Modelo de toma de decisiones México: “La Paridad de Género y la participación política de la mujer” Por: Ángel Manuel López García. Introducción En 2019 se cumplirá 64 años desde que, por ley, las mujeres en nuestro país tienen derecho a votar y ser votadas, derecho que quedó plasmado en la constitución y que ejercerían por primera vez el 3 de julio de 1955, pero este importante avance en pro de la equidad se ve opacado por la desigualdad que aún afecta no solo a las mujeres de nuestro país sino a la mayoría de las mujeres alrededor del mundo. La participación de las mujeres en la vida pública es histórica, pero no necesariamente reconocida o suficiente, impensable una Revolución Mexicana sin Adelitas, la Independencia sin Josefa Ortiz de Domínguez, el voto de las mujeres sin esa primera iniciativa de Hermila Galindo, la diplomacia sin Olga Pellicer y Rosario Castellanos entre muchas otras mujeres que han abonado a la construcción de este México tan imperfecto. No ha sido menor la lucha por abrir lugares para su participación, de ahí que surgieran la paridad de género, una herramienta de acción afirmativa que reserva un porcentaje determinado a puestos de toma de decisión y candidaturas políticas para las mujeres. Desde su nacimiento, este sistema ha enfrentado diversos argumentos a favor como señalar que si las mujeres son más de la mitad de la población, deberían estar proporcionalmente representadas o que no vulneran el derecho de los lectores a decidir libremente, pues el resultado final se da en las urnas y argumentos en contra por ejemplo que se asume que el género es una cualidad más importante que la capacidad o la experiencia y también que se podría prestar a un mal entendido si no se da el mismo trato a otros grupos como las minorías étnicas o religiosas. Pero valdría la pena preguntarse si las mujeres legislan, representan, o toman decisiones de Estado sustantivamente diferentes y/o mejores que sus contrapartes hombres. Pienso por ejemplo en el Servicio Exterior Mexicano, donde el ingreso y ascenso depende de los méritos personales y la participación de las mujeres se ha incrementado sin tener que exigir una cuota de género. Recuerdo también a Margaret Thatcher, Angela Merkel, Aung San Suu Kyi, Theresa May, Hillary Clinton y Michelle Bachelet quienes han demostrado que las barreras de género pueden romperse sin paridad. Hay también otros ejemplos de historias no tan célebres como el caso de Corazón Aquino, Imelda Marcos, Dilma Rousseff o Indira Gandhi, quienes al igual que muchos hombres, fueron acusadas por escándalos de corrupción y abuso de poder. 1 Grupo 372 Modelo de toma de decisiones El cambio de paradigma tal vez no dependa solamente de una paridad, sino de un conjunto de elementos que venzan las resistencias y garanticen que las mejores mujeres y los mejores hombres lleguen a los espacios de poder para que nos defiendan y nos hagan sentir plenamente identificados, representados e incluidos más allá de las fronteras de la vida política de nuestro país. Justificación La Administración Pública debe implementar estrategias para incrementar el liderazgo y la participación política de las mujeres, con el fin de coadyuvar a la aplicación de la paridad entre mujeres y hombres en la representación política y la toma de decisiones. La meta es incrementar el número de mujeres en puestos de representación y toma de decisiones a nivel nacional, estatal y municipal, así como promover sistemas electorales que garanticen los derechos político-electorales de las mujeres, especialmente en el marco de la reciente reforma constitucional relacionada con la paridad. Aunque los primeros mecanismos para impulsar la participación política de las mujeres se introdujeron en la legislación mexicana desde hace más de 25 años, no fue sino hasta 2014 que se estableció la obligatoriedad de la paridad de género en la postulación de candidaturas para los cargos legislativos federales y locales a nivel constitucional. Estas modificaciones, aunadas a diversos criterios adoptados por el Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación, han contribuido para dar un impulso significativo en la participación de las mujeres no solo en el Poder Legislativo, sino también en la integración de