Tema 1 El lenguaje es una capacidad general cognitiva del ser humano. La lengua, por su parte, es la manifestación de esta capacidad en un sistema determinado. El objetivo de la lingüística general es describir un lenguaje, incluyendo los procesos que hacen referencia a este y cómo se investiga (el método de conocimiento). La lingüística interna se ocupa del sistema interno de las lenguas. La externa se ocupa de las relaciones con el mundo exterior, con otras disciplinas y otras capacidades cognitivas. A esta rama pertenecen, por ejemplo, la antropología lingüística, la psicología lingüística, la biolingüística… etc. La lingüística teórica puede equipararse a la general. Se opone a la lingüística descriptiva, que se basa en una lengua concreta y a la lingüística aplicada, que se utiliza para la resolución de problemas particulares. La lingüística general surgió como ciencia en 1916, año en el que se publicó el Curso de Lingüística General de Ferdinand de Saussure, editado de forma póstuma a partir de una recopilación de los apuntes tomados por sus alumnos durante años. Esta obra revolucionó el mundo de la lingüística pues cambió la manera de enfocar esta ciencia en muchos aspectos: 1. El lenguaje se convirtió en una ciencia autónoma, dejando de estar subordinada a otras disciplinas. 2. La lingüística dejó de deberse a la introspección del lingüista, que basaba las descripciones en el lenguaje individual del autor y en cómo lo utilizaba. 3. Dejó de ser normativa, pasando de ser prescriptiva a descriptiva. 4. Dejaron de interesar los usos anteriores del lenguaje, lo diacrónico. La lingüística comenzó a centrarse en cómo se utiliza el lenguaje en el presente. 5. Los lingüistas comenzaron a interesarse por el habla, por la oralidad. Antes de esto solía trabajarse con textos escritos, que se consideraban la norma. En torno a un 30% de todas las lenguas existentes en la actualidad son únicamente orales. Enfoques en el estudio del lenguaje: Enfoque biológico: El enfoque biológico del lenguaje es el enfoque más moderno. Considera que el ser humano es capaz de utilizar el lenguaje porque su fisiología lo permite debido a unas características que ningún otro animal posee, así como ninguna de las especies de homínidos anteriores al homo sapiens sapiens. Las características fisiológicas que diferencial al ser humano del resto de primates son principalmente la evolución del sistema nervioso central y del aparato fonador, que tiene forma de L invertida, a diferencia de los primates, cuyo canal es plano, que poseen dos canales diferentes que les permiten comer y respirar al mismo tiempo. La pérdida de esta capacidad, en apariencia positiva, es lo que permitió que el homo sapiens sapiens comenzara a hablar, lo cual desde el punto de vista de los lingüistas marcó la diferencia entre la supervivencia de estos y la extinción de los neandertales, que solo podían producir sonidos nasales y vocálicos centrales. Otra característica es la disminución del prognatismo, lo que favoreció el desarrollo de la cavidad bucal. Los principales cambios del sistema nervioso central fueron el crecimiento del cerebro y del cociente de encefalización, que hace referencia a la relación que existe entre el tamaño del cuerpo y del cerebro. Además, el cerebro humano se especializó: creció el neocórtex y las diferentes partes de este adquirieron funciones específicas, incluyendo el lenguaje. También se especializó el córtex motor, que controla los movimientos corporales. Aparecieron además las áreas de Broca y Wernicke. 1 Dentro de este enfoque de la lingüística se encuentran varias ramas científicas: 1. Antropología. Estudia aspectos del lenguaje como el momento histórico en el que este surgió, que en la actualidad se cree que fue el Paleolítico Superior. 2. Biolingüística. Se ocupa del estudio del gen del lenguaje y está muy relacionada con las teorías del innatismo, que surgieron vinculadas al movimiento generativista liderado por Chomsky. Esta teoría considera que en el código genético del ser humano se encuentra el lenguaje y habla del órgano del lenguaje. 3. Psicolingüística. Los psicolingüistas son los que se encargan de estudio de los procesos cognitivos que subyacen al lenguaje, es decir, qué procesos realiza nuestra mente cuando hablamos y entendemos. 4. Neurolingüística. Estudia las áreas cerebrales implicadas en el lenguaje. Por otra parte, la foniatría y la logopedia pertenecen a la lingüística aplicada o práctica. Enfoque estructural: El enfoque estructural trata cómo es el sistema lingüístico y cómo hacemos uso de él. El fundador de la escuela estructuralista fue Saussure. La gramática (sintaxis y morfología) se ocupa del estudio de las relaciones del lenguaje. Del significado se encargan la semántica, la lexicología y la lexicografía. Finalmente, la fonética y la fonología se encargan del modo de transmisión. Dentro del uso del lenguaje, la pragmática se encarga de estudiar para qué sirven o para qué se usan las diferentes estructuras del lenguaje. Aquí se incluye también el análisis del discurso. Enfoque social: Cuando se considera el lenguaje desde el punto de vista social hay dos enfoques principales: el lenguaje como comunicación y el lenguaje como constructor de la sociedad. Sociolingüística. Geografía lingüística: se encarga de estudiar las poblaciones en relación a las lenguas que se utilizan. Dialectología: se ocupa de la variación lingüística en relación con el área geográfica a la que pertenecen los hablantes. Etnolingüística: estudia las relaciones entre cultura y lengua. Lingüística de la comunicación: estudia el fenómeno de la comunicación a partir de los elementos que la componen y sus funciones. Rasgos de diseño del lenguaje humano: Arbitrariedad: no hay relación natural entre el significante y el significado. El