RAEEs, REENCARNACIONES Y RECICLADOS BASURA Cuando lo supuestamente práctico se enfrenta a lo legalmente correcto Luis M. Irasarri Hace unos días, iba yo a comer a casa de mis cuñados y junto a un edificio en obras cercano observé un montón de bolsas negras con residuos de construcción, mezcladas con dos microondas, un calefactor y dos coches de niño deteriorados y desechados. Los dos microondas y el calefactor contenían componentes con aceite, probablemente sin mezcla de PCBs a “ojo de buen cubero”, pero eso, solo “a ojo”. Por la tarde, fuimos a una gran superficie a comprar una impresora y unos teléfonos inalámbricos. En el ticket de compra no había ninguna alusión a la disposición transitoria única del R.D. 208/2005 que yo les había mencionado durante la comida. Que nos hagan una factura, dijo mi cuñado. Tampoco en la factura había rastro de la mal llamada “tasa visible”. Leo en una revista de la OCU que el consumidor tiene derecho a saber porque conceptos está pagando y que, por otra parte, no se han percatado de ninguna campaña institucional importante de concienciación ciudadana referente a los RAEEs. Hoy me despierto y la radio me informa que solo reciclamos 1 de cada 10 Kgs de residuos urbanos y, mas concretamente, solo el 4% de los envases (aunque parece que la cifra es errónea y se debe situar entre el 10%-15%. Decía el entrevistado que, sin embargo, estamos pagando para reciclar el 100% de los envases. Ya sé, ya sé que los RAEEs son una cosa distinta a los envases pero….. Mas tarde comento con mi cuñado y me informa de que eso es inflación pura: pagar por algo que ni mejora el Medio Ambiente, ni recupera recursos, ni nada, es pagar por algo que no tiene retorno en forma de valor añadido. ¡¡¡Atiza!!! Rebobinemos. Los equipos electrónicos que llegan a su fin de vida y se desechan significan: - - Un riesgo cierto de contaminación ambiental ya que entre los RAEEs se pueden encontrar substancias y componentes definidos como peligrosos por la Ley, que hoy van a vertederos, incineradoras o gestores no profesionales. Un despilfarro irracional de materias primas y recursos no renovables. Parece inevitable que nos aguarda un futuro de escasez de recursos. Para frenar estos efectos nefastos para el medio ambiente y la economía (ya me dirán Vds. que fabricamos sin materias primas o que podremos comprar si sus precios están por las nubes), el Parlamento Europeo y el Consejo Europeo 1 generan, después de 10 años de discusión pública, la Directiva 2002/96/CE y la 2002/95/CE que se trasponen a la legislación española el 25.02.2005 mediante el R.D. 208/2005 que entró en vigor el 13.08.2005. Uno de los objetivos clave de esta legislación es: producir limpio-usar-reciclar, “reencarnar” las materias primas “eco-eficientemente”, es decir, cumpliendo la Ley en sus aspectos ecológico-medioambientales, minimizando el impacto en la salud y Medio Ambiente y logrando el mínimo costo económico en todas las etapas del proceso. Para ello, las leyes europeas obligan al ciudadano a colaborar en la recogida de RAEEs y pagar por su reciclado, al productor a administrar transparentemente y con criterios industriales, técnicos y económicos, el dinero que le ha sido confiado a dichos efectos y a las administraciones competentes, a facilitar la recogida, instruir al ciudadano y controlar la gestión con rigor. Hoy hace seis meses de la entrada en vigor en España del R.D. 208/2005 y percibo 5 aspectos de la realidad que me dan vueltas en la cabeza: a) Manejamos residuos potencialmente peligrosos. Algunos RAEEs contienen substancias y componentes peligrosos según la legislación vigente y es esencial que los responsables administrativos y, sobre todo, los industriales que van a gestionarlos en nombre de los ciudadanos y bajo la responsabilidad de los productores, lo hagan con el mínimo riesgo para la salud humana y el Medio Ambiente. Las administraciones públicas competentes son las responsables de controlar todo ello, emitiendo las autorizaciones pertinentes y vigilando eficazmente que la Ley se cumpla. El riesgo es asintótico, y por tanto la exigencia, que debe ser creciente cuanto mayor