Práctica I 2/2 Canalización Endovenosa Integrantes: Barajas Gonzáles Francisco Javier Bravo García Victoria Ameyali Chaine Vega Alejandra Magnolia De Jesús Palacios Nochtli Nayeli González Martínez Fernando. Hernández Saavedra Paulina López Reyes Gloria Janette Alejandra Chaine Palafox González Nancy Valeria Reyes Morales Hepsiba Yael Saldaña Toriz Adriana Procedimiento En primer lugar, se llevó al caballo al shut preparándolo para el procedimiento, se procedió a rasurar un rectángulo en el cuadro proximal del cuello, sobre la vena yugular izquierda, aunque en nuestro caso se rasuró más de lo debido, lo cual fue error nuestro, posteriormente se embrocó ocupando 3 veces yodo y alcohol consecutivamente, para después administrarle Xilacina para relajar al paciente y poder trabajar adecuadamente. Posteriormente cuando se encontraba en estado óptimo, se le administró Lidocaína en 3 zonas formando la cabeza de Mikey mouse es decir, primero la mitad donde entrara el catéter, y la mitad de la mitad en cada lado donde irían las suturas. Después se procedió a colocar un catéter de teflón corto de 14, a 45° aunque con algunas complicaciones iniciales Puesto en el lugar adecuado, se prosiguió a fijar con sutura de nylon con puntos simples. Finalmente se le administró la dosis de vitaminas. Experiencia Ésta fue satisfactoria, además que en algunos de nosotros fue la primera vez que pudimos colocar un catéter IV en un equino, lo cual fue una experiencia nueva e interesante, ya que la mayoría solo conocía la técnica en pequeñas especies. Modificación de técnica El profesor nos enseñó la fijación de la venoclisis por medio de 3 suturas simples superficiales para así evitar la des canalización del paciente. Complicación La dificultad la obtuvimos porque no se tenía clara la reacción al colocar el catéter, puesto que, esperábamos una regresión de la sangre inmediata por el mismo, por ello se intentó un aproximado de 4 veces pues creíamos no estábamos en el sitio. Solución El profesor nos auxilió, realizó un movimiento presionando distal al punto de introducción del catéter y salió sangre lo cual nos explico que por la altura, la sangre no regresa al momento de colocar el catéter. Posiblemente en las cuatro veces que colocamos el catéter estuvimos dentro de la vena pero al no conocer esto suponíamos lo contrario, al final el conocimiento fue adquirido, además de que la dosificación del tranquilizante, dilución de vitaminas y el protocolo antiséptico para el embrocado fue correcto, así como la organización ya que cada uno realizó un papel fundamental en esta. En conclusión, la práctica cumplió su objetivo, y nos dio la oportunidad de practicar la técnica, adquirir conocimientos nuevos en una especie diferente a la que conocíamos, y vitaminar a nuestro caballo de paso.