ki sissa

KI SISSA
Manteniendo contacto, Creencias Apasionadas y Entendimiento
¿Cómo debemos lidiar con la gente que nos ha hecho tanto mal? ¿Cómo debemos interactuar con la
gente que sabemos que están violando las normas establecidas y están envueltos en un ambiente
amoral o Criminal? Especialmente ¿Como podríamos lidiar con gente que por, diferentes circunstancias,
han dado la espalda a los valores básicos judíos como lo es la familia, Dios, el pueblo Judío, etc.?
En la porción de la Tora Ki Sissa, aprendemos como después de que el pueblo Judío peco, al adorar el
Becerro de Oro, Moisés descendió de la Montaña y vio al pueblo revelándose ante el. Cuando el vio
esto, tiro las tablas de los Diez Mandamientos al suelo, quebrándolos en muchos pedazos. Después de
castigar a los culpables, Dios le dijo que grabara dos tablas más y que ascendiera al Monte Sinaí. Antes
de que Dios inscribiera los Diez Mandamientos de nuevo en las tablas, Dios le enseño una Oración
Moisés; en si la Gemara en Rosh Hashanna dice que Dios, como fuese, cuando Él le enseño esta oración
a Moisés, se envolvió en un Talit como uno que guía a la congregación en oración y dice “Cuando Israel
peque, que oren delante de mi en este orden de Oración y Yo les perdonare”. Esta es la famosa oración
que decimos una y otra vez en Yom Kippur y que decimos especialmente en la oración de Selichot antes
de Rosh Hashanna “Hashem, Hashem, Dios misericordioso y Clemente…”
Los Rabinos atribuyen que la razón por la que decimos “Hashem, Hashem...” dos veces es para
enseñarnos que Dios esta con nosotros antes de pecar y Dios esta con nosotros aun después que
pecamos. Todavía podemos sentir la presencia de Dios después de haber pecado, para que podamos
regresar. Posiblemente es por eso que la Gemara dice que Dios se envolvió en un Talit para decirnos
que debemos envolvernos en todos los mandamientos que podamos después de que hemos pecado y
no sentir que hemos perdido nuestro derecho de hacer mandamientos solo porque hemos pecado.
El Baal Shem Tov enfatizo el hecho de que Dios esta con nosotros en todo lugar, aun después de
haber pecado. El Gaón de Vilna, hizo una excepción a este comentario del Baal Shem Tov y pensó que
estaba cerca a ser una herejía porque el Baal Shem Tov continuo y dijo que una persona ni siquiera
podía levantar su dedito sin que Dios estuviera con el. Para el Gaón de Vilna, pareciera implicar que el
Baal Shem Tov estaba haciendo a Dios un cómplice en el crimen de las personas. El Gaón de Vilna
probablemente pensaba de esta manera porque la creencia Hasidica de que tenemos que redimir las
chispas, lo que significa en todos nosotros hay una chispa de divinidad. Cada uno de nosotros tiene un
alma y en todo ser vivo o falta de vida hay una chispa de divinidad. Esta creencia nos dice que tenemos
que redimir estas chispas, sin embargo esta idea es llevada al extremo, puede llevarnos a excesos
terribles como algunos grupos lo han hecho, especialmente los Franquistas; ellos creían que teníamos
que redimir las chispas aun del mal, ellos hacían malas obras a propósito, como el incesto, para redimir
las chispas. Estos es un gran pecado. Los comunistas hicieron esto en nuestros días cuando mataron
millones de gente para poder mejorar como dijeron este mundo.
Ellos decían que solo estaban removiendo la escoria para que la luz de redención pudiera ser vista.
El Baal Shem Tov, no dijo que teníamos que hacer malas obras para poder redimir las chispas. Él estaba
hablando de algo completamente diferente, él estaba diciendo que Dios es un Dios que entiende, que
nadie puede estar tan lejos de Dios para no poder regresar a El. Puede ser que Dios no apruebe lo que
hemos hecho pero el nunca cortara su relación con nosotros de tal manera que no podamos regresar a
El. Surge esta pregunta ¿Por qué Moisés fue elegido para ser el líder del Pueblo Judío? Después de todo
él nunca paso un día de su vida en esclavitud, él no sabia Hebreo; él se caso con alguien que no era de su
Pueblo, el crió a su hijo primogénito como un pagano de acuerdo al Midrash.