ayuntamientos. Perspectiva histórica de la participación política de las mujeres en México Pese a que la historia ha enfatizado la lucha de las mujeres por acceder a la posibilidad de votar, en realidad no puede concebirse una auténtica participación de ellas en la vida política nacional si no tienen o ejercen su derecho a ser electas. El problema ha estado en que el simple reconocimiento del derecho de las mujeres al voto pasivo y a acceder a cargos públicos no ha sido suficiente para romper una inercia de siglos. Es por ello que se ha modificado en cinco ocasiones el marco normativo (en 1993, 1996, 2002, 2008 y 2014), primero para promover la igualdad entre hombres y mujeres en cargos públicos, después para establecer cuotas del 30 y 40% para mujeres y, finalmente, para obligar a los partidos políticos a nominar en sus candidaturas a cargos legislativos a 50% de mujeres y 50% de hombres. Pero vamos a los números. Ninguna mujer ha sido presidenta de la República, mientras que tan solo siete han gobernado alguna entidad federativa.4 En el ámbito parlamentario, la situación dista de ser alentadora, aun con contundentes reformas constitucionales. 2 Grupo 372 Modelo de toma de decisiones Paridad de género La paridad, entendida como una participación equilibrada de mujeres y hombres en las posiciones de poder y de toma de decisiones en todas las esferas de la vida (política, económica y social), constituye una condición destacada para la igualdad entre los sexos. De hecho, el grado de paridad de las instituciones políticas y económicas se considera actualmente un indicador de la calidad democrática de los países, integrándose este dato en numerosos índices internacionales. Una presencia equilibrada de hombres y mujeres busca que se refleje mejor la composición de la sociedad, que se garanticen los intereses de las mujeres en la elaboración de las políticas públicas y se contribuya a eliminar la percepción que la política es cosa de hombres. Este principio de presencia equilibrada, establece que, del conjunto de posiciones a repartir (en una lista electoral, en un consejo de administración, en un órgano de gobierno colegiado, etc.) ninguno de los dos sexos tendría que tener una proporción inferior 40% ni superior al 60% - es decir, en ningún caso se asigna el 40% a las mujeres. Panorama actual en México El Senado aprobó en lo general y lo particular, por unanimidad, el dictamen que reforma diversos artículos de la Constitución Política, para garantizar que haya paridad de género en los tres poderes de la Unión, en los órganos autónomos, y en los gobiernos estatales y municipales. La reforma, enviada a la Cámara de Diputados como parte del proceso legislativo, consagra el derecho de las mujeres a participar en todos los espacios políticos en condiciones de igualdad con los hombres. Para ello, establece la obligatoriedad constitucional de observar dicho principio en la integración de los Poderes de la Unión. Incluye el mismo esquema para los estados, así como para la integración de los ayuntamientos; es decir, paridad en los tres poderes de todas las entidades federativas y los municipios. En el dictamen aprobado se establece que la Suprema Corte de Justicia estará integrada por ministras y ministros. Otros puntos que incluye son: 1. Las legislaturas de las entidades federativas deberán realizar reformas en su legislación para garantizar los procedimientos de elección, designación y nombramiento de sus autoridades, bajo el principio de paridad. 2. La paridad de género se aplicará para los partidos políticos, órganos autónomos y en cualquier entidad, órgano u organismo que ejerza funciones de autoridad en el ámbito de la Federación, las entidades federativas, municipios y alcaldías de la Ciudad de México. 3 Grupo 372 Modelo de toma de decisiones 3. La modificación constitucional incluye la paridad de género en la elección de representantes ante los ayuntamientos en los municipios con población indígena. 4. Establece la paridad en los nombramientos de las personas titulares de las secretarías de despacho del Poder Ejecutivo Federal y sus equivalentes en las entidades federativas. 