Untitled - Ogigia. Revista Electrónica de Estudios Hispánicos

Anuncio
OGIGIA
Revista electrónica de estudios hispánicos
N.º 2 - Julio 2007
Issn 1887-3731
Editores
Jesús Félix Pascual Molina
(Universidad de Valladolid, España)
Eva Álvarez Ramos
(Universidad de Valladolid, España)
Consejo científico
Chiara Atzori
(Traductora)
Fernando Blanco Cendón
(Kansai Gaidai University, Japón)
Fokion Erotas
(University of Athens, Grecia)
Sergio García Sierra
(Università di Catania, Italia)
Guillermo Martínez
(California Polytechnic State University, EE.UU.)
Miguel Salas Díaz
(Universidad de Lenguas Extranjeras de Dalian, China)
María Mar Soliño Pazó
(Universidad de Salamanca, España)
Maquetación
A&P Creaciones
Información
http://www.ogigia.es
info@ogigia.es
OGIGIA. Revista electrónica de estudios hispánicos
ISSN: 1887-3731
Revista indexada en DIALNET (http://dialnet.unirioja.es)
© Copyright, 2007.
© De los textos sus respectivos autores.
OGIGIA no se responsabiliza de los juicios y opiniones expresados por los autores en sus artículos y
colaboraciones.
3
Índice
Editorial................................................................................................................... 5
Artículos
1.- Literatura
Configuración de los personajes históricos en El ruedo ibérico de Valle-Inclán
Juan Ramón Vélez García..................................................................................................7
Los realismos en Beatus Ille de Antonio Muñoz Molina
Diop Papa Mamour............................................................................................................21
El impacto de “Viernes” en la poesía venezolana
William Martínez, Jr...........................................................................................................37
La imagen de Castilla y España en la literatura galleguista de los siglos XIX y XX
Miguel Salas Díaz..............................................................................................................45
2.- Lengua
En busca de una explicación didáctica del subjuntivo para estudiantes de ELE
Miguel A. Martín Sánchez y Charo Nevado Fuentes
............................................................................................................................................61
Amistades peligrosas: una aproximación teórica y una clasificación práctica de los falsos
amigos entre el Español y el Griego moderno
Eleni Leontaridi, Natividad Peramos Soler, Marina Ruiz Morales................................77
3.- Historia, Arte, Cultura
La imagen de España en el mosaico cultural paneruropeo: retos y compromisos del
Consejo de Europa en la cooperación intercultural
Chiara Atzori......................................................................................................................91
El jardín del sendero que se bifurca: análisis económico-político de la integración y
posterior reinserción de América Latina en el sistema mundial
Miguel Ángel Hidalgo Martínez......................................................................................109
Reseñas......................................................................................................................121
Basado en hechos reales: diez historias, de Saúl Fernández
Javier García Rodríguez.................................................................................................123
Poems to Lisi, de Francisco de Quevedo edición de Gareth Walters
Begoña Casado Martín...................................................................................................129
La Luz, de Miguel Salas Díaz
Eva Álvarez Ramos.........................................................................................................131
Cometas en el cielo, de Khaled Hosseini
William Martínez..............................................................................................................133
Soledades, de Antonio Machado, edición de Dolores Romero López
Eva Álvarez Ramos.........................................................................................................137
Coleccionismo y nobleza. Signos de distinción social en la Andalucía del Renacimiento,
de Antonio Urquízar Herrera
Jesús Félix Pascual Molina............................................................................................139
Normas de publicación.......................................................................141
EDITORIAL
5
eDITORIAL
Ve la luz el segundo número de Ogigia. Revista electrónica de estudios hispánicos.
Tras la buena acogida del primer número y la inclusión en el directorio DIALNET (http://
dialnet.unirioja.es), además de en otros portales de internet como el que dedicado al
Hispanismo gestiona el Instituto Cervantes (http://hispanismo.cervantes.es) la vida de lo
que comenzó como una ilusión es ya una realidad.
El presente número recoge, en más de 100 páginas de texto, diversas aportaciones
en el ámbito de la lengua, la literatura y la cultura española e hispanoamericana, de mano
de profesionales de la enseñanza que, con sus estudios, proponen nuevas vías de
trabajo, repasan otras y provocan la reflexión.
En este número, hemos agrupado los artículos en tres bloques, de acuerdo con el
planteamiento temático de la revista: Literatura, Lengua y un tercer apartado dedicado a
la Historia, el Arte y la Cultura. Completan el volumen una serie de reseñas bibliográficas
dedicadas a materiales relacionados con los temas señalados, fruto de un interés que
queremos compartir con los lectores.
Ogigia sigue creciendo. Nuevos habitantes, nuevos proyectos, que esperamos se
conviertan en un importante soporte de quienes se dedican a la difusión de la lengua y la
cultura española.
Basten estas líneas de agradecimiento a todas aquellas personas que confiaron en
nosotros para la publicación del primer número; a todas aquellas que se acercaron con
curiosidad a él; a las que han querido compartir su sabiduría en este segundo; todas ellas
han hecho que sigamos navegando allende los mares digitales.
6
Ogigia. Revista electrónica de estudios hispánicos
Juan Ramón Vélez García
7
CONFIGURACIÓN DE LOS PERSONAJES HISTÓRICOS EN
EL RUEDO IBÉRICO DE VALLE-INCLÁN
Juan Ramón Vélez García
(Universidad de Salamanca)
Resumen
El propósito de este trabajo es analizar cómo están configurados literariamente los
personajes históricos que aparecen en las novelas que conforman la trilogía El ruedo
ibérico de Valle-Inclán. Éstas abarcan aspectos concernientes a un período convulso de la
historia española ya abordados por el autor en su Farsa y licencia de la reina castiza y
algunos artículos de prensa. Valle-Inclán ofrece una visión esperpéntica y degradada de la
corte de Isabel II y su reinado a punto de desmoronarse en vísperas de “La Gloriosa”.
Palabras clave: trilogía – personajes – farsa - historia
Abstract
The aim of this work is to analyze how the historical characters appearing in Valle-Inclán’s
El ruedo ibérico trilogy are literary shaped. These novels encompass aspects concerning a
convulsed period of Spanish history already approached by the author in his play Farsa y
licencia de la reina castiza and some press articles. Valle-Inclán offers a caricaturesque
and degraded vision of the court of Isabel II and her crumbling kingdom in the eve of “La
Gloriosa”.
Keywords: trilogy – characters – farce - history
Ogigia. Revista electrónica de estudios hispánicos
8
Introducción
El ruedo ibérico es una trilogía perteneciente a un plan inicialmente concebido por
Valle-Inclán como un ciclo de nueve novelas organizadas en tres bloques, centrada en los
momentos cercanos a “La Gloriosa” de 1868, revolución que se saldó con el
derrocamiento de la reina Isabel II. El autor sólo logró completar las dos primeras: La
corte de los milagros y Viva mi dueño; la tercera, Baza de espadas, quedó truncada.
Mi propósito en este artículo es exponer cómo queda reflejada en estas tres novelas
la “Corte de Isabel Segunda, con sus frailes, sus togados, sus validos, sus héroes bufos, y
sus payasos trágicos” (Viva 311)1, temática que tenía precedentes en la Farsa y licencia
de la reina castiza del autor. Ya en otras obras anteriores suyas la acción se desarrollaba
en unas coordenadas cronológicas similares. Es el caso de Sonata de invierno, La guerra
carlista, Tirano Banderas y las Comedias bárbaras.
Para empezar, hay que destacar la importancia de la colectividad en estas obras. De
ello se deriva una polifonía de voces que va a marcar su desarrollo. Hay algunos
personajes que reciben una mayor atención, pero no puede decirse que exista un
protagonista individual sobre el que recaiga el peso de la historia, lo cual cumple el
anuncio del autor: “El ruedo ibérico no tendrá, a lo largo de sus varios volúmenes,
protagonistas. Su gran protagonista es el medio social, el ambiente...”2. Ante el lector
desfila una galería de personajes, algunos históricos, otros ficcionales. Estos últimos
proceden, bien del universo creado por Valle en obras anteriores (tal es el caso del
Marqués de Bradomín o del Duque de Ordax) o bien de obras de autores ajenos, entre los
que destacan los cervantinos Rinconete y Cortadillo y Don Quijote; otros son creados ex
profeso para El ruedo ibérico. La construcción de una ficción que engloba personajes de
tan diversa procedencia alimenta la dialogicidad y está anticipando uno de los rasgos
característicos en la evolución de la novela de las últimas décadas: la ruptura de lo que se
ha dado en llamar compossibility. Dos o más personajes son “compossible, that is,
capable of coexisting and interacting, only if they belong to the same text; characters
belonging to one text are normally not compossible with characters from another”3.
1
A partir de aquí las citas de la trilogía irán acompañadas por el título abreviado de la obra a la que
pertenezcan y el correspondiente número de página entre paréntesis para evitar una proliferación de notas
al pie. Las ediciones que utilizo son: La corte de los milagros, Madrid, Espasa Calpe, 1990; Viva mi dueño,
Madrid, Espasa Calpe, 1992; Baza de espadas, Barcelona, AHR, 1958.
2
Citado por MADRID, Francisco, La vida altiva de Valle-Inclán, Buenos Aires, Poseidón, 1943, p. 115.
3
MCHALE, Brian, Postmodernist Fiction, London, Routledge, 1991, p. 57.
Juan Ramón Vélez García
9
Díaz-Plaja señala que en la evolución de la estética del autor tiene lugar “un
desplazamiento de lo individual-temporal a lo colectivo-espacial”4. A la importancia del
protagonismo detentado por la colectividad, explicitada por el propio Valle-Inclán, se suma
el interés del autor por la construcción y fijación de escenas con un afán teatral: “Yo
escribo de forma escénica, dialogada, casi siempre [...]. Escribo de esa manera porque
me gusta mucho, porque me parece que es la forma literaria mejor, más serena y más
impasible de conducir la acción. Amo la impasibilidad en el arte”5. Busca la caracterización
indirecta de sus personajes, que éstos “se presenten siempre solos y sean en todo
momento ellos, sin el comentario, sin la explicación del autor. Que todo lo sea la acción
misma”6. De este modo, los fragmentos dialogados (en algunas ocasiones, vertiginosos y
plagados de exclamaciones que los acercan a un remedo paródico de los diálogos de las
piezas de Echegaray) pasan a un primer plano.
El peso de lo visual en la obra explica las referencias a las artes plásticas, en
descripciones teñidas de pictoricidad –como las que se ocupan de la Marquesa Carolina y
su entorno–, con ecos de Velázquez –Bradomín presenta un “empaque de figura
velazqueña” (Corte 195)– y, sobre todo, del Goya de los “Disparates”, “Caprichos” y
“Pinturas negras”. El propio autor considera que su técnica en estas novelas es
eminentemente pictórica y “puede aproximarse a la técnica del puntillismo en pintura. Hay
una desarticulación de motivos y una vibración cromática en mi voluntad” 7. Así, la Familia
Real en su primera aparición “tenía un resplandor de códice miniado. La Señora,
particularmente, estaba muy majestuosa con el incendio que le subía a la cara” (Corte
65).
La corte isabelina es descrita como una corte de “Licencias y Milagros” (Corte 82 y
90). Las licencias podrían aludir a las que se toman aquellos que rodean a la reina para
hacer y deshacer en función de intereses de variada índole, así como a la lascivia
proverbial de la monarca. Valle-Inclán recurrió para titular el primer libro de la trilogía a
una expresión –cour des miracles– usada en Francia a finales de la época medieval con
el fin de referirse a un barrio marginal que siglos más tarde sería retratado por Victor Hugo
en Nuestra Señora de París. Conlleva una notoria carga de ironía, pues las evocaciones
4
DÍAZ-PLAJA, Guillermo, Las estéticas de Valle-Inclán, Madrid, Gredos, 1965, p. 242.
5
En DOUGHERTY, Dru, Un Valle-Inclán olvidado: entrevistas y conferencias, Ed. de Eugenio Suárez
Galbán, Madrid, Fundamentos, 1983, pp. 190-191.
6
Ibidem, p. 191.
7
Ibidem, p. 178.
Ogigia. Revista electrónica de estudios hispánicos
10
que en principio dicho nombre puede suscitar entran en contradicción con la perceptible
degradación de la corte española. Al igual que en la novela de Hugo designa un
submundo, en la obra de Valle sirve para nombrar a una corte carnavalesca de
personajes históricos sometidos a la reflexión deformante de los espejos del Callejón del
Gato, en una España donde “¡todo es bufo! / –¡Bufo y trágico!” (Viva 55) agitada en las
vísperas de “un drama superior a las facultades de los intérpretes. Éstos, monigotes de
cartón, sin idealidad y sin coraje, nos parecen ridículos en sus arreos de héroes.
Gesticulan con torpeza de cómicos de la legua las situaciones más sublimemente
trágicas”8. Adjetivos como “fatuo”, “vano” o “voluble” aplicados en ocasiones a la corte y su
pompa hacen resaltar la “vaga magnificencia” (Viva 306) que marca la vida de sus
miembros, integrantes de un circo: “Sobre la gala de los uniformes destacaban los
guantes blancos su cruel desentono, y eran todas las manos, manos de payaso” (Corte
79). El título de la trilogía ya abunda en esa idea de espectáculo; el sintagma “ruedo
ibérico” ha contado con fortuna posterior como título para otras expresiones de distinta
índole: Cuadernos del Ruedo Ibérico era una revista de oposición política al franquismo;
El ruedo ibérico es también el nombre de un programa de televisión centrado en la vida
política de la España actual.
El autor recurre a los procedimientos del esperpento en las novelas que nos ocupan,
operando una estilización deformante sobre un material histórico que ya facilitaba esa
elaboración. La caricatura y la deformación ya estaban en coplas, aleluyas, caricaturas y
otros testimonios mordaces contemporáneos a los hechos abordados, como se pone de
manifiesto en “Periquillo, gacetillero”, libro noveno de Viva mi dueño: “A la Historia de
España, en sus grandes horas, nunca le ha faltado acompañamiento de romances. Y la
epopeya de los amenes isabelinos hay que buscarla en las coplas que se cantaron
entonces por el Ruedo Ibérico” (Viva 331); algunas de estas coplas se recogen en las
obras. En la caracterización de los personajes se detecta asimismo la influencia de los
periódicos satíricos de la época tratada. La deuda con dicha prensa se manifiesta también
en los títulos escogidos para cada uno de los “libros” menores en que se dividen las
novelas. Valle aprovecha también algunas publicaciones suyas anteriores, como Una
tertulia de antaño, de 1909, o artículos de 1892. La crítica ejercida por él, no obstante, no
es tan virulenta como la que fue vertida en algunas páginas de prensa contemporáneas a
los hechos que se abordan, o en el libro Los borbones en pelota, firmado con un
8
En MADRID, op. cit., p. 345.
Juan Ramón Vélez García
11
seudónimo (“Sem”) bajo el que presumiblemente se escondían los hermanos Valeriano y
Gustavo Adolfo Bécquer.
Los personajes de El ruedo ibérico
Pasamos a analizar ahora cómo están configurados los personajes históricos más
relevantes que aparecen en El ruedo ibérico.
Isabel II
El tratamiento de uno de los personajes principales está marcado por una serie de
constantes físicas y de temperamento. Se hace especial hincapié en su obesidad, en
ocasiones focalizada en sus manos –“achorizada mano” (Viva 233) –, acentuada por la
actitud golosa de la que suele hacer gala; por ejemplo, tras la muerte de Narváez “La
Reina de España, frondosa, rubia y herpética, con nada se consolaba: Para no caer en
desmayo, se fortalecía con bizcochos y marrasquino” (Corte 336). Se mueve “con aire de
oca graciosa” (346) y posee “crasas mantecas” (67) y “opulentas mantecas” (Viva 155).
En la ceremonia de la Rosa de Oro se encuentra “sonriendo purpúrea”, “pimpante,
donosa y feliz de malicias en la vana charla de la etiqueta” (Corte 78). Su carácter es
campechano: “La Católica Majestad se abanicó la pechuga con pava magnificencia” (Viva
149); “La Católica Majestad sonreía conqueridora y frescachona, con la sonrisa de la
comadre que vende buñuelos en la Virgen de la Paloma” (Corte 353); también aparece
“empechada y matrona”, y actuando “con gesto picarón y campechano” (338). Se alude a
su “sandunga populachera” (Viva 159), a cómo “amontonaba con sandunga el labio
borbónico” (162). Destaca cómo, para justificar sus licencias, establece una distinción
entre sus condiciones regia y humana: “Mis flaquezas de mujer son independientes de
mis actos como Reina” (160). Aparece como una mujer incompetente que se ve incapaz
de sostener el peso de la corona y se ve desbordada por sus obligaciones: “¡Patrocinio,
qué vía crucis es el gobierno de los españoles!” (249), de temperamento manejable
–“Eulalia, no me traigas cuentos, porque los creo y entre unos y otros me revolvéis la
cabeza” (Corte 70)– aprovechado por algunos de los que la rodean para orientar sus
actuaciones en función de determinados intereses, como se revela en la “secreta
merendona de compota y chocolate” que mantiene con el Padre Claret y Sor Patrocinio
entre las páginas 153 y 156 de Viva mi dueño. Es propensa a los berrinches, como el que
sufre tras un desplante de Sor Patrocinio haciéndose eco de las opiniones que ponen en
entredicho la autenticidad de los estigmas de la monja: “¡Patrocinio es una santa
Ogigia. Revista electrónica de estudios hispánicos
12
insoportable! Suponiendo que sea santa, porque hay quien se ríe de sus llagas [...] ¡El feo
de esta tarde no se lo paso! ¡Por muy santa que sea, yo soy la Reina de España! Es muy
mandona y quiere que siempre le haga caso, y siempre no puede ser. Con todas sus
luces místicas también se equivoca” (Corte 345).
Isabel II es un blanco fácil de ataques plasmados en coplas y chascarrillos varios,
pues “La Católica Majestad ofrecíase al coloquio de las lenguas, como una castiza que no
le negaba ningún gusto a sus mantecas” (Viva 332). Y así, los emigrados “contaban y no
acababan, licencias y desafueros de las Personas Reales” (51). Es considerada como
“otra Mesalina”, una “¡Mesalina en el trono de San Fernando!” (239); así se establece la
comparación con otro personaje histórico: la última esposa del emperador romano
Claudio, de lujuria proverbial. Es significativo al respecto su comportamiento en el baile
–“En los pasos y figuras tuvo sonrisas muy zalameras para un pollastrón sobre la
treintena, que lucía la llave de gentilhombre” (Corte 83)– y el diálogo que poco después
mantiene con el joven, quien se convertirá en su preferido. Esta comparación histórica con
Mesalina ya apareció en la prensa de la época, en concreto en el periódico barcelonés El
Cohete del 3 de octubre de 1868. Se adivina en ella una voluntad de gobernar
competentemente confrontada con una dramática incapacidad de llevar a buen puerto
esos propósitos: “Yo quiero hacer la felicidad de todos los españoles” (344). Su hermana,
la Infanta Isabel Francisca, dice en la página 321 de Viva mi dueño acerca de ella: “La
creo mal aconsejada, pero su corazón es bueno”. No obstante, Isabel II también muestra
algunas inclinaciones autoritarias al instar a “¡Pegar fuerte, a ver si se enmiendan!” (Corte
52). Para los padres de “la Niña” (la revolución en ciernes), “La Reina se ha hecho
incompatible con la dignidad nacional” (Baza 60).
En la trilogía aparecen personajes-reflejo de Isabel II como la Tía Melona, Paquita la
de los Bufos y Doña Baldomera. La primera aparece en La corte de los milagros, la
segunda en Viva mi dueño. La tercera es un personaje histórico (hija de Mariano José de
Larra) incluido en Baza de espadas, cuyas similitudes con la monarca son evidentes, pues
se la describe como “pechona y rozagante”, con “un mecimiento de oca”, “todo un temblor
de pechos y nalgas” (Baza 160) que gorjea (139) y hace “bucheos de paloma” (148).
El Rey Consorte
El rey Francisco aparece eclipsado por la reina; las menciones que se le dedican lo
presentan como una mera comparsa insignificante de la misma: “hacía chifles de faldero
al flanco opulento de la reina” (Corte 71); “acogido al flanco matronil de la Reina” (73). Se
Juan Ramón Vélez García
13
incide en su pequeñez y fragilidad: “El Rey, menudo y rosado, tenía un lindo empaque de
bailarín de porcelana” (71). Las mayúsculas empleadas en su tratamiento contrastan
irónicamente con la insignificancia y pusilanimidad que muestra. La animalización que
sufre su figura lo asimila a un perro faldero: “El Augusto Consorte se arrimó, con respingo
de perro faldero, al recadén propincuo de la reina” (72). Se articula así una marcada
contraposición entre el tamaño y el aspecto lozano de Isabel II y el porte quebradizo del
rey consorte, al que en las habladurías populares se acusaba de impotente y homosexual.
En sus apariciones públicas “Las Reales Personas no disimulan el desacuerdo del
tálamo” (Viva 306). Se le conocía popularmente como “Paquita”, lo cual queda reflejado
en una copla reproducida en La corte de los milagros –“Paquito Natillas / es de pasta
flora... / y orina en cuclillas / como una señora” (346)– y en varias ocasiones en las que es
llamado así por algunos personajes y también por el narrador (vid. Viva 85, 86 y 87). En
los funerales de Narváez presenta un aspecto “exiguo y tripudo como una peonza” (Corte
356). Sus intentos de reafirmar su autoridad aparecen como actos risibles de petulancia:
“como a impulsos de un resorte, sacó del buche los enojados tiples de su voz” (72); “le
habló con merengue, sacando la cadera” (Viva 152); “El Rey Don Francisco, a su modo,
arrogantizó la figura, sacando un cuarto de anqueta” (171). Su largo parlamento final en la
primera novela del ciclo, en el cual lamenta el ninguneo al que es sometido (Corte 354),
está inspirado en un texto de Antonio Bermejo en su Estafeta de Palacio también usado
por Pedro de Répide en su novela Isabel II, reina de España. El mencionado discurso
(uno de los más prolongados adjudicados a un personaje de El ruedo ibérico) está
precedido de un marco de la cita degradatorio –“adamando la figura bombona”– seguido
de una referencia final también degradatoria a su manera de hablar y moverse en la que
se contiene una de las diversas alusiones a la baraja: “En la Cámara Real [...] su voz
recibía una mengua jocosa, de fantoche que sale al tablado vestido con manto y corona
de rey de baraja” (355). El contraste con la solemnidad del marco y la seriedad de sus
palabras acentúa lo risible de su actuación. La notoria importancia del marco de la cita en
la caracterización de los personajes se desarrolla especialmente en su caso: habla con
chifles y “tiples de marioneta” (Viva 152), con voz de “chirimía” (229) o un “majestuoso
quiquiriquí” (245); la aliteración de “i” reproduciría fónicamente las características de su
idiolecto.
Ogigia. Revista electrónica de estudios hispánicos
14
El Príncipe Alfonso
El Príncipe de Asturias aparece como “un niño pálido, con las orejas muy separadas:
El enclenque desparpajo de la figura, la tristeza de la mirada, llena de prematuras
curiosidades, promovían, con aquel disfraz de charrasco y el pantalón colorado, un
recóndito dejo de cruel mojiganga. La expresión aguzada, enfermiza y precoz del Augusto
Niño no prometía una vida lozana” (Corte 77). Su frágil estado de salud parece anticipar
su posterior muerte por tuberculosis a la edad de 28 años. Es “un candil sin aceite” (Viva
235). Hacia el comienzo de Viva mi dueño se alude a él como “Puigmoltejo” (51), en
referencia a que su padre sería Puig-Moltó y no el rey Francisco. Se destaca su inocencia
–“Cuando yo sea Rey, de lo primero que firme será la creación de un cuerpo de zuavos”,
a lo que responde su madre “¡Pobre tontín, si piensas hacer la felicidad de los españoles
con la creación de un cuerpo de zuavos!” (157)– y su condición de muchacho manejado
por el aparato del poder, a través de la educación que recibe por parte de su “tímido y
fanático” (302) maestro Cayetano del Toro y del padre Claret. Destaca al respecto el
episodio en el que exhibe una retahíla memorística sobre los libros del confesor en la
página 303, que casi le provoca la asfixia.
González Bravo
El ministro aparece como “un viejo craso y cetrino con ojos duros de fanático
africano” (Corte 82) y como un “búho semítico” (ibidem); la vejez es usada como recurso
caracterizador reiteradamente en su caso y en el del Marqués de Torre-Mellada. La
animalización por medio de aves es la más frecuente en el libro, y es intensa en lo que
respecta a González Bravo. En la página 131 de La corte de los milagros aparece
meditando en su poltrona: “Tenía la mirada semita y de azulinos blancos, que parecía
afilarse sobre la línea corva de la nariz, la frente calva con tufos de ceniza, y aquel ceño
brusco y acusado que, en otro tiempo, los imagineros ponían a los judíos, en los pasos de
Semana Santa”. Durante una entrevista con la reina:
Giraba Don Luis González Bravo, en redonda visual, las pupilas de cuervo, estriadas
de bilis. El Primer Ministro sentía un acre y profundo desprecio. Sin matices, incluía en
un mismo juicio pesimista y asqueado, a toda la Real Familia: En Palacio le temían y le
adulaban: Don Luis González Bravo vivía advertido, y caminaba al logro de sus fines,
con la suspicacia de no ser persona grata en los reales estrados. (Corte 351)
Juan Ramón Vélez García
15
Las descripciones suelen ser fragmentarias, y en ellas se pone énfasis en
determinados rasgos, como la mirada. En la 352 “amargó su cara cetrina” y en la 353
“Clavó su aguijón” en un marco de la cita. Su condición de “zorro viejo en el corral
político” (Viva 36) le otorga la experiencia y la astucia necesarias. También aparece así
presentado como un depredador, lo que viene reforzado por sus previas asimilaciones a
rapaces, y la referencia a “corral” como el ámbito en el que se desenvuelven los manejos
políticos reincide en las constantes alusiones a aves como términos de comparación. Su
actitud en un consejo de ministros es representativa del carácter farsesco y bufo –a la par
que trágico– de lo que se narra en las obras: “El Señor González Bravo se lucía haciendo
pajaritas de papel y las colocaba en las carteras de sus compañeros” (53).
Sor Patrocinio
Es frecuentemente designada con apelativos como “Madre de las Llagas” o “monja
de las llagas”; la alusión a “El misterio de sus velos” (Viva 245-246) remitiría a la aureola
de secretismo que emanaba su persona, cuyas admoniciones parecen ser tomadas como
emanaciones de la voluntad divina. Asimismo, se recogen presumibles milagros de su
autoría (su supuesto desdoblamiento en La corte de los milagros y la restitución de la tinta
en el tintero en Viva mi dueño, seguida de un aparatoso trance). Es informadora de la
reina y ejerce como emisaria divina: “–¡Vuestra Majestad, se halla perfectamente
enterada! / –Pues así, de todo cuanto ocurre por vuestras casas: Baja a contármelo un
pajarito del cielo” (Corte 165). El enorme poder que atesora ya es anunciado en una
conversación entre Torre-Mellada y Adolfito Bonifaz, que se hace eco de uno de los
rumores difundidos acerca de la relación entre la reina y Sor Patrocinio, el que afirmaba
que la monarca hacía que sus camisas las santificara la monja usándolas previamente:
–¿Y es verdad lo que cuentan de las camisas? ¿Se las pone primero Sor Patrocinio?
–No sé... Puede ser... ¡Nada tendría de particular esa devoción de la Señora! Adolfito,
en Palacio quien hace el sol y la lluvia es la monja. Pero no te dejes prender
demasiado en sus artes. Hoy todo lo gobierna. ¿Quién sabe mañana? González Bravo
es hombre para desterrarla, como hizo Bravo Murillo. (227, las cursivas son mías)
En las palabras dirigidas por el marqués al preferido de la reina también se alude al
destierro al que fue sometida en 1835 bajo la acusación de falsificar sus llagas. La carta
de la reina dirigida al Papa sería “el fruto de una gran intriga apostólica, con hilos en
Ogigia. Revista electrónica de estudios hispánicos
16
Roma, Londres y Trieste: Todo lo movía desde su celda la monja por cuya boca hablaba
el Espíritu Santo” (Viva 333). Patrocinio actúa como una hábil marionetista que sabe
manejar los resortes del poder. Destaca el recorrido folletinesco que efectúa
transportando la misiva, “sin ruido, toda velada, [...] con levitación de marioneta” (252).
Su aureola ultraterrena es alimentada con la calculada teatralidad de sus palabras y
de sus actos, como se pone de manifiesto en una de las visitas de la reina:
En el locutorio, asistida por dos novicias que alumbraban con velas verdes, apareció la
Madre Patrocinio: Eran transparentes de blancura el rostro y las manos: Caminaba
rígida y extraña: Parecía en tránsito. Se abrió rechinante la enrejada puerta, y afligida,
con el pañolito sobre los ojos, entró Doña Isabel. La Seráfica Madre quedó en pie, los
brazos abiertos en cruz, mostrando la palma sangrienta de las manos, sobre las dos
novicias arrodilladas, alumbrantes con sus velillas verdes: La figura de la monja tenía
un acento de pavor milagrero y dramático. (Corte 342)
O en su presentación ante Monseñor Franchi, de similares características:
La Madre Patrocinio descendió al locutorio, entre dos novicias, con aparato de velillas
verdes. Inmóviles y veladas quedaron las alumbrantes a los quicios de la puerta, y la
monja se adelantó, previa una profunda reverencia, al rojo Legado Pontificio. En los
medios de la estancia volvió a inclinarse y se alzó, descubriendo el rostro de lunaria
blancura: Quedó con los ojos extáticos y los brazos en cruz, mística y sobrenatural,
envuelta en un aire de lirios e inciensos. (Viva 328)
El Padre Claret
Claret, sin embargo, tiene “manos labriegas” y “ristre enlutado” en las uñas (Viva
301). Adquiere gran importancia la mención a las marcas diatópicas de su discurso, a sus
“crasas vocales payesas” (151), su “prosodia payesa” (245). Su procedencia catalana lo
convirtió en blanco de aceradas burlas en la prensa de la época. Se establece, asimismo,
un marcado contraste fónico entre su habla y la de Sor Patrocinio. Frente a los “suaves
pianos de la monja” (155) y sus “musicales mieles” (250), él “usaba el tonillo de los
predicadores ramplones” (295) o “marcó un signo de cazurra aprobación” (303); los
adjetivos “ramplones” y “cazurra”, extenderían su carga semántica al propio personaje.
Destaca en la página 304 de Viva mi dueño su discurso acerca de la educación que se
debe dispensar a los niños, mostrando un temperamento ultramontano y retrógrado. Su
Juan Ramón Vélez García
17
simpleza y estulticia se acentúan confrontadas con Monseñor Franchi, el vanidoso nuncio
del Vaticano, “cargado de evangélicos bálsamos” (Viva 295), en franco contraste con el
Padre Claret y su “boca vasta y oscura, rasgada de pastosas vocales catalanas, partida
por el chirlo que diseñaba acentos de clérigo trabucaire, en aquella jeta payesa y
frailuna” (295-296). El contraste entre ambos también se refleja en la orientación de las
recomendaciones que proporcionan a la reina (297). Los dos eclesiásticos resultan
“recelosos el uno del otro, encubiertas las suspicacias con amistosas expresiones” (300).
Narváez
Narváez se presenta abriendo “el compás de las zancas, con aire de jácaro
viejo” (Corte 73); más adelante, “abriendo el flamenco compás de las zancas, desaparecía
como un fantasma, entre el fatuo susurro de las Camarillas”, mostrando cómo los
personajes aparecen en ocasiones como ésta desprovistos de consistencia, como
fantasmas o sombras propensas a evaporarse en cualquier momento. El Mote “Espadón”
ya preexistente aplicado a Narváez se muestra adecuado a los recursos literarios
empleados por Valle. En las postrimerías de su convalecencia, “El Espadón de Loja, con
garrafas en los pies, cáusticos en los costados, y en las orejas cuatro pendientes de
sanguijuelas, íbase de este mundo amargo, a todo el compás de sus zancas
gitanas” (309), arrepentido de su gobierno, como manifiesta utilizando una referencia
quijotesca que denigra el valor de la nación: “¡Así no hubiese gobernado nunca esta
Ínsula Barataria!” (310).
Prim
La primera descripción de Prim en La corte de los milagros alimenta las referencias
naipescas de la trilogía, también contenidas en los títulos de la tercera novela inconclusa
(Baza de espadas) y el libro sexto de Viva mi dueño (“Barato de espadas”): “El General
Prim caracoleaba su caballo de naipes en todos los baratillos de estampas
litográficas” (Corte 51). Resulta asimilado a otro personaje histórico (“Teatral Santiago
Matamoros”) en una imagen donde el adjetivo “teatral” es clave para entender la
configuración de las novelas. La identificación con Santiago fue alimentada por el propio
Prim y la prensa de la época también se hizo eco de ella. Cuando cierra uno de sus
primeros parlamentos en Viva mi dueño repitiendo tres veces “¡No soñemos!”, se está
reproduciendo la peculiar retórica usada por el personaje real. Su carácter ambicioso se
anuncia pronto: “les ponía en cuidado la ambiciosa condición del Conde de Reus. ¡Aquel
Ogigia. Revista electrónica de estudios hispánicos
18
soldado de aventura que caracoleaba un caballo de naipes en todos los baratillos de
estampas litográficas” (Corte 62). En algunas descripciones se configura con la fijeza de
un retrato, enmarcado y con estudiada pose, como si quisiera dejar constancia de una
determinada imagen que busca proyectar a la posteridad. Su egocentrismo es criticado en
una conversación entre Vallín y López de Ayala –“Solemnes extremos del vate
unionista” (Baza 44)–, en la que también se constata su habilidad para desenvolverse en
la partida: “–Prim, más que reaccionario, es un pillastre. Y con el confinamiento de
nuestros amigos, ahora refluye en ese condottiero toda iniciativa revolucionaria. Cuando
menos se piense desembarcará en una playa española y hará la revolución en provecho
suyo, sin respeto a los pactos comprometidos con la Unión Liberal. Prim ha sido toda la
vida un jugador de ventaja” (45).
Don Carlos
El pretendiente Don Carlos, junto con Bakunin y la ficticia Feliche Bonifaz, es uno de
los pocos personajes que recibe un tratamiento enaltecedor. Así lo atestigua el ambiente
de su corte en el exilio: “Cerca de Gratz, en una quinta con musgos románticos, jardines
de recortados bojes y fuentes mitológicas, se aposentaba la Corte de Don Carlos.–
Aquella tarde de nevasca, encendida la chimenea, con el telón romántico del jardín, tras
el llanto de los cristales, el emisario de los revolucionarios españoles conferenciaba con el
Augusto Pretendiente” (Viva 350). Es una figura magnificada por la simpatía
valleinclanesca hacia el carlismo que alimentó la génesis de algunas de sus obras: “El
Pretendiente dignificóse con un gesto de galán que ensaya grandes papeles: Como ante
un espejo, proyectaba la bella figura ante la Historia” (Baza 221); pero como podemos
comprobar, tampoco está exenta de cierta afectación y teatralidad. Por otro lado, el líder
carlista Cabrera, “Tigre del Maestrazgo”, no escapa a la animalización ya sugerida por su
mote, cuyas connotaciones de fiereza resultan atemperadas cuando muestra “furruña de
gato viejo” (Viva 353).
Bakunin
Del “gran revolucionario Miguel Bakunin” se ofrece una imagen dignificadora, lo cual
constituye otra de las escasas excepciones a la tónica seguida por el autor en lo que a la
configuración de los personajes se refiere. Así, es considerado “El apóstol del pueblo” por
Fermín Salvochea (Baza 60). Se teje en torno a él una aureola mesiánica, casi
cristológica, a partir de la cual es llamado por el narrador “el apóstol eslavo” (107),
Juan Ramón Vélez García
19
“Apóstol de la Revolución Social” (145) y “Apóstol de la Revolución Universal” (185); en la
página 151 parece presidir un trasunto de la última cena. También es llamado “santo
laico” (156).
Cánovas del Castillo
Ofrece una “expresión perruna y dogmática” y “una fealdad menestral, con canas y
patas de gallo” (Baza 21). Destacan los marcos de la cita que describen el estilo usado en
sus elocuciones; así, “Rectificó con pedante gramática” (22); “peroraba con áspero ceceo
y engalle de la jeta menestral. Tenía su discurso un encadenamiento lógico y una
gramática sabihonda, de mucho embrollo sintáxico” (24). La utilización de “jeta” para
designar el rostro del personaje es otro recurso animalizador, compartido con el Padre
Claret. Asimismo, el verbo de dicción alude a un discurso engolado y artificioso. Los
rasgos estilísticos mencionados por el narrador obedecen a los que adornaban las
intervenciones del Cánovas real, y se reproducen en la intervención del personaje, al igual
que las intervenciones de Prim ficcional se ajustaban al estilo de los discursos del Prim
real. Junto al Marqués de Salamanca, Cánovas integra una pareja de “pulcros vejestorios”
que, en el umbral de la puerta, tras una conversación, “hacían una figura de lanceros
cediéndose el paso” (Ibídem).
