del cráneo y por último
irregulares difícil de clasificar. También huesos neumáticos, que
en su interior se desarrollan cavidades o senos, y por último
huesos sesamoídeos que son inconstantes y se desarrollan en el
pié, en las superficies de apoyo.
Los reparos óseos son accidentes como: depresiones,
elevaciones, facetas, son producidas por inserciones de tendones,
ligamentos o fascias; también por el paso de nervios y vasos que
le dan ciertas características.
Las depresiones, son hundimientos en la superficie de los huesos,
que reciben el nombre de: fosas, fisuras, surcos, escotaduras,
agujero, conductos, canales, etc.
Elevaciones pueden ser: lineales, redondas y puntiagudas.
Facetas se clasifican en articulares y no articulares.
La unión de todos los huesos forman el esqueleto, que es el axil
dado por la columna vertebral, cráneo y huesos del tórax y, el
esqueleto apendicular formado por el miembro superior e inferior.
El miembro superior está formado de cuatro segmentos: el hombro
dado por la clavícula y el omóplato, brazo representado `por el
húmero, antebrazo por el cúbito y el radio y por último se muestra
formado por carpo, metacarpo y huesos de los dedos.
El miembro inferior o pélvico consta de: la cadera, formado por el
sacro y el coxis; el muslo representado por el fémur; la pierna
dado por la tibia, peroné y la rótula y el pié constítuido por tarso,
metatarso y los huesos del dedo.
Como se dice anteriormente el hueso es un tejido conectivo
especializado que hace de la estructura soporte del diente,
estando en íntimo contacto con éste y es afectado por los
procesos fisiológicos y patológicos del tejido dentario.
Función del tejido óseo
El hueso está constituído por una matriz que contienen células
dispersas. Contiene un 25% de agua, 25% de proteínas y 50% de
sales minerales, presentando cuatro tipos de células: Las
osteoprogenitoras, son células no especializadas derivadas del
mesénquima, de aquí derivan todos los tejidos conectivos. La
osteoprogenitoras se encuentran en la capa interna del periostio,
en el endosito y en los canales del hueso que contienen vasos
sanguíneos. A partir de éstas, se forman los osteoblastos y los
osteocitos.
Los osteoblastos, son célúlas que han perdido la capacidad de
dividirse por mitosis, secretan colágeno y otros materiales, que
constituyen el hueso. Estos se encuentran en las superficies
óseas y a medida que secretan material, éste los va envolviendo
convirtiéndolos en osteocitos.
Los osteocitos también han perdido la capacidad de división y no
producen materiales sino que están encargados de mantener las
actividades celulares del tejido óseo como el intercambio de
nutrientes y de desechos.
Osteoclastos, son células derivadas de monocitos circulantes, que
se asientan en la superficie del hueso y destruyen la matriz ósea
( reabsorción ósea ).
La sales minerales, mas abundantes son la hidroxiapatita ( fosfato
tricalcico ) y carbonato cálcico. En menos cantidad hidróxido de
magnesio y cloruro y sulfato de magnesio; éstas sales se
depositan por cristalización en el entramado de colágeno durante
el proceso de mineralización o calcificación.
El hueso no es totalmente sólido, tiene pequeños espacios, que
son canalículos por donde circulan vasos sanguíneos encargados
del intercambio de nutrientes. El tamaño de éstos espacios,
determinan si el hueso es compacto o esponjoso.
El hueso compacto, constituye la mayor parte de la diáfísis de los
huesos largos, así como la parte externa de todos los huesos del
cuerpo, el hueso compacto constituye soporte y protección. Tiene
una estructura de anilos o láminas concéntricas alrededor de
canales centrales denominados canales de Havers, que se
extienden longitudinalmente.
Los canales de Havers se comunican con los canales de Volkmann
que perforan el periostio.
Los canales de Havers y Volkmann, son utilizados por los vasos
sanguíneos, linfáticos y nervios, para extenderse a través del
hueso.
Entre las láminas concéntricas hay espacios en que se encuentran
los osteocitos, éstos espacios son los lacunae.
Para que los ostecitos, intercambien nutrientes con el líquido
intersticial, los lacunae tienen ramificaciones canaliculares, por
donde los osteocitos emiten prolongaciones.