cantidad de RAEEs se encuentran reunidos y más diversidad de substancias peligrosas puedan llegar a tomar contacto entre ellas y con el entorno. Cuanto mayor sea el riesgo, mas crítico será distinguir y manejar correctamente, con garantías de profesionalidad, control y transparencia, las distintas substancias peligrosas que reciban los gestores. Como ciudadano yo me sentiría tranquilo si las administraciones competentes establecieran objetivos de calidad y exigencia en la gestión y tratamientos de RAEEs, homologables con los de países europeos más eficaces y armonizados en todas las CC.AA. Se exigiera a los SIGs que los gestores en que descansan la responsabilidad de los tratamientos de residuos adopten sistemas de gestión y códigos de conducta transparentes y homologables con los más eficientes de Europa. Certificaciones internacionales ISO en calidad, medio ambiente y seguridad e higiene, con un control externo semestral de resultado publicable, al menos durante los 6 primeros años son, en mi opinión, una importante garantía de control para todos. b) Saldando problemas. Después de seis meses y salvo honrosas excepciones parece que el sistema de recogida y tratamiento de RAEEs no acaba de arrancar y cuando lo hace, se proponen soluciones “prácticas” que tienden a “bordear las leyes por el exterior”. Ejemplo. Soy partidario de cambiar los límites y exigencias medioambientales si no responden a sólidos criterios, a poder ser científicos, pero mientras tanto, 2 debe cumplirse la Ley y, si hay que cambiar, se cambia, compensando a los industriales que invirtieron bajo anteriores exigencias si ello les perjudicara. Desde 1992 se sabía que la Directiva RAEEs iba a exigir la extracción de gases peligrosos contenidos en frigoríficos, congeladores, etc., tanto en el circuito de refrigeración como en la espuma aislante. Tanto es así, que se desarrollaron e instalaron procesos de molienda controlada (Alemania, Italia, Suecia, etc.) para “ir preparando el camino” e ir cumpliendo con esos objetivos. En centro Europa se utilizan desde hace años molinos estancos especiales para recoger los gases contenidos en equipos de refrigeración y definidos como peligrosos por las directivas europeas. El Reino Unido ha estado mandando miles de containers a Alemania, Suecia y Holanda para que sus frigoríficos fueran tratados correctamente hasta disponer ellos de instalaciones adecuadas en U.K. Cataluña lleva gestionando sus equipos frigoríficos adecuadamente, es decir, de acuerdo con la Ley, desde 1995. Vamos, referencias e historial no nos faltaban para saber lo que había que hacer correctamente. Me dicen que se está promocionando una propuesta para gestionar solo el 50% de los gases contenidos en equipos frigoríficos, los contenidos en el circuito de refrigeración, y abandonar los contenidos en la espuma aislante “debajo de la alfombra”. El argumento aportado es que “es práctico”. A mi me parece un despropósito mientras la Ley no se cambie. Otro ejemplo. Se esta promocionando el que los RAEEs medianos (TVs, microondas, etc.) y los pequeños (secadores de pelo, vídeos, transistores, etc.) se envíen “totum revolutum”, a un horno de fundición de cobre donde los contenidos de cobre (4% al 7%), cantidades menores de plomo, zinc, antimonio y el metal precioso presente, se reciclaran con bastante eficacia. El resto: plásticos, aluminio, hierro, acero y vidrio, básicamente, se incinerarán para obtener energía y/o acabarán en la escoria. Ese no es el espíritu (léase la introducción en caso de duda) de la directiva original 2002/96/CE. Para este viaje no necesitábamos tanta alforja. Por otra parte, es conveniente recordar que lo más rentable desde el punto de vista energético y del Desarrollo Sostenible es, reciclar “mecánicamente”, plástico para plástico, aluminio para aluminio, hierro para hierro, vidrio para vidrio, acero para acero, etc. No siempre es viable, cierto, pero en más del 80% de los casos, lo es. c) Información al usuario. No saben, no contestan. En los departamentos de información de dos grandes superficies de distribución he comentado la disposición transitoria única del