Conclusiones
La configuración de los personajes históricos en El ruedo ibérico sigue
procedimientos propiamente esperpénticos, no muy alejados de los que fuera del ámbito
hispánico emplearía, por ejemplo, Mervyn Peake en su Trilogía de Gormenghast:
animalización, cosificación, distorsión generalmente amplificatoria de determinados
rasgos... La pretensión de impasibilidad que mencionaba Valle como una meta a
conseguir en su arte no resulta fácil de plasmar por completo, pues en la presentación del
aspecto de los personajes, sus palabras y sus actos por medio de esas intervenciones del
narrador cercanas a acotaciones teatrales ya se vierten simpatías y antipatías hacia los
actantes de una farsa trágica y cómica a un tiempo en la que la muñequización afecta
incluso a la concepción vital, tal como se refleja en las reflexiones de la marquesa de
Torre-Mellada acerca de la sordidez de una vida que “no valía más, que el resorte de
alambre que un muñeco esconde en el buche de serrín” (Corte 117).
20
Ogigia. Revista electrónica de estudios hispánicos
Diop Papa Mamour
21
LOS REALISMOS EN BEATUS ILLE DE ANTONIO MUÑOZ MOLINA
Papa Mamour Diop
Resumen
En este trabajo, abordamos el actual debate sobre la realidad y su expresión literaria
y artística: el realismo. En Beatus Ille, primera novela de Antonio Muñoz Molina, el
universo novelesco permite percibir tres tipos de realismos: el realismo épico elegiaco, el
realismo histórico o contrafactual y el realismo mágico.
Palabras clave: realismo (s) - Beatus Ille - Guerra Civil española.
Abstract
This work deals with the current debate about reality and its literary and artistic
expression: realism. In Beatus Ille, Antonio Muñoz Molina’s first novel, the fictional
universe reveals three kinds of realism: the epic and elegiac realism, the historic realism
and the magic realism.
Key words: realism (s) - Beatus Ille - Spanish civil war.
Ogigia. Revista electrónica de estudios hispánicos
22
Introducción
Hablar del realismo hoy significa ir más allá del análisis o de la teoría literaria,
hacerse grandes interrogantes. Lo que llama la atención de nuevo, no son los aspectos
internos sino las razones de ser de los textos encuadrables bajo el marbete de “realistas”,
las condiciones de su posibilidad. Quiero ello decir que hablar del realismo supone asumir
un concepto escurridizo y de alta inestabilidad ontológica y semántica1; sobre todo en el
mundo actual poroso a múltiples trastornos y cambios que acaban de convertir la realidad
en algo múltiple, movedizo y desconcertante que apela consecuentemente, nuevas
condiciones novelísticas que puedan envolver y expresar su carácter fluyente, contingente
y transitoria.
Es por ello por lo que surgen ya desde 19622, en la novelística española, obras
encaminadas a reflejar este realismo plural y virtual, apartadas del socialrealismo que
marcó la década de los 50. Claro exponente de estas nuevas tendencias novelísticas es
Beatus Ille de Antonio Muñoz Molina donde el realismo es como un tapiz que se dispara
en muchas direcciones, pues en esta novela casi tienen cabida todos los “realismos”,
siendo más visibles el realismo épico-elegiaco, el realismo histórico o realismo
contrafactual y el realismo mágico.
¿Crisis del Realismo? Los realismos
Desde hace algún tiempo y cada vez con más frecuencia, los estudiosos de la
literatura se detienen a reflexionar sobre la realidad y su expresión literaria y artística: el
realismo. Al respecto conviven posturas opuestas: la de aquellos que se entusiasman
1
BUNGE, Mario, A la caza de la realidad. Controversia sobre el realismo, Barcelona, Gedisa, 2005. Según
este autor, el realismo es la tesis de que hay cosas reales. Sin embargo, como todo sistema filosófico
comprensivo, el realismo posee siete componentes: ontológico, gnoseológico, semántico, metodológico,
axiológico (concerniente a la teoría de los valores), moral y praxeológico (concerniente a la teoría de la
acción). Además, cada uno de sus constituyentes se presenta en diferentes matices: ingenuo, crítico y
científico. De ahí que se puedan distinguir en total 21 tipos posibles de realismo.
2
La mayor parte de los estudiosos sitúan el ocaso del realismo social en 1962 con una novela que es
nombrada como la abanderada de la transformación estética e ideológica en la novela española: Tiempo de
silencio de Luis Martín Santos.
Diop Papa Mamour
23
ante la posibilidad de reproducir una realidad única y los más escépticos que consideran
que la realidad es plural. Queremos dejar claro que nuestra intención no es tomar partido
por uno y otro bando en esta polémica, tampoco hacer profecías sobre el futuro del
realismo; tan sólo queremos describir y analizar un fenómeno que es una realidad: la
existencia en la novelística española de la transición de nuevas estrategias narrativas
para dar cuenta de la “realidad” actual.
Siempre nos vemos obligados a acercarnos al realismo porque para nosotros la
realidad, esta palabra banal pero terrible, constituye un enigma, un problema y pensarla y
definirla nos sitúa en el umbral de la Filosofía: los preámbulos de la discusión se hallan en
los trabajos de Russel, Wittgenstein, los lógicos y los semánticos o de Nietzsche,
Heidegger o aún Derrida.
En la crítica literaria, el siglo XX se ha reanudado un viejo combate entre res y
nomen: por una parte se sostiene la idea de que existe una realidad estable, inocente,
original, directamente accesible a la percepción, y que, por su prioridad ontológica,
permitiría juzgar la validez de todo enunciado o toda representación; por otra parte, se
defiende la idea según la cual la realidad es siempre algo convencional y por tanto de
naturaleza doble, porque es una representación desprovista de todo privilegio ontológico.
En la literatura, las consecuencias de este debate no tardaron en manifestarse. Al
mismo tiempo que los cambios surgidos en el mundo, se empiezan a reconocer dudas y a
admitir la improbabilidad de una dimensión no corrupta, inmediata de la experiencia a la
vez que se considera como suspecto todo el debate relativo al grado de correspondencia
y exactitud entre representación y representado. De igual manera, se desconfía de los
argumentos tendentes a valorar la importancia de las obras artísticas bajo la criba de su
propiedad y la exactitud de sus imitaciones.
En consecuencia, expresiones como “mímesis” y como “verosímil” sólo aparecen en
el discurso crítico entrecomilladas o en contextos que dejan entrever con claridad las
dudas que conllevan.
Con tales premisas, deberíamos preguntarnos si aún es conveniente hablar de
realismo, si el concepto todavía tiene algo de útil. Pues bien, en el campo literario, la
atención del análisis recae sobre la discursividad, sobre la retórica es decir los procesos
lingüísticos, semióticos u otros mediante los cuales la realidad está dicha. Al respecto
aporta Francisco Lorrigio3 que mimesis y especularidad pierden terreno en beneficio de
3
LORRIGIO, Francisco, “Le réalisme comme anthropologie du réel”, en Roman, réalités et réalismes, Paris,
Presses Universitaires de France, 1989, pp 41-53.
Ogigia. Revista electrónica de estudios hispánicos
24
las atestaciones de la textualidad y de lo que se designa por costumbre, según Bajtin
como “effet de réel.”
Dicho “effet de réel” siendo de naturaleza fluctuante y cambiante, se comprende que
el concepto de realismo reciba varias etiquetas: es la era de los realismos y ya no del
Realismo, pues el planteamiento arriba expuesto trasciende el concepto de realismo como
tendencia estética que pretende la introducción exacta de la realidad como objetivo de la
obra artística para considerarlo como “género de discurso” (Bajtin) o clase de discursos
(los lingüistas del discurso) es decir una modalidad discursiva que condiciona el lenguaje
en función de las circunstancias en que se produce. Eso no quiere decir que el realismo
sea sólo cuestión de discurso; sigue interesándose en lo que implica la doble hipótesis de
la realidad y de la ficción, para no oponerlas sino para examinar cómo realidad y ficción se
interrelacionan e interactúan y cómo conducen una a la otra porque “le réel s’achève dans
la fiction comme la fiction s’achève dans le réel”4.
Este juego entre realidad y ficción, entre Realismo y realismos, historia verdadera e
historia inventada ya presente en la novela española de la transición cobra relieves
insospechados y hasta desconcertantes en Beatus Ille de Antonio Muñoz Molina.
Los realismos en Beatus Ille
La marcha argumental de Beatus Ille sigue el itinerario de un joven estudiante
Minaya que llega a Mágina a finales de los sesenta, huyendo de Madrid y de los
movimientos huelguistas universitarios, con la excusa de escribir una tesis doctoral sobre
el poeta republicano casi inédito: Jacinto Solana, amigo de su tío Manuel. Minaya en la
búsqueda de su principal obra Beatus Ille, descubre un crimen cometido hace treinta y
dos años: el de Mariana, esposa de Manuel y amante de Solana, urdido por Doña Elvira,
madre de Manuel, y ejecutado por Utrera, un escultor venido a menos y huésped
incondicional de la casa. Asimismo descubrirá la trampa en que se ve envuelto y
desenmascarará al verdadero narrador de la historia que va tejiendo las redes: un Solana
que se murió en 1947 en un tiroteo con la Guardia Civil.
Sin embargo, subraya José Carlos Mainer que la Guerra Civil y “la derrota de los
mejores” eran los temas explícitos del libro y que “su propósito era recuperar un pasado
4
BESSIERE, Jean, Roman, réalités et réalismes, Paris, Presses Universitaires de France, 1989, p 7.
Diop Papa Mamour
25
que el franquismo había negado a las generaciones posteriores a la contienda y el núcleo
de la trama patentiza ese objetivo de manera casi autobiográfica” 5
El sentido y la implicación generacional de ese rescate aparece con las múltiples
referencias histórico-políticas ocurridos en España durante y después de la Guerra Civil,
los más relevantes siendo en opinión de Gracia Fanlo y Herrero Fernández6 las alusiones
a la Segunda República7 , las referencias al Frente Popular8 , las alusiones a las Brigadas
Internacionales9 y las referencias a los frentes de Guadalajara, de Córdoba y del Ebro10.
Por tanto, en torno a la Guerra Civil, se construye un realismo épico elegiaco, por
tratarse de una novela que plasma la tragedia de la guerra. Lo bélico y lo melancólico se
refieren a episodios siniestros tales como el bombardeo de Guernica y de la Plaza de
toros de Badajoz respectivamente aludidos en:
“Sonó entonces la voz de Orlando como una severa invocación… Pensad en Guernica,
o en la plaza de toros de Badajoz. El pueblo no espera la revolución sino el
Apocalipsis” 11.
“Ya no hace falta fingir ni renunciar” dijo señalándome, por que lo que viene ahora es el
Apocalipsis. Acordados de lo que cuentan los periódicos sobre Guernica. Bombas de
fósforo, tierra quemada, incendio de azufre, como en las ciudades de la llanura”12.
Otro tanto puede decirse de las referencias a muertes trágicas como el linchamiento
de Víctor Vega, el fusilamiento de Justo Solana.
Por otra parte, la historia que desarrolla Beatus Ille se halla distribuida
cronológicamente en tres momentos: la primavera de 37, los primeros meses de 1947 y
5
MAINER, José Carlos, “Antonio Muñoz Molina o la posesión de la memoria”, en ANDRÉS SUAREZ, Irene,
ed., Ética y estética de Antonio Muñoz Molina, Neuchâtel, Universidad de Neuchâtel, 2000, pp. 55-68.
6
GRACIA FANLO, María Pilar y HERRERO FERNÁNDEZ, María Teresa, Estudio crítico de Beatus Ille,
Zaragoza, Mira Editores, 2006.
7
Ibídem, p. 185
8
Ibídem, pp. 17, 37, 157.
9
Ibídem, p. 25
10
Ibídem, p. 116
11
MUÑOZ MOLINA, Antonio, Beatus Ille, Barcelona, Seix Barral, 2004, p. 201.
12
Ibídem, p. 219.
Ogigia. Revista electrónica de estudios hispánicos
26
1969. Por tanto, por un lado, la novela se sitúa en los años de la Guerra Civil y de
posguerra y por otra parte, en un tiempo posterior, cuando Minaya recibe de Manuel una
carta de pésame a la muerte de sus padres.
Es en esa década de guerra y posguerra, bisagra de la nueva España donde se
plasman las costumbres sociales de la época que son iguales de trágicas que los hechos
relacionados con el período bélico civil derivado de la guerra.
Por ejemplo, el abismo entre las clases sociales (los ricos y los pobres) simbolizado
en la novela por la diferencia socioeconómica entre Manuel y Solana está muy marcado.
También se refleja el hambre en la época de la posguerra: “una rebanada de pan
desusadamente blanco que el deshacía despacio sobre la taza y rehundía en el café con
una cucharilla. “Cómaselo usted todo don Manuel, que es pan de verdad” le dijo Amalia “a
doce pesetas me lo han vendido en el estraperlo”13.
Pero son mucho más crueles las escenas en que se narran:
a) El terror de los habitantes representado en sueños, sudando de miedo por que
“estaba otra vez en la guerra y me mataban”14.
b) El miedo a hablar de cosas de la guerra que se nota en la reticencia de la esposa
de Manuel Biralbo al conversar con Minaya:
Calla, Manuel -repite la mujer en voz baja-, mirando de soslayo al extraño que hace
preguntas sobre cosas olvidadas, mientras que su marido, como si no fuera consciente
del riesgo que ella teme y advierte, sigue hablando y no sólo invita a Minaya a sentarse
sino que le ofrece su petaca y su papel de fumar y se enreda en insensatas
explicaciones que nadie le ha pedido15 .
c) La lucha por la comida en los campos de presos de guerra:
Las grandes hojas, entre un verde azulado y gris, se derramaban entre las manos
tendidas de los presos, que peleaban para conseguirlas y las desgarraban y las
mordían luego ávidamente sus nervaduras chupando su jugo pegajoso y amargo16.
13
MUÑOZ MOLINA, Antonio, Beatus Ille, op. cit., p. 140.
14
Ibídem, p. 230.
15
Ibídem, p. 69.
16
Ibídem, p. 167.
Diop Papa Mamour
27
d) Los tiroteos en medio de la ciudad, que sirvieron de tapadera casual en el
asesinato de Mariana17, o el fusilamiento del padre de Solana y otros.
Otro realismo que subyace a Beatus Ille es el realismo histórico o realismo
contrafactual. Aquí mi cometido es estudiar primero la relación historia y ficción y analizar
las estrategias y procedimientos narrativos que utiliza Muñoz Molina para mezclarlos con
exquisita habilidad artística.
En la novela española del período de la transición, se superan los límites entre
Historia y Ficción, pues ambas son dos procesos de recreación e interpretación. Primero
se cuestiona la historia como verdad absoluta hasta ahora planteada por la historiografía
positivista. La posmodernidad afecta a la historiografía de dos modos: niega la posibilidad
de construir grandes relatos es decir niega el empirismo histórico como base de sus
paradigmas; rehúsa también la posibilidad de reconstruir el pasado ya que los
documentos no son pruebas reales de lo sucedido sino discurso y representación.
Por tanto, se comienza a considerar la Historia como un proceso de reconstrucción y
reelaboración del pasado. En esta perspectiva, la Historia aparece no sólo como un saber
sino también un saber hacer.
Dicho planteamiento ya cobra fuerza con el filólogo Theodor Lessing con su obra “la
historia como forma de dar sentido al no sentido.” En el mismo sentido abunda G. M.
Koch18 que hace hincapié en la formación de la historia a base de acontecimientos como
un proceso poético:
La imaginación, el deseo, la añoranza, la pasión, la esperanza, todos estos
elementos participan más en el proceso que cualquier sentido científico o la voluntad de
decir la verdad. La historia nunca ha sido un registrar “sine ira et estudio.” Realmente los
supuestos hechos de la historiografía son elementos del hacer.19
17 Ibídem,
p. 91.
18
KOCH, Gertrud M., Zum verhältnis von Dichtung und Geschichtsschreibung, Frankfurt, Lang Verlag, 1983.
Citado por GNUZMANN, Rita, "De la literatura como historia y de la literatura histórica", en Actas del
Congreso Internacional sobre la novela histórica (homenaje a Navarro Villoslada), Príncipe de Vaina, 8,
1996, pp. 135-165.
19
En GNUTZMANN, Rita, “De la literatura como historia y de la literatura histórica.”, en Actas del Congreso
Internacional sobre la novela histórica (homenaje a Navarro Villoslada), Pamplona, Príncipe de Vaina, 8,
1996, p 157.
Ogigia. Revista electrónica de estudios hispánicos
28
Roland Barthes analiza el texto histórico como discurso en tres niveles: la
enunciación, el enunciado y el significado 20. Barthes argumenta que el historiador usa
determinados recursos al modo del narrador: aceleración, deceleración, saltos en el
tiempo, apertura poética de la narración, inicio de la narración en un planteamiento
arbitrario. No se trata de hechos sino más bien de significantes que él como historiador
organiza para darles sentido.
Según Barthes, los eventos históricos sólo existen en el plano lingüístico y
constituyen una reelaboración bastante subjetiva: “le fait n’a jamais qu’une existence
linguistique (…) le discours historique est essentiellement élaboration idéologique, ou pour
être plus précis, imaginaire”21.
En el mismo rumbo, Hayden White se hace preguntas acerca del estatus científico
de la historiografía:
1) ¿Cuál es la estructura particular de la conciencia histórica?
2) ¿Cuál es el estatus epistemológico de las explicaciones históricas?
3) ¿Cuáles son las formas de la representación histórica?
4) ¿Qué autoridad pueden reclamar los textos históricos que demuestre su
aportación segura del conocimiento de la realidad?
Del análisis de este cuestionamiento múltiple, White colige que los textos históricos
son otra especie de ficción verbal cuyos contenidos son tanto inventados como
encontrados y cuyas formas tienen más en común con sus contrapartidas literarias que
con las científicas22.
En consecuencia, “todos los historiadores utilizan formas de entramado y
concatenación determinadas por las categorías culturales de la sociedad a la que
pertenecen”23. En fin, el historiador selecciona su material, lo pone en determinado orden,
subraya la importancia de tal documento y no otro; es decir es el quien le otorga sentido,
lo cual encaja en el subjetivismo propio de la narración ficcional. Este distanciamiento
entre el historiador y el suceso histórico es precisamente el elemento que la crítica tanto
de la literatura posmoderna como la poshistoria ponen de manifiesto: “Posmodern fiction
20
BARTHES, Roland, “Le discours de l’histoire”, en Poétique, 49, Paris, 1982, p 13.
21
BARTHES, Roland, Op cit., p 20.
22
HAYDEN, White, “The historical Text as Literary Artefact.”, en Ciclo, 3, 1974, p 277-303.
23
GNUTZMANN, Rita, Op cit., p 158.
Diop Papa Mamour
29
stresses the tensions…between the actual events of the past and the historian fact of
processing them into facts”24.
En resumen, se desprende de este análisis que novela e historia han caminado
juntos desde la Antigüedad sin que sea factible establecer fronteras nítidas entre las dos
formas de conocimiento y de narración. Así la novela histórica debe entenderse como
“una forma moderna de actualización de esa larga tradición de intercambios entre la
novela y la historia”25.
Beatus Ille tiene un propósito diferente del de la literatura de realismo social: se
recupera el pasado de una forma literaria, histórica, cultural e incluso personal. Se puede
calificar de metaficción historiográfica donde el mito del héroe queda destruido a
diferencia de la literatura socialrealista que exaltaba a los Republicanos26.
Así Beatus Ille puede legítimamente inscribirse dentro de la novela historiográfica,
pues cumple los requisitos necesarios que reconoce Linda Hutcheon: un texto
contradictorio y especialmente paródico en su relación intertextual con la tradición y las
convenciones que el género implica.27 Y nos parece interesante examinar aquí los
procedimientos que hacen posible en Beatus Ille esta mirada irónica hacia la Historia.
Para Muñoz Molina, parte de la transformación de los hechos se produce mediante
la intervención de la imaginación, esta imaginación que altera la memoria, la que hace
que las lagunas mentales que podamos tener cuando recordamos sean rellenadas con
sucesos inventados.
Incluso se llega a falsear la realidad. Por ejemplo, se falsea toda la historia en torno
a la vida de Solana, porque la novela acomete el proceso de reinterpretación y
desvelamiento de la historia más reciente y problemática de España: la Guerra Civil. En
este sentido, precisa Latorre Madrid sobre Beatus Ille que:
Asume el papel de reveladora de la historia, utilizando para ello un discurso
desmitificador con el que no pretende resolver enigmas (las muertes de Mariana,
Solana y Justo) sino cuestionarlos desde una óptica diferente (…) mostrar la historia no
24
FEYER, Ferenc, “Historicidad y novela”, en Letra Internacional, 15-16, 1989, p 33.
25
FERNÁNDEZ PRIETO, Celia, Historia y novela: Poética de la novela histórica, Pamplona, Eunsa, 1998.
26
GRACIA FANLO, María Pilar y HERRERO FERNÁNDEZ, María Teresa, Estudio crítico de Beatus Ille,
Zaragoza, Mira Editores, 2006.
27
HUTCHEON, Linda, Narcissistic narrative: the Metafictional Paradox, Waterloo, Ontario, Wildrid Laurier
University Press, 1980.
Ogigia. Revista electrónica de estudios hispánicos
30
oficial, la que se nos ha transmitido mediante documentos históricos, sino la historia
subterránea, la no contada o aún la todavía no inventada28.
Pero al margen del análisis del argumento, escudriñemos ahora en la novela los
recursos y estrategias narratológicos para ficcionalizar la historia: son en Beatus Ille el
anacronismo y la carnavalización; la desmitificación de la historia a través de la parodia de
algunos géneros históricos y la desmitificación del héroe.
Por anacronismo entendemos tal como lo plantea Amalia Pulgarín “una contestación
teórica al positivismo y uno de los aportes más significativos del posmodernismo histórico.
Representa un afán subversivo y un ansia de recuperar la historia pasada para
actualizarla en nuestro presente”29.
En esta perspectiva, la reescritura del pasado desde el presente se convierte en
invención. Y uno de los procedimientos que utiliza Muñoz Molina en Beatus Ille es desde
el planteamiento de Madrid Latorre “el fundido”, de claras referencias cinematográficas,
que consiste en unir dos tiempos distantes, dos situaciones similares en una sola. Dicho
procedimiento permite dar cuenta de una situación en el año 1969, que es el presente que
le sirve al narrador para recordar un acontecimiento similar ocurrido tres o cuatro décadas
antes, lo cual confunde tanto al narrador como al receptor del tiempo en que transcurren
los hechos.
Un segundo procedimiento podría ser lo que Pulgarín denomina “el tiempo cósmico
del carnaval.” En base a este recurso, los protagonistas llevan dentro misterios
encubiertos y aparecen con máscaras, lo cual favorece la complejidad del laberinto
novelesco y sirve para enmascarar el acontecimiento histórico.
Este juego de ocultación y este dispositivo de teatralidad multiplican las perspectivas
e imposibilitan la existencia una verdad histórica unilateral y oficialmente reconocible.
De igual manera, la desmitificación de la historia se nota en Beatus Ille por un tercer
procedimiento: la parodia de géneros históricos como la crónica objetiva y el diario real
cuyas limitaciones aparecen en las palabras del propio Solana que hace hincapié en el
carácter versátil y movedizo de la escritura:
28
LATORRE MADRID, Miguel A., La narrativa de Antonio Muñoz Molina: Beatus Ille como metanovela,
Málaga, Universidad de Málaga, p 97.
29
PULGARÍN, Amalia, Metaficción historiográfica: la novela histórica en la narrativa hispánica
posmodernista, Madrid, Fundamentos, p 66.
Diop Papa Mamour
31
Yo he inventado el juego 30 (…) o de tantas palabras mentirosamente calculadas y
escritas para atraparlo31 o compruebo que apenas puedo establecer una cronología32 o
imágenes rotas y fogonazos y palabras que permanecen en el aire33.
Por último, se desmitifica al héroe de la historia. Éste aparece más real “presentado
como personaje de carne y hueso” con el procedimiento de la marginalidad de Solana34 .
Se presenta la imagen de un protagonista lleno de contradicciones y de miedos, un
escritor brillante, amigo de los grandes escritores de la época quien al final le dice a
Minaya: “yo no podía ser un héroe, porque el acto de escribir era tan necesario e
imposible como la respiración para un hombre que se ahoga.”
¿Existe un realismo mágico en Beatus Ille?35
Diremos que existen señales que encajan en el realismo mágico, si entendemos por
este término, la presencia de elementos mágicos-fantásticos percibidos por los personajes
como parte de la normalidad. Muñoz Molina hace suya esta escritura muy codiciada por
los autores hispanoamericanos como Gabriel García Márquez, Miguel Ángel Asturias,
Juan Rulfo, Jorge Luis Borges o Alejo Carpentier36 .
En Beatus Ille, se concilia lo sobrenatural y lo fantástico con la verosimilitud interna
del relato. Lo consigue el autor por la trascendencia en la novela del papel que juegan por
una parte la memoria y el recuerdo y por otra parte los sueños.
La memoria desempeña una función importante en Beatus Ille, pues la novela se
sustenta en el recuerdo y la memoria de hechos acaecidos en el pasado. Minaya es el
principal instrumento que reaviva esta memoria colectiva, pero en realidad hay una
pluralidad de memorias porque, según los personajes, tienen distintas funciones entre las
cuales podemos destacar, basándonos en el trabajo de Gracia Fanlo y Herrero
Fernández37:
30
MUÑOZ MOLINA, Antonio, Beatus Ille, op. cit., p.276.
31
Ibídem, p. 269.
32
Ibídem, p. 174.
33
Ibídem.
34
LATORRE MADRID, Miguel A., op cit., p 114.
35
Los signos de interrogación muestran nuestras dudas al respecto. En realidad, en este trabajo
acometemos la tarea de identificar rasgos de realismo mágico en Beatus Ille.
36
Alejo Carpentier ha acuñado el concepto de “real maravilloso” para designar esta realidad en sus novelas.
37
GRACIA FANLO, María Pilar y HERRERO FERNÁNDEZ, María Teresa, op.cit.
Ogigia. Revista electrónica de estudios hispánicos
32
a) La memoria que potencia y mitifica el recuerdo, la de Manuel por ejemplo con la
mitificación del recuerdo de Mariana y de su amigo Jacinto Solana: “Al perderlo a él yo
no estaba perdiendo al único hombre a quien podía llamar mi amigo, sino el derecho a
recordar o saber cómo había sido mi vida antes de renunciar a ella…” 38 .
b) La memoria selectiva y un tanto iconoclasta, la de Mariana que quiere despojarse
de todos los recuerdos de su vida anterior y recibir un “nueva memoria.”
c) La memoria culpable de Solana a cuya memoria Mágina queda adscrita “como un
paraíso vengativo”39 al igual que la pasión con Mariana.
d) La memoria redentora de Utrera que rescata al final la verdadera memoria del
crimen: “porque no hay nadie que pueda seguir sosteniendo el dolor y la culpa o
simplemente la memoria al cabo de treinta y dos años”40.
En breve, la memoria se hace cómplice de los personajes en Beatus Ille y mantiene
ese tiempo cósmico y circular propio del realismo mágico. Muñoz Molina le concede una
especial importancia, por lo que afirma:
Ya dijo William James que a lo que principalmente se dedica la memoria es olvidar. En
un movimiento doble y simultáneo, la trama de la vida se teje y se deshace, y la
referencia al telar insomne de la reina Penélope cobra más exactitud al vincularlo a la
monotonía sin descanso de las funciones vitales. Recordando y olvidando, escribiendo
y borrando, casi siempre en la arena, la memoria actúa sobre nosotros y dentro de
nosotros de un modo tan incesante como late el corazón o se nos ensanchan los
pulmones41.
Otro característico del realismo mágico es la presencia de personajes que suelen
tener viajes no sólo de tipo físico sino que estos cambios de espacios y tiempos se
realizan desde sus pensamientos y estados oníricos. Ello es un rasgo esencial de Beatus
Ille, donde el sueño “adquiere un protagonismo de eje vertebrador y estructurador en la
novela”42.
La importancia en Beatus Ille de los sueños es fundamental porque los recuerdos de
Solana están mezclados con la fantasía, con su imaginación de forma similar a los
38
MUÑOZ MOLINA, Antonio, Beatus Ille, op. cit., p.194.
39
Ibídem, p. 55.
40
MUÑOZ MOLINA, Antonio, Beatus Ille, op. cit., p. 287.
41
MUÑOZ MOLINA, Antonio. Pura alegría, Madrid, Alfaguara. p 176.
42
LATORRE MADRID, Miguel A., op cit., p. 294.
Diop Papa Mamour
33
sueños. Por su carácter onírico, el sueño permite la incorporación de elementos
especulares que el personaje no siempre está en disposición de interpretar. Éste es el
recurso que Muñoz Molina utiliza cuando Minaya cuenta un sueño a Inés:
Le dijo a Inés que en el sueño había una luz rosa y helada y una sensación de
distancia y de inasible ternura que era también la claridad de mayo entrando para
despertarlo por un balcón de su infancia donde anidaban las golondrinas o detenida a
media tarde sobre una plaza con acacias. Inútilmente cerró los ojos y quiso reanudar el
sueño o recobrarlo entero sin gastar su delicia, su tono exacto de color, pero aún
después de perderlo el nombre de Mágina sobrevivió en él como una iluminación de su
memoria, como si le bastara pronunciarlo para derribar murallas de olvido y tener ante
sí una ciudad intacta, ofrecida y distante sobre su colina azul, cada vez más precisa en
su cualidad de invitación… 43.
Interpretando ese sueño de Minaya, señala Latorre Madrid que nos encontramos
con los motivos esenciales de lo que va a ser el desarrollo de la memoria: la vuelta a
Mágina del protagonista, el rescate de la infancia de Minaya mediante la memoria, que en
el fondo es rescatar la memoria colectiva del pueblo y de sus habitantes.
Es más, para profundizar en el análisis del sueño en Beatus Ille, conviene evocar a
Freud y su Teoría de los Sueños. Freud siempre estableció una estrecha relación entre el
mundo del arte y el de los sueños y consideró que el fantasear y la ensoñación como
alternativas a las frustraciones que conoce el hombre. Este planteamiento se comprueba
perfectamente en Beatus Ille: soñar para Solana equivale a inventar, crear y superar la
frustración que la propia realidad le ha deparado: no ha sido capaz de escribir un libro.
Por fin, la oscilación entre la realidad y la fantasía a través de la memoria y del
sueño condiciona el tratamiento del cronotopo 44 en Beatus Ille.
El espacio es imaginario: Mágina es un lugar inventado como lo es Macondo en Cien
años de soledad de Gabriel García Márquez o Comala en Pedro Páramo de Juan Rulfo.
Además Mágina es un universo mítico que guarda secretos, vidas misteriosas,
muertes falsas, premeditadas, incógnitas, relaciones insospechadas… Ofrece una
43
44
MUÑOZ MOLINA, Antonio, Beatus Ille, op. cit., p. 17.
BAJTIN, Mijail, Teoría y estética de la novela, Madrid, Taurus, 1989, p237. Por cronotopo, entendemos –
como bien señala Bajtin- lo que en traducción literal significa “tiempo-espacio” o sea la conexión esencial de
relaciones temporales y espaciales asimiladas artísticamente en la literatura.
Ogigia. Revista electrónica de estudios hispánicos
34
“estampa remota, un pretexto dócil para la contemplación, un recinto vacío y dispuesto a
ser ocupado por la literatura”45
La descripción del espacio va salpicando toda la novela y se puede percibir de ella
su aspecto misterioso:
Mágica fue primero el nombre de una apacible ciudad de mercaderes y umbrosas villas
romanas tendidas en la llanura del Guadalquivir, y alguna vez el pico o el arado de los
arqueólogos destierra en aquella ribera cenagosa una piedra de molino o la estatua
decapitada de una divinidad púnica o íbera, pero la otra Mágina, la amurallada y alta,
no fue edificada para la felicidad o la vida que fecundaban las aguas del río y la diosa
sin advocación ni rostro, sino para defender una frontera militar, primero, de los
ejércitos cristianos y luego de los árabes que subieron desde el sur para reconquistarla
y fueron vencidos junto a la muralla que ellos mismos levantaron… 46.
Pero en Beatus Ille, más que de un lugar físico, se trata de un espacio interior y
sentido, absolutamente penetrado por las vivencias del personaje, un espacio subjetivo
que ya utilizó Marcel Proust, puesto que “el espacio que aparece en sus novelas es un
viaje a través de la conciencia, y sus paisajes son interiores.”47
La interiorización y subjetivación del espacio son dos características del tratamiento
espacial en Beatus Ille. Tanto Minaya como Solana interiorizan su visión del paisaje, tal
como podemos percibir en el siguiente pasaje:
Le pareció -el narrador se refiere a Minaya- imaginaria o lejana, como si la ciudad y el
invierno no mantuvieran un vehículo preciso con el interior de la casa, o sólo en la
medida en que le añadían un paisaje íntimo48 .
Los desplazamientos de los personajes por las calles de Mágina y por la casa de
Manuel pueden ser considerados como una metáfora de un viaje interior a sus recuerdos
y tienen también un poco de “recorrido iniciático.” Incluso señala Latorre Madrid que la
45
MUÑOZ MOLINA, Antonio, Beatus Ille, op. cit., p. 227.
46
MUÑOZ MOLINA, Antonio, Beatus Ille, op. cit., p. 75.
47
LATORRE MADRID, Miguel A., op cit., p. 403.
48
MUÑOZ MOLINA, Antonio, Beatus Ille, op. cit., p. 22.
Diop Papa Mamour
35
casa es cronotopo y metáfora de la escritura, pues en Beatus Ille, la casa es un lugar
preeminente para la comprensión de la novela y tiene un parentesco evidente con otras
casas literarias de Ernesto Sábato por ejemplo o de Isabel Allende, porque constituye un
microcosmos social y alberga a representantes de las fuerzas históricas y sociales del
pasado.
El tiempo es a su vez uno de los aspectos más complicados de la novela. Se trata
de un tiempo cósmico y cíclico y el autor juega constantemente con él, creando sincronías
o simultaneidades, analepsis, prolepsis, dilataciones, aceleraciones, ralentizaciones y
anacronías. Es un tiempo que “se borra, se detiene, se superpone pasado y presente y
todo ello debido a que se establece desde la memoria”49, como podemos leer en este
párrafo:
Tal vez ahora en la estación, cuando recuerda y niega y quiere embridarse la voluntad
y el deseo para que sólo le ofrezcan ante sí el necesario futuro de la deserción, la
partida y el tren y los ojos vengativamente cerrados, querrá percibir la duración del
tiempo que ha pasado en Mágina y el orden en que se sucedieron las cosas y
descubrirá que no sabe y no puede , que no concuerda el tiempo exacto de los
calendarios con el de su memoria, que han pasado dos meses y treinta años y varias
vidas enteras sin que él pueda asignarles vínculos de sucesión o de causa50 .
Al igual que el espacio, se puede percibir un tiempo interior y subjetivo, encuadrable
en la Teoría de la Corriente de Conciencia o el tiempo psicológico o durée del filósofo
Bergson:51 En Beatus Ille, los recuerdos aparecen mezclados en el fluir atemporal y
continuo.
Es más Latorre Madrid habla de “supresión del tiempo” motivada por el recuerdo de
Solana mediante la memoria involuntaria, que es una memoria creativa y alejada de la
memoria voluntaria, que está dominada por la razón; esta memoria afectiva que utiliza
49
GRACIA FANLO, María Pilar y Herrero Fernández, María Teresa, Op cit., p 210.
50
MUÑOZ MOLINA, Antonio, Beatus Ille, op. cit., p. 51.
51
BURUNAT, Silvia, El monólogo interior como forma de narrativa en la novela española, Madrid, J. Porrúa
Turanzas, 1980. En opinión de esta autora, Bergson establece una separación entre el tiempo físico,
conceptual y abstracto y el tiempo vital, intuitivo, concreto. El pasado es la vida psíquica unida a nosotros
continuándose en el presente. Mediante el mecanismo de la memoria, se presenta en un estado de
presente (…) El novelista sustituye la memoria lógica, que encadena el presente al pasado, por una
memoria poética, que reconstruye el pasado como presente.
Ogigia. Revista electrónica de estudios hispánicos
36
también Marcel Proust en su literatura, pues no puede existir tiempo cuando las fronteras
entre lo ficticio e inventado y lo real están difusas.
A modo de conclusión
De todos es sabido que la novela española de la transición se desmarca de la
tendencia socialrealista, de un realismo crudo y tremendista52 y un extremismo expresivo,
rozando los lindes del surrealismo y próximo a cierto expresionismo pintoresco y
escandaloso. El cometido de estas novelas es rescatar el pasado de la Guerra Civil,
matizando la versión que de ella ofrecieron los cronistas. Este objetivo se consigue con
recursos metaliterarios que presentan la novela como un laberinto donde la ficción y la
historia se entremezclan.
En este marco estético e ideológico se inscribe Beatus Ille de Antonio Muñoz Molina
donde la metaliteratura hace posible un universo a la vez bélico, histórico y maravilloso en
el que al realismo épico elegiaco propio de la literatura de guerra se suman el realismo
contrafactual y el realismo mágico mediante la desmitificación de la historia y el mundo
recordativo y onírico en el que se hallan permanentemente los personajes; todos recursos
por los cuales Beatus Ille merece el calificativo de metanovela.
