BIODANZA Y ESCUELA Extracto del Libro “Biodanza para Niños y Jóvenes” Jerónimo Meza y Alejandro Balbi Toro 2017 8. BIODANZA Y ESCUELA El origen de las investigaciones de Rolado Toro, creador del sistema Biodanza, en torno al fenómeno humano, fue en la escuela. Su primera relevancia pública fue en los años ´50, a partir de la exposición en el Ministerio de Educación de Chile “Los niños de Pocuro”. Presentó trabajos gráficos realizados por sus estudiantes del internado rural de Pocuro (VI región, Chile). Estos dibujos, estaban cargados de intensidad vivencial. El aprendizaje –para Rolando- ocurre en las páginas del libro de la vida, en la experiencia directa. Por ello, los llevaba al bosque a caminar, o los despertaba en la madrugada para ver el nacimiento de un ternero, entre otros. Luego, los estudiantes expresaban en dibujos esas experiencias. Fue conocido en esa época como un innovador en educación, por eso fue invitado a trabajar a nivel universitario, por su revolucionario enfoque del ser humano y sus procesos de aprendizaje. El Sistema Biodanza, se desarrolló luego como un proceso colectivo, donde muchas personas maravillosas aportaron elementos. El Sistema siempre llevará en su génesis, el ser una pedagogía, el querer generar condiciones de aprendizaje donde el potencial humano pueda ser expresado. Esto, hace a la Biodanza sumamente pertinente en el contexto escolar, no solamente en relación a la convivencia -pues ahora se vuelve urgente como hemos señalado- sino, en relación a todo el proceso de aprendizaje. Proponemos la oportunidad de salir poco a poco de esta fortaleza de aislamiento constituida en la escuela. Descubrir nuevos horizontes que para algunos constituyen zonas inexploradas, peligrosas o desconocidas, abrir un arcoíris de posibilidades. Ofrecer a cada uno de los participantes el ganar confianza en sí mismo, retomando juntos el coraje innato a la vida, transformándonos en aventureros y así, forjar un camino lleno de posibilidades. Tratamos de transmitir los valores de conciencia ecológica, intercambio vital, afectivo y creativo, buscando el placer simplemente de hacer y jugar juntos. Paulatinamente, buscamos ir desarrollando una mirada hacia el mundo y cambiar la perspectiva, elaborando la empatía hacia todo aquello circundante. En palabras del Sanclair Lemus Biodanza es: “Una nueva Sensibilidad hacia la vida”. El Sistema Biodanza aporta aprendizaje en forma vivencial. En lugar de transmitir como conocimiento externo y separado de la realidad presente, invitamos a comprometernos, adentrarnos osadamente en la experiencia. Por ejemplo, en vez de estudiar y escribir sobre los volcanes, investigar sobre germinación de las semillas o los proceso del H2O/CO2, podemos ofrecerles la oportunidad de experimentar el protagonismo. Ser “volcánicos” en la danza de intensidad, o poner límites sintiendo ira. Experimentar la vivencia poética de ser raíz y germinar, hasta volverse un árbol fuerte, erguido al viento, crecer hacia la luz como una planta y recibir la lluvia, danzándole a las nubes, al sol y en vinculación con el ambiente, respirando y exhalando vida. Un niño o niña, habiendo vivido la experiencia trascendente de ser o cuidar una semilla, no querrá crecer para arrasar la selva. Por supuesto, el aprendizaje se debe hacer en equilibrio entre el método científico y el vivencial. Nuestro aporte deseado para el sistema educativo es simple, profundo y, sentimos, imprescindible: la oportunidad de validar el sentir y la experiencia, dentro de un ambiente enriquecido y afectivo. 8.1. Abordaje general para introducir Biodanza en las escuelas 8.1.1. Contexto global Comprendemos que estamos viviendo el fin de un modelo social de desarrollo, impulsado por la competencia y el exitismo: la sociedad de mercado; donde los vínculos, son mediados por criterios comerciales y de poder. Este modo de vida y su conjunto de valores, nos han llevado como humanidad, a vivir un contexto global sumamente complejo; pérdida de la biodiversidad, cambio climático, elevación de temperatura de los océanos, desertificación, islas de plástico en el mar, entre muchos otros. La educación recibida en el sistema, ha sido pensada para formarnos en ese horizonte y aunque quisiéramos continuarlo, es evidente que no podemos: la supervivencia de la especie depende de encontrar nuevos caminos que despierten los núcleos innatos que protegen la vida. 8.1.2. Pacto con el ego “No basta liberar al Ser Humano de su miseria económica. Es necesario también liberarlo de su miseria afectiva, de su pobreza creativa y de su incapacidad para disfrutar el placer de vivir" Rolando Toro La humanidad siempre ha lidiado con la supervivencia. Ese objetivo lo llevamos impreso en cada célula de nuestro ser. De manera natural, en toda la fauna, desde los reptiles hasta nosotros, los seres humanos, esto ha sido resuelto por la Fase Arquiencefálica del cerebro tripartito, es decir, los instintos, descrita como “una conducta innata hereditaria que no requiere aprendizaje y que se desencadena frente a estímulos específicos. Su finalidad biológica, es la adaptación al medio para la sobrevivencia de la especie.” (Aspectos Psicológicos de Biodanza, Curso de Formación IBF, Rolando Toro Araneda). La suma de las distintas respuestas instintivas, da como resultado un supra instinto, el instinto de supervivencia. En el caso particular de nuestra especie, desde el inicio del patriarcado, hemos desechado esta sabiduría y realizado así, un pacto con el Ego. Su premisa para convencernos, es la supervivencia del más fuerte. La frase fue escrita inocentemente por Darwin en sus observaciones, posteriormente, sus estudiosos la destacaron y finalmente, quienes ejercen el poder, la volvieron el emblema civilizatorio “de la evolución”. La supervivencia del más fuerte, se tradujo en “el ego más fuerte sobrevivirá”. Es por esto que, todo el modelo educativo busca fortalecer la estructura del Ego. Por otro lado se encuentra la Identidad, que entre sus características está que es permeable y continua. Su naturaleza es dinámica y se establece en relación al ambiente, por eso sólo puede ser revelada en presencia del otro. Finalmente, su fuerza de expresión radica en la conexión con los instintos. No es posible endurecer una identidad, solo es posible reprimir su expresión y desnutrirla. Es el Ego la única estructura psíquica que puede hacerse dura, rigidizándose. Por ello, la educación ha sido piedra angular de este pacto y, mediante ésta, se replica el modelo de un ser humano empobrecido y con poca o casi nada de fuerza expresiva. Una educación para ser súbditos, sumisos, sometidos y complacientes a esta estructura. 8.1.3. Educación para la guerra La escuela, como la conocemos, tiene su raíz a principios del siglo XIX en Prusia. Surgió para evitar las revoluciones, como las ocurridas en Francia, integrando algunos principios ilustrados, aunque manteniendo los regímenes absolutos. Su fuerza, se basaba en la división social. Su estructura, en la disciplina y el respeto total por la autoridad, promoviendo la docilidad y la obediencia. Esta preparación desde la infancia tiene como objetivo la formación militar y el trabajo como obrero industrial, con su reiteración, rendimiento y obediencia. Esta herencia continúa actualmente, podemos verlo en ejemplos concretos como cursos separados por niños de la misma edad, la campana para separar el recreo de las clases, las filas para entrar al salón, los castigos, la disciplina escolar; en el aprendizaje: afán por la meta y no por el proceso. Esta idea, tiene similitud a una “línea de producción”, donde el alumno será modelado y llenado de conocimiento. En este modelo educativo, desde el ejercicio físico hasta el desarrollo de la lógica y la capacidad de memorizar, están propuestos dentro de un marco de competencia. Este modelo prusiano es de educación para la guerra, por ello no solo está obsoleto, sino también, y eso es lo más grave, es dañino para la vida y es urgente transformarlo. La tensión de este modelo educativo, ha ido creciendo con el pasar de las décadas. Su sentido como fuente de información, ha sido sobrepasado por las redes tecnológicas de comunicación y, curiosamente, los niños, niñas y jóvenes son quienes mejor las manejan. La escuela se ha constituido en un lugar aburrido, en las clases, el conocimiento se impone desde fuera, no es permitido el cultivo de la autorganización del aprendizaje. Actualmente, cuando coincide el interés personal con el del currículo impuesto por el Estado a los estudiantes, estos pueden acceder a tutoriales e información, sin pasar por un proceso de evaluación ni comparación con los demás, expresado en las calificaciones. Este es el inicio de la disociación vida y obra. “Mi vida es el recreo donde soy, hago lo que quiero y mi obra, las clases, lo que debo aprender”. Se establece una separación concreta entre el querer y el deber. El resultado es la desmotivación y la atrofia de la tendencia natural a la cognición, condición no solo humana, sino propia del fenómeno de la vida y conducta de cada una de las células biológicas. En las últimas décadas, los sucesos en la escuela se han tornado alarmantes. Casos de acoso escolar, donde las víctimas terminan suicidándose; niños quienes, para adaptarse, están consumiendo fármacos diariamente, los cuales además, son exigidos por los maestros para aceptarlos en el aula; la depresión infantil, las altas tasas de deserción escolar, sobretodo en estudiantes en situación de vulnerabilidad social. En fin, el modelo entero se está desarmando, la educación diseñada para perpetuar ese sistema, también tiene que ser cambiada. Esta educación es para una cultura escindida, en la cual el currículum está totalmente fragmentado; lo estudiado en ciencias no tiene vinculación alguna con lo aprendido en lenguaje. Este modelo de educación, ha llegado a su peak y está actualmente en crisis de sentido. Cada ser humano, comienza de joven a construir una fortaleza para vivir, donde cada aspecto de su vida se va separando; la disociación sentir, pensar y hacer, la separación entre vida/obra, la división entre individuo/especie y humano/naturaleza comienzan a instalarse desde la escuela. Poco a poco, se encierra en una percepción estrecha de la realidad, como mirando el cielo desde la ventana de la torre de un castillo, encontrándose tan pequeño, se deprime al creer que eso es el mundo. Su potencial