Los canalículos están conectados entre sí y con los conductos de
Havers. El sistema de Havers u osteon, está formado por un canal
central, las láminas concéntricas que lo rodean, los canalículos,
lacunae y osteocitos. Las láminas entre osteomas son láminas
intersticiales.
Hueso esponjoso, éste no contiene osteones. Las láminas
intersticiales, son de forma irregular, formando tabiques o placas
llamadas trabéculas. Estos tabiques dejan huecos que están
llenos de médula ósea roja.
El hueso esponjoso es el principal constituyente de la epifísis de
los huesos largos y del interior de la gran mayoría de los huesos.
La ostreogénesis es el proceso de creación de nuevo hueso.
A las dos semanas de gestación, se comienza a formar la columna
vertebral en el embrión humano. En el nacimiento el esqueleto aún
es blando y flexible, y no todos están consolidados. El numero de
huesos es superior a los 208 del adulto, al nacer ya que al pasar el
tiempo éstos se fusionan.
El único hueso móvil, es la mandíbula o maxilar inferior.
Osteogenesis, es la formación de huesos por la función de los
osteoblastos y osteoclastos.
La osificación puede ser endocondral, periòstica o membranosa.
La miología es el estudio de los músculos del cuerpo humano que
le da la capacidad contráctil a la estructura ósea. La unidad de los
músculos, es la célula muscular que forma la fibra muscular.
La mayoría de los músculos voluntarios se unen a los huesos, por
medio de un tejido fibroso denso que es un tejido especializado de
la fibra muscular y éstos al reunirse se concentran haciendo una
unión más férrea o láminas de fibras constituyendo el tendón o
aponeurosis de inserción.
La inserción de los tendones producen en el hueso tubérculos o
tuberosidades y las aponeurosis forman crestas en el hueso.
El tono muscular es un estado de excitabilidad del sistema
nervioso que mantiene bajo control a los músculos esqueléticos.
La función primordial de los músculos es generar movimientos, ya
sea voluntario o involuntario; músculos esqueléticos y viscerales
respectivamente, algunos son mixtos porque se enhebran en
ambas formas.
El sistema muscular permite al esqueleto se mueva, mantenga la
estabilidad y la forma del cuerpo; toda ésta regulación se
mantiene a través del sistema nervioso, a excepción del músculo
cardíaco, que funciona en forma autónoma. El músculo constituye
el 40% del peso total del individuo.
Las funciones del sistema muscular son: locomoción, actividad
motora de los órganos internos, información del estado fisiológico,
mímica, estabilidad, postura, producción de calor, forma y
protección.
El sistema muscular esta formado por músculos y tendones
Se distinguen según su disposición tres tipos de músculos:
esquelético, liso y cardíaco. El músculo estriado su unidad
fundamental es el sarcómero, y que presenta, al verlo a través de
un microscopio, estrías que están formadas por las bandas claras
y oscuras alternadas del sarcómero. Está formado por fibras
musculares en forma de huso, con extremos muy afinados, y más
cortas que las del músculo liso. Éstas fibras poseen la propiedad
de la plasticidad, es decir, cambian su longitud cuando son
estiradas, y son capaces de volver a recuperar la forma original.
Para mejorar la plasticidad de los músculos, sirven los
estiramientos. Es el encargado del movimiento de los esqueletos
axial y apendicular y del mantenimiento de la postura o posición
corporal. Además, el músculo esquelético ocular ejecuta los
movimientos más precisos de los ojos.
El músculo liso, también conocido como visceral o involuntario. El
estímulo para la contracción de los músculos lisos está mediado
por el sistema nervioso vegetativo autónomo. El músculo liso se
localiza en los aparatos reproductor y excretor, en los vasos
sanguíneos, en la piel, y órganos internos.
