Sumario 1. Introducción. 2. La persona desde diferentes perspectivas. 3. La imprecisión en la noción de persona. 4. Ser humano y persona. 5. La persona en la doctrina tradicional. 6. El concepto de persona en el Código Civil Federal en México. 7. Conclusiones. 8. Bibliografía. 1. Introducción. El concepto de persona no solo es un concepto jurídico fundamental en el derecho, sino el Concepto por excelencia del que dependen otros conceptos de la misma naturaleza. Pensaríamos entonces, que un concepto así debería haber sido analizado, explicado y unificado por los grandes juristas que han escrito sobre él a través de los siglos, pero desafortunadamente no es así. En nuestros días encontramos una gran diversidad de opiniones y propuestas que crean confusión y obligan a seguir estudiando y analizando el tema. Por lo anterior, considero que un trabajo de investigación al respecto es necesario para poder entender otros temas de importancia actual en la ciencia jurídica. En este breve ensayo, me propongo comparar los diferentes enfoques desde los que algunos juristas, tanto nacionales como extranjeros, estudian el tema, para estar en aptitud de formular algunas conclusiones, aclarando que aunque se abordaron los trabajos de varios autores, el hilo conductor del presente, proviene del ensayo: “De nuevo sobre el concepto de persona. El reto ante el debate bioético y biojurídico actual” de la autoría de la Doctora Ilva Myriam Hoyos Castañeda quien es una experta en el tema, así como de su ensayo “La persona 1 y sus derechos. Consideraciones bioético - jurídicas”, que llamó poderosamente mi atención. Para realizar este trabajo recurrí a las fuentes documentales, principalmente en el ámbito jurídico y filosófico, aunque en este último reconozco que no estoy muy versada. Y aunque se trate de un ensayo modesto el estudio de este tema debe hacerse a través del método analítico, ya que será necesario explorar distintas doctrinas que se han elaborado, así como utilizar el método histórico para ver la evolución que se ha dado al respecto. En algunas partes del trabajo será necesario recurrir al método comparativo ya sea en cuanto a la doctrina o los sistemas normativos vigentes lo cual es imprescindible para tener una visión panorámica del tema actualmente. Por lo que hace a las técnicas, para lograr los objetivos será necesario recurrir a la investigación documental en los ámbitos doctrinal y legislativo. 2. La persona desde diferentes perspectivas. Una de las razones de la imprecisión que impera tanto en la doctrina como en la legislación en relación al concepto de persona es que no solo el derecho se ocupa de este tema, también es objeto de estudio de otras ciencias como la sociología, la filosofía, la psicología y desde luego, el derecho, por mencionar algunas. Cada una de ellas busca, por distintos caminos, darnos un concepto de “persona” acorde a su visión y sus propios instrumentos de estudio, de ahí la diversidad de explicaciones. Para algunos estudiosos del tema, la persona como objeto de estudio, lo es en un primer momento de la filosofía, que es la ciencia que inquiere sobre el “ser”. Así, Fernández Sessarego expone que: “La ciencia jurídica necesita fundamentarse, inquirir no solo por cual es el ente u objeto de su conocimiento y estudio sino que también requiere aproximarse al conocimiento del ser de su objeto, así como discutir sobre las vías epistemológicas para aprehenderlo. El 2 derecho necesita dar una razón primaria de su existencia y de su sentido. Es aquí donde aparece la filosofía para hacerse cargo de esta problemática”. 1 En la ciencia jurídica, por lo tanto, deberían ser los jusfilósofos quienes emprendieran tan ardua tarea. Si la misma se deja en manos de los juristas sucedería lo mismo que con el concepto de “derecho” respecto del cual no existe acuerdo sobre el mismo. En el tema de persona, se encuentran tantas posturas que se concluye que algunas solo tienen diferencia de grado o de la perspectiva desde la que se hace el enfoque, pero existen otras que difieren diametralmente tal es el caso de la Dra. Myriam Hoyos Castañeda quien pretende, “llamar la atención sobre la necesidad de volver a una concepción metafísica de la persona que rescate la dimensión ética y la dimensión jurídica que le son inherentes, para, así, hacer frente a todo el pensamiento pragmático y utilitarista que considera que no todo ser humano es persona y, por tanto, en el caso de ser aceptado, llega a restringir la titularidad de los derechos humanos solo a algunos hombres. Lo que está en juego, en definitiva, es la noción misma de persona, así como la existencia de los derechos humanos.” 