ENTRONIZACIÓN DE LA BIBLIA Ambientación Preparar un atril, mesa o lugar destacado para colocar una Biblia. Velas encendidas a los lados de la misma. 1. Motivación Nos hemos reunido alrededor de la Palabra de Dios, que ilumina nuestras vidas. Al igual que el antiguo Pueblo de Dios, somos peregrinos, seguidores del Señor que sigue hablándonos en las Escrituras. 2. Oración Padre nuestro, lleno de ternura y misericordia, te agradecemos porque nos has enviado a Jesús, tu Hijo Amado.. Nos disponemos a recibirlo con fe: Queremos abrir nuestros corazones y todo nuestro ser a su Palabra, que es fuente de vida para nosotros. y nos pongamos efectivamente a la escucha de Jesús, tu Palabra viviente, que todos, nos ubiquemos como discípulos de Jesús y lo anunciemos a los demás para que nuestro pueblo, en Jesús, tenga vida y vida abundante. Amén. 3. Lectura de la Biblia Escucharemos la siguiente cita bíblica de Heb. 4 ,12 4. Reflexión Reflexionemos como la palabra de Dios es viva y eficaz y una vez que hacemos vida la palabra de Dios no podemos ser iguales5. Peticiones Ahora, expresamos libremente nuestras oraciones con la confianza de los hijos que se dirigen a su Padre y la de hermanos reunidos en familia. Luego de cada petición, respondemos: “Dios, Padre Nuestro, escúchanos”. Expresar oraciones espontáneas o preparadas con anticipación. Oremos Dios, Padre de Jesús y Padre Nuestro, que nos amas, y por eso nos hablas para llevarnos a la salvación. Te agradecemos por habernos dado a Jesucristo, tu Hijo Amado, tu Enviado. Él es tu Palabra viva, que nos revela tu rostro de Padre misericordioso. Danos tu Espíritu, para que aprendamos a escucharlo con un corazón abierto y sencillo, para que tu Palabra pueda dar fruto en nuestra vida. Amén. 6. Bendición final y canto El guía o animador toma la Biblia y la levantándola, dice: Que el Padre, que desde un principio condujo la historia de su Pueblo, hasta la llegada de su Hijo, Palabra de Vida, y que nos ha llamado a proclamar su Plan de amor entre los hombres y mujeres, cuide providentemente de nosotros. Todos Alabado seas por siempre, Señor Que Nuestro Señor Jesucristo, Hijo y Enviado del Padre, que nos invita a seguir sus pasos y continuar su misión, nos acompañe, ayudándonos a ser sus seguidores y seguidoras. Todos Alabado seas por siempre, Señor Que el Espíritu Santo, que el Padre y el Hijo enviaron sobre su pueblo, nos enseñe a escuchar la Palabra que nos salva y nos haga anunciadores entusiastas de que el Reino ya ha empezado. Todos Alabado seas por siempre, Señor Y la bendición de Dios Todopoderoso Padre, Hijo y Espíritu Santo descienda sobre nuestras comunidades y sobre cada uno. Todos Alabado seas por siempre, Señor