52
Para profundizar en aspectos del “tremendismo” y el “miserabilismo” en la novela española de posguerra,
conviene consultar el trabajo siguiente: CALVO CARILLA, José Luis, La mirada expresionista. Novela
española del siglo XX, Madrid, Mare Nostrum, 2005.
William Martínez
37
EL IMPACTO DE “VIERNES” EN LA POESÍA VENEZOLANA
William Martínez, Jr.
(California Polytechnic State University)
Resumen
Este ensayo presenta una revisión histórica de la producción poética venezolana en las
décadas de los 1930 y 1940. Se examina el papel que el grupo poético “Viernes” jugó en
trazar la pauta de la modernidad en las letras venezolanas. También se examina el papel
que varios de los integrantes de Viernes tomaron dentro y fuera del grupo. Igualmente se
alude a la influencia que estos poetas vivieron, tanto nacionales como internacionales.
Finalmente, se discute la disolución del grupo y su impacto a la poesía venezolana y
latinoamericana de posguerra.
Palabras Clave: Poesía – Latinoamérica- Venezuela- Historia de la Literatura—
Literatura.
Abstract
This essay presents a historical review of the poetic production in Venezuela in the 30’s
and 40’s. It reviews the role that “Viernes,” a poetic group, had in developing the modern
literary movements in Venezuelan literature. The impact that several members of the
group had while in and then later after their departure from the group is examined.
Equally, the poetic influences inherited by the group, both national and international, are
discussed. Finally, the essay deals with the dissolution of the group and its impact in the
literature of Venezuela and Latin America after World War II.
Key Words: Poetry— Latin America - Venezuela— Literary Histrory— Literature.
Ogigia. Revista electrónica de estudios hispánicos
38
Una de las características más notables de la poesía venezolana de los últimos 25
años, es el uso de imágenes cortantes, muchas veces hasta contrarias, todas llenas de
color y vivacidad.
La poesía en Venezuela, sea ésta la que resulta de la urbanidad
congestionante de Caracas, o de la intranquilidad de la vida de provincia, conlleva figuras
poéticas iracundas, insólitas, que se nutren de un calidoscopio de realidades Estas
imágenes tienen su origen en un grupo con mucha influencia surrealista, cuya mayor
contribución fue penetrar en la conciencia intelectual venezolana, abriendo las puertas de
la modernidad a un país envuelto en los vástagos de una difícil dictadura. Este grupo de
escritores e intelectuales se conoce como "Viernes".
Los intelectuales literarios venezolanos están bastante de acuerdo que la poesía
moderna en Venezuela se inicia inmediatamente después de la caída de la dictadura de
Juan Vicente Gómez en diciembre de 1935 1. Para el país, y por ende a las letras
venezolanas, durante la dictadura gomecista rige un período de austeridad y de represión
autorial. Con la excepción de José Antonio Ramos Sucre2, la imagen poética venezolana
es estéril, gastada, sin novedad o de imaginación redundante.
Desde el inicio del siglo, se ve en la literatura venezolana una gran influencia del
modernismo, la cual proviene de un positivismo fuerte, ya presente desde finales del siglo.
Las tendencias del siglo anterior continúan ejerciendo impacto. José Ramón Medina
explica:
1
Juan Vicente Gómez, militar declarado, por acto armado toma el poder en 1908. Su régimen durará hasta
su muerte, en diciembre de 1935. A este trágico período de la historia de Venezuela se le conoce como el
"gomecismo," y está caracterizado por una de las etapas más brutales que ningún país haya vivido. Para un
estudio detallado recomendamos revisar la Historia fundamental de Venezuela de J.L. Salcedo-Bastardo,
Caracas, Fundación Gran Mariscal de Ayacucho, 1977.
2
José Antonio Ramos Sucre (1890-1930) fue uno de los poetas más influyentes de las letras venezolanas.
Políglota y estudioso, tuvo que interrumpir sus estudios al inicio de la dictadura gomecista. La poesía de
Ramos Sucre es difícil de clasificar. Recibió influencia del romanticismo francés y de la poesía en prosa de
Bertrand y Baudalaire. Pero es el carácter hermético de su poesía lo que lo conecta directamente con el
modernismo latinoamericano. El mayor enfoque en su poesía es la palabra o ‘símbolo” como él mismo la
refiere. Cada uno de sus poemas intenta ser totalizante y a la vez ser fiel a la pureza del idioma. Hay una
palpable obsesión con la muerte y revitalización en su obra. Su erudición es patente y ésta le lleva a lograr
un experimento lingüístico aterrador: la eliminación de pronombres relativos en su poesía. Su obra literaria
consiste en varios libros, entre los más importantes, Las formas del fuego y El cielo de esmalte, ambos de
1929. Muere, trágicamente afectado por el insomnio, en Ginebra en 1930.
William Martínez
39
…las letras venezolanas del Siglo XX aparecen en sus momentos iniciales como la
simple continuación de todo el rico proceso que caracteriza los últimos tiempos del
Siglo XIX… Naturalmente, el modernismo no está solo, aunque señorea por encima de
otras tendencias. Todavía persisten las oleadas románticas y rezagos neoclásicos,
junto a las tentativas distintas de la nueva estética3 .
De estas "nuevas estéticas" las más dominantes vendrán a ser el regionalismo y el
criollismo. Mariano Picón Salas, uno de los más reconocidos historiadores de la literatura
venezolana, ha marcado a este período poético como "regionalista y nativista", con un
sabor marcado de fervor nacionalista; cita, como sus mayores exponentes a los poetas
José Domingo Tejera, Elías Sánchez Rubio, Humberto Tejera y Diego Córdoba4 .
Existe hasta la fecha, un debate acerca de desde dónde precisar los inicios de un
estudio histórico de la modernidad poética venezolana. Unos indican que la vanguardia,
con la "Generación de 1935", es el lugar propicio para iniciar, mientras que otros arguyen
que es a partir de la llamada "Generación de 1958" donde se encuentran las bases. Una
clara razón para partir de la generación de 1935 y no de la de 1958 es que mientras en la
primera sugiere un pensamiento más empautado con tonos fuera del carácter nacional,
en la posterior, no sólo existe un pensamiento nacionalista, sino que ya existe también
una cosmovisión universal de la poética y de su estética patente. Es muy palpable el
impacto que tuvo "Viernes" en su momento, especialmente en lo que representó para la
Venezuela de aquella época.
Con una excepción, como indico anteriormente con en el caso de Ramos Sucre,
"Viernes" será el punto de partida de la modernidad poética venezolana.
La fuerte
influencia que establecieron los poetas de este movimiento en otros futuros, es la pauta
imborrable que hace de "Viernes" clave para el entendimiento de la evolución poética en
la urbe en Venezuela. "Viernes [es] el iniciador de la modernidad en la literatura de
nuestro país, especialmente en lo que respecta a la poesía”5.
El movimiento de renovación literaria que había surgido inicialmente durante la
vanguardia venezolana al final de la década de los años veinte, llegó a su culminación
con la nueva libertad lograda después del gomecismo.
3
De estos esfuerzos brota en
MEDINA, JOSÉ RAMÓN, Ochenta años de literatura venezolana, Caracas, Monte Avila, 1980, pp. 8-9.
4
PICÓN SALAS, MARIANO, Formación y proceso de la literatura venezolana, Caracas, Monte Ávila, 1980,
p. 230.
5
VERA, ELENA, Flor y Canto. 25 años de poesía venezolana (1958-1983), Caracas, Biblioteca de la
Academia Nacional de la Historia, 1985, p. 23.
Ogigia. Revista electrónica de estudios hispánicos
40
escena una serie de escritores que a finales de 1935 y principios de 1936 vendrían a
formalizar al grupo "Viernes" nombrándose de tal manera por el día establecido para sus
reuniones semanales.
Los poetas de esta agrupación son fuertemente influidos por los movimientos
surrealistas francés y latinoamericano. Junto a esto, se inscribe el impacto de García
Lorca por España y de Pablo Neruda, por Latinoamérica6 . Pero la heterogeneidad de la
escritura entre sus miembros es lo que más llama la atención. Aunque todos tenían en
mente una estética de renovación lingüística, la manera de obtener tal meta era bastante
variada. Sobre esto, José Ramón Medina apunta que "Viernes tampoco fue un grupo
homogéneo desde el punto de vista de las tendencias que se desarrollaron en su seno.
Aunque trató de fijar un sentido y un destino la expresión."7
La vanguardia venezolana puede ser equiparada con la introducción de la escritura
surrealista. Es "Viernes" quien toma la batuta de esta nueva manera de apreciar el arte
para avanzar, dentro de su discorde de voces, la idea de la modernidad y el impacto de la
nueva tecnología en la sociedad. Por medio de "Viernes", las lecturas de los grandes
nombres de la literatura mundial, en específico la francesa de aquel momento, son
"descubiertas" por los venezolanos. Juan Carlos Santaella explica, “Viernes fue un grupo
renovador que permitió a través de sus publicaciones, que se conocieran poetas de
enorme significación pero relativamente desconocidos en estas tierras, como Rilke,
Hölderlin, Novalis, Rimbaud, Valéry, Eliot, entre otros”8.
Entre los integrantes de "Viernes" contamos con Luis Fernando Álvarez y José
Ramón Heredia, quienes fueron los más interesados en la escritura surrealista. A ellos se
les unía en filosofía estética Angel Miguel Queremel9 , cuya muerte tendría gran impacto
para el grupo10. En estos, se incluyen Andrés Eloy Blanco, Pablo Rojas Guardia, Enrique
Planchart, Otto De Sola, Pascual Venegas Filardo, Oscar Rojas Jiménez, Rafael Olivares
6
PICÓN SALAS, MARIO, Formación y proceso de las literature venezolana, Caracas, Monte Ávila Editores,
1980, p. 180. El autor indica de Viernes que "los nuevos poetas que surgían ensayaban sus saltos
mortales", marcando como influyentes "el erotismo total , disuelto en torbellino dionisíaco que mandaba de
su lejos Chile un poeta de tanto aliento como Pablo Neruda; el surrealismo francés con su provisión de
monstruos; la poesía solar de un García Lorca."
7
MEDINA, JOSÉ RAMÓN, Ochenta años de literatura venezolana, Caracas, Monte Ávila, 1980, p. 121.
8
SANTAELLA, JUAN CARLOS, Manifiestos literarios venezolanos, Caracas, Monte Ávila, 1992, p. 8.
9
El segundo número de la revista “Viernes” fue dedicado a la memoria de Queremel, donde se publicó una
selección de su obra, junto con un número de elogios. De aquí en adelante, hasta el último número, su
nombre aparecerá en el directorio de la revista como si fuese miembro activo.
10
SANTAELLA, JUAN CARLOS, op. cit., p. 9.
William Martínez
41
Figueroa y Vicente Gerbasi. De las reuniones de "Viernes" vienen a nutrirse muchos
poetas que serán clave para seguir la evolución de la poesía contemporánea en
Venezuela.
De esta generación se destaca Vicente Gerbasi. Ya se ha escrito que "Toda la
creación poética posterior hecha en Venezuela de alguna manera se ha nutrido de
Vicente Gerbasi"11 . En especial se destaca su visión mágica-realista del paisaje
venezolano y la conexión de éste con la integración del individuo. Sin
embargo, es
necesario mencionar que la mejor producción de los integrantes de "Viernes" no fue sino
hasta más tarde que su inicial participación. Por ejemplo, en Gerbasi, su poema más
famoso y complejo "Mi padre, el inmigrante," fue escrito en 1945. Aún así, no es como un
por menor el tremendo impacto que la participación en "Viernes" tuvo en su maduración
poética.
La revista Viernes sale a luz en el año de 1939. En ella se encuentra su manifiesto
estético, donde indican que éste "es un grupo sin limitaciones" y "Que se identifica con laro-sa-de-los-vien-tos." El grupo tenía como visión la pluralidad en ideas estéticas y
maneras de presentarlas, ya que declaraban como bandera "Todas las direcciones. Todos
los vuelos. Todas las formas." Finalmente, ellos esperan que esta asociación "sea la
víspera definitiva del gran reposo -ya en marcha hacia lo continental- de lo venezolano"12.
En los escritos publicados en la revista 'Viernes", los poemas contenían un lenguaje
difícil de seguir, muchas veces hermético a propósito.
Reinaba el cosmopolitismo,
desigual al acostumbrado por escritores modernistas latinoamericanos, el deseo de ir más
allá de las fronteras y problemáticas nacionales y enfrentarse a la realidad de la
universalidad humana. Quizá mucho de esto se debió a la inesperada posibilidad de
escribir de una manera mucho más abierta, por primera vez en mucho tiempo. Y este
ambiente de libertad produjo una literatura empujada por un deseo de diversidad.
Pero este ideal de diversidad será lo que últimamente traerá el final del grupo. En
mayo de 1941, cuando sale a relucir la edición final de la revista Viernes (que comprende
cuatro números, del 18 al 22) la dirección artística del grupo ya había desaparecido. La
visión surrealista trajo consigo sus enemigos, formándose un grupo de opositores, los
"anti-viernistas," como los nombra Juan Liscano. Ellos tratarán de desviar nuevamente la
11
12
PADRÓN, LEONARDO, Crónicas de la vigilia, Caracas, Academia Nacional de la Historia, 1990, p. 165.
SANTAELLA, JUAN CARLOS, op. cit., p. 42.
Ogigia. Revista electrónica de estudios hispánicos
42
dirección de la aceptabilidad de códigos poéticos, a través de la introducción de una línea
más clasicista dentro de la hegemonía literaria del país:
Frente a Viernes, en un período álgido de su actuación... se compactó una oposición
despiadada que en más de un caso, no usó armas limpiamente poéticas. Hubo burlas,
seminarios humorísticos de gran lectura, críticas de bolillería sin altura alguna, chistes
fáciles.
No se aceptaba, al parecer, el hermetismo de este lenguaje parecido a
traducción del inglés y del alemán, ni la evasión, ni el extranjerismo, ni la falta de
sensibilidad ante lo social y lo nacional13.
El impacto de "Viernes" se siente fuertemente en dos puntos. Primero, con ellos se
introduce una visión más cosmopolita de los códigos poéticos. El surrealismo introduce la
importancia y la preocupación por la imagen verbal a la poesía venezolana. Esta
preocupación sigue teniendo gran vigencia hoy en día.
Segundo, el grupo reunió la
diversidad de voces en un momento, para dar una cierta unidad, irónicamente
homogénea a la producción literaria de ese momento en Venezuela, en términos del
deseo de describir su realidad vivencial por medio de la imagen surrealista. La
contribución de "Viernes" es, pues, llevar a la poética venezolana del modernismo
latinoamericano hacia la modernidad de pensamiento, e iniciar la consolidación de la
noción de contemporaneidad que ya empezaba a brotar.
Después de "Viernes," como he indicado, surge un movimiento que trata de
establecer un retorno a los valores "clásicos" de la poesía. Resulta, si se puede calificar
así, un neoclasicismo venezolano, donde los códigos estéticos encaran una nostalgia por
las formas tradicionales: el soneto, la lira, el verso rimado y la métrica ajustada, entre
otras.
Pero la reacción contra "Viernes" no fue una de negar el trabajo de éstos, sino más
bien de ir
hacia el exceso y la falta de autenticidad de los nuevos promotores del
surrealismo, así como la consistente alienación de las problemáticas sociales y culturales
de la emergente Venezuela. Más específicamente, la producción petrolera es de gran
beneficio para la oligarquía durante la dictadura gomecista. Esta nueva industria sirve de
clave para comprender la realidad venezolana de los años en cuestión, y, de alguna
manera, la propia realidad de hoy día. Igualmente importante es el cuestionamiento del
13
LISCANO, JUAN, Panorama de la literatura venezolana actual, Caracas, Publicaciones Españolas, S.A.,
pp. 219-20.
William Martínez
43
significado del individuo como un ente viable para la sociedad, y la disolución del
pensamiento escapista y hermético:
Los poetas que aparecen en Venezuela en la década del 40 se mueven dentro de una
corriente literaria plenamente definida, que busca ante todo la razón esencial del
hombre como primer protagonista de la poesía, dando a su lenguaje un vigor de
claridad clásica-en intención y expresión-, y asumiendo, por eso, una posición contraria
al hermetismo, que definió la dinámica de muy buena parte de las tendencias
inmediatamente anteriores 14.
Liscano ha revisado este período con bastante detalle y, una de las cosas que
mayormente destaca, es la españolización de las formas poéticas en boga durante estos
años:
La influencia hispanizante tuvo varios aspectos, muchas veces no coincidentes: la
aceptación de formas preceptivas o bien de una organización estructural derivada de
aquéllas; la temática ora trágica a la manera unamuniana, ora alegre y pinturera, a la
manera andaluza. Sonetos, romances cuartetas aconsonantadas, alejandrinos
solemnes, endecasílabos llenaron [esta] poesía15.
Además, aparte de esta influencia española, sigue resintiéndose la palabra y la
fuerza de Pablo Neruda, especialmente la de sus escritos inspirados por la tragedia de la
Guerra Civil española. La forma surrealista de alguna manera viene a co-existir, en parte,
con las nuevas tendencias neoclásicas. Esta co-existencia lleva, muchas veces, a
incrustar a los poetas por otros caminos desiguales, revelando las preocupaciones
estéticas personales.
De este tipo de tendencia podemos marcar los temas de la
tropicalidad, la naturaleza, y la experiencia del hombre ante la imponente selva. Ejemplo
bueno es Gerbasi con Poemas de la tierra y Mi padre el inmigrante, así como Otto de Sola
con En este nuevo mundo.
Entre los poetas que más se destacan durante este período son Ana Enriqueta
Terán, Luis Pastori, Aquiles Nazoa, J.A. Escalona-Escalona, Ida Gramko y Juan Beroes.
Junto con ellos, se agregan los nombres de Guillermo Meneses, que ya por aquellos años
14
MEDINA, JOSÉ RAMÓN, op. cit., p. 227.
15
LISCANO, JUAN, op. cit., p. 222.
Ogigia. Revista electrónica de estudios hispánicos
44
entraba en su madurez como escritor, junto con José Ramón Medina y Juan Manuel
González. Estos dos últimos, pasarán a ser la parte integral del grupo poético
“Contrapunto,” que surgió de 1946 hasta 1949.
Una de las características de los textos creados durante este período es la
insistencia por la búsqueda de una conciencia nacional. Dicha concienciación pasa por la
incandescente búsqueda de la palabra prístina, la construcción ideal del poema como
manera de entablar una arquitectura entre fondo y forma, arquitectura que tiene como
esencia la noción de profundidad y de tradición. Por lo tanto, la insistente utilización de
formas "clásicas". El establecimiento de una tradición en conjunto con la indagación sobre
la palabra, la esencia del verbo mismo, y por ende, un entablamiento dialógico con la
naturaleza misma del ser humano, es la meta de estos escritores.
La noción de la búsqueda de maneras clásicas para establecer una conciencia
nacional está muy vinculada a la aparición de lo que Medina ha llamado "poetas
universitarios"16. La mayoría de los escritores que tienen el acceso directo a las casas
editoriales provienen de la Universidad Central, donde todos estudian alguna carrera. El
impacto de una exposición a los diferentes movimientos literarios universales, españoles
en especial, viene a aclarar el deseo de regresar a las formas hispanizantes poéticas
como fuente de adquisición de una conciencia nacional venezolana.
Al final de la década de los años 40, Venezuela se ve confrontada con uno de los
más difíciles momentos de su historia. El advenimiento de un golpe de estado militar, y su
subsiguiente aniquilación de las libertades de expresión, vendrán a tener un tremendo
impacto dentro de la valoración de códigos estéticos para las siguientes generaciones.
Sin embargo, es indudable que, para las letras venezolanas, las ideas portadas por
“viernes” fueron fundamentales en su desarrollo. “Viernes” pues, viene a representar para
la poesía en Venezuela un respiro de aire puro entre dos bocanadas rancias de su
historia.
16
MEDINA, JOSÉ RAMÓN, op. cit., p. 226.
Miguel Salas Díaz
45
LA IMAGEN DE CASTILLA Y ESPAÑA EN LA LITERATURA GALLEGUISTA
DE LOS SIGLOS XIX Y XX
Miguel Salas Díaz
(Universidad de Lenguas Extrajeras de Dalian, China)
Resumen
El nacionalismo necesita siempre de un enemigo para articular su discurso. En el caso del
galleguismo, el enemigo es España, encarnada principalmente en la figura de Castilla.
Muchos ejemplos de la literatura gallega de los siglos XIX y XX nos lo demuestran.
Palabras Clave: nacionalismo – Galicia – España - literatura.
Abstract
Nationalism always needs an enemy. For the galician nationalism this enemy is Spain,
mainly Castilla. A lot of examples in galician XIXth and XXth century literature demonstrate
this idea.
Key Words: nationalism - Galicia - Spain - literatura.
Ogigia. Revista electrónica de estudios hispánicos
46
Breve introducción teórica
El nacionalismo es un fenómeno excesivamente complejo como para entrar a
definirlo en este breve artículo, destinado exclusivamente a la imagen que la literatura
nacionalista gallega ofrece de España y de Castilla en particular. Sin embargo sí tenemos
que referirnos a algunas de sus características, que resultarán esclarecedoras a la hora
de comprender la razón de que los autores galleguistas elaboren una imagen de España
y Castilla muy determinada.
La visión más tradicional e historicista del término nacionalismo lo considera un
simple fenómeno sociológico. Según Karl Deutsch, el nacionalismo no sería la expresión
natural y eterna del sentimiento esencial y profundo de la nación, como pretenden
muchos de los teóricos nacionalistas, sino un proceso social iniciado en el siglo XIX y
auspiciado por factores como el aumento de ferrocarriles, carreteras, telégrafos, o la
aparición del servicio militar y de un sistema educativo nacional unitario 1. “La asociación
de un amplio número de individuos –elites nacionales y regionales, clases medias, clases
populares– unidos por múltiples y complejos canales de comunicación social e integración
económica”2. Ernst Gellner aborda el fenómeno desde otra perspectiva:
Fundamentalmente, el nacionalismo es un principio político que sostiene que debe
haber congruencia entre la unidad nacional y la política. Sentimiento nacionalista es el
estado de enojo que suscita la violación del principio o el de satisfacción que
acompaña su realización. Movimiento nacionalista es aquel que obra impulsado por un
sentimiento de este tipo3.
Para Bennedict Anderson, y vamos acercándonos a los conceptos que más nos
interesan, las naciones son comunidades imaginadas construidas deliberadamente. El
lenguaje escrito jugaría un papel importante en esta invención: la imprenta permitió la
creación de una memoria colectiva de dimensiones desconocidas en el mundo de la
cultura oral4 . Pero es Cruz Prados quien aporta, en su definición del concepto de
nacionalismo, datos esenciales para nuestro ensayo:
1
FUSI, Juan Pablo, La patria lejana. El nacionalismo en el siglo XX, Madrid, Taurus, 2003, p. 281.
2
Ibídem, p. 281.
3
GELLNER, Ernst, Naciones y nacionalismo, Madrid, Alianza, 1997, p. 13.
4
ANDERSON, Bennedict, Imagined communities, London-New York, Verso, 2002.
Miguel Salas Díaz
47
Ante una situación sociopolítica insatisfactoria —derrota, decadencia, desventaja, etc.
—, se concibe un proyecto político modificador de esa situación, que es dotado de una
legitimidad y de un valor superlativos al presentarlo como el proyecto propio e
irrenunciable de un sujeto colectivo, la nación: un sujeto que es postulado como
preexistente y objetivo, como primordial y natural; como una colectividad que viene
existiendo de forma latente bajo apariencias enmascaradoras y violentas, y que es
portadora, por derecho originario y natural, de la soberanía política, que es condición
necesaria para que la nación pueda tener un proyecto político propio, y para que un
proyecto político pueda ser formulado como proyecto nacional. En general, un
movimiento político es nacionalista en la medida en que responde a esa estructura5 .
Hay tres elementos en esta definición que nos importan especialmente. El primero
de ellos es que la situación de partida del nacionalismo es la insatisfacción. La creencia
de sufrir un tratamiento injusto es consustancial al nacionalismo. El segundo es que el el
nacionalismo percibe a la nación como sujeto colectivo protagonista de una serie de
peripecias históricas, como si se tratara del personaje principal de una novela. La tercera
es que el nacionalismo cree que la nación es igual a sí misma desde el origen de los
tiempos. De este modo, “el “nosotros” y el “ellos” se mantienen constantes e inmutables
desde los orígenes hasta la actualidad”6. El “ellos”, la imagen del enemigo, del ajeno, es a
lo que nos dedicaremos en este artículo.
La responsabilidad de la imagen del “otro” recae en gran parte sobre los hombros de
los “mitógrafos”: elites intelectuales que, desde una situación privilegiada, definen las
características de lo nacional y también de lo que no lo es. Nietzsche habla del tipo de
individuo que se empeña en mostrar a los pueblos “cómo hacerse todavía más
nacionales: ése agrava la enfermedad de este siglo y es un enemigo del buen europeo,
un enemigo de los espíritus libres”7. De estos mitógrafos surge el nacionalismo para
extenderse después, en forma de de argumento emocional, por todas las capas de la
sociedad. Su misión, como dice Halbwachs, “consiste en hacer creer a quienes lo oyen
que las convicciones y sentimientos que despierta en ellos no les han venido de fuera,
sino que proceden de ellos mismos, y que simplemente ha adivinado lo que se elaboraba
5
CRUZ PRADOS, Alfredo, El nacionalismo, una ideología, op. cit., p. 50.
6
Ibídem, pp. 98-99
7
SAVATER, Fernando, El mito nacionalista, Madrid, Alianza Editorial, 1996, p. 23.
Ogigia. Revista electrónica de estudios hispánicos
48
en el secreto de su conciencia limitándose a prestarles su voz” 8. Dice Prat de la Riba,
padre del nacionalismo catalán,
respecto a la esencial labor de los mitógrafos: “Me
complazco en bajar la cabeza ante los videntes, los poetas, los escudriñadores de
archivos e investigadores de ruinas, que han dado a nosotros, los sociólogos y los
políticos, todo lo que necesitábamos y lo único que necesitábamos: el alma de Cataluña”9.
La selección que el nacionalismo lleva a cabo de lo nacional crea obligatoriamente
situaciones de discriminación. Fernando Savater nos recuerda el ejemplo de
Garaikoetxea, quien dijo que “sólo se puede ser una cosa. No se puede ser vasco y
español a la vez, ni vasco y francés” 10. Cruz prados recuerda, a su vez, la breve frase de
Prat de la Riba, quien se quejaba porque en otras épocas los catalanes admitían “la
monstruosa coexistencia de las dos culturas”11, refiriéndose a la catalana y la castellana.
Cuando la propia identidad es algo monolítico, eterno, incuestionable, la convivencia con
las demás se convierte, de modo natural, en monstruosa. Como dice Bernard Crick, el
nacionalismo divide todo en nacional y no nacional, lo que es lo mismo que decir
verdadero o falso 12. Lo que no es nuestro es falso, y esto lleva a rechazar todo lo que nos
recuerde a nuestros vecinos, con los que nos comparamos. Savater analiza esta realidad
con especial lucidez, y señala cómo —refiriéndose al País Vasco— “no sólo se educa a
los niños para que detesten lo español, sino para que llamen español a cuanto
detestan”13.
Todo el nacionalismo se basa en tal concepto del mal doble —el interior y el exterior,
los invasores y los traidores— contra el que hay que luchar. Walker Connor ha
seleccionado el texto de un joven revolucionario nacionalista chino que, hacia 1900,
ilustraba muy bien esta situación: “Quienes no son de la raza Han no descienden del
Emperador Amarillo, forman parte de familias exteriores. Es evidente que no hay que
ayudarles; quien les ayuda, no sabe a qué linaje pertenece”14. Michel Focault nos
recuerda: “La doctrina vincula a los individuos a ciertos tipos de enunciación y les prohibe
8
Maurice HALBWACHS, La memoria colectiva, Zaragoza, Prensa universitaria de Zaragoza, 2004, p. 47.
9
Enric PRAT DE LA RIBA, La nacionalidad catalana, Madrid, Alianza, 1987., p. 30.
10
Ibídem, pp. 25-26.
11
Cf. CRUZ PRADOS, Alberto, El nacionalismo, una ideología, op. cit., p. 91.
12
Cf. Ibídem, p. 106.
13
SAVATER, Fernando, El mito nacionalista, op. cit., p. 47.
14
CONNOR, Walker, Etnonacionalismo, Madrid, Trama, 1998, p. 192.
Miguel Salas Díaz
49
cualquier otro; pero sirve, en reciprocidad, de ciertos tipos de enunciación para vincular a
los individuos entre ellos, y diferenciarlos por ello mismo de los restantes”15. Para
pertenecer al grupo unido por la doctrina se requiere “el reconocimiento de las mismas
verdades y la aceptación de una cierta regla —más o menos flexible— de conformidad
con los discursos válidos”16.
El mito nacionalista es, por tanto, un elemento de autodefinición: nos habla de la
imagen que las elites creadoras desean para su comunidad. Y, definiendo a los propios, el
mito define también al contrario. George Schöpflin añaden que todas las culturas
construyen su discurso en oposición a otro. La comparación es esencial en la
construcción de una cultura, pues permite a este verse a sí misma como única portadora
de una verdad moral que otras no conocen17 .
Esta presencia permanente, casi obsesiva, del otro en el discurso nacionalista
responde a una necesidad antropológica. El relato mítico nacionalista responde, en cada
detalle a la descripción del mesianismo que hace Francois Laplantine en su libro Las tres
voces de la imaginación colectiva18 :
Hay un estilo de comportamiento societario mesiánico que consiste, siempre, en una
réplica contraaculturativa de un grupo étnico que, considerándose colonizado desde
adentro o desde afuera (o de ambas partes a la vez), intenta reorganizar su existencia
en torno de una opción redentora, universal, monoteísta y uraniana19.
El nacionalismo necesita de un oscuro enemigo invasor que justifique sus propias
derrotas y carencias, que concentre en su siniestra figura todo el mal que aqueja a la
oprimida nación y que represente todo aquello contra lo que se debe luchar. Dice Savater
de esta actitud:
El mundo se va acrisolando en compartimentos estancos, en rebaños de inocentes
aunados por sus agravios históricos contra los otros, que siempre tienen mala intención
15
FOCAULT, Michel, El orden del discurso, Barcelona, Tusquets, 2002, p. 44.
16
Ibídem, p. 43.
17
Cf. SCHÖPFLIN, George, “The function of myth and taxonomy of myths”, en: Geoffrey HOSKING and
George SCHÖPFLIN, Myths and nationhood, New York, Routledge, 1997, p. 28.
18
LAPLANTINE, François, Las tres voces de la imaginación colectiva, Barcelona, Granica, 1977, p.
113-114.
19
Ibídem, p. 30.
Ogigia. Revista electrónica de estudios hispánicos
50
(uno de los lemas de los independentistas de Quebec es je me souviens —me acuerdo
— referido a una derrota militar de los franceses ocurrida hace doscientos cincuenta
años): Nadie quiere ser al menos responsable parcialmente, cada cual se empecina en
presentarse como víctima y cobrar su indemnización20.
El caso galleguista
En el caso galleguista el enemigo que representa al Mal absoluto es España,
concentrada muchas veces su esencia en la imagen de Castilla, auténtica bestia negra
del galleguismo desde sus orígenes, allá por el siglo XIX, hasta la actualidad más
reciente, no por más maquillada menos convencida de su visión de la historia.
La tierra
La imagen de la tierra, como paisaje, como madre, como origen de los vicios y
virtudes de un pueblo, es siempre esencial en la iconografía nacionalista. El galleguismo
siempre ha comparado la tierra gallega con la castellana, ofreciendo fragmentos
reveladores. Es el caso de Manuel Murguía, esposo de Rosalía de Castro y una de las
voces más importantes del nacionalismo galaico. En el siguiente párrafo Castilla es una
tierra desolada de ríos turbios:
Ahora que la vía ferrada penetra en el país por otros distintos lugares, el espectáculo
es diverso. El sol o las lluvias nos dan, según la hora y la ocasión, el verdadero
aspecto del suelo. Diríase que entra aquí con la locomotora, algo de las desolaciones
de Castilla, y que le salen al encuentro los campos siempre verdes y los cielos risueños
de Galicia. Cita misteriosa en la cual se dan su beso de paz los viejos enemigos. El Sil,
que trae el agua según dice un antiguo adagio, viene turbio como los ríos que cruzan
las vastas llanuras centrales de España; no transparente al modo de los que surcan y
fecundan los campos gallegos21.
El suelo polvoriento es la imagen que representa, en numerosos poemas de
Eduardo Pondal, a Castilla, habitada de hombres de rostro oscuro y envidia pronta: “Os
20
SAVATER, Fernando, El mito nacionalista, op. cit., pp. 17-18.
21
MURGUÍA, Manuel, Galicia, Madrid, Sálvora, 1985, p. 4.
Miguel Salas Díaz
51
fillos escuros / do chan polvoriento, / de rostro mourisco; / os fillos do vento, / os sempre
envexosos / dos galegos feitos...”22
También Rosalía compara la tierra gallega con otras regiones de la horrible España,
de la que huyen hasta los pájaros:
Galicia é sempre un xardín donde se respiran aromas puros, frescura e poesía... E a
pesar de esto chega a tanto a fatuidade dos iñorantes, e tanto a indina preocupación
que contra a nosa terra esiste, que inda os mesmos que poideron contemprar tanta
hermosura (...) inda os que penetraron en Galicia e gozaron das delicias que ofrece,
atrevéronse a decir que Galicia era... ¡¡un cortello inmundo!!... Y estos eran quisais
fillos... de aquelas terras abrasadas de onde hastra os paxariños foxen... 23
La imagen de los pájaros es recogida, ya en el siglo XX, por Alfonso Castelao,
escritor, humorista y diputado. Castilla es enemiga de la naturaleza:
Percorramos con ollos galegos os arrais da nosa Terra e veremos alí mesmo o que,
para nós, siñificou o siñifica o Estado hespañol nascido en Castela. A enorme
estensión dos nosos montes, denantes povoados de albres (foi Felipe II quén ordeou a
derradeira tala), amóstranse agora enteiramente calvos i "en maldita esterilidade"
cando podian constituir a nosa fonte principal de riqueza. N-eses montes está presente
o ideal arrasador de Castela, nemiga dos albres e dos paxaros 24.
22
PONDAL, Eduardo, Queixume dos pinos e outros poemas, Vigo, Biblioteca da Cultura Galega, 1995., p,
169. (“Los hijos oscuros / del suelo polvoriento / de rostro morisco; / los hijos del viento / los siempre
envidiosos / de los hechos gallegos.” Traducción del autor.)
23
CASTRO, Rosalía de, Poesía completa I: Cantares gallegos, Santiago de Compostela, Sotelo Blanco
Edicións, 1993, p., 32. (“Galicia es siempre un jardín donde se respiran aromas puros, frescura y poesía... Y
a pesar de esto llega a tanto la fatuidad de los ignorantes, y a tanto la indigna preocupación que contra
nuestra tierra existe, que incluso los mismos que pudieron contemplar tanta hermosura (...) incluso los que
penetraron en Galicia y gozaron de las delicias que ofrece, se atrevieron a decir que Galicia era... ¡¡un
lodazal inmundo!! Y estos eran quizás hijos... de aquellas tierras abrasadas de las que hasta los pajarillos
huyen” (Traducción del autor).
24
CASTELAO, Alfonso, Sempre en Galiza, Madrid, Akal, 1994, pp. 272-273. (“Recorramos con ojos
gallegos nuestra Tierra y veremos, allí mismo, lo que para nosotros significó y significa el Estado español
nacido en Castilla. La enorme extensión de nuestros montes, antes poblados de árboles (fue Felipe II quien
ordeno la última tala) se muestran ahora enteramente calvos y “en malita esterilidad”, cuando podrían
constituir nuestra fuente principal de riqueza. En esos montes está presente el ideal arrasador de Castilla,
enemiga de los árboles y de los pájaros” (Traducción del autor).
Ogigia. Revista electrónica de estudios hispánicos
52
Risco opina que la religiosidad de Castilla se debe a lo terriblemente inhóspita que
es su naturaleza, a la que no se puede amar:
É que o ibero é alleo ó senso da Natureza e nin tan xiquera sabe ollar a paisaxe. En
toda a literatura clásica castelá, cáseque non hai un eixempro de que se lle chame a un
arbre polo seu nome. Pra eles, un arbre, de calquera clás que sexa, non é máis que un
arbre. Aínda máis: os castelaos son místicos por desapego á terra. Pódia que sexa
porque á súa terra se lle non poda querer... Buscan as campías do ceo porque son
áspras e duras as que teñen na terra. En troques, cecáis por eso hai en Galicia tanto
descreído: nonos compre tanto como a eles buscalo ceo, tendo unha terra como a que
temos, unha terra que nos agarima e nonos bota de sí coa súa fosquedade, como as
terras áridas 25.
