[QM14] EN TORNO AL ACORDEÓN MICROTONAL Iñaki Alberdi – Acordeón San Telmo, 21 de agosto 2014, 20:00 Organiza: Musikaegileak & Quincena Musical Introducción y notas al programa: Elix Etxebeste Birds Fragments II (1989): Toshio Hosokawa (1955) Luma (2014, estreno absoluto): Zuriñe F. Gerenabarrena (1965) 2 2 T1: Saludo – El programa – El instrumento – Primero y segundo bloques del programa 2 Saludo – lo escuchado (Iñaki monta y desmonta el instrumento) 2 El sonido microtonal, el instrumento transformado y la confluencia de estéticas 2 Microtonalidad 2 La música microtonal 3 Aerófono microtonal 3 El arte empuja a la ciencia 4 El recorrido del concierto 4 Primer bloque del programa 4 Birds Fragments II (1989): Toshio Hosokawa (1955) 5 Compositor 5 Birds Fragments II (1989) 5 Luma (2014, estreno absoluto): Zuriñe F. Gerenabarrena (1965) 6 Compositora 6 Luma 6 Segundo bloque del programa 6 Felix Ibarrondo (1943): Arinka (2003) 6 Compositor 6 Arinka 7 Zuria (2013-2014): José María Sánchez-Verdú (1968): 7 Compositor 7 Zuria 8 Arinka (2003): Felix Ibarrondo (1943) 8 Intervención Juan Ramón Makuso: lectura de Zuria 8 Zuria (2013-2014): José María Sánchez-Verdú (1968) 8 T2: Se cierra el círculo - El tercer bloque. Se cierra el círculo: donde las estéticas se encuentran Una belleza diferente Explorar nuevas convenciones, nuevos comportamientos La estética de dos tradiciones y sus vanguardias Tercer bloque del programa Georg Friedrich Haas (1953): Sayaka (2006) Compositor Sayaka Toshio Hosokawa (1955): Melodia (1979) Melodia Sayaka (2006): Georg Friedrich Haas (1953) Melodia (1979): Toshio Hosokawa (1955) 2 1 /0 8 /2 0 1 4 · [ A (R )T W O R K ] · Proyecto # Iñ a k i A lb e rd i: E n to rn o a l a c o rd e ó n m ic ro to n a l 8 8 8 9 9 9 9 9 10 10 10 11 11 P 1 / 11 [QM14] Birds Fragments II Luma (1989) (2014, estreno absoluto) : Toshio Hosokawa (1955) : Zuriñe F. Gerenabarrena (1965) T1: Saludo – El programa – El instrumento – Primero y segundo bloques del programa Saludo – lo escuchado (Iñaki monta y desmonta el instrumento) Kaixo, arratsaldeon guztioi Buenas tardes, buenas noches. Acabamos de escuchar las dos primeras obras de un recital innovador que abre el Ciclo de Música Contemporánea de la septuagésimo quinta edición de la Quincena Musical. Iñaki Alberdi, en compañía del percusionista Rafael Gálvez, va a llevarnos por nuevos caminos. Nos invita a descubrir conformaciones sonoras desconocidas y a disfrutar de una belleza diferente, un sonido novedoso y un instrumento innovador. El recital lleva el título “En torno al acordeón microtonal”, y todavía rondan por el aire los sonidos de las dos primeras obras del programa. La segunda, Luma, interpretada con acordeón microtonal, estreno absoluto y también la razón por la que Alberdi se disponga ahora a desmontar el instrumento y transformarlo de nuevo en el instrumento convencional. De hecho, se trata de un programa que rodea, presenta, y se acerca al acordeón microtonal. Tres puntos de fuga convergen para descubrir esas conformaciones sonoras desconocidas: el mundo de la microtonalidad la innovación instrumental y la confluencia de estéticas El concierto combina: la interpretación de obras que se aproximan o se consuman como microtonales; la presentación de una innovación instrumental significativa para la realidad del acordeón y la composición actuales; y una zona de confluencia de dos estéticas diferentes: la japonesa y la europea. El sonido microtonal, el instrumento transformado y la confluencia de estéticas Microtonalidad Lo primero que hay que comentar es lo de la microtonalidad. Qué es. Para esto, lo mejor es imaginarse que la música que habitualmente escuchamos en las salas de conciertos, está hecha de sonidos que se ordenan en escaleras –escalas– a distancias de pasitos que miden uno o medio pasito, un tono o un semitono. Cada uno de esos medios pasitos viene a ser una tecla del piano. Microtonal supone dar pasitos menores que medio, y al ser menos de medio tono los llamamos microtonos. 