2 Por otra parte, tenemos a otros juristas que, como Tamayo y Salmorán, critican la anterior postura y analizan al sujeto del derecho desde un punto de vista estrictamente jurídico-positivista, ajeno a cualquier otra consideración, ya que en su ensayo critica y expone sobre “las doctrinas de la “esquizofrenia” jurídica. En ellas la persona jurídica no es más el contenido de las normas jurídicas positivas, sino un sujeto “preexistente”, detentador de cualidades y atributos jurídicos en sí y por sí; un “sujeto metajurídico” que, no obstante yacer por fuera de los derechos históricos, debe ser modelo y justificación de estos. Asimismo, ahí se explica la ideología normativa que recoge los atributos de este “sujeto metajurídico” y se las atribuye al ser humano, creando, entes trinitarios, científicamente indescriptibles”.3 1 Fernández Sessarego, Carlos, ¿Qué es ser “persona” para el derecho?, en http://dike.pucp.edu.pe/bibliotecadeautor-carlos-fernandez-cesareo/ar 2 Hoyos Castañeda, Ilva Myriam, De nuevo sobre el concepto de persona. El reto ante el debate bioético y biojurídico actual, en dspce.unav.es/dspace/bitstream/PD_41-2_14.p 3 Tamayo y Salmorán, Rolando, El sujeto del derecho, Isonomía, Revista de Teoría y Filosofía del Derecho. No. 3 ITAM, México, 1995, p.167 3 Las posturas tan antagónicas que se acaban de mencionar, no hacen sino reafirmar la necesidad de seguir analizando el tema, recurriendo a otros autores que nos permitan llegar a alguna conclusión. 3. La imprecisión en la noción de persona. Quien inicie estudios formales de derecho, debe saber que existen conceptos jurídicos fundamentales que es necesario conocer cuanto antes para que sirvan de cimiento para lo que vendrá después. Normalmente es en el primer o segundo semestre cuando se empieza a estudiarlos y uno de ellos, básico sin lugar a dudas, es el concepto de persona. Hablar de un concepto de persona, en principio, parecería algo sencillo, pero debemos recordar que el derecho se expresa a través del lenguaje y que los términos y expresiones que se utilizan en un sistema jurídico determinado, puede ser que tengan un significado univoco como lo expresa Hohfeld “o si por el contrario, sus reglas de uso toleran ambigüedades que el contexto puede, o no, ayudar a disipar. Hay en suma, un aparente caos terminológico que, en este caso, parece ser un indicio de caos conceptual”4 Ahora bien, ¿Qué es persona para el derecho? Esto es importante porque la palabra “persona” es un claro ejemplo de confusión terminológica. Algunos aplican el término refiriéndose al “ser humano”, otros, al “sujeto de derecho“ y los más se remontan a los textos romanos para darnos la etimología de la palabra explicándonos que deriva de “personare” (de ´per´: ´intensidad´ y ´sonare´: ´ hacer ruido’). Comúnmente entre los romanos el termino persona designaba una careta que cubría la cara del actor cuando recitaba en una escena. Precisamente con base a lo anterior algunos autores han elaborado un concepto de persona jurídica atribuyendo a los romanos su significado jurídico originario. Así, Tamayo y Salmorán explica que: 4 Hohfeld, Wesley Newcomb, Conceptos jurídicos fundamentales, Distribuciones Fontamara S.A., 3ª. Edición, México, 1995, p. 10 4 “la persona (un actor enmascarado) “personifica” a alguien (originalmente, a los personajes de la obra), hace un papel. El origen y el significado teatral de “persona” están fuera de discusión. Aún más, los posteriores usos de “persona” se derivan de su significado dramático.” 5 Algunos autores, en forma por demás sencilla, declaran que: “Jurídicamente, persona significa todo ser o ente sujeto de derechos y obligaciones; con ello se alude tanto a los humanos como a las personas morales, precisamente los primeros como seres y las segundas como entes”,6 otros señalan que “La persona solo designa un haz de obligaciones, de responsabilidades y de derechos objetivos; un conjunto de normas. La persona física no es el hombre, como lo considera la doctrina tradicional; el hombre no es una noción jurídica que expresa una función específica del derecho; es una noción biológica, fisiológica y psicológica. Cuando una norma jurídica utiliza el concepto de hombre, no le confiere por ello el carácter de una noción jurídica”. 