La lengua
La lengua, como la tierra, es una representación viva del alma de sus hablantes. No
es solamente un vehículo de expresión, sino un índice político. De este modo refleja lo
bueno y lo malo del pueblo, y la comparación entre las lenguas gallega y castellana
resulta inevitable. Para Murguía el gallego no solamente es anterior al castellano, sino
que es su origen. Además, está libre de las feas palabras árabes, del mismo modo que
Galicia nunca estuvo dominada tampoco por los musulmanes:
A poco que se observe, nótase que sus voces [las gallegas], en la mayor parte, son
débil corrupción del latín, sin que se vea en el gallego, como sucede en el castellano,
esas ásperas palabras que ha tomado del árabe, como un signo de su pasada
servidumbre. Formóse el gallego antes que el castellano y llegó también a su
perfección antes que este. Es su padre, como lo es del portugués; ejemplo vivo de lo
que podía llegar a ser el gallego, si en vez de corromperse y viciarse con voces y giros
castellanos, hubiese aspirado a su perfección y sido un idioma nacional. En gallego
escribió sus Cantigas el inmortal monarca castellano Don Alfonso X, llamado el Sabio,
25
RISCO, Vicente, Leria, Vigo, Galaxia, 1961, p. 81. (“Es que el ibero es ajeno al sentido de la Naturaleza y
ni siquiera sabe contemplar el paisaje. En toda la literatura clásica castellana no hay apenas un ejemplo en
el que se llame a un árbol por su nombre. Para ellos, un árbol, sea del tipo que sea, no es más que un árbol.
Aún más: los castellanos son místicos por desapego a la tierra. Puede que sea porque su tierra no puede
ser amada... Buscan los campos del cielo porque son ásperos y duros los que tienen en la tierra. En
cambio, quizás por eso hay en Galicia tanto descreído: no necesitamos buscar el cielo tanto como ellos,
teniendo una tierra como la que tenemos, una tierra que nos mima y no nos expulsa de su lado con su
aspereza, como las tierras áridas” (Traducción del autor).
Miguel Salas Díaz
53
y muchos otros poetas de aquellos tiempos en que el gallego era un idioma formado,
mientras el castellano estaba todavía en su infancia26 .
La dureza fonética del castellano es un trasunto de la dureza del alma española, y
se recurre a ella constantemente. Tal es el caso de Pondal, autor de la letra del himno
gallego. Dice en uno de sus poemas (habla un emigrante gallego en Argentina): “Non
podo estas falas, / non podo sentir, / como follas duras / de ferro sutil. / Esta dura terra /
non é para min”27.
En otro poema Pondal afirma que los castellanos no sólo hablan con acento
cortante, sino que dicen cosas vanas, fatuas y superficiales, propias de blandos y necios,
frente al noble silencio gallego. Además insiste en insultar a los castellanos con el adjetivo
escuro, con el que se refiere a la degradante mezcla de sangres semíticas que forma la
raza que puebla el suelo polvoriento: “É propio dos brandos, / é propio dos necios, / dos
fillos escuros / do chan polvorento; / as vanas palabras, / os duros acentos, / cal soa entre
canas / efímero vento. / É propio dos fatuos / os ruídos superfluos... / Un nobre silencio /
dos fortes gallegos”28.
Vilar Ponte, ya en el siglo XX y a pesar de todas las pruebas aportadas por la
filología, se empeña en afirmar que el gallego es el origen del castellano: “lingua
armoniosa que naceu do latín, desgaxada do albre da soberanía de Roma para parir o
castelán e o portugués...”29 También para Castelao la importancia del gallego es superior:
“O idioma que vós impuxéchedes pol-a forza é un irmán menor do galego” 30.
26
MURGUÍA, Manuel, La primera luz, Santiago de Compostela, Xunta de Galicia, 2000, pp. 14-16.
27
PONDAL, Eduardo, Queixume dos pinos e outros poemas, op. cit., p. 244. (“No puedo ese habla, / no
puedo sentir, / como hojas duras / de hierro sutil. / Esta dura tierra / no es para mí” (Traducción del autor).
28
Ibídem, p. 249-250. (“Es propio de los blandos / es propio de los necios, / de los hijos oscuros / del suelo
polvoriento; / las vanas palabras, / los duros acentos, / cual suena entre cañas / efímero viento. / Son
propios de los fatuos / los ruidos superfluos... / Un noble silencio / de los fuertes gallegos” (Traducción del
autor).
29
Citado en Francisco FERNÁNDEZ RIEGO, Pensamiento galeguista do século XX, Vigo, Galaxia, 1995, p.
34. (“Lengua armoniosa que nació del latín, desgajada de árbol de la soberanía de Roma para parir el
castellano y el portugués”. (Traducción del autor).
30
CASTELAO, Alfonso, Sempre en Galiza, op. cit., p. 42. (“El idioma que vosotros impusisteis por la fuerza
es un hermano menor del gallego” (Traducción del autor).
Ogigia. Revista electrónica de estudios hispánicos
54
La raza
Pero es la literatura sobre la raza la que, sin duda alguna, ofrece fragmentos más
reveladores a la idea que los galleguistas tienen de Castilla y España con respecto a la
propia situación étnica gallega. Murguía, padre del nacionalismo gallego, hablando del
exterminio cultural de Galicia llevado a cabo por Castilla, afirma lo siguiente:
Con tan nobles palabras pondrían digno remate a su obra de exterminio intelectual, si
se nos permite la frase, de un pueblo numeroso y superior, —por ser por entero céltico,
señor Sánchez Moguel, por ser más germanizado (aunque parezca a algunos
absurdo), y por no haberse contaminado con la sangre semita, que tanto domina en las
comarcas que ama y ensalza nuestro adversario, porque son suyas 31.
Pocas páginas después el autor sigue dando rienda suelta a su racismo antisemita:
Si la ínfima gente que al mando de Tarif destruyó el imperio gótico, a cuya ruina
contribuyeron del todo los godos de Toledo; (...) si la conquista y hasta la apellidada
civilización árabe (reducida hoy a sus verdaderas y por cierto bien modestas
proporciones) no hubiesen traído a España y muy en especial al mediodía de la
península —en donde preponderaba ya de antiguo el elemento semita— una nueva
corriente de esta sangre, es más que posible que la poesía sueva hubiera llegado
hasta nosotros 32.
Pondal es aún más insultante en su apreciación racial de los españoles:
Se son castellanos, / se son dos iberos, / se son dos alarbios / e mouros, e eso / da
súa prosapia / os fai ben contentos: / que sean quen queiran / e os veigan os demos. /
Nós somos do norte, / nós somos dos suevos, / nós somos dos celtas, / nós somos
gallegos.
Podrán os cultos fillos / do chao polvorento e ermo, / alabarse do inxenio / do fidalgo
manchego. / Podrán gabar do manco / o estilo duro e seco, / como as frutas do
espiño, / dos seus maternos eidos. / Nós somos de Camoens / os cultos gallegos. (...)
31
MURGUÍA, Manuel, El nacionalismo gallego, Santiago de Compostela, Follas Novas, 2000, p. 30.
32
Ibídem, p. 40.
Miguel Salas Díaz
55
Se acaso se gaban / dos seus duros eidos, / das duras estepas / e chao polvoriento; /
se beben o leite, / e comen os queixos / de cabra e carneiro: / que ben lle aproveite, / e
os leven os demos; (...)
Vós sodes dos cíngaros, / dos rudos iberos, / dos vagos xitanos, / da xende do
inferno; / dos godos, dos mouros / e larbios; que aínda / vos leven os demos. / Nós
somos dos galos, / nós somos dos suevos, / nós somos dos francos, / romanos e
gregos. / Nós somos dos celtas, / nós somos galegos 33.
Pero si, hasta cierto punto, pueden comprenderse ciertas tendencias racistas en el
contexto nacionalista decimonónico, sorprende la afición que por ellas sentía Alfonso
Castelao, diputado galleguista durante la Segunda República y de conocidas tendencias
socialistas, no sólo eso, sino que gran parte de su obra nacionalista más importante,
Sempre en Galiza, está escrita después después de la Guerra Civil, y después de que
formara parte de las primeras filas de la lucha antifascista. Castelao es, sin embargo, lo
suficientemente inteligente como para expresar su contundente mensaje racista y
pretender no haberlo dicho, aunque sus trucos saltan a la vista. Como en la siguiente
frase, en la que maquilla su evidente racismo tachando a éste de “tentación antipática”:
Eisiste en Galiza unha homoxeneidade de caráiter, tan secularmente autóctono, tan
contrario â alma castelá, que a miúdo caemos en tentacións antipáticas, tales como a
de proclamar que nós somos ários e os demáis semitas. Con todo séxanos permitido
decir con Portela Valladares: "Os confusos lindeiros de raza destácanse en Galiza de
rara maneira, porque celtas, suevos, normandos, pelegrinantes, cantos alá foron veñen
d-un tronco común, repiten o mesmo sangue, coma o repiten os iberos, os fenicios, os
árabes e bereberes, os almoades e os almoravides, n-outras zonas da Penínsua. En
33
PONDAL, Eduardo, Queixume dos pinos e outros poemas, op. cit., pp. 246-248. (“Si son castellanos / si
son de los iberos, / si son de los alarbios / y moros, y eso / de súa prosapia / los tiene contentos: / que sean
quienes quieran / y los lleven los demonios. / Nosotros somos del norte, / nosotros somos de los suevos, /
nosotros somos de los celtas, / nosotros somos gallegos. / Podrán los cultos hijos / del suelo polvoriento y
yermo, / alabar el ingenio / del hidalgo manchego. / Podrán alabar del manco / el estilo duro y seco, / como
las frutas del espino, / de su lugar materno. / Nosotros somos de Camoens / los cultos gallegos. (...) Si
acaso presumen / de sus tierras duras / de sus duras estepas / de suelo polvoriento; / si beben la leche, / y
comen los quesos / de cabra y carnero: / que les aproveche, / que los lleven los demonios; (...) / Vosotros
sois de los cíngaros, / de los rudos iberos, / de los vagos gitanos, / de la gente del infierno; / de los godos,
de los moros / y alarbios; que aún / os lleven los demonios. / Nosotros somos de los galos, / nosotros somos
de los suevos, / nosotros somos de los francos, / romanos y griegos. / Nosotros somos de los celtas, /
nosotros somos gallegos” Traducción del autor).
Ogigia. Revista electrónica de estudios hispánicos
56
canto é posible, induvidablemente, posuímos unidade etnográfica".(...) En verdade, os
lindeiros espirituaes de Galiza aseméllanse en todo âs murallas romanas de Lugo34.
Termina Castelao sumándose a la antipática tentación de otros galleguistas, aunque
guste de tirar a piedra y esconder la mano. Usa un truco semejante cuando cita las
palabras de otro galleguista, Vicetto, al que llama exaltado para darle la razón en un
espacio de menos de diez palabras:
Con razón o eisaltado Vicetto escrebeu estas verbas: "¿E quén lle negaba (a Galiza)
ese dereito de igoaldade e solidaridade antre os demáis povos peninsuares?...
Negáballo canalla mestiza de galegos e mouros, que constituía os modernos povos de
Castela, Estremadura, etc.; negáballo, en fin, esa raza de impuro, adulterado sangue35 .
Y continúa con su decir no diciendo:
E se a raza fose, n-efeito, a determiñante do caráiter homoxéneo d-un povo, sen que
por así creelo incurrísimos en pecado, ben podía Galiza enfrentar a súa enxebreza co
mestizaxe do resto de Hespaña, atribuíndolle ao sangue árabe a indiscipriña, a
intolerancia e a intransixencia con que os hespañoles se adornan36.
Castelao no es el único autor de su generación que sustenta estas ideas. Risco, por
ejemplo, afirma: “Sexa pol-a millor adautación á terra, sexa pol-a superioridá da raza, o
certo é que nin a infiltración romana, nin a infiltración ibérica conseguiron destruir o
34
CASTELAO, Alfonso, Sempre en Galiza, op. cit., pp. 260-261. (“Existe en Galicia una homogeneidad de
carácter, tan secularmente autóctono, tan contrario al alma castellana, que a menudo caemos en
tentaciones antipáticas, tales como la de proclamar que nos somos arios y los demás semitas. Con todo,
permítannos decir con Portela Valladares: “los confusos linderos de la raza se destacan en Galicia, porque
celtas, suevos, normandos, peregrinos, cuantos allá fueron vienen de un tronco común, como la repiten los
iberos, los fenicios, los árabes y bereberes, los almoades y los almorávides en otras zonas de la Península.
En lo posible, indudablemente, poseemos unidad etnográfica”. (...) En verdad, los linderos espirituales de
Galicia se asemejan en todo a las murallas de Lugo”. Traducción del autor).
35
Ibídem, p. 393. (“Con razón el exaltado Vicetto escribió estas palabras: “¿Y quién le negaba (a Galicia)
ese derecho de igualdad y solidaridad entre los demás pueblos peninsulares? Se lo negaba la canalla
mestiza de gallegos y moros que constituía los modernos pueblos de Castilla, Extremadura, etc. Se lo
negaba, en fin, esa raza de impura y adulterada sangre”.” Traducción del autor).
36
Ibídem p. 446-447. (“Y si la raza fuese, en efecto, determinante en el carácter homogéneo de un pueblo,
sin que por así creerlo incurriésemos en pecado, bien podría Galicia enfrentar su pureza con el mestizaje
del resto de España, atribuyéndole a la sangre árabe la indisciplina, la intolerancia y la intransigencia con
que los españoles se adornan”. Traducción del autor.)
Miguel Salas Díaz
57
predominio do elemento loiro centroeuropeo no pobo galego.”37 Otero Pedrayo afirma
cosas similares: “Pero non queremos comenzalo sen indica-la individualidade de Galicia
dentro das culturas peninsulares. Non dubidaremos en ir busca-la súa orixe a un
europeísmo superior. Se comparamos Galicia coas outras terras peninsulares, veremos
que nada debe nin ás xentes nin ás culturas do Sur. Escapou a semitización” 38.
El pensamiento racista desemboca, inevitablemente, en el desprecio y el odio por la
cultura “enemiga”, considerada inferior y cuyo contacto se cree pernicioso. Veamos, para
terminar con este breve ensayo, un de ejemplo que ilustra esta actitud. Es un fragmento
de Jaime Quintanilla, y se refiere en él a los “malos gallegos”, aquellos que no se ajustan
al modo galleguista de ver la patria:
“¿Coñocedes, meus amigos, a sintomatoloxía dos imbéciles? Unha das características
dos imbéciles é a súa facultade de reprodución, pero non teñen a de producir por sí
mesmos. (...)
Ven esto a conto de que na nosa raza hai unha chea deses pobres homes. Teñen os
pensamentos catalogados, como si foran frascos dunha botica. Viñéronlles de fora, de
Castela e de Madrid, e non saben pensar máis que cos pensamentos de Madrid e de
Castela”39.
Sin embargo, hay algo mucho pero que la agresividad que rezuma este texto. Algo
peor que el odio, y que el desprecio, algo que es, en mi opinión, la pero consecuencia de
las derivadas del nacionalismo, la que hace que sea peligroso que estos autores se
estudien –y se estudian– en las escuelas e institutos de Galicia, es la certidumbre que los
37
RISCO, Vicente, Teoría do nacionalismo gallego, Edición omaxe, cincuenteario da fundación das
Irmandades da Fala, Buenos Aires, 1966, pp. 22. (“Sea por la mejor adaptación a la tierra, sea por la
superioridad de la raza, lo cierto es que ni la infiltración románica ni la infiltración ibérica consiguieron
destruir el predominio del elemento rubio centroeuropeo en el pueblo gallego.” Traducción del Autor.)
38
OTERO PEDRAYO, Ramón, Ensaio histórico sobre a cultura galega, Vigo, Biblioteca da Cultura Galega,
1995., pp. 15-16. (“Pero no queremos comenzarlo sin indicar la individualidad de Galicia dentro de las
culturas peninsulares. No dudaremos en buscar su origen en un europeísmo superior. Si comparamos
Galicia con las otras tierras peninsulares, veremos que nada debe ni a las gentes ni a las culturas del Sur.
Escapó a la semitización.” Traducción del autor).
39
Citado en: Francisco FERNÁNDEZ RIEGO, Pensamento galeguista do século XX, op. cit., p. 103.
(“¿Conocéis, amigos míos, la sintomatología de los imbéciles? Una de las características de los imbéciles
es su capacidad de reproducción, pero no tienen la de producción por sí mismos. (...) Viene esto a cuento
de que en nuestra raza hay un montón de esos pobres hombres. Tienen los pensamientos catalogados,
como si fueran frascos de una botica. Les vinieron de fuera, de Castilla y de Madrid, y no saben pensar más
que con los pensamientos de Madrid y de Castilla.” Traducción del autor).
Ogigia. Revista electrónica de estudios hispánicos
58
autores nacionalistas tienen y transmiten de que es imposible el entendimiento entre las
diferentes culturas. “A mestizaxe das culturas, –dice Risco– destructor, esterilizador da
personalidade individual e colectiva, non pode darse máis que en pobos inferiores ou en
pobos decadentes —recaidos na inferioridade—“40. Y continúa, una decena de páginas
más adelante: “O odio de razas radica nun fondo da alma inatacable polo razoamento. É
un instinto”41. Otero Pedrayo escribió toda una novela, Arredor de sí42, para demostrar la
tesis de que las culturas son incomunicables. Dice su protagonista:
“Endexamais entenderei a España. Non serei nada nela. Levo un vivir de estudiante
aplicado e apaixonado, de pureza e honestidade mental. Fago o que podo mais
fóxeme a realidade do Misiticismo, dúrmome lendo a Calderón, sinto o mudéxar
ruinoso e queimado (...). Ou estou morto ou é a Iberia a que está morta. (…) De fixo
don Marcelino enganouse escribindo para tódolos españois. Quen non sexa castelán
non pode sentir a realidade e o imperio da tradición cultural que se chama española”43.
La lucha por entenderse es, por lo tanto, una lucha perdida. El mundo, para los
nacionalistas, se divide en compartimentos estancos. El objetivo principal de la cultura,
que no es otro que la comunicación, la interpretación del mundo, está abocado al fracaso,
siempre según el pensamiento reflejado por Risco, Otero Pedrayo y otros galleguistas en
los textos expuestos en este artículo.
La imagen que la literatura galleguista da de Castilla y España es sesgada, parcial,
deforme e injusta, basada en conceptos tan discutibles como el de superioridad racial o el
de pureza de sangre. Para el comportamiento nacionalista no importa la veracidad de un
argumento o una afirmación, sino su potencial mítico, su capacidad para transmitir
contenido emocional que favorezca la cohesión interna del grupo y su alejamiento de los
40
RISCO, Vicente, Mitteleuropa, Vigo, Galaxia, 1984, p. 289. (“El mestizaje de culturas, destructor,
esterilizador de la personalidad individual y colectiva, no puede darse más que en pueblos inferiores o en
pueblos decadentes –recaídos en la inferioridad–” Traducción del autor).
41
Ibídem, p. 299. (“El odio entre razas radica en un fondo del alma intocable por el razonamiento. Es un
instinto.” Traducción del autor).
42
43
OTERO PEDRAYO, Ramón, Arredor de sí, Vigo, Galaxia, 1991.
Ibídem, p. 89. (“Jamás entenderé a España. No seré nada en ella. Llevo una vida de estudiante aplicado
y apasionado, de pureza y honestidad mental. Hago lo que puedo, pero se me escapa la realidad del
Misticismo, me duermo leyendo a Calderón, siento el Mudéjar ruinoso y quemado. (...) O estoy muerto o es
Iberia la que está muerta. (...) Don Marcelino se engañó escribiendo para todos los españoles. Quien no sea
castellano no puede sentir la realidad y el imperio de la tradición cultural que se llama española”. Traducción
del autor.)
Miguel Salas Díaz
59
grupos “rivales”. Por lo tanto, y por muchos datos que se aporten para demostrar la
falsedad de la imagen que el nacionalismo gallego tiene de Castilla, es improbable que
esta cambie. No se puede combatir los argumentos emocionales con las pruebas de la
razón. Doscientos años de literatura nacionalista han creado un mito negativo alrededor
de Castilla: para los galleguistas, ella será siempre la culpable de todos los males que le
han sucedido, suceden y sucederán a Galicia.
60
Ogigia. Revista electrónica de estudios hispánicos
Miguel A. Martín Sanchez y Charo Nevado Fuentes
61
EN BUSCA DE UNA EXPLICACIÓN DIDÁCTICA DEL SUBJUNTIVO PARA
ESTUDIANTES DE ELE
Miguel A. Martín Sánchez y Charo Nevado Fuentes
(Universidad de Salamanca)
Resumen
La palabra subjuntivo no ha parado de generar dudas y problemas a los implicados
en el proceso de aprendizaje de ELE: docentes y discentes. Los unos y los otros han
mostrado interés y preocupación hacia este modo verbal. Los unos ante las dudas
surgidas para poder enseñar de la manera más eficaz posible estas estructuras
gramaticales; los otros, ante los problemas y dificultades que les genera unas estructuras
formales que en la mayoría de sus lenguas no existen. Analizar los problemas de la
mitificación del subjuntivo, revisar las formas de enseñarlo, y reflexionar sobre algunas
posibilidades didácticas para presentarlo en clase, es el objetivo de este trabajo.
Palabras Clave: Gramática – Subjuntivo – Problemas – Explicación - ELE
Abstract
The subjunctive word has not stopped to generate doubts and problems to the
implied ones in the process of ELE learning: teachers and students. And others have
shown to interest and preoccupation towards this verbal way. Before the arisen doubts to
be able to teach of the possible most effective way these grammar structures; the others,
before the problems and difficulties that generate formal structures to them that in most of
their languages do not exist. To analyze the problems of the myth of the subjunctive one,
to review the forms to teach it, and to reflect on some didactic possibilities to present/
display it in class, is the objective of this work.
Key Words: Grammar – Subjunctive – Problems – Explanation - ELE
Ogigia. Revista electrónica de estudios hispánicos
62
Introducción
Como profesores de ELE
sabemos, por experiencia, que la palabra subjuntivo
suscita en nuestros alumnos un gran interés en descubrirla y en adentrarse en ese
vocablo lleno de grandes usos aún por descubrir para ellos. Pero al mismo tiempo
provoca un gran temor, en los discentes de español como segunda lengua, por el gran
desconocimiento que tienen de este modo verbal así como por la gran mitificación que
hay en torno al subjuntivo, ya que no hay un único ámbito funcional, fácil de delimitar, al
que se vincule. Como dice Ignacio Bosque “el Subjuntivo es una enmarañada madeja
que, además está formada por múltiples hilos”1.
Los profesores de ELE tenemos el gran reto de desenmarañar esa gran madeja
explicando hilo por hilo de forma parcial y graduada, adaptándonos siempre al nivel de
nuestro grupo de alumnos. Conseguirlo será nuestro objetivo en nuestra tarea diaria que
intentaremos, de igual forma, plasmar en este artículo.
Es evidente que si un estudiante de ELE puede usar correctamente el subjuntivo,
será capaz de llevar a cabo un número importante de actos lingüísticos de diferente
naturaleza: podrá argumentar, rebatir opiniones, establecer hipótesis, expresar deseos,
expresar sentimientos, juzgar, valorar, describir objetos irreales, expresar planes de
futuro…
Cuando un alumno conoce y utiliza el subjuntivo con todo lo que ello conlleva, tendrá
una enorme capacidad lingüística y una gran competencia comunicativa en español.
No hay fórmulas mágicas que funcionen al cien por cien, pero sí algunas
recomendaciones que pueden ayudarnos en nuestro objetivo. En primer lugar, debemos
organizar nuestra práctica pedagógica de forma que las reglas gramaticales sean
sencillas y fáciles de comprender, esquemáticas y breves, presentadas de forma
deductiva o inductiva (como veremos posteriormente en otro punto). Tenemos que
olvidarnos, en la medida de lo posible, de las explicaciones lingüísticas de carácter
abstracto centrándonos sobre todo en contextos reales en los que posteriormente los
alumnos se van a desenvolver en situaciones cotidianas. Por otro lado, no tenemos
necesariamente que inducir al alumno a que generalice una regla general, sino que las
reglas sean aprendidas en su contexto sintáctico-semántico y pragmático. Y por último,
señalar que la selección y elección de las actividades llevadas al aula es fundamental
para conseguir la interiorización y utilización por parte del alumno de este gran tema que
estamos abordando.
1
BOSQUE, I., Bosque: Indicativo y subjuntivo, Madrid, Taurus, 1990.
Miguel A. Martín Sanchez y Charo Nevado Fuentes
63
Intentar que este cajón desastre en que muchas veces se ha convertido la
explicación y la utilización del subjuntivo se convierta en una serie de cajones ordenados
será nuestro gran desafío en este artículo.
La gramática del alumno
A la hora de plantear cualquier actividad relacionada con la enseñanza de ELE es
preciso tener en cuenta los destinatarios. Evidentemente no es lo mismo enseñar
gramática a alumnos hispanohablantes nativos, que enseñar a comunicarse a alumnos no
nativos. En el segundo caso, que es el que nos ocupa, el papel de la gramática está
supeditado a las funciones comunicativas, y por lo tanto la gramática no será un fin, sino
un medio para que los alumnos alcancen la competencia comunicativa.
Todos los alumnos de una L2, y en concreto de ELE, disponen de una gramática del
alumno, entendiendo por tal no los libros o materiales publicados, sino el conocimiento
gramatical que poseen, tanto explícito como implícito, en cada uno de los estadios de su
interlengua.
Uno de los conceptos clave en la adquisición de una L2 es el de la interlengua, y
ésta resulta determinante para la gramática del alumno. La interlengua hace referencia al
tipo de lengua de un estudiante de L2 que aún no ha terminado el proceso de aprendizaje
de dicha lengua, es decir el sistema que puede observarse en una fase concreta del
desarrollo de una L2, o en palabras de Marta Baralo la interlengua “constituye un sistema
lingüístico interiorizado, que evoluciona (...). Este sistema es diferente del de la lengua
materna (...) y del de lengua meta que se está aprendiendo; tampoco se puede considerar
como una mezcla de uno y de otro”2.
Los estudiantes de ELE persiguen, como objetivo principal y prioritario, alcanzar una
competencia comunicativa, expresarse, comprender, comunicarse en definitiva (con todo
lo amplio del término), y para ello, y como parte integrante de la competencia
comunicativa, necesitan dominar la subcompetencia gramatical. Siguiendo las ideas de
Canale y Swain, la enseñanza-aprendizaje de ELE debe atender a la enseñanza de la
2
BARALO, M., Teorías de adquisición de lenguas extranjeras y su aplicación a la enseñanza del español.
Colección Experto en Enseñanza del Español como Lengua Extranjera, Madrid, Fundación Antonio de
Nebrija, 1998, p. 68.
Ogigia. Revista electrónica de estudios hispánicos
64
competencia comunicativa, entendiendo ésta como una gran macrocompetencia
compuesta por varias subcompetencias3.
La subcompetencia gramatical estaría conformada por el conocimiento del código
lingüístico, del léxico, las reglas de la morfología y la sintaxis, pronunciación y ortografía.
Y para alcanzar esta subcompetencia, los estudiantes que están aprendiendo una L2, en
nuestro caso español, deben dominar tres aspectos fundamentales: la forma, el uso y el
significado. Todos estos componentes forman la denominada gramática del alumno.
Los estudiantes de ELE disponen de dos tipos de conocimientos gramaticales:
conocimiento gramatical explícito, que adquieren conscientemente, a través de una
instrucción gramatical; y el conocimiento gramatical implícito, que se trata de un
conocimiento gramatical de carácter intuitivo, inconsciente. Para alcanzar la competencia
comunicativa en ELE, los estudiantes deberán contar con ambos tipos de conocimientos
gramaticales.
La gramática del alumno no es estática, no se mantiene inamovible, sino que
evoluciona, al igual que su interlengua, según evoluciona su conocimiento de la L2. Así, a
medida que los alumnos aprenden y aumentan su conocimiento de la lengua meta, la
gramática del alumno aumenta progresivamente, por supuesto que mediante el trabajo y
el estudio, apoyado, guiado y conducido por el profesor de ELE, coprotagonista del acto
didáctico.
La gramática del alumno se construye a través de actividades de diferente tipo, y
que persiguen diferentes objetivos. A la hora de programar una clase de ELE, el profesor
programador debe seleccionar unos contenidos, secuenciarlos, elaborar unas actividades,
todo ellos orientado a conseguir unos objetivos comunicativos 4.
Desde la perspectiva metodológica de los enfoques comunicativos, y más
concretamente desde le Enseñanza de la Lengua Mediante Tareas (ELMT) o enfoque por
3
Desde la lingüística aplicada, Canale y Swain y más tarde Canale expresan que la competencia
comunicativa es una macrocompetencia compuesta por cuatro microcompetencias o subcompetencias, las
cuales se refieren al conocimiento del código lingüístico, la sintaxis y la semántica en el nivel de la
gramática, de la oración, de la fonología (competencia gramatical); al modo en que se combinan formas
gramaticales y significados para lograr un texto trabado, hablado o escrito en diferentes géneros
(competencia discursiva); a las reglas sociales (competencia sociolingüística); y al dominio de las
estrategias de comunicación verbal y no verbal que pueden utilizarse para favorecer la efectividad de la
comunicación (competencia estratégica). Cf.: CANALE, M. y SWAIN, M., “Theoretical bases of
communicative approaches to second language teaching and testing”, en Applied Linguistics, Vol. I, 1980,
pp. 1-47; CANALE, M., “From a comunicative competence to comunicative Language pedagogy”, en
RICHARDS y SMITH, Language and comunication, Londres, Longman, 1983, pp. 2-27.
4
La programación es fundamental en todo proceso educativo. Más información acerca de la programación
de la clase de ELE puede consultarse en MARTÍN SÁNCHEZ, M. A., “Aspectos didácticos básicos de la
programación de la clase de ELE” en Frecuencia L, 30, 2005, pp. 54-57.
Miguel A. Martín Sanchez y Charo Nevado Fuentes
65
tareas5, las actividades serán las herramientas para construir esa gramática del alumno, y
así el profesor debe presentar los contenidos gramaticales supeditados a las funciones
comunicativas. Para construir esa gramática del alumno, el profesor de ELE utilizará
diferentes actividades con diferentes objetivos, presentando a los alumnos actividades
con el foco en la forma, con el foco en el uso, y con el foco en la forma y en el uso al
mismo tiempo que, desde una perspectiva comunicativa son, en nuestra opinión, las más
eficaces para conseguir nuestros objetivos comunicativos.
La gramática mostrada y presentada en la clase de ELE tiene que tender a unos
criterios funcionales, útiles para los estudiantes. No se trata por tanto de enseñar
conceptualizaciones de subjuntivo u otros aspectos gramaticales, sino la forma y el uso
para que los estudiantes puedan utilizarlo y comunicarse en español. Por lo tanto, la
presentación de un determinado contenido gramatical estará supeditada a la
funcionalidad y relevancia que dicho contenido tiene para la comunicación del estudiante
no nativo.
A continuación analizaremos brevemente algunas cuestiones didácticas relevantes
que todo profesor de ELE debe tener en cuenta a la hora de presentar la gramática a sus
estudiantes.
La enseñanza de la gramática
Retomando lo dicho hasta el momento, y teniendo en cuenta por tanto que la
enseñanza de la gramática es imprescindible en la clase de ELE, es hora de abordar el
cómo vamos a enseñar la gramática. La consideración de una serie de actividades y
planteamientos y su integración en un acto didáctico constituye el cómo enseñar. El
diseño del acto didáctico que vamos a desarrollar con los alumnos exige una serie de
decisiones: cómo establecer el contacto con los discentes, hacer interesante el tema,
motivar a los estudiantes, qué lenguaje voy a utilizar en clase (verbal, icónico, simbólico),
cómo voy a ordenar las actividades a realizar y qué secuencia voy a seguir en la
enseñanza6.
En el momento de programar las clases, el profesor tiene que plantearse qué
actividades y cosas podría hacer para que los alumnos aprendan de una forma más fácil,
5
Un interesante trabajo acerca de la ELMT es el de Sheila Estaire. Cf. ESTAIRE, S., Tareas para hacer
cosas en español: Principios y práctica de la enseñanza de lenguas extranjeras mediante tareas, Madrid,
Universidad Antonio de Nebrija, 1999.
6
RODRÍGUEZ DIÉGUEZ, J. L., “Los componentes del currículo” en SÁENZ BARRIO, O. (Dir.), Didáctica
General. Un enfoque curricular, Alcoy, Marfil, 1994, pp. 155-174.
Ogigia. Revista electrónica de estudios hispánicos
66
divertida y eficaz. No se trata de seleccionar únicamente los contenidos gramaticales, sino
que hay que establecer las estrategias de enseñanza. Una estrategia de enseñanza es,
básicamente, una secuencia de actividades que el profesor decide como pauta de
intervención en el aula7 .
El profesor de ELE a al hora de programar la gramática en sus clases deberá tener
en cuenta algunas cuestiones. Evidentemente, lo deseable sería contar con un profesor
programador, experto, que contara con la formación didáctica y la experiencia necesaria
para programar adecuadamente una clase de ELE, y no con un profesor programado, que
copia las programaciones de otros o que sigue, año tras año, con la misma programación.
Desde una perspectiva más acertada y profesional, opinamos que el profesor debe ser
programador, y a la hora de preparar una clase debe tener en cuenta los objetivos
comunicativos pretendidos. Supeditados a estos objetivos y funciones comunicativas
vendrán la selección de contenidos (gramaticales, léxicos, funcionales y socioculturales),
la selección de actividades y la evaluación.
Cuando programamos una clase de ELE, sea del nivel que sea, y tenga la
especialidad que tenga, la gramática está presente. Lo realmente importante que debe
tener en cuenta un profesor a la hora de programar sus clases en relación con la
gramática, es que ésta nunca se enseña de forma aislada, sino en contextos concretos,
en situaciones prácticas, presentando los contenidos gramaticales en función de los
objetivos comunicativos. Por lo tanto, lo primero que se tiene que hacer es seleccionar los
contenidos funcionales, y después el resto, entre ellos los contenidos gramaticales.
La gramática debe enseñarse a través de una serie de actividades que permitan al
estudiante tomar conciencia de los contenidos y la utilidad y necesidad comunicativa de la
situación. Consideramos que a través de actividades de diferente naturaleza, con
muestras reales de lengua, prácticas controladas y prácticas libres (secuencia PPP), la
enseñanza de la gramática se revela más efectiva, tanto en los enfoques deductivos,
inductivos o mixtos.
La secuencia PPP8 permite, a través de la presentación de muestras reales de
lengua, observar en contextos y situaciones comunicativas concretas, los contenidos
gramaticales a tratar, tanto en lo referente a la forma, al uso y al significado. Mediante las
7
8
Ibídem, p. 168.
Se trata de una estructuración tradicional de la clase dentro del Enfoque Comunicativo. La secuencia PPP
divide el proceso de enseñanza en tres fases: presentación, práctica y producción. Más información en
BYRNE, D., Teaching Oral English, Harlow, Longman, 1976.
Miguel A. Martín Sanchez y Charo Nevado Fuentes
67
prácticas controladas, se presentan actividades (siempre comunicativas y significativas)
para que los alumnos trabajen con la forma y el uso, así como con el significado que el
profesor ha seleccionado. Por último, las actividades y prácticas libres permiten a los
estudiantes aplicar e integrar los nuevos contenidos aprendidos, de manera que mediante
una interacción entre todos ellos practicarán las diferentes destrezas y asimilarán los
contenidos gramaticales presentados. Ahora bien, desde una perspectiva actual, no debe
considerarse la secuencia PPP como la única posible para presentar la gramática en
clase, ya que evidentemente esta secuencia didáctica muestra algunas deficiencias9. Con
el ELMT se busca mayor creatividad en la producción, y aunque muchos autores
consideran que ambas propuestas son incompatibles, la verdad es que no existe una
incompatibilidad intrínseca entre ambas propuestas. Pero de todos modos, se adopte la
secuencia que se adopte, ésta deberá ser flexible y dependerá de factores como el
contexto de aprendizaje, la competencia lingüística del profesor, su experiencia, los
objetivos o los estilos de aprendizaje de los alumnos, entre otros.
En conclusión, la enseñanza de la gramática en una clase de ELE debe atender al
uso de la lengua, con una organización funcional, presentar muestras reales y
contextualizadas, establecer una gradación de los contenidos, seguir una enseñanza
cíclica, no presuponer conocimientos previos de los alumnos (sobre todo es muy
importante tener en cuenta que nuestros alumnos no tienen por qué conocer el
metalenguaje) y por último, ser claros y precisos, para no provocar errores y confusiones
en nuestros estudiantes.
La “mitificación” del subjuntivo
Todo profesor de ELE ha tenido que enseñar, en algún momento de su carrera, el
subjuntivo. Y no es tarea fácil. Nos encontramos ante uno de los contenidos gramaticales
más complicado, necesario, y a la vez más temido. A lo largo de nuestra carrera docente
hemos escuchado muchas definiciones de subjuntivo por parte de nuestros estudiantes:
el infierno, la tortura, el terror, otros lo consideran la medicina y el remedio a todos los
males, otros piensan que utilizándolo demostrarán un mejor dominio del español..., pero,
9
Algunos autores como Byrne ya indican que la secuencia puede detenerse en la fase práctica; otros hacen
hincapié en la “ilusión de corrección” de la secuencia PPP, ya que la corrección en el aula en muchas
ocasiones se tornaba en incorrección, bien en situaciones artificiales dentro del aula, bien en situaciones
reales fuera de la misma en la que los alumnos son incapaces de utilizar las estructuras aprendidas. Vid.