expresivo, se queda latente y toma el camino de la inhibición, desembocando como resultado colectivo, en la neurosis social actual. El sentido de integración ontológica, se pierde y es cambiado por miles de horas en asignaturas separadas, unidas solo por la libertad del recreo. La autorregulación orgánica, es reemplazada por la ortopedia de las normas de conducta, el horario de una campana y las políticas de la autoridad institucional. La percepción de la abundancia como experiencia, pasa a ser cuantitativa y competitiva “soy valioso en la medida que le gano a los demás”. El valor del semejante, no cabe dentro de lo importante. La escuela necesita urgentemente renacer. Actualmente, se está cumpliendo la profecía proclamada por los jóvenes: “la vida comienza el viernes por la noche”, reflejo de la falta de sentido que resulta la propuesta escolar. A la hora de volvernos agentes para la transformación de la escuela, debemos estar en alerta, porque una visión superficial de la profundidad del fenómeno humano, puede conducirnos a quedarnos sólo en el artificio de la superficie. La antigua escuela, forma parte del modelo competitivo, y tiene una característica esencial de este: poder absorber casi todo y volverlo una mercancía. El sistema es sumamente estable en su equilibrio interno y resiste a pesar de cambios, a los que sea sometido. Esto, lo logra introduciendo conceptos de la nueva visión, sin necesariamente integrarlos en profundidad. Un ejemplo de lo anterior, es lo que sucedió con la escuela prusiana, proponiendo la obligatoriedad de la educación desde los principios de “Libertad, Igualdad y Fraternidad”, pero en definitiva se usó ese argumento para la implementación de una educación espartana. Un ejemplo en otro ámbito, lo podemos ver en el movimiento social del Punk en Inglaterra, en los años 70´s, esencialmente contestatario y anti-sistémico, escándalo para las elites de la época. Solo 40 años después se la conmemora en el palacio de la realeza, con una exposición como parte de la identidad del país. El modelo incorporó la estética, la forma, los cabellos de colores parados en punta, las aplicaciones de metal y pantalones realmente estrechos, pero no la esencia del movimiento social, su denuncia: el ser humano ha sido desvinculado de su naturaleza por un sistema enajenante. En la escuela, corremos el riesgo de cambiar sólo el nombre de la “Inspectoría” por “Convivencia Escolar”, y preparar programas para desarrollar la inteligencia emocional y las habilidades psicosociales, pero buscando el mismo objetivo de antes, fortalecer el ego humano, determinando que los estudiantes deberán ser “fuertes emocionalmente”, es decir, la escuela debe moldearlos para resolver o gestionar rápidamente sus problemas y seguir funcionando como sujetos económicos. Integrar la forma y no comprometer el fondo, es seguir replicando el pacto con el ego. Este antiguo modelo, genera daño y dificulta el aprendizaje. En un ambiente de competencia permanente, frente a las burlas y discriminación, es muy difícil para un estudiante atreverse a levantar la mano y preguntar algo en Matemáticas, o el que sabe mucho de Historia quiera compartir su conocimiento con el grupo, sin ser descalificado por su brillantez. El cambio comienza por una integración a un nivel más amplio de vinculación, fruto de una vivencia nueva. Esta es la vivencia del Ser Bioontocosmológico, ligado al cosmos y las fuerzas que organizan la vida, a la cual se puede acceder mediante la práctica regular de Biodanza. Solo desde ahí, podemos comenzar un proceso de transculturación, desde una cultura de muerte a una cultura de vida, formar parte del surgimiento de un nuevo paradigma: el Principio Biocéntrico, el cuál pone la vida en el centro de todo quehacer humano. Éste, promueve y estimula todo lo necesario para sentirse protegido y así, favorecer y permitir la expresión de la vida. 8.1.4. Cerebro tripartito La escuela tradicional cultiva solo una parte del cerebro, el cual es núcleo de nuestro sistema nervioso. Éste es tripartito, es decir, está compuesto de tres fases. La primera, es el Arquiencéfalo, cerebro primitivo, compartido con los reptiles. Su función es fundamental: proteger la vida por medio de los instintos. Estos, son funciones innatas, hereditarias y de respuesta inmediata, no requieren elaboración y están determinadas. Un ejemplo, que usualmente compartimos con los estudiantes es el del instinto de guarida. “Nunca te vas a quedar dormido acostado en medio de la autopista, por el contrario, siempre sabrás reconocer un lugar seguro para descansar”. La segunda fase, es el Hipotálamo, compartido también con los mamíferos. Está a cargo de las respuestas emocionales. Por eso, el perro se pone alegre cuando, quien lo cuida, llega a casa. Finalmente, la tercera fase, es el neo córtex, responsable del pensamiento lógico, el lenguaje, la abstracción, la previsión y el análisis. Cuando comentamos estos hechos a los estudiantes, les preguntamos: “¿En qué asignatura del colegio trabajamos el Neo Córtex? “ Ellos comienzan respondiendo: “Matemáticas, Ciencias, Lenguaje,,,” y no pasa mucho tiempo hasta concluir… “en todas.” Todos los espacios guiados en la escuela por adultos, son de estimulación cortical. Es muy difícil para los estudiantes lograr un nivel de vinculación saludable, tanto consigo mismos, entre ellos y con el ambiente, si solo estimulamos áreas nerviosas especializadas en el análisis y la separación. Es como pedir clavar con un destornillador. Simplemente, no es la herramienta adecuada. Por otro lado, la corteza cerebral o neo-córtex puede modular, inhibir o frenar la expresión de los otros dos cerebros, en casos extremos, creando enfermedades psicosomáticas. Somos la única especie con corteza cerebral –comentamos a los estudiantes- (salvo con capas delgadas también, delfines y gorilas), por esto, vendríamos siendo un experimento de la naturaleza. Todos los mamíferos tienen Arquiencéfalo e Hipotálamo, los cuales trabajan juntos hace miles de años, y se articulan mediante el Sistema Integrador LímbicoHipotalámico. Si no aprendemos a vincularnos de otro modo, reintegrando las funciones instintivas, nuestra especie se autoextinguirá. En los siguientes capítulos, exponemos la necesidad de estimulación del Sistema Integrador Adaptativo Límbico-Hipotalámico para la integración de las funciones originarias (como el instinto gregario o de manada como bases para la solidaridad), la función biológica de la expresión de las emociones, y también como respuesta adaptativas al medio. 8.1.5. Restauración orgánica y reposo: el gran tabú en la escuela El Sistema Integrador Límbico-Hipotalámico, instinto y emoción, está probado en todos los mamíferos. Este, funciona en la pulsación de dos subsistemas nerviosos: somato-motor sensorial e instintivo- visceral. El primero, tiene que ver con la respuesta adaptativa al medio, actúa frente al peligro y dispone la energía hacia las extremidades, para poder entrar en acción. Entre sus características fisiológicas están: el alza de la presión sanguínea, aceleración del pulso cardíaco y la ventilación acelerada, entre otras. Todo esto, se realiza con el objetivo de proteger la propia vida. La función instintivo-visceral en tanto, es la pulsación opuesta, baja la presión sanguínea, por ello el flujo vuelve a los órganos internos y se produce la reparación celular, orgánica y sistémica. Al observar la dinámica escolar cotidiana, encontramos una gran activación somato motor sensorial en los recreos, donde los niños y niñas corren, gritan y saltan, todo transcurre con fuerza y al mismo tiempo. Luego, al entrar a clases donde físicamente están en reposo, el mensaje es confuso, pues deben estar activos en el plano mental, generando gran actividad y consumo de energía. Esto es reforzado por la competencia constante a través de pruebas, las cuales refuerzan las funciones de alerta y presentan a los demás como adversarios. Al efectuar mediciones sobre qué es lo más valorado por los estudiantes de las sesiones regulares en la escuela, el resultado nos sorprendió, pues nuestros esfuerzos parecen estar centrados en generar un espacio dinámico y con muchos juegos participativos. No obstante, lo más valorado es la relajación. Creemos que esto resulta del reconocimiento del espacio como un lugar sin competencia, donde es posible bajar el alerta, confiar y descansar: “Cuando un grupo es capaz de descansar juntos, puede comenzar a crecer en conjunto”. ¿En qué ámbitos crees que Biodanza es un espacio que te aporta? (puedes marcar más de una opción) La encuesta fue aplicada a 300 estudiantes, de 7 a 18 años, quienes recibieron clases regulares durante seis años como parte del currículo. Colegio Rubén Darío, Santiago, Chile 2014. También hemos efectuado mediciones para medir el impacto sobre las Líneas de Vivencia. Las Líneas de Vivencia son cinco grandes categorías de experiencia del ser humano, tienen su raíz en el potencial genético y es importante comprender la influencia que tienen desde las protovivencias. Las protovivencias son las experiencias vividas entre los 0 y los 6 meses, que permiten la expresión de la persona a futuro. Esta medición, la realizamos mediante la comparación de frecuencia de respuesta según una escala de Likert (siempre, frecuentemente, a veces o nunca) ante una serie de 25 afirmaciones, estando asociadas cada afirmación a una línea de vivencia. La de mayor incremento, es decir, pasaron de, a veces/nunca a frecuentemente/siempre, fueron las afirmaciones de la línea de la Trascendencia, cuya protovivencia es la armonía con el ambiente. Resultado encuesta aplicada a 900 estudiantes de 10 a 16 años, quienes recibieron clases regulares por tres meses con un grupo creado para las sesiones, dentro del programa cocurricular Inteligencia Afectiva. Colegio Alberto Blest, Santiago de Chile, 2016. Proponemos con fuerza, considerar que no existe en la propuesta cotidiana de la escuela, dinámicas que estimulen la parte de nuestra respuesta nerviosa que está vinculada con la restauración orgánica. La única excepción es sala cuna y en el pre-escolar, donde aún se duerme siesta y se descansa. 