R.D. 208/2005. No tenían ni idea, ni el responsable de información, ni su jefe, ni el jefe del jefe. Nada. No acabo de entender a que viene tanto interés en que el costo adicional que paga el consumidor por tratar los RAEEs “históricos”, o sea, un concepto que no tiene nada que ver con el equipo que esta comprando, sea opaco. Estoy dispuesto a cambiar de opinión, pero, de momento, a mi me parece que ayudaría a la transparencia económica de los procesos de recogida y tratamiento, el que todos supiéramos cuanto pagamos y que se hace con ello. En muchas ONGs tienen auditorias y dan cuentas públicas de lo que hacen. En el caso de la gestión de RAEEs, que se financian en algo que tiene cierto carácter de “impuesto”, yo lo veo oportuno, con mayor razón si cabe. 3 Ya sé que la directiva dice expresamente lo contrario, pero a mi me gustaría que el costo que supone recoger y reciclar los RAEEs fuera visible siempre para el consumidor, siempre. Ahora, la directiva insta a que sea visible el costo relativo a los RAEEs históricos (y ya existen fuertes discrepancias al respecto), pero no para los RAEEs comprados a partir del 13.08.2005. ¿No les gustaría saber lo que pagan por un Desarrollo Sostenible y, en consecuencia, que les rindan cuentas transparentes de quien cobra “cuanto” por hacer “que”?. ¿No creen que sería muy pedagógico? Por otra parte, pienso yo, que incluir en el ticket o la factura el “numero del registro” del fabricante del equipo electrónico, registro a que hace referencia el R.D. 208/2005, serviría como control para evitar fraudes. d) La eficacia, la eficiencia y la inflación. La inflación es eso que, al crecer más que el de los demás competidores, hace que nuestros productos sean inviables en el mercado y las fábricas de nuestros padres cierren o se vayan a otros países más baratos para poder seguir compitiendo. Si cualquier costo que incida en un producto, y el “costo adicional” por recoger y reciclar RAEEs en España es ya uno de ellos, es demasiado alto y, el segmento de mercado español no acepta la subida, el productor tendrá que reducir gastos en el producto de alguna forma si quiere seguir estando en el mercado español. Una forma de reducir costos es aumentando la productividad, otro es irse a fabricar a países con mano de obra mas barata, con energía mas barata, con materias primas mas baratas. Pienso que una solución interesante sería la siguiente: La Administración central, el Ministerio de Medio Ambiente informa a la ciudadanía y la educa, como es su obligación, sobre la problemática de los RAEEs. Todos los años se hacen dos campañas, una coincidiendo con la publicación de los ratios de eficacia del conjunto y los de las distintas autonomías, comparándolos con el resto de la U.E. Algo parecido a lo que hace la Dirección General de Tráfico respecto a los accidentes. Las autonomías hacen campaña cada cuatro meses (insistiendo en las familias y las universidades), una de ellas explicando que poblaciones e instituciones han sido más eficaces en la recogida. Los SIGs (en su conjunto) hacen campaña cada tres meses (insistiendo en colegios, escuelas e institutos), una de ellas, explicando cuanto dinero debieran haber recogido, cuanto se ha recogido en realidad, es decir, cuanto fraude ha habido y como se ha distribuido el dinero recogido, informando de los ratios económicos (euros gastados/Kg recolectado y tratado) y comparándolos con otros miembros de la U.E. Cuanto se ha tratado en España y cuanto, donde y porqué, fuera de ella. Aprenderemos y trataremos de imitar al más eficaz: Kg recogido/habitante/año y también, como lo ha hecho el más eficiente en administración, recogida y tratamiento de acuerdo con la Ley: euros/Kg recogido. Cada estamento debiera establecer premios e incentivos. Finalmente me gustaría que el proceso fuera lo menos inflacionario posible. Para ello, pienso que los municipios debieran hacerse cargo de lo que han hecho toda la vida y saben como hacerlo bien, una eficaz y servicial (cada 4 vez hay mas ciudadanía de edad con dificultades motoras y que vive sola) recogida de RAEEs domésticos mediante una tasa municipal específica. De