Los Rabinos nos dicen que Moisés era un pastor, en otras palabras Moisés paso por lo mas bajo de la
ley, un pastor de ovejas en la Ley Judía era considerada la posición mas baja, porque el usualmente
pastoreaba a sus ovejas en la propiedad de otros y porque como pastor vivió una existencia en soledad,
por consiguiente él era considerado como un maleante. Moisés por supuesto no hizo ninguna de estas
cosas pero el entendió el área del pastor. Cuando Moisés fue elegido como el líder del Pueblo Judío la
Tora dice “El guio las ovejas hacia el desierto y el llego al Monte de Dios, a Horeb”. La palabra Acher
(después) es superflua “Y el guio las ovejas hacia Bamidbar” puede significar “El desierto” o puede
significar “como un líder”. La Palabra oveja en Hebreo Tzom, puede también significar los tres tipos de
personas que un líder tiene que guiar, Tzadikin (Gente Justa) Anoshim (Gente Ordinaria) y Nophlim
(Pecadores), Moisés tiene que mirar a cada uno de estos tipos de persona con simpatía, poniéndose el
mismo en sus zapatos, él tiene que ser Acher (otra persona) mirando la situación en beneficio de esa
persona y no de el mismo. Moisés tenia que entender el punto de vista de ellos, esto él podía hacer, esta
fue su grandeza sin embargo solo porque el entendió a su gente y sus errores no significo que el
estuviera de acuerdo con la ejecución de estos errores o aun condenarlos, significo que el los entendió y
la gente sabia que él les entendía, el empatizo con ellos, la Tora continua diciendo que un ángel de Dios
le apareció en un fuego ardiente en medio de una zarza, la zarza ardía con fuego pero no era consumida,
Moisés no solo entendió al pueblo, pero tenia pasión por sus creencia y esas creencias nunca pudieron
ser consumidas, su trabajo era levantar al Pueblo y acercarlo a su estándar.
El Rabino Moisés fue elegido para ser el líder del pueblo porque el tenia estas dos cualidades, tenia
pasión por sus creencias, la cuales no lo comprometían, y el entendía al pueblo y nunca quebró su
contacto con ellos para poderlos levantar, así es como Dios trata con todos nosotros, El esta con
nosotros en nuestros problemas aun con aquellos problemas que nosotros hemos provocado sobre
nosotros mismos. Todos sabemos que el Midrash nos enseña que después de que el Templo fue
destruido y fuimos enviados al exilio, la Shechina de Dios también fue al exilio, aunque fuimos exiliados
por nuestros pecados, Dios estaba con nosotros, Dios esta con nosotros antes y después del pecado. Él
no nos hace pecar y tampoco es cómplice en nuestros pecados, nosotros hacemos eso por nosotros
mismos. El nunca rompe su relación con nosotros, El siempre esta allí ayudándonos a regresar.
Nosotros también nunca debemos de romper nuestro contacto con aquellos que nos han hecho mal,
no debemos violar nuestros estándares, al cometer un acto inmoral o criminal para recuperarlos,
entonces estaríamos en efecto bajándonos a su nivel en ves de levantarlos a un nivel apropiado,
debemos de darles la bienvenida al contacto con ellos, siempre y cuando no signifique comprometer
nuestros estándares. Despreciar personas, instituciones, movimientos o naciones, no es la forma de
hacer las cosas, Dios nos ensena cuando nos dio la oración “Hashem, Hashem…” y por su voluntad el
Rabino Moisés fue elegido para ser nuestro líder y grande profeta. Esperemos y Oremos que
recordemos esta lección para que el mesías venga pronto en nuestros días. Amen.