2 1 /0 8 /2 0 1 4 · [ A (R )T W O R K ] · Proyecto # Iñ a k i A lb e rd i: E n to rn o a l a c o rd e ó n m ic ro to n a l P 2 / 11 [QM14] La música microtonal Podemos imaginar tópicos que funcionan para situarnos: Dentro de lo que puede hacerse con pasos sonoros de tono y semitono, asociamos música tonal, atonal... pentatonismo chino... diatonismo europeo, ya sea clásico o rock... Dentro de lo que puede hacerse con pasos sonoros más pequeños, microtonos, asociamos música india, o árabe... Y aquí es como que el sonido se desliza. No da pasos, patina, resbala. Quizá hay alguien que prefiera una explicación más gráfica y menos sonora: Pensemos en esos dibujos ocultos que había que desocultar siguiendo con el lápiz, punto a punto, la numeración, así hasta completar el dibujo y poder ver de qué imagen se trataba. Ahora imaginemos que una obra musical es una forma, un dibujo, que se va completando según unamos los puntos... Cuando la forma, el dibujo, es microtonal, los puntos están más cerca, los trazos tienen menos aristas, son más fluidos entre ellos. Pero para hacer música microtonal se necesita un instrumento que pueda ofrecer dichas diferenciaciones, como los instrumentos de cuerda sin trastes, por ejemplo. En el caso del acordeón es necesario convertirlo en microtonal. Aerófono microtonal El acordeón que habitualmente denominamos “de concierto” es un instrumento joven pero no nuevo. Precedido por innumerables variantes en el ámbito de las tradiciones, éste es el más evolucionado. Podríamos decir que en los años cincuenta estandarizó su configuración organológica actual. Lo que significa que las composiciones relevantes y escritas originalmente para el instrumento datan de a partir de mediados del siglo XX. Pero este acordeón no es microtonal, es un aerófono –un instrumento de aire– con fuelle y teclados, construido para dar pasos de medio tono. Aunque ya en su configuración habitual el instrumento viene marcando maneras, y su timbre atestigua la presencia de telas, metales y maderas, entre los materiales que configuran su cuerpo. Su sonido hondo, profundo, permite que las resonancias se expandan. Las lengüetas que vibran con el aire tienen su propia personalidad y también se relacionan entre ellas. Se comportan diferente, por ejemplo, las agudas y las graves ante un mismo golpe de aire y ciertos ímpetus hacen sonar unas antes que otras, aunque las teclas se presionen a la vez. Si nos referimos a las lengüetas del acordeón microtonal, las relaciones entre ellas vuelven a cambiar, es algo así como la diferencia entre ser 2 o ser 4 en una familia, entre ser 12 ó 24 en este caso. Gestos que habitualmente resuelven la música que se está escribiendo o leyendo, componiendo o interpretando, tienen ahora otras consecuencias. Se hace necesario un reajuste en el lenguaje gráfico, un entrenamiento especial en distancias y movimientos, una adaptación de costumbres auditivas y de previsiones de resultados en las combinaciones... 2 1 /0 8 /2 0 1 4 · [ A (R )T W O R K ] · Proyecto # Iñ a k i A lb e rd i: E n to rn o a l a c o rd e ó n m ic ro to n a l P 3 / 11 [QM14] El arte empuja a la ciencia Ya sólo con la posibilidad de llevar a cabo la transformación del instrumento, de construir el mecanismo sonoro necesario para obtener un acordeón microtonal, el arte ha vuelto a empujar a la ciencia. Es un hecho que el arte empuja a la ciencia, y que lo hace de mil maneras. La imaginación artística concibe, imagina, propone... Y a la ciencia le corresponde ofrecer la posibilidad. Alguien imagina volar, alguien navegar bajo el agua, alguien el sonido de un Stradivarius, alguien el de timbres creados por síntesis aditiva... La ciencia responde con artefactos e instrumentos según puede explicar y producir lo que el arte ha imaginado. La creatividad es dominio del arte, pero está en todas partes. El arte imagina y la ciencia tiene la tarea de hacerlo calculable, reproducible... Alberdi propuso un nuevo mecanismo para el tercer acordeón microtonal que