esa forma, la recogida hasta el punto limpio municipal o mancomunado, especializado en RAEEs, que es la parte más pesada e incontrolable del costo, queda fuera del precio, no es inflacionaria por tanto. Cada municipio busca la solución que crea mas adecuada a su caso y da cuentas de ello a sus contribuyentes. Tiene que ser una medida armonizada, no vale que unos municipios si y otros no. La cuestión de la agrupación, selección y tratamiento de RAEEs, actividades a las que los industriales están muy acostumbrados, es natural que las desarrollen los SIGs, o individualmente el productor si así lo cree conveniente, aplicando primero criterios y exigencias esenciales de calidad, medio ambiente y de seguridad e higiene laboral, teniendo en cuenta que el riesgo se va concentrando según se avanza en el proceso y además, pero en segundo lugar, introduciendo criterios de eficiencia económica. Una vez cumplidos los requisitos esenciales, cuanto menos costo, mejor, porque pudiera así atraerse trabajo de países limítrofes y lanzar una industria de recuperación y reciclado modélica que va a ser clave en un futuro Es muy sencillo el objetivo: cumplir escrupulosamente con las leyes en vigor, ser muy eficaz en medio ambiente y seguridad laboral, ser, al menos, un 20% mas barato que los competidores y ganar dinero para invertir en innovación y nuevas tecnologías. Así se minimizaría el costo, el impacto inflacionario y podría crearse futuro laboral. ¡Casi ná!. e) Pero el problema de fondo sigue ahí. La directiva 2002/95/CE es un primer paso, titubeante. Sin exigir además cambios profundos, de forma que el diseño este concebido para la “reencarnación” de la gran mayoría de los materiales empleados en los equipos, no haremos más que acallar nuestras conciencias, porque ello no evitará que el consumismo galopante que cabalga sobre la necesaria innovación nos lleve a la carestía y luego a la escasez de recursos. Lo que está pasando con el petróleo creo es un buen ejemplo de lo que se adivina en el futuro para otro tipo de materias primas. Desde luego, haciendo la vista gorda y “saldando” los problemas por la vía “practica” no habrá incentivos para el productor sensible y se desincentivará el “diseño para la reencarnación”.Seguiremos teniendo “reencarnaciones basura” por la vía “práctica”, de cumplimiento, de “cumplo” y “miento”. Lógicamente a los productores que se esfuercen hay que premiarlos. Una idea al vuelo para arrancar rápido. ¿Qué tal plagiar la normativa de la etiqueta ecológica “Angel Azul” alemana?.... ¿y premiar a los productores que se acojan con un IVA reducido por 5 años?. Los equipos etiqueta “Angel Azul” ya están en el mercado alemán y estamos en un mercado único, ¿fácil, no?. ¿Que puedo aportar yo?. Pues aparte de contarles como veo las cosas con la esperanza de equivocarme en casi todo, puedo compartir alguna información aprovechable. Creo que un poco de descriptiva y algunas sugerencias sobre las substancias y componentes peligrosos que podemos encontrar en algunos RAEEs pueden ser de utilidad: 5 Los RAEEs pueden presentar en su constitución componentes peligrosos de acuerdo con el Anejo 2 de la Orden MAN 304/2002. Aplicando el art. 5 y Anexo III del R.D. 208/2005 deben ser extraídos selectivamente y ser eliminados o valorizados de conformidad con la Ley 10/1998 sin diluir ni transferir a otro medio. Los siguientes componentes peligrosos pueden encontrarse, entre otros, en los siguientes RAEEs: Aceites minerales Se encuentra presente en algunos radiadores, algunos tipos de condensadores (por ejemplo en microondas), algunos equipos de rayos X, etc. Se tendrá especial cuidado en controlar si este tipo de aceites NO están contaminados con PCBs. Se considerará que la extracción de aceite ha concluido cuando se haya extraído el 98% del mismo. Condensadores de PCB (ver legislación específica: R.D. 228/2006; R.D. 1378/1995; Directiva 96/59/CE, etc.) Los condensadores de PCB fueron retirados del mercado en 1986 pero posteriormente se han encontrado condensadores de aceite de pequeño tamaño contaminados con más de 50 ppm de PCBs. Condensadores de PCB aún se encuentran