5. Para la postulación de sus candidaturas, se obliga a los partidos políticos a observar este precepto constitucional en las candidaturas al Poder Legislativo Federal y a los demás cargos de elección popular. Datos de últimas elecciones en el país Participación en el ámbito local a. Ayuntamientos Para el proceso electoral 2017-2018 se registraron poco más de 9,300 candidaturas para presidencias municipales, de estas, el 47% de ellas fueron mujeres. La razón por la cual no se alcanzó la paridad estriba en las candidaturas independientes, toda vez que sólo el 12% de las candidaturas bajo esta figura fueron mujeres. En este sentido, vale la pena destacar que hubo 74 municipios donde todas las candidatas a presidenta municipal fueron mujeres. De las 4,405 candidatas a alguna presidencia municipal, 440 resultaron electas. Lo anterior implicó que un 27% de los 1,613 ayuntamientos en disputa en las elecciones de 2018 ahora son encabezados por mujeres, una proporción sin precedentes. Actualmente 540 de los 2,043 municipios que eligen autoridades por el sistema de partidos políticos tienen presidentas municipales. Las entidades que tienen la mayor cantidad de alcaldesas son: Veracruz (54/212), Oaxaca (54/153) y Puebla (46/217); aunque en términos porcentuales las entidades con más presidentas municipales son Tabasco: (41%), Baja California (40%) y Sonora (38%). (Anexo 1.0) b. Congresos estatales El ámbito donde las reglas de paridad han demostrado mayor efectividad es en el legislativo. Actualmente en México hay 1,113 legisladores locales, de los cuales 546 (49%) son mujeres. Se presenta la información de la integración por sexo de cada entidad federativa: (Anexo 1.1) Las entidades cuyas legislaturas tienen mayor presencia femenina son: Morelos (14/20), Chiapas (26/40) y Tlaxcala (15/25). (Anexo 1.2) c. Gubernaturas 4 Grupo 372 Modelo de toma de decisiones A pesar de los logros alcanzados por la reforma de 2014 aún existen obstáculos a los que se enfrentan las mujeres cuando se trata de cargos uninominales, como por ejemplo la gubernatura de una entidad. Tras el fallecimiento de la gobernadora de Puebla, actualmente solo 2 de los 32 titulares del poder ejecutivo local son mujeres, lo que representa apenas 6.25% de las gubernaturas. Participación en el ámbito federal a. Congreso de la Unión Por primera vez en la historia de nuestro país el Congreso de la Unión está integrado prácticamente por el mismo número de hombres que de mujeres. De 500 curules en la Cámara de Diputados, 241 son ocupadas por mujeres (48%), mientras que en el Senado de la República son 63 de los 128 escaños (es decir, el 49%) los ocupados por mujeres. En virtud de lo anterior las y los diputados aprobaron inscribir la leyenda “LXIV Legislatura de la paridad de género” en la plataforma de comunicación, así como en la documentación y papelería oficial de esta Cámara. La actual proporción de legisladoras federales coloca a nuestro país en el primer lugar entre los países miembros de la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (OCDE) con el mayor porcentaje de mujeres en los parlamentos y en el cuarto a nivel mundial. b. Gabinete federal En este mismo sentido, destaca que el 40% de quienes encabezan las diferentes secretarías de Estado son mujeres. Al respecto vale la pena notar que en varias de estas dependencias se trata de sus primeras titulares mujeres. Las mujeres que encabezan las secretarías federales en la actual administración son: 1. 2. 3. 4. 5. 6. 7. 8. 9. Olga Sánchez Cordero, Secretaria de Gobernación. María Luisa Albores González, Secretaria del Bienestar. Josefa González Blanco Ortíz Mena, Secretaria de Medio Ambiente y Recursos Naturales. Rocío Nahle García, Secretaria de Energía. Graciela Márquez Colín, Secretaria de Economía. Irma Eréndira Sandoval Ballesteros, Secretaria de la Función Pública. Luisa María Alcalde Luján, Secretaria de Trabajo y Prevención Social. Alejandra Frausto Guerrero, Secretaria de Cultura. 