Montería, 18 de marzo de 2019 Señores: CLINICA CENTRAL O.H.L LTDA L. C. Cordial saludo Por medio de la presente, me dirijo a todos ustedes para manifestarles nuestro agradecimiento, por haberle salvado la vida a mi esposa la atención prestada por su grupo de colaboradores es de resaltar, no me cabe la menor duda que ustedes hicieron todo lo humanamente posible por devolverle la ilusión de volver a ver a sus hijos y familia, fueron muchos días y noches difíciles, momentos de angustia y desesperación para nosotros, en los cuales siempre escuchábamos de su parte una voz de aliento y esperanza. Recuerdo que cuando nos informaron en la otra Clínica donde se encontraba ella, que el convenio con su EPS se había acabado y que ella tenia que ser trasladada a otra clínica, sentí mucha angustia y temor, miraba al cielo y preguntaba, ¿señor que pasa? , pero era Dios obrando, desde el momento de su traslado sentimos el cambio y esto gracias a Alfredo Argel (conductor de la ambulancia) que la traslado y a la auxiliar de enfermería Sugey Mórelo, quienes con su amabilidad nos demostraron desde un principio como seria el cambio, luego cuando llegamos a su clínica desde los vigilantes y personal de la clínica vimos que todo sería diferente. En ocasiones llegaba a mi casa abatido y sin esperanzas, mi preocupación crecía mas y mas cuando mis hijos y mi mama, me preguntaban por su madre y me tocaba fingirles que todo iba bien, luego cuando me refugiaba en la oración con Dios, sentía como mis energías se recargaban, luego con el amanecer llegaba la esperanza de llegar a la clínica a recibir el informe de evolución de alba, en ocasiones salía de ellos muy emocionado y en otras con el corazón en la mano, luego cuando entraba a UCI. Recuerdo que el primer día que nos informaron que alba seria traslada a esa área de la clínica, sentí que mi corazón se hizo pedazos, ese primer día cuando fui a visitarla bendita cama 9, por orden de entrada, éramos los últimos y ella pensó que no iríamos a visitarla y como no recordar sus lágrimas de tristeza pero fue en ese lugar en donde Dios empezó a hacer su obra, colocando a cada una de las personas que hacen parte de ese espacio, para que alba y nosotros volviéramos a creer, Nunca olvidare la atención de los doctores Camilo Mosquera, Cesar Enzuncho, Lorena Arismendi, Will Guevara, Martha Jabit, Julia de Vos, Héctor Cantillo, Jesús Ramírez, Jorge Ordosgoitia las jefas de enfermería de UCI, Paola Sepúlveda, Lisbeth Martínez, a Cila Rosso por sus oraciones, a esas enfermeras abnegadas: Yenni, Nevis, Carolay, Johana, Hermila, Amparo, Alba, Wilber, Oscar, Naicilis . Al personal de sexto piso: Nevis Canchila, Nilsa Davison, Jackelin Doria, Armila Jiménez, Rocio Ruiz, Diana Hernandez, Sugey Morelo, Yerlis Yances, a las jefes de enfermería Angela, Karen, Maria, Blanca, gracias por su atención y entrega. A sus vigilantes, al personal de servicios generales, quienes me asombraban preguntándome por ella como iba en su recuperación y las palabras de aliento, gracias. A quienes si por algún motivo se olvido o paso su nombre gracias. Nuestras familias les vivirán agradecidos toda la vida, Dios los bendiga a todos, sigan atendiendo a todos sus pacientes con esa misma calidad humana y motivación, gracias CLINICA CENTRAL, ustedes nos devolvieron la alegría. Att, Familia Ruiz restrepo