Liberalismo clásico El liberalismo aparece a mediados del siglo XVI, en Inglaterra. Es la doctrina política, económica y social que defiende (u originalmente lo hacía) la libertad individual, la libertad en el comercio y la apertura de los mercados combinadas con la limitación del poder del gobierno. El liberalismo económico señala que la mejor forma de alcanzar el desarrollo económico y la eficiencia en la asignación de los recursos es a través de un mercado libre sin la intervención del Estado (regulaciones, impuestos, etc.). Características: Sus bases racionales son el realismo y fundamentalmente el empirismo sustentado bajo el derecho natural. Se mantiene el equilibrio de la producción y el consumo ya que la oferta y la demanda tienen libre interacción. El Estado tiene limitada su interacción, pues debe dejar que las empresas y personas lleven a cabo sus acuerdos y contratos. La oferta y demanda se ve afectada pues no cuentan con la protección del estado y tampoco con su completa aceptación. El desarrollo y protección de la economía queda en mano de las empresas y personas. Para que su ejecución sea exitosa, la acumulación de capital y los ahorros son indispensables. La empresa o persona busca siempre el beneficio personal, impulsando así el bienestar social. Neoliberalismo El “nuevo liberalismo” aparece entre 1970 y 1980. Es también una corriente pero esta se limita más bien a lo económico y lo político. El neoliberalismo es considerado una corriente de tipo capitalista. A pesar de basar algunas de sus ideas en el liberalismo clásico o tradicional, se trata de una corriente completamente diferente, y más radical. El neoliberalismo defiende la liberación de la economía al mismo tiempo que promulga la necesidad de favorecer al sector privado con intervenciones imparciales del Estado. Características: La mínima participación del Estado en la configuración de la economía de un país. La poca intervención del gobierno en el mercado laboral. Política de privatización de empresas estatales. Libre circulación de capitales internacionales y el énfasis en la globalización. La economía le abre las puertas a las multinacionales para que inviertan. Adopción de medidas contra el proteccionismo económico. La operación de las actividades económicas son notoriamente más simplificadas, ya que se resume la burocracia del estado en el proceso. Oposición al exceso de impuestos y gravámenes. Aumento de la producción, para lograr el objetivo básico del desarrollo económico del círculo inversor. Contra el control de los precios de los productos y servicios por parte del Estado, es decir, la ley de la oferta y la demanda es suficiente para regular los precios. La base económica debe estar formado por empresas privadas. Fundamentado totalmente en el capitalismo.