se ha construido respondiendo a cuartos de tono. Al imaginarlo, pensaba en el lenguaje musical ya no sólo occidental. La empresa ha sido un éxito y transgredir la mirada occidental es, por cierto, otro matiz, que el acordeonista nos hace sentir con la elección de programa. El recorrido del concierto Las obras del concierto de hoy exploran los comportamientos de la microtonoalidad de diferentes maneras y desde diferentes perspectivas. El Zeitgeist –el espíritu del tiempo– de este concierto puede sorprendernos quizá como una botella con mensaje en un solitario paseo por la playa. El mensaje llevaría un círculo pintado. Ciertamente, si observamos el programa, el anagrama de este concierto podría ser un círculo pintado ágilmente y en único trazo con un pincel: El recorrido del trazo comienza con –Birds Fragments II– del compositor japonés Hosokawa, cargando la tinta de la propuesta con la mirada puesta en la microtonalidad del shô –un órgano de boca japonés que suena también a través de aire y lengüetas–. Después, el programa entra puramente en la microtonalidad del acordeón con una obra expresamente compuesta para el instrumento transformado. Así, Luma –de Gerenabarrena– marca el momento del trazo más evidente en torno al acordeón microtonal. El trazo circular mantiene el impulso del pincel con la obra más rítmica del programa, Arinka de Ibarrondo y subraya el protagonismo de las peculiaridades sonoras del acordeón con Zuria, de Sánchez-Verdú. El sonido sigue siendo foco de atención y el círculo se cierra entre la continuidad sonora y el silencio, con Sayaka de Haas, para acabar con una obra del mismo compositor con quien se iniciaba el concierto, Hosokawa, que nos devuelve al inicio con un concepto tradicional propio de la música en su concepción más amplia: Melodia (1979) Primer bloque del programa EL PROGRAMA HA COMENZADO CON: 2 1 /0 8 /2 0 1 4 · [ A (R )T W O R K ] · Proyecto # Iñ a k i A lb e rd i: E n to rn o a l a c o rd e ó n m ic ro to n a l P 4 / 11 [QM14] Birds Fragments II (1989) : Toshio Hosokawa (1955) Compositor Nacido en 1955 en Hiroshima, Toshio Hosokawa se formó en Japón y Alemania, con el coreano –y ya casi centenario (1917)– Isang Yun, y posteriormente con Klaus Huber. Es curiosamente a través de Huber y en Alemania donde se siente impulsado a estudiar con intensidad la tradición japonesa. A partir de entonces, premios, docencia, participación en los festivales más representativos de la creación contemporánea y el prestigio internacional le han acompañado los últimos treinta años. Su música transmite la inspiración del encuentro entre oriente y occidente, confluencia que se convierte en rasgo característico compartido también con otros compositores japoneses consagrados internacionalmente y que queda reflejado sobre todo en la elección de los instrumentos... pero su singularidad radica más en una marcada coherencia estilística: En los años 80 comienza a orientarse hacia los conceptos tradicionales japoneses en su hacer compositivo. Algo que desde mediados de los 90 se deja ver por ejemplo a través de la influencia de formas y géneros de la música japonesa, como el gagaku o el teatro No. Birds Fragments II (1989) Birds Fragments II está escrita originalmente para shô ––instrumento que el compositor estuvo aprendiendo en los años 80 y que protagoniza muchas de sus composiciones– en este caso como instrumento solista, con o sin percusión, según decida el intérprete, quien además puede elegir el instrumento de percusión. Alberdi interpreta esta obra gracias al acordeón microtonal y Rafael Gálvez le acompaña al taiko japonés. Como comentábamos, la pieza forma parte de un grupo, y Hosokawa describe las intenciones del proyecto de la siguiente manera: “Se trata de una serie de obras inspiradas en mi visita a la galería TOM. La Galería TOM es un museo para ciegos donde las esculturas son percibidas por el tacto. Hemos vivido la experiencia progresiva de reconsiderar nuestro sentido del tacto que ha sido eclipsado en el