SOCIOLOGÍA DE LA EDUCACIÓN Sociología de la Organización Escolar Profesorado de Segundo Nivel de Enseñanza o Educación Media La más valiosa enseñanza de la sociología es esta: las cosas no son lo que parecen. PETER BERGER SOCIOLOGÍA DE LA EDUCACIÓN Profesor: Celular Twitter- Lcdo. Vladímir Alexis Peralta Smolianinov – WhatsApp: 6415-0658 @vladsmol20 Facebook- Vladimir Instagram- Peralta Smolianinov vladsmol20 LOS CENTROS ESCOLARES COMO ORGANIZACIONES SOCIALES Perspectivas en Sociología de la Organización Escolar En los primeros años setenta, la Sociología de la Educación estaba dominada, casi en exclusiva, por la investigación de la relación entre el origen social y el rendimiento académico. La escuela y el proceso de escolarización se consideraban una caja negra, que no producía efecto alguno en los resultados de los estudiantes y, mucho menos, en la igualdad social. Así lo señalaban, con fuerza, desde potentes investigaciones, Coleman y Jencks, cuyos análisis mostraban la poderosa relación entre las características del origen familiar de cada alumno y su rendimiento académico: es la parte más cercana del entorno social del chico, su familia y los estudiantes amigos, la que afecta más a su rendimiento; el producto de una escuela depende ampliamente de las características de los chicos que entran, y todo lo demás es (vienen a decir) bien secundario o completamente irrelevante. Precisamente, el aporte de la Sociología del Currículo y los nuevos sociólogos de la educación va a ser decisivo para hacer de la organización escolar una categoría central en el análisis sociológico de la educación, convirtiéndose en uno de sus principales retos intentar establecer en qué medida la escuela como organización contribuye y es responsable de los resultados que de tal institución social se derivan. El Concepto Sociológico de Organización Escolar La herencia durkheimiana, recogida fundamentalmente en tres de sus obras: Educación y Sociología, La educación moral y La evolución pedagógica en Francia, nos anima a ver la organización escolar como un hecho social. Ello quiere decir que la organización escolar es algo que tiene una realidad objetiva y un carácter externo y coercitivo para los individuos, debiendo realizar su estudio de manera objetiva y desinteresada, sin juicios de valor, ni pretensiones normativas. El modo de hacerlo es mediante el contenido de su coerción, que es inculcar una educación moral que recomponga la conciencia común, y una educación técnica, que posibilite la solidaridad orgánica y haga frente a las posibles situaciones de anomia que pudieran darse en las sociedades con una compleja división del trabajo. Max Weber, en su gran obra Economía y Sociedad, ve la organización escolar como una relación social racional con arreglo a fines, que caracteriza al tipo ideal de dominación racional-legal que es la burocracia. Burocracia: Max Webber Es el procedimiento de dominación racional-legal que funciona según los principios de: a) jerarquía administrativa; b) separación de los niveles administrativo o de gestión y político o de decisión; c) separación entre la persona y el cargo; d) el mecanismo reglamentario del expediente, que comporta el ejercicio de la dominación por medio de un cuadro administrativo que requiere, entre otras cosas, una adecuada formación profesional. La arquitectura escolar representa una división técnica del espacio de trabajo, donde la estructura pluralista de poder se plasma en la estructura pluricelular de sus aulas. Con todo, los centros escolares, como sistemas sociales abiertos al entorno que son, están en un continuo feed-back con el medio social. La apertura de la organización al entorno viene a dar, de acuerdo con el modelo de contingencia o sociotécnico, respuestas funcionales al entorno social, que es el que proporciona los inputs o «materias primas» al centro escolar (alumnos, profesores, financiación, legislación...) recibiendo a cambio capital humano y soluciones a su incertidumbre. En conclusión, la escuela o centro escolar es una organización social, es decir, un sistema social o totalidad articulada, que cuenta con un círculo preciso de miembros, configurados racionalmente siguiendo el modelo burocrático, que tiene como objetivo conseguir, en reciprocidad con su medio o entorno social, los fines específicos que se fija: la socialización moral y técnica de las jóvenes generaciones. Elementos sociológicos de la organización de los centros escolares Los elementos a considerar en todo estudio sociológico de la organización escolar son conocer y delimitar: 1) Los objetivos, metas o propósitos que se fijan y orientan a los centros escolares como organizaciones. 