ALEMANIA Los Orígenes Alemania está situado a lo largo de rutas de migración, por lo que desde la prehistoria este país ha sido el lugar de numerosas migraciones. De hecho, los paleontólogos han recuperado rastros de homínidos que emigraron de África y que se remontan a 50 millones de años. Además, gracias a los científicos sabemos que en los principios de la historia hace 400,000 años, vivió una forma derivada del Homo Sapiens cerca de la ciudad actual de Heidelberg. Ya que se pensaba que radicaba en esta área se le llamó el “Hombre de Heidelberg”, que era una especie más avanzada que su antecesor. En ese entonces, los grupos de nómadas se dedicaban a la caza y a la recolección. También se tienen datos de la época del hombre del Neanderthal gracias a los restos que se encontraron cerca de Düsseldorf. Estos grupos vivieron ahí hace aproximadamente 100,000 años. Un tiempo más adelante, en el 40,000 a.C., se sabe que existió el “Hombre de CroMagnon”, una especie del Homo Sapiens-Sapiens más parecida al hombre actual. Los pueblos cazadores se encontraron con los pueblos agrícolas del suroeste de Asia, con quienes se mezclaron y convivieron por un tiempo. Impresionantemente, es en Alemania de donde provienen el mayor número de datos arqueológicos más importantes relacionados con este grupo prehistórico. Estos hallazgos han hecho pensar a los arqueólogos que fue en Alemania (en el sur del país) donde se descubrió la música, e incluso, el arte en sí, hace unos 35,000 años. Más adelante, en el año 2,300 a.C. llegaron nuevos grupos de inmigrantes sobretodo del sur de Rusia, y se instalaron en el centro y norte de Alemania. Del 1,800 al 400 a.C, durante la Edad de Bronce, las tribus alemanas absorbieron gran parte de la cultura de los pueblos celta, los cuales desaparecieron en años posteriores. Es hasta el llamado “Período de migración”, que comienza la historia de Alemania como la conocemos hoy, cuando los escritores griegos y romanos comenzaron a describir a los habitantes de la región. Del 300 al 500 d.c. los pueblos nómadas que hablaban lenguas germánicas, emigraron a la región que hoy conocemos como Alemania del este encontrándose con los pueblos celtas que ya vivían ahí. El Imperio Romano En los siglos que siguieron, las tribus germánicas gradualmente sustituyeron a las tribus celtas, quienes invadieron el Imperio Romano a lo largo de las fronteras del Rin y del Danubio. Para los romanos que llamaban a Alemania “Germania”, esta región era un pueblo bárbaro y sombrío, que estaba inclinado hacia la destrucción. Después de que la autoridad romana colapsó en las provincias occidentales a finales de los años 400 de la era cristiana, uno de estos pueblos germánicos, los francos, llevó gradualmente a las diversas tribus germánicas bajo su autoridad y cristianizó a los paganos restantes en la región. Los gobernantes francos, incluyendo al famoso CarloMagno, los presentaron como herederos de los emperadores romanos. Alrededor del año 800 d.C. CarloMagno creó un gran imperio que ocupaba los territorios de Alemania y Francia, sin embargo, después de su muerte la región sufrió un gran malestar social. Fue hasta el año 936 que Otón I consolida el imperio nuevamente. CarloMagno fue el único soberano que pudo unificar lo que hoy en día es Alemania, Francia e Italia. El imperio sólo duró 40 años, el cual es dividido por el Tratado de Verdún. Durante los siguientes 80 años, Alemania es dividida en cinco ducados (Sajonia, Bavaria, Franconia, Lorena y Suabia) dirigidos por el rey Luis “El Germánico”. La creación de un Estado germánico en Europa central, cuyos gobernantes heredarían la corona del Sacro Imperio Romano, fue una piedra angular importante en el desarrollo de la identidad alemana, a medida que el lenguaje y la lealtad política se fusionaron. Edad Media Durante la era medieval y la era temprana moderna, la estructura imperial proporcionó a los territorios alemanes fragmentados un marco administrativo y legal, al mismo tiempo que se preservó la libertad de centenares de príncipes y ciudades alemanas. Posteriormente, la unidad del “Sacro Imperio Romano” fue destrozada durante el siglo XVI, con el juicio de Martín Lutero contra la Iglesia Católica. Precisamente, uno de los personajes más influyentes de este período de la historia es Martín Lutero. Gracias a su traducción de la Biblia hace un aporte importante al desarrollo del idioma alemán, además que crea una impresionante fractura en el mundo cristiano. Con su reforma protestante, no sólo cambia la historia religiosa y el pensamiento teológico, sino que también modifica el rostro de Europa, gracias a los elementos sociales y políticos