8.1.6. La función biológica de la emoción “Biodanza es una terapia para enfermos de civilización que han perdido las claves de la vida y... (deben)… aprender a transformar el esquema de estrés en esquema de armonía”. Rolando Toro La regulación de las emociones y el sistema de respuesta visceral, es esencial a la hora de recuperar el equilibro interno u homeostasis del sistema viviente humano. Les proponemos imaginar una situación de ejemplo; es en el caso de correr un peligro. Desde el bosque salta un tigre, todo el sistema de emergencia se activa, se libera adrenalina, se agita la respiración y el ritmo cardíaco se intensifica para subir la presión y llevar flujo sanguíneo con más oxígeno a las extremidades, para luchar o en este caso, huir. Una respuesta adrenérgica total. Luego de la gran escapada, se busca un lugar seguro, determinado por el instinto de guarida, para recuperar el equilibrio interno u homeostasis. Esto lo realizamos mediante la función instintivo-visceral y para lograrlo el organismo puede ejecutar las siguientes acciones: llanto, sudoración, espasmos musculares, modificación del peristaltismo intestinal y cambio de presión sanguínea. Este listado es tabú en nuestra cultura, darnos cuenta de eso fue de extraordinario valor. No se puede llorar, menos si eres hombre. La sudoración es combatida con toda clase de productos y el olor corporal es un gran tabú. Uno de nosotros (cuya identidad será revelada en la segunda edición), tuvo una experiencia al respecto en la adolescencia, durante los años de rebeldía no usó desodorante y nadie lo mencionó, luego se enteró que esto generaba malestar en su entorno. Alguien le comentó a nombre de otra persona quien no se atrevió a decirlo, todo un rodeo, luego de esto volvió a usar desodorante, sin problemas. Estaba en busca de encontrar ese tabú. Las alteraciones del peristaltismo intestinal producen sonidos considerados vergonzosos, y siempre van acompañadas de un: discúlpeme. Estando tranquilo en el patio de la escuela, observando a mis estudiantes, reiteradas veces, tanto profesores como estudiantes, se acercan y preguntan ¿qué pasa, por qué tan flojo, tan quieto, tan relajado? Pareciera estar prohibido descansar en la escuela, así es como se aprende, también lo está en las oficinas, empresas, fábricas y en toda la cultura del mercado. 8.1.7. Bases biológicas del aprendizaje Todo lo vivo quiere conocer y busca siempre las mejores condiciones para su desarrollo. Vamos a observar cómo funcionan los procesos de cognición al nivel más básico de lo vivo: las células. El comportamiento celular, funciona como una red de colaboración, se abre y comunica cuando el ambiente es nutricio y se cierra defendiéndose cuando es tóxico. En concreto, queremos destacar cinco funciones biológicas de todas las células vivas: • • • • • Afinidad y rechazo: Cada célula reconoce y distingue aquello nutritivo, de lo tóxico. Comportamiento de la membrana celular: La pared de la célula es permeable y afectiva. Puede pulsar, abrirse y cerrarse según la cualidad del ambiente. Sistema de defensa: En el caso de reconocer un agente externo dañino, la célula activa un sistema defensivo, de eso desprendemos la existencia de una identidad biológica, cada célula se reconoce a sí misma. Solidaridad celular: Funcionamiento sistémico con un objetivo común, esto revela identidad colectiva. Por ejemplo, al producirse una herida en la piel todas las células próximas a la dermis herida colaboran en la regeneración del daño. Memoria: Todos estos procesos son guardados en la memoria celular. Estos elementos forman parte del sistema Biodanza de Rolando Toro, quien propone una Singularidad Biológica y el Psiquismo Celular: el inconsciente vital, una inteligencia organizadora de todo lo vivo. 8.1.8. Hijos de las estrellas “No podemos evolucionar ni trascender si traicionamos las fuerzas que componen y nutren la vida.” Rolado Toro Uno de los conocimientos más reveladores sobre el origen de la vida viene de la astronomía. Esto es parte de la teoría de Biodanza, lo traigo para la reflexión sobre la nueva educación y qué espacio ocupa el Ser Humano en el cosmos. La comprensión de nuestra naturaleza es fundamental. Solo desde ésta, es posible el acceso a diseñar estrategias adecuadas para el desarrollo de nuestro potencial. Todos los elementos que encontramos en el universo y que ahora forman parte constitutivas de “lo vivo” han sido fusionados al interior de soles; el hidrógeno, el calcio de los huesos, el hierro en nuestra sangre, el carbono en el ADN, el oxígeno, todos los átomos nacieron en la matriz incandescente de los soles ancestrales. La teoría del Big Bang propone que todo se inició por una gran explosión, cuando se formaron los primeros soles: el primer elemento (la química posteriormente elaboró una taxonomía llamada la tabla periódica), el hidrógeno, tiene un solo protón. En el núcleo de estos primeros soles, la presión era tan gigantesca, que los protones comenzaron a fusionarse y crearon nuevos elementos. Es curioso saber que la diferenciación entre los elementos está determinada por el número de protones y que como resultado de esta unión, se libera una gigantesca energía. En nuestro pequeño sol vemos esta energía como luz y la sentimos como calor. Volviendo a los soles primarios, en ellos se generó la unión inicial de dos átomos de hidrógeno, a partir de la que surgió el helio, con 2 protones. Luego, el litio con 3, el berilio con 4, el carbono con 6, el nitrógeno con 7 y el oxígeno con 8… hasta llegar a 26 protones y formar el hierro. Este elemento es tan pesado para el núcleo que hace estallar la estrella, y esta esparce el contenido de elementos nuevos por el cosmos. El inconsciente vital, en el Sistema Biodanza, es la fuerza organizadora de estos elementos pasando de los elementos inorgánicos a la configuración orgánica de todo lo vivo. Por eso, desde Biodanza proponemos con audacia: la vida es la organizadora del cosmos y este no es fruto de un azar extraordinario. Este es el centro del Principio Biocéntrico, punto de partida para toda la reflexión sobre el ser humano vinculado al universo y fundamento ético de todas las acciones del ser humano. El Paradigma Biocéntrico, propone concebir al ser humano dentro de un proceso evolutivo mayor. Nos saca de la idea de “el hombre frente al cosmos” y nos propone “la humanidad en el Cosmos”. Desde este horizonte, formando parte del gran fenómeno de lo vivo, dejamos de tener una relación sujeto-objeto con la realidad. Donde el único sujeto posible es el YO y todo lo demás: personas, animales, plnatas, hongos son tratados como objetos. La vivencia del humano como ser Bioontocosmológico es esencial para comprender nuestro lugar en el universo y establecer así, la importancia de nuestras relaciones y vínculos con la existencia. Utilizamos el prefijo “Bio” porque estamos vivos y las leyes de lo biológico nos dan el contexto. “Onto” es la referencia al Ser, el despertar a la conciencia del sentido, y “Cosmológico”, al estar integrados y en relación con los fenómenos cósmicos. Un ejemplo de la ligazón entre cosmos y vida, es el otoño. El planeta gira inclinado y se aleja del sol, de su fuente de energía vital. Todos los árboles se enteran y bajan su sabia a las raíces, soltando sus hojas hasta el próximo ciclo. Majestuosa, la danza de la vida se despliega con sus hilos de vinculación tan fuertes y con solo negarlos un poco, aparece la neurosis y la enfermedad. 8.1.9. El contacto y la caricia en la escuela “En todas las Escuelas se debería enseñar Biodanza. Con música, danza y caricias podemos crear un mundo donde nuestros sueños serán posibles”. Rolando Toro Presentaremos tres conceptos fundamentales, los cuales, son un imperativo neurológico en el desarrollo de todos los mamíferos, por tanto en el ser humano: Contacto, Conexión y Caricia. El contacto se produce cuando dos cuerpos se tocan. Hay contacto entre el suelo y el zapato, entre el vaso y el agua, entre la roca y el río. La conexión se da entre dos cuerpos como intercambio de energía; un circuito eléctrico es ejemplo de conexión. La caricia es un caso muy particular de conexión, pues la cualidad de la energía intercambiada es integradora, tiende a fusionar las partes haciéndolas sentir como una sola. La caricia suele ser afectiva o erótica, a veces ambas. El contacto y la caricia son necesidades neurológicas, pues nuestro sistema nervioso requiere del estímulo y contacto afectivo para su desarrollo. Las Investigaciones realizadas durante el siglo pasado por el psicólogo René Spitz, en la sala de neonatología lo probaron: los bebés que eran contenidos, arropados y acariciados, sobrevivían mientras que, quienes no lo eran, tenían menos posibilidades de vivir y sufrían de Hospitalismo. Lo dramático fue cómo se llegó a esta investigación. En el hospital, habían dos salas para los bebés, una con el índice de mortalidad alto y otra mucho más bajo. Todo parecía ser igual: alimentación, insumos, temperatura, etc. Lo distinto era la enfermera. En la primera sala, ella los acariciaba, les cantaba y, los mimaba por una afinidad personal, mientras que en la otra, donde existía mayor morbilidad, el trato era estrictamente profesional. Por lo tanto, la caricia y el vínculo afectivo son determinantes para el desarrollo mamífero. El Sistema Nervioso necesita del continente afectivo como feedback con el ambiente propicio para ello. Por otra parte, la caricia y el contacto, son esenciales a la hora de compartir una sociedad pacífica. Estudios de etología (ciencia del comportamiento de los animales), de Chance sobre primates, revelan cómo se dan dos dinámicas. La primera: sociedades agonistas, caracterizadas por el miedo y la tensión entre los miembros, provocado por la urgencia de un macho dominante quién desde arriba de la jerarquía social impone solo tres tipos de vínculo: lucha, fuga y evitación. La segunda: son las sociedades hedónicas donde por medio de permanentes abrazos, besos y caricias los integrantes bajan la agresividad y comparten pacíficamente. A este grupo pertenecen los grandes primates como gorilas y chimpancés. Estas observaciones, extrapoladas al modelo humano permiten observar que la propuesta de transculturación pasa por “introducir en el esquema agonístico el elemento fundamental capaz de disminuir la tensión interhumana: el contacto, la caricia, la función lúcida de brindar contención al otro. Esta mudanza no puede ser sólo ideológica, se trataría de activar los núcleos innatos, biológicos, instintivos y emocionales del contacto corporal.” (Inconsciente Vital y Principio Biocéntrico, Rolando Toro, pág. 35) Para evaluar los resultados de Biodanza, mediante