2) La estructura de gestión y participación de los centros, con sus órganos unipersonales y colegiados. 3) La organización del conocimiento en una programación y horario determinados, como intermediarios entre el conocimiento oficial y el que se transmite a los alumnos en el interior del aula. 4) El proceso de asignación de los alumnos en grupos, que afecta a la cantidad y calidad de los conocimientos y las oportunidades académicas que reciben los distintos perfiles de alumnos. 5) La cultura o clima escolar, resultado de la arquitectura escolar, los valores y normas propios y la apertura del centro al entorno social. LOS OBJETIVOS DE LA ESCUELA COMO ORGANIZACIÓN Es rasgo distintivo de toda organización formal su establecimiento con el propósito explícito de lograr ciertos objetivos, que constituyen su característica estructural ya que sirven para articularla. De lo que se trata es de analizar cómo se concretan en el centro escolar aquellas funciones que la sociedad demanda de la educación, para posibilitar, a su vez, la práctica didáctica en el aula. Dicho de otra manera, analizar los objetivos que fija el centro escolar organizando el conocimiento en el Proyecto Educativo de Centro, como sistema de relaciones que posibilita la contextualización de ese conocimiento desde la autonomía del profesor en su diseño curricular de aula. Para la sociología, las escuelas son organizaciones al servicio de los jóvenes, unidades sociales investidas de la función de servicio consistente en la socialización técnica y moral de las nuevas generaciones. Es lo que afirma Durkheim en La educación moral: que el objetivo de la escuela como organización es acometer la socialización cultural y técnica de las nuevas generaciones, con el objeto de crear el yo social de cada uno. LA ESTRUCTURA FORMAL Y EL PODER EN LAS ESCUELAS Las escuelas se vertebran, como sucede en otras organizaciones, en torno a una estructura formal de autoridad; es decir, un conjunto de posiciones con funciones identificada y poder de decisión, encarnadas por lo general en miembros del profesorado. La forma que adopta el gobierno de los centros se puede situar en un gradiente de polaridad, entre el gerencialismo y la gestión democrática. Por gerencialismo se entiende hacer recaer la gestión de la organización en unos cargos unipersonales a los que se dota de poder suficiente para ello. Por lo general porque se entiende, o así se pretende que sea, que su preparación técnica y la toma de decisiones de arriba hacia abajo constituyen la forma más eficaz de gestionar la organización. En el otro extremo de la polaridad, la gestión democrática representa la articulación efectiva del derecho a la participación de los diferentes agentes educativos (profesores, alumnos, padres y entorno) en la toma de decisiones en lo que concierne a la gestión y desarrollo de la organización. Los órganos unipersonales y sus funciones respectivas Los órganos unipersonales de gobierno de los centros escolares representan la encarnación genuina de los criterios gerencialistas, frente a los colegiados, representantes de la gestión democrática. La dirección representa la máxima autoridad oficial del centro, dirigiendo y coordinando todas sus actividades organizativas, ejerciendo la jefatura de su personal y convocando y presidiendo las reuniones de los demás órganos. El profesorado le presiona pretendiendo que el director sea un primus inter pares, un compañero de quien recibir comprensión en la aplicación cotidiana del reglamento y su apoyo ante los padres; llegando, si es necesario, a confiar en su permanente respaldo a su autoridad como profesor, incluso más allá de su posible legitimidad, como señalaba Howard S. Becker del profesorado de Chicago. Los alumnos lo consideran el tribunal supremo de justicia del centro