mundo moderno a través del sentido de la vista. Me impresionaron particularmente las esculturas nacidas de la imaginación fuerte y misteriosa de los alumnos ciegos de una escuela japonesa. Los niños ciegos nunca han visto las aves. Expresaban en barro sus propios "pájaros" tal y como se imaginaban lo que sería tocar los pájaros de verdad, o a través de poemas, cuentos o canciones. La idea de "Forma" está dentro/enterrada en el cuerpo de estos niños. Pensé en estos pequeños inventando formas en arcilla, tratando de inventar formas musicales tocando los sonidos. Y hay una imagen de un pájaro volando sobre esta música. También intenté volver a apoderarme aquí de criterios que la música moderna ha olvidado, como el sentido de la materialidad, su tacto, su profundidad y su naturaleza espacial. Brids Fragments II fue estrenada el 2 de Octubre de 1990, en Frankfurt, Alemania por Mayumi Miyata al shô y Midori Takada a la percusión. 2 1 /0 8 /2 0 1 4 · [ A (R )T W O R K ] · Proyecto # Iñ a k i A lb e rd i: E n to rn o a l a c o rd e ó n m ic ro to n a l P 5 / 11 [QM14] LA SIGUIENTE OBRA HA SIDO: Luma (2014, estreno absoluto) : Zuriñe F. Gerenabarrena (1965) Compositora Gerenabarrena nació en Vitoria-Gasteiz en 1965, donde se tituló en Composición. Compositora, autora y realizadora en foros internacionales de muy diversa naturaleza, combina la creación con la labor de docencia en el Centro Superior de Música del País Vasco –Musikene–. Pertenece a la generación de compositores que, formándose con las heterogéneas figuras de la llamada “Generación del 51” –en su caso especialmente con Carmelo Bernaola–, han recogido el testigo de los maestros, para después ampliar su formación con otras figuras importantes de la composición internacional. Muchos compositores de renombre han sido sus maestros, Y para Gerenabarrena, Italia en 1991 fue un paso decisivo, un baño de estéticas con figuras de la creación musical que marcó su evolución como compositora. Pero eso queda ya hace 20 años, lejos ya de la actual madura, personal y sutil línea de trabajo, aunque precisamente a este recorrido se deba la versatilidad de esta creadora, evidente en un polícromo catálogo de obras que contiene música para solista, cámara y orquesta instrumentales, obras de música acusmática, electroacústica, electrónica o coral, así como para artes escénicas, plásticas y audiovisuales. Luma Sobre Luma comenta la propia compositora: “Si cada obra es un desafío, ésta lo es aún más, por las posibilidades que ofrece este nuevo instrumento y sabiendo que Iñaki Alberdi es su intérprete. LUMA es una obra que explora y se cuestiona la percepción en este nuevo territorio instrumental y sonoro. Indaga en el sonido a tientas, mientras se sumerge en el tiempo con intención de engullirlo o deformarlo. Contiene ideas tan queridas, que persisten en mi trabajo durante estos años, como son: la síntesis del sonido, el enmascaramiento, el retorno, la contradicción…; siendo en buena parte alentadas desde la curiosidad de lo otro, lo circundante y lo desconocido.” Segundo bloque del programa El segundo bloque del programa lo consituyen Arinka de Ibarrondo y Zuria, de Sánchez-Verdú. Felix Ibarrondo (1943) : Arinka (2003) Compositor Félix Ibarrondo, nacido en Oñati (Guipúzcoa), en 1943, y afincado en París desde 1969, es un compositor de premiado hacer y obra abundante y variada. Con un catálogo que supera el centenar de obras, sus grabaciones reflejan los diversos 2 1 /0 8 /2 0 1 4 · [ A (R )T W O R K ] · Proyecto # Iñ a k i A lb e rd i: E n to rn o a l a c o rd e ó n m ic ro to n a l P 6 / 11 [QM14] soportes de grabación que ha visto la historia de la música en los últimos 40 años: desde los vinilos de finales de los 70 hasta las grabaciones digitales actuales. Ya es historia también considerarlo representante de la composición vasca junto a Luis de Pablo, Carmelo Bernaola o Antón Larrauri... Guardando las diferencias no sólo en su edad sino en su personalidad y en su hacer compositivo, el estilo de