que la reforma contiene. El nuevo pensamiento religioso que él defendió fue la piedra angular de los pensadores de la época moderna, como Hegel y Kierkegaard. Alemania y Europa fueron divididas en una lucha religiosa, donde se encontraban los católicos y los protestantes, ya que la Iglesia luterana fue reconocida como la nueva confesión sancionada a partir de 1530 en muchos estados alemanes. Como consecuencia de este conflicto religioso, surge la llamada “Guerra de treinta años”, que devastó el territorio alemán, provocando que la población se redujera en un 30%. La Guerra de los Treinta Años disminuyó considerablemente el poder y el prestigio del Santo Emperador Romano y destruyó el equilibrio que había dentro del imperio con la autoridad imperial y la autonomía territorial. Esto, a su vez, provocó que existiera una fuerte lucha por el poder entre los príncipes, lo que al mismo tiempo le daría un poder dominante al norte de Alemania. Algo que más adelante, en la era moderna, traería consecuencias desastrosas, debido a su nacionalismo exagerado. La era moderna, fue traída por los ejércitos de Napoleón, quienes ayudaron a que cayera el Sacro Imperio Romano, propagando ideas revolucionarias y nacionalistas dentro de Alemania. Es hasta 1648 que la guerra termina, pero el territorio es dividido en numerosos principados. Confederación Germánica Cuando el último monarca del Sacro Imperio Romano Germánico abdicó, se inició una búsqueda por crear un Estado nacional alemán unificado. Dentro de los asuntos a discutir se encontraba si se debía crear una gran Alemania conformada por todos los territorios o una pequeña Alemania integrada sólo por algunos estados; además a esta disyuntiva se le sumaba el reparto del poder entre el pueblo y la corona. En marzo de 1848, la Revolución estalla en Alemania, lo que convierte a Alemania en un estado nacional e institucional. Al instalarse el primer Parlamento en Frankfurt se estableció que no sería posible establecer un Estado nacional que incluyera a Austria, con lo cual se decide por la “pequeña Alemania”, en la forma de un imperio bajo el dominio del Reino de Prusia. El surgimiento de Prusia, trae consigo el establecimiento de una potencia militarmente agresiva, declarando a Alemania como Imperio en 1871, y gobernada por un monarca prusiano. Unificación Alemana En 1871 es el inicio de Alemania como país con la institución del Imperio Alemán. Tras la victoria de Prusia en la Guerra Franco-Prusiana, se consigue la unificación de los diferentes estados alemanes, excluyendo a Austria. De esta manera Prusia se convierte en Alemania bajo el régimen del canciller Otto von Bismarck, uno de los estadistas más importantes del siglo XIX. A partir de entonces se inicia un período de gran desarrollo nacional en los ámbitos de economía, política y milicia. Desde entonces, Alemania es considerada junto con el Reino Unido, una de las principales potencias del mundo. Bajo este liderazgo, Alemania experimentó rápida industrialización, y el nacionalismo alemán militante surgió a finales del siglo XIX. Primera Guerra Mundial El pretexto para el inicio de la guerra se dio a causa del asesinato del archiduque Francisco Fernando, heredero de la corona austriaca, en Sarajevo (junio de 1914) por parte de una organización nacionalista serbia llamada “Mano Negra”. Con este suceso, Austria quiso aprovechar la oportunidad para acabar con Serbia, a lo cual Alemania se unió. El 1º de agosto de 1914 estalla la Primera Guerra Mundial donde Alemania se lanza al combate en apoyo a su aliado el Imperio Austrohúngaro. Las grandes potencia se aliaron en dos bandos: por un lado, los Aliados de la Triple Entente (Rusia, Reino Unido y Francia), y, por otro, las Potencias de la Alianza Central (Alemania, Austria-Hungría). El conflicto comenzó con la invasión de Francia por el Imperio Alemán, Bélgica y Holanda, seguida de la invasión de Serbia por el imperio Austrohúngaro, y el ataque de Rusia contra Alemania. En total, más de 70 millones de militares, incluyendo 60 millones de europeos, lucharon en la guerra más grande de la historia hasta ese momento. Tras años de estancamiento, la guerra empezó su decaída en marzo de 1917 con la derrota de Rusia tras la Revolución de Febrero y la firma de un acuerdo de paz entre este país y las Potencias Centrales en marzo de 1918. El 4 de noviembre de 1918, el Imperio Austria-Hungría solicitó un acuerdo y tras una serie de ofensivas por parte del imperio alemán a lo largo de todo el Frente Occidental, los Aliados hicieron retroceder a los alemanes. Alemania, el 11 de noviembre de 1918, solicitó un acuerdo, poniendo fin a la guerra con la victoria