AGUA SEGURA ¿Qué entendemos por agua segura? El agua de consumo humano, o agua segura es la que se utiliza para uso doméstico, higiene personal y no perjudica la salud de las personas. LA ANEMIA NORMA TÉCNICA – MANEJO TERAPÉUTICO Y PREVENTIVO DE EN NIÑOS, ADOLESCENTES, MUJERES GESTANTES Y PUÉRPERAS (2017) 4.5 Medidas Generales de Prevención de Anemia Promoción del consumo de agua segura, el lavado de mano y la higiene de los alimentos en el hogar Generalmente la diarrea en niños más grandes estará relacionada a: a. Prácticas inadecuadas de lavado de manos. b. Inadecuada manipulación de alimentos. c. Insalubridad dentro del hogar. d. Consumo de agua insegura. https://www.un.org/sustainabledevelopment/es/water-andsanitation/ El agua libre de impurezas y accesible para todos es parte esencial del mundo en que queremos vivir. Hay suficiente agua dulce en el planeta para lograr este sueño. Sin embargo, actualmente el reparto del agua no es el adecuado y para el año 2050 se espera que al menos un 25% de la población mundial viva en un país afectado por escasez crónica y reiterada de agua dulce. La sequía afecta a algunos de los países más pobres del mundo, recrudece el hambre y la desnutrición. Esa escasez de recursos hídricos, junto con la mala calidad del agua y el saneamiento inadecuado repercuten en la seguridad alimentaria, los medios de subsistencia y la oportunidad de educación para las familias pobres en todo el mundo. Afortunadamente, se han hecho algunos avances en la última década y más del 90% de la población mundial tiene acceso a fuentes de agua potable mejoradas. Para mejorar el acceso a agua apta para el consumo y al saneamiento, y la gestión racional de los ecosistemas de agua dulce entre las comunidades locales en varios países en desarrollo del África Subsahariana, Asia Central, Asia Meridional, Asia Oriental y Asia Sudoriental. •3 de cada 10 personas carecen de acceso a servicios de agua potable seguros y 6 de cada 10 carecen de acceso a instalaciones de saneamiento gestionadas de forma segura. •Al menos 892 millones de personas continúan con la práctica insalubre de la defecación al aire libre. •Las mujeres y las niñas son las encargadas de recolectar agua en el 80% de los hogares sin acceso a agua corriente. •Entre 1990 y 2015, la proporción de población mundial que utilizaba una fuente mejorada de agua potable pasó del 76% al 90%. •La escasez de agua afecta a más del 40% de la población mundial y se prevé que esta porcentaje aumente. Más de 1700 millones de personas viven actualmente en cuencas fluviales en las que el consumo de agua supera la recarga. •4 billones de personas carecen de acceso a servicios básicos de saneamiento, como retretes o letrinas. •Más del 80% de las aguas residuales resultantes de actividades humanas se vierten en los ríos o el mar sin ningún tratamiento, lo que provoca su contaminación. •Cada día, alrededor de 1000 niños mueren debido a enfermedades diarreicas asociadas a la falta de higiene. •Aproximadamente el 70% de todas las aguas extraídas de los ríos, lagos y acuíferos se utilizan para el riego. •Las inundaciones y otros desastres relacionados con el agua representan el 70% de todas las muertes relacionadas con desastres naturales Consecuencias del Consumo de Agua no Segura o Contaminada •Casi la mitad de la Población de los países en desarrollo padecen enfermedades transmitidas por el agua. •Los Organismos Patógenos utilizan el agua como vehículo para introducirse en el organismo humano. •El grupo de las enfermedades diarreicas es la causa principal de mortalidad y morbilidad infantil en los países en desarrollo. Las enfermedades de origen hídrico más frecuentes son: El cólera •La enfermedad es transmitida a través del consumo de agua o alimentos contaminados. •Se multiplica rápidamente en el intestino humano eliminando una potente toxina que provoca diarrea intensa. Fiebre tifoidea •Se contagia al consumir agua o alimentos contaminados con deposiciones de personas portadoras o enfermas de fiebre tifoidea. •El agente causante es la bacteria llamada Salmonella Typha. •Estas penetran al organismo a través de la vía oral. •Los alimentos se contaminan al no lavar bien las frutas y verduras que pueden haber sido regadas con aguas