BYRNE, D, op. cit.
Ogigia. Revista electrónica de estudios hispánicos
68
en definitiva, todas estas posturas ante el subjuntivo tienen un denominador común: la
“mitificación” de este modo verbal.
El subjuntivo, es evidente y no vamos a descubrir nada nuevo, suscita en los
estudiantes de ELE cierta ansiedad, derivada en parte por la dificultad de la modalidad en
español. Hay que tener presente, cuando analizamos las dificultades de aprendizaje de
alumnos no nativos, que este modo no existe en muchas de las lenguas nativas de estos
estudiantes10. Ingleses, alemanes, holandeses..., encuentran importantes dificultades a la
hora de usar el subjuntivo precisamente (además de por otros factores) porque no
encuentran un equivalente en su lengua, y como dice Lourdes Miquel, muchas veces
pensamos en una lengua, y hablamos en otra11. He aquí uno de los problemas.
Tradicionalmente se ha venido presentando el subjuntivo en base a explicaciones
confusas o demasiado “sesudas” a las que un alumno no nativo no tiene acceso, salvo
lógicamente en casos de una instrucción lingüística y formal muy profunda. La experiencia
nos dice que la mayoría de los estudiantes de ELE no disponen de un conocimiento
gramatical exhaustivo, por lo que en muchos casos las explicaciones tradicionales en
referencia a la subjetividad, la irrealidad, la aserción, la información conocida o no
conocida, y la información relevante, por citar algunos ejemplos clásicos, resultan, en
muchos casos, muy confusas y poco efectivas, ya que, he aquí otro problema, transmitir a
estudiantes no nativos los conceptos de subjetividad, irrealidad, aserción, etc, es muy
complicado y va, normalmente, acompañada del fracaso.
Otro problema que “mitifica” el subjuntivo es recurrir a explicaciones siguiendo el
criterio sintáctico, ya que en la mayoría de los casos los estudiantes no dominan, ni el
metalenguaje ni las estructuras gramaticales, ni siquiera en su propia lengua materna. Por
lo tanto, de nada sirve partir de un criterio sintáctico cuando nuestros alumnos no saben
qué es la subordinación, o incluso en casos más complejos como la pragmática donde
juega un papel importante el uso de la lengua y conceptos muy abstractos.
La solución a todos estos problemas es, en nuestra opinión, presentar el subjuntivo
con una organización funcional y recurrir a explicaciones próximas al uso, donde los
discentes puedan experimentar por sí mismos las diferentes utilidades del subjuntivo,
10
A este respecto afirma José Plácido Ruiz que no es del todo cierto que no exista el subjuntivo en otras
lenguas, al menos en sentido representacional, ya que todo aquello que queremos expresar en español
utilizando el subjuntivo “existe de un modo u otro en la conciencia de los hablantes de cualquier lengua”. Cf.
RUIZ CAMPILLO, J. P., “ El subjuntivo es lógico: una actividad de concienciación”, en REDELE, nº 1, 2004,
www.mec.es/redele/revista1/pfds1/placido.pdf
11
MIQUEL, L., “Lengua y Cultura desde una perspectiva pragmática: algunos ejemplos aplicados al
español”, en Frecuencia L, Nº 5, 1997, pp. 3-13.
Miguel A. Martín Sanchez y Charo Nevado Fuentes
69
desterrando de una vez por todas las explicaciones tradicionales basadas en las formas, y
presentando muestras reales en las que mediante la secuencia PPP nuestros alumnos
puedan ir viendo, de manera funcional y cíclica, el subjuntivo con un objetivo
comunicativo, dirigido al uso de la lengua.
En busca de una explicación del subjuntivo
Como docentes de ELE tenemos que tener siempre presente, en nuestra labor
didáctica, que formar hablantes competentes en una segunda lengua, en nuestro caso el
español, implica no sólo que dominen aisladamente las estructuras gramaticales de un
idioma, sino también que las sepan articular en un discurso interactivo y que sepan
utilizarlas de manera apropiada a los fines que el hablante intenta conseguir y al contexto
social en el que emite sus enunciados12.
A la hora de abordar el estudio y la práctica de la gramática, y en concreto del
subjuntivo, es fundamental conjugar las teorías lingüísticas con las aportaciones
pedagógicas y metodológicas13.
En primer lugar, hay que señalar que cuando los docentes de ELE nos encontramos
en nuestras clases con el temido tema del subjuntivo, tenemos que desmitificar las
dificultades que se le atribuyen a este tema y buscar trucos o recetas caseras que nos
ayuden a conseguir nuestro objetivo: que los estudiantes de ELE utilicen el subjuntivo en
diferentes contextos de la vida diaria.
Para conseguir este gran logro son importantes las reglas gramaticales14, ya que
facilitan en gran medida la generalización, facilitan asimismo la transferencia a otras
situaciones y permiten la autocorrección. Explicar gramática por lo tanto es necesario,
pero cómo explicarla es el tema que nos aborda. Sabemos que en la explicación del
subjuntivo, muchas veces se ha recurrido a grandes reglas para explicar la diferencia
entre indicativo o subjuntivo, entendiéndose como tal lo irreal o lo real. El éxito o el
12
En este campo destacan los diferentes trabajos de Francisco Matte Bon, MATTE BON, F., “Gramática y
gramática para comunicar”, en Informe del seminario taller N_15 del Consejo de Europa, Estrasburgo,
Consejo de Europa, 1988; MATTE BON, F., “La gramática en un enfoque comunicativo”, en Actas de las
Jornadas Internacionales de Didáctica del Español como lengua extranjera, Madrid, Ministerio de Cultura,
1997.
13
En esta línea se desarrolla el trabajo de Liceras; LICERAS, J.M., La adquisición de las lenguas segundas
y la gramática universal, Madrid, Síntesis, 1996.
14
A este respecto, Ellis señala en su trabajo que “la docencia fracasa a menudo en proporcionar la
adquisición de nuevas estructuras lingüísticas; sin embargo, la docencia permite un aprendizaje más rápido
y con unos resultados de competencia más altos”. ELLIS, R., The Study of Second Language Acquisition,
Londres, Longman, 1995, p. 196.
Ogigia. Revista electrónica de estudios hispánicos
70
fracaso está en la presentación de la estructura, las reglas tienen que ser esquemáticas,
simples y fáciles de interiorizar por parte del alumno, para que permitan a la vez ser
reproducidas y reconocidas en contextos reales. Las reglas del subjuntivo deben ser
rentables15.
Estas reglas gramaticales que vamos a utilizar en nuestras explicaciones del
subjuntivo, estarán estrictamente relacionadas y supeditadas a los objetivos funcionales
que pretendemos conseguir.
De este modo, empezaremos por reglas sencillas enmarcadas en contextos y
situaciones reales, siempre teniendo en cuenta que las reglas irán aumentando de
dificultad en la misma medida que aumenta el nivel de nuestros alumnos, pero nunca sin
perder su eficacia tanto dentro del aula como posteriormente fuera de ella.
Al desengranar los diferentes usos del subjuntivo, las reglas que vamos a presentar
a nuestros alumnos tienen que tener las siguientes características: rentables, es decir,
claras y contextualizadas; lo más generales posibles y no contradictorias, con el fin de
simplificar y no sembrar la duda.
Partiendo de esos planteamientos podemos empezar elaborando nuestras propias
reglas del subjuntivo como mostramos a continuación:
Frases
hechas:
cuando estamos
comiendo: ¡Que aproveche!
cuando vamos a dormir: ¡Que descanses!
cuando vamos de viaje: ¡Que tengas buen viaje!
cuando vamos de fiesta: ¡Que lo pases bien!
Expresar deseos: ojalá + subjuntivo
quiero + que + subjuntivo
USOS DEL SUBJUNTIVO
Recomendar: te aconsejo que
te recomiendo que
es bueno que
+ subjuntivo
es necesario que
es conveniente que
…
Expresar planes de futuro: cuando + subjuntivo + futuro
Expresar finalidad: para que + subjuntivo
Describir objetos que deseamos: quiero + sustantivo + que + subjuntivo
Valorar: Me parece bien/mal + que + subjuntivo
15
Como dice Concha Moreno: “se entiende por rentabilidad, el hecho de conseguir grandes resultados con
un mínimo esfuerzo”. MORENO, C., “Gramática y contexto. La estructura y el significado”, en Actas de las
Jornadas de Expolingua, Madrid, 1999, p. 197.
Miguel A. Martín Sanchez y Charo Nevado Fuentes
71
En esta búsqueda de explicaciones o reglas útiles y eficaces desempeña un papel
importante el análisis contrastivo, por dos tipos de razones: por una parte ayuda a
entender los errores de los alumnos. Por otra, ayuda a entender el funcionamiento del
idioma estudiado. En este tema podemos incluir como ejemplos, las reglas de los verbos
de opinión o las reglas de las oraciones de relativo.
Creo que + Indicativo
No creo que + Subjuntivo
* ¿Indicativo?
Tengo + sustantivo + que + Indicativo (objeto ya conocido)
Quiero + sustantivo + que + Subjuntivo (objeto todavía no conocido)
De esta forma iremos creando nuestras propias reglas del subjuntivo que iremos
adaptando al nivel de los alumnos, reglas que vamos a ir ampliando progresivamente de
acuerdo con los objetivos perseguidos en nuestra programación.
A la vez que damos reglas, la ejemplificación es importante, y es fundamental
enmarcarla con ejemplos reales en los que los mismos alumnos pueden ser partícipes o
convertirlos en protagonistas en los ejemplos que los profesores utilizan en sus
presentaciones.
Podemos resumir este punto con las características que creemos tiene que tener
una eficaz explicación del subjuntivo que, por supuesto, se pueden trasladar a otros
ámbitos de la gramática:
· Conocer los destinatarios y adaptar las explicaciones a sus necesidades.
· Atender a los diferentes niveles de los alumnos.
· La claridad debe presidir las explicaciones.
· Favorecer la construcción creativa de la lengua.
· Proporcionar inputs ricos y variados.
· Proporcionar práctica adecuada y contextualizada (tema que abordaremos en el
siguiente punto).
Propuesta didáctica para la explicación del subjuntivo
En la explicación del subjuntivo, como hemos visto en el apartado anterior, los
recursos gramaticales son necesarios para que la comunicación sea lo más correcta,
adecuada y rica posible, pero esto no es suficiente en el aprendizaje de lenguas, ofrecer
Ogigia. Revista electrónica de estudios hispánicos
72
actividades variadas, atractivas y contextualizadas, es la otra gran parte de nuestra labor
docente para así potenciar la comunicación. Por este motivo, en este punto nos vamos a
ocupar de la práctica y la producción.
En la elaboración y puesta en práctica de nuestras propuestas didácticas tenemos
que tener siempre presente el hecho de que no todos los alumnos aprenden igual, que
existen diversas capacidades y diversos estilos de aprendizaje.
Esto implica la elaboración de presentaciones deductivas, presentaciones
inductivas, presentaciones que requieran en ocasiones una reflexión sobre la lengua y
presentaciones que requieran
un aprendizaje más mnemónico o más visual. Cada
estudiante es un mundo y cada tipo de actividad deberá adaptarse al perfil del discente.
Puesto que existe la posibilidad de que el conocimiento se automatice más
fácilmente a través de la contextualización y de la atención a los aspectos culturales,
deberemos
proporcionar contextos ricos y adecuados para los diferentes usos del
subjuntivo, entendiendo por contexto mucho más que una mera ejemplificación. Las
reglas del subjuntivo deben mostrar el contenido en todo su uso, en toda su viveza, a
través de actividades no ambiguas que favorezcan la reflexión por parte del alumno sin
exponerlo a un esfuerzo adicional. Las diferentes propuestas didácticas que podemos
plantearnos pueden ser desde diálogos hasta breves muestras de lengua adaptadas al
nivel del alumno.
Debemos conseguir una interacción real, hacer que el alumno interactúe con el
propio material de trabajo proporcionando práctica adecuada y contextualizada.
Son diversas las actividades que podemos proponer en el aula para trabajar los
diferentes usos del subjuntivo, a continuación mostramos algunas de ellas que pueden
servir como ejemplos y que en cualquier caso pueden ser adaptadas o modificadas
dependiendo del grupo, del nivel o de los intereses de los propios alumnos.
Si partimos de la deducción como método de trabajo serán buenas todas aquellas
actividades de elección entre indicativo y subjuntivo; las oraciones de relativo, los verbos
de opinión y las oraciones concesivas pueden servirnos como modelos en este tipo de
actividades.
En las oraciones de relativo podemos comparar mediante diferentes
actividades (pueden ser imágenes, textos escritos o producciones orales) los objetos que
tenemos y los que necesitamos. Así mismo algunos extractos sobre diferentes temas de
opinión los podemos utilizar para analizar la diferencia entre los verbos de opinión según
vayan
en afirmativo o negativo. Interpretaciones de datos estadísticos o imágenes
enmarcadas en un contexto claro nos servirán para observar la diferencia entre aunque +
Miguel A. Martín Sanchez y Charo Nevado Fuentes
73
indicativo/subjuntivo. En este tipo de actividades, serán los propios alumnos los que a
través de la observación llegarán a establecer sus propias reglas gramaticales.
Entre las muestras reales de lengua, las recetas de cocina nos servirán para
practicar cuando + subjuntivo + imperativo (“cuando el aceite esté caliente, pon las
patatas”). Diferentes tipos de diálogos los podemos utilizar para reservar una habitación
en un hotel, para comprar ropa en una tienda, para pedir algo en un restaurante…, los
alumnos estarán observando(mediante una lectura) o escuchando (mediante una
audición) para posteriormente ser ellos mismos los que reproduzcan la estructura quiero/
necesito/busco + sustantivo + que + subjuntivo (“quiero una habitación que sea doble”).
En los periódicos podemos seleccionar artículos de opinión, anuncios breves,
interpretación de datos estadísticos, cartas de reclamaciones o protesta que nos
permitirán practicar los verbos de opinión, la valoración, las oraciones de relativo, las
oraciones concesivas o las expresiones de protesta. Con las descripciones del
funcionamiento de algún dispositivo estaremos practicando las oraciones temporales con
subjuntivo. Las recetas caseras que podemos leer en algunas revistas las podemos
utilizar para practicar las oraciones finales (“para que el pelo quede más brillante lávalo
con agua fría en el último aclarado”).
Cuando el objetivo que perseguimos es la práctica y la producción de una estructura
presentada a través de la inducción, son muy positivas aquellas actividades que tienen
como protagonistas a los mismos estudiantes, poniendo de relieve y aprovechando sus
propias experiencias. Como ejemplos de este tipo de actividades, podemos practicar las
expresiones
de
recomendación
utilizando
el
subjuntivo
para
que
nos
hagan
recomendaciones (para viajar a sus países, practicar el idioma español, visitar su
ciudad…). En cuanto a expresar deseos (deseos para ellos mismos, deseos para sus
compañeros, deseos para el mundo…). Las oraciones temporales con subjuntivo (planes
de futuro para ellos mismos, una receta de comida típica de su país…). Las oraciones
finales (recetas caseras que conocen y utilizan en sus países).
Estos son sólo algunos ejemplos de propuestas didácticas que podemos llevar al
aula de ELE para practicar el subjuntivo que seguro se pueden ampliar, modificar y
mejorar para conseguir que los estudiantes de ELE dominen y utilicen este nuevo modo
verbal que tan desconocido resultaba para ellos.
Para concluir
Ogigia. Revista electrónica de estudios hispánicos
74
A lo largo de las páginas precedentes hemos estado comentando y reflexionando
acerca de la conveniencia y modo de presentar el subjuntivo a nuestros estudiantes de
ELE. Como hemos indicado, la presencia de la gramática se antoja imprescindible, y
aunque la dimensión pragmática y sociopragmática son las más complicadas de enseñar,
la subcompetencia gramatical debe estar supeditada a ellas, es decir, debemos enseñar
la gramática con fines comunicativos, con objetivos funcionales, entendiendo la
enseñanza de la lengua centrada en el uso y el contexto. Así, debemos desterrar de una
vez por todas las explicaciones tradicionales y magistrales del subjuntivo focalizadas en la
forma y plantear actividades y explicaciones que ayuden al estudiante de ELE a
interiorizar y utilizar este modo real en su proceso de adquisición de la L2. La reflexión
sobre todas estas cuestiones ha sido el objetivo y la finalidad de este pequeño trabajo.
Nuestra intención no era otra que provocar la conciencia para que cada docente sea
consciente del proceso de enseñanza del subjuntivo en sus clases. Si al menos hemos
suscitado la reflexión, nos habremos dado por satisfechos.
BIBLIOGRAFÍA
BARALO, M., Teorías de adquisición de lenguas extranjeras y su aplicación a la
enseñanza del español. Colección Experto en Enseñanza del Español como Lengua
Extranjera, Madrid, Fundación Antonio de Nebrija, 1998.
BOSQUE, I., Indicativo y subjuntivo, Madrid, Taurus, 1990.
BYRNE, D., Teaching Oral English, Harlow, Longman, 1976.
CANALE, M. y SWAIN, M., “Theoretical bases of communicative approaches to
second language teaching and testing”, en Applied Linguistics, Vol. I, 1980, pp. 1-47.
CANALE, M., “From a comunicative competence to comunicative Language
pedagogy”, en RICHARDS y SMITH, Language and comunication, Londres, Longman,
1983, pp. 2-27.
ELLIS, R., The Study of Second Language Acquisition, Londres, Longman, 1995.
ESTAIRE, S., Tareas para hacer cosas en español: Principios y práctica de la
enseñanza de lenguas extranjeras mediante tareas, Madrid, Universidad Antonio de
Nebrija, 1999.
LICERAS, J.M., La adquisición de las lenguas segundas y la gramática universal,
Madrid, Síntesis, 1996.
MARTÍN SÁNCHEZ, M. A., “Aspectos didácticos básicos de la programación de la
clase de ELE”, en Frecuencia L, 30, 2005, pp. 54-57.
Miguel A. Martín Sanchez y Charo Nevado Fuentes
75
MATTE BON, F., “Gramática y gramática para comunicar”, en Informe del seminario
taller N_15 del Consejo de Europa, Estrasburgo, Consejo de Europa, 1988, pp. 36-39.
MATTE BON, F., “La gramática en un enfoque comunicativo”, en Actas de las
Jornadas Internacionales de Didáctica del Español como lengua extranjera, Madrid,
Ministerio de Cultura, 1997, pp. 75-81.
MIQUEL, L., “Lengua y Cultura desde una perspectiva pragmática: algunos ejemplos
aplicados al español”, en Frecuencia L, Nº 5, 1997, pp. 3-13.
MORENO, C., “Gramática y contexto. La estructura y el significado”, en Actas de las
Jornadas de Expolingua, Madrid, 1999, pp. 195-211.
RICHARDS y SMITH, Language and comunication, Londres, Longman, 1983.
RODRÍGUEZ DIÉGUEZ, J. L., “Los componentes del currículo” en SÁENZ BARRIO,
O. (Dir.), Didáctica General. Un enfoque curricular. Alcoy, Marfil, 1994, pp. 155-174.
RUIZ CAMPILLO, J. P., “El subjuntivo es lógico: una actividad de concienciación” en
REDELE, nº 1, 2004. (www.mec.es/redele/revista1/pfds1/placido.pdf).
SÁENZ BARRIO, O. (Dir.), Didáctica General. Un enfoque curricular, Alcoy, Marfil,
1994.
76
Ogigia. Revista electrónica de estudios hispánicos
Eleni Leontaridi, Natividad Peramos Soler , Marina Ruiz Morales
77
AMISTADES PELIGROSAS:
UNA APROXIMACIÓN TEÓRICA Y UNA CLASIFICACIÓN PRÁCTICA DE LOS
FALSOS AMIGOS ENTRE EL ESPAÑOL Y EL GRIEGO MODERNO.
Eleni Leontaridi, Natividad Peramos Soler, Marina Ruiz Morales
(Universidad Aristóteles de Tesalónica)
Resumen
Aunque el griego y el español pertenecen a familias distintas, llama la atención el
alto grado de coincidencias a nivel fonológico y morfológico. Este trabajo se centra en un
aspecto de esta relación, el que tiene que ver con los falsos amigos. A grandes rasgos, el
término hace referencia a palabras de dos idiomas que presentan afinidad morfológica
pero, a la vez, divergencia semántica. Muchos de los falsos amigos se deben a una
etimología común que ha derivado en significados distintos en cada lengua, otros
simplemente a una coincidencia a nivel de pronunciación o de grafía. Después de pasar
revista
por
distintas
aproximaciones
al
fenómeno,
se
presentarán,
de
forma
esquematizada, casos de falsos amigos entre el español y el griego moderno, pues
creemos que una presentación de este tipo puede resultar ser una herramienta útil en el
proceso de aprendizaje de la lengua extranjera.
Palabras clave: falso amigo - falso cognado – español- griego moderno enseñanza de ELE
Abstract
Although Spanish and Modern Greek belong to different linguistic families, the
number of coincidences they present at phonological and morphological level is very high.
This study focuses in one aspect of this relation, namely the case of false friends.
Generally speaking, the term refers to words of different languages that present
morphological affinity but, at the same time, semantic divergence. In some cases, many of
those false friends share the same etymology, which eventually, has generated different
meanings in each language; in other cases we are just dealing with a simple phonetic o
written coincidence. After examining various approaches to the phenomenon, a summary
of false friends between Spanish and Greek will be presented, since we believe a practical
Ogigia. Revista electrónica de estudios hispánicos
78
approach of this kind can constitute a useful tool for the teacher, as well for the student of
a foreign language.
Keywords: false friends - dales cognate – Spanish - Modern Greek - SFL teaching
Introducción
Un fenómeno que es advertido a menudo por los profesores y los alumnos de una
lengua extranjera, pero también por personas que hablan más de un idioma, tiene que ver
con ejemplos de lo que se llama “falsos amigos”. La nomenclatura viene a variar, de forma
que también se usan nombres como “calcos léxicos”, “parónimos interlingüísticos” -éste
último usado por Polo1-, etc. El término falsos amigos constituye traducción del término
francés faux-amis2 y fue usado por primera vez en 1928 por Koessler y Derocquigny en su
obra bajo el título característico Les faux-amis ou les trahisons du vocabulaire anglais3. A
grandes rasgos, el término hace referencia a palabras de dos idiomas que presentan
afinidad morfológica pero, a la vez, divergencia semántica:
1 POLO
POLO, José, “Treinta años después, complementos a una sección hispano-francesa de parónimos
interlingüísticos”, en Cauce: Revista de filología y su didáctica, 29, 2006, pp. 347-358.
2
En italiano e inglés se usan también falsi amici y false friends respectivamente.
3
Véase Falso amigo (de Wikipedia, la enciclopedia libre), en http://es.wikipedia.org/wiki/Falso_amigo
(acceso 8/6/2007), sin fecha. En la misma fuente se pueden consultar muchos ejemplos de falsos amigos
entre el español y el inglés/ francés/ portugués/ italiano/ alemán/ vasco/ catalán y otros idiomas. Por citar
algunos:
FALSOS AMIGOS ENTRE EL ESPAÑOL Y VARIOS IDIOMAS
expresión no
se parece a la expresión
para el significado del
lengua
pero significa
española
española
español se utilizaría
aldea
vascuence
aldea
el lado
herrixka
ambulanz
alemán
ambulancia
consulta externa
rettungswagen
ano
checo
ano
sí
řiť
nombre
catalán
nombre
número
nom
Да (da)
ruso
da
sí
там
granatowy
polaco
granate
azul marino
szkarłatny
klavo
esperanto
clavo
tecla
najlo
niño
gallego
niño
nido
neno
prima
alemán, holandes
prima
estupendo
kusine, nicht
putus
latín
puto
muchacho
-
refräng
sueco
refrán
estribillo
ordspråk
tu
serbocroata
tú
allí
-
vos
neerlandés
vos
zorro
je / jij
Eleni Leontaridi, Natividad Peramos Soler , Marina Ruiz Morales
79
«I falsi amici sono le parole di due lingue che si assomigliano nella maniera in cui sono
scritte ma che hanno un senso diverso. [...] Per esempio, in spagnolo esiste il verbo
andar che assomiglia al verbo italiano andare. Tuttavia, i loro sensi sono diversi: andar
dovrà essere reso in italiano come camminare mentre andare sarà tradotto in
spagnolo come ir» 4.
Otro ejemplo de falsos amigos entre el español y el italiano, sería la palabra burro,
que en español significa asno mientras que en italiano significa mantequilla. La palabra
española hija en griego significa ‘tenía’ (είχα /íja/), que a su vez en griego significa
‘película’ (ταινία /tenía/). Un periódico en griego no es ‘periódico’ (éste sería εφημερίδα /
efimerída/) sino ‘revista’. Para dar más ejemplos, falsos amigos entre el español y el
inglés y el francés respectivamente serían5 : actual (real, efectivo, no actual), consistent
(compatible, no consistente), constipation (estreñimiento, no constipación), library
(biblioteca, no librería), severe (grave, no severo), success (éxito, no suceso), exit (salida,
no éxito); armée (ejército, no armada), équipage (tripulación, no equipaje), fatigue
(desgaste, no fatiga), manche (manga, no mancha), usé (gastado, no usado) 6.
Fundamentos teóricos
Muchos de los falsos amigos se deben a una etimología común que ha derivado en
significados distintos en cada lengua, otros simplemente a una coincidencia a nivel de
pronunciación o de grafía. En relación con esto, deberíamos señalar que hay que
distinguir entre falso amigo y falso cognado (false cognate). Éste último hace referencia a
una palabra, que debido a similitudes fortuitas de apariencia y significado, parece guardar
parentesco con otra palabra de una lengua diferente, pero que en realidad no comparten
el mismo origen etimológico.
«El ejemplo típico es el del verbo inglés to have (tener, haber) y el similar verbo
español haber, los cuales, pese a sus semejanzas aparentemente obvias, en realidad
provienen de raíces proto-indoeropeas bien distintas: el inglés to have proviene de
4
Véase http://www.geocities.com/jesalgadom/idiomas_falsos_amigos_it_es.html
5
Entre paréntesis se ofrece la traducción al español.
6
Ejemplos provenientes de Martínez de Sousa, MARTÍNEZ DE SOUSA, José, «Los falsos amigos», en
http://cvc.cervantes.es/el_rinconete/anteriores/junio_00/09062000_03.htm (acceso 8/6/2007), 2000
(9/6/2000). Para más ejemplos de falsos amigos entre el español y el inglés/ francés, véase Falso amigo,
ref. cit.
Ogigia. Revista electrónica de estudios hispánicos
80
*kap- (agarrar), y en realidad está emparentado con nuestro verbo captar, aunque no lo
parezca; mientras que nuestro haber proviene de la raíz proto-indoeuropea *ghabh(dar), y aunque tampoco lo parezca, está emparentado con el inglés to give (dar)» 7.
Cierto es que tanto la nomenclatura usada como las distintas aproximaciones al
fenómeno vienen a variar entre los autores. Así, Matte Bon8 , por ejemplo, distingue entre
los falsos amigos evidentes y los falsos amigos parciales.
Según Matte Bon9, los falsos amigos evidentes son formas que presentan similitud a
nivel morfológico, difieren, sin embargo, a nivel semántico. Por ejemplo, la palabra asilo
no significa en italiano lo que significa en español10 ; en italiano designa la institución
educativa que acoge a niños de tres a seis años (o sea, lo que en español se llama jardín
de infancia –calcado del alemán Kindergarten)11. Para este caso, Francesconi12 usa el
término falsos afines, mientras que Galiñanes Gallén13 , a su vez, habla de falsos amigos o
falsas analogías, siguiendo a García Yebra14 , quien define estos ejemplos como “palabras
que por el significante se parecen a palabras de otra lengua, pero difieren de ellas en el
significado”. Asimismo, según otra definición,
mots qui se corresponden d'une langue l'autre par l'etymologie et par la forme, mais qui
ayant évolu‚ au sein de deux langues et, partant, de deux civilisations différentes, ont
pris des sens différents15.
7
Véase Falso Cognado, de Wikipedia, la enciclopedia libre, en http://es.wikipedia.org/wiki/Falso_cognado
(acceso 8/6/2007), sin fecha.
8
MATTE BON, Francisco, “Análisis de la lengua y enseñanza del español en Italia”, en redELE, n° 0, marzo
2004, (online) en http://www.sgci.mec.es/redele/revista/matte.shtml (acceso 8/6/2007), 2004.
9
Ibídem.
10
Según la definición de la RAE (2001: 228): “1. m. Lugar privilegiado de refugio para los perseguidos. 2.
[m.] Establecimiento benéfico en que se recogen menesterosos, o se les dispensa alguna asistencia.3. [m.]
fig. Amparo, protección, favor”.
11
MATTE BON, Francisco, op. cit., cita otros ejemplos conocidos entre el español y el italiano: Salir=uscire,
salire=subir; Aceite=olio, aceto=vinagre; Burro=asino, burro=mantequilla.
12
FRANCESCONI, Armando, “La lexicología contrastiva español-italiano”, en Espéculo. Revista de estudios
literarios. (UCM, online), 31, en http://www.ucm.es/info/especulo/numero31/lexicolo.html (acceso 8/6/2007),
2005.
13
GALIÑANES GALLÉN, Marta, “Falsos amigos adjetivales”, en Espéculo. Revista de estudios literarios.
(UCM, online), 32, en http://www.ucm.es/info/especulo/numero32/famigos.html (acceso 8/6/2007). 2006.
14
GARCÍA YEBRA, Valentín, Traducción: historia y teoría, Madrid, Gredos, 1994, p. 347.
15
VINAY J.P. y DARBELNET, J., Stylistique comparée du francais et de l’anglais, Paris, Didier, 1958, p. 71.
Eleni Leontaridi, Natividad Peramos Soler , Marina Ruiz Morales
81
Los falsos amigos parciales –según Matte Bon16- son palabras ligeramente distintas
en la forma y con significados que coinciden sólo en parte; dicho de otra forma, vocablos
casi similares en los dos idiomas que no se usan de la misma forma. A veces, se requiere
una selección entre los distintos significados de una palabra para que se encuentre el
significado correspondiente en la otra lengua17 . Éstos se llamarían afines ilusorios18 por
Francesconi19:
“El significado de su estado original se ha mudado en uno o en ambos idiomas, como
por ejemplo el inglés disgrace (‘afrenta’) frente al italiano disgrazia o al español
desgracia, el inglés library (‘biblioteca’) y el italiano librería. [...] el español criollo no se
traduce al francés con ‘créole’, ni los términos españoles habitación y cama con los
italianos ‘abitazione’ e ‘camera’, la oficina no es el it. ‘officina’ (taller) sino ‘ufficio’, que a
su vez no es el oficio porque éste al italiano se traduce con ‘mestiere’. El compromiso
español se puede traducir al italiano con ‘compromesso’, pero a menudo lo
encontramos en textos de relaciones internacionales con el significado de
‘impegno’ (esp. acuerdo, promisa). Coordinación puede ser en italiano tanto
‘coordinamento’ como ‘coordinazione’, pero no ocurre lo mismo con adaptación
‘adattamento’ o con agrupación ‘raggruppamento’”.
En todo caso, el punto de partida de todos estos ‘falsos amigos’ es la polisemia, y,
como señala Francesconi en determinadas épocas literarias los autores españoles se
servían de estas palabras polisémicas para sus juegos verbales20.
Dada la complejidad del tema, para los fines de este estudio, usaremos el término
falso amigo en su significado amplio, de forma que el término haga referencia en general
16
MATTE BON, op. cit., pp. 3-4.
17
Por ejemplo: (it) carta= (esp.) papel, carta -naipe-, tarjeta-de crédito, de visita, etc. (esp.) carta= (it) letteracorrespondencia-, carta-naipe-. (it) mirare=(esp.) apuntar a un blanco, aspirar a (esp.) mirar= (it.) guardare.
18 Son las palabras transparentes de Doppagne, como por ejemplo: inglés actual (‘real’, ‘efectivo’), francés
actuel (‘del momento presente’), holandés aktueel, español actual, etc. Vid. DOPPAGNE, A., «Une méthode
d’acquisition du vocabulaire espagnol » , en Linguistica Antwerpiensia, 1, 1967, pp. 105-126.
19
20
FRANCESCONI, Armando, op. cit.
Cfr. Quevedo y sus agudezas. «El autor en el Buscón juega con los dobles sentidos producidos por
palabras como servicio que vale ‘certificado de servicio’ y ‘orinal’; cardenal ‘cardenal’ y ‘lívido’; saco ‘saco’ y
‘capa y traje ancho’. A veces este juego semántico puede resultar intraducible como ocurre en otro texto de
Quevedo (Visita de los chistes en Obras Completas vol. I): “Y es cierto que son diablos los Médicos, pues
unos y otros andan trás los malos y huyen de los buenos, y todo su fin es que los buenos sean malos y los
malos no sean buenos jamás” Vid FRANCESCONI, Armando, op.cit.
Ogigia. Revista electrónica de estudios hispánicos
82
a palabras de distintos idiomas que presentan gran similitud morfológica pero que no se
usan de la misma forma.
Falsos amigos y traducción
«Cuerpo de tal –dijo don Quijote-, y qué adelante está vuesa merced en el toscano
idioma! Yo apostaré una buena apuesta que adonde diga en el toscano piace, dice
vuestra merced en el castellano place; adonde diga piú, dice más, y el su declara con
arriba, y el giú con abajo».21
En general, la lexicología estudia la confrontación entre léxico nativo y léxico
extranjero. Bajo esta perspectiva, Lado22 distingue siete categorías de relaciones entre las
palabras de dos idiomas distintos:
1) Palabras semejantes por forma y significado.
2) Semejantes por forma pero distintas por significado.
3) Semejantes por su significado pero distintas por sus formas.
4) Distintas por forma y significado (no corresponden sus concepciones de la
realidad).
5) Distintas por tipo de construcción o composición.
6) Semejantes por significado primario pero distintas por connotación.
7) Semejantes por significado, pero con restricciones debidas a su distribución
geográfica.
Sin embargo, la verdad es que los diccionarios bilingües no prestan particular
atención a las equivalencias léxicas que resultan útiles, no sólo en la tarea del traductor
sino en las situaciones comunicativas en general. En relación con esto, Francesconi23
señala que éste es el problema por resolver, o sea distinguir entre lexema y palabra texto
21
Desgraciadamente, don Quijote hubiera perdido la apuesta, porque piú nο se traduce siempre con “más”;
tampoco se traduce siempre su con "arriba", ni giú con "abajo". CERVANTES SAAVEDRA, Miguel de, El
ingenioso hidalgo don Quijote de la Mancha, (ed. de A. Herrero Miguel), Cap. LXII, 2ª parte Barcelona,
Sopena, 1978, p. 659.
22
LADO, Robert, Linguistics across Cultures: Applied linguistics for language teachers, Ann Arbor, MI,
University of Michigan Press, 1957.
23
FRANCESCONI, Armando, op. cit.
Eleni Leontaridi, Natividad Peramos Soler , Marina Ruiz Morales
83
(text word)24, dado que la palabra nunca aparece en posición aislada. Galiñanes Gallén25 ,
a su vez, explica que:
“Los falsos amigos constituyen una de las más graves interferencias lingüísticas que se
pueden encontrar en la traducción, ya que originan graves errores de significado,
literalismo e ininteligibilidad. Por lo tanto, el traductor tiene que tener mucho cuidado
con ellos, porque al atribuir a una palabra un significado erróneo, apartándose del
verdadero, impide la comunicación que se establece con el lector, que ignora el error
cometido”.
Martínez de Sousa26 observa que debido a confusiones de este tipo, se han
registrado ciertos errores históricos, como llamar Canal de la Mancha, en español, a lo
que en realidad debería haberse llamado Canal de la Manga27 . Asimismo, el topónimo
estadounidense Key West no es nada más que adaptación (errónea) al inglés del
topónimo español Cayo Hueso; Sin embargo, Key West no equivale a Cayo Hueso, sino a
Cayo Oeste 28.
Falsos amigos y enseñanza de ELE
“Lo spagnolo non è punto neanco per noi italiani una lingua facile, o, per dir meglio
presenta la gran difficoltà delle lingue facili (...). Si casca nell'italiano senz'
accorgersene, si inverte la sintassi ad ogni istante, si ha sempre la propria lingua
nell'orecchio e sulle labbra, che ci inciampa, ci confonde, ci tradisce”29.
24
Cfr. Todorov : «Il y a deux phénomènes bien distincts, la signification du mot pris isolément, tel qu’il peut
figurer dans le dictionnaire et sa signification dans la chaîne du discours, à l’intérieur d’un énoncé
particulier.» Vid. TODOROV, Tzvetan, «Signifiance et sens», en Mélanges linguistiques offerts à Emile
Benveniste, Paris, Societe de linguistique de Paris, 1975, pp.: 509-515.
25
26
27
GALIÑANES GALLÉN, Marta, op. cit.
MARTÍNEZ DE SOUSA, José, ref. cit.
Fr. Canal de la Manche.
