Pátzcuaro, Michoacán.- Esta construcción que originalmente funcionó como parte del Ex Convento de Santa Catarina, de las Monjas Dominicas, fue construida a mediados del siglo XVIII, ubicado a media cuadra de la actual Plaza Vasco de Quiroga. De acuerdo a información extraída del libro Descubre una cuenca, el Lago de Pátzcuaro, desde hace algunos años el edificio funciona como centro comercial en la exposición y venta de artesanías regionales, y el edificio conserva en su interior cinco de los once patios originales, ya que al abrir una calle peatonal, los patios quedaron divididos y aunque se le conoce como Casa de los Once Patios, actualmente son cinco, donde se ubican los artesanos instalados en locales. En entrevista con la trabajadora y artesana Gabriela Hurtado Aguilar, manifestó que este edificio fue construido en el año de 1745 y era parte de lo que es la Iglesia del Sagrario y Convento de Santa Catarina, al abrirse la calle, quedaron sólo cinco de los once patios. Dijo la entrevistada, que este edificio estuvo abandonado por muchos años, al cerrarse en tiempos de la Reforma y la maleza se adueñó del lugar, hasta que un grupo de artesanos allá por la década de los 60, procedieron al rescate y en coordinación con los gobiernos de los diferentes niveles, se rescató y se procedió a convertirlo en centro artesanal, donde los artesanos de la región y de otros municipios elaboran sus artesanías y las ponen a la venta sin intermediarios. En uno de los apartados existe un baño con portada tipo barroco, muy escaso en su tiempo, mandado construir exclusivamente para una princesa que se negó a su reinado y prefirió enclaustrarse a este convento, para que no extrañara su hogar. En el patio principal, existe un mural donde se expresa cada artesano y sus diversos oficios, como son los que trabajan el cobre, el maque, la madera, entre otros más. Asimismo, confirma Gabriela Hurtado que en este lugar existen túneles que van a dar a la Basílica de la Salud y hasta pueden desembocar en Las Yácatas de Tzintzuntzan y hasta Santa Fe de la Laguna. Las puertas que conducen a los túneles desde esta histórica casa, se encuentran cerrados y sin ingreso al público. En su estructura existen abundantes columnas, trabes y zapatas de madera armónicamente combinadas con austeras arcadas barrocas de los primeros tiempos coloniales, que le permiten mostrarse como uno de los casos antonomásticos de la arquitectura Patzcuarense.