CONFLICTIVIDAD Y CRONICIDAD EN PAREJAS SEPARADAS CON HIJOS. Alta conflictividad crónica. Birnbaum y Bala (2010) describen los aspectos que definen la alta conflictividad: gran número de litigios y relitigios, alto nivel de ira y desconfianza, dificultad de comunicación sobre los hijos, historia de violencia doméstica y rechazo de los hijos a ir con un progenitor. La cronicidad del conflicto. Los factores que crean y mantienen la alta conflictividad relacional incluyen factores individuales y contextuales. Los conflictos generados por la separación (humillación, rechazo, la pérdida) interactúan con las vulnerabilidades caracterológicas de los progenitores, el abuso de alcohol y drogas, los trastornos de personalidad del grupo B llamados dramáticos, emotivos o inestables (narcisista, antisocial, histriónico y límite). Los factores contextuales añaden complejidad con la actuación de los profesionales (psicólogos, abogados) e instituciones con quien estos progenitores contactan y buscan alianzas que pueden potenciar el conflicto, y una vez en un proceso adversarial, aumenta el desgaste emocional y la polarización de las posiciones. Ref. Capdevila C., La coordinación de coparentalidad. Una intervención especializada para familias en situación de alta conflictividad crónica post-ruptura de pareja. Anuario de psicología. 2016, 46, 41-49. Ignacio González Sarrió. Doctor en Psicología Jurídica. Perito judicial y forense. Miembro del Turno de Peritos Forenses del Ilustre Colegio Oficial de Psicólogos. Coordinador Grupos de Trabajo en Psicología Jurídica. http://psicolegalyforense.blogspot.com NºCol.cv06179. 696102043 Valencia.