7 Aunque Galindo Garfias reconoce que al derecho solo le interesa una parte y no la totalidad de la conducta humana y por tanto acepta que persona es el sujeto de derechos y obligaciones, también aclara que “en tanto que con el sustantivo “hombre” propiamente se particulariza la especie en un individuo determinado como perteneciente a la humanidad, con la voz “persona” se quiere decir algo mas, se apunta en manera más clara y con mayor énfasis a la dignidad del ser humano, porque alude implícitamente al hombre en cuanto está dotado de libertad para proponerse a si mismo fines y para decidir la dirección de su conducta, con vista a la realización de tales fines;”8 Hasta aquí, podemos observar que no se ha avanzado mucho en clarificar el concepto de persona pues cada autor, quizá con la mejor de las intenciones, llega a conclusiones diversas que no hacen más que abonar a la incertidumbre. 5 Tamayo y Salmorán, Rolando, El concepto de persona jurídica, en http://biblio.juridicas.unam.mx/libros/2/923/6.pdf 6 Domínguez Martínez, Jorge Alfredo, Derecho Civil. Parte general. Personas. Cosas. Negocio jurídico e invalidez., Ed. Porrúa, 10ª. Edición, México. 2006, p.131 7 Medina Riestra, José Alfredo, Coordinador, Teoría del Derecho Civil, Gómez Pérez, Olga Guillermina, autora del capítulo XVIII Las personas, Ed. Porrúa y Universidad de Guadalajara, 2ª. Edición, México, 1999, p.212 8 Galindo Garfias, Ignacio, Derecho Civil. Primer curso. Parte general. Personas. Familia., Ed. Porrúa, 23ª. Edición, México, 2004, p. 302 5 4. Ser humano y persona. Pudiera ser que al analizar por separado ciertos conceptos utilizados por los juristas, nos arrojen luz a la cuestión. Conceptos como ser humano y persona, se utilizan a veces como sinónimos y otras como términos totalmente independientes unos de otros. El ser humano hace referencia a todos los entes de la especie, precisamente humana. Somos parte de la naturaleza y estamos sujetos a los efectos de los fenómenos naturales al igual que otros seres vivos con quienes compartimos el planeta. ¿Qué nos hace diferentes a los animales? Respetando las opiniones en contrario, yo considero que somos materia pero también espíritu y que esta combinación permite pensarnos a nosotros mismos como seres libres. Por otra parte, es necesario decidir si el ser humano es persona o son dos conceptos totalmente separados. Algunos autores exponen dos tendencias respecto de este tema: “la tendencia reduccionista que argumenta a favor de la separación entre el concepto de persona, el de ser humano y el de vida humana, lo que implica reducir el ámbito de aplicación del concepto de persona respecto del ser humano: por otra la tendencia unitaria que justifica la identidad intrínseca entre persona, ser humano y vida humana”. 9 Definitivamente no podemos separar el concepto de ser humano y persona y creo que quien mejor nos explica esto es Hoyos Castañeda al exponer que si se acepta una definición de persona en consideración a que se tenga auto reflexión, racionalidad y sentido moral que es lo que les otorga derechos y obligaciones como afirman algunos, conduce a un funcionalismo en el que lo significativo para ser persona consiste en tener, no en ser, lo cual se traduce, en mi opinión, en que sea el estado el que arbitrariamente decida, de entre los seres humanos, quienes son personas y quienes no, con el riesgo de afectar sus derechos humanos básicos. 10 5. Concepto legislativo de persona en México. 9 Hoyos Castañeda, Ilva Myriam, La persona y sus derechos. Consideraciones bioético – jurídicas. Ed. Temis S.A. y Universidad de La Sabana, Colombia, 2000, p.3 10 Ibídem. P. 5 6 El Código Civil Federal mexicano publicado en el Diario Oficial de la Federación el 31 de agosto de 1928, no da un concepto de persona, ni siquiera una definición, únicamente en el Libro sobre las personas en los artículos 22 y 23 se establece que : Art. 22 La capacidad jurídica de las personas se adquiere por el nacimiento y se pierde por la muerte; pero desde el momento en que un individuo es concebido, entra bajo la protección de la ley y se le tiene por nacido para los efectos declarados en el presente código. Es necesario aclarar que este artículo no ha sufrido ninguna reforma hasta el momento. Art. 23 La menor edad, el estado de interdicción y demás incapacidades establecidas por la ley, son restricciones a la personalidad jurídica; pero los incapaces pueden ejercitar sus derechos o contraer obligaciones por medio de sus representantes. Por lo que hace a este artículo, el 23 de julio de 1992 fue adicionado para quedar de la siguiente manera: Art. 23 La minoría de edad, el estado de interdicción y demás incapacidades establecidas por la ley, son restricciones a la personalidad jurídica que no deben menoscabar la dignidad de la persona ni atentar contra la integridad de la familia; pero los incapaces pueden ejercitar sus derechos