Ibarrondo permite que le consideremos también como parte de una generación posterior, lo que le convierte en puente entre corrientes del desarrollo de la composición vasca, que cuenta ya con compositores consagrados nacidos en los años en los que Ibarrondo se preparaba para ir a París y que, a su vez, ya están creando escuela. Ibarrondo es un agitador que comprende los momentos turbulentos del alma humana y que entiende la composición como un acto de contemplación y captura de fuerzas, energía, tensiones, volúmenes, espesura o vacíos. La mayor parte de los títulos, al margen de que se expresen en euskera, francés o castellano, son una invitación a la experiencia multisensorial, una experiencia que se convierte en orgánica en el momento en el que comienza a sonar la expresiva fuerza interna de sus composiciones. Y éste vuelve a ser el caso con Arinka. Arinka Si el concierto se cierra con la obra más “melódica” del programa, éste es su tiempo sonoro más rítmico. La obra cumple en 2014 su decimoprimer año. Once años que existe, pero es atemporal. En Arinka, los sentidos piensan en ritmo arina, ligero... el baile, la danza y la corporal dinámica de los gestos. Una nota, dos notas, piden la siguiente, los sonidos cambian de manos y danzan por sí mismos. El fuelle del instrumento se convierte en instrumento rítmico, de percusión. El entretejido minucioso de dinámicas y agógicas, impide la precipitación y deja que los sucesos se concatenen. La energía es impulso natural, suficiente y necesario, y Arinka es Ibarrondo puro. No se sabe si enamora por la joven belleza que transpira su vitalidad o si es por la sabiduría de la danza de un cuerpo maduro. SEGUIDAMENTE ESCUCHAREMOS: Zuria (2013-2014) : José María Sánchez-Verdú (1968) : Compositor Sánchez-Verdú (1968) es uno de los compositores más destacados del panorama actual español. Su trabajada visión artística y la reflexión que realiza acerca de su propia producción –y a la vez de la creación actual– nos permiten tomar consciencia de la comunicabilidad del arte, además de empujarnos a sentir curiosidad por otras estéticas, otras culturas, otras creaciones, otras artes, de hoy en día. Se habla de él subrayando su refinamiento y precisión, así como su madurez en las referencias a otras culturas o en el descubrimiento de nuevas soluciones o nuevas implementaciones de materiales y conceptos. 2 1 /0 8 /2 0 1 4 · [ A (R )T W O R K ] · Proyecto # Iñ a k i A lb e rd i: E n to rn o a l a c o rd e ó n m ic ro to n a l P 7 / 11 [QM14] En su visión creativa, Sánchez-Verdú utiliza sonoridades en constante transición, dirige la mirada hacia procesos entre el sonido definido, claro, y el ruido necesario en su emisión y existencia. Éste último aspecto se ve favorecido en el caso del acordeón, gracias a la impura emisión sonora del aire en un cuerpo que se mueve con un fuelle y que modela el sonido con un teclado: suena el ruido del fuelle, el aire entre materiales, la percusión de las teclas... El acordeón es un instrumento presente en el hacer compositivo de SánchezVerdú desde hace ya veinte años y en casi una decena de obras. En relación a la obra de esta noche, y a colación del concierto que hace tres días Alberdi ofrecía en en Bamberg, leíamos que la prensa alemana recogía cómo Sánchez Verdú se refería a Zuria como lo mejor y más reciente que había escrito para acordeón. Zuria Zuria, blanco... de claridad máxima y acromático, luz intensa constituida por todas las longitudes de onda del espectro visible. Para crear el blanco, se mezclan los tres colores primarios, el rojo, el verde y el azul que llegan a la retina en su máxima intensidad. El blanco responde también a muchas asociaciones dependiendo de las culturas... silencio, libertad de valores, vacío, inocencia, infinito... Zuria nos habla del blanco del acordeón. Luz y color, ausencia y saturación, silencio, memoria, eco, límite... ponen en relación al espacio y al ser humano. Sánchez-Verdú contaba en su intención compositiva con la poesía de Juan