5 Grupo 372 Modelo de toma de decisiones Problemática Aunque hay diversos casos de notable avance en materia de paridad de género, esta sigue siendo una de las deudas históricas de la democracia mexicana. El aumento en la participación política de las mujeres en vinculación con la introducción de acciones afirmativas y paridad de género no ha disminuido los episodios de violencia política de género; incluso, en procesos electorales previos, se ha observado la normalización de mensajes o propaganda que buscan menoscabar y disminuir la participación de la mujer por el simple hecho de ser mujer; como ejemplo de expresiones o acciones contenedoras de este tipo de violencia, que ha llegado a cobrar la vida de mujeres al ejercer sus derechos políticos. La omisión de las autoridades encargadas de prevenir, investigar y sancionar estos actos es una forma de expresión de violencia institucional y, en un futuro es importante garantizar el despliegue de la participación de las mujeres en la contienda política sin limitaciones, claro está, que pongan en riesgo su integridad. Por otro lado, existen grandes retos vinculados a la tensión existente entre la paridad de género con algunas figuras de reciente incorporación, tales como: la reelección a nivel local, la representación popular de la multiculturalidad mexicana o, inclusive, las candidaturas independientes. Medidas De manera particular, para el logro de estas medidas, se debe desarrollar un modelo de intervención que de iniciativa a una igualdad en la democracia, realizando proyectos de fortalecimiento de la participación política de las mujeres y promoción de una agenda de empoderamiento económico. El proyecto propondría impulsar la participación política y el liderazgo de las mujeres mediante el fortalecimiento de capacidades de las mujeres políticas de cara a los procesos electorales federales, estatales y municipales. Estrategias 1. Sensibilizar a los tomadores de decisiones sobre la importancia de la participación de las mujeres en el ámbito político-electoral y, de esta manera, garantizar apoyos al proyecto con vistas a su intervención en cada entidad federativa. 2. Programas de formación a mujeres líderes, así como mentorías personales en algunos casos. 3. Estrategia de comunicación orientada a cambiar la opinión pública sobre la participación política de las mujeres. 4. Asesoría legal a mujeres a quienes se les haya impedido de alguna manera el ejercicio de su derecho a la participación política. 6 Grupo 372 Modelo de toma de decisiones 5. Asesorías para introducir la agenda de empoderamiento económico de las mujeres en cargos de responsabilidad estatal o municipal. 6. Fortalecer las capacidades de mujeres políticas –incluidas mujeres indígenas– a nivel nacional, estatal y municipal. 7. Incrementar el acceso de las instituciones federales electorales a conocimiento y herramientas clave para garantizar la implementación de las disposiciones relativas a la paridad y/ o las cuotas de género establecidas en la legislación electoral. 8. Impulsar consensos y acuerdos nacionales y estatales en torno a las reformas de paridad de género. Metodología En ésta metodología para la toma de decisiones, consideré importantes las palabras: revisar, consultar, comparar, definir y evaluar, lo que me llevo a 4 pasos para la implementación de políticas públicas y acciones en pro a la problemática. 1. Consultar toda la información disponible. Este primer paso es indispensable y es la línea que separa una decisión acertada a una equivocada, ya que es importante conocer el panorama, el contexto, los factores y actores, así como las opiniones más relevantes de éstos y nutrirnos de toda la información necesaria. 2. Evaluar el entorno. En éste punto se crean consideraciones sobre lo distribuido que puede estar el problema y su entorno, y aquí se determina qué decisiones serían las más favorables para poder solucionarlo y aplicarlos. 3. Tomar decisiones basadas en la paridad de género. Necesitamos decisores comprometidos que marquen la diferencia y tengan visión. 