el uso de instrumentos aplicados en la escuela, pedimos a los estudiantes contestar una serie de 25 afirmaciones, antes de la primera clase y después de la última. Esta medición fue realizada mediante la comparación de frecuencia de respuesta según una escala de Likert (siempre, frecuentemente, a veces o nunca). Dentro de las tres con mayor aumento, pasando de a veces/nunca a frecuentemente/siempre, fue: “Doy abrazos y caricias” y, en séptimo lugar “recibo abrazos y caricias”. En solo tres meses, los participantes le dieron valor al contacto afectivo y a la posibilidad de ser agentes activos de paz. En la gráfica a continuación presento las primeras 10 de 25 afirmaciones. Resultado encuesta aplicada a 900 estudiantes de 10 a 16 años, quienes recibieron clases regulares por tres meses con un grupo creado para las sesiones, dentro del programa cocurricular Inteligencia Afectiva. Colegio Alberto Blest, Santiago de Chile, 2016. Hemos tenido una experiencia interesante en relación a los golpes y el cambio en la conducta de los niños. Al iniciar las clases, sugerimos proponer al grupo dos acuerdos, los cuales deben ser conversados y aceptados por todos sus miembros. El primero, refiere a la posibilidad de relacionarnos sin golpes, ni por odio ni por amistad. Proponemos, despertar la curiosidad de qué pasaría si por una hora compartimos y, nos comunicamos sin pegarnos. El segundo, es sobre la descalificación verbal: nos proponemos no descalificarnos, pues todos somos únicos y, no hay necesidad de poner a nadie debajo para sentirnos superiores. En el ejemplo que queremos compartir, el grupo llevaba 3 sesiones, en la primera hubo algo de golpes aunque la agresión fue bajando progresivamente. A la tercera sesión, llegó un nuevo participante el cual, aceptó verbalmente los acuerdos. Sin embargo, apenas comenzó el movimiento, golpeó, empujó con alegría y, entusiasmo a todos. Creemos que su forma de satisfacer la necesidad de contacto era mediante el golpe y aunque intentamos pararlo, el participante siguió. Desde, la comprensión de la progresividad en la aplicación de la metodología, le tuvimos paciencia. En el transcurso de la sesión, los amigos golpeados por el participante nuevo, ya estaban golpeando a los demás como si se tratara de un acto reflejo. Para la siguiente clase, reforzamos el encuadre y el acuerdo inicial. A partir de esta experiencia, hoy podemos determinar que tenemos la certeza de que los golpes pueden ser contagiosos. Actualmente, el tocar a los estudiantes está prohibido en la escuela. Entre los casos de detestable abuso y la represión del contacto se ha llegado a establecer estrictos protocolos: los profesores no pueden tocar a ningún estudiante de la escuela. En nuestro caso particular, la caricia, la conexión y el contacto son parte del programa de Biodanza, es decir “la materia que hay que pasar”. Para poder hacerlo, he establecido tres simples pautas. La primera es: siempre el contacto debe ser en un lugar público, visible. La segunda: en caso de trabajar con niños y niñas pequeñas, es necesario agacharse para estar a la misma altura en el abrazo; y la tercera: las manos deben estar en un lugar visible. 8.1.10. Biodanza en la escuela: la bisagra para la nueva cultura Una de las ideas basales del modelo actual de construcción de comunidad, está en la interpretación de la teoría de la evolución de Darwin; el más fuerte sobrevive. Este núcleo es reforzado consistentemente en la escuela por parte de los adultos, mediante la permanente comparación, competencia y exacerbación de los estados alerta. Biodanza propone, la red, como la matriz donde se genera el bienestar de los individuos: mientras más vinculados, más saludables, resilientes y con mayores posibilidades de desarrollo y expresión de su potencial. Cuando liberamos al ser humano de esta visión limitada, cuando deja de ser un objeto que atiende a la economía, dejamos espacio para que lo nuevo surja. Es importante comprender que no es una idea nueva, la que nos abre las puertas para percibir el nuevo paradigma biocéntrico, sino una vivencia. La percepción se modela según nuestra experiencia, es este sentido, tenemos una visión antropocéntrica y una cultura de mercado pues estas son las vivencias que hemos tenido. La nueva escuela puede ser un lugar de vinculación, donde tener experiencias que nos permitan expresar todo el potencial humano. Necesitamos educar para vivir en armonía y no para la excelencia académica. Esto se logra utilizando la vivencia como camino epistemológico. Es devolver a cada estudiante el motor de aprendizaje, ofrecer múltiples estímulos y permitir la autoorganización de sus propias experiencias. Abandonar la visión crítica y pasar a la aceptación incondicional, apoyar y facilitar el natural desarrollo de la inteligencia y la creatividad. Validar el error como posibilidad natural de aprendizaje. La clave de la propuesta es, la introducción de la afectividad en la educación. Impregnar el ambiente de amor ya que, el acceso al conocimiento es un proceso afectivo. El amor es la fuerza vinculante organizadora de la vida. También lo es el límite oportuno, expresado con la intensidad necesaria para ser aceptado. Las vías de acceso al amor son concretas: la caricia, el abrazo y la calificación. También lo son, la aceptación y celebración de la diferencia, estas surgen de una compresión profunda de la diversidad como estímulo para la vida. A modo de ejemplo: un monocultivo, la plantación de pinos, es un “desierto verde” donde sobreviven apenas unos insectos y, propenso a las plagas. A la inversa, un bosque nativo está lleno de plantas y animales en constante vínculo, interacción y feedback. La nueva educación tiene movimiento y emociones. Es necesario reconocer en el grupo la fuente de conocimiento, observación, asombro, humor, y éstas como estrategias pedagógicas. Biodanza es una bisagra, un catalizador, una vía para acceder a una nueva sensibilidad hacia la vida. Es una estrategia para recobrar ese vínculo perdido. Necesitamos colaborar en la creación de un ambiente enriquecido en posibilidades para que la vida se presente. Queremos proponer extender la práctica a todos los miembros de la comunidad escolar: docentes, administrativos, familias y estudiantes, como una manera directa de activar los núcleos que estimulan la vida. La sinergia producida es esencial a la hora de generar un cambio hacia una nueva educación. Enseñar a establecer redes afectivas y, comprender la amistad como un paso evolutivo para la especie. Se trata de buscar conectar la educación con el profundo y conmovedor fenómeno de la vida. Los siguientes son los objetivos de Biodanza en las escuelas (Educación biocéntrica, curso de formación IBF, Rolando Toro Araneda) Cultivo de la afectividad: -Danzas de solidaridad, danzas de la amistad, encuentro en feedback. -Superar toda discriminación social, racial o religiosa. Toma de contacto con la propia identidad: -Ejercicios de desafío personal frente a las dificultades. -Coraje para defender sus puntos de vista. -Conexión con la propia fuerza. Cultivo de la expresividad y la comunicación: -Expresar las emociones a través de la danza y del diálogo. -Ejercicios de creatividad artística: poesía, música, pintura y cerámica. -Desarrollo de la expresión verbal, oratoria y recitación. Desarrollo de la sensibilidad cenestésica, percepción del propio cuerpo y destreza motora: -Ejercicios de fluidez, coordinación, sinergismo, eutonía, asertividad motora y placer cenestésico. -Clases de natación orgánica. Adquisición del aprendizaje vivencial: -Talleres de aprendizaje vivencial de la naturaleza: Geología, Botánica, Zoología y Astronomía. Integración a la naturaleza y desarrollo de la conciencia ecológica: -Excursiones al mar y a la montaña. -Percepción de la naturaleza con los cinco sentidos. -Búsqueda del nido ecológico. Desarrollo y ampliación de la percepción: -Ejercicios de percepción musical y de obras de artes plásticas. -Percepción con los cinco sentidos de situaciones humanas. Expansión de la conciencia ética: -Ejercicios de regresión y expansión de conciencia. -Coros y danzas en la naturaleza. 8.2. Estrategia de Biodanza en relación a la institucionalidad de la escuela 8.2.1. Apoyo de la dirección de la escuela Cuando se entra a formar parte de una institución educativa, y para poder proyectar el programa de Biodanza, es necesario tener el respaldo del director o equipo directivo. Quienes lideran el proyecto, deben conocer el Sistema con el que trabajamos. Como plantea Raúl Terrén en el libro Biodanza la Poética del Encuentro Humano, capítulo Bases Epistemológicas de Biodanza: “se propone una inversión para la creación del conocimiento, es decir, se abandona el supuesto de que está afuera y, se reconoce como un aspecto del ser que está disponible en la medida que se faciliten las vías de acceso.” Por esto, la práctica vivencial es la puesta de entrada para acceder al conocimiento. No obstante, puede resultar difícil para el director salirse de su rol y aceptar quitarse los zapatos, como primera condición. La estrategia del facilitador de Biodanza para entrar en la escuela, consiste en comunicar nuestro mensaje en el idioma de la escuela: generando investigaciones, indicadores de impacto, informes finales y, registros audiovisuales, con toda la rigurosidad posible. Estas estrategias pueden ayudar a abrir la puerta, no obstante solo la practica vivencial directa garantiza la comprensión del mensaje de Biodanza. La comunidad de Biodanza tiene la virtud de contar con especialistas en muchas áreas, la invitación es a unirnos para aportar desde nuestras disciplinas y, lograr la traducción del mensaje en forma consistente. Más adelante, abordaremos posibilidades para algunos de los requerimientos de la escuela como programas, evaluaciones, objetivos e indicadores. Para entrar en una escuela, hemos de buscar estrategias efectivas para mostrar el sistema, una sesión abierta es muy recomendable. En conversaciones tranquilas, con Cesar Wagner, él sugirió una frase, la cual me ha resonado todos estos años de trabajo “…hay que insistir, resistir y persistir”. 