en RAEEs formando parte de antiguas luminarias fluorescentes y electrodomésticos que poseen motores de cierta potencia, especialmente en lavadoras. Componentes con mercurio El mercurio metal se encuentra en lámparas de descarga para iluminación pero también se encuentra en los relés de contacto por mercurio y en pequeñas lámparas fluorescentes que iluminan las pantallas de cristal líquido (LCD). En todos los casos es necesario desmantelar estos componentes con mucho cuidado ya que van encapsulados en frágiles ampollas de vidrio. Los relés pueden encontrarse todavía en algunos aparatos de este tipo: frigoríficos y congeladores antiguos, aparatos con detectores de vibración, algunos tipos de cafeteras, planchas o calentadores, ciertos controladores de tiempo en iluminación comunitaria, algunos faxes y equipos hi-fi, ordenadores analógicos, equipos de metrología de alta potencia y equipos grandes de telecomunicación. Pilas y acumuladores De acuerdo con la Orden 304/2002 (Decisión 2000/532/EC) todas la baterías de plomo/ácido, los acumuladores de Ni/Cd y las pilas o baterías de todo tipo que contienen mercurio por encima de los límites establecidos, son residuos peligrosos, por ejemplo, hay pilas alcalinas o salinas no fabricadas en la UE, pero introducidas en el mercado europeo a través de importaciones puntuales de choque o incorporadas en juguetes o artilugios electrónicos importados, que 6 han sido fabricadas con tecnologías antiguas y superan en contenido de Hg establecido (5 ppm) entre 200 y 1000 veces. Pilas y baterías como las descritas pueden encontrarse incorporadas en una amplia gama de RAEEs, mencionaré algunos ejemplos: teléfonos móviles, lámparas de emergencia, cepillos de dientes eléctricos, estabilizadores y otros equipos que incorporen fuentes de energía de emergencia, taladros y destornilladores eléctricos portátiles, en general las herramientas portátiles, juguetes y electrónica importada de países de economía emergente, etc. Tarjetas de circuitos impresos Las tarjetas de circuitos impresos que incorporan componentes tales como relés de mercurio, pilas o baterías peligrosas, componentes con oxido de berilio (OBe) o cualquier otro componente clasificado como peligroso de acuerdo con la Orden 304/2002, son residuos peligrosos. Tarjetas de este tipo pueden encontrarse en centrales de telefonía profesional, en ciertos equipos que realicen algún tipo de emisión basada en ondas electromagnéticas y en una amplia gama de tarjetas cuyos componentes necesiten una fuente autónoma de energía incorporada (ej.- relojes electrónicos, relojes de cuarzo), etc. Cartuchos de tinta y toner Los cartuchos de tinta o toner que se encuentran incorporados en impresoras desechadas pueden ser componentes peligrosos por contener o haber contenido cierto tipo de disolventes calificados como substancias peligrosas (Orden 304/2002). Los toner de colores suelen contener substancias constituidas por metales pesados o substancias orgánicas potencialmente peligrosas (Orden 304/2002). Plásticos conteniendo substancias bromadas En los aparatos eléctricos y electrónicos que deben superar pruebas de resistencia contra incendios (la gran mayoría), los plásticos que los constituyen (carcasas, tarjetas, componentes, etc.) suelen incorporar aditivos para lograr superar la norma de seguridad correspondiente al país en que se vende. Los aditivos orgánicos bromados han sido y son utilizados ampliamente para estos fines. Entre la amplia familia de aditivos bromados que han sido empleados y se suelen encontrar en RAEEs relativamente antiguos, hay 3 que están considerados como peligrosos: el decabromo bifenilo, el penta bromo difenil éter y el octa bromo difenil éter. Componentes conteniendo amianto (asbestos) (ver legislación específica: R.D. 665/1997; R.D. 108/1991, etc.) Puede ser encontrado en la distintas variedades del amianto: “crisolita”, “amosita”, ”antofilita” y “crocidolita”. Estas substancias pueden encontrarse en RAEEs relativamente antiguos en los cuales se produce y emplea calor a temperaturas elevadas: cocinas, hornos, calentadores eléctricos, depósitos de agua