28
Para una muy extensa bibliografía sobre el tema de los falsos amigos en varios idiomas remitimos al
lector interesado a An on-line hypertext bibliography on false friends en http://www.lipczuk.buncic.de/ , (sin
fecha), (acceso 8/6/2007).
29
Edmondo De Amicis, Citado en BOSELLI, Carlo, Le sorprese dello spagnolo, Milano, Le lingue estere,
1943, pp. 23-24.
Ogigia. Revista electrónica de estudios hispánicos
84
Sea como sea, la aparición de falsos amigos es mayor cuando se trabaja con
lenguas que pertenecen a un mismo ámbito lingüístico, pero crece exageradamente
cuando se trabaja con lenguas tan parecidas morfológicamente, como son el español y el
italiano, o fonéticamente, como son el español y el griego. La similitud registrada puede
ayudar, pero a la vez estorbar al estudiante italiano/ griego del español, dado que uno de
los mayores obstáculos para el aprendizaje de una lengua extranjera lo constituyen las
interferencias que la L1 ejerce sobre la L2 30.
El
estudiante
de
una
lengua
extranjera
adquiere
ciertas
expresiones
espontáneamente, las cuales son repetidas sin tener que ser pensadas previamente, y sin
necesidad de recurrir a su lengua materna. Pero, a partir del momento en el que sale de
este contexto y está obligado a expresar ideas más complejas, tiende a calcar el modelo
del idioma que considera más parecido a la lengua estudiada. Así, entre el abanico de
expresiones y de estructuras que el idioma extranjero le ofrece, el alumno, sobre todo el
de los primeros niveles, escoge las más cercanas a las que ya conoce, es decir, las que
más se parecen a su lengua materna (o la lengua extranjera que mejor conoce). Los
ejemplos de palabras o expresiones que tienen la misma cadencia fónica en español y en
griego son innumerables, lo cual a menudo da lugar a curiosas construcciones
inexistentes en la lengua de destino y, en algunos casos, a giros extraños y no carentes
de gracejo. Sin embargo, nuestra experiencia nos ha demostrado que el profesor de
lengua extranjera debe saber sacar provecho de este tipo de “conocimiento”, dado que el
humor ayuda en gran medida en la memorización de vocabulario y de estructuras. Raras
veces un estudiante griego olvidará el significado de palabras como broma, vale, página,
helada, pipa... ¿La razón? Porque estas palabras constituyen casos de falsos amigos
entre el español y el griego: Broma es ‘mal olor’ o incluso ‘puta’. Vale significa ‘pon/
30
Para unas consideraciones relacionadas con el aprendizaje de lenguas afines, como el español y el
italiano, véase CALVI, Maria Vittoria, “Aprendizaje de lenguas afines: español e italiano”, en redELE, n° 1, en
http://www.sgci.mec.es/redele/revista1/calvi.shtml (acceso 8/6/2007), junio 2004. Para más información
sobre los falsos amigos entre el español y el italiano véase CANON, J., “Expresiones compuestas como
'Faux amis' en los idiomas español e italiano”, en Lebende Sprachen: Zeitschrift für fremde Sprachen in
Wissenschaft und Praxis. Fachblatt des Bundesverbandes der Dolmetscher und Übersetzer, 6, 1961, pp.
129. Vid. también, NAVARRO, A., Fernando, “Glosario de “falsos amigos” italiano-español”, en Terminologie &
Traduction (Luxembourg), 1, 2002., pp. 219-286. SOLTERO GODOY, Margarita, La fundamentación teórica y
práctica de la traducción literaria a través del texto (C.E. Gadda). Tesis doctoral, Salamanca [vid. Resumen
en la base de datos TESEO], 1998. SAÑÉ S. & SCHEPISI, G., Falsos amigos al acecho, Bologna: Zanichelli,
1992. y MEREGALLI, Franco, Semantica pratica italo-spagnola, Varese-Milano: Istituto Editoriale Cisalpino,
1955. También en
Falsi amici (italiano-spagnolo), Falsos amigos (italiano-español)» en http://
www.geocities.com/jesalgadom/idiomas_falsos_amigos_it_es.html (acceso 8/6/2007), 2003. Vid También,
Falsi amici più ricorrenti. «Falsi amici più ricorrenti nelle due lingue/ Falsos amigos más frecuentes en los
dos idiomas», en http://www.aulafacil.com/Italiano/Lecc-39.htm (acceso 8/6/2007), sin fecha.
Eleni Leontaridi, Natividad Peramos Soler , Marina Ruiz Morales
85
échame más’. Página significa ‘he engordado’ mientras que helada es el nombre de
‘Grecia’ en griego. En cuanto a pipa, en griego το να παίρνεις μία πίπα /to na pérnis mía
pipa/ (tomar una ‘pipa’) es lo que le hacía la famosa becaria al Sr. Presidente de los
EE.UU. en el salón oval. Igualmente útiles resultan ser las coincidencias de este tipo a la
hora de consolidar ciertos conocimientos morfosintácticos: co-aparición de los
pronombres con formas del imperativo afirmativo, con ejemplos tan ilustrativos
como“pídame Señor”, lo cual vendría a significar nada menos que ¡fólleme, señor!, etc.31
Conclusiones
Concluyendo, cuanto más se parecen dos idiomas morfológica o fonéticamente, más
fácil se hace la comprensión pero también crecen las posibilidades de que se registren
falsos amigos; algunas veces éstos son inocuos pero otras tantas dan lugar a
intercambios graciosos o malentendidos. Terminando, citamos un listado de falsos amigos
entre el español y el griego, pues creemos que este tipo de información puede resultar ser
una herramienta útil –tanto para el profesor como para el alumno- en el proceso de
aprendizaje de una lengua extranjera32 . No pretendemos que esta lista sea exhaustiva,
pero –en gran medida, creemos- refleja los peligros que... están al acecho. Para más
información sobre los falsos amigos entre el español y el griego y malentendidos
originados por éstos, remitimos al lector a Leontaridi y López Jimeno 33.
Falsos amigos entre el español y el griego moderno
La expresión española...
se parece a la expresión griega...
que en griego significa...
Alicia
Αλήθεια /alícia/
verdad
ande
άντε /ánde/
¡no me digas!/ ¡dale!/ ¡tira! (interj.)
barba
µπάρµπα /barba/
tío (vulg.)
broma
βρώµα /vroma/
mal olor/ puta
31
Igual de graciosa para los griegos resulta la morfología del imperfecto de subjuntivo del mismo verbo:
pidiese (‘te follas’)...
32
En relación con este tema, es muy interesante el estudio de RIBAS MOLINÉ, Rosa y D’AQUINO HILT,
Alessandra, “La reflexión metalingüística de los alumnos en la enseñanza y el aprendizaje de lenguas
extranjeras: resultados de una experiencia didáctica”, en IDEAS – Investigaciones y Estudios Hispánicos
Aplicados, 3, 2006, en http://www.ideas-heilbronn.org/artic.htm (acceso 8/6/2007), abril 2006.
33
Vid. LEONTARIDI, Eleni, “HOLA Ή ΤΙΠΟΤΑ!; de perlas lingüísticas y lindezas semejantes: el caso de los
Falsos Amigos” (en imprenta), en ΛΕΟΝΤΑΡΙΔΗ, Ε., MΠΑΛΑΣΗ, Ε. & ΣΠΑΝΟΠΟΥΛΟΥ, Κ. (ed.), Πρακτικά της
Ημερίδας «Αφιέρωμα στη Γερμανική, Ισπανική και Ιταλική Γλώσσα», Αθήνα, Δ.Ξ.Γ. Παν/μίου Αθηνών,
2005. Vid También, LÓPEZ JIMENO, Amor “Algunos "falsos amigos" del aprendiz de griego (moderno)
hispano-hablante”, en Apuntes, invierno 2000, pp. 15-17.
Ogigia. Revista electrónica de estudios hispánicos
86
cables
καύλες /kavles/
estar caliente (vulg.)
cacique
καθίκι /kaciqui/
orinal
caseta
κασέτα /kaseta/
cinta (de música)
clase
κλάσε /klase/
¡tira un pedo
cola
κόλλα /kola/
folio/ pegamento
coño
κώνειο /konio/
cicuta
criada
κρυάδα /kriada/
tiritona
chula
τσούλα /tsula/
puta
dentro
δέντρο /dendro/
árbol
diaria
διάρροια /diaria/
diarrea
esto
έστω /esto/
por lo menos/ supongamos que
favorita
φαβορίτα /favorita/
patilla
fila
φίλα /fila/
besa
gafa
γκάφα /gafa/
metedura de pata
gamba
γάµπα /gamba/
pantorilla
gesto
χέστο /gesto/
¡cágalo! (¡déjalo! coloq.)
han
αν /an/
si
harto
άρτο /arto/
pan (vocativo)
has
ας /as/
¡vamos¡ (exhortativo)
hasta
άστα /asta/
déjalos
hastío
αστείο /astío/
chiste
he jodí'o! [he jodido]
έχω δύο /ejo dío/
tengo dos
hija
είχα /ija/
tenía
José
χώσε /jose/
¡hinca! (¡mete!, ¡dale! coloq.)
ley
λέει /lei/
dice
lucha
λούτσα /lucha/
empaparse
lustro
λούστρο /lustro/
barniz
Malaquías
µαλακία /malakía/
acción y efecto de masturbarse
mano
Μάνο /mano/
nombre propio masc. (acusativo)
mapa
µάπα /mapa/
berza/ cara (coloq.)
marica
Μαρίκα /marika/
nombre propio fem.
más
µας
nuestro
mesa
µέσα /mesa/
dentro
mestizos
µε στήθος /me stizos/
con pecho
mides
µ’ είδες /mides/
me has visto
miga
µύγα /miga/
mosca
mira
µοίρα /mira/
destino/ suerte
mono
µόνο /mono/
sólo
mucho
µούτσο /mucho/
grumete
oso
όσο /oso/
mientras/ hasta/ cuanto
página
πάχυνα /página/
he engordado
/mas/
Eleni Leontaridi, Natividad Peramos Soler , Marina Ruiz Morales
pare
πάρε /pare/
¡toma¡
paro
πάρω /paro/
tome (subj. 1ª prs)
parto
πάρ’ το /parto/
¡tómalo!/ ¡cógelo!
pera
πέρα /pera/
más allá
periódico
περιοδικό /periodikó/
revista
peseta
πετσέτα /petseta/
toalla/ servilleta (de tela)
picha
πίτσα /picha/
pizza
pídame
πήδα µε /pídame/
fóllame
pidiese
πηδιέσαι /pidiese/
te follas
pipa
πίπα /pipa/
pipa/ mamada (vulg.)
plátano
πλάτανο /plátano/
plátano de sombra (árbol)
pucha
πούτσα /pucha/
polla
puches
πούτσες /puches/
pollas
puse
που ’σαι /puse/
¿dónde estás?
que
και /ke/
y
quita
κοίτα /kita/
mira
sábana
σάβανα /sávana/
sudarios
servilleta
σερβιέτα /servieta/
compresa higiénica
Sofía
sofía/ Sofía /sofía/
sabiduría/ nombre propio fem.
su
σου /su/
te (pronombre C.I.)
supiera
σουπιέρα /supiera/
sopera
tapa
τάπα /tapa/
tapa, tapón
tenía
ταινία /tenía/
película
trago
τράγο /trago/
macho cabrío (acusativo)
tripa
τρύπα /tripa/
agujero
tú
του /tu/
le (pronombre C.I. masc.)
vaca
µπάκα /baka/
panza
vaso
βάζω/ βάζο /vaso/
pongo/ florero
vale
βάλε /vale/
pon/ echa
ya
γεια/ για /ya/
hola/ adiós/ para
87
Bibliografía
«An on-line hypertext bibliography on false friends» (sin fecha), en http://
www.lipczuk.buncic.de/ (acceso 8/6/2007).
BOSELLI, Carlo, Le sorprese dello spagnolo, Milano, Le lingue estere, 1943.
CALVI, Maria Vittoria, «Aprendizaje de lenguas afines: español e italiano», en redELE,
n° 1, en http://www.sgci.mec.es/redele/revista1/calvi.shtml (acceso 8/6/2007), junio 2004.
CANON, J., «Expresiones compuestas como 'Faux amis' en los idiomas español e
italiano», en Lebende Sprachen: Zeitschrift für fremde Sprachen in Wissenschaft und
Ogigia. Revista electrónica de estudios hispánicos
88
Praxis. Fachblatt des Bundesverbandes der Dolmetscher und Übersetzer, 6, 1961, pp.
129.
CERVANTES SAAVEDRA, Miguel, de, El ingenioso hidalgo don Quijote de la Mancha,
(ed. de A. Herrero Miguel), Barcelona, Sopena, [1615] 1978.
DOPPAGNE, A., «Une méthode d’acquisition du vocabulaire espagnol», en Linguistica
Antwerpiensia, 1, 1967, pp. 105-126.
«Falsi amici (italiano-spagnolo) / Falsos amigos (italiano-español)» en http://
www.geocities.com/jesalgadom/idiomas_falsos_amigos_it_es.html
(acceso
8/6/2007),
2003 (13/04/2003).
«Falsi amici più ricorrenti nelle due lingue/ Falsos amigos más frecuentes en los dos
idiomas», en http://www.aulafacil.com/Italiano/Lecc-39.htm (acceso 8/6/2007), sin fecha.
«Falso Amigo» (de Wikipedia, la enciclopedia libre), en http://es.wikipedia.org/wiki/
Falso_amigo (acceso 8/6/2007), sin fecha.
«Falso Cognado» (de Wikipedia, la enciclopedia libre), en http://es.wikipedia.org/wiki/
Falso_cognado (acceso 8/6/2007), sin fecha.
FRANCESCONI, Armando, «La lexicología contrastiva español-italiano», en Espéculo.
Revista de estudios literarios. (UCM, online), 31, en http://www.ucm.es/info/especulo/
numero31/lexicolo.html (acceso 8/6/2007), 2005.
GALIÑANES GALLÉN, Marta, «Falsos amigos adjetivales», en Espéculo. Revista de
estudios literarios. (UCM, online), 32, en http://www.ucm.es/info/especulo/numero32/
famigos.html (acceso 8/6/2007). 2006.
GARCÍA YEBRA, Valentín, Traducción: historia y teoría, Madrid: Gredos, 1994.
LADO, Robert, Linguistics across Cultures: Applied linguistics for language teachers,
Ann Arbor, MI, University of Michigan Press, 1957.
LEONTARIDI, Eleni «HOLA Ή ΤΙΠΟΤΑ!; de perlas lingüísticas y lindezas semejantes: el
caso de los Falsos Amigos» (en imprenta), en ΛΕΟΝΤΑΡΙΔΗ, Ε., MΠΑΛΑΣΗ, Ε. &
ΣΠΑΝΟΠΟΥΛΟΥ, Κ. (ed.), Πρακτικά της Ημερίδας «Αφιέρωμα στη Γερμανική, Ισπανική
και Ιταλική Γλώσσα», Αθήνα, Δ.Ξ.Γ. Παν/μίου Αθηνών, 2005.
LÓPEZ JIMENO, Amor «Algunos "falsos amigos" del aprendiz de griego (moderno)
hispano-hablante», en Apuntes, invierno 2000, pp. 15-17.
MARTÍNEZ DE SOUSA, José, «Los falsos amigos», en http://cvc.cervantes.es/
el_rinconete/anteriores/junio_00/09062000_03.htm (acceso 8/6/2007), 2000 (9/6/2000).
Eleni Leontaridi, Natividad Peramos Soler , Marina Ruiz Morales
89
MATTE BON, Francisco, «Análisis de la lengua y enseñanza del español en Italia», en
redELE, n° 0, marzo 2004, (online) en http://www.sgci.mec.es/redele/revista/matte.shtml
(acceso 8/6/2007), 2004.
MEREGALLI, Franco (1955), Semantica pratica italo-spagnola, Varese-Milano: Istituto
Editoriale Cisalpino, 1955.
NAVARRO A., Fernando, «Glosario de “falsos amigos” italiano-español», en
Terminologie & Traduction (Luxembourg), 1, 2002., pp. 219-286.
POLO POLO, José, «Treinta años después, complementos a una sección hispanofrancesa de parónimos interlingüísticos», en Cauce: Revista de filología y su didáctica, 29,
2006, pp. 347-358.
RAE - REAL ACADEMIA ESPAÑOLA, Diccionario de la Lengua Española, Madrid: Espasa
Calpe, 2001.
RIBAS MOLINÉ, Rosa & D’AQUINO HILT, Alessandra, «La reflexión metalingüística de
los alumnos en la enseñanza y el aprendizaje de lenguas extranjeras: resultados de una
experiencia didáctica», en IDEAS – Investigaciones y Estudios Hispánicos Aplicados, 3,
2006, en http://www.ideas-heilbronn.org/artic.htm (acceso 8/6/2007), abril 2006.
SAÑÉ S. & SCHEPISI, G., Falsos amigos al acecho, Bologna: Zanichelli, 1992.
SOLTERO GODOY, Margarita, La fundamentación teórica y práctica de la traducción
literaria a través del texto (C.E. Gadda). Tesis doctoral, Salamanca [vid. Resumen en la
base de datos TESEO], 1998.
TODOROV, Tzvetan, «Signifiance et sens», en Mélanges linguistiques offerts à Emile
Benveniste, Paris, Societe de linguistique de Paris, 1975, pp.: 509-515.
VINAY J.P. & DARBELNET, J., Stylistique comparée du francais et de l’anglais, Paris,
Didier, 1958.
90
Ogigia. Revista electrónica de estudios hispánicos
Chiara Atzori
91
LA IMAGEN DE ESPAÑA EN EL MOSAICO CULTURAL PANEUROPEO:
RETOS Y COMPROMISOS DEL CONSEJO DE EUROPA
EN LA COOPERACIÓN INTERCULTURAL
Chiara Atzori
(En prácticas en el Departamento Cultura –
Consejo de Europa – Estrasburgo)
Resumen
Desde 1949, el Consejo de Europa se compromete a defender la democracia y los
derechos humanos de los Estados miembros. Hoy día, la nueva economía global, más
que nunca lleva al Consejo a centrar su papel de mediador en la cooperación intercultural,
para defender y conservar la variedad de lenguas y culturas que habitan su territorio. Tras
la aprobación de la Declaración sobre la Diversidad Cultural en 2000, las políticas
culturales del Consejo de Europa, en las que España participa activamente, hacen
hincapié en la riqueza del patrimonio cultural. Gracias a nuevas y creativas formas de
capacidad empresarial, este patrimonio se está convirtiendo en el verdadero motor de las
economías locales.
Palabras clave: Consejo de Europa - democracia - diversidad cultural - cooperación
cultural - itinerarios culturales.
Abstract
Since 1949, the Council of Europe is engaged to defend democracy and human
rights in its member States. Today’s global economy – more than ever – leads the Council
to focus its mediation role in the intercultural co-operation, to protect and preserve the
large variety of languages and cultures that live within its territory. After the adoption of the
Declaration on Cultural Diversity in 2000, Council of Europe cultural policies’, in which
Spain is also actively involved, call the attention on the richness of the European cultural
heritage. This heritage, thanks to new creative entrepreneurships, is becoming the real
engine of the local economies.
Key words: Council of Europe – democracy - cultural diversity - cultural co-operation
- cultural itineraries.
Ogigia. Revista electrónica de estudios hispánicos
92
El Consejo de Europa (CoE) es la organización política más antigua del continente.
Fundado en Londres el 5 de mayo de 1949 por la unión de 10 estados del oeste de
Europa, actualmente engloba a 47 países (el miembro más reciente es Montenegro, que
hizo su entrada en la organización el pasado 11 de mayo) y tiene su sede en
Estrasburgo1.
Se trata de un organismo distinto de la Unión Europea, aunque ningún país ha
adherido nunca a la Unión, sin pertenecer antes al Consejo. Cinco países extraeuropeos,
la Santa Sede, los Estados Unidos, Canadá, Japón y México, han obtenido el estatuto de
observadores.
España se adhirió al Consejo de Europa el 24 noviembre 1977, convirtiendose en el
vigésimo Estado miembro, tras aprobar el Estatuto que, en el artículo 1, expone la
finalidad principal para la cual fue creada la organización política: realizar “una unión más
estrecha entre sus miembros para salvaguardar y promover los ideales y los principios
que constituyen su patrimonio común y favorecer su progreso económico y social” 2.
El Consejo vigila sobre la observancia de los derechos humanos fundamentales, de
la democracia parlamentaria y del Estado de derecho. Desde su constitución, lleva
desempeñando el papel de mediador y guardián de la coexistencia y de la cooperación
pacífica y democrática entre las naciones. Tras empezar su actividad en los años
sucesivos a la Segunda Guerra Mundial, el CoE tuvo un rol de extremada importancia en
la difícil situación internacional de los años de la Guerra Fría. Sucesivamente, a partir de
la caída del Muro de Berlín, tuvo que emprender una política más enfocada en misiones y
proyectos específicos. Desde 1989 representa, aún más, el punto de referencia para los
países de Europa central y oriental en las etapas de consolidación de las reformas
políticas, legislativas y económicas, necesarias para lograr una democracia estable.
Los países miembros, reciben por parte del Consejo también conocimientos e
indicaciones en materia de Derechos Humanos, Educación, Cultura y Medio Ambiente. En
la Cumbre de Estrasburgo de octubre 1997, fue reforzado el papel del Consejo de Europa
en tema de valores democráticos y derechos humanos, de cohesión social y de diversidad
cultural. En la siguiente Cumbre de Varsovia de mayo 2005, fueron adoptadas nuevas
líneas políticas acerca de la protección y de la seguridad de los ciudadanos europeos
contra la amenaza del terrorismo, del crimen organizado y del tráfico de seres humanos,
1
Véase la página web del Consejo de Europa www.coe.int
2
BOE n. 51 de 1/3/1978, Ref. 1978/05972.
Chiara Atzori
93
consiguendo, además, el apoyo y la cooperación de otros organismos europeos e
internacionales.
La riqueza de la diversidad cultural europea: el Proyecto de Creación de
Capital Cultural
Hoy día, la labor de mediación que el Consejo de Europa desempeña, no es menos
complicada que durante el siglo pasado. En el siglo XXI, Europa vuelve a ser un
continente amenazado por divisiones (problemas de identidad cultural, de minorías
nacionales o transnacionales) que crean barreras y marcan fronteras ya no políticas sino
culturales. Después de la lograda reunificación política conseguida a lo largo del siglo XX,
con la llegada de la economía global, fue necesario adoptar nuevos instrumentos
legislativos y nuevas medidas programáticas para seguir practicando una política de
integración socio-cultural.
La actividad del Consejo de Europa, desde siempre está enfocada en el concepto de
una identidad europea que se centra en los valores comunes más allá de las diferencias
culturales, consideradas además como herencias y patrimonios comunes de todos los
países miembros. Estos principios fundamentales fueron reconocidos y adoptados por
primera vez en la Convención Cultural Europea aprobada en París en 1954, y constituyen
los pilares que reglamentan la política del Consejo en defensa de la democracia en todo
tipo de manifestación cultural.
La Declaración sobre la Diversidad Cultural adoptada por el Comité de Ministros el 7
de Diciembre de 2000 3, el primer instrumento internacional elaborado sobre el tema, fue la
respuesta del CoE frente a la nueva economía global. A través de la Declaración, el
Consejo quiso garantizar un entorno democrático al proceso de desarrollo de la cultura y
de la expresión de la diversidad cultural, sea a nivel internacional sea a nivel local.
La diversidad cultural, elemento esencial para la vida de la sociedad y del ser
humano, desde siempre es un rasgo dominante en la historia del continente europeo.
Antes de la Declaración de 2000, no existía ninguna reglamentación a nivel internacional
que exigiera a los protagonistas del mundo económico, el respeto de la diversidad cultural
por su valor intrínseco. Dos asuntos relacionados a la economía global aparecieron
particularmente problemáticos: por una parte, las innovaciones tecnológicas produjeron
cambios relevantes en la industria audiovisual y favorecieron relaciones más estrechas
entre cultura y mercado; por otra parte, las modificaciones de las reglamentaciones
3
The Council of Europe Declaration on Cultural Diversity, Strasbourg, Council of Europe publishing, 2001.
Ogigia. Revista electrónica de estudios hispánicos
94
internacionales en materia de comercio, afectaron directamente a la cultura y a la
diversidad cultural.
Hoy día, la economía global es conocida también como economía cultural. La
verdadera esencia de los productos que se intercambian en los mercados, es de tipo
cultural. Los modos de vida, los conceptos y las ideas se han convertido en productos
culturales y el sector cultural es el que a nivel mundial está evolucionando más
rápidamente. La creatividad es el motor de la nueva economía y la diversidad cultural es
su alimentación. Estos dos factores son fundamentales para la economía, y a la vez están
amenazados por ella.
Europa es un continente donde la creatividad y la diversidad cultural son recursos
extremadamente abundantes. Millones de pequeñas comunidades existen en su territorio
y dan vida a diversos y variados productos culturales. Sin embargo, no hay que olvidar un
factor de riesgo: los centros más pequeños difícilmente tienen acceso a aquellos recursos
que los habilitarían a competir en el mercado global. Además, se plantea el serio
problema de la instrumentalización de la cultura, la cual, en algunos contextos, podría
estar sometida a los objetivos económicos y sociales. La actividad del CoE es
fundamental, sobre todo para establecer reglas precisas y aclarar las circunstancias en
las que los principios culturales merecen la prioridad sobre los principios económicos.
La diversidad cultural es un tema tan importante que requiere esfuerzos comunes y
no se puede debatir simplemente a nivel local, ni tampoco gestionarse a través de
convenios bilateras entre las naciones.
En el año 2004, el Departamento Cultura del Consejo de Europa pudo
definitivamente lanzar el Proyecto de Creación de Capital Cultural (Creating Cultural
Capital Project), actualmente coordenado por Doña Madelena Grossmann. Se trata de un
programa único, evolucionado y perfeccionado tras la experiencia de un anterior proyecto
piloto realizado en Bulgaria en el bienio 2001-2002. El proyecto nació con la idea de
estimular las industrias culturales a capitalizar la diversidad cultural, para que los
organismos gubernamentales, el mundo de los negocios y los ciudadanos, se
comprometan y cooperen para alcanzar todos la misma finalidad.
El Proyecto de Creación de Capital Cultural tiene basicamente tres objetivos4:
-
desarrollar la capacidad de los productores culturales que actúan a nivel local
para entrar en el circuito de la economía global;
4
Creating cultural capital for democracy diversity: a Council of Europe Project, Strasbourg, Council of
Europe – Directorate General IV, 2003.
Chiara Atzori
-
95
promocionar una competencia europea sobre un tipo de empresarialidad que
respete las condiciones culturales locales, fuentes de diversidad y de creatividad;
-
crear una red de agencias de desarrollo cultural a nivel local, regional e
internacional, que actúe como punto de referencia para los productores locales y
facilite su ingreso en el mercado global.
Para conseguir los objetivos propuestos, es imprescindible que cada país sea
consciente de todos los recursos culturales de los que dispone. Por tanto, es fundamental
que se realice una completa y detallada exploración del territorio, en busca de todas las
expresiones de la diversidad cultural, el verdadero motor del proyecto. Sucesivamente, es
necesario planear estrategias para la instalación de nuevas actividades y para el
desarrollo de las estructuras existentes. La creación de agencias de desarrollo cultural,
está relacionada con la realización de un portal de intercambio cultural (Cultural Exchange
Network - CEN – Portal) para que las comunidades culturales locales puedan comunicar
de manera dinámica entre ellas, intercambiar conocimientos, servicios, productos y otros
recursos.
El éxito de la fase experimental del proyecto, animó a varios países a manifestar su
interés en la participación, y no solamente a los nuevos miembros (Serbia, Montenegro,
Croacia, Rumanía, Hungría, Federación Rusa), sino también a ciertos países que desde
hace tiempo forman parte del CoE. España, a través del Ministerio de Cultura, a finales de
2006 se adhirió al Proyecto de Creación de Capital Cultural, contribuyendo
financieramente a la evaluación del trabajo realizado hasta el presente.
El Proyecto de Creación de Capital Cultural es sin duda innovador y ambicioso: su
reto es convertir la diversidad y la variedad cultural en vehículos de riqueza no sólo
económica, favoreciendo el intercambio transnacional de capital humano, conocimientos y
saberes diferentes.
Cooperación internacional y turismo cultural: los itinerarios culturales
europeos
Para promocionar el concepto de identidad europea en su unidad y sus
diversidades, el Consejo de Europa en 1984 abrió el debate sobre los itinerarios
culturales. Las actividades sobre este tema se pusieron en marcha concretamen tres años
después, en 1987, cuando en el Departamento Cultura vió la luz el Programa de
Itinerarios Culturales del que actualmente es responsable Doña Françoise Tondre.
Ogigia. Revista electrónica de estudios hispánicos
96
Este año, el programa celebra el vigésimo aniversario de actividad y varias
manifestaciones se han programado para la ocasión. Entre otras, caben destacar la
Conferencia Europea que se celebrará en Francia, en la localidad de Puy-en-Velay, del 27
al 30 septiembre próximos y la Conmemoración del 20 aniversario de “Los caminos de
Santiago de Compostela” (el itinerario cultural con el cual el programa arrancó en 1987)
que tendrá lugar en Santiago de Compostela, los días 23 y 24 de octubre 2007.
La actividad del Consejo de Europa en tema de itinerarios culturales, se basa
jurídicamente en el texto de la Resolución (98) 4 del 17 de marzo de 1998 con su anexa
reglamentación5 . Adoptado por el Comité de Ministros, el documento permitió establecer
los principios guía para trazar rutas culturales en toda Europa. Gracias al tema del viaje a
través del tiempo y del espacio físico, los ciudadanos europeos pueden descubrir sus
raíces culturales y su historia, patrimonio común para todos los pueblos.
El reto del programa es estimular el diálogo intercultural e interreligioso, para
comprender en profundidad la historia europea de los siglos pasados y de la actualidad,
con la esperanza de alcanzar, algún día, el objetivo de la cohesión social y de la
convivencia pacífica de los pueblos.
La protección del patrimonio natural y cultural,
permite también mejorar el nivel de vida de los ciudadanos, y desarrollar las condiciones
sociales y económicas de los países que colaboran en la gestión de los itinerarios. Se
promueven, además, actividades de turismo cultural a medio y largo plazo con una óptica
sostenible y responsable, para satisfacer las diversas exigencias de turistas, visitantes,
viajeros y peregrinos.
La Resolución (98) 4 enuncia los criterios que el Consejo de Europa observa para
otorgar el título acreditativo a un itinerario cultural. En concreto, el tema sobre el cual la
ruta debe estar centrada, tiene que ser representativo de los valores europeos (historia de
los pueblos, migraciones y grandes civilizaciones) y ser compartido por varios países. Es
importante que, en cuanto posible, en el proyecto participe al menos uno de los países
que más recientemente han suscrito la Convención Cultural Europea.
Además, la ruta debe recorrer un camino histórico o un trayecto que siga las huellas
de un personaje histórico ilustre, y promover la cooperación multicultural, las
investigaciones científicas, la conservación del patrimonio, el intercambio cultural y
educativo entre los jóvenes europeos.
5
Resolution (98) 4 on the cultural routes of the Council of Europe, Strasbourg, Committee of Ministers,
1998.
Chiara Atzori
97
Cualquier organismo que presente una propuesta de itinerario cultural, sea una
asociación, sea una federación de asociaciones, ha de ser reconocido jurídicamente y
garantizar el respeto de los principios democráticos en la gestión de su actividad.
El proceso burocrático necesario para obtener la acreditación, empieza al presentar
la candidatura ante la Reunión del Consejo de Orientación de la Comisión Cultura. Tras
su aceptación, la comisión evalúa el proyecto, los organismos que se ocupan de la
actividad, su forma de financiación, objetivos y métodos, perspectivas de desarrollo a
medio y largo plazo.
Según las características y la extensión del itinerario, el CoE puede otorgar tres
diferentes títulos acreditativos:
-
“Gran Itinerario cultural del Consejo de Europa” (si desarrolla un tema
paneuropeo y propone redes de actividades a largo plazo);
-
“Itinerario cultural del Consejo de Europa” (si está organizado alrededor de un
tema con repercusiones históricas y geográficas más limitadas);
-
“En el cuadro de los itinerarios culturales europeos del Consejo de
Europa” (para proyectos aislados, inspirados a uno de los temas de los itinerarios
europeos).
El organismo responsable del itinerario cultural, cada dos años debe presentar un
informe al Consejo de Europa, para el control de la actividad realizada, la evaluación de
los criterios adoptados y la confirmación de su idoneidad para poder continuar.
Varias agencias y touroperadores que promueven los itinerarios culturales – afirma
Françoise Tondre – a menudo envían folletos, materiales y todo tipo de información
sobre las actividades y las manifestaciones organizadas para dinamizar las rutas
europeas. Es un feed back importante para que el CoE pueda ejercer cierta forma de
control alternativo y con frecuencia superior a la del informe bienal.
Desde 1998, el Instituto Europeo de los Itinerarios Culturales de Luxemburgo, aporta
su valiosa ayuda en el programa específico del Consejo de Europa, se ocupa de la
evaluación de las propuestas para los nuevos itinerarios, examina proyectos, reparte y
archiva informaciones, asegura la instalación de las rutas y vigila la cooperación entre los
participantes.
Ogigia. Revista electrónica de estudios hispánicos
98
Hasta el presente, el programa de itinerarios culturales del Consejo de Europa
cuenta con 24 rutas oficiales6. El primero en incorporarse fue el camino de Santiago de
Compostela7 , “Gran Itinerario del Consejo de Europa” desde junio 2004: “Es sin duda el
itinerario de mayor éxito en Europa y en el mundo – comenta la señora Tondre –. En
2005, Santiago de Compostela acogió a 5 millones de visitantes, no sólo peregrinos,
porque Santiago reúne intereses variados: hay caminantes, pero también personas
curiosas de novedades. Las peregrinaciones hasta la ciudad del Apóstol Santiago son
manifestaciones de la devoción cristiana; de todas formas, el viaje representa la metáfora
de nuestra condición en la vida terrenal. Todos encuentran en aquel lugar algo casi mítico
que llama la atención de mucha gente. Yo estuve en 1987 y me pareció una ciudad con
un encanto especial. Cada semana, además, recibo correos de personas que preguntan
algunas
que
otras
cosas
y
piden
informaciones,
envian
comentarios,
hacen
comparaciones después de recorrer parte del camino que, siendo muy largo, no siempre
se puede acabar. En Francia, por ejemplo, se conoce sobre todo un trayecto que empieza
en Puy en Velay y que es particularmente duro, porque primero hay que cruzar los
Pirienos para luego andar hasta el otro lado de España.”
La riqueza del patrimonio natural y cultural español, reluce también en otros
itinerarios culturales quizás menos conocidos que los de Santiago de Compostela, pero
de remarcable valor e interés cultural y social. Entre otros:
-
Parques y Jardines, el Paisaje (1992), “Gran itinerario cultural del CoE” desde
diciembre 20048;
-
el Legado de Al-Andalus (1997), “Gran itinerario cultural del CoE” desde junio
20049;
-
el camino de la Lengua Castellana y su expansión por el Mediterráneo: las
rutas de los Sefardíes (2002), “Gran itinerario cultural del CoE” desde junio 2004,
6
Véase la tabla relativa a los itinerarios culturales del Consejo de Europa (Anexo A).
7
Las imágenes relativas a los itinerarios culturales proceden del material informativo oficial realizado por el
Consejo de Europa. Véanse imágenes 1 – 2.
8
Véanse imágenes 3 – 4: una ruta de gran éxito turístico, que ofreció al CoE un instrumento práctico para la
aplicación de la Convención Europea del Paisaje que entró en vigor en 2004.
9
Véanse imágenes 5 – 6: un itinerario que permite reflexionar sobre una época del pasado en la que el
diálogo entre culturas y religiones diversas y la convivencia pacífica de los pueblos, marcaron una etapa
fundamental para la evolución de la historia del género humano.
Chiara Atzori
99
itinerario que vio la luz gracias a la iniciativa y a la dedicación de D. José María
Ballester, ex Director del Departamento Cultura del Consejo de Europa10 ;
-
la Ruta del hierro en los Pirineos, “Itinerario cultural del Coe” desde diciembre
200411;
-
la Red de sitios cluniacenses (2004), “Gran itinerario” desde mayo 2005 12;
-
la Vía Regia (2004), “Itinerario cultural del CoE” desde 200613;
-
San Martín de Tours, personaje europeo, símbolo del compartir (2005), “Gran
itinerario del CoE” desde septiembre 200514;
-
itinerarios europeos de patrimonio judío (2005), “Gran itinerario” desde
diciembre 200515;
-
las Rutas del olivar (2005) “Gran itinerario” desde mayo 200616;
la Ruta de Don Quijote, el más recién itinerario español en recibir el título
acreditativo de “Itinerario del Consejo de Europa”, en abril 2007.