de los aliados. Al final de la guerra Francia, el Reino Unido y el Imperio Ruso, fueron derrotados militar y políticamente, a tal grado de desaparecer. El Imperio alemán, entonces se adjuntó los territorios derrotados de Francia, Gran Bretaña, España, y Portugal. Segunda Guerra Mundial En 1933, el Partido Nacional Socialista de los Trabajadores Alemanes, el cual estaba constituído por un grupo fascista radical, tomó el control en Alemania después de que su líder, Adolfo Hitler, fuera nombrado canciller. Bajo este liderazgo nazi autocrático, Alemania cayó en una dictadura totalitaria, que también trajo como consecuencia una opresión racista de sus ciudadanos judíos. A pesar de que el gobierno de Hitler sólo duró una década, trajo consigo una Segunda Guerra Mundial y el genocidio de millones de judíos, mejor conocido como “el Holocausto”. La Segunda Guerra Mundial es el capítulo más oscuro de la historia alemana. El 01 de septiembre de 1939 Alemania inicia la Segunda Guerra Mundial al invadir territorio polaco. El gobierno de Hitler tenía como meta la adquisición de un gran imperio, para alcanzar la hegemonía de Alemania. Sin embargo, esta guerra no sólo fue de carácter político-económico, sino que también sirvió para aplicar fuertes leyes racistas. Durante esta guerra se hizo la peor masacre de la historia, no solamente se asesinaron a más de 6 millones de judíos, gitanos, rusos, serbios, polacos y otras etnias, sino que también se crearon campos de concentración donde se torturaban y explotaban a personas pertenecientes a estos grupos. El campo de concentración de Auschwitz fue el campo más grande de exterminio durante el Holocausto, estuvo dirigido por el oficial de las SS Obersturmbannführer Rudolf Höss hasta el verano de 1943. En 1940, tenía una población de 1,400 personas, la mayoría de ellos judíos. Más de 6,500 miembros de las SS sirvieron en Auschwitz realizando diversas tareas brutales para cumplir con el objetivo de la llamada solución final al “problema judío”. La solución final era el plan de los nazis para llevar a cabo un genocidio sistemático, para erradicar a la población judía de Europa. También, dentro de Alemania se llevaron a cabo varias luchas internas para detener a Hitler ya que muchos se encontraban en desacuerdo con sus ideas, además se daban cuenta de que lo que quería lograr era imposible. La Rosa Blanca fue un grupo organizado que abogaba por la resistencia no violenta contra el régimen. Se fundó en 1942, por un grupo de estudiantes cristianos que redactaron, imprimieron y distribuyeron 6 hojas en las que animaban a la población a la resistencia contra el nacionalismo. Al principio, las hojas se distribuyeron mediante envíos masivos por correo, en diferentes ciudades en Baviera y Austria, ya que el sur de Alemania sería más receptivo al mensaje antimilitarista. Los hermanos Scholl, sus principales líderes, comparecieron ante el tribunal el 22 de febrero de 1943, donde se les culpó de traición, y fueron condenados a la guillotina ese mismo día. Todos los miembros clave del grupo fueron condenados a muerte el verano de ese año. El 25 de abril de 1945, las tropas soviéticas y americanas entraron por primera vez a Alemania, “cortando” el país en dos. El 30 de abril de 1945, Hitler se suicida en su búnker de la Cancillería del Reich en Berlín. El ingreso de los Estados Unidos a la guerra acabó por derrotar a Alemania quien firmó su rendición el 08 de mayo de 1945. Es entonces que en que en la conferencia de Postdam se vuelve a definir el mapa político de Europa y las zonas de ocupación de Alemania y Austria. La Guerra Fría Después de la Segunda Guerra Mundial, Alemania, ya derrotada y devastada por la guerra, se convirtió en el primer punto de la Conferencia de Postdam. En la Conferencia de Postdam de 1945, los aliados dividieron Alemania en cuatro zonas de ocupación militar: Francia al suroeste, Gran Bretaña al noroeste, Estados Unidos al sur y la Unión Soviética al este. La antigua capital del imperio Nazi, Berlín, también se dividió entre los aliados. Los rusos se habían comprometido a que los aliados occidentales cruzaran el territorio. Sin embargo, para 1948, los rusos endurecieron el control sobre Europa del Este. Pero, los aliados del oeste emitieron una moneda para rescatar la economía alemana, lo que causó enojo entre los soviéticos, quienes respondieron cortando todo el tráfico de Berlín Occidental en junio de 1948. La ocupación de los aliados tuvo como ícono el Muro de Berlín, el cual perduró más de 40 años. Sin embargo, a partir de 1950 logra una impresionante recuperación internacional, lo que la convierte en la tercera potencia económica