signo lingüístico es arbitrario, simbólico y convencional. Hay excepciones como las onomatopeyas. Además, la estructura sujeto+verbo+objeto parece tener una explicación temporal desde el comienzo de la acción al final de esta. Doble articulación del lenguaje: el lenguaje tiene dos niveles: el de los morfemas, que son unidades mínimas con significado y el de los fonemas, que pese a no tener significado por sí mismos modifican el de los morfemas. Productividad: los seres humanos somos capaces de crear enunciados que antes no habían sido dichos y, además, comprenderlos. Un niño es capaz de producir enunciados que no ha oído a sus padres. Esto no ocurre en los otros animales como los primates, cuyo número de señales es transmitido de padres a hijos sin 2 variar en cantidad. El lenguaje de las abejas combina elementos, pero siempre de la misma forma (dirección y distancia). La productividad es posible por la doble articulación del lenguaje y la gramática, que es un sistema jerárquico. Se considera que la gramática aporta al lenguaje la recursividad, es decir, hay características gramaticales que se pueden aplicar de forma repetitiva, casi infinita, a la expresión de la lengua. Por ejemplo, las construcciones de relativo permiten realizar encadenamientos infinitos, así como la coordinación o la yuxtaposición. Existen excepciones, reglas que limitan las capacidades del lenguaje humano, estudiadas especialmente por los generativistas, escuela fundada por Chomsky. En el estudio de estas reglas o universales lingüísticos introdujo el término gramatical frente a gramatical, que no coincide con lo correcto y lo incorrecto, aspectos que no interesan a los generativistas. Estudian lo que se puede decir y lo que no se puede decir, a tres niveles: fónico, léxico y sintáctico. Fonéticamente, [pft] y [pttk] son agramaticales, pues no serían usados por ningún hablante del mundo que tuviese que crear una nueva palabra. Sin embargo, hay lenguas que pueden tener combinaciones como [pls], [pla] o [pal] como sílabas. A nivel del español, solo los dos últimos sonidos serían gramaticales. La combinatoriedad léxica varía dependiendo de las lenguas: por ejemplo, en español, los errores se cometen, en inglés, se utiliza el verbo make. Existen muchos casos de estructuras gramaticales pero incorrectas, como aquellas en las que hay leísmo. Carácter discreto: el lenguaje divide en elementos discretos aquellos espectros continuos como los colores, las ondas sonoras… Todas las unidades sintácticas son siempre únicas e indivisibles y se oponen a las unidades continuas de la naturaleza. Cuando un niño nace, es capaz de diferenciar todos los sonidos de todas las lenguas del mundo. A partir del décimo mes, el oído se hace sensible única mente a los sonidos de su lengua materna. La [p] y la [b] forman parte de una misma onda. El oído es capaz de distinguirlas atendiendo al momento en el que las cuerdas vocales empiezan a vibrar: la onda es un continuum que dividimos en esos dos sonidos, cuya división también puede cambiar dependiendo de la lengua. En árabe, por ejemplo, no se distinguen el sonido [p] y [b]. Esto se debe a la percepción categórica: cuando el ser humano percibe los sonidos les asigna una categoría dentro de su sistema fonético. Los seres humanos son capaces de adaptar la percepción a la duración del sonido. Desplazamiento: en el lenguaje humano podemos hacer referencia a acontecimientos que no están ligados al momento presente en el que se produce el mensaje. Es decir, podemos hablar de acontecimientos en el pasado y en el futuro. Los sistemas de comunicación animal solo pueden producirse en el momento, en general, aunque animales como las abejas presentan cierto desplazamiento al ser capaces de hacer referencia a la comida situada en un lugar diferente al que estas ocupan. Transmisión cultural: el aprendizaje de una lengua es independiente del código genético y de la raza. Esto se opone en cierta manera a los generativistas: considerar que la lengua es algo cultural va en contra de la opinión de que el lenguaje está en los genes. Otros rasgos de diseño: Canal auditivo-vocal: el lenguaje humano está basado en el uso de un canal oral y una percepción auditiva especializados. Las características del aparato fonador son tales porque su objetivo es producir el lenguaje, así como las del auditivo se orientan a la comprensión. La especialización no tiene que ver con la amplitud del rango auditivo que percibimos, pero sí con la capacidad para diferenciar sonidos dentro de este rango. Transferibilidad de medios: el ser humano ha sido capaz de transformar las señales del canal auditivo y vocal a otros medios que pueden ser percibidos por otros sentidos, como la escritura o el braille. 3 Retroalimentación: al mismo tiempo que producimos un mensaje, lo recibimos y entendemos. Esto permite modificar el lenguaje, corregirlo... Está relacionada con el canal auditivo-vocal. Intercambiabilidad: el emisor y el receptor pueden intercambiar sus papeles en una misma conversación. Está relacionada con la retroalimentación. Especialización: aparte de estar biológicamente al lenguaje, es también una especialización de tipo funcional (comunicativa, informativa, etc.). Está relacionada con el canal auditivo-vocal. Semanticidad: los signos lingüísticos tienen una relación semántica estable. El ser humano tiene la capacidad de modificarla, pero pasando por una serie de estados de semanticidad constante. Desvanecimiento rápido: el lenguaje se desvanece tras ser emitido. Esta es la cause directa de la transferibilidad de medios y está relacionado con el canal auditivo-vocal. Reflexibilidad: el lenguaje humano sirve para hablar de sí mismo (metalenguaje). Prevaricación: en el lenguaje humano se pueden emitir mensajes falsos, el ser humano puede mentir. 4