y la máxima instancia de resolución de sus problemas. Finalmente, para los padres la dirección aparece como la institución ad hoc para introducirse en el centro y negociar asuntos de su competencia clientelar. GESTIÓN DEMOCRÁTICA Y PARTICIPACIÓN: LOS ÓRGANOS COLEGIADOS Los centros escolares suelen caracterizarse por su autonomía de funcionamiento y la participación de sus diferentes agentes activos, ya se ha visto teóricamente y así es en la práctica de los centros docentes de los países democráticos. La autonomía en los ámbitos curricular, de gestión económica y de recursos y de gestión de personal aun siendo cierta no deja de ser limitada, sobre todo en los ámbitos económico y de personal, ya que quedan fuera del poder de decisión de los centros. En el ámbito curricular, al centro escolar le corresponden los niveles de concreción segundo (Proyecto Curricular de Centro) y tercero (Programación Didáctica de Aula), una vez que Gobierno (Enseñanzas mínimas) y Comunidad Autónoma han aportado el primero (Currículum Oficial). LOS EFECTOS DE LA ORGANIZACIÓN FORMAL SOBRE LA ENSEÑANZA Y EL APRENDIZAJE Tanto la estructura formal de autoridad como la administrativa y de servicios influyen, aunque sea de manera asimétrica, en la consecución de objetivos y en el logro de los estudiantes. Primero, organizando los procesos de enseñanza-aprendizaje y haciéndolos realidad en las prácticas educativas, y la segunda, haciendo posible el contexto en el que llevar a cabo esos procesos de enseñanza y aprendizaje, ocupándose de las cuestiones de logística y funcionamiento general del centro, en aspectos como su limpieza y avituallamiento, y llevando a cabo también los registros necesarios de asistencia, calificaciones o titulaciones adquiridas, para que el aprendizaje surta los efectos deseados, ya sean éstos un puesto de trabajo o el acceso a unos estudios posteriores, en el entorno o medio social en el que se inserta. En la bibliografía de la sociología de la organización escolar está muy extendida la idea de los efectos de esa organización formal sobre la autonomía del profesorado, en el sentido de generar una holgura estructural o articulación imprecisa en la organización escolar debida a que, el tradicional conflicto entre el poder profesional y el burocrático, se refuerza en favor de éste por la naturaleza autónoma del trabajo docente y las exigencias de uniformidad de la burocracia. LA ORGANIZACIÓN ESPACIAL Y TEMPORAL DEL APRENDIZAJE Históricamente, la organización del conocimiento en los centros escolares ha revestido formas diferentes. Basta con realizar un recorrido histórico, del tipo del realizado por Durkheim en La evolución pedagógica en Francia, para ver que dicha organización no ha sido siempre la misma, variando en función de los presupuestos teóricos subyacentes. En la actualidad, la organización del conocimiento escolar se lleva a cabo mediante, al menos, dos mecanismos: su clasificación curricular y su distribución temporal. El primer mecanismo, resultado de la división social del trabajo, hace referencia al grado de separación entre las materias a transmitir, integrado o separado. Por lo que se refiere al segundo mecanismo, se podría decir, como dijo Bidwell (1965) hace ya tiempo, que la división del trabajo en la escuela es temporal y funcional a la vez: dividido en períodos lectivos (clase, jornada, semana, trimestre, curso) y asignado en espacios en los que los grupos, clases o cursos, son enseñados por uno o más profesores generalistas o especialistas. El resultado de la coordinación de todo ello es el horario, compendio de la distribución espacio-temporal del conocimiento en el centro escolar y muestra de panopticismo institucional. En el sistema escolar vigente clasifica el aprendizaje en cursos académicos, fijando un calendario temporal anual y una programación semanal y diaria para su desarrollo. El horario oficial puede decirse que se comporta como un instrumento de control temporal y espacial, como un panóptico que todo lo tiene bajo control, que ve y registra lo que sucede en cada momento en el centro escolar. El horario escolar establece en el centro escolar, en efecto, todas estas tareas: a) El trabajo que se va a realizar y el ritmo de su desarrollo a