8.2.2. Trabajar con el equipo docente Los profesores de la escuela han de estar familiarizados con el trabajo afectivo de Biodanza. Ellos, serán quienes pueden darle continuidad a la propuesta, para que no se constituya como un hecho aislado y así, profundizar la disociación. Es muy positivo que, los docentes participen directamente de las sesiones de Biodanza con sus estudiantes. Esto, podría convertirse en una oportunidad de flexibilizar su rol, haciéndolo más horizontal y también, podremos entregarles herramientas concretas de vínculo afectivo. Otra manera de sensibilizarlos es el trabajo conjunto con el equipo docente. Proponer sesiones de capacitación, fortalecimiento de equipo o autocuidado; observando con celo la progresividad, y participando dentro de su horario de trabajo junto a sus colegas. Importante para el facilitador es conocer las actividades que vienen a continuación de la clase y, preguntar a los profesores cual sería el mejor ánimo a la llegada de los estudiantes tras una sesión de Biodanza; ya expandidos, eufóricos, sensibles, entre otros. Para que el profesor pueda saber la mejor manera de aprendizaje, por principio de inversión epistemológica, es habiendo experimentado primero. 8.2.3. Programa dinámico Es necesario, presentar desde un inicio, que este aspecto es abordado de manera distinta en Biodanza respecto de la educación tradicional. No podemos entregar previamente el programa de cómo exactamente se van a realizar las clases, ya que es dinámico y está en feedback con el grupo. Esta aventura, puede ser explicada de diversas maneras, compartimos estos “criterios de intervención” que pueden ayudar a la hora de presentar cómo funciona un programa dinámico. Los siguientes conceptos provienen de la “Metodología VI: Criterios de evaluación del proceso evolutivo en Biodanza”, Curso Formación, IBF, Rolando Toro. Se puede proponer ir creando la intervención en función de las necesidades del grupo y su desarrollo. Siendo así, un programa dinámico y retroalimentado por el proceso grupal. Los criterios son los siguientes: Categorías del movimiento: agilidad, control voluntario intencional, coordinación, elasticidad, equilibrio, expresividad, flexibilidad, fluidez, levedad, potencia, resistencia, ritmo, sinergismo. Otros aspectos motores relacionados con ejercicios específicos de Biodanza: extensión, eutonía, ímpetu vital, oscilación, postura, sensibilidad del movimiento, sensualidad, tono muscular. Observando las categorías del movimiento y los aspectos motores relacionados con ejercicios específicos de Biodanza, es posible realizar una lectura del movimiento de los participantes del grupo. Descubrir nuevas forma de moverse es la base para desarrollar nuevas formas de percibirse a sí mismo y al mundo. Capacidad de contacto y feed-back: sintonización e iniciativa recíproca. El término feed-back, en Biodanza, se refiere al desarrollo de la capacidad de enviar y recibir informaciones y, adaptarse según la respuesta. Al contemplar la capacidad de contacto y el feed-back, es posible realizar una lectura de sus niveles de comunicación afectiva. Capacidad de regresión: Al observar la capacidad de regresión, es posible evaluar los niveles de alerta y autocontrol, incluso cuando éstos disminuyen. Esto muestra, cuán profunda es la entrega de los participantes y, da indicios del grado de confianza en sí mismos y en el grupo. 8.2.4. Evaluaciones En la escuela, evaluar es comparar, esto alimenta la competencia, presentando al otro como un contrario, sin embargo, sabemos: cada uno es único en cada momento. En el caso de la escuela, cuando ésta requiera poner calificaciones, una buena posibilidad es la autoevaluación. La cual puede ser, considerando la asistencia o estableciendo un porcentaje, a partir de la energía aportada por cada uno, para hacer del espacio un lugar más nutricio. Cuando los participantes se ponen la nota a sí mismos, en un círculo, delante de todo el grupo, en un ambiente de ceremonia y, explicando el porqué, no resulta tan ligero ponerse la nota máxima y si, muchas veces los niños y niñas no lo hacen, es por tener aún heridas de autoestima aunque veamos que su participación es un buen aporte. También, la propuesta de una nota final, puede ser, el promedio de la autoevaluación con la nota puesta por el facilitador (por supuesto, la nota máxima), es una buena alternativa. 8.2.5. Apoyar el currículo escolar Es importante ser flexibles y estar en feedback respecto de las temáticas al momento de preparar la sesión. Conversando con la coordinación académica o, directamente con el profesor, informándonos así sobre el proceso de aprendizaje de nuestros estudiantes. Nos ha ocurrido haber preparado una “clase de animales”, y luego, llegan los participantes felices, algo eufóricos, comentando “las legumbres germinaron en un vaso con algodón”. Esta situación debe ser utilizada a nuestro favor: aprovechar lo sucedido en el presente, y cambiar la sesión por una de juego de duendes y árboles, vínculo con la naturaleza y la danza de la semilla. Somos nosotros, los facilitadores de Biodanza, quienes tenemos más herramientas para flexibilizarnos y fluir con nuevas propuestas. Recordemos que estamos al servicio de la escuela, procurando la integración del ser, por ello colaboremos para que los estudiantes puedan recibir el conocimiento lo más vinculado posible. Seamos un aporte y una ayuda para los profesores, facilitando entregar una visión holística del aprendizaje y del mundo. 8.2.6. Integración de la comunidad escolar Así como proponemos trabajar con el equipo docente y, ojalá participen en la sesiones con los estudiantes, también, es valioso integrar a las familias, a los inspectores, a los administrativos y auxiliares de aseo. El facilitador como agente que invita a todos es fundamental ya que demuestra con su acción el concepto de inclusión acuñado por las escuelas que en Biodanza llamamos integración. Por ejemplo, a la hora de convocar a una clase abierta por la celebración del aniversario de la escuela, llamar a los otros estamentos de la comunidad y, no sólo a los estudiantes. Biodanza consiste en invitar a todos y todas a formar parte de la ronda. 8.2.7. Registro y sistematización de la sesiones Generalmente, cuando trabajamos en escuelas, realizamos clases a varios grupos. En ocasiones podemos pasar de una clase aplicando el hilo rojo con pre-escolares a una sesión de lógica causal con adolescentes, por esto consideramos que la flexibilidad psicológica del facilitador es muy importante. Para facilitar nuestro trabajo y ayudar a crear conocimiento, invitamos a llevar registro de las sesiones. Sugerimos utilizar un programa Excel, si bien, está diseñado para manejar datos numéricos, su hilera interminable de casillas nos servirá para escribir y hacer una pestaña para cada curso. Para este registro proponemos los siguientes títulos críticos: La fecha de la clase: como seguimiento de la realización de las sesiones planificadas Objetivo general de la sesión: Tiene que ver con el o los objetivos del Sistema Biodanza. Puede ser estimular la integración motora, afectivo motora, grupal o cualidades de movimiento como fluidez, ritmo, potencia, etc. Objetivos específicos en la sesión: Tiene que ver con los objetivos que el grupo en particular requiere para alcanzar el objetivo general, tales como incrementar el contacto afectivo, estimular la participación de algún estudiante particular o la integración de género. Los contenidos teóricos que se presentaron al grupo al inicio de la sesión, si fuera el caso. Los ejercicios y juegos que se aplicaron durante la sesión. Las canciones que se utilizaron, el artista y elenco en que está clasificada. Comentarios de desarrollo de la sesión: podemos dejar anotaciones sobre líneas de vivencia para ser potenciadas, las características principales del grupo, o bien, un participante particular que consideremos importante agudizar la observación. Para realizar seguimiento de contenido al finalizar la sesión podemos colorear la fecha con una escala simple: verde claro, verde oscuro, amarillo o rojo, para dejar registro del acceso que tuvo el grupo a los objetivos propuestos. Registro audiovisual: videos, fotos grupales y de los ejercicios. Es posible adjuntar a través del hipervínculo una foto o video a la planilla Excel. Este tema lo abordamos en específico en el capítulo siguiente. Esta matriz es la que podemos completar durante, o inmediatamente tras la sesión. Nos permite que a la semana siguiente, de manera fácil podamos saber cómo va el grupo y sus participantes. Este material, luego resulta útil a la hora de crear conocimiento. Fue el método utilizado para hacer este libro. Expertos podrían tomar el Excel y mostrarte todo lo que funcionó y todo lo que no, a solo un clic. Biodanza es un sistema que se articula al observar la vida, constantemente cambiante, buscamos cuidarla y estimular su desarrollo. Como la vida tiende a la evolución, también nuestro sistema ha de desarrollarse y crecer, da ahí la importancia de llevar registros y sistematizar los diferentes elementos del proceso: los objetivos y nuestras observaciones para seguir creando este conocimiento. 8.2.8. Registro audiovisual Recomendamos acostumbrarse a llevar un registro audiovisual de las sesiones: videos, fotos grupales y también de las vivencias. Este material, al editarlo correctamente, se transforma en una excelente herramienta para comunicar la potencia del sistema, tanto al interior de la escuela, al equipo directivo y docentes, como para ser compartido con colegas al presentar propuestas en otros establecimientos. Les compartimos a continuación los criterios de edición recomendados. Creemos que, principalmente hay que mostrar la parte adrenérgica de la curva, cuando hay trance o regresión lo hacemos de forma breve y grupal para evitar exponer a los participantes en un momento de intimidad. Es necesario tener la autorización de los apoderados de los participantes, sobre todo si el material será expuesto fuera de la escuela. En general, sólo para fines de difusión, no se requieren autorizaciones legales para el uso de imágenes de niñas, niños y jóvenes, no obstante en el contexto escolar la normativa es más estricta; esta regulación varía en cada país. Es importante tener en cuenta que es delicado el manejo de imágenes tanto de menores como de personas practicando Biodanza. 