4. Ser oportunos. En la etapa cumbre del proceso decisional se debe tomar en consideración todos los puntos anteriores, la información, la evaluación y los escenarios, pero también la oportunidad Conclusiones y Reflexiones A través de los años, el papel de la mujer en la política ha ido cambiando, aunque no tanto como nos gustaría. En 1952, doña Carmen Caballero Camarillo de Cortés, acompañada por un nutrido grupo de mujeres –adelantadas a su tiempo- logró que el entonces candidato Adolfo Ruíz Cortines se comprometiera a apoyar su petición de poder votar. Logró la modificación a nuestra Carta Magna en 1953, y en 1955, las mujeres pudieron votar en México. Fue hasta 1982 cuando, por primera vez, una mujer –Rosario Ibarra- se postuló 7 Grupo 372 Modelo de toma de decisiones como candidata a la presidencia de la República. Con ella, solo hemos tenido 6 candidatas a dicha función. Incluyendo a la última, Margarita Zavala. El cambio no solo se da en la Ley, debe darse en la actitud de todos nosotros en exigir su cumplimiento, en forzar a que las candidatas tengan las mejores cualidades (también los candidatos) y una vez que sean electas, obligarlas a NO ceder su lugar. Solo así tendrá valor que llegue a las máximas tribunas de nuestra nación. El liderazgo y la participación política de las mujeres están en peligro, tanto en el ámbito local como mundial. Las mujeres tienen poca representación no sólo como votantes, también en los puestos directivos, ya sea en cargos electos, en la administración pública, el sector privado o el mundo académico. Esta realidad contrasta con su indudable capacidad como líderes y agentes de cambio, y su derecho a participar por igual en la gobernanza democrática. Las mujeres se enfrentan a dos tipos de obstáculos a la hora de participar en la vida política. Las barreras estructurales creadas por leyes e instituciones discriminatorias siguen limitando las opciones que tienen las mujeres para votar o presentarse a elecciones. Las brechas relativas a las capacidades implican que las mujeres tienen menor probabilidad que los hombres de contar con la educación, los contactos y los recursos necesarios para convertirse en líderes eficaces. Como señala la resolución sobre la participación de la mujer en la política aprobada por la Asamblea General de las Naciones Unidas en 2011, las mujeres siguen estando marginadas en gran medida de la esfera política en todo el mundo, a menudo como resultado de leyes, prácticas, actitudes y estereotipos de género discriminatorios, bajos niveles de educación, falta de acceso a servicios de atención sanitaria, y debido a que la pobreza las afecta de manera desproporcionada. Algunas mujeres han conseguido superar estos obstáculos, y han sido muy elogiadas por ello, a menudo influyendo positivamente en la sociedad en su conjunto. No obstante, en términos generales, hay que seguir trabajando para lograr la igualdad de oportunidades para todas y todos. 8 Grupo 372 Modelo de toma de decisiones Anexos 1.0 9 Grupo 372 Modelo de toma de decisiones 1.1 10 Grupo 372 Modelo de toma de decisiones 1.2 Referencias 1. Universidad de Guadalajara, 17 de octubre de 1953: Derecho al voto para la mujer en México, disponible en http://www.udg.mx/es/efemerides/17-octubre-0; consultado el 12 de septiembre de 2015. 2. En ese año, tres mujeres resultaron electas como diputadas del Congreso estatal: Elvia Carrillo Puerto, Raquel Dzib y Beatriz Peniche de Ponce; además, Rosa Torre fue electa como regidora en el ayuntamiento de Mérida. Desafortunadamente, este primer paso de la democracia igualitaria se vio marcado por el primer gran episodio de violencia política en la historia reciente, pues cuando el gobernador Felipe Carrillo Puerto murió asesinado en 1924, las cuatro tuvieron que dejar sus puestos. En San Luis Potosí, el derecho al voto estuvo reconocido entre 1924 y 1925. En Chiapas se reconoció en 1925. 3. Griselda Álvarez Ponce de León gobernó Colima de 1979 a 1985; Beatriz Paredes Rangel gobernó Tlaxcala de 1987 a 1992; Dulce María Sauri Rancho gobernó 11 Grupo 372 Modelo de toma de decisiones interinamente Yucatán de 1991 a 1994; Rosario Robles Berlanga gobernó interinamente la Ciudad de México de 1999 a 2000; Amalia García Medina gobernó Zacatecas de 2004 a 2010; Ivonne Ortega Pacheco gobernó Yucatán de 2007 a 2012, y Claudia Pavlovich Arellano acaba de iniciar su mandato en Sonora, el cual concluirá en 2021. 4. ONU Mujeres, Mapa de mujeres en la política, 2015, disponible en http://www.unwomen.org/~/media/headquarters/attachments/sections/library/publicatio ns/2014/wmnmap14_sp%20pdf.pdf?v=3&d=20141202T173735, consultado el 13 de septiembre de 2015. 5. Unión Interparlamentaria, Women in National Parliaments, al 1° de Agosto de 2015. Disponible en http://www.ipu.org/wmn-e/classif.htm; consultado el 13 de septiembre de 2015. 12 Grupo 372