servidas y directamente por personas que preparan los alimentos y no se lavan cuidadosamente las manos después de ir al baño. Hepatitis A •Es una de las enfermedades más antiguas conocidas por los seres humanos. •Las principales vías de contagio son el consumo de agua o alimentos infectados. Escariasis •La escariasis es una infección intestinal causada por el gusano parasitario Ascaris Lumbricoides. •Es la infección humana más común en el mundo. •La infección tiene lugar cuando se ingieren alimentos o bebidas contaminadas con huevos de lombrices. •Los niños y las niñas son afectados más severamente que los adultos. •Para su prevención se debe evitar el consumo de agua contaminada. A nivel mundial, el 80% de las enfermedades infecciosas y parasitarias gastrointestinales y una tercera parte de las defunciones causadas por éstas se deben al uso y consumo de agua insalubre. La falta de higiene y la carencia o el mal funcionamiento de los servicios sanitarios son algunas de las razones por las que la diarrea continúa representando un importante problema de salud en países en desarrollo. El agua y los alimentos contaminados se consideran como los principales vehículos involucrados en la transmisión de bacterias, virus o parásitos. Los organismos transmitidos por el agua habitualmente crecen en el tracto intestinal y abandonan el cuerpo por las heces. Dado que se puede producir la contaminación fecal del agua (si ésta no se trata adecuadamente) al consumirla, el organismo patógeno puede penetrar en un nuevo hospedador. Como el agua se ingiere en grandes cantidades, puede ser infecciosa aun cuando contenga un pequeño número de organismos patógenos. Los microorganismos patógenos que prosperan en los ambientes acuáticos pueden provocar cólera, fiebre tifoidea, disenterías, poliomelitis, hepatitis y salmonelosis, entre otras enfermedades. El agua y alimentos contaminados tienen una gran importancia en la transmisión de patógenos causantes del síndrome diarreico, por lo que se hace necesario tener estrategias que permitan un manejo adecuado de ella. La OMS calcula que la morbilidad (número de casos) y mortalidad (número de muertes) derivadas de las enfermedades más graves asociadas con el agua se reduciría entre un 20 y un 80 por ciento, si se garantizara su potabilidad y adecuada canalización http://www.bvsde.paho.org/bvsacd/cd57/riesgo.pdf “Antes cuando tomábamos agua directo del caño, sufríamos de infección estomacal y parásitos. Mas que todo, mis hijos eran los más afectados. También los hijos de los vecinos. Desde que consumimos el agua clorada estamos más sanos”, dice la señora Elga Chaupis Ayala, mientras observa como el técnico hace la medición del rango residual del cloro en el agua que discurre por el caño de su casa. La diarrea ocupa un puesto destacado entre las enfermedades como causa de morbimortalidad, pues se cobra la vida de 1,8 millones de personas y provoca unos 4 mil millones de casos de enfermedad al año. Los niños son los más afectados, ya que con cada episodio diarreico se reduce la absorción de calorías y nutrientes y se retrasa el crecimiento y el desarrollo. El 90 % de las defunciones de origen diarreico afectan a los niños menores de cinco años de edad, casi siempre en países en desarrollo La OMS estima que el 94 % de los casos de diarrea podrían evitarse a través de modificaciones del medio, como son las intervenciones para aumentar la disponibilidad de agua salubre y mejorar el saneamiento y la higiene.7 Además, una revisión sistemática efectuada en 2005 permitió concluir que los episodios diarreicos se reducen un 25 % al mejorar el abastecimiento de agua, un 32 % al mejorar el saneamiento, un 45 % por medio del lavado de manos y un 39 % mediante el tratamiento y el almacenamiento seguro del agua doméstica.8 Una revisión Cochrane más reciente de ensayos clínicos controlados (2006) confirmó la importante función que las intervenciones en la calidad del agua en el lugar de uso podrían desempeñar en la reducción de los episodios de diarrea, al revelar una disminución a la mitad, en promedio, de la morbilidad por enfermedad diarreica, aunque algunos estudios evidenciaban reducciones del 70 % o más.9 https://www.who.int/household_water/advocacy/combating_ disease_es.pdf