8.2.9. Generar indicadores de resultado Como hemos señalado anteriormente, la propuesta de integración de Biodanza en la escuela ha de ser comunicada en los códigos comprensibles para la institución. Este, es un desafío de flexibilidad y empatía imprescindible para la correcta comprensión de nuestro mensaje. Se trata solo de la forma de presentar la Biodanza, no de modificar su contenido, metodología ni su mensaje. Creemos que el mejor camino para lograr esta propuesta, es generar resultados concretos, datos que puedan asociarse a los objetivos institucionales, validando la incidencia que la intervención desde la Biodanza ha tenido en los grupos. La importancia de generar datos y registros del cumplimiento de objetivos quedó evidenciada en la experiencia de nuestro colega Rodrigo Cisternas, prevencionista de riesgos y facilitador de Biodanza, quien ha aplicado Biodanza con éxito en las obras de edificios de la inmobiliaria Su Ksa. Diariamente, con un equipo de facilitadores, realizan sesiones de Biodanza a los obreros en las azoteas de los edificios en construcción. Después de relatarme esta maravillosa experiencia, concluyó con un indicador significativo para los objetivos instituciones que validaron su trabajo: “logramos bajar los índices de accidentabilidad de 17% a 1%”. Este resultado es muy relevante a la hora de considerar que en el país donde trabaja esta empresa, muere un obrero cada 10 días. El proceso desarrollado pudo ser validado y resumido en este indicador, expresado en una forma significativa para el directorio de la constructora y accesible para otros interlocutores. Esta experiencia inspiradora, impulsó nuestro trabajo en esta dirección en el contexto educativo. Sabemos que Biodanza funciona e incluso en niños y jóvenes es más rápido. La estrategia que es clave desarrollar es la validación de estos resultados. Para llevar adelante el proceso tenemos que determinar quién es el receptor del mensaje. Distinguiendo entre el directorio de la escuela, el encargado local de educación, el ministerio estatal y finalmente las organizaciones mundiales que generan políticas de educación. Ante esta necesidad hemos desarrollado instrumentos, como equipo y con el apoyo de otros colegas, para medir la incidencia que la intervención desde el sistema de Biodanza ha tenido en los cursos. Consideramos valiosos estos esfuerzos, no obstante creemos que estos indicadores son todavía significativos únicamente al interior de la Biodanza. Siendo nuestro próximo desafío acercarse a los organismos internacionales como CEPAL, UNESCO y UNICEF, a indagar sobre los instrumentos y metodologías de investigación validadas para generar indicadores que puedan sean reconocidos mundialmente. Cuando podamos ir desarrollando estrategias de consolidación de datos adecuadas para mostrar la efectividad del sistema a la humanidad, invitamos a publicarlos al interior del movimiento para aplicarlos a nivel global. Luego poder unificar ese material, y así contar con una carpeta amplia y diversa de casos en que Biodanza estimula positivamente el proceso educativo, y el desarrollo de los potenciales humanos. Esta tarea queda pendiente y es el camino que queremos recorrer. En relación a los indicadores que ya hemos realizado, presentamos un instrumento para evaluar la incidencia del proceso de Biodanza, diseñado a partir de un cuestionario de la “Metodología VI: Criterios de Evaluación del Proceso Evolutivo en Biodanza”, adaptándolo a niñas, niños y jóvenes en el contexto escolar. 8.2.9.1. Investigación Biodanza: Colegio Alberto Blest Gana, Santiago de Chile, 2016. Participaron en la aplicación del instrumento 900 alumnos, de entre 10 a 16 años, que practicaron Biodanza durante 12 semanas. Objetivo: medir el impacto del sistema Biodanza en la expresión saludable de la identidad de los participantes, expresada en la relación que establecen consigo mismo, con el otro, con el grupo y con el mundo. Diseño del instrumento: Cuestionario de autopercepción compuesto por dos secciones. La primera corresponde a un conjunto de 25 afirmaciones con respuesta bajo la escala Likert con las siguientes opciones: Nunca, A veces, Frecuentemente, Siempre. La segunda parte es una pregunta abierta. Metodología de administración: El instrumento se aplicó ex-post, antes y después de la intervención. Análisis de resultados: Se compararon diferencias en los resultados cuantitativos, se realizó un análisis de contenido de la pregunta abierta, expresados en categorías. 8.2.9.2. Presentación del instrumento Para efectos de estructura agrupamos las afirmaciones según la línea de vivencia. Los estudiantes solo recibieron las afirmaciones. Enunciado: Lee cada frase con atención, luego marca si te sientes así siempre, frecuentemente, a veces o nunca. La idea es conocerte un poco más, no hay respuestas malas ni buenas LINEAS DE VIVENCIA VITALIDAD: Motivación para la acción y alegría de vivir. SEXUALIDAD: Conexión con el placer, acceso al contacto, las caricias y el disfrute de vivir. CREATIVIDAD: Capacidad de innovar, curiosidad y creatividad existencial. AFECTIVIDAD: Sentir amor, amistad, poder cuidar y poder poner límites. AFIRMACIONES a. Siento motivación para hacer lo que quiero. b. Siento alegría de vivir. c. Tengo energía disponible todo el día. d. Me gusta asumir desafíos personales. a. Disfruto de las actividades que hago. b. Comparto con quienes me hacen sentir bien. a. Siento curiosidad por conocer y aprender. b. Puedo resolver de maneras diferentes una misma situación. c. Siento que puedo crear mi propia vida. d. Siento vergüenza de hablar en público. e. Tengo la sensación de que me entienden. a. Me siento querido por quienes me rodean. b. Puedo expresarme con claridad si algo no me gusta. c. Me siento responsable de cuidar lo que amo. d. Siento que tengo amigos. e. Escucho con atención a las personas. f. Miro a los ojos y mantengo la mirada naturalmente. TRASCENDENCIA: Vinculación con el ambiente y percepción global. g. Tengo la impresión de que las personas no me escuchan. h. Encuentro difícil expresar lo que siento. i. Recibo abrazos y caricias. j. Doy abrazos y caricias. (Si bien las últimas dos afirmaciones pertenecen a sexualidad, la caricia en la escuela es principalmente afectiva). a. Me siento parte de la naturaleza y de la vida. b. Siento armonía en el ambiente en el que estoy. c. Siento que lo que existe es mayor a lo que conozco. ¿Qué te imaginas cuando escuchas la palabra Biodanza? (pre test) ¿Qué es para ti Biodanza? (post Test) Como comentamos, este instrumento se aplicó en la primera y en la última sesión. El primer año, lo hicimos en papel, tomamos muchas horas del equipo en sistematizarlo, transcribiéndolo a formato digital. El segundo año, lo aplicamos con tablets y su análisis fue fácil y rápido. En particular diseñamos el instrumento en Google Form, desde donde, luego de que el participante contesta, se manda vía mail a la cuenta Google. La plataforma genera las gráficas automáticamente, luego se puede exportar en Excel para su posterior análisis. Muchas escuelas ya disponen de estos equipos, y requiere sólo la solicitud del profesor para utilizarlos, es la computación al servicio de la vida. Esta y otras investigaciones completas, las encuentras en la página web: www.biodanzakids.com/investigaciones. Esta página está abierta a publicar informes e investigaciones en esta línea. En concreto en esta investigación, abordamos la cuestión desde el punto de vista cuantitativo y cualitativo. En el primero, comparamos la frecuencia de una respuesta en el pre test con el post test. La frecuencia de respuesta se refiere a las ocasiones de repetición de alguna de esas cuatro opciones por parte de un alumno, por curso, por nivel, por línea de vivencia, o incluso por pregunta. Obtuvimos los resultados, y generamos las gráficas comparativas. Hicimos un abordaje simplificado, agrupando las respuestas en dos categorías: nunca/a veces, como insatisfacción, y siempre/frecuentemente, satisfacción. Pudimos constatar que, con 3 meses de clases, el 7,1% de los participantes pasaron de las primeras dos respuestas negativas a las dos segundas, positivas. Luego, con este criterio pudimos comparar las afirmaciones asociadas a las líneas de vivencia para saber cual estaba siendo más estimulada y así, hacer un ranking de las afirmaciones más incrementadas. En relación al análisis cualitativo, tomamos un curso de 45 niños y niñas de 10 años, y utilizamos la metodología de análisis de contenido a partir de las respuestas a la pregunta abierta. El equipo de facilitadores y psicólogos, Claudia Beltrán y Rafael Campos, analizó todas las respuestas y las organizó según análisis de contenido. Esta técnica, permite la construcción de una matriz de datos, haciendo referencia a unidades de respuestas a través del contenido que surgió del instrumento aplicado. Desde ahí, se obtienen datos (respuestas) de formas simbólicas, y permiten construir unidades de registros. Estas son entendidas como la unidad de significación que se busca en el texto, se extrae del mismo y se codifica, indicando en su conjunto los participantes consultados. Cuando ya se logra tener las unidades de registros, estas permiten generar las categorías, que son entendidas como lo más representativas de las unidades de registro. Para explicarnos con un ejemplo cercano: Rolando Toro para crear las líneas de vivencia, realizó una entrevista preguntando respecto de qué querían vivir las personas, cuáles eran sus sueños y aspiraciones. A todas esas respuestas, aplicó un análisis de contenido, de las que obtuvo unidades de registro, luego agrupó estas en categorías, es decir, las más significativas y de ahí surgieron: Vitalidad, Creatividad, Sexualidad, Afectividad y Trascendencia. De una misma respuesta, pueden obtenerse varias categorías, como se aprecia en ésta; “Aprendí a relajarme y respetar a los demás”. Aquí hay dos categorías, por una parte, está la cualidad de relajación y por otra, la cualidad de respeto. Desde ahí, se comienza a trabajar en el análisis de contenido. Ahora, mostraremos parte del análisis de contenido, las categorías y la síntesis, de la investigación citada. Frente a la pregunta: “¿Qué te imaginas cuando escuchas la palabra Biodanza?” (Las categorías creadas están en negrita): La primera, se encuentra asociada a una acción, esto es alguien está haciendo algo, (de manera voluntaria o involuntaria, de pensamiento, palabra u obra), normalmente esto implica movimiento o cambio de estado o situación, y afecta o influye en una persona, animal o cosa. Esta acción se engloba a través de tres elementos: bailar, danzar y vivir, generando una cualidad de movimiento e interacción a través de la vida, y la experiencia del