caliente, máquinas de café, máquinas de yogurt, tostadoras, planchas, etc. En estos equipos, el amianto se encuentra en forma de flocado, paneles aislantes, tejidos, juntas, tubos tejidos, 7 rellenos y materiales aislantes. El amianto se suele encontrar como uno más de los componentes junto a otras fibras orgánicas, cerámicas o minerales. Identificar y manipular amianto requiere una información y formación particularmente específica. Tubos de Rayos Catódicos La principal fuente de este tipo de componentes son las televisiones y monitores aunque también pueden encontrarse en aparatos profesionales como osciloscopios y equipos de proyección o información pública. Los RAEEs que contienen este tipo de componentes son considerados peligrosos de acuerdo a la Orden 304/2002. Un tubo de rayos catódicos esta formado por varios componentes. Desde el punto de vista de su peligrosidad destacan: - La cara interior de la pantalla esta activada por un recubrimiento de material fluorescente que contiene frecuentemente sulfuros de cadmio y zinc así como otro tipo de substancias que contienen elementos químicos llamados “tierras raras”. - El vidrio del cono contiene de un 10% a un 25% de plomo. - Alrededor de un 2%-4% de vidrios de pantalla (color) contienen un 4% de plomo. Todas las pantallas de los tubos de rayos catódicos “blanco/negro” contienen plomo entre un 10% y un 25%. Gases fluorocarbonados (CFCs, HFCs, HCFCs) (Ver legislación específica: Reglamento 2037/2000) Los aparatos que contienen CFCs, HCFCs o HFCs están considerados como peligrosos de acuerdo con la Orden 304/2002. Estos gases pueden encontrarse en el circuito de refrigeración y en la espuma de aislamiento de: frigoríficos, congeladores, termos, deshumidificadores, equipos de aire acondicionado, etc. Hidrocarburos gaseosos (HCs) Los CFCs, HFCs y HCFCs han ido substituyéndose en los equipos mencionados: frigoríficos, congeladores, etc. por hidrocarburos (HCs), generalmente pentano e iso-butano. Los hidrocarburos no se encuentran específicamente definidos como peligrosos en la Orden 304/2002, sin embargo, ambas substancias mencionadas están consideradas como peligrosas en la Directiva 67/548/EC y también aplicando la Directiva 91/689/EEC como resultado de ser ambos gases combustibles con un flash point menor de 55ºC y, por otra parte, formar mezclas explosivas con el aire. Hay noticias de que la molienda de equipos frigoríficos conteniendo HCs provoca explosiones sino se toman las precauciones necesarias. Lámparas fluorescentes y de descarga Es relativamente frecuente encontrar este tipo de lámparas actuando como lámparas de iluminación en la parte trasera de las pantallas de Cristal Líquido (LCD) de ordenadores portátiles, máquinas registradoras, pantallas de televisión LCD (CTSN, TFT, TFTT, etc.) Estas lámparas contienen mercurio y son, por lo general muy finas y delgadas, muy frágiles. 8 El mercurio se evapora a temperatura ambiente con facilidad y, por tanto, es imprescindible realizar un desmontaje cuidadoso de las pantallas LCD para no romper los tubos fluorescentes y poder así desmontar sin daños el encapsulado de vidrio, que es lo mismo que decir: “sin perder el mercurio” por transferencia al ambiente. Aparatos con fibras cerámicas refractarias (Ver Directiva específica 97/69/CE) Se desarrollaron para sustituir al amianto y pueden ser encontrados en aparatos de relativa reciente fabricación. Al igual que el amianto, estas substancias pueden encontrarse en cocinas, hornos, calentadores eléctricos, depósitos de agua caliente, máquinas de café, máquinas de yogurt, tostadoras, planchas. En estos equipos las fibras cerámicas pueden encontrase en forma de flocado, paneles aislantes, tejidos, juntas, tubos tejidos, rellenos y materiales aislantes. Es raro encontrar componentes hechos solo de fibras cerámicas, sino más bien, mezcladas con otras fibras orgánicas, cerámicas o minerales. Identificar y manipular fibras cerámicas requiere una información y formación particularmente específica. Componentes radiactivos (Ver legislación específica: R.D. 1386/1999) Ciertos aparatos industriales (medición de la