los componentes del centro, sean profesores, alumnos, padres o personal administrativo y de servicios. b) La naturaleza del conocimiento que se va a transmitir (asignatura y nivel). c) La división en períodos lectivos (teóricos, prácticos o de tutoría) y no lectivos (de atención a padres, recreo o actividades lúdicas y comedor); y d) La cadencia del trabajo, compaginando en la medida de lo posible (posibilidad definida por la relación entre la cantidad de demandas y el volumen de recursos) lo diferentes niveles de atención y habilidades de las diferentes horas del día. Por lo demás, en relación con los espacios de la interacción y transmisión educativas habría que considerar las funciones que cumplen los pasillos, el comedor, los patios demás espacios escolares distintos a las aulas, en la reproducción de las culturas de género o grupo de edad, así como de refresco entre períodos lectivos. LA ORGANIZACIÓN DEL ALUMNADO. AGRUPAMIENTO HOMOGÉNEO Y HETEROGÉNEO El proceso de asignación de los alumnos a los distintos grupos es un tema central de la organización, ya que estructura las oportunidades académicas de los diferentes segmentos de alumnos, al afectar a los contenidos, duración, ritmo, intensidad, así como al clima en el que los alumnos aprenden. Como señala Hallinan (1987 y 1994), las diferencias afectan directamente al rendimiento, la motivación y las aspiraciones de los estudiantes. Esto es así porque introduce unas diferencias notables y obvias en la calidad y cantidad de conocimientos que se distribuyen entre los grupos así formados. EL CLIMA ESCOLAR COMO CURRÍCULO OCULTO: LA CULTURA, LOS AGENTES Y EL MEDIO SOCIAL Se puede entender como un índice que comprenda e integre los siguientes indicadores: la cultura del centro, la morfología del profesorado y del alumnado, y las relaciones con el entorno. La cultura de la escuela es el encuentro de una serie de elementos materiales e inmateriales que caracterizan la vida del centro, en un espacio y tiempo determinados. La arquitectura escolar actúa de agente educativo como elemento de control simbólico que es. Los ritos y las ceremonias constituyen tanto los procedimientos rutinarios de gestión de masas, como la expresión de los valores y creencias de la cultura escolar por procedimientos solemnes. Valores y creencias: se pone de relieve una estrecha relación entre educación moral y técnica, e ideología, creencias y valores La morfología social de los agentes educativos Las características sociales del profesorado de cada centro constituyen la morfología social del mismo y, como pudiera pensarse por su papel de agente activo en el proceso de enseñanzaaprendizaje, tienen una gran importancia en la determinación del clima escolar. EL ENTORNO SOCIAL Como señala Hallinan (1994), la sociedad en la que se halla la escuela define su sentido y valora la importancia de sus resultados. En relación a la red de personas en comunicación más o menos frecuente e intensa con la escuela, existen numerosos estudios que ponen de manifiesto que la organización de la comunidad tiene una fuerte influencia sobre el proceso de aprendizaje. En relación a la influencia familiar sobre la escuela, probablemente la más significativa de todas las del entorno, Tyler (1991: 227) se refiere como el currículum del hogar al bagaje que los alumnos traen de sus casas; a las motivaciones, expectativas, hábitos y problemas que subyacen e influyen en sus procesos de aprendizaje. Entre otros factores, lo conforman: el tamaño familiar, el grado de lectura familiar, el tiempo empleado en ver la televisión, la atención que se presta a los deberes y a las faltas de asistencia a clase, la implicación parental en las decisiones escolares y los recursos familiares. Asignación ✓ Si los medios son empresas que buscan el beneficio económico que pasa por conseguir grandes audiencias, ¿es posible una televisión de calidad? ✓ ¿Qué podemos hacer las personas ante los medios? ✓ Mira cuáles son los programas más vistos. ¿Qué efectos personales y sociales crees que pueden tener? ¿Quiénes crees que son los responsables de esa programación y de su calidad: los amos de los medios o los profesionales? ✓ ¿Qué recursos crees que utilizan los medios para conseguir mayores audiencias