vivir. La segunda, se encuentra asociada a una cualidad y expresión de la danza entendida como la representación con palabras o con otros signos externos, de un pensamiento, una idea o un sentimiento. Esta expresión, va asociada a una cualidad del movimiento de la danza, manifestada en una coreografía artística, baile. Y la tercera, se encuentra asociada a una definición hacia la naturaleza, entendida como un conjunto de las cosas existentes en el mundo sin intervención del ser humano. Esta connotación, se vincula con la capacidad de tener un entorno libre, generado desde una intencionalidad más allá del movimiento, en este caso desde la capacidad de sentir, asociada a la naturaleza, al aire libre. Síntesis pre test: Estas tres categorías, van teniendo desarrollo a partir de una noción de lo más concreto frente a un concepto como es la descripción a través de una Acción, pero también hay una noción hacia la cualidad del movimiento, donde aparece la Expresión, permitiendo otras formas de esta acción. Y por último, esta capacidad de asociar, se lleva al plano de la Naturaleza, por la capacidad de vivenciar y principalmente del sentir. En el post test, después de tres meses de clases, frente a la pregunta: ¿Qué es para ti Biodanza?, surgieron las siguientes categorías: La primera categoría, está relacionada con lo valórico de la experiencia desde la interacción con el otro: se van desarrollando elementos de integración en la relación como el respeto por el otro, el apreciar, el compartir, la amistad, la aceptación al otro, la honestidad, el no pelear, la solidaridad, y aprender a convivir. Esto, potencia los elementos en el proceso de vincularse, acciones que conducen a reconocer la diferencia y aceptar como poder enriquecer las relaciones en el trato. La segunda categoría, está relacionada con la socialización (interacción grupal) de la experiencia amplificando el tipo de relación, donde se comienzan a visualizar acciones desde la empatía, reconocimiento del valor de convivir con otro, desde el aprendizaje, la expresión hacia otro, teniendo como vía el juego y el baile. La tercera categoría, está relacionada con el reconocimiento de las emociones, aparecidas en la interacción, donde surge la alegría asociada a la felicidad, y la diversión; a la vez mencionan reconocer el amor, en sí mismos y la capacidad de sentir esta emoción, unas variables son la pasión e intensidad, como también contactarse con la calma y el bienestar. La cuarta categoría involucrada, es el reconocimiento de la seguridad psicológica (autoestima). Esta permite reconocer aspectos del binomio: seguridad-confianza, liberación-relajación y paz-armonía, favoreciendo el proceso de integración, y el posicionarse en el presente, desde una base segura en la interacción. SÍNTESIS POST-TEST: A diferencia del pre-test, se comienza a reconocer aspectos más nutricios en sus descripciones y relatos de respuestas. Hay una experiencia, y se comienza a relacionar con hechos vívidos o, reconocer nuevas nociones. Las más altas puntuaciones se logran en aspectos valóricos: entra en juego el reconocer el valor del otro, ahora desde un aspecto vivencial, el reconocimiento lo brinda la experiencia, la interacción, se abren hacia la posibilidad del respeto hacia el otro, porque comienza el respeto por sí mismos; cuando empiezan a habitarse a sí mismos, compartir es lo central, desde la honestidad y solidaridad, por tanto da cuenta de que la interacción ha cambiado. Esta interacción se verifica desde el grupo fortaleciendo la experiencia de socialización, con otros acentos, como la empatía, siendo el escenario el juego y el baile. La interacción grupal, va derribando ciertas defensas y se va permeando la estructura de cada participante, favoreciendo el percibir y constatar emociones, y poner nombre, así es como el amor, se vivencia en sí mismo como en otros. La alegría es un común denominador, resaltado con la capacidad de divertirse, y a la vez conocer estados más quietos como la calma y el bienestar. Y por último: resuena en los participantes la seguridad psicológica (autoestima), esto es el conocer y aprehender acciones generadoras de desarrollo desde una base segura de reconocer aspectos básicos de la seguridad-confianza, como el poder ser desde la liberación-relajación, que no sea un estresor y sino que pueda incorporar elementos de estructura. Además, favorece integrar elementos de paz-armonía, algo en un primer momento desconocido, ahora fortalecido con una base segura. Así como este instrumento fue diseñado con el objetivo de medir el impacto de Biodanza en la expresión saludable de la identidad de los participantes, proponemos otros objetos que requerirán la preparación de otros instrumentos. Estos podrían ser: la implementación de Biodanza en sí dentro de una escuela o el sistema educativo, el impacto en el rendimiento académico de sus participantes, la influencia en la asistencia, entre otros. En resumen, es fundamental para la difusión de la Biodanza en ambientes institucionalizados, crear y compartir indicadores de impacto tanto cuantitativos como cualitativos. Estos datos son relevantes y, pueden ayudar a abrir programas en muchas escuelas, sobre todo si logramos unificar criterios de evaluación a nivel global. Generar investigación, como hizo el mismo Rolando Toro, para crear solidariamente el Sistema Biodanza es continuar este legado de transformación y sensibilización hacia el conmovedor fenómeno de la vida. 8.2.10. Informe final Recopilado y ordenado, este material es excelente para presentar un informe final en la escuela. Investigación con indicadores de impacto, cualitativos y cuantitativos, sistematización de clases, registro audiovisual, asistencias con gráficas por curso, evaluación de dificultades y recomendaciones pueden conformar un documento que ayude a validar la práctica en el contexto institucionalizado de la escuela. Este material, sirve también a otros colegas para crear sinergia y abrir programas en otras escuelas. Como señalamos anteriormente, si esta estrategia encuentra eco en todos los que estamos trabajando en el ámbito de educación, y compartimos los resultados generados, la potenciación de los efectos y beneficios de Biodanza será enorme, solo necesitamos saber cómo tocar la puerta para abrirla. 8.3. Estrategias específicas para la sesión de Biodanza en la escuela 8.3.1. Pulsar entre el rol del facilitador de Biodanza y profesor de escuela Dependiendo del nivel y la compresión del concepto de disciplina en la escuela donde se realiza el programa de Biodanza, puede variar la forma de presentarnos y vincularnos con el grupo. En general, la propuesta es pulsar entre el vínculo horizontal, cercano a la amistad, del facilitador y, el vertical, desde la autoridad tradicional de profesor. Los participantes en los colegios más estrictos, necesitarán mayor presencia de vínculo vertical, sobre todo al inicio, lo cual podrá ir paulatinamente combinándose con mayor cercanía de manera progresiva. Así como es con el tipo de escuela, también hay casos de ciertos participantes que requieren una presencia fuerte y límites claros, para sentirse vistos y amados. Es importante tener disponible la fuerza Yang: masculina, clara y certera, para expresar y contener con firmeza en esos casos, siempre combinando con la dulzura del Yin. Un caso en particular, se dio en un grupo de adolescentes donde la mayoría tenía estas características. La situación fue afrontada de la siguiente manera: se dejó de hacer chistes por un tiempo, y se “dictó” la sesión desde un espacio mucho más formal y firme, se fueron introduciendo consignas científicas para validar la práctica y así, con el pasar de las sesiones, los Mecanismos de Acción de Biodanza, fueron haciendo su trabajo y el grupo comenzó a Autorregularse. Entonces, se pudo volver a un vínculo más horizontal. Dado lo anterior, la lectura del grupo y la capacidad de pulsar el rol entre facilitador y profesor, es una característica esencial para tener logros en el trabajo dentro de las escuelas. 8.3.2. Objetivo central: la integración grupal Junto con aplicar la metodología adaptada para niños y jóvenes, se debe considerar que al estar en escuela, se abre un nuevo desafío: aplicar el sistema en la sala de clases. Lo central de la propuesta es enfocar la potencia de Biodanza en la Integración Grupal. Estos participantes, a diferencia de un grupo regular semanal, siguen interactuando durante la semana, dentro de un contexto que les es propio y cotidiano de participación, constituyéndose así la relación entre ellos como un eco-factor permanente en su desarrollo. El facilitador debe estar consiente de esto: los estudiantes pasan más tiempo en la escuela, comparado al transcurrido con sus familias (en el caso de Chile donde la asistencia es jornada completa extendida). Por eso, gran parte de las vivencias propuestas, surgen como respuesta a la necesidad de crear en el grupo un ambiente de integración y aceptación mutua. Sugerimos porponer un grupo de profundización extracurrular para facilitar porocesos a estudiantes interesados. 8.3.3. Progresividad en la afectividad Debe recalcarse un punto fundamental: el abordaje de la Línea de la Afectividad. El grupo de Biodanza en la escuela suele ser el curso, el cual se sigue viendo durante toda la semana antes y después de la sesión. Por eso, el compromiso afectivo, ha de ser muy progresivo. Por ejemplo, para un participante puede ser muy dañino el ser víctima de burlas en el patio, tras la sesión realizada, por haber llorado allí. Nos puede parecer natural el llanto en un grupo semanal, pero puede ser muy negativo en un contexto escolar que desde ya, es agresivo. Por lo tanto, mientras más lento avancemos, lograremos una mayor profundidad al final, y a su vez, será más fácil y rápido el proceso de integración de la identidad en estas edades, tanto desde el punto de vista psicológico, como emocional y neurológico, tomando en cuenta que, los participantes estarán más disponibles y receptivos a realizar cambios. Es posible determinar que, sin prisa llegaremos mejor y disfrutaremos el proceso. El permiso, la validación y expresión del sentir, debe crearse de modo definitivo en el grupo para recién comenzar a profundizar en la intensidad de las sesiones. Así, en las primeras sesiones, la base afectiva debe estar creada para poder trabajar contenidos Yang, de oposición o fuerza. 