o contraer obligaciones por medio de sus representantes. (En negrillas la adición) Reiteramos que normativamente, el legislador omitió dar un concepto de persona dejando a la doctrina las explicaciones pertinentes. No obstante, menciona la “capacidad jurídica de las personas” y las “incapacidades como restricciones a la personalidad jurídica” por lo que resulta interesante saber que se entiende por “capacidad” y “personalidad jurídica”. Otro punto importante es la adición que se realizo en 1992 sobre la dignidad de la persona que no debe menoscabarse a través de las restricciones a la personalidad jurídica. Respecto a la personalidad jurídica, está íntimamente ligada a la persona y la mayoría de los juristas acepta que es la aptitud para ser sujeto de derechos y obligaciones, Domínguez Martínez explica al respecto: “ser sujeto de derechos y obligaciones depende de la personalidad jurídica; de esa personalidad depende ser persona para el derecho. Ello significa que ser persona está condicionado a tener personalidad jurídica, se es persona porque se tiene dicha cualidad; no se tiene personalidad porque se sea persona sino al contrario, se tiene el carácter de persona por tener personalidad jurídica”. 11 11 Domínguez Martínez, Jorge Alfredo, Ob.cit. p. 130 7 Abundando, Sánchez Barroso enumera algunas características de la personalidad que mencionaré brevemente: i) es única e inmutable; ii) no admite alteración alguna en cuanto a su naturaleza, alcances y contenido; iii) en todos los sujetos la personalidad es la misma; iv) no admite graduación, no se puede tener más o menos personalidad; v) ser persona jurídica está condicionada a tener personalidad jurídica; vi) el origen y fundamento de la personalidad jurídica está en la ley.12 6. Conclusiones. 1) Es difícil lograr un concepto unívoco de persona ya que es objeto de estudio no solo del derecho, sino de otras ciencias como la filosofía, la sociología, la psicología, etc. 2) Considero que son los jusfilósofos quienes deben ocuparse de formular un concepto claro de persona, acorde a los valores inherentes al ser humano. 3) Si en el ámbito jurídico no se comprende qué es persona, tampoco se podrá dar un concepto de derecho, ya que si una ciencia no clarifica su objeto de estudio, no es ciencia. 4) Todos los seres humanos son personas, y aunque la legislación no establezca un concepto expreso, en cada uno de los artículos donde se habla de persona subyace una corriente ideológica al respecto. 12 Sánchez Barroso, José Antonio, Consideraciones actuales sobre el inicio y fin de la personalidad, en http://biblio.juridicas.unam.mx/revista/pdf/DerechoPrivado/2/dtr12.pdf 8 7. Bibliografía. Domínguez Martínez, Jorge Alfredo, Derecho civil. Parte general. Personas, cosas, negocio jurídico e invalidez. Ed. Porrúa, décima edición, México, 2006 Galindo Garfias, Ignacio, Derecho civil. Primer curso, parte general. Personas, familia. Ed. Porrúa, Vigesimotercera edición, México, 2004 Hohfeld, W.N., Conceptos jurídicos fundamentales. Distribuciones Fontamara, S.A., Mexico, 1995 Hoyos Castañeda, Ilva Myriam, La persona y sus derechos. Consideraciones bioético – jurídicas. Ed. Temis S.A. y Universidad de La Sabana, Colombia, 2000 Medina-Riestra, J. Alfredo, Coordinador. Teoría del derecho civil. Ed. Porrúa y Universidad de Guadalajara, Segunda edición, México, 1999 Hemerografía. Tamayo y Salmorán, Rolando, “El sujeto del derecho” Isonomía, Revista de Teoría y Filosofía del Derecho. No. 3 ITAM, México, 1995 Legislación. Código Civil Federal mexicano publicado en el Diario Oficial de la Federación el 31 de agosto de 1928 Fuentes electrónicas. Barrera Graf, Jorge, El concepto de persona jurídica, en http://biblio.juridicas.unam.mx/libros/2/923/6.pdf Hoyos Castañeda, Ilva Myriam, De nuevo sobre el concepto de persona. El reto ante el debate bioético y biojurídico actual, en 9 http://www.google.com.mx/search?q=hoyos Castañeda Ilva Myriam %2c de nuevo sobre el concepto de persona, el reto ante el debate bioético y biojurídico actual &1e=utf-8&aq=t&rl Platas Pacheco, María del Carmen, La persona, sujeto ético-jurídico, en http://razonamientojudicial.com/pdf/revistas/05 Sánchez Barroso, José el inicio y el Antonio, fin Consideraciones de la actuales personalidad, sobre en http://biblio.juridicas.unam.mx/revista/pdf/DerechoPrivado/2/dtr/dtr12.pdf Tamayo y Salmorán, Rolando, El concepto de persona jurídica, en http://biblio.juridicas.unam.mx/libros/2/923/6.pdf Fernández Sessarego, Carlos, ¿Qué es ser persona para el derecho? en http://dike.pucp.edu.pe/bibliotecadeautor_carlos_fernandez_cesareo/ar 10