Ramón Makuso y el acordeón de Iñaki Alberdi. El poema, asociado íntimamente a la composición, será recitado por Makuso justo antes de escuchar la obra. Arinka (2003) : Felix Ibarrondo (1943) Intervención Juan Ramón Makuso: lectura de Zuria Zuria (2013-2014) : José María Sánchez-Verdú (1968) T2: Se cierra el círculo - El tercer bloque. Se cierra el círculo: donde las estéticas se encuentran Una belleza diferente El arte, en general cualquier objeto artístico o idea que ejerza de arte para quien la contempla, nos invita a experimentar, a especular con nosotros mismos según lo que tengamos delante... Sin saber explicar cómo, las músicas nos teletransportan a tiempos y espacios diferentes, despiertan emociones. Las piezas más célebres o queridas de nuestra vida hurgan en nuestros recuerdos trayendo a veces alguno olvidado... Hablamos de la belleza de lo sublime. 2 1 /0 8 /2 0 1 4 · [ A (R )T W O R K ] · Proyecto # Iñ a k i A lb e rd i: E n to rn o a l a c o rd e ó n m ic ro to n a l P 8 / 11 [QM14] Y aunque no nos recuerden a nada, una sinfonía bien hecha –bien compuesta, bien interpretada–, un cuarteto clásico, bien equilibrado... son una maravilla. La belleza de lo permanente en lo cambiante... La música de esta noche es del tiempo “ahora” y más que recuerdos, o bellezas conocidas nos plantea posibles futuros y bellezas desconocidas. Nos invita a explorar nuevas convenciones, nuevos comportamientos. Explorar nuevas convenciones, nuevos comportamientos Pero aunque hablemos de explorar nuevas convenciones, nuevos comportamientos, la microtonalidad no es tan extraña a la música europea de concierto. Comúnmente, los intérpretes entonan con ligeras variaciones microtonales que –precisamente– dotan a los sonidos de un estímulo, de un atractivo particular que el público, de manera inconsciente disfruta en sus matices, como en la familiar modulación microtonal del lenguaje. Con este último bloque se cierra el círculo del concierto. El sonido como foco de atención, la cercanía entre el shô y el acordeón, la continuidad sonora, la saturación y el silencio, compositores europeos y japoneses... Actualidad y tradición de dos estéticas se conjugan definitivamente en el tercer bloque del programa. El punto de encuentro muestra una estética generada desde el intercambio de nociones y elementos que fundamentan la diversidad. Una belleza que persigue la pureza y la elegancia, a la vez que la imperfección y la transitoriedad, belleza en lo mundano y simple, a la vez que en lo pleno, floreciente, profundo y trascendente. La estética de dos tradiciones y sus vanguardias Se ha puesto en valor la presencia de la naturaleza y la vivencia que el humano tiene de ella. Nos ha imbuido una estética de sonidos delicados y masas sonoras profundas y gruesas. Hemos encontrado fragilidad y contundencia en los gestos... El silencio ha sido culpable de no serlo, de no existir del todo... El sonido se ha desenfocado, desperfilado, para dejar emerger la belleza de la falta de nitidez. En la misma línea se desarrolla el tercer bloque del programa. El círculo lo va cerrando Sayaka de Georg Friedrich Haas, y acaba con una obra del mismo compositor con quien se iniciaba el concierto. Con Melodia de Hosokawa, volveremos al principio. Tercer bloque del programa Georg Friedrich Haas (1953) : Sayaka (2006) Compositor Puede decirse que Haas es uno de esos compositores influyentes del momento, que conoce perfectamente los extremos de su profesión: desde el ninguneo y la ignorancia hasta los baños de premios y reconocimientos. La propuesta compositiva de Haas es, consecuentemente, paso a paso, ir conquistando nuevos terrenos, invitar a aventuras sonoras... algo muy acorde a las intenciones del recital de Alberdi. Haas nació en 1953 en Graz, una ciudad en el este de Austria, donde también estudio Composición y Pedagogía Musical. También se formó en Viena, asistió a los 2 1 /0 8 /2 0 1 4 · [ A (R )T W O R K ] · Proyecto # Iñ a k i A lb e rd i: E n to rn o a l a c o rd e ó n m ic