8.3.4. Participación obligatoria en las sesiones Desde nuestra experiencia, la respuesta a este desafío ha sido potenciar dos elementos siempre presentes en el Sistema: la Progresividad y la Libertad expresiva. El primero, ya lo desarrollamos anteriormente desde la afectividad. En relación al segundo, cuidar presentar el espacio de Biodanza como un lugar de expresión libre y desde ahí invitar permanentemente. Es fundamental para lograr que la obligatoriedad -requisito de la escuelasea absorbida por un interés verdadero en ser parte, divertirse y explorar la posibilidad de aprender desde el sí mismo, el vínculo con otro y con el grupo. Lo central para esto, es la libertad de sentir de quien facilita; ser honesto y sincero con la propia expresión es lo que valida y facilita la expresión de los demás. El hecho de sacarse los zapatos es un estímulo significativo para la sensación de liberarse. Para lograrlo, en especial con adolecentes, valgámonos de argumentos con sentido. Compartimos uno que usamos recientemente. “Quiero proponerte entrar en una nueva sensibilidad. Imagínate vas al bosque, si caminas con zapatos, vas pisando todo sin darte cuenta. Ahora si estás descalzo, pisarás siempre con cuidado, podrás tener información directamente de las características del suelo, no vas a pisar un brote, ni un araña ni una espina. Estarás en cada paso, te volverás más presente y tu experiencia será más plena. En la sesión de Biodanza es igual, por eso te invito a estar descalzo”. Si un participante prefiere estar sentado o no se lo logra motivar es recomendable intentar de enriquecer el vínculo personal con él o ella. Ser explícito afirmando la participación en Biodanza como no obligatoria pero debe estar en la sala porque la escuela así lo requiere. Preguntarle sobre sus gustos y opiniones de un cierto tema es una buena estrategia de aproximación. Aprovechar los recreos para acercarse y compartir otra forma de relación más cercana. Existe un tipo de participante cuya conducta es especial: le interesa la clase y al mismo tiempo necesita boicotearla, es una relación amor-odio. La vivencia de amor incondicional es esencial para resolver este comportamiento. Es necesario usar todas nuestras herramientas de vínculo y mucha paciencia para integrarlo: calificación, mirada, caricia, ternura y fuerza. También en estos casos es muy recomendable comunicarse con el profesor jefe de su curso, pidiendo que se le integre a un programa de apoyo psicológico o terapia de la escuela. (Para abordaje concreto sobre las cualidades del facilitador para trabajar con jóvenes, leer capítulo más adelante.) 8.3.5. El final de la curva Cuando nuestra sesión ocurre dentro del horario escolar, es importante conocer y saber las clases anteriores y posteriores de los participantes. Si vienen de educación física, podríamos proponer un descanso en el suelo inicial, o si tienen una prueba de matemáticas después, es importante no dejarlos muy somnolientos ni tampoco demasiado activos. En este último caso, el próximo profesor tendrá problemas para comenzar su clase. Es necesario tener siempre en cuenta: la educación es un proceso orgánico y solidario entre los profesores y nosotros formaremos parte de ese proceso. 8.3.6. Punteo de los aportes de Biodanza en la escuela ● Integración grupal. ● Integración del plano afectivo como parte del proceso de educativo. ● Aporta en la creación de un ambiente enriquecido que estimula el aprendizaje. ● Aporta nuevos elementos para la percepción del establecimiento educacional como un lugar que incluye movimiento, emociones y la presencia de los demás como parte del apredizaje ● Estimula la alegría y el juego como vías epistemológicas. ● Eleva el nivel de salud y creatividad. ● Incrementa el autocontrol y la autorregulación desde sus bases biológicas. ● Introduce el contacto afectivo, reduciendo la violencia y golpes. ● Aumenta la participación en clases, estimulando el protagonismo existencial. ● Mejora la atención y concentración en clases. 8.3.7. Ejemplo de propuesta de Biodanza para establecimientos educacionales Biodanza para establecimientos educacionales Biodanza se define como un sistema de integración humana, renovación orgánica, reeducación afectiva y reaprendizaje de las funciones originarias de la vida, que busca la expresión saludable de la identidad. Su metodología consiste en inducir vivencias integradoras. Para lograrlo, emplea música, movimiento, emoción y situaciones de encuentro. La práctica crea un ambiente enriquecido favorable para el descubrimiento, desarrollo y expresión de los potenciales, propiciando además, placer y alegría de vivir. El significado de los términos usados en esta definición, está descrito aquí en forma más profunda para su mejor comprensión. Integración humana En Biodanza el proceso de integración actúa mediante la estimulación de las funciones primordiales de la conexión con la vida, que permite a cada individuo integrarse a sí mismo, a la especie y a la totalidad. Renovación orgánica Es la acción sobre la autorregulación orgánica, inducida principalmente mediante estados de disminución de la alerta, que activan procesos de reparación celular y regulación global de las funciones biológicas, disminuyendo los factores de desorganización y stress. Reeducación afectiva Es la capacidad de establecer vínculos con las personas, entregar y recibir afecto. También poder poner límites en forma oportuna, progresiva y en relación a la situación puntual. Reaprendizaje de las funciones originarias de vida Es aprender a integrar las fuerzas de los instintos en el diario vivir. El instinto es, una conducta innata, hereditaria, que no requiere aprendizaje y, se manifiesta mediante estímulos específicos. Ellas tienen por objetivo conservar la vida y permitir su evolución. Los instintos representan la naturaleza en nosotros, y sensibilizarse a ellos significa restablecer la ligación entre naturaleza y cultura. Vivencias integradoras Es una experiencia vivida con gran intensidad en el aquí-ahora y con calidad ontológica, es decir se proyecta sobre toda la existencia. Todas las vivencias, en Biodanza, son integradoras porque tienen un efecto armonizador en sí mismas. Líneas de vivencia Las vivencias en Biodanza están orientadas para estimular los siguientes potenciales denominados Líneas de Vivencia: ● Vitalidad: Alegría de vivir, energía disponible para la acción y principio de autorregulación reposo-actividad. ● Creatividad: Descubrir nuevas maneras de hacer y de vivir en lo cotidiano, creatividad existencial. ● Afectividad: Capacidad de tener amigos, vínculo con el amor, la ternura, reconocer y expresar los propios límites. ● Sexualidad: Conexión con el placer y el disfrute de lo que se hace. ● Trascendencia: Percepción global y capacidad de trascender el propio ego, desarrollo de la empatía. Las sesiones se desarrollan por medio de propuestas que el facilitador presenta como ejercicios de movimiento a los participantes. Para cada ejercicio, existe una música determinada, que considera el grupo etario al que está dirigida la clase, e induce una emoción específica, lo cual se respalda sobre bases biológicas, antropológicas, psicológicas y semánticas que han sido probadas metodológicamente por más de cincuenta años. La emoción provoca una expresión genuina de la identidad a través del movimiento del cuerpo, creando una danza inédita, propia y singular. Beneficios de Biodanza Específicamente para la Extensión de Biodanza con niños, niñas y jóvenes la práctica otorga los siguientes beneficios: Integración grupal. Integración del ámbito emocional como parte del proceso educativo. Aporta en la creación e incorporación de un ambiente enriquecido que estimula el aprendizaje. Aporta nuevos elementos para la percepción del establecimiento educacional como un lugar de conocimiento que incluye movimiento, emociones y la presencia de los demás. Estimula la alegría y el juego como vías de acceso al conocimiento. Eleva el nivel de salud y creatividad. Incrementa el autocontrol y la autorregulación. Introduce el contacto afectivo, reduciendo la violencia y los golpes. Aumenta la participación en clases, estimulando el protagonismo existencial. Favorece la atención en clases. Facilita la expresión de identidad sana y fortalecida en encuentros nutritivos y libres, desde la colaboración y la integración de la diversidad. Propuesta de trabajo Biodanza estará dentro del Programa de Inteligencia Afectiva del Colegio……………………………………………... El Programa tendrá una duración de X meses, X semanas. Participarán X alumnos, que serán seleccionados por el equipo coordinador del colegio. Cada sesión de Biodanza tendrá una duración de 1 hora 30 minutos a la semana y contará con la participación de X estudiantes a la vez, los que se mantendrán regularmente cada semana, no pudiendo cambiar de grupo y deberán contar con la participación de un profesor que sea referente para esos alumnos. El total de los estudiantes, es decir los X, participarán de una sesión de Biodanza a la semana, X sesiones en total. Las sesiones podrían abordar temáticas relacionadas a la necesidad del grupo o que se estén trabajando y se quieran reforzar como valor del mes tales como la empatía, integración grupal, límites, entre otros. En forma paralela, se propone una sesión de Biodanza al mes con los docentes y paradocentes del establecimiento, para fortalecer el equipo y entregar herramientas concretas que les ayude a desenvolver su rol formador, y sobre todo, sensibilizar a la naturaleza afectiva de la propuesta de Biodanza. Creemos importante señalar que para participar en una sesión de Biodanza no hace falta experiencia previa, ya que no hay coreografías ni pasos predeterminados y los ejercicios propuestos no requieren preparación física específica. Los acuerdos que se proponen al inicio de cada sesión son: Autorregulación Individual y Principio del Feedback. El primero, se expresa tanto a nivel fisiológico (aeróbico) como emocional, cada participante determina su grado de participación en la vivencia propuesta, y el segundo guarda relación con estar receptivo a las necesidades y/o límites del otro en una situación grupal o de encuentro con otro. Para la realización de las sesiones, se requiere de un salón ventilado, amplio (2 mt2 por participante), y privado de interrupciones. Un sistema de amplificación para la música (2 a 4 watts RMS por participante), y un micrófono.