densidad, espesor, recubrimientos, etc.) y profesionales (medicina) incluyen substancias radiactivas. A pesar de que estos aparatos están sometidos a un severo control, es importante considerar la posibilidad de que puedan venir mezclados y no identificados en un conjunto de RAEEs que llegan al gestor. Es necesario realizar inspecciones sistemáticas preventivas con detectores adecuados en todas las partidas. Existen detectores de humos que se emplean en casas, hoteles, hospitales, lugares públicos que están basados en substancias radiactivas como el Americio-241. Las emisiones de estos detectores se consideran banales o inocuas por la Ley. Sin embargo su acumulación, molienda, dispersión o fundido en cantidades, pongamos superiores a 2Kgs, debiera, en mi opinión, estar controlado y, preferentemente, separados y depositados en cementerios de substancias radiactivas. Componentes con óxido de berilio (OBe) Estos componentes no se encuentran descritos en la lista del Anexo III (R.D. 208/2005), son poco frecuentes, pero debido a su peligrosidad potencial creo importante tenerlos en cuenta. El aspecto del OBe es el de una porcelana cruda, dura, de color blanco o rosado. A veces se ha mezclado polvo de OBe con siliconas para relleno de ciertos componentes electrónicos. Es buen conductor del calor y malo de la electricidad. En forma compacta es poco nocivo aunque es importante manejarlo con guantes, pero en forma pulverulenta es muy peligroso. En mi opinión la forma mas segura de control es una descontaminación selectiva previa de los RAEEs correspondientes, la cual presenta riesgos fácilmente controlables. Naturalmente las cautelas y controles deben prolongarse, en todo caso, por el resto del proceso de tratamiento de los RAEEs. 9 Se encuentran preferentemente en electrónica relacionada con la emisión de ondas electromagnéticas con alta potencia. Identificar y manipular estos componentes requiere una información y formación particularmente específica. Otros componentes mencionados por el Anexo III del R.D. 208/2005 como: Pantallas de cristal líquido (exentas de tubos fluorescentes), Tarjetas de circuitos impresos (exentas de componentes peligrosos), Cables eléctricos externos y Condensadores electrolíticos. El Technical Assesment Comité (TAC) de la Comisión Europea, asignado a las Directivas fuente del R.D. 208/2005 está considerando seriamente la retirada de estos componentes del Anexo II de Directiva y, en consecuencia, del III del R.D. 208/2005. Es importante que los gestores que vayan a ser autorizados por las administraciones competentes para transportar masivamente, clasificar, manipular o tratar RAEEs, demuestren un conocimiento profesional de los componentes peligrosos con los que se van a encontrar, conocimiento tanto mas profundo cuanto mas se avanza en la cadena de tratamiento, así como, un riguroso cumplimiento de las leyes que afectan a esa actividad industrial, tanto medioambientales como de prevención de riesgos laborales ya que, en el caso de los RAEEs, no solo puede afectar la presencia de una determinada sustancia peligrosa sino que será frecuente la presencia simultanea de varias de ellas cuyas interferencias y efectos son a menudo poco conocidos y pudieran ser multiplicadores. La armonización de estas exigencias entre las CC.AA. influiría muy positivamente en la conservación de la unidad de mercado y logro de un alto grado de calidad medioambiental en todo el territorio español, objetivo que persigue la Directiva Europea en todos los miembros de la UE. Por cierto, he vuelto a casa de mis cuñados y en los contenedores, esta vez, habían desaparecido los transformadores que incorporaban los microondas (a eso se llama canibalizar los RAEEs) pero…., habían nuevos especimenes: un aerosol técnico sin información medioambiental, dos tubos fluorescentes, una tabla de la plancha y un aspirador. También he visto a un encargado municipal vaciando las (múltiples) papeleras del paseo, clasificar los envases y los periódicos (con guantes) y acercarlos a los contenedores específicos. Pitos y palmas para el concejal correspondiente. Seguiremos informando. LMI 21.03.2006. 10