Existen músculos lisos unitarios, que se contraen rápidamente (no
se desencadena inervación), y músculos lisos multiunitarios, en
los cuales las contracciones dependen de la estimulación
nerviosa. Los músculos lisos unitarios son como los del útero,
uréter, aparato gastrointestinal, etc.; y los músculos lisos
multiunitarios son los que se encuentran en el iris, membrana
nictitante del ojo, tráquea, etc. El músculo liso posee además, al
igual que el músculo estriado, las proteínas actina y miosina. El
músculo cardíaco (miocardio) es un tipo de músculo estriado
encontrado en el corazón. Su función es bombear la sangre a
través del sistema circulatorio por contracción. El músculo
cardíaco generalmente funciona involuntaria y rítmicamente, sin
tener estimulación nerviosa. Es un músculo miogénico, es decir
autoexcitable. Las fibras estriadas y con ramificaciones del
músculo cardíaco forman una red interconectada en la pared del
corazón. El músculo cardíaco se contrae automáticamente a su
propio ritmo, unas 100.000 veces al día. No se puede controlar
conscientemente, sin embargo, su ritmo de contracción está
regulado por el sistema nervioso autónomo dependiendo de que el
cuerpo esté activo o en reposo. Los músculos se clasifican según
la forma en que sean controlados en: voluntarios: controlados por
el individuo, involuntarios o viscerales: dirigidos por el sistema
nervioso
central,
autónomo:
su
función
es
contraerse
regularmente sin detenerse, mixtos: músculos controlados por el
individuo y por sistema nervioso, por ejemplo los párpados. Los
músculos están formados por una proteína llamada miosina, la
misma se encuentra en todo el reino animal e incluso en algunos
vegetales que poseen la capacidad de moverse. El tejido muscular
se compone de una serie de fibras agrupadas en haces o masas
primarias y envueltas por la aponeurosis una especie de vaina o
membrana protectora, que impide el desplazamiento del músculo.
Las
fibras
musculares
poseen
abundantes
filamentos
intraprotoplasmáticos, llamados miofibrillas, que se ubican
paralelamente a lo largo del eje mayor de la célula y ocupan casi
toda la masa celular. Las miofibrillas de las fibras musculares
lisas son aparentemente homogéneas, pero las del músculo
estriado presentan zonas de distinta refringencia, lo que se debe a
la distribución de los componentes principales de las miofibrillas,
las proteínas de miosina y actina.Cada músculo posee una
determinada estructura, según la función que realicen, entre ellas
encontramos: fusiformes músculos con forma de huso. Siendo
gruesos en su parte central y delgados en los extremos. planos y
anchos, son los que se encuentran en el tórax (abdominales), y
protegen los órganos vitales ubicados en la caja torácica.
abanicoides o abanico, los músculos pectorales o los temporales
de la mandíbula. circulares, músculos en forma de aro. Se
encuentran en muchos órganos, para abrir y cerrar conductos. por
ejemplo el píloro o el orificio anal. orbiculares, músculos
semejantes a los fusiformes, pero con un orificio en el centro,
sirven para cerrar y abrir otros órganos. Por ejemplo los labios y
los ojosLos músculos son asociados generalmente en las
funciones obvias como el movimiento, pero en realidad son
también los que nos permiten impulsar la comida por el sistema
digestivo, respirar y hacer circular a la sangre.El funcionamiento
del sistema muscular se puede dividir en 3 procesos, uno
voluntario a cargo de los músculos esqueléticos el otro
involuntario realizado por los músculos viscerales y el último
proceso deber de los músculos cardíacos y de funcionamiento
autónomo. Los músculos esqueléticos permiten caminar, correr,
saltar, en fin facultan una multitud de actividades voluntarias. A
excepción de los reflejos que son las repuestas involuntarias
generadas como resultado de un estímulo. En cuanto a los
músculos de funcionamiento involuntario, se puede especificar
que se desempeñan de manera independiente a nuestra voluntad
pero son supervisados y controlados por el sistema nervioso, se
encarga de generar presión para el traslado de fluidos y el
transporte de sustancias a lo largo del organismo con ayuda de los
movimientos peristálticos (como el alimento, durante el proceso
de digestión y excreción). El proceso autónomo se lleva a cabo en
el corazón, órgano hecho con músculos cardíacos. La función
primordial de este tejido muscular es contraerse regularmente,
millones de veces, debiendo soportar la fatiga y el cansancio, o si
no, el corazón se detendría.Los músculos están envueltos por una
membrana de tejido conjuntivo llamada fascia. La unidad funcional
y estructural del músculo es la fibra muscular. El cuerpo humano
contiene aproximadamente 650 músculos. Si contamos además
los músculos erectores presentes en cada uno de los pelos del
cuerpo, entonces podemos considerar que existen más de cinco
millones de músculos.
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