38 OPINIÓN Del 25 de Junio al 1 de Julio de 2016 * Por H. T. Lara Manlio Fabio Beltrones Fue el 26 de octubre de 1992, hace ya casi 24 años, cuando este semanario salió a la luz pública y en la portada de esa primera edición apareció la fotografía de Manlio Fabio Beltrones, en aquel entonces gobernador del Estado, donde hablaba de un nuevo plan de desarrollo económico para Sonora. Han pasado muchos años desde entonces y he podido seguir la trayectoria política de este sonorense. Lo recuerdo entusiasmado en sus tres primeros años de gobierno donde creó una fuerte infraestructura para Sonora, como por ejemplo el Centro de Gobierno. Sin embargo, también recuerdo que en sus tres últimos años no fue muy querido por el presidente Ernesto Zedillo, incluso hasta publicaciones sin fundamento lo señalaron. Conocí a Manlio cuando llegó a Sonora como coordinador de la campaña del ingeniero Rodolfo Félix Valdés; me lo presentó Fernando Elías Calles que en esa época era subsecretario de Gobernación y, desde entonces, tuve la oportunidad de conocer a Manlio muy de cerca, ya que con frecuencia degustábamos una buena comida. Al final Manlio sacó la casta y logró conseguir que Zedillo pusiera de candidato a Armando López Nogales en lugar de Bulmaro Pacheco quien sonaba fuertemente para suceder a Beltrones, ya que Eduardo Bours estaba impedido por las nuevas reglas del PRI en ese año, mismas que obligaban a que el candidato que fuese tenía que haber participado previamente en una elección y Bours no cubría ese requisito. La habilidad y el colmillo de Beltrones le permitieron ser considerado como el vicepresidente en los sexenios de Vicente Fox y de Felipe Calderón. En la elección de Felipe en el 2006 fue el coordinador de la campaña de Roberto Madrazo, candidato del PRI a la presidencia. Durante el 2012 Manlio fue el precandidato más cercano para competir contra el hoy presidente Enrique Peña Nieto; sin embargo, declinó oportunamente. De ahí los altibajos del político sonorense que como está arriba ha estado abajo y hoy está cargando con las derrotas del partido; sin embargo, la mayoría de los columnistas políticos nacionales señalan que no es el único culpable; de hecho creo que la culpa de la derrota del PRI el 5 de junio, fue sólo haber dicho que iba a ganar 9 gubernaturas, cuando el horno no estaba para bollos, ya que los gobernadores principalmente de Veracruz, Quintana Roo y Chihuahua eran unas negras palomas a las que los ciudadanos los iban a castigar en las urnas. Pero Manlio tampoco contaba en ese momento con que los precandidatos de Peña Nieto lo iban a bloquear con decisiones absurdas como subir la gasolina, antes de las elecciones, incluso días antes de la elección el propio Presidente presentó la iniciativa de los matrimonios de parejas del mismo sexo y la adopción entre las mismas, lo que ocasionó una reacción del clero en contra de esta propuesta de ley lo que incidió para que en algunos estados como por ejemplo Aguascalientes, la votación se inclinara hacia el PAN. Se habla incluso de engaños en las encuestas de salida que señalaban que el PRI había ganado en 10 estados, y que minutos antes de entrar al debate en el programa especial de Televisa con Joaquín López Dóriga le dijeron que estaban por perder 7 estados de los 12 en juego ese día domingo. Hay muchos rumores con respecto a las dos reuniones que tuvo Manlio con el presidente Peña donde el Ejecutivo le pide que se quede al frente del www.inversionistasonora.com PRI, pero por otro lado la dignidad de Beltrones no lo permite, aunado a que el Presidente no castigaría ni cambiaría a nadie de los causantes de esta debacle priísta, ni a sus secretarios ni a los gobernadores salientes y menos a funcionarios priístas que ayudaron a la derrota en siete estados del país. Con esto Manlio sutilmente se deslindó del presidente Peña Nieto. Manlio no ha sido el único sonorense que le ha renunciado a un presidente de la república, también lo hizo Gilberto Valenzuela a Alvaro Obregón siendo secretario de Gobernación. Posteriormente Gilberto decidió buscar la presidencia de la república, pero dentro del partido, criticando la desastrosa administración del presidente Obregón y el enriquecimiento de muchos de sus secretarios. Curiosamente varios columnistas como Templo Mayor, del Reforma dice: “pese a lo evidente con su renuncia como dirigente nacional el PRI Beltrones a lo mejor no está acabado, sino que más bien está empezando. Más que un discurso de despedida parecía uno de arranque de campaña, incluso hizo críticas al estilo de gobernar que provocó el desencanto de los ciudadanos por eso hay quienes consideran que Beltrones podría convertirse en el candidato anti sistema… ¡dentro del sistema!...” Este es sólo un ejemplo de lo que muchos pensamos sobre la renuncia a la dirigencia del PRI por parte de Beltrones, quien pudiera considerarse el Claudia Pavlovich