El importante reconocimiento a la Ruta del Quijote, hace hincapié en la figura del
Hidalgo como símbolo del hombre universal, con sus límites, deseos y sueños: los
hombres de todas las culturas pueden identificarse en él. Ahora, todos tenemos la
oportunidad de recorrer físicamente la ruta que reúne los sitios de sus hazañas y no sólo
celebrar su memoria en el espacio ficticio de la literatura. El proyecto prevé además, la
10
Véanse imágenes 7 – 8: recorre las huellas de la lengua castellana, desde su aparición en el siglo XI, en
el Monasterio de San Millán de la Cogolla, hasta su supervivencia en las comunidades sefardíes del
Mediterráneo, pasando por los principales sitios de la divulgación de la cultura medieval: universidades
(Burgos, Valladolid, Salamanca y Alcalá de Henares) y monasterios (San Millán, Santo Domingo de Silos).
11
Véanse imágenes 9 – 10: itinerario muy original y bien logrado, con exposiciones de esculturas al aire
libre, realizadas por escultores contemporáneos, muestras de explotación artística del hierro.
12
Véanse imágenes 11 – 12: un trayecto a través de la historia y de unos lugares encantadores, testigos del
compromiso asumido por los monjes de la orden cluniacense, en la promoción de la paz.
13
Véanse imágenes 13 – 14: un itinerario trazado sobre el antiguo corredor que unía el Este y el Oeste de
Europa, la vía recorrida durante los últimos 2000 años por mercaderos, soldados, reyes, peregrinos y sobre
todo por las principales corrientes migratorias.
14
Véanse imágenes 15 – 16: San Martín de Tours, incansable viajero, europeo antes del tiempo. El
itinerario reúne los lugares en los que se encuentran las huellas de su pasaje o estancia, junto con los miles
de monumentos construidos en su memoria.
15
Véanse imágenes 17 – 18: Itinerario instituido tras la proclamación del Día europeo de la cultura judía en
2000: reúne sitios arqueológicos, sinagogas, juderías, bibliotecas, museos etc. que manifestaron la riqueza
de la cultura judía en Europa.
16
Véanse imágenes 19 – 20: itinerario montado alrededor de la historia de un árbol fundamental para la
economía de las civilizaciones del Mediterráneo, además vehicula un mensaje de paz, muy importante en la
actualidad.
Ogigia. Revista electrónica de estudios hispánicos
100
colaboración de las universidades italianas de Messina y Palermo y del Instituto
Cervantes.
Montar un itinerario cultural, es seguramente un proceso que requiere esfuerzos y
sinergías entre autoridades locales y asociaciones – precisa Françoise Tondre –. En el
conjunto, los itinerarios que existen tienen bases concretas, sólidas, con objetivos
claros para desarrollar. Pero es importante encontrar recursos y buenas ideas. El
Consejo de Europa siempre pudo contar con la colaboración de las autoridades civiles
y religiosas para la realización de este programa. Además, los itinerarios culturales
favorecen los contactos personales, el encuentro de los ciudadanos europeos en el
espacio físico de la ruta. Dan lugar a varias formas de cooperación entre la
administración pública y los ciudadanos, y a colaboraciones entre expertos e
investigadores que así intercambian conocimientos y saberes.
Informaciones mucho más detalladas se podrán encontrar en la obra de cuya
realización está encargada actualmente la Editorial Planeta de Barcelona: una
enciclopedia que recoge la información relativa a los itinerarios culturales del Consejo de
Europa y que se compone de 6 volúmenes, redactados en lengua castellana. La primera
obra dedicada al programa de itinerarios culturales del Consejo de Europa, a la cual se
acompañará también la publicación de un texto más breve, sobre el mismo asunto.
Viajar a través de los itinerarios culturales europeos es todo un descubrimiento, un
acercarse a nuestra identidad, que según decíamos antes, se compone de muchas
identidades. El viaje nos ayuda a relativizar la existencia, a buscar en la realidad y en el
interior de nosotros, una verdad más profunda y esencial17 .
La conservación y la promoción del patrimonio lingüístico local
La unidad cultural entre los pueblos europeos, la conservación de la riqueza de su
patrimonio, se consiguen también a través del reconocimiento de su variedad lingüística.
La Carta Europea de Lenguas Regionales y Minoritarias18, es el tratado internacional
auspiciado por el Consejo de Europa que protege las lenguas regionales y minoritarias y
17
RONCONI, Domenico, «Heureux qui comme Ulysse : les itinéraires culturels ou l’art de voyager
autrement », Strasbourg, Council of Europe printing, 1992, p. 16.
18
European Charter for Regional or Minority Languages, Strasbourg, Council of Europe, 1992.
conventions.coe.int/Treaty/en/Treaties/Html/148.htm
http://
Chiara Atzori
101
favorece su uso. Supone el reconocimiento internacional de la riqueza del patrimonio
lingüístico de Europa y de la necesidad de proteger su supervivencia.
Su aplicación se extiende a todas las lenguas, diferentes de la oficial en el Estado,
habladas tradicionalmente por un grupo numéricamente inferior al de la lengua oficial del
Estado. Excluye dialectos de la lengua oficial y las lenguas de la inmigración reciente. A
través del reconocimiento de la riqueza lingüística se trata de garantizar la supervivencia
de un patrimonio cultural que ha sufrido durante siglos la marginación, intentos de
asimilación y que en algunos casos se encuentra en peligro de extinción. Los
compromisos que los Estados seleccionan son flexibles, y permiten adecuar el régimen de
protección a la situación real de las lenguas. Así, el instrumento de ratificación de España,
otorga el grado mayor de protección a las lenguas co-oficiales de las Comunidades
Autónomas, como el catalán en Catalunya, mientras dispensa uno menor a lenguas como
el bable en Asturias, el aranés en el Valle de Arán o la fabla y el catalán en Aragón.
A través de un sistema de informes y de la labor del Comité de Expertos del Consejo
de Europa, se garantiza un seguimiento de la implementación y aplicación de la Carta. En
este sistema son importantes las aportaciones que permiten a la sociedad civil (a través
de organizaciones no gubernamentales, asociaciones de hablantes de la lengua en
cuestión, etc.) participar en la elaboración del informe.
En el caso de España, la Carta sigue la misma línea que el compromiso contenido
en el artículo 3.3 de la Constitución: “la riqueza de las distintas modalidades lingüísticas
de España es un patrimonio cultural que será objeto de especial respeto y protección.” 19
El Estado español ha seleccionado para las lenguas co-oficiales a nivel autonómico los
artículos que proporcionan el grado mayor de protección, pero son las Comunidades
Autónomas las que han asumido, a través de sus Estatutos de Autonomía, este
compromiso y han desarrollado avanzados regímenes de protección. Sin embargo, el
reconocimiento ha sido desigual en las distintas Comunidades Autónomas y aunque
España se encuentre en la vanguardia de la protección de las lenguas minoritarias y
regionales, se observan disfunciones que hacen necesaria y valiosa la labor del Consejo
de Europa.
En su último informe (Septiembre 2005), el Comité de Expertos del Consejo de
Europa reconocía la extraordinaria labor de las autoridades españolas y el florecimiento
del catalán, euskera y gallego. Al mismo tiempo reconoce problemas en la práctica en
19
Véase http://www.constitucion.es/constitucion/castellano/titulo_preliminar.html.
Ogigia. Revista electrónica de estudios hispánicos
102
campos como la justicia, la administración, los medios de comunicación y la educación, en
cuanto a las lenguas designadas co-oficiales en el ámbito de la Comunidad Autónoma. La
problemática del euskera en la zona mixta de Navarra provoca un gran número de críticas
y comentarios de los expertos. La situación de las lenguas sometidas al nivel mínimo de
protección es casi siempre crítica y así se recoge en el informe. La ausencia de política
lingüística en Aragón, la falta de investigación, reconocimiento y apoyo al gallegoasturiano en Asturias son ejemplos, por no citar el no reconocimento de realidades
lingüísticas tradicionalmente existentes como el gallego en Castilla y León, el bereber en
Ceuta o el portugués en Olivenza. Realidades que en algunos casos desaparecen lenta
pero inexorablemente ante el desinterés social y político. Precisamente, la creación a nivel
nacional de una conciencia acerca de las otras lenguas españolas es uno de los objetivos
a los que, según los expertos, España debería aspirar.
En definitiva, el Consejo de Europa proporciona una constatación de las luces y
sombras de un compromiso que España adquirió para y con las lenguas regionales y
minoritarias, y que todavía se desarrolla desigualmente.
Agradecimientos
Especiales agradecimientos:
A la señora Madelena Grossmann, Departamento Cultura del Consejo de Europa,
responsable del Proyecto de Creación de Capital Cultural, por la dedicación, el entusiasmo y la
confianza que manifestó en ofrecerme la oportunidad de colaborar en proyectos de cooperación
internacional y en tema de diversidad cultural.
A la señora Françoise Tondre, Departamento Cultura del Consejo de Europa, responsable
del programa de Itinerarios culturales, por la amabilidad, la disponibilidad y el interés manifestados
en las conversaciones sobre el tema de itinerarios culturales y de cooperación internacional.
A la señora Gesa Büttner, Departamento Cultura del Consejo de Europa, Gestora de
Información en la Unidad de Investigación y Desarrollo sobre políticas culturales, por la incansable
y puntual labor informativa que permitió profundizar mis conocimientos sobre las políticas
culturales europeas.
A Pablo Aguirrezabal Juaregui, en prácticas en la División de Lenguas Regionales y
Minoritarias, por su significativa aportación sobre la situación de las lenguas regionales y
minoritarias en el territorio español.
A Vanessa Bianchi y a Dorottya Kovasznai, en prácticas en el Departamento Cultura, por el
soporte técnico, la colaboración y los preciosos momentos vividos durante la estancia en
Estrasburgo.
Chiara Atzori
103
Anexo A
Gran itinerario cultural del Consejo de Europa
1. Los Caminos de Santiago de Compostela
2. El itinerario Mozart
Tema del itinerario
Los caminos de
peregrinación
Personajes europeos
3. El legado de Al-Andalus
El camino de la Lengua Castellana y su expansión
4.
por el Mediterráneo: las rutas de los Sefardíes
5. Lugares, rutas y monumentos hanseáticos
6. Parques y Jardines, el Paisaje
Los Vikingos y los
Normandos
Los caminos de
La Via Francigena
peregrinación
San Martín de Tours, personaje europeo, símbolo Personajes europeos
del compartir
Itinerarios europeos del patrimonio judío
La influencia monástica
La red de sitios cluniacenses
7. Las rutas de los Vikingos
8.
9.
10.
11.
12. Las Rutas del olivar
13. La Via Regia
Transrománica – Itinerarios del arte románico en
14.
Europa
Itinerario cultural del Consejo de Europa
Tema del itinerario
15. El itinerario Schickardt
16. Arquitectura sin fronteras
Personajes europeos
17. Los itinearios Wenzel y Vauban
Arquitectura militar
fortificada en Europa
Patrimonio industrial en
Europa
18. La Ruta del hierro en los Pirineos
19. La Ruta del hierro en Europa central
20. La Ruta de Don Quijote
21. Los caminos de San Miguel
22. Las rutas de los Fenicios
Itinerarios europeos del patrimonio de las
23.
migraciones
24. La Vía Carolingia
Hábitat rural
Ogigia. Revista electrónica de estudios hispánicos
104
Imágenes
·1y2
·3y4
Chiara Atzori
·5y6
·7y8
105
Ogigia. Revista electrónica de estudios hispánicos
106
· 9 y 10
· 11 y 12
Chiara Atzori
· 13 y 14
· 15 y 16
107
Ogigia. Revista electrónica de estudios hispánicos
108
· 17 y 18
· 19 y 20
Miguel Ángel Hidalgo Martínez
109
EL JARDÍN DEL SENDERO QUE SE BIFURCA: ANÁLISIS ECONÓMICO – POLÍTICO
DE LA INTEGRACIÓN Y POSTERIOR REINSERCIÓN DE AMÉRICA LATINA EN EL
SISTEMA MUNDIAL.
Miguel Ángel Hidalgo Martínez
“La unidad de nuestros pueblos no es simple quimera
de los hombres, sino inexorable decreto del destino.”
Simón Bolívar.
Militar libertador y estadista.
Resumen
El vertiginoso paso del sistema mundial del siglo XXI penetra incuestionablemente
en todas las estructuras estatales y privadas para consumar el proceso de globalización y
convertir el planeta en un solo ente monolítico engendrado en la luz del “libre mercado”.
Ante tal situación, los gobiernos izquierdistas de América Latina contemplan la integración
regional para insertarse en esta dinámica. A pesar de sus afinidades ideológicas, hay dos
posiciones diferentes para llevar a cabo el proceso de fusión de bloques regionales:
administrar las variables macroeconómicas a través de la tutela del Estado o usar la
capacidad política estatal para planear el desarrollo de mercados internos e independizar
la disponibilidad del crédito en América Latina. Los países de la región se mueven en los
radios de estos dos círculos concéntricos, combinando posiciones y maniobrando
políticamente para definir la situación latinoamericana para los próximos años.
Palabras clave: Integración – Latinoamérica – Globalización – Estado
Abstract
The vertiginous world system’s rythm in the 21st century has deeply advanced into
the bureaucratic and corporative structures, preparing the success of the globalization
period, and through this way shifting the world into a monolithic piece grabbed by the “free
market”. Before this situation, the progressive latinamerican governments have looked at
the “integration process” as a useful method to join the world system. Despite of their
ideological affinities, there are two different positions about how to push forward the
integration process through the countries in Latinamerica: the macroeconomic
110
Ogigia. Revista electrónica de estudios hispánicos
administrative tool used by the State and the political power used to design social
development proyects and independent loans. The countries in Latinamerica join both
positions, going around in the inner circles, waiting for the right moment to play a political
movement in order to decide the region’s future.
Key words: Integration – Latinamerica – Globalization – State.
El umbral del siglo XXI cobija los pasos de un peculiar proceso de dimensiones
planetarias: la estructuración y consolidación de un sistema – mundo capitalista
descentralizado, con una lógica extraterritorial cuya vanguardia yace en los interminables
flujos de capital especulativo. Los actores involucrados en las relaciones internacionales
de nuestro tiempo asisten a una coyuntura histórica sin precedentes: toda trascendental
importancia del poder político parece haberse diluido con el último estertor del “socialismo
real” para dar paso a una etapa absolutamente dominada por el mercado global y su
“destrucción creadora”. Ante tal situación, los latinoamericanos acudieron a las urnas en
varios países durante los últimos años con un tremendo desencanto por lo que sus
respectivas economías habían estado sufriendo estoicamente a manos de los ataques
especulativos y de la intrínseca asimetría comercial del sistema – mundo anteriormente
descrito, situación provocada en gran medida por la adhesión de varios gobiernos de
América Latina al “Consenso de Washington” (ampliamente difundido como panacea
económica para sanar el duro impacto de la década de los ochentas en América Latina).
Esto provocó una obvia reacción política que en América Latina había aparecido ya desde
principios del siglo XX como un reflejo social del duro golpe ocasionado por la Gran
Depresión de 1929: el electorado enarboló estandartes izquierdistas – progresistas,
instalando gobiernos de la misma tendencia política en casi todos los países
latinoamericanos. Así las cosas, y ante el reto de elevar el desarrollo social y
desempantanar económicamente a sus respectivos pueblos, los izquierdistas y recién
electos gobiernos de América Latina han dado prioridad estratégica a la integración
hemisférica como una pertinente herramienta de trabajo; sin embargo no todos los
gobiernos tienen la misma visión al respecto pese a sus coincidencias ideológicas. Hay
dos principales perspectivas de este proceso que tiene momentáneamente a América
Latina disuelta en distintos bloques regionales: el jardín de la integración latinoamericana
tiene un sendero que se bifurca. La principal diferencia en estas dos visiones o
perspectivas diferentes yace en el papel, capacidades y prerrogativas del Estado a
Miguel Ángel Hidalgo Martínez
111
propósito de la gestación, consumación y consolidación de la integración latinoamericana.
En las siguientes líneas se describirá primeramente la naturaleza del sistema – mundo en
el cuál América Latina aspira a insertarse y posteriormente se realizará un análisis
económico y político sobre la divergencia de perspectivas entre los países de la región en
cuanto al papel que el Estado debe tener en el proceso de integración.
Después el colapso del “socialismo real” en 1991 cuyo paroxismo se reflejó en la
disolución de la Unión de Repúblicas Soviéticas Socialistas el sistema – mundo comenzó
una nueva escalada de transformaciones a paso vertiginoso. Ante el derrumbe de las
barreras políticas, el mercado global (comandado ideológicamente por el discurso
“libertador y democrático” del hegemón estadounidense) comenzó a penetrar todas las
antiguas estructuras a nivel mundial para iniciar un proceso de homogeneización
paulatino que muchos teóricos han resuelto en llamar “globalización”. Incluso hubo
algunos “escritores” como Francis Fukuyama que comenzaron a predicar “el fin de la
historia”, argumentando que la crítica al capitalismo que supuso el socialismo había
fracasado y que más allá del libre mercado ya no quedaba otra cosa mas que el
prometedor futuro.
La socióloga chilena Martha Harnecker explica, escueta
pero no menos
profundamente, la lógica de acción del nuevo sistema internacional después del fin de la
Guerra Fría: “El mundo puede funcionar en la actualidad cada vez más como una unidad
operativa única, como un mercado global de capitales.” Esto supuso un unilateralismo de
facto en el trazo del rumbo histórico mundial: la exaltación del paradigma socioeconómico
capialista, la reducción del debate político y el consecuente énfasis en la producción y el
intercambio comercial de valor agregado.
El sistema – mundo del siglo XXI va a perfeccionar su funcionamiento a través del
establecimiento de una red comunicativa que reproducirá imágenes e información hasta el
hastío, conectando en tiempo real y descentralizadamente todos los microsistemas
pertenecientes al omnipresente sistema – mundo.
Ante esta situación, el margen de poder político real de los gobiernos quedará
sustancialmente reducido, en ocasiones de manera escandalosa, para adherirse al “dejar
hacer – dejar pasar” con el que los teóricos clásicos de la economía liberal habían
descrito al espíritu del capitalismo. Los gobiernos pasarán a representar una parte más
del complejo entramado del sistema – mundo, perdiendo cualquier prerrogativa política
importante que hayan tenido en el pasado, sucediendo esto principalmente con los
Ogigia. Revista electrónica de estudios hispánicos
112
gobiernos de los países en vías de desarrollo, que se ven empujados a esta situación
ineludible por la urgencia económica que suponen sus elevados índices de pobreza.
Entonces, se puede aseverar que el presente estado histórico del escenario
internacional se encuentra dominado por un expansivo sistema capitalista que coacciona
a todos los demás actores con el aislacionismo si no se supeditan a su voraz lógica de
acción. Otro aspecto fundamental de este estado de “globalización” capitalista es su
marcada exacerbación neomercantalista: hay una gran cantidad de “dinero virtual”
circulando por el mundo cuya labor fundamental es crear más dinero y no producir bienes
tangibles que eleven el bienestar social.
Ante esta coyuntura, el papel de los gobiernos queda absolutamente reducido:
“Se trata de democracias restringidas o tuteladas, donde las grandes decisiones no son
adoptadas por los parlamentos sino por entidades que escapan a su control: las
grandes agencias financieras internacionales (FMI, BM); los bancos centrales, los
organismos de seguridad nacional, las empresas trasnacionales o los dueños de los
flujos de capital”.
Otro componente fundamental en el sistema – mundo capitalista neomercantilista
son las grandes instituciones crediticias controladas por los países más poderosos desde
sus mecanismos de toma de decisiones: el Fondo Monetario Internacional (FMI), el Banco
Mundial (BM) y la Organización Mundial del Comercio (OMC). Esta “tríada” opera
principalmente con los países menos desarrollados como “promotora” del progreso de la
nueva era, a través de la asesoría técnica para la competitividad y los préstamos (con
intereses exorbitantes) para el desarrollo social. El crédito es fundamental para la
perpetuación del actual sistema – mundo ya que constituye, en síntesis, la capacidad de
acción o inacción de una sociedad o gobierno actualmente.
Conformado como un inmenso y ligero ente interconectado, el mercado mundial es
naturalmente volátil debido a la asimetría en el reparto de sus beneficios. Para demostrar
esto bastaría citar las trágicas experiencias de México en 1994, de los países de la
Cuenca del Pacífico en 1997 o de Argentina en el 2001. Los bruscos movimientos de
capital siguen el “Patrón Atila”: por donde pasa su caballo, no vuelve a crecer la hierba.
Este panorama parece no dejar opción alguna a los gobiernos latinoamericanos
acerca de su papel político domésticamente hablando y en el sistema – mundo: si no hay
una correcta inserción en el mercado global no habrá entrada de divisas al país, los
índices de competitividad bajarán, la moneda se depreciará y finalmente las escasas
Miguel Ángel Hidalgo Martínez
113
utilidades públicas que queden serán posteriormente depredadas por capitales de cartera
en la compra especulativa de desesperados bonos de deuda externa. La disyuntiva
política para los gobiernos reside en cómo adaptarse al mercado global, no en si hay que
hacerlo o no. He ahí la gran crisis política de nuestro tiempo. El debate es únicamente de
forma, no de fondo.
A pesar de la potencialidad catastrófica de lo anteriormente establecido, los pueblos
latinoamericanos parecen levantar la mano y tratar de buscar otro camino que inicia con la
apelación al recurso más anticuado en el mundo globalizado: la política ejercida a través
del interés público. Esta actitud es, por sí misma, una clara muestra de resistencia ante
los embates del sistema – mundo neomercantilista.
La última jornada electoral en América Latina tenía antecedentes particulares que
permitieron la construcción de un resultado distinto al de otros años: la década de los
ochentas significó un importante retroceso para los aparatos productivos de la región
debido al anclaje que supuso el pago de los elevados intereses de la deuda externa
contraída a manera de emergente rescate por la drástica caída del petróleo y otras
materias primas en los setentas. Los gobiernos latinoamericanos comenzaron a
“reprogramar” su gasto público durante los noventas para evitar cualquier otra
desestabilización económica, por lo que la mayoría de ellos se adhirió al Consenso de
Washington. De esta manera comenzó la “gestación técnica” de las economías
latinoamericanas, con la asesoría de las instituciones internacionales crediticias
anteriormente mencionadas. Se enfatizó el papel estratégico de la inversión extranjera, se
redujo significativamente la inversión del Estado y se comenzaron a privatizar las
empresas paraestatales. El resultado fue contraproducente en el corto plazo. Países
como Bolivia comenzaron estos procesos sin el marco jurídico apropiado, lo que provocó
una inmediata inestabilidad social debida al dudoso maniobrar del gobierno en la
implementación de estas políticas. Otros países como México, operaron este cambio tan
repentina y aleatoriamente que el resultado fue catastrófico: una crisis financiera sin
precedentes y el cuasi aniquilamiento del aparato productivo doméstico a manos de los
bancos nacionales que demandaban al gobierno un rescate urgente de las garras
especulativas del neomercantilismo global.
Sin duda alguna el punto culminante de los errores cometidos por los gobiernos
latinoamericanos adictos al “Consenso de Washington” vendría a presentarse en
Argentina, desde el 2001. El gobierno argentino comenzó congelando la paridad
cambiaria del peso argentino con el dólar estadounidense, maniobra astuta para ingresar
Ogigia. Revista electrónica de estudios hispánicos
114
divisas al país y darle certidumbre a la inversión extranjera, así como para inyectarle
versatilidad financiera a la economía. Sin embargo, el factor neomercantilista del sistema
–mundo comenzó a trabajar ya que 51.4% del total de la inversión extranjera directa que
ingresó a Argentina provenía de capitales de cartera (Atila estaba cabalgando ya en las
puertas de la Casa Rosada). Esto comenzó una gran burbuja especulativa, acentuada por
el elevado endeudamiento externo del gobierno (cuyos préstamos eran concedidos a
granel por el FMI) que comenzó a publicar bonos de deuda. Adicionalmente, la moneda
argentina se apreció en los mercados internacionales (debido al movimiento ascendente
del dólar estadounidense), lo que resultó en una descomposición absoluta en la balanza
de pagos y en la consecuente recesión económica acelerada por el desaprovechamiento
de los préstamos que el gobierno había solicitado. Lo más golpeados fueron los
clasemedieros, ya que las autoridades monetarias argentinas encerraron sus ahorros
como garantía para no hacer quebrar los bancos a través de la nefasta política pública
llamada “corralito”. Esta situación condujo a una convulsa sociedad argentina a las calles
para exigir la salida de la depredadora clase política que la había puesto contra el suelo.
El efecto hizo eco en los países vecinos, especialmente en Brasil, cuyo Índice de Precios
al Consumidor (INPC) se disparó desde el superávit en la balanza de cuenta corriente que
sostiene con Argentina.
Estos acontecimientos hicieron reaccionar a la sociedad latinoamericana y poner el
dedo sobre el renglón de las políticas públicas que sus respectivos gobiernos seguían en
el modificado y neomercantilista sistema – mundo. Cualquier mínimo error cometido en la
globalización sería castigado fuertemente por la especulación, la “tríada” (FMI – BM –
OMC) y las trasnacionales.
Es así como en la última jornada electoral la mayoría de los sufragantes
reivindicaron la legitimidad del Estado como principal promotor de las políticas públicas y
como el eje más importante en la procuración de bienestar social, manifestando esto a
través del sufragio por los programas electorales más abocados a esta causa. A pesar de
que la mayoría de los mandatarios electos en Latinoamérica durante el último período
electoral son de tendencia izquierdista – progresista, sus visiones acerca del Estado y de
sus capacidades políticas dentro de la globalización son sumamente distintas. Al
respecto, la visión acerca de la integración de América Latina servirá como brújula para
ubicar este diferencia sustancial entre los gobiernos en el área.
El sendero hacia la integración de Latinoamérica se bifurca de acuerdo a diferentes
perspectivas económico – políticas: por un lado está la visión de la “administración técnico
Miguel Ángel Hidalgo Martínez
115
– financiera” que concibe al Estado como regulador macroeconómico y promotor de las
inversiones extranjeras como entrada de divisas a la región, el estandarte de esta causa
lo enarbola
Brasil (hegemón sudamericano y la economía más poderosa del
subcontinente); y por otro lado se encuentra una visión de “economía social constitutiva”
que pone en el centro de la discusión al Estado como principal agente productivo, factor
fundamental en los ciclos económicos y reivindica su importancia política en el escenario
internacional, la vanguardia de este movimiento recae en la República Bolivariana de
Venezuela (potencia petrolera mundial cuya agresiva política exterior la ha colocado en
una posición estratégica en América Latina). A pesar de converger en el MERCOSUR
(organismo ante el cuál Venezuela ha presentado su solicitud de adhesión), es claro que
ambos países tienen visiones diferentes acerca del papel del Estado en el proceso de
integración y el consecuente posicionamiento que Latinoamérica deberá asumir en el
escenario internacional.
Administración
técnico
–
financiera”:
estabilidad
macroeconómica
y
disolución del estatocentrismo.
Dentro de esta perspectiva acerca de la manera en que habría de proceder la
integración de América Latina se encuentran principalmente dos bloques regionales: la
Comunidad Andina de Naciones (CAN), integrada por Ecuador, Bolivia, Colombia y Perú;
y el MERCOSUR, en el cuál toman parte Brasil, Uruguay, Argentina y Paraguay. Ambos
bloques se encuentran en diferentes fases de integración económica. Mientras que la
CAN está homologando sus indicadores macroeconómicos y tratando de reducir la
galopante inflación que tan continuamente golpea a sus países miembros, el MERCOSUR
ha establecido (desde su fundación en 1991) un proceso fructífero que ha desembocado
en la implementación de una unión aduanera con impuestos comunes, factor que permite
unificar las balanzas de pagos de los cuatro países miembros.
La CAN tiene entre sus iniciativas establecer una moneda común para los países
miembros, sin embargo se enfrenta al apremiante problema que representa la escasez de
fondos para sostener el valor de esta divisa en los mercados internacionales. Además de
que el establecimiento de su “unión aduanera” no es completamente homóloga debido a
la preferencia de algunos países de este bloque con otros en el exterior. En tanto que el
MERCOSUR ha profundizado en su integración económica y ahora ya está dando pasos
en el aspecto político, instalando un Grupo Consultivo acerca de los sucesos
internacionales que involucren a los cuatro países miembros.
Ogigia. Revista electrónica de estudios hispánicos
116
Tanto la CAN como el MERCOSUR enfatizan en el estratégico manejo de los
indicadores macroeconómicos como la puerta hacia la estabilidad y el consecuente
bienestar
social.
De
esta
manera,
su
perspectiva
acerca
de
la
integración
Latinoamericana pone al Estado como un facilitador de los flujos de capital en vísperas de
la armonía económico – social. La CAN y el MERCOSUR han firmado un protocolo que
les permitirá fusionarse en los años venideros, sin embargo este hecho presenta muchas
problemáticas siendo la primera y más importante la terrible asimetría entre los aparatos
productivos de los países andinos y los del cono sur.
La visión de la administración “técnico – financiera” como pauta para la integración
de América Latina ve en el sistema – mundo una oportunidad inmejorable para atraer
divisas a la región y ayudar a incrementar el superávit en las balanzas de pagos de los
países latinoamericanos, tal como lo postula el MERCOSUR en su portal oficial, en donde
se jacta de ser el principal centro de atracción de inversión extranjera en el área.
Esta concepción supone que el Estado debe aminorar su poder de decisión (y
consecuentemente su margen de maniobra) en las incidencias que se presenten dentro
de su respectiva jurisdicción nacional con la finalidad de poder insertar más rápidamente a
América Latina en el escenario internacional, adquirir competitividad y ser una zona
prolífica de libre comercio. De esta manera, los principales indicadores de bienestar social
(PIB per capita, tasa de desempleo, niveles de pobreza, entre otros) quedan altamente
supeditados a la acción que el sistema – mundo realice sobre las economías nacionales,
ya que el Estado permanecerá al margen y únicamente administrando (estratégicamente
o no) la incidencia de la globalización sobre su jurisdicción territorial.
Esta visión acerca de la integración latinoamericana iría más lejos aún cuando, de
ser posible, la CAN y el MERCOSUR se fusionen y comiencen así a mover la autoridad
estatal en América Latina a un mostrador de turismo en donde se les exponga a las
trasnacionales más poderosas las “ventajas comparativas” (y podríamos añadir aquí
también las “facilidades” en materia fiscal) de traer inversiones a un inmenso mercado
lleno de materia prima y equilibrio macroeconómico.
La simple administración en la difícil convivencia de América Latina con el sistema –
mundo no necesariamente conducirá al mejoramiento de los índices sociales o de calidad
de vida. Si los indicadores macroeconómicos están en orden y hay una fuerte entrada de
divisas a un país (no considerando los capitales de cartera) también significaría
posiblemente que la tasa de desempleo esté incrementándose o que la riqueza pudiera
estar mal distribuida. Es prerrogativa del Estado decidir a dónde y a quién beneficiará la
Miguel Ángel Hidalgo Martínez
117
creación de capital y de bienes tangibles, y es ese punto que esencialmente se olvida en
esta perspectiva de “administración técnico – financiera”.
También habría que considerar geopolíticamente la importancia de Brasil en estos
dos bloques regionales. Siendo la economía latinoamericana más poderosa, el país
carioca es la conexión más importante que tiene Estados Unidos hacia Sudamérica
(profundizándose ahora con la colaboración en la producción del etanol, posiblemente
pensado por Lula da Silva para minar la poderosa petro – política chavista de Venezuela).
Brasil tiene un superávit importante en la cuenta corriente con la mayoría de los países
sudamericanos, lo que lo colocaría como un “hegemón regional” interesado en hacer
prevalecer su situación actual. Brasil juega a través de la “Carta MERCOSUR” para
aprovechar su ventaja económica sobre los países sudamericanos y poder aumentar su
influencia, más ahora que Venezuela ha vaciado sus arcas petroleras reclamando (con
éxito sorprendentemente inesperado) un lugar en el liderazgo regional.
Economía social constitutiva: créditos independientes y planificación estatal.
Del otro lado se aglutinan otros dos bloques regionales que pugnan por una visión
radicalmente diferente a la reflejada en el MERCOSUR o la CAN: el Banco del Sur,
institución crediticia con las funciones de un banco y de un fondo monetario; y la
Alternativa Bolivariana para las Américas (ALBA), integrado magistralmente por
Venezuela y Cuba para aumentar el capital político de su proyecto subversivo del
“socialismo del siglo XXI”.
El Banco del Sur (cuya acta constitutiva habrá de firmarse en el marco de la
celebración de la Copa América de futbol en Venezuela) es sin duda alguna una iniciativa
económica muy agresiva y con un alto valor político para la integración latinoamericana.
Venezuela y Argentina impulsaron esta iniciativa, añadiéndose posteriormente en el 2007
los gobiernos de Paraguay y Brasil (la llave del MERCOSUR), Ecuador y Bolivia. El Banco
del Sur iniciará con un capital de 7,000 millones de dólares aportados por cada miembro
de diferente manera, a su conveniencia. Los mecanismos de toda de decisiones no serán
monopolizados por los países que más dinero aporten (como sucede en la “tríada
necrófila” de los organismos internacionales mencionados en el alba de este trabajo) sino
que se procederá de manera democrática, concediéndosele un voto a cada uno de los
miembros.
Las funciones del Banco del Sur son las de un banco debido al otorgamiento de
créditos para los países miembros. Los intereses y el manejo de estos créditos serán
Ogigia. Revista electrónica de estudios hispánicos
118
independientes de los bonos que se emitan en los países del Norte, independizando el
mercado latinoamericano de una manera significativa e iniciando el camino hacia la
“autonomía crediticia”, tan necesitada actualmente para América Latina después de la
pesada carga que significó la deuda externa a principios de los noventas.
Los países miembros también impondrán un impuesto común a toda inversión
extranjera que llegue a la región, para posteriormente transferir esa recaudación tributaria
a los fondos del Banco del Sur y continuar financiando proyectos de desarrollo social. Al
respecto de los destinatarios de los créditos, éstos serían pequeñas empresas,
comunidades marginadas, pueblos indígenas y proyectos para la construcción de
infraestructura pública.
En materia financiera, el Banco del Sur aseguraría un “fondo de rescate” para asistir
a los países que sean golpeados por crisis financieras internacionales, como lo que han
sufrido los países del MERCOSUR a propósito de la crisis en la Argentina.
El proyecto del Banco del Sur tiene una fuerte carga política. Por un lado, los
gobiernos son los artífices de la “independencia crediticia” de América Latina al iniciar la
formación de un fondo autónomo. Más importante aún, el Estado se convierte en un
agente económico trascendental para el desarrollo nacional al otorgar créditos a
pequeñas empresas y comunidades marginadas a través de la toma de decisiones del
Banco del Sur, ayudando a crear mercado doméstico, enfatizando directamente su lucha
en el combate a la pobreza y mejorando sustancialmente los indicadores de bienestar
social. El Estado se reviste del poder político que el triunfo en un proceso democrático
(elecciones) le concedió, para convertirse en el agente planificador por excelencia de una
economía simétrica y con visión humana.
La concesión de créditos a través del Banco del Sur no únicamente representa un
acto de resistencia ante la arbitrariedad unilateral del sistema – mundo sino que también
es una iniciativa por transformar la situación tan desigual que impera entre los países del
Norte y los del Sur (“brecha Norte – Sur”, versan algunos textos neoestructuralistas
acerca de la economía política del siglo XXI). Esta visión convierte al Estado en un fuerte
“poder constitutivo” y no únicamente en un “administrador” del sistema – mundo, como
postula el MERCOSUR o la CAN.
El otro bloque regional dentro de esta perspectiva es el ALBA. Conformado por
Venezuela, Bolivia y Cuba en un inicio; posteriormente se incorporaron Nicaragua y Haití,
y Ecuador como observador. Esta “alternativa” de integración es sin duda alguna una
maniobra geopolítica encabezada por el gobierno venezolano para conectar su proyecto
Miguel Ángel Hidalgo Martínez
119
del “socialismo del siglo XXI” con su fuerte e incuestionable petro – poder a través de la
“conexión centroamericana” (Nicaragua) y la “conexión caribeña” (Haití). Los acuerdos
más importantes en el ALBA se encuentran en el rubro de la cooperación energética,
principalmente de Venezuela hacia los demás socios a los cuáles les ha garantizado una
partida petrolera a manera de “transferencia” que permitirá satisfacer sus necesidades
petroleras. De esta manera, el Estado queda también como principal promotor de la
unidad latinoamericana (ya que hasta ahora PDVSA –paraestatal- es el central del ALBA),
retomando su “capacidad constitutiva”, reivindicada también en el Banco del Sur, para ser
la piedra angular en la integración del subcontinente americano.
Casos especiales.
Peculiar atención merecerían Chile (la economía más sana y competitiva de
Sudamérica) y México (segunda economía más poderosa de la región), dadas sus
características. Los chilenos, atrapados por los mitos históricos en su convivencia con sus
vecinos, han desarrollado una vocación al exterior (asociándose comercialmente con
Estados Unidos y ahora con China, siendo abanderados de la carta asiática en
Latinoamérica). Aunque son socios estratégicos del MERCOSUR su incidencia en la
integración regional tiene muy poco peso político por ahora. En el caso de México, su
dependencia comercial exacerbada hacia los Estados Unidos y los infantiles errores en el
manejo de su política exterior (especialmente respecto a Venezuela) lo han ido aislando
casi por completo de toda la dinámica anteriormente descrita.