a nivel mundial, superando a la Unión Soviética, a Gran Bretaña y Francia. El Muro de Berlín Las diferencias entre los aliados y los comunistas eran tan grandes que incluso se llegaron a tener dos monedas, dos ideales políticos y finalmente dos Alemanias. En 1949, Alemania se divide en República Federal Alemana (RFA) y en la República Democrática Alemana (RDA). La pobre economía soviética y la creciente economía de Berlín, trajo consigo que muchos pobladores de Alemania Oriental quisieran pasarse al otro lado, lo que provocó que la noche del 12 de agosto de 1961, se levantara un muro provisional y sólo se dejaran abiertos 12 puntos de control. Con el paso del tiempo se construyó un muro de ladrillo y se puso un alambrada para que los pobladores de Alemania Oriental no pudieran pasar al otro lado. Entre 1961 y 1989 miles de personas intentaron cruzar a Alemania occidental, sin embargo, muchas fueron detenidas y muchas otras murieron en el intento. Hasta el 09 de noviembre de 1989 miles de personas se agolparon en los puntos de control para poder cruzar al otro lado, sin que nadie pudiera detenerlos, de forma que se produjo un éxodo masivo. La Reunificación Alemana El primer ministro soviético Mikhail Gorbachev asumió como jefe del Partido Comunista de Rusia en marzo de 1985, después de una serie de líderes ineficaces. Como parte de este cambio, Gorbachov lanzó un amplio programa de reformas en el Congreso del Partido Comunista de febrero de 1986. Durante una visita estatal a Alemania del Este realizada por Gorbachov, una multitud de manifestantes saludó al líder soviético, gritando por el cambio. Después de la caída del Muro de Berlín tuvieron que pasar 11 meses para que se estableciera la Reunificación de Alemania. Con esto Alemania Occidental y Oriental se unen formando un sólo país, teniendo como capital Berlín. El 03 de octubre se firma el tratado de Reunificación, se autorizó la adhesión de la RDA a la RFA. Los países que habían ocupado la Alemania de la posguerra: la Unión Soviética, los Estados Unidos, Gran Bretaña y Francia, firmaron el Tratado sobre el Acuerdo Final con respecto a Alemania el 15 de marzo de 1991. El tratado, firmado por Alemania Oriental y Occidental y ratificado por el Estado alemán unificado, eliminó las limitaciones sobre la soberanía alemana que quedaba de las secuelas de la Segunda Guerra Mundial. Dando pie al nacimiento de la nueva Alemania. Alemania y la Unión Europea Alemania es considerado un estado fundador de la Unión Europa, ya que desempeñó un papel fundamental en su construcción. En un principio la Unión Europe no era tan grande como lo es actualmente, ya que sólo estaba formada por Alemania, Bélgica, Francia, Italia, Luxemburgo y los Países Bajos. Actualmente, hay 28 miembros de la unión Europea. En 2001, se da paso a uno de los cambios económicos más importantes de la región, al establecer el euro como la moneda común de la Unión Europea. El euro es la moneda de 19 países de los 28 miembros de la UE. El espacio Schengen es uno de los mayores logros de la UE. Consiste en un espacio sin fronteras internas, en el que ciudadanos de la UE, así como ciudadanos de otros países pueden circular de manera libre sin estar sujetos a controles fronterizos. Desde 1985, ha ido creciendo y hoy en día incluye a casi todos los Estados miembros de la UE y a algunos países asociados que no necesariamente pertenecen a la UE. Como puedes ver la historia alemana es muy compleja y extensa, sin embargo, aquí tratamos de resaltar los puntos más importantes y sobretodo retomar aquellos acontecimientos que de alguna manera han impactado no sólo a Alemania, sino también al mundo entero. Alemania es un país que ha sufrido muchos episodios turbulentos a lo largo de su historia, también ha sido el ejecutor de uno de los episodios más trágicos de la humanidad; sin embargo, a pesar de su difícil y controversial historia, hoy en día es una nación que reconoce y procura la igualdad entre todos sus habitantes, incluyendo a aquellos que no nacieron en Alemania. Y, además, en la actualidad es considerada la locomotora de Europa, una potencia a nivel mundial. Alemania es un país exitoso, admirado por muchos otros países, y aunque a 27 años de la Reunificación, todavía tiene algunas diferencias entre regiones, sin duda, es un país con una enorme fuerza económica e influencia política. Además de ser un país totalmente democrático, algo muy diferente a lo que era el Tercer Reich en los años 40. Esperamos que este breve recorrido por la historia alemana te haya gustado y que hayas aprendido algo nuevo de este hermoso país. 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