ro to n a l P 9 / 11 [QM14] cursos de Darmstadt para nuevas músicas, donde se encontró por ejemplo con Gérard Grisey y en París también trabajó la composición electrónica en el IRCAM. En 2003 fue nombrado profesor de la Universidad de Graz, en 2005 comenzó a impartir clases de composición en la Akademie Basel y desde 2013 es profesor de composición en la Columbia University de Nueva York. Su infancia transcurrió en la montañosa provincia de Vorarlberg, en la frontera con Suiza, y tanto el paisaje como la atmósfera del lugar han dejado una impresión duradera en su personalidad. Para Haas el ambiente no estaba marcado tanto por la impresionante belleza natural, sino más bien por la amenazante grandiosidad de las montañas que flanqueaban el valle estrechándolo y dejando que el sol sólo raramente penetrara... En todo caso, la naturaleza y su imponente fuerza dejaron una huella duradera en su personalidad. En la obra de Haas es determinante el minucioso trabajo de dar forma a sonido. Sobre lo que comenta: "El amor hacia lo que suena, el amor a los sonidos que se desarrollan como seres vivos en el espacio y el tiempo, es para mí uno de los requisitos básicos de mi trabajo". Para ejemplificar el efecto producido sobre el oyente por la música de Haas cabe recordar una imagen del musicólogo Bernhard Günther: “Para la escucha musical las líneas melódicas y la estructura temperada de las alturas de tono son de alguna manera como balaustradas, barandas y peldaños en dimensiones y disposición usuales para el paso en una escalera. La escalera normal puede subirse sin que sea necesario pensar en el movimiento: las proporciones habituales de las alturas de tono y de las medidas de tiempo no están en la música para llamar la atención sobre su propia constitución”. Sayaka Sayaka, compuesta en 2006 para acordeón y percusión, y estrenada en septiembre del mismo año en Dreden, Alemania (première: 29/09/2006, Dresden/D. Johannes Schulin, Kai Wangler), nos recuerda que para Haas es importante que tanto los intérpretes como el auditorio se dejen llevar por las propuestas y por las libertades que ofrece la música. Dejarse llevar para deslizarse y darse cuenta de lo adictivo que puede ser adentrarse en otras formas de escucha, descubrir el espacio entre peldaños, el espectro sonoro, las microdistancias que pueden fragmentar la continuidad sonora... dejar que trasciendan los materiales del acordeón, el cuero, la tela, el metal, la madera... La sugerente continuidad sonora de Sayaka afirma que el atractivo reside en una nueva calidad de la experiencia. Toshio Hosokawa (1955): Melodia (1979) Melodia Finalmente se cierra el círculo del concierto con la pieza Melodia de Toshio Hosokawa, el compositor con el que comenzaba el concierto. Se trata de una obra de juventud compuesta para acordeón en 1979, y dedicada a la acordeonista Mie Miki que estrenó la obra ese mismo año en Hannover, Alemania. Pese a su juventud, 2 1 /0 8 /2 0 1 4 · [ A (R )T W O R K ] · Proyecto # Iñ a k i A lb e rd i: E n to rn o a l a c o rd e ó n m ic ro to n a l P 10 / 11 [QM14] la pieza muestra ya algunas marcas estilísticas que permanecerán en Hosokawa a través de los años: la tradición musical japonesa, la economía de medios, la dilatación temporal, o la corporalidad del sonido. Hosokawa invita a un proceso que reposa en un solo gesto y que se intensifica progresivamente –ya sea en densidad sonora, conquista de registros, o ganancia de dinámicas–. Hosokawa evoca el sonido del shô a través de las lengüetas y el aire del acordeón, juega con la inspiración y la expiración, parte de un sonido en piano y va espesándolo por acumulación de sonido hacia el crescendo para volver al estado inicial en decrescendo. Hosokawa muestra desde la sencillez la inteligencia y la sofisticación. Sayaka Melodia (2006) : Georg Friedrich Haas (1979) 2 1 /0 8 /2 0 1 4 · [ : Toshio Hosokawa A (R )T W O R K ] (1953) (1955) · Proyecto # Iñ a k i A lb e rd i: E n to rn o a l a c o rd e ó n m ic ro to n a l P 11 / 11