Aunque la “marea” de gobiernos izquierdistas en América Latina podría sugerir el
tránsito hacia una unidad regional sólida con la cuál encarar el futuro, los gobiernos
latinoamericanos están transitando por un camino bifurcado hacia la integración: la
diferencia fundamental yace en que unos gobiernos conciben el papel del Estado como
“administrador” y otros como “planificador”.
Muchos países sudamericanos comparten bloques regionales a pesar de su
diferente perspectiva sobre el papel que debe desempeñar el Estado, esto plantea un
área
de
oportunidad
fundamental
para
destrabar
el
proceso
de
integración
latinoamericano: el cabildeo político y el uso de la negociación en la eventual fusión de los
bloques regionales.
El peso de cada una de las propuestas también dependerá del nivel de compromiso
mostrado por sus actores: si Venezuela logra mantener a flote el ALBA con su poderío
petrolero y Brasil falla en continuar con su disciplina macroeconómica a través del
Ogigia. Revista electrónica de estudios hispánicos
120
MERCOSUR las cosas se verán sustancialmente modificadas en ambos bloques debido
al peso político venezolano en aumento. Ahora depende en gran medida de los amarres o
divorcios políticos que los gobiernos latinoamericanos puedan consumar durante los años
venideros, ya que muchos de ellos están involucrados en los mismos bloques regionales.
A fin de cuentas, el debate tendrá que ser político.
Con el Estado como punta de lanza política o con la regulación y administración
macroeconómica, América Latina debe prepararse para encarar las albas venideras bajo
un frente unido, porque es precisamente unidos como venceremos.
Bibliografía
BUSTELO Pablo, “Los orígenes de la crisis financiera de Argentina: una
comparación con la crisis financiera asiática”, Boletín Económico de Información
Comercial Española, Enero del 2002, pp. 9 – 14.
Comunidad Andina de Naciones (CAN), Integración Comercial, Consultado el 9 de
Junio del 2007, Disponible en línea: <http://www.comunidadandina.org/comercio.htm>
Central Intelligence Agency (CIA), Worldfact Book, Consultado el 8 de Junio del
2007, Disponible en línea: www.cia.gov
DOS SANTOS Theotonio, “La teoría de la dependencia. Balance y perspectivas”,
México Ciudad de México, Editorial Plaza & Janés, 2002, p. 27.
La Jornada, “Busca Estados Unidos un acuerdo con Brasil acerca del etanol”,
Consultado el 10 de Junio del 2007, Disponible en línea, Internet:
<http://www.jornada.unam.mx/2007/02/08/index.php?
section=economia&article=026n1eco>
HARNECKER Martha, “Sobre la estrategia de la izquierda en América Latina”,
Science & Society, Volumen 69 Número 2, 6 de Octubre del 2004, pp. 12 y 20.
MERCOSUR, Consultado en Internet el 9 de Junio del 2007, Disponible en línea:
<http://www.mercosur.int/msweb/>
TOUSSAINT Eric, “Sobre las circunstancias que afectan a la creación del Banco del
Sur”, Rebelión, Consultado en Internet el 8 de Junio del 2007, Disponible en línea: <http://
www.rebelion.org/noticia.php?id=51176>
WALLERSTEIN Immanuel, La crisis estructural del capitalismo, México Ciudad de
México, Editorial Contrahistoria, Octubre del 2005, pp. 24 y 47 – 49.
Reseñas
121
RESEÑAS
122
Ogigia. Revista electrónica de estudios hispánicos
Reseñas
123
FERNÁNDEZ, Saúl, Basado en hechos reales: diez historias,
Oviedo, C y Ediciones del Norte, 2006. 95 pp.
ISBN: 84-609-8106-1
Javier García Rodríguez
(Universidad de Valladolid)
LA SOCIEDAD PRESENTE COMO MATERIA NOVELABLE
Más allá de estrellas mass mediáticas que brillantes, con meteóricas carreras
conducidas pulcramente a través de medidas campañas promocionales (en las que
mucho tiene que ver el desparpajo transmutado en descaro del autor y el soporte de una
industria muy novísima), y más allá de los opulentos premios literarios, con sus
estrategias de marketing, sus cuentas de resultados, sus nichos de mercado y sus
targets, la actualidad de la última generación de narradores asturianos, entre los que hay
que contar al grupo de las fantasmagóricas “leyendas urbanas” junto al de los –discúlpese
lo anacrónico de la broma- “exilio interior”, nos ofrece colecciones específicas, nuevos
proyectos editoriales y empresas consolidadas, en las que han apareciendo en los últimos
tiempos obras de, entre otros, Ricardo Menéndez Salmón, Ignacio del Valle, Miguel
Barrero, Alfonso López Alfonso, Carmela Greciet, Javier Almuzara, David López, Martín
López-Vega, Jordi Doce, Antonio Valle, Miguel Postigo o Ana Vega. Novelas, relatos,
aforismos, reflexiones o libros híbridos han visto la luz recientemente, sin olvidar la
propuesta plural de los muy interesantes proyectos colectivos Nuevas maneras de contar
un cuento (coordinado por José Ángel Gayol para Libros del Pexe) y Cuentistas
(coordinado por Jesús R. Castellano para el Ateneo Obrero de Gijón).
Saúl Fernández (1974), periodista y autor de otras obras como el libro de relatos
Maneras perdidas y otras historias (2001) y la novela corta Las demás historias (2004),
representa la vía más realista de esta actualidad narrativa con su libro de relatos Basado
en hechos reales: diez historias. El propio título resulta ya revelador de una declaración
de intenciones estéticas donde prima la consideración de sus relatos como representación
ajustada y certera de la realidad (paradójicamente, la casualidad ha querido que el mismo
Ogigia. Revista electrónica de estudios hispánicos
124
título haya sido elegido posteriormente por Juan Bonilla para una antología de sus
cuentos, aunque en este caso ni la propuesta estética, ni el sustento teórico, ni la idea de
realidad coincidan en absoluto con la de Saúl Fernández). Por tanto, de acuerdo con la
Teoría de los Mundos Posibles desarrollada por Tomás Albaladejo y continuada por Javier
Rodríguez Pequeño para explicar las construcciones literarias a partir del uso de la
ficción, el mundo que propone Saúl Fernández pertenecería al tipo de modelo de mundo
de lo “ficcional verosímil”, donde las leyes que lo rigen, aunque no son las de la realidad
efectiva, son similares a las de ésta, y el referente literario obtenido está formado por
seres, estados, procesos, acciones e ideas que podrían formar parte de esa realidad
primera sin quebrantar la verosimilitud, porque su fuerza reside, precisamente, en la
representación mimética. La adscripción de Saúl Fernández a esta estética del realismo
debe hacerse atendiendo a los magisterios evidentes que emanan de su obra, y que
trazan una genealogía que comenzaría en Galdós y continuaría en Ignacio Aldecoa (la
atención al detalle) y Juan Marsé (la mirada irónica pero compasiva). Fernández se ha
creado su propia tradición (todo escritor lo hace), la que queda ejemplificada en el título
de esta reseña, que es el título del discurso que, en 1897, pronunció Galdós ante la Real
Academia Española: “La sociedad presente como materia novelable”. Decía allí Galdós:
“Imagen de la vida es la novela”. Saúl Fernández se aplica a estas premisas y postula en
una entrevista: “Yo entiendo la narrativa como un espejo de lo cotidiano. Y si quiero seguir
esta premisa es necesario que la base de los relatos sea la mía propia. Soy periodista,
vivo en Asturias (…)”.
Con estos mimbres, y con la influencia de un estilo deudor del periodismo (“Los
materiales accesorios simplemente distraen de la lectura”, ha dicho el autor), pero muy
cuidado y preciso, donde priman la descripción exacta, el humor punzante con ribetes
tristes, la emoción contenida y el diálogo como recurso, Basado en hechos reales se nutre
de un catálogo de situaciones cotidianas del presente fácilmente reconocibles, junto a
historias del pasado que siguen teniendo una influencia capital en el presente, todo ello
con la base geográfica de Asturias o con “lo asturiano” como fondo. Pero más allá, intuyo,
el pilar que sustenta los relatos de Saúl Fernández es la constante reflexión en torno al
narrar, a las posibilidades del decir, a los valores –ideológicos, éticos- que hay detrás de
cada historia, a dilucidar quién cuenta y por qué y cómo, a poner en tela de juicio quién es
el dueño de las historias que se cuentan, a la posibilidad de reescribir lo ya pasado. Y
aunque esta reflexión queda muy desleída -por decisión propia del narrador en una
maraña de acontecimientos comunes, anécdotas cotidianas, lugares conocidos,
Reseñas
125
personajes del día a día, situaciones banales –o que se dan como tales- y hechos
noticiables, no es descabellado postular que estos relatos tratan de cómo el individuo
recupera su memoria, rechace sus recuerdos, reescribe su historia, a partir de los retazos
–deslabazados, quebradizos, siempre incompletos- que ha recibido de los que contaron
antes que él o de las percepciones que le ofrecen sus propios sentidos.
Luego, en cada relato, encontraremos esta reflexión sobre la historia y sus
narraciones ejemplificada en un momento histórico y con una anécdota que la haga
presente y la vivifique. En “Ciertos presagios”, el fondo será el de la Guerra Civil española
vivida desde Asturias (“Son tiempos estos de reescritura de la historia, de estupideces
faltas de rigor y de borracheras de sabios constituyentes. Sabe usted que me gano la vida
con la enseñanza, en un instituto de secundaria, sabe que me dedico a contar cómo
sucedieron las cosas que hicieron de este país el que ahora tenemos entre manos”. “Es
difícil seguir una línea narrativa y no perderme”. “No sé qué quiere saber más, no sé si lo
que pretende es que le hable de mí, de mi padre o de mi abuelo”. “Un profesor borracho,
un divorciado desamparado, un estúpido con voluntad de encontrar su origen”). En “La
mujer caníbal de la calle Bayard”, un truculento suceso protagonizado por una inmigrante
asturiana en una Nueva York hambrienta y cruel, contado a varias voces y con un final
sorprendente (“Los periodistas debemos contar los hechos tal cual han sucedido…”). En
“Mi hermana Violeta”, una historia cotidiana de relaciones familiares, amores y envidias
(“La historia no sé bien yo todavía cuándo explota…”. “Fue, creo, cuando comenzó de
verdad toda esta historia”. “Me aclararon después lo que faltaba y por eso ahora se lo
cuento a usted. Quizá le he molestado con todo esto, pero imagino que sabrá
disculparme. La historia de mi hermana Violeta. No sé qué más decirle”). En “¿Quién
mató a Jesucristo?”, la doble estructura narrativa pasa constantemente del presente al
pasado a través, una vez más, de la reinterpretación de la historia, en este caso el
Evangelio releído a la luz de las investigaciones de Jude Velarde (“Leí. Y leí bien. Según
las notas que me prestó el profesor de Turón, Jesucristo murió víctima de un sorprendente
ataque de celos del gobernador de Judea, Poncio Pilato, amante de Magdalena”). En
“Paciencia de corso”, un Napoleón sonriente espera el derrumbe de su imperio y de su
sueño. En “La muerte progresiva”, los pequeños detalles de una espera con final
previsible, con sus miserias mínimas y sus verdades inexorables, en un hospital. En
“Celebración de la impostura”, un asesino confeso se reivindica como dueño de su historia
(“Mañana imagino que esto que le cuento se publicará en la prensa”. “Porque yo se lo he
contado: usted es el más grande, pero yo soy el mejor”). En “Historia de cimbrios y
Ogigia. Revista electrónica de estudios hispánicos
126
celtíberos”, con un fondo de política local y vidas tristes, el protagonista afirma que su
mujer se enamoró de él “porque siempre te encantaron mis historias”. Y el narrador de “El
lado salvaje de la vida” recuerda que “En aquel tiempo yo quería ser el protagonista de la
leyenda” (un relato, por cierto, que es una especie de minihistoria literaria de las últimas
promociones de autores asturianos). Narrar la vida, vivir la historia, hacer historia de la
narración.
Por este libro aparece, como un fantasma constante y musical, una Alicia Briz que
vive en todos los relatos; y también alcaldes ovetenses y políticos mafiosos, periodistas
sin escrúpulos, reyes de España, suplementos dominicales, ciudades del norte, historias
de la guerra civil, algún cargo público (“gris y sindical”), escritores de culto (uno de nombre
Saúl Fernández, claro), estudiantes perennes abonados a la bohemia cutre y cachonda,
elementos líricos casi imperceptibles (“El olor de las manzanas es oscuro”, ardillas que
son presagios), sarcasmos evidentes (“Franco para mi tío Fermín venía a ser un
demócrata cristiano o a lo sumo, un liberalote un tanto flojo, de ahí su simpatía hacia
Aznar”), un excelente manejo del tiempo de la narración y sus voces, vidas pequeñas
convertidas en literatura, historias mínimas y grandes pasiones, homenajes literarios
constantes, juegos de palabras, relaciones que terminan, humor grueso y delgado,
realidades reconocibles… La forma de contar de Saúl Fernández, evitando las
generalizaciones, centrándose en la acción, ejercitando el diálogo, abominando del tópico,
yendo al grano, filtrando lo sobrante, huyendo de lo accesorio (aunque a veces nos
invade la sensación de excesiva rapidez), ofrece una narración donde el artificio se pone
a la vista para que no distraiga su búsqueda y donde el relato es eficaz porque hace
visible lo evidente.
La casualidad –el destino, la suerte, lo que sea- ha dispuesto que mi lectura del
último libro de Saúl Fernández, Basado en hechos reales: diez historias, coincida con la
relectura del libro de relatos de Felipe Benítez Reyes Maneras de perder. Y aunque nada
hay, a primera vista, que relacione a ambos autores y que vincule sus estéticas, es en uno
de esos relatos, el titulado“El ordenador”, donde aparece un personaje de nombre Saúl
que me apropio ahora para concretar las características fundamentales de la propuesta
narrativa de Saúl Fernández que he querido poner de manifiesto: “Saúl era capaz de
imitar voces distintas... Su garganta era, por sí misma, un pequeño teatro embrujado”. Sí,
añado yo, el pequeño teatro del mundo. Y también: “...pero aún nos divertía más que Saúl
nos contase historias…”. Uno de los personajes de Saúl Fernández afirma en cierto
momento “Pienso que mi vida vista desde fuera pueda resultar singular, pero le seré
Reseñas
127
sincero: ambiciono la absoluta mediocridad. Como Horacio”. Desconozco si Saúl
Fernández se identifica con esta afirmación –también desconozco si es un “persistente
mal vendedor de sí mismo”, Francisco García Pérez dixit-, pero, como preconizaba el
erudito y amoroso autor de la Epístola a los Pisones y El arte de amar, sus relatos
instruyen (hacen pensar) y divierten (nos hacen disfrutar). Lo cual, según está el patio (de
Monipodio), es mérito notable.
128
Ogigia. Revista electrónica de estudios hispánicos
Reseñas
129
WALTERS, Gareth, Poems to Lisi. Francisco de Quevedo, Exeter
Hispanic Texts, University of Exeter Press, Exeter, 2006.192 pp.
ISBN: 978-0-85989-765-5
Begoña Casado Martín
Uno de los mayores problemas que el profesor de ELE encuentra a la hora de
enseñar literatura es la elección de los textos. Si el periodo en el que ha de profundizar es
el Siglo de Oro de la Literatura Española se encuentra, entonces, con un doble problema;
y si los alumnos a los que ha de enseñar este periodo son alumnos que no tienen un nivel
de maestría, se enfrenta a un reto.
Afortunadamente, caen, de vez en cuando, en nuestras manos libros que son de
gran ayuda para estos casos, y, éste es uno de ellos. El lector se encontrará con una
colección de poemas de Quevedo en español con su correspondiente traducción al inglés.
La versión española está despojada de arcaísmos, lo que los estudiantes sabrán apreciar.
Los poemas están traducidos al inglés de forma sencilla y eficaz, respetando muy bien la
métrica.
Esto, sólo podía hacerlo un buen conocedor de la Literatura Española: Gareth
Walters que lleva años dedicado a la traducción y a la enseñanza de la literatura española
en el Departamento de Lenguas Modernas de la Universidad de Exeter. Su propósito es
facilitar a los estudiantes de español el estudio de uno de los mejores poetas españoles;
pero el resultado sobrepasa sus expectativas.
Como ya hemos apuntado el texto es muy útil para los profesores de español que
enseñen literatura, pero, para los estudiosos de la Literatura Española, también resulta un
libro interesante porque supone una novedad en el orden en el que aparecen presentados
los poemas. A la muerte de Quevedo, su fiel amigo José González de Salas los publica.
Los Poemas a Lisi son 56 en esta edición y están divididos en dos partes. El
problema viene cuando aparecen después 14 sonetos más. Los editores modernos de
Quevedo, Florencio Janer, Luis Astrana Marín y José Manuel Blecua, los incluyen de
Ogigia. Revista electrónica de estudios hispánicos
130
formas tan distintas como alejadas de la realidad en la que fueron escritos. Gareth walters
entiende todos los poemas como un ciclo y, por ello, los intercala de forma que tengan
sentido de principio a fin. Una de las razones que le lleva a secuenciar los poemas es la
metáfora del fuego. Hay referencias a un fuego ardiente en los primeros poemas y otras
que sugieren brasas o llamas que se van a apagar, en los poemas finales.
Pero, no se trata sólo de una obra útil para los aprendices de nuestro idioma.
También es perfecta para aquellas personas cuya lengua materna es la anglosajona y que
deseen acercarse al estudio o al disfrute de un autor español.
No obstante, no se trata sólo de una obra útil para los aprendices de nuestro idioma
o para los estudiosos. En realidad, Walters acerca a aquellas personas, cuya lengua
materna es la anglosajona, la obra de uno de los genios de la literatura española. Para
ayudarlos en la tarea, introduce al lector en la literatura europea, haciendo un repaso de
la historia del soneto y los movimientos poéticos en Francia, Inglaterra, Italia y España a
partir de Petrarca. El lector sabrá apreciar la visión global con la que se ven las literaturas
de varios países al mismo tiempo hasta llegar a un autor básico para entender la literatura
posterior en España. Los entresijos del orden de los poemas pueden quedar a un lado sin
que el libro pierda utilidad. El resultado, al fin y al cabo, son 70 poemas de Quevedo bien
traducidos, para que el lector se deleite.
Reseñas
131
SALAS DÍAZ, Miguel, La Luz, Madrid, Hiperión, (X Premio de
Arte Joven – Poesía- de la Comunidad de Madrid, 2007. 76 pp.
ISBN: 978-84-7517-897-4.
Eva Álvarez Ramos
(Universidad de Valladolid)
El Jurado del Premio de Arte Joven a la Creación Literaria (Poesía) de la Comunidad
de Madrid, formado por Jorge de Arco, Miguel García Posada, Juan Carlos Mestre, Jesús
Munárriz y Juan Van-Halen decidió conceder el X Premio de Arte Joven –Poesía- de la
Comunidad de Madrid a Miguel Salas Díaz. Este libro es el resultado del premio a ese
trabajo poético.
Los vaivenes viajeros de Salas Díaz, –que acaba de doctorarse en Teoría de la
Literatura en la Universidad de Valladolid- sus continuos cambios de domicilio y las
vivencias interculturales que ha arrastrado a sus espaldas en los últimos años: Valladolid,
Urbino, Madrid, Galicia, Manchuria… permiten al escritor de estos poemas, transmitir al
lector una perspectiva amplia y variada de la visión de las circunstancias personales del
poeta.
El título resume esas vivencias: La Luz y, hay un verso en su obra que, a mi
entender, puede sintetizar el contenido de este poemario: “Cada ciudad, amor, tiene su
noche, me dijo ella un día”. La luz no se reduce sólo al ámbito de las ciudades por las que
Miguel Salas ha discurrido; la luz de las relaciones personales, de los encuentros
solitarios con el yo perdido o encontrado en un nuevo lugar, la luz y la sombra del
contacto con los otros y con uno mismo, de las preguntas con o sin respuesta que estos
versos encierran; la familia, el recuerdo iluminado de la infancia y de la juventud; todo en
fin, se reduce a eso: a la luz y a la sombra que Salas Díaz de una manera muy personal
sabe transmitir en sus versos.
Se han agrupado sus poemas –si es posible aglutinar la poesía- siguiendo el hilo
argumental de los mismos bajo las siguientes denominaciones: Las albas rotas, La luz
Ogigia. Revista electrónica de estudios hispánicos
132
inhabitable, La isla del primer sol (un día en mis ciudades), La ofrenda de la luz (carta a
los míos).
En Las albas rotas y La luz inhabitable, se produce el diálogo constante del yo y el
tú, que se modifican, –sin dejar de ser ellos- en muchas ocasiones, en el ella y el yo.
La isla del primer sol, es donde más nítidamente podemos descubrir la estancia del
autor en lugares lejanos a su patria –aunque es difícil mantener una patria cuando se es
como Miguel ciudadano del mundo-, pero el lector puede reconocerse –sin problema
alguno- mirando a través de una ventana en cualquier lugar remoto del mundo. No
importa que aparezcan especificados los lugares, todo puede ser nombrado y no ser
reconocido, o a la inversa, todo puede reconocerse sin ser nombrado, porque la
experiencia vital del poeta representada en sus versos, carece de fecha de caducidad y
de lugar de origen. No importa la ciudad, importa la sensación que transmite esa mirada
sutil y cálida del que observa sin ser visto, del que succiona cada retazo de cotidianeidad
para hacerlo propio y dotarlo de un carácter subjetivo e íntimo que desvirtúa, por ejemplo,
ese paseo de los monjes por Urbino, para convertirlo en un jirón de vida de alguien en
algún lugar. Aquí no hay fechas ni nombres y si los hay, son susceptibles de ser
encajados y acoplados a la vida de cualquiera en todo momento al que pueda
equipararse.
Si algo queda en las palabras, es el valor de poder identificarse siempre con aquello
que cuentan, con lo que leemos o nos leen. Es, para todos aquellos que ya lo conocen –
sabrán reconocerse- en los versos de otro que no dejan de ser nuestros: “Ya sé que no
es eterna la poesía, pero sabe cambiar junto a nosotros, aparecer vestida con vaqueros,
apoyarse en el hombre que inventa un amor y que sufre de amor cuando está solo” 1.
Porque cualquiera puede mirarse en su espejo y reflejar todo aquello que fue suyo y
que fue incapaz de nombrar o de plasmar en palabras, aquí puede encontrar esa
transformación palpable y legible de la idea, donde la luz y la sombra conviven sin ser
opuestas, sin pelearse, simplemente como elementos complementarios de lo que es, a fin
de cuentas, vivir: una amalgama de contrarios que siempre encuentran su sitio y así se
demuestra en estos poemas.
1
GARCÍA MONTERO, Luis, “Garcilaso 1991”, en Poesía (1980-2005), Barcelona, Círculo de Lectores,
2006, pp. 320-321.
Reseñas
133
HOSSEINI, Khaled, Cometas en el cielo, Traducción de The Kite
Runner de Isabel Murrillo Fort, Barcelona, Salamandra, 2007.
382 pp.
ISBN: 978-84-9838-088-0
William Martínez, Jr.
(California Polytechnic State University)
Cometas en el cielo es la primera novela del Dr. Khaled Hosseini. La narración cruza
épocas y fronteras, teniendo como trasfondo la historia moderna de Afganistán, desde el
período anterior a la invasión rusa de 1980 hasta la actualidad: justo en el momento
después a la invasión de los Talibanes.
La novela desarrolla la niñez, y juventud del personaje principal, Amir, y sus
relaciones complicadas con su padre Baba; su sirviente y joven amigo, Hassan, y su lucha
por la recuperación de su propio valor, al luchar contra el enemigo perpetuo desde niños,
Assef. Sin embargo, la narración es una mera excusa para tratar temas más profundos:
El deseo de complacer al padre, el significado de la amistad, el deseo de la
autodeterminación nacional, y la posibilidad de encontrar el perdón por eventos que nos
remontan a la infancia.
La trama de la novela sigue las diferentes relaciones que Amir tiene. Primero, su
padre Baba es todo lo que Amir desea ser, pero por desgracia, no parece lograr. Baba
tiene confianza, es atlético y un hombre a quien todos, respetan, tanto por sus acciones
como sus valores y fuerza de acción. Por el contrario, Amir es amante de las lecturas y de
la invención de historias. No es atlético, se siente aislado por su padre, y por su propia
idea de que Baba ama más a Hassan y traiciona la amistad furtiva que tiene con su
compañero de la infancia.
Segundo, Amir tiene un amigo, casi hermano, su sirviente, Hassan, de quien
aprende el significado de la lealtad y de la amistad sin barreras una y otra vez. Desde el
rechazo de admitir que Hassan es amigo, por ser de clase inferior, hasta su traición de no
Ogigia. Revista electrónica de estudios hispánicos
134
defenderlo del antagonista Assef, cuando Hussain es horriblemente atacado y violado.
Amir traiciona una y otra vez a su gran amigo.
No será sino hasta el final, cuando Amir
se enfrente, física y metafóricamente, a Assef -ahora convertido en un líder talibáncuando Amir llegue a entender la profundidad de la amistad que existía entre Hassan y él
mismo, y la importancia de rechazar todo tipo de prejuicio cultural.
La novela se divide en tres secciones. La primera es la vida anterior a la invasión de
Kabul por las fuerzas soviéticas. Esta parte está llena del colorido cultural y descripciones
vivas de la infancia de Amir, pero muchas veces trágicas, especialmente con la
descripción de las relaciones entre Pastunes y Hararas. La segunda parte trata de la vida
de Amir después de su escapada a los Estados Unidos y la transformación de la familia,
que de formar parte de la clase poderosa, pasa a ser clase obrera y vista por la cultura
norteamericana como inferior. Para Amir, los Estados Unidos representan la oportunidad
de enterrar su pasado y de convertirse en un individuo nuevo. Es, en esta sección donde
Amir logra resolver los conflictos con su padre e inicia el camino hacia su evolución
humana.
La tercera parte trata del regreso de Amir a Afganistán, con la misión de
rescatar a Soharab, el hijo de su antiguo amigo, de las garras de Assef. Llegados al final
se enfrenta a su mayor temor: la lucha con Assef por la libertad del niño, y finalmente,
empieza a conseguir el perdón por sus pecados contra Hassan y su cultura.
El título de la novela tiene un doble significado. En primera instancia se refiere al
concurso que se desarrollaba en Kabul antes de la invasión soviética. Los jóvenes de la
clase pastún, que estaba en el poder, competían con cometas; y sus sirvientes -hararas,
todos de clase inferior- luchaban por recuperar la última cometa derrotada, como trofeo
para su amo. Pero más allá de lo literal, el título se refiere a la carrera que el mismo Amir
deberá iniciar para primero, escapar del Afganistán invadido, y después regresar al
Afganistan controlado por los talibanes y rescatar a Soharab. Esta lucha de cometas es,
metafóricamente también la lucha de Amir por redimirse y de Afganistán de lograr su
propia independencia.
Lo que al principio pareciera una novela de la tragedia personal de Amir, pronto se
convierte en un texto que trata la importancia de la aceptación cultural y del deseo
humano de intentar redimirse.
Amir se convierte en una metáfora de la lucha de
Afganistán mismo, desde ser una colonia británica, pasando por su guerra contra la Unión
Soviética, hasta la caída de los talibanes y el intento por lograr su libertad y
autodeterminación.
Reseñas
135
Cometas en el cielo es una novela que evita los mayores clichés de textos de este
estilo. La novela presenta la historia afgana de una manera honesta y clara, entretejiendo
las acciones y relaciones de los diferentes personajes de manera efectiva. Al final de la
novela, el lector aprecia lo que significa ser un amigo de valor, igual que un padre con
honor y una persona de carácter recio.
Por su magnífico estilo, por una trama llena de intriga y de fresca escritura, Cometas
en el Cielo es una novela digna de ser considerada. Hosseini ha creado una pequeño
joya literaria que pronto se ha convertido en una lectura importante, no solamente sobre la
historia reciente de Afganistán sino también acerca de la fuerza del espíritu humano.
136
Ogigia. Revista electrónica de estudios hispánicos
Reseñas
137
MACHADO, Antonio, Soledades, edición de Dolores Romero
López, Exeter Hispanic Texts, University of Exeter Press, Exeter,
2006.108 pp.
ISBN: 0-85989-764-8.
Eva Álvarez Ramos
(Universidad de Valladolid)
En el año 1903 ve la luz la primera edición de Soledades del poeta andaluz Antonio
Machado. Cuatro años después Machado vuelve a publicar sus poemas aumentados y
corregidos en el volumen poético que recibe el título de “Soledades, Galerías y otros
poemas”, trabajo que celebra este año su centésimo aniversario.
El momento pues, es adecuado para la publicación de esta nueva edición basada en
la publicación original y llevada a cabo, de una forma maestra por la doctora Dolores
Romero López de la Universidad Complutense de Madrid; que se ha adelantado un año a
la celebración de este centenario.
El presente volumen recoge los poemas originales de la primigenia edición de 1903
y los compara con las correcciones que Machado llevó a cabo sobre ellos en la edición de
1907. Mediante este concienzudo estudio es plausible comprobar la evolución poética y
psicológica del poeta afincado en Soria y evidenciar, cómo las tendencias poéticas del
modernismo afectaron a sus trabajos poéticos.
Está precedido de un fantástico trabajo crítico a modo de introducción, en el que
Dolores Romero López aclara cual es el fin último de su trabajo: “Esta edición de las
Soledades, tiene como meta principal constatar e interpretar las variantes y modulaciones
llevadas a cabo sobre la edición de 1903 y justificar así la evolución íntima de Antonio
Machado y por ende del período modernista al que éste comenzó adscribiéndose”. No se
busca elaborar un estudio sobre la vida de Machado, ni sobre los temas de su poesía,
tampoco se intenta estructurar sus etapas literarias. Bajo la simple premisa de la
reelaboración de sus textos se intenta demostrar la evolución personal y literaria del
Ogigia. Revista electrónica de estudios hispánicos
138
poeta. No existe ningún otro estudio publicado de Machado de estas características, pese
a la gran bibliografía existente sobre la obra del poeta, de ahí la importancia de este libro.
Contiene, además, la introducción un breve estudio histórico que nos sirve para
contextualizar la obra machadiana, y lo que a mi entender es más importante: una breve
pero
práctica recapitulación de los cambios que sufrieron los poemas en las dos
ediciones, seguida de un análisis profundo en el que se agrupan y se explican los
cambios experimentados.
La alta formación de la doctora María Dolores Romero López se ve plasmada en
este análisis de la obra de Machado. Los conocimientos en Modernismo contribuyen a
explicar claramente cuál es la evolución del poeta andaluz y cómo se desarrollan sus
tendencias poéticas al entrar en contacto con este movimiento. Del mismo modo sus
múltiples publicaciones referidas al tema avalan el trabajo realizado.
El lector puede acercarse a esta edición desde dos perspectivas diferentes:
Buscando simplemente el acercamiento a la obra machadiana, para aquellos que la
desconozcan, o, para los más inquisidores, ver en las mismas palabras de Machado la
evolución y los cambios que experimenta el poeta a través del tiempo, un análisis más
profundo que sin duda nos descubrirá a otro Antonio Machado y que contribuirá a facilitar
el trabajo a los especialistas que estén desarrollando sus investigaciones en torno a la
obra del poeta.
Reseñas
139
URQUÍZAR HERRERA, Antonio, Coleccionismo y nobleza.
Signos de distinción social en la Andalucía del Renacimiento,
Madrid, Marcial Pons, 2007. 229 pp.
ISBN: 978-84-96467-39-2
Jesús Félix Pascual Molina
(Universidad de Valladolid)
Actualmente profesor en la UNED, Antonio Urquízar realizó su tesis doctoral en la
Universidad de Córdoba estudiando la recepción de lo italiano en el Renacimiento
andaluz. Urquízar conoce pues en profundidad el tema que trata en el libro que nos
ocupa. Desde las primeras páginas queda claro que no estamos ante una historia del arte
al uso. El autor se adentra en aspectos sociales e intelectuales para desarrollar un
interesante estudio acerca de los programas de ornamentación doméstica de la nobleza
andaluza. Puntualizaciones en torno al término “colección”, la recepción y asimilación del
humanismo italiano, la imitación de determinadas actitudes por parte de la nobleza, el
papel de la burguesía comercial, o la importancia material de los objetos, son algunos de
los temas tratados a lo largo de las páginas de este volumen, que se completa con el
estudio pormenorizado de algunos ejemplos relevantes, como los Duques de Alcalá o los
Medina Sidonia.
Dos cuestiones llaman la atención sobremanera en esta obra, con respecto a los
estudios de Historia del Arte: el progresivo interés por la historia social, relacionada en
este caso con las manifestaciones artísticas; y el progresivo interés en factores menos
plásticos pero igualmente importantes respecto a las obras de arte, tales como la
apreciación económica de las mismas. Hasta hoy, los historiadores del arte han tendido a
valorar las obras de arte en función de la belleza de las mismas, atribuyendo a nuestros
antepasados los mismos planteamientos de juicio. La utilitas estaba por encima de la
venustas, y la valoración de la pintura es un hecho tardío en nuestro largo siglo XVI. El
autor del presente libro huye de clasificaciones, catálogos y descripciones, para encauzar
su discurso por caminos más interesantes para quienes quieran contextualizar el arte en
el momento y la sociedad que lo produjo. El estudio del trasfondo ideológico e intelectual
Ogigia. Revista electrónica de estudios hispánicos
140
de los poseedores de los objetos artísticos, abre nuevas vías de estudio y plantea nuevas
reflexiones acerca de las artes.
En definitiva, la obra propone un acercamiento novedoso al estudio de las relaciones
entre poseedores y objetos artísticos en la España del Renacimiento, ya que si bien parte
del estudio de la sociedad andaluza, los patrones de comportamiento pueden aplicarse al
resto de los territorios hispánicos. Aunque no se puede hablar de colección en el sentido
estricto, existieron en España otras formas de relacionarse con los objetos, igualmente
interesantes, reflejo de una sociedad determinada, de una época determinada, y de una
valoración determinada: aquella que venía marcada por el carácter nobiliario y económico
que se daba a los objetos artísticos.
Normas de Publicación
141
Normas de publicación
OGIGIA está abierta a cualquier persona que quiera enviar sus trabajos, siempre y
cuando éstos se adapten a la temática de alguno de los bloques de la revista:
a) lengua y literatura: estudios lingüísticos y literarios, estudios gramaticales,
teoría de la literatura y literatura comparada...
b) historia y arte: historia y arte de España y sus relaciones con otros lugares,
patrimonio histórico artístico, cine y otros medios audiovisuales, etnografía,
artes populares, música...
c) didáctica: recursos didácticos o estudios teóricos dentro de la enseñanza de
E/LE
Las aportaciones deben ser originales e inéditas.
La lengua oficial de la revista será el español.
Los trabajos se remitirán en formato digital, con las extensiones .txt, .doc o .rtf, con
tipo de letra Times New Roman, cuerpo 12, espacio y medio de interlineado, no pudiendo
superar una extensión de 12 páginas. El texto irá acompañado de un breve resumen,
redactado en español e inglés, así como un máximo de 5 palabras clave en ambos
idiomas. La tipografía en negrita se empleará tan sólo en los títulos y subtítulos.
Ilustraciones, tablas y gráficos se incorporarán en su correspondiente archivo gráfico
(formato jpeg o tiff), nunca insertadas en el texto.
Las notas, a pie de página, proporcionarán la siguiente información la primera vez
que se cite: APELLIDOS, Nombre, Título de la publicación (en cursiva), Localidad,
Editorial, fecha de edición, número de páginas.
EJEMPLO:
CONDE PARRADO, Pedro y GARCÍA RODRÍGUEZ, Javier (eds.), Orfeo XXI. Poesía
española contemporánea y Tradición clásica, Gijón, Llibros del Pexe, 2005.
Para posteriores citas, se puede recurrir a las expresiones op. cit., ed. cit., Ídem, o
Ibídem, según corresponda.
En el caso de citar un artículo de revista o capítulo de libro o artículo en actas de
congresos, el título irá entre comillas, y el de la publicación periódica o volumen, en
cursiva.
Ogigia. Revista electrónica de estudios hispánicos
142
EJEMPLO:
HERNÁNDEZ GONZÁLEZ, Carmen, "Notas de historia de la lengua sefardí", en
Ínsula: Revista de letras y ciencias humanas, 2000, pp.4-6.
Una vez recibidos en la redacción se someterán a evaluación por parte de nuestro
consejo de redacción, recibiendo el autor comunicación vía correo electrónico, tanto si el
artículo se publica como si no; sin embargo y por razones de confidencialidad, no se
remitirá al autor el informe de justificación.
Los artículos deben enviarse a: revista@ogigia.es
OGIGIA no se responsabiliza de los juicios y opiniones expresados por los autores
en sus artículos y colaboraciones.
OGIGIA no ofrece ningún tipo de compensación económica por los trabajos
publicados.
Recepción de Originales
El número 3 de Ogigia se publicará en enero de 2008. Pueden enviarse trabajos
para su publicación. El plazo de recepción de originales finaliza el 15 de diciembre de
2007. Pueden enviar los textos a: revista@ogigia.es.
Descargar